REPÚBLICA ARGENTINA VERSIÓN TAQUIGRÁFICA CÁMARA DE SENADORES DE LA NACIÓN REUNIÓN DE LA COMISIÓN BICAMERAL PERMANENTE DE TRÁMITE LEGISLATIVO LEY 26.122 Salón Arturo U. Illia — H. Senado de la Nación 23 de abril de 2008 Presidencia de la señora diputada Conti 2 REUNIÓN DE LA COMISIÓN BICAMERAL PERMANENTE DE TRÁMITE LEGISLATIVO LEY 26.122– 23/04/08 — En el Salón Arturo U. Illia del H. Senado de la Nación, a las 9.30 del miércoles 23 de abril de 2008: Sra. Presidenta (Conti). — Buenos días a todos y todas. Gracias por estar acá. Motiva esta reunión el decreto 565/08, por el cual el Poder Ejecutivo promulgó una ley de reciente data, de modificación de la Ley de Defensa del Consumidor, pero observando el artículo 32, que es el que se refiere al transporte aéreo. No me voy a extender en la cuestión. Prefiero que hable aquel legislador que desee debatir sobre el tema. Nosotros estamos proponiendo la firma de un dictamen que aprueba el decreto, porque consideramos que la observación está dentro de los parámetros constitucionales y no altera en nada la unidad normativa del proyecto de ley. Por lo tanto, quienes deseen hacer uso de la palabra pueden hacerlo cuando gusten. Tiene la palabra el señor senador Petcoff Naidenoff. Sr. Petcoff Naidenoff. — Efectivamente, en función de esta observación del artículo 32 de la actual ley 26.361, modificatoria de la 24.240 —de Defensa del Consumidor—, nosotros presentamos un dictamen; y consideramos, en función de las previsiones que prevé la propia Constitución Nacional y la ley que reglamenta el trámite del funcionamiento de la Comisión Bicameral, que en este caso en particular se cumplen los recaudos formales y sustanciales que prevé la legislación de fondo para convalidar este decreto de promulgación parcial. En primer lugar, tenemos que señalar que el Poder Ejecutivo observa el artículo 32 y lo promulga en el contexto del artículo 80 de la Constitución Nacional. Este artículo 80 nos sienta un principio general y una excepción. El principio general establece que los proyectos desechados parcialmente no podrán ser convalidados en la parte restante; pero la excepción es que, sin embargo, se convalida la promulgación parcial en tanto y en cuanto la parte que se promulga, la parte no observada, mantenga la autonomía normativa y el espíritu y la unidad que tuvo en cuenta el legislador, esto es, el Congreso de la Nación, al momento de la sanción de la ley 24.240. Entonces, se cumplen los recaudos formales, porque cuenta con el acuerdo de los ministros, la refrendata de ellos del jefe de Gabinete, este decreto fue elevado por el jefe de Gabinete en tiempo y forma y la Comisión Bicameral ha constatado la publicación en el Boletín Oficial. Desde el punto de vista sustancial, se cumple con estas dos premisas que prevé la Constitución y que nos limita en el análisis de la Comisión Bicameral, esto es, se acepta o se rechaza en tanto y en cuanto se cumplan con los recaudos formales y sustanciales. Ahora bien, en relación a los cuestionamientos a las observaciones puntuales del Poder Ejecutivo, podemos disentir con ellas, porque el Ejecutivo centraliza sus observaciones en dos cuestiones. En primer lugar, los contratos en materia de transporte aéreo son masivos, son contratos de adhesión. En este tipo de contratos de adhesión la Ley de Defensa del Consumidor 24240 tiene un espíritu fuertemente correctivo, y al ser correctivas son complementarias del código de fondo de la legislación vigente en la materia. Esa es la 3 REUNIÓN DE LA COMISIÓN BICAMERAL PERMANENTE DE TRÁMITE LEGISLATIVO LEY 26.122– 23/04/08 primera observación puntual del Poder Ejecutivo. Y, en segundo lugar, el Ejecutivo centraliza sus observaciones en función de que las normas de derecho interno no pueden prevalecer en orden de supremacía a las del tratado internacional. En materia de transporte aéreo comercial, la República Argentina ha suscripto el Convenio de Varsovia, que regula la materia del transporte internacional, no solamente en el país sino prácticamente en el 90 por ciento de los países del mundo. Nosotros disentimos con la primera observación. La segunda puede, a su manera, ser tenida en cuenta. Pero lo real y concreto es que, desde el punto de vista formal y sustancial —el límite que nos otorga la Constitución y la ley reglamentaria—, podemos decir que se cumplen con estos recaudos. Por otra parte, y esto me parece una cuestión central para destacar, de no convalidarse esta promulgación parcial nosotros prácticamente dejaríamos atrás