Poirot frena la muerte y el olvido - Feria Internacional del Libro de

Guadalajara, Jalisco, a 2 de diciembre de 2012
Poirot frena la muerte y el olvido
El fotógrafo chileno Luis Poirot presentó El escritor ante la cámara: medio
siglo fotografiando escritores en el Pabellón de Chile, en el marco de la 26
Feria Internacional del Libro de Guadalajara
Blanco y negro son los colores que Luis Poirot necesita para hacer arte. El trabajo de este fotógrafo
chileno se caracteriza por los marcados claroscuros y la fuerza de sus imágenes, lo que lo ha llevado a
tener un destacado lugar en el escenario artístico internacional.
Nacido en 1940, Poirot es uno de los más grandes retratistas chilenos. Tuvo la oportunidad de
fotografiar a personajes de la talla de Pablo Neruda, Nicanor Parra y Víctor Jara, entre otros. Fotografía
espacios vacíos, casas o edificios, restos de lo que algún día fue, para él “no son sólo retratos, en
realidad voy de ruina en ruina”, dijo el artista.
Los retratos de Poirot son un freno ante la muerte y el olvido, son un documento que ayuda a
mantener en la memoria lo importante, a dejar una constancia de la presencia física, ahora infinita en su
trabajo. En alguna ocasión hizo la fotografía de un viejo colega pensando en la vejez propia: “Su rostro
era mi rostro, su vejez la mía, yo lo utilizaba para hacer mi autorretrato, esa es mi fotografía”, comentó.
Posee estudios de actuación y su persona sensibiliza a los presentes mide las palabras y los
silencios como en su trabajo la luz. De pie ante el público, Poirot presentó, una a una, las imágenes que
dan fe del trabajo de décadas, él describe cada una de ellas, el contexto, la personalidad del retratado, su
relación con él e incluso el clima. “Yo no creo que el lenguaje visual pueda decirlo todo”, señaló el artista
en alguna ocasión con respecto a un trabajo fotográfico que tituló “Neruda: retratar la ausencia”.
El artista anunció que está por publicar un libro con textos de Enrique Lihn y sus fotos sobre el
Carnaval de Sitges, que es uno de los más antiguos de España y donde retrató a decenas hombres
vestidos de mujer que deambulan en la noche por las calles tras la máscara del maquillaje. Serán
alrededor de 150 imágenes acompañadas del poema “Efímera vulgata”, que según Lihn, no se
entendería sin las fotografías de Poirot.
Finalmente, el fotógrafo chileno adelantó que ha trabajado durante más de diez años en un
proyecto en el que ha tomado por lo menos una fotografía diaria de su esposa, tiene ya más de siete mil
de ellas. “Una sola foto no basta para hacerle un retrato, para tratar de entender a la mujer que yo amo”