PROYECTO DE CONVIVENCIA VIVIR Y CONVIVIR ARMONICAMENTE – UNA RESPONSABILIDAD DE TODOS Y TODAS Bogotá D.C., 2012 1. PROBLEMA 1.1. DESCRIPCIÓN El clima convivencial escolar en los últimos años ha sido objeto de análisis y reflexión, producto de los altos niveles de agresividad, hostilidad y violencia que se generan entre estudiantes, es tan preocupante la situación que varios países han optado por crear observatorios encargados de medir el alcance que tiene el comportamiento de los estudiantes al interior de las instituciones educativas y de igual forma plantear estrategias alternativas que ayuden a mitigar el impacto generado por actitudes negativas frente a las relaciones interpersonales que se presentan en el contexto escolar. Teniendo en cuenta este panorama, las instituciones educativas juegan un papel importante, desde el punto de vista pedagógico – formativo, en la medida que pueden plantear estrategias que ayuden a fortalecer espacios democráticos, participativos, que promuevan relaciones interpersonales positivas y donde el conflicto sea una posibilidad para crecer y construir nuevos escenarios. Se hace necesario que toda estrategia este pensada desde la cultura en contexto de los estudiantes y de los ideales que se tienen de escuela; una opción, la gestión del conflicto como posibilidad de autoreflexion, autorregulación y solución a las dificultades presentadas; otra, el desarrollo de procesos basados en la comunicación desde la asertividad y habilidades sociales. 1.2. FORMULACIÓN DEL PROBLEMA ¿Cómo la Gestión del conflicto, la comunicación y el desarrollo de habilidades sociales puede llegar a ser una estrategia pedagógica que a partir de procesos de autocontrol y autorregulación permite mejorar la convivencia entre estudiantes, docentes, directivos y padres de familia del Colegio técnico Jaime Pardo Leal? 2. JUSTIFICACIÓN Por las diferentes formas de ser, pensar, sentir y actuar de los integrantes de la comunidad educativa, se teje un entramado de relaciones que configuran el escenario escolar; son los docentes, estudiantes, directivos, padres y madres de familia que desde sus concepciones, percepciones, significados simbólicos, identidades y lógicas propias, influencian la construcción de una determinada convivencia. Producto de esta diversidad la escuela vive con una serie de necesidades y dificultades, por lo que es importante plantear alternativas que posibiliten la construcción de ambientes convivenciales agradables, enriquecedores y formativos. El Colegio TÉCNICO JAIME PARDO LEAL no es la excepción, es una institución educativa ubicada en la localidad de Antonio Nariño, Barrio Policarpa Salavarrieta que presenta ciertos niveles de agresión, hostilidad y violencia, producto de una gran variedad de factores culturales, sociales, familiares e institucionales, que inciden en que el ambiente convivencial escolar no sea propicio para alcanzar altos logros académicos. Es por esta razón que se propende a partir del presente proyecto, la construcción de una estrategia pedagógica, basada en procesos de resolución de conflictos, comunicación y desarrollo de habilidades sociales, con el objeto de hacer conscientes los mecanismos con que se presentan las relaciones intra e interpersonales y así modificar esos comportamientos negativos. 3. OBJETIVOS 3.1. Objetivo general: Diseñar e implementar una estrategia pedagógica que involucre la gestión del conflicto, la comunicación, la tecnología y el desarrollo de habilidades sociales para los estudiantes del Colegio Técnico Jaime pardo leal, que a partir de procesos de autorregulación y autocontrol permita modificar comportamientos y actitudes negativas para una sana convivencia. 3.2. Objetivos específicos: Investigar sobre las características que definen la convivencia de los estudiantes con el apoyo de los docentes, directivos y padres de familia del colegio Técnico Jaime Pardo Leal, para conocer sus tensiones y favorabilidades, que ayuden al diseño de una estrategia pedagógica tendiente a manejar el conflicto escolar. Construir una estrategia pedagógica basada en la gestión del conflicto, la comunicación, la tecnología, las competencias ciudadanas y el desarrollo de habilidades sociales, que permita mejorar el clima convivencial escolar. Diseñar actividades tendientes a que los estudiantes desarrollen procesos de autorregulación y autocontrol en lo relacionado con la gestión del conflicto, comunicación asertiva, las competencias ciudadanas y habilidades sociales, con el apoyo de los docentes y padres de familia. Implementar y evaluar el proyecto de convivencia para mejorar las relaciones que se dan entre estudiantes con el apoyo de los docentes, directivos y padres de familia, con el fin de crear un buen ambiente escolar. 4. MARCO REFERENCIAL 4.1. MARCO CONTEXTUAL E INSTITUCIONAL El Colegio Técnico Jaime Pardo Leal se encuentra ubicado en la localidad 15 Antonio Nariño, en la dirección Carrera 10 A No. 3-63 sur, del barrio Policarpa Salavarrieta. La institución educativa limita al oriente con la carrera décima sur y el barrio Calvo Sur, al occidente con el barrio Sevilla y la avenida Caracas; al norte con el antiguo hospital San Juan de Dios, con la avenida calle primera y el barrio San Antonio y al sur con el barrio Ciudad Berna, la calle once sur y el río Fucha. El Colegio Técnico Jaime Pardo Leal, cuenta con una población de mil cuatrocientos (1400) estudiantes aproximadamente, distribuidos en dos jornadas; en la jornada de la mañana se encuentran los grados de preescolar a quinto con tres grados de sexto y en la jornada de la tarde se ubican los grados de séptimo a onceavo grado y dos cursos más de preescolar. Historia El barrio Policarpa Salavarrieta, se inicia el 29 de junio de 1961 por Rosa Buenaventura y sus hijos, quienes por razones económicas y no tener un lugar donde pasar la noche decidieron levantar en los terrenos un rancho, en donde más tarde la Central Nacional Provivienda envió a otras familias y a finales de Septiembre del mismo año fue ocupada la parte central del terreno por parte de familias que venían desplazadas del campo a la ciudad. A pesar de las dificultades que surgieron después de la toma de los terrenos a causa de la carencia de servicios públicos y a los constantes maltratos y hostigamientos a cargo de la policía; la comunidad poco a poco se fue organizando en materia de seguridad y la adquisición de los servicios públicos fue de contrabando. El barrio Policarpa tenía una tregua por la posesión de los terrenos con el Instituto de Crédito Territorial y se registraba un florecimiento de la actividad deportiva y cultural; pero esta tregua duró poco tiempo, por la instalación de un puesto de policía que el ICT instaló en la cancha de fútbol del barrio. El puesto de policía funcionó hasta el 12 de enero de 1965, fecha en la que la gente del barrio se toma el puesto de la policía para establecer en su lugar una escuela. Debido a las constantes solicitudes por parte de la comunidad del barrio ante la Secretaría de Educación de la necesidad de una escuela para los centenares de niños que habitaban el barrio, quienes eran rechazados de otras instituciones por ser hijos de invasores; se organiza por esta razón una acción novedosa y beligerante, por parte de la junta directiva del barrio y ratificada por la asamblea general de ocupantes. Ese domingo 12 de enero de 1965, se inicia una manifestación de los habitantes del barrio que exigía una escuela para la educación de los niños y niñas del Policarpa. Premeditadamente, la comunidad simuló una pelea sobre la carrera 10ª, lo que obligó a la policía a salir a controlar a los manifestantes; en cuanto el puesto de policía estuvo sin sus uniformados, se improvisó un salón de clases con sillas, mesas, un maestro y lógicamente niños. Al llegar la fuerza pública al lugar, ya había un aviso “Escuela La