CONCLUSIONES CIENT FICAS Zeftera contiene medocarilo de ceftobiprol, un prof rmaco del compuesto activo ceftobiprol, desarrollado debido a los problemas de solubilidad.El medocarilo de ceftobiprol se convierte en ceftobiprol despu s de su administraci n intravenosa. Es un antibacteriano del grupo de los -lact micos con actividad in vitro frente a un amplio espectro de bacterias grampositivas, incluidas especies de Staphylococcus resistente a meticilina (SARM),S. aureus resistente a vancomicina (SARV),Enterococcus faecalis sensible a ampicilina y S.pneumoniae resistente a penicilina (SPRP)y ceftriaxona. El ceftobiprol es poco activo frente a Enterococcus faecium y Proteus vulgaris, y su actividad es limitada frente a las bacterias anaerobias productoras de -lactamasa, incluidas las especies de Bacteroides. Zeftera se desarroll como perfusi n intravenosa para el tratamiento de las infecciones complicadas de la piel y los tejidos blandos, incluidas las infecciones del pie diab tico sin osteomielitis concomitante en pacientes adultos. Una vez evaluados los datos presentados, el CHMP considera aceptables los datos no cl nicos y sobre calidad. En cuanto a los datos cl nicos, el CHMP considera que la fiabilidad de los datos cl nicos presentados, procedentes de los dos estudios fundamentales BAP00154 y BAP00414, es insuficiente para concluir que la relaci n entre beneficio y riesgo es positiva, debido a las deficiencias identificadas en varios centros de estudio en relaci n con la buena pr ctica cl nica (BPC). RESUMEN GENERAL DE LA EVALUACI N CIENT FICA DE ZEFTERA Calidad La calidad de ceftobiprol est debidamente demostrada. En general, la documentaci n qu mica y farmac utica presentada para la autorizaci n de comercializaci n fue satisfactoria. No se observaron desviaciones importantes respecto a los requisitos de la UE y la ICH. Farmacolog a no cl nica y toxicolog a Los objetivos principales de los antibi ticos -lact micos, incluidas las cefalosporinas como el ceftobiprol, son las prote nas fijadoras de penicilina (PBP),unas enzimas bacterianas unidas a la membrana que intervienen en los ltimos pasos de la bios ntesis de peptidoglucanos (pared celular). El ceftobiprol mostr una buena afinidad por las PBP de Staphylococcus aureus, as como por la PBP2a de las cepas resistentes a meticilina y las PBP de Streptococcus pneumoniae. El ceftobiprol present en general una buena afinidad por las PBP 1, 2, 3y 4de las bacterias gramnegativas E. coli y P. aeruginosa. El ceftobiprol mostr una buena actividad in vitro frente a las bacterias grampositivas. Los valores de la CIM90 fueron 4 g/ml frente a Staphylococcus aureus, igual que frente a las cepas resistentes a meticilina/oxacilina. El ceftobiprol tambi n inhibi la actividad in vitro frente a otros estafilococos, y la CIM90 en estos casos fue generalmente 4 g/ml. Frente a los estreptococos, la CIM90 fue generalmente 1g/ml. En cuanto a las bacterias gramnegativas, el ceftobiprol mostr una buena actividad in vitro frente a cepas BLEA-negativas o sensibles a ceftazidima (CIM90generalmente 0,5 g/ml), pero no frente a las cepas BLEA-positivas o insensibles a ceftazidima (CIM90> 256 g/ml). El ceftobiprol se mostr activo frente a SASM, SARM, S. pyogenes, S. pneumoniae (sensible y resistente a penicilina), E. coli, K. pneumoniae, E. cloacae, C. freundii, S. marcescens, P. mirabilis y P.aeruginosa en un modelo murino con septicemia. El ceftobiprol fue activo frente a S. pneumoniae (sensible y resistente a penicilina), H. influenzae -lactamasa-negativo, E. cloacae BLEA-negativo y K.pneumoniae BLEA-negativo en modelos murinos con infecci n de v as respiratorias. El ceftobiprol fue activo frente a P. aeruginosa en un modelo murino neutrop nico con infecci n del muslo. Adem s,el ceftobiprol fue activo frente a SARM en modelos de endocarditis en ratas y conejos, y en un modelo de osteomielitis en conejos, y frente a SARM y SASM en modelos de infecci n de la piel y los tejidos blandos en ratones. Se logr la erradicaci n completa de S. pneumoniae resistente a penicilina en un modelo de infecci n de v as respiratorias