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Feminismo en Latinoamerica.docx

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Feminismo en Latinoamérica
Feminism in Latin America
Paúl Calderón
Jean Carchi
Pablo López
Alvaro Nieto
Nube Solano
Sumario:
Introducción.- ¿Qué es el feminismo? - Impacto del feminismo en la sociedad.- Feminismo
e igualitarismo.- Feminismo y Antropología en Latinoamérica.- Feminismo, la igualdad
formal sobre la material.- Conclusiones.
Resumen:
El feminismo es un movimiento de carácter político y filosófico, que tienen como su objetivo
principal el reconocimiento y la protección de los derechos en pro del desarrollo de la mujer.
Este movimiento en los últimos años ha venido alcanzado mucha popularidad en todas las
sociedades, pues no existe sociedad alguna que no haya heredado la creencia errónea de que
la mujer siempre está subordinada al mando del hombre, creencia que se da desde la
antigüedad. El ideario feminista es fruto, como todas las ideas hegemónicas de un proceso
de identificación de reclamos y de prácticas políticas que han variado durante su historia, lo
que responde a un criterio antropológico, pues estos acontecimientos se dan en la lucha
constante de hombres y principalmente mujeres que se han adherido a las ideas feministas.
El concepto de igualdad no es suficiente para hablar de feminismo, tenemos que pensar en la
equidad y llevarla en ejecución para comprender al feminismo.
Palabras Clave:
Liberación, Feminismo, Sociedad, Derechos, Igualitarismo, Equidad, Género.

Estudiante de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad de Cuenca.
Estudiante de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad de Cuenca.

Estudiante de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad de Cuenca.

Estudiante de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad de Cuenca.
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Estudiante de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad de Cuenca.

Abstract:
Feminism is a motion of a political and philosophical nature, whose main objective is the
recognition and protection of the rights for the development of women. This motion in recent
years has been very popular in all societies, since there is no society that has not inherited the
mistaken belief that women are always subordinate to the command of man, a belief that has
been given since antiquity. The feminist ideology is fruit, like all hegemonic ideas of a
process of identification of claims and political practices that have varied during its history,
which responds to an anthropological criterion, since these events occur in the constant
struggle of men and mainly Women who have adhered to feminist ideas. The concept of
equality is not enough to talk about feminism, we have to think about equity and implement
it to understand feminism.
Keywords:
Liberation, Feminism, Society, Rights, Egalitarianism, Equity, Gender.
Introducción
El feminismo ha sido representado a través de la historia por distintos movimientos
sociales pertenecientes a distintas y variadas doctrinas, a pesar de que cada doctrina feminista
varia en cuanto a sus preceptos básicos de fundamentación, todas parecen asemejarse en el
fin, es decir, en buscar una transformación social en donde se eliminen las desigualdades y
las jerarquías que no permiten que el hombre y la mujer tengan exactamente los mismo
derechos y obligaciones.
El ejercicio de los derechos entre hombres y mujeres siempre ha estado en constante
discusión, con la aparición del feminismo, el movimiento social feminista ha logrado poco a
poco a través de la historia establecer una igualdad de derechos en relación con los hombres.
A lo largo del tiempo el debate sobre el pleno ejercicio de los derechos ha sido una
constante en la búsqueda de una armonía social. Sin embargo no ha sido un camino fácil de
trazar, ya que en ocasiones se ha pasado de un extremo a otro, esto es de un machismo
extremo a un feminismo igual, así mismo la mujer en la exigencia de sus derechos y la
sociedad en el afán de reivindicar a la mujer, ha plasmado en leyes; derechos y obligaciones,
que no mantienen un equilibrio con los derechos y obligaciones que también tienen los
hombres, es decir que a veces atentan contra los derechos de los hombres lo que viola el
principio constitucional de igualdad ante la ley.
En este sentido lo que se debe proponer es un amplio debate social, en donde se
diferencia claramente entre igualdad y equidad, porque las leyes deben propender la equidad
entre los derechos de hombres y mujeres. Porque respecto a la igualdad se debe hilar muy
fino ya que por naturaleza los hombres y mujeres somos diferentes, así mismo en ese contexto
establecer un complemento y ese complemento se da no entre iguales si no entre distintos
que en la convivencia diaria logran una relación de respeto a sus diferencias y de pleno
disfrute de sus coincidencias.
El feminismo busca la defensa de la mujer y su reconocimiento frente a una sociedad
eminentemente patriarcal, pero muchas de las veces se puede confundir esta necesidad de
reconocer a la mujer con la idea del igualitarismo, en el siguiente trabajo delimitaremos como
estos se diferencian y como el igualitarismo se encuentra totalmente separado de los
objetivos del movimiento feminista.
El ideario que sostiene al feminismo latinoamericano es fruto, como todas las ideas
políticas anti hegemónicas, de un proceso de identificación de reclamos y de prácticas
políticas que han variado durante su historia. La participación de comunidades, criollas e
indígenas en la lucha contra el colonialismo fue amplia, pero no reconocida, y el triunfo de
los liberales en la mayoría del continente no redundó en el reconocimiento de la igualdad de
las mujeres. El racismo heredado de la Colonia no permitió que las mujeres se reconocieran
como tales, sino las relegó a categorías ligadas tanto a la clase de procedencia como a la
pertenencia étnica: blancas, mestizas, indias y negras no compartían cosmovisiones ni
espacios sociales, sólo el maltrato masculino que, en el caso de las últimas, sumaba la
violencia machista y la violencia racista.
