Desarrollo e integración sensorial [1.1] Introducción [1.2] El tacto [1.3] La propiocepción o kinestesia [1.4] Principales disfunciones de la integración sensorial [1.5] Nivel perceptivo y escritura TEMA [1.6] Evaluación y tratamiento de la integración sensorial Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Ideas clave 1.1. Introducción Jean (2008) explica cómo hay algunos problemas como el sarampión, un hueso roto o la falta de visión que son evidentes, pero hay otros que no lo son tanto, como los que tienen como consecuencia un aprendizaje lento o un comportamiento inadecuado. Las causas más comunes de estos tienen que ver con una inadecuada integración sensorial en el cerebro del niño. Estos problemas de integración sensorial no son evidentes, pero ocurre en niños de todas partes, haciendo que algunos niños brillantes presenten dificultades de aprendizaje, y que otros con padres ejemplares y un entorno de crecimiento positivo muestren mal comportamiento. Muy pocas personas piensan en el cerebro y como el proceso de la integración sensorial es automático en la mayor parte de las personas, no se suele pensar en él de modo consciente. De esta manera, salvo que el problema sea realmente importante, las disfunciones en la integración sensorial tienden a pasar desapercibidas. INTEGRACIÓN SENSORIAL Es el acto de organizar las sensaciones para su uso. Por medio de los sentidos obtenemos información sobre las condiciones físicas de nuestro cuerpo y del medio que nos rodea. Las sensaciones fluyen hacia el cerebro, al que llegan constantemente un número infinito de datos sensoriales, a través, no sólo de los ojos y los oídos, sino de todos los órganos de nuestro cuerpo. Nadie organiza las sensaciones a la perfección, pero si es cierto que las personas felices, productivas y bien coordinadas están bastante cerca de ese ideal de percepción sensorial. Cuando el cerebro no es capaz de integrar bien las sensaciones, hay muchas facetas d de la vida cotidiana que se ven afectadas. En estos casos, el individuo tiene que hacer mayores esfuerzos, enfrentarse a mayores dificultades en la vida y los resultados suelen ser menos exitosos y satisfactorios. Los estudios llevados a cabo en Estados Unidos estiman que, actualmente, entre el 5% y el 15% de los niños tienen problemas de integración sensorial que les dificultan el aprendizaje o les repercute en el comportamiento. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Hay niños a los que en casa todo les va bien, o al menos lo suficientemente bien, para que el problema pase inadvertido, sin embargo en clase tienes grandes problemas para superar los desafíos del aprendizaje. Un problema de integración “menor” Puede transformarse en una barrera infranqueable en el momento en el que el niño empieza a ir al colegio En este momento, el niño ha de enfrentarse a muchas pequeñas tareas que, sin una buena integración sensorial, pueden ser un mundo. Ejemplo: sostener las tijeras con la mano, no romper la mina de un lápiz, pasar de una actividad a otra, etc. En clase, el niño con integración sensorial pobre se distrae con una gran facilidad, ya que su cerebro se sobreestimula y su funcionamiento se altera, respondiendo con un exceso de hiperactividad. El niño hiperactivo se mueve constantemente de un lado a otro porque su cerebro se ha desbocado y actúa sin control. Este exceso de actividad es una reacción compulsiva a las sensaciones que el niño no es capaz de anular u organizar. 1.2. El tacto La capacidad de planificar el movimiento depende del grado de precisión que haya adquirido el sistema táctil del niño. Al nacer, el bebé sabía que le están tocando influyendo el tacto en su estado emocional, pero no podía distinguir el lugar dónde le estaban tocando. A los dos años, el niño ya es capaz de identificar más o menos dónde le están tocando y, así dirigir sus acciones de una manera más o menos voluntaria. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Las sensaciones táctiles aportan al cerebro información acerca de las cosas que la vista no puede aportar, activando el deseo de cogerlas. Además, las sensaciones de la piel definen dónde empieza y dónde termina el cuerpo. Según Jean (2008), aquellos niños que no integran bien estas sensaciones no logran identificar con exactitud cómo están estructurados sus cuerpos o lo que hace cada una de sus partes, constituyendo esto una de las causas de la dificultad del aprendizaje para hacer cosas. Estos niños suelen encontrar dificultades para manejar varios objetos, abrocharse y desabrocharse botones, abrir o cerrar cremalleras o al utilizar los cubiertos para comer. Rigal (2006) explica cómo antes de llevar a cabo una acción, tenemos que buscar en nuestro entorno la información que nos va a ayudar a prepararla; es muy complicado encontrar una acción que no surja de un tipo u otro de la estimulación. Antes de que todo el sistema perceptivo, encefálico, entre en juego para analizar la información, ésta es captada por los diferentes receptores sensoriales, auténticas neuronas distribuidas por todo el cuerpo. Información •Antes de realizar cualquier acción Preparación •Receptores sensoriales captan la información •El sistema perceptivo, analiza la información Analizada En los niños de cinco años, ya funciona de una manera muy similar a la del adulto. Existen diferentes categorías de receptores que reaccionan a los estímulos que le son propios como la luz, los sonidos, la temperatura, las presiones, el alargamiento de los músculos, etc. Existe un umbral de excitabilidad, nivel de intensidad mínimo a partir del cual el estímulo es captado por el receptor y por debajo del cual no va a provocar estimulación alguna. Es entonces cuando se produce la aparición de un impulso nervioso que se dirige hasta la corteza cerebral donde se producen una serie de reacciones en cadena que finalizarán con la toma de conciencia del acontecimiento y su percepción, testimonios del procesamiento de la información. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Dependiendo de su localización distinguimos tres tipos de receptores de los cuales sólo los dos primeros contribuyen a la acción motriz: exteroceptivos, propioceptivos Vista (luz), oído (sonidos), olfato (olores), gusto (sabores) y tacto (presión, temperatura) Percepción de estímulos que vienen del interior del cuerpo Sentido del movimiento o pripiocepción INTEROCEPTIVOS Percepción de estímulos que vienen del exterior del cuerpo PROPIOCEPTIVOS EXTEROCEPTIVOS e interoceptivos. Percepción de estímulos que vienen de los órganos internos La piel contiene toda una serie de células receptoras sensibles a las presiones, a la temperatura o al dolor y es de ahí de donde procede el tacto. No todas las partes del cuerpo poseen la misma cantidad de estas células, sino que su densidad varía en función de la zona. Es más alta en las yemas de los dedos donde la discriminación táctil será mejor. Figura 1. Diferentes capas y receptores de la piel Los impulsos procedentes de estas células tienen lugar en las áreas somestésicas del lóbulo parietal opuesto según una disposición muy particular ya que las partes anatómicas colindantes se encuentran en partes próximas a estas áreas y corticales constituyendo lo que se denomina el homúnculo sensitivo. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Las proyecciones corticales de las diferentes partes del cuerpo son mucho más importantes en superficie, especialmente cuando una zona provee una gran cantidad de información: así, la mano ocupa un área cortical mucho mayor que la pierna. El hecho de distinguir detalles a partir del tacto se denomina discriminación táctil y se mejora con el entrenamiento. Aunque el sistema vestibular es el primero en desarrollarse y mielinizarse, el primer contacto con el mundo exterior se produce a través el tacto. Como expresa Goddard (2005), la primera respuesta observable a un estímulo táctil tiene lugar aproximadamente a las cinco semanas de la concepción, con la aparición de los reflejos de la retirada de la masa cutánea. La estimulación suave del labio superior origina la retirada inmediata del cuerpo entero de la fuente de contacto. El área de sensibilidad se expande de forma rápida durante las próximas cuatro semanas rodeando la región oral de la cara, las palmas de las manos y las plantas de los pies, hasta que finalmente toda la superficie corporal responderá al tacto. De cualquier manera, las respuestas primarias más tempranas al tacto son defensivas y se caracterizan por la retracción. El área del cerebro