en el rat n, y de SARM en modelos de endocarditis en ratas y conejos,en un modelo de infecci n de la piel y los tejidos blandos en ratones y en un modelo de osteomielitis en conejos. Por ahora, el ceftobiprol tiene escaso poder de selecci n de cepas mutantes resistentes de Staphylococcus aureus. En cuanto a las bacterias gramnegativas, el ceftobiprol no fue estable frente a las BLEA,la carbapenemasa KPC-2,las -lactamasas de clase B IMP-1 y VIM-2, y la -lactamasa de clase D OXA-10. El ceftobiprol fue estable frente a varias -lactamasas de clase A distintas de las BLEA y frente a la carbapenemasa SME-3. El ceftobiprol parece bastante estable frente a las lactamasas de tipo AmpC,si bien se observaron CIM bastante altas frente a P.aeruginosa productora de AmpC. La frecuencia de resistencias monof sicas y la inducci n de AmpC se investigaron en Morganella morganii, Citrobacter freundii, Providencia stuartii, Enterobacter cloacae, Serratia marcescens y -9 -6 Pseudomonas aeruginosa. Se observaron resistencias monof sicas con frecuencias de 10 a 10 y el perfil de resistencias fue parecido a los de cefepima y ceftazidima. En cepas mutantes resistentes de C. freundii y E. cloacae se observaron niveles aumentados de -lactamasas de tipo AmpC. En cepas mutantes resistentes de P. aeruginosa se constat una regulaci n al alza de las bombas de eflujo mexXY. Los estudios no cl nicos identificaron episodios de toxicidad renal, crisis comiciales y reacciones en el lugar de perfusi n. En un estudio del desarrollo pre y posnatal realizado en ratas, el tama o de la camada y la supervivencia hasta cuatro d as despu s del parto se redujeron con dosis t xicas para la madre. Eficacia El ceftobiprol logr resultados favorables en las dosis recomendadas en el an lisis principal de la eficacia en cuanto a las tasas de curaciones globales de los grupos de an lisis cl nicamente evaluables. Las tasas de curaciones cl nicas en el grupo de an lisis por intenci n de tratar (IT) coprincipal coincidieron con las del grupo de an lisis cl nicamente evaluable. Ambos estudios, BAP00154 y BAP00414,incluyeron pacientes con infecciones por grampositivos. Los resultados de ambos estudios fueron homog neos en los grupos de an lisis cl nicamente evaluable e IT respecto a los pacientes que s lo presentaban los pat genos grampositivos SASM y SARM, en la visita basal. En el estudio BAP00414,las tasas de curaci n cl nica de los pacientes con infecciones del pie diab tico incluidos en los grupos de ceftobiprol y de vancomicina m s ceftazidima fueron del 86,2 % y el 81,8 %, respectivamente, en el grupo de an lisis cl nicamente evaluable, y del 77,4 % y el 71,9 %, respectivamente, en el grupo de an lisis IT.La cifra de pacientes que present una reca da cl nica en la visita de seguimiento tard o (VST)fue baja (<2,5 %)en ambos grupos de tratamiento, tanto en cada estudio por separado como en los dos combinados. La reca da no se asoci a la presencia de infecciones resistentes en la visita basal ni a la aparici n de infecciones resistentes. El solicitante reconoci que los an lisis combinados eran exploratorios. La finalidad de combinar los estudios separados para el an lisis de la eficacia es valorar la uniformidad de los efectos del tratamiento y las tendencias entre subgrupos. Para valorar la ausencia de inferioridad del ceftobiprol frente a los tratamientos de comparaci n, el CHMP pidi al solicitante que presentara res menes de los datos basales de los signos y s ntomas cl nicos observados en el estudio fundamental BAP00414, y un an lisis aparte de los pacientes con infecciones del pie diab tico (IPD)incluidos en este estudio. Adem s se solicit un an lisis separado de las tasas de curaci n y mejor a en la visita de comprobaci n de la curaci n (CDC)y la VST. Los an lisis adicionales presentados en respuesta a la solicitud del CHMP permiten que se tengan en cuenta los resultados de ambos estudios en la valoraci n de la ausencia de inferioridad de la eficacia del ceftobiprol frente a los tratamientos de comparaci n escogidos. Sin embargo,quedaban algunos problemas pendientes: - En respuesta a las