LICEO NARCISO TONDREAU DE CHILLAN Breve Historia Sergio Gana Lagos UNIVERSIDAD DE CONCEPCION - UNIVERSIDAD DEL 810810 1. MUNICIPALIDAD DE CHILLAN 1999 111111111 028948 CUADERNOS DEL BIO BIO Hilario Hernández Sergio Lavanchy Rector Rector Universidad de Concepción Universidad del Bío-Bío Alejandro Witker Director CONSEJO ASESOR María Nieves Alonso Mario AlaTcón Bemey Santiago Araneda Ju an Gabriel Araya Alfredo Barrla Sergio Carrasco Andrés Gallardo Tulio Gonl.ález Luis Guzmán Molina Carlos René lbac3che Arodys Lepe OscarParr3 Marco Aurelio Reyes Vladimir Sánchez Armando Cartes Roberto Conlreras Antonio Femández Fotografía Claudia Arrizaga Promotor Claudio Cortés Arte Osear Lermanda Investigador Rabinson Silva Secretaria Rosa Torres Oficinas de la Dirección: 18 de Septiembre 580 - 3 piso. Telefono (56)42-215 335 Chillán-VIII Región-Chile Agencia Distribución: Emilio Rojas 424 Fono-Fax: (56)41-360764 Casilla: 1492 Concepción-VIII Región-Chile Cuadernos del 810-810 (Obra Completa) IS8N N° 956-227-1 14-5 Cuadernos N" 25 Liceo Narciso Tondreau.Chillan ISBN N° 956·78'16-()(}.3 Registro de Propiedad Intelectual N" J08617 Impreso por Ararnis Cortés- Editorial Logos. Fono2220871-Santiago-C hile TiraJe 2.000 Ejemplares IMPRESO EN CH ILE - PRINTED IN CHIL E Vive las más grandes aventuras leyendo libros , revistas, comics, novelas, internet, cuentos, historias, historietas, poesías, antologías, mitos, leyendas, diarios, suplementos, cartas, bl09rafías, recetas, folletos, libretas; en familia, de a dos, con amigos, solo; en tu casa, en la micro, en la playa, en el campo, en la montaña, en la cancha, donde tú quieras. A SECROUIA MIIIISTERIAl DE EDUClCIDII n....'. y ~ .IB'... PARA CONSU LTAS E INFORMACIONES LLAME SIN COSTO AL 800-201 233 Sergio Gana Lagos Profesor de Estado en Ciencias Biológicas y Química. Licenciado en Filosofía. Ex~profesor de la Universidad de Chile (sede Chillán). Ex~Rector del Liceo de Hombres de Chillán. Miembro de la Sociedad Chilena de Historia Natural. Autor de numerosos trabajos de investigación; por ejemplo: Aves de los alrededores de Quirihue, publicado en la "Revista Chilena de Historia Natural". En la revista "Vigia" de la Armada de Chile ha Publicado: Artefactos litlcos utilizados por los antiguos araucanos. Animales domésticos de {os aborígenes chilenos precolombinos. Isla de Pascua, cien años de soberanía. Primera circunnavegación en globo. Ahora nos entrega esta breve historia del Liceo Narciso Tondreau de Chillán publicado bajo los auspicios de la 1. Municipalidad de Chillán. PRESENTACION El Liceo de Hombres de Chillén, fundado en 1853, es uno de los mas antiguos del país. En sus aulas enseñaron maestros ilustres que lograron frutos admirables: no menos de un centenar de sus alumnos han brillado en la vida nacional como estadistas, parlamentarios, escritores, juristas y militares. Un plantel educacional de tan notable trayectoria merece ser conocido y reconocido' por las nuevas generaciones y la sociedad toda en tiempos en que se hacen grandes esfuerzos para devolverle a la educación pública la dignidad y la eficacia que por largos años se perdía. La reconstrucción de esta historia es tarea fácil cuando poco se hizo para preservar la memoria de sus obras: no existe en Chillán colecciones de sus magníficas revistas Ratos Ilustrados y Rumbos, tampoco archivos fotográficos y registros informados de sus profesores y alumnos destacados; por eso, la ciudad debe agradecer al profesor Sergio Gana Lagos, que tan gratos recuerdos dejó en su paso por el Liceo por su sólida formación intelectual y nobleza de vida, este esfuerzo inicial . que ponemos en circulación este día. Confiamos que este aporte estimule nuevas investigaciones y desde luego la creación de un verdadero Archivo Histórico anexo a la Biblioteca del Liceo. Esta recuperación histórica inicial debe también ser considerada como un homenaje a una figura que por 28 años fue el gran conductor del Liceo y Animador de la vida cultural chi1laneja; el profesor Narciso Tondreau Valin, con quien la ciudad está en deuda por cuanto su recuerdo merece mucho más que el nombre que se ha dado al Liceo de Hombres de Chillán. Finalmente, la Municipalidad de Chillán se complace participar en el proyecto editorial Cuadernos del Bio Bic, creada por la Universidad de Concepción y abierta a todas las comunas de la Región para impulsar la hermosa tarea de recuperar nuestras raíces como cimiento del gran horizonte que nos anima: el bienestar, la ilustración y la libertad de todos. ALDO BERNUCCI. Alcalde Municipalidad de Chillán IN Die E Pág. 7 Introducción . . Su fundación 9 Sus primeros pasos (1853-1897). 10 Rectorados desde 1897 a la fecha ". ............. 15 Comité Centenario. 22 Ex profesores distinguidos. .32 Ex alumnos distinguidos. 33 Homenaje a don Narciso Tondreau . 34 Nec,esidades más urgentes del Liceo. .34 Bibliografía " 35 Anexos Anexo 1: Biografía de don Narciso Tondreau Valin . 38 Anexo 2: Semblanza de don Eugenio María de Hastas . 44 Anexo 3: Breve historia del Internado .... 47 Anexo 4: Entrevista a un ex Rector " 50 Anexo 5: Discurso de un ex alumno O" Anexo 6: Carta de un ex Vicepresidente de la República. Anexo 7: Recuerdos de un ex profesor del Liceo. Anexo 8: Carta de don Pedro Contreras Valderrama.,.. Anexo 9: Carta a un alumno del Liceo de Chillán.. 56 59 61 . ... 64 65 Ane,xo 10: Ratos Ilustrados.. 69 Anexo 11 ; Himno del Liceo de Hombres de Chillán.. 72 Anexo 12: Himno del Liceo Nocturno Mixto "Bernardo Q'Higgins"... 73 Anexo 13 : Docentes directivos actuales.. 74 31 ~. í j2 G l o>1 12.::-'~ 1 ,"e INTRODUCCION Un liceo que tiene, a la fecha, 145 años de existencia y de labor educativa y que ha sido dirigido hasta hoy por 27 rectores, sin duda que tiene una historia digna de ser conocida. Con s610 pensar en los miles y miles de alumnos que han pasado por sus aulas y los centenares de profesores que han prodigado su saber, experiencia y cariño a tantas generaciones de educandos, podremos darnos cuenta de lo que ello significa. Empezó con 20 alumnos y un solo profesor; hoy tiene 1.690 alumnos y 72 profesores. Durante mucho tiempo no dispuso de edificio propio y cuando por tin, lo tuvo, un terrible terremoto lo destruyó por entero, con todas sus instalaciones y materiales didácticos. Durante mucho tiempo no tuvo Internado. Hoy dispone de un excelente edificio asísmico de tres pisos y de un moderno y cómodo Internado. Y todo esto se ha conseguido con el esfuerzo, trabajo y sacrificio de todo el Liceo, de su Centro de Padres y Apoderados y de notables vecinos chilIanejos, muchos de ellos ex alumnos, que quisieron ver a su liceo resu rgi r después de la tragedia de 1939. Escribir esta reseña histórica no ha sido empresa fácil. Casi todo el archivo documental del Liceo se perdió con el terremoto de ese año, incluyendo las Actas de Consejos de Profesores. Maestros antiguos ya no quedan y datos históricos sobre el liceo hay muy pocos y están diseminados en revistas y diarios. Por fortuna existe una reseña escrita por el distinguido ex Rector don Narciso Tondreau que llega hasta 1918, y cada 16 de mayo, día aniversario del Liceo, el diario La Discusión de Chillán, cuyo ex director, don Alfonso Lagos Vi llar, ya fallecido, fue alumno del establecimiento, ha ido publicando valiosas informaciones sobre este antiguo colegio. Además he dispuesto de una biografía de don Narciso Tondreau escrita como tesis para optar al tftulo de Profesor de Estado en Historia y Geografía por el alumno Bartolomé Rojas Espinoza, de la Universidad del Bío-Bío, Campus Chillán, en 1991. Si a esto se agrega que el autor de esta historia del Liceo-fue alumno, profesor, Inspector General, Vicerrector y Rector del establecimiento y que tuvo siempre el cuidado de anotar cuanto dato fidedigno y de interés llegaba a sus oídos, se comprenderá como pudo escribirse este trabajo. Quiero expresar mis sinceros agradecimientos a todas las personas que me ayudaron a realizar este esfuerzo y, en forma especial, al Departamento de Publicaciones de la Universidad de Concepción (Cuadernos del Bio Bío) que dirige el ex alumno del Liceo, Or. Alejandro Witker Velásquez, y a la Ilustre Municipalidad de Chillán que ha patrocinado su publicación. SU FUNDACION El liceo de Hombres de Chillán figura entre los establecimientos de educación media más antiguos de la República. El siguiente es, textualmente, el Decreto Supremo de su fundación: Santiago, 7 de marzo de 1853 _ Atendiendo a la necesidad de que en la Provincia de Nuble haya un establecimiento en que la juventud pueda adquirir conocimientos de un orden superior a los que se dan en las escuelas primarias y prepararse para seguir las carreras profesionales, vengo en acordar y decre- to: l' Se establece en Chillán un Liceo en el que se enseñará el curso de Humanidades del Instituto Nacional. 2' 3' 4' Habrá en este establecimiento alumnos internos y externos. La instrucción será gratuita para los últimos, debiendo los que formen la sección del Internado pagar la pensión que se designe por el Reglamento. Se aplica a fondos del Liceo _de Chillán el producto de las mandas forzosas de la Provincia de Nuble y la suma que se consulte para este establecimiento en el presupuesto de Instrucción Pública. Por Decreto separado se determinará el plan de sueldos y se dará el Reglamento para el Liceo de Chillán. Tómese razón y comuníquese Manuel Montt, Silvestre Ochagavía Designado el Rector que había de dirigirlo, nombramiento que recayó en el profesor Pedro Matus, el Liceo empezó a funcionar el 16 de mayo de 1854. Así lo testifica el Rector en el Acta que levantó a poco de empezar las clases del nuevo establecimiento y que dice lo siguiente: "Procedí a la planteación del Liceo de esta ciudad el 8 de mayo de 1854, día en que los alumnos principiaron a matricularse. El 16 del mismo mes quedaron instaladas las clases de Latín, Geografía, Aritmética y Religión. El Liceo principió a funcionar con 20 alumnos", Chillén, mayo 22 de 1854. Pedro Matus 9 Así pues, aunque el Liceo fue fundado el 7 de marzo de 1853, como lo indica el Decreto respectivo, las fiestas aniversarias se cele~ bran el 16 de mayo de cada año, fecha que corresponde al día de la iniciación de las clases en 1854. Este cambio ha sido necesario porque el 7 de marzo los colegios, en general, están, todavía , organizando su labor pedagógica y, en una semana, es imposible preparar un festejo aniversario como lo merece un Liceo como el nuestro. sus PRIMEROS PASOS (1853-1897) Los comienzos del Liceo fueron difíciles. En 1855 contaba con una matrícula de 50 alumnos, cuya edad fluctuaba entre los ocho y los veintiún años. El 2 de mayo de 1856 se hizo cargo de la Rectoría del Liceo el profesor Abraham Siredey. En esa fecha el Liceo no tenía más personal que el Rector y el portero; el sueldo del primero era de $66 mensuales, mientras el portero ganaba $60 al año. El Rector era, por lo tanto, el único profesor. A mediados de 1856 se nombró un inspector y en el año siguiente, un profesor auxiliar que fue, según lo reconoce el . propio profesor Siredey en una Memoria presentada por él al Supremo Gobierno, "de una eficacia manifiesta en la marcha de las clases y adelanto de los alumnos". El número de alumnos en 1856 no pasó de treinta, de los cuales apenas quince rindieron exámenes. Esto se debía a que, en ese tiem~ po, existía la costumbre de retirar del colegio a muchos alumnos, cuyos padres eran agricultores, al empezar la época de las labores rurales. El liceo no tenía casa propia, sino que ocupaba locales arren· dados que, naturalmente, no podían ser ni cómodos ni adecuados. Tampoco tenía el liceo Reglamento alguno, de modo que la acción del Rector se ajustaba, únicamente, a los dictados de su conciencia. El Reglamento fue dictado el 6 de noviembre de 1858. En ese mismo año se agregó al plan de estudios la asignatura de Francés. En 1860 contaba el Liceo con los tres primeros años de Humanidades y la matrícula alcanzó a 77 alumnos, de los cuales más de 40 rindieron exámenes. El Liceo contaba ya con seis profesores. Con fecha 1 de diciembre de 1860 se dictó un Decreto Supremo que declaró válidos, para los efectos de los grados universitarios, los exámenes rendidos en el liceo de Chillán. El profesor Abraham Siredey dirigió el Liceo hasta mediados de . 1864, entregando el cargo al profesor don Bernardo Sepúlveda, quien asumió la Rectoría con el carácter de interino. En marzo de 1866 se nombró Rector del Liceo al profesor Bernardino Ahumada Moreno, quien, a poco de hacerse cargo de la dirección del colegio, enfermó de gravedad y falleció repentinamente , el 17 de abril del mismo año. Le sucedió el profesor Justiniano Adrover, que se hizo cargo de 10 su puesto de Rector en el mes de mayo de 1866. Su primera preocupación fue establecer un curso de Preparatoria, con lo cual se daba nacimiento a lo que se llamó "Escuela Anexa" del Liceo. Un Decreto Supremo de fecha 4 de junio de 1866 ordenó su creación. Su matrícula se completó con los alumnos del primer año de humanidades que tenían una deficiente preparación y que fueron rebajados de curso, y con los alumnos nuevos que ingresaban. También se preocupó el profesor Adrover de pedir al Supremo Gobierno el envío de textos de estudio, de los cuales carecían totalmente los educandos. La matrícula en 1866 alcanzó a 72 alumnos. El horario de asistencia era el siguiente: Mañana, 7 a 11; tarde, 12 a 5. Había horas de estudio, horas de clases y recreos convenientemente distribuidos. El profesor Adrover obtuvo la creación de una segunda plaza de inspector, cuya falta se hacía muy notable. También redactó un nuevo proyecto de Reglamento que fue aprobado por el Gobierno por Decreto del 24 de agosto de 1866. La preocupación más importante del profesor Justiniano Adrover fue la de dotar al Liceo de un edificio propio, más amplio y más apropiado, gestión en la que obtuvo pleno éxito. En mayo de 1864 la Municipalidad de Chillán había cedido para el futuro edificio del Liceo media manzana en calle Libertad entre Rozas y Buenos Aires (actual Avda. Bdo. O'Higgins) y, en junio de 1867, a petición del profesor Adrover, cedió la otra mitad. El Supremo Gobierno, con fecha 5 de marzo de 1868, decretó la construcción del edificio en la forma que indicaba el profesor Adrover, aprobó el presupuesto de la obra que ascendía a $20.600 y ordenó que se empezaran Jos trabajos con los fondos que, generosamente, habían erogado los vecinos y el Municipio para el objeto. El mismo Decreto estipulaba que, cuando esos fondos se hubieran agotado, la obra continuaría con los dineros que destinara el Gobierno. C~~~iÓ~~:~~o ~i~ll~~~~,a~~~~ ~Oa~See?~~~~tl~~ e~f;o~~~úo~:~~~vd~ fue la la Biblioteca Popular de ChiIJán que pasaron al Liceo por Decreto de fecha 25 de agosto de 1866. En 1868 el número de volúmenes había subido a 850, debido a la adquisición de varios libros con dineros fiscales y con una pequeña subvención municipal. El profesor Adrover dirigió el establecimiento hasta el 11 de enero de 1871, fecha en que abandonó el Liceo para hacerse cargo de la Rectoría del Liceo de Valparaíso. Entre el 1 de marzo de 1871 y el 1 de marzo de 1872 dirige el Liceo el profesor Francisco Aravena , quien entrega la Rectoría al profesor Francisco García, que la desempeña entre el 1 de marzo de 1872 Y enero de 1873, fecha en que es nombrado Rector del Liceo de Ancud. Desde 1866 la matrícula del Liceo ha experimentado las siguientes alternativas: 1866 .... .................................. 72 alumnos 11 1867 .. 1868 .... 1869. 1870 1871 ..... . 1872 .. 100 103 88 107 90 78 En enero y febrero de 1873 estuvo a cargo del Liceo, en calidad de Rector accidental, el profesor Angel Rosendo Turrieta. El 1 de marzo de 1873 se hizo cargo del Liceo el profesor libaría Manterala, quien . estuvo al frente de la Rectoría durante 15 años consecutivos, dando pruebas de una laboriosidad y de una competencia verdaderamente ejemplares. Su primera preocupación fue acometer la empresa de dotar al liceo de una sección de Internado que hacía mucha falta, al extremo de que muchos padres, residentes en el campo, se veían obligados a mandar a sus hijos, a costa de grandes sacrificios, a estudiar a Santiago o a Concepción. Pero elloeal que comenzara a construir el profesor Adrover aún se encontraba inconcluso. Propuso entonces el profesor Manterola que el Gobierno, a partir de 1873, destinara todos los años $10.000 para la continuación de la edificación, obteniendo el primer año esa suma, la que unida a algunos aportes de los vecinos y de la Municipalidad, le permitió hacer avanzar notablemente los trabajos. En 1875 el aporte fiscal fue sólo de cinco mil pesos, con los cuales se terminó de poner techo a toda la parte correspondiente al patio principal y se hicieron, además, la sala destinada a la capilla y dos patios interiores, uno de los cuales se destinó a cocina. En 1877, por fin, el edificio se encontraba más o menos apto para recibir alumnos internos. Un Decreto de fecha 2 de marzo de 1877 . autorizaba este paso y fijaba el número de alumnos internos en 25 como mínimo, que no se alcanzó a completar, entre otras causas, porque ya muchos niños habían sido matriculados en Concepción, donde el costo de la pensión era de $150 anuales, mientras que el Internado del Liceo de Hombres de Chillán cobraba $200 al año. El profesor Manterola consiguió que la pensión se bajara a $170, pero ni con esta medida logró que el Internado se abriera en 1878 debido a la crisis que azotaba al país y que afligió notablemente la economfa de los hogares. En 1879, habiéndose declarado la guerra con Bolivia y el Perú, el Gobierno ordenó que parte del local del Liceo fuera entregada al comandante general de Armas de la provincia para que sirviera de cuartel militar. Esta dura situación para el liceo terminó en 1885, año en que la matrícula alcanzó a 281 alumnos. Le cupo al profesor Manterola el honor de iniciar la instalación de los gabinetes de Física y Química, asignaturas que se habían incorporado al plan de estudios del liceo en 1874. Con su propio sueldo 12 compró los aparatos más indispensables mientras llegaban de Eur.opa los gabinetes que había encargado el Supremo Gobierno. En noviembre de 1877 llegó la primera remesa y en marzo de 1878 la segunda. Para mayor fortuna , el general chillanejo don Pedro Lagos envió desde Lima, en 1881, una importante partida de aparatos de física destinada al Liceo de su tierra natal. Con estos materiales las clases de física pudieron hacerse en forma experimental para mayor comprensión y aprovechamiento de los alumnos. El Gabinete de Ciencias Naturales tuvo su origen en una colección de minerales y muestras de geología obsequiadas por el general Pedro Lagos. Luego, en febrero de 1883, otro hijo ilustre de Chillán, el Dr. Federico Puga Borne, director del Museo de Valparaíso y Rector del Liceo de esa ciudad, envió varios ejemplares zoológicos embalsamados que vinieron a enriquecer el naciente Gabinete. El Gobierno se encargó, por su parte, de enviar colecciones de cuadros didácticos en colores que constituyeron auxiliares poderosos para la enseñanza de las Ciencias Naturales. La Biblioteca fue también motivo de permanente preocupación del profesor Manterola, quien la incrementó notablemente hasta completar en abril de 1888 un total de 2.236 volúmenes. En marzo de 1875 obtuvo el nombramiento de un bibliotecario. EI21 de mayo de 1885, durante el rectorado del profesor Manterola , se fundó en el Liceo la institución denominada "Bienestar Estudiantil", cuya alta finalidad social fue ayudar a los alumnos procedentes de familias de escasos recursos. Puede apreciarse, pues, cuán provechosa fue la labor del profesor Manterola como jefe del Liceo de Hombres de Chillán y cuántos progresos le debió este colegio a su acción inteligente y perseverante. El 24 de abril de 1BBB dejó la ciudad de Chillán para hacerse cargo de la Rectoría del Liceo de la ciudad de Tacna. Por Decreto Supremo de fecha 18 de abril de 1888 fue nombrado Rector del Liceo el profesor Eugenio María de Hostos, quien no se hizo cargo de su puesto, por razones fundadas, hasta el 1 de marzo de 1889. Lo subrogó el profesor José Manuel Rivera, en su calidad de profesor más antiguo, durante toda su ausencia. De acuerdo con el Gobierno, el profesor Rivera hizo gestiones para obtener la creación de un pensionado para medio pupilos, pero, abierto el registro de interesados, sólo se presentaron dos candidatos, por lo cual tampoco prosperó esta vez la instalación del Internado. El rectorado del profesor Hostos, publicista y educador de fama continental, contribuyó a cimentar el progreso y prestigio alcanzados por el Liceo en el país. Hombre de vastos