UNIVERSIDAD NACIONAL DE EDUCACIÓN “Enrique Guzmán y Valle” “Alma Mater del Magisterio Nacional” VICERRECTORADO ACADEMICO Dirección del Instituto de Investigación TÍTULO: “Violencia Familiar y Agresividad en Niños del 2° Grado de Educación Primaria en la I.E. Abraham Valdelomar Ugel 06 del Distrito Santa Anita Durante el 2010” Docente Investigador Responsable Mg. Víctor Nicanor QUISPE VALVERDE Docente Investigador Integrante Mg. Walter HERNÁNDEZ ALCANTARA Lic. Ermit Tolentino CHUMBIRIZA TORRES. Docente Investigador Colaborador Bach. Marcial Arturo BRAVO LALANGUI Mg. Víctor Hugo QUISPE RICALDI. Lic. Emperatriz Elsa RICALDI HUERTAS La Cantuta, Diciembre del 2010. 1 a.- Descripción del Trabajo a.1.-Título: “VIOLENCIA FAMILIAR Y AGRESIVIDAD EN NIÑOS DEL 2° GRADO DE EDUCACIÓN PRIMARIA EN LA I.E. ABRAHAM VALDELOMAR UGEL 06 DEL DISTRITO SANTA ANITA DURANTE EL 2010” b.- Ejecutores: Mg. Víctor Nicanor QUISPE VALVERDE Profesor Asociado de Física, D.E.- Docente investigador TitularResponsable. Mg. Walter HERNÁNDEZ ALCANTARA Profesor Asociado de Física, D.E.- Docente investigador participanteIntegrante. Lic. Ermit Tolentino CHUMBIRIZA TORRES. Profesor Asociado D.E...-Docente investigador participante - integrante Mg. Víctor Hugo QUISPE RICALDI. Profesor Auxiliar Contratado TP. Docente investigador colaborador Lic. Emperatriz Elsa RICALDI HUERTAS Profesora Auxiliar Contratada TP. Docente investigadora colaboradora Bah. Marcial Arturo BRAVO LALANGUI Profesor Jefe de Práctica nombrado TC..-Docente investigador integrante c.- El problema de investigación c.1.- Justificación de la investigación: Con la presente investigación se pretende examinar la importancia teórica del tema de disfunción familiar en nuestro medio, ella no constituye aún una línea 2 de investigación relevante y, por lo tanto, no hay una sistematización teórica al respecto. Esta investigación se constituirá en la información empírica de base, que llenará el vacío del conocimiento existente, así como generará otras interrogantes en futuras investigaciones; ésta tiene mayor importancia porque permitirá estudiar a los niños quienes provienen de familias disfuncionales en relación con la agresividad física y verbal, la ira y hostilidad que presentan en la Institución Educativa; además permitirá determinar si éstos sufren la violencia doméstica. c.2.- El estudio de investigación que se ha realizado es de vital importancia, porque en la medida que los datos obtenidos serán valiosas informaciones, además servirán de fuentes fidedignas a diferentes tipos de investigaciones futuras. c.3.- Otros factores que contribuyeron en la realización del presente trabajo está relacionada con la relevancia pedagógica, ya que el presente estudio arrojó resultados inéditos, éstos contribuirán como insumos para la implementación de estrategias metodológicas y programas psicopedagógicos que faciliten la tarea docente en los tres niveles de Educación Básica Regular en todas las Instituciones Educativas Estatales de las zonas urbanas y rurales del Perú, en pro de la mejora de la calidad educativa y los aprendizajes de los estudiantes a partir de enfoques teóricos y prácticos. d. Planteamiento del problema: d.1.- Formulación del problema d.1.1.- Problema general ¿Cuál es la relación de la violencia familiar con la agresividad en los alumnos del 2° de Educación Primaria en la I.E. Abraham Valdelomar, UGEL N°06, Distrito de Santa Anita, 2010? 3 d.1.2.-Problemas específicos PE1: ¿Cuál es la relación de la cohesión familiar con la agresión física en los alumnos del 2° de Educación Primaria en la I.E. Abraham Valdelomar, UGEL N°06, Distrito de Santa Anita, 2010? PE2: ¿Cuál es la relación de la cohesión familiar con la hostilidad en los alumnos del 2° de Educación Primaria en la I.E. Abraham Valdelomar, UGEL N°06, Distrito de Santa Anita, 2010? PE3: ¿Cuál es la relación de la cohesión familiar con la ira en los alumnos del 2° de Educación Primaria en la I.E. Abraham Valdelomar, UGEL N°06, Distrito de Santa Anita, 2010? PE4: ¿Cuál es relación de la cohesión familiar con la agresión verbal en los alumnos del 2° de Educación Primaria en la I.E. Abraham Valdelomar, UGEL N°06, Distrito de Santa Anita, 2010? e. Hipótesis e.1. Hipótesis principal HG: La violencia familiar influye significativamente en la agresividad en los niños del 2° grado de Educación Primaria de la I.E. N°106 “Abraham Valdelomar” de la UGEL N°06 del Distrito de Santa Anita durante el 2010. e.1.1.- Hipótesis Derivadas. HE1: Los niños de 2° grado de Educación Primaria de la I.E. “Abraham Valdelomar” reportan un nivel predominante en la frecuencia de violencia familiar. 4 Ho: Los niños de 2° grado de Educación Primaria de la I.E. “Abraham Valdelomar” no reportan un nivel predominante en la frecuencia de violencia familiar. HE2: Los niños de 2° grado de Educación Primaria de la I.E. “Abraham Valdelomar” comunican un nivel predominante en la intensidad de violencia familiar. Ho: Los niños de 2° grado de Educación Primaria de la I.E. “Abraham Valdelomar” no comunican un nivel predominante en la intensidad de violencia familiar. HE3: Los niños de 2° grado de Educación Primaria de la I.E. “Abraham Valdelomar” presentan un nivel regular de ajuste de agresividad. Ho: Los niños de 2° grado de Educación Primaria de la I.E. “Abraham Valdelomar” no presentan un nivel regular de ajuste de agresividad. HE4: Existe una relación directa y significativa entre la frecuencia de la violencia familiar y la agresividad en los niños de 2° grado de Educación Primaria de la I.E. “Abraham Valdelomar”. Ho: No existe una relación directa y significativa entre la frecuencia de la violencia familiar y la agresividad en los niños de 2° grado de Educación Primaria de la I.E. “Abraham Valdelomar”. 5 HE5: Existe una relación directa y significativa entre la intensidad de la violencia familiar y la agresividad en los niños de 2° grado de Educación Primaria de la I.E. “Abraham Valdelomar”. Ho: No existe una relación directa y significativa entre la intensidad de la violencia familiar y la agresividad en los niños de 2° grado de Educación Primaria de la I.E. “Abraham Valdelomar”. f.- Objetivos f.1.- Objetivo general: Analizar la influencia de la violencia familiar en la agresividad en niños del 2° grado de Educación Primaria de la I.E. N°106 “Abraham Valdelomar” de la UGEL n°06 del Distrito de Santa Anita durante el 2010. f.2.- Objetivos específicos:. f.2.1.- Evaluar el nivel de frecuencia de la violencia familiar que presentan los niños del 2° grado de Educación Primaria de la I.E. n°106 “Abraham Valdelomar” de la UGEL n°06 del Distrito de Santa Anita durante el 2010 f.2.2.- Evaluar el nivel de intensidad de la violencia familiar que presentan los niños del 2° grado de Educación Primaria de la I.E. n°106 “Abraham Valdelomar” de la UGEL n°06 del Distrito de Santa Anita durante el 2010 f.2.3.- Evaluar el nivel de agresividad que presentan los niños del 2° grado de Educación Primaria de la I.E. n°106 “Abraham Valdelomar” de la UGEL N°06 del Distrito de Santa Anita durante el 2010 f.2.4.-Determinar la relación que existe entre la frecuencia de la violencia 6 familiar en la agresividad que presentan los alumnos del 2° grado de Educación Primaria de la I.E. N°106 “Abraham Valdelomar” de la UGEL N°06 del Distrito de Santa Anita durante el 2010 f.2.5.-Determinar la relación que existe entre la intensidad de la violencia familiar en la agresividad que presentan los alumnos del 2° grado de Educación Primaria de la I.E. N°106 “Abraham Valdelomar” de la UGEL N°06 del Distrito de Santa Anita durante el 2010 g.-. Variables g.1.- Variables. Las variables que se utilizaron en investigación fueron: a. Variable Independiente: (Causa) - b. Variable Dependiente: (Efecto) - c. VI: Violencia familiar. VD: Agresividad. Variable Intervinientes: - Vi1: Sexo: niños y niñas. - Vi2: Edad: 06-09 años de edad. - Vi3: Condición Socioeconómica: Media y Baja. g.2. Operacionalización de variables. A. Dimensiones e indicadores en la variable independiente. - “Violencia familiar”. B. Dimensiones e indicadores en la variable dependiente. - “Agresividad”. - g 3. Dimensiones e indicadores. 7 VARIABLES DIMENSIONES V.I: • Cohesión INDICADORES • Tipo de familia: Violencia Amalgamada familiar Conectada Separada Desligada • Adaptabilidad • Estructura Flexible Caótica • Dependencia. • Puntaje del • Desajuste familiar. inventario de • Desajuste social. agresividad V.D: • Agresividad. al desajuste en el Agresividad • Desarraigo nacional. comportamiento • Aprobación social. psicosocial. debido h.- Limitaciones de la investigación: Para la realización del presente trabajo de investigación no se han contado con limitaciones de carácter teórico ni práctico puesto que los miembros del grupo cuentan con la preparación en la especialidad y la experiencia necesaria para hacerlo. Además, hubieron limitaciones de material bibliográfico, ni financieros, ni 8 en la recolección de los materiales, debido a que con anticipación se realizaron las coordinaciones de estudios de factibilidad y se cursaron la comunicaciones con distintos investigadores interesados en el tema en el ámbito nacional mediante el Internet. i.- Descripción de las características de la investigación: El estudio realizado en un primer momento, ha sido de tipo descriptivocorrelacional. Según Hernández, Fernández y Baptista ( 2006) los estudios descriptivo buscan especificar las propiedades importantes de personas, grupos, comunidades o cualquier otro fenómeno que sea sometido a análisis., es debido a ello que se han descrito a las variables violencia familiar y la agresividad en niños del 2° grado de primaria; luego en un segundo momento se determinó la influencia entre ambas usando el diseño correlacional. j.- Marco téorico El espacio de la familia es el mejor lugar para que el niño se sienta querido. Los apegos que los niños desarrollan con sus padres y hermanos generalmente duran toda la vida, sirven de modelos para relacionarse con los compañeros de estudios, con sus profesores y con otras personas con quienes tomarán contacto a lo largo de su desarrollo. Dentro de la familia el ser humano experimenta sus primeros conflictos sociales. El tipo de disciplina que ejercen los padres, sus relaciones interpersonales, las discusiones familiares entre hermanos, etc., proporcionan al niño importantes lecciones de conformidad, de cooperación, de competencia, de oportunidades para aprender cómo influir en la conducta de los demás. Los hijos que viven con un solo padre, están más proclives a experimentar ansiedad. La ansiedad en el niño es uno de los síntomas más comunes de la 9 tensión emocional. Es lógico atribuir estos signos, entre otros factores, a la rapidez con que cambia la sociedad, al fenómeno de la competencia y del individualismo en todos los ámbitos sociales (familia, escuela, comunidad), lo cual genera ansiedad, conflictos, frustración y otros problemas emocionales; una sensación incómoda de tensión y aprensión hace que el sujeto se perciba a sí mismo muy intranquilo, se traduce en problemas de conducta y/o de rendimiento académico en la escuela. Un ambiente familiar cargado de conflictos interpersonales provoca déficit en desarrollo emocional, además genera distintos niveles de ansiedad, desórdenes ansiosos; si los padres sufren ansiedad y/o depresión, se producen conflictos y discordias en forma sostenida. Las experiencias familiares negativas pueden influir en la autopercepción del niño, en su capacidad de control emocional y conductual, y estas cogniciones