PROGRAMACIÓN DE COMPETENCIAS BÁSICAS. LA CONCRECIÓN CURRICULAR. Alberto García Díaz. CEIP Antonio Devalque. Rioja (Almería). La incorporación de las CCBB al currículo permite destacar aquellos aprendizajes que se consideran imprescindibles, desde un planteamiento integrador y orientado a la aplicación de los saberes adquiridos. ● Las CCBB suponen la posibilidad de que cualquier persona pueda ser y sentirse miembro activo de una sociedad en la que participe, se sienta plenamente incluido, forme parte en la toma de decisiones y evolucione constantemente. ● (CCBB CEP Huelva). Diseños curriculares. Los diseños curriculares son el documento donde se procede a seleccionar la cultura que en un determinado país se considera socialmente relevante. En el nuestro están recogidos en los Reales Decretos de Enseñanzas Mínimas: Real Decreto 2630/2006, de 29 de diciembre, por el que se establecen las enseñanzas mínimas del segundo ciclo de Educación Infantil. Real Decreto 1513/2006, de 7 de diciembre, por el que se establecen las enseñanzas mínimas de Educación Primaria. Real Decreto 1631/2006, de 29 de diciembre, por el que se establecen las enseñanzas mínimas correspondientes a la Educación Secundaria Obligatoria. Definición de las CCBB en los Reales Decretos. El modelo de formulación utilizado en los diseños curriculares para definir las CCBB consta de tres elementos: Una definición semántica de cada una de las CCBB. Una visión de sus implicaciones para el aprendizaje. Una delimitación de la contribución que cada una de las áreas curriculares puede hacer a cada una de las competencias. Los dos últimos elementos constituyen orientaciones para eleborar un definición operativa, pero no son ellos mismos una definición operativa. Definición de las CCBB en los Reales Decretos. La definición que se hace de cada una de las CCBB en los Reales Decretos es una definición semántica, semántica pero no incluye una definición operativa Proporciona una visión del tipo de aprendizaje que se considera socialmente deseable, pero no incluye una selección concreta de los elementos culturales que harán posible la consecución de este tipo de aprendizajes. Es necesario un modelo que relacione cada una de las ccbb con los elementos prescritos en las áreas curriculares y con los correspondientes objetivos de etapa. En síntesis: La definición que los Reales Decretos hacen de las CCBB puede ayudar a comprender su significado, pero no aporta una visión integradora de cada competencia con el resto de elementos del currículo. El currículo se estructura en torno a las áreas de conocimiento y es en ellas en las que deberemos buscar los referentes que permitan el desarrollo de las competencias. En síntesis: Es necesario superar la fragmentación de los diseños curriculares. Es necesario relacionar e integrar todos los elementos que aparecen en el diseño. Es necesario que en cada una de las áreas se relacionen cada objetivo con los criterios de evaluación que indiquen el grado de adquisición de los aprendizajes expresados en éstos y que se identifiquen los contenidos necesarios para su adquisición. Es necesario transformar el diseño curricular en currículo. Partiremos del Real Decreto de Enseñanzas Mínimas de nuestra etapa educativa. Seleccionaremos nuestra área y seguiremos estos pasos: 1. Contribución de mi área a las CCBB Con el Real Decreto de nuestra etapa y La Orden por la que se establecen las enseñanzas, en Andalucía, para la misma: Observamos los elementos curriculares de nuestra área y redactamos a nuestro modo, las orientaciones (que ya figuran en la normativa), sobre cómo y a qué competencias contribuye el área. Este proceso de reflexión nos ayudará a identificar más claramente las relaciones entre los elementos curriculares y de ellos con las CCBB. 2. Seleccionamos un criterio de evaluación. Toda competencia se expresa en comportamientos. Los comportamientos en los que se expresan las competencias básicas en relación al currículo son dos: los objetivos de las áreas y sus correspondientes criterios de evaluación. Los objetivos se formulan como capacidades a alcanzar, no se trata de conductas observables, sino de capacidades que pueden ser alcanzadas a través del trabajo con determinados contenidos seleccionados. Los criterios de evaluación tienen como finalidad definir unos indicadores válidos para reconocer el nivel alcanzado en el desarrollo de una competencia o capacidad. Establecen el tipo y grado de aprendizaje que se espera haya alcanzado el alumnado, en un momento determinado, respecto a las capacidades enunciadas en los objetivos generales. 2. Seleccionamos un criterio de evaluación. Los criterios de evaluación aparecen formulados de una manera amplia y abierta, y deben ser concretados y actualizados: Revisamos la redacción del criterio y la adaptamos, si es necesario, a nuestro contexto. Estudiamos si es procedente incluir en él otros aprendizajes (procedentes de la Orden de la Consejería o seleccionados por el centro). Solamente en el caso de que sean muy evidentes. Podemos dividirlo en dos o más criterios, si lo vemos conveniente (en ese caso tendríamos que repetir con cada uno todos estos pasos). 