:: El Mundo.com :: Página 1 de 2 La belleza en Immanuel Kant Conceptos filosóficos de la estética Con motivo del III Congreso Iberoamericano de Filosofía que se realizó en la Universidad de Antioquia, nos visitaron personajes bien interesantes, doctos en el tema. Bienvenido fue el evento porque es una de las carencias que sufren nuestros profesores, políticos y críticos de arte, entre otros muchos, incluyéndonos, desde luego. El conocimiento de la filosofía, aunque sea somero, debe tenerse como obligación para poder entender el mundo que nos rodea y a nosotros mismos. Libe de Zulategi y Mejía Una de las razones que vive nuestro país, de las situaciones caóticas que se viven y se crean dentro del mundo político y social, es Noticias relacionadas la ausencia de elementos y conocimientos Adicionar artículo filosóficos que guíen el pensamiento de los diferentes bandos. El discurso que se utiliza Comentar para discutir la guía necesaria a nuestro Recomendar este artículo pueblo está ausente totalmente de un raciocinio que tenga como centro de interés Seguimiento de la noticia al ser humano, al colombiano, a los que habitamos este hermoso país, a nuestra profunda razón de ser. En nuestra sociedad no se lee y menos se estudia filosofía o se averigua qué es y para que sirve. Es un tema árido a veces, pero, cuánta falta hace. Por esto fue bienvenido el III Congreso Iberoamericano de Filosofía y ojalá haya sembrado la necesidad de leer sobre el tema. Además, la presencia de la Doctora en Filosofía Lucy Carrillo y de un grupo de filósofos extranjeros y de nuestras universidades, enaltecieron un evento que suena extraño en nuestro medio. En entrevista concedida a este diario, la señora Carrillo analiza varios puntos vitales para el desarrollo cultural y el porqué la filosofía se debe estudiar a fondo hoy para poder adecuar las teorías de los grandes pensadores de acuerdo al mundo actual. Ella aboga por una explicación fluida que permita llegar a la filosofía con mayor comodidad y con un acercamiento más fácil. La amplitud temática de esta disciplina es vasta y compleja. Por ejemplo, respecto al arte y a la estética, son infinitas las acepciones de lo bello, lo feo, bueno o malo en la historia de la filosofía. Cada filósofo, de acuerdo a su momento histórico, a las experiencias anteriores a él y a su pensamiento, aportó un concepto de la estética, lo que crea la necesidad de leer mucho. Nosotros, los contemporáneos, nos vemos en la necesidad de acercarnos al pensamiento relativo a la creación del ser. Por lo tanto, hoy estamos obligados a leer cientos de tomos de todos aquellos genios mencionados para poder llegar a un concepto propio o para adherirse al que se considere más adecuado. Belleza y arte Trataremos de aclarar un tanto, a riesgo de cometer muchos errores, cuál es el concepto de belleza y de arte. Lograr un concepto exacto de qué es bello o qué es bueno es un imposible. Cada filósofo, cada crítico o cada artista tiene conceptos que provienen de raciocinios distintos o de culturas que marcan diferencias. No es lo mismo el concepto de lo bello o lo feo de un filósofo educado en universidades o bajo tutela de maestros de inmensa cultura, que el de un indígena o un ser simple que emite su juicio por elemental sensación ante el objeto. Es claro que ambos tienen premisas igualmente válidas. Tampoco es lo mismo el concepto de alguien que nació en el siglo XVII al de un catedrático actual. Por ejemplo, aquel se refiere a la pintura como una forma de imitar literalmente un objeto. En ese entonces, el arte radicaba en la similitud con que se captaba la realidad de la naturaleza o de cualquier objeto. Esa similitud se unía a la interpretación del mismo tema y ambos logros conformaban la obra de arte. Este punto de la interpretación era clave para emitir el juicio. Nunca se ha llamado arte a lo que es exactamente igual a la realidad, sin más aporte. Lo bien hecho per se no conlleva ese valor. Siglos después, el catedrático cifra su concepto de belleza en la interpretación que de dicho objeto hace