Vacas recién paridas y un ordeño de cuatro veces al día

PRIMAVERA 2003
Vacas recién paridas y un ordeño de cuatro veces al día:
vacas con mayor producción y más sanas
Actuales investigaciones muestran que el ordeñar cuatro veces durante los primeros 21 días de lactación puede ser tan beneficioso
como el ordeñar tres veces al día durante toda la lactación. Las vacas permanecen más sanas, producen más leche y usted trabajará menos.
Por Geoffrey E. Dahl. Fuente: Hoard’s Dairyman, Julio 2002
O
rdeñar tres veces al día en vez lugar dos es
una práctica que se ha hecho popular entre
algunos productores desde hace bastante tiempo.
Los ordeños más frecuentes a los que sometemos
a los animales implican un aumento en la producción,
como pasa en otras especies. En el ganado vacuno de
leche, con el tercer ordeño la producción de leche
normalmente se incrementa en 3,63 Kg. por vaca y
día, independientemente de su producción normal.
Esto significa que vacas que están produciendo 18,15
litros por día cuando son ordeñadas dos veces, producirán 21,78 litros de media. Al mismo tiempo, vacas
produciendo 36,29 Kg. de leche al día llegarán a tener
una producción de casi 40 Kg. en tres ordeños.
El mayor inconveniente en un ordeño de tres turnos es la necesidad de mayor mano de obra. Hay
también otras variables de costos añadidos, como lo
es el uso de la sala de ordeño más tiempo cada día.
Esta práctica ha sido tradicionalmente implementada a lo largo de toda la lactación. Sin embargo,
recientes investigaciones nos aportan un cambio de
filosofía en el ordeño de tres veces. Los estudios
muestran que un ordeño frecuente (de cuatro a seis
veces al día) al principio de la lactación puede mejorar las producciones a lo largo de toda la lactación
con muy poco coste añadido de mano de obra.
Uno de estos estudios se ha realizado en Israel.
Las vacas fueron ordeñadas seis veces al día durante
los primeros 42 días de la lactación. Los datos fueron
comparados con un segundo grupo que fue ordeñado tres veces durante toda la lactación. Como se
esperaba, las vacas que fueron ordeñadas seis veces
tuvieron producciones superiores que el segundo
grupo. Durante las primeras seis semanas, el primer
grupo de vacas dieron 7,26 Kg. más de leche al día.
Sin embargo, la mayor diferencia entre los dos
grupos fue la persistencia en la lactación del primer
grupo de seis ordeños al día ( ver tabla 1 ).
Tabla 1.
Resultados de la frecuencia de ordeño en Israel
3x
6x
Leche, semanas 1-6, Kgs
35.29
42.64
1.43
1.49
Grasa %, semanas 1-6
1.39
1.42
Proteína % , semanas 1-6
Leche, semanas 7-18, kgs
37.42
42.50
Grasa %, semanas 7-18
1.27
1.27
1.25
1.26
Proteína % , semanas 7-18
10478
8995
Leche, 305 días, Kgs
Origen: Bar-Peled et al., J. Dairy Sci., 78:2726-2736
Las vacas ordeñadas seis veces al día durante los
primeros 42 días continuaron dando más leche, incluso después de que se volviera a la rutina de los 3
ordeños al día. Produjeron más de 1.361 kgs de diferencia durante la lactación entera. Los componentes
de la leche no se diferenciaron entre los dos grupos,
pero la ingestión de materia seca aumentó en el
grupo de seis ordeños.
Además, las vacas de seis ordeños experimentaron un regreso mas largo al balance positivo de energía y un mayor tiempo para una puntuación de la
condición corporal por debajo del 2.5 que aquellas
vacas ordeñadas tres veces. En conjunto, el grupo de
los seis ordeños tuvo mayores producciones y mayor
eficiencia de la alimentación durante toda la lactación en comparación con el grupo de tres ordeños.
En un segundo estudio en Maryland (USA), los
resultados fueron casi idénticos que el trabajo realizado en Israel ( ver tabla 2 ).
La concentración de la prolactina aumenta después de cada ordeño. Un incremento en la prolactina
en una lactación temprana puede aumentar el número de receptores en las células epiteliales mamarias y
la sensibilidad a la prolactina. Estos niveles altos de
sensibilidad pueden causar el desarrollo de un
número mayor de células secretoras y llegar a activarse en esa lactación.
Se cree que el crecimiento de las células mamarias
llega a su máximo nivel al final de la preñez y las primeras pocas semanas de la lactación. En el momento
en que la producción de leche es la principal función
del número de células secretoras de la mama, comenzando la lactación con más células debería aumentar
los registros. El extra en leche debería mantenerse
pues la pérdida de células ocurre de forma gradual y
continuada durante toda la lactación.
Tabla 2. Resultados de la frecuencia de ordeño
6x
3x
Leche (Kgs/día)
38.19
41.09
Grasa %
1.75
1.78
Proteína %
1.35
1.30
Nivel Concepción %*
10.57
14.06
*Resultados de sincronizar la inseminación desde
los 69 a los 76 días en leche.