todo el avance que se ha logrado en la construcción de consensos en la Cámara de Diputados y en el Senado de la Nación al convalidar la reforma de la ley integral 24.240, la de Defensa del Consumidor. Creo que un artículo aislado como es el caso del artículo 32 que deja sin efecto el artículo 63, que es el que otorgaba supletoriedad a la ley 24.240 en la regulación de materia de contratos aerocomerciales, no modifica la unidad ni el espíritu ni la sustancia ni los alcances del artículo 80. No obstante ello, con las facultades que nos otorga la propia Constitución, es facultad del Poder Legislativo insistir —conforme lo prevé la propia Constitución— con la parte observada para que en su oportunidad el Congreso le dé tratamiento. Por eso, en función de los recaudos que prevén la Constitución Nacional y la ley reglamentaria, acompañamos un dictamen de minoría aceptando las observaciones, más allá de que disentimos con las observaciones puntuales, haciendo hincapié en que se cumplen con los recaudos formales y sustanciales que prevé la Constitución. Sra. Presidenta. — Tiene la palabra la señora diputada Rodríguez. Sra. Rodríguez. — Yo disiento con el dictamen de mayoría y con algunas de las observaciones que ha formulado el miembro preopinante. En realidad, creo que justamente lo que está en juego es que se han violado los requisitos que son rigurosos en cuanto a la validez de la promulgación parcial de las leyes, que están establecidos no solamente por la ley, pese a la laxitud que le otorga al contexto normativo el dictamen de la mayoría, sino por la propia Constitución. Yo creo que acá hay un sistema muy claro en relación a que en cualquier caso de duda debe estarse a favor de una interpretación restrictiva respecto de las atribuciones legislativas, y que esto lo da un juego sistémico de los artículos 99, inciso 3, 76 y 29 de la Constitución Nacional. Esto marca cómo debe regularse todo el resto del texto en cuanto a atribuciones legislativas, e incluso la propia ley que regula el trámite que debe seguir esta comisión. El decreto no cumple con los requisitos porque, en primer lugar, creo que sí aniquila la unidad y el espíritu de la norma. En ese sentido, el senador preopinante habló sobre la unidad. Gelli dice que la 4 REUNIÓN DE LA COMISIÓN BICAMERAL PERMANENTE DE TRÁMITE LEGISLATIVO LEY 26.122– 23/04/08 unidad tiene que ver con la voluntad que todos los legisladores tuvimos en cuenta al momento de sancionar la norma, y esta unidad contemplaba la protección de los usuarios del transporte aéreo, que justamente se excluye con esta derogación de la promulgación parcial, con lo cual se reduce drásticamente el alcance protectivo de la norma que quisimos sancionar. No se trata de una cuestión incidental, de una cuestión que no tuvimos en cuenta o de una cuestión que fue secundaria o de detalle sino que fue de expreso tratamiento, estudio y consideración en las cámaras. Fue una decisión política expresa de los legisladores que se reformaran las normas de protección del transporte aéreo derogando las disposiciones que dificultaran el ejercicio del derecho. Por eso se cambió la norma anterior. Ambas cámaras decidieron esto reformando el statu quo y extendiendo la protección de la ley más allá de un carácter meramente supletorio, que era la situación anterior. Como muestra de ello puedo mencionar que en el informe del dictamen de las comisiones de Defensa del Consumidor, de Comercio y de Justicia se expresó que “ninguna justificación técnico-jurídica ni de sana política de consumo reconoce la actual subsidiariedad de la ley 24.240, de Defensa del Consumidor, en conflictos del servicio de transporte aéreo impuesta por el artículo 63, cuya derogación se postula. Este sector de actividad, como cualquier otro que genere relaciones de consumo, debe ser alcanzado por la integración normativa del artículo 3°, sin que su naturaleza explique excepción alguna.” Esto está en el Orden del Día 306 de las sesiones ordinarias. Es decir que fue objeto de tratamiento, fue intención expresa del legislador e incluso hubo consenso del oficialismo, que por supuesto fueron la mayoría de los firmantes del dictamen de las comisiones respectivas, que en este caso fueron tres las que se expidieron justificando el cambio de la norma. Por otro lado, se trata de un veto discriminatorio, dado que la ley 26.361 establece un sistema integral de protección de defensa de los consumidores, de acuerdo con el artículo 42 de la Constitución Nacional. Este artículo constitucional