Escala de Autoeficacia General de Baessler y Schwarzer

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UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR
FACULTAD DE HUMANIDADES
LICENCIATURA EN PSICOLOGÍA INDUSTRIAL/ORGANIZACIONAL
"NIVEL DE AUTOEFICACIA DE LOS EMPLEADOS DE LA CONFEDERACIÓN DEPORTIVA
AUTÓNOMA DE GUATEMALA."
TESIS DE GRADO
MANUEL ALFREDO ROJAS PAZ
CARNET 51770-94
GUATEMALA DE LA ASUNCIÓN, JUNIO DE 2014
CAMPUS CENTRAL
UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR
FACULTAD DE HUMANIDADES
LICENCIATURA EN PSICOLOGÍA INDUSTRIAL/ORGANIZACIONAL
"NIVEL DE AUTOEFICACIA DE LOS EMPLEADOS DE LA CONFEDERACIÓN DEPORTIVA
AUTÓNOMA DE GUATEMALA."
TESIS DE GRADO
POR
MANUEL ALFREDO ROJAS PAZ
PREVIO A CONFERÍRSELE
EL TÍTULO DE PSICÓLOGO INDUSTRIAL / ORGANIZACIONAL EN EL GRADO ACADÉMICO DE
LICENCIADO
GUATEMALA DE LA ASUNCIÓN, JUNIO DE 2014
CAMPUS CENTRAL
AUTORIDADES DE LA UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR
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INVESTIGACIÓN Y
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INTEGRACIÓN UNIVERSITARIA:
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SECRETARIA GENERAL:
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LORENZANA
AUTORIDADES DE LA FACULTAD DE HUMANIDADES
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VICEDECANO:
MGTR. HOSY BENJAMER OROZCO
SECRETARIA:
MGTR. ROMELIA IRENE RUIZ GODOY
DIRECTORA DE CARRERA:
MGTR. GEORGINA MARIA MARISCAL CASTILLO DE JURADO
NOMBRE DEL ASESOR DE TRABAJO DE GRADUACIÓN
LICDA. ANDREA MARROQUIN CABRERA
REVISOR QUE PRACTICÓ LA EVALUACIÓN
MGTR. PATRICIA JUDITH ROSADA CHAJON
AGRADECIMIENTOS
A Dios: Por ser quien guía mi vida, quien me brinda sabiduría, actitud y quien
siempre ha bendecido mi vida, dándome salud, abundancia y una linda familia.
A mis padres: Por apoyarme en todo momento, ser mi ejemplo de vida, por
haberme educado, aconsejado y darme siempre todo lo mejor. A mis queridos
padres les dedico éste logro.
A mi esposa Gaby: Por darme el ánimo para seguir adelante, por darme un
buen ejemplo en la superación académica; por apoyarme en todo momento,
por demostrarme que los logros se pueden alcanzar, por ser la madre de mi
hijo y por darme los mejores momentos de mi vida, te amo.
A la Licenciada Patricia Rosada: Por haberme dado la oportunidad de
cumplir con ésta meta, por su apoyo, por su guía y por su gran atención que
siempre me brindó.
A CDAG: Por haber permitido realizar este estudio de investigación y darme el
apoyo necesario durante el proyecto.
A los compañeros de la universidad: Porque siempre me impulsaron a seguir
adelante, me apoyaron, me asesoraron y me dieron el ánimo para terminar la
carrera.
A mi asesora: Andrea Marroquín, por su apoyo, interés y tiempo que dedicó
para que ésta meta se cumpliera. Muchas gracias.
ÍNDICE
RESUMEN
I. INTRODUCCIÓN ...............................................................................................
1
II. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA .............................................................
2.1 Objetivo General …........................................................................................
2.2 Objetivos específicos ....................................................................................
2.3 Elementos de estudio ……………….. ..........................................................
2.4 Definición de Variables ..………………..........................................................
2.5 Alcances y Límites ........................................................................................
2.6 Aporte ...........................................................................................................
20
20
20
21
21
21
22
III. MÉTODO .......................................................................................................
3.1 Sujetos ..........................................................................................................
3.2 Instrumentos .................................................................................................
3.3 Procedimiento ...............................................................................................
3.4 Tipo de investigación, diseño y metodología estadística………....................
23
23
24
25
25
IV. PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS DE RESULTADOS…………………………..
27
V. DISCUCIÓN DE RESULTADOS………………………………………………...
36
VI. CONCLUSIONES………………………………………………………………...
41
VII. RECOMENDACIONES………………………………………………………….
42
VIII. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS…………………………………………..
43
ANEXOS
RESUMEN
El presente estudio tuvo como objetivo general establecer el nivel de autoeficacia de
los empleados administrativos de la Confederación Deportiva Autónoma de Guatemala
(CDAG). Los objetivos específicos fueron: determinar el nivel de autoeficacia en los
empleados que han practicado algún deporte y los que no, además determinar el nivel
de autoeficacia de los empleados de género femenino y masculino, y finalmente,
determinar el nivel de los empleados según su escolaridad.
Con el propósito de responder a las preguntas de la presente investigación, se aplicó la
escala General de Autoeficacia de Baessler y Schwarzer (1996) a 30 empleados
administrativos de CDAG, de ambos sexos, de 3 niveles de escolaridad, entre ellos:
diversificado, universitario y postgrado; de los cuales 15 practicaban deporte y 15 no.
Los resultados indicaron que el nivel de autoeficacia percibido de los empleados
administrativos de CDAG es alta, como también el nivel percibido por aquellos que
practican deporte y aquellos que no. Asimismo, los datos apuntan a que los hombres
tienen un nivel más alto de autoeficacia que las mujeres y entre mayor es el grado de
escolaridad, más alta es la autoeficacia.
Se recomienda seguir incentivando a los empleados administrativos con programas
motivacionales, dinámicas de grupo para formar equipos de trabajo de alto rendimiento,
y promover el desarrollo académico como también las promociones internas,
aprovechando así, el alto nivel de autoeficacia que han demostrado sus empleados.
I.
INTRODUCCIÓN
La confederación Deportiva Autónoma de Guatemala (CDAG), es el organismo rector y
jerárquicamente superior del deporte federado a nivel nacional, es un organismo
autónomo que tiene como misión, desarrollar un sistema del deporte calificado,
tecnificado, íntegro e incluyente que forme deportistas competitivos a nivel mundial.
Hoy en día, hay muchos factores que pueden influir en el desempeño de un trabajador,
ya que existen muchos distractores que afectan la capacidad de centrar su atención en
sus objetivos, de lograr controlar su estado emocional, y específicamente la capacidad
de realizar determinadas tareas, objetivos y logros.
Ésta última característica que determina la capacidad propia de realizar ciertos logros,
es conocida como autoeficacia. Bandura (1986) define la autoeficacia como los juicios
de cada individuo sobre sus capacidades, con base en las cuales organizará, y
ejecutará sus actos de modo que le permita alcanzar el rendimiento deseado.
Es importante determinar el papel que juega la autoeficacia en el desempeño de los
empleados de CDAG, ya que un alto nivel de autoeficacia, puede llevar al equipo de
trabajo, a enfrentar mayores retos y obtener mejores resultados en sus funciones.
Este estudio pretende establecer el nivel de autoeficacia que presentan aquellos
empleados que han practicado algún deporte federado a diferencia de los empleados
que no lo han hecho.
Por tal razón, a continuación se destacan algunas investigaciones que fundamentan
estudios de la autoeficacia, los cuales se han realizado en Guatemala.
En el contexto nacional, Carbonell (2011) buscó establecer el nivel de autoeficacia de
los docentes de planta de la Universidad Rafael Landívar asociados a cuatro áreas
1
didácticas, las cuales se describen cómo la planificación de sus cursos, la forma en que
involucran a sus alumnos en sus clases, la interacción que tienen con ellos y su forma
de evaluar. Además armoniza las cuatro áreas anteriores con variables como edad,
sexo, experiencia docente y las fuentes de autoeficacia. Utilizó un instrumento
adaptado por parte de Leonor Prieto, el cual mide las creencias de autoeficacia docente
universitaria y lo aplicó a 139 docentes, 60 de género femenino y 79 de género
masculino. Carbonell comprueba que poseen un nivel alto de percepción de su eficacia
en su labor docente, lo cual conlleva al éxito académico en sus estudiantes; tienen una
autoeficacia mayor en cuanto a la planificación de sus cursos, pero no tienen una
autoeficacia tan alta en la manera como involucran a sus alumnos en clase. Tampoco
se encontró relación de la autoeficacia en las variables de sexo y edad, pero si existe
una relación significativa de la autoeficacia con la variable de experiencia docente.
Carbonell determina que fueron los años de laborar en la institución, el factor que
influyó más en su percepción de autoeficacia y sus principales fuentes de autoeficacia
fueron la experiencia docente, los modelos y sugerencias de otros profesores y
compañeros, además del entusiasmo que sienten al ayudar a aprender a los alumnos.
Finalmente recomendó que la autoeficacia docente sea tomada en cuenta en cuanto a
evaluaciones y programas de formación del profesorado; además de trabajar y reforzar
la autoeficacia colectiva para preparar al profesorado con los cambios tecnológicos y
educativos.
Por su parte, Chavarría (2010), realizó un estudio de tipo descriptivo en el que definiría
la correlación entre autoeficacia y nivel de ventas de un grupo de distribuidores de una