Pola”; estos informaron inmediatamente al alcalde quien respondió” es mejor que dejen quieto ese avispero”. Debido al gran número de niños, se ve la necesidad de construir unos salones en la Central de Vivienda Provivienda, pero a pesar de esto, las condiciones siguen siendo muy precarias. El primer rector de la escuela Policarpa fue el señor Vidal, quien lucho insaciablemente por hacer cada día mejor el funcionamiento de la escuela, pero era necesaria una construcción digna para los estudiantes. De lo anterior nace la comisión de educación creada por los habitantes del barrio, en donde se acuerda una cuota voluntaria para el sostenimiento y mantenimiento de la escuela. En el año de 1987 la comunidad acepta entregarle a la Secretaría de Educación los terrenos de la antigua casa cultural, con el ánimo de iniciar el proyecto de construcción del colegio. En enero de 1988 se inicia la primera etapa de construcción, con el apoyo de los concejales del partido comunista y de la Unión Patriótica. La obra finaliza en octubre de 1989, cuyo nombre que hasta la fecha se llamaba “Escuela Policarpa Salavarrieta” pasó a ser “Colegio Jaime Pardo Leal”, en memoria del dirigente de la Unión Patriótica asesinado ese mismo año en La Mesa Cundinamarca. Proyecto educativo institucional El Proyecto Educativo Institucional del Colegio Técnico Jaime Pardo Leal, lleva como título “MEJORAMIENTO DEL AMBIENTE EDUCATIVO A TRAVES DE LA TECNOLOGIA CON ÉNFASIS EN GESTIÓN EMPRESARIAL Y DISEÑO TECNOLÓGICO” Filosofía La filosofía del colegio puede considerarse como la guía para dirigir a los hombres y mujeres que vienen a formarse y a aprender y aprehender. Se fundamenta en la Constitución Política de nuestro país, por medio de la cual se le reconoce sus derechos humanos. En ella la institución se identifica con la concepción que se tiene de la dignidad humana, en la búsqueda de una calidad de vida, de ser ciudadanos comprometidos con la soberanía y desarrollo económico y social del país, autónomos, responsables de su propio conocimiento en relación con lo científico, tecnológico, artístico y moral. Se reconoce la singularidad e individualidad de la persona humana como ser único e irrepetible, orientando hacia la formación integral de los estudiantes, en el descubrimiento de capacidades, habilidades y destrezas, permitiendo así a los hombres y mujeres su desarrollo y satisfacción personal. Misión Somos una institución educativa de carácter oficial que ofrece educación técnica de calidad, en los niveles de preescolar, básica, media y articulación con la Educación Superior, con énfasis en diseño tecnológico y Gerencia empresarial, con el propósito de formar personas capaces de construir un proyecto de vida exitoso, que trascienda en el fortalecimiento de su entorno familiar y social. Visión En el año 2020 el Colegio Técnico Jaime Pardo Leal será reconocido a nivel local y distrital como una excelente institución educativa técnica, formadora de líderes en tecnología con trascendencia humana, emprendedora, capaz de participar crítica y activamente en las transformaciones sociales y culturales. Objetivo General Ofrecer un servicio educativo de calidad fundamentado en la formación humanística y tecnológica basado en los valores éticos, sociales, ambientales y culturales que respondan a las necesidades propias y del entorno. Objetivos Específicos Organizar el servicio educativo de acuerdo a las cuatro áreas de gestión (Directiva, Administrativa, Académica y de. Comunidad) de tal forma que responda a las necesidades e intereses de la comunidad . Formar estudiantes que aprecien, promuevan y vivan los valores éticos, sociales, ambientales y culturales. Desarrollar competencias en el estudiante que le permita el acceso a la ciencia, la tecnología y la cultura, para ayudar en la construcción exitosa de su proyecto de vida. Formar estudiantes competentes en las especialidades de Gerencia Empresarial, Diseño Tecnológico y en los programas de Articulación con la educación superior. Desarrollar una capacidad crítica, reflexiva y propositiva en los estudiantes para que sean autónomos, responsables y comprometidos para liderar y generar cambios significativos en su vida personal, familiar y comunitaria. Propender por un ambiente institucional basado en el trabajo en equipo, el respeto, la participación, la conciliación y la cordialidad. Principios Participación y trabajo en equipo: Generamos espacios que permiten que las personas actúen con capacidad, habilidad y oportunidad para identificar necesidades y prioridades, consolidando equipos de trabajo, con el fin de participar en la toma de decisiones. Creatividad: Como proceso de presentar un problema a la mente con claridad y luego tener la capacidad de ver nuevas posibilidades y hacer algo al respecto, produciendo cambios. Comunicación asertiva: Concebimos un estilo de comunicación abierto a las opiniones ajenas, dándoles la misma importancia que a las propias. Parte del respeto hacia los demás y hacia uno mismo, planteando con seguridad y confianza lo que se quiere, aceptando que la postura de los demás no tiene por qué coincidir con la propia y evitando los conflictos de forma directa, abierta y honesta. Sana convivencia: Formamos en el respeto por los derechos y oportunidades de todas las personas que conforman la comunidad educativa, el establecimiento de cálidas relaciones entre estudiantes, docentes y padres de familia y la consolidación de un ambiente de paz y de concordia. Identidad y pertenencia: Generamos procesos que permiten la formación de mi identidad personal, reconociéndonos como sujetos de derechos y deberes, promoviendo y vivenciando valores que conlleven a una convivencia armónica con el ambiente natural, social y cultural del cual hacemos parte. Ciencia y tecnología: Potenciamos el desarrollo de la ciencia y la tecnología para transformar el mundo, lo cual implica un compromiso serio de formar a las nuevas generaciones en responsabilidad y compromiso social. Actitud emprendedora: Concebimos la formación de actitudes basadas en el optimismo, la proactividad y el desafío, superando los obstáculos hacia un proyecto de vida exitoso. Valores Honestidad: Consiste en pensar, vivir, comportarse y expresarse con coherencia y sinceridad de acuerdo con los principios de la verdad y la justicia. Es el saber actuar con rectitud y honradez frente a las situaciones que se nos presenten en la vida Solidaridad: Es fomentar nuestra participación en toda actividad que implique el servicio social, la generosidad y el bien común. Tolerancia: Es el respeto y la consideración hacia las formas de ser, de pensar, de obrar y de sentir de los demás, aunque éstas sean diferentes o contrarias a las propias. Implica respetar la diferencia, luchar para que sea conservada y defendida por otros, permitir a los demás comportamientos que no atenten contra las personas o contra el bien común. Responsabilidad: Compromiso que se adquiere consigo mismo de manera autónoma, para lograr la satisfacción del deber cumplido, llegando a un sentido de participación en el que existe la voluntad para intervenir con sentimiento de pertenencia en las diferentes actividades institucionales. Es siempre dinámica y conlleva a opinar y colaborar, dentro de las normas de convivencia del Colegio. Hacer lo que debo sin que nadie me lo recuerde es la consigna del éxito. Compromiso: Comprometerse va más allá de cumplir con una obligación, es poner en juego nuestras capacidades para sacar adelante todo aquello que se nos ha confiado. Una persona comprometida es aquella que cumple con sus obligaciones haciendo un poco más de lo esperado al grado de sorprendernos, porque vive, piensa y sueña con sacar adelante cada uno de los retos propuestos. Respeto: Considerado como el reconocimiento de nuestros semejantes, que se manifiesta en la manera como nos relacionamos entre sí, lo cual implica la comprensión y la aceptación de las condiciones inherentes a las personas como seres humanos con derechos y deberes en un constante proceso de mejoramiento y transformación. Se relacionan con éste valor, la tolerancia, puntualidad e identidad. 