NEUROPSICOLOGIA CORRIENTES FILOSÓFICAS QUE DIERON ORIGEN A LA PSICOLOGÍA ANTECEDENTES DE LA PSICOLOGÍA CIENTÍFICA Base filosófica para la psicología Aristóteles (384 - 322 a.C.). Nació en Estargia, al norte de Grecia, sostenía que la mente o psique es el acto primero de todas las cosas, es lo que hace posible que sintamos y percibamos. Existen además, tres tipos de psique: vegetativa (de las plantas), sensitiva (de los animales) y racional (del ser humano). La psicología humana se basa en los cinco sentidos. Creía que los procesos de conocimiento se producen a través de los sentidos. Sostenía que la mente en el momento del nacimiento es como una tabla rasa, carece de ideas innatas y todo depende del aprendizaje. Aprender depende directamente de la memoria, que trabaja en base a la semejanza (relacionando cosas parecidas), el contraste (observando diferencias) y la contigüidad (recordamos cosas que están juntas en espacio y tiempo). Aristóteles afirmaba que los procesos de motivación estaban guiados por dos polos: agrado y desagrado. Nuestra mente nos guía hacia el agrado y rechaza o nos separa del desagrado. El fin último de cualquier motivación es la felicidad y ésta se consigue con la búsqueda del auto perfeccionamiento; ser más perfectos y completos. Hemos de dar un gran salto en la historia para encontrar otra gran aportación a lo que se considera la base de la psicología filosófica, de la mano de René Descartes (1596-1650), considerado el primer hombre moderno por su pensamiento. Pertenecía a la nobleza francesa. Estaba muy interesado en las matemáticas, la ciencia y la filosofía, y decidió combinar sus propósitos intelectuales con los viajes. Pasó varios años viajando por Europa, frecuentemente como caballero voluntario en diversos ejércitos. En 1649 Descartes aceptó una invitación para convertirse en profesor de filosofía en la corte de la Reina Cristina de Suecia. Murió al año siguiente en Estocolmo. Descartes postuló la doctrina del interaccionismo, según la cual el cuerpo y la mente se influyen entre sí en alguna medida, y que el punto de interacción entre ambos se halla en la glándula pineal. También argumentó que debía existir un universo externo al Yo pensante, un universo no opaco a las facultades cognoscitivas del ser humano. También, escribió el famoso libro "Discurso del método" (1637), donde expone que podemos dudar de todo (de lo que percibimos), pero de una cosa no podemos dudar, de que estoy dudando; y si estoy dudando es que pienso, y si pienso es que existo. De aquí su famosa frase "pienso, luego existo." (Cogito ergo sum). Para Descartes hay tres cosas de las que no podemos dudar: del Yo o del Pensamiento, del Mundo por su extensión y de Dios por su infinitud. Para él lo psíquico es lo consciente, o sea todo lo que existe en nuestra conciencia: la imaginación, la fantasía, los sueños, los recuerdos (…). Sostuvo que cualquier idea que se presente a la mente a la vez de un modo claro y distinto debía ser verdadera. Lo claro es lo que se presenta de modo inmediato a la mente y lo distinto es lo que a la vez es claro e incondicionado. Descartes decía que lo distinto se conoce por su evidencia es independiente de cualquier condición limitadora (PsicoActiva, 2011). CORRIENTES FILOSÓFICAS QUE APORTARON A LA PSICOLOGÍA Como indicamos en el párrafo anterior, la relación del empirismo con el racionalismo es directa. Entendiendo que etimológicamente el racionalismo, viene de la palabra latina ratio que significa razón. Es la concepción que ve en el espíritu, la mente y el entendimiento, el fundamento de toda relación del ser humano con el mundo considerada esta relación como forma superior del pensar humano. RACIONALISMO La influencia del racionalismo sobre la psicología está relacionada con lo siguiente: El racionalismo es una teoría filosófica que tiene su origen en el pensamiento de Descartes (1596-1650, filósofo francés). Descartes valoraba por encima de todo la razón y creía que esta facultad era capaz de darnos importantes contenidos, a la vez que procedimientos que garantizasen su verdad. La razón es el instrumento adecuado para la construcción de las teorías y el descubrimiento de leyes. Reivindica también el lenguaje matemático para la descripción de la realidad. El conocimiento cierto descansa en la intuición, que es capaz de ofrecer a la mente los objetos de forma clara y distinta. Descartes considera que existen dos tipos de realidad muy distintas, la "res extensa" (del latín res: cosa) o cuerpos, y la "res cogitans" (del latín cogitans: pensante) o mentes. Los animales y el resto de los cuerpos son únicamente res extensa y sus diferencias se pueden explicar en términos cuantitativos y matemáticos. Los seres humanos participan de la res extensa (pues tienen cuerpo) y de la res cogitans (puesto que disfrutan de mentes). Se trata de dos realidades distintas que se rigen por leyes distintas. Los animales carecen de alma, son puros cuerpos y se conciben como simples autómatas, tesis que le lleva a Descartes a introducir el mecanicismo como teoría explicativa, aunque válida únicamente para los cuerpos y no para la mente. Con el tiempo, algunos filósofos extenderán el mecanicismo también a la mente (así ocurre con las tesis asociacionistas que encontramos en los empiristas). Las mentes disponen de principios innatos, a partir de los cuales y mediante procedimientos propios de la razón, que también son innatos, puede alcanzar el conocimiento de la realidad, incluidos los cuerpos. Descartes introduce el mecanicismo para dar cuenta de la conducta animal, pero también el determinismo ya que consideró que el mecanismo fundamental de la conducta de los organismos es el reflejo, que es totalmente automático y no necesita de intervención alguna de la razón. Los hombres tienen también reflejos e instintos, pero lo principal de su conducta se escapa al determinismo y el mecanicismo pues descansa en su mente racional. En la filosofía aristotélica el cuerpo y la mente dependían uno de otro, pues uno era el principio material y el otro el principio formal de los seres vivos, sin embargo, en el racionalismo cartesiano (Cartesio=Descartes) la relación mente-cuerpo queda rota, pues se trata de dos sustancias totalmente distintas, aunque estén unidas en un punto preciso del cerebro, la glándula pineal (órgano situado en la base del cerebro). La defensa cartesiana de las ideas innatas influyó en los psicólogos de la Gestalt y en la psicología cognitiva. Su concepción de la res extensa dio lugar a la postura materialista y mecanicista en psicología, representada por ejemplo por Lamettrie (1709-1751, biólogo y filósofo francés) y Cabanis (1757-1808, filósofo y médico francés), y llega incluso hasta el conductismo radical. Conviene también recordar la oposición existente entre las explicaciones mecanicistas y las finalistas o teleológicas. Las explicaciones mecanicistas suelen ser deterministas y se refieren a la causalidad material y eficiente para dar cuenta de los cambios en la realidad; por su parte las explicaciones finalistas creen imprescindible referirse a la causalidad final (los motivos o propósitos de las acciones). Los modelos mentalistas suelen preferir las explicaciones finalistas y los modelos positivistas (como los conductistas, p. ej.) se inclinan más por las explicaciones mecanicistas. Un ejemplo de explicaciones finalistas lo encontramos en el racionalista Leibniz (1646-1716, matemático y filósofo alemán), para quien la realidad consta de centros individuales de fuerza a los que llamó "mónadas". Las mónadas son seres simples con vida propia, seres puramente espirituales y carentes de extensión. Las mónadas están dispuestas de tal modo que parecen actuar unas en otras, y están sometidas a una armonía preestablecida por Dios. Leibniz aceptó distintos niveles de conciencia, desde la percepción inconsciente hasta la percepción. La percepción se compone de pequeñas percepciones, siendo la "apercepción" la suma de esas pequeñas percepciones (Martorell y Prieto (s/a). EMPIRISMO El empirismo, doctrina filosófica desarrollada en los siglos XVII y XVIII contraponiéndose al racionalismo. ―Todo conocimiento proviene de los sentidos, por lo que no existen las ideas innatas. Los sentidos nos ofrecen sensaciones, y éstas se transforman en ideas gracias a los principios de la asociación: similitud, contigüidad y contraste‖ (Martorell y Prieto (s/a). Su fin es concretar el origen del conocimiento, realizando descripciones fenomenológicas del mismo, para encontrar los elementos que lo constituyen. Considera a la experiencia como única fuente válida del conocimiento en el contacto de los sentidos con las cosas. Estudia hechos y experiencias, la posibilidad de ideas espontáneas. Requiere de la observación (sentidos) para dar certeza de su conocimiento. Verifica, confirma o niega una hipótesis. Lo que determina si los conocimientos son válidos o no, está en la forma como los construyamos. Representantes: John Locke, Berkeley, David Hume. John Locke: Es considerado como el fundador de la teoría del conocimiento. Distingue dos fuentes posibles de las ideas; empleando el análisis introspectivo: la sensación (experiencia interna) y la reflexión (experiencia externa) (Velázquez, 2007). Para una mejor diferenciación, conozcamos los puntos de influencia del empirismo sobre lo que hoy es la psicología: Por ejemplo, el Principio o ley de la contigüidad: si varias sensaciones ocurren frecuentemente juntas, una sola puede producir el recuerdo de las restantes. El empirismo se opone al método deductivo propuesto por los racionalistas y a las tesis apriorísticas (innatistas) y defiende el fenomenismo: únicamente podemos conocer los fenómenos, pero no la realidad tal y como pueda ser en sí misma, la verdad objetiva. (Fenómeno: la realidad en tanto que se presenta a los sentidos.) Descartes defendió el mecanicismo y determinismo para explicar la res extensa (cuerpos), pero el mecanicismo se impuso gracias a los trabajos de Galileo (1564-1642) y Newton (1642-1727). Por lo que el mecanicismo sostiene que: La conducta del ser humano es un fenómeno natural más, por lo que puede ser explicada según las leyes naturales. Determinismo: no existe el libre albedrío, por lo que la conducta podrá predecirse por completo cuando se descubran las leyes de la conducta. Además, si la mente se puede explicar, entonces se someterá a leyes deterministas. Materialismo: toda la realidad es material, por lo que, de nuevo, la conducta humana es un fenómeno natural, y está determinado por las mismas fuerzas y leyes físicas que valen para el resto de la naturaleza. Representante más destacado del mecanicismo materialista: Hobbes (1588-1679, filósofo inglés). Para este autor, los contenidos de la mente se rigen por las mismas leyes físicas que los movimientos físicos. Locke (1632-1704, filósofo inglés), uno de los iniciadores del empirismo moderno, es el primero en poner en cuestión el concepto de sustancia (la supuesta realidad que subyace o en la que descansan los fenómenos). No la niega pero afirma que no tenemos una experiencia directa de ella, sino, en todo caso de sus actividades. Las sustancias se infieren, no se experimentan directamente. Otras tesis empiristas que influirán en la psicología: - Hedonismo psicológico: el hombre escoge las acciones que tengan consecuencias más placenteras o menos dolorosas (tesis que cabe relacionar con algunas ideas principales del conductismo, como la del refuerzo positivo de Skinner). - Asociacionismo: aunque el empirismo inglés, como Descartes, defiende el dualismo mente/cuerpo, a diferencia de aquél filósofo entiende los procesos mentales como meras consecuencias de la asociación de vivencias: las vivencias complejas se componen de vivencias simples, y entre ellas no hay más que diferencias cuantitativas. En el mundo de la mente encontramos fuerzas semejantes a las presentes en el mundo físico. Los empiristas trasladan el mecanicismo y determinismo que Descartes propone únicamente para el mundo físico al mundo de la mente. Las ideas asociacionistas se encontrarán después en varios modelos o movimientos psicológicos, como las primeras psicologías científicas (Wundt), o Pavlov (1849-1936, fisiólogo ruso), y principalmente en el conductismo. La cuestión fundamental en la polémica racionalismo/empirismo es: ¿cómo se origina el conocimiento? Racionalismo: gracias a las ideas innatas y a la intuición; lo importante es lo que la conciencia pone. Empirismo: todo el conocimiento proviene de los sentidos; lo importante es lo que la conciencia recibe. Hume (1711-1776, filósofo escocés): considera que todo lo que podemos conocer se limita a la aparición de fenómenos, o la sucesión de un fenómeno tras otro, pero nada más (nada más quiere decir aquí: nada que se refiera a la supuesta realidad que subyace en los fenómenos, nada que se refiera a supuestas realidades trascendentes como el alma o Dios, nada que nos induzca a creer en vínculos causales entre las cosas). Hume considera que la ciencia de la naturaleza humana es la ciencia más importante y debe desarrollarse antes que cualquier otra, pues en cierto sentido es la ciencia de las ciencias. Esta ciencia de la naturaleza humana no debe partir de principios a priori sino de la experiencia y la observación (Martorell y Prieto (s/a). LA POSICIÓN KANTIANA Kant (1724-1804, filósofo alemán) intentó superar el racionalismo y el empirismo. Tomó del empirismo la tesis de que el conocimiento tiene como límite la experiencia. Y del racionalismo la tesis de que no todos los principios que intervienen en el conocimiento se originan en la experiencia. Creyó que hay principios no empíricos de la mente. Al principio Kant fue racionalista y creyó que la ciencia podía avanzar deduciendo unos conocimientos a partir de otros en virtud de principios estrictamente racionales (lo que después llamó "sueño dogmático") pero la lectura de Hume le hizo despertar de ese sueño y creer que el uso de la razón tiene unos límites (la experiencia). Otras tesis: La ciencia más perfecta es la matemática pues sus proposiciones son no-empíricas, sintéticas (Kant llama analíticos a las proposiciones que no añaden información nueva pues el predicado nos dice algo que ya pensamos al pensar el sujeto: "los triángulos tienen tres lados", y sintéticas a las proposiciones que añaden información nueva pues lo que afirmamos en el predicado no se incluye en el sujeto: "los ángulos internos de todo triángulo suman 180"). Las ciencias empíricas únicamente puede conocer los fenómenos (lo que se ofrece a la percepción, realidad influida por las estructuras innatas de nuestra mente), pero nunca los noúmenos (la realidad independiente de nuestra mente). Creyó también que no era posible una ciencia empírica de la mente pues los fenómenos psicológicos no se podían cuantificar y experimentar. Rechazó el concepto de alma al considerar que quisieron demostrar su existencia cometieron errores lógicos en