compañía de mercadeo en red. Utilizó a un grupo de 33 distribuidores escogidos
aleatoriamente donde no se hicieron distinciones entre edad, sexo, ni tiempo de
pertenecer a la compañía, aplicó la prueba general de Autoeficacia de Baessler,
Scharzer y Jerusalem (1995); concluyó que existe una baja correlación negativa entre
auto eficacia y nivel de ventas de los distribuidores de la compañía en estudio, además,
se encontró una alta autoeficacia en todos los distribuidores participantes y el nivel de
ventas varía debido a que cada uno de ellos tiene su propio sistema para hacer el
negocio de mercadeo en red y debido a que las tablas de puntuación tienen mucha
2
diferencia entre cada uno de sus niveles. Chavarría recomendó que la compañía
establezca un perfil del distribuidor para facilitar la capacitación y proyecciones de
ventas.
Por su lado Tobar (2010), presentó una investigación en la que busca establecer el
nivel de autoeficacia que tienen los estudiantes de las carreras de Licenciatura en
Psicología clínica, Industrial/Organizacional y Educativa del quinto año de una
universidad privada. Para realizar su investigación, utilizó un grupo de 93 alumnos de
las diferentes carreras de psicología de jornada matutina como vespertina; de los
cuales 39 eran de Psicología Clínica, 47 de Psicología Industrial y 7 de Educativa.
Utilizó un instrumento compuesto de 2 partes, la primera una escala para medir la
autoeficacia académica, adaptada por Juan Carlos Torre (2006), y la segunda una
escala tipo Likert con seis preguntas con cuatro y cinco niveles de respuestas. En su
investigación, Tobar pudo concluir que aunque no existe diferencia estadística
significativa, existe una mínima diferencia en los alumnos de la carrera de Psicología
Industrial, mostrando un leve porcentaje mayor que los de las otras carreras de
psicología. Recomendó a los docentes llevar a cabo actividades prácticas que
promuevan cambios sociales y personales para fortalecer la autoeficacia de los
estudiantes.
Caxaj (2009) en su investigación descriptiva pretendió demostrar la existencia de la
correlación entre la auto-eficacia académica y el rendimiento académico de los
estudiantes de primer año de las carreras de Ciencias de la Comunicación y Psicología
de la Universidad Rafael Landívar del 2007. Aplicó la Escala de Autoeficacia
Académica la cual es una adaptación libre de Juan Carlos Torre Puente (2006) de su
tesis doctoral en la Universidad Pontificia Comillas, España, y adaptada al contexto de
la Universidad Rafael Landívar por Cuestas (2007). Utilizó un grupo de 88 estudiantes
que fueron tomados de manera aleatoria, de una población total de 261 estudiantes del
primer año de ambas carreras, tomando una sección de la jornada matutina y
vespertina de cada una de ellas. Para determinar el rendimiento académico de cada
uno de los estudiantes, se obtuvo el reporte de notas finales de los cursos de
3
Estrategias de Comunicación Lingüística (ECL) y Estrategias de Razonamiento (ER);
además realizó el análisis de correlaciones estadísticas de las dos variables, por medio
del coeficiente de correlación de Pearson y se realizó la diferencia de medias a través
de la T de Student. Concluyó que sí existe correlación positiva entre la autoeficacia
académica y el rendimiento académico de las dos carreras analizadas, pero de
diferente nivel en cada jornada; por lo cual recomendó a la Universidad Rafael Landivar
incluir en sus evaluaciones de admisión, la prueba de autoeficacia para conocer el nivel
de los aspirantes.
Archila (2009) realizó un estudio que se enfocó en establecer la relación que existe
entre el nivel de ventas y la autoeficacia de las Gerentes de Sector de una empresa de
venta de catálogo. Dicho estudio de tipo descriptivo, se aplicó a 35 trabajadoras que
conforman la totalidad de vendedoras de la empresa, la escala de autoeficacia general
adaptada a la población española, obtenida en el estudio realizado por Pilar Sanjuán,
Ana Pérez y José Bermúdez en el año 2009. Para llegar a sus conclusiones, realizó un
análisis cualitativo y cuantitativo de los resultados que se obtuvieron, y determina que
no existe relación entre el nivel de ventas y la autoeficacia de las Gerentes de Sector
de la empresa de venta de catálogo. Los resultados de las escalas aplicadas,
muestran que el cien por ciento de los sujetos de estudio posee una autoeficacia mayor
a 3 puntos, lo cual muestra una alta autoeficacia y un grupo heterogéneo. Archila
recomendó monitorear periódicamente el nivel de autoeficacia del grupo de estudio
para mantener un alto nivel, además de disminuir las diferencias a nivel laboral
existentes para que los sujetos de investigación, forme un grupo homogéneo.
Además de los estudios nacionales, se citan investigaciones a nivel internacional que
nuevamente enfatizan la importancia de medir los niveles de la autoeficacia tanto en el
ambiente educativo como el deportivo.
En España, Reigal, Videra, Tamayo y Juárez (2012) buscaron examinar la importancia
que tienen el auto concepto físico y la autoeficacia general en la predicción de la
conducta física en una muestra de adolescentes. Los participantes del estudio lo
4
conformaron 1,588 adolescentes de la ciudad de Málaga (España), siendo el 47%
chicos y el 53% chicas, con edades entre los 14 y 16 años; de la muestra total, el 60%
practica actividad física regular. Utilizaron varios instrumentos, entre ellos un
cuestionario sociodemográfico, el cuestionario de autoconcepto física (CAF) (Gonñi,
Ruiz de Azúa, & Rodríguez, 2006) y la escala de autoeficacia General (AEG) de
Schwarzer y Jerusalem (1995). Se empleó el método correlacional de tipo transversal,
utilizando la encuesta como herramienta para la toma de datos. Se pudo observar en
los análisis de regresión logística binaria efectuados, que ambos constructos predicen
de forma significativa la conducta de práctica física para el total de la muestra, teniendo
en cuenta que el modelo incluye las dimensiones de condición física, habilidad física y
fuerza, así como la autoeficacia general. Sin embargo, cuando se analiza en función
del sexo, la percepción de eficacia general quedó también excluida en el caso de las
chicas.
En Lima, Perú, Drinot (2012) expuso la relación entre la autoeficacia del docente y la
calidad del manejo de aula en su práctica pedagógica, tomando como referencia el
auto reporte del maestro y el reporte de los estudiantes. Como segundo tema de
investigación, hizo una comparación entre una escuela mixta privada y una escuela
mixta pública, ambas del distrito de Chorrillos. Para obtener los resultados de la
investigación, se aplicaron dos escalas a 38 docentes y una a 401 alumnos de ambas
instituciones. Para evaluar la autoeficacia docente en los maestros, se utilizó la Escala
de Eficacia Percibida de los Maestros (Tschannen-Moran y Woolfolk, 2001), y para
evaluar la calidad del manejo de aula en la práctica pedagógica, se utilizó la Escala del
Modelo Instruccional de Situación Educativa-MISE de Rivas, Descals y Gómez-Artiga
(2003). Esta última contaba con dos versiones, una para docentes y otra para los
estudiantes. Concluyó Drinot, que los docentes que poseen un mayor sentido de
autoeficacia reportaron también un mejor manejo de aula en su práctica pedagógica.
Igualmente, los docentes, tanto del colegio público como del privado, evaluaron mejor
la calidad de su manejo de aula de lo que lo hicieron sus propios estudiantes. En
cuanto a la comparación entre ambas instituciones, las diferencias fueron que los
docentes de la institución privada se autoevaluaron como más eficaces que los
5
docentes de la institución pública. Para finalizar, descubrió que factores como, el
género, los años de docencia en general y haber obtenido el título profesional en
educación, no tuvieron relación significativa con la forma en que los docentes se
autoevalúan a sí mismos y con el reporte de la calidad del manejo de aula en su
práctica pedagógica.
Reigal, Videra, Parra y Juarez, (2012) en Málaga, España, examinaron las relaciones
entre la práctica de actividad físico deportiva en la adolescencia y diversas
autoevaluaciones como el autoconcepto físico, percepción de salud y satisfacción vital.
Para
dicha
investigación,
participaron
1504
adolescentes
seleccionados
aleatoriamente, de la ciudad de Málaga, de edades comprendidas entre los 14 y 16
años, 49.60% hombres y 50.40% mujeres, de escolaridad de 3ero y 4to de educación
secundaria y 1ero de Bachillerato.
Los instrumentos utilizados para medir los
constructos indicados son el cuestionario de Autoconcepto Físico (CAF, Goñi, Ruíz de
Azúa y Rodriguez, 2006)), el Cuestionario de Salud General (GHQ, (Goldberg, 1972,
1978; Muñoz, Vázquez-Barquero, Rodríguez, Pastrana & Varo; 1979), y la Escala de
Satisfacción con la Vida (SWLS, Diener, Emmons, Larsen y Griffin, 1985). Sigue un
diseño transversal de tipo correlacional en el que se usa la encuesta para obtener los
datos. La investigación manifestó diferencias en las puntuaciones adquiridas por los
adolescentes encuestados en base a la práctica física deportiva y a favor de los que
son activos. Los análisis estadísticos mostraron que la práctica física es una variable
que genera diferencias significativas a favor de los que practican deporte y la adopción
de estilos de vida activos. Sin embargo, la frecuencia de práctica muestra únicamente
diferencias significativas entre grupos en el autoconcepto físico. Además, los años de
experiencia en conductas de práctica física influyen en los resultados encontrados,
obteniéndose valoraciones más positivas en aquellos que llevan más tiempo realizando