4.2. MARCO TEÓRICO En este apartado se pretende explicar cada una de las variables que constituyen el proyecto de convivencia, como son: Gestión del conflicto, comunicación, tecnología, habilidades sociales, metacognición y convivencia, con el fin de comprender los elementos que las definen y así darle forma a la estrategia pedagógica que se quiere diseñar e implementar. 4.2.1. Gestión del conflicto Para Fernández (2009), en general, el conflicto es percibido como algo negativo, una amenaza o peligro que pone en riesgo la integridad (física o psicológica) de quien se ve afectado por el mismo; usualmente conflicto va asociado a violencia, razón por la cual se lo trata de evitar antes que hacerle frente. Sin embargo, el conflicto no es bueno ni malo en sí, sino que depende de la manera en que es abordado, ya que sus efectos tendrán directa relación con la forma en que la(s) persona(s) afectada(s) responda(n) ante su emergencia. Como señalan varios autores, el conflicto es un hecho consustancial al ser humano y forma parte de las relaciones sociales y de la vida en sociedad; se presenta en diferentes ámbitos de interacción, como la escuela, la familia, el trabajo, la sociedad, etc., cada uno de los cuales le otorga una particularidad y connotación diferentes, que contribuyen al planteamiento de una conceptualización. Por tal razón, no existe una sola definición sino muchas, cada una de las cuales destaca los aspectos y las dimensiones diferentes del conflicto. El conflicto, se refiere a la lucha de las posiciones, intereses o necesidades entre dos o más personas, grupos u organizaciones que consideran que sus intereses son incompatibles. Herrera Duque define al conflicto como “…una construcción de las personas en la interacción que establecen en su vida cotidiana, a la que llegan como actores con intereses, una historia, un contexto cultural y unas prácticas y sentidos, …” (2001: 8). En el conflicto existe un choque de intereses entre dos o más personas, por la creencia de que sus deseos, valores, necesidades, formas de pensar, creencias, etc., son incompatibles y que por tanto no pueden ser alcanzadas de forma simultánea lo que genera, un cúmulo de sentimientos y emociones que tiñe todo lo relacionado con el conflicto haciéndolo más complejo de tratar. Asimismo, se debe tener presente que el conflicto es un fenómeno dinámico y dialéctico, con momentos de inflexión y con momentos de escalada y desescalada. Por tanto, con base en lo señalado se puede definir al conflicto como: “un proceso, que posee una dinámica propia y se caracteriza por el choque o cruce de los intereses entre las personas, las cuales manejan percepciones que en algunos casos son diferentes sobre el mismo conflicto, se involucran sentimientos y emociones. En el que influyen (…) el contexto social, cultural, [educativo] y económico…” (Zárate, citado en Fernández, 2009) Es el contexto lo que determina que los conflictos sean parte de la vida del ser humano y por esta razón son una gran fuente de aprendizaje. Tener conflictos significa estar vivo, y lo saludable es aprender a manejarlos, principalmente porque algunos son inevitables. Lo que sí es evitable son las consecuencias negativas de los mismos, el ser humano cuenta con recursos internos e innatos que lo dotan de capacidad para abordarlos, (el ser humano sobrevive gracias a ellos) si bien es cierto que las estrategias útiles “se aprenden“. La escuela tiene una responsabilidad social muy importante y es el de generar escenarios que posibiliten desarrollar esas habilidades o capacidades para abordar el conflicto a partir de la estructuración de estrategias con metodología, técnicas e instrumentos propios, adaptados a las realidades de los espacios educativos, con el fin de enfrentarlos. Es aquí donde surge el término “gestión del conflicto”, entendido como la ruta que se debe seguir para abordar las situaciones conflictivas, fija el proceso secuencial que se debe seguir, la manera en que este proceso debe ser desarrollado, las herramientas pertinentes, la estructura organizativa más adecuada al fin perseguido, las instancias participantes y, fundamentalmente, el marco normativo adecuado para la promoción de tales acciones como parte de una política institucional educativa (Fernández, 2009). Es usual que la escuela no dirija su mirada a la estructuración de un modelo que permita el desarrollo de estrategias tendientes a entender, comprender y hacer frente al conflicto, por esta razón es visto como un elemento disfuncional, algo negativo que debe evitarse; razón por la cual el sistema educativo trata de regularlo, entendido como eliminarlo. De hecho, una de las principales preocupaciones de los educadores en las instituciones escolares, junto a temas netamente educativos, va ligada a la forma de evitar los conflictos y, con ello, la forma de controlar la disciplina de los estudiantes. Esta preocupación continua conduce a que la escuela le dedique mucho esfuerzo y energía a esta tarea. Hay un afán por tener la autoridad suficiente para controlar el comportamiento de los estudiantes y así garantizar un buen funcionamiento del aula y asegurar la convivencia armónica de sus miembros. Detrás de esta ansia de control, se encuentra subyacente la necesidad de asegurar una convivencia pacífica. Por ello, en esta tarea recurren a diversas estrategias, algunas de ellas estructuradas, en torno a lineamientos institucionales preestablecidos y otras de una forma más bien anárquica y desorganizada, basada en los usos y costumbres sociales y locales. Torrego (citado en San Martin, 2003), explica que en la escuela se puede vivir y convivir con uno de los tres tipos de modelos de gestión del conflicto: Normativo: denominado el sancionador, ya que a través de la sanción se busca corregir la conducta catalogada como indeseable, de manera que no se vuelva a repetir. Relacional: otorga el poder de la resolución del conflicto a la relación entre las partes, está basado en el dialogo y en la buena disposición. La gestión del conflicto se realiza mediante la comunicación directa, su finalidad es evitar que el conflicto derive en crisis y en consecuencia, evitar que derive en violencia. Integrador: busca fusionar valores relacionados con el control disciplinario en un marco democrático y participativo, así como de respeto a los derechos de las personas. Este modelo se basa en la flexibilización del modelo normativo, ya que coincide en la necesidad de que existan normas democráticas que faciliten la convivencia, y en la institucionalización del modelo relacional, debido a que considera que es importante la generación de las condiciones que favorezcan un clima de convivencia y una cultura del diálogo. Para el Colegio Técnico Jaime Pardo Leal, es importante asumir el modelo integrador para el tratamiento de los conflictos, ya que: Promueve el establecimiento de mecanismos de diálogo que sustituyan los castigos de carácter autoritario, para ello es necesaria la formalización de normas claras de convivencia que sean de conocimiento colectivo y que hayan sido construidas de forma democrática y participativa. Estimula la capacidad de autorregulación de la conducta de manera que las partes inmersas en un conflicto aprendan a construir acuerdos, a asumir compromisos y a responsabilizarse por sus actos. Impulsa el resarcimiento de los daños ocasionados y consecuentemente la reparación de la relación, de modo que la relación se preserve. Pone énfasis en la resolución del conflicto a través del abordaje directo basado en el acercamiento entre las partes y en el aprendizaje de mejores formas de comunicación. Requiere la creación de un marco protector en diferentes ámbitos como ser: cambios en el currículo, mayores espacios de participación de los padres de familia y/o acudientes y de los estudiantes, medidas organizativas como la creación de unidades de reacción ante el surgimiento de conflictos, etc. Exige contar con estructura (normas, organización, etc.) y capacidades (equipos, herramientas, etc.) que legitimen el diálogo y la participación y que propicien su implementación dentro el marco escolar. Ve hacia futuro y se interesa por la relación ulterior entre las partes. 