Subido por iktysinteriores

espacios publicos y uso de sig

Anuncio
LOS ESPACIOS PÚBLICOS EN UN ENTORNO DE SIG
GUERRERO LLADÓS, M.
Departamento de Geografía y Sociología
Universidad de Lleida
Plaça Víctor Siurana, nº1, 25003 Lleida
[email protected]
RESUMEN
Este artículo expone un modelo para la gestión del medio urbano y especialmente el de
los espacios públicos mediante el uso de los Sistemas de Información Geográfica. El propósito
es simplificar la realidad en una estructura de datos que sirva para la obtención de un modelo
básico a partir del cual se almacene y se gestione la información de dichos espacios.
La autora del trabajo reivindica la importancia de estos espacios en la gestión de los
gobiernos locales. A menudo el desarrollo de un proyecto SIG en un ayuntamiento se constituye
en el área de recaudación o planificación urbana, y no se integran los espacios públicos porque
sobre ellos no hay un beneficio económico directo. Sin embargo, sostenemos que éstos espacios
deben ser implantados en un SIG para mejorar su gestión y de esta forma contribuir, en buena
parte, al bienestar de los ciudadanos, a la seguridad y a la imagen de la ciudad.
Palabras clave
Modelo de datos, espacio público, SIG urbano.
ABSTRACT
This article proposes a model for managing the urban environment in general, and its
public spaces in particular, employing Geographic Information Systems. The aim of the
proposal is to simplify reality through the creation of a data structure and a basic model in
which information about these spaces can be stored and managed.
The authoress of this project wants to highlight the importance of public spaces in the
management of municipalities. GIS implementation at the local level (i.e. in town halls) tends to
take place basically in tax collection and urban planning matters, and not in issues related to
public spaces, probably because they do not generate direct economic gains. However, these
spaces must also be implemented with GIS technology if they are to see their management
improved, something that would contribute to the aim of obtaining better living conditions for
citizens, and a more secure and beautiful city.
Keywords
Data models, public space, urban GIS
1. DEFINICIÓN DE ESPACIOS PÚBLICOS
Sin entrar en detalle sobre este apartado dada la extensa bibliografía existente
vamos a definir los espacios públicos en este artículo como aquellos espacios que son
de accesibilidad libre para los ciudadanos para su ocio pero también para su movilidad
por la ciudad. Esto significa que no tan solo se tienen presente los espacio verdes como
plazas o jardines sino también las propias calles que sirven como ejes de transporte
1583
EL ACCESO A LA INFORMACIÓN ESPACIAL Y LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS GEOGRÁFICAS PÁG. 1583-1592
rodado y peatonal. Así pues, el conjunto de espacios libres que integran espacios verdes,
plazas, calles o canales son a nuestro modo de ver espacios libres que se constituyen
como imprescindibles para la calidad de vida humana y esenciales para el buen
funcionamiento de los núcleos urbanos.
2. LOS ESPACIOS VERDES EN UN ENTORNO DE SIG
La complejidad de la realidad puede ser simplificada para mejorar nuestro
conocimiento sobre ella. Para ello es recomendable el uso de modelos que representen
el espacio y nos permitan mejorar nuestra metodología de trabajo. Pero previamente a
todo trabajo debe de haber un planteamiento teórico que nos permita establecer cuales
son realmente las funciones que debe cumplir el modelo de datos, a quien va dirigido y
para qué.
Este artículo expone un modelo para la gestión del medio, y más especialmente de
los denominados espacios públicos. La gestión del territorio recae sobre distintas
administraciones en función de la estructura administrativa del territorio. Sin embargo,
la información sobre éste se adquiere en primer lugar a través de las entes locales. Ellas
adquieren un especial protagonismo en la recolección de los datos y ello justifica
nuestra voluntad por plantear un modelo que se adecue a dichas entidades.
