Subido por melaniejblanco

SACCHETTI-HOVHANNESSIAN- Lectura de imágenes

Anuncio
FICHA DE CATEDRA
Acerca de una lectura de imágenes
Ficha de Cátedra- SACCHETTI- HOVHANNESSIAN
Elementos a tener en cuenta para el análisis de obra, desde Historia de la Cultura.
Las formas actuales de investigación histórica ampliaron considerablemente el material
a revisar: Lejos de preocuparse solamente por acontecimientos políticos, tendencias
económicas, estructuras sociales, existe gran interés por reconstruir cosmovisiones, vida
cotidiana, culturas. Tales búsquedas no podrían llevarse a cabo si se continuase recurriendo a
las fuentes tradicionales, como por ejemplo los documentos oficiales producidos por las
administraciones y conservados en archivos. Por eso es que cada vez más frecuentemente se
están utilizando distintos documentos entre los cuales, junto a los textos literarios y los
testimonios orales, se incluyen las imágenes.
Buscamos una participación de las imágenes que sea enriquecedora para la
comprensión de la historia. No se trata de ilustraciones que “dicen” a través de lo visible, lo
mismo que el discurso escrito. Las imágenes constituyen un lenguaje visual polisémico, lo que
Derrida llama el juego infinito de significaciones. Las imágenes no son reflejo mimético de una
determinada realidad social ni un sistema de signos carentes de relación con el contexto, sino
que ocupan posiciones intermedias entre ambos extremos.
No se encontrará en esta ficha un instructivo acerca de cómo leer una imagen. El
objetivo es dar algunas pautas a tener en cuenta para relacionar imágenes y contextos; pautas
que no se formulan como principios universales sino como elementos de investigación.
1.- las imágenes no dan acceso al mundo social concreto sino a las visiones de ese
mundo propias de una época: a la visión que el hombre construyó de la mujer, a la visión de
los obreros según la burguesía, a la visión de la población civil sobre la guerra, etc. Por lo tanto
es conveniente construir un marco enunciativo: ¿quién enuncia? Qué enuncia? Tales visiones
pueden construir una mirada hegemónica tanto como inventar excentricidades.
2.- El testimonio de las imágenes se enriquece cuando son situadas en una serie de
contextos: cultural, político, internacional, etc. Entre ellos el de las convenciones artísticas que
rigen en determinado tiempo y lugar. Conviene conocer los intereses del artista, quién encarga
la obra, la función que pretende darse a la imagen.
3.- El testimonio de una serie de imágenes es más confiable que el de una imagen
aislada. Se recomienda establecer redes de imágenes (la producción de un artista en distintos
momentos; distintas obras contemporáneas)
4.- Para reconstruir la historia es necesario leer entre líneas, tanto los textos como las
imágenes, registrando los detalles significativos, las ausencias. Con esto se está reponiendo
mucha información: suele haber prejuicios, tabúes, represiones que solo en perspectiva
histórica salen a la luz.
A modo de ejemplo de lo antedicho, tomaremos de la Escuela de Fontainebleau, la
serie Gabrielle D´Estress.
Mediante el análisis de la representación social1 de la cortesana, daremos cuenta, por un lado,
del sistema de signos que llevan a que un contexto privado legitime una situación pública y de
clase, y por otro, del proceso histórico de Francia a fines del s. XVI como antecedente de las
monarquías absolutas del siglo siguiente.
1
Chartier R., cualquiera que sean las representaciones no mantienen nunca una relación de inmediatez y
de transparencia con las prácticas sociales que dan a leer o a ver. Todas remiten a las modalidades
específicas de su producción, comenzando por las intenciones que las habitan, hasta los destinatarios a
quienes ellas apuntan, a los géneros en los cuales ellas se moldean. Descifrar las reglas que gobiernan
las prácticas de la representación es pues una condición necesaria y previa a la comprensión de la
representación de dichas prácticas.
De las tres pinturas sólo analizaremos una; Gabrielle d’ Éstrées y Catherine-Henriette de
Balzac d'Entragues, Marquesa de Verneuil, desnudas en el baño.
Utilizando “el juego infinito de significaciones” podemos plantear ciertas preguntas y hacer las
siguientes lecturas:
1.- Quién es el pintor?
2.- Quiénes son estas mujeres?
3.- Quién encargó las pinturas?
4.- Qué vemos cuando miramos el cuadro?
5.- Qué se está queriendo representar?