sus argumentaciones (paralogismos de la razón pura). Una conclusión general sobre la influencia de la filosofía en la psicología: el racionalismo, el empirismo y el apriorismo kantiano son los referentes filosóficos de los que se derivarán concepciones psicológicas tan relevantes como el mentalismo, el conductismo y el constructivismo, respectivamente. EL ESTRUCTURALISMO Edward Titchener (1867-1927), el discípulo más importante de Wundt, fue el creador del estructuralismo. Es un movimiento heterogéneo que inicialmente aparece como una metodología científica, convirtiéndose luego en una ideología filosófica que pretende elaborar teorías objetivas y verificables, a través del control científico a las ciencias del espíritu. En el estructuralismo el ser humano pasa de ser sujeto de la historia y de la cultura, a ser objeto que se conoce por la objetividad y la neutralidad científica. Quienes asumieron el estructuralismo "buscaron la permanencia y estabilidad de las estructuras que duran y derivan su significado solamente de sí mismas y de sus raíces en una naturaleza humana, en cuanto realidad plenamente determinada como los demás objetos del mundo". Los estructuralistas comenzaron por combinar el marxismo y el psicoanálisis, pero sobre todo es el positivismo quien más marca a esta corriente. El estructuralismo plantea la manera de comprender al ser humano para pasar a mirarlo como objeto de observación y análisis, como cualquier otro objeto de la ciencia, porque el inconsciente precede a lo consciente. Se opone al causalismo y al historicismo sobre todo en su visión del humano, que de sujeto pasa a ser objeto del conocimiento y eso implica que los hombres estén sometidos a las estructuras. El gran desarrollo de este movimiento se dio a partir de 1960 encontrando en Lévi Strauss su mayor exponente, hoy es criticado y acusado por su desprecio a la historia y por la devaluación de la autonomía individual. EL FUNCIONALISMO William James (1842-1910), precursor o primer gran funcionalista. El funcionalismo caracterizado por el utilitarismo otorgado a las acciones que deben sostener el orden establecido en las sociedades, es una corriente teórica surgida en Inglaterra en los años 1930 en las ciencias sociales, especialmente en sociología y también de antropología social. La teoría está asociada a Émile Durkheim y, más recientemente, a Talcott Parsons además de a otros autores como Herbert Spencer y Robert Merton. El funcionalismo se caracteriza por un enfoque empirista que preconiza las ventajas del trabajo de campo. En este sentido, los teóricos funcionalistas identifican en sus textos comunicación con comunicación de masas porque esa es la realidad de la sociedad moderna. Hasta el siglo XIX, la mayoría de las labores se realizaban en un gabinete, mediante relatos sesgados de viajeros. El funcionalismo abrió el camino de la antropología científica, desarrollándose luego con gran éxito en Estados Unidos. La corriente funcionalista es la escuela más extendida; se ha llegado a naturalizar y se estudia como el paradigma de las ciencias de la comunicación. Esta circunstancia se ha entendido como lógica porque es la perspectiva que mejor se identifica con la dinámica y los intereses del sistema audiovisual. La escuela propone una serie de teorías concretas con continuidad basadas en distintas disciplinas: la teoría hipodérmica, la teoría de los efectos limitados, la teoría matemática de la comunicación y otros enfoques más particulares. Son esquemas de acción cuyo objetivo es construir un proyecto integrador que aporte conocimientos sobre cómo funciona la comunicación social y cómo debe funcionar. Bajo esta mirada, las instituciones sociales serían medios colectivamente desarrollados para la satisfacción de las necesidades biológicas y culturales; los define, por lo tanto, por el cumplimiento de una función social, y no —como se hacía generalmente— por las circunstancias históricas de su desarrollo. Enfatiza, por lo tanto, las medidas que las instituciones toman para alcanzar los fines socialmente valorados. En la escuela funcionalista americana, basada sobre todo en la obra de Talcott Parsons, se pone un énfasis particular en el mantenimiento de la estabilidad social. En el contexto estadounidense ayuda pensar que EE.UU. es una nación que todavía está construyéndose a partir de inmigrantes de distintas procedencias (melting pot) y que, por tanto, era necesario la integración política. Objeto de la psicológica para el funcionalismo: estudio de los propósitos y función de los procesos mentales. Es un enfoque de psicología con extraordinario éxito en la psicología americana. EL PRECURSOR: WILLIAM JAMES Influencias sobre el funcionalismo: la obra de Darwin, con su idea de la adaptación de los organismo al ambiente; comienzo del estudio de los fenómenos psicológicos en el marco neurofisiológico. Obra principal: Principios de Psicología. Su definición de la psicología: ciencia de la vida mental, de sus fenómenos y sus condiciones. Fenómenos mentales: sensaciones, deseos, cogniciones...Condiciones: procesos corporales y sociales que influyen en la vida mental. Crítica al enfoque estructuralista: la búsqueda de las sensaciones o contenidos mentales simples es un error pues la conciencia es siempre una multiplicidad, una corriente o flujo de contenidos. Método de la psicología: es necesario múltiples niveles de análisis y una metodología flexible, por lo que nos sirven tanto la introspección, como el método experimental, como el método de inferir actividades mentales en animales, locos y salvajes (el método comparativo). Un ejemplo de una teoría con éxito: su teoría de la emoción: la experiencia emocional depende de la percepción de cambios corporales, los cuales son consecuencias de reflejos del sistema nervioso (nos sentimos tristes porque lloramos y tenemos miedo porque temblamos), es también del danés Carl Lange. Hace depender la experiencia emocional de la percepción de cambios fisiológicos: Teoría de James-Lange. Aunque James matizó más tarde: acepta la influencia de la valoración de la situación como releva nte, junto a la percepción de los cambios corporales, para la respuesta emocional. El desarrollo del funcionalismo Objeto de la psicología según Harvey Carr, uno de los principales psicólogos de esta corriente: estudio de las actividades mentales relativas a la adquisición, almacenamiento, organización y valoración de las experiencias y su utilización posterior en la guía del comportamiento. Elementos esenciales de la definición: comportamiento guiado hacia un fin, y el componente adaptativo del mismo. Algunos funcionalistas: Hall, Cattell, y los miembros de la Universidad de Chicago: Dewey, Angell y Carr. Algunas características y logros: - Importancia de las posibilidades adaptativas de los procesos psicológicos. - Atención a las diferencias individuales. - Importancia de las aplicaciones de la psicología. - Aceptación de diferentes métodos. Consecuencia muy importante para el desarrollo de la psicología: dado que el aprendizaje es uno de los mecanismos psicológicos más importantes de cara a la adaptación, el objeto principal de la investigación funcionalista será el aprendizaje (como lo era la sensación para los estructuralistas). Muchos de los principios funcionalistas fueron aceptados por el conductismo. FILÓSOFOS QUE APORTARON A LA PSICOLOGÍA En: http://www.psicoactiva.com/historia/histo1.htm Visitado en agosto de 2011 Si deseamos estudiar la conducta del hombre, es de vital importancia que primero analicemos sus orígenes, su historia y tracemos una línea del tiempo que nos llevará por distintas épocas; desde que se dio la transformación de mono a humano, el mismo ha tratado de dar explicación a su comportamiento, así como la historia del hombre comenzó en la era primitiva, la historia de la psicología tienen una misma procedencia ya que su objeto de estudio es el ser humano. Antes de comenzar con este ensayo; hay otro punto importantísimo del que debemos estar conscientes, las épocas en las que se desarrolla cada etapa de la historia influyen en gran medida a los pensadores que se gestaron en ese Inter de tiempo, ya que el ambiente en que se desenvolvieron freno o alentó sus aportaciones, es por esto que aparte de analizar las ideas de filósofos también se dará una visión general de cada periodo esto a través de la descripción de la política, religión, cultura, economía y forma de pensar de las personas en estas fases de tiempo. La palabra psicología viene del griego psique que significa alma y logos estudio; por lo tanto es la ciencia que estudia la mente y la conducta. No es casualidad que el origen de la palabra psicología sea griego, esto se debe a que los primeros filósofos, que fueron los pioneros en el estudio de esta disciplina, fueron de ascendencia griega, es por esto que durante mucho tiempo y en los principios la psicología estuvo íntimamente ligada con la filosofía, tuvieron que pasar muchos años para que esta fuera capaz de lograr la emancipación de la filosofía. Los iniciadores que se preguntaron por qué el hombre actúa como actúa; fueron Sócrates, Platón y Aristóteles. Después del esplendor de los griegos pasamos por una etapa de transición, el periodo helénico romano en el que se dio origen a la iglesia cristiana, que tomaría el poder en la siguiente etapa; que fue la edad media que también se le llamó oscurantismo puesto que hubo un retroceso y estancamiento en el desarrollo del pensamiento; pero a pesar de esto e incluso en este momento de la historia, se hicieron contribuciones; a través de San Agustín y Santo Tomas. Siempre después de una obscuridad viene la luz y fue así que llego la etapa del Renacimiento en la que se retomaron ideas de los clásicos griegos, a de más de agregar sus propias aportaciones René Descartes, Baruch Spinoza y Wilhem Von Leibniz contribuyeron a la psicología por medio de sus razonamientos; debido a esto la corriente filosófica a la que representan se le denomino racionalismo. La razón, no es la única fuente de conocimiento, el hombre también aprende mediante la experiencia, esta forma de pensar es característica de los empiristas de la época Barroca y sus principales exponentes fueron Thomas Hobbes, John Locke, George Berkeley, David Hume y Emmanuel Kant. En la época de la Ilustración surgió un personaje que logro hacer que las corrientes racionalistas y empiristas se integraran ya que el conocimiento del hombre se nutre tanto de la razón, como de la experiencia fue Wilhem Wundt, que además estableció a la psicología como ciencia separándola definitivamente de la filosofía. En este ensayo nos ocuparemos de analizar el desarrollo de la historia de la psicología, esto a través de la investigación de diferentes épocas, contextos y principales personajes que destacaron en la gestación y crecimiento de dicha ciencia. Para comenzar tenemos que remontarnos a los orígenes mismos del hombre es por eso que daremos un vistazo general del ser humano y su comportamiento. Citando a Federico Engels ―El trabajo, no es solo fuente de enriquecimiento, ha tomado un papel fundamental en la evolución del hombre‖. Esta cualidad de trabajar, hace que nos diferenciemos de los otros animales. Conforme las necesidades del hombre fueron creciendo, él también se evoluciono; un ejemplo de esto es la utilización del fuego ya que gracias a ello, el hombre primitivo pudo cocinar sus alimentos e incluir en su dieta diferentes tipos de comida, que hizo que su cerebro evolucionara y se convirtiera en lo que hoy es. Fue entonces que se empezó a preguntar acerca de las fenómenos que no podía entender, tuvo la noción de que había algo dentro de su ser que lo hacía que se moviera y tuviera vida (una chispa o espíritu) cuando esta chispa lo abandonaba se generaba la muerte; estos fueron los primeros antecedentes del alma. También tenía la necesidad de dar explicación a los fenómenos de la naturaleza de los cuales dependía. Por lo cual relacionaba la idea de que los seres espirituales estaban dentro de algo o de alguien y le daban vida, se creía que seres sobrenaturales o espíritus habitaban objetos que no tenían vida, todo lo que se movía tenia vida propia por ejemplo el sol y la luna a estas ideas se le conoce como Animismo. Otra de las creencias de este tiempo es el Animatismo que consistía en dar vida y poder a seres inertes y pensaba que estos eran capaces de acciones y movimientos sensibles, creían en el poder sobre natural por ejemplo creer que un tótem tenia vida propia y poderes. Una vez que ya revisamos el origen del hombre, el siguiente paso primordial es examinar las bases fundamentales de la psicología. Como lo expuso Henryk Misiak si nos remontamos hacia el origen y desarrollo de las ciencias encontraremos que cada una de ellas estuvo precedida por una serie de sucesos. Lo primordial para la psicología fue saber todo con respecto al hombre y el mundo al igual que la filosofía pero cada una de ellas desde un ángulo y métodos diferentes, la psicología estudia por medio del método científico el comportamiento del hombre entendiendo en un sentido amplio su forma de ser; debido a esto en un principio estas dos disciplinas estaban ligadas íntimamente, porque la psicología era considerada parte de la filosofía, muchos y variados factores intervinieron en la emancipación de la psicología; en el siglo XIX se confundían los trastornos mentales y se les daba un tratamiento solo filosófico y no psicológico o médico. Durante muchos años, numerosos psicólogos usaron doctrinas filosóficas como bases de referencia para sus tratamientos. La fisiología del siglo XIX fue el factor más importante en la independencia de la psicología y muy pronto se reconoció a los pioneros de la psicología muchos de los cuales fueron en inicio fisiólogos, los dos primeros y más importantes Wilhem Wordt en Alemania y William James en América ambos fueron médicos y los dos enseñaron fisiología antes de involucrarse de lleno a la Psicobiología. Queda claro que la psicología estaba profundamente vinculada con la filosofía siendo los filósofos griegos los pioneros en el estudio de la conducta humana por tanto es necesario instruirnos sobre ellos. También es conveniente examinar el ambiente en el que se encontraban situados estos personajes, así es que damos un panorama al contexto que los rodeaba. Nos enfocaremos más en el estudio de algunos de sus principales pensadores como lo fue Sócrates fue el primer filósofo moral que vio la luz por primera vez en Atenas en el año de 470 d.c. La filosofía de Sócrates proponía que el conocimiento se encontraba dentro de uno mismo y no provenía del exterior, fue por eso que se le enjuicio poniendo como pretexto el que no reconocía a los dioses y fue condenado a tomar cicuta una especie de veneno, murió a los 70 años en el año de 399 AC uno de sus legados fue la mayéutica método inductivo que se basaba en el dialogo, este método nos dice que la idea de la verdad esta oculta