se mantienen los niveles en consumo duradero

ELEVADOS NIVELES DE CONSUMO EN AUTOMÓVILES Y MUEBLES
1.-ÍNDICE DE CONFIANZA DEL CONSUMIDOR MADRILEÑO:MODERADO
OPTIMISMO ANTE EL NUEVO AÑO
Según viene siendo habitual en las recogidas inmediatamente posteriores al
período navideño, el Índice de Confianza del Consumidor Madrileño (ICCM) de la
primera oleada del 2006 aumenta hasta un valor de 82,3 puntos en la escala 0200. Subida de 6 puntos respecto a la medición de noviembre, muy superior a la
de un año antes, de apenas 4 décimas. (Gráfico 1)
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Pese ser un registro lejos del valor “normal” (100 puntos), es muy similar –
ligeramente superior - al de enero de 2005 (82 puntos), pero con la diferencia de
que la tasa de variación del ICCM entre noviembre y enero (8,4) es muy superior
este año a la del pasado (0,5), situándose con ello en la segunda mejor posición
del ultimo quinquenio. (Gráfico 2). Se puede decir, en síntesis, que el nuevo año
se encara con moderadas expectativas de mejora y un talante algo más
optimista que al cerrar el 2005.
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Esa mejora del estado de ánimo – en buena medida estacional - se explica por
el ascenso respecto a noviembre de todos sus indicadores. Entre ellos destaca el
comportamiento del subíndice retrospectivo (IR), que asciende más de 10 puntos
respecto a noviembre (63 entonces frente a 73,4 ahora) ; mejora también en la
comparación interanual (tres puntos mas que en enero de 2005). Con algo menos
de ímpetu, pero en posiciones destacadas, mejora el subíndice de valoración de
la situación económica general del país (IEP), que sube algo más de 7 puntos
respecto a la oleada de noviembre (58,3 entonces, frente a 65,8 de ahora),
aunque pierde fuelle en la tasa interanual: dos puntos menos que en enero de
2005. En similar posición de ganancias se sitúa el subíndice de valoración de las
economías domésticas (IF) - nivel 95 ahora frente a los 88 de entonces -, y mejora
4 puntos en la comparación interanual (90,6 en enero de 2005). De esta forma, la
percepción sobre la marcha de las economías familiares sigue ejerciendo de
“locomotora” del ICCM , situándose netamente por encima del subíndice de la
situación general del país - del que le separan casi 30 puntos (siete más que
hace un año) - lo que en buena medida explica el mantenido tirón del consumo
doméstico que ahora comprobaremos. (Gráfico 3).
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Por su parte, los subíndices de Expectativas (87,2 puntos) y de Momento de
Compra (80,9) registran ligeras ganancias relativas respecto a noviembre, aunque
pierden posiciones si se comparan con su situación en enero de 2005 (90 y 84,9
puntos, respectivamente).
Todo lo anterior determina que, respecto a la oleada precedente, apenas
cambie la proporción de responsables de las compras familiares madrileñas
con un estado de ánimo “positivo” - algo más del 41% del total - y que
disminuyan las ubicadas en el cuadrante de “indiferentes” – en torno al 26% - a
favor de las “negativas”, que aumentan casi tres puntos. Distribución muy
similar a la del año pasado por estas fechas, pero algo mejor que la de enero
de 2003, que fue la más pesimista del último quinquenio. (Gráfico 4)
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Por su parte, el Índice de Comportamiento Consumidor - síntesis de las
principales decisiones y tendencias del consumo privado de los hogares
madrileños –, aunque sigue manteniendo un perfil expansivo (55,7%), pierde
fuelle - dos puntos - respecto a la oleada precedente, algo frecuente en estas
fechas “postnavideñas”, aunque - y esto es significativo - también lo hace
respecto al perfil de los últimos cuatro años. (Gráfico 5)
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La distribución territorial de los indicadores analizados refleja en esta ocasión
un panorama ciertamente desigual a la hora de encarar el nuevo año. De
hecho, la corona metropolitana sureste – residencia de capas sociales medias
y medias bajas - aparece como el área menos optimista de la Comunidad de
Madrid y, junto con la periferia sureste del municipio capitalidad, como la
menos expansivas en el comportamiento consumidor. Las diferencias
espaciales del ICCM se ratifican según el nivel socioeconómico, con un
recorrido que va de los 58 puntos de este índice en las familias con recursos
más modestos hasta los 87 – muy por encima del promedio regional - en las
más pudientes.
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TONO VITAL DEL MERCADO: ELEVADOS NIVELES DE CONSUMO,
ESPECIALMENTE EN AUTOMÓVILES Y MUEBLES
Confirmando la intensidad del consumo privado en la región y como reflejo del
muy consumista comportamiento de los madrileños en las recientes fiestas
navideñas, el nuevo año registra la tercera mejor posición de toda la serie
histórica – que abarca ya catorce años - en compra efectiva de bienes
duraderos. Así, el 45,7% de los hogares consultados reconoce haber hecho
alguna adquisición de este tipo de bienes en el semestre precedente a la
encuesta. Ello supone sólo algo más de un punto respecto a noviembre pasado
(44,6%), pero implica una mejora de más de siete puntos respecto a la
medición de ahora hace un año (38,5 %) y es el segundo registro más elevado
del último quinquenio para enero. (Gráfico 6)
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El comportamiento alcista respecto a noviembre abarca a todos los capítulos
de gasto excepto vivienda, que recobra sus posiciones moderadas tras la
inédita subida de la oleada anterior que recogió sin duda las inversiones
previas al cierre del año fiscal.