este tipo de tareas. Los resultados demuestran que se deben crear hábitos de vida
activos para aumentar el bienestar psicológico en las personas.
6
De nuevo en España, Reigal y Videra (2011) realizaron un estudio en el cual pretenden
poner de manifiesto las relaciones existentes entre la frecuencia de práctica física y
autoeficacia en la tercera edad. En el estudio, participaron 289 individuos de la ciudad
de Málaga, España, los cuales eran practicantes de actividad física en diversos
polideportivos municipales u otras en la vía pública, específicamente de tipo aeróbico
(bailar, correr, andar), que lo hacían con una intensidad moderada y con una duración
aproximada de una hora cada sesión. El 27.7% eran hombres y el 72.3% mujeres, con
edades comprendidas entre los 65 y 85 años. Para obtener los datos, se entrevistó a
cada uno de los participantes voluntarios, que respondieron a cuestiones de tipo
sociodemográfico y a la Escala de Autoeficacia General (AEG; Schwarzer y Jerusalem,
1995). El estudio manifestó que los valores más altos en la percepción de eficacia
general los han obtenido aquellos que participaban en tres o cuatro sesiones
semanales, teniendo en cuenta que la llevaban a cabo con una intensidad moderada y
siendo de tipo predominantemente aeróbico.
Cantón y Checa (2011) en Valencia, España, desarrollaron una investigación para
evaluar la relación entre las atribuciones que se realizan de una competición, la
percepción de autoeficacia en la misma, y las emociones que se experimentan durante
aquella competición. Para llevar a cabo dicha investigación, utilizaron tres medidas; la
primera: Inventario de Evaluación de Emociones en la Competición Deportiva
(INECOD), cuyo primer acercamiento piloto (Cantón, Checa y Sancerni, 2011; Checa,
2011); segunda: Las atribuciones realizadas por el deportista sobre el resultado de una
competición en particular, son evaluadas a través de un ítem cerrado con 4 alternativas
de respuesta en función de dos de los ejes básicos del modelo atribucional de Weiner
(1986): locus de control y estabilidad.
Por último, las expectativas de autoeficacia
(Bandura, 1977, 1986). La muestra está formada por 60 deportistas, con una media de
edad de 21,87 años, en cuanto al género, se trata de una muestra mayoritariamente
masculina que representa un 83.3%, mientras que las mujeres componen el 16.7%
restante. En cuanto a la disciplina deportiva, el 53.3% de la muestra son deportistas
individuales (Kárate) y el 46.7% practican deporte de equipo, en este caso, Fútbol. La
experiencia deportiva se ve representada con una media de 13.13 años de práctica,
7
mientras que los años de competición presentan una media de 8.63. Se realizó una
entrevista grupal (máximo cinco deportistas) de aproximadamente 20 minutos en la que
los participantes debían visualizar las imágenes que recordaran sobre la competición
más positiva y más negativa que recordaran. Tras la visualización, los deportistas
debían asignar una intensidad a cada uno de los ítems y contestar a las preguntas
cerradas sobre atribuciones y autoeficacia. Se concluyó que, los resultados en la
competición percibida como exitosa demuestran diferencias significativas en la
experimentación de emociones positivas, en función de las atribuciones realizadas. En
cuanto a la autoeficacia, se encontró correlación positiva entre emociones agradables y
autoeficacia y una correlación negativa entre experimentación de emociones
desagradables de arousal alto (ira y miedo) y autoeficacia percibida.
En Tenerife, España, Hernandez, Ramos, Negrín, Ruíz y Hernández (2011), realizaron
una investigación con el objetivo de poner a prueba una concepción unidimensional de
la empleabilidad percibida y además, analizar la relación que mantiene con la
autoeficacia para la búsqueda de empleo. Para obtener los resultados, se utilizó una
muestra de 462 estudiantes y titulados universitarios, entre los 19 y 30 años de edad,
25.7%
hombres y 74.3% mujeres. Se elaboró un cuestionario compuesto por dos
escalas. Una Escala de Percepción de empleabilidad en universitarios y otra Escala de
Autoeficacia para la búsqueda de Empleo. La primera escala es unidimensional y
evalúa la empleabilidad percibida de personas formadas pero sin experiencia laboral.
La segunda es una escala específica que evalúa la autoeficacia relativa a conductas de
búsqueda de empleo, con experiencia laboral como apoyo de servicios de orientación
de las universidades. Los cuestionarios se aplicaron en aulas de diferentes facultades
y escuelas de una universidad española, así como en el servicio de orientación para el
empleo de la Fundación Empresa Universidad del mismo centro. Mediante la
realización de análisis factoriales, exploratorio y confirmatorio, los resultados muestran
la unidimensionalidad de ambas escalas y una correlación de Pearson entre ellas de
0.56. Lo cual significa que la empleabilidad y la autoeficacia para la búsqueda de
empleo, correlacionan significativa y moderadamente, pero se pueden diferenciar.
8
Becerra y Díaz (2008) en su investigación realizada en Bogotá Colombia, trataron de
determinar la relación entre el nivel de actividad física y la percepción de los beneficios,
las barreras y la autoeficacia en un grupo de empleados oficiales. Para evaluar la
actividad física, utilizaron el Cuestionario Internacional de Actividad Física (IPAQ) y el
cuestionario de Nola Pender (EBBS) para evaluar la escala de barreras, beneficios y
autoeficacia. Para llevar a cabo la investigación, se obtuvo la autorización de la oficina
de Recursos Humanos y del comité de Ética de la Gobernación de Antioquía. Ambos
cuestionarios se aplicaron bajo consentimiento a 243 empleados voluntarios,
seleccionados aleatoriamente, entre los 18 y 65 años de edad, vinculados laboralmente
con la Gobernación de Antioquía y con factores de riesgo cardiovasculares; de los
cuales el 54.7% mujeres y el 45.3% hombres. Los resultados demostraron que: en
referencia a la actividad física, se encontró que el 65.8% de los empleados eran
mediamente activos, 70.9% hombres y 61.7% mujeres, y la correlación negativa entre
METS y autoeficacia y beneficio de la actividad física no se evidencia correlación entre
actividad física y barrera. Se concluyó que los hombres son físicamente más activos
que las mujeres y que los niveles de actividad física se elevan con la edad y se reducen
cuando aumenta el nivel educativo. Además, la percepción de los beneficios de la
actividad física en las personas sedentarias fue mayor que aquellas físicamente
activas.
Se puede inferir que a lo largo de la vida, se van formando las propias creencias según
los ambientes en donde las personas se han desarrollado; también existen diversos
que factores pueden influir en las decisiones de las personas y llevarlas a tener un
sentido de autoeficacia que puede definir su capacidad de hacer las cosas con éxito.
Éste es el resultado de varios años de investigación en donde hoy se puede utilizar los
niveles de autoeficacia para definir la capacidad de cada individuo.
Los estudios y resultados presentados en las investigaciones anteriores, demuestran
que la autoeficacia puede ser estudiada en diferentes ámbitos, tales como laboral,
deportivo y educativo. Para ello, a continuación se define el concepto de la
autoeficacia, sus factores que la afectan, sus principales fuentes y su relación con la
salud y el deporte.
9
Autoeficacia
Durante el proceso de la vida, todas las personas afrontan diariamente retos,
dificultades y decisiones que deben tomar. En todo momento, el hombre no deja de
aprender o experimentar diferentes situaciones; situaciones en las que debe tomar
decisiones en base a su capacidad, creencias y experiencias pasadas. Como dice el
dicho: cuando termina la vida de la escuela, comienza la escuela de la vida. Durante
este transcurso de vida, las personas deben de formar un carácter que lo llevará a
tomar las decisiones que le parezcan adecuadas para lograr sus metas y objetivos
individuales.
Para profundizar sobre estos tipos de conductas, Canto (1998), menciona que la
autoeficacia se ha estudiado por treinta y cinco años y se ha logrado adaptar en varios
conceptos; ya que se refiere a la capacidad, la confianza, la certeza o bien, utilizando
un término de devoción, sería la fe con la que las personas actúan para lograr un
resultado específico a través de sus decisiones.
Los seres humanos se enfrentan
diariamente a muchos desafíos y son capaces de superar esos retos adaptando sus
conductas y emociones.
Concepto de Autoeficacia
Conocido como el creador de la teoría de la autoeficacia, Bandura (1997) la define
como creer en la capacidad propia para organizar y establecer un juicio para controlar
un resultado futuro. De acuerdo a la definición de Bandura, se puede mencionar que
cada individuo puede reaccionar de forma diferente a las situaciones que enfrenta y
definir su propio ambiente.
Chavarría (2010) citando a Bandura (1995), define la autoeficacia como la confianza
que tiene una persona de su capacidad para realizar las actividades que le
corresponda hacer. Además agregue que los juicios que la persona hace acerca de su
autoeficacia dependen de las tareas y las situaciones en que se involucran, y las
personas las utilizan para referirse a algún tipo de meta o tarea a alcanzar.
10
Por su lado Torre (2007) describe el concepto de la autoeficacia como “un juicio que el
sujeto emite sobre su capacidad para alcanzar un determinado nivel de ejecución en
una tarea” (p. 42). Además agrega que la autoeficacia más bien es una creencia o
creencias que cada individuo posee para realizar o no algo y lograr un nivel adecuado e
