“Sagrada Familia, reflejo del amor de Dios” Colegio Santa Teresita del Niño Jesús Departamento: Lengua y Literatura. Profesora: Grace Sauterel Gajardo. “La casa de Bernarda Alba” un reflejo de la sociedad española de inicios del siglo XX La obra teatral “La casa de Bernarda Alba” fue escrita por Federico García Lorca. La historia transcurre a lo largo de los años de 1930 y el espacio macro en el que se desarrolla es en un pequeño pueblo de Andalucía. En cuanto a la temática de la obra, esta gira en torno al enfrentamiento entre la libertad y la autoridad. Por un lado, está Bernarda Alba, que representa la autoridad dentro de su casa. Es una mujer estricta y autoritaria que impone estrictas normas a sus hijas después de quedar viuda. Bernarda es la representación de las tradiciones y las normas sociales de aquella época. Por otro lado, están las cinco hijas de Bernarda que anhelan su libertad. Especialmente Adela y Martirio, que son las que más se rebelan contra las imposiciones de su madre. Adela incluso desafía el miedo que le tiene a su madre por sus ganas de vivir un amor prohibido. A lo largo de la obra, hay un constante choque entre el mundo cerrado y opresor que Bernarda quiere imponer en su casa, y los deseos de libertad y pasión que tienen sus hijas encerradas. Este enfrentamiento llega al punto máximo con la trágica muerte de Adela, que simboliza que en aquel contexto social era imposible para las mujeres alcanzar la libertad. Lorca usa este contraste entre libertad y autoridad para mostrar la opresiva situación de la mujer en la España de principios del siglo XX. Las mujeres estaban sometidas a rígidas normas sociales y morales que no les permitían ser libres. La obra hace alusión a un contexto sociocultural, puesto que a lo largo de la historia podemos apreciar que la mujer tenía cierto rol dentro de la sociedad de aquella época, esto se evidencia a través de los siguientes hechos o acciones: En el transcurso de la obra “La casa de Bernarda Alba” podemos reconocer diversas costumbres machistas, que estaban impuestas por la sociedad en aquellos años. Una de estas conductas es en la educación y costumbres que enseñaba Bernarda a sus hijas, como por ejemplo el hecho de que obligara a sus hijas a permanecer confinadas en su casa y él miedo que quería crear bernarda a sus hijas sobre cómo la sociedad las castigan si llegaran a cometer algún tipo de adulterio, también podemos apreciar la opresión que vivían las mujeres en esta época y gracias a esta opresión y el deseo de libertad que tenía Adela, es el surgimiento de otra tragedia que es el suicidio de esta misma, ya que en como se puede observar en la obra Adela soñaba con ser libre y esa libertad Bernarda no se la permitía y esto lo podemos apreciar de mejor manera al darnos cuenta que Adela estaba enamorada de pepe el Romano y se rebela contra las normas sociales y de su madre, ya que como bien sabemos pepe se casaría con su hermana mayor Angustia. Bárbara al enterarse de esto decide guardar la honorabilidad de su familia y decide decirle a Adela que pepe había sido asesinado lo que esto genera que Adela se quitara la vida, luego de esta tragedia podemos ver otro acto de machismo por parte de Bernarda al recalcar que “Sagrada Familia, reflejo del amor de Dios” Colegio Santa Teresita del Niño Jesús Departamento: Lengua y Literatura. Profesora: Grace Sauterel Gajardo. su hija Adela había muerto virgen lo que demuestra que pese a todo lo que estaba pasando quería seguir guardando la esencia de su familia, ya que como se mencionó antes, las mujeres no podían cometer algún tipo de adulterio. Otra de las acciones machistas que podemos encontrar en la obra es, el rol que debe cumplir las mujeres en la sociedad el cual era ser una buena ama de casa que se dedicara al cuidado del hogar y respetar el honor de la familia y esto iba de la mano con él casamiento ya que esto resguardaba el honor y sobre todo la reputación de la familia, ya que el matrimonio podía proporcionar más estatus económico a las familias, mientras que el rol del hombre era el que sustentaba la casa, un ejemplo claro de esto es una frase dicha por Bernarda la cual es “Hilo y agujas para las hembras, látigo y mula para el varón” (min 12:45 — 12:50), esto da a entender que se espera que la mujer cumpla con tareas domésticas, mientras que el hombre realice los trabajos físicos. La obra pertenece al género dramático, y el subgénero corresponde al drama, lo que se puede evidenciar a través de las siguientes características presentes en la obra. En primer lugar, y como uno de los rasgos más evidentes, está el realismo del lenguaje. Que aunque la obra contiene elementos cómicos, como lo podrían ser las expresiones de Poncia, también se mantiene un lenguaje un poco más realista. Y por lo que podemos dar cuenta, la obra, de