se ve vulnerado en perjuicio de los derechos constitucionales de quienes sean usuarios del sistema de transporte aéreo, que justamente son los más débiles en este tipo de relaciones contractuales y que estarían discriminados en relación con otro tipo de usuarios o consumidores, dado que estarían afectando normas de fondo más restrictivas en cuanto al contenido y accesibilidad de derechos. Por otro lado, me parece que acá hay una inadecuada fundamentación del decreto. Por una parte, contrariamente a lo que dice el decreto, no hay obstáculo alguno para que el Congreso modifique o derogue normas del Código Aeronáutico. En realidad, lo que se está haciendo es: a través de una norma específica, como la Ley de Defensa del Consumidor, hacer que esta prevalezca, y esta es una consecuencia del dictado de principios y criterios más modernos y más protectorios como los que contiene la Ley de Defensa del Consumidor. Y esto es algo que el Congreso bien puede hacer. Tanto el Código como la ley son de competencia del Congreso. En este sentido, no hay ningún obstáculo a que nosotros podamos hacer una acción en 5 REUNIÓN DE LA COMISIÓN BICAMERAL PERMANENTE DE TRÁMITE LEGISLATIVO LEY 26.122– 23/04/08 consecuencia. Por otra parte, tampoco resulta acertado afirmar que existe un conflicto de normas de carácter internacional con relación al sistema internacional de transporte aéreo, como se hace en los considerandos del decreto. Por supuesto que hay una obvia necesidad de armonizar el sistema de normas y de interpretación de la ley, pero esto no nos habilita a señalar conflictos a priori, máxime cuando la ley viene a reglamentar derechos de índole constitucional, como lo es el artículo 42 de la Constitución Nacional, cuyo primer párrafo —como ustedes saben— dispone: “Los consumidores y usuarios de bienes y servicios tienen derecho, en la relación de consumo, a la protección de su salud, seguridad e intereses económicos; a una información adecuada y veraz; a la libertad de elección, y a condiciones de trato equitativo y digno.” En cuanto a los fallos mencionados por los considerandos del decreto, por ejemplo, se refieren a la decisión de la Cámara de los Lores en el Caso Sidhu, que es un caso peculiar, ya que se trata del pedido de indemnización de pasajeros de British Airways detenidos por el gobierno de Irak en el transcurso de la invasión a Kuwait. En ese caso el avión había sido detenido. Por un lado, hay una decisión de la Cámara de los Lores. Pero pasajeros franceses de ese mismo vuelo, y por el mismo hecho, tuvieron una resolución diferente a la de la Cámara de los Lores en la justicia francesa y recibieron una indemnización por fuera de las normas del Tratado de Varsovia. Es decir que aquí puede aplicarse una interpretación. En todo caso, como lo es en una situación de armonización de normas, será algo que deberán resolver los jueces. Tampoco la decisión de la Corte Suprema en el caso El Al Israel Airlines es enteramente relevante, porque es un caso atípico. No se trató de un accidente sino que era una pasajera que reclamaba por trastornos psicológicos por una revisión descomedida llevada a cabo por el personal de la aerolínea. El propio fallo admitió que el predominio del Tratado de Varsovia, de acuerdo con la propia letra, admite muchas excepciones. Es decir que aun los mismos fallos que dan sustento el decreto contradicen la lógica de esta promulgación parcial. Por último, no quiero dejar de destacar que llama demasiado la atención el momento político y económico en que se está haciendo esta promulgación parcial. En esto ustedes habrán visto lo que ha sido la aparición en los medios de comunicación y las declaraciones de miembros y dirigentes de Aerolíneas, como Gonzalo Pascual, con respecto a la posibilidad de argentinizar Aerolíneas. Por otra parte, hay una nota de Clarín que dice que “…pero deja entrever cierto paralelo con el reciente ingreso del Grupo Petersen, controlado por la familia Eskenazi…”. Pero pese a desmentidas, puertas adentro de la compañía aseguran que “hay una presión concreta similar a la que vivió Repsol en el caso de YPF para que ingrese un socio local”, y que “dos fuentes muy calificadas del mercado le dijeron a este diario que las conversaciones más serias involucran a otros dos empresarios: a Jorge Brito, dueño del Grupo Macro, a Juan Carlos López Mena, dueño de Buquebus”, y una de esas fuentes también mencionó a Eurnekian, más allá de que por supuesto tiene 6 REUNIÓN DE LA COMISIÓN BICAMERAL PERMANENTE DE