El trato preferente de este artículo hacia los espacios públicos es fruto de la
ausencia de tratamiento en la gestión de estos espacios por parte del gobierno de los
municipios desde una perspectiva de SIG. Raramente se encuentra un modelo de datos
para integrar los espacios públicos en un SIG para su posterior análisis, mantenimiento
y evaluación. Consideramos que es un deber del gobierno local plantearse políticas de
actuación y asumir el rol de promover y gestionar dicho espacio.
3. LA FUNCIÓN DEL ESPACIO PÚBLICOS Y SU PROTECCIÓN
El debate sobre la preservación de los espacios públicos, y de las zonas verdes,
giran alrededor de tres grandes temáticas. Aquellos que defienden dichos espacios por
motivos ético-estéticos, otros por motivos científico-educacionales y por último los que
defienden la preservación de la calidad de vida del ciudadano. Este último constituye
para muchos expertos en el tema, un requisito para la calidad social, para la vigencia
socio-política y cultural de la ciudad, y un factor para la buena salud física y mental de
la población residente (Pesci, 1999).
Fíjense como no sólo se habla del espacio verde sino también de aquel espacio
cultural o histórico-cultural. Este punto no solo engloba espacios arquitectónicos de
valor histórico sino también formas de hábitat, dando lugar a paisajes económicos
particulares. La conservación de los espacios públicos teniendo presente sus
componentes socio-culturales se justifica por:
-
Los valores recreativos y culturales
La educación ambiental
La calidad estética del paisaje
La diversidad cultural
La seguridad de preservar para generaciones futuras el capital cultural
La calidad de vida del las personas
El valor económico
La percepción del entorno
1584
LOS ESPACIOS PÚBLICOS EN UN ENTORNO DE SIG
Referente a este último punto, el espacio público es un lugar donde el ciudadano y
el visitante perciben y evalúan la ciudad en cuestión. Los espacios públicos son, sin
duda, los espacios de percepción de la realidad más próxima. En ellos podemos hallar
los valores de la belleza, el patrimonio, o percibir otros como la inseguridad, la falta de
higiene, la inaccesibilidad. De poco servirá una campaña promocional turística si
previamente no ha habido un esfuerzo por el ayuntamiento de mejorar los espacios
públicos o como se suele decir en términos de geomarketing, la imagen de la ciudad.
En este punto introducimos un nuevo concepto que es el de imagen de la ciudad,
sin duda muy relacionado con lo expuesto hasta ahora. En el presente momento hay un
gran volumen de políticas orientadas a vender las ciudades. Si hasta el presente
momento justificábamos la preservación de estos espacios para el beneficio de los
propios ciudadanos no debemos olvidar también los económicos. Una fuente de
ingresos para un territorio puede ser la entrada de turismo cultural tal como muestran las
innumerables campañas turísticas que transmiten los medios de comunicación. Así
pues, se justifican en los puntos anteriores las razones de índole económica, que sin
duda benefician a los propios residentes y a los ingresos públicos locales.
A lo comentado hasta ahora debe sumarse un problema incipiente a nivel global
que podríamos denominar como “privatización del espacio público”. Existe una
tendencia, que con el tiempo se ha ido acentuando, de crear urbanizaciones nuevas,
cerradas al espacio exterior y donde las calles son propiedades privadas. Estas
urbanizaciones constituyen islas aisladas de la ciudad a la cual pertenecen. En estas se
substituye el espacio publico y desaparecen los servicios y bienes públicos como
pueden ser los colegios, hospitales o museos, por poner tan sólo algunos ejemplos. Los
residentes de estos microespacios crean sus propias normas y se hacen inaccesibles para
el resto de población. Situación que podemos trasladar en sentido opuesto, dado que su
aislamiento contribuye a una mayor inaccesibilidad a los servicios públicos y en buena
parte de los casos, a la mayor dependencia del coche privado con todas las
repercusiones negativas que ello conlleva.
Estas urbanizaciones pueden hallarse en todos los países, pero especialmente en
aquellos donde el grado de desigualdad social e inseguridad es más elevado. Para evitar
esta creación de guetos, el papel de la buena gestión del gobierno es totalmente crucial.