cuestiones planteadas, el solicitante sostuvo que la experiencia en pacientes con IPTBc debidas a pat genos grampositivos distintos de los estafilococos est lo bastante fundamentada en un an lisis combinado para subrayar esta conclusi n. Los datos presentados siguen sin ser s lidos para llegar a esta conclusi n. La tasa de curaciones cl nicas en los casos de infecci n por estreptococos beta-hemol ticos, la principal cepa relevante, en la poblaci n microbiol gicamente evaluable fue num ricamente menor en el grupo de ceftobiprol [56/63(89%)]que en el de control [50/54(93%)]. Respecto a las cepas aisladas con m s frecuencia en este grupo, las tasas de curaciones cl nicas fueron: Streptococcus pyogenes: 26/31 (84%) y 26/29 (90%) en los grupos de ceftobiprol y de control, respectivamente; Streptococcus agalactiae: 17/19 (89%) y 4/5 (80%) en los grupos de ceftobiprol y de control, respectivamente. El solicitante explic que la diferencia en las tasas de curaci n cl nica de S. pyogenes entre los grupos de ceftobiprol y de comparaci n en el an lisis combinado del grupo microbiol gicamente evaluable se deb a principalmente a los resultados observados en el estudio BAP00154 (73%y 88 %con ceftobiprol y el tratamiento de comparaci n, respectivamente) en lugar del estudio BAP00414 (90% y 92 % con ceftobiprol y el tratamiento de comparaci n, respectivamente). El escaso n mero de muestras y los resultados aparentemente desiguales del tratamiento de comparaci n demuestran la falta de solidez de los datos combinados. Los hallazgos desiguales de los distintos estudios se explican, al menos en parte, por el bajo n mero de muestras. Esta situaci n no respalda la presunta aceptabilidad de ceftobiprol 500 mg 2v/d para el tratamiento de las infecciones confirmadas por grampositivos en general o por estreptococos como S.pyogenes en particular. En respuesta a la objeci n del CHMP respecto a la posolog a mencionada, la dosis habitual recomendada se estableci en 500 mg cada 8horas en perfusi n intravenosa de 120 minutos para todas las infecciones presuntas o confirmadas por grampositivos y gramnegativos. - Asimismo,la experiencia en pacientes con IPTBc por pat genos gramnegativos distintos de E. proced a de los datos del estudio BAP00414 y de un an lisis combinado que cont tambi n con datos (ITm)del estudio BAP00154. Los datos presentados siguen sin ser s lidos para llegar a esta conclusi n. Los datos de los pat genos gramnegativos por tipo de infecci n obtenidos del estudio BAP00414 en el grupo ITm muestran claramente la escas sima cifra de pat genos distintos de E. coli y la distribuci n desequilibrada entre los dos grupos de tratamiento y los tipos de infecci n (en parte debido a la aleatorizaci n 2:1). Adem s, se observaron tasas de curaci n cl nica num ricamente inferiores en el grupo de ceftobiprol en relaci n con las enterobacterias distintas de E.coli aisladas con m s frecuencia en el grupo de an lisis microbiol gicamente evaluable del estudio BAP00414. En general, la cifra de pacientes infectados por enterobacterias con una CIM de 0,25-16 mg/l para el ceftobiprol sigue siendo demasiado baja como para poder elegir un valor de corte para el conjunto de enterobacterias. Es preciso ampliar la experiencia en infecciones por gramnegativos distintos de E. coli para poder sacar conclusiones s lidas sobre si la eficacia cl nica es equivalente a la del tratamiento de comparaci n estudiado. coli - Es preciso ampliar la experiencia en infecciones por gramnegativos distintos de E. coli para poder sacar conclusiones s lidas sobre si la eficacia cl nica es equivalente a la del tratamiento de comparaci n estudiado. E.coli es la nica bacteria que cumpli los requisitos para considerarse una especie frente a la que se hab a demostrado eficacia cl nica en estudios cl nicos. - Algunos grupos relevantes de pacientes se excluyeron de los estudios cl nicos: infecciones por cuerpos extra os (p. ej., cat teres, etc.); endocarditis; osteomielitis; artritis s ptica; fascitis necrosante; eccema o neoplasia con sobreinfecci n; isquemia cr tica de extremidades; pacientes inmunocomprometidos. La