insuperable de ejecución. Esta autoevaluación de la capacidad personal, se puede
realizar con diferentes grados de profundidad, conciencia y precisión. Además de
evaluar la propia capacidad de la autoeficacia a través de los juicios, creencias,
opiniones y sentimientos.
Para Prieto (2007) los fundamentos teóricos de la autoeficacia inicia con 2 enfoques
teóricos: la teoría del aprendizaje social de Rotter y la teoría social cognitiva de Albert
Bandura, en donde se refiere a la autoeficacia como el papel que ejerce la percepción
de la capacidad personal en el comportamiento humano en general. También agrega
que durante la trayectoria científica de Bandura y su experiencia con pacientes fóbicos,
concibe la autoeficacia como la modificación de la percepción personal sobre la propia
capacidad.
Así mismo Canto (1998) agrega que Bandura (1986) estableció un punto de vista en
que los pensamientos que tienen las personas de sí mismo, son importantes para la
aptitud personal, ya que cada persona puede construir su propio ambiente y sistema
social. Consecuentemente, el ser humano no solo reacciona a su ambiente, sino que
también es capaz de realizar modificaciones y actuar proactivamente. De acuerdo con
esta teoría, las habilidades, conocimientos y experiencias anteriores que las personas
guardan, no siempre pronostican los logros futuros, ya que según sus creencias que
mantienen sobre sus capacidades, influyen firmemente en sus acciones.
Bandura (1986) consideró que la autoeficacia podría afectar la elección de ciertas
actividades, el esfuerzo para realizarlas y la persistencia para ejecutarlas. Así que
experimentó con estudiantes para conocer su capacidad de aprendizaje y determinó
que un estudiante que tienen duda sobre su capacidad de aprendizaje, posee una baja
autoeficacia y evitará participar en ciertas actividades asignadas. Mientras que un
estudiante con alta autoeficacia, mostrará mayor compromiso sobre actividades
asignadas y se involucrará con mayor perseverancia aun cuando encuentre problemas.
11
En cuanto el concepto anterior, Bandura pudo determinar que las creencias de
autoeficacia podrían afectar la conducta humana en varias formas:
a) Influyendo en las elecciones que realizan los estudiantes y las conductas que
ejecutan para seguirlas.
b) Motiva al estudiante a realizar tareas en las cuales se siente competente y
confiado, mientras que lo anima a evitar las tareas en las que no se siente
capaz.
c) Determina cuánto esfuerzo necesitará el estudiante para realizar la tarea
d) Predice cuánto tiempo permanecerá en su realización, y cómo se recuperará al
enfrentarse a situaciones con dificultad.
Factores que afectan la autoeficacia
En el artículo presentado por Canto (1998), menciona los factores que para Schunk
(1995), afectan la autoeficacia de los estudiantes:
El establecimiento de metas: Este es un proceso cognitivo que afecta los logros
alcanzados (Bandura 1988; Cocke y Latham, 1990; Schunk, 1989) citado por Canto
(1998). Aquellos estudiantes que se proponen metas, pueden lograr un sentido de
autoeficacia y un compromiso para lograrlas. La autoeficacia se produce cuando el
estudiante está logrando sus objetivos y se considera una persona capaz (Elliot y
Dweck, 1988). Tanto el establecimiento de metas por parte del maestro como del
alumno, demuestra un aumento positivo en la autoeficacia.
El procesamiento de la información: Este examina cómo las demandas de
procesamiento cognitivo del material de estudio influye sobre la autoeficacia. Esto
significa que aquellos estudiantes que perciben dificultad para comprender algún
material de estudio, experimentan niveles más bajos; a diferencia a aquellos que sí se
sienten capaces de manejar los procesos cognitivos que necesitan para el aprendizaje
de material de estudio. Por su lado las investigaciones realizados por Pintrich y De
12
Groot (1990), Zimmerman y Martinez-Pons (1990), Schunk y Gunn (1985), Graham y
Harris (1989a, b), citados por Canto (1998), mostraron que la autoeficacia tienen una
relación positiva al emplear estrategias de aprendizaje. Enseñar a los alumnos éstas
estrategias, aumenta y se aprovecha aun más la autoeficacia.
Los modelos: Estos sí ejercen una influencia positiva sobre la autoeficacia y su
rendimiento (Schunk, 1995). Por su lado Zimmerman y Ringle (1981) citados por Canto
(1998), concluyeron que los niños que observaron a modelos con baja persistencia,
pero con alta confianza, tuvieron niveles más altos de autoeficacia que los niños que
observaron a otros niños más pesimistas y que persistían más en la tarea. Además
agregan que aquellos niños que observan a modelos iguales, su autoeficacia aumenta
aun más que cuando observan a los maestros como modelos.
Retroalimentación: Permite conocer las causas que pueden traer el éxito o el fracaso
en la realización de las tareas. Cuando se realiza la retroalimentación, la motivación se
mantienen y la autoeficacia aumenta, una vez el estudiante asocia su éxito con el
esfuerzo realizado (Schunk, 1995).
Premios: Éstos son los reconocimientos o factores motivacionales que alentan a las
personas a reconocer el esfuerzo que han elaborado para obtener el éxito en
determinadas tareas. Estos factores también afectan el nivel de autoeficacia (Schunk,
1995).
Fuentes de la autoeficacia
Bandura (1997) sostiene que las creencias que las personas mantienen acerca de su
autoeficacia se basan en la interacción de cuatro fuentes principales:
Experiencias de dominio: Esta es la que ejerce la mayor influencia sobre la conducta
de la persona, según el éxito y el fracaso que ha experimentado. Estas fuentes se
refieren a las experiencias anteriores en que las personas miden los resultados de sus
13
acciones, y sus interpretaciones de éstos resultados van creando la autoeficacia según
sus efectos. Así que los resultados con éxito logran aumentar su autoeficacia y por el
contrario, los malos resultados, o acciones de fracaso, reducen su autoeficacia.
Desarrollar un sentido de eficacia a través de las experiencias de domino no es una
opción de adoptar hábitos preparados. Más bien adopta instrumentos cognitivos, de
conducta y de auto-regulación que crea y ejecuta las acciones apropiadas para afrontar
las circunstancias cambiantes de la vida. Si una persona sólo experimenta éxitos
fáciles, sólo esperará resultados inmediatos y se desmotivará rápidamente con los
fracasos. Así que las circunstancias difíciles o acciones de fracaso, sirven para
aprender que el éxito requiere un esfuerzo sostenido.
Experiencias vicarias: Se presentan en modelos sociales, al observar la conducta de
otras personas similares; ver lo que son capaces de hacer a través de sus acciones y
toda ésta información almacenada, ayudará a aumentar la creencia del observador, de
la capacidad que tiene para formar una propia expectativa sobre su conducta y sus
consecuencias. Por lo contrario, si se observa el fracaso a pesar de muchos esfuerzos,
el observador reduce su nivel de motivación. Además, si el observador o persona
considera a otro modelo muy diferente a él, sus creencias de eficacia personal no se
verán muy influidas por la conducta y resultados obtenidos.
Los modelos hábiles,
transmiten conocimiento, destrezas y estrategias efectivas que el observador aprende
para manejar las diferentes situaciones. Las actitudes del modelo, son más influyentes
que las destrezas, y entre más aprenden los observadores, más se fomenta su
autoeficacia.
Persuasión social: Se refiere a que las personas crean, fortalecen y desarrollan su
autoeficacia como resultado de lo que dicen otras personas que influyen en ellas.
Puede darse por una retroalimentación positiva, comentarios motivacionales que
pueden aumentar la autoeficacia de la persona. Aunque el aumento puede ser sólo
temporal si los esfuerzos que se generan para cierta tarea no llegan a tener el éxito
esperado. Además, si la persona persuadida no cuenta o no se considera dotada de las
capacidades necesarias para obtener el éxito, fácilmente evita o abandona cualquier
esfuerzo al momento que se le presenta una dificultad. Finalmente, las personas que
14
logran influenciar a las demás con una creencia satisfactoria de eficacia, transmiten
una estimación positiva, logrando la potencialidad de la confianza y capacidad de las
personas persuadidas a lograr el éxito; midiendo el éxito en términos de auto-mejora
que de compararse con el éxito de los demás.
Los estados psicológicos y emocionales: Indica que las personas pueden recibir
información relacionada con su autoeficacia a través de las reacciones fisiológicas,
cuando éstos se ven enfrentados a la ejecución de determinadas tareas. Los estados
fisiológicos pueden ser afectados por la ansiedad, estrés, tensión, fatiga, etc. Además,
ocasionar una ejecución pobre, con señal de debilidad física y demuestran
vulnerabilidad al someterse a actividades que implican fuerza y persistencia. El estado
de ánimo también influye en los juicios que cada persona tiene sobre su autoeficacia.
Un estado de ánimo positivo, anima la autoeficacia percibida, así como un estado de
ánimo negativo la desanima. La intensidad de las reacciones físicas y emocionales no
es más importantes que cómo éstas son percibidas y interpretadas. Esto significa que,
aquellas personas con alto sentido de autoeficacia, considera un estado de activación
con mucha energía para ejecutar cualquier tarea, mientras los que dudan de su
capacidad, los debilita.
Finalmente los indicadores psicológicos de eficacia,
desempeñan un punto importante que influye en la salud y en la actividad que requiere
un esfuerzo físico y perseverante.
La autoeficacia en el fomento de la salud
