MIRATE AL ESPEJO La violencia es un fenómeno social que excede la problemática de los centros educativos. Las escenas que vemos en las calles, en muchas familias, en los escenarios de la política, en los medios de comunicación, las descalificaciones entre políticos… son manifestaciones de conductas agresivas. Si estas conductas son las que se repiten a diario en los colegios, quiere decir que la violencia escolar es un mero reflejo de nuestra vida cotidiana. ¡Lo bueno es que podemos hacer algo para que esto cambie! Todos tenemos derechos y el sólo hecho de ser personas nos posibilita gozar de ellos. En el caso de los menores de edad vienen reflejados en la Convención sobre los Derechos del Niño; pero también nos los garantizan la Constitución y las leyes, que determinan que todos tenemos derecho a recibir una educación de calidad, a vivir en una vivienda digna, as estar rodeados de un entorno protector, a ser aceptados y queridos, a no recibir abusos y explotación. La mayor parte de los conflictos son el resultado de la injusticia, la exclusión y la vulneración de los derechos de los demás. Cuando aislamos a una persona por su edad, por su sexo, por su raza, por su religión o por pertenecer a una cultura diferente o a otro país o por su forma de pensar, estamos actuando en contra de los derechos de esa persona y esa actuación es la que puede dar lugar a un conflicto que ponga en riesgo la convivencia pacífica. Sin embargo, es importante tener en cuenta que un conflicto no debe implicar siempre la violencia y pueden resolverse de una forma pacífica. Siempre merece la pena intentar otros canales de solución. Nuestros derechos nos protegen; pero de igual forma que tenemos derechos, tenemos obligaciones de asumir tareas y cumplir normas para que la sociedad pueda funcionar correctamente. Y la primera obligación o norma es la reciprocidad, que se parece mucho a un espejo: “si yo soy amable contigo, tu serás amable conmigo”; “si yo no atiendo tus peticiones, tu no responderás a las mías”. Si siempre pensamos de esta forma, no haremos a nuestros compañeros y compañeras aquello que no queremos que nos hagan a nosotros; y mejor aún, nos comportaremos con ellos o con ellas de la misma manera que deseamos que ellos se comporten con nosotros. La violencia es evitable. Los conflictos pueden solucionarse por vías pacíficas. Debemos aportar alternativas, nuevas soluciones, aprovechar nuestra creatividad, dialogar, negociar y así llegar a un acuerdo que nos permita convivir. Basado En Violencia escolar (Adaptación) ACTIVIDADES 1. Identifica el tema del texto. 2. Señala las ideas más importantes. 3. Elabora un resumen de no más de cinco líneas. 4. ¿A qué modalidad textual pertenece: narración, descripción, diálogo, exposición o argumentación? Justifica tu respuesta. 5. Identifica la tesis del texto. 6. Señala el tipo de extructura. 7. Localiza los argumentos que aparecen para defender la tesis. 8. Identifica el tipo de argumentación según la postura del autor y según la forma con la que defiende su tesis. 9. ¿Sabrías identificar algún tipo de argumento? 10. Identifica también los conectores que unen las distintas ideas ARGUMENTAR: TIPOS DE ARGUMENTOS Para argumentar bien, es fundamental conocer la estructura de un texto argumentativo así como sabe qué argumentos debo seleccionar y emplear para convencer a un auditorio, a un grupo de personas o a una sola persona. ¿Que es un argumento? Un argumento es una expresión escrita u oral que manifiesta un razonamiento para probar, apoyar, justificar o rechazar una idea u opinión (es decir, una tesis). En la lista siguiente figuran los argumentos más habituales: Analogía Se compara o establece una relación de semejanza entre dos situaciones, ideas, seres, cosas o casos diferentes y se deduce que lo que es válido para un caso lo es también para el otro. Autoridad El autor del texto argumentativo cita o