pueden contribuir a que se desarrolle y mantenga la ansiedad. Las agresiones en las familias disfuncionales acusan desajustes emocionales en los hijos, además los vuelven agresivos en la escuela. Los niños criados bajo condiciones de abusos físicos y emocionales tienen más posibilidades de desarrollar trastornos psicológicos y problemas de conducta. Las alteraciones conductuales son siempre la señal de un problema. Muchas de esas alteraciones son el resultado de relaciones intrafamiliares disfuncionales o escasas. Son comunes las actividades de escape de una vida familiar desagradable: abandono del hogar, actividad sexual temprana y conducta antisocial. Los hijos de 10 familias con altos niveles de violencia pueden no aprender las habilidades sociales: la negociación y el compromiso. Un factor decisivo en la adaptación adecuada de los hijos después de la separación tiene relación con el manejo eficaz del estrés del padre que vive con los hijos, en cómo los protege de los conflictos familiares y participa de una paternidad democrática. El afecto es la dimensión del estilo parental que muestra una relación más clara y menos controvertida en el desarrollo del niño. Durante los años de la infancia, el cariño y el apoyo parental son fundamentales. Los niños que tienen una relación afectuosa y cálida con sus padres suelen mostrar un mejor ajuste o desarrollo psicosocial, incluyendo confianza en sí mismos, competencia conductual y académica, autoestima y bienestar psicológico, menos síntomas depresivos y menos agresividad. Además cuando el afecto impregna las relaciones parentofiliales, es más probable que los hijos se muestren receptivos a los intentos socializadores de sus padres. En cambio, la falta de cohesión familiar, la carencia de amor e importancia comunicativa en la relación padre-hijo, aparecen fuertemente relacionadas con la agresividad del niño en la Institución Educativa y también tiene mucha relación con las consecuencias de una familia disfuncional en su desarrollo por la falta de afecto. Se comprueba que bajo la etiqueta de control, suelen incluirse aspectos o dimensiones diferentes de la relación entre padres y el niño, así puede hablarse del control para hacer referencia al establecimiento de sus límites (actividades no 11 permitidas, horarios, etc.), a la exigencia de responsabilidades y a la aplicación de sanciones por su incumplimiento. Otro aspecto de control sería la vigilancia o supervisión directa, en la que los padres observan el comportamiento de sus hijos, para intervenir ante cualquier tipo de infracción, mala conducta o agresión. La agresión es una conducta dirigida a herir causar daño físico psicológico, verbal y moral, por tanto el uso de la acción física directa en agravio de otro, tanto como las injurias verbales más procaces, el sarcasmo, la burla sangrienta, la ironía mordaz, la ira y hostilidad constituyen formas de un comportamiento emocional potencialmente agresivo ( Muñoz Marín, 1998, p. 109). La mayoría de las personas aprende por experiencia o por procesos de socialización y adaptación, porque la agresión abiertamente expresada es rechazada socialmente, por lo que utilizan otras formas encubiertas de agresión como la indiferencia, “el raje” o el “chisme”. La agresividad humana es aquella clase de conducta caracterizada por el acto de atacar con la finalidad de provocar injuria a otro individuo. Su amplia gama expresiva comprende de la más tenue agresión verbal hasta el ataque violento a personas o cosas incluyendo el propósito de quitar la vida” (Alarcón, Reynaldo. “Psicología, pobreza y su desarrollo (CONCYTEC, 1998, p. 126). La agresión puede seguir también a la frustración, cuando la persona se ve impedida de alcanzar una meta o de realizar una acción, también cuando 12 experimenta la insatisfacción de una necesidad o un deseo. Por eso una persona hambrienta es una persona frustrada y en consecuencia potencialmente agresiva. Ellis (1986) nos dice que “la agresión adquirida por condicionamiento clásico por el uso de los premios y castigos para moldear la conducta”. A veces la agresión se canaliza a través de formas de conducta aceptables socialmente como los deportes y otros espectáculos. Otros son inaceptables como la violencia, la delincuencia y los conflictos. La familia funcional y su relación con los hijos La familia es una estructura dinámica donde cada miembro cumple un rol determinado, además se debe considerar que la armonía familiar debe ser la base del grupo familiar; es decir, de padres e hijos. Si la familia mantiene excelentes relaciones se observaría la atención de los padres a los hijos, la preocupación para que no les falte nada, una buena alimentación, los hijos responden en el mismo sentido de las atenciones de los padres, equilibrio, coherencia completa de roles que en la mayoría de los casos contribuyen a la armonía familiar. El grupo familiar encausa el sentimiento de unidad familiar, conciencia sobre la importancia de hacer cambios positivos, buscar el sentido de una felicidad plena. La falta de comunicación en grupo familiar obstaculiza todo progreso, la familia no vive a plenitud, se generan falsas experiencias dentro de los integrantes, nos apartamos de un modelo de familia más armónica. También dentro del grupo familiar funcional la falta de tolerancia impide una mayor integración del grupo, el proceso se frustra debido a la oposición de algunos miembros. 13 En contraste, los padres deben ser pacientes, flexibles, comprensivos, la tolerancia es una virtud familiar. El proceso de tolerancia en el grupo familiar no se lleva en forma mecánica o automática, necesita una participación activa y consciente de cada uno de los miembros de la familia. La familia funcional y los problemas que enfrentan De acuerdo con Eguiliz (2003), la familia funcional en relación con su vida familiar armónica enfrenta una serie de problemas entre sus miembros: 1) La falta de salud física, mental y moral de sus miembros. Sus miembros deben cuidar su salud, porque es la base de la salud hogareña, acostarse tarde desgasta energía, no comer a la hora causa un desbalance orgánica, cuando se da la enfermedad los padres enfrentan mutuas acusaciones de descuido a los hijos. 2) Falta de religiosidad. La humildad y el espíritu religioso se afectan por la vida desordenada de sus miembros, es un factor negativo en la integración de valores en la familia. 3) Inseguridad emocional, social y económica. La vida familiar proporciona seguridad emocional, la estabilidad armónica; los hijos deben sentirse amados, con los lazos más estables en el seno de su hogar. 4) Falta de madurez emocional de los miembros de la familia. Los padres inmaduros emocionalmente, por su juventud, no tienen la experiencia necesaria para educar a sus hijos, se percibe en este caso la rebeldía de los hijos, los conflictos se presentan por la inmadurez de la pareja que transmite patrones negativos a los hijos. 5) Educación desigual de los padres. Los matrimonios deberían realizarse entre personas de igual educación, la educación desigual desvincula en vez de unir a la pareja; el roce constante y disconformidades determinan la disolución del vínculo familiar. 6) 14 Separación de la familia por diversas causas. Naturalmente afecta la vida familiar; sin embargo, es necesario para el bienestar de las integrantes, por mejoras económicas o una estabilidad emocional. 7) Personas ajenas al núcleo familiar. Los parientes cercanos (suegros, hermanos, cuñados, sobrinos) no actúan de acuerdo con los principios de esta, entorpecen el estilo de vida y generan malestar, incomodidad. Los conflictos en la familia funcional Los conflictos familiares en la familia funcional son el reflejo de la situación del grupo, en determinados momentos de crisis, se presenta con estados de desarmonía, desequilibrio y sin dirección determinada por problemas de diferente naturaleza entre sus miembros, ya sea carácter económico, de salud, sentimental, etc. La familia funcional como organización social descansa sobre la base de profundas necesidades emocionales, costumbres, poderosas fuerzas socioemocional que se nutren de principios e incentivos económicos, políticos, legales y religiosos. No se conoce otro ambiente social tan pródigo en contrastes, paradojas, conflictos y contradicciones. La familia funcional es un refuerzo donde el sujeto se aleja y se protege de las múltiples agresiones del mundo, la sobre dominación paterna constituye un factor de desequilibrio al generar un conflicto en los hijos, más en los pequeños engreídos. También la falta de diálogo es causa de conflicto, no se accede a un intercambio de ideas, sentimientos, información de problemas, necesidades, aspiraciones, una barrera impide el diálogo familiar, este problema se debe a 15 circunstancias diversas: 1) El trabajo recargado de los miembros familiares, con la consiguiente disminución de tiempo para llegar a un intercambio de experiencias entre los miembros del hogar. 2) El uso inadecuado y excesivo de los medios de comunicación social (MCS), principalmente de la TV que genera adicción a la violencia en los menores de edad. Las familias funcionales y la asistencia familiar La incidencia de hogares con experiencias tristes de separación temporal o definitiva de sus miembros, cada día es más frecuente, se convierte en una situación problemática como afirma la psicóloga Adelaida Shaat Gandolfo, en una situación que podría considerarse como parte del ciclo vital de la familia; es resultado de una situación de tensión y crisis, muchas parejas optan la figura jurídica del divorcio, considerando aceptable. Los padres no consideran las diferentes reacciones de los hijos según la edad, así en caso de esta investigación los niños de 3 a 6 años, aún están aprendiendo a diferenciar sus pensamientos, desarrollan sentimientos de culpa y confusión ante el divorcio de sus padres. Algunos pueden pensar “Quizás mi papá se quedaría en casa, si yo me portara mejor”, también puede presentar otras conductas que demuestran su ansiedad: mojar la cama, problemas en el sueño, agresividad constante en su vida personal. En cambio, los niños de 6 a 8 años presentan fantasías respecto a la reconciliación de sus padres y creen equivocadamente que tienen el poder para lograr que se reúnan de nuevo, piensan que pueden hablar con ellos, realizar actos fantásticos para acercarlos, luego entienden que no está en sus manos el lograr que las cosas vuelvan a ser como antes. 16 Ante la separación pueden presentar un descenso en su rendimiento académico, dificultades en su atención, en algunos casos tienen actitudes agresivas, suelen estar tristes y preocupados a diario. No es igual el divorcio con la situación de enfrentamientos, confrontaciones, pleitos y agresiones mutuas que afectan a los hijos, especialmente a los menores, común en el contexto de violencia e inequidad de género; los problemas y patologías de los miembros de una familia de dan en situación de separación o divorcio. Principios negativos presentes en la familia funcional Las familias funcionales presentan principios rígidos, implícitos y socialmente estereotipados, siguiendo lo que señala O´Neill (1996): 1) Posesión o propiedad del cónyuge (el marido y la mujer están atados el uno al otro). 2) Renuncia a la individualidad propia (uno sacrifica su propia identidad e individualidad al contrato). 3) Mantenimiento del frente-pareja, de la pareja como unidad (al igual que hermanos siameses debemos aparece siempre como pareja: el matrimonio en sí constituye el carné de identidad, como si uno no pudiera existir sin él). 