Alfa espera energía con reforma Con la nueva Ley podría ser operadora independiente de yacimientos mexicanos de gas shale. Por: Diego Graglia y Lourdes Flores | Martes, 17 de diciembre de 2013 Alfa va con todo por el gas shale Tras el éxito de Alfa en la producción energética en Texas, el corporativo quiere entrar "con todo" al sector energético mexicano, dice Álvaro Fernández Garza, CEO de la firma. Tras la aprobación de la reforma energética el 12 de diciembre de 2013, el corporativo podría convertirse en un operador independiente de yacimientos de lutitas (gas shale). Tiene especial interés debido a que posee una combinación estratégica única entre empresas mexicanas: experiencia en explotación en lutitas, en campos mexicanos, socios internacionales de quienes aprender, capacidad financiera y tecnológica, y personal capacitado. Pero no está sola entre las empresas mexicanas que esperan beneficiarse en grande, publica la edición CEO de la revista Expansión, correspondiente a noviembre-diciembre 2013. Hay varias categorías importantes: las firmas que tienen el potencial de convertirse en operadoras independientes, las que ofrecerán servicios en mar y tierra a las operadoras, y las petroquímicas, que recibirán insumos hoy difíciles de conseguir. Su experiencia en el tema viene desde 2006, cuando entró al negocio energético tras la preocupación del uso de gas, cada vez más caro que sus filiales, la petroquímica Alpek y la autopartista Nemak, consumían en gran cantidad. Decidió ser socia minoritaria de la operadora texana de gas y petróleo Pioneer Natural Resource. El objetivo era cubrirse del precio en México al producir y vender gas en Estados Unidos. "Nos tocó demasiada suerte", relata Fernández. "Le pegamos a la cuenca más importante que ha habido, desde las más importantes allá de Arabia Saudita. Le pegamos a Eagle Ford, de los grandes descubrimientos que están transformando a Estados Unidos". Hoy, la pequeña subsidiaria estadounidense Newpek crece a gran velocidad y Alfa se prepara para ser una operadora independiente si la reforma que debate el Congreso le abre las puertas a una presunta revolución energética mexicana. El conglomerado regiomontano -que preside Armando Garza Sada, primo de Fernández- ya no sólo es socio menor en el yacimiento Eagle Ford en Texas: también adquirió operaciones propias en Oklahoma, Texas y Colorado. y se aprestaba a cerrar otra compra en Kansas. En México, opera campos maduros de Pemex junto con un socio. Gracias a esas operaciones, Alfa, número seis de 'Las 500 empresas más importantes de México' de la revista Expansión, acumula experiencia, expertos y tecnología para extraer gas y petróleo en el país. El verdadero atractivo de las licencias El 12 de diciembre de 2013 el pleno de la Cámara de Diputados aprobó la reforma energética por 353 votos a favor y 134 en contra, con lo que se abre la puerta a la entrada de capital extranjero al sector energético. El dictamen aprobado permitirá al Estado entablar diversos contratos para aprovechar el petróleo y gas natural, pero prohíbe de manera explícita las "concesiones", según se expresa en las modificaciones al artículo 28 de la Constitución. El artículo quinto transitorio de la reforma establece que las compañías podrán reportar los "beneficios futuros" para efectos contables y financieros de las asignaciones y contratos, reafirmando que todos los hidrocarburos son propiedad de la nación. Sin embargo, la definición del modelo de contrato para que las compañías privadas entren a la extracción y producción de hidrocarburos dictará el verdadero atractivo para las inversiones en el sector, pues si terminan diluyéndose en la redacción de la legislación secundaria, las empresas perderán interés, pero si se asemejan demasiado a la concesión puede generar litigios, anticiparon analistas. "Una cuestión muy importante ahorita sobre la definición de qué es una licencia. Para mí es que es muy parecida a una