Además la perspectiva feminista a la disciplina antropológica ha motivado la atención
de especialistas interesados por relevar los giros epistémicos que esta ha traído consigo. A la
fecha se cuenta con varias obras que sintetizan la trayectoria de esta tendencia,
principalmente entre las comunidades antropológicas de habla inglesa. A partir de algunas
de las publicaciones más citadas, se puede reconstruir el camino que ha seguido desde la
conformación de la "antropología de la mujer”; hacia la "antropología feminista " sin obviar
la llamada "etnografía feminista".
Es en este contexto que incursiono en un acercamiento a la obra de cuatro autoras
emblemáticas para la conformación de la antropología feminista en Latinoamérica, tanto
desde la línea cronológica como desde una polémica que tiene resonancia en diversas
latitudes: la referida al interrogante acerca de si la antropología feminista es un enfoque, una
perspectiva teórica particular dentro de la disciplina, un método de investigación o está en
proceso de convertirse en una especialidad antropológica. Puede afirmarse que se está en una
interface en la que se abre la posibilidad de conformar una sub comunidad epistémica
caracterizada por aplicar en la investigación antropológica un punto de vista sustentado en la
teoría feminista y la perspectiva de género, ambas en continua renovación y diálogo -tanto
interno como externo- con otras posiciones que se interesan por analizar la diversidad
humana. La particularidad de la antropología feminista es centrarse en la articulación de esa
diversidad con distintos ordenadores que producen desigualdad y en el posicionamiento de
los sujetos que viven esa articulación frente a la hegemonía.
Ubico el contenido de esta exposición en un momento clave de la antropología
mexicana en el cual se fincó su derrotero, conduciéndola a su actual amplitud temática: el del
surgimiento de la llamada antropología crítica, protagonizada por un grupo de jóvenes
especialistas que desarrollaron una fuerte posición crítica frente a la práctica dominante de
la antropología hasta la década de 1970, calificándola de disciplina de Estado debido a su
clara identificación con el indigenismo y por ser el sustento de la política estatal en materia
de integración de la nación promovida desde los años anteriores a la revolución mexicana de
1910.
La estructura racial de los sujetos humanos el feminismo y l igualdad racial son de
carácter lustral, junto con los aportes Kantianos de la ilustración y la Universalización
axiológica, el imperativo categórico de Kant que consiste en la acción moral que es la misma
ley en su carácter racial. Las polémicas feministas están relacionadas con la polémica
política, no hay códigos alternativos que terminen con la doble moral, la aspiración de lograr
un código Universal con rangos políticos, históricamente ha evolucionado de la igual formal
a material que admite la exigencia de ambos sexos por la aplicación de los principios jurídicos
de la igualdad para tomar medidas de las desventajas en mujeres aplicando la inclusión.
Por la igualdad constitucional se hace referencia a la consideración del estado
paritario en el feminismo en materia de justicia que impida el desarrollo del estado de
inclusión feminista. Mediante procesos intelectuales de un modelo de estado comprensivo de
igualdad de género en términos de la política, la sociedad actual no es inclusiva de las
personas que lo componen, la marginación lo pone el mismo estado a la colectividad. El
avance del TJCE ha permitido con el tiempo la igualdad de género ha considere un auténtico
derecho fundamental, la democracia feminista y los aportes constituciones de la tradición
liberal e igualitaria aportan elementos para la mujer como: elección, reconocimiento,
superando los residuos que mantiene el estado social de algunos postulados indiscutidos entre
la igualdad y la libertad. Protección material en el convenio Europeo de los Derechos
Humanos. Se encuentra regulado en el art 14 del convenio europeo de los derechos humanos.
La traducción sin discriminación, sin distinción, de la versión francesa o inglesa y las
limitaciones con que se aplica el derecho de igualdad por el tribunal, que exige la no violación
de los derechos fundamental, en el ámbito europeo está garantizada una igual aplicación, que
limita el efecto directo de la igualdad.
1.- ¿Qué es el Feminismo?
El termino feminismo hace referencia a los movimientos de liberación de la mujer,
que a través del transcurso de la historia han ido adquiriendo diversas proyecciones, al igual
que otros movimientos de distintas materias, los movimientos feministas han generado
pensamiento y acción, justicia y práctica. El feminismo propugna un cambio en las relaciones
sociales existentes en busca de la liberación de la mujer (y también del varón) por medio de
la búsqueda de la eliminación de las jerarquías y desigualdades existentes entre ambos sexos.1
La historia del feminismo es la historia de mujeres que sólo han tenido paradojas que
ofrecer, no porque, como los críticos misóginos dirían, la capacidad racional de las
mujeres es deficiente o tienden por naturaleza a llevar la contraria, no porque el
feminismo no ha sido capaz de dotarse de una teoría y unas prácticas correctas, sino
porque históricamente el moderno feminismo occidental está constituido por las
prácticas discursivas de una política democrática que ha equiparado individualidad
con masculinidad.2
1.1.- La teoría feminista
La estructuras teorías feministas hablan, sobre todo, acerca de la cuestión de la
subordinación de las mujeres a los hombres: como surgió, como y porque se perpetua, como
podría cambiarse, y, a veces, como sería la vida sin ella. Las teorías a medio camino pueden
resultar menos dramáticas y considerar aspectos de relaciones de género con sectores
específicos de la vida social, tales como la educación, la familia, y la política misma. Las
teorías feministas tienen un doble propósito, en primer lugar servir de guías para la
comprensión de la desigualdad de género y posteriormente ser guías para la acción. Existen
desacuerdos dentro y entre las mismas teorías sobre quien puede o podría ser considerado
feminista y sobre cómo conseguir el cambio social.3
1
Susana Gamba, Diccionario de estudios de género y feminismos, (Buenos Aires: Editorial Biblos, 2007).
Cristina Borderías, Joan Scott y las políticas de la historia, (Barcelona: Icaria Editorial, 2006), p. 254.