experiencia con otros grupos es muy reducida (p.ej., pacientes con bacteriemia o con quemaduras importantes infectadas). Aparte del debate en el seno del CHMP, la escasa experiencia en los ensayos en fase III de pacientes con IPD no justificaba una notaci n aparte en la indicaci n propuesta. - No puede descartarse la posibilidad de que aparezcan resistencias tras el uso cl nico de ceftobiprol. La baj sima frecuencia observada en la presente base de datos cl nicos debe interpretarse con precauci n debido a las condiciones controladas del ensayo y la limitaci n de la base de datos. Tras la notificaci n de las deficiencias referentes a las BPC,el CHMP cuestion la integridad general de los datos de los estudios BAP00154 y BAP00414. El solicitante presento los an lisis de sensibilidad solicitados, en los que se excluyeron 11 centros de dudosa fiabilidad (S11).El solicitante aport nuevos an lisis de sensibilidad correspondientes a los centros inspeccionados y no excluidos por la FDA (7de 10 centros)y la Agencia Europea de Medicamentos (2de 4centros)(SG9). Aunque los an lisis de sensibilidad presentados parecen coincidir con la conclusi n de ausencia de inferioridad, esto ha de interpretarse con precauci n. Ciertamente, la reducci n de la cifra de pacientes incluidos en este an lisis compromete la solidez de la conclusi n, especialmente en los subgrupos relevantes (por pat geno o diagn stico concreto de IPTBc), de forma que hay pocos datos de poblaciones cl nicamente evaluables de ambos grupos de tratamiento en estos estudios fundamentales. No obstante, respecto a los diagn sticos principales, como los de heridas, abscesos y pie diab tico, los resultados parecen coincidir con la conclusi n original, aunque el intervalo de confianza crece en el estudio BAP00414;lo mismo sucede con el pat geno m s importante,S.aureus (SARMy SASM).En cuanto a E. coli, las cifras son demasiado reducidas como para sacar conclusiones claras sobre la eficacia,aunque no son desfavorables ni para el ceftobiprol ni para el tratamiento de comparaci n. Un nuevo an lisis de sensibilidad realizado con 42centros (SG42,entre ellos los 9centros antes mencionados) que fueron inspeccionados por inspectores de la FDA o de la UE,o auditados por un auditor independiente de GC,y que no se consideraron imposibles de verificar ni poco fiables,incluy a 879 (54,5%)de los 1612 sujetos originales. Los resultados del an lisis de este subgrupo coincidieron con los del an lisis de todo el conjunto de datos. Sin embargo, el deficiente control global de los datos de estos ensayos, puesto de manifiesto por los diversos problemas de BPC en varios de los centros auditados e inspeccionados, indica una falta de rigor en el conjunto de datos disponibles. Este control deficiente favorece el resultado de ausencia de inferioridad, pues puede impedir que se detecten posibles diferencias entre los resultados. Es de agradecer que en los ensayos que pretenden demostrar diferencias entre tratamientos exista la obligaci n categ rica de usar un dise o satisfactorio y de minimizar los errores, pues un gran n mero de imperfecciones aumenta la probabilidad de que no se logre demostrar una diferencia entre los tratamientos cuando sta existe. Como cada inspecci n o auditor a ha ocasionado la exclusi n de m s centros, la ejecuci n global del ensayo resulta dudosa y ya no puede concluirse que su realizaci n no haya minado la capacidad de distinguir los tratamientos eficaces de los menos eficaces o ineficaces. El pretendido efecto beneficioso o la mayor utilidad frente a otros medicamentos comercializados en los pacientes cr ticos con IPTBc graves no est s suficientemente justificados, dada la falta de datos cl nicos s lidos en relaci n con dichos pacientes. Por tanto,el CHMP consider que los an lisis de sensibilidad adicionales y las nuevas consideraciones de apoyo (en parte te ricas) no eran suficientes para respaldar la demostraci n de la eficacia en la solicitud de esta autorizaci n de comercializaci n. Seguridad La base de datos de seguridad respecto a la indicaci n propuesta era bastante limitada, especialmente