La salud y la enfermedad son el resultado de las interacciones entre los factores
psicosociales y biológicos; así menciona Bandura (1997). Además menciona que la
salud no es la ausencia de la invalidez o la enfermedad física; puede determinarse por
herencia genética o bien, por los hábitos del estilo de vida y condiciones ambientales
(Fuchs, 1974) citado por Bandura (1997). En ocasiones, los malos hábitos, promueven
una incapacidad física o hasta una muerte prematura. Una mala alimentación, el abuso
de drogas, cigarrillos, alcohol, y la falta de protección de las enfermedades de
15
transmisión sexual, pueden tener graves consecuencias en la salud.
Además, las
condiciones ambientales, los productos industriales y agrícolas pueden también afectar
la salud; ya que muchos de ellos están emitiendo residuos cancerígenos. Eliminar
éstos malos hábitos puede traer muchos beneficios para la salud.
La autoeficacia percibida es un determinante importante de la conducta que impulsa la
salud y ésta influye en dos niveles. El primero es la confianza de las personas en su
capacidad para manejar los estresores que activan los sistemas biológicos y que
intervienen la salud y la enfermedad. El segundo nivel es el ejercicio del control directo
sobre los aspectos de la conducta modificable de la salud y el índice de envejecimiento.
Entre los efectos biológicos de la autoeficacia, se ha implicado al estrés como el más
importante que provoca disfunciones físicas (Krantz, Grunberg y Baum, 1985, O´Leary,
1990) citados por Bandura (1997). El problema no se basa en las condiciones que se
da el estrés, más bien se basa en la incapacidad de manejarlo y que produce efectos
biológicos perjudiciales. La teoría social cognitiva considera las reacciones de estrés en
términos de ineficacia percibida como amenazas de rechazo, así que si las personas
manejan con efectividad los estresores, no se perturban. Al contrario de los que no los
pueden controlar, incapacitan su nivel de funcionamiento. Bandura (1997) comenta que
a través de estudios se ha demostrado que se puede fortalecer la eficacia de manejo
percibido, lo cual dirige a las personas a sobrellevar los mismos estresores que
anteriormente los incapacitaban, a experimentarlos sin angustia o sin estrés.
El autor anteriormente mencionado indica que, la autoeficacia también puede potenciar
la conducta de la salud, pues las personas que se creen en su poder de auto-motivarse
y auto-regularse, logran un cambio en los hábitos perjudiciales de la salud. Aunque no
encuentran sentido al esfuerzo si no disponen de lo necesario para lograr el éxito o
bien, si no logran resultados inmediatos. La auto-regulación no sólo es un acto de
voluntad, se requiere desarrollar ciertas destrezas de motivación y conducta. La
conducta se observa, se hacen cambios para buscar sub-metas e incentivos y buscan
apoyo social para sostener su esfuerzo y alcanzar su objetivo. El cambiar un hábito
puede tener poco efecto, al menos que sea perdurable; además, los hábitos saludables
16
que se mantienen durante toda la vida como: patrones alimenticios, destrezas
recreativas, destrezas de auto-manejo para evitar los vicios, se crean en la infancia y la
adolescencia.
La autoeficacia y el deporte
La gran influencia de la tecnología ha provocado que se reduzca la práctica de la
actividad física y en ocasiones lleva a deteriorar la salud de las personas, provocando
muchas veces altos índices de obesidad y problemas cardiacos. Éstos resultados han
alarmado a los investigadores de la salud, ya que, justo durante la infancia y la
adolescencia en donde se crean los hábitos perdurables que se mantienen a lo largo
de la vida.
Guillén (2007) cita a Bandura, González, Locke y Latham quienes indican que la
capacidad física percibida o autoeficacia, debe de incluirse tomando en cuenta que tan
alta o baja sean las creencias de la eficacia de las personas según los factores
afectados como: establecimiento de metas, procesamiento de la información, los
modelos, la retroalimentación y los premios. El establecimiento de metas es sin duda
un proceso cognitivo importante que afecto los logros. Los atletas que establecen sus
metas, o que aceptan metas a alcanzar pueden experimentar un sentido de
autoeficacia para obtenerlas y establecen un compromiso para esforzarse y conseguir
el éxito. Además, se comprometen en actividades que consideran que serán de apoyo
para alcanzar la meta definida: como por ejemplo: ir a entrenamientos, repetir la
información que debe ser recordada, esforzarse y persistir. También se ha encontrado
un incremento positivo en la autoeficacia cuando el mismo estudiante o atleta es quien
establece su propia meta.
Balaguer y Escartí (1995) definen que la relación entre autoeficacia y ejecución en
tareas deportivas y motoras se han estado investigando desde los años ochentas en
diferentes deportes como: gimnasia, natación, tiro olímpico, tenis, hockey y maratón. La
17
autoeficacia, deporte y actividad física se pueden clasificar en dos categorías
importantes:
a) Como variable dependiente con diferentes fuentes indicativas sobre la capacidad
para realizar una terea.
b) Como variable independiente que está influida por la ejecución de diferentes
deportes y tareas motoras.
Según Balaguer y Escartí (1995) citan a Feltz (1992), e indican que los estudios en la
categoría de variable dependiente, son en su mayoría de carácter experimental en
donde se compara el impacto de la autoeficacia con la ejecución real, modelado,
feedback verbal, etc. Aquí se manipula indirectamente la autoeficacia y se analiza la
influencia sobre la ejecución motora. En el caso de la categoría de variable
independiente se han utilizado metodologías experimentales como observacionales. En
éste caso, solo se evalúa la autoeficacia respecto a las tareas deportivas y se examina
su relación con la conducta. En ambos casos se define una teoría similar; si la
autoeficacia regula el esfuerzo y la persistencia, determinará en parte el rendimiento en
la ejecución de tareas motoras y podrá utilizarse como un pronóstico del mismo.
Rojas (2007) citando a Harter (1982), comenta que el deporte de alto rendimiento o de
alta competición exige condiciones motrices, fisiológicas y psicológicas muy específicas
que deben de ser adquiridas durante el proceso de entrenamiento y durante las fases
de iniciación o fundamentación deportiva. Sugiere que cuanto mayor sea el número y la
variedad de experiencias que tenga un individuo en una actividad dada, más
oportunidades tendrá para desarrollar un sentido de competencia en ese dominio. Así
que un amplio conjunto de experiencias enriquecedoras, sean negativas o positivas
durante el entrenamiento y competencia, ayudará a la formación del deportista. Dentro
de los aspectos psicológicos relacionados con el buen rendimiento del deportista, se
encuentra la capacidad de centrar su atención en estímulos relevantes, y la
autoeficacia está cercanamente relacionada con las percepciones y valoraciones que el
deportista tiene acerca de su propia capacidad para realizar correctamente una tarea y
de ella dependen gran parte de los resultados en los encuentros deportivos.
18
Basado en las investigaciones y estudios anteriormente citados, se demuestra que la
autoeficacia puede ser formada específicamente por los factores y ambientes a los
cuales los individuos han sido sometidos. Estos ambientes pueden marcar la confianza
en la que cada persona siente para realizar determinadas metas y objetivos; cualidades
a las que se adaptan para reaccionar a diferentes situaciones inesperadas, y sentirse
capaz de manejarlas. La autoeficacia también se puede estudiar a través de los
estados psicológicos, de salud y relacionarlos con las costumbres, hábitos y entornos
adquiridos durante sus vidas.
Se puede observar que la autoeficacia juega un papel importante en ámbito del deporte
y la salud, y son los ambientes, costumbre y hábitos los que pueden influir en lograr un
menor o mayor nivel de autoeficacia. Finalmente, existe un beneficio en aquellas
personas que obtienen un nivel más alto de autoeficacia, ya que manejan con mayor
facilidad las diferentes situaciones que se presentan en la vida.
19
II. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
La salud y el deporte juegan un rol importante en el desempeño físico de las personas.
Estos buenos hábitos pueden influir en la capacidad que cada individuo cree tener y
llevarlo a un incremento del nivel de autoeficacia para desarrollar ciertas tareas. El
establecimiento de metas es uno de los factores que más influye en las personas que
han realizado un deporte, ya que sus logros están enfocados en objetivos.
Bandura (1986), define la autoeficacia como los juicios que cada persona tiene sobre
su propia capacidad, por la cual se organiza y ejecuta sus tareas de una manera que le
permita alcanzar el desempeño deseado. Por su lado Torres, (2009) citando a Hu,
Moti, McAuley y Konopack quienes definen la autoeficacia como la capacidad que una
persona siente para una determinada acción o tarea.
Las teorías indican que la
autoeficacia es crucial para que las personas realicen sus logros personales, y mucho
tiene que ver los ambientes en los que se han desarrollado y las experiencias que han
vivido anteriormente para enfrentar los retos y conquistar sus triunfos.
A través de este estudio se considera importante responder a la siguiente pregunta de
investigación, ¿Cuál es el nivel de autoeficacia de los empleados administrativos de la
Confederación Deportiva Autónoma de Guatemala?
2.1 Objetivo General
Establecer el nivel de autoeficacia general de los empleados administrativos de CDAG.
2.2 Objetivos Específico