4) Un compartimiento rígido y regulado (tareas, comportamientos y actividades estrictamente separados por líneas predeterminadas de acuerdo con conceptos anticuados de macho y hembra). 5) Fidelidad absoluta (física e incluso psicológicamente atados, a través de la coacción y no de la elección). 6) Exclusividad total (un acoplamiento impuesto preservará la unión de la pareja). Muchas veces se forma una pareja creyendo que el amor carga todo, que es posible adaptarse a vivir juntos. Sin embargo, muy pronto se percibe elementos sorpresivos en cada uno de los cónyuges, se convierten en trabas para la relación. 17 Tipos de conflictos en la familia: Conflictos “abiertos” Son aquellos que se produce por una discusión, “choque” de dos o más miembros de la familia, a partir del cual puede iniciarse un periodo de distanciamientos más o menos largo. Conflictos “encubiertos” Este tipo de conflictos se caracteriza por sentimientos negativos que, no obstante, no vienen acompañados por una confrontación directa de las personas implicadas, que, al acumularse sin ser expresados, favorecen el resentimiento y el enfriamiento de la relación, generando una crisis estructural por una sucesión de pequeños episodios que producen roces permanentes de la pareja; el hombre y la mujer se encierran en un circuito en el que están mutuamente pendientes de sus reacciones. El amargo resentimiento favorece la metamorfosis del amor en odio. El incremento de tensión y hostilidad es el resultado del grado de crueldad y de destrucción de parejas rotas, dispuestas a infringirse mutuamente, oscilando desde un empujón hasta un homicidio, por el descontrol y los inevitables golpes con la violencia verbal descargando la furia en los más débiles: los niños. La falta de habilidades de auto-afirmación es una causa frecuente de este tipo de conflictos. Las diferencias de opinión, de intereses entre los familiares son inevitables. Incluso hay ocasiones en las cuales resulta muy difícil evitar un choque, conflicto. Los niños aprenden en su hogar modelos de relación violentos, 18 tienden a reproducirlos a través de conductas delictivas o actos de maltrato, los conflictos provocan en los niños sufrimiento infantil emocional crónico, retraso en el crecimiento personal. Otros indicadores son: retraso en el crecimiento, retraso intelectual y del lenguaje, falta de expresividad, apatía, dificultades para establecer vínculos sociales, desórdenes post traumáticos y emocionales, muchos experimentan sentimientos de escasa autoestima y sufren de depresión y ansiedad. Un grupo familiar, cuyo modo de resolución de conflictos es violento, será un modelo violento para los hijos testigos de esa violencia, quienes repetirán las mismas conductas cuando formen sus propias parejas, constituyéndose en un factor de riesgo, además de ser un peligro para los miembros más débiles de la familia. La cohesión en el funcionamiento familiar Las familias cohesionadas, según David Olson (1996), son las que presentan criterios de unidad en estas familias y tratan de mejorar la autonomía y la individualidad de los diversos miembros de la familia, al respecto sobre esta característica se han hecho numerosos estudios, es interesante las investigaciones de Wynne y Cols (1958) que fueron los primeros en informar que algunas familias particularmente las que conviven con un paciente esquizofrénico, muestran un excesivo interés por la unión familiar, lo describieron con el término de Pseudo-Mutuality, en esta situación se seguían afirmando las divergencias de un miembro respecto de algún aspecto concreto de las expectativas familiares, esto es vivido como una ruptura global y no como lo que es, apenas un 19 distanciamiento respecto de tal aspecto concreto que, por lo demás, es algo sólo personal. Para Steerling (1974), la alta cohesión familiar en algunos casos analizados puede ser atendida como una fuerza centrípeta que lleve entre sí, intelectualmente y emocionalmente, a los miembros de la familia esta cohesión contrasta con la fuerza centrífuga, que empuja hacia afuera a los miembros de la familia del sistema familiar. Karpol (1976) propuso un modelo para descubrir las relaciones interpersonales y las diversas etapas por las que atraviesan los conceptos del “yo” y “nosotros”. En este sentido, el primer estudio de inmadurez estaría caracterizado por la ausencia de distancia entre el yo y el nosotros, cuya relación es una pura fusión de las personas; más tarde, en la etapa de la madurez, los cónyuges sostienen en relación interpersonal mediante el diálogo y la comunicación, garantizando la distancia de ellos; a través de este proceso, las personas logran una relación más madura con los demás, a la vez que es consciente de su individualidad. Según David Olson, la categoría de cohesión familiar es un modelo que tiene dos componentes: el vínculo emocional y el nivel de autonomía individual que una persona experimenta en el ámbito de su propia familia. En la cohesión podemos distinguir hasta 4 tipos: Cohesión desprendida. Donde se da la primacía del yo, donde se da la ausencia de unión afectiva entre los familiares, donde la ausencia de lealtad a la familia es muy común y también presenta una 20 alta independencia personal. Cohesión separada. Primacía del yo con presencia de nosotros, se da una moderada unión afectiva entre los familiares, se da cierta lealtad e interdependencia entre los miembros de la familia, aunque con un cierto sesgo hacia la independencia. Cohesión unida. Primacía del nosotros con presencia del yo, se presenta una considerable unión afectiva entre los familiares, cierta lealtad, fidelidad e interdependencia entre los miembros de la familia; aunque con algún sesgo hacia la independencia. Cohesión enredada. Primacía del nosotros, máxima unión afectiva entre los familiares, exigencia de fidelidad y lealtad a la familia y alto grado dependencia a las decisiones tomadas en común. También se ha podido notar algunas características muy determinantes dentro de la cohesión familiar: el vínculo emocional, la independencia, los límites familiares, las coaliciones, el tiempo, el espacio, los amigos, la toma de decisiones, los intereses, el ocio etc., todo ello interviene de manera directa en la cohesión familiar. La adaptabilidad en el funcionamiento familiar La familia se entiende como un sistema morfostático, en esta unidad los miembros interactúan y se relacionan mutuamente en una sociedad que cambia constantemente, estas características son muy notables, hay familias que intentan rígidamente mantener la homeostasis, a través de las sucesivas fases de su desarrollo, éstas mayormente son altamente disfuncionales y atípicas (Bernard, 1977, citado por Jackson, 1977). 21 Quizás algunos estudiosos plantean los conceptos de Homeostasis (estabilidad) y morfogénesis (cambio) necesarios y considerados en un sistema familiar viable. Hill y Rugers (1964) afirman que la familia era una constitución capaz de cambiar, adaptarse y reordenar su estructura, dados los continuos cambios en edad, composición familiar y necesidad de una redefinición de las reglas. Así, por ejemplo, una familia bloqueada por un equilibrio rígido a un patrón morfostático genera siempre un problema. También como expresa (Rapporrt, 1962, citado por Arancibia, 1997), la familia debe ser capaz de adaptarse a las crisis normales de su travesía vital, ya sea la transición a la paternidad, el comienzo de los hijos en la escuela, la promoción y aceptación de la autonomía en la adolescencia, la educación de los hijos, etc. Angelí (1936) sostiene que la adaptabilidad familiar es una dimensión relevante para entender el éxito familiar en el tratamiento de los procesos estresantes, provocado por el paro laboral; Kieren y Tallman (1971) consideran la habilidad de cada cónyuge para hacer frente de modo afectivo, a una nueva situación, cambiando los roles y las estrategias, esta habilidad de los cónyuges depende de 3 factores: flexibilidad, empatía y la motivación. Para Sprenkle y Rusell (1979), adaptabilidad conyugal, denominada también adaptabilidad familiar, es la habilidad de un sistema conyugal o familiar para cambiar su estructura de poder, los roles y las reglas de la relación en 22 respuesta al estrés producido por una situación concreta y determinada por el desarrollo vital evolutivo de toda la familia. Sobre la base de lo dicho David Olson (1996) nos señala 4 tipos de adaptabilidad y son las siguientes: Adaptabilidad caótica. Ausencia de liderazgo, cambios aleatorios de roles, disciplina irregular y demasiados cambios. Adaptabilidad flexible. Liderazgo compartido de roles, disciplina democrática y cambios cuando son necesarios. Adaptabilidad estructurada. Liderazgo a veces compartido, roles en ocasiones compartidas, cierto grado de disciplina democrática y los cambios ocurren cuando se solicitan. Adaptabilidad rígida. Liderazgo autoritario, roles fijos, disciplina estricta y ausencia de cambios. La comunicación en el funcionamiento familiar Esta variable es considerable como un elemento modificable en función de la posición de los matrimonios y familias a lo largo de las otras dimensiones: cohesión y adaptabilidad familiar. Las habilidades positivas para la comunicación son muchas; por ejemplo, tenemos que la empatía, los comentarios de apoyo, lo escucha atenta, los diálogos fluidos, las entremeses, etc. facilitan a las familias y los matrimonios la puesta en común de intereses compartidos, cuando queremos expresar nuestras necesidades y preferencias, respecto de sus modos de funcionar como cónyuges y como familias funcionales. También hay aspectos negativos y causan la reparación de la unidad familiar; es decir, las habilidades negativas para la comunicación (dobles 23 mensajes, dobles vínculos, críticas, etc.) van minimizando la habilidad de la pareja y de la familia para ponerse en común acuerdo y compartir un sentimiento; por lo tanto, van restringiendo los posibles desplazamientos que se van presentando al interior de las mismas y afectan a las otras dimensiones: la adaptabilidad y la cohesión. No podemos ignorar por razones obvias la importancia de la comunicación al interior de las familias para lograr la funcionalidad en sentido óptimo, su influencia en la dinámica conyugal va propiciando un adecuado funcionamiento de los roles que deben cumplir todos sus miembros en general. Las crisis manifestadas en los conflictos familiares Crisis de evolución o del ciclo vital. Es inevitable una crisis en cada etapa vital. Son los conflictos más esperados y universales, requieren cambios dentro del sistema familiar. Algunos de estos cambios son repentinos o dramáticos y otros leves y graduales. Son crisis reales y deberían ser manifiestos. Estas crisis están determinadas social o biológicamente. No se pueden prevenir. Los problemas aparecen cuando la familia intenta impedir las crisis, en lugar de definirla y adaptarse; o cuando intentan que sean detenidas o se produzcan en forma prematura. Algunos ejemplos son: jubilación, matrimonio de uno de los hijos, entrada en la pubertad, vejez. Crisis externas. Son sucesos inesperados. Son las más simples. El gran peligro aparece cuando se buscan culpables y se comienza a pensar en lo que se podría haber hecho, para evitar la crisis en vez de tratar de adaptarse a la 24 situación. Algunos ejemplos son: pérdida repentina del empleo, muerte imprevista de un miembro, un accidente. Crisis estructurales. Son las más complicadas. Hay