recurre, para apoyar su tesis, a un especialista, un intelectual (filósofo, escritor, pensador…), un experto, una persona reconocida, un científico, etc., o a un grupo de expertos, científicos, intelectuales… que han elaborado un estudio, un ensayo, una investigación, etc. Cantidad Se antepone la calidad, lo mejor, lo exquisito frente a la cantidad o lo abundante. Cantidad Se menciona que la cantidad o lo que la mayoría cree, piensa, dice o hace para defender una postura. Lo que la mayoría piensa o hace funciona en ocasiones como argumento. La mención del sentido común se incluye en esta variante. Causa o argumento de causalidad Demostrar una relación causa-efecto entre dos hechos o ideas suele ser un razonamiento muy eficaz para defender una tesis u opinión. Conocimiento o creencias generales Se fundamenta una tesis recurriendo al sentido común o ideas que todo el mundo ha escuchado en relación al conocimiento que se tiene de la realidad. Consecuencia o argumento de causa-efecto Exponer o mostrar las consecuencias de determinada idea, acto, hecho… es muy eficaz para la defensa de una tesis. Se relaciona estrechamente con el argumento de causalidad. Creencias (religiosas, morales, ideológicas, filosóficas…) Para apoyar o rechazar una tesis o idea se puede emplear las creencias de tipo religioso, moral, ideológico, filosófico… Emoción (o argumento afectivo-emotivo) Provocar emociones, relacionadas sobre todo con los deseos, miedos o dudas, para conmover y suscitar una reacción de simpatía, empatía o rechazo es otro de los recursos más típicos usados en una argumentación. Estético Se da prioridad a la belleza (normalmente externa) por encima de otras cualidades o valores para argumentar una opinión, idea o tesis. Ético o de valores Se defiende una causa por sus valores éticos (más allá de una religión o ideología): justicia, generosidad, libertad, respeto, etc. Eslogan Repetir continuamente una frase puede influir en el receptor. Estadístico o de datos Consiste en argumentar basándose en pruebas fiables con datos, estudio o cifras. Existencial Lo que es real, auténtico, verdadero y posible se valora frente a lo que es falso, o inexistente o imposible. Experiencia personal Suele esgrimirse como argumento la experiencia personal, es decir, lo experimentado, observado, visto o, en general, vivido por uno por encima de otros criterios o argumentos. Fama Las palabras o la imagen de una persona famosa puede usarse para influir en los destinatarios. Generalización A partir de un caso concreto o similar se usa para realizar una generalizar una idea o tesis común, que se aplica a otro caso del mismo tipo. Hechos históricos, científicos, artísticos… La persona que argumenta se puede basar en hechos reales, probados y objetivos de índole histórica, científica, artística, etc. Hedonismo Se basa en lo que proporciona placer, agrado, diversión, bienestar… Prejuicios Se trata de argumentar apelando apelando directa o indirectamente a los prejuicios es otro recurso usado para defender una tesis. Progreso El progreso, la novedad, lo original, lo nuevo… se antepone a lo que es valorado como antiguo. Racional Es un argumento racional el que se basa en un análisis objetivo y lógico que demuestra la evidencia de lo que se afirma. Refranes, proverbios, máximas Se acude a ellos como garantía de verdad que no admite discusión. El refrán y el proverbio tienen una raíz popular; las máximas, adagios o frases sentenciosas provienen de una fuente culta. Salud Frente a lo que es nocivo, tóxico y perjudicial para la salud física y mental de una persona se defiende lo que es sano, saludable, beneficioso. Semejanza o analogía Alguien defiende alguna idea, comportamiento, hecho, acto… basándose en que es muy parecido a otra idea, comportamiento o acto que es cabal y convincente. Social o ideas generales admitidas por la sociedad Las creencias, opiniones, valores, comportamientos, etc., que