4.2.2. Habilidades sociales Según Monjas y de la Paz, 1998, las habilidades sociales son las capacidades o destrezas sociales específicas requeridas para ejecutar competentemente una tarea interpersonal. Hablar de habilidades, es hacer referencia a un conjunto de conductas aprendidas. Son algunos ejemplos: decir que no, hacer una petición, responder a un saludo, manejar un problema con una amiga, empatizar o ponerse en el lugar de otra persona, hacer preguntas, expresar tristeza, decir cosas agradables y positivas a los demás. Gresham (citado en Monjas y de la Paz, 1988) señala que en la bibliografía se suelen encontrar tres tipos de definiciones de las habilidades sociales: Definición de aceptación de los iguales En estas definiciones se usan índices de aceptación de los iguales o popularidad. Se consideran niños o adolescentes socialmente hábiles los que son aceptados o populares en la escuela o en la comunidad. El mayor fallo de estas definiciones es que no identifican los comportamientos específicos que se relacionan con la aceptación de los iguales. Definición conductual Se definen las habilidades sociales como aquellos comportamientos específicos de la situación que maximizan la probabilidad de asegurar o mantener el reforzamiento o decrecer la probabilidad de castigo o extinción contingente sobre el comportamiento social propio. La premisa que subyace a este tipo de definiciones es la adquisición de habilidades interpersonales específicas que permiten a uno experimentar relaciones con otros que son personal o mutuamente satisfactorias. Estas definiciones tienen la ventaja de que se pueden identificar, especificar y operacionalizar los antecedentes y las consecuencias de los comportamientos sociales particulares con fines de evaluación e intervención. Sin embargo, esta definición no asegura que los comportamientos identificados para la intervención sean de hecho socialmente hábiles o socialmente importantes. Definición de validación social Según este tipo de definiciones, las habilidades sociales son aquellos comportamientos que, en situaciones determinadas, predicen importantes resultados sociales para el niño o adolescente, como por ejemplo, aceptación, popularidad o juicios de otros significativos. Las habilidades sociales son, por tanto, un conjunto de competencias conductuales que posibilitan que el niño o adolescente mantenga relaciones sociales positivas con los otros y que afronte, de modo efectivo y adaptativo, las demandas de su entorno social, aspectos estos que contribuyen significativamente, por una parte, a la aceptación por los compañeros y, por otra, al adecuado ajuste y adaptación social. Hablar de habilidades sociales implica hacer referencia a los conceptos de inteligencia emocional y de procesos de autorregulación y autocontrol (Metacognición), por cada uno de los puntos en común que promulgan. La inteligencia emocional según Goleman (1996), está compuesta de un numeroso conjunto de habilidades como son: autocontrol emocional, entusiasmo, perseverancia, capacidad de automotivarse, relaciones interpersonales, recibir y comprender los sentimientos de los demás, expresión emocional, autoconocimiento, sociabilidad, empatía, arte de escuchar, resolver conflictos, colaborar con los demás, control de los impulsos, diferir las gratificaciones, autorregular nuestros estados de ánimo, manejo de la ansiedad y optimismo entre otros. Estas habilidades pueden enseñarse, y se plantea la necesidad de llevar a cabo una educación, una alfabetización emocional que posibilite hacer a las personas emocionalmente competentes y capaces de controlar sus emociones. Uno de los procesos que puede ayudar significativamente en hacer consciencia de la forma como me relaciono con migo mismo y con los demás, de posibilitar esa alfabetización emocional de la que habla Goleman, es la metacognición. Metacognición En el proceso de enseñanza aprendizaje generalmente no se advierte de la importancia que tiene el reflexionar sobre los propios saberes y la forma en que se producen, no solo los conocimientos, sino también en la forma como se interrelacionan consigo mismo y con su entorno. Es decir que por lo general, suelen ignorarse los factores que intervienen en la formación y desarrollo de las estructuras cognitivas de los estudiantes, factores primordiales cuando se trata de lograr un cambio en ellos, en formas de pensar, actuar y sentir. Este hecho lleva a la necesidad de considerar los elementos del meta-aprendizaje (aprender a aprender) o metacognición (Chrobak, 2000). La palabra metacognición es un término compuesto en el cual "cognición" significa conocer y se relaciona con aprender y "meta" hace referencia a la capacidad de conocer conscientemente; es decir, de saber lo que se sabe, de explicar cómo se aprendió e incluso de saber cómo se puede seguir aprendiendo. Flavell (Citada en Osses y Jaramillo, 2008), uno de los pioneros en la utilización de este término, afirma que la metacognición, por un lado, se refiere “al conocimiento que uno tiene acerca de los propios procesos y productos cognitivos o cualquier otro asunto relacionado con ellos, por ejemplo, las propiedades de la información relevantes para el aprendizaje” y, por otro, “a la supervisión activa y consecuente regulación y organización de estos procesos, en relación con los objetos o datos cognitivos sobre los que actúan, normalmente en aras de alguna meta u objetivo concreto” (p. 191). Así, por ejemplo, se practica la metacognición cuando se tiene conciencia de la mayor dificultad para aprender un tema que otro; cuando se comprende que se debe verificar un fenómeno antes de aceptarlo como un hecho; cuando se piensa que es preciso examinar todas y cada una de las alternativas en una elección múltiple antes de decidir cuál es la mejor, cuando se advierte que se debería tomar nota de algo porque puede olvidarse. La metacognición permite la reflexión sobre los procesos cognitivos que realiza la persona posibilitando la identificación de las condiciones y operaciones que influyen en el proceso de aprendizaje de tal manera que se pueden reconocer y valorar las experiencias, las vivencias, los sentimientos, las emociones y las percepciones del estudiante que afectan los progresos en el proceso de aprendizaje. Esta reflexión orienta al desarrollo de competencias (Argüelles y Nagles, 2001, p. 113) Por tanto, este proceso puede ser desarrollado mediante experiencias de aprendizaje adecuadas, como por ejemplo la aplicación de la Inteligencia Emocional. Según Burón (1996), la metacognición se destaca por cuatro características: conocer los objetivos que se quieren alcanzar, identificar las estrategias para conseguir estos objetivos, auto observación del propio proceso y evaluación de los resultados. La metacognición es un proceso que puede ser abordado desde las ideas, los pensamientos y las percepciones sobre “el conocimiento que uno tiene y el control que uno ejerce sobre su propio aprendizaje y, en general, sobre la propia actividad cognitiva, facilitando la toma de consciencia de los propios procesos de aprendizaje, de su funcionamiento, optimización y control” (Mateos, 2001 citada por Argüelles y Nagles, 2001). En consecuencia, es posible diferenciar dos componentes metacognitivos: