Biblioteconomía Guía de uso de la Fichero Maestro de

RECURSOS
Biblioteconomía
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Guía para el uso de la CDU
insiste en la necesidad de mantener un
Adaptada por Rosa San Segundo
fichero de autoridades que establezca la
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forma autorizada para representar cada
Madrid: AE�OR, 2003
materia.
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Después de explicar el uso de los signos
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AENOR ha editado este año la versión
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Guía de uso de la
CDU,
de las clases principales. En cada una de
ellas se hace un repaso de la temática
Esta obra sustituye a la guía publicada por la
cubierta por los epígrafes principales (habi­
FID en 1993 (edición española de 1994).
tualmente hasta tres dígitos). Se indica qué
Aunque básicamente respeta la estructura de
materias se deben incluir en la subdivisión,
la anterior, se han incorporado los cambios
los auxiliares especiales que tiene y cuáles
realizados en la clasificación hasta finales
son los comunes que se emplean con más
:
de 1999, se ha dedicado un capítulo al
frecuencia para ese tema. El objetivo es que
Fichero Maestro de Referencia y se ha ree­
se clasifique comprendiendo la estructura,
laborado la parte relacionada con la utiliza­
siguiendo el hilo lógico de lo genérico a lo
ción del sistema en entornos automatizados.
específico, empezando por encajar la mate­
La obra se estructura en doce capítulos.
ria en una disciplina y concretando después
Los dos primeros se dedican a contextuali­
zar el sistema revisando sus antecedentes
el tema con los recursos del sistema.
En la última parte de la
Guía se abordan
históricos y a su aplicación práctica. Una
diversos aspectos relacionados con la auto­
breve reseña histórica sirve para introducir
matización. Por un lado, se esboza la histo­
los principios básicos en los que se sustenta
EDUCACIÓN Y BIBUOTECA - 138. 2003
y códigos auxiliares se analiza el contenido
adaptada por Rosa San Segundo Manuel.
española de la
"
exista un orden predominante), por lo que se
MCILWAINE,I.C.
ria y se presenta la estructura del
Fichero
la Clasificación Decimal Universal (en ade­
Básico de Referencia,
lante, CDU):
características de su mantenimiento y poten­
división en disciplinas y
deteniéndose en las
estructura jerárquica que se va flexibilizan­
cial utilidad. A continuación, se plantean las
do gracias a la incorporación de facetas que
posibilidades de la CDU como herramienta
recogen aspectos generales (lugar, tiempo,
para la indización y recuperación de infor­
etcétera) o específicos de una materia. En
mación en entornos automatizados. En este
cuanto a su utilización, se exponen las deci­
sentido, se pone de relieve que el potencial
siones que es necesario tomar para emplear
de la clasificación para facilitar la navega­
un sistema cuya versatilidad le permite
ción por recursos organizados temáticamen­
adaptarse a múltiples necesidades: organi­
te ha sido escasamente utilizado en los catá­
zación de libros en las estanterías, de colec­
logos en línea. Sin embargo, el uso de siste­
ciones digitales o de archivos personales;
mas de clasificación tradicionales se está
creación de índices temáticos y diseño de
revitalizando con el desarrollo de Internet.
perfiles de DSI (Difusión Selectiva de la
En este entorno se están aprovechando las
Información).
posibilidades de un sistema codificado para
Desde el capítulo 3 al 8 se profundiza en
facilitar acceso a la información en un
las características y uso del sistema. Se
entorno multilingüe, así como de la estruc­
insiste en el carácter analítico-sintético de la
tura jerárquica para ampliar o especificar la
CDU, cuyos códigos muchas veces se com­
búsqueda. No obstante, todavía quedan
ponen de varias notaciones que representan
algunos obstáculos que dificultan su total
diferentes conceptos. Esta característica
aprovechamiento. Por ejemplo, que no se
obliga a establecer una sintaxis que norma­
pueda buscar por partes independientes de
lice el orden de mención de las distintas
un código o la debilidad de los índices alfa­
notaciones. La flexibilidad del sistema posi­
béticos para facilitar acceso a la infonna­
bilita diferentes combinaciones (aunque
ción clasificada.