igual manera, evita los aspectos míticos propios de la tragedia antigua y se adhiere a una representación un poco más cercana a lo que es la vida cotidiana, lo cual es una característica típica del drama. Por otra parte, también tenemos los temas abordados dentro de la obra, como lo son la moral tradicional, la presión social sobre las personas, las diferencias sociales y la condición de la mujer en la sociedad española de la época. Estos conflictos derivan directamente de las normas y estamentos impuestos directamente por el hombre, no como a diferencia de lo que es la tragedia o la comedia, ya que en este caso los conflictos no se solucionarán de una forma que acomode a todas las partes ni tampoco están impuestas por un ser divino o superior. En cuanto a la estructura interna, la historia empieza con la presentación del conflicto inicial, ya que no contextualiza sobre la muerte del segundo esposo de bernarda, y como está impone a sus hijas un luto intenso que tendrá que durar 8 años, y como sus hijas no están de acuerdo a este duelo sobre todo su hija mayor Angustias, puesto que ella no era hija del esposo fallecido de bernarda sino que era hija del primer esposo de esta, pero ninguna se atreve a rebelarse a bernarda excepto Adela que si bien su revelación total es en el segundo acto, ya podemos ver que en el primero trata de revelarse al querer quitarse el luto y colocarse su vestido verde del día de su cumpleaños, y muestra su deseo gran deseo de salir a pesar de que su madre Bernarda se los haya prohibido. En el relato es posible conocer a varios personajes secundarios tales como Poncia, que es la criada de confianza de Bernarda y lleva trabajando para ella durante 30 años. Tiene una relación compleja con ella, generalmente marcada por la confianza, pero también el trato autoritario de Bernarda, aunque Poncia conoce todos los secretos de la familia. También está “Sagrada Familia, reflejo del amor de Dios” Colegio Santa Teresita del Niño Jesús Departamento: Lengua y Literatura. Profesora: Grace Sauterel Gajardo. María Josefa que es la anciana madre de Bernarda. Tiene una relación difícil con su hija, quien la mantiene encerrada por su locura para no dañar la reputación familiar. María Josefa representa un contraste a la personalidad de Bernarda, con su alegría y libertad. Luego está Prudencia que es una amiga de Bernarda. Su relación se basa en pertenecer al mismo círculo social de mujeres respetables del pueblo, a este personaje lo conocemos, ya que acude a casa de Bernarda a visitarla. Por su parte, el nombre de la protagonista es Bernarda Alba. Bernarda era una mujer de 60 años, viste siempre con vestidos negros y tacos de este mismo color. Es una persona con un carácter muy fuerte, es una persona autoritaria y dominante, una persona muy estricta con sus hijas. También nos podemos dar cuenta que es una persona que sé mucho por el que dirá la gente y la imagen de su familia ante la sociedad. En cuanto a las acciones principales que desarrolla su protagonista para resolver el conflicto, se pueden mencionar cuatro: a) Tras la muerte de su esposo, Bernarda impone a sus cinco hijas un luto estricto de ocho años. Durante este período, les prohíbe terminantemente cualquier tipo de relación con hombres y las obliga a vestir ropas negras en señal de duelo, restringiendo así su libertad y contacto con el mundo exterior. b) Bernarda oculta a su propia madre, María Josefa, encerrada en una habitación para evitar que sea vista por las mujeres del pueblo. Esto se debe a que María Josefa sufre de locura, y Bernarda teme que su comportamiento errático pueda dañar su reputación y la de su familia ante los ojos de la sociedad conservadora en la que viven. c) Ante las crecientes tensiones y peleas entre sus hijas, especialmente por los celos que despiertan en torno a Pepe el Romano, Bernarda decide acelerar los preparativos para la boda de su hija mayor, Angustias, con Pepe. Ella cree que, casándola rápidamente, se evitarán más conflictos y disputas entre las hermanas. d) Bernarda vigila de cerca a sus hijas con un ojo crítico, intentando mantenerlas “dulces y educadas” según los estrictos códigos de conducta femenina que ella impone. Su objetivo es controlar sus comportamientos y reprimir cualquier indicio de rebeldía o deseo de libertad. El clímax de la obra llega a un punto crítico cuando Bernarda descubre que su hija menor, Adela, ha mantenido un romance clandestino con Pepe, el prometido de su hermana Angustias. Cegada por la ira y la deshonra, Bernarda toma una escopeta y entra furiosa en el corral, donde se escucha un disparo, lo que lleva a todos a creer que ha matado a Pepe. Tras esto, se desencadena el desenlace trágico, donde se nos relata que Adela, convencida de que su madre realmente ha asesinado a su amante Pepe, se encierra en