DIABETES MELLITUS DEFINICION La diabetes es una enfermedad crónica que se origina porque el páncreas no sintetiza la cantidad de insulina que el cuerpo humano necesita, la elabora de una calidad inferior o no es capaz de utilizarla con eficacia. La insulina es una hormona producida por el páncreas. Su principal función es el mantenimiento de los valores adecuados de glucosa en sangre. Permite que la glucosa entre en el organismo y sea transportada al interior de las células, en donde se transforma en energía para que funcionen los músculos y los tejidos. Además, ayuda a que las células almacenen la glucosa hasta que su utilización sea necesaria. En las personas con diabetes hay un exceso de glucosa en sangre (hiperglucemia), ya que no se distribuye de la forma adecuada. Noemí González, secretaria de la Sociedad Española de Diabetes (SED) y especialista en Endocrinología y Nutrición del Hospital La Paz, de Madrid, explica que la glucosa elevada puede ser perjudicial "para todo el organismo, pero principalmente para el corazón, el riñón y las arterias, por lo que las personas que tienen diabetes y no lo saben o no la tratan tienen más riesgo de problemas renales, infartos, pérdida de visión y amputaciones de miembros inferiores". ETIOLOGIA Según el estudio di@betes, la incidencia de diabetes en España es de 11.58 casos por cada 1.000 personas al año. Es decir, cada día se producen 1.057 nuevos casos. El porcentaje actual de personas con diabetes (prevalencia) según este mismo estudio es del 13.8 por ciento. "Lo que es más importante es que un 6 por ciento de ellos no lo saben (diabetes no diagnosticada)". CAUSAS Luis Ávila, vocal de la Junta Directiva de la SED, apunta que "no se conoce la causa exacta de la diabetes, entre otras cosas porque hay muchos tipos diferentes". De hecho, el momento de aparición de la enfermedad, las causas y los síntomas que presentan los pacientes dependen del tipo de diabetes: Diabetes tipo 1 Aparece generalmente en niños, aunque también puede iniciarse en adolescentes y adultos. Suele presentarse de forma brusca y muchas veces independientemente de que existan antecedentes familiares. Se produce una destrucción de las células que producen la insulina en el páncreas (las células beta) por autoanticuerpos. "Es decir, el organismo ataca a sus propias células como si fueran extrañas (como ocurre en la enfermedad celíaca, y en otras enfermedades autoinmunes)", aclara González. El mecanismo inicial que induce la aparición de estos anticuerpos no está totalmente identificado y es muy complejo. Se investiga si el origen está, según Ávila, en "una predisposición genética que, debido a diferentes factores ambientales, produce esa respuesta autoinmune que destruye esas células". Diabetes tipo 2 Surge en la edad adulta, su incidencia aumenta en personas de edad avanzada y es unas diez veces más frecuente que la tipo 1. En ella se produce una disminución de la acción de la insulina, de forma que, aunque haya mucha, no puede actuar. González indica que se da "un componente mixto: por un lado, hay menor insulina en el páncreas y, por otro, esta insulina funciona peor en los tejidos (la denominada resistencia a la insulina)". "Su principal causa es la obesidad porque el tejido graso produce determinadas sustancias que disminuyen la sensibilidad de los receptores de la insulina", agrega Ávila. Puesto que la obesidad ha crecido de forma muy significativa en España, también lo ha hecho este tipo de diabetes. Diabetes gestacional Durante el embarazo la insulina aumenta para incrementar las reservas de energía. A veces, este incremento no se produce, lo que puede originar una diabetes gestacional. Suele desaparecer tras el parto, pero estas mujeres tienen un alto riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 a lo largo de su vida. FACTORES DE RIESGO NO MODIFICABLES • Edad. La prevalencia de DM2 aumenta a partir de la mediana edad, y es mayor en la tercera edad. • Raza/etnia. El riesgo de desarrollar DM2 es menor en individuos de raza caucásica que en hispanos, asiáticos, negros y grupos nativos americanos (indios, alaskeños, hawaianos, etc.), que además presentan una evolución más rápida a diabetes mellitus (DM) • Antecedente de DM2 en un familiar de primer grado. Los individuos con padre o madre con DM2 tienen entre dos y tres veces (cinco o seis si ambos padres presentan la condición) mayor riesgo de desarrollar la enfermedad. • Antecedente de DM gestacional. Las mujeres con antecedentes de DM gestacional tienen alrededor de 7,5 veces mayor riesgo de DM2 en comparación con las mujeres sin la condición. • Síndrome del ovario poliquístico. Este síndrome se ha asociado a alteraciones en la regulación de la glucosa en diferentes poblaciones; en Estados Unidos hasta un 40 % de las mujeres con síndrome del ovario poliquístico tiene alterada su regulación de la glucosa a los 40 años, y un metaanálisis reveló aproximadamente tres veces