en la mente de cada ser humano, la técnica consistía en preguntarle al discípulo o interlocutor (dialogo) acerca de algo y luego se procedía a rebatir las respuestas, haciéndole ver lo errado de sus ideas, después lo guiaba (inductivo) hacia un nuevo pensamiento, distinto al primero. El Maestro no impartía la sabiduría al discípulo, pensaba que este no era una caja en la que se puede incrustar el saber o las diferentes verdades, para Sócrates es el alumno el que saca de sí mismo el conocimiento. Su filosofía moral consistía en comprender el significado de la naturaleza y las virtudes como la belleza, también postulaba que el alma la formaba las instituciones según lo que ellas te enseñaran y dictaban moralmente que erabueno y que malo, si un hombre quiere ser feliz debe actuar bien, el hombre es malo solo por la ignorancia. La influencia de Sócrates en la psicología llega hasta nuestros días ya que sus ideas que proponen que aprendemos falsas creencias pero que poseemos la verdad liberadora en nosotros mismos y podemos descubrirla por medio del dialogo; son ideas que influenciaron a San Agustín y a Sigmund Freud y el psicoanálisis. El siguiente filósofo que tubo relevancia es Platón Realmente se llamaba Aristocles, Podros Platón significa el de hombros anchos, fue alumno de Sócrates y perfeccione sus ideas, además fue maestro de Aristóteles y también estudio geometría con los pitagóricos, Fue el primero en pensar el cómo era posible el conocimiento; entre sus obras más importantes están la República y los diálogos de Platón. La teoría dualista de las ideas fue el punto central de la filosofía Platónica, consideraba dos tipos de realidad: El mundo de las ideas que es inmaterial - eterno, es un mundo sensible en el que se genera el pensamiento y los estados de la mente como la inteligencia, el conocimiento. Y el mundo material: que se refiere a las cosas materiales - corruptible sometida al cambio (generar y destruir) es el mundo que conocemos en donde se encuentran los objetos que conocemos a través de los sentidos, y el estado de la mente produce creencias e imaginación. Consideraba que el alma vive feliz en el mundo de las ideas, se refería a ella como ―principio vital‖, inmortal, viaja de un cuerpo a otro y la consideraba como un principio de conocimiento, proponía que el alma se encontraba atrapada en el cuerpo, que era como una cárcel y que solo la sabiduría que se encuentra en nosotros mismos la libera. El alma ya había experimentado y aprendido en el mundo de las ideas, el cuerpo solo tenía que recordar lo que el alma ya había aprendido. El alma estaba formad por tres partes Moral, inteligencia y razón (es el camino hacia la realidad). Creía que el bien debe ser por el bien mismo no con el afán de conseguir fama o gloria. También creo la epistemología que es el estudio del conocimiento (por su interés como se forman las ideas, y el pensamiento), evolucione hasta dar origen a la psicología cognitiva. Su postura era el del realismo metafísico las ideas existen como objetos no físicos y son más reales que las propias copias físicas los objetos. Otro de los filósofos griegos que aportó a la psicología fue Aristóteles la vida lo recibió en el año 384 a. c. en una localidad de macedonia miembro de una familia acomodada, su influencia toco a los pensadores de la edad media, el renacimiento y los modernos psicólogos cognitivos, fue alumno de Platón, aunque no estaba de acuerdo sus reflexiones ya que este manejaba la idea de dos mundos. Aristóteles fue el primer filósofo sistemático; creía que solo existía un solo mundo y una sola realidad y que el cuerpo tenía dos aspectos el fisiológico y el mental, sus obras abarcan casi todo el saber de su época, desde la biología, política, psicología (de Anima), lógica, gramática, metafísica etc. Aristóteles Consideraba a la psicología como el estudio del alma; y también una rama de la biología, consideraba que la conducta tiene bases biológicas; su filosofía es de índole realista natural individual, él creía que el hombre se componía de materia o cuerpo (existencia física de lo que estamos hechos) y forma o alma (lo que hace que algo sea lo que es, lo que lo define y lo hace comprensible para nosotros); la mente en la percepción recibe la forma de un objeto no su materia. Propone que todos los seres vivos tiene alma y es lo que define en la naturaleza, provoca el crecimiento, el movimiento y los procesos vitales en general; pero también expone que el cuerpo y alma son una unidad que no pueden vivir separados. juicio como conclusión. La siguiente época en la que se sitúan los filósofos San Agustín y Santo Tomas que influenciaron la psicología es la edad Media, también es conocida como edad Oscura. Se caracteriza por la expansión y poder de la iglesia cristiana en Europa, la exageración en las supersticiones y la ignorancia, la mayor parte de las personas eran analfabetas y la poca educación estaba controlada por la iglesia, hubo mucho desarrollo en el arte religioso, pero en las ciencias fue muy poco o no se daba a conocer estaban controlados por la iglesia, el sistema económico estaba basado en sistema feudal consistía en una jerarquía de señores y vasallos, él se ofrecía a un señor, entablando un contrato en donde el vasallo debía obediencia y lealtad, y el señor debía protección. La sociedad estaba organizada de la siguiente manera: nobleza feudal, la alta nobleza (marqueses, condes y duques) poseía grandes feudos; y la baja nobleza o caballeros. Clero feudal, alto clero (abades, obispos), y otros más humildes (curas de pueblo o monjes) estaban subordinados a su autoridad. Pueblo llano. Los laboratores o trabajadores, por tanto, los más numerosos, estaban compuestos por campesinos, siervos de los señores feudales y artesanos, que eran los más numerosos. Otra característica distintiva de la edad media son Las cruzadas fueron campañas militares fueron hechas en XI y XIII, contra los musulmanes para la recuperación de Tierra Santa y el Santo Sepulcro, fueron motivadas por los intereses de expansión de la nobleza feudal, el control del comercio con Asia y el deseo de control del papado sobre las monarquías. El final de la Edad Media llega con el término del sistema feudal. Los caballeros feudales empezaron a ser técnicamente superados por el desarrollo de técnicas militares, esto llevo al decaimiento de la era medieval. La Iglesia Católica, disminuye su poder debido a la Reforma Protestante, además de las nuevas ideas religiosas que trajo la burguesía. Una de las corrientes filosóficas del renacimiento fue El racionalismo es una corriente filosófica que surgió en Francia en el siglo XVII, creada por René Descartes, que se opone al empirismo (que más adelante estudiaremos), el racionalismo se caracterizó por: la confianza en el poder de la razón, la postulación de las ideas innatas, por la utilización del método lógico-matemático para explicar los razonamientos y del empírico para confirmarlos cuando es posible, también se caracterizó por la recuperación de doctrinas clásicas, el fatalismo (Spinoza) o el platonismo gnoseológico (Leibniz); así mismo declara el Mecanicismo del universo; el racionalismo y empirismo constituyeron la base filosófica de la Ilustración. Ya que tenemos un panorama y la época en donde se gestaron las contribuciones a la psicología, examinaremos sus principales filósofos, René Descartes, Baruch Spinoza y Gottfried Wilhelm Leibniz, ellos son los más importantes intelectuales de la corriente conocida como el racionalismo la cual fue creada por René Descartes que nació en Francia, 1596, filósofo y matemático francés, estudio derecho en la facultad de Poitiers. El 10 de noviembre, en el curso de tres sueños sucesivos, experimentó la famosa «revelación» que lo condujo a la elaboración de su método, renunció a la vida militar, y viajó por el mundo hasta regresar a Francia en 1622, para vender sus posesiones y asegurarse así una vida independiente los primeros cinco años los dedico a elaborar su propio sistema del mundo y su concepción del hombre y del cuerpo humano, que estaba a punto de completar en 1633 en 1637 apareció su famoso Discurso del método, presentado como prólogo a tres ensayos científicos, proponiendo una duda metódica, que sometiese a juicio todos los conocimientos de la época, a diferencia de los escépticos, la suya era una duda orientada a la búsqueda de principios últimos donde sometiera el saber. Este principio lo halló en la existencia de la propia conciencia que duda, en su famosa frase ―De lo único que no puedo dudar, es que dudo y si dudo pienso, y si pienso existo‖. Su método de la duda cartesiana, consiste en descomponer los problemas complejos en partes progresivamente más sencillas hasta hallar sus elementos básicos, que se presentan a la razón de un modo evidente, y proceder a partir de ellas, a reconstruir todo el complejo, exigiendo a cada nueva relación establecida entre ideas simples la misma evidencia deéstas. Sus ensayos científicos destacaban su formulación de la ley de inercia y una especificación de su método para las matemáticas. Sus fundamentos de su física mecanicista, la principal propiedad de los cuerpos materiales, los situó en la metafísica que expuso en 1641, donde enunció así mismo su demostración de la existencia y la perfección de Dios y de la inmortalidad del alma. Situó el alma en el cerebro en la glándula pineal, desarrollo su método de introspección en el que se valida el contenido de la mente, descubre la conciencia y hace referencia a la información sensorial y a las ideas innatas. Para terminar con el contexto barroco hablaremos de Immanuel Kant, filósofo alemán nacido el 22 de abril de 1724. Murió en 1804. En 1740 entro a la universidad a estudiar teología El pensamiento de Kant denominado pre crítico se apega a la metafísica, se interesó en la filosofía de newton. Una de las aportaciones más importantes de Kant que fue el único que logro unir a los empiristas con los racionalistas. El principio psicológico que utilizo Kant es el de a priori y a posteriori. Con Kant terminamos el contexto barroco y damos pie a la ilustración, que es el último contexto del que se hablara en este ensayo es la ilustración. Se dice que la misión de dicha era, es aplicar la razón y el conocimiento científico a la vida humana, y sustituir la visión de la sociedad. El objetivo era sustituir la religión y la tradición por el estudio de la naturaleza. La ilustración se ubicó principalmente en Francia pero también en varios países solo que de una forma diferente, aunque comenzó en Inglaterra. Políticamente podemos decir que el reino de absolutismo medieval fue sustituido por una monarquía constitucional y una democracia. La iglesia católica era la iglesia oficial y los philosophes franceses desarrollaron un gran odio hacia la religión como una institución que trataba de tener a los fieles en estado de ignorancia. La economía no era buena pues en estos tiempos Francia estaba en revolución. El arte pasó a segundo término pues lo más importante era la naturaleza y sus leyes. Este fue el último contexto que nos compete desarrollar y continuamos con los filósofos. Y uno de los mayores representantes de la ilustración fue Wilhem Wundt que fue el fundador de la psicología como una institución nació en 1832 en una elite intelectual de los mandarines y murió en 1920. Su aportación más importante fue crear el primer laboratorio de psicología llamado ―la cuna de la psicología‖. Los seres humanos una forma de vida realmente impresionante, capaz de analizarse a si mismos y así poder entender su entorno y lo que los rodea, pero para ello necesita el entendimiento y comprensión de su pasado, de lo que el mismo ha sufrido, para convertirse en lo que es actualmente, y aunque las nuevas tecnologías o teorías surjan, en nuestro tiempo, nunca debemos olvidar las raíces que nos forjaron y sobretodo que nada sustituirá el que nosotros mismos busquemos la respuesta en cada uno. Para concluir diremos, que este mundo está lleno de personas diferentes, con diferentes ideas que hay que respetar, y que la historia es parte esencial de nuestra formación y aún más en la psicología y que debemos entender que como aquellos filósofos pensaban de distinta manera, así es nuestra vida actual pero creemos que el objetivo de la vida es aprovechar al máximo cada opinión y así entre todos llegar a la verdad. Como pensaba Sócrates ―el conocimiento está dentro de nosotros mismos‖ así que aprovechemos ese maravilloso elemento que en nuestra mente y junto con ella les invito a descubrir quiénes somos en realidad, recuerden la respuesta está en nosotros. René Descartes Resumen: Filósofo francés que comenzó la filosofía moderna: “Pienso luego existo”. Descartes reflexionó sobre un sistema universal mecanicista cerrado, desarrolló la geometría analítica, explicó la refracción de la luz e investigó el magnetismo. Se recuerda sobre todo a este francés extraordinario por su invención de la Geometría Analítica. Pero su logro más notable fue la reducción de la Naturaleza a leyes matemáticas. "Consideraría que no sé nada de Física si tan sólo fuese capaz de expresar cómo deben ser las cosas, pero fuese incapaz de demostrar que no pueden ser de otra manera. No obstante, habiendo logrado reducir la Física a las Matemáticas, la demostración es entonces posible, y pienso que puedo realizarla con el reducido alcance de mi conocimiento." Con estas palabras, René Descartes expresa el pensamiento que lo situaría entre los principales artífices de la revolución científica del siglo XVII. A las "formas" y las "cualidades" de la Física Aristotélica, que habían resultado ser un callejón sin salida, contraponía la "idea clara y fundamental" de que el mundo físico no es más que un puro mecanismo. En Geometría Analítica, Descartes creó una técnica que le permitía expresar las leyes de la Mecánica, que constituían las leyes últimas de la Naturaleza, mediante ecuaciones algebraicas. Y entonces propuso el programa ideal de toda ciencia teórica: construir, con un mínimo número de principios, un sistema que diese razón de todos los hechos conocidos y que permitiese descubrir hechos nuevos. Toda la Física Teórica subsiguiente se ha planteado como objetivo la consecución de este ideal. Podemos afirmar que, en el siglo XVII, Blaise Pascal e Isaac Newton lograron llevar a cabo el programa cartesiano, que consiste en ofrecer la explicación del mundo físico en función de su mecanismo. No podemos dudar del carácter revolucionario ni de la influencia de las ideas teóricas y del programa de Descartes. La paradoja es que ésta haya sido tan profunda en personas que consideraban su enfoque esencialmente inaceptable y que rechazaban algunos de sus presupuestos fundamentales y de sus conclusiones específicas. Christian Huygens, el gran matemático y astrónomo holandés, cuyo padre había sido amigo íntimo de Descartes, afirmó a finales de su vida que sólo podía aceptar una pequeña parte de