crisis reiteradas (la familia repite antiguas crisis). Lo más factible es que la tensión surja de fuerzas encubiertas e internas. Estos conflictos tratan de evitar que se produzca un cambio. Por ejemplo, familias con miembros violentos, alcohólicos, con un miembro que tiene reiterados intentos de suicidio. La experiencia que más nos predispone a recurrir a la fuerza despiadada para aliviar nuestras frustraciones, es haber sido objeto o testigo de actos de agresión maligna repentinamente durante la niñez. Con el tiempo optan por el camino de la agresión para solventar conflictos y, una vez alcanzada la madurez, reproducen el ciclo de violencia maltratando a sus propios hijos. En este tipo de crisis, las relaciones paterno-filiales se ven afectadas por sentimientos de inseguridad, impotencia, depresión; todo esto agudiza la tensión. El conflicto entre la pareja al aumentar el nivel de hostilidad provoca un aumento del comportamiento agresivo; el castigo físico hacia los niños es socialmente más aceptado, se produce un desplazamiento de la agresividad hacia el niño favoreciendo de esta manera a la aparición de problemas de orden del desarrollo personal social de niños y niñas, incremento en los problemas de salud, disminución marcada en el rendimiento escolar, problemas del aprendizaje. Crisis de atención. Se presenta en familias con uno o más miembros desvalidos o dependientes. Este miembro mantiene a toda la familia aferrada con 25 sus reclamos de cuidado y atención. Las crisis más graves se presentan cuando se requiere una ayuda tan especializada que no se puede sustituir la labor en caso de ser necesario. Por ejemplo, si no viene la enfermera alguien debería ausentarse de su trabajo. Ejemplos de estas crisis involucran a personas que dependen de algo externo para su sostén económico, o quienes dependen de personas externas para el cuidado de uno de los miembros, etc. El conflicto es menos problemático si es manifiesto, ya que la familia puede recurrir a personas externas e incluso unirse para recibir ayuda. Si es oculto nadie se entera y resulta más difícil su solución. Si la tensión es habitual (siempre sucede lo mismo), puede resultar molesta, más que procurar a la familia. Por ejemplo, cuando un miembro que se alcoholiza a diario. Las familias que identifican la tensión como proveniente desde afuera son familias en las que nadie acepta la responsabilidad de cambio. (Minuchin, 1997). Estas crisis que desencadenan los conflictos pueden surgir por lo siguiente: diferencias de opinión, una inadecuada distribución de las responsabilidades, falta de comunicación entre los miembros de la familia, falta de comprensión o empatía, tener miembros violentos, alcohólicos, adictos a drogas, violencia intrafamiliar, conflictos de intereses, problemas económicos. La familia: contexto de desarrollo y socialización en la infancia La familia es, para la mayoría de las personas, el primer contexto de desarrollo, un contexto en el que el niño modelara su construcción como persona, en el que establecerá las primeras relaciones con otros y en el cual desarrollará 26 una imagen de sí mismo y del mundo que le rodea. Y este desarrollo se producirá en un escenario de relaciones, intenciones y actuaciones en las que el niño desempeñará un papel protagonista y activo. La calidad y cualidad de las relaciones interpersonales que viva en este contexto dejarán sin duda una huella significativa en su esencia como ser individual y social. Las relaciones familiares –desde una perspectiva de construcción conjunta, revisando el contexto familiar como primero y más importante contexto de socialización infantil –resultan inevitables pensar en la familia como elemento original y configurador de las características personales futuras de niños y adolescentes, debiéndose a cuatro razones básicas: 1) las influencias familiares primero ocurren en el tiempo. 2) Son, además, las más persistentes. 3) Están dotadas de especial intensidad y ejercen influencia en las relaciones posteriores fuera de la familia. 4) Ejercen especial influencia en el ámbito social y personal. La familia es el contexto más adecuado para la crianza y educación de niños y adolescentes, porque se ha mostrado que es el mejor promotor del desarrollo personal y social; es el agente con más capacidad de protección en situaciones de riesgo. Si bien parece claro su papel en el desarrollo personal y social del niño, no resulta tan fácil explicar las vías y mecanismos mediante los cuales se lleva a cabo esta influencia educativa sobre el desarrollo infantil. Tradicionalmente se ha propuesto que los niños adquieren sus características psicológicas como consecuencia de la influencia que reciben de sus padres con carácter unidireccional. Desde el modelo tradicional de socialización familiar, los padres felicitan cierto estilo de interacción que determina 27 el tipo de relación padres-hijos y las consecuencias evolutivas a él asociadas. Son numerosos los trabajos que podemos citar al respecto, pero cabe destacar los estudios sobre estilos de apego y estilos de socialización familiar. En referencia a las relaciones afectivas (estilos de apego), la familia constituye el sistema básico que garantiza la seguridad emocional del niño. El desarrollo de la teoría del apego, a partir de sus formulaciones iniciales (Baldwin, 1998) y con posteriores contribuciones en nuestro propio marco cultural en una situación de juego interactivo padres-hijos, una pieza clave para conocer cómo se forman los primeros-vínculos afectivos que servirán al niño para las relaciones que mantendrá en contextos extra familiares. A partir de una historia de apego, segura, consistente y estable, el niño internalizará un modelo de representación de sí mismo y de las relaciones con los otros, confiado y positivo. La capacidad de vinculación emocional se forja, por tanto, en el contexto familiar y constituirá una base de operaciones a partir de la cual el niño deseará explorar y conocer el exterior y también a los otros. En tal sentido, el tipo de apego seguro se relaciona con unas figuras que cumplen adecuadamente su función: estar disponibles, percibir y responder a las demandas del niño de forma coherente, ser emocionalmente estables y mantener formas de interacción armónica e íntima con sus hijos. Además de asegurar afectivamente a sus hijos, los padres deben poner límites y normas en el comportamiento de los suyos para garantizar unas pautas educativas y un futuro de adaptación social. Ambos aspectos implicados en la relación padres-hijos (afecto y control) son considerados las dimensiones básicas que caracterizan los estilos de socialización en el marco familiar. Los estilos educativos (estilos de 28 socialización familiar) son el conjunto de metas estrategias de socialización que los padres emplean con sus hijos; es decir, lo que los padres desean que ocurra respecto a sus hijos y los medios para alcanzar esos estados deseables. Las expectativas y metas educativas que guían a los padres en su tarea de socializar a los hijos, constituyen auténticas guías para la acción educativa. Esta acción educativa es ejercida por los padres mediante un rango variado de estrategias de socialización. Entre los intentos por sistematizar dichas estrategias de socialización cabe destacar la tipología aportada por Baumrind (1973; citado en Ginsburg y Bronstein, 1993) y su reformulación posterior por MacCoby y Martín (1983, citado en Coloma, 1993), así como la clasificación de Hoffman (1970). Baumrind identifica tres estilos de control parental: democrático (o autoritativo), autoritario y permisivo. MacCoby y Martín (1983, citado en Coloma, 1993) redefinen estos estilos sobre la base de dos dimensiones: afecto y control. El afecto se refiere al grado de sensibilidad y responsabilidad de los padres ente las necesidades emocionales de sus hijos y el control a las demandas y nivel de exigencia que los padres imponen a sus hijos. Según el modelo tradicional de socialización, los comportamientos parentales asociados a cada tipología generan consecuencias en la conducta de los hijos, consecuencias que no se limitarán a los años de la infancia, sino se extenderán a la adolescencia y la juventud. Uno de los problemas del modelo clásico de socialización familiar es el carácter de exclusividad con que tiende a plantearse. Desde este modelo parece que los estilos educativos parentales constituyen el factor relevante que determina los rasgos de la personalidad infantil y juvenil. Podríamos considerar dos tipos de 29 limitaciones subyacentes a este análisis, relacionadas con sus características de exclusividad y unidireccionalidad: a) Su ignorancia o escasa consideración de otros factores antecedentes, simultáneos y posteriores a los estilos de socialización familiar. b) Su análisis insuficiente de los propios procesos intrafamiliares de socialización. El currículum educativo familiar hace referencia al conjunto de conocimientos, destrezas, actitudes, valores y normas de conducta que se van adquiriendo mediante la participación en procesos de enseñanza-aprendizaje con los miembros de la comunidad familiar. Dicho currículum tiene un carácter implícito u oculto, difícilmente pueden llegar a ser explicitadas las metas y contenidos por los miembros de la familia. Los padres organizan actividades y constituyen estilos participativos de relación con sus hijos, no siempre son conscientes de estar llevando a cabo dicha actividad. Sabemos que los motivos que guían a los padres cuando interactúan con sus hijos condicionan su actitud y la manera de estar en las actividades y tareas que comparten con ellos. García (1997) ha descubierto, analizando una muestra de madres de profesiones variadas con hijos de 7 a 10 años, la existencia de cuatro tipos de motivos al ser preguntadas sobre situaciones hipotéticas cotidianas de enseñanza-aprendizaje y ser observadas en situaciones de resolución de tareas con sus hijos: a) instruccionales (aprender, promover el desarrollo), b). Lúdicos (juego, diversión), c). Pragmáticos (acabar rápido, hacerlo bien) y d). De control (que me atienda, que siga mis instrucciones). 30 Se agrupó los cuatro tipos de motivos en dos factores: motivación centrada en los intereses del niño (motivos instruccionales y lúdicos) y motivación centrada en los intereses del adulto (motivos pragmáticos y de control), y encontró que las madres del nivel educativo medio-alto (sobre todo las de profesión enseñante) tendieron a elegir más los motivos centrados en el niño, mientras que las de nivel educativo bajo (fundamentalmente amas de casa), eligieron los motivos centrados en el adulto. Las primeras hacían además un mayor uso de estrategias más mediadoras o de guía, valoraban con más adecuación las competencias de sus hijos y organizaban la tarea adecuándola a dichas competencias. En cambio, las madres con motivación más centrada en el adulto (pragmática y de control) tendían a utilizar estrategias más asistenciales a sustituir en la tarea a sus hijos y a no preparar las tareas con el fin de simplificarlas. Otro aspecto valorable es la calidad del currículum educativo familiar, lo constituyen los contenidos de las actividades cotidianas en que los niños participan. Una observación sobre dichos contenidos, ha permitido observar que cada familia puede llevar a cabo una distribución muy diferente del tiempo para cada contenido. Además se aprecia una organización secuencial de las actividades cotidianas en cada familia, unas familias proporcionan a sus hijos ambientes más estructurados y predecibles, otras más inadecuados e impredecibles; también unas familias aparecen como más capaces que otras para proporcionar las actividades más adecuadas a sus hijos según la edad; es decir, para reconocer que cada edad requiere un espacio educativo propio. 