la iglesia - Ministerio Internacional Dios Es Amor

República Bolivariana de Venezuela
Instituto Bíblico Teológico
“Dios Es Amor”
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Inscrito en el Ministerio del Poder Popular de Interiores y Justicia de la
Dirección de Culto Nro. 7755
TEOLOGIA VI (7)
LA IGLESIA
FACILITADORA: APÓSTOL DRA. ROSA DE BELIZARIO
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LA IGLESIA TEOLOGIA VII 004
"Jesús determinó con lada claridad que hubiera una sociedad compuesta de sus adeptos y
seguidores para dar el evangelio a la humanidad, ejercer un ministerio en beneficio de ella y trabajar
como él lo hizo para el engrandecimiento del reino de Dios. No preconizó organización alguna o
plan para el gobierno o administración de esta sociedad... Hizo algo mucho más grande que
proporcionar organización:}

Dios fue manifestado en Carne,

Justificado en el Espíritu,

Visto de los gentiles,

Creído en el mundo,

Recibido arriba en gloría
El dio vida. Jesús formó la sociedad de sus discípulos llamándoles para que se congregaran a
su alrededor. Le comunico a dicha sociedad, hasta donde le fue posible durante su ministerio en la
tierra, su propia vida, su espíritu, su propósito. Prometió continuar impartiendo, hasta el fin del
mundo, su vida a dicha sociedad, la iglesia. Su gran don u obsequio a la iglesia, podemos decir, fue
sí mismo".
Joel 2: 16; Esdras 2:t55; Joel 2: 16. La palabra "iglesia" es una transliteración del griego
"ekklésía" que es una palabra que aparece en el N.T. Y que se usa para una asamblea pública citada
por un heraldo (Hch. 19:32, 39, 40). Sin embargo en la (LXX) significa asamblea ó congregación de
israelitas especialmente cuando se reúnen delante del señor con propósitos religiosos: la iglesia es
una entidad sobrenatural:
"La congregación que el Dios vivo reúne alrededor de Jesucristo. De esta forma la iglesia es
la familia espiritual de Dios, la comunión cristiana creada por el Espíritu Santo a través del
testimonio de los grandiosos hechos de Dios en Cristo Jesús. Donde quiera que el Espíritu Santo
une las almas que le adoran a Cristo unas con otras, allí está el Ministerio de la Iglesia".
(Efesios 3:3-6)
(Romanos 16: 25,24)
Su proceso es de crecer hacía el mundo venidero, y todos sus dones y actividades son la
continuación de la obra de Cristo por el poder del Espíritu Santo; y aparecerá en la era venidera
como el pueblo de Dios unido en una congregación ante el trono como la ciudad celestial- la nueva
Jerusalén.
En el AT. se emplean dos palabras para designar a 1iglesia, es decir "qahal" (o Kahal)
derivada de la raíz ya en desuso: "qal" (ó Kal) que significa "Llamar", y "edhad" deriva de "ya adh":
"designar ó encontrarse ó Congregarse""en un lugar determinado""o designado". "Edhad" es
propiamente una reunión por medio de designación y cuando se aplica a Israel, denota la sociedad
misma formada por los hijos de Israel o por sus cabezas representativas, estuvieran o no reunidos en
asamblea. "Qahal", por otra parte denota propiamente una reunión en donde verdaderamente se
reúne todo el pueblo. En consecuencia encontramos en ocasiones la expresión "gehal'' ''edhah'' es
decir: "La asamblea de la congregación" Ex. 12:6; Núm. 14:5; Jer. 26: 17, parece que la reunión
verdadera era a veces una reunión de los representantes del pueblo. Deut. 4:10; 18:6; comparece.
Deut. 5:26. Edhah es por muchos la palabra más común en Exodo, levítico, Números y Josué, pero
esta por completo ausente en Deuteronomio y no encuentra sino rara vez en los libros posteriores.