TRÁMITE LEGISLATIVO LEY 26.122– 23/04/08 que negarlo por su relación con Aeropuertos 2000. En Página/12 —para que no digan que es Clarín que es el enemigo del gobierno- se dice que el Gobierno acaba de autorizar el aumento de hasta el 18 por ciento en las tarifas de los vuelos de cabotaje y excluyó a las compañías aéreas del alcance de la Ley de Defensa del Consumidor. Es decir que esta misma vinculación que estoy haciendo yo respecto de las ventajas que se podrían pretender dar en cuanto a ciertas prerrogativas económicas a quienes conforman un grupo de amigos del entorno del ex presidente Kirchner está saliendo en todos los diarios en este momento, a la vez que se está promulgando en forma parcial esta norma. Sin lugar a dudas esto da un margen de sospecha, cuando no hay ningún tipo de explicación jurídica que lo avale; ni siquiera la encontramos en los considerandos del propio decreto. Las únicas explicaciones que encontramos son económicas, que van más allá del propio decreto. Por todo esto, voy a votar en contra de este dictamen y adherir a mi dictamen de minoría. Perdonen por la extensión. Sra. Presidenta. — Tiene la palabra el señor diputado Obiglio. Sr. Obiglio. — Desde el PRO coincidimos con el dictamen de mayoría y lo vamos a acompañar. Entendemos los motivos económicos. Es claro que si uno quita los topes indemnizatorios el cálculo económico que tienen las empresas de transporte aerocomercial se altera notablemente, con lo cual inmediatamente se alteran los costos de los pasajes; por lo tanto, es lógico que se mantengan los topes indemnizatorios. De todas formas creemos que, al haber sido sancionada esta ley por unanimidad en las dos cámaras, sería conveniente que en algún otro momento también se debata la posibilidad de introducir dentro de la Ley de Defensa del Consumidor alguna forma de dar protección al transporte aerocomercial, por supuesto que moderando la forma en que se haga y sin quitar los topes que tenemos pactados en los tratados internacionales. Solamente quería decir eso. Sra. Presidenta. — Tiene la palabra el señor diputado Cigogna. Sr. Cigogna. — Voy a empezar por el final de la señora diputada Rodríguez, cuya desbordante imaginación no deja de sorprenderme, porque juzga intenciones de toda naturaleza en este tema. Lo que a mí me hubiera llamado la atención es que el veto se produjera en un momento diferente a los diez días que corresponden. En todo caso, en la unanimidad en la sanción de la ley habría existido alguna intencionalidad vinculada con la temática de la hipotética venta de parte del capital accionario. Es decir, según ella habría habido una suerte de confabulación de distintos sectores del Congreso para sancionar esta ley y darle oportunidad al Ejecutivo, justo dentro de los diez días, para formular el veto. Me parece que el veto está correctamente formulado dentro del plazo constitucional. Realmente yo adhiero a la exposición del señor senador Naidenoff, quien con 7 REUNIÓN DE LA COMISIÓN BICAMERAL PERMANENTE DE TRÁMITE LEGISLATIVO LEY 26.122– 23/04/08 toda precisión explicó que una cosa es la opinión que pueda haber con respecto al fondo de la cuestión y otra cosa es la evaluación en cuanto a si el Ejecutivo actuó dentro de sus facultades, lo cual hizo, porque tiene facultades de colegislador. Podemos coincidir o no cuando el Ejecutivo hace uso de este poder respecto de aquello que veta, podrá parecernos mejor o peor, pero está fuera de discusión que esté dentro de sus facultades hacerlo. El hecho de que el artículo vetado haya sido motivo de prolijo análisis en las comisiones y en el seno de las cámaras tampoco es invalidante. Es decir, la facultad del veto no es sólo para advertir al Congreso que se descuidó en tal artículo y escribió tal cosa —que a veces pasa— porque aun cuando el Congreso haya analizado medularmente y llegado a la convicción de que la redacción de una norma es la adecuada, el Ejecutivo puede discrepar de ese criterio y emitir su veto del modo en que lo hizo en esta oportunidad. De modo tal que yo coincidido con las palabras del senador Naidenoff y, obviamente, acompaño el dictamen de mayoría. Sra. Presidenta. — Tiene la palabra el señor senador Guinle. Sr. Guinle. — En realidad creo que es bueno bajar a tierra después de algunas elucubraciones y ceñirnos a lo que es el accionar de la comisión. Lo del senador Naidenoff ha sido detallado y preciso, y obviamente que comparto su posición. En realidad lo que hace el dictamen de minoría es modificar los fundamentos, pero está