la Física Cartesiana; pero, al mismo tiempo, reconocía que había sido la obra Los principios de Filosofía de Descartes, lo que inicialmente había abierto sus ojos a la ciencia. Él mismo dijo que Descartes no sólo ponía de manifiesto las limitaciones de la Filosofía de los antiguos, sino que, "en su lugar, ofrece causas comprensibles de todo lo que existe en la Naturaleza". Como suele ocurrir con frecuencia con las teorías revolucionarias, el legado de Descartes no fue sólo un logro, sino también una profecía y una visión. El propio Descartes se vio obligado a reconocer que su ideal matemático de la ciencia, puramente deductivo, había fracasado ante las complejidades de la Naturaleza y los enigmas de la materia. Este fracaso era especialmente evidente en Fisiología, el campo en el que se había aventurado con mayor osadía. No obstante, de su fracaso y compromiso Descartes extrajo otra contribución para el pensamiento científico, en muchos aspectos tanto o más importante que el propio programa teórico. Forzado a recurrir a la experiencia y a las hipótesis, demostró ser el primer gran maestro del modelo hipotético. Éste se ha convertido en una herramienta esencial en cualquier investigación científica. En sus modelos teóricos de los procesos fisiológicos, Descartes desplegó los más ingeniosos ejercicios de su ingenio imaginativo y experimental. Vida y obra. Su filosofía modeló el pensamiento europeo. Nació el 31 de marzo de 1596 en La Haye, Turena (Francia). Con ocho años entró en la escuela jesuita de La Flèche en Anjou, donde permaneció hasta los dieciséis. Descartes estudió matemáticas y escolasticismo, con el propósito de orientar la razón humana para comprender la doctrina cristiana. Estuvo muy influido por el Catolicismo. Comenzó a estudiar Derecho en la Universidad de Poitiers, obteniendo la licenciatura en 1616. A pesar de eso, nunca ejerció la profesión jurídica. En 1618, con la intención de seguir la carrera militar, entró al servicio del príncipe Mauricio I de Nassau-Orange. Descartes sirvió en otros ejércitos, pero su interés se centraba siempre en los problemas de las matemáticas y la filosofía. Se trasladó a Italia, donde permaneció de 1623 a 1624. Luego se dirigió a Francia, donde residiría entre 1624 y 1628. Durante esta etapa de su vida, se dedicó plenamente a la filosofía y a realizar experimentos de óptica. En 1628, vendió sus propiedades en Francia y partió a Holanda, donde vivió en diferentes ciudades (Amsterdam, Deventer, Utrecht y Leiden). Fue en ese período cuando escribió su obra "Ensayos filosóficos", que fue publicada en 1637. Ésta está compuesta de cuatro partes: un ensayo sobre geometría, otro sobre óptica, un tercero sobre meteoros y el último, "el Discurso del método", que describía sus especulaciones filosóficas. A éste le siguieron, entre otros ensayos, "Meditaciones metafísicas" (1641; revisado 1642) y "Los principios de la filosofía" (1644). En 1649 Descartes fue invitado a darle clases de filosofía a la reina Cristina de Suecia. Un año después, los rigores del invierno del norte le provocaron una neumonía, que en poco tiempo le causó la muerte. Descartes trató de aplicar a la filosofía los procedimientos racionales inductivos de la ciencia, y en concreto de las matemáticas. Partió del principio "Pienso, luego existo", el cual probaba su propia existencia y la de Dios. Su filosofía, también llamada cartesianismo, le llevó a elaborar explicaciones complejas y erróneas de diversos fenómenos físicos. Estas explicaciones, sin embargo, cobraron valor al sustituir los vagos conceptos espirituales de la mayoría de los autores clásicos por un sistema de interpretaciones mecánicas de los fenómenos físicos. Aunque al principio estuvo próximo a la teoría de Copérnico sobre el Universo, con su idea de un sistema de planetas giratorios moviéndose alrededor del Sol, renunció a esta teoría cuando fue considerada herética por la Iglesia católica. En su lugar ideó una doctrina de los vórtices o torbellinos de materia etérea, en la que el espacio estaba pleno de materia, en diversos estados, girando sobre el Sol. La contribución más notable que hizo Descartes a las matemáticas fue la sistematización de la geometría analítica. Fue el primer matemático que intentó clasificar las curvas conforme al tipo de ecuaciones que las producen, y contribuyó también a la elaboración de la teoría de las ecuaciones. Descartes fue el responsable de la utilización de las últimas letras del alfabeto para designar las cantidades desconocidas y las primeras letras para las conocidas. También inventó el método de los exponentes (como en x2) para indicar las potencias de los números. Además, formuló la regla, conocida como la ley cartesiana de los signos, para descifrar el número de raíces negativas y positivas de cualquier ecuación algebraica. Biografía de René Descartes (2011). En: http://www.alipso.com/monografias/2448_descartes/ Visitada en septiembre de 2011. Frases célebres del René Descartes: - Es prudente no fiarse por entero de quienes nos han engañado una vez. - Daría todo lo que sé, por la mitad de lo que ignoro. - Dos cosas contribuyen a avanzar: ir más deprisa que los otros o ir por el buen camino. - Vivir sin filosofar es, propiamente, tener los ojos cerrados, sin tratar de abrirlos jamás. - La matemática es la ciencia del orden y la medida, de bellas cadenas de razonamientos, todos sencillos y fáciles. - El bien que hemos hecho nos da una satisfacción interior, que es la más dulce de todas las pasiones. - La filosofía es la que nos distingue de los salvajes y bárbaros; las naciones son tanto más civilizadas y cultas cuanto mejor filosofan sus hombres. - Para investigar la verdad es preciso dudar, en cuanto sea posible, de todas las cosas. - Lo poco que he aprendido carece de valor, comparado con lo que ignoro y no desespero en aprender. - No hay nada repartido de modo más equitativo que la razón: todo el mundo está convencido de tener suficiente. 1. 2. 3. Pasos para realizar el trabajo Ahora bien una vez reanudada las actividades por plataforma nos enfocaremos a poder seguir con el avance de los contenidos que nos toca realizar, recordando el contenido de crecimiento y desarrollo y observar el video de EL HOMBRE QUE CONOCÍA EL INFINITO .pasaremos a desarrollar. Esta Unidad Temática desarrollaremos en sesiones, donde realizaremos en la primera parte las principales corrientes psicológicas.(dar lectura al contenido) Posteriormente responderemos a las siguientes preguntas problemáticas donde debes dar tu opinión en cada una de ellas. ¿Cuáles crees que son las bases filosóficas de la psicología? Para el Empirismo el conocimiento es: “Todo conocimiento proviene de los sentidos, por lo que no existen las ideas innatas. Los sentidos nos ofrecen sensaciones, y éstas se transforman en ideas gracias a los principios de la asociación: similitud, contigüidad y contraste” (Martorell y Prieto (s/a). Para el Empirismo el conocimiento es: El empirismo se opone al método deductivo propuesto por los racionalistas y a las tesis apriorísticas (innatistas) y defiende el fenomenismo: únicamente podemos conocer los fenómenos, pero no la realidad tal y como pueda ser en sí misma, la verdad objetiva”. Registra tu opinión acerca del siguiente párrafo: La cuestión fundamental en la polémica racionalismo/empirismo es: ¿cómo se origina el conocimiento? Racionalismo: gracias a las ideas innatas y a la intuición; lo importante es lo que la conciencia pone. Empirismo: todo el conocimiento proviene de los sentidos; lo importante es lo que la conciencia recibe. Las diferencias entre el Empirismo/ Racionalismo y define sus aportes al desarrollo del conocimiento. (CADA UNA EN SU AUGE) 4. 5. 6. Todo esto deben de realizar a mano en hoja tamaño carta, y mandar a plataforma en formato pdf. Les mandare un texto de apoyo para que puedan apoyarse, donde nos servirá durante la Unidad Temática. Cualquier consulta sobre el trabajo comunicarse por vía Whatsap. REALIDAD NACIONAL PROCESO DE LA FUNDACIÓN DE LA REPÚBLICA 1. Introducción Nuestro país ha tenido características muy especiales y particulares al momento de nacer, es decir, el parto fue muy difícil y costoso como consecuencia de sus peculiaridades, tal vez es por eso nos cuesta mucho solucionar los problemas internos, pues porque nacimos con problemas muy serios. Diversos intereses internos y externos han influido en las acciones y decisiones. A diferencia de nuestros vecinos, en Bolivia es difícil ponerse de acuerdo para encaminar acciones como país, pareciera que no hay el factor suficiente de unidad y cohesión interna como para que este país sea viable. La historia manifiesta que el parto duró 16 años (1809 – 1825), y en ese tiempo muchas cosas cambiaron, pues los ideólogos de la independencia en su mayoría habían muerto, y fueron hombres formados en el régimen colonialistas los que diseñaron la nueva República. Es por eso que hemos heredado una serie de contradicciones internas que en 180 años de vida como República no pudimos superar 2. Antecedentes Históricos Es cierto que Bolivia (Charcas), fue la primera en expresar el grito libertario del colonialismo (1809), pero también es cierto que ha sido la que ha tardado más en definir su situación porque sus características culturales, políticos, sociales y economías eran muy diversas, con la diferencia de sus vecinos que en poco tiempo se declararon libres como estado y Republica. Los difíciles años que llevaron a la Audiencia de Charcas a su independencia con respecto a España, y a su autonomía con relación a los dos Virreinatos de los cuales dependió alternativamente, el del Perú y el del Río de la Palta, dejaron a la nueva Republica de Bolivia en una situación política inestable y con una economía desastrosa. Debemos decir que en el proceso de independencia de la Patria, como en la de toda América, actuaron factores externos que determinaron la historia, tales como las ideas provenientes del iluminismo y del racionalismo filosófico, ideas emanadas de la revolución francesa (1789) y de la emancipación de los Estados Unidos (1776): Inglaterra, por su parte no perdía la mira sobre un continente que siempre había ambicionado como potencial mercado comercial. España, en las postrimerías del siglo XVIII, bajo el reinado de Carlos III, había implantado un nuevo sistema administrativo, sustituyendo los Corregimientos por las Intendencias (1782) y sacando los territorios de la Audiencia de Charcas de la jurisdicción de Lima para que pasen a formar parte del Virreinato de la Plata cuya cabeza era la ciudad de Buenos Aires. Estos factores muestran hasta qué punto Bolivia estuvo comprometida tanto con la ideología del momento como con los intereses políticos de buena parte de América del Sur. Era tal la situación de inestabilidad política cuando Napoleón Bonaparte invade España (1808) lo que, repercutiendo en toda América desencadenó el proceso libertario en todas las colonias. La lucha se inició con las rebeliones de 1809, luego de las cuales llegaron a Charcas ejércitos provenientes tanto de la Argentina y Perú como de la Gran Colombia para controlar los aprestos de insurrección. Al analizar la antigua situación por la que atravesaba Charcas en las postrimerías del siglo XVIII y comienzos del XIX, se debe destacar varios hechos ocurridos en el transcurso de los 16 años de guerra interna (1809 – 1825) los que fueron definiendo el destino de la Audiencia. En primer lugar, tenemos los levantamientos de Chuquisaca y La Paz (1809) y la independencia de las Provincias del Río de la Plata con su consolidación mediante el Congreso de Tucumán (1810), lo que determinó el envío de ejércitos auxiliares argentinos para independizar el alto Perú, nombre con el que a fines del siglo XVIII se conocía a la Audiencia de Charcas, la que desde 1776 formaba parte del Virreinato de Buenos Aires. Las misiones argentinas fracasaron y dejaron una huella de amargura y descontento, sin embargo, muchos rebeldes mantuvieron hasta el fin sus relaciones con la junta de Buenos Aires. En este proceso libertario se debe resaltar la acción interna que se lleva a cabo desde Cochabamba, así como la activa participación indígena que tuvo mucho que ver en el proceso. Los indios estaban divididos, pues mientras una buena parte luchaba con los patriotas, otra luchaba dentro de las fuerzas realistas, en tanto que un tercer grupo conservaba un carácter autonomista y reivindicatorio que intentó la reconstitución del incario. En el periodo que de 1811 a 1821 nacen y se consolidan las guerrillas formando "republiquetas", las que mantienen el espíritu libertario de un territorio controlado por los realistas, ideologías ésta última con la que muchos ciudadanos simpatizaban. Las guerrillas, según algunos autores, con su entusiasmo libertario, su falta de medios y sus deficiencias administrativas, fueron el modelo de la futura República de Bolivia. Durante los 16 años de lucha los diferentes grupos guerrilleros fueron cayendo llegando a la independencia tan sólo la Republiqueta de Ayopaya. Pese a los repetidos brotes de independencia el territorio de Charcas estuvo controlado hasta el año 1821, al menos esporádicamente, por las fuerzas realistas y los ciudadanos simpatizantes con ese orden de cosas. A partir de esa fecha, se m ovilizan los Ejércitos de San Martín y Bolívar, que deseaban llegar a Lima para consolidar la independencia de esta parte de América, dejando de lado a Charcas, sujetándola directamente al destino del Perú. José de San Martín después del fracaso de los Ejércitos Auxiliares, decide cruzar la cordillera para llegar a Chile, y desde allí, alcanzar Lima por mar; Bolívar luego de la Batalla de Pichincha (Ecuador), intenta alcanzar por tierra la capital del virreinato del Perú. Antes de que esto ocurra ambos libertadores se reúnen en Guayaquil, San Martín se retira dejando el campo libre a Bolívar en su camino hacia Lima. Para entonces muchos ciudadanos pertenecientes a las viejas familias, ya luchaban a lado de la causa patriota que era la única opción posible en la América Libre, fue tal el caso de Agustín de Gamarra, Andrés de Santa Cruz y José Ballivián quienes en el transcurso de los años serian figuras importantes de la historia de Bolivia. Después de las Batallas de Junín y Ayacucho (1824) sólo quedaba un reducto realista y autonomista: el ejército comandado por Pedro Antonio de Olañeta que dominaba Charcas. Olañeta murió asesinado en 1825. Después de este suceso, el Mariscal Sucre, que ya había penetrado en el Alto Perú siguiendo órdenes de Bolívar, emitió un decreto el 09 de febrero de 1825, reuniendo la Asamblea que determinó los destinos de la futura Bolivia. Los doctores altoperuanos, como Casimiro Olañeta, no fueron ajenos a este hecho, pues estos jugaron un papel importante en las decisiones que se tomaron y que afectaron el futuro de la naciente patria. La Audiencia de Charcas, que perteneció al Virreinato del Perú hasta el año 1776 en que se fundó el virreinato de Buenos Aires, paso a formar parte de la nueva jurisdicción en su integridad, incluyendo sus cuatro intendencias. La Paz, Potosí, Chuquisaca y Santa Cruz, que comprendía a Cochabamba, más las Gobernaciones de Moxos y Chuiquitos. Se erigieron como tales el año 1777, después de diez años de la expulsión de los jesuitas. Estas gobernaciones dependían de la Audiencia de Charcas en lo político – administrativo y, en lo militar dependían de Santa Cruz de la Sierra. Todas estas reformas tuvieron lugar durante el reinado de Carlos III (1759 – 1778) El 3 de agosto de 1810, en plena guerra de la Independencia, la Audiencia de Charcas volvió a la jurisdicción de Lima capital del virreinato del Perú, siendo Virrey José de Abascal. La ya declarada independencia de las provincias del Río de la Plata y las necesidades militares de un momento tan conflictivo como aquel fueron las causales inmediatas de esta transferencia, la cual afirmó la unidad y autonomía de Charcas que no se consideró ligada a ninguno de los virreinatos. 