"Qahal" abunda en Crónicas, Esdras y Nehemias. "Sinagoge" es la palabra usual y universal para
traducir a la anterior Septuaginta (LXX) y es también la traducción acostumbrada de aquella palabra
en el Pentateuco. Sin embargo en los libros posteriores de la Biblia "qahal" se traduce por
"ekk:lsésía". El N.T. también dos palabras derivadas de la segtuaginta (LXX) es decir "ekklsésía".
que se deriva de "ek" y "kaleo" (sustantivo griego) "Convocar" y "Sunagoge" que se deriva "Sun" y
"ago" que significa "llegar Juntos" ó "estar reunidos juntos" se traduce correctamente por
Congregación y no Iglesia. Así "ekklsésía". En el N.T; llego a cambiar de idea.
1) En círculos griegos seculares significa una asamblea pública generalmente de orden
político de aquellos ciudadanos que respondían al llamado del mensajero oficial o heraldo. Así se
emplea en Hch. 19: 32, 39s (2). En la LXX se emplea a menudo la palabra heb. "qahal" que designa
la congregación de Israel (1 Reyes 8:14; 1 Crón. 13:2-2; Sal 22:22; CP. Hch. 7:38; o sea Ekkelésía
en el N.T.llega a dar concepto de Iglesia, el significado de una teocrática de los llamados de Dios; y
se aplica a todo el cuerpo de cristianos de una ciudad (Hechos 11:22; 13: 1) a una Congregación (1
CO. 14: 19,35; Ro. 16:5). Al cuerpo todo de creyentes de la tierra (Efesios 5:32). La Iglesia es
entonces una compañía de personas llamados del mundo apartado de El, profesas y promete lealtad
al señor Jesucristo.
COMISION DE LA IGLESIA
Como cuerpo de Cristo y como la nueva Israel (Ex 1 9:6) la iglesia ha sido ungida para
cumplir un sacerdocio en el mundo: un servicio mediatoro que declara la voluntad de Dios para la
humanidad y presenta las necesidades humanas ante el trono de Dios en oración; existen dos
deberes que el apóstol Pedro menciona, relacionados entre si que corresponde a dicho sacerdocio.
1. "Ofrecer Sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo". (IP. 2:5) es
decir adorar a Dios y cumplir su amorosa voluntad. Ef 2:21-22.
2. Anunciar "las virtudes de aquel que os llamo de las tinieblas a su luz admirable; es decir
dar testimonio de su obra salvifica en el mundo". 1 P. 2:9; Ef 5:8;Jn. 12:36.
El Sacerdocio de la Iglesia en el N.T. es de carácter corporativo: a ningún ministro o.
dirigente individual se le llama "sacerdote", se aplica a los cristianos; puesto que nuestro Sumo
Sacerdote, el que nos ha dado el acceso al trono (Bch. 10: 19-22) nuestro sacerdocio delante de
Dios es una función de nuestra calidad de hijos de Dios; puesto que Cristo (13: 15) no se requiere
ninguna ordenanza sacerdotal. Los escritos posapostolicas empero, se encaminan rápidamente en
esa dirección, clemente (95-96 d.C) describe el ministerio cristiano en función de sumo sacerdote,
sacerdotes, y levitas (1 Clemente 40-44) la Didajé (13:3) asemeja los profetas (sobre el bautismo) e
Hipólito (Refutación sobre toda herejía, prefacio), parecerían haber sido pioneros en el uso de los
títulos "sacerdotes" y "sumo sacerdote" para los ministros cristianos. (c.a. 200 d. C.)
MARCOS DE LA ETICA
El Señor atrae y mantiene a su pueblo en una relación de pacto con él por su Espíritu y
Palabras (Is. 59:21) su voz se escucha en la proclamación de la Palabra y sus acciones se ven en la
administración de los sacramentos. Por consiguiente, estas Gunto con la oración y la alabanza) son
las señales de la Iglesia visible, y los medios que el Espíritu Santo usa para atraer a los individuos a
una fe personal y para nutrir a los creyentes en aquel culto colectivo de la comunidad cristiana. Ya
que ellos (los creyentes) reciben la promesa de Dios, él perdona los pecados de su pueblo y los sella
con los sacramentos para el mundo venidero.
Hechos 20: 28- Su Característica; junto con la proclamación (K&ygma) enseñanza (didache),
también se le dio en lugar prominente al Bautismo y la Cena del Señor en la iglesia primitiva (Bch.