creemos que son admitidos socialmente pueden ser empleados como un argumento para rebatir al contrario (sobre todo, si este defiende una idea, acto, hecho o comportamiento poco común o visto raro o propio de una minoría. Tradición Al contrario que el argumento basado en el progreso, encontramos a quienes usan los valores, creencias o hechos que se manifiestan a lo largo de la tradición. Utilidad o pragmático En este caso lo que es útil, práctico, necesario o eficaz se enarbola como argumento frente a lo que no es inútil, ineficaz, innecesario, peligroso, poco práctico. EJEMPLO DE TEXTO ARGUMENTATIVO RESUELTO ARGUMENTOS FALACES O FALSOS Existen también argumentos falsos, llamados falacias. Le dedicaremos pronto un artículo. De momento, te ponemos el más habitual y te dejamos este enlace que te puede servir para identificarlos. Ad hominem Es aquel que se acepta o rechaza no por el argumento o razonamiento hecho, sino en función de la persona que lo expresa. TEXTO Hay quien considera que la pena capital no es efectiva, argumento mucho más peligroso de lo que, seguramente, muchos de sus defensores suponen. Porque si vamos a las cifras, entonces tendremos que abolir las leyes que castigan la violencia doméstica, ya que, según endurecemos la legislación, dicha violencia parece crecer. Con frecuencia se arguye el ejemplo estadounidense, en donde la existencia de la pena de muerte coexiste con tasas de criminalidad relativamente altas, como paradigma de la inutilidad de esta. Pero el argumento carece de fuste: no sabemos cuáles serían las tasas de criminalidad de no existir dicha pena. En cambio, en sentido contrario, cabría señalar el ejemplo de España, donde los delitos eran mucho menores mientras hubo pena de muerte, que tras su abolición. ¿El aumento de la delincuencia ha sido consecuencia únicamente de la abolición de la pena capital? De ninguna manera. Desde luego que no. En 1975 había en las cárceles españolas poco más de 7.000 reclusos. Hoy, unos 80.000, con unas leyes más laxas; aplicando los mismos baremos que durante el franquismo, no sabemos cuál sería la población carcelaria, pero es fácil suponer que la cifra de presos se incrementaría notablemente. En todo caso, estamos hablando de una cantidad casi doce veces superior, un crecimiento del 1 200 %, cuando la población solo se ha incrementado en un 20%. Desde luego, la partida fundamental que explica el aumento de reclusos en estas últimas décadas es el deterioro de la salud social; pero también, sin duda, la dureza de la ley incide, aunque no podamos averiguar en qué porcentaje. Con esto solo quiero significar que, con las cifras en la mano, puede argumentarse en los dos sentidos. Autor: Fernando Paz, 2/4/2018 (adaptación) PRÁCTICA PARA EXAMEN DE SELECTIVIDAD LENGUA Asunto (o tema general): La pena de muerte. Tesis, tema o idea central que defiende el autor: No podemos saber, con las cifras actuales, si la abolición de la pena de muerte es beneficiosa o perjudicial. Intención: Convencernos de que nadie puede asegurar el efecto beneficioso que puede tener la abolición de la pena de muerte y refutar o poner en duda que sea una ley inútil. Estructura del texto: La estructura es tripartita: 1)introducción del asunto e idea que rechaza (párrafo 1); 2) cuerpo argumentativo en el que aporta las razones para defender su postura (párrafos 2, 3, 4 y primera oración del texto); y 3) conclusión: última oración del párrafo 5. Función del lenguaje: Predomina la referencial (expone datos e ideas usando la modalidad enunciativa), pero también aparece la expresiva (pues muestra su opinión sobre el asunto) y la apelativa (desea convencer al receptor de su tesis). Esquema organizativo de las ideas: Presentación del asunto: la pena de muerte. Algunos opinan que la pena capital debería suprimirse. El autor no está de acuerdo. Argumento de los que ven inútil la pena de