campaña intolerancia a la lactosa

DOSSIER DE PRENSA
CAMPAÑA INTOLERANCIA A LA LACTOSA
24 de Octubre de 2011
CONTENIDO DOSSIER DE PRENSA
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NOTA DE PRENSA ..........................................................................Pág. 3-4
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LACTOSA
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LACTASA
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¿QUÉ ES LA INTOLERANCIA A LA LACTOSA?............................ Pág. 5
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¿CUANDO SE DESARROLLA?
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TIPOS DE INTOLERANCIA…………….…………..............................Pág. 6
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PREVALENCIA Y DIAGNÓSTICO.....................................................Pág. 7
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TIPOS DE TEST……………... ...........................................................Pág. 8
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DETECCIÓN
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TRATAMIENTO…………….................................................................Pág. 9
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ALIMENTACIÓN ....................................................................... .........Pág. 10
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La campaña “Come lo que quieras y disfruta sin miedo”
de Laboratorios SALVAT en colaboración con ADILAC,
pretende poner fin a los problemas de Intolerancia a la Lactosa
Un 34% de la población tiene problemas con la digestión de los lácteos. Lo que
muchos no saben es que la lactosa está presente no sólo en los lácteos,
sino en muchos otros alimentos de consumo habitual.
Madrid, 24 de octubre de 2011. Miles de personas en España con Intolerancia a la
Lactosa, podrán volver a desayunar un café con leche, tomar una fondue o un helado.
La lactasa es un enzima que se encuentra en el intestino delgado que ayuda a descomponer
y digerir la lactosa presente en muchos alimentos de consumo habitual (leche, quesos,
yogures, fruta, cremas, salsas, bollería, embutidos…). Pero para una persona intolerante a
la lactosa, la ingesta de lácteos supone. Cólicos abdominales, diarrea, erupciones cutáneas,
estreñimiento, flatulencias, ardor
La lactasa (Nutira) es un complemento alimenticio adecuado para todas aquellas personas a
las que no les sientan bien los alimentos o platos elaborados con productos lácteos,
incluidas aquéllas con intolerancia a la lactosa.
Algunas personas pueden ser intolerantes y no saberlo, ya que existen grados de
intolerancia a la lactosa. La causa más común es la pérdida progresiva de lactasa intestinal,
un proceso natural que se acentúa con la edad.
Una dieta rica en lácteos se considera muy necesaria para evitar déficits como el de
calcio, entre otros, especialmente en la infancia, adolescencia y tercera edad.
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LA CAMPAÑA:
Bajo el lema “Come lo que quieras y disfruta sin miedo”, se presenta en España el primer
tratamiento para la Intolerancia a la Lactosa. Basta con un comprimido de lactasa antes de
comer/beber cualquier alimento que contenga algún producto lácteo o derivado, para terminar
de forma definitiva con las dietas restrictivas.
Para ello, Laboratorios Salvat, en colaboración con la Asociación de Intolerantes a la
Lactosa de España (ADILAC), llevará a cabo diversas acciones en comedores para
empleados, gracias a la colaboración de grandes compañías y medios de comunicación de
Madrid, así como en prestigiosos restaurantes que se suman a esta Campaña Prosalud,
mediante materiales informativos para difundir y mejorar la calidad de vida de miles de
personas intolerantes a la lactosa cuya única solución, hasta ahora, era seguir una dieta
restrictiva de por vida.
Además, se llevarán a cabo acciones informativas y sensibilización en los mercados
municipales de Madrid de Maravillas, Ventas y Antón Martín.
Para más información
www.nutira.es
Marta Carreté
[email protected]
Dep Comunicación
609 65 10 62
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¿Qué es la lactosa?
La lactosa es un disacárido natural compuesto por dos azúcares simples, la glucosa y la
galactosa, también conocida como el azúcar de la leche.
Es el azúcar principal de todas las leches de los mamíferos y también se encuentra en
muchos alimentos preparados a partir de la leche: natas, cremas, postres, helados…
¿Qué es la Lactasa?
La lactasa es una enzima producida en el intestino delgado, que juega un papel fundamental
en el desdoblamiento de la lactosa en sus dos componentes básicos (galactosa y glucosa).
Este desdoblamiento es necesario para que estos azucares puedan ser absorbidos por
nuestro organismo. Cuando la actividad de la lactosa intestinal es deficiente, el
desdoblamiento no se produce y aparecen los síntomas propios de la intolerancia a la
lactosa.
¿Qué es la intolerancia a la lactosa?
La intolerancia a la lactosa es la sintomatología que se produce debido a la falta de digestión
y absorción de la lactosa causada por la deficiencia de la enzima lactasa en las
microvellosidades del intestino delgado.
Al no haber lactasa suficiente, la lactosa no se desdobla en sus azúcares simples (glucosa y
galactosa) por lo que llega íntegramente sin digerir al intestino grueso, produciendo
síntomas como distensión y/o dolor abdominal, flatulencias, diarrea,…
Estos síntomas acostumbran a aparecer entre 15 minutos y dos horas después de haber
ingerido alimentos con lactosa y remiten en un periodo de tiempo de entre 3 y 6 horas.