uno que tiene que ver propiamente con el conocimiento y otro de carácter procedimental (control metacognitivo o aprendizaje autorregulado), ambos importantes para el aprendizaje y relacionados entre sí (Flavell, 1976 citada en Osses y Jaramillo, 2008) Argüelles y Nagles (2007) afirman que, el conocimiento metacognitivo permite reconocer el funcionamiento de las actividades cognitivas en la persona y el control metacognitivo permite generar procesos de autorregulación de la actividad cognitiva, es decir de los procesos de aprendizaje que realiza una persona. Según estos dos autores Argüelles y Nagles (2007), el conocimiento metacognitivo aborda particularidades relacionadas con la persona, la tarea y las estrategias: las La persona. Esta variable trata del conocimiento que tenemos de nosotros mismos como aprendices, de nuestras potencialidades y limitaciones cognitivas y de otras características personales que pueden afectar el rendimiento en una tarea o la solución a un problema especifico, se deben considerar los intereses, los sentimientos, las emociones, las motivaciones y los estados de ánimo (Argüelles y Nagles, 2007). Conocimiento de la tarea. Hace alusión al conocimiento que poseemos sobre los objetivos de la tarea y todas aquellas características de ésta, que influyen sobre su mayor o menor dificultad, conocimiento muy importante, pues ayuda al aprendiz a elegir la estrategia apropiada (Argüelles y Nagles, 2007). Conocimiento de las estrategias. El conocimiento de las estrategias que pueden ser aplicadas en propósitos múltiples permite su utilización en situaciones diferentes en el espacio vital de la persona. Sin embargo, esto exige un amplio dominio del campo de aplicación de cada estrategia y de los resultados esperados del uso y el potencial de adaptabilidad de la estrategia para responder a situaciones concretas y especificas (Argüelles y Nagles, 2007). En cuanto al control metacognitivo o aprendizaje autorregulado, la idea básica es que el aprendiz competente es un participante intencional y activo, capaz de iniciar y dirigir su propio aprendizaje. El aprendizaje autorregulado, por tanto, permite que las personas contribuyan en forma activa al logro de sus propias metas de aprendizaje e interactuar proactivamente en la construcción de los conocimientos que integran a su estructura cognitiva. Desde esta perspectiva la autorregulación hace referencia a las ideas, sentimientos y actos generados y que se orientan de manera sistemática a la consecución de metas (Argüelles y Nagles, 2007). Desarrollar procesos metacognitivos permite que haya consciencia de las habilidades que una persona tiene al pensar, sentir y actuar, es así como, se da la reflexión, el análisis y la evaluación de los mecanismos que operan cuando se interactúa consigo mismo, con los otros y/o con el entorno. Tener autocontrol y autorregulación de las emociones, sentimientos, pensamientos y acciones, ayuda a que las personas construyan una sana convivencia, es por esta razón que hay que profundizar en cada uno de los aspectos que tienen que ver con la interrelación, con la convivencia. 4.2.3. Convivencia Vives y Lara (2005, p.11) afirman que, “La palabra convivencia significa vivenciar con, es decir, vivir con el otro, los otros, en términos generales con la sociedad. Toda sociedad es una organización donde se mezclan leyes, tradiciones, costumbres, normas, convenciones que sustentan la organización, pero al mismo tiempo restringen o coartan las apetencias personales, generando conflicto y malestar. Así, vivir no es otra cosa que intentar un equilibrio entre lo personal y lo social, lo propio y lo común”. Partiendo de los planteamientos de los autores, se puede decir que la convivencia está definida por las relaciones interpersonales y las tensiones generadas por las diferencias propias de los niños, niñas, jóvenes y adultos, sus experiencias de vida, su cultura, su simbología, sus imaginarios e ideologías. El sentido de la convivencia es ante todo, una forma para estar en sociedad, para compartir, para intercambiar en la cotidianeidad, es una manera de ser y estar en un territorio, en una comunidad. La convivencia no se da en forma espontánea, es algo que se construye, que se produce social y colectivamente, por tanto surge la necesidad del diseño de acuerdos o consensos mínimos para mantener unas relaciones favorables donde cada quien pueda libremente desarrollar procesos de comunicación, y autorreconocimiento. Uno de los lugares en el que se vive con los otros y se convive con tradiciones, costumbres, normas, etc., como lo plantea Vives y Lara (2005), es la escuela, uno de los espacios en el que niños, niñas, jóvenes y adultos pueden tener la posibilidad de compartir sus experiencias, formas de pensar, sentir y actuar. Puede ser un espacio de crecimiento, de encuentro, de aprendizaje, de experiencias compartidas, de conocimiento de los otros y de descubrimiento del mundo. En la escuela, como en un microcosmos, se reproducen las situaciones conflictivas de la sociedad, pero también las posibilidades de superación e integración que favorecen los ambientes educativos. Es, sin duda, un taller insuperable para aprender a convivir. Convivir en la escuela además de permitir el desarrollo de relaciones sociales con los otros, posibilita espacios de socialización, entendido como el “proceso de adquisición, interiorización e integración en la personalidad del individuo, de los valores sociales y las normas de comportamiento propios del grupo social o comunidad a la que pertenece, con el fin de posibilitar su adaptación al contexto social” (Instituto Cervantes, 2009). Es por esta razón que convivir en la escuela significa tener la capacidad de vivir con una serie de elementos que conllevan a relacionarme con los otros, a equilibrar los intereses particulares (condicionados por las expresiones, deseos, costumbres, principios, normas y códigos) con los intereses sociales que privilegian el bienestar colectivo, es reconocer al otro y llegar a ser reconocido. Convivir en la escuela exige tolerancia en el sentido de aceptar aquello que es diferente. “Una actitud intolerante riñe con el establecimiento de relaciones armoniosas o de convivencia porque rechaza al otro, ya sea en su totalidad o en algunos aspectos esenciales en la vida de relación” igualmente la convivencia requiere “el establecimiento de unas normas comunes, llamadas normas de convivencia” (Malgesini y Jiménez, 2000, p.78). Una relación convivencial requiere de unas reglas preestablecidas que ayuden a que el juego de las interacciones se den en forma armónica, en forma pacífica, en forma natural y que deben ser aceptadas y cumplidas de una manera responsable por todos. Puig (1993). (Citado en Pérez, 1999), define las normas como reglas o pautas de conducta que determinan lo que hay que hacer o no. Puig, plantea que toda norma supone algún tipo de enunciado o principio valorativo, del que se deriva, y al que se puede acudir para dar razón de ella. Cuando no se acepta dicho valor o principio, la norma es puesta en cuestión. Frente a los valores, que suelen ser fines en sí mismos y guardan una cierta independencia de las situaciones específicas, las normas –por lo general– son medios o instrumentos para conseguir determinadas metas, especificando lo que se debe o no hacer en unas circunstancias concretas. Así, pues, las normas no son valores en sí mismas, pero constituyen una manifestación y un soporte externo-interno de los valores que influyen y acaban adquiriendo los individuos. Convivir en la escuela exige además hablar de conflicto, situación en la que dos o más personas entran en oposición o desacuerdo, porque sus posiciones, intereses, necesidades, deseos o valores son incompatibles o son percibidos como incompatibles, donde juegan un papel muy importante las emociones y sentimientos