conocimientos y experiencia, que había viajado por América y Europa, el profesor Hostos estaba preparado para implantar y orientar la reforma educacional iniciada en 1889. En interesantes memorias enviadas al Gobierno y al Rector de la 13 Universidad de Chile, expuso sus ideas reformistas basadas en la conveniencia de no imbuir a los educandos nociones aisladas e incongruentes de todas las ciencias, sino un sistema organizado de conocimientos que se auxiliaran y complementaran mutuamente. Condenaba la memorización como método didáctico y, en lo que se refiere a los textos de estudio, sostenía que el profesor debería ser el texto vivo. Recomendó, y puso en práctica en el Liceo, la abolición definitiva de los calabozos, arrodillamientos, palmetas y otros castigos contrarios a la humana dignidad. Pidió a los profesores mayor benevolencia, cuyos frutos serían provechosos no solamente para la vida escolar, sino para la futura vida ciudadana. El profesor Hostos solicitó y obtuvo la creación de la Cátedra de Educación Musical que, a su juicio, influiría en la formación moral e intelectual de los educandos, pero sólo se hizo efectiva en 1891. El rectorado del profesor Hostos fue corto (marzo de 1889 a abril de 1890), pero de positivo progreso para el Liceo que cimentó, en forma sólida, el prestigio alcanzado hasta la fecha. En abril de 1890 dejó el . Liceo de Chillán para hacerse cargo del Liceo Miguel Luis Amunátegui, de Santiago. Reemplazó al profesor Hostos el señor Julio Roberto Pizarra, a quien le tocó implantar el "sistema concéntrico" , que venía a reemplazar el sistema de ramos sucesivos con exámenes finales. La reforma, aprobada por Decreto Supremo de fecha 10 de enero de 1889, debía aplicarse, en forma gradual, en los seis años de humanidades. El 7 de enero de 1891 , a causa de la grave situación que afrontó el país, se decretó la clausura de varios colegios, entre los cuales figuró el Liceo de Chillán , volviendo a ser ocupada una parte de su edificio como cuartel militar. En estas circunstancias, el profesor Pizarra se trasladó a Santiago, obteniendo del Ministro de Instrucción Pública la promesa de que el Liceo volvería a abrir sus puertas, lo que, efectivamente, ocurrió el20 de julio de 1891. La Cátedra de Educación Musical, que había pedido el señor Hostos, vino a concretarse solamente el 11 de julio de 1891 a raíz de las gestiones realizadas en Santiago por el profesor Pizarra. El profesor Julio Roberto Pizarro dejó su cargo de Rector el 13 de enero de 1892, reemplazándolo el profesor José Manuel Rivera, . quien ya había desempeñado antes el cargo. A los pocos días el señor Rivera, por disposición superior, hace entrega de la Rectoría al profesor Rómulo Ahumada Maturana, quien sirve el cargo hasta el 27 de diciembre de 1892, esforzándose por continuar la implantación del sistema concéntrico. El horario se modificó de modo que, en la mañana, las clases comenzaban a las ocho para terminar a las once; en la tarde comenzaban a la una para terminar a las cuatro. El profesor Ahumada, tras una breve enfermedad, dejó de existir en Talca el 27 de diciembre de 1892. Le sucede el profesor Luis Torres 14 Pinto, profesor de Ciencias Físicas y Naturales, titulado en el Instituto Pedagógico. Entre los profesores de este período se destacan: el profesor Maximiliano Salas Marchant, de Castellano; el profesor Enrique Sepúlveda, de idiomas; el profesor Gregario Bravo, de Matemáticas; el profesor Luis Torres Pinto, de Ciencias Físicas y Naturales; el profesor Enrique Malina Garmendia, que luego sería Rector de la Universidad de Concepción, de Historia y Geografía; el profesor Gaspar MolI, de Dibujo y el profesor Nicetas Krziwan, de Gimnasia. El rectorado del profesor Torres Pinto duró cuatro años, desde el 4 de febrero de 1893 hasta el 23 de junio de 1897. El día 10 de junio de 1897 el profesor Torres Pinto había presentado su renuncia, habiendo tenido antes la inmensa satisfacción de inaugurar el Internado con fecha 17 de marzo de 1897 y dejarlo organizado y en funciones. El autor de esta reseña histórica, que muchísimos años más tarde debió hacerse cargo del Internado del Liceo de Hombres de Chillán, ya funcionando, comprende perfectamente el esfuerzo, sacrificio y preocupaciones que deben haberle significado al profesor Torres Pinto iniciar un Internado donde nada existía. Debe pensarse que un Internado es como un hogar de menores en que el jefe debe hacer las veces de un padre con muchos hijos y velar por su salud, aprovechamiento, alimentación y bienestar en generaL Todo esto a base de una infraestructura adecuada, con personal idóneo en cocina, repostero, comedores, dormitorios, baños; salas de estudio e inspectores responsables, estableciendo ,una óptima distribución del tiempo que signifique su mejor aprovechamiento, siendo el responsable de todo y afrontando muchas veces incomprensiones, problemas de conducta de los alumnos, entrevistas con apoderados, proveedores, siempre exigentes en el pago puntual, etc. Por todo esto, aprecio el esfuerzo del profesor Torres Pinto en aquellos años, debiendo improvisarlo todo y luchando, con éxito, contra tantos problemas; a través del tiempo le rindo mi sincero homenaje. La renuncia del profesor Torres Pinto tuvo su origen a raíz de algunas incidencias ocurridas a causa de la pretendida supresión del 62 año de humanidades. La renuncia fue aceptada y el 23 de junio de 1897 entregó la rectoría al profesor Manuel A. Gil, que era el profesor más antiguo del Liceo. El profesor Gil recibió el Liceo con 372 alumnos, lo que da una idea de lo que el Liceo había crecido en un plazo relativamente corto. Desempeñó la Rectoría desde el 23 de junio al 23 de agosto de 1897, fecha en que, por retirarse de la docencia, entregó el cargo al profesor Nicetas Krziwan. RECTORADOS DESDE 1897 El 25 de septiembre de 1897 fue designado Rector don Narciso Tondreau Valin, quien tomó posesión de su cargo con fecha 7 de octubre del mismo año. El rectorado del profesor Narciso Tondreau ha sido 15 el más largo de todos, como que duró 28 años consecutivos (18971925), cumpliéndose durante su período un vasto e interesante programa de trabajo que colocó al Liceo de Hombres de Chillán entre los mejores establecimientos de segunda enseñanza del país. Tuvo la suerte de contar con un selecto personal administrativo y docente; el profesor Enrique Molina continuó durante este período colaborando con el Liceo desde el cargo de primer inspector y profesor de Filosofía, Historia y Geografía; ya se anidaban en su mente las ideas que daría conocer más tarde en sus notables obras de Filosofía. El profesor Tondreau se caracterizó siempre por su acendrado amor por la cultura y la educación, entregando sus mejores esfuerzos al progreso del Liceo. He aquí algunas de sus obras: logró la creación del cargo de médico del Liceo, que fue servido durante algunos años por el Dr. Rodolfo Latapiat Manríquez; hizo participar al Liceo en la Exposición de Educación celebrada en Santiago en 1902, obteniendo un segundo pre mio con sus presentaciones de Dibujo, Caligrafía, Zoología, Botánica y Geografía; incrementó notablemente el Gabinete de Ciencias Naturales con colecciones de animales embalsamados, herbarios, fósiles , esqueletos, minerales y cuadros didácticos en colores referentes a Zoología, Botánica, Geología y Mineralogía; también adquirió varios modelos anatómicos y preparaciones en alcohol y formalina. Inició en 1905 la construcción del pabellón definitivo para internos por la calle Buenos Aires, edificio que en 1913 se continuó por la calle Bulnes. Logró también la transformación del Gimnasio en Salón de Actos, lo que permitió el desarrollo de veladas artísticas y conferencias de gran interés; también se desarrollaron en el mismo Salón, hermosos conciertos de la Sociedad Musical Santa Cecilia, de la cual el profesor Tondreau fue presidente durante varios años. Quienes conocieron al profesor Tondreau saben, y me lo dijeron, que tenía un refinado gusto artístico y que era un apasionado de la música clásica que cultivaba con devoción. Al retirarse del Liceo, en 1925, para acogerse a una merecida jubilación, el profesor Tondreau fue objeto de numerosos homenajes de parte de la ciudad, de sus alumnos, ex alumnos, profesores, amigos y colaboradores. En 1965 el Supremo Gobierno le rindió un homenaje póstumo al decretar que este colegio se llamará en lo sucesivo "Liceo Fiscal de Hombres Narciso Tondreau". Le sucede en el cargo el señor Ramón Pérez Yáñez, Profesor de Estado en las asignaturas de Ciencias Biológicas y Química y autor de la interesante obra histórica Forjadores de Chile. El señor Pérez Yáñez se hizo cargo del Liceo a mediados de 1926 y continuó la brillante obra de su antecesor hasta principios de 1939, durante 13 años consecutivos, sirviendo la Rectoría con ejemplar abnegación e interés. Entre sus obras se destacan las siguientes: creación de varios cursos paralelos de humanidades con el consiguiente aumento del número de profesores; arreglo del Girnnasio con escalas murales, caballetes, cuerdas y 16 baños calientes anexos; organización de la Cooperativa de Consumo; construcción de un pabellón para Trabajos Manuales; arreglo de la sala de Dibujo; instalación de baños modernos para el Internado; reestructu· ración del Bienestar Estudiantil; adquisición de un piano de concierto; colocación de zócalos de madera a todas las salas de clases; incre· mento de los Gabinetes, etc. Es interesante hacer notar que el profesor Pérez, desde los pri· meros días de su Rectorado, organizó el Liceo de acuerdo con su crite· rio pedagógico y tuvo especial tacto para aplicar la Reforma Educacio· nal de 1928. Otro hecho de importancia ocurrido en este período es la . incorporación de personal femenino en las labores docentes; las prime· ras profesoras nombradas para servir en el Liceo de Hombres de ChilIán fueron las profesoras Abelina Rodríguez, Zoila Villarroel y Adelina Miranda; poco después se incorporó la profesora Zoila de Siredey y más adelante, muchas más. Don Ramón Pérez tuvo especial interés en lograr la enseñanza correlacionada de las asignaturas, asunto en el que comprometió sus mejores esfuerzos. Anticipándose a su época, dio a los ramos técnicos la importancia que, a su juicio, merecían; de aquí su empeño en construir mejores talleres y dotarlos de todos los materiales necesarios para su correcta enseñanza. También se preocupó de vincular al Liceo con el ambiente cultural de la ciudad; ciclos de charlas y veladas artísticas se sucedieron con frecuencia; la Sociedad Musical Santa Cecilia continuó brindando sus conciertos en el Salón de Actos del Liceo, ahora dotado de un excelente piano de cola; de este modo el Liceo se transformó en un centro que irradiaba cultura hacia la sociedad chillaneja. Las conferencias se ilustraban con proyecciones luminosas logradas mediante un excelente epidiascopio adquirido durante su rectorado; este mismo proyector permitía objetivar en magnífica forma las clases . de las diferentes asignaturas. Correspondió al profesor Ramón Pérez Yáñez reorganizar la Brigada de Boy Scouts del Liceo. Esta Brigada había sido fundada en el año 1913, durante la Rectoría del profesor Narciso Tondreau. Su primer comandante fue el don Francisco Javier Briones, llegandO a tener en esa época hasta 11 decurias. Otro de los comandantes notables de esta Brigada fue el profesor de Inglés del Liceo señor Kuno Havenish, siempre durante la Rectoría del profesor Tondreau. Después vino un período de decadencia para la Brigada; entonces el profesor Ramón Pérez, deseoso de verla renacer como antes, llamó al profesor señor Fabio Flores Contreras, que pasó a desempeñar los cargos de profesor de la Escuela Anexa del Li ceo y comandante de la Brigada de Boy Scouts. As í, la Brigada, dirigida con especial interés y cariño por el profesor Flores, resurgió al poco tiempo y alcanzó a tener más de 100 scouts, como en sus mejores días. Se recuerdan, como hechos notables, la excursión de los scouts a la Región de los Lagos y las tradido- l7 nales giras a las Termas de Chillan, donde la Brigada pasaba 15 días en campaña. Recuerdo con especial cariño (porque fueron mis profesores) a los siguientes profesores de este período: Castellano: Abelina Rodríguez, Pedro Troncoso (Inspector General), Benito Heredia. Historia y Geografía: Manuel Venegas, Pedro Contreras. Educación Cívica y Economía Política: Alejandro Carrasco. Inglés: Ana Figueroa, Tomás Figueroa. Francés: Jorge Chaves, Humberto Catalán. Matemáticas: Oonato Espinoza, Froilán Rioseco , Alberto Martínez, Alvaro Tobar. Física: Alvaro Tobar. Ciencias Naturales: Claudina Muñoz, Osvaldo Ledezma. Biología: Ramón Pérez (Rector). Química: Osvaldo Ledezma. Dibujo: Gumercindo Oyarzo. Música y Canto: Zoila González, Juan Moisés Pérez. Trabajos Manuales: Juan Moisés Pérez, Heriberto Torres. Gimnasia: Candelario Sepúlveda. Religión: Clodomiro Acuña. Cabe también mencionar al siguiente personal del mismo período: Profesores de la Escuela Anexa: Fabio Flores, Roberto Saldías, Santiago Chamorro. Bibliotecaria-Secretaria: Victoria Barra. Inspectores: Exequiel Sepúlveda, Carlos Castilla. Ecónomo: Francisco de la Fuente. Portero: Julio Retamal. El profesor Ramón Pérez Yáñez se retiró del Liceo a raíz del terremoto de 1939, acogiéndose a una merecida jubilación y teniendo , en el último instante de su carrera pedagógica, la dantesca visión de una ciudad y un Liceo totalmente destruidos. . Lo subroga el profesor Tomás Figueroa Bravo, que hacía poco había asumido el cargo de Inspector General del Liceo, siendo nombrado Rector Titular el 27 de octubre de 1939. La labor que debía emprender el profesor Figueroa era una obra de romanos: tenía ante sí la tarea de levantar un colegio de las ruinas, debía educar a la juventud sin medios materiales de ninguna clase y sin contar siquiera con un modesto edificio. Pero no estaba solo en la tarea. A su lado estuvieron, férreamente unidos, todos los profesores del Liceo que, ante la desgracia que afligía a la ciudad y al Liceo, no obstante que el dolor invadía a sus propios hogares, supieron agigantar su labor y sus corazones para mante- 18 ner en alto la antorcha de la cultura. ¿Dónde está el reconocimiento emocionado de la ciudadanía y del gobierno de la época para aquellos modestos servidores públicos? La primera tarea que afrontó el profesor Figueroa fue la de salvar el escaso material y mobiliario que quedó en condiciones de prestar algún servicio. Removiendo cuidadosamente los escombros logró, con la ayuda de brazos amigos, recuperar el piano de cola, algunos valiosos cuadros al óleo, dos microscopios, mapas geográficos, algunos muebles y máquinas de escribir, unas pocas sillas y bancos, unos cuantos libros, otros tantos animales embalsamados, parte del servicio del Internado, etc. Todo deteriorado, pero todavía útil. El profesor del Liceo y artista señor Jorge Chaves restauró, tiempo después, los hermosos cuadros que aún conserva el Liceo. Para que se comprenda bien la magnitud del desastre que debió sufrir el Liceo a raíz del sismo de 1939 es necesario puntualizar aquí que, por esa época, el colegio contaba con muy valiosos medios de enseñanza y con instalaciones suficientes para recibir cerca de 800 alumnos; tenía un buen Internado, una excelente y bien dotada Biblioteca que era su orgullo, Gimnasio y Salón de Actos, un valioso Museo de Historia Natural, Laboratorios muy completos de Física y de Química, Sala de Dibujo, Talleres de Trabajos Manuales (carpintería, cestería, cartonaje y encuadernación), máquina de proyección, piano y armonio para las clases de Música y Canto, salas de clases suficientes para el funcionamiento de 15 cursos de humanidades y 4 de preparatorias, canchas de básquetbol y de fútbol, baños temperados, etc. Esta había sido la obra de 16 rectores a través de 86 años de trabajo. iBastó un instante para que se destruyera todo! Creo pertinente copiar aquí algunos "Recuerdos" publicados por el ex profesor del Liceo don Raúl Castañeda en la edición "Primer Centenario" de la revista Rumbos, órgano literario oficial del Liceo: "... una noche de verano, que se presentaba fresca después de un día de ca lor, un terremoto horrible destruía a Chillán y el Liceo era convertido en un montón de escombros. A Nicanor Parra, como único profesor soltero, se le encomendó la vigilancia en la extracción de los libros de la Biblioteca, el material de los laboratorios y otras cosas útiles que pudieran recuperarse". Era de extrema urgencia encontrar un local para hacer funcionar el Liceo. Tras perseverantes gestiones del profesor Figueroa, se entregaron al Liceo unas barracas de viviendas colectivas, ubicadas en la Avenida Argentina esquina de Itata, donde comenzaron las clases el lunes 5 de junio de 1939 con asistencia alterna, pues en la mañana ocupaba el local el Liceo de Niñas y en la tarde, el Liceo de Hombres. Allí se ejercieron las delicadas funciones docentes en las más deprimentes condiciones materiales y afrontando el rigor de un invierno en extremo riguroso que extendía sus gélidas garras hasta dentro mismo 19 de las salas de clases. Dice el profesor Castañeda en sus "Recuerdos u : "El local era muy malo e inadecuado; en los días de lluvia había -que suspend.er las clases pues en las salas llovía más que afuera; en suma se trabajaba en forma heroica, pero lo hicimos con todo interés y abnegación". En aquel local estuvo el Liceo hasta agosto de 1939; no tenemos datos de cuántos alumnos y profesores enfermaron a causa de las deficientes condiciones de aquellas barracas y la crudeza de aquel invierno que pasaron allí, pero deben haber sido muchos. Entretanto el profesor Tomás Figueroa había conseguido un local de emergencia en la Plaza Sánchez, poco mejor que el anterior, pero siempre totalmente inadecuado para las funciones docentes. Recurro de nuevo al profesor Castañeda: "Aquí nos tocó sufrir los rigores del verano naciente; las salas eran excesivamente bajas, de madera y cubiertas con pizarreño que se caldeaba, produciendo un horno perfecto". El Liceo permaneció en aquel local hasta tines de octubre, fecha en que gracias a la tesonera gestión del Rector y a la colaboración del eficiente arquitecto provincial don Francisco Salís de Ovando, gran amigo del Liceo, se entregaron al Liceo los tres pabellones de madera que se habían construido para el colegio en su antiguo terreno de Avenida Libertad. La familia Ilceana, alumnos y profesores, volvía, por fin, a su antiguo hogar, por cierto muy cambiado, casi irreconocible. Este local, con ser muy superior a los anteriores, no podía considerarse como definitivo para el Liceo. El profesor Tomás comprendió que su lucha no había terminado aún. Su propósito era hacer renacer el Liceo, como el ave fénix de sus cenizas. El momento era apropiado para solicitar la construcción del edificio definitivo. Su proceder recuerda los esfuerzos tesoneros de don Justiniano Adrover, coronados por el éxito, para obtener un edificio más amplio y más adecuado para el funcionamiento del Liceo. Tras las gestiones correspondientes realizadas por el profesor Figueroa en Santiago, el Gobierno determinó adquirir la manzana comprendida entre las calles Lumaco, Maipón, Carrera y El Roble para construir allí el edificio definitivo del Liceo. Pedidas las propuestas públicas correspondientes sobre la base de planos y especificaciones técnicas determinadas por la Dirección General de Obras Públicas, el edificio comenzó a construirse, en obra sólida, asísmica, el19 de agosto de 1943 por el lado de calle Maipón. El día 5 de noviembre de 1945 la construcción se continuó por la calle Lumaco. La obra en ejecución era un hermoso edificio de tres pisos -que consultaba todas las comodidades para el funcionamiento de un Liceo moderno. El 23 de noviembre de 1945 se daba término a la parte del edificio que enfrenta a la calle Maipón, el cual fue destinado por el profesor Figueroa para el funcionamiento de la Escuela Anexa a partir de 20 1946. Mientras tanto se continuaba trabajando en la obra gruesa del pabellón de calle Lumaco; dicha obra gruesa se terminó el 12 de octubre de 1947 y quedó en ese estado por largos años, debido a que el Gobierno no destinó nuevos fondos para las terminaciones. A pesar del empeño que gastó en ello, el profesor Tomás Figueroa no logr6, en el resto de su período, realizar la unidad del Liceo que, a la sazón, se encontraba dividido en dos locales muy distantes. Hay que destacar que, fuera de atender a la restauración material del Liceo, el profesor Figueroa se preocupó, paralelamente, de reorganizar sus instituciones culturales que constituyen el alma de un colegio. Funcionaron nuevamente, bajo la