Determinar el nivel de autoeficacia en los empleados que han practicado algún
deporte.

Determinar el nivel de autoeficacia de los empleados que no han practicado
deporte.

Determinar el nivel de autoeficacia de los empleados de género femenino.

Determinar el nivel de autoeficacia de los empleados de género masculino.
20

Determinar el nivel autoeficacia de los empleados según su escolaridad.
2.3 Elementos de estudio

Autoeficacia
2.4 Definición de Variables
Definición Conceptual
Autoeficacia: Se refiere a la convicción que uno tienen de poder realizar con éxito las
conductas necesarias para producir un resultado determinado (Bandura, 1997).
Definición Operacional
Autoeficacia: Será el resultado de medir el nivel de autoeficacia a través de una
escala de autoeficacia general, en donde se manifiestan los niveles de autoeficacia en
sus diferentes variables de estudio.
2.5 Alcances y límites
El alcance de la presente investigación pretende establecer y conocer el nivel de
autoeficacia que tienen los empleados de la Confederación Deportiva Autónoma de
Guatemala y comparar los resultados para reconocer si existe una diferencia en el nivel
de autoeficacia en aquellos trabajadores que han practicado un deporte y los que no.
En dicho estudio se utilizará la Escala de Autoeficacia General y se aplicará a una
muestra representativa de los empleados para conocer el grado de capacidad que
tienen para desarrollar sus tareas. Por tanto, los resultados que se obtendrán podrán
ser válidos únicamente con los trabajadores que laboran en la empresa en donde se
realizó el estudio, no obstante, podrán generalizarse con sujetos con características
similares. Los límites de ésta investigación se relaciona con las políticas de la
compañía en cuanto a la aplicación de la escala y los tiempos en los que se debe
realizar dicho estudio.
21
2.6 Aportes
La presente investigación pretende mostrar los niveles de autoeficacia de los
empleados de la institución y así contar con indicadores que puedan vincular el
rendimiento y los resultados del desempeño en los diferentes puestos de trabajo.
El aporte a Guatemala; serán los resultados que brinde la investigación que permitirán
aportar información valiosa para modificar, mejorar o incrementar las herramientas que
se utilizan para fomentar el planteamiento de metas y objetivos en empleados
administrativos de la confederación deportiva autónoma de Guatemala.
Dicha investigación, además desea aportar a las facultades de Psicología, que los
resultados puedan demostrar si la práctica de actividad física puede mejorar o no el
rendimiento de los trabajadores.
Y el aporte a los estudiantes de psicología será que la autoeficacia es capaz de medir
las habilidades y conductas de las personas no sólo en un ambiente académico sino
también laboral y que puede marcar una diferencia entre los resultados y logros de
cada individuo.
22
III El MÉTODO
3.1 Sujetos
Para realizar la investigación se utilizó el muestreo no probabilístico de tipo cualitativo,
en donde la muestra no es aleatoria; para elegir la muestra por conveniencia en su
actividad deportiva. Se trabajó con 15 empleados administrativos que haya practicado
algún deporte y con 15 que no hayan practicado deporte. Los empleados
administrativos fueron todos aquellos que se dedican específicamente a la atención de
las asociaciones y federaciones deportivas de Guatemala, los cuales estuvieron
dispuestos a participar en la investigación.
Ésta población estuvo conformada por
trabajadores administrativos, de ambos sexos, con un grado académico mínimo de
diversificado; indicando si practican o no algún deporte, mayores de 18 años. Los
mismos se distribuyeron de la siguiente forma:
No.
Género
Nivel de
Escolaridad
Practica
Deporte
Edad
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Diversificado
Diversificado
Diversificado
Diversificado
Diversificado
Diversificado
Diversificado
Universitario
Universitario
Universitario
Universitario
Universitario
Universitario
Postgrado
no
no
no
no
si
si
si
no
no
no
si
si
Si
no
27
26
24
46
38
23
28
40
50
42
29
35
21
28
23
No.
Género
Nivel de
Escolaridad
Practica
Deporte
Edad
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
diversificado
diversificado
diversificado
diversificado
diversificado
diversificado
universitario
universitario
universitario
universitario
universitario
universitario
universitario
universitario
postgrado
postgrado
no
no
no
si
si
si
no
no
no
no
si
si
si
si
si
si
68
28
24
26
24
36
28
40
34
39
43
55
35
25
63
33
3.2 Instrumento
Para evaluar el nivel de autoeficacia se utilizó la Escala de Autoeficacia General creada
por Baessler y Schwarcer (1996) citado por Archila (2009) se basa en el concepto de
expectativa de autoeficacia definida por Albert Bandura, que hace referencia al
sentimiento de confianza en las capacidades propias para manejar los estresores. La
escala consta de 10 ítems con formatos de respuesta de escalas de tipo Likert de 4
rangos; 1 = Incorrecto, 2 = Apenas Cierto, 3 = Más bien cierto, 4 = Cierto; el cual debe
de colocar una X en cada ítem, sobre el rango que considere más adecuada a su
criterio. El punteo más alto demuestra el nivel más alto de autoeficacia percibida por
los sujetos y el punteo más bajo, reflejará un bajo nivel de autoeficacia. El valor máximo
a obtener es de 40 puntos, cuando el puntaje mínimo es 10 puntos.
24
3.3 Procedimiento
Para lograr cumplir con el objetivo de la investigación, se llevaron a cabo los siguientes
pasos:

Aprobación del tema por parte de la facultad de humanidades de la Universidad
Rafael Landivar.

Se solicitó a la institución un permiso que autorice la realización de la
investigación con los empleados administrativos.

Se planificó la aplicación del instrumento para una fecha establecida en la que
todos los empleados administrativos que forman parte de la investigación,
puedan contestar el instrumento.

Se aplicó el instrumento a los sujetos en la fecha y horario establecido.

Se recolectó la información a través de la aplicación del instrumento y se
tabularán los datos adquiridos.

Se procedió a analizar los datos obtenidos para obtener las puntuaciones que
según la tabla de calificación de escala aplica para cada ítem.

Se compararon los resultados entre los empleados administrativos que han
practicado algún deporte y los que no.

Se interpretaron los resultados obtenidos a través de procedimientos
estadísticos descriptivos.

Se redactó un informe conforme a los resultados obtenidos, además de las
conclusiones y recomendaciones.