3
Sandra Acker, Genero y educación: reflexiones sociológicas sobre mujeres, enseñanza y feminismo, (Madrid:
Nacrea, S.A. de Ediciones, 2000), p. 63.
2
1.2.- Diversidad de perspectivas feministas
Hay diversos tipos de feminismo que difieren por completo, tanto desde sus análisis
teóricos hasta su modelo de cambio social o su visión de la sociedad ideal. Un método de
categorización consiste en conceptualizar tres tipos principales de feminismo: 1) feminismo
liberal y moderado, 2) feminismo marxista o socialista, y 3) feminismo radical.4
El feminismo liberal sostiene que las mujeres deben tener las mismas oportunidades
y derechos que los hombres, básicamente quienes siguen el feminismo liberal creen en la
reforma del sistema desde dentro de lo mismo. El feminismo marxista o socialista considera
que la opresión de la mujer no es sino un caso de la opresión de clase, opresión que tiene su
origen en el capitalismo, las feministas marxistas señalan por ejemplo, hasta qué punto se
beneficia el sistema capitalista de la opresión de las mujeres en cuestiones como la
discriminación salarial. Por último el feminismo radical sostiene que la opresión de la mujer
se fundamenta en la biología, en concreto, en las diferencias biológicas entre los géneros y,
sobre todo, en el hecho de que solo las mujeres puedan tener hijos. 5
1.3.- La diferencia sexual como utopía
El proyecto político de la diferencia sexual aún no se ha resuelto como desvincular la
propia identificación de ciertas imágenes, formas de comportamiento y expectativas
constitutivas de la feminidad: es una teoría de la legitimación de las mujeres basada en un
uso estratégico de repeticiones deconstructivas. Es utópica en el sentido de a-tópica; por
ejemplo, aún no tienen un basamento, está en ningún lugar, pero apunta a un proceso de
resignación que ya ha empezado.6
1.4.- Entrevista Adjunta
El presente capítulo contará con la presentación de una entrevista adjunta realizada a
la Lcda. En Género Y Desarrollo, Blanca Crespo, quien se encargará de resolver muchas
4
Janet Hyde, Psicología de la mujer: la otra mitad de la experiencia humana, (Madrid: Ediciones Morata, S.L.,
1995), p. 81.
5
Ibíd., p. 81
6
Rosi Braidotti, Feminismo, diferencia sexual y subjetividad nómade, (Barcelona: Editorial Gedisa, S.A.,
2015), p. 196.
interrogantes en cuanto a los variados aspectos de análisis desde los cuales se puede abordar
un tema tan complejo como lo es el feminismo.
2.- Impacto del feminismo en la sociedad
En la actualidad el feminismo ha contribuido a la sociedad actual de manera que se
presenta en el ámbito público y privado. En el aspecto público lo podemos ver porque
reivindica la paridad y el derecho a la ciudadanía, en igualdad de condiciones entre ambos
géneros, que significa la posibilidad de decidir en igualdad con los hombres el destino del
mundo y el ejemplo de sociedad que deseamos para nuestro futuro(…). Pero el feminismo
también ha incurrido en lo privado, exigiendo derechos como la mayoría de edad de las
mujeres dentro del matrimonio, el derecho al divorcio, al aborto, al respeto y dignidad.7
El movimiento feminista como corriente de ideas políticas y filosóficas fue muy
cuestionado en Cuba porque sus objetivos atacaban el poder de los hombres. La
prensa cubana dirigida por ellos, salvo excepciones, mostraba muchas reminiscencias
para este modelo de cubana trasgresora pues suponía un ataque a la virilidad criolla
acostumbrada a que el papel de la mujer fuera el de objeto de belleza y sumisión.8
Uno de los principales aportes de las primeras feministas ha sido la construcción del
movimiento feminista internacional, la trascendencia de las fronteras y la puesta en común de
reivindicaciones de carácter social y político, pese a la diversidad y heterogeneidad en su
composición, la especificidad de sus luchas y la confluencia de diferentes tendencias al interior
del feminismo, como lo hace notar Mérola. La incorporación de las mujeres al movimiento
feminista tiene diferentes motivos, pero según ella, en general la adhesión se debe a una
reacción racional frente a unas condiciones económicas y sociales insoportables.9
“Los movimientos de mujeres en América Latina tienen como una de sus
características el hecho de haber formado parte de la izquierda y haberse originado en el seno
7
Causapié Lopesino, “La contribución del feminismo al desarrollo de la sociedad”, Psychosocial Intervention,
(Septiembre 1995): p. 103 - 106, vol. 4, Num.10.
8
Julio Cesar Gonzales, “Feminismo y Masculinidad: ¿mujeres contra hombres?”, Temas, (Abril 2005): p. 4 - 14,
vol. 37.
9
Giovanna Mérola, "Las mujeres: la mayoría marginada". Nueva Sociedad, (julio- agosto 1985): p. 114, Núm.
de las mujeres intelectuales. Sin embargo, en la medida en que estos movimientos han
evolucionado y crecido con una dinámica propia (…)”.10
Por otro lado, la presión y la acción política de las feministas, han conseguido una
serie de derechos y reconocimientos legales como que las mujeres puedan votar, puedan
estudias carreras superiores y por tanto, que puedan ser abogadas, medicas, políticas; que
puedan ejercer profesiones que se les estaba siendo vedadas por ser mujeres como el ser
conductoras, mineras y entre otras cosas más.11
2.1.- Investigación cuantitativa
Acompañando la investigación dogmática acerca del impacto que ha tenido el feminismo en
la sociedad latinoamericana tendremos la presentación de gráficos estadísticos que se han
obtenido luego de haber tabulado las respuestas de 20 encuestas realizadas en base a 5
preguntas que evalúan el impacto que ha tenido el feminismo en las personas de la ciudad de
Cuenca.