y donde la relación entre las partes en conflicto puede salir robustecida o deteriorada en función de cómo sea el proceso de resolución del mismo (Torrego, 2003, p.37). Los conflictos se presentan de múltiples formas, por motivos diversos y con intensidades variadas; hacen parte de la dinámica de vida, puesto que gran parte del tiempo hay interrelación, y de acuerdo a la forma como se asuman pueden generar nuevos caminos de entendimiento y de desarrollo social y personal, o por el contrario vías de destrucción y desconocimiento de los derechos y necesidades que como personas tenemos. Según Rodríguez (citado en serie lineamientos de política, s.f.), “los conflictos, como expresión de la diferencia de ideas y modos de ser y actuar de los seres humanos, ponen a prueba nuestra capacidad para manejarlos y convivir creativamente con ellos. En tal sentido, son un motor del desarrollo moral e intelectual y de enriquecimiento de la vida cotidiana y del conocimiento; una gran oportunidad de descentrarse de los intereses y las miradas propias para colocarse en el lugar del otro y la otra” (p.60). Por consiguiente, el conflicto se considera como un instrumento esencial para la transformación, por tanto, es necesario establecer mecanismos claros para orientarlos hacia una solución favorable al cambio. Dicho proceso de transformación y cambio vendrá dado por la toma de conciencia colectiva de los miembros que hacen parte de una comunidad, en este caso educativa. Por ello, desde esta perspectiva, no sólo se admite sino que también se favorece el afrontamiento de determinados conflictos desde una perspectiva democrática y no violenta, lo que se puede denominar la utilización didáctica del conflicto. Lederach (2000), argumenta que “el objetivo al analizar un conflicto en últimas es de comprender y ajustar, es decir, regular el proceso para que vaya encaminado hacia fines productivos” (p.60). perspectiva, que según Lederach, trae un sistema de valores implícito; ya que, una de las tareas en el desarrollo de la solución a un conflicto, es la toma de conciencia y la clarificación de los valores que están relacionados con el comportamiento, que es en sí, lo que define el actuar de cada persona. 4.2.4. Competencias ciudadanas El Ministerio de Educación define así las competencias ciudadanas: “Las competencias ciudadanas son el conjunto de conocimientos y de habilidades cognitivas, emocionales y comunicativas que, articulados entre sí, hacen posible que el ciudadano actúe de manera constructiva en la sociedad democrática. Retomando el concepto de competencia como saber hacer, se trata de ofrecer a los niños y niñas las herramientas necesarias para relacionarse con otros de una manera cada vez más comprensiva y justa y para que sean capaces de resolver problemas cotidianos. Las competencias ciudadanas permiten que cada persona contribuya a la convivencia pacífica, participe responsable y constructivamente en los procesos democráticos y respete y valore la pluralidad y las diferencias, tanto en su entorno cercano, como en su comunidad, en su país o en otros países”. 5. PLANEACION 5.1. AREAS ESTRATÉGICAS DIMENSIÓN AREAS ESTRATEGICAS DEFINICIONES OPERACIONALES Gestión del conflicto Social - convivencial Comunicación Tecnología Resolución de conflictos Mediación Negociación Conciliación Normas – manual de convivencia Expresión verbal Expresión no verbal Utilizar los diferentes medios de comunicación con que cuenta el colegio Habilidades sociales Competencias ciudadanas Inteligencia emocional – Autocontrol y autorregulación Autoconcepto y autoestima Asertividad Empatía Proyecto de vida Convivencia y paz Participación y responsabilidad democrática Pluralidad, identidad y valoración de las diferencias 5.2. ESTRATEGIAS Para el desarrollo del proyecto se tendrán en cuenta las siguientes estrategias: Organización de una propuesta pedagógica basada en la gestión del conflicto, la comunicación asertiva, las Competencias ciudadanas y el desarrollo de habilidades sociales, que permita a partir de procesos de autorregulación y autocontrol, mejorara el ambiente escolar. Formación y capacitación a estudiantes con el apoyo de los docentes y padres de familia sobre aspectos relacionados con el modelo de resolución e integración de conflictos, mediación, negociación, comunicación asertiva, empatía, habilidades sociales y uso de la tecnología. Construcción de principios que reconozcan la cultura del contexto y el ideal educativo de estudiantes, docentes y padres de familia, para generar una actitud y compromiso favorable para con la convivencia, definidos en un Manual. Desarrollo de los proyectos transversales teniendo como uno de los objetivos, la construcción de una sana convivencia. Implementación de las convivencias experienciales atendiendo a las necesidades de los estudiantes. Trabajo interinstitucional con entidades como, Hospital Vista Hermosa, Secretaría de integración Social, Policía Nacional, Fundación Preveer, Salud al Colegio, Fundación Emaús. Articular el proyecto de convivencia en cada uno de los ejes de la propuesta pedagógica “polita y Jaimito continúan en el viaje del reconocimiento de su ser y su territorio hacia un proyecto de vida emprendedor” Planificación, organización y evaluación de la ejecución de los recursos económicos destinados para el proyecto. AREA ESTRATEGICA Competencias ciudadanas Gestión del conflicto Comunicación Habilidades sociales PERSPECTIVA 1. 2. OBJETIVOS 3. Contribuir con el mejoramiento del ambiente convivencial escolar, a través de la capacitación y/o actualización de estudiantes con el apoyo de los docentes y padres de familia en temas relacionados con la gestión del conflicto, modelo de resolución de conflictos e integración, negociación y mediación. Construir principios que reconozcan la cultura del contexto y el ideal educativo de estudiantes con el apoyo de los docentes y padres de familia, para generar una actitud y compromiso favorable para con la convivencia. Conformar la mesa de conciliación de tal forma que responda a lo establecido en el Manual de Convivencia, en uno de los pasos del proceso para tratar situaciones conflictivas. 1. 2. 3. 4. Utilizar los diferentes medios de comunicación con que cuenta la institución (emisora escolar, periódico, carteleras, murales, pagina WEB, etc) para abordar desde la expresión verbal y no verbal el significado de vivir y convivir. Propiciar en los estudiantes a través de actividades lúdicas, recreativas, culturales y deportivas la comprensión del conflicto en sus relaciones interpersonales, y difundir los valores y principios que fundamentan el horizonte Institucional. Desarrollar encuentros con los estudiantes para tratar temáticas que estén relacionadas con su diario vivir, utilizando como técnica el cine foro y juego de roles. 1. Diseñar, aplicar y evaluar estrategias metodológicas – didácticas para que los estudiantes desarrollen procesos de autocontrol y autorregulación de los comportamientos, afectos y emociones. 2. Desarrollar encuentros experienciales con los estudiantes, dentro o fuera del colegio, para tratar temas relacionados con el reconocimiento de los afectos y las emociones. 3. Organizar una escuela de padres para dialogar, formar y capacitar sobre temas relacionados con la convivencia. 1. Aportar a la construcción de la convivencia y la paz. 2. Promover la participación y responsabilidad democrática. 3. Promover la pluralidad, identidad y valoración de las diferencias humanas Mejorar los canales de comunicación formal con que cuenta el colegio y hacer realidad la utilización de la página Web Institucional. AREA ESTRATEGICA Competencias ciudadanas Gestión del conflicto Comunicación Habilidades sociales PERSPECTIVA 1. Al 2013 el 100% de los estudiantes ha recibido capacitación y o formación en resolución de conflictos, negociación, mediación y conciliación. 