3. El Congreso de Tucumán El año 1816 el Congreso de Tucumán proclamó la independencia de las provincias del Río de las Plata, tanto del Rey de España como de la metrópoli cualquiera fuera del Gobierno que en ella prevaleciera. Era la culminación de un proceso que nacido en la Universidad de Charcas había tenido una etapa revolucionaria de carácter radical, jacobina en muchos casos al cual iba moderándose. (En Francia se denominaba jacobino por celebrar sus reuniones en un convento de dominico. Era un partido francés de la época de la Revolución, partidario de dirigir la educación de los ciudadanos) En el Congreso se discutió el tipo de gobierno a elegirse, algunos se inclinaban por un Estado monárquico, entre ellos estaba Manuel Belgrano, con la variante de que llegó a pensarse en un descendiente de los incas para el futuro monarca. Esta idea fue rebatida por Vicente Pazos Kanqui que era partidario de un Gobierno republicano, idea que defendió en Buenos Airea desde el Periódico La Gazeta en el cual trabajaba, Su opinión tuvo mucho peso pues se trataba de un hombre aymara. Otros pensaron en una monarquía con un rey europeo a la cabeza, idea que se mantuvo latente durante mucho tiempo, pero finalmente, prevaleció la postura abiertamente republicana. En cuanto a Charcas, cuya separación de las provincias del Río de la Plata se hacía evidente después de las desastrosas campañas de los ejércitos auxiliares, las opciones fueron dispares. Mariano Moreno, formado al fin al cabo en Charcas lo lamentó, no así Bernardino Rivadavia y un círculo quienes tenían sus miras puestas en el Atlántico. En la práctica, el año 1816, buena parte del territorio de Charcas todavía estaba controlada por los realistas, aunque se mantenían activas las guerrillas y los ejércitos argentinos hacían los últimos intentos de penetración. 4. Los ejércitos libertadores en el norte de Sudamérica Fernando VII, después de aceptar la Constitución 1812 la deroga en 1814, iniciando un Gobierno absolutista. La situación en el norte del continente sudamericano, por esos mismos años, era difícil. En Caracas se había constituido la junta suprema conservadora, la cual empezó a actuar en forma autónoma. Esta junta envió como emisarios a Londres a Simón Bolívar y Andrés Bello. Allí Bolívar conoció a Miranda y ambos retornaron a Venezuela en 1810. En 1811 el Congreso creado en Caracas con la participación de Miranda, declaró la Independencia de Venezuela, naciendo una precaria República pues el General realista Monteverde, después de abatir a los rebeldes restableció el antiguo régimen. Miranda cayó preso y Bolívar embarcó para Nueva Granada (Colombia), formando parte allí de las tropas revolucionarias. Después de larga contienda, Monteverde abandona Caracas y Bolívar la ocupa, siendo nombrado presidente de la República. El año 1816 los realistas se apoderaron nuevamente de Venezuela y Bolívar huye a Jamaica, de allí pasa a Haití, retornando poco después a Venezuela con mayor ímpetu. Toma el camino de la Angostura y forma allí un gobierno que el mismo preside. Al cual titula "Republica de Colombia". El Congreso de Caracas se reúne en 1819 y Bolívar inicia sus campañas. Después de los triunfos de Bocayá (1819) y Carabobo (1821) los Ejércitos Libertadores estaban consolidados en el Norte y, es entonces, que Bolívar emprende su gran sueño; la libertad de toda América. Vence la resistencia de Pasto y Popayán (sur de Colombia) y avanza rumbo a Quito, esta vez encomendando las tropas al General José Antonio de Sucre quien vence en Pichincha. Andrés de Santa Cruz participó en esta batalla a lado de los patriotas. El Virreinato del Perú formado después de 1811, por el territorio comprendido entre Potosí y el norte del Perú era el único reducto realista y estaba dentro de una tenaza formada por los ejércitos libertadores. El General José de San Martín controlaba el sur y los ejercito de Bolívar y el Norte. 5. Simón Bolívar, el Libertador Simón Bolívar, nació en Caracas en año 1783. Tuvo por maestro a Simón Rodríguez quien lo inició en la lectura del filósofo suizo JeanJacques Rousseau y los enciclopedistas. Hijo de una familia acaudalada, realizó estudios en España. Pasó a Italia y acompañado de su maestro, subió al monte Aventino en Roma, jurando allí dar libertad a América. Volvió a su patria realizando, en 1810 un nuevo viaje a Europa acompañado de Andrés Bello entonces pudo ver el debilitamiento de España a raíz de la invasión napoleónica. Bolívar tuvo una inteligencia excepcional y una gran clarividencia para prever el futuro de América. En lo personal era un hombre cultivado y seductor. Estuvo casado en su juventud con su prima Teresa de Toro de quien quedó viudo muy joven. Bolívar, al retornar nuevamente a Venezuela, lucha contra la dominación española dispuesto a cambiar el sistema imperante en toda América. Después de diversos acontecimientos en la lucha entre las fuerzas patrióticas y los realistas, Bolívar entró triunfante en Caracas el año 1813, donde fue proclamado "Libertador". Pero aún le esperaba muchos contratiempos para llamar al Congreso de la Angostura a cuya Asamblea presentó un proyecto de Constitución y propuso la unión de Colombia y Venezuela. Éste sería el primer paso que luego fracasó, en el que se ve la idea del Libertador de unir una gran nación a toda la América hispana. Con esta idea Bolívar avanzó hacia el sur, con el fin de llegar a Lima que era la sede del Virreinato más poderoso de América del Sur. A su paso por Quito conoció a Manuelita Saenz que fue el gran amor de su vida. Estando en Quito, concertó una entrevista con el General San Martín en Guayaquil después de la cual el General argentino se retiró del escenario de la guerra. Esto hizo que Bolívar encontrase un campo expedito para realizar su gran sueño: la unión americana. En estas circunstancias se crea Bolivia. El General Sucre comunicó a Bolívar el resultado de la Asamblea declarando la Audiencia de Charcas un territorio independiente de los dos Virreinatos, el del Río de la Plata y el del Perú. Bolívar no vio con buenos ojos esta decisión contraria a la idea de la unión americana; sin embargo, con los halagos, los altoperuanos supieron doblegar su ánimo y voluntad y al fin aceptó la realidad, y al mismo tiempo el cargo de presidente de la Republica que llevaría su nombre. Después de breve estadía en Bolivia donde dejó la "Constitución Vitalicia", Bolívar dejó a Sucre en el Gobierno y retornó a Colombia (1827) a la que encontró sumisa en una guerra civil a consecuencia de la cual Colombia y Venezuela se separaron (1829). En tanto Perú había abolido la Constitución bolivariana y Bolivia había hecho otro tanto con la "Constitución Vitalicia". La Audiencia de Quito, por su parte, se había constituido en República independiente. Amargado al ver como se derramaba y despedazaba su obra renunció al poder en 1830 y se retiró a Santa Marta, allí le comunicaron el asesinato de su gran amigo y colaborador, el Mariscal Antonio José de Sucre. Murió joven en diciembre de 1830 a los 47 años abandonado y solo. 6. La Asamblea Constituyente y la creación de la República De acuerdo a lo establecido por Sucre se eligieron los representantes para la Asamblea que tuvo lugar en Chuquisaca el 10 de julio de 1825; ésta fue precedida por José Mariano Serrano que se había destacado en el Congreso de Tucumán de 1810. El presbítero José María Mendizábal, natural de Jujuy fue elegido vicepresidente. Entre los asistente sólo estaban dos veteranos de la lucha por la independencia, José Miguel Lanza y José Ballivián, lo que muestra que en los 16 años de contienda muchas cosas habían cambiado, en su mayoría los grandes idealistas independistas habían muerto y el control político estaba en manos de hombres de letras, muchos de ellos formados aún en el antiguo régimen. Andrés de Santa Cruz fue elegido diputado por la Paz, pero declinó la nominación. Entre los participantes cabe destacar a Casimiro Olañeta y Manuel María Urcullu, este último fue encargado de redactar las Actas. Después del discurso inaugural de José Mariano Serrano y un mensaje del General Antonio José de Sucre, el cual fue elegido, habló Olañeta como el mejor hombre y más convincente orador de su tiempo, él expuso la idea de que era imposible pensar en la unión a las provincias del Río de La Plata. Pidió luego la palabra Gutiérrez, diputado por La Paz, sosteniendo que lo que fue la Audiencia de Charcas debía mantenerse unida al Perú. Esta opinión fue refutada por Moscoso y apoyadas sesiones más adelante por Olañeta y Serrano que defendieron calurosamente la idea de la independencia total. La discusión terminó el 28 de julio y en agosto se votó por tres opciones: 1. ¿Se unirían las provincias del Alto Perú a la Argentina o se declaraban separadas por ser esto más convenientes a sus intereses y felicidad? 2. ¿El Alto Perú quedará unido con la República del Bajo Perú o también se declaraba separado? 3. ¿Los departamentos del Alto Perú se erigirían en estado soberano e independiente de todas las naciones, tanto del viejo como del nuevo mundo? Prevaleció el sentimiento mayoritario por la autonomía, pues la primera proposición no tuvo ningún voto a su favor, la segunda sólo dos y la tercera fue aprobada por la Asamblea en pleno. Se formó una Comisión para redactar la "Declaración de Independencia" formada por siete miembros entre los que estaban José Mariano Serrano, José Joaquín Casimiro Olañeta y Quemes, Manuel María Urcullu y José María Mendizábal. Los 48 representantes firmaron de manera unánime el texto, una de cuyas partes dice: "las provincias del Alto Perú firmes y unánimes en tan justas y magnánime resolución, protestan ante la faz de la tierra entera que su voluntad irrevocable es gobernarse por si mismas y ser regidas por la Constitución, leyes y autoridades que ellas propias se diese y creyese más conducente a su futura felicidad" El Acta se firmó el 6 de agosto de 1825 en conmemoración de la Batalla de Junín. La creación de Bolivia fue producto de 16 años de lucha la cual permitió a los nativos y residentes de la Audiencia de Charcas, ver como la situación estratégica de su territorio y su gran riqueza eran fundamentales para quienes deseaban construir una América nueva. Pasada la avalancha de españoles, argentinos, peruanos y más tarde colombianas, lo habitantes de estas tierras recogieron los despojos de la guerra y así se dispusieron a construir su propia patria. 7. ¿Cómo nació la Republica? Bolivia creada por cinco departamentos, (Chuquisaca, Potosí, La Paz, Santa Cruz y Cochabamba) que habían existido como antes cuasi autónomo desde mucho antes de la fundación de la República, pues tenía sus delimitaciones políticos-administrativas y una autonomía de gestión avanzadísimas en torno de núcleos económicos también definidos. La ley número 39 del 23 de enero 1826 al establecer la división político administrativo de la República, reconoce y legaliza las antiguas jurisdicciones territoriales que éstos departamentos habían tenido muchos antes de 1825. Luego mediante Ley Nº 209 del 21 septiembre de 1831, por voluntad libre de los tarijeños se anexa la provincia de Tarija y se la convierte en Departamento habiendo tenido ésta un alto grado de auto gestión y delimitación políticoadministrativa propia, al igual que sus dejadas provincia de Río de la Plata que ahora forman el estado federal Argentino. Esto es importante destacar, la mayoría de los países del mundo, al establecer sus delimitaciones políticoadministrativas internas, así como al darse una forma de Estado determinado, tan sólo respetaron el derecho natural y el históricamente adquirido por las regiones. Es por eso que en muy pocos lugares del mundo sus habitantes cuestionan su organización estatal. Justamente esto no sucedió en Bolivia, pues los que diseñaron la patria no han respetado el estado político autónomo de las regiones claramente identificadas con sus particularidades geográficas, políticas sociales y económicas. Sin embargo, no respetaron el grado de autogestión que habían tenido sus regiones para, conforme a esto, determinar la forma a adoptarse, fracasaron por el simple hecho de que violentaron la histórica forma en que se condujeron esos pueblos. El adoptar una forma de estado, es un hecho jurídico que en ningún caso puede desconocer los derechos adquiridos centenariamente por los pueblos. La única manera de adoptar una forma completamente justa en este sentido, es que ésta sea el fiel reflejo de la realidad político-administrativa y económica que pretende normar. Hacer lo contrario es cometer un error tan absurdo como injusto: pretender contener la realidad de una región a una norma que no guarda relación con ésta es un fracaso anticipado, y esto fue lo que se hizo en Bolivia lamentablemente. Un 13 de agosto de 1825, los representantes adoptaron para si un Estado "concentrado general y uno". Han violentado flagrantemente nuestros derechos históricos, pero ha llegado la hora de cambiar y corregir este error histórico que nos ha heredado consecuencias de injusticia. 8. Origen del establecimiento del sistema centralista Sería injusto y poco serio afirmar que se cometió este garrafal error con una intención premeditada para malograr deliberadamente al país en su nacimiento. Pero si podemos citar dos causas, una ingenua y otras interesadas, que dieron origen a este error histórico. Primera causa: Los altoperuanos que manejaron la formación de la nueva república eran ex monarquistas y eran admiradores del enciclopedismo francés, sin duda que hubo en este aspecto buena voluntad. Temieron una disgregación y creyeron erróneamente, que el camino de la unión era cercenar los derechos autogestionarios de las cinco cuasi autonomías mediante una norma y establecer así, una patria unida. Fue muy contraproducente. Segunda Causa: Se la debemos a la oligarquía de la Plata residente en Chuquisaca: quiso dominar al naciente país para consolidar y expandir su poder económico y político, objetivo que creyó conseguir mejor centralizando el poder en un estado clásicamente unitario, concentrado y general. Miope y mezquino el argumento de esta oligarquía tal como posteriormente ha sido el comportamiento de todas las oligarquías de este país. Bolivia nunca acaba de pagar este craso error, por cuanto fue antihistórico en lo jurídico, político y administrativo. 