si los datos de las dos recomendaciones posol gicas se analizan por separado. Tan s lo 543 pacientes usaron la pauta de 500 mg 3v/d (estudio BAP00414). En los ensayos cl nicos principales, las reacciones adversas m s habituales aparecidas durante el tratamiento y relacionadas con el f rmaco fueron n useas, reacciones en el lugar de perfusi n, v mitos, diarrea y disgeusia. Parece que las tres ltimas dependen ligeramente del nivel de dosis empleado;sin embargo,por lo general, las reacciones fueron leves o moderadas con la dosis actual (500mg 3v/d) que se recomienda para la comercializaci n. Quedaban algunas dudas: - Teniendo en cuenta la experiencia bastante escasa con las pautas posol gicas de 2v/d y 3v/d por separado, los AA relacionados con el lugar de perfusi n, como flebitis y tromboflebitis, constituyeron un problema. - Se plantearon dudas acerca de si las concentraciones muy altas de ceftobiprol se asocian o no a un mayor riesgo de trastornos convulsivos yatrog nicos en los pacientes estudiados, en pacientes debilitados gravemente enfermos o en otros pacientes con trastornos convulsivos o tratados simult neamente con f rmacos epilept genos. - Se abord la hiponatremia, que es un importante riesgo ya identificado en el plan de gesti n de riesgos de la UE. - Teniendo en cuenta el problema no cl nico pendiente y la experiencia de seguridad bastante limitada en cuanto a toxicidad renal,el solicitante propuso medidas adecuadas de reducci n de riesgos con el fin de atender a los pacientes con mayor riesgo de nefropat a por dep sito de cristales (p.ej., pacientes con alteraciones metab licas del tipo de la acidosis o la alcalosis metab licas sist micas, o acidosis tubular renal, que producen cambios del pH urinario que favorecen la precipitaci n de cristales). - La colitis por C. difficile aparece dentro de las reacciones adversas relacionadas con el f rmaco. Como el ceftobiprol se elimina casi totalmente por el ri n de forma intacta, y dada la experiencia bastante escasa que existe con este f rmaco,la aparici n y la incidencia de este tipo de colitis resultan preocupantes. La colitis por C.difficile se habr a vigilado como parte de la farmacovigilancia sistem tica. El incumplimiento de las normas de BPC observado en los dos ensayos cl nicos fundamentales impide concluir que la base de datos de seguridad disponible actualmente sobre el ceftobiprol sea exhaustiva y refleje realmente todos los posibles acontecimientos adversos debidos al tratamiento con este compuesto. La posibilidad de que falten datos importantes de seguridad sobre el producto invalida el perfil de seguridad, inicialmente considerado positivo, y ya no permite al CHMP valorar todos los posibles riesgos asociados al uso de este medicamento. Inspecciones relativas a la BPC Bas ndose en los resultados de las inspecciones solicitadas por la UE en relaci n con la BPC, el CHMP ha concluido que los dos ensayos fundamentales,BAP00154 y BAP00414,no se realizaron en cumplimiento de las normas de BPC. Estos resultados tambi n est n corroborados por los resultados de las inspecciones relativas a la BPC realizadas previamente por la Food and Drug Administration de EEUU. La declaraci n adjunta al resumen cl nico y al Informe de Estudio Cl nico concerniente al cumplimiento de las normas de BPC ya no puede considerarse v lida. Las auditor as relativas a la BPC realizadas en nombre del promotor revelaron muchos problemas pero, aun as ,los auditores aceptaron datos que los inspectores de la UE no consideraron aceptables. Cada inspecci n o auditor a ha motivado la exclusi n de m s centros. La naturaleza de los problemas detectados es tal que la realizaci n del ensayo y sus resultados no son fiables para respaldar la pretendida ausencia de inferioridad del ceftobiprol. Adem s, para el CHMP,el escaso control de los datos no asegura que el perfil de seguridad del ceftobiprol se haya definido suficientemente. Motivos de la revisi n Aunque el solicitante ha admitido las dudas planteadas en relaci n con la realizaci n de los dos ensayos en fase III presentados en la solicitud de autorizaci n de comercializaci n (SAC)y ha comprendido que dichas dudas crearon cierta incertidumbre sobre el conjunto de pruebas cient ficas que pretend an establecer la eficacia y la seguridad del ceftobiprol, el solicitante pidi que se revisase la solicitud referente al ceftobiprol en relaci n con dos factores principales: 1) El ceftobiprol es un antibacteriano nico que podr a ofrecer ventajas considerables sobre los tratamientos existentes actualmente. 