1. 2. En el año 2012-2013, desarrollar 4 talleres con los estudiantes, utilizando la metodología de estudio de casos para, tratar los elementos que se deben tener en cuenta a la hora de dar solución a los conflictos. 2. METAS 3. 4. Manual de convivencia revisado y ajustado de acuerdo a los principios convivenciales construidos por la comunidad educativa al finalizar el presente año 2012. Conformación de una mesa de 3. En el año 2012-2013, cada mes trabajar un valor y principio establecido en el Horizonte Institucional (abrir espacios de expresión y reflexión, como son: formaciones, carteleras, emisora escolar, periódico, etc) En el año 2012 realizar dos ediciones del periódico escolar. En el año 2012-2013 realizar jornadas culturales, lúdicas, recreativas y deportivas: Día del idioma Dìa de la niñez y la recreaciòn Día del juego y el deporte Día del medio ambiente Día de la familia Día del reconocimiento de los afectos y las emociones. Día de la familia Día de la innovación tecnológica 1. En el año 2012-2013 realizar una convivencia experiencial con los estudiantes y docentes dentro o fuera de la institución. 2. En el año 2012-2013 organizar una escuela de padres por bimestre, para tratar temas relacionados con el buen trato, la comunicación asertiva, entre otros. 3. En el año 2012-2013, organizar 4 talleres para desarrollar con los estudiantes sobre inteligencia emocional. 1. En el 2012-2013 se realizará una jornada sobre la construcción de la paz en el colegio y en el país. 2. En el 2012 se elaborará, junto con los representantes de los estudiantes, un plan anual de participación y responsabilidad democrática, con su cronograma. 3. En el 2012, se elaborará un mapa o un diagnóstico de las diferencias culturales que caracterizan al país, a la ciudad conciliación en el año 2012. 4. 5. 2 jornadas centradas en la lógica y la matemática. Semana de la ternura En el año 2012-2013 realizar 2 cineforos con los estudiantes, para tratar temáticas como, matoneo en la escuela y consumo de sustancias. En el año 2013 se implementará la pagina Web Institucional y a la localidad. AREA ESTRATEGICA Competencias ciudadanas Gestión del conflicto Comunicación Habilidades sociales PERSPECTIVA Actividades sobre la paz. 1. Capacitación y/o formación 1. (Número de estudiantes y padres de familia capacitados x 100)/ (Totalidad de estudiantes y padres de familia convocados). INDICADORES Funcionamiento conciliación de la mesa Incumplimiento del convivencia (faltas gravísimas) manual graves de y (Faltas graves y gravísimas cometidas por los estudiante en el presente periodo x 100)/ (Faltas graves y gravísimas cometidas por los estudiantes en el periodo anterior). 1. Convivencias experienciales (Número de estudiantes participantes x 100)/ (Totalidad de estudiantes convocados). Número de estudiantes participantes x 100)/ (Totalidad de estudiantes convocados). 2. Participación y responsabilidad democrática. Usuarios de la página Web. de (Número de casos atendidos por parte de la mesa de conciliación x 100)/ (Totalidad de situaciones de conflicto). 3. recreativas, (Número de actividades ejecutadas x 100)/ (Número de actividades programadas). 2. 2. Actividades lúdicas, culturales y deportivas (Número de usuarios que acceden a la página Web, en el presente periodo x 100)/ (Número de usuarios que acceden a la página Web, en el periodo anterior). Escuela de padres (Número de padres de familia capacitados x 100)/ (Totalidad de padres de familia convocados). Número de actividades ejecutadas x 100)/ (Número de actividades programadas). Pluralidad, identidad y diferencias culturales Número de actividades ejecutadas x 100)/ (Número de actividades programadas). PLAN DE ACCIÓN CICLOS UNO Y DOS (TRANSICION A QUINTO DE PRIMARIA) AREA ESTRATÉGIC A OBJETIVOS ESPECÍFICOS GESTION DEL CONFLICTO Contribuir con el mejoramiento del ambiente convivencial escolar, a través de la capacitación y/o formación de estudiantes con el apoyo de los docentes en temas relacionados con la gestión del conflicto, modelo de resolución de conflictos e integración, negociación y mediación. Construir principios que reconozcan la cultura del contexto y el ideal educativo de estudiantes, docentes y padres de familia, para generar una actitud y compromiso favorable para con la convivencia. ACTIVIDADES O ACCIONES PEDAGÓGICAS Desarrollo de talleres para lograr identidad y actitud de compromiso personal y comunitaria Desarrollo de actividades que permitan bajar niveles de ansiedad y agresividad en los estudiantes y a la vez trabajar competencias como, trabajo en equipo, solidaridad, creatividad, etc., y procesos de pensamiento. Desarrollo de juegos tradicionales en el patio durante los espacios de descanso u otros, de tal forma que ayude al fortalecimiento de valores y principios institucionales. Revisión y ajuste del Manual de convivencia, atendiendo a los principios convivenciales construidos. El documento debe adaptarse a la edad de los niños y niñas. UNIDAD MEDIDA CA NT VALOR UNITARIO RECURSOS TOTALES RESPONSABLE S Cronograma para la ejecución del recurso (8 meses correspondiente al calendario académico desde el momento en que haya disponibilidad presupuestal) 1er 2º 3er 4º 5º 6º 7º 8º mes mes mes mes mes mes mes mes Materiales para el desarrollo de talleres 20 47.750 955.000 Director de curso y docentes de x apoyo x x x x x x X Juegos matemáticos para el desarrollo del pensamiento yenkas, torres de hannoi cubo de Ruby , rumiquiu 40 24.000 960.000 Director de curso y docentes de apoyo x x x x x x x materiales 1 100.000 400.000 X X X X X X 1 300.000 Docentes y monitores X Y mano de obra 1 50.000 50.000 Docentes y administrativ x x Insumos técnicos x Conformar la mesa de conciliación de tal forma que responda a lo establecido en el Manual de Convivencia, en uno de los pasos del proceso para tratar situaciones conflictivas. Utilizar los diferentes medios de comunicación con que cuenta la institución para abordar desde la expresión verbal y no verbal el significado de vivir y convivir. Organización de la mesa de conciliación estudiantil Desarrollar un proceso de capacitación a los estudiantes que conforman el comité de conciliación Mantenimiento, adecuación y utilización de la emisora escolar, para la realización de programas y divulgación de información que fomente la sana convivencia. Diseño del periódico escolar con temas ambientales, culturales, deportivos, teniendo como eje los valores y principios institucionales Adecuación de un espacio físico 1 0 0 Insumos 1 120.000 120.000 Mantenimiento y arreglo 1 2.000000 2.000.000 Rector y Auxiliar Financiera Litografía 600 800 480.000 Docentes Transporte 18 170.000 3.060.000 Director de grupo y Docentes de apoyo Rectoría X X X X X X X X X X X x X X X X X x x x x x x x x x x x x x x x x x x x X Salidas pedagógicas: Recorrido Histórico y cultural la Candelaria COMUNICACIÓN Propiciar en los estudiantes a través de encuentros, actividades lúdicas, recreativas, artísticas, culturales y deportivas la comprensión Y resolución del conflicto en sus relaciones interpersonales, y difundir los valores y principios que fundamentan el horizonte Institucional. Feria del libro Empresa de reciclaje x Cine – incentivo grupo de conciliación Parques y/o teatros de la ciudad 2.100.000 Talleres artísticos (plásticas, danza, teatro, etc) Materiales para el desarrollo de las actividades 21 100.000 Descubro mil talentos (día del lenguaje y las lenguas, día de la familia, semana de la ternura. Grupo artístico 2 300.000 600.000 Director de grupo y Docentes de apoyo Área de Humanidades x x Embellecimiento planta física: diseño de murales por aula, decoración de materas en la institución. HABILIDADES SOCIALES Diseñar, aplicar y evaluar estrategias metodológicas – didácticas para que los estudiantes desarrollen procesos de autocontrol y autorregulación de los comportamientos, afectos