Si queremos evitar una ciudad fragmentada e insegura debe potenciarse la calidad de los
bienes públicos como parámetro para una ciudad sostenible y una buena calidad de vida.
Sobre las relaciones entre el urbanismo y la seguridad hay una inmensa bibliografía
pero no debe olvidarse la obra de Jane Jacobs pues ha sido un punto de referencia desde
su publicación en 1961. En ella se manifestaba la necesidad de tratar en los planes
urbanísticos los espacios públicos como elementos esenciales de estructuración social
de la ciudad. Otra de sus análisis interesantes fue la denuncia de la creación de espacios
monofuncionales dentro de la ciudad dado que podían conducir a la destrucción de la
diversidad urbana.
4. LA NORMATIVA LEGAL
La normativa que regula los usos y establece las directrices para futuras
actuaciones está contenida en los Planes Generales Municipales (PGM). En éstos
podemos localizar el espacio público en distintas zonas tal como se muestra el gráfico
4.1. A modo de ejemplo, lo subrayado corresponde a espacio potencialmente público.
1585
EL ACCESO A LA INFORMACIÓN ESPACIAL Y LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS GEOGRÁFICAS PÁG. 1583-1592
Por infraestructura interurbana entendemos toda aquella red de comunicaciones que une
distintas áreas urbanas. Lógicamente, la gestión de dichas áreas está dirigida por una
entidad supramunicipal dado que el territorio que abarca la infraestructura supera los
límites administrativos básicos. Aunque no sea competencia del municipio, hemos
querido integrarlo en el gráfico como área pública con un alto interés como sistema de
comunicaciones, además de por sus altas repercusiones sociales y económicas sobre el
municipio.
La primera directriz de un PGM es zonificar el territorio en dos grandes
clasificaciones; el suelo urbano (SU) y el no urbano (SNU). Este último debe de ser
protegido de la urbanización como reserva posible de espacio libre y por lo tanto,
podemos considerarlo como sujeto con disposición de espacio publico.
No debemos olvidar que el espacio publico no está constituido únicamente por los
espacios abiertos como parques o plazas sino que también las propias calles o canales
pueden constituir espacios de recreo. Las calles y canales además, cumplen con una
doble función de movilidad y accesibilidad entre los distintos puntos de la ciudad.
CLASIFICACION DEL TERRITORIO
INFRAESTRUCTURA
INTERURBANA
ZONIFICACION
Suelo urbano
Público
Suelo no
urbano
Espacios donde se puede aplicar
una política de gestión de bienes
públicos
Privado
Grafico 4.1: Modelo simple de clasificación del territorio resaltando las
zonas con espacio público.
Fte- Elaboración propia.
5. PROPUESTA DE MODELO DE DATOS
Hasta el presente momento las experiencias observadas nos han hecho constatar
que los SIG se han implantado en entornos municipales con objetivos muy
determinados. Se trata de proyectos que se han iniciado, mayormente, en los
departamentos de urbanismo o de recaudación. Esta demanda de cartografía y de datos
por parte de estas dos áreas ha contribuido a lo largo de la historia de los SIG a
favorecer una determinada base de datos y una forma de trabajar que ha dificultado la
1586
LOS ESPACIOS PÚBLICOS EN UN ENTORNO DE SIG
integración de datos de otras áreas. En estos ayuntamientos se implantaron unidades de
SIG departamentales sin tener presente modelos de datos corporativos. Es relativamente
reciente la concienciación de la importancia de gestionar la información a través de
modelos de SIG abiertos que permitan integrar a posteriori datos. Sin duda, esto
responde a un aumento del interés que tienen los ayuntamientos para gestionar la
información mediante los SIG y la popularización de estos instrumentos a nivel mundial
Sin embargo, para la gestión del espacio público sostenemos que aún existe en la
cartografía convencional un escaso tratamiento de la representación de dichos espacios.
Este tema consideramos que es vital y exclusivo para la gestión urbana y debería ser una
de las funciones básicas de competencia pública.