31 Para Rodrigo y Acuña (1998), el análisis del escenario familiar, en términos de entornos de actividades cotidianas con actores, motivos y tareas dirigidas a metas culturales, nos abre la puerta a un abanico muy amplio de aplicaciones que giran en torno a la evaluación y optimización de entorno educativo de los hijos y que parte de la conceptualización de la familia como una comunidad de prácticas, un escenario donde padres e hijos piensan y razonan según sus concepciones, donde se viven y comparten experiencias que determinarán, en gran parte, el desarrollo psicológico de los hijos. Modelo Circumplejo de David H. Olson Este modelo fue desarrollado por David H. Olson, Candyce Russell y Douglas Sprenkle en 1979, con base en numerosas teorías y terapias, como una forma relativamente sencilla de describir el ambiente interno de la familia. Como ya se ha referido, estos autores consideran que la funcionalidad familiar puede valorarse según dos dimensiones: la cohesión y la adaptabilidad. La primera la definen como “el vínculo emocional que los miembros de la familia tienen entre sí” (Olson, 1989) y la segunda como “la habilidad de un sistema marital o familiar para cambiar su estructura de poder, las relaciones de roles y las reglas de las relaciones, en respuesta al estrés emocional y propio del desarrollo”. Consideran la COMUNICACIÓN una tercera dimensión que determina el movimiento en las dos anteriores, sin embargo, permanece implícitamente dentro del modelo. La cohesión, comprende dos aspectos básicos de la funcionalidad familiar: el vínculo emocional entre los miembros de la familia y el grado de autonomía individual de los mismos. Una cohesión 32 familiar extremadamente alta (amalgamada) da lugar a una excesiva unión de sus miembros y a una muy limitada autonomía individual; una cohesión extremadamente baja, lo contrario. La adaptabilidad, describe la capacidad del sistema marital/familiar para cambiar sus estructuras de poder (roles y reglas) en respuesta a las crisis familiares normativas o no normativas. Una adaptabilidad familiar extremadamente alta origina caos en el interior de la familia, esto es, la inexistencia de roles y reglas definidas; una adaptabilidad extremadamente baja, rigidez que impide amoldarse a las crisis del ciclo familiar. (Rakel, 1990). La conducta agresiva Orígenes de la conducta agresiva infantil Una de las grandes dificultades de los padres es saber cómo tratar la conducta agresiva de sus hijos, porque, a menudo, enfrentamos la desobediencia y la rebeldía de ellos. La agresividad es un trastorno que, en exceso y si no se trata en la infancia, probablemente originará problemas en el futuro: fracaso escolar, falta de socialización, dificultad de adaptación, etc. ¿Qué podemos entender por agresividad en los niños? Cuando se habla de agresividad, se habla de hacer daño, físico o psíquico a una otra persona. De una acción intencionada manifestada a través de patadas, arañazos, gritos, empujones, palabrotas, mordidas, corrida del pelo, etc., a otra persona. Este comportamiento es relativamente común y a menudo aparece cuando el niño cumple un año. Cuando el bebé nace, trae impulsos amorosos y 33 agresivos que, con el tiempo y con el cuidado de los padres, empezará a construir vínculos afectivos y a desarrollar sus relaciones personales. Ésta es una fase muy importante. Su personalidad será construida a partir de su conocimiento del mundo a su alrededor. Para eso es necesario que el bebé se sienta protegido y cuidado en su entorno familiar. La influencia de la familia La familia es uno de los elementos más relevantes dentro del factor sociocultural del niño. La familia lo es todo para él. La familia es su modelo de actitud, de disciplina, de conducta y de comportamiento. Es uno de los factores que más influyen en la emisión de la conducta agresiva. Está demostrado que el tipo de disciplina que una familia aplica al niño, será el responsable por su conducta agresiva o no. Un padre poco exigente, por ejemplo, y que tenga actitudes hostiles, y que está siempre desaprobando y castigando con agresión física o amenazante constantemente a su hijo, estará fomentando la agresividad en el niño. Otro factor que induce al niño a la agresividad es la relación tensa y conturbada entre sus padres. El factor sociocultural lo constituyen el tipo de barrio donde se viva y expresiones que fomenten la agresividad: "no seas un cobarde". Los factores orgánicos tipo hormonal, mecanismos cerebrales, estados de mala nutrición, problemas de salud, etc., también influyen en el comportamiento agresivo. Dentro del factor social, el niño, que no tiene estrategias verbales para afrontar las situaciones difíciles, será fácilmente conducido a la agresión; también 34 las formas de controlar la agresividad del bebé llorón, el carácter de los niños, el castigo, los cuidados especiales, la violencia en la educación, los castigados con fuerte genio. Pautas que ayudan a controlar la conducta agresiva de los niños El tratamiento de la agresividad de un niño, en los casos que sea persistente su conducta agresiva, debe ser asignado a un profesional especializado. El tipo de tratamiento que se utilizará dependerá del resultado de la evaluación. Lo primero será identificar, a través de observaciones, charlas y entrevistas, los antecedentes (causas y reacciones a la frustración) y los consecuentes (qué es lo que gana con la agresión) del comportamiento agresivo del niño. La conducta agresiva de un niño es un comportamiento aprendido, se puede modificar, la intervención de los padres y de los profesores es muy importante. El castigo físico no es aconsejable en ninguno de los casos, porque sus efectos son generalmente negativos: se imita la agresividad y aumenta la ansiedad del niño. Si nos empeñamos en cambiar la conducta agresiva de nuestro hijo, mantenemos la paciencia y la perseverancia, seguramente solucionaremos el problema. Consejos contra la conducta agresiva infantil La psicóloga Gloria Marsellach Umbert, autora del libro “Recetas del psicólogo en la red”, define algunas pautas de cómo solucionar el problema. Según ella, se debe seguir un plan: 1) Identificar el tipo de conducta. Es decir, qué 35 es lo que nuestro hijo está haciendo exactamente. Hay que ser objetivos y específicos en la respuesta. Si el niño patalea, grita, o de qué forma expresa su agresividad. 2) Apuntar diariamente en una tabla, durante una semana, cuántas veces el niño aplica la conducta de agresividad. Anotar qué es lo que provocó el comportamiento. Con lo cual será necesario registrar los porqués y las respuestas. Determinar en qué momentos los ataques agresivos son más frecuentes. 3) Elegir dos objetivos para modificar la conducta: debilitar la conducta agresiva y reforzar respuestas alternativas deseables existentes, en el repertorio de conductas del niño o en la enseñanza de habilidades sociales. Ejemplos: Existen algunas condiciones que proporcionan al niño consecuencias gratificantes para su conducta agresiva. Por ejemplo, si en el patio del colegio, no estando el cuidador, el niño sabe que pegando a sus compañeros, éstos le cederán lo que él quiera, habrá que poner a alguien que controle el juego hasta que ya no sea necesario. Reducir el contacto del niño con los modelos agresivos. Muéstrele a su hijo otras vías para solucionar los conflictos cómo el diálogo, el razonamiento, el establecimiento de normas, etc. Si los niños observan que los mayores tratan de resolver los problemas con tranquilidad, podrán imitar esta forma de actuar. 4) Los padres deben reducir los estímulos que provocan la conducta. Enseñar al niño a permanecer en calma ante una provocación. 5) Recompense a su hijo cuando éste lleve a cabo un juego cooperativo y asertivo. 6) Cuando esté determinado el procedimiento que utilizará, poner en práctica el plan. Debe continuar registrando la frecuencia con que su hijo emite la conducta agresiva para así comprobar si el procedimiento utilizado está siendo o no efectivo. Informar del plan elegido a todos 36 los adultos que formen parte del entorno social del niño. Mantenga una actitud relajada y positiva y notarás los progresos. Al final, todos se sentirán mejor. Temas para tratar la agresividad infantil: el hijo muerde mucho, peleas frecuentes, mordeduras de niños llorones. Cuando las peleas del niño son frecuentes qué deben hacer los padres Los pequeños y los niños de edad preescolar a menudo se pelean por los juguetes. Algunos niños son premiados involuntariamente por su comportamiento agresivo. Por ejemplo, puede ser que un niño empuje a otro niño, arrojándole sobre el piso y quitándole su juguete. Si el otro niño llora y se aleja, el niño agresivo se siente victorioso ya que consiguió el juguete. Es importante identificar si este patrón está ocurriendo en los niños agresivos. Las peleas frecuentes pueden ser una señal de que el niño tiene otros problemas. Por ejemplo, puede estar triste o alterado, tener problemas controlando el coraje, haber sido testigo de violencia o haber sido la víctima de abuso en el cuidado diurno, en la escuela, en el hogar. Las investigaciones han demostrado que los niños, físicamente agresivos a temprana edad, tienen la tendencia a continuar dicho comportamiento cuando son mayores. Los estudios también han demostrado que los niños, expuestos a la violencia y la agresión repetidamente a través de la televisión, los videos y las películas, actúan de manera más agresiva. Si un niño pequeño tiene problemas persistentes con la acción de pelear y de morder o exhibe un comportamiento agresivo, los padres deben buscar la 37 ayuda profesional de un psiquiatra de niños y adolescentes o de otro profesional de la salud mental especializado en la evaluación y tratamiento de los problemas del comportamiento en los niños pequeños. Qué se debe hacer con los niños peleones Para atender a los niños peleones, se recomienda: 1) La intervención temprana es mucho más efectivo. No esperes a que el niño empiece a mostrar un comportamiento más agresivo. Intervenga tan pronto, observe que el niño se siente frustrado o que se esté alterando. 2) Cuando los niños pequeños pelean a menudo, supervíselos más de cerca. 3) Si el niño le da a otro niño, de inmediato separe los dos niños. Luego trate de consolar y atender al niño que ha sido golpeado. 4) Al bebé que comienza a caminar (de 1 a 2 años) dígale: "No se da. Duele cuando das". 5) Al niño pequeño (de 2 a 3 años) dígale: "Yo sé que tienes coraje, pero no des. Cuando das duele". Esto comienza a enseñarle la empatía hacia otros niños. 6) No le dé al niño si le está dando a otros. Esto le enseña al niño a usar comportamiento agresivo. 7) Los padres no deben ignorar, menospreciar las peleas entre hermanos. 8) Enséñales que la agresión no es la forma correcta para conseguir lo que uno quiere. Por ejemplo, imaginemos el caso de dos niños, uno de 6 y otro de 4 años de edad. El mayor está jugando con una pelota hasta que el más pequeño aparece para quitársela. Y ahí se forman peleas y griteríos. El pequeño grita y patalea porque quiere la pelota. Intervenimos y exigimos que el mayor conceda la pelota al más pequeño. Con eso estaremos reforzando de una manera positiva a que el pequeño siempre patalee y grite para conseguir lo que quiere. 