Origin: Henshaw et al., J. Dairy Sci. 83 (suppl 1): 242
Durante los 42 primeros días de lactación, las
vacas fueron ordeñadas tres veces al día en intervalos de ocho horas y otras se ordeñaron 6 veces en
intervalos de 4 horas. Después del día 42, todas las
vacas se ordeñaron tres veces al día durante el resto
del estudio que duró las 38 semanas de la lactación.
Cuando se compararon los datos con las vacas de
los tres ordeños, las vacas que se ordeñaron seis
veces produjeron 2,72 kgs más durante toda la lactación. Además, los valores de grasa y proteína aumentaron, aunque el porcentaje de la proteína fue ligeramente inferior. Además, no hubo efectos negativos
en el plano reproductivo, así como tampoco hubo
diferencia entre los grupos en la media de concepción en las primeras ovulaciones sincronizadas.
¿Cómo funciona?
Parece que existen dos explicaciones para los resultados de mayores producciones como resultado del
incremento de los ordeños. El primero es el efecto físico de disminuir la presión en la glándula mamaria.
Cuando la ubre está llena, la sintetización de la leche
disminuye. La sintetización es mayor justo después
del ordeño y gradualmente disminuye con el tiempo,
hasta casi 36 horas después del último ordeño, cuando la secreción de la leche simplemente se para.
Más recientemente, un factor parecido al hormonal, conocido como “inhibidor del feedback de la lactación” (IFL), ha sido relacionado con la supresión de
la sintetización de la leche. El IFL es segregado por las
células epiteliales de las mamas. Esto significa que
mientras la leche se acumula en la glándula mamaria
entre los ordeños, también se acumula el IFL. Cuando
la ubre está llena, los niveles de IFL están en sus valores más altos y se suprime la producción de leche. La
presión de la ubre y los niveles de IFL disminuirán a
mayores frecuencias de ordeño. Estos dos factores
afectan a la producción durante la lactación temprana, pero no explican la persistencia de este efecto
después de volver a un ordeño normal.
La mayor persistencia de la lactación se piensa
que puede ser debida a un efecto de mayor sensitividad a la prolactina en la glándula mamaria.
HACIENDO QUE FUNCIONE EN NUESTRA GRANJA
Aumentar la frecuencia de los ordeños al principio
de la lactación es algo muy simple que se puede llevar a cabo en la granja. En rutinas de dos o tres ordeños, las vacas paridas pueden ser ordeñadas al principio y al final de un ordeño para conseguir una frecuencia de 4 ó 6 ordeños.
Aunque este sistema puede no darnos exactamente intervalos de seis o cuatro horas, parece que
da la suficiente estimulación como para conseguir
aumentar la producción.
La siguiente pregunta es “¿cuánto tiempo tenemos que ordeñar a la vaca de esta manera?”. Los
datos de los experimentos realizados muestran que
las mayores frecuencias de ordeño sólo necesitan ser
realizadas durante los primeros 21 días de lactación.
Por ejemplo, si tus vacas son ordeñadas dos veces,
en periodos de 12 horas, entonces las vacas paridas
solo deberían ser ordeñadas al principio y al final de
cada ordeño. En un rebaño de 120 vacas en ordeño,
estimando que 10 vacas parirán cada mes, tendremos
siete u ocho vacas que se ordeñarán cuatro veces.
El conseguir este tipo de resultados no requerirá
mucha mano de obra extra, pero se puede llegar a
conseguir una producción parecida al ordeño de tres
veces al día.
Se puede ver el efecto que se obtendrá mirando la
tabla 3. Los resultados están calculados basándonos en
el costo de la mano de obra de 20$ por hora, dedicando unas cuatro horas por vaca, durante toda la lactación.
Los costos de materia seca se calculan en 6 céntimos
por cada 0,45 Kg., con 0,22 kilos de materia seca por cada
0,45 kilos de aumento en la producción de leche.
El costo de conseguir 42 ordeños extras se distribuye en todos los 305 días de lactación, el precio de
la leche se estableció en $11 por cada 100 kilos. Las
estimaciones son para cada día en cada lactación de
305 días, y los totales de la granja están basadas en
un rebaño de 120 vacas.
Por eso, asumiendo un aumento de 2,72 kilos por
vaca y día, podemos esperar un beneficio extra
potencial de $97.60 por vaca con un precio de la
leche de $11.
Tabla 3. Beneficios económicos en cuatro ordeños
1.36 kg. 2.72kg. 4.08Kg.
0.11$
0.11$
Mano de obra (0.11$)
0.18$
0.09$
Comida (0.27$)
0.05$
0.05$
Materiales (0.05$)
Aumento de leche (0.99$) 0.33$
0.66$
Beneficio/vaca (0.56$)
0.08$
0.32$
Beneficio/granja
2.928$
11.712$ 20.496$