2:41-42; 20:7; 10:47, etc.). Estos dos ritos se consideraban como instituidos por Cristo para hacer
que lo miembros de la iglesia entraran en comunión con su muerte y resurrección y de esta forma
consigo mismo a través del Espíritu Santo (Mt. 28: 11-12; 1 Co 11:23-27; Hch. 2:38; Ro 6:3-5; Col.
2: 11-12) ambas cosas estaban unidas en la enseñanza de nuestro Señor (Mr. 10: 38-39) y en la
mente de la Iglesia (1 Co. 1 0:5ss) como teniendo el mismo significado. Eran la promulgación
visible de la palabra proclamada en el Kérygma y así debe entenderse su significado. El Kerygma o
proclamación del evangelio en el N. T. no era en mero recitar los acontecimientos de la muerte,
resurrección y ascensión de Jesús, el hijo de Dios. Era la representación de estos acontecimientos a
la vista de los agentes en el poder del Espíritu de tal manera que a través de esta proclamación
pudieran relacionarse con estos acontecimientos en una forma viva a través de la fe. En la
proclamación del evangelio el acontecimiento ocurrido una vez y para siempre continúa siendo
efectivo para la salvación (1 Co. 1:21; 2Co. 5: 18-19). La palabra del Kérygma entregó a los
hombres el ministerio (mysterion) del reino de Dios que cristo trajo (Mt. 13:1-23; Mr. 4:4); Y el
predicador al cumplir con su labor estaba siendo mayordomo de este misterio (1 Co. 4:14; Col.
1:25; Ef 3:8-9). Los milagros o señales que acompañaban este Kérygma , en la Iglesia primitiva
eran el aspecto visible del poder viviente que la palabra derivada de su relación con el misterio del
reino de norte (nota)
a. Dios; el cual es éste: antes de esta consumación escatológica; antes de la destrucción de
Satanás; antes del siglo venidero. El reino de Dios se ha introducido en este siglo invadido el reino
del maligno en poder espiritual para dar a los hombres de antemano la bendición del perdón (Mr.
2:5) la vida (Jn 3:3); y la justicia (Mí. 5:20; Ro 14:16). Cosas que pertenecen al siglo venidero. La
justicia del reino es una justicia interior y absoluta (Mí. 5:22-48) que solo podrá ser realizada en la
medida que Dios la da a los hombres.
b. La palabra griega mysterion se le dio más adelante la traducción "Sacramentum" y los ritos
mismos vinieron a ser conocidas como «Sacrarnenta". La palabra "Sacramentum" significa a la vez
"algo puesto aparte como sagrado" y "un juramento militar de obediencia administrado por el
comandante" (esta palabra pertenece a un periodo de elaboración de la doctrina muy posterior al
NT.). Los consientes evangélicos le asignan la importancia como "ordenanzas" (Término preferido)
dadas por Cristo para ser responsable y permanentemente observados por la iglesia cristiana.
La Iglesia en el sentido cristiano apareció primeramente en Jerusalén después de la ascensión
de Jesús. Se componían del grupo de discípulos del señor Jesús, eran galileos; juntamente con lo
que respondieron a la predicación de los apóstoles en Jerusalén. Sus miembros se consideraban el
remanente elegido de Israel destinado a hallar la salvación en Sión (Hch. 2: 1 7ss) y como el
Tabernáculo de David restaurado, que el mismo Jesús, había prometido edificar (Hch. 15:16; Mt.
