Béla Bartók (1881-1945) Influido en sus inicios por Liszt, Wagner y Strauss, Bartók se orientó, concluida su formación musical en Budapest e impresionado por los elementos entre occidentales y orientales en la música de Debussy, hacia la investigación del folklore musical del sudeste de Europa. A partir de estas estructuras rítmico-melódicas y sonoras populares fue elaborando su propio estilo elevado. Al lado de Schönberg y Stravinsky, Bartók se convirtió en una figura sobresaliente en lo que concierne a la búsqueda y creación de un estilo musical propio para el siglo XX. Partiendo de la variante húngara del simbolismo europeo, del modernismo y de las tendencias folklóricas del cambio de siglo, Bartók fue llegando, tras pasar en la década de 1920 por un expresionismo rayando en la dodecafonía, a partir de 1930 a una síntesis entre constructivismo, surrealismo y un nuevo clasicismo en que se mezcla lo oriental y lo occidental. Liszt y el siglo XX habían considerado original la nueva música popular cultivada en las ciudades húngaras. Bartók y Kodály reconocieron después una música popular que había sobrevivido intacta a la influencia occidental en las canciones y danzas de los campesinos que recogieron en sus viajes, primero por escrito y más tarde con el fonógrafo. Las primeras 20 canciones campesinas húngaras las publicaron en 1906. Posteriormente extendieron sus investigaciones hacia la Europa del Este y se dedicaron al rescate del patrimonio tradicional. Ya en 1934 había 1026 cilindros grabados que transcribir a partir del fonógrafo (labor sólo terminada a la muerte de Bartók). De la música popular partían directamente unos fuertes impulsos que repercutían en la expresividad e incluso en la propia esencia de la música de Bartók, tal como la superación del sistema de modos mayor y menor, nuevos ritmos, melodías y timbres. El Allegro barbaro (1911) es, con sus ritmos marcados (piano como instrumento de percusión) y sus ásperos contornos, una manifestación anterior a Stravinsky y hasta entonces inédita de un nuevo estilo y una nueva estética, llena de personalidad y fuerza. En la ópera en 1 acto El castillo de Barba Azul (1911) sale de una profunda crisis vital al dar con acentos de gran expresividad y nuevos timbres y formas. Bartók se retiró y dedicó algunos años principalmente al estudio de la música popular. No consiguió ningún gran éxito hasta 1923 con la Suite de danzas. En 1924 apareció su libro La canción popular húngara. En 1926 comienza una nueva fase creativa, en la que combina la experiencia de la música popular con la tradición de la música culta occidental, por la que sentía una gran admiración, especialmente hacia Bach (polifonía y contrapunto), Beethoven (elaboración motívica), Debussy (tímbrica de acordes), y la tendencia clasicista de su época (formas clásicas como la sonata o el concierto); el resultado es un estilo propio, virtuosístico, poderoso y brillante. La década de los 30 aporta una serie de obras de madurez con una gran voluptuosidad sonora y proporciones armónicas; publica como obra didáctica el Mikrokosmos, con ejercicios de dificultad progresiva para la interpretación del piano y de la nueva música. En esos años hay un interés por la economía de medios, con pequeños elementos sonoros dominados por la percusión, como la Música para cuerdas, percusión y celesta (1936) o la Sonata para dos piano y percusión (1938), pero también una intelectual y difícil música de cámara -sobre todo cuartetos-, o los tan distintos conciertos para piano y orquesta, que exigen del solista cualidades de virtuoso. La última obra de Bartók antes de su emigración es el Cuarteto de cuerda n° 6, que refleja la gran conmoción ante la Europa de 1939. Las últimas composiciones de Bartók alcanzan una depuración que recuerda a los modelos clásicos. El Concierto para orquesta combina principios del concerto barroco con un rico melodismo, armonía (también tonal) y claridad. Bartók llegó a presenciar el éxito mundial de sus composiciones, que comenzó con el estreno de la última citada, en 1944. Se convirtió en el autor más interpretado del siglo XX.