2) El solicitante valor con mayor detalle las consecuencias que tienen las desviaciones de las normas de BPC observadas para la realizaci n de los ensayos y si la naturaleza de dichas desviaciones es tal que el estudio pierde la capacidad de distinguir entre un tratamiento eficaz y otro ineficaz (la sensibilidad del an lisis ).Se ha atendido especialmente a: a. la respuesta microbiol gica, que podr a considerarse un criterio de valoraci n m s objetivo, b. un an lisis detallado de los factores que,seg n la CHMP/ICH/364/96 (ICHE-10),son elementos importantes para la correcta realizaci n de estudios de ausencia de inferioridad que deben evaluarse exhaustivamente una vez completado el ensayo de ausencia de inferioridad con control activo . Adem s de este an lisis, el solicitante pidi que se valorasen los resultados de dos an lisis conservadores que, en opini n del solicitante, demostraban claramente la solidez de los resultados globales de los ensayos. El CHMP consider lo siguiente: teniendo en cuenta el amplio espectro antimicrobiano, la actividad bactericida y el perfil de seguridad del ceftobiprol, este medicamento ser a especialmente valioso para el tratamiento de los pacientes cr ticos con IPTBc graves. Sin embargo, las cifras de cada subgrupo de mayor riesgo identificado son bajas y estos an lisis no se consideran lo bastante s lidos como para especificar en la secci n 4.1 del RCP ning n grupo concreto que pudiera beneficiarse del tratamiento con ceftobiprol. el conjunto de datos hist ricos del solicitante sobre la sensibilidad de los an lisis en los estudios de otros medicamentos con esta indicaci n no es directamente relevante para el problema de la infracci n de las normas de BPC en los presentes estudios. Los siete factores explicados por el solicitante bas ndose en la CHMP/ICH/364/96 son importantes, pero no impiden el sesgo producido por los problemas referentes a la realizaci n del estudio o posiblemente a la incorrecci n del registro/la comunicaci n del estudio no se evidenciaron nuevos problemas a ra z de los an lisis de sensibilidad y los resultados microbiol gicos. Los an lisis, incluido el de seguridad cl nica, parecen coherentes.Se alcanz la ausencia de inferioridad en cuanto al criterio de valoraci n principal de la eficacia en ambos subconjuntos (S11y SG42). El CHMP reiter que el principal problema pendiente sigue siendo la cuesti (incluidos los de seguridad) que pueden considerarse fiables, inspecciones/auditor as arrojaron resultados diferentes, lo que increment fiables. El panorama general de los estudios es que el cumplimiento de variable y el control del ensayo no fue ptimo. n de cu les son los datos ya que las distintas la cifra de centros poco los distintos centros fue En consecuencia, el CHMP no puede establecer una relaci n entre beneficio y riesgo positiva para el ceftobiprol. MOTIVOS DE LA DENEGACI N Considerando que Los estudios cl nicos fundamentales BAP00154 y BAP00414 no se realizaron de conformidad con la BPC,como requiere el Anexo I de la Directiva 2001/83/CE modificada, y la naturaleza de los problemas hallados es tal que la realizaci n de los estudios y sus resultados no son fiables como base para recomendar que se conceda una autorizaci n de comercializaci n. El solicitante no ha demostrado suficientemente la eficacia terap utica y la seguridad cl nica conforme a lo estipulado en el art culo 12(1)del Reglamento (CE)N 726/2004 y el art culo 26(1)(b)de la Directiva 2001/83/CE modificada. El CHMP ha recomendado por mayor a denegar la concesi n de la autorizaci n de comercializaci n para Zeftera de conformidad con el art culo 9(1)(a)del Reglamento (CE)n 726/2004.