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RECURSOS
En el último capítulo se detalla cómo se
emplear para usarlo. Las detalladas explica­
realiza el proceso de revisión de la clasifica­
ciones se justifican porque, como indica la
ción, tanto para actualizar la terminología
propia autora, la CDU, a diferencia de la
como para eliminar secciones obsoletas e
mayoria de los sistemas de clasificación, no
incorporar nuevas clases.
Esta
Guía
fue originariamente diseñada como herra­
no es ni un tratado teórico
mienta para la ordenación de libros en los
sobre teoría de clasificación ni un manual de
estantes, sino como lenguaje de indización.
ejercicios de clasificación. Su contenido
Esta distinción explica por qué el sistema
combina una exposición de los principios
parece complicado en ocasiones y por qué
fundamentales de la clasi ficación con con­
da lugar a códigos muy amplios que deben
sejos útiles para su aplicación práctica.
adaptarse a las necesidades prácticas de la
Ayuda a clasificar porque proporciona un
ordenación de la colecci ón . el
buen conocimiento de la estructura del sis­
tema y de los mecanismos que se pueden
Cannen Caro Castro
Varios
MOORE, Michael
Cargado de ironía y mordaz crítica, el
Estúpidos hombres blanco."
ganador del Osear 2002 a la Mejor Película
Barcelona: Ediciones B, 2003
Documental por Bowling for Columhine,
acerca al lector -1}ue no podrá quedar indi­
En EDUCACiÓN y BIBLIOTECA no reseña­
ferente- sucesos como el "robo" de las elec­
mos besl-seller. El motivo es lógico. No
ciones por parte de Bush, las alianzas eco­
hace falta que desde aquí les apoyemos;
nómicas que justifican guerras aunque exis­
además no suelen ser, en la mayor parte de
ta manifiesta oposición por parte de la opi­
los casos, santos de nuestra devoción. Pero
nión pública, el racismo disfrazado en algu­
en esta ocasión nos hemos saltado la regla,
nos estados, los fraudulentos procedimien­
porque en la salida al mercado de la edición
tos de la justicia estadounidense en pro de
anglosajona de Estúpidos hombres hlancos.
una mayor seguridad, las irregularidades en
de Michael Moore, los bibliotecarios tuvie­
las aplicaciones de las penas de muerte, el
ron mucho que ver. Concretamente una
olvido voluntario del cuidado al medio
bibliotecaria de Englewood, Nueva Jersey,
ambiente . . .
Ann Sparanese, que tras asistir a una confe­
Para el autor, las bibliotecas constituyen
rencia de Moore en la que éste comentó la
una piedra angular entre las peticiones de
censura que estaba sufriendo su libro por
cambio. Escribe: "Otra p rueba de lo c rudo
parte de la editorial HarperCo1\ins, debido a
que lo ti ene nuestra descendencia es el
su contenido "antigubernamental" y "anti­
número de bibliotecas públicas y escolares
patriótico", montó todo un dispositivo de
que han cerrado o a las que se les ha reduci­
presión para que el libro viera finalmente la
do el horario . ¡No sea que los niños pasen
luz. Además de por esta loable acción de los
mucho rato leyendo cosas peligrosas !". Y
bibliotecarios estadounidenses -1}ue ya tie­
concluye: "para los niños que viven en casas
nen bastante con arriesgar su libertad no
donde hay libros, el cierre de una biblioteca
dejándose avasallar en su puesto de trabajo
es triste. Pero para aquellos que provienen
por los dictámenes de la USA Palriol Act - la
de un medio donde nadie lee, la pérdida de
obra del escritor y cineasta norteamericano
una biblioteca es una tragedia que puede
abre los ojos al lector sobre algunos de los
negarles para siempre el acceso, no sólo al
últimos acontecimientos de la reciente his­
gozo de la lectura, sino a una información
toria estadounidense y su vinculación con
determinante para su trayectoria vital y pro­
algunos de los con fli ctos internacionales
fesional". Sobran las razone s. íei
que estamos sufriendo todav í a hoy.
Marta Martínez Valencia
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