orientación de los profesores asesores: la Academia Literaria "Samuel Lillo", el Bienestar Estudiantil, el Centro Deportivo, el Centro de Estudiantes; vuelve a aparecer la revista Rumbos, tan querida de los estudiantes y del público; se organiza, también, la Cooperativa de Consumos del Liceo y se abre, nuevamente, el Servicio Médico, destinado a la atención de los alumnos. La obra enumerada bastaría para llenar de legítimo orgullo a cualquier persona. El profesor Figueroa no lo consideró nunca así. Por el contrario, decía que había cumplido apenas con su deber y que si algo se había hecho se debía al entusiasmo y colaboración de sus colegas profesores. A principios de 1949, por Decreto Nº 1158 de fecha 5 de febrero, el Supremo Gobierno, considerando el prestigio y la importancia alcanzados por el Liceo de Hombres de Chillán, lo asciende a la categoría de "Liceo Superior de Primera Clase", quedando al mismo nivel que el Instituto Nacional y el Internado Nacional Barros Arana de Santiago. Se había dado un paso de gran importancia en la vida del Liceo que involucraba un acto de justicia y la aprobación de la obra realizada. El Rector, don Tomás Figueroa Bravo, obtiene su jubilación en mayo de 1950. Al dejar el Liceo fue Objeto de una manifestación de cariño y reconocimiento, no sólo de los profesores y alumnos del Liceo, sino de todos los círculos sociales e instituciones culturales de la ciudad y, muy especialmente, de sus ex alumnos que siempre le guardamos profundo respeto y gratitud. En mayo de 1950 se hace cargo del Liceo el Inspector General señor Antonio Lafuente Palma en carácter de Rector subrogante. Permanece en funciones sólo hasta mediados de julio, ya que el 13 de julio de 1950 se nombra Rector del Liceo al profesor Osvaldo Ledezma García, profesor de Biología y Química del establecimiento. El profesor Ledezma organiza el Liceo, cambiando el 22 ciclo (4º, 52 Y 62 años de humanidades) al edificio de calle Maipón y dejando en el edificio de calle Libertad el 1er. ciclo y las preparatorias que conformaban la Escuela Anexa. Con la cooperación de ex alumnos, padres y apoderados se da a la tarea de reunir los dineros necesarios para adquirir un equipo de 21 cine sonoro para el colegio, gestión en la que obtiene pleno éxito. Con la ayuda de las autoridades y la aprobación del Director General de Educación Secundaria, al profesor Adrián Soto Vivanco , da los pasos necesarios para reabrir el Internado en marzo de 1951, el cual no funcionaba desde su destrucción en 1939. Consigue que el Intendente de la provincia ceda al Liceo algunos pabellones anexos al edificio de Avenida Libertad para funcionamiento del Internado y se preocupa de todos los detalles de su organización. Los meses de enero y febrero de 1951 los destina a terminar estos preparativos y hace, en la prensa local , las publicaciones pertinentes. iHabía destinado al profesor Ledezma al servicio del Liceo el tiempo que los demás destinamos al descanso! Este exceso de trabajo , unido a las consiguientes preocupaciones, hicieron profunda mella en la salud del Rector. En los primeros días de marzo de 1951 sufrió un agudo ataque de parálisis que lo tuvo al borde de la muerte. Rodeado de la atención de los mejores médicos y del cariño y atenciones permanentes de su famil ia, el profesor Ledezma logra reponerse bastante de la cruel enfermedad. En su lecho de enfermo continuaba preocupado del Liceo y recibía con placer la visita de sus colegas y alumnos que le llevaban noticias del Liceo. Subroga al profesor Ledezma el Inspector General señor Antonio Lafuente Palma, cuya jubilación se encontraba en trámite. El día 31 de julio de 1951 el profesor Lafuente, cuyo Decreto de jubilación acababa de llegar, hace entrega del Liceo, en una emotiva ceremonia, al profesor más antiguo, don Carlos Fuentes Véjar, quien, con fecha 7 de agosto de 1951, es nombrado Inspector General en reemplazo del profesor Lafuente, quedando, con mayor razón, como Rector subrogante del Liceo. COMITE CENTENARIO El profesor Carlos Fuentes, secundado por los profesores del Liceo, emprende una enérgica campaña para obtener del Gobierno la pronta terminación del edificio de calle Lumaco que se hallaba en obra gruesa desde el 12 de octubre de 1947. El profesor del Liceo Sergio Gana Lagos, autor de estas líneas, en artículos de prensa publicados en La Nación de Santiago y La Discusión de Chillán, insinúa al Supremo Gobierno la conveniencia de proceder a la terminación inmediata del edificio del Liceo que pronto celebraría sus primeros cien años de existencia . En un Consejo de Profesores celebrado a fines de septiembre de 1951 , bajo la presidencia del profesor Fuentes, se acuerda impulsar al máximo la campaña iniciada y se designa, al efecto, una comisión de profesore s para que se encargue de llevarla adelante. Esta comisión queda integrada por el profesor Carlos Fuentes, como presidente, y por los profesores Leonor Suárez, Abelina Rodríguez, Rosenda Ramírez , 22 Sergio Gana, Jorge Bustamante, Ramón Riquelme, José del Canto, Carlos Salazar y José San Martín. La primera preocupación de esta comisión fue convocar a las autoridades, padres y apoderados, ex alumnos, representantes de la radio y prensa locales, amigos del Liceo y vecinos en general, a una Asamblea Pública destinada a coordinar un plan de acción para lograr la terminación del edificio y celebrar, digna:mente, el centenario del Liceo en 1953. La comisión procedió, de inmediato, a fijar el día 5 de octubre de 1951 para la realización de la Asamblea. Por medio de una intensa campaña de prensa y radio y conversando personalmente con las autoridades, parlamentarios y vecinos, se aseguró, de antemano, el éxito de la Asamblea . Aunque, en verdad, esta labor preparatoria no hacía falta, ya que el cariño que todo Chillán siente por su viejo Liceo, aseguraba el éxito de la reunión. La asistencia sobrepasó todas las expectativas, concurriendo el Intendente de la provincia señor Ricardo Auger Valenzuela, el Alcalde de la comuna señor Antonio Lafuente Palma, el ministro de la Corte de Apelaciones señor Osvaldo Reinicke, el diputado señor Humberto Aguirre ooolan, el jefe zonal de Impuestos Internos señor Luis Arriagada, el arquitecto provincial señor Juan Corgini, el consejero de la Corporación de Reconstrucción señor Pedro Poblete Vera, el director del diario La Discusión señor Alfonso Lagos Villar, el oficial jefe del Registro Civil señor Moisés Noriega, el cuerpo de profesores del Liceo, el señor Nicanor Poblete, el señor Gumercindo Oyarzo, el doctor Germán Villagrán, el señor Pedro Espinoza, el señor Daniel Coria, el señor Juan Moisés Pérez, el abogado señor Víctor Flores Castelli y un centenar de personas más vinculadas al Liceo. Presidió la reunión el Rector señor Carlos Fuentes Véjar y actuó de secretario el señor Sergio Gana Lagos. Todos los oradores estuvieron acordes en que la terminación del Liceo era un problema de carácter urgente que no admitía ninguna postergación y ofrecieron su concurso para llevar adelante la empresa de obtener los fondos necesarios y la inmediata inversión de los dos millones de pesos consultados para el Liceo en el presupuesto del año en curso. Hacen uso de la palabra el señor Intendente, el señor Alcalde, el diputado Aguirre ooolan, el señor Pedro Poblete , el señor Nicanor Poblete, el señor Pedro Espinoza, el señor Andrés González, el señor Juan Corgini, el señor Daniel Coria, a nombre de los padres yapoderados, el señor Raúl Espinoza y varias personas más. De esta Asamblea resulta designado el "Comité Centenario" que deberá preocuparse de la terminación del edificio y de cooperar en la celebración de las festividades centenarias. Como estos hechos constituyen parte importante de la historia del Liceo, he queridO consignarlos con algunos detalles y, por la misma razón, doy, a continuación, la constitución del "Comité Centenario" designado por aclamación en la Asamblea: Sres. Pedro Espinoza y Norberto Espinoza, por los ex alumnos; presi- 23 dente del Centro de Alumnos del Liceo de Hombres; Sr. Gonzalo Gazmuri, por la Ilustre Municipalidad; Sr. Abdón Correa, por la Cámara de Comercio Mayorista; Sr. Alfonso Lagos Vi llar, por la prensa local; Sr. Rector del Liceo; Sres. Carlos Fuentes y Sergio Gana, por los profesores del Liceo; Sres. Daniel Caria y Oscar Soto, por los padres y apoderados; Sr. Rªúl Espinoza Toro por los profesionales y un representante de la Radio Nuble. El comité se constituyó en sesión, apenas terminada la Asamblea, para designar su mesa directiva, resultando elegida, por acuerdo unánime, la siguiente: Presidente: Sr. Alfando Lagos Villar. Primer Vicepresidente: Sr. Carlos Fuentes Véjar. Segundo Vicepresidente: Sr. Pedro Espinoza Secretario de Actas y Prensa: Sr. Osear Soto. Tesorero: Sr. Abdón Correa Chandía. Directores: Sres. Norberto Espinoza. Gonzalo Gazmuri, Sergio Gana, Daniel Caria, Raúl Espinoza, Nelson Sandoval (por los alumnos), Germán Fernández (por la Radio Nuble). El Comité Centenario se puso de inmediato en actividad para obtener el logro de las finalidades acordadas y, tras algunos viajes a Santiago del presidente y de los dos vicepresidentes, costeados de su propio peculio, se obtuvo que el Gobierno llamará a propuestas públicas para las terminaciones del edificio del Liceo y se comprometiera a consultar una partida importante de dinero en el presupuesto del año siguiente para terminar los trabajos. Los viajes a la capital de los miembros del Comité Centenario fueron aprovechados también para conversar con el Rector de la Universidad de Chile y ex alumno del Liceo, señor Juvenal Hernández Jaque, para solicitarle se declarara a Chillán como Sede Permanente de Bachillerato, petición que fue bien acogida por el Rector y que vino a hacerse realidad un año más tarde. Las propuestas para las terminaciones del edificio del Liceo fueron adjudicadas a la firma constructora Salazar y Cía. y los trabajos se iniciaron el dia 14 de abril de 1952, estando a cargo del Liceo el profesor Carlos Fuentes Véjar, quien veía, de este modo, coronados por el éxito, los esfuerzos que empeñara en el asunto. Gran alegría hubo ese día en el Liceo en los corazones de profesores y alumnos porque se divisaba, por fin, la posibilidad de que terminara la molesta división del Liceo en dos locales tan distantes ubicados en Avenida Libertad y en calle Maipón, con el consiguiente sacrificio de su personal docente que debía caminar de uno a otro edificio, con buen o mal tiempo, con frío o con calor, para cumplir sus abnegadas labores. Y aunque los golpes de los obreros molestaban el desarrollo de las clases en el pabellón contiguo, a todos nos sonaban como música porque veíamos cumplirse una aspiración tan sentida. 24 El día 31 de diciembre de 1951, cuando el mundo se aprestaba a recibir un nuevo año, el Liceo de Hombres de ChilJán recibió la inesperada noticia del repentino fallecimiento de su Rector titular, señor Osvaldo Ledezma García, acaecido en Llolleo, donde pasaba una temporada, por recomendación médica, para afianzar su mejoría. Reunido de inmediato el Consejo de Profesores, toma el acuerdo de enviar una com isión de profesores para que asistan a sus funerales, expresen las condolencias a la familia y entreguen una ofrenda floral, todo en nombre del Liceo. Con posterioridad, los restos mortales del profesor Ledezma fueron traídos a Chillán, velados en el recinto del Liceo y llevados al cementerio de esta ciudad, acompañados por los profesores y alumnos del colegio. El 16 de mayo de 1952, con ocasión del 992 aniversario del Liceo, profesores y alumnos nos trasladamos al camposanto a testimoniar nuestro cariñoso y emocionado recuerdo a los maestros fallecidos: don Osvaldo Ledezma García y don Heriberto Torres Arratia. El día 29 de abril de 1952 el profesor Carlos Fuentes V. hace entrega de la Recloría del Liceo al profesor Humberto Catalán Muñoz, designado para ocupar el cargo por Decreto de fecha 14 de marzo de 1952. El profesor Catalán había sido, entre los años 1931 y 1937, profesor de Francés en el Liceo de Hombres de Chillán, y luego, Rector del Liceo de Lautaro, Rector del Liceo Juan Antonio Ríos, de Santiago (que debió fundar y organizar) y, desde 1948, Rector del Liceo de Traiguén, establecimiento desde el cual venía trasladado al Liceo de Chillán. Unía el nuevo Rector a su experiencia administrativa el conocimiento del ambiente en que le iba a tocar actuar. A los pocos dras se dio a conocer como un hombre de gran espíritu de empresa y con una capacidad de trabajo poco común. Tomó rápidamente contacto con las instituciones ligadas al Liceo, como el Comité Centenario, del cual fue nombrado Vicepresidente Ejecutivo, el Centro de ex Alumnos que presidía don Pedro Espinoza, el Centro de Padres y Apoderados, que contribuyó a fundar y que presidió el Dr. Germán Villagrán García, etc. Comprendiendo la grave responsabilidad de organizar las festividades centenarias del Liceo en un plazo relativamente corto, se dio de inmediato a la tarea de asegurar la terminación del edificio de caJle Lumaco (actual calle Claudio Arrau) y, de acuerdo con su Presidente, el señor Alfonso Lagos Villar, Director de La Discusión y Premio Nacional de Periodismo, citó al Comité Centenario a sesiones permanentes de trabajo. Por otra parte, el Comité Centenario Interno del Liceo elaboraba un proyecto de festejos que sería sometido al conocimiento del Consejo de Profesores. Hay que señalar que el Liceo de Hombres de Chillán no tendrá nunca ~ómo a.gradecer la labor magnífica del Comité Centenario que presidió el periodista Alfonso Lagos Vi llar. A la labor silenciosa , pero te- 25 sonera de este Comité se debió la continuación de los trabajos de terminaciones del edificio del Liceo. El Periodista Alfonso Laoos no escatimó jamás sus mejores esfuerzos para lograr los altos fines perseguidos por el Comité. Aun enfermo de cuidado, y en vísperas de ser sometido a una delicada intervención quirúrgica en Santiago, continuaba preocupado del Liceo. Restablecido totalmente, acentuó sus esfuerzos en favor del colegio que lo había formado y que lo cuenta entre sus más distinguidos ex alumnos. En compañía del Rector señor Humberto Catalán Muñoz y de los señores Pedro Espinoza González, Abdón Correa Chandía y Osear Mellado de la Fuente, presidente del Centro de ex Alumnos, continuó realizando viajes a Santiago hasta obtener los fondos suficientes para la term inación del edificio y la promesa de nuevas partidas para iniciar la construcción del Gimnasio-Teatro que tanta falta le hacía al Liceo. Por otra parte, el diario La Discusión, que el señor Lagos dirigía, estuvo en todo momento ayudando al Liceo en sus propósitos; otro tanto hicieron las radios La Discusión y Nuble. El profesor Catalán tomó a su cargo la feliz iniciativa del recordado Rector señor Osvaldo Ledezma y, allegando nuevos fondos a los reunidos por el profesor Ledezma, logra inaugurar, oficialmente, el 29 de agosto de 1952 el Cine Sonoro "Osvaldo Ledezma", nueva arma pedagógica de inestimable valor con que contó el Liceo desde esa fecha. Hubo ese día una emotiva ceremonia que contó con la asistencia de las autoridades civiles, militares y eclesiásticas y numeroso público. Se sirvió un cóctel a los asistentes y se exhibieron varias películas sonoras con el nuevo equipo. La señora Claudina Muñoz vda. de Ledezma tuvo el hermoso gesto de Obsequiar, en memoria de su esposo, la suma de diez mil pesos para contribuir a pagar el equipo recién inaugurado. Este gesto puso una nota de honda emoción a la ceremonia. El día 10 de octubre de 1952 la Universidad de Chile dicta el Decreto Nº 2851 que declara a Chillán como Sede Permanente de Bachillerato. Con este hecho culminaba una intensa y prolongada campaña realizada en tal sentido por los jefes de los colegios secundarios de Chillán, tanto fiscales como particulares y por el Comité Centenario del Liceo de Hombres. Las primeras pruebas de Bachillerato se rinden en el local del Liceo de Niñas en el mes de enero de 1953 con un éxito que sobrepasó todas las expectativas y que aseguró la continuidad del Bachillerato (ahora con el nombre de Prueba de Aptitud Académica) en Chillán, para bien de los alumnos y de sus padres o apoderados. Desde su llegada al Liceo, en abril de 1952, el profesor Catalán tenía el deseo de habilitar el Internado lo más pronto posible, haciendo realidad los esfuerzos del profesor Osvaldo Ledezma, que no fructificaron debido a su enfermedad. Tenía autorización de la Dirección General de Educación Secundaria para proceder a su reapertura en el más breve plazo, pero cuando se terminó el local del Liceo por calle Lumaco, el Instituto Comercia l, que no tenía edificio propio, solicitó al Ministerio la 26 entrega del antiguo local que tenía el Liceo en Avenida Libertad y que el profesor Catalán deseaba destinar al funcionamiento del Internado. No pudiendo oponerse a las disposiciones del Ministerio de Educación, que aprobaba la solicitud del Instituto, el profesor Catalán la condicionó a la construcción de un edificio de tres pisos en el sitio del Liceo por calle Maipón para el futuro Internado, petición que fue aceptada por el Ministerio. Esta circunstancia postergó una vez más la reapertura del Internado. Con la cooperación económica del Comité Centenario y de algunos profesores del Liceo se inicia, en este período, la construcción de un jardín con espejo de agua y pérgolas frente al edificio de calle Malpón. Ejecuta los planos, desinteresadamente, el arquitecto señor Luis Harding; cooperaron en los trabajos varios soldados del Regimiento de Infantería N~ 9 de Chillán, cedidos gentilmente por su comandante. La Ilustre Municipalidad proporcionó algunos materiales y carretones para la extracción de tierras y escombros. Otros adelantos de interés realizados en el período del profesor Catalán fueron los siguientes: instalación de luz eléctrica en la planta baja del edificio de calle Maipón, donde funcionaban las oficinas y la Biblioteca del Liceo; creación de una nueva plaza de Inspector; pintura del edificio de Avenida Libertad, trabajo que no se hacía desde la Rectoría de don Tomás Figueroa Bravo; reiniciación de las giras anuales de los 5tos. anos; organización del Centro de Padres y ApoderadOS del Liceo: dotación de mobiliario para los Gabinetes; incremento de la Biblioteca, etc. Como Rector le correspondió al señor Catalán organizar las festividades centenarias del Liceo de acuerdo con el programa elaborado por el Comité Centenario Interno y discutido y aprobado por el Consejo de Profesores que designó comisiones para los diferentes actos. Da una idea de la magnitud de la responsabilidad que asumía el Liceo en esos días el hecho de que participaron delegaciones de 29 liceos comprendidos entre Curicó y Temuca , los cuales compitieron en torneos deportivos, de oratoria, declamación y dibujo. Los profesores asistentes tomaron parte en reuniones que, con el nombre de "Jornadas Pedagógicas", estaban destinadas a estudiar los principales problemas de la educación. Dichas Jornadas se celebraron entre el12 y el16 de mayo de 1953 Y contaron con el patrocinio del Ministerio de Educación. Además de las actividades señaladas, el programa de las Festividades Centenarias consultó otras de gran importancia como Revista de Gimnasia, Expos ición Escolar, Edición Extraordinaria de 100 páginas de la revista Rumbos, Velada de Gala en el Teatro Municipal cuyo orador de fondo fue el Rector de la Universidad de Concepción y exprofesor del Liceo don Enrique Malina Garmendia, Desfile Alegórico, Asamblea de ex alumnos, c_oncursos para escribir una monografía del Liceo y de la provincia de Nuble, etc. Los festejos terminaron con un Banquete de 27 Gala al que asistieron las autoridades, invitados especiales y los profesores del Liceo de Hombres y de los 29 liceos participantes. Todos los actos tuvieron especial lucimiento; el Desfile Alegórico contó con la presencia de todos los alumnos y como fue en la noche, cada uno portaba una antorcha encendida; era impresionante ver tres cuadras de antorchas que subían por Avenida Libertad y varios carros iluminados y adornados artísticamente. Antes de jubilar, el profesor Catalán, estudiando en sus horas libres e incluso de noche, obtuvo el título de abogado de la Universidad de Chile que ya le había otorgado antes el diploma de Profesor de Estado en la asignatura de Francés; esto da una idea de la extraordinaria capacidad de estudio y trabajo del profesor Catalán. Le sucede como Rector el profesor René Cabrera lñíguez, quien dirigió el Liceo desde 1961 a 1971. En 1964, tras repetidas gestiones ante las autoridades, logró la reapertura del Internado que no funcionaba desde el terremoto