9.- La situación del Chaco Los archivos de la historia demuestran de manera contundente que el Chaco Boreal como el Chaco Central formaban parte íntegramente del Alto Perú, administrada por la Real Audiencia de Charcas. Al crearse la Audiencia de Charcas el 04 de septiembre de 1559, con jurisdicción territorial, además de las cien leguas a la redonda de Chuquisaca, ampliado dos años después con la inclusión del oriente con tierras y pueblos conquistados por Ñuflo de Chávez y Andrés Manso, y al sur con las Jurias, Diaguitas y Tucumán, según Cedula Real de 25 de agosto de 1563. Después de la conquista española y portuguesa, el Gran Chaco Americano durante la colonia comienza a ser objeto de continuos retaceos en territorio. Una parte del Chaco, durante la Colonia recibe la cobertura política respectiva. Durante la vida republicana nuevamente es objeto de divisiones que afectan irremediablemente su integridad como una Gran Región Americana. El primer retaceo Ocurrió al organizarse las gobernaciones en la América durante la Colonia Segundo Retaceo Al fundarse la Republica de Bolivia el 6 de agosto de 1825, en el territorio del Alto Perú, que fue administrado por al Real Audiencia de Charcas, sobrevino la división política territorial en departamentos, provincias, cantones y colonias en todo el país; creándose el departamento de Chuquisaca por Decreto Supremo del 26 de enero de 1826 y en lo que a la región chaqueña se denominó Azero, creada el 13 de octubre de 1840, capital sauces (hoy Monteagudo). El 14 de septiembre de 1947 al crearse la provincia Luís Calvo, se divide la Provincia Azero, quedando al oeste la provincia Hernando Siles y al este la Provincia Luís calvo. Mediante Decreto Supremo del 23 de enero de 1826, se crea el Departamento de Santa Cruz de la Sierra, denominándose Provincia Cordillera a la región Chaqueña, creada en la misma fecha. Por decreto Ley del 24 de septiembre de 1831, el Mariscal Andrés de Santa Cruz, crea el Departamento de Tarija. El 12 de agosto de 1876, el Gral. Hilarión Daza, firma en Potosí el Decreto Supremo creándose la provincia Gran Chaco 10. ¿Era necesaria la creación de una República como Bolivia? Algunas de las preguntas que necesariamente tenemos que hacernos y respondernos sinceramente todos los bolivianos, antes de ingresar en materia, son las siguientes; ¿fue correcta la creación de Bolivia?, ¿debimos pertenecer a lo que hoy es Argentina?, ¿o al Perú?, ¿o al Brasil? ¿Por qué se unieron regiones tan heterogéneas como el Oriente y el Occidente boliviano? ¿La zona de la llanura chaqueña con las zonas sub andinas con topografías distintas?, ¿Cómo se explica la división de la región chaqueña claramente identificada en tres Departamentos? ¿Fue cabal y acertada esta unión entre regiones con contradicciones muy marcadas? ¿Existe alguna explicación histórica para este tipo de interrogantes? ¿es posible remediar esta situación? ¿No será que Bolivia nación mal?, porque equivocadamente adoptó una forma de Estado completamente unitario y concentrado, violentando deliberadamente la realidad cuasi autonómica que detentaban entonces las regiones que ahora conforman la República, cercenándoles los derechos autonómicos inmanentes que éstos habían adquirido históricamente. Entonces la respuesta deviene después de un análisis del contexto histórico y determinante cuando se tomaron decisiones para la fundación de la República. Ese centralismo se mantuvo por razones estrictamente económicas y políticas a lo largo de la vida republicana hasta la fecha creando odios y rencillas irreconciliables entre regiones, y lo que es peor postergando el desarrollo de las mismas. Esto demuestra que el sistema de administración política impuesta no ha sido el más acertado porque la realidad era muy particular y no correspondía al sistema. Esta desacertada estructura creada hizo que los Departamentos/Regiones hayan demostrados siempre poca voluntad de colaborar con el país, comportándose a los largo de la vida republicana, cada uno de ellos, en los hechos, de forma cuasi-autónoma. La Estructura creada no ha logrado doblegar la vocación de cada una de las regiones por lo que no ha funcionado adecuadamente el sistema unitario impuesto por la rebeldía de las mismas a la adecuación formal. Lamentablemente, las personas que influyeron directamente en el diseño político-económico-administrativo de este país, fueron occidentales (con un visión altoperuano; Olañeta Urcullu y Serrano) que tenían una visión totalmente distinta a la de los llanos, oriente y el chaco boliviano. Como hubo la necesidad de concentrar y obligar a la unidad territorial y política es que se cometieron una serie de arbitrariedades en la definición de los límites Departamentales. ¿Cómo es posible que un Departamento como Chuquisaca tenga tres regiones concentradas? (altiplano, valle y chaco) o Tarija que también alberga tres regiones (altiplano, valle y chaco) 11. Sistema Constitucional importado e impuesto. La Constitución, que en los hechos constituyó una forma de Estado unitario y centralizado, en realidad fue copiada del modelo español que a su vez había imitado al sistema unitario centralizado francés. Se ha adecuado una Constitución importada que no tenía relación con la realidad, pero que intereses de grupo obligaron su adecuación. Hay sobradas razones en la historia, por qué Francia y España –en su momento- optaron acertadamente aplicar este modelo de Estado, frente a amenazas interiores que ponían en riesgo la viabilidad de su existencia, pero la nuestra era totalmente contraria a las mismas. Luego de lograr el objetivo, cambiaron radicalmente el modelo de Estado para dar paso a las Autonomías y tuvieron éxito en el proceso. En el caso de Bolivia, desde la fundación de la república no se ha cambiado el sistema de administración política, por lo que se ha mantenido intacto el sistema centralizado, en plena contradicción con la realidad. En la historia hubo varios intentos de hacer cambios, pero estos fracasaron por la evidente falta de voluntad política. 12. Regiones indómitas Según la Constitución Política del Estado vigente, nuestra Republica es unitaria, democrática y representativa, pero en realidad, no hemos podido ser ni lo uno, ni lo otro, ni lo tercero. Somos un Estado que vive una etapa de proceso formativo, donde aún no se ha producido la sujeción completa a un poder legítimo y a las reglas de juegos constitucionales. La débil cohesión interna del aparato estatal boliviano, a lo largo de más de siglo y medio, se ha logrado más por la fuerza que por la legalidad y legitimidad. El uso de la fuerza ha sido un prerrequisito esencial para que los distintos núcleos de poder regional acaten y legitimen la autoridad de un Poder Central. La profunda raigambre cuasi-autonómica que detentaban en la legislación española colonial, lo que hoy son regiones bolivianas, contrastadas con la absorbente estructura centralista en lo administrativo, político, económico de esta República, su burocracia, el mito imperante, su colonialismo interno, la ausencia de control y la falta de participación popular en los asuntos departamentales, han dado origen a que los Departamentos disconformes con este modelo, jamás demuestren voluntad política para colaborar con esa Bolivia implantada (impuesta) de 1825. 13. Regionalismo evidente Ahora se explica por qué la región está mucho más antes que la Patria. El historiador Ramón Sotomayor Valdez decía: "En Bolivia hay sucrenses, cruceños, cochabambino, paceños, etc. pero muy pocos de ellos son verdaderamente bolivianos pues la patria está absorbida, o más bien supeditada por la localidad (región)" Actualmente cada Departamento, tiene "su propia" simbología que no tiene nada que envidiar a ningún estado soberano en fervor y pasión cívica regional. Tienen escudos de armas, himnos de guerra, banderas, etc. en las instituciones flamea la bandera regional junto a la nacional a pesar de que la educación es homogénea con gran influencia andina y con ninguna relación con la (realidad) región. Lo mismo ocurre con los héroes regionales, pues cada uno de ellos tiene mucho significado regional, pero no son muy conocidos en el resto del país. Moto Méndez en Tarija, Alonso de Ibáñez en Potosí; Alejo Calatayud en Cochabamba, Cañoto en Santa Cruz, Bernardino Bilbao Rioja en el Gran Chaco. La lucha entre regiones es tan notable, que los demás problemas internos son subyugados inmediatamente cuando estos añoran. Hay poca voluntad política de las regiones de pertenecer a un Estado unitario. En Bolivia no existe vocación centralizadora, sino autonómica. Se demuestra que la adecuación de la Constitución francesa-española a Bolivia no fue la correcta, pues no consideraron la heterogeneidad de naciones y regiones, con sus propios fueros conquistados, tradiciones e intereses muy distintos y delimitaciones políticas claras y definidas por administración propia. 14. Conclusión Bolivia es un estado que solo existe en la ficción jurídica, porque en los 180 años de vida republicana no hemos llegado a consolidar un estado legitimo en el que todas las naciones estén representadas y anexadas de manera voluntaria. Hemos arrastrado las contradicciones desde su fundación. Es por eso que tenemos esperanza en que la Asamblea Constituyente convocada para el mes de julio, nos posibilite un mejor futuro desde el asentamiento de nuevas bases estructurales de un tipo estado que responda a nuestra realidad. La asunción del mando de país de un indígena como Evo Morales, nos posibilita un camino hacia la asamblea constituyente como debe ser, con la participaron de todos los sectores y regiones. Es necesario garantizar la inclusión de todos, para que seamos representados y desde allí se realice un nuevo pacto social. Existe la esperanza de que, a partir de una nueva Constitución Política, quede en la historia los paros y bloqueos que han creado mucho perjuicio al país, porque ha hecho que en muchos momentos sea inviable. Tengo la fe en que las cosas van a cambiar para bien con este nuevo presidente indígena. Actividad a desarrollar y presentar por el estudiante: Poner en práctica la lectura crítica y analítica en el contenido, una vez comprendido el contenido, redacte un análisis filosófico personal, resaltando las partes positivas o negativas, respecto a las distintas etapas del proceso de la fundación de la República de Bolivia, hoy Estado Plurinacional de Bolivia. Desearle suerte y éxitos a cada uno de ustedes. FILOSOFIA INFLUENCIA DE LA FILOSOFÍA ANTIGUA EN EL MUNDO CONTEMPORANEO LA FILOSOFÍA GRIEGA EN EL SIGLO XXI Los textos de los filósofos griegos, como de los poetas, los oradores o los historiadores, siguen gozando de tal vigor y capacidad de atracción que, aun cuando las sucesivas reformas educativas, en enseñanzas medias o universitarias, se empeñen en lo contrario, seguirán concitando el interés de los lectores en busca de ideas, experiencias, indicios o estímulos que puedan arrojar algo de luz sobre los interrogantes o las inquietudes del tiempo presente. Ese ha sido el sino de los textos desde el momento en que salían de las manos de sus autores o del cálamo del copista. Los rollos comenzaban a peregrinar y rodar en un círculo mil veces reiterado de leo y copio hasta que han llegado a nosotros cargados de variantes, de lagunas y de diafonías. Los filólogos han sido los cuidadores de estos textos, escrutando manuscritos, preparando ediciones, recopilando antologías y ofreciendo, finalmente, a los lectores traducciones a las diferentes lenguas modernas. En este largo proceso, aunque el autor, que ha concebido la obra, es el personaje protagonista, también otros, el copista, el editor y el traductor, han dejado su huella, y especialmente una vasta legión de intérpretes, lectores que bien sea por su saber filológico o histórico o por su creatividad filosófica, también ha dejado en las obras antiguas su impronta, ahormando y encauzando el caudal de la traición clásica según la realidad del momento y sus exigencias. De este modo las obras clásicas han llegado a nosotros acompañadas por una inmensa comitiva, la llamada literatura secundaria, que puede ayudarnos a comprenderlas mejor pero que también pueden ocultar su sentido originario. Es la tradición cultural de la que el lector actual de los textos clásicos no puede zafarse. La clave de bóveda en este proceso es el término interpretación. El lector que, tras leer un texto, plasma en un papel su interpretación del mismo, deja ipso facto en él una parte de su propio bagaje intelectual y emocional. Wilamowitz, el gran estudioso alemán del mundo clásico, conocido como el princeps philologorum, ilustra mejor que nadie este hecho. Cuando, tras haber entregado a las prensas el primer tomo de su obra sobre Platón, recibió la noticia de la derrota de Alemania en la primera guerra mundial, descorazonado, añadió el siguiente epílogo: «Nur wenige Stunden, nachdem ich die Vorrede des ersten Bandes in den Druck gegeben hatte, ist entsetzliche Wahrheit geworden, was ich Weihnachten 1917 nur als eine Möglichkeit aussprach, die jenseits meines Lebens eintreten könnte. Ich habe die Selbstzerstörung, Selbstentmannung meines Volkes erleben müssen. In der Ochlokratie und unter den feigen oder feilen Schmeichlern, die sie in allen Ständen findet, ist für einen alten Mann, der sich seine Preußenehre von keinem Gott und keinem Menschen aus dem Herzen reißen läßt, kein Platz mehr. Er hat nur abzusterben. Aber das Reich der ewigen Formen, das Platon erschlossen hat, ist unzerstörbar, und ihm dienen wir mit unserer Wissenschaft: in seinen reinen Äther dringen die Miasmen der Verwesung nicht; auch Haß und Neid soll exo theíou choroû bleiben. Unter dem Zeichen Platons werde ich fechten, solange ich atme»1. Como puede verse, la teoría platónica de las formas no es ya solamente un producto teórico que puede proporcionar una explicación satisfactoria de la realidad, sino también una especie de patria inmutable, indestructible y pura, en la que puede refugiarse el sabio filólogo frente a las desilusiones del mundo terrenal. Esta toma de posición combativa expresada por Wilamowitz a favor de las doctrinas platónicas constituye una constante en la historia de la filosofía. En la Antigüedad, Cicerón se declaraba admirador de Platón, el filósofo que antepone a todos los demás, por ser «hombre más sabio que nadie y filósofo más profundo que ninguno, que fue tratadista príncipe sobre la república»2. Razones de naturaleza política empujan a Cicerón, hombre político como Platón, a defender las posiciones del filósofo ateniense y alinearse con él contra los mismos adversarios. Razones de otra naturaleza, en este caso teológica, empujaron a Agustín de Hipona a plantearse la pregunta: «Si Platón dijo que el sabio es aquel que imita, conoce y ama a este El texto citado figura como Nachwort al segundo volumen de su obra sobre Platón. 