Aquel que desee convertirse en maestro del hombre, debe empezar por enseñarse así mismo antes de enseñar a los demás; y debe enseñar primero con el ejemplo antes de que lo haga verbalmente. Pues aquel que se enseña a sí mismo y rectifica sus propios procedimientos, merece más respeto y estimación que el que enseña y corrige a otros, eximiéndose a él mismo. Khalil Gibran EL VALOR DE SER PROFESOR Cuando se recuerdan los profesores que han pasado, vienen a la mente aquellas épocas de niño, cuando no se piensa en la cantidad de cosas a aprender, sino en lo maravilloso que significaba el aprendizaje en general. Luego, en la época del colegio, se recuerdan aquellos que dieron lecciones… lecciones de valores; y se llega a la conclusión que aunque no fueron los docentes más inteligentes, experimentados o científicos, lograron sembrar la curiosidad y sed de conocimiento necesario para seguir indagando en el abismo del conocimiento. Con esto se deduce, que los profesores deben tener conocimiento de lo que hablan, pero mas aún… DEBEN SABER TRANSMITIRLO, sembrando ideas en el alumno para incentivar el estudio, la investigación y motivar el aprendizaje. Ya en la universidad, se experimenta toda clase de profesores; aquellos eruditos de las ciencias y otros que con su experiencia enriquecen los conceptos y estimulan sólo con sus palabras.1 Por ello debe haber un equilibrio entre la pedagogía y el conocimiento. El docente debe tener la capacidad de preparar el espacio, los recursos y las actividades, distribuyendo el tiempo y creando un ambiente afectuoso donde estén los estímulos necesarios para el aprendizaje considerando la evaluación como un proceso de inicio, desarrollo y término. Es importante que el profesor reflexione diariamente sobre la labor que está ejerciendo en el aula y fuera de ella, siendo un crítico constructivo dispuesto al cambio; con metodologías de carácter significativo acordes a la realidad social y cultural de los educandos.2 1 2 Contreras, J. (2009) Conocimiento Vs Pedagogía. Revista Profe. Giselle, C. (2008) La labor docente. Si alguna palabra sirviera para caracterizar a profesores y profesoras, tendría que ver con el valor, la audacia y la temeridad. Fernando Savater, en su libro El valor de educar habla del doble significado de la palabra valor. Distingue por un lado la valía del acto educativo, sus virtudes y los beneficios que aporta a la sociedad. Por el otro, se refiere a la educación como un acto de valor y coraje. Para elegir ser maestros y maestras, se debe tener una fuerte dosis de valor, idealismo, entusiasmo y esperanza, como para asumir una tarea que en algún tiempo fue oficio de esclavos.3 Así, cada 15 de mayo se conmemora el nombramiento de San Juan Bautista de la Salle como el patrón de los educadores por liderar las causas de la educación moderna, hecho consagrado por el Papa Pío XII en el año de 1950. Juan Bautista sostuvo el principio de la gratuidad y de la universalidad de la educación. Ese mismo año en Colombia, la Presidencia de la República declaró a esta fecha como el Día del Maestro.4 Educar es “hacer” personas. Cualquiera que se sienta mejor que aquel que le enseñó, es paradójicamente porque tuvo quien le educara. En una sociedad nadie se hace solo, nadie surge de la nada, todos tomamos de todos y unos aprendemos de otros.3 3 4 Cordero, R. (2009) Día del maestro. Colombia Aprende (2009). Día del maestro.