Samaritana

Anuncio
Lectio Divina
ENCUENTRO DE JESÚS CON LA SAMARITANA
Juan 4, 1 – 42
 PREPARANDO NUESTRO ENCUENTRO
La LECTIO DIVINA consiste en “sentarse a los pies del Maestro”
para escuchar su Palabra para recibir el amor del Padre y
aprender de Él cuál es nuestra misión en la Iglesia y en la
sociedad. Quien no sabe sentarse a los pies de Jesús, o no tienen
tiempo para escuchar al Señor en su Palabra, pone en peligro su
identidad y su misión.
AMBIENTANDO EL LUGAR – creamos un ambiente acogedor
preparando un altar sencillo que tenga una Biblia abierta en el texto que vamos a orar,
un cirio y un crucifijo. Podemos agregar un signo que sea de ayuda para entender mejor
el texto, en este caso podrían ser un pozo, un jarro para el agua y unos vasos.
 ORACIÓN INICIAL – INVOCANDO EL ESPÍRITU SANTO
NOS PONEMOS EN LA PRESENCIA DEL SEÑOR calmando
nuestro corazón, hacemos silencio interior. Para ello respiramos
profundamente, cerramos nuestros ojos y ponemos en las manos del
Señor lo que hoy nos preocupa y aflige, nuestra realidad de vida
actual. Así nos disponernos a escuchar lo que el Señor quiere
decirnos personalmente a cada una.
Al comenzar la Lectio Divina invocamos al Espíritu Santo, Él inspiró el texto que
estamos leyendo, ahora Él inspirará en tu corazón lo que Jesús quiere decirte:
CANTAMOS:
Ven Espíritu de Santidad, ven Espíritu de luz
ven Espíritu de fuego, ven abrázanos..
ORACIÓN:
Ven Espíritu de Amor, ven Espíritu Consolador, ven Espíritu de
Verdad, Tú que estás presente en todas partes y lo llenas todo, tesoro
de todo bien y fuente de la vida, ven, habita en nosotros por medio de
la Palabra que hoy escuchamos.
 PROCLAMACIÓN DEL TEXTO
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según San Juan
(Juan 4, 5-42)
En aquel tiempo: Jesús llegó a un pueblo de Samaría
llamado Sicar, cerca de la tierra que Jacob dio a su hijo
José. 6Allí se encuentra el pozo de Jacob. Jesús, cansado por
la caminata, se sentó al borde del pozo. Era cerca del
mediodía.
7Fue entonces cuando una mujer samaritana llegó para
sacar agua, y Jesús le dijo: «Dame de beber.» 8 Los
discípulos se habían ido al pueblo para comprar algo de
comer. 9 La samaritana le dijo: «¿Cómo tú, que eres judío,
me pides de beber a mí, que soy una mujer samaritana?»
(Se sabe que los judíos no tratan con los samaritanos).
10Jesús le dijo: «Si conocieras el don de Dios, si supieras
quién es el que te pide de beber, tú misma le pedirías agua
viva y él te la daría.» 11 Ella le dijo: «Señor, no tienes con
qué sacar agua y el pozo es profundo. ¿Dónde vas a
5
conseguir esa agua viva? 12Nuestro antepasado Jacob nos dio este pozo, del cual bebió él, sus hijos
y sus animales; ¿eres acaso más grande que él?» 13Jesús le dijo: «El que beba de esta agua volverá
a tener sed, 14 pero el que beba del agua que yo le daré nunca volverá a tener sed. El agua que yo le
daré se convertirá en él en un chorro que salta hasta la vida eterna.» 15La mujer le dijo: «Señor,
dame de esa agua, y así ya no sufriré la sed ni tendré que volver aquí a sacar agua.»
16Jesús