El modelo de datos que aquí planteamos simplifica en dos dimensiones y a partir
de cinco categorías básicas el espacio público. Estas son: las plazas, los parques, las
calles, los canales y el equipamiento urbano. Una vez definido el tipo de espacio a
representar se digitaliza la información mediante topología lineal, a excepción del
equipamiento urbano que puede ser representado por puntos.
Nivel
2º
3º
Mayor grado de información
1º
1. PLAZA
2. PARQUE
Línea,
segmento
3. CALLE
Línea,
segmento
Intersección
de segmentos
Polígono
Polígono
Carril
4. CANAL
Aceras
Línea,
segmento
5. EQUIP.
Punto
Polígono
Tipo: banco,
alumbrado,
papelera, etc.
Atributos: dirección postal, uso, sentido de la circulación, estado de conservación…
Grafico 5.1: Modelo conceptual de elementos básicos de infraestructura urbana
Clasificada como espacio publico.
Fte- Elaboración propia.
La figura 5.1 muestra la propuesta de modelo. El principio que lo rige es la
simplificación de la información para reducir los costos económicos iniciales y facilitar
el mantenimiento de la información a posteriori. Como puede observarse en la figura,
los distintos niveles marcan la complejidad de la información introducida. El nivel 1
seria el inicial y el más fácil de mantener por estar constituido por líneas simples. La
información que se le puede atribuir dependería de las necesidades de cada entidad pero,
sin embargo, sus posibilidades ya son muy amplias. En un segundo nivel de
1587
EL ACCESO A LA INFORMACIÓN ESPACIAL Y LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS GEOGRÁFICAS PÁG. 1583-1592
complejidad las líneas simples que rodean plazas o parques pueden cerrarse dando lugar
a elementos poligonales asignando áreas concretas. Aunque con mayor grado de
dificultad, las calles también pueden dar lugar a polígonos. Los límites de éstos serian
de lado a lado de fachada de edificio incluyendo aceras y carriles en el caso de calles
rodadas. El segundo nivel permitiría entonces, agilizar operaciones como el cálculo de
áreas y por lo tanto valorar la superficie existente total de espacio público. Un tercer
nivel supondría para las calles una segregación poligonal de los elementos integrantes
de estas. A modo de ejemplo, una calle podría estar subdivida por los siguientes
polígonos:
- Una acera
- Un carril bicicleta
- Un carril de servicio rodado público
- Un carril rodado.
En el caso de los equipamientos urbanos (quinto elemento básico del gráfico)
podría establecerse un elemento grafico más complejo y más próximo a la forma real
del objeto a representar que el punto digitalizado en el nivel 1.
Figura 5.2 Propuesta de nivel 1
Fuente cartográfica: Ayuntamiento de Lleida. Elaboración propia
1588
LOS ESPACIOS PÚBLICOS EN UN ENTORNO DE SIG
Figura 5.3 Propuesta de nivel 3
Fuente cartográfica: Ayuntamiento de Lleida. Elaboración propia
Figura 5.4 Propuesta de nivel 3 con puntos de direcciones postales
Fuente cartográfica: Ayuntamiento de Lleida. Elaboración propia
1589
EL ACCESO A LA INFORMACIÓN ESPACIAL Y LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS GEOGRÁFICAS PÁG. 1583-1592
A continuación se detalla, como ejemplo, los posibles atributos enlazados a una
base cartográfica de una calle. Aunque alguno de ellos son datos informativos
opcionales, hay algunos que son del todo imprescindibles. Se trata de los campos que
corresponden a la dirección postal (número de calle y policía). Gracias a ellos no solo
podemos vincular toda la infraestructura de datos municipales en una posición concreta
sino también, y no menos importante, combinar los datos entre sí (Duivenboden, 2003).
Los siguientes puntos muestran los atributos de una base cartográfica de calles
indiferentemente del nivel en que se encuentre.
-
Id: Campo correspondiente a un identificador único de segmento
Calle: Código numérico de la calle
Número de policía derecho: Número de entrada correspondientes al margen
derecho de la calle
Número de policía izquierdo: Número de entrada correspondientes al margen
izquierdo de la calle
Sentido direccional de la calle: En este campo se debería definir si hay un
sentido de circulación o ambos.