su habitación y se quita la vida, sumida en la desesperación. En cuanto a la estructura externa de la obra, esta cuenta con 3 actos, que se desarrollan en un tiempo aproximado de 1 hora 20 minutos. El cuadro o escenografía presente en la obra es “Sagrada Familia, reflejo del amor de Dios” Colegio Santa Teresita del Niño Jesús Departamento: Lengua y Literatura. Profesora: Grace Sauterel Gajardo. principalmente la sala de la casa de Bernarda, en dicho sitio suceden la gran mayoría de las acciones de la obra. Respecto de los recursos empleados, podemos señalar el uso de personajes tipo, entre los que cabe reconocer a “El Galán” y “El compinche” visualizados, a través del personaje de Pepe el Romano y Poncia, podemos dar cuenta de que, en el caso de Pepe el Romano, este encarna a la perfección el personaje tipo del mujeriego en la obra, ya que, por un lado, mantiene relaciones amorosas paralelas con Angustias, con quien está comprometido, y con Adela, la hermana menor de esta misma con quien sostiene un romance secreto, demostrando su doble juego amoroso característico de los mujeriegos. Podemos deducir según lo que se menciona en la obra que su atractivo despierta la pasión y el deseo en las mujeres, generando celos y envidias entre las hermanas que lo desean. Además, se insinúa que Pepe tiene un poder económico inferior al que posee Angustias, lo que convierte a esta misma en un partido atractivo para Pepe, quien ansía mejorar su estatus y poder adquisitivo mediante el matrimonio. Para Adela, reprimida por las estrictas normas de su madre, Pepe representa la tentación prohibida de la libertad y el romper esas reglas que siempre se la han sido impuestas, aumentando su atractivo como amante clandestino. La presencia de Pepe y sus enredos amorosos con las hermanas desencadenan gran parte de los conflictos centrales de la obra, sembrando la discordia y disputas por su atención, un papel típico de estos personajes, que siembran la semilla de las pasiones desatadas en las mujeres. En el caso del personaje de Poncia, encaja en el arquetipo del “compinche” debido a su estrecha relación de confianza y lealtad con Bernarda, la protagonista, a pesar de la tensión y complejidad que caracteriza su vínculo de ama y criada. Esta complicidad inquebrantable se forja a lo largo de los 30 años que Poncia ha trabajado para Bernarda, convirtiéndose en su confidente y conocedora de todos los secretos y problemas de la familia, gracias a lo cual Bernarda la mantiene cerca y deposita en ella su confianza, a pesar del trato autoritario que le da. Poncia encarna así el papel del “compinche” fiel e indispensable para el protagonista, un aliado clave cuya lealtad es inquebrantable, forjada a través de décadas de convivencia y complicidad, lo cual la convierte en un personaje crucial para el desarrollo de la trama y los conflictos familiares de la obra. Además, se emplean en el relato algunos tópicos literarios, con el fin de enfatizar la temática planteada, de estos podemos identificar el tópico del “Tempus irreparabile fugit” y al “Furor amoris”. En el primero de los tópicos, se hace referencia al tiempo irreparable que huye, que se aprecia claramente en el personaje de Angustias. Ella era una mujer sumisa ante su madre y conformista con su situación, tan resignada que prácticamente olvidó que existía un mundo más allá de los límites impuestos por Bernarda. Su conformismo era tal que podemos decir que dejó pasar el tiempo sin darse cuenta de las responsabilidades sociales que nunca cumplió, como casarse. A lo largo de la obra, se menciona que Angustias, a pesar de tener casi 40 años, nunca había recibido una propuesta de matrimonio. Es evidente que, al igual que sus hermanas, había experimentado muy poco de la vida debido a las estrictas normas impuestas por su madre. Cuando finalmente abre los ojos a la realidad, cae en cuenta de que el tiempo ha pasado sin “Sagrada Familia, reflejo del amor de Dios” Colegio Santa Teresita del Niño Jesús Departamento: Lengua y Literatura. Profesora: Grace Sauterel Gajardo. que ella haya cumplido con ciertas expectativas que sociedad esperaba de ella solo por ser mujer. En este personaje podemos encontrar muy marca esa idea del “tempus irreparabile fugit”, el tiempo que se escapa sin remedio, dejando pasar oportunidades y experiencias que nunca podrán recuperarse. Su sumisión y conformismo la llevaron a desperdiciar años cruciales de su vida, sin darse cuenta hasta que fue demasiado tarde. En cuanto al segundo tópico, este se refleja en el personaje de Adela, quien representa la pasión del amor en la historia. Esto se evidencia en el intenso sentimiento amoroso que alberga hacia Pepe el Romano. Adela también encarna el deseo, y el anhelo más profundo que la consume es el ansia por la libertad. A lo largo de la trama, ella lucha