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¿Cuándo se desarrolla?
Aunque comúnmente se asocie este problema a la infancia, momento en que se introduce la
leche de vaca en la dieta, la realidad es que la intolerancia a la lactosa es más común en los
adultos y aumenta con la edad.
¿Afecta a todos por igual?
La sensibilidad a la lactosa puede variar ampliamente, -algunas personas notan sus efectos
de forma inmediata tras consumir pequeñas cantidades, mientras otras tienen un umbral de
sensibilidad más alto y es más difícil de observar su relación causa-efecto-. La sensibilidad
puede también cambiar con el tiempo y con el estado general de salud.
¿Qué tipos de intolerancia existen?
Distinguimos diferentes tipos de intolerancia a la lactosa.
1. Intolerancia primaria
Pérdida progresiva de la producción de lactasa.
Es la causa más frecuente. Los niveles de lactasa de cada individuo varían acorde con la
edad y el origen étnico provocando que una persona que hasta el momento había sido
tolerante a la lactosa pase a presentar problemas en su digestión.
Aunque pueda pensarse lo contrario, la intolerancia a la lactosa es más común en los
adultos que en los niños. En la infancia, la leche es nuestro principal alimento, y por ello,
el organismo está biológicamente preparado para digerirla. Los niveles de lactasa suelen
ser elevados en el intestino de los niños pero van disminuyendo con la edad a medida
que nuestra biología, como ocurre con cualquier otro mamífero, impone un cambio
dietético: el abandono de la leche. Sin embargo, desde la domesticación de los bóvidos,
el ser humano sigue consumiendo leche y derivados en la edad adulta, cuando los
niveles de enzima lactasa se reducen y el organismo está menos preparado para
asimilar la lactosa.
En definitiva, la mayoría de los adultos tiene bajos niveles de lactasa como parte de un
desarrollo evolutivo normal ya que los humanos somos el único mamífero que toma
leche en la edad adulta.
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2. Intolerancia secundaria.
La disminución de la producción de la lactasa es consecuencia de una patología que
daña la mucosa intestinal del intestino delgado como las diarreas severas,
enfermedad celíaca, enfermedad de Crohn o quimioterapia. Generalmente este tipo de
intolerancia se revierte cuando el paciente recupera la integridad del tejido intestinal.
3.
Intolerancia terciaria o congénita
Trastorno congénito raro que se manifiesta con diarrea severa en el recién nacido debido
a ausencia total de lactasa desde el nacimiento que persiste durante toda la vida.
¿Cuál es la prevalencia de la intolerancia a la lactosa?
Se estima que en España un 34% de la población española tiene déficit de lactasa y la
prevalencia de personas diagnosticadas como intolerantes a la lactosa es de un 14%.
¿De qué métodos de diagnóstico disponemos?
Actualmente la intolerancia a la lactosa tiene, a priori, un diagnóstico empírico, es decir,
relacionando la ingesta de productos que contienen lactosa con la sintomatología que la
genera. En la mayoría de los casos son los mismos afectados quienes sospechan de esta
enfermedad y acuden al médico.
El diagnóstico se confirma mediante el test del hidrógeno expirado, el test de tolerancia a la
lactosa, la prueba de acidez fecal o la biopsia de intestino delgado (estas dos últimas menos
utilizadas al ser métodos invasivos).
1. Test de hidrógeno en el aliento
El paciente en ayunas hace una espiración en un pequeño aparato que permite recoger
el aire espirado para analizar los niveles de hidrógeno. Posteriormente se le suministra
una solución con lactosa (25-50 gramos) y a intervalos posteriores de tiempo (cada 1530 minutos) se le toman nuevas muestras de aire espirado como se hizo al principio.
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Si se constata un aumento del hidrógeno en la respiración tras la ingesta de la lactosa se
considera que la persona es intolerante.
Esta prueba al no ser invasiva y tener pocas complicaciones, actualmente se le
considera el mejor test para diagnosticar esta intolerancia. A pesar de ello no se
realiza en centros de atención primaria sino en los servicios de gastroenterología de
algunos hospitales de referencia.
2. Test de tolerancia a la lactosa
Analítica que contabiliza los niveles de glucosa en la sangre antes y después de la
ingesta de 50 gramos de lactosa.
En primer lugar, se extrae una muestra de sangre para determinar el nivel de glucosa en
sangre del paciente en ayunas (valor basal). Posteriormente el paciente ingiere 50
gramos de lactosa y se extraen muestras de sangre a los 30, 60, 90 y 120 minutos.
En condiciones normales, la glucosa ascendería 20 mg/dl por encima del valor basal
debido al desdoblamiento de la lactosa en glucosa y galactosa y posterior absorción.
En el caso de un paciente con intolerancia a la lactosa, ésta no se desdobla en el tubo
digestivo y la glucosa en sangre no muestra cambios con respecto al valor basal.
