EDUCACIÓN FÍSICA Elementos Históricos de la educación física. Desde esta perspectiva, un eje transversal importante ha sido el desarrollo que ha experimentado la educación física a través de los años, tratando de posicionarse como algo más que una simple materia de recreación, una lucha que inicio no hace poco: "La educación física como materia educativa, no data más allá del siglo XVIII. Ciertamente, todas las culturas han conocido unas prácticas corporales propias. Desde el origen del hombre, el ejercicio físico ha ido evolucionando y ganando en organización y eficacia" (Blázquez Domingo- 2006). Hoy por hoy ha ganado terreno pero aún le falta y más en la categoría que nosotros estamos privilegiando: la motricidad, relacionada con el cuerpo, con la mente, con el movimiento, esta que es tan necesaria como trascendental en el niño, ya que "La motricidad juega un papel imprescindible en el desarrollo integral del este, tanto a nivel intelectual, afectivo, psicosexual como social desde los primeros momentos de su vida, y que su evidencia puede condicionarnos a realizar una prófugo la reflexión acerca de la metodología educativa más indicada para abordar la adquisición de los aprendizajes en la etapa de educación infantil" (Ruiz Juan Francisco – 2003). Al hacer un recorrido histórico por quienes han dejado legados de impacto para la cultura que hoy poseemos, es posible visualizar que desde la antigüedad los griegos tomaban la educación física como la liberación del alma que según ellos estaba encerrada en el cuerpo, era una forma de catarsis, sin embargo y aunque en ésta época se marcó un especial énfasis en los deportes logrando excelentes resultados, había un vacio a nivel cognitivo, ya que el cuerpo se ejercitaba pero aún no se lograba entender los procesos mentales y cognitivos relacionados con el cuerpo. De esta manera es como después el ejercicio empieza a unirse con el ser, con la comprensión y el bienestar. Hoy por hoy falta creer en las dimensiones que se potencian desde la educación física en el ser humano. La educación física no es solo ejercitar el cuerpo, al contrario, como dice Benjumea Pérez Margarita María es una ciencia; un arte que desarrolla de manera intencional facultades, movimiento y comprensión; Uribe Pareja (1997) dice que la concepción e interpretación de educación física, va más allá de la conducta motriz, y la constituye en un elemento portador de significado y significación para y del individuo, y desde esta visión toda expresión motriz está dotada de sentido e intencionalidad y, como tal, es una forma de manifestación de la personalidad. Por ende no es válido que el ser humano restrinja su bienestar integral al corporal, de ahí también la critica que subyace en este trabajo y es precisamente la inadecuada orientación didáctico- pedagógica del área que solo está permitiendo el desarrollo del cuerpo en poca consonancia con lo cognitivo, lo social y lo motriz "La construcción histórica de la asignatura se ha conformado desde unos principios de hegemonía del conocimiento en relación a aquella, caracterizados unos determinados contenidos especialmente considerados por la cultura dominante que tienden a consolidar los valores y finalidades que respecto al cuerpo y la cultura física son los dominantes. Así en un momento determinado la idea del cuerpo-máquina dio lugar a un concepto de la educación física de carácter instrumental en donde la condición física en el contenido hegemónico, como es el caso de las grandes corrientes gimnásticas de principios de siglo; o bien, la idea dignidad de la persona que hace de la psicomotricidad su vehículo de expresión en educación física”. (Contreras, 1998) Alcances desde la concepción de educación física La educación física entendida como la educación de la salud, del cuerpo y de la mente desde el pensamiento de Pérez Plata (2006), es de alguna forma aniquilar la homogeneidad del ser humano y reestructurar el concepto de sujeto, quien requiere de elementos personalizados de enseñanza, ya que su desarrollo depende de determinada etapa evolutiva, cronológica y mental. La tabula rasa no se debe aplicar en ningún contexto y menos en el educativo, donde hay ritmos, necesidades, particularidades e historias diferentes y marcadas por subjetividades de merecido respeto, análisis y comprensión. La complejidad del ser humano requiere de docentes también complejos que entiendan las dimensiones por las cuales pasa el sujeto. Por estas razones de triangulación desde el término calidad (teoría- praxiscontexto), algunos docentes de educación física lanzan la hipótesis según la cual la institución – Nuestra Señora del Buen Consejo- requiere redimensionar los parámetros que rigen el área, hacer un alto en el camino y reflexionar sobre el impacto positivo que debería proyectar la educación fisca dentro del ámbito escolar y específicamente en los diferentes aspectos que componen al ser humano, en este caso al estudiante. Repensar el plan de área, el currículo desde la educación física que logre pensar en la complejidad y no quedarse en lo superficial, reconocer lo biológico, lo neurobiológico, lo simbólico, lo intelectual, lo cognitivo, lo social, lo afectivo, etc. De la mirada detallada y analítica que se logre establecer entre estos elementos y el ser humano se podrá resignificar la calidad del área y su estatus dentro del ámbito escolar que contribuya a hacer agradable y compleja la educación física como área potencial en el desarrollo integral del ser humano para poder favorecer lo que Trigo Eugenia categoriza como el hacer, el Saber, el Pensar, el Sentir, el Comunicar, el Querer. Capacidades motoras El ser humano, es un ser integral donde podemos observar una gran cantidad de capacidades que le permiten desarrollar determinadas tareas para su subsistencia. En la educación física, estas capacidades son muy notorias y se unen en tres grandes grupos como son las capacidades perceptivo motoras, las físico motoras, y las socio motoras. Son muchas las concepciones que se tienen de dichas capacidades y que lo llevan a uno a pensar, cuál de ellas sería más importante, sin embargo, y teniendo como referencia al colegio parroquial Nuestra Señora del buen Consejo en sus diferentes prácticas de la educación física, se evidencia que estas capacidades se trabajan, pero se debe fortalecer en intensidad. Partiendo "El término perceptivo motor informa acerca de la dependencia directa entre el movimiento voluntario y las formas de percepción de la información. Todo movimiento voluntario contienen elementos de conocimiento perceptivo proveniente de algún tipo de estimulación sensorial" (Castañer - 2001), se puede afirmar que los sentidos y las percepciones, se trabajan en la actualidad en poca cantidad, lo que ha intervenido en la concepción que los alumnos le pueden dar a la educación física desde una visión deportivista, punto que debe replantearse no solo en alumnos, sino también en docentes y directivos. En otros contextos, sin dejar a un lado el intervenido, se puede observar que las diferentes capacidades físicas (fuerza, resistencia, velocidad y flexibilidad), se trabajan en mayor cantidad que las perceptivas, lo que puede facilitar un análisis sobre la comprensión que tienen los alumnos sobre ese concepto, si se tiene que "Las capacidades físico motrices constituyen fundamentos para el aprendizaje y perfeccionamiento de las acciones motrices para la vida que se desarrollan sobre las bases de las condiciones amorfo-funcionales que tiene el organismo, representan uno de los componentes esenciales para el desarrollo de las capacidades de rendimiento físico del individuo" (Ruiz-1987). Es aquí cuando se hace necesario, relacionar durante las practicas, las capacidades perceptivas con las físicas sin dejar a un lado las sociales "las capacidades socio motrices hacen referencia a una interacción en la que participan más de una persona, especialmente en los juegos y por sus colectivos en donde los resultados son mucho más enriquecedores" (Parlebas - 1997), debido a que cuando el trabajo se hace en equipo, el alcance de objetivos a nivel individual y grupal es mas satisfactorio