38 j.1.-Antecedentes de la investigación Entre los antecedentes de estudio de esta investigación, figuran algunas fuentes de autores con mayor importancia, a nivel internacional y nacional. Andreu Rodríguez y otros (2002), en la Universidad Complutense de Madrid y CES San Pablo – CEU, realizaron el estudio con el principal objetivo de analizar las propiedades psicométricas del Cuestionario de Agresión (AQ) (Buss y Perry, 1992). Los resultados obtenidos en relación con sus propiedades psicométricas en una amplia muestra de sujetos pertenecen a diferentes centros educativos de la Comunidad de Madrid (1.382 sujetos, 49,9% varones y 50,1% mujeres, con edades comprendidas entre los 15 y los 25 años). Ruhle (1972) realiza un estudio: “El alma del niño proletario” en la ciudad de Madrid-España. Investigó en forma muy exhaustiva al niño proletario y llegó a la siguiente conclusión: las condiciones de vida y la psicología de los niños de hogares proletarios, justamente desencadena reacciones hostiles de agresión directa o indirecta y otras formas de conducta antisocial de parte de estos niños. Melfo (1989) materializa su estudio: “Marginalidad: un enfoque educativo”, llevado a cabo en la ciudad de Caracas, Venezuela, investigó las diversas vertientes ortodoxa, historicista y estructuralista que enfocan las características de la marginalidad y su impacto en la psicología y condiciones educativas de los 39 niños, llegando a las conclusiones abiertamente negativas tales como el alto índice de analfabetismo y el bajo nivel de escolaridad. Ansion y otros (1993) estudiaron “La escuela en tiempos de guerra: una mirada a la educación desde la crisis y la violencia”, en la ciudad de Lima, Perú. Investigó casos y reflexiones teóricas sobre las condiciones escolares en las zonas urbanas marginales del Perú: en Villa el Salvador, Canto Grande y Cajamarca, en un contexto de la violencia político-social de las décadas 19902000, llegando a la conclusión de que la violencia sembrada por el terrorismo fue patrón y estímulo de agresividad en una educación limitada en las zonas urbanos marginales aledañas a la ciudad de Lima, porque provenían de zonas rurales de menor desarrollo económico. Por su parte, Castillo Ríos (1983) realizó un estudio: “Los niños del Perú”, llevado a cabo en la ciudad de Lima, Perú. Investigó las condiciones de vida material y espiritual de los niños más pobres de extrema pobreza e indigencia; llegó a la conclusión de que estos niños son agresivos por la violencia que han sufrido y tienen dificultades en el aprendizaje debido a las limitaciones y condiciones de vida. En su turno, De la Torre Quispe (1991) efectúa su estudio: “El poder político de la educación”. Lo realiza en la ciudad de Lima, Perú. Es una investigación mixta teórica-práctica, enfatiza la educación primaria desde la concepción de la dialéctica marxista. Llegó a la conclusión de que el fracaso de las sucesivas reformas educativas genera la crisis crónica del sistema educativo nacional, 40 además este fracaso afecta principalmente a los niños de educación primaria, en un clima de disfunción familiar y agresión en todas las zonas más pobres y marginadas del Perú. Mayhua y otros (1999) realizaron el estudio “Entre cuadernos y barrotes: la educación peruana desde el punto de vista de sus víctimas”, llevado a cabo en la ciudad de Lima, Perú. Fue un estudio investigativo contestatario, totalmente crítico al sistema educativo nacional, cuestiona el conjunto de rutinas escolares, además adoptan una cerrada defensa a favor de los alumnos en condiciones de pobreza y disfunción familiar, llegando a la conclusión de que la violencia familiar deforma la personalidad del niño y lo convierte en un adolecente totalmente agresivo. j.2.- Marco histórico Los estudios históricos muestran que la estructura familiar ha sufrido pocos cambios por la emigración a las ciudades y la industrialización. El núcleo familiar era la unidad más común en la época preindustrial y aún sigue siendo la unidad básica de organización social en la mayor parte de las sociedades industrializadas modernas. Sin embargo, la familia moderna ha variado en su forma más tradicional; es decir, en sus funciones, composición, ciclo de vida y rol de los padres. La única función que ha sobrevivido a todos los cambios es la fuente de afecto y apoyo emocional para todos sus miembros, especialmente para los hijos. Otras funciones que antes desempeñaba la familia rural (trabajo, educación, formación religiosa, actividades de recreo y socialización de los hijos) son hoy 41 realizadas por instituciones especializadas. El trabajo se realiza normalmente fuera del grupo familiar y sus miembros suelen trabajar en ocupaciones diferentes y lejos del hogar. La educación la proporcionan el estado y grupos privados. La familia todavía es responsable de la socialización de los hijos, aunque en esta actividad los amigos y los medios de comunicación han asumido un papel muy importante. La composición familiar ha cambiado drásticamente a partir de la industrialización de la sociedad. Algunos cambios están relacionados con la modificación actual del rol de la mujer. En las sociedades más desarrolladas, la mujer ya puede ingresar (o reingresar después de haber tenido hijos) en el mercado laboral en cualquier etapa de la vida familiar, se enfrenta a unas expectativas mayores de satisfacción personal a través del matrimonio y de la familia. En los últimos tiempos se ha desarrollado un considerable aumento de la tasa de la disfunción familiar, producida por las facilidades legales y la creciente incorporación de la mujer al trabajo. Durante el siglo XX ha disminuido en Occidente el número de familias numerosas. Este cambio está particularmente asociado a una mayor movilidad residencial y a una menor responsabilidad económica de los hijos para los padres mayores, al irse consolidando los subsidios de trabajo y otros beneficios del estado que permiten mejorar el nivel de vida de los jubilados. En la década de 1970, el prototipo familiar evolucionó hacia unas estructuras modificadas que englobaban a las familias monoparentales, familias del padre o madre casado en segundas nupcias y familias sin hijos. Las familias 42 monoparentales en el pasado eran a menudo consecuencia del fallecimiento de uno de los padres. Actualmente la mayor parte de las familias monoparentales es el resultado de una disfunción, aunque muchas están formadas por mujeres solteras con hijos. En 1991, uno de cada cuatro hijos vivía sólo con uno de los padres, por lo general con la madre. Sin embargo, muchas de las familias monoparentales se convierten en familias con padre y madre, a través de un nuevo matrimonio o de la constitución de una nueva convivencia. La familia de padres casados en segundas nupcias se crea mediante un nuevo matrimonio de uno de los padres. Este tipo de familia puede estar formada por un padre con hijos y una madre sin hijos, un padre con hijos y una madre con hijos, viven en otro lugar o dos familias monoparentales que se unen. En estos tipos de familia, los problemas de relación entre padres no biológicos e hijos suelen ser un foco agresivo físico o verbal, especialmente en el tercer caso. Las familias sin hijos son más; es el resultado de una libre elección de los padres, elección más fácil gracias al control de natalidad (anticoncepción). Durante muchos años, el número de parejas sin hijos se había ido reduciendo en forma constante gracias a la gradual desaparición de enfermedades; por ejemplo, las venéreas causaban infertilidad. Sin embargo, en la década de 1970, los cambios en la situación de la mujer modificaron esta tendencia. Hoy las parejas, especialmente en los países más desarrollados, a menudo eligen no tener hijos o posponer su nacimiento hasta gozar de una óptima situación económica. A partir de la década de 1960, se han producido diversos cambios en la unidad familiar. Un mayor número de parejas viven juntas antes, en vez de contraer matrimonio. De forma similar, algunas parejas de personas mayores, a 43 menudo viudos o viudas, encuentran que es más práctico desde el punto de vista económico cohabitar sin contraer matrimonio. Actualmente las parejas homosexuales también viven juntas como una familia en forma más abierta, compartiendo a veces sus hogares con los hijos de una de las partes o con niños adoptados. Las comunas (familias constituidas por grupos de personas que no suelen estar unidas por lazos de parentesco) han existido en el mundo desde la antigüedad. Estas unidades familiares aparecieron en Occidente en las décadas de 1960 y 1970, pero en la década siguiente disminuyeron en forma considerable. Los países industrializados están experimentando tendencias familiares similares a las de Occidente. La mejora de los métodos de control de natalidad y la legalización del aborto, han reducido en forma considerable el número de familias monoparentales no autosuficientes. El número de familias disfuncionales con segundas nupcias está aumentado, incluso en los países donde los impedimentos religiosos y legales son muy fuertes. Además en todas las sociedades industriales están apareciendo unidades familiares más pequeñas con una fase pos-paternal más larga. En los países en vías de desarrollo, la tasa de hijos que sobreviven en una familia disfuncional ha ido aumentando con rapidez en la medida de que se han ido controlando las enfermedades infecciosas, el hambre y otras causas de mortalidad infantil. La reducción de esta tasa de mortalidad infantil y el consiguiente crecimiento de la población se presentan en estos países latinoamericanos; por ejemplo, en el Perú donde presenta un grave problema de recursos económicos y laborales, donde las familias disfuncionales no pueden 44 mantener a tantos hijos; por eso vemos a diario, por la carencia laboral a muchos niños, padres adolecentes, padres jóvenes, padres adultos y ancianos comercializando productos: golosinas, venta de comidas, venta de prendas de vestir entre otros artículos, inclusive pidiendo limosnas en sitios públicos. La familia es el grupo social básico creado sobre la base de vínculos de parentesco, matrimonio, está presente en todas las sociedades. Idealmente la familia proporciona a sus miembros protección, compañía, seguridad y socialización en nuestra sociedad. La estructura y el papel de la familia varían según la sociedad. La familia nuclear (dos adultos con sus hijos) es la unidad principal de las sociedades más avanzadas. Este núcleo está subordinado a una gran familia monoparental, cuyos hijos viven sólo con el padre o con la madre en situación de soltería, viudedad o divorcio. En nuestra sociedad se aprecia una marcada tendencia a una disfunción familiar, se presenta de manera más notoria en los asentamientos humanos marginales aledaños a la ciudad de Lima Metropolitana (Cono Norte, Este, Sur). En los tres niveles de Educación Básica Regular, en todas las Instituciones Educativas Estatales, se puede observar cómo los alumnos se agreden de manera física y verbal manifestando en sus emociones irá y hostilidad; también en nivel primario, los niños se han convertido en una forma de interacción muy habitual durante su convivencia diaria, surgiendo estas dos formas de agresión y dos formas de emociones. El conocimiento y la habitualidad de los niños agresivos, se manifiestan en la hostilidad para un pequeño número de iguales, quienes repetidamente desempeñan el papel de víctimas. 