Transporte y logística I Cuando hablamos acerca de cuáles son los eslabones logísticos de la cadena de suministro nos referimos a los siguientes: Abastecimiento Este eslabón se centra en la adquisición de materias primas y componentes necesarios para la producción. Incluye la selección de proveedores, negociación de contratos y gestión de inventarios de materiales. Producción En esta etapa, las materias primas se transforman en productos terminados. Incluye la planificación de la producción, gestión de la calidad y optimización de los procesos de manufactura. Almacenamiento Los productos terminados se almacenan antes de ser distribuidos. Este eslabón abarca la gestión de inventarios, organización del almacén y uso de tecnologías para el seguimiento de productos. Transporte Implica el movimiento de productos desde el lugar de producción hasta los puntos de venta o clientes finales. Incluye la gestión de flotas, selección de rutas y modos de transporte, y aseguramiento de entregas puntuales. Devoluciones También conocido como logística inversa, este eslabón se encarga del retorno de productos defectuosos o no deseados. Incluye la gestión de devoluciones, reciclaje y disposición adecuada de los productos. Distribución Los productos se distribuyen a los puntos de venta o directamente a los clientes. Este eslabón abarca la coordinación de entregas, gestión de centros de distribución y servicios de última milla. Estructura de un sistema logístico Adquisición de productos La adquisición de productos configura la primera parte de la estructura de un sistema logístico. En esta etapa se obtienen los productos una vez que han completado el proceso de producción. O sea, una vez que salen de la fábrica o del lugar de producción. Se trata de una etapa en la que dichos productos son transportados desde estos puntos de producción a los almacenes en donde se conservarán en forma de stock hasta que sean demandados por los consumidores. Inventariado Una vez que los productos llegan al almacén, antes de ser guardados, deben ser inventariados. Es decir, deben ser registrados en las bases de datos de los almacenes con toda la información relativa a los propios productos y que pueda ser de interés. Esta información permite saber dónde se va a guardar el producto, así como la cantidad de unidades de la que se dispone y de las características particulares de cada producto. Esto permite un acceso rápido y eficaz a la hora de volver a requerirlos. Por ejemplo, una vez que se lleva a cabo la venta y que el producto deba ser enviado al consumidor. Almacenaje Una vez que los productos han sido correctamente inventariados, la siguiente fase del sistema logístico es el almacenaje. En esta fase el producto simplemente es guardado hasta que sea requerido. Esta fase es sencilla. Sin embargo, hay que tener en cuenta que, para que el producto pueda llegar en forma al cliente, este almacenaje debe ser realizado de acuerdo a las características de cada producto. O, lo que es lo mismo, teniendo en cuenta que las condiciones de almacenaje sean las adecuadas para cada producto. En la mayoría de los casos, no son necesarias condiciones particularmente especiales. Sin embargo, en otras habrá que tener en cuenta aspectos relativos a la temperatura, a la exposición a la luz, el nivel de humedad ambiental, etc. Embalaje y manipulación La siguiente etapa que gestiona el sistema logístico es el embalaje y manipulación del producto. Se produce después de que se haya completado la venta del producto. O sea, que el producto sea demandado por un consumidor. Cuando esto ocurre, el producto sale de la fase de almacenamiento (lo que es posible gracias a la labor de inventariado que se realizó previamente). Pero, antes de ser enviado al cliente, el producto debe ser embalado y manipulado. Es decir, preparado de forma adecuada para garantizar que el producto (o productos, en el caso de que la venta incluye más de un único producto) llega al cliente en la forma en que este lo ha demandado. Transporte y distribución La siguiente etapa del sistema logístico es el transporte y la distribución. Esta es la etapa más visible del sistema logístico, ya que es cuando el producto llega a las manos del consumidor. En esta etapa el producto es transportado desde el almacén hasta el consumidor, lo que implica que el pedido deba ser incluido en las rutas de reparto, lo que permitirá una distribución lo más eficiente posible y evitando sobrecostes. Logística inversa Aunque se puede pensar que el sistema logístico termina cuando el producto es recibido por el consumidor, existe una fase más que también forma parte del sistema: la logística inversa. Esta etapa tiene lugar cuando el producto no responde plenamente a las expectativas del cliente y, en consecuencia, se produce un cambio o devolución del producto. Entorno de desarrollo logístico El transporte permite la conectividad entre productores y consumidores, facilitando el acceso a mercados más amplios y diversificados. Además, contribuye a la globalización al posibilitar el intercambio de productos a escala mundial. La logística, por su parte, se encarga de planificar, coordinar y optimizar el flujo de recursos. Desde la producción hasta la distribución, minimizando costos y tiempos. Ambos juegan un papel esencial en la cadena de suministro. Lo cual incide directamente en la competitividad de las empresas, ya que una logística eficiente puede