3. Identificamos contenidos. Identificamos los contenidos necesarios para la adquisición de los aprendizajes expresados en el criterio de evaluación: Primero seleccionaremos los que estén contenidos en el criterio de evaluación. expresamente Si es necesario modificamos su redacción y la adaptamos a nuestro contexto. Les damos la profundidad deseada para incluir los aprendizajes que consideremos pertinentes, en el caso de existan evidencias claras. 4. Seleccionamos objetivos. Buscamos y seleccionamos el objetivo u objetivos que expresen las capacidades a alcanzar, correspondientes a los aprendizajes relacionados en los contenidos y criterio de evaluación seleccionados. 5. Buscamos indicadores de evaluación. Un indicador es un conjunto de variables empíricamente observables que proporcionan información cualitativa o cuantitativa, pertinente sobre el programa objeto de evaluación (Eisner 1993). El indicador consiste en desglosar procesos generales en otros más simples; concreta el criterio de evaluación en cuanto que es un señalador que permite cuantificar los procesos, para lo que se formula separando los implicados en el criterio. 5. Buscamos indicadores de evaluación. Los indicadores son elementos construidos a partir del análisis y descomposición de los criterios de evaluación de cada área, permiten evaluar si se está cumpliendo y en qué medida los criterios estaban prescritos. Los indicadores, a partir de los criterios de evaluación, describen directa o indirectamente las habilidades, destrezas o hábitos establecidos en los objetivos de área. Desglosar los criterios en indicadores exige un esfuerzo por identificar los distintos tipos de aprendizaje expresados, por un lado, y por otro en definirlo en conductas observables. 6. Relacionamos los indicadores con CCBB. Al analizar detenidamente un criterio comprobaremos que es posible identificar distintos aprendizajes (indicadores) y que probablemente cada uno de éstos podamos relacionarlo con una competencia básica. La guía básica para asignar cada indicador a las CCBB es la contribución del área a las mismas, que hemos redactado al principio. A cada indicador le buscamos COMPORTAMIENTOS con una, dos o tres CCBB. Al final las relaciones serán completas, que no quede criterio sin ser asignado a las CCBB. Cada indicador debe estar asociado a un máximo de dos o tres competencias. De este modo habremos obtenido una concreción curricular en la que estarán integrados todos los elementos del currículo. ● Una concreción que nos permitirá diseñar y programar estrategias para la adquisición de las CCBB. ● Habremos currículo. ● transformado el diseño curricular en Siguiendo el procedimiento descrito en estos pasos, y una vez hayamos finalizado con los elementos curriculares de los Reales Decretos, seguiremos con las enseñanzas recogidas en las Órdenes (10 de agosto de 2007, para Primaria y Secundaria) por las que se desarrolla el currículo correspondiente a dichas etapas en Andalucía, que no hayamos añadido ya. Finalmente haremos lo mismo con aquellos aprendizajes que el centro, en aras de su autonomía pedagógica y organizativa, considere conveniente incluir, en función de las características de su alumnado y del entorno. Relacionar los indicadores de todas las áreas a cada competencia. Se trata de arrastrar todas las relaciones anteriores con respecto a cada competencia. ● Para ello haremos un listado, por cada competencia, en el que figuren todos los indicadores relacionados con ella que han aparecido en la concreción curricular de cada una de las áreas. ● Habremos logrado así una definición operativa de las competencias básicas, a través de los aprendizajes que contribuyen a su adquisición. Para terminar: La concreción curricular realizada permite tener relacionados todos los elementos del currículo. ordenados y Facilita las programaciones en cuanto que nos permite seleccionar los elementos relacionados que intervienen en cada secuencia didáctica. Ofrece un listado de indicadores, que son el referente de los aprendizajes a adquirir. La relación entre criterios e indicadores permite evaluar fácilmente cada área. Permite obtener información sobre los aprendizajes concretos que el alumnado domina o no domina. Para terminar: Permite evaluar competencias. Permite obtener el perfil competencial de cada alumno o alumna. Facilita la adopción de medidas de atención a la diversidad y la adaptación curricular. Créditos: Materiales del Proyecto Atlántida (http://www.proyectoatlantida.net/). Materiales del Proyecto COMBAS: http://www.mecd.gob.es/cniie/investigacion-innovacion/competencias-basi Competencias Básicas Huelva: http://www.competenciasbasicashuelva.com/