16:18). Jerusalén era, pues, el escenario divinamente señalado para que los que esperan el
cumplimiento final de todas las promesas de Dios (Hch. 3:2 1). Visto externamente, el grupo de
creyentes bautizados, revestía las características de una secta dentro del judaísmo. Se la denominó
"Secta de los Nazarenos" por un orador profesional (Hch. 24:5,14; Cp. 28:22) mientras que sus
propios adherente s dieran el nombre "el camino" a la fe que profesaban fue más o menos
tolerada por el judaísmo durante los treinta o más años de su existencia en Judea, excepto cuando
las autoridades judaicas se sintieron molestas por su fraternización con las iglesias gentiles en el
extranjero. No obstante debe tenerse en cuenta el carácter esencialmente judío de la iglesia en
Jerusalén. Sus miembros aceptaban las obligaciones impuestas por la ley, y el culto del templo. La
creencia que los distinguían era la de que Jesús de Nazaret era el Mesías de Israel que Dios mismo
había certificado esta verdad al levantarlo de entre los muertos después de haber sufrido por la
redención de Israel, y que "el día del Señor grande y manifiesto" estaba ya por llegar, y culminaría
con la aparición final del Mesías en juicio y gloria. Las practicas que los distinguían incluidas el
bautismo en el nombre de Jesús, asistencia regular a las reuniones de instrucción organizados por
los apóstoles, y la "Comunicación" de casa en casa, lo que Lucas describe. "el partimiento del pan
y: .. Las oraciones" (Hechos 2:41-46). Los primeros dirigentes de la iglesia fueron los doce
apóstoles (galileos) específicamente, Pedro, Juan, pero estos fue reemplazados por ancianos
nombrados, en la forma habitual entre los judíos, con Jacobo el hermano de Jesús, como presidente
(Gá. 2: 9 - Hch. 15: 6ss). La presidencia de este último se extendió durante casi toda su vida de la
iglesia en Jerusalén, quizás ya que la década del treinta (Gá. 1:19- Hch. 12:17) hasta su ejecución
cerca del 62 d.C. Es muy posible que esto haya ocurrido en relación con las concepciones
mesiánicas de la iglesia.
Eusebio informa que un primo de Jesús, Simeón, hilo de Cleofás, sucedió a Jacobo en la
presidencia, y que se dice después de la captura de Jerusalén en el 70 d.C., ordenó la búsqueda de
todos aquellos que pertenecieron a la familia de David. A fin de que no quedara entre los judíos ni
un solo miembro de la. Real, (los judíos aprovechando una tregua forzosa se hicieron fuertes y
cuando tito Flovío retama la ofensiva halló una tenaz oposición que 10 obligó a entrar en Jerusalén
y destruirla totalmente dispersados los judíos. Palestina paso a ser provincia romana). La iglesia se
hizo numerosa (Hch. 21:20) llegando a incluir entre sus miembros a sacerdotes y fariseos (Hch. 6:7;
15:5). En sus comienzos incluso también a muchos helenistas, judíos de habla griega (de la
dispersión) que llegaba como peregrinos a ciertas fiestas o que por distintos motivos se encontraban
transitoriamente en Jerusalén. A menudo estos judíos eran más pudientes que los de Jerusalén y
manifestaban su piedad llevada "limosna a [su] nación" Hch. 24: 17 probable alusión a la ofrenda
traída para los cristianos pobres de Jerusalén. (Hch. 20: 1-6) considerados aún como parte de la
nación judía. Cuando la iglesia adopto la práctica de la ayuda mutua, en benefactor típica fue
Bemabé, natural de Chípe (Hch. 4:34-3 7) y cuando se hizo necesario nombrar una comisión para
atender la distribución para atender la distribución, los siete elegidos, a juzgar por sus nombres, eran
helenitas (Hch. 6:5) aparentemente fue a través de este elemento helenista que el evangelio
desbordó los estrechos límites del cristianismo judaico, creando nuevos corrientes en territorios
extranjeros.
Esteban uno de los siete tuvo una discusión (Hch. 6; 7; 8) en una sinagoga helenista de
Jerusalén (de la posiblemente era miembro Saulo de Tarso), y fue acusado ante el Sanedrín de haber
blasfemado contra el templo y la ley de moisés. Su defensa demuestra sin lugar a dudas una actitud
liberal hacia la inviolabilidad del templo, y la persecución que se desencadenó después de ser
muerte quizás haya estado dirigido contra este tipo de tendencias entre los creyentes helenistas,
antes que contra el cristianismo de los apóstoles (que era respetuoso de la ley), Felipe, otro de los
siete, llevó el evangelio a Samaria, y después de bautizar a un eunuco extranjero cerca de la antigua
ciudad de Gaza, siguió predicando por la costa, hasta que llegó a la ciudad de Cesárea,
predominantemente pagana donde muy pronto encontraría Pedro aceptando a los gentiles no
circuncidados para ser bautizados.
Cuando estalló la guerra con Roma en 66 d.C. la iglesia llego a fin, según Eusebio, sus
miembros se trasladan a Pella en la Transjordanía posteriormente se dividieron en dos grupos, los
nazareno s, que, aunque ellos mismos guardaban la ley, adoptaban una actitud: tolerante hacia los
creventes gentiles y los ebionistas, que heredaron el punto de vista riaizantes de sumisión a la ley.