y emociones. Desarrollo de cine – foros y talleres relacionados con procesos tendientes a trabajar la inteligencia emocional. Desarrollar encuentros experienciales con los Desarrollo de convivencias por estudiantes, dentro o grados fuera del colegio, para tratar temas relacionados con el reconocimiento de los afectos y las emociones. Permitir espacios de reflexión a los padres o acudientes sobre la formación, responsabilidad e interacción con sus hijos (as). Escuela de padres: desarrollo de talleres TOTAL Tela vendaval o náutica, antifluido Pintura 18 32.000 576.000 Docentes PRAE Prevención 8 50.000 400.000 Videos - guías de trabajo 4 50.000 200.000 Transporte 16 200.000 3.200.000 Docentes PRAE Prevención x X Directores de grupo y docentes de apoyo Talleristas 3 500.000 1.500.000 Materiales 3 15.000 45.000 $16.646.000 Orientación y Directores de grupo x X X X X X X X X X X X x x PLAN DE ACCIÓN BACHILLERATO AREA ESTRATÉGIC A OBJETIVOS ESPECÍFICOS GESTION DEL CONFLICTO Contribuir con el mejoramiento del ambiente convivencial escolar, a través de la capacitación y/o formación de estudiantes en temas relacionados con la gestión del conflicto, modelo de resolución de conflictos e integración, negociación y mediación. Construir principios que reconozcan la cultura del contexto y el ideal educativo de los estudiantes, para generar una actitud y compromiso favorable para con la convivencia. ACTIVIDADES O ACCIONES PEDAGÓGICAS Charlas, videos, talleres, identificación del riesgo y medidas de seguridad, convivencias de sensibilización con el acompañamiento de personas que han vivido situaciones difíciles relacionadas con el tema. UNIDAD MEDIDA Materiales para el desarrollo de talleres VALOR UNITARIO RECURSOS TOTALES RESPONSABLE S 1er 2º 3er 4º 5º 6º 7º 8º mes mes mes mes mes mes mes mes x x x x x x X X X X x x x x x x 20 47.750 955.000 Director de curso y docentes de x apoyo x 5 10.000 50.000 Coordinación X Juegos matemáticos para el desarrollo del pensamiento yenkas, torres de hannoi cubo de Ruby , rumiquiu 40 24.000 960.000 Director de curso y docentes de apoyo x Papelería y sistematización 1 44.259 44.259 Docentes y administrativ Talleres sobre la ley de infancia y Folletos y adolescencia carteleras Desarrollo de actividades que permitan bajar niveles de ansiedad y agresividad en los estudiantes y a la vez trabajar competencias como, trabajo en equipo, solidaridad, creatividad, etc., y procesos de pensamiento. Revisión y ajuste del Manual de convivencia, atendiendo a los principios convivenciales construidos. CA NT Cronograma para la ejecución del recurso (8 meses correspondiente al calendario académico desde el momento en que haya disponibilidad presupuestal) x x Conformar la mesa de conciliación de tal forma que responda a lo establecido en el Manual de Convivencia, en uno de los pasos del proceso para tratar situaciones conflictivas. Utilizar los diferentes medios de comunicación con que cuenta la institución para abordar desde la expresión verbal y no verbal el significado de vivir y convivir. 1 Organización de la mesa de conciliación estudiantil Adecuación espacio físico 4 0 0 Rectoría x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x 1 Desarrollar un proceso de capacitación a los estudiantes que conforman el comité de conciliación Mantenimiento, adecuación y utilización de la emisora escolar, para la realización de programas y divulgación de información que fomente la sana convivencia. Diseño del periódico escolar con temas ambientales, culturales, deportivos, teniendo como eje los valores y principios institucionales Materiales 4 30.000 120.000 x Mantenimiento y arreglo 0 0 0 Rector y Auxiliar Financiera Litografía 600 800 480.000 Docentes Transporte 18 170.000 3.060.000 Director de grupo y Docentes de apoyo Materiales o insumos para el desarrollo de las actividades 20 200.000 3.500.000 Grupo artístico 2 Salidas pedagógicas: COMUNICACIÓN Feria del libro Propiciar en los estudiantes a través de encuentros lúdicos, recreativos, artísticos, culturales y deportivos la comprensión de los valores y principios que fundamentan el horizonte Institucional. Parques y/o teatros de la ciudad x Visitas a lugares como la cárcel y un ancianato, un hospital. Talleres artísticos (danza) Desarrollo de actividades culturales 350.000 700.000 Consuelo Cavanzo Área de Matemáticas y Coordinación x Materiales Embellecimiento planta física (salones y corredores). HABILIDADES SOCIALES Diseñar, aplicar y evaluar estrategias metodológicas – didácticas para que los estudiantes desarrollen procesos de autocontrol y autorregulación de los comportamientos, afectos y emociones. Video- foros, a partir de películas reflexivas y de casos reales, que conlleven a la Videos - guías de contextualización. Socialización trabajo de vivencias de diferentes actores de la comunidad. Desarrollar encuentros experienciales con los Desarrollo de convivencias por estudiantes, dentro o grados fuera del colegio, para tratar temas relacionados con el reconocimiento de los afectos y las emociones. Permitir espacios de reflexión a los padres o acudientes sobre la formación, responsabilidad e interacción con sus hijos (as). Incentivo – salida pedagógica Escuela de padres: desarrollo de talleres Transporte 21 525.000 2 300.000 600.000 0 0 0 16 200.000 3.200.000 Directores de grupo x Docentes x Directores de grupo y docentes de apoyo Talleristas 3 500.000 1.500.000 Materiales o insumos 3 15.000 45.000 TOTAL $16.646.000 $15.739.259 TOTAL PRESUPUESTO ASIGNADO - 25.000 $ 32.385.259.oo $15.739.259 Orientación y Directores de grupo x x x x x x x x x x x x x x x BIBLIOGRAFIA Argüelles, Denise y Nagles, Nofal. (2007). Estrategias para promover procesos de aprendizaje autónomo. Colombia: Alfaomega. Burón, Javier. (1996). Enseñar a aprender: Introducción a la metacognición. Ediciones Mensajero. Bilbao. Chrobak, R. (2000). La metacognición y las herramientas didácticas. Universidad Nacional del Comahue, Buenos Aires, Argentina. Recuperado el 16 de diciembre de 2009 de la Word Wide Web: http://www.unrc.edu.ar/publicar/cde/05/Chrobak.htm Fernández, Marisol. (2009). Modelo de Gestión de Conflictos Escolares. Programa de Apoyo a la Gestión Pública Descentralizada y Lucha contra la Pobreza. La Paz, Bolivia. Goleman, D. (1996). La inteligencia emocional. Barcelona: Kairós. Lederach, Paul. (2000). El abecé de la paz y los conflictos. Madrid: Catarata. Malgesini, Graciela y Jiménez Carlos. (2000). Guía de conceptos sobre migraciones, racismo e interculturalidad. Madrid: Catarata. Monjas, Ines y de la Paz Balvina (1998). Las habilidades sociales en el currículo. Centro de Investigación y Documentación Educativa. Bolivia, La Paz. Osses, Sonia y Jaramillo Sandra. (2008). Metacognición: un camino para aprender a aprender. Estudios Pedagógicos XXXIV, 1, 187-197. Recuperado el 02 de Diciembre de 2009 de la Word Wide Web: http://www.scielo.cl/pdf/estped/v34n1/art11.pdf Perez, Cruz. (1999). Educación para la convivencia como contenido curricular: propuestas de intervención en el aula. Revista estudios pedagógicos. 25, 113-130. Recuperado el 07 de Diciembre de 2009 de la Word Wide Web: http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0718- 07051999000100007&script=sci_arttext#13 San Martín, José Antonio (2003). La mediación escolar: Un camino para la gestión del conflicto escolar. Madrid. Editorial CCS. Serie Lineamientos de Política. (s.f.). Colegios que construyen convivencia: propuesta pedagógica para la resolución de conflictos escolares. Bogotá: Secretaría de Educación Alcaldía Mayor de Bogotá D.C. Torrego, Juan. (2003).Mediación de conflictos en instituciones educativas – manual para la formación de mediadores. España: Narcea. Vives, Martha y Lara Luz. (2005). Educación para el conocimiento social y político estado del arte. Bogotá: Pontificia Universidad Javeriana. 95061005090