de 1939 y que pasó a ocupar el edificio construido especialmente para él, frente a la calle Maipón. En 1965 se inaugura el Gimnasio del establecimiento, para cuya consecución se contó con la valiosa ayuda del ex alumno del Liceo, diputado don Víctor Flores Castelli, quien consiguió que se destinaran cincuenta millones de pesos para su construcción. Le correspondió también al profesor Cabrera crear los cursos anexos en la ciudad de Bulnes que luego se transformaron en el actual Liceo Fiscal de esa ciudad. Desde 1970, debido a la gran demanda de matrícula, el Liceo de Hombres de ChiJIán pasó a tener el carácter de Liceo Fiscal Mixto, para lo cual el profesor Cabrera solicitó y obtuvo la creación de numerosos cursos paralelos; se mantuvo como Liceo Mixto hasta diciembre de 1978. Además, el profesor Cabrera consiguió la designación de un orientador educacional y de un Vicerrector, cargo, este último, que desempeñó, por primera vez en la historia del Liceo, el profesor Sergio Gana Lagos, tras haberlo ganado en un Concurso Nacional de antecedentes. En 1971 el profesor Cabrera se acoge a una merecida jubilación. Le sucede en el cargo el profesor Sergio Gana Lagos, quien había sido alumno, profesor, Inspector General y Vicerrector del establecimiento. Durante su período le corresponde inaugurar, en brillante ceremonia desarrollada el 2 de mayo de 1973, con asistencia de las autoridades, el Liceo de Coihueco, anexo al Liceo de Hombres de Chillán. Además solicitó la creación de nuevos cursos, lo que trajo consigo el aumento de la matrícula y de la dotación de profesores, personal paradocente, administrativo y auxiliar. El Liceo, desde años atrás, debido a su continuo crecimiento, debió funcionar en tres jornadas: mañana, tarde y noche; el Liceo Nocturno siempre acogió a las personas adultas y gente de trabajo. El número de profesores se acercaba al centenar. Preocupación preferente del nuevo Rector fue incrementar la 28 cantidad de libros de la Biblioteca, crear una Galería de Rectores con fotografías de todos los que siguieron a don Narciso Tondreau, incluyéndolo a él en primer lugar; fundó la Orquesta Estudiantil, dotándola del instrumental necesario, incluyendo un piano. Y en lo material se arreglaron los baños y servicios higiénicos de los alumnos; se construyó una reja de fierro y se hicieron jardines por calle Lumaco; logró unir el edificio principal con el Internado y con el Gimnasio por medio de pasillos techados; adquirió más mobiliario escolar, etc. En cuanto al Internado, el profesor Gana logra el incremento del número de internos , dando preferencia a los alumnos de zonas rurales y de otros pueblos de la provincia y, al mismo tiempo que organiza su vida escolar en un régimen de estudio, los dota de comodidades que hagan grata su estancia en el colegio; así, adquiere para la sala de estar un televisor de 23 pulgadas, hace construir estanterías con casilleros individuales para guardar sus útiles de estudio, coloca bancos en los pasillos y en el jardín, compra un calefactor ambiental para el comedor, se preocupa de aumentar la dotación de mesas, sillas, vajilla y mantelería para el comedor, repostero y cocina, adquiere un triciclo para hacer las compras diarias de mercado, etc. La sección de Internado de cualquier colegio cumple una alta finalidad social, pues proporciona un hogar y una alimentación sana y abundante a los niños cuyos padres tienen sus casas fuera de la ciudad, al mismo tiempo, que se vigila y orienta su estudio y se evita la acción, muchas veces nociva, del medio y el exceso de libertad en una época en que no se plasma aún la personalidad del niño. Solicita a Inspectoría General que los alumnos internos asistan a clases en la jornada de la tarde para que así puedan ir a sus casas por sábado y domingo. Esta medida es muy bien acogida por los padres y apoderados. El profesor Gana jubila en mayo de 1973. Le sucede en el cargo, con el carácter de Vicerrector interino, el Inspector General del Liceo señor Lucio Flores Pérez, quien dirige el Liceo sólo por pocos meses. Producido el pronunciami ento militar del 11 de septiembre de 1973, el nuevo gobierno designa Rector al profesor de Educación Física del establecimiento señor Jorge Bustamante Sanhueza, quien sirve la Rectoría hasta 1976. Durante su período el Liceo continúa su ritmo ascendente de progreso, lográndose la creación de nuevos cursos y el nombramiento de varios profesores; el Liceo se distingue en las competencias deportivas y por su excelente aprovechamiento. Al profesor Bustamante le sucede la profesora Blanca Manríquez Arellano, quien sirve el cargo durante diez años, siendo la primera mujer que tiene el honor de dirigir el Liceo. Durante su períOdO se cumple un amplio programa de trabajo con la colaboración efectiva del profesorado y del Centro General de Padres y Apoderados del establecimiento, destacándose: la reposición de pisos de las salas de clases; 29 reparación del sistema eléctrico, colocándose tubos fluorescentes; arre· glo de los baños; pintura del frontis del edificio y muros interiores; crea· ción de una Pinacoteca, de una sala de proyecciones y de una Banda de Guerra; adquisición de mobiliario escolar y elaboración de un pro· yecto para transformar el Gimnasio en un Salón de Actos que cumpla ambas finalidades . Y en lo educacional, los alumnos del Liceo obtienen excelentes puntajes en la Prueba de Aptitud Académica y, por sus no· tas, varios se hacen acreedores a premios y becas otorgadas por el Presidente de la República. Desde el 16 de junio de 1986 el liceo de Hombres de Chillán pasa a depender directamente del Departamento de Educación de la Ilustre Municipalidad de Chillán, de acuerdo con las disposiciones del Gobierno. A principios del año escolar 1988 asume la Dirección del liceo el profesor Héctor Raúl Carrasco Jara, a quien le correspondió presidir las festividades del 1350 aniversario del establecimiento. Su período como Rector fue muy corto pues, designado Alcalde de Pinto, debió abando· nar la Dirección del liceo a principios de diciembre de 1988 para asumir sus nuevas funciones . No obstante, demostrando un gran espíritu de iniciativa, logró real izar importantes obras, como la habilitación de un Salón de Actos en lo que fuera el patio cubierto del establecimiento; además, se preocupó de la reparación del mobiliario escolar, de la pin· tura del frontis del edificio y de la Sala de Profesores, colocando corti· nas en esta última. Le sucede en el cargo el Vicerrector del liceo, profesor Wagner Pérez Eulufí, quien asume la Dirección del establecimiento el 1 de di· ciembre de 1988, después de haberse desempeijado, sucesivamente, como docente de la Universidad de Chile, sede Nuble, Instituto Profe· sional de Chilán y Universidad del Bío·Bío. El profesor Pérez Eulufí de· sempeña la Dirección del liceo por casi 5 años, logrando durante este tiempo, con la colaboración del Municipio, del Cuerpo de Profesores y del Centro General de Padres y Apoderados, desarrollar una importante y fructífera labor que coloca al Liceo de Hombres de Chillán entre los establecimientos de Enseñanza Media de mayor importancia en el país. En primer término cabe destacar el alto rendimiento demostrado por los alumnos en la Prueba de Aptitud Académica, superando su puntaje la media nacional. El Liceo tiene en este período 1.500 alumnos, distribuidos en tres jornadas y en 55 cursos a cargo de 80 profesores, incluyendo cinco docentes-directivos; el número de administrativos y paradocentes alcanza a 17, además de un número similar de auxiliares a cargo de servicios menores. La Biblioteca tiene ya 7.000 volúmenes , en su mayoría obras de consulta a disposición de alumnos y profesores. Otros adelantos logrados por el profesor Pérez Eulufí son los siguientes: dotación de sillas para todos los alumnos y mobiliario para la 30 Oficina de Orientación, Biblioteca, Sala de Profesores, Gabinetes de Física y Química, incluyendo cortinas para este último; adquisición de equipos computacionales que incluyen seis Ataris con disquetera y once computadores con dos impresoras; todo esto para habilitar una moderna Sala de Computación. Además, habilitación de una Sala de Proyecciones con un video, un televisor, minicomponentes, mobiliario apropiado, cortinas; reparación de los baños de los alumnos y del piso del Gimnasio; instalación de una Sala de Orientación; pintura de los muros interiores del Liceo, cocina, comedor y frontis del Internado; reparación de parte de la techumbre del edificio principal; adquisición de libros para la Biblioteca; colocación de alfombras en la Sala de Computación y Oficina de Justificaciones; colocación de una reja metálica por calle Maipón frente al jardín del Internado; adquisición de un refrigerador, un califont y un teléfono para el Internado, etc. Todo lo que se ha señalado significó una inversión cercana a los quince millones de pesos, pero representa mucho más ya que gran parte de la mano de obra fue ejecutada por el personal de servicio del Liceo. Con fecha 26 de julio de 1993 reasume sus funciones de Director del establecimiento el señor Héctor Raúl Carrasco Jara; en consecuencia, el profesor Wagner Pérez Eulufí regresa a su cargo de Vicerrector del Liceo, con la satisfacción de la labor cumplida, dejando al colegio en un alto nivel de eficiencia, acorde con nuestro tiempo, con los equipos tecnológicos necesarios y un destacado Cuerpo de Profesores que ha elevado notablemente el rendimiento académico de los alumnos. y así llegamos a los tiempos actuales. El Liceo continúa creciendo a un ritmo acelerado; ya tiene 1.690 alumnos repartidos en 51 cursos, de los cuales 39 corresponden a la jornada diurna, con 1.414 alumnos y 12 a la jornada nocturna, con 276 alumnos. Del total de alumnos señalados, 171 corresponden a Enseñanza Básica y 1.519 a Enseñanza Media. El Liceo continúa funcionando en tres jornadas: mañana, tarde y noche. La jornada de la mañana se extiende desde las 8:00 a las 13:30 horas; la jornada de la tarde va desde las 13:45 a las 19:15 horas, y la jornada nocturna se cumple desde las 19:20 a las 23:30 horas. El Liceo Nocturno empezó a funcionar en el año 1944, fruto de una feliz iniciativa de los profesores del Liceo y de los alumnos de los últimos cursos de humanidades; como se dijo antes, esta última jornada está destinada a recibir personas adultas y gente que trabaja; su primer Rector fue don José Tohá González que más adelante llegó a ser Ministro derlnteríor y Vicepresidente de la República. Un total de 72 profesores cumplen con la atención de las tres jornadas, todas las cuales dependen del equipo docente-directivo formado por el Director don Héctor Raúl Carrasco Jara, el Subdirector don 31 Wagner Pérez Eulufí y el Inspector General don Jaime Herrera Uribe. El Liceo cuenta con un moderno Internado que hospeda a un centenar de alumnos procedentes del campo y ciudades vecinas; está a cargo de un Director, secundado por 5 inspectores y 8 auxiliares. Tiene amplios comedores, sala de estar, dormitorios y una sala de estudio construida con aportes del Centro de Padres y de la Municipalidad de Chillán. . En cuanto al Externado, el número de inspectores sube a 8; hay 7 funcionarios administrativos y 11 auxiliares. Además, el Liceo tiene dos orientadores, una Unidad Técnico-Pedagógica (U.T.P.), una oficina de Servicio Dental y una excelente Biblioteca con 8.333 volúmenes a cargo de un bibliotecario. También existe un Centro General de Padres y Apoderados y un Centro de Alumnos, ambos eficientes colaboradores del quehacer liceano. Un amplio gimnasio, con graderías y baños anexos, permite realizar las clases de Educación Física sin que importe el estado del tiempo. Un Salón de Actos, dotado de escenario, construido con aportes del Centro General de Padres, sirve para dictar conferencias, realizar actos académicos, veladas artísticas y de aniversario, ceremonias de graduación, etc. Cabe mencionar también que hay dos Salas de Computación con 15 computadores del "Proyecto Enlaces" y donaciones de la Ilustre Municipalidad de Chillán. Otras obras realizadas durante este período son: dotación de mobiliario nuevo, con aporte del Municipio, a todas las salas de clases. Remodelación de la Sala de Profesores y la Biblioteca, dotando a esta última de mejor mobiliario y muchas obras de consulta como aporte del Proyecto MECE-MEDIA. Remodelación de los baños de los profesores . . Se hizo un escenario al aire libre. Se mantienen en el patio arcos de beibifútbol y básquetbol y red del vóleibol, etc. Llegado el mes de septiembre de 1997, hubo que lamentar la enfermedad del profesor Héctor Raúl Carrasco Jara, Director del Liceo, quien debió someterse a una delicada operación de implante de bypass, lo que lo ha mantenido con licencia médica. Por fortuna se ha recuperado notablemente. Mientras tanto. de nuevo lo subroga el Subdirector don Wagner Pérez Eulufí, a quien debemos y agradecemos gran parte de la información de este último período. EX PROFESORES DISTINGUIDOS Eminentes profesores han prestado sus servicios en este colegio. Podemos citar los siguientes: Enrique Malina Garmendia, Adrián Soto Vivanco, Samuel Zenteno Araya , Claudio Rosales Yáñez, Manuel Jesús Ortiz, Francisco Briones, David Briceño, Raimundo Lemaitre, Liborio Manterola, Eugenio María Hostos, Narciso Tondreau, Luis To- 32 rres Pinto, Ramón Pérez Yáñez, Nicanor Parra, Alejandro Venegas, Tomás Figueroa Bravo, Pedro Nolasco Cruz Silva, Raúl Castañeda Roland, Humberto Catalán Muñoz, Heriberto Torres Arratia, Ana Figueroa G., Luis y Manuel Lara, Manuel Venegas Valdés, Osvaldo Ledezma García, Carlos Fuentes Véjar, Alfredo Reitcher, Eugenia Freude S., Abelina ROdríguez de Espinoza, Alvaro Tobar Gajardo, Pedro Contreras Valderrama, Juan Moisés Pérez Jiménez, Pedro Troncoso, Benito Heredia Maya, Gumercindo Oyarzo Vargas, Jorge Chaves Daihlé, Fabio Flores Contreras, Alfonso Poblete, Alejandro Carrasco, Claudina Muñoz, Zoila Siredey, Froilán Rioseco, Candelario Sepúlveda, Donato Espinoza, Clodomiro Acuña, y tantos otros que entregaron al Liceo sus mejores años. EX ALUMNOS DISTINGUIDOS Son muchos, algunos de los cuales llegaron a ocupar altos cargos en el gobierno. Podemos nombrar los siguientes, excusándonos por ser imposible poner la lista completa: Juvenal Hernández Jaque (ex Rector de la Universidad de Chile), Armando Quezada Acharán, Federico Puga Borne (ex profesor de la Universidad de Chile y ex-Presidente de la Sociedad Científica de Chile), Carlos Silva Vildósola, Manuel Guzmán Maturana, Moisés Tro_ncoso Poblete, Ignacio Brunet, Luis Alamos Barros (ex Intendente de Nuble y ex Ministro de Fomento), Santiago Labarca Huberston (ex Ministro de Educación, ex Rector de la Universidad Técnica del Estado y ex Embajador en Italia), Marcial Mora Miranda (ex Diputado y ex Ministro del Interior), Claudio Arrau León (destacado pianista de fama internacional; una calle de Chillán, justamente la del Liceo de Hombres, lleva su nombre), Alfonso Lagos Villar (ex Director del diario La Discusión y Premio Nacional de Periodismo), Carlos Santelices, Custodio Oyarzún, Armando Lira, Jerónimo Alvarado, Alfonso Quintana Burgos (ex Diputado, ex Ministro de Agricultura y ex Vicepresidente de la República), José Tohá González (ex Ministro del Interior y ex Vicepresidente de la República), Jorge Tapia Valdés (desempeñó cargos de Ministro y Embajador), Osear Soto Guzmán (cardiólogo, médico del Presidente Allende), Aurelio Celedon, Comandante en Jefe de la Fuerza Aerea de Chile y Walterio Millar, historiador y periodistaEstimados ex alumnos, al pensar en vuestro Liceo, recordad, con orgullo, que formasteis parte de un Liceo grande y prestigioso; que le debéis la más sagrada reverencia, y que sois vosotros los llamados a mantener ese prestigio y esa· grandeza conseguida por vuestros antecesores en casi siglo y medio de existencia. 33 HOMENAJE A DON NARCISO TONDREAU Con ocasión de cumplirse cien años desde que don Narciso Tondreau asumiera, en octubre de 1897, la Rectoría del Liceo de Hombres de Chillán, la Dirección, profesorado y alumnos del establecimiento le rindieron un sentido homenaje que, a través de una semana, contó con una exposición , charlas y una velada artística en la que se dieron a conocer a los alumnos los rasgos más sobresalientes de su recia personalidad , su cariño por el colegio, al que sirvió durante 28 años consecutivos (1897-1925) y sus numerosas obras que colocaron al Liceo entre los mejores establecimientos de segunda enseñanza del país. NECESIDADES MAS URGENTES DEL LICEO Son muchas, mencionaremos las más importantes: Reparación del piso y techo del Gimnasio. Reparación total de los baños del establecimiento. Implementación de Laboratorios de Química, Física y Biología. Dotación de butacas para el Salón de Actos del Liceo. Necesidad de una multicancha. Terminamos esta reseña histórica del Liceo de Hombres de Chi· Ilán augurando al querido Liceo mejores días y diciendo a los alumnos actuales y venideros: iel futuro es vuestro; aprovechad los conocímien· tos y la cultura que os dan vuestros maestros para ser ciudadanos dig. nos y útiles a la Patria y labraras un brillante pO/venir; con esfuerzo y perseverancia yo sé que lo lograréis! Felicidades. 34 BIBLIOGRAFIA Narciso Tondreau V. "Reseña histórica sobre el Liceo de Chillán", Anales de la Universidad de Chile. 1918. Fernando Martínez L. Reseña histórica de ChjJlán. Impreso por Univer- Bartolomé Rojas E. sidad de Chile, Sede Nuble. 1980. "Narciso Tondreau, un rescate histórico- ~~6f~~~nda~" 'E~~~ig B%eer~?d:d ~~l tí~~6~B?o~ 1991. Carlos René Ibacache "Narciso Tondreau", Periódico La Comuna. Municipalidad de Chillán. 1983. Sergio Gana L. "Biografía de un liceo centenario", Revista Rumbos. 1953. Liceo de Hombres, 135 años de historia", Periódico La Comuna. Municipalidad de Chillán. La Discusión. 1988. Diario chillanejo fundado en 1870. Ediciones del 16 de mayo de cada año. Juan Gabriel Araya G. Eugenio María de Haslas en Chile. Depto. de Producción Gráfica del Instituto Profesional de Chillán. 