Estadística 1
10
Grace Prada,”El feminismo, un movimiento social alternativo” Repertorio Americano (Enero-Diciembre
2005): p. 36 - 40.
11
Oliva Blanco e Isabel Morant, El largo camino hacia la igualdad: feminismo en España: 1975- 1995 (Madrid:
Instituto de la Mujer ,1995), p. 132.
Estadística 1.- El resultado de la primera pregunta nos permite evidenciar que la mitad de
los encuestados tienen un conocimiento general acerca de que es el feminismo y que es lo
que busca a través de su doctrina.
Cree usted que el feminismo ha influido
en la sociedad
8%
29%
Si
63%
No
No se
Estadística 2
Estadística 2.- En este grafico nos podemos dar cuenta, de que la mayoría de las personas
son conscientes de que el feminismo ha sido un factor influyente en la evolución de la
sociedad.
DE QUE MANERA CREE QUE EL FEMINISMO
HA INFLUIDO EN LA SOCIEDAD
No se
15%
Mala
25%
Estadística 3
Buena
60%
Estadística 3.- De cierto modo como la población afirma que el feminismo ha sido un factor
en la evolución de la sociedad, la misma piensa que es un determinante positivo y que nos ha
hecho avanzar para bien.
CREE USTED QUE EL FEMINISMO HA
LOGRADO QUE LAS MUJERES
ALCANCEN EL PLENO EJERCICIO DE
SUS DERECHOS
No
30%
No se
5%
Si
65%
Estadística 4
Estadística 4.- La constante lucha de las mujeres por el querer obtener la equidad de derechos
a comparación de los hombres ha sido obvia, por lo cual esta lucha ha sido evidente para
nuestros encuestados que afirman que las mujeres han alcanzado el pleno ejercicio de sus
derechos.
Cree usted que el feminismo ha
conseguido reducir la conflictividad social
20%
10%
Si
No
70%
Estadística 5
No se
Estadística 5.- Como se puede constatar el feminismo ha logrado un avance para los
derechos de las mujeres, pero no ha logrado reducir la conflictividad social según la opinión
mayoritaria de nuestros participantes
3.- Feminismo e igualitarismo
En el sentido más básico y a la vez el más profundo del feminismo, lo que busca es
el reconocimiento en la teoría y en la práctica de los derechos de las mujeres, eliminar un
grupo social que se base en la dominación de los hombres sobre las mujeres. El feminismo
como ideología y práctica política tiene muchas corrientes, como la igualitarista, esta
corriente no es nueva y es una de las más aceptadas fuera del feminismo. Esta insiste en que
la diferencia sexual no se debe convertir en una desigualdad social, sin embargo es muy
difícil hablar de igualitarismo cuando se vive en una situación muy desigual, es por ello que
surge la necesidad del feminismo.
3.1.- ¿Por qué no igualitarismo envés de feminismo?
Tenemos que tomar en cuenta que el feminismo, es un discurso político que se basa
en la justicia. El feminismo es una teoría y práctica política articulada por mujeres que tras
analizar la realidad en la que viven toman conciencia de las discriminaciones que sufren por
la única razón de ser mujeres y deciden organizarse para acabar con ellas, para cambiar la
sociedad.12 De esa manera el feminismo se articula como una filosofía política y al mismo
tiempo como un movimiento social.
Si hablamos de igualitarismo, este concepto no
concuerda con los deseos del feminismo, puesto que el igualitarismo, no define un problema
específico, podría referirse a distintas cuestiones; consiste en considerar a cada ser humano
como igual, pero es necesario establecer la problemática para trazar objetivos claros, en este
caso hablamos de feminismo, puesto que este busca combatir la desigualdad de género. El
feminismo va más allá de igualar el acceso a oportunidades, tiene que ver con repensar las
instituciones y las estructuras patriarcales, con la liberación de la mujer de ciertos
condicionamientos que se le han impuesto en forma de roles de género, con la eliminación
de estereotipos sexistas y en general en una forma distinta de ser reconocidas.
12
Nuria Varela, Feminismo para Principiantes. (Barcelona: Ediciones B. S. A, 2008), p. 10.
El espíritu del feminismo es observado como una teoría de la justicia que ha ido
cambiando el mundo y trabaja día a día para conseguir que los seres humanos sean lo que
quieran ser y vivan como quieran vivir, sin un destino marcado por el sexo con el que hayan
nacido.13 En el fondo el feminismo no solo busca mujeres audaces, sino busca también que
el fundamental acto de valor de los hombres sea aceptar a las mujeres como seres humanos
libres, propietarios de su destino, capaces de ganarse la vida y para gozarla sin que su
condición sexual se lo impida. No se puede llamar igualitarismo porque no busca que todo
sea igual, que la mujer se adapte a las normas y reglas masculinas de la sociedad, sino que
cada una tenga sus propios derechos y libertades.
El desarrollo humano descansa en la creación de un entorno en el que las personas
puedan realizar sus opciones, y vivir en forma productiva y creativa de acuerdo con sus
necesidades e intereses14, por ello el feminismo se centra en una lucha por erradicar todo lo
que esta eminentemente controlado por hombres y que a su vez estos no permiten el correcto
desarrollo de las mujeres por su simple condición, el feminismo lo que busca es eliminar esa
arcaica concepción de que la mujer se debe al hombre y que tiene que adaptarse a las
condiciones que este le brinda para su desarrollo. La igualdad, que es considerada esencial,
implica una homogeneización estereotipada referida al sujeto o la subsunción al sujeto, la
alternativa que se presenta para sanar esta situación es la igualdad con equidad a partir del
principio ético de equivalencia. De este modo los sujetos son recíprocamente equivalentes
aún en desigualdad y en ese principio se sustenta la necesidad de establecer mecanismos y
fórmulas y procesos de equidad como vía de eliminación de desigualdades y de la opresión,
así como el ejercicio de la justicia en beneficio de la igualdad.15
El medio para logara la igualdad es la equidad de género, entendida como la justicia
en el tratamiento a mujeres y hombres de acuerdo a sus respectivas necesidades.16 Se trata de
superar el concepto de igualdad de oportunidades para llegar al de igualdad de resultados,
13
Ibid., p. 15.