incansablemente por sus ideales y por preservar su amor prohibido con Pepe, dispuesta a todo con tal de mantener esa relación clandestina. Un claro ejemplo de esto es su trágico suicidio, provocado por la mentira de su madre, quien le hace creer que ha asesinado a Pepe. Consumida por la desesperación ante la supuesta pérdida de su amado, Adela decide quitarse la vida, demostrando así la fuerza arrebatadora de su pasión y deseo. A partir de lo leído, se puede establecer que la obra sigue siendo relevante hasta nuestros días debido a su exploración de temas universales como la opresión, la represión y la búsqueda de libertad personal, temas que han logrado resonar inclusive en la sociedad contemporánea actual. De igual forma, a lo largo de los años, esta obra ha generado diversas interpretaciones, al igual que controversias más que nada referida a la “moralidad”. Algunas de las interpretaciones que se le ha dado a esta obra se centran principalmente en los aspectos feministas, mientras que otras exploran la psicología de los personajes. Las controversias a menudo se relacionan con la representación de la sexualidad y la moralidad en la obra. En cuanto a la motivación del autor para escribir este relato, es probable que la razón principal por la que el autor Federico García Lorca escribió este relato fue para retratar y denunciar los problemas y tensiones sociales que existían en España en el año 1936, justo antes de que comenzara la guerra civil española. Lorca era un escritor e intelectual muy comprometido con los temas de su época. Estaba muy atento a las injusticias y desigualdades que sufría la gente en la sociedad española de aquel tiempo. En sus obras, quería reflejar la cruda realidad y darles voz a los grupos más desfavorecidos y oprimidos. Antes de la Guerra Civil, España vivía una situación de muchos conflictos sociales, políticos y económicos. Había fuertes tensiones entre la izquierda y la derecha, los obreros reclamaban sus derechos, la Iglesia y los terratenientes tenían mucho poder. Todo esto dividía mucho al país. Gracias a esto Lorca plasmó en este relato las dificultades de aquella España tan agitada. En esta obra retrató las injusticias y la opresión que sufrían las mujeres de la época, cumpliendo su objetivo principal, que era denunciar estas acciones y generará conciencia en la sociedad a través de sus obras. “Sagrada Familia, reflejo del amor de Dios” Colegio Santa Teresita del Niño Jesús Departamento: Lengua y Literatura. Profesora: Grace Sauterel Gajardo. Por lo anterior, la obra “La casa de Bernarda Alba” es recomendable, ya que esta obra, de Federico García Lorca, es una tragedia profundamente humana que explora temas universales como la represión, el deseo, los roles de género y el choque entre tradición y modernidad. A través de personajes memorables y un diálogo intenso y poético, el autor crea un retrato cautivador de una familia de mujeres atrapadas en un mundo opresivo dominado por la figura autoritaria de la madre. La tensión hierve lentamente a medida que se desarrollan los conflictos entre las hermanas, revelando las contradicciones y frustraciones que enfrentan en su encierro. Lorca aborda estos temas difíciles con sensibilidad, ofreciendo diferentes perspectivas sobre la condición de la mente humana. La prosa de este texto es lírica y cruda a la vez, evocando imágenes vívidas de la vida en la sociedad española y los estragos emocionales provocados por la represión. Esta obra es una exploración de la libertad individual frente a las convenciones sociales opresivas, y una denuncia de la hipocresía y la crueldad de la sociedad de la época. Esta es una obra que se recomienda encarecidamente, ya que al sumergirse en este drama trágico y llamativo, sin duda dejará una impresión duradera en el lector. Finalmente, podemos decir que esta es una obra que se rige firmemente por el machismo y patriarcado de la época. Una obra que refleja el control masculino que tienen las mujeres, y a pesar de que no haya mucha presencia masculina, se siguen rigiendo en nombre del difunto esposo de Bernarda. También podemos encontrar la opresión femenina que sufrían las hijas de Bernarda y la poca libertad que las mujeres tenían. El rol que tenían estas en la sociedad también es un pensamiento en extremo patriarcal, ya que constantemente se deja en claro la división estricta de los roles de género, donde la mujer se veía en la obligación de permanecer en casa y desarrollarse sólo en el ámbito doméstico, realizando tareas manuales y sumisas, mientras que al hombre se le asignaban las labores de fuerza, autoridad y el mundo exterior, esto lo podemos ver reflejado firmemente en la siguiente frase “Hilo y agujas para las hembras, látigo y mula para el varón”. Escrito por Sofía Díaz y Antonia Guajardo. Santiago, 4 de junio de 2024.