Ancho del margen derecho: Valor numérico del carril derecho.
Ancho del margen izquierdo: Valor numérico del carril izquierdo.
Estado de conservación
Carril bicicleta: existencia o no de carril
Ancho de carril bicicleta
Sentido del carril bicicleta
Ya hemos comentado la relevancia de incluir la dirección postal. Para ello hay
distintas soluciones con distintos grados de dificultad. La opción más compleja pero
más exacta seria delimitar la longitud del segmento en función del ancho de las fachadas
de ambos sentidos. Esto significaría que el inicio de una fachada edificada o proyectada
marcaría una ruptura de segmento. Una formula más simple de asignar direcciones seria
mediante los programas de SIG. Estos permiten asignar direcciones a tramos mediante
aplicaciones como el geocoding de ArcView o el create address locator de
ArcToolbox. Por último, otra opción seria crear una base cartográfica de puntos con
direcciones que permita relacionar mediante consultas de proximidad espacial los
tramos de calle con la dirección postal. La ventaja de esta última propuesta radica en
que muchos ayuntamientos ya disponen de una capa de puntos geocodificados. La
existencia de esta capa cartográfica responde a su gran utilidad para ubicar datos
económicos, de población, etc.
Plantear un modelo de datos eficiente supone un paso adelante para la gestión del
espacio urbano y para la calidad de vida del ciudadano. Una base de datos unida a una
base cartográfica permite un poderoso instrumento de gestión. La información gráfica
mediante los SIG permite visualizar fácilmente la información tanto a una escala
detallada como a una escala pequeña según las necesidades de análisis. Esto permite
crear distintos enfoques sobre una misma problemática a diferentes escalas.
El uso de un SIG sobre el espacio debería permitir poder calcular operaciones tan
simples como la relación existente entre la superficie de lo público y de lo privado. Se
estima que una buena partición del territorio seria 60% de espacio privado y 40% de
espacio público.
1590
LOS ESPACIOS PÚBLICOS EN UN ENTORNO DE SIG
6. CONCLUSIÓN DE LA IMPLANTACIÓN DE UN SIG EN LOS ESPACIOS
PÚBLICOS URBANOS
Llegado este punto, debemos hacer énfasis sobre las ventajas que tiene la
implantación de un SIG sobre los espacios públicos. Existen antecedentes de
planificación de los espacios libres que se remontan a finales del siglo XIX como por
ejemplo la propuesta de Olmsted sobre los parques de la ciudad de Boston. Sin lugar a
duda existe una amplia concienciación pública y científica sobre los beneficios de los
espacios públicos, especialmente de los verdes. Sin embargo, la aplicación de los SIG
sobre la gestión y la conservación de estos espacios urbanos sólo apunta muy
tímidamente en algunas ciudades.
A continuación se exponen con breves ejemplos algunas ventajas de un SIG sobre
espacios públicos:
- La introducción de la información permite un planteamiento inicial de
identificación de cuales son los espacios urbanos que son públicos. Este simple
paso permite tomar conciencia del área que debe ser gestionada y protegida. El
paso de la introducción de datos sobre los espacios a un SIG debe permitir una
primera clasificación tipológica. De esta forma, se pueden catalogar los
espacios históricos, verdes, de recreación, folklóricos y recibir un trato
municipal diferenciado.
- Un SIG debe permitir mejorar la eficacia de las tareas de mantenimiento y
gestión de los espacios públicos. A modo de ejemplo, el mobiliario urbano
como bancos y especialmente la iluminación del alumbrado pueden ser
reparados fácilmente gracias a la base de datos existente.