Carmen de la Cruz, ´Bienestar, cuidados y derechos. El debate de desarrollo y las políticas pendientes´,
Feminismo, género e igualdad (2011): p. 217.
15
Marcela Lagarde y de los Ríos, El Feminismo en mi Vida. (Ciudad de México: Gobierno del Distrito Federal,
2012), p. 97.
16
Alba Carioso, Feminismo y Cambio Social en América Latina y el Caribe. (Buenos Aires: CLACSO, 2012), p.
115.
14
esta igualdad de resultados tiene por objetivo que las personas gozar y ejercer sus derechos,
páralo cual es necesario eliminar cualquier distinción, exclusión o restricción basada en el
sexo que pueda anular el goce o ejercicio de esos derechos.
Dentro del movimiento feminista es necesario eliminar las desiguales que cierto
grupo de mujeres pueden imponer, un claro ejemplo es la raza, sin embargo esto en cierto
punto e ha eliminado y ha existido una igualdad entre mujeres, pues al inicio en los grupos
feministas se incorporaron mujeres sin tener en cuenta raza y género a la vez. 17 En este
sentido si se puede hablar de igualitarismo, pero dentro del movimiento feminista, debido a
que dentro de las esferas de dicho grupo es necesario que exista una igualdad de
oportunidades entre las mujeres que lo integran, al contrario de lo que pasa en el exterior del
movimiento, el concepto de igualitarismo no basta para reconocer que las mujeres son
recíprocamente equivalentes a los hombres y viceversa.
4.- Feminismo y Antropología en Latinoamérica
Conceptualmente, la diferencia entre los sexos no implica desigualdad legal. Es
posible concebir a mujeres y hombres como legalmente iguales en su diferencia mutua. Pero
eso no ha sido el caso, al menos en la última década. Desde el punto de vista histórico, las
diferencias entre los sexos y la desigualdad legal están estrechamente igual ligados. ¿Por
qué? Porque la diferencia mutua entre hombres y mujeres se concibió como la diferencia de
las mujeres con respecto a los hombres cuando los primeros tomaron el poder y se erigieron
en el modelo de lo humanos. Desde, entonces la diferencia sexual ha significado desigualdad
legal n perjuicio de las mujeres. Esta desigualdad pudo haberse dado en contra del sexo
masculino si el parámetro de lo humano hubiese sido a la inversa18. Pero, esta empíricamente
probado que la jerarquización se hizo y se hace a favor de los varones. Es más en todas partes
y en la mayoría abrumadora de las culturas conocidas, las mujeres son consideradas de alguna
manera o de algún grado, inferiores a los hombres. Cada cultura hace esta evaluación a su
manera y en sus propios términos, a la vez que genera los mecanismos y las justificaciones
necesarias para su mantenimiento y producción.
17
Bell Hooks, El Feminismo es para todo el mundo. (Madrid: Traficantes de Sueños, 2000), p. 82.
Mercedes Olivera. Algunos problemas de la investigación antropológica actual, (México: nuestro tiempo,
1980), págs. 43-55.
18
Sin embargo, a pesar de que en cada cultura el grado de inferioridad, de las mujeres
con respecto a los hombres y los argumentos para justificarla puede ser distintos, todas las
culturas conocidas tienen algunos rasgos comunes. Lurdes ha identificado tres de estos:
primero, una ideología y su expresión en el lenguaje que explícitamente devalúa a las
mujeres dándole a ellas, a sus roles, sus labores, sus productos y su entorno social, menos
prestigio o poder el que se le da los hombres; segundo, significado negativos a tribuidos a
las mujeres y sus actividades a través de hechos simbólicos o mitos (que no siempre se
expresan de forma explícita); y tercero, tercero estructuras que excluyen a las mujeres de la
participación en diferentes aspectos19.
4.1.- Género y diferencia sexual
Pasaré ahora a presentar de forma igualmente sucinta el innegable aporte que hizo
Marta Lamas a la conformación de la antropología feminista en América Latina. Entre el
feminismo de la igualdad y el de la diferencia, así como por las obras de las feministas
radicales que pusieron en el centro de sus reflexiones el cuerpo y la sexualidad de las mujeres
como el locus sobre el que el patriarcado estableció su dominio, esta autora incursionó en el
estudio de la prostitución femenina como indicativa de ese locus. Este interés se ampliaría
más tarde, centrándose en la conformación de la diferencia sexual. En el camino, fue una
decidida introductora de las discusiones en torno a la categoría de género que circulaban en
el ámbito académico anglosajón. Su artículo "La antropología feminista y la categoría
género", publicado en 1986 en la revista Nueva Antropología, se convertiría en poco tiempo
en una referencia común entre las estudiosas del tema. En él caracterizó al género como una
categoría antropológica ubicada en el centro de la polémica naturaleza vs. Cultura,
particularmente porque da cuenta de las diferencias entre mujeres y hombres presentes en la
mayoría de las sociedades conocidas. Con ello se adentró en la discusión entre universalidad
y particularidad, referida a la evidencia de que en muchos casos esa diferencia es el
fundamento ideológico de la desigualdad entre mujeres y hombres. Para la autora, quizás la
mayor riqueza que aportaba el género en la época era lo que enunció como "el
desmantelamiento del pensamiento biologicista (tanto patriarcal como feminista) respecto a
19
Lourdes Méndez. Antropología feminista, (Madrid: síntesis, 2007), págs. 86-112.