1987. Comisión Redactora La provincia de Ñuble en la Exposición de Sevilla. Imprenta 1928. y Litografía Universo, Santiago, 35 ANEXOS ANEXO 1 BIOGRAFIA DE DON NARCISO TONDREAU VALIN Sergio Gana Lagos Luis Fernando Tondreau y esposa, residentes en Canadá, a instancias de un cuñado de apellido Valin que vivía en el norte de Chile, decidieron tentar suerte y venirse a vivir a este país. Partieron en 1861 en un frágil barco a vela con sus dos hijos, Luis Napoleón y Armando, más un tercer hijo de tres meses de gestación. Tras seis meses de navegación, el barco echó anclas en el puerto de Coquimbo, justo a tiempo de que naciera el primer Tondreau chileno, hecho que ocurrió el 25 de agosto de 1861. Le pusieron por nombre Narciso David Tondreau Valin. Pronto la familia decidió trasladarse a la vecina ciudad de La Serena, donde arrendaron una espaciosa casa con amplio patio. Aquí ere. ció el niño Narciso y cuando llegó a la adolescencia pasó a ser hijo único, pues su hermano Luis Napoleón se embarcó con rumbo desconocido, sin saberse más de él; por su parte, Armando se enroló en el ejército donde, a causa de una enfermedad, falleció al poco tiempo sin dejar descendencia. Los padres de Narciso se preocuparon de su educación y -hay constancia de que lo inscribieron en el Seminario de La Serena. Pocos años después encontramos al joven Tondreau estudiando Derecho en la Universidad de Chile y absorbiendo cultura a través de las obras clásicas que leía con pasión. Aquí tuvo ocasión de relacionarse con eminencias de la época como Valentín Letelier, Pedro Balmaceda, Enrique Matta, Orrego Luco, Juan Enrique Tocornal, Pedro Montt, Eduardo de la Barra y Rubén Darío que, por ese tiempo, estaba en Chile y quien, al parecer, influyó hondamente en su espíritu haciéndolo amar la poesía. Los demás, amantes todos de las bellas letras, moldearon su carácter e influyeron notablemente en su acervo cultural, sin ser absorbido por el sectarismo, tomando un poco de todo lo que él consideraba lo mejor. En este ambiente de intelectuales y artistas Tondreau fue uno más de ellos. En 1887 pUblica un libro de poesías (Penumbras) que recibió una excelente acogida y del cual Rubén Darío dijo lo siguiente: "La publicación de Penumbras me ha llenado de verdadero placer; su autor puede gloriarse de ser, entre los poetas chilenos contemporáneos, digno de toda estima y de todo aplauso". Al mismo tiempo, Tondreau hace sus primeras letras en los periódicos oLa Tribuna Electoral" y "La Epoca donde ocupaba los cargos de redactor y crítico literario. El 5 de junio de 1887 publica en La Epoca su poesía MMis amores" dedicada a Rubén Darío quien, en carta, le agradece y felicita por tan sentidos versos. A su vez, Darío dedica a Tondreau su poesía KLo que son los 11 38 , Narciso Tondreau Valin Rector : 1897- 1925 Una ejecutoria que dejó una honda huella en el Liceo Ramón Peréz Yañez Rector 1926-1939 Digno continuador de su brillante antecesor. Tomas Figu eroa Bravo Rector: 1939-1950 La tarea de la reconst rucción después del terremoto de 1939 Gumerci ndo Oyarzo Vargas (1892-1981) Profesor de Artes Plásticas y gran animador de la vida cultural chillaneja RATOS ILUSTRADOS Hazaña del periodismo estudiantil RUMBOS Continuidad y ruptura de una hermosa tradición poetas~, publicada en Val paraíso el 8 de agosto de 1888. Vale la pena señalar aquí que publicar un libro, en ese tiempo, . era una empresa económica que sólo podían afrontar los poetas ricos; y Tondreau no lo era. Si no hubiese sido por la ayuda de varios amigos amantes de la poesía, encabezados por Jorge Huneeus Gana, el libro Penumbras jamás se habría publicado y así no podríamos disfrutar hoy de esos hermosos versos que se titulan ~Lo que va de ayer a hoy", "Al pie del sauce", "Que bien se está en la tumba", "Tedio", ·Sueño de invierno", uEn el cementerio", uVivir es luchar", "Soñando despierto", -La procesión", etc. Además de la poesía y la lectura de obras clásicas, Narciso Tondreau era un apasionado de la música clásica; poseía un piano y gozaba inmensamente interpretando obras de los grandes clásicos como Mozart, Seethoven, Sach, Chopin, en forma personal. ¿Dónde estudió música?; no lo sabemos: posiblemente en el Seminario de La Serena. Todo esto demuestra que Tondreau tenía talento, dedicándose a todo lo que sus inspiraciones artísticas le llevaban. Fue gran amigo de Pedro Antonio González, pero no se dejó llevar por su estilo de vida sino que se mantuvo pulcro y recatado, como debió ser en sus comienzos bajo la inspiración de su paso por el Seminario de La Serena. Pasa el tiempo y, al producirse la guerra civil de 1891, Tondreau toma partido al lado de las Fuerzas Parlamentarias, no obstante haber sido gran amigo de Pedro Balmaceda, hijo del Presidente. Se enroló como capitán y como jefe de Sección del Ministerio de Guerra y Marina; más tarde ascendió a sargento mayor e hizo la campaña en calidad de ayudante del Ministro de Guerra. Terminado el enfrentamiento, el Gobierno de Jorge Montt le ofreció una Embajada que Tondreau no aceptó. En cambio fue designado sucesivamente Intendente de Maule en 1891, de linares en 1892 y de Cautín en 1894. Ahora es tratado de don y así lo seguiremos consignando en esta reseña biográfica. Ya se ha recibido de abogado y con este título universitario y toda la inmensa cultura adquirida abandona definitivamente Santiago para radicarse finalmente en Chillán por casi 40 años. En 1894 había contraído matrimonio con Delfina Delia del Solar, hermosa y distinguida dama nacida en Talca, quien le dio cuatro hijos. Por decreto de fecha 25 de septiembre de 1897 que lleva las firmas de Federico Errázuriz Z. y Domingo Amunátegui S. , es designado Rector en propiedad del Liceo de Hombres de Chillán, por renuncia de su antecesor don Luis A. Torres Pinto, provocada por disensiones de carácter político en torno a la supresión del sexto año de humanidades. Don Narciso Tondreau se hace cargo del Liceo el día 7 de octubre de 1897 y es bien acogido por los profesores y por la prensa local; La Discusión del día siguiente dijo: -Desde ayer se encuentra entre nosotros el nuevo Rector del Liceo de Chillán, señor Narciso Tondreau; le enviamos nuestros saludos. Personalidad joven , entusiasta y progresista, todo 39 hace pensar que el señor Tondreau será para nuestro Liceo, tan mal tratado por los últimos sucesos, un mensajero de orden, corrección y mejoramiento en todo sentido". Este es el momento en que aparece, en forma tímida, un personaje que, con el correr del tiempo, será considerado entre los más ilustres que hayan vivido en Chillán y como el mejor Rector que haya tenido el Liceo. Pero no todo fue fácil; el edificio del Liceo era estrecho para contener la creciente demanda de matrícula y para la recepción de nuevos internos; en 1902 el Ministerio de Instrucción Pública otorgó fondos para ampliar el Internado con un nuevo pabellón que fue inaugurado en 1905. El edificio del Liceo estaba casi en estado ruinoso, especialmente su techumbre, al extremo de que en el invierno de 1919 se hundió el techo de la Sala de Física y se llovían todas las demás salas, la Rectoría, la Biblioteca, la Sala de Profesores, etc. Esto motivó por parte del Rector el envío de un oficio al Intendente de la provincia haciendo ver que "hacía más de 15 años que venía pidiendo el cambio total del techo del edificio que se encuentra en desastrosas condiciones". Y a estas dificultades materiales se sumaban las académicas que debió afrontar el señor Tondreau. Después de cinco años de haber llegado don Narciso a la Rectoría del Liceo, este colegio ocupaba un lugar de prestigio entre los establecimientos de la región; su deseo era ubicarlo entre los mejores del país; sin embargo, la situación económica de los profesores era deprimente y no constituía ningún aliciente para su delicada función. Don Enrique Malina Garmendia escribió más tarde: "Tenían que recargarse de horas de clases extras, alcanzando límites completamente antipedagógicos lo cual acentuaba la falta de idoneidad". Sin embargo, bajo la dirección del señor Tondreau y estimulados por su entusiasmo, los profesores del Liceo sacaron fuerzas de flaqueza y de esta forma, todos los problemas no fueron suficientes para amilanar el valor y ánimo de educar. Y así lo demuestra la realización del Congreso General de Enseñanza realizado en Santiago en 1902, al que el Liceo de Chillán envió tal cantidad de trabajos de excelente calidad que obtuvo el 2!! lugar en la Exposición, recibiendo felicitaciones del Presidente de la República Germán Riesco y del Ministro de Instrucción Pública don Manuel Barros Borgoña. Y no era para menos, ya que los trabajos de don Enrique Malina y de don Narciso Tondreau fueron calificados como un gran aporte a la educación. En la sesión final el Rector del Liceo declamó el poema "Roma Imperial" que mereció nutridos aplausos de los asistentes al Congreso. En esta línea de trabajo se siguió mientras don Narciso Tondreau ocupó la Rectoría del Liceo, y tanto cariño y aprecio le dispensaban sus alumnos, profesores, apoderados y la ciudad en general que para su día onomástico, todos los años, se le ofrecía una velada artístico-literaria organizada por el Liceo de Hombres, el Liceo de Niñas, el Liceo Pedagógico y el Americano de Señoritas, con la concurrencia de 40 mucho público y altas personalidades de la ciudad. Esto demuestra que, por el prestigio logrado por el Liceo y por sus propias cualidades, don Narciso se había transformado en uno de los personajes más respetados y queridos de la ciudad. La Discusión del 19 de octubre de 1918 dice, al respecto: uEI señor Tondreau, actual Rector, es un caballero que reúne, como pocos, las cualidades de honorabilidad, amabilidad, mucha prudencia y discreción que necesita un jefe para mantener la marcha armoniosa de un establecimiento como el Liceo de Hombres de Chillán. Ese mismo año los Anales de la Universidad de Chile publican una completa "Reseña Histórica sobre el Liceo de Chillán", escrita por el señor Tondreau. En octubre de 1920 se inauguró el Salón de Actos del Liceo que sirvió de punto de enlace de intelectuales, artistas y estudiantes de la ciudad. Así, la labor del Liceo, según deseo del señor Tondreau, se extendía a toda la sociedad chillaneja. Dejar el ambiente cultural de Santiago que le ofrecía tantas oportunidades, soportar estoicamente el estado ruinoso de una casa que amenazaba derrumbarse, son pruebas suficientes del espíritu de sacrificio y del amor de don Narciso por la educación; sólo una persona que ama lo que hace puede actuar así. Y, a pesar de tantos afanes y preocupaciones, don Narciso encontraba tiempo para dedicarse a la música; pronto trabó amistad con la familia Schaeffer que mantenía un "Almacén de Música" y que fueron los impulsores de la fundación de la "Sociedad Musical Santa Cecilia". En efecto, para el 18 de junio de 1918 citaron a una reunión destinada a crear en Chillán una institución que albergara a los artistas y amantes de la música de la ciudad; por supuesto que a dicha reunión concurrió don Narciso Tondreau junto a otras personalidades de la época, como Otto Schaeffer, Carlos Schaeffer, Daría Brunet, Axel Madson, Edmundo Georgi, Ornar Hernández, Generoso González, Carlos Dorlhiac, Kuno Habenicht, etc. Pronto don Narciso ocupó la Presidencia de la naciente institución que dirigió con tino y abnegación por varios años. Cuando jubiló como Rector del Liceo en el año 1925, la Sociedad Musical Santa Cecilia, en 1926, lo nombró por aclamación, Presidente Honorario Vitalicio de la institución de la cual había sido uno de los principales fundadores. En 1921 Claudia Arrau vino a Chile y dio dos conciertos el 10 Y 11 de julio. Don Narciso le hizo entonces entrega de un hermoso canastillo de flores y, en un breve discurso, recordó al niño prodigio de ayer, transformado en un célebre artista para bien de la música y el prestigio de la patria que lo vio nacer; luego rindió homenaje a la madre de Arrau, la señora Lucía León de Arrau, que fue aplaudida de pie por toda la concurrencia; el momento fue de gran emotividad. La música, para don Narciso, fue una expresión del arte que lo acompañaría toda su vida. Apreciado por todos no puede extrañarnos que el día 29 de oc- 41 tubre (día de San Narciso) el homenaje que se le rindiera año a año se transformara en una fiesta pública con la participación de todos los co. legios, profesores, alumnos e incluso, autoridades. Cualquier reunión pública, actos cívicos, de beneficencia o sociales debía contar con su presencia. Pero el tiempo transcurre inexorable; después de 28 años de Rectorado en nuestro Liceo y de 33 años de servicios públicos, don Narciso decide acogerse a jubilación. El homenaje de que fue objeto por este motivo fue apoteósico; se llevó a efecto el 24 de abril de 1926. Se organizó una velada artística en el Teatro Municipal, donde actuaron los más destacados artistas de la ciudad y tuvo importante actuación la Orquesta de la Sociedad Musical Santa Cecilia dirigida por don atto Schaeffer. Asistie ron a esta velada las más connotadas personalidades de la ciudad, autoridades, todo el profesorado y gran cantidad de alumnos; el teatro se hizo estrecho para contener a toda la gente que deseaba rendir su homenaje a tan ilustre maestro. La prensa no escatimó elogios para su persona y expresó que "hoy que el señor Tond reau ha querido retirarse a un justísimo descanso, recibe la muestra de agradecimiento y simpatía de toda la ciuad y, en especial de los educadores, quienes quieren significar de esta manera el alto concepto que les merece la hermosa obra cultural y educativa que ha realizado en nuestro medio por casi treinta años". Después de la velada se realizó un Banquete de Gala en el Club Comercial, al que asistieron más de cien personas que escucharon emocionadas las palabras de agradecimiento y despedida del señor Tondreau; hubo muchos que no pudieron contener las lágrimas; así sentían en sus corazones el alejamiento de tan insigne maestro y querido Rector. Ya jubilado, don Narciso permaneció durante algunos años más en la ciudad , haciendo clases en el Seminario de Chillán, actividad que suspendió a raíz del fallecimiento de su esposa, ocurrido en el año 1928. Como sus hijos ya no se encontraban en Chillán, viajaba con frecuencia a otras ciudades con el deseo de verlos y pasar unos días con ellos. Por fin se decide a irse a vivir alternada mente con sus hijos y en 1933 se despide definitivamente de Chillán, recordando con cariño a esta tierra donde vivió y trabajó por tantos años. Después de vivir 16 años con sus hijos (que eran cuatro) fallece a causa de un tumor maligno el día 16 de diciembre de 1949, a la edad de 88 años. La Discusión, único periódico que seguía editándose en Chillán, le dedicó algunos artículos en las ediciones de diciembre de 1949, recordando con cariño al gran maestro. En 1965 el Supremo Gobierno le rinde un homenaje póstumo al decretar que este coleg io se llamará en lo sucesivo "LICEO FISCAL DE HOMBRES NARCISO TRONDREAU", lo que involucra un acto de justicia y reconocimiento a su magnífica y dilatada labor en beneficio del 42 Liceo. Así, don Narciso no quedará jamás en el olvido; el Liceo que tanto amó llevará por siempre su nombre y cada 16 de mayo se le rinde homenaje en el Liceo. V, con ocasión de cumplirse en octubre de 1997 cien años desde que don Narciso asumió la Rectoría del Liceo, la Dirección y profesorado le rindieron un sentido homenaje, organizando una · Semana Cultural" en recuerdo suyo que contó con una exposición, charlas y una velada artística como las que él gustaba organizar y en la cual se dieron a conocer a los alumnos algunos rasgos biográficos suyos que constituyen un ejemplo para la juventud. 43 ANEXO 2 SEMBLANZA DE DON EUGENIO MARIA DE HOSTOS Sergio Gana Lagos Este eminente educador, reformador y publicista de fama continental, nació en 1842 en la isla de Puerto Rico. Siendo aún muy niño fue enviado por sus padres a educarse a España; allí nació en su espí- ~~~U~iÓ.n~:I~O~~~U~~t~ ~~d:ul~?6~~~ ~~1i~~ ~~1~~~I'qE;r~oCnO~r~:~~~~O~ al selVicio de sus ideales libertarios. Tuvo su primera oportunidad en 1868 cuando, permaneciendo aún en Europa, supo de los esfuerzos de los cubanos por liberarse del yugo de España. De inmediato se trasladó a los Estados Unidos, donde se incorporó a la Junta Revolucionaria de Cuba. No descansó un momento redactando artículos para los periódicos, preparando "meetings" de apoyo, recolectando fondos para remitir %~~~ ~e~~a~a~i~~~ó~; f~r~:b:~j~~re~ ~~~~g~7~;~~i~ ~e i~~ fu~~ con otros guerrilleros, actuando en asaltos y emboscadas, logrando, por fortuna, salir con vida. Luego extendió su acción a Sudamérica, llegando en 1870 a Lima, donde su ansia por culturizar al pueblo lo llevó a fundar la "Sociedad de Amantes del Saber", donde se impartían conocimientos correspondientes al área Primaria y Secundaria. Al mismo tiempo seguía escribiendo y publicando artículos en los diarios El Heraldo y La Patria de Lima. A principios de 1872 llegó a Chile y, en razón de su merecida fama, fue nombrado redactor del diario La Patria de Valparaíso por su Director don Isidoro Errázuriz. Viajó con frecuencia a Santiago y tomó contacto con grandes personalidades de la época como el almirante Blanco Encalada, Manuel Antonio Matta, Pedro León Gallo, Benjamín Vicuña Mackenna, José Manuel Balmaceda y otros que le ayudaron a forma r una sociedad destinada a trabajar por obtener auxilios para Cuba; al mismo tiempo trabajaba en dar forma a "Un juicio crítico sobre Hamlet" que, una vez publrcado, fue comentado elogiosamente por los críticos literarios. Se interesó también por la escultura y la pintura chilenas, prediciendo que los jóvenes pintores Pedro Lira, Alberto Orrego y Nicolás Guzmán serían, en breve plazo, pintores famosos. El tiempo le dio la razón. A fines de 1873 partió de Chile a Buenos Aires , donde fue muy bien recibido por la Sociedad, el Gobierno y la prensa. Continuó allí su ~obs~~ ~~ifndci~~~:s i~!~~m~i~~~ b~r~t~~~e~e~oseo~tt~~Oyti;i~fro tuU~~rr~ ~atal. No duró mucho porque los españoles, conocedores de su espíritu libertan o, lo obligaron a partir hacia Venezuela. Su inquietud por educar, 44 que era en él como una obsesión, lo llevó a fundar en Caracas un cole- ~i~~c~p~~~es~~ dl:st~n~Úab~Cfor~~r;'i~i~:~~O~urddtn!~~'~~~~~~ e~~~~:~z~~ Le cupo, además, el honor de reformar por entero la enseñanza secundaria y superior, aplicando en ellas el Sistema Concéntrico de enseñanza que se aplicaría más tarde en Chile a raíz de la Reforma Educacional de 1889 que él ayudó a impulsar. No se explica uno cómo podía darse tiempo para tanta actividad. Durante su estada en Santo Domingo publicó dos notables libros: Lece/ulles de EJerecho Constiiu¡;,iof/8f y un tratado de Moral Social. Se ha dicho, con razón, que Hostos fue "un fecundo sembrador de ideas". X así lo calificó el escritor dominicano Juan Bosch en su novela biografica titulada Hostos, el sembrador edi· tada en La Habana en 1939. En 1888 el Presidente Balmaceda envía un cable a Santo Do· mingo solicitando a Hostos que regrese a Chile para ayudar a elaborar ~it9~~J~~~c~~r ~~1°~~~0 Ed~uH~c~~r~s ~~e8~ill~n~~g~b~~~re~:'o ;~ed:~ muy bien acogido por la sociedad chillaneja, por la prensa, por el prole· sorado y por los padres y apoderados. La Discusión de Chillán ya se había encargado de darlo a conocer por anticipado, como lamento más adelante su partida. El señor Hostos no sólo hizo crecer al liceo en todo sentido, cimentando su prestigio, sino que volcó su preocupación hacia otros ámbitos, participando en actos públicos, dando conferencias para exponer sus ideas educacionales y morales, y, más allá del ámbito chillanejo, participa en un Congreso Pedagógico en Santiago y apoya a. los maestros en el sentido de aumentar sus remuneraciones a fin de que éstos puedan consawarse por entero a la educación, sin tener necesidad de ocupar su tiempo en otras tareas (el tema sigue vigente en nuestros días). 189~1. r~~t~~~~d~~18~~~0;0~~r~~~~i~Tó~odrte'r &~~~~~n~~ d~~~g :S~~ii~ de la Rectoría del Liceo Miguel Luis Amunátegui en Santiago. La Discusión de Chillán publicó, al respecto, lo siguiente en su edición del 22 de mar· zo de 1890: "Ha sido nombrado Rector del Liceo Miguel Luis Amunátegui de Santiago, el actual Rector del liceo de Chillán señor EUQenio María de Hostos. Sentimos, sinceramente, la separación de Chlllán del señor Hostos que se había hecho estimar de todos por sus méritos y talento. Deseamos al señor Hostos en su nuevo cargo la más completa fortuna". "Es conveniente puntualizar -dice Juan Gabriel Araya· que Hos· tos fue uno de los más distinguidos educadores extranjeros que ha te· nido el país a lo lar90 de su historia". La educacion, para Hostos, es un concepto que se debe practj· car en estrecha relación con el medio social al cual pertenece el indivi· duo, debiendo comenzar ésta en el seno del hogar. Se comprende en- 45 tonces el beneficio grande que recibió el Liceo de Chillán durante su breve permanencia y el prestigio involucrado con su presencia. En Santiago el señor Hastas se incorp'0ra a una gran cantidad ~;toa;~d~~~~~¡d:~~~~O~ebe~~;jj~~:;to~i~~t~~~~ ¡95LiI~r~Z~fci~aI1~~~ de Santiago lo declara "Hijo adoptivo" y con ese gesto reconoce su vasta labor en Chile en pro de la cultura y la educación. Por ese tiempo se publicaba en Chile la Revista de Instrucción Secundaria que el señor Hastas utilizó para divulgar sus ideas pedagó- gicas. Mientras ejercía el rectorado en la ciudad de Chillán publicó en dicha revista dos interesantes artículos titulados "La enseñanza secundaria y su reforma" y "La sección preparatoria de los liceos". Estos eran temas de gran actualidad a fines del siglo XIX y dichos artículos contribuyeron, en gran medida, a uniformar criterios al respecto. En ellos insiste en la finalidad social que debe tener la educación para que así Fau:~~c~~~~li~eC~~ ~~~6;J~~~~~t~,0~~;~~~~ ~er~~g~~~c~s~s~2r;g;tr~~: enseñanza enciclopédica y el exagerado número de asi~naturas vigentes en la época. Se define partidario del sistema concentrico de asignaturas, rechazando el sistema de los ramos sucesivos con exámenes finales que imperó durante mucho tiempo en Chile; en esto concuerda con el criterio de los educadores alemanes. Sus ideas no sólo las expuso en publicaciones diversas, sino que las aplicó en la práctica docente con excelentes resultados. Podríamos agregar otros detalles de la vida del señor Hostos en el país, pero creo que basta con decir que fue un periodista incansable que supo estampar en la imprenta sus inquietudes, sus desvelos, su . sabiduría, su amor por la educación y su bregar incansable por la libertad de América, por la causa de Cuba y de las Antillas todas. El señor Hostos abandona Chile en 1898, justamente el mismo año en que son derrotadas las fuerzas españolas en Centroamérica; pero este hecho no le satisface del todo pues advierte que intereses foráneos seguirán manejando la economla de las Grandes Antillas. Trata de luchar contra esa situación y para ello hasta se entrevista en 1899 con el Presidente de los Estados Unidos. Desea que los puertorri- ~~~:oe~lg~~~~~ ~e~~~as~~op~~i~~sg~~:~no~r~~~~~~t,~ ~7 fr~~~~~i¡Oe~ sus intentos decide radicarse en Santo Domingo que será su hogar definitivo y último. Tras tanto bregar, cansado y desilusionado, fallece el 11 de agosto de 1903 a la temprana edad de 61 años. Sus restos descansan en el Panteón Nacional de Santo Domingo, santuario que la República Dominicana consagra a sus héroes y personajes célebres. 