Se llevó a cabo el informe final de dicha investigación.
3.4 Tipo de Investigación, Diseño y metodología Estadística
La presente investigación es de tipo descriptivo, conforme a la teoría de Achaerandio
(2000), la cual indica que no serán manipuladas las variables, pues sólo serán
utilizadas como elementos de estudio. La misma tendrá como objetivo definir e
interpretar la diferencia que pueda existir entre los sujetos de estudio.
25
Para análisis de los resultados, se utilizó la media aritmética o promedio simple. Paz
(2007), menciona que la media aritmética muestra el valor central de los datos
constituyendo ser la medida de ubicación que más se utiliza. Es calculada sumando los
valores de interés y dividiendo entre el número de valores sumados.
26
IV. PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS DE RESULTADOS
A continuación se muestran los resultados del presente estudio, el cual define el nivel
de autoeficacia de los empleados de la Confederación Deportiva Autónoma de
Guatemala, obtenida por medio de la escala de Autoeficacia General de Baessler y
Schawrzer (1996) citada por Archila (2009).
Gráfica 4.1
No.
Género
Nivel de Escolaridad
Practica Deporte
Edad
Punteo autoeficacia
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
Femenino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
masculino
Diversificado
Diversificado
Diversificado
Diversificado
Diversificado
Diversificado
Diversificado
Universitario
Universitario
Universitario
Universitario
Universitario
Universitario
Postgrado
diversificado
diversificado
diversificado
diversificado
diversificado
diversificado
universitario
universitario
universitario
universitario
universitario
universitario
universitario
universitario
postgrado
postgrado
no
no
no
no
si
si
si
no
no
no
si
si
si
no
no
no
no
si
si
si
no
no
no
no
si
si
si
si
si
si
27
26
24
46
38
23
28
40
50
42
29
35
21
28
68
28
24
26
24
36
28
40
34
39
43
55
35
25
63
33
37
34
34
34
30
40
27
35
35
40
28
38
38
37
40
40
40
29
39
38
37
34
34
33
39
39
36
40
38
37
27
En la tabla 4.1 se encuentra representada la muestra seleccionada que se conformó
por 30 empleados administrativos de CDAG, de ambos géneros, de diferentes niveles
de escolaridad, siendo estos diversificado, universitario y postgrado; comprendidos
entre las edades de 21 años hasta 68 años, de los cuales 15 de ellos practican deporte
y 15 de ellos no practican deporte.
Gráfica 4.2
Como se pueden observar los resultados obtenidos en la tabla 4.2, la media de
autoeficacia general percibida en los empleados administrativos de CDAG es de 36, lo
cual indica que el nivel de autoeficacia percibida es alta. Además se puede observar
que el 63.33% de los empleados poseen un alto nivel de autoeficacia con una media de
38.05, mientras que el 16.66% de los empleados posee un nivel medio con una media
de 31.7. Se puede observar una puntuación máxima de 40 puntos y una mínima de 27
puntos.
28
Gráfica 4.3
Como se pueden observar los resultados obtenidos en la tabla 4.3, la media de
autoeficacia general percibida en los empleados administrativos de CDAG que
practican deporte es de 35.73, lo cual indica que el nivel de autoeficacia percibida es
alta.
29
Gráfica 4.4
También podemos observar que los resultados obtenidos en la tabla 4.4, la media de
autoeficacia general percibida en los empleados administrativos de CDAG que no
practican deporte es de 36.26, lo cual indica que el nivel de autoeficacia percibida es
alta; aun más alta que aquellos que practican deporte.
30
Gráfica 4.5
Puntuación obtenida de la escala de autoeficacia de empleados
de género femenino
40
35
30
25
Puntuación total
20
15
10
5
0
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
Empleados de género femenino
Observando los resultados obtenidos en la tabla 4.5, la media de autoeficacia general
percibida en los empleados administrativos de CDAG de género femenino es de 34.78,
lo cual indica que el nivel de autoeficacia percibida es normal.
31
Gráfica 4.6
Puntuación obtenida de la escala de autoeficacia de empleados
de género masculino
40
35
30
Puntuación total
25
20
15
10
5
0
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
Empleados de género masculino
Mientras que en los resultados obtenidos en la tabla 4.6, la media de autoeficacia
general percibida en los empleados administrativos de CDAG de género masculino es
de 37.06, lo cual indica que el nivel de autoeficacia percibida es alta; aun más alta que
el nivel del género femenino.
32
Gráfica 4.7
Puntuación obtenida de la escala de autoeficacia de
empleados de nivel de escolaridad Diversificado
40
35
30
Puntuación total
25
20
15
10
5
0
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
Empleados con escolaridad Diversificado
Como se pueden observar los resultados obtenidos en la tabla 4.7, la media de
autoeficacia general percibida en los empleados administrativos de CDAG de nivel de
escolaridad Diversificado es de 35.53, lo cual indica que el nivel de autoeficacia
percibida es alto.
33
Gráfica 4.8
Al observar los resultados obtenidos en la tabla 4.8, la media de autoeficacia general
percibida en los empleados administrativos de CDAG de nivel de escolaridad
Universitario es de 36.14, lo cual indica que el nivel de autoeficacia percibida es alto; a
penas 0.61% más alto que los empleados de escolaridad de Diversificado.
34
Gráfica 4.9
Por último, se puede prestar atención a los resultados obtenidos en la tabla 4.8, la
media de autoeficacia general percibida en los empleados administrativos de CDAG de
nivel de escolaridad Postgrado es de 37.33, lo cual indica que el nivel de autoeficacia
percibida es alto; siendo estos más altos que los empleados de nivel diversificado y
nivel universitario.
Los resultados muestran que en general los empleados administrativos de CDAG,
poseen un alto nivel de autoeficacia, aunque se pueden percibir pequeñas diferencias
en las variables de género y escolaridad; en las que el hombre posee una media un
tanto mayor al del género femenino, así mismo, entre mayor nivel de escolaridad,
mayor el nivel de autoeficacia percibido.
35
V. DISCUSIÓN DE RESULTADOS
El presente estudio de investigación se realizó con los trabajadores administrativos de
CDAG, para determinar el nivel de autoeficacia general, como también determinar los
niveles de autoeficacia de aquellos que practican deporte y los que no; además de
conocer los diferentes niveles que presentaron las variables de género y escolaridad.
Para dicha investigación, se aplicó la escala de autoeficacia general de Baessler y
Schawzer (1996) citado por Archila (2009), y se pudo definir que el nivel de autoeficacia
percibida de los empleados es alta, como también lo es para aquellos que practican
deporte y los que no. Para las variables de género, el estudio también demostró que el
nivel de autoeficacia es alto, demostrando que la media de los hombres es un tanto
más alta que la de las mujeres. Mismo caso es el de la variable de escolaridad, que
entre mayor el grado, mayor es la media en el nivel más alto de la escala de
autoeficacia.
Conociendo los resultados de las investigaciones citadas con anterioridad y de acuerdo
con los resultados de Carbonell (2012), en donde buscó establecer el nivel de
autoeficacia de los docentes de planta de la Universidad Rafael Landívar asociados a
cuatro áreas didácticas, se demuestran resultados similares con la presente
investigación, en la cual comprueba que poseen un alto nivel de autoeficacia. Sin
embargo no encuentra relación en las variables de sexo y edad, mientras que, sí existe
una leve diferencia en la variable de sexo. Además concuerda que el factor que más
influye en el nivel de autoeficacia, es la experiencia docente. Resultados similares
refleja la el actual estudio en donde entre más alto el grado de escolaridad, mayor es el
nivel de autoeficacia.
Por otro lado, Chavarría (2010) realizó un estudio de tipo descriptivo en el que definiría
la correlación entre autoeficacia y nivel de ventas de un grupo de distribuidores de una
compañía de mercadeo en red, concluyendo que los resultados demuestran una baja
correlación negativa entre autoeficacia y nivel de ventas, además encontró un alto nivel
de autoeficacia en todos los distribuidores participantes y el nivel de ventas varía según
36
el sistema que cada uno utiliza para realizar el negocio de mercado en red. Éste
resultado concuerda con Bandura (1986), en donde consideró que la autoeficacia
podría afectar la elección de ciertas actividades, el esfuerzo para realizarlas y la
persistencia para ejecutarlas. Además agregó que un estudiante con alta autoeficacia,
mostrará mayor compromiso sobre actividades asignadas y se involucrará con mayor
perseverancia aun cuando encuentre problemas. Al igual que investigaciones
anteriores, la conclusión se asemeja mucho a los resultados de la presente
investigación, ya que como empleados administrativos de CDAG, muestran también un
alto nivel de autoeficacia.
Tobar (2010), presentó una investigación en la que busca establecer el nivel de
autoeficacia que tienen los estudiantes de las carreras de Licenciatura en Psicología
clínica, Industrial/Organizacional y Educativa del quinto año de una universidad privada.
Logra concluir que no existe diferencia estadística significativa, existe una mínima
diferencia en los alumnos de la carrera de Psicología Industrial, mostrando un leve
porcentaje mayor que los de las otras carreras de psicología. Los datos anteriores son
similares a la presente investigación, ya que aunque la media de Autoeficacia en
general es alta, hay pequeñas diferencias entre variables como género y escolaridad.
Por su parte Caxaj (2009) al realizar su investigación en la que pretendió demostrar la
existencia de la correlación entre la auto-eficacia académica y el rendimiento
académico de los estudiantes de primer año de las carreras de Ciencias de la
Comunicación y Psicología; afirmó que sí existe correlación positiva entre la
autoeficacia académica y el rendimiento académico de las dos carreras analizadas,
pero de diferente nivel en cada jornada. Esto se relaciona con la teoría de los factores
que
afectan la autoeficacia según Schunk (1995). Uno de éstos factores es el
establecimiento de metas y define que; aquellos estudiantes que se proponen metas,
pueden lograr un sentido de autoeficacia y un compromiso para lograrlas; si el
estudiante está logrando sus objetivos y se considera una persona capaz. Al igual que
en la presente investigación, se demuestra que entre más alto es el nivel de