totalmente de acuerdo con reconocerle validez al veto parcial; y en realidad lo hace porque, como bien dijo, cumple con los requisitos formales y sustanciales. En realidad, la norma que se promulga goza de autonomía y unidad. No se puede tener otro criterio a partir de observar que, existiendo o no el artículo, la norma puede existir igual. Es decir, ningún tipo de argumento, por más retorcido y complicado que sea, puede interpretar una cosa distinta. Vamos a acompañar el proyecto de la mayoría. Los fundamentos que expresa la minoría es que si hay que insistir se va por la vía del artículo 83 de la Constitución Nacional, lo cual es otra cuestión, que está hoy en consideración en esta Comisión. Reitero, vamos a acompañar el proyecto de la mayoría. Sra. Presidenta. — Tiene la palabra el señor diputado Landau. Sr. Landau. — Adhiero al dictamen de la mayoría. Sin embargo, deseo señalar que la legislación de esta Convención se ha hecho para que la legislación interna no colisione, precisamente, con este tratado que ha suscripto Argentina y que, naturalmente, tiene jerarquía constitucional. En consecuencia, están perfectamente fundadas las razones del veto parcial a la ley. Por lo demás, no advierto que pierda unicidad el conjunto normativo. Sra. Presidenta. — Tiene la palabra la señora senadora Perceval. Sra. Perceval. — Siguiendo la línea del señor senador Guinle, me parece oportuno recordar cuál es el objetivo y la función de esta Comisión Bicameral. En realidad, a partir de la ley 26.122, que la constituye y regula, realmente nuestro objetivo y responsabilidad son determinar si la observación parcial realizada por el Poder 8 REUNIÓN DE LA COMISIÓN BICAMERAL PERMANENTE DE TRÁMITE LEGISLATIVO LEY 26.122– 23/04/08 Ejecutivo altera o no sustancialmente el proyecto de ley aprobado por el Congreso de la Nación. En esto podemos tener disidencias, y las reconozco en función de lo que dijo la señora diputada Rodríguez. Sin embargo, también es cierto que la constitución bicameral no reemplaza al Congreso ni en sus funciones ni en sus debates. Al mismo tiempo, también se puede aprobar esta observación parcial del Poder Ejecutivo y el legislador tiene el total derecho de insistir con el artículo observado por el Poder Ejecutivo, el artículo 3. En este sentido, me remito a la claridad normativa del artículo 15 de la ley 26.122 que expresa lo siguiente: “Las disposiciones de esta ley y el curso de sus procedimientos no obstan al ejercicio por el Congreso de sus potestades ordinarias relativas a la insistencia respecto de normas legales total o parcialmente vetadas.” Mi intervención ha sido solamente para recordar en qué marco normativo nos movemos en la Comisión Bicameral. Sra. Presidenta. — Tiene la palabra la señora diputada Rodríguez. Sra. Rodríguez. — Quiero realizar una sola aclaración, dado que ha sido mencionada mi imaginación. En todo caso, quiero decir que mi imaginación no ha sido una fuente original sino que las expresiones que formulé son citas doctrinarias. Una es de la doctora Gelli referida a las relaciones de poderes en la reforma constitucional y dice lo siguiente: “…aquella unidad que no está facultado a quebrar el presidente, mediante la promulgación parcial, no puede ser otra que la unidad política, esto es, el acuerdo general al que llegaron los legisladores aprobando unas disposiciones porque al mismo tiempo se sancionaban otras, aunque estas y aquellas pudieran dividirse jurídicamente.” La otra cita es de Alfredo Vítolo. Se trata de un artículo del año 2000 que señala lo siguiente: el objeto de la estricta regulación constitucional de la promulgación parcial es que siendo la ley el producto de una expresión exclusiva del Poder Legislativo, le está vedado al presidente conferir obligatoriedad a una norma distinta de la sancionada mediante el artilugio de promulgar sólo los aspectos del proyecto que comparte y desechando aquellos que no merezcan su aprobación. Quiero señalar, reitero, que esto no es producto de mi imaginación, sino que son citas textuales de la doctrina. No me quiero atribuir un mérito de otros. Sr. Cigogna. — La alusión a la imaginación de la señora diputada no era relativa a las citas de María Angélica Gelli y de Vítolo hijo sino a otra parte de su exposición, que no era citas de terceros sino de la propia imaginación de la diputada. Sra. Presidenta. — La comisión recaudará los dictámenes que expresaron cada uno de los bloques al respecto. Nos volveremos a encontrar cuando sea necesario. — Son las 10 y 07.