46 ANEXO 3 BREVE HISTORIA DEL INTERNADO Sergio Gana Lagos Un Decreto Supremo de fecha 2 de marzo de 1877 autorizó la creación del Internado del Liceo de Hombres de Chillán, bajo la Rectoría del eminente profesor Sr. Liborio Manterola. Sin embargo, la falta de un edificio adecuado y la escasa demanda de matrícula impidieron ver realizado este anhelo. Sólo veinte años más tarde, el 17 de marzo de 1897, el Rector don Luis Torres Pinto tuvo el honor de abrir el Internado y dejarlo organizado y en funciones. El Internado del Liceo de Hombres de Chillán sirvió a la provincia y a la zona central del país durante 42 años consecutivos, hasta que fue destruido totalmente, junto con el Liceo y la ciudad, por el sismo del 24 de enero de 1939. Por esa época el Liceo ocupaba la manzana comprendida entre las calles Libertad, Rozas, Bulnes y Buenos Aires (actua l Avenida Bernardo Q'Higgins). El Internado estaba en el ángulo de Buenos Aires con Bulnes. Contaba con tres grandes pabellones de dormitorios (para grandes, medianos y chicos), cada uno con sus baños anexos. La doble hilera de catres blancos, de propiedad del Liceo, daba un aspecto de sala de hospital a estos dormitorios. En una esquina de cada uno estaba la cabina del Inspector desde donde se manejaban las luces y timbres, provista también de un ventanillo de observación. A las 6:30 A.M. en primavera y a las 7 A.M. en invierno se tocaba la Ulevanta~ da" y luego seguía el aseo personal de los alumnos, arreglo de las camas, revista de aseo, estudio y desayuno, para continuar el día con clases en doble jornada junto a los alumnos externos; almuerzo a las 12:30 horas; once a las 16:30 (entre la segunda y tercera hora de cIases de la tarde); después, recreo, estudio, comida a las 19:30 horas y acostada a las 21 horas. Contaba el internado con buenas cocinas, vaji~ lIa suficiente, comedores, salas de estudio, guardería de útiles escolares, ropería, etc. Los inspectores de ese tiempo eran personas mayores que infundían respeto por presencia. Recordamos entre ellos a don Exequiel Sepúlveda (El Huaso Sepúlveda) y a don Carlos Castilla (El Cholo Castilla). El ecónomo era el señor Francisco de la Fuente (don Pancho, alias el Buffalo Bill). No existía el cargo de Vicerrector de modo que el Rector, don Ramón Pérez Yáñez, dirigía también el Internado·. Destruidos el Liceo y el Internado por el terremoto del 24 de enero de 1939, como ha quedado dicho, se hicieron numerosos esfuerzos por conseguir la reapertura de ambos. Don Tomás Figueroa Bravo, Rector que sucedió a don Ramón Pérez Yáñez, logró la reapertura del externado el 5 de junio de 1939 en unas barracas de viviendas colectivas ubicadas en la Avenida Argentina esquina de Itata. El local era estrecho y deficiente y, por supuesto, allí no tuvo cabida la sección de 47 Internado. En agosto del mismo año se traslada el liceo a un local ubicado en la Plaza Sánchez, apenas un poco mejor que el anterior, pero siempre sin espacio para el Internado. En octubre de 1939 se traslada el Liceo a los tres pabellones de madera construidos en su antiguo terreno de Avda. Libertad, pero, lamentablemente, no se ha consultado un pabellón para el Internado. El señor Figueroa realiza, entonces, gestiones para obtener un edificio definitivo para el Liceo, el que se construye en la manzana ubicada entre las calles Lumaco, Maipón, Carrera y El Roble, edificio que sólo viene a terminarse gracias a las gestiones del Comité Centenario del Liceo de Hombres de ChilJán, durante el rectorado del señor Humberto Catalán Muñoz. Tampoco esta vez ha podido construirse un pabellón para el Internado, no obstante que la planificación general del edificio consultaba tres pabellones para el objeto. El Instituto Come rcial de Chillán que, por entonces, funcionaba en un local de emergencia, pidió al Gobierno que se le cediera el local que el Liceo dejaría en calle Libertad. El señor Catalán condicionó esta entrega a la destinación de fondos para construir un pabellón del Internado en el nuevo local del Liceo, a lo cual accedió el Supremo Gobierno, destinando para el objeto la suma de diez millones de pesos. Como la obra demoraría algunos años en construirse, el señor Catalán se dio a la tarea de reunir los elementos más indispensables para hacer funcionar un Internado. Pidió y obtuvo la vajilla, loza, cristalería, mesas, manteles, etc. Lamentablemente llegó al final de su carrera docente sin lograr su anhelado propósito. Sucesor del señor Catalán fue el pedagogo en Castellano don René Cabrera lñíguez, quien, contando ya con el edificio para el Internado y los enseres indispensables, hace los trámites necesarios para lograr, por fin, la reapertura del Internado, después de 25 años de inactividad. Sus gestiones tienen pleno éxito y el 1 de julio de 1964 el Internado del Liceo de Hombres de Chillán reabrió sus puertas con una matrícula inicial de 50 alumnos. Desempeñó las funciones de Ecónomo el titular, nombrado bajo la Rectoría del señor Catalán, don Luis Contreras Albornoz, el mismo eficiente funcionario que hoy cumple, con celo y abnegación ejemplares, dichas delicadas funciones . El propio Rector don René Cabrera dirige el Internado por no existir el cargo de Vicerrector. En 1967, tras algunos trámites realizados personalmente en Santiago, logra el señor Cabrera el tras lado del cargo de Vicerrector del Liceo de Melipilla, que no tenía Internado, al Liceo de Hombres de Chillán y propone para servirlo al ex alumno, antiguo profesor e Inspector General del Liceo, Sergio Gana Lagos, autor de estas líneas, quien es nombrado interinamente a contar del 1 de septiembre de 1967. Le corresponde a este funcionario ser el primer Vicerrector en toda la historia del Liceo de Hombres de Chillán. Desde el primer ,momento organiza la vida de los internos en un régimen de estudio, cola- 48 boración, respeto y acatamiento de las normas disciplinarias del Liceo e Internado. Al mismo tiempo, se preocupa de atender a su progreso material y logra, en breve plazo, realizar una serie de adelantos, entre los que se destacan los siguientes: reparación de baños y servicios hi· giénicos; construcción de una puerta de calle de fierro y de rejas orna· mentales y bancos de cemento en el jardín, habilitación de una oficina para el Vicerrector y de otra para el Ecónomo; dotación de mesas, si· lIas, manteles, etc., para el comedor a fin de atender a la creciente de· manda de matricula; adquisición de un televisor de 23" y de un triciclo; construcción de estanterías con casilleros individuales para los útiles de estudio de los internos y de bancos de madera para el corredor; repara· ción de la pileta y colocación de pastelones en los pasillos del jardín; adquisición de un calefactor para el living·comedor y de fundas de cre· tona para los muebles del living, construcción de pasillos techados entre el Internado y el edificio del Liceo y entre éste y el Gimnasio·Tealro, etc. El 2 de enero de 1969, Sergio Gana es nombrado Vicerrector en propiedad al ganar el Concurso Nacional correspondiente, para lo cual contó con el apoyo de la Dirección, profesorado, personal paradocente y administrativo del Liceo. En 1971 jubila el Rector Sr. René Cabrera lñíguez y, por disposición de la Dirección de Educación Secundaria, Sergio Gana debe asumir el cargo como Rector interino, el cual sirve paralelamente a sus funciones de Vicerrector titular. Esta situación se mantiene hasta el 1 de abril de 1973, fecha en que renuncia al cargo de Vicerrector y propone para servirlo, en carácter de interino, al Inspector General del Liceo, señor Lucio Flores Pérez, quien asume de inmediato sus funciones. El señor Lucio Flores se preocupa con especial interés de continuar la obra de su antecesor y realiza mejoras notables en el Internado como equipar la cocina con un califont a gas que permite dis· poner constantemente de agua caliente; terminar con las filtraciones de agua de los baños del 22 piso hacia el repostero; también renueva la mantelería y habilita en el repostero un comedor para el señor ecónomo e inspectores. Un mes más tarde, el 1 de mayo de 1973, Sergio Gana Lagos se acoge a jubilación después de más de 35 años de servicios en la Enseñanza Media y en la Educación Universitaria. Todo el personal del Liceo lo despide con un emotivo acto celebrado en el propio recinto del Internado del Liceo de Hombres de Chillán. En 1976 es designado Vicerrector el señor Osvaldo Muñoz quien, hasta la fecha, cumple tales funciones con dedicación yabnega· ción ejemplares, cuidando mantener muy en alto el prestigio alcanzado por el Internado y velando, ml¡y especialmente, por el bienestar y buen rendimiento escolar de los alumnos internos. Bajo su dirección el Internado acaba de celebrar, a lo largo de su semana, un nuevo año de existencia y lo ha hecho con un nutrido programa de actividades artísticas y culturales que han trascendido hacia la comunidad chillaneja. 49 ANEXO 4 ENTREVISTA A UN EX RECTOR" 1. Señor Gana, sabemos que Ud. fue alumno del Liceo, ¿podría contarnos algo acerca de su vida como estudiante? "Yo ingresé como alumno del Liceo en marzo de 1930 a un primer año de humanidades y egresé del sexto año en 1935, justamente el año en que la ciudad de Chillán, en su actual emplazamiento, celebraba jubilosa el Primer Centenario de su fundación. Mis estudios básicos Jos hi ce en la Escuela Superior Nº1 de San Carlos, mi ciudad natal. Mi vida como estudiante fue similar a la de muchos jóvenes de mi época; recuerdo que tenía inquietudes literarias y que fuí, en un tiempo , redactor de la revista Rumbos, órgano literario oficial del Liceo de Hombres de Chillán. Mi Profesor-Jefe fue don Humberto Catalán Muñoz, profesor de francés, que más tarde llegó a ser Rector del establecimiento. Entre -mis profesores recuerdo a don Gumercindo Oyarzo Vargas, don Ramón Pérez Yáñez, don Pedro Contreras Valderrama, don Alvaro Tobar Gajardo, don Osvaldo Ledezma García, don Jorge Chávez Daihlé, don Benito Heredia Maya, don Juan Moisés Pérez Jiménez, don Tomás Figueroa Bravo, la Sra. Abelina Rodríguez de Espinoza, la Sra. Ana Figueroa de Fasani, la Sra. Claudina Muñoz de Ledezma, la Sra. Zoila Siredey de González, don Alejandro Carrasco, don Froilán Rioseco, don Heriberto Torres, don Candelario Sepúlveda, etc. Entre mis compañeros de estudios puedo citar a los abogados Renato Fuentealba, Guillermo Vega, Alejandro Pérez; a los médicos Osvaldo Saldías, Demetrio Yanine, Humberto Torres; a los agricultores Jorge y Juan Chavarría; al químico-farmacéutico Remberto Fuentes, etc. Eramos 26 compañeros, de los cuales siete han fallecido; los restantes nos reunimos cada cinco años en el Liceo, el 16 de mayo y lo hemos hecho llevando algunos obsequios, por ejemplo una máquina proyectora de láminas y diapositivas, la Historia de Chile de don Fco. Antonio Encina, etc. Nos corresponde juntarnos de nuevo en 1990, al cumplir 55 años de egresados". 2. ¿Qué experiencia de su vida estudiantil recuerda? "Recuerdo con agrado un viaje de estudios que hicimos a Concepción, Talcahuano, Isla Quiriqu ina, Penco, Tomé, y otros lugares, en 1934; visitamos la Escuela Industrial de Concepción, donde nos hospedamos, la Fábrica de Loza Penco, la Fábrica de Paños de Tomé, la Isla Quiriquina, la Escuela de Grumetes, etc. En Talcahuano estuvimos a bordo del acorazado Almirante Latorre, orgullo de la marina chilena en • Entrevista concedida en septiembre de 1989 por el ex Rector del Liceo de Hombres de Chiltán, Sergio Gana Lagos, a un grupo de alumnos del Cuarto Año F del establecimiento 50 ese tiempo, y bajamos a un submarino. Fue una experiencia inolvidable". 3. ¿ Cómo era la relación profesor-alumno en su época? "Era una relación cordial; existfa mutuo respeto y comprensión entre profesores y alumnos. Por eso recuerdo, con veneración y cariño, a todos mis maestros, la mayoría fallecidos". 4. ¿De dónde provenían los alumnos que asistían a este colegio? "De la ciudad, de los pueblos vecinos y del campo; estos últimos tenían preferencia en el Internado". 5. ¿De cuántos cursos se componía el Liceo? "Había 18 cursos de Humanidades (4 primeros, 4 segundos, 3 terceros, 3 cuartos, 2 quintos y 2 sextos); además existía la Escuela Anexa con cursos de cuarta, quinta y sexta preparatorias. 6. ¿Dónde y cómo se desarrollaban las actividades docentes durante su vida estudiantil? "El Liceo de Hombres de Chillán ocupaba una manzana completa entre las calles Libertad, Rozas, Bulnes y Buenos Aires (actual Avenida Bdo. O'Higgins). Tenía una excelente Biblioteca, Gabinetes de Física, Química y Ciencias Naturales, Sala de Dibujo, Salón de Actos, Gimnasio con baños anexos, Internado y hasta una pequeña cancha de fútbol. El edificio del Liceo y todas sus instalaciones fueron destruidas totalmente por el sismo del 24 de enero de 1939; no se salvó casi nada. El edificio fue reconstruido años después en el lugar que hoy ocupa. Nuestro Rector era el eminente educador don Ramón Pérez Yáñez, a quien sucedió el recordado y querido profesor don Tomás Figueroa Bravo". 7. ¿ Cómo se celebraban los aniversarios del Liceo en su tiempo? "Con gran entusiasmo y regocijo; existían competencias deportivas inter-colegios, edición de la revista Rumbos, desfile de profesores y alumnos, velada artística, revista de gimnasia, exposiciones, etc. No se acostumbraba realizar 'convivencias"'. 8. ¿ Ud. pensó alguna vez ser profesor y luego rector del Liceo en el cual estudió? "La verdad es que siempre tuve gran cariño por el Liceo que me educó. Al estudiar para profesor de Biología y Qufmica en el Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile en Santiago, soñé con volver algún día como profesor a mi colegio, pero jamás imaginé que, con el correr del tiempo, llegaría a ser Rector del establecimiento. Cuando me recibí de profesor, y con el diploma en la mano, me acerqué al Director de Educación Secundaria, don Adrián Soto Vivanco, y le pregunté si disponía de algunas horas vacantes en Chillán; su respuesta fue ·que había 9 horas de Ciencias en el Liceo de Hombres y 14 en el Liceo de Niñas. Con ese horario empecé mi carrera docente, en la que serví to51 dos los cargos, profesor, Inspector General, Vicerrector y Rector" . 9. ¿Fue una buena experiencia llegar como profesor al Liceo donde Ud. estudió? "Diría más bien que fue una gran felicidad". 10. ¿ Cuál fue la relación con los profesores ahora que Ud. llegó en condición de colega? "Fue una relación amistosa; me trataron con gran cariño y recibí de ellos valiosos consejos que me ayudaron en mi tarea docente. Fui recibido por el Rector Sr. Tomás Figueroa Bravo, que había sido mi profesor de Inglés". 11 , ¿Influyó en el trato con sus alumnos la forma en que fue tratado por sus profesores? "Yo diría que sí, aunque, naturalmente, me nacía ser justo, bon· dadoso, ecuánime. Nunca olvidé mi condición de alumno y esa expe· riencia me fue muy útil". 12. ¿ Cómo se catalogaría Ud. como profesor? "A mí no me correspondería contestar esta pregunta, pero, sin· ceramente, creo que fui un profesor de vocación que sentía placer en cumplir con su trabajo". 13. ¿ Ud. alguna vez pensó en llegar a ser Rector de su Liceo? "Siendo Vicerrector, a cargo del Internado, supe que el Rector, Sr. René Cabrera lñíguez, iba a jubilar; entonces pensé por primera vez en la posibilidad de llegar a ser Rector de mi Liceo. Aquí debo agradecer a todos mis colegas por su decisión unánime de apoyarme, lo que llevó al Ministerio a resolver mi designación para el cargo". 14. ¿ Considera Ud. haber logrado su máximo desarrollo como profesor? "Tampoco me correspondería contestar esta pregunta, pero creo que, dentro de mis capacidades, hice lo posible por lograrlo. Terminé mi carrera docente_como Profesor de Química Orgánica de la Universidad de Chile, Sede Nuble". 15. ¿Cómo considera a los alumnos de su época comparados con los de hoy en día? "La juventud de todos los tiempos ha sido idealista, inquieta, luchadora. En mi tiempo había menos distracciones (T.V., juegos elec· trón!cos. discotecas), así que nos quedaba más tiempo para estudiar y participar en competencias deportivas y academias estudiantiles. Tam· poco se oía hablar de drogadicción o de otros vicios que significan in· menso daño para una parte, por fortuna pequeña, de los jóvenes de hoy". 16. ¿ Cuál cree Ud que era la opinión que tenían los alumnos respecto a Ud. como profesor? "En verdad nunca me la dijeron, pero cuando me encuentro con mis ex alumnos, siempre hacen gratos recuerdos de mi labor como profesor. El ti empo permite aquilatar mejor la abnegada labor de los 52 maestros". 17. ¿ Cómo recibió la noticia de que había sido designado Rector? "Con emoción, con gratitud hacia mis colegas y con algo de temor por la gran responsabilidad que entrañaba dirigir, prácticamente, tres Liceos Gornadas de la mañana, de la tarde y de la noche) con más de cien profesores y cerca de tres mil alumnos". 18. Durante su período de rectoría, ¿hubo cambios en su manera de ser hacia los que habían sido sus colegas anteriormente? "Yo traté de no cambiar negativamente; no sé si lo logré, pero nunca olvidé· cuán difícil, fatigosa e incomprendida es la labor del maestro. Ellos eran mis colaboradores y les estaba agradecido. Nuestras relaciones fueron siempre amables". 19. ¿ Cuál cree Ud. que fue la reacción de sus colegas al saber que había sido designado Rector? "Me felicitaron , me desearon éxito en el desempeño del cargo y me ofrecieron su colaboración que agradecí emocionado". 20. ¿ Qué experiencia importante le tocó vivir o compartir como profesor o como rector? "Como profesor, la celebración del Primer Centenario del Liceo, en 1953, bajo la Rectoría de don Humberto Catalán Muñoz. Participaron delegaciones de 29 Liceos del país que compitieron en torneos deportivos, de oratoria, declamación y dibujo. Los profesores estuvimos reunidos en Jornadas Pedagógicas para estudiar problemas de la educación. Hubo una maravillosa Exposición de Artes Plásticas, Artes Manuales, Ciencias Naturales, Ciencias Sociales, etc., que ocupó todo el segundo piso del Liceo por calle Maipón; Revista de Gimnasia; edición extraordinaria de la revista Rumbos, con un centenar de páginas y con la Historia del Liceo que me cupo el honor de escribir; con la fotografía del profesorado y de todos los cursos del colegio acompañados de sus respectivos profesores-jefes; con entrevistas y crónicas del mayor interés, etc. El acto más importante fue la Velada de Gala en el Teatro Central, en la que habló, visiblemente emocionado, el ex profesor del Liceo y Rector-fundador de la Universidad de Concepción , don Enrique Malina Garmendia. Además , hubo un Banquete Oficial con la asistencia de altas autoridades; una Asamblea Solemne de ex Alumnos, culminando todo con un precioso Desfile Nocturno de Carros Alegóricos , con participación de todo el alumnado portando antorchas encendidas. Creo que Chillán no ha vuelto a ver un espectáculo tan maravilloso y significativo como aquél. Como Rector, sentir que, en alguna medida, estaba contribuyendo, junto con mis colegas , a la formación intelectual, moral y física de miles de adolescentes". 21. ¿En qué año obtuvo el cargo de Rector? "En 1971". 22. ¿ Cuáles fueron sus obras más importantes durante su Rec- 53 toría? "Puse especial énfasis en lograr el incremento de la Biblioteca con obras de consulta modernas; solicité y obtuve la creación de nuevos cursos con el consiguiente aumento de la dotación de profesores, personal paradocente, administrativo y auxiliar; se creó una Galería de Rectores ; se adquirió un piano y el instrumental para la Orquesta Estudiantil del colegio, fundada bajo mi inspiración; se consiguió el arreglo de los baños y servicios higiénicos; se construyeron antejardines por calle Lu maco y se protegieron con rejas de fierro; se hicieron pasillos techados para comunicar el edificio principal con el Internado y con el Gimnasio; veredas de cemento desde el Hall al Gimnasio y desde éste a calle El Roble, para un posible acceso de pÚblico; se incrementó el mobiliario escolar; se dotó al Internado de jardines, bancos de cemento, escaños de madera para el corredor de acceso; se adquirió un televisor de 23 pulgadas para uso de los internos en sus horas libres; se construyeron estanterías con casi lleros individuales para guardar sus útiles de estudio; se instaló un calefactor ambiental en el living-comedor, se dotaron de mesas, sillas, vajilla , servicio y mantelería tanto el comedor . como el repostero y cocina; se instaló un lavaplatos; se arreglaron los baños; se repusieron los vidrios que faltaban; se habilitó una oficina para el Ecónomo; se adquirió un triciclo para hacer las compras diarias de mercado, etc. El 2 de mayo de 1973, en brillante ceremonia realizada en el Teatro Municipal de Coihueco, me correspondió inaugurar el Liceo de ese pueblo, en un principio como cursos anexos al Liceo de Hombres de Chillán". 