- Un SIG con un inventariado de árboles o espacios verdes puede ser
especialmente útil para asignar valores ecológicos o para calcular porcentajes
mínimos de tierra arbolada en relación al volumen de población. A modo de
ejemplo, ciudades estadounidenses utilizan ordenanzas de conservación de
tierras arboladas en función de la densidad de población del entorno. En zonas
residenciales de baja densidad media requieren mayor retención de zona verde
de tal forma que se contribuye a desacelerar la expansión urbana (Miller,
1997).
- La incorporación de los ejes de comunicación viaria y peatonal al SIG permite
planificar mejor la movilidad urbana y la accesibilidad a los puntos clave de las
ciudades. A nivel peatonal las rutas o corredores verdes pueden contribuir a
mejorar la calidad de vida del ciudadano y también la seguridad de los más
pequeños en los desplazamientos diarios del hogar al colegio y viceversa. A
nivel rodado, se pueden establecer mecanismos que faciliten la movilidad y
reduzcan incompatibilidades con otros usos. Mediante un SIG se pueden
establecer rutas óptimas, cálculos de accesibilidades a los servicios públicos,
etc.
- Una mayor gestión del espacio público debe contribuir a reducir las zonas
conflictivas o delictivas de la ciudad. La introducción de datos como delitos
registrados en una ciudad junto con la combinación de otras capas de
información como la morfología de la ciudad, la iluminación de la zona, etc.
puede dar información sobre posibles causas de concentración de delitos
(Guerrero, 2006)
1591
EL ACCESO A LA INFORMACIÓN ESPACIAL Y LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS GEOGRÁFICAS PÁG. 1583-1592
Aunque la lista de ventajas de los SIG sobre los espacios públicos se podría
extender mucho más, lo que en definitiva queremos resaltar en este artículo es la
importancia del uso de las nuevas tecnologías para el bien de la sociedad. No estamos
hablando de intereses económicos directos sobre las entidades locales sino de la
reivindicación de los beneficios de las nuevas tecnologías para la sociedad, a través de
una mejora en la gestión de algo que ya le pertenece como ciudadano y contribuyente.
Sin embargo, aunque para la entidad gestora recae un esfuerzo, a priori, para implantar
dicha información en un SIG también se beneficia a medio plazo a partir de mejorar la
gestión y planificación de su territorio.
BIBLIOGRAFÍA
Bridge, G. Watson, S. (2000): A companion to the city. Oxford, Blackwell Publishers.
Bru Bisuter J. (1995): “ Los espacios recreativos en la doble dimensión protección/uso:
un análisi conceptual desde la perspectiva geográfica”, en Bru Bisuter, J (Ed):
Ciutat i espais lliures, Lleida, Edicions de la Universitat de Lleida, pp.43-59.
Cheng, J.(2003): Modelling Spatial and Temporal Urban Growth. Enshede, ITC
Dissertion.
Duivenboden, H. Vries, M. (Ed), (2003): Upstream, Chronicle of the Streamlining Key
Data Programme. The Hague, Stoomlijning Basisgegevens.
Guerrero, M. (en premsa): “La localizacion de delitos en Lleida mediante un SIG”, en
Fraile, P. (Ed): Paisage ciudadano, delicto y percepción de la inseguretad:
investigación interdisciplinar del medio urbano. Oñati, Instituto Internacional de
Sociología Jurídica.
Hall, P. (1996): Cities of tomorrow. Oxford, Blackwell Publishers.
Jacobs, J.(1961): The Death and Life of Great American Cities. New York. Random
House.
Landry, C.(2000): The creative city, a toolkit for urban innovators. London, Earthscan
publications ltd.
Miller, R. (1997): “Planeación del enverdecimiento urbano”, en Krishnamurthy L.,
Rente J. (Eds): Áreas Verdes Urbanas en Latinoamérica y el Caribe, Mexico,
Banco Internacional de Desarrollo, pp.83-108.
Pesci, R. (1999) La ciudad de la urbanidad. Argentina, Prefeitura de Porto y Nordelta
S.A.
Richard, R.(2000): Ciudades para un pequeño planeta. Barcelona, Editorial Gustavo
Gili S.A.
El Pla d’espais liures de Lleida. Ajuntament de Lleida
1592
Descargar