En automóviles se produce una subida de casi tres puntos porcentuales,
pasando a 10,1% de hogares compradores ahora desde los 7,4% de
noviembre, lo que confirma las previsiones realizadas en la última oleada de la
Encuesta de la Cámara y encuadra en el récord de ventas registrado a escala
nacional en 2005, que, por cierto, encabezó la Comunidad de Madrid. La
mejora de ventas en esta oleada supone una ganancia relativa de un 36%
respecto a la precedente y de un 4 % en términos interanuales (9,7% en enero
de 2003). Con ello, este registro se sitúa en la mejor posición alcanzada en
cualquier mes de enero de los últimos diez años y en el segundo lugar de toda
la serie histórica, sólo ligeramente por debajo del techo de ventas alcanzado en
2001 – como sucediera en el conjunto del país – que se concretó en la oleada
de septiembre con un 10,7% de hogares compradores. Máximos estos que,
según algunas previsiones del sector, no parece que puedan repetirse en el
año que comienza. (Gráfico 7)
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En el caso de la vivienda, los datos recogidos en esta oleada (2,8% de
hogares compradores) suponen una inhabitual caída de un 44% respecto a la
también insólitamente elevada medición precedente, pero es muy similar ligeramente superior- a la de enero de 2005 ( 2,5%) .
En cuanto a electrodomésticos (30,8% de hogares compradores ahora, frente
a 27,6 % en noviembre) y muebles (19% frente a 18,7%), las situaciones de
compras efectivas suponen mejoras destacables respecto a la oleada
precedente. Pero también y especialmente frente al comportamiento de enero
de 2005 (23,7% y 13,4% respectivamente), ya que significa un crecimiento
interanual de un 42% en muebles y 11% en electrodomésticos que – como en
automóviles - alcanzan en esta oleada el segundo mejor registro de toda serie
histórica .Y tanto en uno como en otro caso los niveles de ahora son los más
altos de cualquier mes de enero del último quinquenio.
La concentración social y territorial del mercado de bienes de larga duración
sigue siendo tan acusada, al menos, como hace un año, y en esta ocasión con
niveles de compras superiores. Así, el número de hogares compradores supera
el promedio regional en los núcleos en los que el ama de casa es laboralmente
activa (53,6%); de nivel socioeconómico alto y medio-alto (54%) y residente en
la corona metropolitana noroeste (57,8%). Por el contrario, las compras
efectivas son significativamente menos acusadas en los hogares de niveles
sociales medio-bajos y ubicados en los ocho distritos de la periferia sur y este
de la capital.
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Con vistas al futuro próximo, los datos apuntan a que va a seguir un nivel
sostenido
en
las
compras
de
bienes
duraderos,
especialmente
en
electrodomésticos y vivienda. Por zonas, los cuadrantes noroeste, tanto de la
corona metropolitana como del municipio capital, son los que presentan
mejores expectativas al respecto.
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3. TERMÓMETRO DEL NIVEL DE VIDA: UNA PRONUNCIADA “CUESTA DE
ENERO” CON REBAJAS CONCURRIDAS
El consumo cotidiano muestra un panorama habitual en estas fechas postnavideñas, con una tendencia generalizada a moderar los gastos familiares,
especialmente en aquellos capítulos que más se han desbordado en las
pasadas fiestas. Así, el comportamiento del último bimestre (Índice 110,2)
contrasta con la previsión de cara al próximo (Índice 91,7). Con ello, el valor del
Termómetro de Nivel de Vida, que pondera pasado y futuro, alcanza los 100,9
puntos, registro inferior tanto al de noviembre pasado (104,7) como al
correspondiente a enero del último año (104,6).
De hecho, los niveles del
Termómetro y de las previsiones de futuro de esta oleada son de los más bajos de
toda la serie histórica, lo que vendría a confirmar que la cuesta de enero de este
año se presenta especialmente empinada tras los importantes gastos efectuados.
De hecho, en términos de consumo cotidiano los excesos habidos sobre todo
en alimentación, bebidas, restaurantes, ocio y – sobre todo - uso de tarjetas de
crédito, se prevé enmendarlos para el bimestre que viene, frente a unos gastos
en vestimenta que mejoran sus posiciones. (Gráfico 8)
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Si se utilizan como indicador de compras futuras según segmentos sociales, las
previsiones de gasto en materia de vestimenta y calzado arrojan índices
positivos en la mayor parte de los territorios y sectores sociales considerados,
quizás algo mas moderados en los hogares de niveles socioeconómicos mediobajos. Con todo, ello las previsiones auguran una destacable afluencia a las
rebajas invernales, adelantadas este año, que será especialmente acusada
entre las parejas más jóvenes.
Siguiendo la senda habitual de las oleadas de enero, y como consecuencia de
los recientes desembolsos navideños se produce un incremento de la voluntad
de ahorro especialmente destacada este año. Así, las previsiones de futuro
alcanzan un valor medio de casi 88 puntos, muy superior a las expresadas en
noviembre (54 puntos), y que, sintomáticamente, se sitúa por encima de las
registradas en enero del año pasado (83 puntos). (Gráfico 9)
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