el artista, o en la http://www.elmundo.com/sitio/noticia_detalle.php?idedicion=1056&idcuerpo=5&dsc... 11/11/2009 :: El Mundo.com :: Página 2 de 2 transformación del mismo –por ejemplo, los impresionistas, los expresionistas, los surrealistas y los abstractos-, no en el objeto real captado tal cual. Son ejemplos que no se pueden comparar, aunque la esencia de los criterios sea la misma. Los conceptos son diferentes. Es el análisis de las condiciones intrínsecas que producen el halago visual o sensorial ante un objeto, el que puede, en algunos casos, reflejar una similitud de criterio. Santo Tomás decía que “es bello lo que a la vista agrada”. Con este axioma la belleza queda circunscrita a cosas meramente bonitas, a lo superficial, a lo aparente. Aristóteles se acerca con verdadero acierto, según nuestro criterio, al decir que “arte y belleza son la imitación de la mimesis de la naturaleza, no de la naturaleza misma”. Se va a la esencia, a la sustancia, a lo que no Muchas obras de Francisco de Goya se transforma, a lo que subsiste en las cosas son feas, pero grandiosas por su a pesar de las modas, formas y cambios que significado. Es algo que si bien no alteren su apariencia y a los cambios de la transforma ni obliga al hombre a humanidad. Lo aparente nunca tendrá cambiar las cosas, sí le alerta para categoría de arte. Lo profundo, sí. pensar más sobre el significado de lo que hace, escribe, pinta, esculpe o compone. En las fotos aparecen tres En este caso debemos acercarnos a obras del artista: “Grupo sobre un Immanuel Kant, uno de los más duros de la balcón”, “Saturno devorando a un filosofía y con conceptos tan interesantes hijo” y "Doña Teresa Sureda". que invitan a escribir y a analizarlos dentro de las premisas de las necesidades para la verdadera comprensión de lo que significa el arte. Sitúa el juicio de belleza en el pensamiento, de acuerdo a su estructura cultural. Esto es, llegar a emitir un juicio basado en su formación y en características inherentes a su lugar, a su momento, a su tiempo y a su espacio. Para él “los objetos pueden ser juzgados bellos cuando satisfacen un deseo desinteresado que no implica intereses personales”. No se debe buscar en el objeto bello propósitos específicos y los juicios de belleza suelen ser universales. “El arte debe dar la misma satisfacción desinteresada que la belleza natural. Resulta paradójico que el arte pueda cumplir un destino que la naturaleza no puede: puede ofrecer belleza y fealdad a través de un objeto. Una hermosa pintura de un rostro feo puede, incluso, llegar a ser bello”. Para muchos, arte es pintar o esculpir cosas bonitas. Error lamentable. El arte es una necesidad en quien lo hace y en quien lo contempla. Arte es algo que crea el hombre con sus manos, su mente y sus sentimientos. Es trascendental, no superficial. Puede ser bello o muy feo. Muchas obras de Goya son feas, pero grandiosas por su significado. Es algo que si bien no transforma ni obliga al hombre a cambiar las cosas, sí le alerta para pensar más sobre el significado de lo que hace, escribe, pinta, esculpe o compone. En el Renacimiento el artista era un consejero de la comunidad. Pensaba. Hoy el artista se ha convertido en un divo que no tiene la libertad de intervenir en su ámbito social. Tampoco tiene la autoridad. La ha perdido. Pero volvamos al filósofo Kant. Hoy, más que antes, es casi obligatorio analizar por largos espacios su pensamiento sobre el arte y la estética. La libertad del hacer arte que hoy existe conlleva la responsabilidad de enterarse sobre “qué es lo que estoy haciendo y por qué, para qué, para quién”. La Filosofía es básica para la vida, pero no es fácil su lectura y menos para llevar una claridad sobre el tema a los lectores. Hemos tratado de hacerlo, partiendo de nuestras lecturas, -no somos filósofos- conservando el respeto por uno de los más importantes pensadores de la historia y por los que habrán de dedicar un momento para leer estas líneas. http://www.elmundo.com/sitio/noticia_detalle.php?idedicion=1056&idcuerpo=5&dsc... 11/11/2009