23. Si se le presentara una nueva oportunidad de ser profesor o Rector, ¿cuál elegiría Ud.? "Creo que profesor, con un horario reducido, porque después de 35 años de trabajo, recorriendo todo el escalafón docente, es justo acogerse a un relativo descanso". 24. ¿ Qué vInculo mantiene Ud. aún con el Liceo después de tantos años alejado de él? "Invitado todos los años por la Rectoría, concurro a las festividades aniversarias el 16 de mayo y también a los actos culturales que el Liceo realiza. Soy autor de una Historia del Liceo de Hombres de ehi//án que he entregado al señor Rector don Wagner Pérez Eulufí y a la U.T.P. del Liceo". 25. En su vida ¿relacionó lo sentimental con lo profesional? "Sí; el sentimiento de cariño y gratitud hacia mi Liceo condicionó, en gran medida, mi actuación profesional". 26. ¿ Cree Ud. que su vocación fue la de ser algún día profesor? "Cuando era alumno del Liceo admiraba la labor de mis profesores. Creo que entonces nació en mí el deseo de llegar a ser algún- día un profesor como ellos". 27. Además de profesor, ¿ qué otras actividades desarrolló du- 54 rante ese tiempo? "Cultivé la música, la investigación, la lectura, como lo hago hasta hoy. Participé en actividades gremiales destinadas a dignificar la labor del magisterio". 28. ¿En qué ocupa ahora su tiempo libre? "Escribo mis memorias, estudio Arqueología y colecciono artefactos indígenas; leo mucho y toco un poco de piano K • 29. Al término de su labor docente-directiva, ¿cómo compensó la comunidad liceana su trabajo y esfuerzo? "Yo no esperaba compensación alguna porque sigo pensando que sólo cumplí con mi deber, pero, a pesar de eso, me hicieron un acto de despedida, una comida de gala, un belio discurso y un magnífico regalo". 30. ¿Alguna vez se sintió fracasado como profesional? "Afortunadamente no. Algunas veces sentf la incomprensión de ciertas personas y de los Poderes Públicos hacia la magnífica y abnegada labor del profesorado en general. ¿Qué sería de nuestra cultura sin los profesores? 31. ¿Ha notado Ud. cambios en la comunidad liceana a través de los años? ¿El Liceo ha crecido enormemente; advierto que existe un creciente espíritu de superación en la juventud". 32. ¿Qué mensaje enviaría Ud. a la comunidad liceana? "A los liceanos de ahora y de siempre les diría: "El futuro es vuestro; aprovechad la experiencia, los sanos consejos y los conocimientos que os entregan a diario vuestros maestros L~:o~IL~a~I:V:del~~~od~~~á e~g~0:sfu~~:6~tf~~~'rso~3~~~n~:; ~~~s~~~ dréis llegar a ser eficientes "profesionales" o Mtécnicos" y contribuir al engrandecimiento de nuestra querida patria-. 55 ANEXO 5 DISCURSO DE UN EX ALUMNO' Autoridades, Sr. Rector del Liceo, jefes de colegios, Sres. profe- sores, P~d~~~ Ae~g~~~~d~~g~~~r~:;esze~~~~fí' Á~V~e"n~~oa',~~~~~i'eza de pedirme que diga alQunas palabras en este acto en mi calidad de ex alumno de este quendo colegio. Yo ingresé a él en 1930 a un primer año de humanidades, como entonces se llamaban los cursos del Liceo, y egresé en 1935, año en que Chillán Nuevo celebraba el Primer Centenario de su fundación. Tuve excelentes profesores, como siempre lo han sido los docentes de este Liceo. Dirigía el colegio el Rector Sr. 'Ramón Pérez Yáñez, profesor de Biología y notable escritor, sucesor de don Narciso Tondreau. Entre mis profesores recuerdo con especial emoción a mi profesor-jefe, don Humberto Catalán Muñoz, profesor de 6~n~~:;a;, ~~~Pe~~~ d~eHli~~gr?af~eG~~g~~W~ ~~ee~~es~~céesoiu~ ~~~~~~J~ Rector del Liceo de Aplicación de Santiago; a don Alvaro Tobar Gajar· ~~'nf;o¿~~?'ra~;u~~~ee~~t~~~sle:~~~dO n8i~~~~~rp~~n~~ac~~~fo ~~q~~~~~ ~:~~:!~;n~~t~ñ~eAC~iI~i~~~~O~:~:~~~~~ LJ~i~:~r~ ~~~Jl~~~ YMI~i~~~ Pérez, profesor de Educación Musical y Primer Violín de la Orquesta Santa Cecilia; a don Osvaldo Ledezma, profesor de Biología y Química y luego Rector de este Liceo; a la Sra. Claudina Muñoz, profesora de Ciencias; a don Pedro Troncoso y a don Benito Heredia, profesores de Castellano, el primero Inspector General del Liceo, mientras que el Sr. Heredia fue nombrado Rector del Liceo de Punta Arenas; a la Sra. Abe· lina Rodríguez, profesora de Castellano; a don Tomás Figueroa Bravo, profesor de Ingles y luego Rector, sucesor de don Ramón Pérez Yáñez; a don Jorge Chávez, profesor de Francés y notable pintor premiado en varias exposiciones; a don Gumercindo Oyarzo, profesor de Artes Plás· ticas y notable acuarelista, premiado en la Exposición de Sevilla; a don Donato Espinoza, profesor de Matemáticas designado Director de la Escuela Normal de Chillán; a don Alejandro Carrasco, abogado y profe· sor de Educación Cívica y Economía Política; a don Froilán Rioseco , re~~~a~~ ~dur~~;~o~ $~i~a~t:~~~c~sdn~~lo~e~:~~:~a;~~f~:6rÚ~:~~st~~?~ y Geografía; a doña Zoi la González, profesora de Educación Musical; a don Clodomiro Acuña, sacerdote y profesor de Religión; a don Heriberto Torres, profesor de Artes Manuales, etc . .. Discurso pronunciado por el ex alumno Sergio Gana Lagos en la velada oficial del 16 de mayo de 1991 al cumpl ir el Liceo 138 años de vida. 56 sionale:,u~~~~~~jt~. eEr~~~~e~af~~r,a=le~r~' t~~e~~f~i~~~?nO:, ~rob~~ Humberto Torres, el abogado Renato Fuentealba, el Químico- ~iC::r~~;~~t~1°H:~~~eyrt~:au~~i~~'n~1 ~~~gqaUdeO s~~~1a~~~~ ~~~e~~~/n8:: da cinco años nos reunimos en Chillán y visitamos con emoción y agradecimiento al Liceo, trayendo nuestro cordial saludo. El último encuentro lo tuvimos el año pasado en esta misma fecha. Egresado del Liceo determiné estudiar para profesor, con el secreto anhelo de regresar algún día a mi colegio, lo que puede conseguir al cabo de algunos años y donde realicé toda mi carrera docente sirviendo sucesivamente los cargos de profesor, Inspector General, Vice- ;r~~1°~~ I~sef~~~ivj~~d~~ Jei P;i~~~oéedn~~;~~~od~eE~~~gltc~~\~i~~ c~~ lebrada con gran regocijo bajo la dirección del Rector Sr. Humberto Catalán Muñoz. Vinieron delegaciones de 29 liceos del país; hubo competencias deportivas, Concursos, Jornadas Pedagógicas, Revista de Gimnasia, Exposición Oficial, Asamblea de Ex-Alumnos, Desfile Alegórico, Velada de Gala en el Teatro Central en la que el principal orador fue el ex-profesor del Liceo y Rector-Fundador de la Universidad de Concepción don Enrique Malina Garmendia. Fue un acto memorable y maravilloso. Dentro de las Comisiones de Trabajo designadas por el Consejo de Profesores a mí me correspondió escribir la "Historia del Liceo" que fue publicada en la edición especial uPrimer Centenario de la revista "Rumbos u, órgano literario oficial del establecimiento. También fui nombrado Comisario de la hermosa Exposición de Trabajos realizados por los alumnos. En nuestra época de estudiantes el Liceo estaba ubicado en la manzana comprendida entre Avenida Libertad y las calles Rozas, Bulnes y Buenos Aires, actual Avenida Bernardo O'Higgins. Tenía 800 alumnos, Internado, una excelente Biblioteca, GimnaSIO y Salón de Actos, Museo de Historia Natural, Laboratorios de Física y Química, Sala de Artes Plásticas, Talleres de Artes Manuales y salas de clases suficientes para 15 cursos de Humanidades y 4 de la Escuela Anexa. Contaba también con una Brigada de Boy-Scouts que comandaba el recordado profesor don Fabio Flores Contreras; y había canchas de básquetbol, de fútbol , baños temperados, etc. El 24 de enero de 1939, cerca de la medianoche, ChiUán sufrió uT"!o de los ':lás severos sismos de su historia que significó la destrucc~on de la Ciudad, centenares de muertos y hendos y la ruina total del liceo. La obra de 17 rectores a través de 86 años se había perdido en uno~ cuantos minutos. El Supremo Gobierno, que presidía don Pedro N ~6~1~~u~:,rd~¡e~~r~~~i~~ :~tti~~~~St~~;~nn~~r~~ ~le~~T~~r~~ ~I ¿yg:~ Ó~~ mercial. El Liceo de Hombres de Chillán ha proyectado en el país y en el 57 ~~~~~~r~ealam~~~v~eadXh~~~n~~ss~rci ~~y ~a~it~i~~8~~~~ ~~~O~~~ !~~ quirido renombre a través del tiempo: Don Juvenal Hernández que llegó a ser Rector de la Universidad de Chile; Claudia Arrau, pianista de fama internacional; Armando Quezada Acharán; Federico Puga Borne; Carlos Silva Vild6sola; Manuel Guzmán Maturana, autor de textos de estudio; Moisés Troncaso Poblete; Luis Alamas Barros; Santiago Labarca; Marcial Mora Miranda; A lfon~o Quintana Burgos; Alfonso Lagos Villar, Director-propietario de La DIscusión, Premio Nacional de Periodismo y Presidente del "Comité Centenario" que impulsó y consiguió la terminación de este edificio del Liceo, que estuvo en obra gruesa por varios años; Carlos Santelices, tenor que actuó en la Scala de Milán; Custodio Oyarzún; Armando Lira, famoso pintor; Jerónimo Alvarado, médico-ciruJano; Ignacio Brunet; Víctor Flores Castelli, abogado y diputado por Chillán, a quien se debe la construcción del Gimnasio del Liceo; Pablo Neruda, poeta y Premio Nóbel de Literatura; Nicanor Parra, poeta, profesor universitario y Premio Nacional de Literatura; Walterio Millar, historiador y periodista; Os. car Hernández, magnífico acuarelista; Sergio Hernández, poeta, profesor universitario, autor de varios libros; Gustavo Guzmán, Premio Nacional de Arte; atto Schaeffer, músico de sensibilidad exquisita, fundador de la Sociedad Musical Santa Cecilia y de la Casa del Arte donde ahora funciona la Universidad del Bío-Bío y nos brinda sus conciertos la Orquesta Santa Cecilia, de la que el señor Schaeffer fue Director hasta sus últimos días ... y hay muchos ex alumnos más, no menos distinguidos, pero que sería largo enumerar. Con el correr del tiempo, Uds., actuales alumnos del Liceo, aumentarán la larga lista de ex alumnos y recordarán , como nosotros lo hacemos, con nostalgia y cariño, al Liceo que les dio su formación intelectual, moral y física. Para triunfar en sus estudios no se necesitan condiciones especiales de inteligencia. Mi experiencia como profesor me ha enseñado que son mucho más importantes dos condiciones de carácter: esfuerzo y perseverancia. Uds. , ayudados por el Depto. de Orientación, deben trazarse una meta y luchar, con tesón, por alcanzarla, cumpliendo cada día con las tareas y obligaciones del momento; que nunca se encuentren desprevenidos ante una prueba o una interrogación. Así el triunfo lo tendrán asegurado e irán escalando, poco a poco, los peldaños de esa meta que hoy puede parecerles lejana, pero que llegará, sin duda, para vuestra satisfacción, para alegría de sus padres y para orgullo de este más que centenario Liceo que hoy día los cobija con amor y al que deseamos éxito y prosperidad siempre crecientes. ¡Jóvenes estudiantes, el futuro es vuestro; aprovechad los conocimientos que os dan vuestros maestros para ser ciudadanos dignos y útiles a la patria y labraros un brillante porvenir! He dicho. 58 ANEXO 6 CARTA DE UN EX VICE PRESIDENTE DE LA REPUBLlCA" Mis estimados amigos: Para proyectar en la "pantalla" de la revista Rumbos algunas de las impresiones recogidas en mis lejanos tiempos de estudiante del Li· ceo de Hombres de Chillán, deberé pasar al revés casi toda la "cinta cinematográfica" que guardo en el kardex de mis recuerdos. Pero son tan fuertes e indelebles las impresiones que deja en nuestro espíritu la vida de estudiante que, a pesar de los años transcurridos, no resulta difícil satisfacer los deseos de los jóvenes directores de la revista Rumbos con motivo del Centenario del Liceo. Ingresé a la 3a. Preparatoria del Liceo después de haber cursado las dos primeras -y a mucha honra- en la Escuela Superior N!! 1. Fue mi primer profesor en el Liceo don Francisco Merino, profesor de cuño antiguo, paternal y severo al mismo tiempo. Tenía alma de maestro como muchos otros de los que formaban en aquel entonces el personal docente del establecimiento. Sin mayores dificultades llegué hasta el 42 año de Humanidades, curso que debí repetir por haber fracasado en algunos ramos. Me sentí desmoralizado, pero gracias a los consejos de mi profesor de Historia don Samuel Zenteno Anaya, reaccioné y pude . continuar mis estudios en el Lieo y en la Universidad hasta recibir mi título de abogado. El año pasado, mientras desempeñaba la Cartera del Interior, recibí la agradable visita de don Samuel Zenteno que no venía admírense ustedes- a pedirme nada sino, como me lo dijo, a tener el placer de saludarme. En mis tiempos de estudiante no se habían creado todavía las vacaciones de invierno, pero, en cambio, no por patriotismo sino por esa inclinación tan propia de los niños de faltar a clases, era costumbre tomarse todo el mes de septiembre como vacaciones de Fiestas Patrias, en consecuencia que el feriado legal era sólo del 8 al 28 del mismo mes. Pero siempre había un grupito de rompehuelgas que iba a clases lo que, al parecer, no les parecía bien ni a los propios profesores pues a dichos alumnos se les mantenía de pie en los postes o pilares que circundaban los corredores del Liceo. El Liceo de Hombres de Chillán ha cumplido en el país una fructífera labor educacional y cultural, llenando, honrosamente, una etapa en nuestra vida institucional. . • Extracto de una carta enviada a la revista Rumbos por el ex Vicepresidente de la República, don Alfonso Quintana Burgos, con ocasión del centenario del Liceo de Hombres de Chillán. Santiago, marzo de 1953. 59 A todos los que fueron mis profesores en el querido y nunca olvidado Liceo de Chillán, encabezados por el paternal y bondadoso don Narciso Tondreau, rindo en esta ocasión el homenaje de mi gratitud. Gracias a ellos puedo decir que he triunfado en la vida, alcanzando los más altos honores que las democracias dispensan a los ciudadanos. 60 ANEXO 7 RECUERDOS DE UN EX PROFESOR DEL LICEO' llegué a Chillán allá por el año 1937. Esta magnífica tierra tostada por los soles estivales ya era conocida por mí. Mi padre había dejado allí sus sagrados despojos. Llegaba pues a tierra conocida y cumplía así una cara aspiración de mi carrera docente. Era, a la sazón, Rector del Liceo el insigne pedagogo y escritor don Ramón Pérez Yáñez. El Liceo ocupaba una vieja y colonial casona frente a la calle Libertad; sus salas eran amplias y tenía amplios y espaciosos corredores y patios. Poseía también una magnífica cancha, donde el loco Oyarzún ordenaba las flexiones y ejercicios al son de un pito que, cuando el profesor se cansaba, pasaba a poder de Retamal, el portero, mientras el loco hacía sus diligencias en el centro de la ciudad. Cierto o falso el hecho, Tomi, el querido Inspector General, lo relataba con tal colorido que llegué a convencerme de su veracidad. En el Liceo existía un ambiente de cordialidad y de compañerismo que hacía fácil y grato el desempeño de las arduas tareas docentes. En el campo literario se destacaba Nicanor Parra, joven profesor de Matemáticas que hacía sus primeras armas pedagógicas en el Liceo; había descubierto el método de armonizar las áridas matemáticas con el verso de corte moderno. La insigne Gabriela Mistral, en visita que nos hiciera a Chillán, lo destacó como un futuro gran poeta y, desde entonces, la inspiración poética de Nicanor creció, vaciándose en versos delicados y agradables, muchos de los cuales se encuentran en su Cancionero sin nombre, libro que publicara años más tarde y, si no me equivoco, poco después de obtener el premio "Municipalidad de Santiago" por su hermoso "Canto a O'Higgins". Pasó el tiempo , y una noche de verano que se presentaba fresca después de un día de calor, cuando aún mucha gente no se recogía a sus hogares, un terremoto horrible destruía a Chillán; el Liceo quedó convertido en un montón de escombros. A Nicanor Parra , como único profesor soltero, se le encomendó la vigilancia en la extracción de los libros de la Biblioteca, el material de los laboratorios y otras cosas útiles que pudieran recuperarse. Parra cumplió su cometido en forma brillante el primer día, pero en los días sucesivos las musas empezaron insistentemente a visitarlo y mi amigo se abstrajo en tal forma escribiendo versos, que los libros de la Biblioteca empezaron a desaparecer entre los escombros. Fue, además, 'frecuente encontrar sobre los motores de los camiones, a guisa de insignia, algunos de los animales embalsama* Recuerdos del distinguido el( profesor del Liceo señor Raúl Castañeda Roland. San Bernardo, 5 de abril de 1953. 61 dos del Gabinete de Ciencias Naturales. En compensación, salieron de allí muy buenos versos. El 1 de mayo de 1939 reanudamos nuestras tareas educativas en un local de emergencia ubicado en Avenida Argentina esquina Avenida Ecuador, vale decir en una esquina de la ciudad. El local era muy malo e inadecuado; en los días de lluvia había que suspender las cIases pues en las salas llovía más que afuera; en suma, se trabajaba en forma heroica, pero lo hicimos con todo interés y abnegación. A principios de octubre obtuvimos un local mejor y más central; fue el local que heredó más tarde la Escuela Industrial. Aquí nos tocó sufrir los rigores del naciente verano; las salas eran demasiado bajas, de madera y cubiertas con pizarreño que se caldeaba, produciendo un horno pertecto. Para librarnos del calor hacíamos baldear las salas a menudo. Por suerte, y gracias a la activa y eficiente labor del arquitecto provincial, don Francisco Solís de Ovando, gran amigo del Liceo, pudimos contar con un local mejor y más amplio donde pudimos trabajar con comodidad. Renació así la figura legendaria del Liceo y su actividad cultural . comenzó de nuevo a esparcirse por toda la ciudad. A mí me correspondió colaborar con el scoutismo al lado de don Fabio Flores que gustaba lucir sus gráciles pantorrillas en los desfiles con que decidimos alegrar a la ciudad mártir. En 1944 realizamos la mayor concentración scoutiva que recuerde Chillán. Reunimos dos mil scouts desde Talca a Bio Bío; hubo fiesta en la ciudad y los pitos y tambores de las bandas inundaron el ambiente con una sinfonía de gozo y optimismo. Gumercindo Oyarzo y Jorge Chaves llevaban el aliento liceano al Grupo Tanagra que era el alero de las artes plásticas de la ciudad. Y Heriberto Torres, Gumercindo Oyarzo, Juan Moisés Pérez, Aníbal Raposo y doña Zoila de Siredey integraban la Orquesta de la Sociedad Musical Santa Cecilia que dirigía, con entusiasmo sin igual, el talentoso cultor de la música clásica don Otto Schaefer. Encargados en forma oficial del encauzamiento de las inquietudes literarias del alumnado estaban los profesores de Castellano, Alfonso Poblete y la distinguida dama doña Abelina Rodríguez, a quien, por la bondad de su corazón , se le había designado tesorera del "Bienestar Estudiantil", cargo desde el cual desarrolló una magnífica y altruista labor en bien del alumnado de escasos recursos. Por otra parte, el talentoso y distinguido ex alumno don Alfonso . Lagos Vi llar acogía con cariño, en las páginas de su diario La Discusión, las colaboraciones del profesorado, lo que aprovechamos para publicar versos y artículos literarios y pedagógicos. El Liceo bullía en actividad y Tomy (Tomás Figueroa), que había ascendido al cargo de Rector después del terremoto, sonreía satisfecho detrás de sus anteojos. Han pasado cien años de esforzada y fructífera labor; los ex alumnos, los profesores, la ciudadanía entera se apresta para rendir al 62 Liceo un homenaje agradecido y fervoroso. Desde los aledaños de la capital hemos querido escribir estas líneas para recordar con cariño al Liceo y a la admirable pasta humana con que nos tocó trabajar. A través de un siglo de existencia el Liceo de Hombres de Chillán ha forjado . innumerables legiones de hombres útiles y talentosos que se han destacado en todas las actividades del país. 63 ANEXO 8 CARTA DE DON PEDRO CONTRERAS VAL DERRAMA' Mis estimados amigos, agradezco en forma muy sincera el otre· cim iento que me hacen para expresar en las páginas de la revista Rumbos mis pensamientos y recuerdos como chillanejo y ex alumno del liceo en la fecha en que la cultura de la provincia se viste de gala para celebrar alborozada el centenario de nuestro querido colegio. Los que vivimos en Santiago, y especialr}1ente el que escribe estas líneas y que preside el "Centro de Hijos de Nuble", estamos preparando nuestra participación en tan fausto aconte- cimiento. Hay en todos nosotros un gran orgullo de pertenecer a esa pléyade de hombres que, forjados en el liceo, vuelven sus ojos agradecidos, desde los diferentes rincones del país, para darle una mirada de recuerdo ya que él nos dio las armas necesarias para luchar en la vida, inspirándonos siempre en la bondad, cariño y sabiduría de nuestros maestros. Alguien ha dicho que Chillán es como un ser que cae ante factores que el hombre no puede contrarrestar, pero que pronto se levanta con mayor empuje, con nuevos bríos, fortalecido por un ideal que lo impulsa hacia su porvenir, y este ideal fecundo, en buena parte, ha tenido su origen en el Liceo de Hombres de Chillán que ha sabido convertir adolescentes en hombres de bien, dotados de un coraje y valentía que les ha permitido triunfar en las diversas actividades del país. Todo colegio es un hogar espiritual y cuando este hogar celebra sus cien años es justo que sus ex alumnos se unan alrededor de su estandarte para exaltar sus virtudes, recordar los tiempos de su juventud y expresar su alegrfa por retomar, aunque sea por breve tiempo, a su querido Liceo. Mis amigos... estaremos con ustedes. en esta fiesta y, en nombre de los hijos de Nuble y, en especial, de los ex alumnos del Liceo que vivimos en Santiago, los saludo en forma fraterna, deseándoles éxito y felicidad . . Cana de don Pedro Contreras Valderrama, e", profesor de Historia y Geografía del Liceo de Hombres de Chillán. Santiago. marzo de 1953. 