Los cristianos de épocas posteriores incluyeron a los ebionistas entre los hereies Los creyentes de
Jerusalén no podían arrojarse a la exclusividad del término "ekklesía", a pesar de la asociación del
mismo con el A.T; y la Congregación mixta, de creyentes judías y gentiles que se formó en
Antioquia a orillas del Orontes, también se comenzó a llamar sencillamente "la iglesia" de dicho
lugar (Hch. 11:26; 13:1). Además Antioquia, y no Jerusalén sirvió de modelo de "la nueva iglesia"
que habría de surgir en todas partes del mundo. Fue fundada por judíos helenistas. Aquí también los
creyentes fueron por primera vez apodados "cristianos o cristitas" por sus vecinos gentiles (Hch.
11:26). Antioquía vino a ser el trampolín para la extensión del evangelio en todo el Levante.
El reino de Cristo no es en todos sentidos parecido al de los reyes de la tierra. El no gobierna
la iglesia por la fuerza, sino sub. jetivamente, mediante su Espíritu que opera en la iglesia, y
objetivamente por la Palabra de Dios como la regla de autoridad. Todos los creyentes están
incondicionalmente comprometidos a obedecer la palabra del Rey. Así como cristo es el único
gobernante soberano de la iglesia, su palabra es la única ley en sentido absoluto. En consecuencia,
todo poder despótico es c01ill.trabandoen la iglesia. No hay poder gobernante independiente de
Cristo. El papa de ROMA queda condenado en esto en que aunque profesa ser vicario de Cristo
sobre la tierra; suplanta, prácticamente, a Cristo y reemplaza su Palabra mediante innovaciones
humanas. El papa no solamente coloca la tradición en pie de igualdad con la Biblia, sino que
también pretende ser el intérprete infalible de las dos cuando habla excathedra, respecto a materias
de fe y de moral. La Escritura y la tradición pueden ser reglas de fes mediatas o remotas, la regla
inmediata es la enseñanza de la iglesia, la cual tiene su garantía en la infalibilidad papal. La palabra
del papa es la palabra de Dios. Pero aunque es verdad que Cristo ejerce su autoridad en la iglesia
por medio de sus oficiales, esto no debe entenderse en el sentido de que trasfiera su autoridad a sus
siervos. El mismo gobierna la iglesia como sus órganos. No tienen ministerial o independiente, sino
únicamente un poder derivado de su señor. Se puede distinguir en la iglesia diferentes clases de
oficiales: una distinción muy general es la que se encuentra entre oficiales extraordinarios y
ordinarios.
a. Apóstoles. Hablando en forma estricta, este nombre se aplica sólo a los doce escogidos por
Jesús y a Pablo; pero también se aplica a ciertos hombres apostólicos que ayudaron a Pablo en
su trabajo, y que estuvieron capacitados con dones y gracias apostólicas, Hech. 14:4, 14; 1
Coro 9:5, 6; 2 Cor. 8:23; Gál. 1:19 Los apóstoles tuvieron la tarea especial de poner los
fundamentos de todos los siglos. Resulta que sólo por medio de su palabra los creyentes de
todos los siglos posteriores tienen comunión con Jesucristo. De aquí que ellos son los apóstoles
de la iglesia en el día actual tanto como fueron de la iglesia primitiva. Tienen ciertas cualidades
especiales.
Recibieron (a) su comisión directamente de Dios o de Jesucristo, Marc. 3:14; Luc. 6: 13; Gal.
1-:1; (b) fueron testigos de la vida de Cristo y especialmente de su resurrección, Juan 15:27: Hech.
1:21, 22; iCor. 9:1; (e) fueron consientes de ser inspirados por el Espíritu de Dios en toda
enseñanza, tanto oral como escrita, Hech. 15:28; 1 Cor. 2:13; 1 Tes. 4:8; 1 Jn. 5:912; (d) tuvieron
el poder de obrar milagros y lo usaron en diferentes ocasiones para ratificar su mensaje, 2 Cor. 12:
12; Heb. 2:4; y (e) fueron ricamente beneficios en sus trabajos como señal de la aprobación divina
de ellos, 1 Coro 9: 1,2; 2 Cor. 3:2,3; Gal. 2:8.
b. Profetas. El Nuevo Testamento habla también de profetas, Hech. 11:28; 13:1,2; 15:32; 1 Cor.