le dijo: «Vete, llama a tu marido y vuelve acá.» 17La mujer contestó: «No tengo marido.»
18Jesús le dijo: «Has dicho bien que no tienes marido, pues has tenido cinco maridos, y el que
tienes ahora no es tu marido. En eso has dicho la verdad.» 19La mujer contestó: «Señor, veo que
eres profeta. 20Nuestros padres siempre vinieron a este cerro para adorar a Dios y ustedes, los
judíos, ¿no dicen que Jerusalén es el lugar en que se debe adorar a Dios?» 21Jesús le dijo:
«Créeme, mujer: llega la hora en que ustedes adorarán al Padre, pero ya no será "en este cerro" o
"en Jerusalén". 22Ustedes, los samaritanos, adoran lo que no conocen, mientras que nosotros, los
judíos, adoramos lo que conocemos, porque la salvación viene de los judíos. 23Pero llega la hora, y
ya estamos en ella, en que los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad.
Entonces serán verdaderos adoradores del Padre, tal como él mismo los quiere. 24Dios es espíritu,
y los que lo adoran deben adorarlo en espíritu y en verdad.» 25La mujer le dijo: «Yo sé que el
Mesías, (que es el Cristo), está por venir; cuando venga, nos enseñará todo.» 26Jesús le dijo: «Ese
soy yo, el que habla contigo.»
27En
aquel momento llegaron los discípulos y se admiraron al verlo hablar con una mujer. Pero
ninguno le preguntó qué quería ni de qué hablaba con ella. 28La mujer dejó allí el cántaro y corrió
al pueblo a decir a la gente: 29«Vengan a ver a un hombre que me ha dicho todo lo que he hecho.
¿No será éste el Cristo?» 30Salieron, pues, del pueblo y fueron a verlo.
31Mientras
tanto los discípulos le insistían: «Maestro, come.» 32Pero él les contestó: «El alimento
que debo comer, ustedes no lo conocen.» 33Y se preguntaban si alguien le habría traído de comer.
34Jesús les dijo: «Mi alimento es hacer la voluntad de aquel que me ha enviado y llevar a cabo su
obra. 35Ustedes han dicho: "Dentro de cuatro meses será tiempo de cosechar". ¿No es verdad?
Pues bien, yo les digo: Levanten la vista y miren los campos: ya están amarillentos para la siega.
36El segador ya recibe su paga y junta el grano para la vida eterna, y con esto el sembrador
también participa en la alegría del segador. 37Aquí vale el dicho: Uno es el que siembra y otro el
que cosecha. 38Yo los he enviado a ustedes a cosechar donde otros han trabajado y sufrido. Otros
se han fatigado y ustedes han retomado de su trabajo.»
39Muchos
samaritanos de aquel pueblo creyeron en él por las palabras de la mujer, que declaraba:
«El me ha dicho todo lo que he hecho.» 40Cuando llegaron los samaritanos donde él, le pidieron
que se quedara con ellos. Y se quedó allí dos días. 41Muchos más creyeron al oír su palabra, 42y
decían a la mujer: «Ya no creemos por lo que tú has contado. Nosotros mismos lo hemos
escuchado y sabemos que éste es verdaderamente el Salvador del mundo.»
Palabra del Señor
PASO 1
LEER EL TEXTO
¿Qué DICE el texto?
Luego de la proclamación del texto, cada una lo lee nuevamente en silencio para
comprender la PALABRA y para descubrir lo que Dios nos enseña a través de ella. Nos
preguntamos ¿QUÉ DICE EL TEXTO?