2 Así se expresa en Leyes I, 15 y Leyes II, 14. Dios, cuya participación le hace feliz, ¿qué necesidad hay de examinar a los demás filósofos? Ninguno de ellos está tan cerca de nosotros como los platónicos»3. En nuestra tradición, las afinidades políticas y religiosas, quizá más que ninguna otra, mucho más que las que tienen que ver con la elaboración de una explicación científica de la realidad, han sido motivo para la adhesión a determinadas posiciones y, por tanto, para la promoción, estudio y difusión de las mismas. Este proceso de adhesiones y rechazos, de simpatías y antipatías, se produce ya en la antigüedad, originándose un cuerpo cada vez más amplio de tratadistas, estudiosos y comentaristas, que expresan filias y fobias, más explícitas o más encubiertas, hacia los distintos autores y corrientes del pensamiento. El proceso se repite en las diferentes épocas históricas, primera Edad Media, Baja Edad Media, Renacimiento, Barroco, Ilustración, Romanticismo, interfiriendo en la recepción de los textos en Occidente. Nada hay que lamentar en estos procesos, no es tarea de filósofos ni el treno ni el lamento, pero sí intentar comprender. Comprender en primer lugar que, junto a toma de posiciones entusiastas o rechazos sonoros, los críticos, en particular, filólogos e historiadores, han puesto a disposición de los estudiosos actuales un arsenal de instrumentos sin el cual el conocimiento de la filosofía, como de otras facetas de la cultura griega y latina, sería mucho más limitado por no decir imposible. Piénsese cuánto debemos ponderar la ingente aportación de H. Diels, el coetáneo y amigo de Wilamowitz, para el conocimiento de la filosofía presocrática. Valga esta alusión a uno de los filólogos más queridos para los estudiosos de la filosofía como reconocimiento a una multitud laboriosa de investigadores volcada en la escrutación y colación de manuscritos, ediciones y traducciones, comentarios y estudios, que contribuyen a la realización de esta tarea. La situación actual de los estudios sobre la filosofía griega viene condicionada, en buena medida, por las aportaciones y las figuras que pertenecen al periodo que se inicia en Alemania, el país pionero en los estudios de la antigüedad, con lo que se denomina la Altertumwissenschaft, un proyecto que se proponía examinar todos los aspectos del mundo antiguo4. Buena parte de los principales instrumentos para el estudio de la filosofía griega tiene su origen en ese periodo y su influencia sigue perviviendo en nuestros días a través de las grandes obras de aquellas eminentes figuras. Aunque me he referido sobre todo a las aportaciones de filólogos e historiadores, también personalidades de la filosofía han contribuido a conformar el legado recibido sobre la filosofía griega; para empezar, ya Platón y Aristóteles fueron intérpretes y analistas de la obra de sus predecesores, y esa lectura crítica y dialógica por parte de los filósofos se ha mantenido vigente en toda la tradición filosófica, hasta llegar en la modernidad a Espinosa, Kant o Hegel. Mención especial merecen dos filósofos alemanes por su profunda influencia en la percepción y recepción del pensamiento griego en nuestro tiempo: en primer lugar, Schleiermacher como traductor y estudioso de la obra platónica, quien ha suscitado la cuestión, tan debatida en nuestros días, sobre el Platón exotérico y el esotérico o quien ha planteado la necesidad de entender los diálogos platónicos desde la perspectiva de la obra de 3 La ciudad de Dios VIII, 5. 4 R. Pfeiffer, Historia de la Filología clásica de 1300 a 1850, 301. arte. Y en segundo lugar, Nietzsche, cuyos ensayos se han convertido en puente de acceso a los pensadores griegos, ofreciendo al mismo tiempo una singular visión crítica cuya fecundidad no ha sido suficientemente explorada. En la actualidad, como resultado de este complejo proceso de recepción de los textos, Sócrates, Platón y Aristóteles siguen constituyendo la trinidad más significativa del cosmos filosófico griego. El tercero, Aristóteles, es un discípulo de Platón, el cual, a su vez, es discípulo de Sócrates. Por tanto, en Sócrates hallamos el punto de arranque de un pensamiento que se desarrolla, con diversas ramificaciones, en lo que son los dos cuerpos textuales más importantes de toda la filosofía griega, el platónico y el aristotélico. Aristóteles supondrá en parte la continuidad con esa línea de pensamiento y en parte también un posicionamiento crítico, incorporando partes importantes de la tradición presocrática y sofística. En todo caso, en lo fundamental, esos tres autores constituyen la plana mayor de la filosofía griega. Todo lo demás, antecesores y sucesores, serían o balbuceos previos, como sugiere Aristóteles a propósito de la cuestión central de la causalidad, o comentarios y desarrollos a los grandes textos clásicos5. Frente a la plana mayor, existen también disidentes, los sofistas, los atomistas, los epicúreos y, en general, los escépticos, no solamente la escuela helenística conocida con ese nombre, sino también una larga secuencia de pensadores que se iniciaría con Jenófanes, seguiría con los sofistas y se convertiría en escuela filosófica con Pirrón y Sexto Empírico. A la luz de este legado, creo que las hay dos líneas temáticas que reclaman atención en la actualidad y que suponen un desafío a esta visión heredada, cuyo peso en los estudios actuales sobre filosofía griega sigue siendo preponderante. Esas líneas son 1) El pensamiento griego y la filosofía política y 2) El pensamiento griego y el relativismo. 1. El pensamiento griego y la filosofía política En la cuestión de la filosofía política es quizá donde hallamos las lagunas y las paradojas más lacerantes. Ni Sócrates ni Platón ni Aristóteles fueron partidarios de la democracia. Platón en particular fue un adversario firme y permanente, defendiendo la necesidad de una organización social que asignara las funciones de gobierno a un sabio o grupo de sabios y que excluyera a la mayoría (el ochlos, la oclocracia de la que habla la nota de Wilamowitz). Una filosofía de este tipo es natural que fuera acogida con entusiasmo entre aquellos estudiosos europeos de los siglos XVIII, XIX y primer tercio del siglo XX para quienes la perspectiva de una solución democrática al problema de sus países o, más en general, de las sociedades europeas, ni tan siquiera parecía contemplarse, al menos de un modo nítido y decidido, en el ámbito de los círculos de influencia de los investigadores de la cultura clásica. Todo lo que merece y recibe en elogios esa inmensa creatividad artística de la Grecia clásica, lo recibe en silencio y olvido cuando no en directos ataques el sistema democrático y sus partidarios, como el sofista Protágoras de Abdera. Recuérdese el ya tópico aserto de Whitehead de que «la historia de la filosofía occidental no es más que una serie de notas de pie de página a Platón», al que ha replicado Gallop (Parmenides of Elea, , no sin razón. Esto resulta difícil de explicar si se tiene en cuenta que la democracia es un invento griego, la realidad y la palabra, que, mientras estuvo vigente el sistema democrático, se produjo el mayor florecimiento de la ciencias, las artes y la cultura que llamamos clásica por antonomasia, y que, en dicho período y en dicho sistema, vivieron y crearon artistas como Fidias, literatos como Esquilo, Sófocles y Eurípides, filósofos como Anaxágoras, Protágoras, Sócrates, Platón o Aristóteles, o líderes como Pericles. Seguramente, aunque nadie lo exprese así, pensaron que toda esa enorme creatividad se produjo a pesar de o al margen de la democracia6. Entre los estudiosos del mundo clásico se ha instalado hasta enraizarse profundamente el sentimiento del elitismo que casa y congenia en perfecta armonía con la República de Platón y con la reiterada afirmación platónica de que «no cesarán los males del género humano hasta que ocupen el poder los filósofos puros y auténticos o bien los que ejercen el poder en las ciudades lleguen a ser filósofos verdaderos» (Carta VII). Saber latín y griego se convertía en un indicio de esa aristocracia filosófica. Esa mentalidad elitista, que en la modernidad ha encontrado cálido hospedaje en buena parte de los seminarios de filosofía y de estudios clásicos, ha sido muy habitual entre los filósofos y pensadores que tenían un enlace estrecho y directo con la filosofía clásica. Bastarán algunos ejemplos. El profesor M. Á. Granada, hablando de G. Bruno a propósito de la perfección del hombre, recuerda el siguiente texto de Averroes: «Manifestum est, quod praedicatio nominis hominis perfecti a scientia speculativa, et non perfecti, sive non habentis aptidinem quod perfici possit, est aequivova, sicut nomen hominis quod praedicatur de homine vivo et de homine mortuo, sive praedicatio hominis de rationali et lapideo»7. La diferencia entre el hombre sabio o filósofo y el hombre vulgar es semejante a la que hay entre un ser humano vivo y uno de mármol. Platón no llegó a tal extremo, pero la inspiración del texto de Averroes encuentra ecos, quizá no tan exagerados, en los textos de Platón y Aristóteles. El propio Bruno encuentra en los testimonios de los dioses, como en el caso del oráculo de Delfos para Sócrates, la prueba de la existencia de un género de individuos cuya potencia cogitativa se encuentra gobernada por un espíritu divino8. Sócrates será el modelo de la auténtica vida filosófica, que se verá amenazada y abocada a un permanente conflicto con la sociedad. 6 ¿Acaso no tendrá alguna relación la creatividad, tanto artística como científica o filosófica, con la parresía, la libertad de palabra de la que tan orgullosos se sentían los atenienses? Tal vez sea instructivo recordar el tratado Sobre lo sublime, del siglo I d. C., que, planteando las causas de la decadencia de la oratoria, se hace eco de una opinión muy extendida «según la cual la democracia es una excelente nodriza de talentos y que en un sentido general con ella han brillado y con ella se han extinguido los elocuentes oradores». El anónimo redunda en esta idea al afirmar que «gracias a los laureles que otorga el régimen democrático, el espíritu de los oradores se agudiza con la práctica; se afina, por así decir, y, como es lógico, comparte el resplandor de la libertad con los hechos mismos de los que se ocupa». Poco después hallamos el mismo tema en el Diálogo de los oradores de Tácito (56/57-117). 7 M. Á. Granada, La reivindicación de la filosofía en Giordano Bruno, 68 n. 52. 8 Bruno habla de individuos «cuyo espíritu o ánimo, aunque tocado por algunas afecciones corpóreas, no resulta, sin embargo, penetrado o ligado por ellas; antes bien, en virtud de su mente despierta, alcanza una sabiduría más profunda, de suerte que no solo resta inmune a las turbaciones de los necios, sino al temor mismo del vulgo». M. A. Granada, o.c., 11. Surge de esta manera un mito, basado en la Apología platónica y alentado en el siglo XX particularmente por Leo Strauss, de un irremediable conflicto entre la sociedad y la filosofía, mito que tiene el efecto9, no sé si el propósito, de seguir manteniendo vivo el hálito del elitismo, de la escisión platónica de la sociedad, entre la clase productora, gobernada por el alma inferior, de un lado, y, del otro, el pequeño grupo de los filósofos, gobernados por el alma superior. La obra de Platón es la referencia invariable de este modo de pensar que, aunque se reclame como un modo de vida que debe desarrollarse en privado (se apela con frecuencia al único texto de la República 591c que parece hablar de una ciudad interior), tiene en su seno la permanente tentación de traducirse a la vida política. Los tres viajes de Platón a Sicilia serían buena prueba de esa tentación. ¿Acaso no han sucumbido también a la tentación los discípulos de Leo Strauss? ¿Acaso Wilamowitz no estuvo siempre dispuesto a la tribuna propagandística10? Sin embargo, no siempre toda prédica de un modo de vida ha tenido esta tentación de ganar el amparo del poder político, como prueba la religión órfica. Entre los filósofos, sin embargo, ya desde los griegos, precisamente porque entendían que todo saber debe llevar aparejada la búsqueda de un rédito social, esa propensión a la intervención política ha sido bastante frecuente. No se cuestiona, por tanto, la legitimidad de la pretensión de intervenir en la política, sino de la toma de posición a favor de un sistema político elitista, bajo variadas fórmulas, que mantenga a raya a la masa inculta e intemperante que amenaza a los sabios. En términos generales, el siglo XX ha ofrecido escenarios terribles en la historia de la humanidad que no pueden ser ajenos a quienes tengan algún interés por la filosofía política. Un observador de estos escenarios podría establecer la conclusión contraria a la de Platón en la Carta VII: por muchos que sean los males de una democracia, el remedio será peor que la enfermedad si por remedio se entiende la instauración de un sistema que elimine la esencia de la democracia, que es la intervención y participación de la mayoría, y eso con independencia de las intenciones con que tal sustitución se disfrace o se pretenda justificar. La historia terrible del siglo XX de la que hablo compromete a quienes, pensadores, historiadores, intelectuales y ciudadanos en general, han sido testigos de dicha experiencia y no a quienes no la han vivido ni a quines no han tenido conocimiento de la misma. Estas consideraciones nos conducen directamente a revisar el panorama de la filosofía política griega, en el que, junto a Platón y Aristóteles, aparece la figura de Protágoras con dos rasgos especialmente significativos: primero, como iniciador de la filosofía política, y segundo, como teórico de la democracia. La importancia de reconocer la figura de Protágoras tiene una primera consecuencia importante de carácter metodológico: el pensamiento griego se aborda tal como realmente aconteció y se constituyó, como una polémica, no ya solo una polémica entre maestro y discípulo, lo cual ocurría en el seno de las escuelas, sea la Academia o el Liceo, sino entre corrientes de pensamiento dispares y antagónicas. Este hecho, el de la polémica, expresa un rasgo esencial del desarrollo del pensamiento griego, un pensamiento que se constituye 9 De este mito se hace eco L. Canfora, en su libro Una profesión peligrosa, aunque no aporta argumentos convincentes. 