escolaridad, mayor es el nivel de autoeficacia.
37
Así también, Archila (2009) realizó un estudio que buscaba establecer la relación que
existe entre el nivel de ventas y la autoeficacia de las Gerentes de Sector de una
empresa de venta de catálogo, y los resultados obtenidos fueron los siguientes; no
existe relación entre el nivel de ventas y la autoeficacia de las Gerentes de Sector de la
empresa de venta de catálogo, el cien por ciento de los sujetos de estudio mostraron
una alta autoeficacia y un grupo heterogéneo. Mismos resultados que se ven en la
presente investigación, en la que los empleados administrativos se sienten muy
confiados en realizar sus tareas, logros u objetivos. Esto tiene una estrecha relación
con alguna de las fuetes de la autoeficacia que según Bandura (1997) las experiencias
vicarias se presentan en modelos sociales que observan la conducta de otros para
saber lo que son capaces, luego aumentan sus creencias para formar su propia
expectativa sobre sus consecuencias. Este escenario se puede dar en un ambiente
competitivo, en donde cada individuo trata de sobresalir de los demás, buscando el
reconocimiento y el éxito.
El estudio realizado en España por Reigal, Videra, Tamayo y Juárez (2012) en donde
buscan examinar la importancia que tienen el auto concepto físico y la autoeficacia
general en la predicción de la conducta física en una muestra de adolescentes. Como
resultado, indican que ambos conceptos predicen de forma significativa la conducta de
práctica física, así como la autoeficacia general. Además, tener percepciones positivas
del concepto y la eficacia personal, puede favorecer el acceso a éste tipo de tareas
físicas. Concluyen que Los resultados del modelo de regresión logística indican que el
auto concepto físico y la percepción de eficacia general son variables válidas para
predecir la conducta de práctica física.
Según Rojas (2007), el deporte de alto
rendimiento o de alta competición exige condiciones motrices, fisiológicas y
psicológicas muy específicas que deben de ser adquiridas durante el proceso de
entrenamiento, por lo cual los estudios científicos han mostrado el creciente interés al
relacionar la percepción de autoeficacia con los resultados deportivos. A diferencia de
los resultados de la presente investigación en donde demuestra que aquellas personas
38
que practican un deporte y las que no, han obtenido resultados similares en los niveles
de autoeficacia, por lo que no existe ninguna diferencia significativa.
Por su lado Cantón y Checa (2011), realizó una investigación en la que evalúan la
relación entre las atribuciones que se realizan de una competición, la percepción de
autoeficacia en la misma, y las emociones que se experimentan durante aquella
competición y concluyó que los resultados en la competición percibida como exitosa
demuestran diferencias significativas en la experimentación de emociones positivas. Y
en cuanto a la autoeficacia, encontraron correlación positiva entre emociones
agradables y autoeficacia y una correlación negativa entre experimentación de
emociones desagradables. En la preste investigación existe una pequeña diferencia
entre los niveles de autoeficacia que experimentan aquellos empleados administrativos
que practican un deporte y aquellos que no lo hacen. Ambos grupos obtienen altos
niveles de autoeficacia y no demuestran grandes diferencias entre sí.
A nivel de este estudio, se evidencia que no existen diferentes niveles de autoeficacia
entre aquellos empleados administrativos que practican deporte y los que no; Becerra y
Díaz (2008) en su investigación en la que trataron de determinar la relación entre el
nivel de actividad física y la percepción de los beneficios, las barreras y la autoeficacia
en un grupo de empleados oficiales, concluyeron que la correlación negativa entre
autoeficacia y beneficio de la actividad física no se evidencia correlación entre actividad
física y barrera. También encuentran que la percepción de los beneficios de la actividad
física en las personas sedentarias fue mayor que aquellas físicamente activas.
En su investigación de poner a prueba una concepción unidimensional de la
empleabilidad percibida y además, analizar la relación que mantiene con la autoeficacia
para la búsqueda de empleo; Hernández, Ramos, Negrín, Ruíz y Hernández (2011),
concluyeron que la unidimensionalidad de ambas escalas y una correlación de Pearson
entre ellas es de apenas 0.56, lo cual significa que la empleabilidad y la autoeficacia
para la búsqueda de empleo, correlacionan significativa y moderadamente, pero
pueden diferenciarse. Mientras que en la presente investigación, el practicar o no
deporte no hace una diferencia significativa entre los empleados; además, tanto las
39
variables de género y escolaridad, muestras pequeñas diferencias en las medias, y
todos los resultados indican niveles de Autoeficacia altos, a excepción de los resultados
del género femenino, que su escala es media.
De acuerdo a los resultados obtenidos en este estudio, se puede observar que la
autoeficacia se puede medir, y así, obtener resultados importantes en el sector laboral.
Estos resultados pueden convertirse en una herramienta importante para conocer la
capacidad de los logros que puede llegar a tener cada individuo, o bien, el grupo de
trabajo; interpretándose estos como un buen equipo de trabajo ya que su alto nivel de
autoeficacia pueden generar confianza y seguridad en su desempeño. Según Bandura
(1997), la autoeficacia es la capacidad propia para organizar y establecer un juicio para
controlar un resultado futuro y Torre (2007) considera que la autoeficacia es un juicio
emitido por la capacidad de cada persona en alcanzar un objetivo o tarea; a un nivel
adecuado e insuperable de ejecución.
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VI. CONCLUSIONES
De acuerdo a los resultados obtenidos en la investigación, se pueden definir las
siguientes conclusiones:
1. El nivel de autoeficacia general percibido por los empleados administrativos de
CDAG es alto, ya que la media es de 36 puntos. Se denomina un nivel de
autoeficacia alto, cuando el punteo es mayor a 35 puntos de 40.
2. Se encontró un alto nivel de autoeficacia general en aquellos empleados que
practican algún deporte, obteniendo una media de 35.73 de 40 puntos.
3. También se observó un nivel alto y una media de 36.26 de 40 puntos, aquellos
empleados administrativos que no practican deporte.
4. A diferencia de los hombres, los resultados del género femenino lanzaron un nivel
normal de autoeficacia general percibida, con un punteo de 34.78; lo cual muestra
que a diferencia de los hombres, las mujeres poseen un nivel más bajo de
autoeficacia.
5. Según los resultados obtenidos, se encontró que los empleados administrativos de
género masculino, también lanzaron resultados con un alto nivel de autoeficacia;
con una media de 37.06 de 40 puntos.
6. Además, se pudo determinar que los resultados de los niveles de autoeficacia
fueron más altos, mientras la escolaridad era mayor; por lo que la media de los
empleados con estudios de posgrado, fue de 37.33, de los universitarios de 36.14 y
los de diversificado 35.53 de 40 puntos. En los tres niveles de escolaridad la
autoeficacia percibida fue alta.
41
VII. RECOMENDACIONES
1. Se recomienda a CDAG implementar periódicamente programas motivacionales
para retroalimentar la autoeficacia de todo el grupo de empleados administrativos,
así mantener el alto nivel de autoeficacia percibido.
2. Se recomienda desarrollar más actividades a través de dinámicas de grupo, para
lograr una mayor interacción entre los empleados y equipos de trabajo para que
aquellas personas que niveles normales o bajos de autoeficacia, logren identificarse
aun más con la compañía e imitar a aquellos que sobresalen en su desempeño.
3. Será importante impulsar a los empleados a que continúen preparándose
académicamente, ya que estos logros los llevarán a tener mayor confianza en sí
mismos e incrementar su autoeficacia. Esto se puede lograr a través de becas de
estudios o talleres de trabajo con temas afines a su carrera.
4. Trabajar
en
capacitaciones
motivacionales
para
mejorar
el
autoestima
específicamente para mujeres, ya que los resultados del género femenino, fue un
tanto más bajo que el de los hombres.
5. Estimular a los empleados a dirigirse a mayores retos laborales para aprovechar el
alto nivel de autoeficacia que los resultados lanzaron; logrando que sean los
empleados internos los primeros en ser tomados en cuenta para promociones en
los puestos de trabajo.
6. Implementar talleres estratégicos para identificar a líderes que pueden crear
equipos de trabajo de alto rendimiento; lo cual beneficiaría a la organización
obteniendo mejores resultados colectivos; además de seguir impulsando logros
deportivos para Guatemala.
42
VIII. Referencias Bibliográficas
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España.
45
Tesis inédita. Universidad de Valencia,
ANEXOS
46
Escala de Autoeficacia General de Baessler y Schwarzer
Edad: ______ años
Escolaridad:
Género: Masculino
Diversificado
Practico deporte: SI
Femenino
Grado universitario
Post grado
NO
ESCALA DE AUTOEFICACIA GENERAL
INDICACIONES:
No hay respuestas correctas, ni incorrectas. Lea cada una de las afirmaciones, y marque con
una “X” el número que considere conveniente. Utilice la siguiente escala para responder a
todas las afirmaciones:
1
2
3
4
INCORRECTO APENAS CIERTO MÁS BIEN CIERTO CIERTO
No.
AFIRMACIONES
Puedo encontrar la manera de obtener lo que quiero aunque
alguien se me oponga.
Puedo resolver problemas difíciles si me esfuerzo lo suficiente.
1
2
3
4
1
2
3
4
Me es fácil persistir en lo que me he propuesto hasta llegar a
alcanzar mis metas.
Tengo confianza en que podría manejar eficazmente
acontecimientos inesperados.
1
2
3
4
1
2
3
4
5
Gracias a mis cualidades puedo superar situaciones imprevistas.
1
2
3
4
6
Cuando me encuentro en dificultades puedo permanecer tranquilo
(a) porque cuento con las habilidades necesarias para manejar
situaciones difíciles.
Venga lo que venga, por lo general soy capaz de manejarlo.
1
2
3
4
1
2
3
4
1
2
3
4
1
2
3
4
1
2
3
4
1
2
3
4
7
8
9
10
Puedo resolver la mayoría de los problemas si me esfuerzo lo
necesario.
Si me encuentro en una situación difícil, generalmente se me
ocurre qué debo hacer.
Al tener que hacer frente a un problema, generalmente se me
ocurren varias alternativas de cómo resolverlo.
47
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