mayor riesgo de DM gestacional en las mujeres con dicho síndrome. FACTORES DE RIESGO MODIFICABLES • Obesidad, sobrepeso y obesidad abdominal. La obesidad (índice masa corporal [IMC] ≥ 30 kg/m2 y sobrepeso (IMC de 25-30 kg/m2) aumentan el riesgo de intolerancia a la glucosa y DM2 en todas las edades. Actúan induciendo resistencia a la insulina. Más del 80 % de los casos de DM2 se puede atribuir a la obesidad, y su reversión también disminuye el riesgo y mejora el control glucémico en pacientes con DM establecida • Sedentarismo. Un estilo de vida sedentario reduce el gasto de energía y promueve el aumento de peso, lo que eleva el riesgo de DM2. Entre las conductas sedentarias, ver la televisión mucho tiempo se asocia con el desarrollo de obesidad y DM. La actividad física de intensidad moderada reduce la incidencia de nuevos casos de DM2 (RR: 0,70; IC del 95 %: 0,58-0,84), independientemente de la presencia o ausencia de intolerancia a la glucosa, como han demostrado diversos estudios. • Tabaquismo. El consumo de tabaco se asocia a un mayor riesgo de DM2 dependiente dosis (cuantos más cigarrillos, mayor riesgo) según un metaanálisis de 25 estudios que analizan la relación. Dejar de fumar puede reducir el riesgo de DM. El beneficio es evidente cinco años después del abandono, y se equipara al de los que nunca fumaron después de 20 años. • Patrones dietéticos. Una dieta caracterizada por un alto consumo de carnes rojas o precocinadas, productos lácteos altos en grasa, refrescos azucarados, dulces y postres se asocia con un mayor riesgo de DM2 independientemente del IMC, actividad física, edad o antecedentes familiares. El riesgo fue significativamente mayor, entre los sujetos que consumen esta dieta y son obesos (IMC ≥ 30 kg/m2 frente a < 25 kg/m2). En contraste, aquellos que siguen una dieta caracterizada por mayor consumo de verduras, frutas, pescado, aves y cereales integrales tienen una modesta reducción del riesgo. SÍNTOMAS Entre los posibles síntomas de una elevación de la glucosa se encuentran los siguientes: Mucha sed (polidipsia). Sensación de mucha hambre (polifagia). Necesidad de orinar continuamente, incluso de noche (poliuria). Pérdida de peso, a pesar de comer mucho. Cansancio. Visión borrosa. Hormigueo o entumecimiento de manos y pies. Infecciones fúngicas en la piel recurrentes. Si la glucosa sube despacio, de forma progresiva (en general, en la diabetes tipo 2), pueden pasar años hasta que comiencen los síntomas, y por ello la enfermedad puede pasar inadvertida. "Que no duela no quiere decir que no haga daño, y de ahí la importancia del diagnóstico precoz para prevenir la aparición de complicaciones". PREVENCIÓN En la actualidad no es posible prevenir la diabetes tipo 1, a pesar de los múltiples intentos que se han hecho. La diabetes tipo 2, que es la más frecuente, sí se puede prevenir. Puesto que la causa más importante es la obesidad, "todas las acciones que tengan que ver con la prevención de la obesidad -evitar el sedentarismo, la comida basura, las bebidas azucaradas...- van a tener un resultado positivo", quien afirma que se sabe "que un estilo de vida saludable reduce en un 80 por ciento las posibilidades de tener diabetes tipo 2". Una vez que se ha diagnosticado la enfermedad, hay que prevenir la aparición de complicaciones micro y macrovasculares. El seguimiento del tratamiento prescrito, así como de las recomendaciones dietéticas y de actividad física es fundamental para evitar complicaciones como las cardiovasculares, las renales, la retinopatía diabética o el pie diabético. Además, se aconseja la realización de revisiones periódicas, entre las que destacan las siguientes: Fondo de ojo. Análisis de la función renal. Revisiones de los pies. Electrocardiograma. Medición de la presión arterial. Las personas con diabetes también deben estar atentas a la aparición de hipoglucemia (bajo nivel de glucosa en sangre). Actualmente se considera que una persona tiene una hipoglucemia cuando su nivel de azúcar en sangre es menor de 70 mg/dl. Es la complicación aguda de la diabetes más frecuente y puede aparecer en multitud de circunstancias: Dosis de insulina excesiva. Insuficientes hidratos de carbono en las comidas. Comidas retrasadas en el tiempo. Ejercicio extra para la dosis de insulina administrada. Algunos antidiabéticos orales también pueden causar hipoglucemia. Administración de la insulina en músculo en lugar de en tejido subcutáneo. Errores en la administración de insulina (administrar insulina rápida en lugar de retardada o errores de dosis). Bañarse o ducharse con agua muy caliente poco después de haberse pinchado la insulina. Entre las medidas para prevenir la hipoglucemia cabe citar la realización de un mayor número de controles de glucemia durante el día, sobre todo si se ha hecho ejercicio físico, así como la planificación con antelación del ejercicio físico que se va a realizar para poder ajustar la insulina que se