45 La agresividad física y verbal son actos destructivos, dirigidos hacia el exterior, su única finalidad es hacer daño y demostrar superioridad ante el grupo, sin importar el daño, romper una norma social. A futuro, estas conductas tienden a reflejarse y a manifestarse de una forma negativa en su entorno social, estando todo el tiempo a la defensiva ante cualquier estímulo. En la medida de que estos comportamientos van tomando fuerza y comienza a deteriorarse las relaciones interpersonales y familiares, se presentan inseguridad, baja autoestima y un autoconcepto erróneo de sí mismo. La familia empieza a preocuparse por los constantes llamados de atención, las Instituciones Educativas llaman al padre cuando esto ocurre para buscar una pronta solución a la problemática; la preocupación del padre y la Institución Educativa no tiene mayores efectos, no poseen herramientas psicológicas adecuadas, para la disminución del comportamiento agresivo manifestado de muchas formas y con una denominación específica. La agresividad física y verbal que manifiestan en el niño ira y hostilidad, surge por una disfunción familiar que daña la personalidad y crea trastornos psicológicos adquiridos: la nequicia y la inestabilidad emocional en el niño. Por los problemas, ellos sufren diversos tipos de maltratos y en respuesta se convierten en personas agresivas e impulsivas llevándolas a un descontrol emocional. . Existen varias teorías que explican el origen de la agresividad y son: a) De las instintivas. “Los hombres no son amables ni criaturas amistosas propensas al amor, simplemente se defiende si les ataca, por el contrario 46 debemos reconocer en él un gran deseo de agresión parte de su dotación instintiva” (Freud, Sigmund. “Psicoanálisis”. 1856-1939) b) Como conducta aprendida. “Las experiencias tienen efectos importantes en los animales: ¿Qué tienen los gatos?, ¿Por qué matan ratas?” (Zin Yang, Kuo. “Psicología animal”, Universidad de Yale - Estados Unidos. Sita en New Haven) c) También la televisión incita a la violencia. En otros, representaría una descarga de la agresividad. d) Influencia de la cultura. “La agresividad es un fenómeno cultural y que no exterioriza en violencia” (Cornaton, Mitchel) e) Desde el punto de vista biológico. “Las deficiencias en la alimentación habitual no son el factor único de la delincuencia pero sí parece tener una influencia mucho mayor sobre la conducta humana, de lo que hasta ahora habíamos creído” (Forman, Charles.) f) Corteza cerebral. “La agresión es una reacción común aunque no inevitable a la frustración y a la emoción reprimida” (Hunter Hubel, David. 1926) Bandura (1986) manifiesta que la agresión es aprendida socialmente a través de la observación. Los padres que estimulan a su hijo para que piense en forma independiente y tenga sus propias opiniones, a través de preguntas, explicaciones y tolerancia ante decisiones y opiniones que no concuerdan con las suyas, tienen hijos más individualizados y con una mejor salud mental y competencia social. Además los intercambios verbales frecuentes entre los padres y sus hijos, servirán para estimular su desarrollo cognitivo y su habilidad para la 47 adopción de perspectivas e influirán sobre su rendimiento académico. Sin embargo, los padres –quienes no aceptan la individualidad de sus hijos, quienes suelen reaccionar de forma negativa ante sus muestras de pensamiento independiente, limitando y constriñendo su desarrollo personal –van a tener hijos con más síntomas de ansiedad y depresión, más dificultades en el logro de la identidad personal y menor competencia social. Según Skiner (1952), “La teoría de Aprendizaje” deja la evidencia de que la agresión es adquirida por condicionamiento operante. En muchas ocasiones, los padres utilizan estrategias de control psicológico: descalificaciones, inducción de culpa o manifestaciones de aceptación y afecto, sólo en forma contingente al comportamiento del niño que ellos consideraban apropiado. Maslow (1964) sostiene que la agresión tiene un origen cultural. Sostiene que la agresión es una reacción frente a la frustración de las necesidades biológicas, inclusive frente a la incapacidad de satisfacerlas. En efecto, el enfoque tipológico más tradicional es aquel que ha considerado a los progenitores en función a su estilo educativo en relación con el desarrollo y el ajuste de los niños. El estilo educativo no parte de la combinación de diferentes dimensiones de la conducta parental, sino del clima emocional: una constelación de actitudes comunicadas al niño a través de aspectos indirectos: el tono de voz, el lenguaje no verbal que influyen en cómo las prácticas concretas son vividas por el niño. j.3.- Marco conceptual Los términos fundamentales necesarios para el presente trabajo son: 48 Adaptabilidad Describe la capacidad del sistema marital/familiar para cambiar las estructuras de poder (roles y reglas) en respuesta a crisis familiares normativas o no normativas. Adaptabilidad familiar Extremadamente alta origina caos al interior de la familia, esto es, la inexistencia de roles y reglas definidas; una adaptabilidad extremadamente baja, rigidez que impide amoldarse a las crisis del ciclo familiar. Agresión Acto de acometer a alguien para matarlo, herirlo o hacerle daño. U. t. en sent. fig. || 2. Acto contrario al derecho de otra persona. || 3. Der. Ataque armado de una nación contra otra, sin declaración previa. || ~ sexual. f. Der. La que por atentar contra la libertad sexual de las personas y realizarse con violencia o intimidación es constitutiva de delito. Agresividad infantil Es la reacción hostil u ofensiva de los niños y niñas que canalizan sus conflictos internos contra el medio social y físico que lo rodea a modo de descargar tales frustraciones. Anomia 49 Es la condición social consistente en el desarrollo de expresiones sociales que no toman en cuenta ninguna norma, principio o elemento de regulación conductual, actuando de manera completamente anárquica e individualista. Amalgamar (De amalgama). tr. Unir o mezclar cosas de naturaleza contraria o distinta. U. t. c. prnl. || 2. Quím. Alear el mercurio con otro u otros metales para formar amalgamas. U. t. c. prnl. Cohesión Acción y efecto de reunirse o adherirse las cosas entre sí o la materia de que están formadas. || 2. Enlace (unión de algo con otra cosa). || 3. Fís. Unión entre las moléculas de un cuerpo. || 4. Fís. Fuerza de atracción que las mantiene unidas. Caos (Del lat. chaos, y este del gr. , abertura). m. Estado amorfo e indefinido que se supone anterior a la ordenación del cosmos. || 2. Confusión, desorden. || 3. Fís. y Mat. Comportamiento aparentemente errático e impredecible de algunos sistemas dinámicos, aunque su formulación matemática sea en principio determinista. Cohesión familiar Comprende dos aspectos básicos de la funcionalidad familiar: el vínculo emocional entre los miembros de la familia y el grado de autonomía individual de 50 los mismos. Una cohesión familiar extremadamente alta (amalgamada) da lugar a una excesiva unión de sus miembros y a una muy limitada autonomía individual; una cohesión extremadamente baja es lo contrario. Conducta antisocial Son comportamientos individuales y sociales caracterizados por atentar frontalmente contra las normas de convivencia colectiva, cooperación y civilidad. Conectar (Del ingl. to connect). tr. Unir, enlazar, establecer relación, poner en comunicación. U. t. c. intr. y c. prnl. || 2. Tecnol. Enlazar entre sí aparatos o sistemas, de forma que entre ellos pueda fluir algo material o inmaterial, como agua, energía, señales, etc. U. t. c. intr. y c. prnl. || 3. intr. Lograr una buena comunicación con alguien. Correlación Correspondencia o relación recíproca entre dos o más cosas o series de cosas. || 2. Fon. Conjunto de dos series de fonemas opuestas por los mismos rasgos distintivos. || 3. Fon. Relación que se establece entre estas series. || 4. Mat. Medida de la dependencia existente entre variantes aleatorias. Desajustar (De des- y ajustar). tr. Desigualar, desconcertar una cosa de otra. || 2. prnl. Desconvenirse, apartarse del ajuste o concierto hecho o próximo a hacerse. 51 Desajuste: Acción y efecto de desajustar o desajustarse. Desintegración Acción y efecto de desintegrar. || ~ nuclear. f. Transformación espontánea o provocada de un núcleo atómico, generalmente acompañada de la emisión de fotones u otras partículas. Desintegración familiar Disfunción, separación, divorcio, abandono. Desligar (Del lat. delig re). tr. Desatar, soltar las ligaduras. U. t. c. prnl. || 2. Separar, independizar. Desligar un acontecimiento de otro. U. t. c. prnl. || 3. Desenmarañar y desenredar algo no material. U. t. c. prnl. || 4. Dispensar de la obligación contraída. || 5. Absolver de las censuras eclesiásticas. || 6. Mús. picar (hacer sonar las notas con una breve pausa entre ellas). Dependencia (De dependiente). f. Subordinación a un poder mayor. || 2.drogodependencia. || 3. Relación de origen o conexión. || 4. Sección o colectividad subordinada a un poder. || 5. Oficina pública o privada, dependiente de otra superior. || 6. En un comercio, conjunto de dependientes. || 7. Cada habitación o espacio dedicados a los servicios de una casa. || 8. Der. Situación de 52 una persona que no puede valerse por sí misma. || 9. Med. y Psicol. Necesidad compulsiva de alguna sustancia, como alcohol, tabaco o drogas, para experimentar sus efectos o calmar el malestar producido por su privación. Disfunción Desarreglo en el funcionamiento de algo o en la función que le corresponde. || 2. Biol. Alteración cuantitativa o cualitativa de una función orgánica. Estructura (Del lat. struct ra). f. Distribución y orden de las partes importantes de un edificio. || 2. Distribución de las partes del cuerpo o de otra cosa. || 3. Distribución y orden con que está compuesta una obra de ingenio, como un poema, una historia, etc. || 4. Arq. Armadura, generalmente de acero u hormigón armado, que, fija al suelo, sirve de sustentación a un edificio. || ~ profunda. f. Gram. En gramática generativa, esquema abstracto de las relaciones gramaticales de las frases de una lengua dada o de un conjunto de ellas. || ~ superficial. f. Gram. En gramática generativa, reflejo de la estructura profunda en las frases de una o varias lenguas. Estructura familiar Líneas de parentesco que constituyen el grupo familiar y elementos que lo conforman. Expectativa 53 Esperanza de realizar o conseguir algo. || 2. Posibilidad razonable de que algo suceda. || 3. Posibilidad de conseguir un derecho, una herencia, un empleo u otra cosa, al ocurrir un suceso que se prevé. Sin actuar ni tomar una determinación hasta ver qué sucede. Familia Grupo de personas emparentadas entre sí que viven juntas. || 2. Conjunto de ascendientes, descendientes, colaterales y afines de un linaje. || 3. Hijos o descendencia. || 4. Conjunto de personas que tienen alguna condición, opinión o tendencia común. Flexible (Del lat. flexib lis). adj. Que tiene disposición para doblarse fácilmente. || 2. Que en un enfrentamiento se pliega con facilidad a la opinión, a la voluntad o a la actitud de otro o de otros. Carácter, persona flexible. || 3. Que no se sujeta a normas estrictas, a dogmas o a trabas. Ideología, legislación flexible. || 4. Susceptible de cambios o variaciones según las circunstancias o necesidades. Horario, programa flexible. || 5. m. Cable formado de hilos finos de cobre recubiertos de una capa aislante, que se emplea como conductor eléctrico. || 6. Sombrero flexible. Funcionamiento familiar Dinámica relacional sistemática que se da a través de cohesión, armonía, roles, comunicación, permeabilidad, afectividad y adaptabilidad. 