12:10; 13: 2; 14:3; Ef 2:20; 3:5; 4:11; 1 Timo. 1:18; 4:14; Apoc. 11:6. Evidentemente el don de
hablar para la edificación de la iglesia estuvo muy desarrollado en estos profetas, y fueron en
ocasiones los instrumentos para revelar ministerios y predecir eventos futuros. La primera
parte de este don es permanente en la iglesia cristiana, y fue distintamente reconocido por las
iglesias Reformadas (profetizar), pero la ultima parte, fue carismático y temporal. Difirieron de
los ministros ordinarios en que los profetas hablaban bajo especial inspiración.
c. Evangelistas En adición a los apóstoles y profetas, los evangelistas se mencionan en la Biblia,
Hch. 21:8; Ef 4:11; 2 Tim. 4:5. Felipe, Marcos, Timoteo y Tito pertenecen a esta clase. Poco se
sabe acerca de estos evangelistas. Acompañaban y asistían a los apóstoles y algunas veces
fueron enviados con misiones especiales. Su trabajo era predicar y bautizar, pero también
ordenar ancianos, Tito 1:2; 2 Tim. 5:22, y aplicar la disciplina, Tito 3: 10. Su autoridad parece
haber sido general y un poco superior a la de los ministros regulares.
a. Ancianos. Entre los oficiales comunes de la iglesia los presbuteroi o episkopoi son los
primeros en orden de importancia. El primer nombre nada más significa "ancianos", es decir los que
son más viejos, y segunda, "los inspectores". El término presbítero se usa en la Escritura para
denotar a los hombres viejos, y para designar una clase de oficiales un tanto parecidos a aquellos, y
que funcionan en la sinagoga.
Como designación de oficio, el nombre fue eclipsado poco apoco y hasta desplazado por el
nombre episkopoi. Los dos términos a menudo se usan indistintamente, Hech. 20:17,28; 1 Tim. 3:1;
4:14; 5:17, [9; Tito 1:5,7; 1 Pedo 5:1,2. Presbuteroi se menciona por primera vez en Hech. 11:30,
pero con toda evidencia el oficio ya era bien conocido cuando Pablo y Bernabé fueron a Jerusalén, y
deben haber existido aun antes de la institución del diaconado. Al menos al término hoineoterol de
Hech. 5 parece señalar hacia una distinción entre estos y los presbuteroi. Se hace mención frecuente
de ellos en el Libro de los Hech. 14:23; 15:6, 22; 16:4; 20: 17, 28; 21: 18. Probablemente el oficio
presbiterial o episcopal se introdujo primero en las iglesias de los judíos, Sgo. 5:14; 1 Tes. 5:12;
kubernesis, 1 Coro 12:28; hegoumenoi, Heb. 13:7, 17, 24; Y piomenes, Ef 4:11. Con toda claridad
estos oficiales tenían el encargo de velar sobre el rebaño que había sido confiado a su cuidado.
Tenían que proveerlo, gobernarlo y protegerlo considerándolo como la familia de Dios.