va a administrar y los hidratos de carbono que se van a comer. En este sentido, los expertos recalcan que nunca se debe administrar la insulina sin haberse hecho un control de glucemia. ¿Cómo medir los niveles de glucosa? Existen diversas formas de medir la glucosa. Para la práctica de deporte pueden resultar especialmente útiles los medidores continuos de glucosa (MCG) implantables, que constan de un pequeño sensor que va implantado en el antebrazo y un transmisor que envía los datos a una aplicación que el paciente instala en su móvil. Estos dispositivos proporcionan resultados en tiempo real, que además se pueden descargar en otros móviles. También permiten programar alarmas que se activan cuando el paciente tiene niveles próximos a la hipoglucemia y ofrecen la posibilidad de llevar un registro de las glucemias y analizar como la alimentación o la actividad física inciden en ellas. DIAGNÓSTICO El diagnóstico de la diabetes se realiza midiendo los niveles de glucosa en la sangre. Se trata de pruebas que puede realizar el médico de atención primaria. Ávila explica que solo existen 4 formas de diagnosticar la diabetes: Glucemia basal (en ayunas) mayor de 126 mg/dl Hemoglobina glucosilada mayor de 6,5 por ciento Curva de glucemia con 75 g de glucosa mayor de 200 mg/ dl Glucemia al azar (en cualquier momento del día) mayor de 200 mg/dl con síntomas típicos Todos ellos deben ser confirmados en una segunda ocasión menos el último, que se ratifica por los síntomas. TRATAMIENTOS El tratamiento de la diabetes se basa en tres pilares: dieta, ejercicio físico y medicación. Tiene como objetivo mantener los niveles de glucosa en sangre dentro de la normalidad para minimizar el riesgo de complicaciones asociadas a la enfermedad. La insulina es el único tratamiento para la diabetes tipo 1. hoy en día solo puede administrarse inyectada, ya sea con plumas de insulina o con sistemas de infusión continua (bombas de insulina). "Es preciso ajustar la administración de insulina a lo que la persona come, la actividad que realiza y sus cifras de glucosa, por lo que el paciente debe medirse la glucosa de forma frecuente, mediante el uso de glucómetros (pinchándose los dedos) o con sensores de glucosa interticial (alguno ya está financiado en varias comunidades autónomas), de forma más sencilla y menos dolorosa". La diabetes tipo 2 tiene un abanico terapéutico más amplio. En este caso, a diferencia de los pacientes con diabetes tipo 1, no siempre va a ser precisa la administración insulina. Adoptando un estilo de vida saludable y perdiendo peso, los niveles de glucosa pueden normalizarse. Junto a ello, añade la endocrinóloga, "el uso de uno o más fármacos que ayuden a que la insulina funcione mejor van a ser la mejor opción de tratamiento". Según Ávila, el fármaco que se prescriba "dependerá fundamentalmente de las características clínicas del paciente". Los grupos terapéuticos disponibles son los siguientes: Biguanidas, de las cuales solo se utiliza la metformina. Inhibidores de la alfa decarboxilasa. Sulfonilureas. Inhibidores de la enzima DPP-4. Antagonistas de SGLT-2. Agnoistas de GLP-1. Insulinas. CUIDADOS DE ENFERMERIA La importancia del control de la glucemia para reducir las complicaciones en el sujeto diabético se ha demostrado claramente en estudios prospectivos a largo plazo, aleatorios y de intervención. El primer objetivo del control de la glucemia en la mayoría de los diabéticos debe ser disminuir la hemoglobina glicosilada a menos de dos puntos porcentuales por arriba del límite superior de lo normal, además, la intensidad del tratamiento debe individualizarse y ajustarse en cada caso. 1. Educar al paciente diabético es crucial para garantizar el éxito de todas las formas terapéuticas. 2. Garantizar un régimen de insulina de múltiples componentes o hipoglicemiantes orales, combinados o separados, en esquemas que fomenten la normoglucemia del paciente. 3. Fomentar un equilibrio entre el consumo de alimentos, la actividad física y la dosis del medicamento. 4. Familiarizar al paciente con el auto monitoreo de la glucosa sanguínea (SMBG), que reemplazó a la prueba de orina como método de control. 5. Es necesario incentivar la comunicación entre el paciente y el personal del área de la salud. 6. Es imprescindible el apoyo psicológico. 7. Fomentar la reducción en el consumo de calorías tendiente a minimizar la producción hepática de glucosa. 8. El ejercicio constituye la piedra angular en el tratamiento del paciente diabético tipo 2, pues disminuye la resistencia a la insulina, el peso corporal, los perfiles lipídicos y otros factores de riesgo cardiovascular. Referencias Bibliográficas https://www.revista-portalesmedicos.com/revista-medica/cuidados-de-enfermeriadiabetes/2/ https://cuidateplus.marca.com/enfermedades/digestivas/diabetes.html http://www.msal.gob.ar/ent/index.php/informacion-para-ciudadanos/diabetes https://redgdps.org/gestor/upload/GUIA2016/P3.pdf