54 Golpe Acción y efecto de golpear. U. t. en sent. fig. || 2. Movimiento rápido y brusco. Hogar monoparental Es la condición de las familias caracterizadas por una fractura relativamente permanente del hogar nuclear típico, que pierda uno de sus miembros, es decir, al padre y la madre. Hostilidad Cualidad de hostil. || 2. Acción hostil. || 3. Agresión armada de un pueblo, ejército o tropa. || romper las ~es. fr. Mil. Dar principio a la guerra atacando al enemigo. Ira Pasión del alma, causa indignación y enojo. || 2. Apetito o deseo de venganza. || 3. Furia o violencia de los elementos. || 4. Repetición de actos de saña, encono o venganza. || descargar la ~ en alguien. fr. Desfogarla contra él. || ~ de Dios. loc. interj. U. para manifestar la extrañeza que causa algo, o la demasía de ello, especialmente cuando se teme que produzca sus malos efectos contra nosotros. || llenarse alguien de ~. fr. Enfadarse o irritarse mucho. Madrastra 55 Mujer del padre respecto de los hijos llevados por éste al matrimonio. || 2. p. us. Cosa que incomoda o daña. Padrastro Marido de la madre, respecto de los hijos habidos antes por ella. || 2. Mal padre. || 3. Obstáculo, impedimento o inconveniente que estorba o hace daño en una materia. || 4. Pedazo pequeño de pellejo que se levanta de la carne inmediata a las uñas de las manos, y causa dolor y estorbo. || 5. Dominación ( lugar alto que domina una plaza). Predominio Poder, superioridad, influjo o fuerza dominante que se tiene sobre alguien o algo. Relación Exposición que se hace de un hecho. || 2. Conexión, correspondencia de algo con otra cosa. || 3. Conexión, correspondencia, trato, comunicación de alguien con otra persona. U. m. en pl. Relaciones de parentesco, de amistad, amorosas, comerciales. || 4. Trato de carácter amoroso. U. m. en pl. Tienen relaciones desde hace tiempo. || 5. Lista de nombres o elementos de cualquier clase. Rígido/a (Del lat. rig dus). adj. Que no se puede doblar ( severo. V. disco. 56 torcer). || 2. Riguroso, Social Perteneciente o relativa a la sociedad. || 2. Perteneciente o relativo a una compañía o sociedad, o a los socios o compañeros, aliados o confederados. Separar (Del lat. separ re). tr. Establecer distancia, o aumentarla, entre algo o alguien y una persona, animal, lugar o cosa que se toman como punto de referencia. U. t. c. prnl. || 2. Formar grupos homogéneos de cosas que estaban mezcladas con otras. || 3. Considerar aisladamente cosas que estaban juntas o fundidas. || 4. Privar de un empleo, cargo o condición a quien lo servía u ostentaba. || 5. Forzar a dos o más personas o animales que riñen, para que dejen de hacerlo. || 6. prnl. Dicho de una persona, de un animal o de un vehículo: Tomar caminos distintos los que iban juntos o por el mismo camino. || 7. Dicho de los cónyuges: Interrumpir la vida en común, por fallo judicial o por decisión coincidente, sin que se extinga el vínculo matrimonial. || 8. Renunciar a la asociación que se mantenía con otra u otras personas y que se basaba en una actividad, creencia o doctrina común. || 9. Dicho de una comunidad política: Hacerse autónoma respecto de otra a la cual pertenecía. || 10. Dicho de una persona: Retirarse de algún ejercicio u ocupación. Verbal Que se refiere a la palabra, o se sirve de ella. Memoria verbal. Expresión verbal. || 2. Que se hace o estipula solo de palabra, y no por escrito. Injuria, 57 contrato verbal. || 3. Gram. Perteneciente o relativo al verbo. || 4. Gram. deverbal. || 5. Ling. Dicho de un sintagma o de una frase: Que tiene por núcleo un verbo. Violencia Cualidad de violento. || 2. Acción y efecto de violentar o violentarse. || 3. Acción violenta o contra el natural modo de proceder. || 4. Acción de violar a una mujer. k.- Métodos y técnicas. k.1.- El método aplicado al presenten estudio ha sido el descriptivo correlacional. Descriptivo porque en un primer momento describimos ambas variables y correlacional porque en un segundo momento se ha determinado la intensidad de relación de asociación significativa entre ambas variables. En tal sentido el diseño de investigación aplicado con el propósito de describir y determinar la intensidad de relación de asociación significativa entre la variable independiente disfunción familiar y la variable dependiente agresividad, incluyendo sus respectivas dimensiones: - Siendo las variables : 58 X, disfunción familiar (variable independiente). Y, agresividad (variable dependiente). - Las dimensiones de ambas variable : Disfunsión familiar X1, cohesión X2, adaptabilidad Y1, agresión física Agresividad Y2, hostilidad Y3, ira Y4, agresión verbal - Siendo: r, correlación lineal de Pearson. . l.- Materiales e instrumentos: l .1.- Descripción del instrumento Se emplearon dos instrumentos estandarizados para medir a las variables con sus correspondientes dimensiones: El instrumento es “Prueba FACES II (Familiar Adaptability and Cohesión Evaluation Scales) de David Olson” y el “Cuestionario de Agresión (AQ), Buss y Perry, 1992”, cuya adaptación psicométrica en la versión española fue realizada por José Manuel Andreu Rodríguez, Mª Elena Peña Fernández y José Luis Graña Gómez, 2002. 59 Los instrumentos tienen dos partes: la primera parte se denomina “Información demográfica”; la segunda, “Información sobre las variables de investigación”. La información demográfica comprende 4 ítems: grado y sección, edad, sexo y condición socioeconómica. La segunda parte abarca las dimensiones de cada instrumento de la investigación. El primer instrumento comprende de 20 ítems para la variable disfunción familiar, el cual están distribuidos dimensionalmente de la siguiente manera: Cohesión 1, 17, 7, 5, 13, 15, 11, 19, 3, 19 (10 ítems) Adaptabilidad 8, 14, 16, 20, 2, 12, 4, 6, 10, 18 (10 ítems) Los valores de la variable independiente “Disfunción familiar”: El mínimo y máximo, por cada dimensión (Cohesión y adaptabilidad), son de 10 a 50. El segundo instrumento comprende de 29 ítems para la variable agresividad, el cual están distribuidos dimensionalmente de la siguiente manera: Agresión física 1, 5, 9, 13, 17, 21, 24, 27, 29 (9 ítems) Hostilidad 4, 8, 12, 16, 20, 23, 26, 28. (8 ítems) Ira Agresión verbal 3, 7, 11, 15, 19, 22, 25 2, 6, 10, 14, 18 (7 ítems) (5 ítems) Los valores mínimos y máximos de la variable dependiente “Agresividad”: son: de 9 a 45, para la dimensión agresión física; de 8 a 40, para la dimensión 60 hostilidad; de 7 a 35, para la dimensión ira; de 5 a 25, para la dimensión agresión verbal. l.2.- En cuanto a la Validez y confiabilidad del instrumento utilizado para medir el funcionamiento familiar llamado Prueba de Fases II debemos manifestar que este instrumento ha sido empleado en más de 30 proyectos de investigación, 10 de los cuales han demostrado su validez. Se ha demostrado la sensibilidad de las escalas para discriminar entre familias problemáticas y no problemáticas. El test tiene altos niveles de fiabilidad, validez y utilidad clínica, permite situar una familia en función a la percepción que tengan sus miembros con respecto del funcionamiento. Se empleó el coeficiente de Alpha de Conbach para cada una de las dimensiones de cohesión y adaptabilidad, se compararon dos muestras y se obtuvieron puntajes que demuestran la consistencia interna de la prueba. La confiabilidad determinada por test-retest con intervalos de 4 a 5 semanas, arrojó para cohesión: r=0.83; y para adaptabilidad r=0.80. m.- Universo y muestra. 1. Población y muestra de estudio m.- Universo y muestra. m.1.- Universo 61 El presente trabajo de investigación se llevó a cabo en la I.EE.N°106 “Abraham Valdelomar”, ubicada geográficamente en el centro poblado urbano “Los Ficus” Av. 7 de Julio s/n. perteneciente al Distrito de Santa Anita durante el presente año 2010. m.2.- El universo ha estado constituida por 291 niños, que durante el 2010 están cursando estudios del 2 ° grado de Educación Primaria en la IEE Nº106 “Abraham Valdelomar en Turno Mañana ™ y Turno Tarde ( TT), cuya distribución se indica en las siguientes tablas 01 y 02. m.3.- .La muestra se representó mediante la técnica del muestreo al azar simple. Tabla 1.Distribución de la población de estudio del 2° TM Sexo Grado y Sección H M Total 2° A 25 09 34 2° B 18 16 34 2° C 17 16 33 2° D 15 17 32 Total 75 58 133 62 Tabla 2.Distribución .Distribución de la población de estudio del 2° TT Sexo Grado y Sección H M Total 2° A 17 19 36 2° B 19 21 40 2° C 20 23 43 2° D 17 22 39 Total 73 85 158 m.4.- En cuanto al diseño de la muestra, teniendo en cuenta a los datos discretos para ésta estimó el tamaño de la muestra mediante la aplicación de la siguiente fórmula estadística: Figura 02. Fórmula Estadística Donde: 63 n = Tamaño de la muestra N = Tamaño de la población = 291 Z = Número determinado según la tabla de áreas bajo la curva normal = 1,96 P = Probabilidad de acierto = 0,5 q = Probabilidad de no acierto = 0,5 E = Error máximo permitido = 0,05 El tamaño de la muestra que indica la fórmula ha sido : n= 143 niños. n.- Tratamiento de datos. n.1.- Los criterios estadísticos utilizados para organizar y resumir la información han sido: Se aplicó el Programa Estadístico SSPS18 versión en español 2010, para el procesamiento de datos en: Medidas de tendencia central: media, mediana, moda, Medidas de dispersión: Desv. típ. Varianza, rango, Valor mínimo y máximo. Coeficiente de Correlación de Pearson. n.2.- Los tipos de pruebas estadísticas utilizadas para probar las hipótesis han sido de acuerdo con el tratamiento hecho a las variables de la unidad de estudio, se realizó el análisis y la interpretación de los resultados conforme a los objetivos, las hipótesis y los modelos planteados en el estudio de investigación, del modo siguiente: 64 a) Evaluación y revisión de los datos. b) Los datos fueron digitados en el paquete estadístico SPSS18 versión en español, formando una base de datos para el tratamiento estadístico y obtener la correlación “r” de Pearson entre las variables de estudio. c) La presentación de los datos en cuadros y gráficos. o.- Resultados de la investigación : O.1.- Análisis descriptivo de la población ! #$ % ! & #$ % ! & " ! " ! " () *+( *+( *+( *, ,#+ ,#+ + ' - + 65 + . / + #$ #* -3 4 " + 051 2- +#- )3 4+ #$ + #$ 0 1 2+#, #3 4+ #$ 061 2-( +#- )3 4+ 07 1 2-8 + , % ! % " ! " ( 9 ,* -8+8 -8+8 -8+8 * 9 (* (+8 (+8 )(+* ) 9 # 8 9 )+ )+ +8 +8 * - . / ! " + ,+ + ( 83 4+ ) 9 " 2# +) 3 4 66 + + + ( 9 8 9 2* 8,+ 2,* +-8 83 4+ * 9 + 83 4 + 2(* ( . : ! . : < *8 ' " ( " ,,+# +) +) + + + " : + ; - 2*8 +,, #3 4 + " 2( )3 4 * 6 & & ! 6 " ,,+# (+ + ! " ,,+# . / ! 5 " & ' . ( -* & *+ & " * + #,+8 #,+8 + + " " 2 ( ! * + - . / " ! " * + & + & + + & +* 34 & #, 83 4 67 & 2-* + & % ; & & : ; & : :; - + = # % % & ? > #, #8 #( ; + # #( ? & & @ A % + > & - 68 ; & - & & :# % :# :; + % & ? > # % #, #8 # #( ) ; + " #( ? & & -8@ A # % > & - 69 = - & & & > % & > :; - + - % % & ? > -( -* #( ) ; + #( " ? & -8- & @ A - % > & & ! ; & > - & # 70 # % ; # :; - + % & - ( > # #- -* -( ? --+ ? ; & )# #+ @ % % & A > & ; - 71 #, % & & - :; - & > ? + , % # #) #- #8 #( * ; + % #(+ & ? & #, @ A , % > & 72 - #( & % & & :; - + ( % % & ? > -( ; ? -8+ & & A ( % -* @ > & - 73 # -* -) *+ & & - 6 & ) 6 : & ; & : & 7 6 ! F$ ; < & > & : & > - & + *8 > < : B 2 ; & : & > + & < : C 2 ; & : & > + & & & . & @ / & & E / ; & B *8+ @ + : % = + @ ; ; & & + & ; & > ! > & & ! @ & *8 & & + & D ! ; & & > % " % @ + & & 8 3 > : & % D& 74 & + . > 8 3 + D + +; > @ : @ @ = + 4 : : & )+ 4 > @ +