b. Maestros. Es claro que los ancianos no fueron maestros originalmente. No había necesidad
de separar maestros al principio, puesto que !había apóstoles, profetas y evangelistas. Poco a poco,
sin embargo, la distancia estuvo conectada más estrechamente con el oficio episcopal; paro aun
entonces los maestros todavía no constituían una clase aparte de oficiales. La afirmación de Pablo
en Ef. 4: 11, que el Cristo ascendido dio también a la iglesia. "pastores y maestros", mencionados
como una sola clase, demuestra con claridad que estos dos no constituían dos clases diferente de
oficiales, sino una clase que tenía funciones relacionadas, 1 Tim. 5: 17 habla de ancianos que
trabajaban en la Palabra y en la enseñanza, y según Heb. 13:7 los hegournenoi también eran
maestros. Además, en 2 Tim. 2:2 Pablo hace ver a Timoteo con urgencia la necesidad de señalar
para el oficio hombres fieles que también serán capaces de enseñar a otros. Con el correr del tiempo
dos circunstancias condujeron a distinguir entre los ancianos:
'O inspectores
que quedaron llamados
también para enseñar: (1) cuando los apóstoles murieron las herejías surgieron y aumentaron, la
tarea de aquellos que estaban designados para enseñar se hizo más precisa y demandó preparación
especial, 2 Tim. 2:2; Tito 1:9; y (2) en atención al hecho de que el trabajador es digno de su salario,
aquellos que estuvieron encargados del ministerio de la Palabra, una tarea muy laboriosa que
requería todo su tiempo, quedaron libres de otros trabajos, para que se dedicaran más
exclusivamente al trabajo de enseñanza. Con toda probabilidad los aggeloi a quienes se dirigieron
las cartas a las siete iglesias dIe Asía Menor, fueron los maestros o ministros de aquellas iglesias,
Apoc. 2:1, 8, 12, 18, 3:1, 7, 14. En círculos Reformados los ministros ahora gobiernan las i81esias
juntamente con los ancianos, pero en adición a eso administran la Palabra y los sacramentos. Juntos
hacen las necesarias reglamentaciones para el gobierno de la iglesia.
c. Diáconos. Además de los presbuteroi se menciona en el Nuevo Testamento los diakonoi,
Fil. 1:1; 1 Tim. 3:8, 10, 12. Según la opinión predominante Hechos 6: 1-6 contiene el relato de la
institución del diaconado. Sin embargo algunos eruditos modernos lo dudan, y consideran el oficio
mencionado ¡en Hech. 6, bien, como un oficio general en el que las funciones de ancianos y
diáconos quedaron combinados, o bien como un oficio meramente temporal que sirvió a un
propósito especial.
Llaman la atención al hacha de que algunos de los siete elegidos, como Felipe y Esteban
evidentemente se dedicaron a la enseñanza; y que el dinero recogido en Antioquia para que los
pobres de Judea fue entregado en manos de dos ancianos. No se hace mención de diáconos para
nada en Hech. 11:30, aunque estos, si hubieran existido como una clase separada, habrían sido los
que habían recibido, como es natural aquel dinero. Y sin embargo con toda probabilidad Hech. 6
nos refiere la institución del diaconado: (1) El nombre diakonoi, que fine, previo al evento narrado
en Hech. 6, siempre usado en sentido general para designar un sirviente, subsecuentemente
comenzó a ser empleado, y en el curso del tiempo sirvió exclusivamente, para designar aquellos que
están comprometidos en trabajos de misericordia y caridad. La única razón que puede ser designada
para esto se encuentra en Hech. 6. (2) Los siete hombres que se mencionan estuvieron encargados
de la tarea de distribuir adecuadamente los dones que eran traídos por los agapae, un ministerio que
en otras partes se describe más particularmente con la palabra diakonia, Hech. 11:29; Rom. 12:7; 1
Cor. 8:4; 9:1, 12, 13; Apoc. 2:19. (3) Los requerimientos para el oficio, según se mencionan en
Hech. 6, son bastante preciosos, y en ese respecto concuerdan con las demás mencionadas en 1 Tim.
3:8- 10, 12. (4) Muy puede decirse a favor de la idea favorita de algunos críticos acerca de que el
diaconado no se desarrolló sino hasta más tarde por el tiempo cuando el oficio episcopal hizo su
aparición.