10 Véase Manuel F. Galiano, «Ulrich von Wilamowitz-Moellendorff y la filología clásica de su tiempo», Estudios clásicos 13, nº 56, 1969, 25-57. y afina en el agon, en el debate abierto del espacio público, en las lecturas públicas de los escritos, en los dissoì lógoi. Los escritos de Platón y Aristóteles, pese a los muros de sus escuelas, son fiel reflejo de ese carácter polémico de la filosofía griega y, por esa razón, son los textos de estos filósofos el mejor exponente del pensamiento protagórico aun en ausencia de los abundantes libros del sofista, incluido el Perì politeías, escrito unos cincuenta años antes que la República de Platón, obras que comparten el mismo título (Politeía). Consecuencia de una lectura que parta del enfoque polémico es que la obra de Platón y la de Aristóteles no pueden ser leídas de la misma manera. Platón y Aristóteles, en ausencia de sus adversarios, Protágoras y otros sofistas, no pueden ser elevados a la categoría de maestros del pensar de Occidente, porque ellos son un lado del debate, solo uno, acerca del mejor modo de organizar la vida política y acerca del mejor modo de vida, las dos cuestiones básicas de la filosofía política. Alguien dirá que, si esta propuesta es aceptable, lo es ahora como antes de las trágicas experiencias del siglo XX, a lo que respondería que, en todo caso, las citadas experiencias han contribuido a cargarla de razón. 2. El pensamiento griego y la cuestión del relativismo Si el punto anterior se refiere a un área concreta de la filosofía, la cuestión del relativismo, aunque con implicaciones importantes en ese ámbito, afecta al modo de entender la filosofía en su conjunto. La introducción del relativismo se enfrenta a una tradición historiográfica, que se remonta al menos a Sexto Empírico, en la que los filósofos quedan divididos en dos grupos, dogmáticos y escépticos. Esta división se ha mantenido intacta hasta nuestros días. Las corrientes hegemónicas de la filosofía han tomado partido a favor de lo que Sexto denominaba posiciones dogmáticas, con notables excepciones como Hume o Nietzsche. Por lo que toca a los filósofos griegos, Platón y Aristóteles seguían siendo considerados como las cumbres del pensamiento y representaban la tradición filosófica más genuina: ellos serían los que, más allá de la superficie de las cosas, habrían descubierto los principios inmutables de la realidad, el verdadero objeto del conocimiento. Siguiendo esta perspectiva, los estudiosos de la historia de la filosofía consideran el dogmatismo y el escepticismo como dos inseparables compañeros de viaje en permanente polémica. «Es lo cierto, dice Hegel, que la filosofía positiva lo deja subsistir al lado de ella; el escepticismo, en cambio, adoptando la actitud contraria, ataca a esta filosofía y se esfuerza en superarla»11. En este esquema hermenéutico, el espacio conceptual relativista desaparece; a lo sumo, sobrevive oculto y confundido como un elemento del escepticismo12. Como Margolis afirma, se da por supuesto que el debate sobre el relativismo ya fue resuelto en su día, con argumentos incontrovertibles, por Platón y Aristóteles, de modo que ya no valdría la pena volver a la cuestión. La figura de Protágoras y su frase homo-mensura sería el residuo de la filosofía relativista y escéptica. Lo que aquí propongo consiste en superar este esquema dualista mediante la introducción de una tercera posición, el relativismo, como una posición consistente, profundamente enraizada en el pensamiento griego, en particular en la tradición presocrática, y netamente diferenciada de las dos antes citadas. Esta propuesta implica desarrollar dos tareas: a) Reconstruir los trazos filosóficos esenciales del relativismo, cuya primera expresión se halla en los fragmentos de Jenófanes, Heráclito y Parménides y que alcanzaría su expresión más elaborada en el pensamiento de Protágoras. A partir de Sócrates, la filosofía experimentaría un profundo giro que habría de dejar en la penumbra las principales tesis y argumentos del pensamiento relativista, desmembrado y ridiculizado en las obras de Platón y Aristóteles. En la actualidad se puede contemplar la emergencia del relativismo en diversas disciplinas, como la antropología, la ética o la historia de la ciencia. Las ciencias naturales han elaborado categorías que exigen plantear como central el tema de la relación. La filosofía, tradicionalmente orientada a lo absoluto, comienza a estudiar el relativismo con presupuestos distintos: hoy cabe consultar una amplia bibliografía que desarrolla y elabora el pensamiento relativista como una teoría consistente, defendible y más ajustada que el dogmatismo tradicional a las exigencias de nuestra problemática actual y a los indicadores conceptuales de nuestro tiempo. Sirva como ejemplo el libro de Margolis, en el que, no por casualidad, la figura de Protágoras ocupa una preeminente posición13. Todos estos estudios proporcionan herramientas imprescindibles para acometer este tipo de trabajo. b) En términos más específicos, como historiadores de la filosofía, la segunda tarea consiste en recuperar del espacio relativista en la filosofía griega. Es cierto que el relativismo griego, refutado por Platón y Aristóteles, no ha tenido continuidad como doctrina independiente, si bien, como ya he indicado, ha sobrevivido como una pieza del escepticismo tanto antiguo como moderno. Pese a todo, aunque no lo conocemos como una doctrina sistematizada, ya que carecemos de los textos más importantes, nuestra hipótesis es que las tesis relativistas, sobre todo con Protágoras, debieron de alcanzar un notable desarrollo, como lo prueba la importancia excepcional que Platón y Aristóteles concedieron a este sofista, incluido por Diógenes Laercio en sus Vidas. De los textos que conocemos, podríamos afirmar que el relativismo concedía un papel central al concepto de relación frente a la marginación en que queda reducida en Aristóteles, del que cabe recordar un texto crucial según el cual la relación es, «de todas las categorías, la que tiene naturaleza y entidad ( è ousía) en mucho menor grado, y es posterior a la cualidad y a la cantidad»14. Esa centralidad de la relación afecta tanto a la ontología (ser, flujo), como a la epistemología (disputa sobre las cualidades, valor del conocimiento sensible y su relación con el racional) y a la teoría política (convencionalismo, problema de las leyes naturales, participación de todos en la constitución de la normatividad)15. 13 J. Margolis, The Truth About Relativism (Oxford Uk & Cambridge USA), 1991. 14 Aristóteles, Metafísica 1088a23, trad. T. Calvo. 15 Valgan los siguientes textos de los Fragmentos Póstumos de Nietzsche como muestra de esta línea de pensamiento: «Die Eigenschaften eines Dinges sind Wirkungen auf andere «Dinge». En mi experiencia como estudioso de la filosofía griega, el punto de partida para el estudio del pensamiento relativista ha sido la figura de Protágoras y, más ampliamente, la polémica que tuvo lugar entre Sócrates y los sofistas tal como se refleja en Platón y Aristóteles. No es banal que estos grandes filósofos dediquen grandes esfuerzos a refutar las tesis protagóricas. Son, por lo tanto, los propios textos platónicos y aristotélicos los que nos invitan a mirar el protagorismo de otra manera y a profundizar en la polémica contra Protágoras, quizá la más importante y la de mayor calado en toda la historia de la filosofía, lo que exige conocer los argumentos de todos los interlocutores y no sólo de una parte. Desde este punto de partida, ganamos una nueva perspectiva para contemplar la historia de la filosofía griega hacia el pasado y hacia el futuro. Volviendo la mirada hacia los presocráticos, la presencia de la posición relativista nos ofrece nuevas posibilidades de interpretación. Un ejemplo: las interpretaciones sobre el pensamiento de Jenófanes se hallan irreconciliablemente escindidas entre quienes lo consideran el iniciador del escepticismo y quienes lo interpretan como el sabio orgulloso que se cree en posesión de la verdad absoluta y definitiva. Tal dualidad deriva de considerar sus teorías a la luz del esquema dogmatismo-escepticismo. El pensamiento de Heráclito ofrece otro ejemplo significativo. Existen entre sus fragmentos varios de claro matiz relativista sin que hayan sido considerados filosóficamente importantes. Existe asimismo una sustanciosa polémica por parte de Platón y Aristóteles contra el Efesio. Como con Protágoras, tampoco en este caso se ha dedicado el esfuerzo necesario para esclarecer el por qué de la polémica. Aristóteles llega a decir que quienes piensan como Heráclito «eliminan la entidad, es decir, la esencia», lo que es lo mismo que destruir la ciencia misma. Acusación grave que dirige también contra Protágoras. Platón, por su parte, cuando trata de buscar una definición de belleza, es decir, un concepto absoluto, se las tiene que ver asimismo con Heráclito16. ¿Cuál es el sentido de esta confrontación? Todo estudioso de la filosofía griega reconocerá que Platón, y quizá antes su maestro Sócrates, jugó un papel crucial en la historia del pensamiento filosófico. Desde nuestra perspectiva, dicha crucialidad consistió en fundamentar, rescatando elementos de la tradición presocrática ligados al pitagorismo, el pensamiento de lo absoluto, lo que le exigió al mismo tiempo refutar, no por capricho, la filosofía rival, el espacio conceptual relativista. Que Heráclito y Protágoras sean los dos blancos de sus críticas no es ninguna arbitrariedad. Si volvemos a mirada hacia el tercer gran momento del pensamiento griego, las filosofías helenísticas, y en particular el escepticismo, analizadas desde el esquema que proponemos, experimentan también nuevas posibilidades hermenéuticas. Sabido es que para Sexto Empírico el principio constitutivo de la escepsis son las antilogías de Protágoras, pese a lo cual el sofista es clasificado entre los filósofos dogmáticos. Esto exige al estudioso un análisis que conduzca a un neto discernimiento entre relativismo y escepticismo y, más concretamente, a evaluar los elementos relativistas escondidos en la tradición escéptica y a explicar por sich»». KGA VIII 1, 2 (85), 102. «Das «Ding an sich» widersinnig. Wenn ich alle Relationen, alle «EigenschafDas «Ding an sich» widersinnig. Wenn ich alle Relationen, alle «Eigenschaften», alle «Tätigkeiten» Aristóteles, Metafísica 1007a20. Platón, Hipias Mayor 289b. En el Teeteto, Protágoras y Heráclito coinciden en cuestiones fundamentales sobre la realidad y el conocimiento. Qué el pensamiento relativista ha sido integrado en el escepticismo y por qué sólo allí ha podido sobrevivir. Tarea ésta válida no sólo para el escepticismo antiguo, sino también para el moderno, como lo prueban los escritos de Francisco Sánchez o de Michel de Montaigne. Me parece que estas dos líneas de análisis que aquí se proponen incluyen un conjunto de problemas teóricos que van de la lógica a la política, una alternativa a la visión canónica de la filosofía, y que tienen dos pilares fundamentales: a) En el ámbito general de la filosofía, lo relativo frente a lo absoluto. En la lógica, la predicación relativa frente a la predicación monádica de Aristóteles, o lo que es lo mismo, un lenguaje relacional frente a un lenguaje de cualidades. En la ontología, la reivindicación de la relación como categoría frente al protagonismo casi absoluto de la sustancia aristotélica. En la ética, el reconocimiento de la intersubjetividad, de los muchos iguales y de la presencia decisiva e inevitable del conflicto. En la metodología de la investigación y discusión, el relativismo significa, no el banal todo vale17, sino la negativa a solventar las diferencias por la vía de la imposición y supone también la decisión de permanecer en el terreno de la pluralidad. Conocida es la réplica platónica a la tesis de Protágoras: «El dios, no el hombre, es la medida de todas las cosas»18. b) En el ámbito de la filosofía política, la mayoría frente al experto, el sabio o el hombre prudente, lo cual significa defender la necesaria participación de todos en la virtud política, es decir, en la deliberación y la decisión, pues de ello depende, y no solo del progreso técnico, la pervivencia de las ciudades. Quiero concluir esta propuesta con una reflexión de J. Margolis, en el libro antes citado, que comparto plenamente. El relativismo no sólo ofrecería una alternativa a las posiciones epistemológicas y ontológicas dominantes, sino que «tendría el más profundo efecto sobre temas de política práctica y pública, especialmente en relación con la dirección autoritaria de los asuntos humanos y con la posición conceptual de cualquier verdad supuestamente invariante sobre la que descansa tal dirección». Esta propuesta para el estudio del pensamiento griego se basa en una doble convicción: primero, que entender la filosofía griega como una polémica, un diálogo entre iguales, es más acorde con la realidad y el fieri de esa filosofía, y segundo, que recuperar el pensamiento y los pensadores de la democracia, cuya primera realidad se alumbró en suelo griego, es un buen servicio que podemos prestar a nuestra sociedad. Un efecto colateral no secundario de esta propuesta es que no nos veremos abocados a la paradoja de colocar en el cesto de nuestras preferencias tanto el sistema democrático como sus más insignes adversarios. Sócrates, Platón y Aristóteles bajarán del pedestal a que han sido elevados y departirán, en pie de igualdad, con los pensadores de su tiempo, como realmente ocurría en la Atenas donde estos pensadores vivieron y filosofaron. Actividad a desarrollar por el estudiante: A través de la lectura, comprender de manera crítica y reflexiva el contenido, finalmente, como producto, presentar un comentario en texto escrito, desde su análisis personal respecto a la influencia de la filosofía antigua al mundo contemporáneo. Estimados estudiantes, desearles éxitos en su formación TRABAJO PRÁCTICO REALIZAR DOS ORACIONES DE CADA CONSONANTE ACORDE A ESTOS EJEMPLOS I U A Imillaxa utana anataski QI QU QA Qillwaxa qutana qamasiriwa Q’I Q’U Q’A Q’ipirixa q’ulu q’aspaniwa Q’ipisa, q’ulusa, q’aspasa thanthawa QHI QHU QHA Qhispilluxa qhantatina wali qhusqhuwa Qhispillusa, qhathisa, qhirisa, qhurisa … KI KU KA K’I K’U K’A KHI KHU KHA CHA CHI CHU CH’A CH’I CH’U CHHI CHHU CHHA TI TU TA T’I T’U T’A THI THU THA PI PU PA P’I P’U P’A PHI PHU PHA SI SU SA JI JU JA XI XU XA NUNCA AL INICIO JAXU LI LU LA LLI LLU LLA NI UN NA ÑI ÑU ÑA MI MU MA RI RU RA YI YU YA WI WU WA TRIPLE SILÁBICA: imillaxa ikiñana ikisji Utanxa umawa utji Anuxa aycha achuski QI QU QA Qillqirixa qillqañanti qillqaski Qurixa qullqisa qulluru imatawa Qamaqixa qarwa qallu katutayna Q’I Q’U Q’A Q’iwirinjiwa Q’illu q’ipixa Q’usu q’uñixa q’usñiwa Q’asirixa q’atawina q’asaski QHI QHU QHA Qhispilluxa qhipata qhiphuntitu Qhuthutuxa qhusqupacha qhumanti Qhalinchaxa qhantatita qhathuru sari Qhantatita qhalinchaxa qhathuru sari CONTINUAR … Kiwluxa kikpaki kirki ku ka K’i k’u k’a Khi khu kha Cha chi chu Ch’a ch’i ch’u Chhi chhu chha Ti tu ta T’i t’u t’a Thi thu tha Pi pu pa p’i p’u p’a phi phu pha si su sa ji ju ja xi xu xa nunca al inicio jaxu li lu la lli llu lla ni un na ñi ñu ña mi mu ma ri ru ra yi yu ya wi wu wa