la opresión femenina, ubicándolo en el registro 'humano', o sea, en lo simbólico…" (p. 196),
reconociendo que quedaban aún interrogantes sin responder, como el hecho de que la
posición compartida en las estructuras jerárquicas acercaba más a mujeres y hombres del
mismo rango, alejando decisivamente a unas mujeres de otras. Esto alertaba con respecto a
reconocer los alcances de la categoría de género para la investigación, evitando con ello
incurrir en planteamientos ideológicos en vez de analíticos.
Un desarrollo posterior de los dilemas planteados lo plasmó en otro artículo de
influencia innegable entre las especialistas: "Usos, dificultades y posibilidades de la categoría
de género". En él, Marta Lamas afirmó que el género "alude al orden simbólico con que una
cultura dada elabora la diferencia sexual, y esta, por su parte, remite al inconsciente, con lo
que alertaba sobre la tendencia que observaba en ese momento a establecer una dicotomía,
sexo-género, y una sinonimia, género=diferencia sexual”20. Con el amplio desarrollo que
hizo de estas consideraciones conceptuales, aportó un punto de referencia local a la
conformación de los estudios contemporáneos sobre la diversidad sexual.
Su profundo conocimiento del psicoanálisis, de la teoría social y de los avances
biomédicos la condujeron a ser crítica de la postura construccionista en torno al género que,
a fuerza de repetición y falta de lectura analítica, se convirtió en un lugar común para señalar
que todo lo que hace a mujeres y hombres es resultado de la acción sociocultural, sin reparar
en que el efecto de esta afirmación es devastador para el feminismo, pues si todo se explica
cómo construcción social, sin relevar el peso decisivo de la deconstrucción, se vuelve ineficaz
para la práctica política libertaria.
Este artículo aportó otra clave central: la pertinencia epistemológica de poner en
diálogo a autoras feministas y autores críticos del poder y la dominación, señalando así
caminos por los que transitan muchas antropólogas feministas contemporáneas.
4.2.- Cautiverio de las mujeres
20
Martha Lamas. Equidad entre géneros, (México: UNAM, 1997), p. 13.
Con la intencionalidad de contribuir al desarrollo de la antropología de la mujer, como
se designaba en esos años a la mirada particular de las especialistas cifrada en la dilucidación
del lugar que ocupaban las mujeres en diferentes culturas, tomando como referente
primordial la definición del género como hecho de la cultura, opuesto a la biología del sexo,
la autora analizó a las mujeres en los contextos en los que hipotético que se expresaba de
manera más clara la opresión a la que estaban sometidas. La autora acuñó el término de
cautiverio para caracterizar esa opresión, proponiéndolo como "la expresión político cultural
de la condición de la mujer…" en la sociedad patriarcal.
Para la elaboración de la tipología enunciada en el subtítulo del libro, tomó como eje
fundamental la sexualidad de las mujeres y su constreñimiento. A partir de la dominación
política ejercida por la sociedad patriarcal en torno al cuerpo y la sexualidad de las mujeres,
afirmó, se generan definiciones estereotipadas21 de estas, convirtiéndolas en tipos prescritos
que sintetizan las modalidades de la opresión vivida, desde su mayor idealización hasta la
más abierta exclusión. Estas modalidades se expresan en las categorías de madres posas,
putas, monjas, presas y locas, enfatizando la dimensión del cautiverio que cada una de ellas
sintetiza. Estos cautiverios tienen la particularidad de definirse en un espacio que, aunque
propio, no es exclusivo ni excluyente, pues las mujeres pueden ocupar más de uno a la vez.
Una vez hecho un recorrido pormenorizado de las mutuas implicaciones entre la
construcción teórica de los cautiverios y sus componentes, la autora destaca, en las
conclusiones del libro, el valor de la transgresión como recurso de las mujeres para vivir la
propia vida, transformar la sociedad y, por supuesto, convertirse en sujetos libres.
4.3.- Opresión de las mujeres indígenas
La opresión de la mujer en el sistema capitalista y sobre la explotación y opresión de
las mujeres indígenas en Latinoamérica, ambos íntimamente conectados entre sí. En el
primero se afirma que la particularidad de la condición de la mujer en el sistema capitalista
es su opresión, definiéndola como la forma de explotación capitalista que ejerce el hombre
21
Son definiciones que se fijan mediante su repetición frecuente, sus gestos, una frase, una formula
artística, etc.
sobre ella22 (Cursivas son del autor), para el sistema en general, su situación sería la de
explotada; pero, en el interior de las relaciones cotidianas sostenidas con otros trabajadores
explotados, estos reproducirían la explotación sobre las mujeres, lo que da contenido a lo que
llamó "opresión femenina" para distinguirla de la mera explotación económica.
Este juego entre explotación y opresión vincula al primer artículo con el segundo, en
el que aborda con detalle la situación de las familias indígenas que observó en su
investigación en algunas comunidades indígenas de Latinoamérica. A la luz de sus datos
etnográficos y etnohistóricos, desentrañó la relación entre formas de trabajo coloniales y
modernas, feudales, no feudales y capitalistas, como el fundamento de la dependencia de las
comunidades indígenas con respecto a las fincas cafetaleras. La autora consideró que la aguda
explotación de las mujeres en ellas se incrementaba por el paternalismo presente tanto en las
relaciones laborales como sociales, ejemplificado con el compadrazgo establecido entre
patrones y trabajadores. Otro hecho crucial fue identificar la reproducción de la marginación,
pues detectó un número considerable de hijos -resultado de violaciones o relaciones sexuales
forzadas entre patrones y trabajadoras- que no eran reconocidos por sus procreadores y, por
las condiciones de su nacimiento, tampoco tenían lugar en los hogares indígenas.