muerte: No evita tasas altas de criminalidad en EEUU. Argumentos del autor: Imposibilidad de saber el efecto en la cifra de crímenes por la supresión de la pena capital. En España, la supresión de la pena de muerte no ha evitado la disminución de los reclusos, todo lo contrario Conclusión: es imposible asegurar, con los datos que tenemos, que la supresión de la pena de muere supondría menos crímenes. Resumen: Muchas personas creen que la pena de muerte es una ley inútil, pues no disminuye la criminalidad donde sigue vigente. Sin embargo, el autor no está de acuerdo con esa postura, pues las cifras demuestran que no disminuyen los delitos porque una legislación sea severa. Pone como ejemplo el caso español: desde que que se derogó la pena capital, el número de reclusos ha aumentado muchísimo. Por tanto, concluye que, con los datos que tenemos actualmente, no podemos saber si una ley menos dura tendría un efecto beneficioso o perjudicial. Tipo de texto: Es un artículo de opinión de carácter expositivo-argumentativo que pertenece al ámbito periodístico. Rasgos lingüísticos y estilísticos: • • • • • • • • • Abundancia de sustantivos abstractos, muchos de ellos creador por derivación: «legislación», «inutilidad», «criminalidad», «crecimiento», «violencia», «dureza», «fundamental», etc. Predominio de oraciones enunciativas que expresan hechos o ideas, pero también opiniones personales (de ahí la función emotiva). También hay una oración interrogativa que tiene una contestación contundente para expresar su opinión. El autor, para conseguir mayor expresividad, coloca esa oración interrogativa en el párrafo 4 y, justo a continuación, él mismo responde con dos enunciados no oraciones (los únicos que hay): «De ninguna manera», «Desde luego que no». Son negaciones categóricas que recalcan la posición del autor. Como es habitual también en un texto argumentativo aparecen varias perífrasis modales («tendremos que abolir», «podamos averiguar», «puede argumentarse»); solo hay una perífrasis tempoaspectual: «estamos hablando». Empleo de un registro formal, con uso abundante de oraciones compuestas ceñidas a las reglas gramaticales y con un léxico entre estándar y culto («laxa», «abolición», «derogación», «paradigma»). Ni la sintaxis en la que predomina el empleo de la subordinación (todas las oraciones tiene dos o más verbos, solo aparece una oración simple y dos oraciones nominales) ni el léxico impiden la comprensión perfecta de lo que nos quiere manifestar el autor. Usa sinónimos para no tener que repetir palabras cercanas («pena capital» – «pena de muerte»; «presos» – «reclusos»; «tasas» – «cifras», «abolición»-«supresión», «crecimiento-aumento»). Las palabras claves del texto coincide, por supuesto, con el asunto principal: es el sintagma «pena de muerte», que se repite dos veces y vertebra el texto, pues se repite con un sinónimo «pena capital», en una ocasión elude el complemento del nombre y solo dice «pena» y también se refiere a ella con el hiperónimo «ley». Todas esas palabras y otras crean un campo léxico-asociativo: a las que acabamos de mencionar habría que sumar otras como «violencia», «criminalidad», «reclusos», «castigan», «delincuencia», «delitos», «cárceles», «población carcelaria», etc. Otro campo léxico-asociativo es el que se relaciona con la argumentación: «argumento», «defensores», «arguye», «consecuencia». Respecto al tono emocional, el autor se muestra rotundo y contundente: defiende su opinión de modo tajante a la vez que reflexivo, usando varios ejemplos y, sobre todo, con esas negaciones categóricas que antes hemos mencionado y cierran el tercer párrafo. Cohesión: SECCIÓN: PRÁCTICA PARA EXAMEN SELECTIVIDAD LENGUA • • • • • • • • • • • • «sus defensores»: el posesivo tiene un valor anáfórico, pues se refiere algo dicho antes «la pena capital no es efectiva». «su abolición»: el posesivo tiene un valor anafórico: se refiere