6.- Quién es la mujer vestida en el plano del fondo?
7.- Quién se encuentra retratado encima del hogar?
8.- Es una representación? Para quién, para qué.
9.- Esta exposición de qué da cuenta?
Estas preguntan nos servirán para reconstruir el marco enunciativo, en un primer nivel de
representación. El segundo nivel se plantearía en poner en presente el objeto ausente.
La mayoría de las producciones de esta Escuela son de autor anónimo y en esta
ocasión el pintor se escuda detrás de ello para dar cuenta de una situación privada. En todo
caso estas pinturas manieristas cumplen con el ideal de belleza femenino de Fontainebleau;
cabezas pequeñas y graciosas sobre cuellos largos y elegantes, torsos y brazos
extremadamente largos; pechos pequeños y altos.
La blonde Gabrielle d’Estrees fue amante y favorita del rey de Francia Enrique IV, entre 1590 y
1599, año de su muerte. No se sabe a ciencia cierta si la mujer que la acompaña en la serie de
pinturas que la retratan, es una de sus hermanas o Catherine-Henriette de Balzac d'Entragues
otra amante del rey, más joven que Gabrielle.
El cortinado rojo se encuentra abierto a modo de telón, develando en primer plano, una escena
íntima; dos mujeres con el torso desnudo. En segundo plano una mujer vestida, bordando.
Las mujeres se presentan relajadas dejándose mirar dentro de la.. ¿bañera?, e invitando al
espectador a entrar en una historia armada mediante un preciso sistema de signos centrado en
los diversos valores simbólicos de la figura de la “favorita” del rey Enrique IV.
Catherine pellizca el pezón de su compañera, mientras ésta sostiene entre dos dedos un
anillo…tal vez el mismo que el rey recibiera bendecido en su consagración en Chartres y
regalara a su querida en los Carnavales de 1598.
Si ambas han sido amantes del rey, cabria preguntarse, si lo que nos están mostrando es el
juego voluptuoso de un menáge á trois practicado con le Grand Alcandre (nombre en clave de
Enrique) en privado, y quedar registrado pictóricamente a pedido del mismo rey como prueba
de sus fantasías eróticas. Si observamos detenidamente, al fondo del cuadro y sobre el hogar
hay un marco que encuadra las piernas de una mujer semidesnuda, innegablemente la
habitación no pertenece a una mujer virtuosa. Lo privado se hace público.
Otra lectura posible nos está mostrando la reciente maternidad de Gabrielle (la leche de sus
pezones es mostrada por la amante más joven) y la promesa firmada del rey (anillo) de unas
próximas bodas. Otra vez se muestra cómo lo privado se hace público y cómo el ser madre
legitima la aspiración a ser esposa y reina.
Si estamos en presencia de un amor entre mujeres, la falta de desinhibición en el terreno
sexual, el mostrarse desnudas y expuestas a la mirada del otro/a, tocándose, sería un requisito
indispensable para que las amantes reales se convirtieran en favoritas. No estaríamos
equivocadas al pensar esta posibilidad, ya que sabemos que estas mujeres de la corte, al vivir
juntas en los mismos lugares y participar en los mismos rituales, se unían con lazos de
amistad, conveniencia, solidaridad, simpatía y “cortesía”, por lo que formaban verdaderas redes
comunicacionales constituidas por la etiqueta, las relaciones de fuerza y un código de honor
femenino, subterráneas y paralelas a las oficiales.
La figura de la mujer, en el plano segundo, vestida de rojo (color utilizado por la realeza) con
cuello blanco y escarpines dorados, estaría representando a la nobleza de sangre que,
mientras borda las conveniencias políticas de tal o cual alianza, vigila sus intereses
monárquicos, haciendo de lo privado una cuestión de interés público.
A modo de conclusión, podemos decir que este cuadro muestra, elementos dentro del
contexto de los otros dos, por un lado, la audacia subversiva de la seducción femenina y el
propósito encubierto del artista por develar la vida secreta de la monarquía. Por otro, el pintor
está, trasladando su concepto de género al tratamiento del espacio mostrándonos una
privacidad y un secreto definitivamente femeninos.
Las imágenes constituyen un lenguaje visual polisémico que nos habilita a una posible
reconstrucción, brindando una valiosa herramienta para llegar a la etapa hermenéutica,
permitiendo de esta manera recuperar la mirada de época.
Laura Sacchetti- María Marta Hovhannessian
Descargar