64 ANEXO 9 CARTA A UN ALUMNO DEL LICEO DE CHILLAN" Marta Brunel Viejo de más de cien años el Liceo de Chillán, ningún contempo· ráneo existe para contar la historia de su nacimiento y sus pininos de su desarrollo y su madurez, pero los que hemos doblado hace rato la esquina de la cincuentena, bien podemos para la muchachada que ahora puebla sus aulas, contar --como quien junto al anillo del brasero narra la maravilla de una conseja-, contar, digo, tanta empresa vivida por la .~~~e,ireC:~ria':c~oa~~a~f' c2~n Ye~~o~~~~:~d~ ~lai~c;rativo de una voca- Querían los entonces alumnos de los últimos años de humanidades que el liceo no significara sólo puertas adentro un centro de cul- ~~:'af~d~~:, ~~~I~f¡~aJeU~~if~~~~r~r6v~~¿fa~~~~~r ~f~~r ~::.:I~~p~~ con la Antártida; por oriente hasta llegar a esa línea que el amanecer torna de nieve rosa-azul y por el poniente, hasta encontrar esa otra línea de horizonte ardido en dramáticos crepúsculos. Pero al norte, sí, al norte, la ambición quería llegar hasta Santiago, adentrarse en instituciones literarias, en redacciones de revistas y diarios, tomando con ~~i~~rV~~::,ie~!~/~e~~a~~a~~~Zs~v~i~~~f~~~re~e~~~~ ~~a~i~~~;f~: nes. Sí, era una muchachada intrépida que creía en Arturo Alessandri, J~ki, '~í~ec~~ ~~~~naabc~ó~ina ;~~t~T~ ~ t~~~u:ta ~r:u~~o~~~aa~~~:~~ie~ Stravinski, que trataba de entender a Picasso, buscando ansiosamente caminos a su propio temperamento y formas a su capacidad creadora. Contábamos con un maestro por antonomasia: don Narciso Tondreau . Con un crítico benévolo: don Luis Felipe Contardo. Con un iluminado músico: Qtto Schaffer. Con un dibujante destinado a formar escuela: Carlos Dorlhiac. Con un personaje salido de una novela victoriana para asomarse a traves de viajes y libros a las maravillas del arte: don Daría Brunet. Con un gramático que lograba hacer entender y amar nuestro bello idioma: Claudio Rosales. Y por un prodigio del azar hasta se contaba con creían en nosotros y respaldaban económicamente las innumerables aventuras de ese puño de creadores en agraz que todos éramos. Walterio Millar fue el director de la revista que condensó tanta aspiración. Se llamaba "Ratos Ilustrados", nombre que ahora nos parece ridículo , pero que en ese entonces, aún con reminiscencias del 900 , 65 . era tan indicado, tan preciso, como aquél de "Santa Unión" que denominaba a una pastelería. En "Ratos Ilustrados" colaboraba no sólo la muchachada liceana, sino que por la fuerza de atracción de su ambicioso programa, la muchachada sureña, la norteña y la otra ubicada en la cordillera o litoral. Así Diego Muñoz, Pablo Neruda, Sepúlveda Cifuentes, y Rojas Ji· ménez asomaron sus nombres a la vida literaria en sus páginas, junto con el de Tomás Lago, Antonio Roeco del Campo, Alfonso Lagos Vil lar, Absalón Ballazar y el mío propio, junto también a los dibujos de Eduardo Videla, Gumercindo Oyarzo, Walterio Millar, Gabriel Fagnilli Fuentes, Armand~a~~I~I;~~: r~~~~:z~:s~f!;°u~~:~t~6d~u~~~~~scg~~~~~;'litera_ rio, bajo no recuerdo que nombre pomposo. Pero el hecho era que se propiciaban conferencias, recitales, exposiciones, y -¿Por qué no?ex istía también una editorial. De esta hazaña editorial que tuvo que existir porque los destinos de ese tiempo están trazados, nació para el público lector la novelista Marta Brunet. Escribía yo a la par que la muchacha. Publicaba: en "Ratos lIustrados"J¡ en la página literaria dominical de "La Discusión", el también ~~~;~ n~~riga;~~~~~ ~~n~~spaa~:b~en ian~~~~~Ó~i~~a~cue~~, ~:n~oUj~~~ pesos por cuento, hecho que me llenaba de un recóndito orgullo. Además integraba el directorio del centro literario de estudios. Y cosa maravillosa: era la compañera de todos los muchachos que tenían la casa de mis padres abierta para largas charlas y sabrosas onces, tomadas éstas a la manera de otros tiempos, con pavo o arrollado de chanchito o malaya y los innumerables postres exquisitos, cuando no era con picarones, si el porfiado tiempo lluvioso le imponía como un rito. y aquí una anécdota: mi madre tenía dada orden de que en cuanto aparecieran "los chicos", apareciera también, fuera la hora que fuera el carrito del té convenientemente surtido, cosa que me sacaba de tino por vulgar. Según me confeso tiempo adelante Tomás Lago, muerto de la risa, el carrito de té era para ellos tan atractivo como podía ser mi compañía, las candentes discusiones y el naipe de proyectos que sin fatiga barajábamos. La editorial lanzó un libro: versos de Absalón Baltazar. No sé si buenos o malos. El entusiasmo nos impedía aplicar toda medida. Para nosotros era sencillamente la obra de uno del grupo. Me encargué de hacerlo llegar a los críticos santiaguinos, a ésos junto a los cuales proyectábamos llegar para hombrearnos con ellos y enrostrarles el aban. ~~~~g~~a~uoe ~;ja~n~n ~~~~ ~r:, ~~~~~i:~!cr~v~~~~~o~~~;p~j~~~I~~f~~ rales , nuestra obra realizada, terminando con una perentoria advertencia de que los versos de Absalón Baltazar merecían ser leídos y comentados. Nadie hizo caso de mi carta ni del libro, salvo Hernán Díaz Arrieta, Alone, que me contestó muy divertido con el énfasis de mi tono y preguntando noticias mías. 66 tidumbr~Se~~'a~~ 6~~dTcTó~iCdem~~~~¡i~~a~~eq%é~~Jé P,,::; ~~~~7~sc~~ "Montaña Adentro" que había escrito ese verano, en el fundo de una de mis tías en Rari-Ruca. descon;~i~e~~e~[¡~~~a S:~Uh~l~tn~~tg~~R~:~~r~~i'daS~~t~ ~~~~, c~~~~~ sabe tanto lector de habla castellana. Porque el libro, bien chileno, como buen chileno, nació para rodar tierras. Pero volvamos a nuestro grupo: Vivíamos en una ebullición constante. No sólo teníamos para "Ratos Ilustrados" o para la página literaria dominical de "La Discusión" el envío de las colaboraciones de la muchachada de fuera, sino que su gr~R~~,Plr~~Ón~:bl~~e~~d~í~eC~~'~~~~c~U~a;:~~edf~~,uc~~, ~7t~,Pfi,~~~ desmadejado, con unos ojos de oscuro material tierno y unas largas manos que me impresionaron, manos colgantes y gue al tenderse al gesto del saludo eran como de goma, como si súbitamente hubieran desaparecido de ellas todos los huesos, como guante relleno de aire. La voz estaba cansada, apesadumbrada con el mensaje de una pura poesía que ya lo hacía entre todos el primero. Llegó Joaquín Sepúlveda Cifuentes con su ca ra de niño triste previsor de un dramático desti- rn~r~~ja2, ~~~~~a~d~a~~j~lé~t~~a~u~ti~:~gr'í~a~oi~~~~c~~Sd~d~~~, !TI~ de la muerte al conjuro de las palabras de Pablo Neruda. y ¿por qué no otra anécdota? Mis padres y yo pasábamos en verano en una vieja casona con el primer patio umbroso de naranjos, apretado de flores y trinos, con las glicinas poniendo movibles sombras de los corredores y el agua clara de un pi lon en interminables monsergas. Durante muchos días, a la misma hora esperada por mí ansiosamente, sonaba la campanilla, acudía presurosa y encontraba a Alberto Rojas Jiménez menudo y correcto que desde el comienzo de este teatro, pronunció las mismas palabras, a las que respondía con mi silencio maravillado. Decía él: -"Señora, vengo para que me déis una rosa" Iba yo por ella y cuando se la colocaba en la solapa, agregaba con sigilo -"Hasta las rosas, señora se mueren por besar vuestras manos"-. Así éramos todos los perdidamente románticos. Una generación pasa pronto por las aulas de un liceo. Esta a que me refiero, ya en poder del bachillerato, se esparció en busca de su destino. Mi propIO destino pareció estar ligado a ella, porque como muchos de sus integrantes salí de Chillán rumbo a Santiago, a Buenos Aires, Santiago, yendo y viniendo, por América y Chile, escritora y periodista, escritora y diplomático en el pasado, escritora y maestra actualmente, pero ante todo lo primero: escritora, por la gracia de Dios. Pero de todos nosotros, nadie se hurto el imperativo marcado por la vocación adolescente. Pablo Neruda reside en la tierra que conforma nuestro planeta y desde el paralelo que sea, su acento nos llega cargado de misteriosas esencias de auténtica poesía. Gabriel Fagnilli Fuentes, en Buenos Aires 67 está rodeado del prestigio que su capacidad de investigador histórico merece, tanto que la Academia Argentina de la HistOria le abre sus puertas y lo recibe en su seno. Armando Lira viaja por tierras de América, se afinca y muere en la muy señorial Caracas tras alcanzar una aplaudida y feraz obra de pintor y maestro. Tomás Lago ordena, cuenta, muestra la gracia del arte popular chileno y tesoneramente, contra ~~;tgl ;;rta~e~o~ou~~~ ;~ri~la~~~~li~~~:! rr~~T~ W~~e~~ioM~I~~~o~i~~~~i Museo Histórico y acuciosamente revela sus condiciones de captador de estampas nacionales, llevándolas por el gráfico hasta el corazón del niño. Diego Muñoz tiene en su haber cuentos para una antología. AI- ~oen~EaL~~s~su~g~"~ ~iri8:n~~~b~u~~~~~dq~; g~~n"g~~o~ri~~~i¿~sd~eJ~I~~~ raíso tiene la honra de ser los que con más años cuentan de ininterrumpida publicación, editados en nuestro idioma. Los muertos no sólo representan nombres para una memoria cordial , sino que nombres para nuestra historia literaria y plástica. Rojas Jiménez, Sepúlveda Cifuentes, Antonio Aocco del Campo, Absalón Ballazar, Armando Lira. Los maestros yerguen sus figuras tutelares como un claro ejemplo de lo que debe ser un rector de juventudes. Narciso Tondreau, Claudia Rosales, Luis Felipe Contardo y Qtto Schaffer desde el más ~~;. ~~;~~~2°p~::cu~0~m:r~~~~~, 9J:~~?ro~a~~e~d~~~t n~~~ir~r~~~u~~ busca algo que ofrecerles, algo que sirva de testimonio a nuestra gratitud . Ustedes nos dieron una pequeña lámpara mágica: la cartiesa de nuestras vocaciones , la conciencia de nuestra responsabilidad de creadores. La obra de todos, en apretado haz, bien puede ser ese testimonio. Alumno del Liceo de Chillán: Crea que sin conocerlo soy para usted tanto como una vieja amiga y que mi más íntimo deseo, mi inspiración mayor formulada en esa mañana otoñal por las que circula una tibia brisa inesperada, es que la generación suya, la que ahora puebla de esperanzas y certidumbres las aulas de esa casa de estudios, sea una continuadora de la nuestra y que dentro de años de años, otro escritor salido de sus filas cuente a sucesivas yeneraciones la historia ~~~~ire~aravillosa de nuevos nombres para e trajo literario y artístico Porque Chillán obliga Cordialmente. · Pladl , OTeste. Tradición de Ñuble: espacio y tiempo: visión histórica litera ria. Chillán, Ediciones Un iversidad del Bio Bío , 1933, pp. 57-59. 68 ANEXO 10 REVISTA RATOS ILUSTRADOS· "Nuestra revista es la estudiantil. Busquemos en nuestra vida nuestra inspiración. El colegio, sus patios, su algarabía, las luchas por el triunfo, los deberes, los heroísmos anónimos, he ahí bellos temas. Aún, como en pasada ocasión, dijo nuestro Rector, las salas vacías tienen poesía. Meditemos sobre nuestra propia vida, apuremos sorbo a sorbo nuestra infancia y nuestra juventud que vale más que el oro y que no volveremos a recupe rar cuando la hayamos perdido". Así escribía el editorialista de la revista Ratos Ilustrados, el 2 de junio de 1918. La publicación había aparecido por primera vez a la circulación el 28 de abril de 1918, "editada bajo los auspicios de los alumnos del Liceo de Chillán", Eran 12 páginas, con portada a color y profusamente ilustrada con caricaturas, fotografías y reproducciones de . ob ras de arte. El diario El Día, que por esos años circulaba en Chillán, informaba en su entrega del 26 de abril de 1918, que la revista liceana era dirigida por un Comité integrado por los siguientes estudiantes: Presidente: Heriberto Kern; - Vice-presidente: Alfredo Veloso; Secretario: José Binimeli; - Director propietario: Walterio Millar; -' Directores: Oscar Arancibia, Luis Rodríguez, Raúl Ferrada, José Miguel Alvarado, Eduardo Rodríguez, Rafael Veloso. En este equipo habrá un nombre clave: Walterio Millar, nacido en Yungay (1899-1978), quien venía con el virus periodístico desde la Escuela primaria de su pueblo natal donde junto a Armando Lira (19031959) , también nacido en aquel reducto al pie de los Andes, habían editado El Escolar , un periódico del que no hemos podido ubicar ningún ejemplar. En el equipo inicial de Ratos Ilustrados no aparece Armando Lira, pero si aparecerá en sus páginas interiores y en el N° 18, (30-VIII1919), se le menciona nada menos como "gerente" de la revista. La búsqueda de ejemplares de la revista resultó laboriosa. Desde luego no se encuentra en la Biblioteca del Liceo, ni en las bibliotecas . Municipal, Nacional ni del Congreso Nacional. Al tener conocimiento que Pablo Neruda, cuando era aú n un muchacho que escribía versos, había publicado en Ratos Ilustrados, supuse que pod rían encontrarse algunos ejemplares en la Biblioteca que donó a la Universidad de Chile. Y, supuse bien: ahí encontré un juego de los primeros 20 números encuadernados y bien conservados. El recorrido de las páginas de la revista fueron una de las experiencias más ricas que he tenido en el desentierro de tesoros a los que por oficio estoy acostumbrado. 69 Por información que recogí en el diario El Día, supe que a lo menos la revista sobrepasó los 30 números; el colega Carlos René Ibacache ha encontrado testimonios que aseguran más de 60. Todo indica que Ratos Ilustrados constituye una de las hazañas mayores del periodismo estudiantil chileno y que la tarea de recuperarla y situarla en una Biblioteca chillaneja debería constituir una tarea en la que habría que gastar el mayor empeño. Marta Brunet recuerda en una célebre carta enviada a un "estudiante liceano" (¿Cuántos la habrán leída?), que su vocación literaria surgió bajo el alero de Ratos Ilustrados. Ya hemos dicho que en sus páginas están balbuceos literarios de Neruda; también se registra la presencia de quien sería uno de los mayores exponentes de la critica literaria chilena, Raúl Silva Castro; en sus páginas se reproducen obras de Carlos Dorlhiac y Armando Lira y una serie de deliciosas caricaturas del Walterio Millar. Pero hay más, la lectura de los editoriales asombran por la calidad literaria pero sobre todo por la madurez con que esos jóvenes asumían su proceso formativo y desarrollaban sus conciencia cívica y social: "aunque sea una revista de ambiente puramente estudiantil, ha alcanzado a imponerse que hoy día en el mundo se abre paso la idea que toda enseñanza debe reposar en la iniciativa de los alumnos". Por eso concluye este editorial exhortando a todo los estudiantes que leen sus columnas a poner de su parte en las clases algo más que la voluntad de oír al profesor y aprender; les pide que adelantándose a las explicaciones procuren averiguar por si mismos las cosas, porque Ratos Ilustrados, aunque dirigido por adolescentes ha sabido también que para triunfar en la vida, para llegar a ser algo como hombre, es necesario poner de nuestra parte toda la iniciativa de que somos capaces y no ser meros repetidores de otros repetidores". y en otro editorial, centrado en la denuncia de la postración cultural del pueblo, alzan sus voces con un llamado rotundo: "Gobernantes, el pueblo tiene derecho a la luz, no la neguéis. Todos somos iguales, estamos hechos del mismo barro. ¿Por qué no ilumináis las bajas regiones del edificio social? ¿Creéis hacer la felicidad del pueblo con adelantos materiales? La civilización podrá hacer de Chile un Cartago; la instrucción, una verdadera República. Escoged". Pero no se crea que era un grupo de tontos graves sólo empeñados en la denuncia de la cuestión social y la emancipación de la mujer o sólo de jóvenes poetas embriagados de romanticismo; no, eran jóvenes que vibraban con el deporte y las fiestas primaverales a cuyas reinas otorgaban gran presencia en sus páginas, incluso El Oía informa que Ratos Ilustrados se proponía editar un libro con fotografías de todas las reinas de las fi estas primaverales de los últimos años. Los directivos de la revista se esforzaron por abrir espacios "desde Talca a Temuco" en busca de colaboradores, suscriptores y 70 avisadores; incluso un número aparece impreso en Talca; y algo muy importante, s~ esforzaron por convertirse en un vocero de toda la provincia de Nuble. El número 10 (6-X-1918), estuvo dedicado a Bulnes; en la portada aparece el retrato del Gobernador Alfredo Dueñas y en su interior se ofrece una temática propia de esa comuna, con caricaturas de sus figuras públicas y fotografías de sus mujeres hermosas. El Día, decía, al informar sobre el N2 29 de Ratos Ilustrados: kLa revista trae una presentación que podemos calificar de lujosa, que manifiesta los esfuerzos gastados por sus directores en orden a conseguir el favor del público mediante la bondad de la publicación estudiantil". La colosal empresa fue posible también por otros factores que estimularon a ese elenco de jóvenes emprendedores: el comercio chilIanejo estuvo presente con anuncios; los profesionales con anuncios y suscripciones y, por cierto, un profesorado comprometido con una tarea nacional bajo la conducción de uno de esos Rectores que motivan con el ejemplo de su talento y su entrega; el profesor Narciso Tondreau (1861-1949), cuya figura moral ha cruzado el tiempo en la historia literaria y educacional de Chile; figura moral que sería bueno revivir en el viejo Liceo en la hora en que la democracia se propone volver sobre el sueño de Sarmiento: educar al soberano. Educar al pueblo que es el actor de la democracia con los cuidados que las Monarquías ilustradas preparan todavía los Príncipes porque sin ciudadanos instruidos la democracia no es más que una coartada demagógica para ocultar el poder real de los poderosos de siempre. Educar al pueblo es crear condiciones para que en los colegios florezcan los espíritus inquietos como aquellas que dieron vida a Ratos Ilustrados, más tarde a Rumbos en el histórico Liceo donde es hora de escuchar el eco de las sabias enseñanzas de don Narciso, sembrador de ciencia, poesía y sueños de una nación próspera, libre y justa y las lejanas huellas de un puñado de jóvenes más modernos que unos cuantos que hoy, si sueñan, sueñan con ser tigres o con sentirse chilenos sólo en los estadios. "Del libro inédito que publicará próximamente Alejandro Witker sobre temas de cultu · ra regional J que en homenaje a esa pléyade Iiceana llevará el nombre de la revista que se recuerda en este articulo. 71 ANEXO 11 HIMNO DEL LICEO DE HOMBRES DE CHILLAN CORO Nuestras voces unamos en coro nuestras almas unamos también y entonemos un himno sonoro al Liceo que es templo del bien. I Caminemos con paz y alegría en las luchas del diario deber y sintamos crecer cada día nuevas ansias de luz y saber. Ni ambición de placer, ni de oro, sólo anhelos tenemos de unión, que es común el ansiado tesoro y la tierra es un gran corazón. CORO Nuestras voces unamos en coro, nuestras almas unamos también y entonemos un himno sonoro al Liceo que es templo del bien. 72 A N E X O 12 HIMNO DEL LICEO NOCTURNO MIXTO "BERNARDO O'HIGGINS" Eres hijo, Liceo Nocturno, del esfuerzo de la juventud, te sostienen cien brazos robustos y un ejército ansioso de luz. Cual un astro, gentil mensajero, sembrador de cultura y amor, iluminas nuestro pensamiento con la aurora de un mundo mejor. En noches cuajadas de estrellas o cubiertas por la tempestad, tu figura parece más bella porque forjas un nuevo ideal. Caravanas de hombres y mujeres que trabajan y van a estudiar, hoy coronan tu sien de laureles y bendicen tu nombre al cantar. ANEX013 DOCENTES DIRECTIVOS ACTUALES DIRECTOR: Héctor SUBDIRECTOR Wagner Juan Raúl Carrasco Jara Pérez Eulufí INSPECTOR GENERAL: Ramón Ciro Mayorga Santana INSPECTOR GENERAL: Jaime Bernardo Herrera Uribe