Trata de comprender lo que el texto dice.

Ubícate en el tiempo, el lugar y los personajes que aparecen.

Repásalo una o dos veces con la mirada, hazlo lentamente, deja que las palabras
hagan eco en tu corazón.

Marca con un signo de interrogación (¿?) lo que no entiendes.

Quédate con aquella frase o palabra que te llama la atención, la que más te
resuena en el corazón. Subráyala o escríbela.

______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
 COMPRENDIENDO EL TEXTO
1.- CONTEXTO HISTÓRICO BÍBLICO:
El Evangelio de Juan fue escrito hacia fines del primer siglo. En el texto, y entre
líneas, se proyectan los rasgos de una comunidad cristiana abierta, acogedora,
pluralista. La comunidad que se refleja en el texto supone como normal que las mujeres
tengan el papel de líderes en la comunidad y que sean las que anuncian la Buena Nueva,
incluso con mayor eficacia que los varones. Los apóstoles fueron a la aldea (vv. 8,27) y
no sucedió nada. En cambio, fue la mujer, y muchos se convirtieron, por causa de su
palabra que daba testimonio (v. 39). En este sentido, ella es modelo de evangelizadora,
¡que puede enseñar a los discípulos!
Agua, soga, cántaro, pozo eran los elementos que marcaban el mundo de trabajo de
la mujer en el tiempo de Jesús, lugar tradicional de encuentros y conversaciones. Los
discípulos, al volver de la ciudad, se admiran que Jesús esté conversando con una mujer
junto al pozo; pero no dicen nada. Jesús demuestra tener más libertad que ellos. La
mujer le da la oportunidad de superar el tabú que prohibía a un varón conversar en
público con una mujer, sobre todo si era de Samaria, es decir una extranjera pagana.
El significado simbólico del agua tiene su raíz en la vida, en la historia y en la
tradición del pueblo. Jesús las conoce, y se apoya en ellas para conversar con la
samaritana. El emplea la palabra agua en dos sentidos: el material, que sirve para calmar
la sed; y el sentido simbólico de agua como fuente de vida y don del Espíritu. Cuanto
más agua se saca del pozo, menos agua queda. En cambio, cuanto más agua se saca de la
fuente, más agua corre de ella. Es también símbolo de la acción de Dios en las personas.
Jeremías opone el agua viva de la fuente al agua de la cisterna (Jer 2,13).
Jesús inicia el diálogo partiendo de una necesidad concreta, su propia sed, y da lugar
a que la mujer se sienta necesaria y servidora. Pide de beber a una persona prohibida,
sin mostrar preocupación por las normas severas de la pureza legal. A una mujer,
considerada “hereje” por los judíos de su época, Jesús revela por primera vez su
condición de Mesías.
Jesús intenta entrar en diálogo con ella a través de varios temas: agua, familia,… pero
no lo consigue. Cuando la samaritana lo identifica, ella entra en la conversación y toma
la iniciativa. Pasan luego al tema de la religión y de las esperanzas mesiánicas de su
pueblo. Jesús no da respuestas, plantea preguntas. No se impone ni condena, respeta a
la mujer. Mientras él tomaba la iniciativa, la conversación no avanzaba. Avanzó y
alcanzó su objetivo solo a partir del momento en que la mujer se situó y comenzó a
tomar la iniciativa. En ese momento brotó vida nueva.
2.- PARA PROFUNDIZAR EN EL TEXTO

¿Qué hace la mujer en este texto? ¿Es eso frecuente en la Biblia?

¿Sobre qué conversan Jesús y la Samaritana?

¿Qué llama más la atención en la actitud de la Samaritana durante el
diálogo con Jesús?

¿Qué influencia ejerce ella sobre Jesús?

¿Qué es lo que más llamó mi atención en este texto, y que hasta ahora no
había visto de esta manera?
PASO 2
MEDITAR EL TEXTO
¿Qué ME DICE A MI HOY el texto?
La PALABRA de Dios interpela la vida, le da nuevo sentido en Jesucristo, invita a crecer
en fe, esperanza y caridad. Es necesario que ella llegue al corazón iluminando nuestra
realidad de vida actual, por eso nos preguntamos:
¿QUÉ ME DICE A MI HOY EL TEXTO?

Quédate con la palabra o frase que más te ha tocado el corazón, márcala con un
signo de exclamación (¡!).