3. Prueba de acidez fecal
Consiste medir la acidez de la materia fecal puesto que en las personas con déficit de
lactasa se detecta un elevado nivel de acidez en sus heces. Este test se emplea en raras
ocasiones.
4. Biopsia intestinal
Consiste en realizar una biopsia de de la mucosa intestinal e analizar en el laboratorio
los niveles de lactasa presentes en la muestra. Con esta técnica se puede valorar el
grado de severidad que sufre el afectado, pero es una prueba muy invasiva que
normalmente no se realiza
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¿Por qué es importante detectarla y tratarla rápidamente?
La lactasa es una enzima que se produce en las células del intestino delgado. Si seguimos
tomando lactosa,
aumentará la lesión en la mucosa intestinal debido a las diarreas
asociadas, de manera que se producirá menos lactasa que permitirá desdoblar menos
lactosa, entrando así en un círculo vicioso que puede llevar al paciente a problemas
importantes.
¿Cómo tratar la intolerancia a la lactosa?
A día de hoy no existe un tratamiento que cure la intolerancia a la lactosa. Las personas
afectadas de esta patología aprenden a educar su dieta evitando la ingesta de productos
que contengan lactosa, pero por otra parte, una dieta baja en lácteos aumenta el riesgo de
padecer déficits de calcio, vitamina D, vitamina A y proteínas. Ingerir una cantidad suficiente
de productos lácteos así como seguir una dieta equilibrada facilita alcanzar los niveles de
ingesta diaria recomendados de calcio, que reducirá el riesgo de padecer enfermedades del
aparato locomotor como por ejemplo la osteoporosis.
En el año 2009, en una reunión de expertos en dietética, nutrición y alergia alimentarias
organizada por la EFSA (European Food Safety Authority) se concluyó que existía una
relación causa-efecto sobre el consumo de lactasa exógena y el desdoblamiento de la
lactosa en aquellos individuos con problemas en la digestión de los lácteos, recomendando
una dosis de 4500FCC (Food Chemical Codex) por cada ingesta de lácteo equivalente a
250 ml de leche.
Esta lactasa exógena se puede adquirir en el Estado Español desde principios de este año
2011 en forma de cápsulas o comprimidos masticables bajo el nombre de Nutira ®.
¿Qué alimentos contienen lactosa?
Como hemos visto anteriormente, la lactosa está presente en muchos alimentos consumidos
a diario. Existen tablas informativas, como la que se adjunta a continuación que está
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elaborada por ADILAC y en la que se recogen los grupos de productos que contienen
lactosa, los que pueden contenerla y los que son libres de ella.
ALIMENTOS/PRODUCTOS CON
ALIMENTOS/PRODUCTOS QUE
ALIMENTOS/PRODUCTOS SIN
LACTOSA
PUEDEN CONTENER LACTOSA
LACTOSA
Alimentos
Alimentos
Alimentos
Leche vaca
Purés y sopas
Fruta natural
Leche en polvo
Pan
Frutos secos
Batido de leche
Pasteles
Mariscos
Derivados lácteos
Fiambres
Cereales
Nata
Embutidos
Huevos
Quesos frescos y
Pasteles y frituras de carne
Miel
fermentados
Huevos guisados con leche
Mermelada
Mascarpone
Sucedáneos de huevos en
Patatas
Quark
batidos
Arroz
Feta
Flanes
Pasta
Crema de leche
Puré de patatas
Verduras
Postres lácteos
Crema o puré
Carnes
Margarina
Bollería
Pescados
Mantequilla
Donuts, Crèpes, Bollos
Legumbres
Helados
Bizcochos, galletas
Tofu
Salsa bechamel
Tostadas
Leches vegetales: soja,
Precocinados
coco, avena, arroz,
Ingredientes y aditivos
Cereales enriquecidos
almendras.
Lactosa
Aderezo de ensladas y
etc.
Monohidrato de lactosa
mayonesas
Azúcar de la leche
Sorbetes
Ingredientes y aditivos de
Sólidos lácteos
Tartas
origen lácteo
Lactitol (E966)
Yogures
Lactatos (E325, E326, E327)
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Trazas de leche
Batidos, ponches, malteados
Esteres lácticos (E472b)
Suero
Chocolate con leche
Lactilatos (E481, E482)
Suero de leche
Rebozados
Proteínas de la leche
Suero en polvo
Sucedáneos de chocolate
Caseína
Suero lácteo
Sopas instantáneas
Caseinato
Cuajo
Bebidas espiritosas
Caseinato de calcio (antiguo
Cuajada
Sidra i vino
H4511)
Grasas de leche
Caseinato de sodio (antiguo
Productos
H4512)
Medicamentos
Caseinato potásico
Complejos vitamínicos
Caseinato magnésico
Dentífricos
Lactálbumina
Lactoglobulina
Ingredientes y aditivos
Ácido láctico (E270)
Riboflavina (E101)
Almidón
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