concesión, pero en qué manera es diferente, eso aún lo deben explicar (en la legislación secundaria)", expresó el director Duncan Wood, director en México del Mexico Institute del centro Woodrow Wilson International, con sede en Washington. Fernández Garza, exige concesiones durante la entrevista a la revista Expansión, realizada algunas semanas previas a la aprobación de la nueva ley. Y no se queda ahí: pide que no tengan limitaciones en el tipo de hidrocarburo que pueda extraer una concesionaria. "Si hacemos un agujero de 15,000 pies, que es más o menos el pozo promedio, ¿qué sale?", dice. "Todo lo que hay allá abajo, sale gas y petróleo, y gas líquido y condensados, y un montón de cosas, pentanos y butanos. Todo el mugrero (el reto) de las grandes inversiones, por ejemplo en Texas, es cómo separo todo". Las grandes inversiones en lutitas requieren concesiones para ser rentables, según su argumento. Cada pozo cuesta hasta 10 millones de dólares (mdd) y suelen hacerse cientos o miles en un campo. El escenario de apertura que imagina Fernández Garza es uno en que Pemex sigue explotando los yacimientos de aguas someras en el Golfo de México. Las grandes transnacionales del petróleo, como Exxon, Shell o BP, toman los mayores riesgos, y la posibilidad de mayores recompensas- al invertir en exploración y explotación de aguas profundas. Y empresas consideradas medianas en el mundo energético entran a disputarse las reservas que se cree hacen a México el cuarto poseedor mundial de gas shale. "No son suficientes los contratos de utilidad compartida de la propuesta del gobierno", dice el CEO. Más empresas quieren entrar al negocio Hay más empresas mexicanas que esperan beneficiarse en grande con la reforma energética. El conglomerado regiomontano Alfa está en buena posición porque está aprendiendo mucho de explotación en lutitas y porque es dueño de Alpek, una de las grandes petroquímicas. "En el camino le fuimos aprendiendo", dice Fernández Garza. "De tener un par de personas allá para tener participación en el tema, ahorita tenemos un montón de gentes aprendiendo activamente en toda la cadena. No nada más la parte administrativa: ya tenemos geólogos, ya tenemos expertos en perforación, ya tenemos maquinaria". Pero hay otras firmas expectantes, dice Ernesto Marcos, consultor de energéticas nacionales y extranjeras y ex director de Finanzas de Pemex. "Hay otras empresas mexicanas de servicios petroleros que están igualmente posicionadas como Alfa para convertirse en operadoras independientes", dice. Menciona a Grupo Diavaz, que da servicios de operaciones marítimas, exploración y producción, y a Grupo R, perforadora, exploradora, transportadora y operadora de campos de gas. También hay otras que pueden dar el salto a ser operadoras, agrega, como Perforadora Latina, Demar y la constructora ICA. Hay más: Grupo Carso puede construir plataformas marítimas y brindar servicios de perforación a través de su empresa CICSA, según un informe de la financiera Actinver. La compañía de la familia de Carlos Slim Helú ya le alquila a Pemex una de esas plataformas y construirá otras tres del tipo autoelevable por 250 millones de dólares (mdd). Además, su filial Tabasco perfora en Colombia. Grupo México, de Germán Larrea, compró en 2012 cinco plataformas marítimas y dos unidades modulares. Espera que le traigan cerca de 400 mdd en ingresos para 2015 por su arrendamiento a Pemex, según el mismo informe. Las petroquímicas, como Alpek y Mexichem, pueden salir ganando. "Utilizan petroquímicos básicos, producidos sólo por Pemex en territorio mexicano", cita un informe de Accival, la casa de bolsa de Banamex. "La reforma energética implica un aumento a largo plazo de la capacidad de petroquímicos básicos de México, al estabilizar y aumentar el suministro a largo plazo de materias primas clave". Por: Diego Graglia y Lourdes Flores http://www.cnnexpansion.com/especiales/2013/12/05/alfa-quiere-ser-operadora-privada