reducir costos y aumentar la velocidad de respuesta a la demanda del mercado. Mejorando de esta manera, la satisfacción del cliente, y generando un impacto positivo en la productividad. Incluso, la infraestructura logística bien desarrollada reduce costos, mejora la competitividad, y promueve el comercio nacional e internacional, aportando al crecimiento económico en áreas rurales y urbanas. Son dos motores esenciales de la economía moderna, al permitir el comercio, la especialización productiva y la eficiencia en la gestión de recursos. Los sistemas EDI (Electronic Data Interchange) El sistema EDI se utiliza para el intercambio electrónico de documentos. Con relación a la actividad logistica, la transmisión de documentos a través del sistema EDI se utiliza para distintos procesos como son: Previsiones de pedidos Confirmación de pedidos Avisos de expedición. Albaranes de entrega Bonos de recepción, etc… Las principales ventajas del sistema EDI son: Un ahorro importante de tiempo en los procesos implicados. Una reducción importante de errores Una reducción de costes administrativos (no sólo personal, sino también materiales como papel, correo, etc…) Los principales inconvenientes del sistema EDI son: Supone un coste elevado para las pymes, aunque esto está cambian con el tiempo. La asimetría de poder en las relaciones empresariales entre clientes y proveedores. Sistema de gestión de almacenes (SGA) Los sistemas de gestión de almacenes (SGA) son programas informáticos que se encarga del control, la gestión y la automatización de los procesos de los almacenes. Por tanto, a grande rasgos, entre sus funcionalidades tenemos: la recepción de materiales. el almacenaje. preparación y expedición de pedidos. Sistema de recuentos. En la practica, los sistemas de gestión SGA, como consecuencia de la automatización de procesos que conlleva su aplicación, controlan en tiempo real todas las operaciones de los almacenes utilizando como captación de datos los sistemas de radiofrecuencia y reconocimiento de voz. MRP (Materials Requirements Plannings) El MRP, se trata de un sistema diseñado para que se dispongan de los materiales necesarios en el momento oportuno para cumplir con las demandas de los clientes. El MRP tiene que calcular cuántos componentes se necesitan para satisfacer la demanda de productos finales por parte de nuestros clientes, y para ello debe establecer el Plan Maestro de Producción, lo que se traduce en una serie de órdenes de compra y fabricación de los materiales necesarios. Por tanto se trata de un sistema de planificación y control del inventario de materiales para satisfacer la demanda de nuestros clientes. ERP (enterprise resource planning) y SCM (supply chain management) Los ERP (Enterprise Resource Planning) son sistema integrados de datos, que gestiona todos los recursos internos de la empresa (dinero, personas, equipos, tiempo, espacio físico, etc.) a través de sus procesos de gestión y que proporcionan información de valor para la toma de decisiones de la empresa. Sistemas de gestión del transporte Los sistemas de gestión del transporte son los que recibe las órdenes de pedidos, confirma las fechas de envío, asigna los transportistas y establece la recogida y los plazos de entrega antes de liberar la orden al sistema de gestión del almacén para su procesamiento. Una vez que los pedidos se han recogido, embalado y enviado, el sistema gestiona su seguimiento, los fletes de transporte y las características del transporte. Las funciones básicas de estos sistemas incluyen: la selección de rutas (teniendo en cuenta la capilaridad y la variabilidad de la demanda) los horarios de entrega (en caso de internet suelen ser fuera del horario de trabajo) etc… Organización El proceso de organización logística es fundamental para el éxito de cualquier empresa o proyecto. Se trata de una estrategia que permite optimizar y coordinar de manera eficiente todas las actividades relacionadas con el flujo de bienes, desde su origen hasta su destino final. 1. Gestión de inventarios: Es fundamental mantener un control preciso y actualizado de los productos disponibles. Esto implica llevar un registro detallado de las existencias, así como prever la demanda y evitar tanto los faltantes como los excesos. 2. Almacenamiento: El lugar donde se almacenan los productos debe ser adecuado y seguro. Esto implica contar con instalaciones que cumplan con los requisitos de espacio, temperatura y condiciones necesarias para preservar la calidad de los bienes. 3. Transporte: Una vez que los productos están listos para ser enviados, es crucial planificar la mejor forma de transporte. Esto implica considerar factores como el tipo de mercancía, la distancia a recorrer, los costos y los tiempos de entrega. 4. Gestión de la cadena de suministro: Para asegurar un flujo eficiente de bienes, es esencial coordinar todas las partes involucradas en el proceso logístico. Esto incluye a proveedores, fabricantes, distribuidores y minoristas, quienes deben trabajar en conjunto para garantizar un abastecimiento adecuado y oportuno. 5. Optimización de rutas: En el transporte de mercancías, es fundamental encontrar la ruta más eficiente. Esto implica considerar factores como la distancia, el tráfico, las restricciones legales y las condiciones del camino, con el objetivo de reducir costos y tiempos de entrega. 