3) EL LLAMAMIENTO DE LOS OFICIALES Y SU INTRODUCCIÓN AL OFICIO. Debe
hacerse distinción entre el llamamiento de los oficiales extraordinarios, por ejemplo, los Apóstoles,
y el de los oficiales ordinarios. Los primeros fueron llamados de una manera extraordinaria con un
llamamiento inmediato de parte de Dios, y los últimos en una manera ordinaria y mediante la
agencia de la iglesia. Aquí tenemos que ver más particularmente con el llamamiento de los oficiales
ordinarios. (1) El Llamamiento interno. Se piensa a veces que el llamamiento interno a un oficio en
la iglesia consiste en algunas indicaciones extraordinarias de Dios que sirven para saber que uno es
llamado una clase de revelación especial. Pero esto no es correcto. Consiste más bien en
determinadas indicaciones providenciales y ordinarias dadas por Dios, e incluye de manera especial
tres cosas: (a) la conciencia de ser impedido hacia alguna tarea especial en el reino de Dios, por
amor a Dios y a su causa (b) la convicción de que uno está al menos en una medida intelectual y
espiritual capacitado para el oficio requerido; y (e) la experiencia de que Dios con toda claridad está
pavimentando el camino hacia la meta. (2) El llamamiento externo. Este es el llamamiento que
viene a uno por medio de la instrumentalidad de la Iglesia. No emana del Papa (católico romano), ni
de un obispo o colegios de obispos (episcopales), sino mediante la iglesia local. Tanto los oficiales
de ella como los miembros ordinarios toman parte en él. Se hacen evidente según los pasajes de
Hech. 1: 15-26; 6: 2-6; 14: 23, que los oficiales tienen en el asunto una mano directora, pero no con
la exclusión del pueblo. El pueblo tuvo que ser reconocido aun en la elección de un apóstol, según
se ve en Hech. 1: 15- 26; parece que en la época apostólica los oficiales dirigían la elección del
pueblo llamando la atención a las cualidades necesarias que eran requeridas para el oficio, pero
permitían al pueblo tomar parte en la elección, Hech. 1: 15-26; 6: 1-6; 1 Tim. 3:2-13. Por
consiguiente en el caso de Matías Dios hizo la elección final.
B. LA INTRODUCCIÓN DE LOS OFICIALES AL OFICIO. HAY DOS RITOS
ESPECIALMENTE RELACIONADOS CON ESTO:
(l) La ordenación. Esta presupone el llamamiento y el examen del candidato para el oficio. Es
un acto del presbiterio (1 Tim. 4: 14). Dice el Dr. Hodge: La ordenación es la solemne del juicio de
las iglesias, mediante aquellos que están señalados para expresar tal juicio, que el candidato está
llamado verdaderamente por Dios para tornar parte en este ministerio, y por consiguiente se hace
auténtico delante del pueblo el llamamiento divino". Esta autenticación resulta, bajo todas las
circunstancias ordinarias, la condición necesaria para el ejercicio del oficio ministerial. En términos
concretos puede considerarse un reconocimiento público y una confirmación del llamamiento del
candidato a este oficio. (2) La imposición de las manos. La ordenación viene acompañada con la
imposición de las manos. Claramente se ve que las dos (ordenación e imposición) iban juntas en los
tiempos apostólicos, Hech. 6: 6; 13: 3, 1 Tim. 4: 14; 5: 22. En aquellos tiempos primitivos la
imposición de las manos implicaba con evidencia dos cosas: Significaba que una persona estaba
apartada para un determinado oficio, y que algún don espiritual le había sido conferido. La iglesia
de Roma opina que estos dos elementos todavía están incluidos en la imposición de las manos, que
esta imposición confiere actualmente alguna gracia espiritual sobre el recipiente, y por tanto, le
atribuye un significado sacramental. Los protestantes sostienen, a pesar de todo que es nada más
una indicación simbólica del hecho de que uno ha sido apartado para el oficio ministerial en la
iglesia. Aunque consideran la ordenación corno un rito escritural y corno uno apropiado del todo no
lo consideran esencial en absoluto.
CUESTIONARIO
1) IMPOSICIÓN DE MANOS EN EL AT. Y N.T.
2) CUAL ERA Y ES SU FUNCIÓN.
3) ¿INVESTIGUE SOBRE EL LLAMAMIENTO PERSONAL Y QUE ES?
4) DEFINA Y DIGA LOS MARCOS ECLESIÁSTICOS DE UNA
CONGREGACIÓN.
5) CUAL ES LA FUNCIÓN DE LOS CINCO (5) MINISTERIOS - NÓMBRELOS
y ESPECIFIQUE SU FUNCIÓN.
6) QUE ACONTECE EN LA IGLESIA DE JERUSALÉN.
7) PORQUE HUBO CAMBIOS A QUE SE DEBE.
8) SABES LO QUE ES TRANSLITERACIÓN BÍBLICA INVESTIGUE Y
ANALICE.
9) EN QUE FECHA FUE ABOLIDA LA PALABRA" PROTESTANTE"