Para meditar:
1.- A la luz del encuentro de Jesús con la samaritana medito: ¿Cómo es mi relación con
Jesús?
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
2.- A través del diálogo, Jesús le ayuda a la mujer samaritana a descubrir su identidad y
su misión. Cómo mujeres, el Señor nos invita a dar a conocer el “rostro femenino de
Dios”, según nuestra forma de vivir y expresar la afectividad, nuestra capacidad de
establecer relaciones con las personas poniéndonos al servicio del amor y la gracia de la
donación gratuita de sí misma engendrando, dando vida y acompañándola, realizando
así, nuestra vocación a la maternidad afectiva, cultural y espiritual. ¿De qué manera
crees que las mujeres podemos fortalecer la entrega de nuestras cualidades
específicamente femeninas en la familia, el trabajo, la Iglesia y la sociedad?
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
3.- Dios ha confiado especialmente a la mujer la maravillosa tarea de dar vida,
protegerla y acompañarla, haciendo que en ella recaiga la misión de construir futuro.
La mujer samarita corrió a su pueblo para comunicarle que había encontrado al Cristo,
invitándoles a conocer la nueva vida del Espíritu que ella había encontrado en su
diálogo con Jesús. ¿De qué forma crees que las mujeres podemos ayudar a las personas
a encontrarse con Cristo camino, verdad y vida?
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
PASO 3
ORAR EL TEXTO
¿Qué LE DIGO AL SEÑOR motivada por su PALABRA?
La comprensión de las Escrituras exige, no sólo estudio, sino intimidad con Cristo y
oración, continuamos nuestro diálogo con el Señor expresándole lo que brota de nuestro
corazón a partir de la Palabra escuchada respondiendo a la pregunta:
¿QUÉ LE DIGO AL SEÑOR MOTIVADA POR SU PALABRA?

Haz escuchado la Palabra del Señor, ahora deja hablar a tu corazón.

Marca con un asterisco (*) la palabra o frase que te invita a la oración. Repasa el
modo en la samaritana dialoga con Jesús, ella le expresa la verdad de su vida, sus
dudas, sus cuestionamientos, su pecado. Dialoga con el Señor en esta oración
desde tu verdad.
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
PASO 4
CONTEMPLAR/ACTUAR EL TEXTO
¿A qué ME INVITA el Señor en orden a la conversión y a la acción?
La Contemplación, nos permite ver toda la realidad con nuevos ojos, los ojos del Señor,
y junto con Él hacemos un nuevo proyecto de vida que se orienta hacia lo que Él nos ha
enseñado a través de su Palabra. Por esto la Contemplación va unida a la acción. En
comunión con el Señor y en obediencia a Él discernimos las acciones concretas que nos
ayudan a configurar nuestra vida con la suya y, apoyados en su fuerza comenzamos a
realizarlas.
Repasa el texto nuevamente y quédate con la palabra o frase que te invita a
levantarte para seguir a Cristo y hacerte su discípulo.
La samaritana corre a anunciar la Buena Noticia a su pueblo, ¿Qué vas a hacer tú
para vivir más plenamente lo esencial de ser mujer y ponerlo al servicio de los
demás?
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________

______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
 ORAMOS CON NUESTRA MADRE MARÍA
Para terminar nuestro encuentro damos gracias a Dios por nuestra condición de mujer y
le pedimos que imitando a María podamos ser en el mundo de hoy las madres, esposas,
hijas, hermanas, trabajadoras, consagras que reflejando el amor de Dios por nosotras,
podamos dar testimonio de Cristo con nuestra vida.
HACEMOS ORACIÓN CON EL MAGNÍFICAT DE MARÍA
Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi
espíritu en Dios, mi salvador; porque ha mirado la
humillación de su esclava.
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,
porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí:su
nombre es santo, y su misericordia llega a sus fieles de
generación en generación.
El hace proezas con su brazo: dispersa a los soberbios de
corazón, derriba del trono a los poderosos y enaltece a los
humildes, a los hambrientos los colma de bienes y a los
ricos los despide vacíos.
Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia
-como lo había prometido a nuestros padres- en favor de
Abrahán y su descendencia por siempre. Gloria al Padre.
Descargar