Mercedes Olivera examinó en detalle las formas de explotación a que estaban
sometidas esas mujeres, describiendo y puntualizando sus expresiones a través del trabajo
productivo, del trabajo reproductivo, del trabajo doméstico, pero, sobre todo, mediante los
"servicios" de todo tipo que debían prestar a los patrones, incluidos los sexuales. Denunció
la permanencia del derecho de pernada, con lo cual evidenció la diferencia entre la
explotación compartida con los hombres y la opresión específica vivida por las mujeres, pues
ellos no estaban sujetos a esa forma de vejación.
Aun cuando no lo enunció en esos términos, este artículo de Mercedes Olivera abrió
las puertas a la caracterización de las mujeres indígenas como depositarias de una triple
opresión: de género, de clase y étnica. Esto abrió paso a considerar las indígenas como
mujeres con una particularidad histórica, social, cultural y económica que requería de un
22
Mercedes Olivera. Algunos problemas de la investigación antropológica actual, (México: nuestro tiempo,
1970).
andamiaje conceptual propio, que la autora sustentó en una lectura marxista de las relaciones
de producción y reproducción atravesadas por las consecuencias de la situación colonial que
precedió y acompañó al capitalismo en México.
4.4.- Participación política y re conceptualización democrática
Otro de los temas principales de la agenda del movimiento es la lucha por la
participación igualitaria en todos los espacios de toma de decisiones políticas, en los cuales
las mujeres están claramente sub-representadas. Dentro de la lucha por el ejercicio pleno de
la ciudadanía política de las mujeres se sitúan la demanda de “cuotas” en las elecciones de
representantes y la formación de líderes sociales y comunitarios para su acceso a los distintos
niveles institucionales, desde los gobiernos municipales hasta los parlamentos.
Sin embargo, las estrategias del movimiento por la equidad trascienden el objetivo de
la mayor presencia de mujeres en política para reivindicar más bien cambios en las agendas
políticas de los países e incluso cambios en la propia concepción dominante de la política y
la democracia, que actualmente continúa siendo generadora de políticas neoliberales,
militaristas y fundamentalistas.
Frente a estas políticas que impiden la construcción de ciudadanías verdaderamente
democráticas, desde algunos sectores del movimiento se defiende una propuesta
de Democracia Radical que, en palabras de Gina Vargas, supone “recuperar la democracia
no sólo como sistema de gobierno, sino como una forma de organización de la vida social,
tanto en los niveles materiales como simbólicos, en lo público como en lo privado, en lo local
como en lo global"23.
5.- Feminismo, la igualdad formal sobre la material
El feminismo de la igualdad tiene sus raíces en la ilustración, de estructuras racionales
de los sujetos humanos, los sujetos tienen algo en común más relevantes que sus contrastes,
la ética Kantiana le dio su expresión más elaborada que la de la ilustración. La ilustración
supuso la exigencia de Universalización ética, moral, no se calificaba por la calidad del
contenido bueno sino por sino por poder o no someterse a la prueba. Y en el imperativo
23
Gina Vargas. Antropología en latinoamericana, (México: UNAM, 1996), págs. 13-34
Categórico de Kant la bondad moral de una acción consistía en la motivación de la buena
voluntad y que el sujeto ilustrado es un sujeto autónomo y así la clave de la moralidad es la
Ley y su carácter racional es la formalidad es decir que sea legal para todo el sujeto racional.
El feminismo de la igualdad tiene raíces ilustradas y en la polémica actual se
fundamenta en bases Kantianas, las polémicas sobre éticas feministas están estrechamente
relacionadas con las polémicas políticas, en lo fundamental no es que las mujeres propongan
códigos alternativos que caracterices especiales, características éticas, que pueda haber
normas universales24 con el objetivo de terminar con el doble código de la moralidad y a su
vez aplicar un código universal, considerándose en sí mismo un valor, con un rango político
superior. Por la perspectiva histórica ha evolucionada desde la igualdad puramente formal a
un concepto material, así surgen las aspiraciones igualitarias desde los siglos XVII, al
principio jurídico de igualdad tiende a quedar subsumido en el de legalidad y se considera
legal aquellas que la ley considera como tales como mujer, negros, y otros grupos raciales
constituyen una laguna de del concepto de igualdad; por ejemplo, Rousseau, Hegel. Kant
defiende la exclusión de las mujeres en la participación de la vida política, desde las teorías
feministas la igual se ha visto como una reparación jurídica para dar un trato igualitario tanto
al hombre como a la mujer y por otro lado la igualdad materia permite admite la existencia
de ambos sexos y toma las medidas necesarias para responder a las desventajas que
experimentan las mujeres para ello la inclusión ha sido el trato igual.25
5.1.- Igualdad y Constitución
El estado social puede integrar las posibilidades de construcción del Estado paritario
que se pone desde el feminismo, las exigencias del estado social en materia de justicia e
igualdad impidan el futuro el desarrollo del modelo de este estado sin integrar una parte
feminista. Por otra parte, desde el feminismo de la igualdad se ha presentado mediante
procesos intelectuales de racionalidad feminista un modelo de estado comprensivo de
igualdad de género en términos de rentabilidad política y mayor bien estar social; a diferencia
del estado feminista y el estado social es comprensivo de una totalidad que se manifiesta
24
Celia Amoros, 1994. Feminismo Igualdad y diferencia. México. Universidad Nacional Autónoma de México.