que percibe el tacto se extiende como una diadema y se denomina córtex somatosensorial, siendo capaz de registrar frio, calor, presión, dolor y la posición corporal. Las áreas de mayor sensibilidad corporal, tienen respectivamente un área grande de representación en el córtex somatosensorial; los labios y las manos, por ejemplo, ocupan una sección grande del mapa somatosensorial. Incluso en la base de los folículos del pelo hay receptores del tacto. El responsable del aparato vestibular es el movimiento del líquido de las células ciliadas y el sentido del tacto es fundamental para el funcionamiento del equilibrio, la orientación y el movimiento. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Figura 2 . Áreas del cerebro que perciben el tacto El niño que tiene un sistema propioceptivo activo en exceso será “táctilmente defensivo” y es probable que aún tenga reflejos cutáneos de retirada no inhibidos, que continúan influenciando el sistema nervioso central. En este caso, el tacto no podría ser ni una fuente instantánea de consuelo ni un proveedor de información ya que, la respuesta refleja eliminará la retirada de la fuente de contacto, y el niño no podrá utilizar adecuadamente su técnica de discriminación táctil. Este puede tener una percepción anormal de toda la información que entra en el área del córtex y que registra el tacto. Puede tener mecanismos pobres de tolerancia y/o adaptación frente al frío o al calor. También puede poseer una resistencia muy baja de tolerancia al dolor asociado a la piel pero, paradójicamente, una gran tolerancia frente al dolor interno. Es posible que este niño sobre reaccione a las inyecciones, rasguños y pequeños cortes, pero luego no perciba que sus piernas están llenas de moratones. Es muy probable que no le guste ningún tipo de contacto físico, de tal manera que tendrá dificultad para aceptar o mostrar afecto, razón que dificultará a la madre para establecer una relación cálida con el niño. Puede mostrarse muy cabezota con respecto a las prendas de vestir y la manera en la que hace las cosas. Tratará de evitar aquellos deportes basados en el contacto, puede que tenga una baja estima de su imagen y escaso sentido de su espacio. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Síntomas de hipertactibilidad: Hipersensible. No le agrada el contacto pero puede ser un “tocador” impulsivo. Reacciones alérgicas de la piel. Mal control de la temperatura. Bajo umbral de dolor externo. Anorexia. No le gusta practicar deporte. Tendencia a confiar en los estímulos sensoriales en lugar del lenguaje verbal. En casos extremos, nos podemos encontrar con casos de anorexia nerviosa por una distorsión de la imagen corporal. El anoréxico “se siente” gordo y considera que su espacio corporal ocupa mucho más de lo que en realidad ocupa. En este tipo de casos, aunque el niño pierda peso, esta sensación no se alterará ya que proporcionalmente posee la misma cantidad de superficie de piel y, como consecuencia, la misma cantidad de receptores en contacto con el mundo exterior. Si tenemos en cuenta que las sensaciones de este tipo están medidas por el tronco del encéfalo, el sentimiento traspasará cualquier lógica que le sea impuesta desde el córtex; ningún tipo de evidencia contraria hará cambiar la percepción que una persona anoréxica tiene de sí misma. Según Goddard (2005), el contacto temprano lleva a la sensibilidad permanente de la parte del cerebro que controla las respuestas de estrés, provocando bajos nivel de hormonas de estrés. Los niños pequeños que carecen de contacto Rápidamente se sienten alterados e intentan subministrarse información sensorial esencial a través de la autoestimulación Ejemplo: “balanceo” observado entre los niños abandonados en los orfelinatos que intentan aportarse información esencial vestibular, táctil y propioceptiva. Estudios llevados a cabo con niños prematuros, muestra un aumento de peso de hasta el 45% en niños a los que se les da masajes de 15 min, tres veces al día. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Para el desarrollo de la imagen corporal del niño, el tacto es de suma importancia Los niños que tienen dispraxia (patología psicomotriz que consiste en una mala organización del movimiento) posen una sensación pobre de su imagen corporal, dificultad en la localización de las diferentes partes corporales. Cuando tienen que dibujar a un ser humano, a menudo, la cabeza se dibuja de una manera desproporcionada, ya que es extremadamente grande con respecto al cuello que puede no existir (a menudo, una característica de los dibujos de niños que no han desarrollado los reflejos de enderezamiento cervical). También son indicios de problemas dibujar las manos excesivamente grandes o las extremidades o posturas distorsionadas. Es la boca del neonato la que aporta la primera fuente de información táctil en los primeros meses de vida, a través de la succión y exploración con los labios y la lengua. Inicialmente, las manos también están implicadas en movimientos palmares y la respuesta Babkin (movimientos con las palmas de las manos provocando que busquen con los dedos), después, en un juego entre las manos y la boca. Esta fase del desarrollo se conoce como “fase oral” del desarrollo. De la misma manera que en la respuesta táctil prenatal, en el desarrollo táctil postnatal el comienzo se da en la boca y se extiende hacia las manos, los pies y finalmente, al cuerpo entero. Si los reflejos de agarre o retirada se prolongan más tiempo del tiempo asignado, el delicado equilibrio entre el sistema táctil Propioceptivo y el discriminatorio se verá alterado. Conforme los niños van creciendo, su contacto físico con los padres disminuye. En la pubertad, el adolescente tentativamente busca de nuevo el estímulo táctil con la aparición de la conciencia sexual, de tal manera que el ciclo de búsqueda de contacto continua a lo largo de toda la vida. Es posible que sea el grupo comprendido entre los 8 a 16 años el que más sufra en el caso de que existan problemas de tacto no detectados, ya que es en estas edades cuando el niño debería buscar información táctil por sí mismo. El niño con poco sentido protectivo será “el atrevido”, al no encontrar el peligro, se lesionará con frecuencia o lesionará a otros y no sabrá leer el lenguaje corporal de las otras personas. Presenta, de algún modo, un peligro para sí mismo y para los demás, siendo literalmente “insensible”. Por el contrario, su opuesto, el defensivo táctilmente tímidamente desaparecerá de las actividades y experiencias para las que no se considera adecuadamente preparado. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Síntomas de hipoactividad: Hipotáctil. Alto umbral de dolor. Le gustan los deportes con contacto. El niño puede armar jaleo y peleas Necesita contacto compulsivamente. Se comporta como un “elefante en una tienda de porcelana”. Tacto y aprendizaje Martín (2003), describe cómo la experiencia indica que, en términos generales, las actividades sensoriales facilitan la comprensión. De esta manera, el tacto actúa como integrador de la experiencia sensible y favorece el aprendizaje. El trabajo en las aulas con plastilina u otros materiales de este tipo, favorece el desarrollo táctil, así como todos los procesos que lleva consigo. La metodología basada en actividades táctiles facilita el procesamiento de la información sensorial para que el aprendizaje se lleve a cabo de manera eficiente. Es posible la identificación de objetos en una pe rcepción única. Favore cen la atención a los estímulos apropiados para el aprendizaje , permitiendo dar importancia a la información re le vante , para favore cer e l inicio del proceso de aprendizaje. Las se nsaciones táctiles se integran con las visuale s y auditivas para captar los significados de forma más global y completa. Me diante e l tacto se pue den percibir mejor los contraste s. Se le cciona los e stímulos para no sobrecargar los sistemas, a la vez que la visión y la audición. Favore ce el desarrollo y maduración de la vía se nsorial táctil en el cerebro para aprender de forma completa. Con los de más sentidos y sistemas, el tacto e s facilitador de la captación del esquema corporal, e l equilibrio, la posición del cue rpo para lee r, para e scribir y para la realización de otras tareas. Ayuda n el estable cimie nto de mapas inte rsensoriales y de consiste ncia en la percepción se nsorial, junto con la visión y la audición. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje 1.3. La propiocepción o kinestesia No tan conocido pero indispensable en educación motriz para un buen control motor, es el sentido del movimiento o propiocepción. La sensibilidad propioceptiva procede de dos grandes sistemas sensoriales: Receptores localizados en los músculos, las articulaciones y los tendones musculares, asociados a la cinestesia. Receptores del laberinto o vestíbulo del oído interno, asociados al sentido vestibular. Terminación nerviosa libre Fibra eferente IV Fibra muscular extrafusal Fibras eferentes α RECEPTOR MUSCULAR HUSO NEUROMUSCULAR Fibra en cadena Fibra en saco Fibra eferente y Fibras aferentes II Fibra aferente IA Fibra aferente II Fibras eferentes y RECEPTOR TENDINOSO ÓRGANOTENDINOSO DE GOLGI Fibra aferente IB Fibras aferentes III RECEPTORES ARTICULARES - Receptor de Rufini - Corpúsculo de Golgi - Corpúsculo de Pacini - Cápsula articular Figura 3. Diferentes receptores propioceptivos Las sensaciones cinestésicas provienen de cualquier conjunto de receptores diseminados por: Los músculos Los husos musculares, que indican los cambio de longitud en los músculos Tendones musculares Órganos tendinosos de Golgi que indican la tensión o fuerza muscular a la que están sometidos durante la contracción Las cápsulas articulares Receptores múltiples que indican la amplitud y la velocidad de la abertura o cierre de las articulaciones TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Sin la cinestesia, sería imposible llevar a cabo cualquier actividad motriz voluntariamente controlada. Toda esta información se procesa en las áreas somestésicas y más tarde es transmitida a otras áreas del mismo lóbulo parietal y el encéfalo para que podamos controlar mejor nuestros movimientos, responsables en gran medida de la estructuración de nuestro esquema corporal. En cuanto al sentido vestibular, se deriva de los movimientos de la cabeza (y por tanto, del cuerpo, la mayor parte de las veces) y nos servimos de él para mantener el equilibrio durante las acrobacias gimnásticas, en patinaje, en natación sincronizada. Las sensaciones que provienen del cuerpo, que incluyen las sensaciones táctiles y propioceptivas, forman la somestesia. Si combinamos las sensaciones táctiles y cinestésicas nos encontramos con el sentido háptico que nos va a permitir reconocer las formas por medio del tacto activo, sin que intervenga la vista, aunque en la mayoría de las actividades de manipulación, nosotros utilizamos constantemente la combinación de las sensaciones táctiles además de las visuales. Sensaciones táctiles Sensaciones cinestésicas Sentido háptico Parece ser, según Redon et al. (1994), que las sensaciones cinestésicas en los niños son casi las mismas que para el adulto. En un experimento realizado con niños de 5 a 9 años, estos debían reproducir con su brazo izquierdo los movimientos que el investigador les realizaba con su brazo derecho sin visión alguna (se les había colocado los brazos en pequeños entablillados a la altura de los codos). En un principio, el encargado del experimento, llevaba a cabo un movimiento real de flexión del antebrazo derecho sobre el brazo. Casi dese el comienzo del movimiento, los niños ya reproducían con el brazo izquierdo el movimiento del brazo derecho, en función de la velocidad de dicho movimiento. Después les bloquearon el brazo derecho y les aplicaron un vibrador en el tendón del tríceps del mismo brazo. Por lo que nosotros sabemos, en esta misma situación de brazo bloqueado, TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje el adulto percibe un movimiento del antebrazo que se corresponde al estiramiento del músculo sometido a la vibración (una flexión “ilusoria”, en este caso). La experiencia ha demostrado que en los niños a partir de 5 años, la reacción es la misma, flexionando el antebrazo izquierdo, lo que demuestra que percibe una flexión del antebrazo derecho. De esta manera, este experimento demuestra que las informaciones cinestésicas son utilizables desde esta edad, y probablemente desde antes, en la toma de conciencia del movimiento y por tanto en la mejora del control motor (como en el caso de la escritura sin visión). Su ausencia no impide escribir, pero no permite ajustar nuestro movimiento (no podemos verificar lo que hacemos) lo que va a producir un trazo ilegible. La propiocepción, según