a «abolición de la pena de muerte». Recordemos que con las anáforas textuales se evita la repetición (sobre todo, cuando las palabras están cerca). El uso del adjetivo «dicha» tiene también un carácter anafórico: en el primer párrafo se usa junto a «violencia» para no repetir el complemento del nombre («violencia doméstica»); en el segundo párrafo tiene el mismo fin al modificar «pena», pues evita repetir el complemento del nombre: «pena de muerte». «violencia»: se repite dos veces cerca en la última oración del primer párrafo. «esta» (última palabra de la primera oración del párrafo 2): tiene un valor anafórico, pues se refiere a «pena de muerte». «donde»: valor anafórico, es un adverbio relativo cuyo antecedente es «ejemplo estadounidense» en el segundo párrafo, y «el ejemplo español» en el tercer párrafo. Repetición léxica: «pena de muerte», «argumento». Deixis temporal: «en 1975», «estas últimas décadas», «hoy». «esto»: valor anafórico, este pronombre demostrativo neutro se refiere a todo lo dicho anteriormente a lo largo del texto. Los sinónimos y el hiperónimo citados antes, así como el campo léxicoasociativo dicho también en el otro apartado, sirven también como mecanismos de cohesión. En este texto contribuye también a la cohesión el contraste entre los párrafos segundo y tercero: en el primero se habla del «ejemplo estadounidense» y en el otro del «ejemplo español». Otro mecanismo importante son los conectores discursivos. Destacan los siguientes: «porque» (primer párrafo), que tiene un valor causal; «pero» (segundo párrafo), «en cambio» (en el tercero), que tienen valor contraargumentativo y otros como «desde luego» (indica afirmación), «también» (conector sumativo y a la vez afirmativo) y «en todo caso» (quinto párrafo), que indica posibilidad y tiene un valor entre condicional y concesivo. Sirven también como conectores intraoracionales o nexos que unen dentro de la misma oración los siguientes: «si» (valor condicional) y «ya que» (valor causal) en el primer párrafo; «mientras» y «cuando» (valor temporal) en el segundo y cuarto párrafo, respectivamente; «pero» (valor adversativo) aparece en el cuarto y quinto párrafo, y «aunque» (valor concesivo) en el último. La mayoría son los conectores habituales en una argumentación. Modalización (o manifestación de la subjetividad): SECCIÓN: PRÁCTICA PARA EXAMEN SELECTIVIDAD LENGUA Hay varios ejemplos de rasgos lingüísticos que revelan la presencia del autor (es normal en una texto argumentativo subjetivo): • • • • • • • Léxico valorativo: «peligroso» (en el primer párrafo), «inutilidad» y «carece de fuste» (segundo párrafo), «de ninguna manera» (tercer párrafo), «deterioro» (último párrafo). Expresiones de certeza como la locución adverbial «sin duda» y el adverbio «únicamente» en el cuarto párrafo, así como de probabilidad, que queda patente en la primera oración al usar el adverbio «seguramente». Uso de la primera persona del plural inclusivo («tendremos que abolir», «sabemos», «estamos hablando») y, sobre todo, hay que resaltar el empleo de la primera persona del singular: «quiero» en la última oración del texto. Utilización de elementos cuantificativos (muestran la presencia del emisor): «más peligroso», «muchos de sus defensores», «con frecuencia», «ninguna manera», «poco más», «una cantidad doce veces superior», «notablemente», «solo», «unicamente». Uso de la negación categórica (comentado antes): «De ninguna manera. Desde luego que no». El uso de las perífrasis modales (arriba mencionadas) y el uso del condicional («incrementaría», «serían», «cabría») también son recursos modalizadores. Otra muestra de la modalización, es decir, de la presencia del autor, es el empleo de la modalidad enunciativa negativa para expresar lo que podría ocurrir si se cumplieran ciertas situaciones: «no sabemos cuáles serían las tasas de criminalidad», «no podemos averiguar en qué porcentaje».