Ana Sánchez Urrutia, Nuria Pumar Beltrán, 2013. Análisis Feminista del Derecho: España. Universidad
Barcelona.
25
terminológicamente inclusiva de todas las personas que lo componen una sociedad, esto no
quiere decir que la sociedad actual es inclusiva de toda las personas que lo componen y damos
por conocido las marginaciones que pone el mismo estado social respecto a los colectivos. Y
así también las relaciones entre el femi9nismo y el psicoanálisis en Francia que genera el
feminismo activista anglosajón, se revindica un lenguaje específico de género. Proceso que
no permite el avance de la igualdad material, estas directivas estas importantes judicial del
TJCE ha permitido con el tiempo la igualdad de género se considere un auténtico derecho
fundamental en el Art 119 se modifica por el tratado de Ámsterdam donde se desarrolla con
mayor amplitud la igualdad de género, pero existen exigencias imprescindibles para la
integración de la teoría feminista en el estado y en el estado social de derecho26 reconoce sin
embargo, que la democracia feminista comparte con la social democracia la conexión entre
la sociedad civil y el estado y su modelo de democracia es participativa, la democracia
feminista retomando las constituciones de la tradición liberal e igualitaria aportaría elementos
para la mujer como: elección, participación, distribución de la riqueza y reconocimiento, para
ello sería necesario superar los residuos que mantiene el estado social acerca de algunos
postulados indiscutidos respeto de la relación entre la igualdad y la libertad. El feminismo
no contiene una teoría del estado, pero si del poder, el feminismo ha podido perfilar a lo largo
de la historia el patriarcado ha ejercido de caracterización social y tiene efectos en relaciones
sociales sexualmente diferenciados, sin instrumentos de perpetuación demuestra que las
relaciones sexuales son relaciones de perpetuación, pero la teoría del estado exige algo más
la voluntad de imponerse políticamente y dominar al otro; En relación al estado miembro de
la unión supone un impórtate avance en la legislación interna de los Estados pero que no han
merecido la atención del legislador.
Conclusiones
El feminismo representado a través de sus diferentes movimientos y variadas
doctrinas existentes, busca siempre un mismo fin, el cual es, la liberación de la mujer del
yugo del hombre, representado a través de las injustas desigualdades de género que sufre el
sexo femenino en comparación con el sexo masculino.
26
Luisa Balaguer, 2005. Mujer y Constitución. La constitución Jurídica del género: Universidad de Salamanca.
El feminismo en la sociedad ha tenido un gran papel a través de la historia, ya que
por estos movimientos la mujer ha ido poco a poco consiguiendo que se respeten sus
derechos. Este movimiento ha contribuido de forma positiva a la sociedad haciéndola
evolucionar con respecto de su forma de pensar hacia las mujeres, haciendo que ahora las
mujeres se encuentren en igualdad de condiciones que los hombres, para así poder avanzar,
estando cada día más cerca de una armonía entre ambos géneros.
El feminismo tiene su objetivo claro en reconocer y defender los derechos de la mujer,
basándose en términos de justicia y así eliminar las relaciones en las que exista una total
dominación por parte de los hombres, el igualitarismo si bien busca reconocer a todos como
iguales, este hace que las mujeres se adapten a las condiciones creadas e impuestas por los
hombres, desconociendo así la diferencia existente entre hombres y mujeres,; la equidad aquí
es lo más importante puesto que si hablamos de equidad estaríamos reconociendo las
desigualdades, que sí, existen entre hombres y mujeres, y estaríamos aceptando una nueva
forma de relacionarnos basándonos en el respeto y en la no discriminación, es necesario
eliminar de nosotros la igualdad de oportunidades, y referirnos a la igualdad de resultados,
puesto que en la igualdad de oportunidades solamente se garantiza el acceso de las mujeres
a oportunidades impuestas por los hombres, en cambio en la igualdad de resultados, nos
encontraríamos frente a un equitativo desarrollo.
Con la ayuda de los análisis de los autores mencionados anteriormente hemos podido
llegar a concluir que el feminismo en Latinoamérica es el resultado de los golpes sistemáticos
de la prepotencia blanca y mestiza, la discriminación económica, la marginación social, la
exclusión de la educación formal y de los sistemas de salud, son temas de la teoría feminista
latinoamericana contemporánea, porque por motivos sexistas todas las mujeres los sufrieron
y sufren de algún modo, sólo que las feministas blancas no los han enfrentado en su
descarnada versión racista y colonialista. La participación femenina en la larga tradición de
resistencias indias y luchas populares está dando una nueva voz al feminismo
latinoamericano.
A pesar de estas dificultades, el antirracismo feminista contemporáneo comparten la
idea de demarcar la cuestión racial y sexual en la configuración de la caracterización de la
violencia contra las mujeres y en el estudio de qué es la democracia para las mujeres, así
como en el compromiso de evidenciar el mecanismo que mantiene las desigualdades y los
privilegios entre las mujeres blancas y las indias y las negras, entre las heterosexuales y las
lesbianas.
La igualdad material formal en el feminismo desde tiempos remotos ha sido
discriminatoria, pero desde la ilustración y la formula Kantiana se ha tratado de incluir a la
mujer, buscando normas que lo regulen este hecho, pero se encuentra con problemas de
carácter social y político el estado desde el ámbito social garantiza el trato igual de ambos
géneros, pero no es posible en lo absoluto ya que el mismo estado la discrimina en ocasiones,
para lo cual existe la protección materia por parte del convenio europeo de los derechos
humanos que protege y garantiza la igualdad sin obstante es imposible erradicar la
discriminación de género en su totalidad.
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