DEPRESIÓN POSTPARTO La Sociedad Española de Medicina General (SEMG) define la Depresión Posparto como un trastorno transitorio que aparece entre dos y cuatro días después del parto y desaparece de forma espontánea y sin secuelas en un periodo de dos semanas. Existen dos tipos de trastorno depresivo postparto: la depresión baby-blues y el trastorno depresivo en sí mismo. Se considera depresión baby-blues a la existencia de una alteración leve en el estado de ánimo de la madre puérpara, con síntomas depresivos leves. En general se manifiesta por falta de concentración, ansiedad, tristeza… pero sobre todo por una inestabilidad del humor con gran tendencia al llanto. Este estado remite en dos semanas aproximadamente sin ningún tipo de tratamiento. A diferencia del anterior, el transtorno depresivo o depresión postparto es la depresión que se inicia en las primeras 12 semanas tras el parto debido al gran cambio que se produce con la llegada de un niño, con síntomas depresivos típicos: tristeza, sentimientos de desesperanza y de minusvalía, insomnio, pérdida de apetito, lentitud de movimiento, pensamientos recurrentes de muerte, síntomas físicos varios (molestias digestivas, dolor de cabeza, fatiga…), ansiedad elevada, etc. Este estado sí requiere tratamiento. Aunque en sentido estricto no se conocen las causas, se considera que el cambio hormonal y el gran cambio de vida en el que se sumerge la madre podrían estar en el origen de este transtorno. RECOMENDACIONES A TENER EN CUENTE EN CASO DE APARICIÓN DE DEPRESIÓN POSTPARTO • Busca alguien con quien hablar sobre tus sentimientos • Pide ayuda con las tareas domésticas y cuidado del bebé • Habla con otras madres sobre tus inquietudes y sentimientos • Procura estar la mayor parte del tiempo acompañada • Busca ayuda psicoterapéutica o médica • Encuentra tiempo para ti misma