6. Seguimiento y control: Una vez que los productos están en tránsito, es importante contar con sistemas de seguimiento que permitan monitorear su ubicación y estado en tiempo real. Esto facilita la toma de decisiones y la solución de problemas que puedan surgir durante el transporte. En resumen, el proceso de organización logística es esencial para garantizar el éxito de cualquier negocio o proyecto. Desde la gestión de inventarios hasta la optimización de rutas, cada etapa desempeña un papel clave en la cadena de suministro. Mantener una coordinación efectiva y utilizar herramientas tecnológicas adecuadas pueden marcar la diferencia entre el fracaso y el éxito en el ámbito logístico. ¿Qué son los modelos logísticos de distribución? El proceso de distribución es la etapa de abastecimiento por la que pasan los productos antes de llegar a los consumidores. Desde el punto de vista logístico, podemos encontrar varios modelos de distribución, que bien podemos organizar nosotros mismos dentro de nuestra empresa, o bien podemos contratar a una empresa externa para que se encargue de todo el proceso. Modelos logísticos de distribución Según la Faedis, podemos dividir estos modelos en cuatro tipos: Modelo descentralizado Quizás sea el modelo más utilizado. Su método consiste en que, una vez haya acabado la fase de fabricación, la mercancía pasa directamente a un almacén central, conocido como regulador. Una vez aquí, pasa nuevamente a transportarse a otros almacenes de proximidad o delegaciones, con el objetivo de acercar la mercancía a los puntos de venta. La gran ventaja de este modelo es el ahorro de tiempo que supone la cercanía entre almacén y el punto de venta. Por el contrario, su principal desventaja es que este modelo requiere de una gran infraestructura, por lo que resulta más caro. Modelo centralizado Al contrario que en el modelo descentralizado, aquí la necesidad de infraestructuras es mucho menor, por lo que se produce un mayor ahorro. En este modelo logístico de distribución, la mercancía, una vez salida de la fábrica, pasa a un almacén central. De él es desde donde sale una flota de camiones, cada uno con una ruta de distribución asignada para dar alcance a los clientes de las diferentes zonas. Distribución cross-docking Esto podría considerarse una versión del modelo descentralizado, pero sustituyendo los almacenes de proximidad por cross-docking (plataformas de carga y descarga). Aquí la mercancía no llega a almacenarse, sino que el fabricante entrega sus productos y los comerciantes lo reexpiden en menos de 24 horas, manteniendo el flujo de esa mercancía. Plataforma de consolidación Este modelo es usado cuando los fabricantes no producen la cantidad suficiente como para llenar su propia flota de transporte. De este modo, varios fabricantes reúnen su mercancía en un centro de consolidación y, desde allí, es distribuida a los clientes. Cómo elegir el tipo de modelo logístico de distribución que más me conviene A la hora de decantarnos por uno u otro modelo, debemos valorar y analizar los siguientes aspectos: Ubicación. En qué punto se encuentra el centro o los centros de fabricación, así como dónde se encuentran los puntos de destino a los que debe llegar nuestra fabricación. No es lo mismo una multinacional que una empresa que trabaja a nivel autonómico. Debemos analizar qué tamaño de mercado queremos abastecer para saber qué cantidad de almacenes necesitamos. Nivel de servicios. Aquí entra en juego la rapidez con la que queramos que nuestros productos sean entregados. Si trabajamos con tiempos de entregas muy cortos, quizás el modelo descentralizado o el cross-docking sean nuestra mejor opción. Medios de transporte. Analizar qué cantidad de flota de transporte necesitamos para nuestro servicio. Si, por ejemplo, llenar un camión con nuestra mercancía nos cuesta, lo más seguro es que la opción que más nos beneficie sea la plataforma de consolidación. INTEGRACIÓN LOGÏSTICA La logística integral es un modelo de organización y de gestión que aborda de manera global y sincronizada los diferentes departamentos, procesos, recursos y flujos relacionados con hacer llegar el producto final hasta el cliente. Por lo tanto, en la logística integral se gestionan desde las relaciones con clientes, proveedores y demás players del sector, hasta los procesos de recepción, almacenamiento, inventario, transporte y venta de mercancías e, incluso, el servicio de atención al cliente. El concepto de logística integral se suele manejar principalmente en la contratación de operadores logísticos, ya sean 3PL, 5PL o cualquier otro. Esto se debe a que a dichos operadores se les puede delegar un proceso logístico en particular o, en caso contrario, múltiples procesos de forma global (logística integral). Importancia de la logística integral La importancia de la logística integral tanto por parte de los operadores logísticos como de cualquier empresa radica en que esta permite: Optimizar los recursos de toda la cadena de distribución logística en un entorno colaborativo. Aprovechar las potencialidades de integración que ofrecen las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TICs en las empresas logísticas). Prever o corregir imprevistos en los procesos involucrados. Reducir los costos logísticos. Minimizar el impacto ecológico global de la actividad logística. Responder a las nuevas necesidades de servicio y atención al cliente. Expandir las operaciones hacia nuevos mercados de manera sostenible.