Goddard (2005), es un sentido que, por un lado es interdependiente del resto de los sentidos pero, a su vez, aliado a los mismos. Aunque es el resultado de información multisensorial, también forma un canal de información propia. La propiocepción o kinestesia nos permite ser conscientes de dónde está cada una de las partes de nuestro cuerpo en cualquier momento, dándonos la posibilidad de llevar a cabo los ajustes posturales adecuados. Es una sensación interna, por lo que vamos a poder llevar a cabo movimientos detallados sin ser conscientes y en ausencia de otras referencias sensoriales. Tenemos propioceptores por todo el cuerpo en las articulaciones, en los tendones, en los músculos, etc. La entrada de información que proviene de los propioceptores es procesada, en un primer momento, a través del sistema vestibular, pero además se coordina con la información que proviene de las otras fuentes sensoriales para influenciar los movimientos del cuerpo y dirigir ajustes para la motricidad fina. Lógicamente toda información distorsionada que provenga de cualquiera de estas fuentes también afectará a los receptores. Propiocepción Kinestesia La propiocepción abarca todas las sensaciones que impliquen la posición del cuerpo, tanto en posición de descanso como de movimiento. La kinestesia se refiere solamente a sensaciones provenientes de la implicación activa de la contracción de los músculos. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Los niños que tengan pocos estímulos sensoriales propioceptivos cuando se encuentran quietos, quizá tengan que moverse constantemente ya que dependen de la información que reciben del movimiento muscular cuando están en un espacio. En estos casos, también debería comprobarse la capacidad visual. Es común e n niños con dificultade s de apre ndizaje la falta de conciencia propioce ptiva. Paradójicame nte , pocos niños confiarán e n la propioce pción o e n la kine ste sia para lle var a cabo cie rtas tare as. Ejemplo: se le pide a un niño de sie te años que lance un cojín de ntro de un cubo de arena a una distancia de dos metros. No logró e l objetivo durante los cuatro prime ros lanzamie ntos, consiguiendo en e l quinto que el cojín e ntrara e n el cubo. Teóricamente e sto de bería se r más fácil, pero los prime ros lanzamie ntos iban demasiado lejos. El niño poseía e scasa pe rcepción de la profundidad y confiaba en la información propioceptiva para dirigir la fuerza de su lanzamie nto. Una ve z conse guido el obje tivo sabía cuál e ra la “se nsación” ne cesaria para la consecución de su objetivo. Esta misma no le serviría en e l caso de mover e l objetivo. 1.4. Principales disfunciones de la integración sensorial Las disfunciones de la integración sensorial se producen porque el cerebro no funciona de manera natural y eficiente, incidiendo concretamente en los sistemas sensoriales. Cuando hay disfunción, la organización o procesamiento del flujo de impulsos sensoriales por parte del cerebro que aporta información al individuo sobre sí mismo y sobre el mundo que le rodea, no se produce de forma correcta. Cuando el cerebro no procesa bien la información sensorial, tampoco dirige eficazmente el comportamiento. Una disfunción en la integración sensorial es como una especie de “embotellamiento” en el cerebro, ya que hay fragmentos de información que se quedan “atrapados en el tráfico” y no consiguen llegar a las partes del cerebro dónde deberían llegar para hacer su trabajo. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Aunque está claro que las disfunciones de la integración sensorial responden a flujos irregulares en la actividad cerebral, la mayoría de los neurólogos no suelen encontrar nada raro en los niños que las padecen. Las incapacidades de aprendizaje y desarrollo pueden estar relacionadas con problemas muy diversos, siendo la deficiencia sensorial tan sólo uno de ellos y la incapacidad de aprendizaje no es lo mismo que retraso mental, ni tampoco lo es la disfunción de la integración sensorial. Una disfunción de la integración sensorial es un mal funcionamiento y no la ausencia de función. Dispraxias del desarrollo Jean (2008), define la dispraxia del desarrollo como una disfunción cerebral que dificulta la organización de las sensaciones táctiles y, a veces vestibulares y propioceptivas, interfiriendo en la capacidad de planificar movimientos. Se inicia en una etapa temprana del desarrollo y por ello recibe este nombre. La integración sensorial deficiente no se ve, pero si la deficiencia de coordinación motriz Por ello la dispraxia parece un problema de movimiento El niño con dispraxia siente su cuerpo en menor medida que los demás, por lo que es menos consciente de lo que puede y o puede hacer con él. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Algunas de las características de las dispraxias del desarrollo son: Torpeza. Organización espacial deficiente. Mal esquema corporal. Mala planificación motriz. Planificación excesiva de los movimientos que necesita para llevar a cabo una tarea. Dificultad para automatizar sus actos en el aprendizaje deportivo. Gran deseo de aprendizaje y se esfuerza, pero su percepción corporal no le dice cómo. Dificultad para aprender a escribir, dibujar, colorear. ¿Cómo influyen las dispraxias en el rendimiento escolar? El hecho de que el cerebro tenga dificultades para hacer una cosa, no quiere decir que no pueda hacer bien otras. Aunque algunos niños con dispraxia tienen problemas de aprendizaje, estos no siempre tienen lugar. Se puede ser dispráxico y aún así aprender cosas, aunque sea con mayor esfuerzo del normal. La defensa táctil La defensa táctil es una tendencia a reaccionar emocionalmente y de forma negativa ante las sensaciones del tacto. La mayor parte de las personas reaccionan de manera negativa a determinados estímulos táctiles que le producen un especial desagrado, pero en el caso de la defensa táctil, estas reacciones son significativamente mayores. Es muy difícil prestar atención en clase cuando la piel o la ropa despiertan sensaciones incómodas o desagradables. Las sensaciones táctiles son causa de grandes perturbaciones del sistema nervioso provocando emociones y comportamientos negativos. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Se pone ropa larga para que nada le Evitan muchos de esos objetos que toque los brazos y no le gusta meter les suelen gustar a los demás niños las manos en pintura de dedos, ni como los osos de peluche. andar descalzo por la arena o la hierba. DEFENSA TÁCTIL Evita que otra persona le bañe y prefiere no dar paseos por la orilla por miedo a que el roce del agua sobreestimule su sistema nervioso. Ciertos tejidos como la lana y algunos materiales sintéticos o de texturas más bastas le dan repelús. El niño que tiene defensa táctil se encuentra ante un gran dilema, ya que necesita más sensaciones táctiles que otros niños, pero es incapaz de modular los impulsos táctiles y utilizarlos para mantener en equilibrio su sistema nervioso. Es un hecho, que el niño que padece este tipo de desorden neuronal, experimenta de manera diferente a los demás los estímulos táctiles. Algo que a los demás les hace sentir bien, a ellos les desagrada y les provoca irritación. Algunos son capaces de expresar lo que sienten. Ej.: cuando tocan un lápiz es como si se pinchasen con una aguja, recibieran una descarga eléctrica o les picase un insecto Ej.: cuando les tocan es como si les hiciesen cosquillas, pero estas no son algo placentero, aunque les provoque una risa refleja. La inhibición es el proceso neuronal por el que una parte del sistema nervioso impide que otra sobrerreaccione a las señales sensoriales. Las sensaciones táctiles de la ropa que toca el cuerpo y las de la propia piel afluyen constantemente al sistema nervioso de las personas. Sin embargo, la mayoría inhiben estas sensaciones, evitando que nuestro sistema nervioso responda a ellas. El niño con defensa táctil no genera suficiente actividad inhibidora y sus sensaciones (estas y muchas otras), le hacen sentirse incómodo, provocando que quiera moverse todo el rato de un lado para otro. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje 1.5. Nivel perceptivo y escritura El nivel perceptivo de la actividad gráfica hace posible el darse cuenta de lo que se está haciendo Permite controlar mejor , más conscientemente, el propio acto motor y el grafismo resultante Las sensaciones táctiles (textura, forma, peso y tamaño) y las propioceptivas o cinestésicas, en ocasiones, son inseparables de la actividad de los músculos y las articulaciones. En la escritura, en la que una gran parte de la actividad se concreta en la mano, este hecho es evidente. Tanto los movimientos de la mano y el contacto de esta con el lápiz y con el soporte son los que van a desencadenar que las sensaciones táctiles, tónicas, articulatorias, se reciban y registren al mismo tiempo e influyan unas en otras. Esto provocará cambios en la acción y, a su vez, generará nuevas sensaciones. Por ejemplo: Un lápiz demasiado fino o corto, o las dos cosas a la vez, obliga a exagerar la tensión de los dedos de la mano, y probablemente también la presión sobre el papel, impidiendo un movimiento fluido y provocando fatiga muscular excesiva. Un lápiz bastante grueso y largo, cortado en caras, con el peso adecuado y una mina consistente y deslizante facilita la función tónica del niño, lo que suele provocar una buena prensión y movimientos fluidos y regulares. Al igual que en otras actividades motrices, la percepción táctil-propioceptiva durante el grafismo, permanece a un nivel más intuitivo y global que otras como la visual la cual permite un análisis más sutil. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Percepción táctil, propioceptiva y kinestésica Permite la toma de conciencia por parte de los niños de cómo cogen el lápiz, del grado de tensión empleada, de la postura del cuerpo y de los movimientos que llevan a cabo de la adecuación motriz a la tarea y el bienestar o incomodidad que les aporta. 1.6. Evaluación y tratamiento de la integración sensorial El programa de intervención de la integración sensorial debe permitir que el niño construya de manera espontánea sus propias respuestas adaptativas necesarias para integrar las sensaciones. Se basa en proporcionar y controlar señales sensoriales, especialmente las que proceden del sistema del movimiento, de los músculos y las articulaciones y de la piel. De esta manera, el objetivo fundamental es que el niño sea capaz de funcionar bien: La educación de la actividad gráfica ha de contemplar una progresiva adecuación y dominio de la motricidad de los niños, y no estar basada únicamente en los resultados gráficos que se consiguen. Físicamente Emocionalmente Académicamente La importancia de la actividad motriz reside en que aporta las señales sensoriales necesarias para organizar el proceso de aprendizaje. Se deben introducir experiencias sensoriales que contribuyan a que el niño recibe de manera adecuada las sensaciones del tacto, ya que las sensaciones táctiles transmiten información primaria de gran importancia a muchas partes del cerebro. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje El niño hipersensible se organiza mejor ante situaciones de presión profunda. Ej.: colocar al niño entre dos alfombras simulando hacer una “hamburguesa”. Suelen salir de ella más calmados y organizados. Jean (2008) establece una serie de preguntas referentes a los síntomas de la defensa táctil. Como ya hemos explicado, no todos se presentan a la vez en el mismo niño y, en ocasiones, niños que los tiene no presentan deficiencias de integración sensorial. Evita que le toquen la cara. Es posible que retire la cabeza si hay alguna cosa cerca de su cara. Lavarle la cara puede ser especialmente difícil. Le resulta especialmente irritante que lo toquen durante el trabajo dental y se mueve mucho en la silla del dentista. Sufre cuando le lavan o le cortan el cabello. No le gusta que la gente lo toque, ni siquiera de manera amistosa y agradable. Se retira cuando lo quieren abrazar o incluso cuando le dan una palmada en el hombro. Tocar al niño al vestirlo puede desencadenar una reacción negativa. Simplemente subirle las medias puede hacerlo reaccionar. No le gusta que lo bañen o le corten las uñas. Tiende a evitar el contacto físico con amigos, aún cuando le guste hablar con ellos y relacionarse. El hecho de que lo toquen desde atrás le resulta más amenazante que a otros niños. Sufre al estar cerca de la gente aún sin tocarla o sin que lo toquen a él. A menudo prefiere usar ropa de manga larga aunque tenga calor. Tiene una necesidad poco usual de tocar o evitar tocar ciertas superficies o texturas como una alfombra o cobija. Es sensible a ciertas telas y evita la ropa hecha de ese material. No le gusta poner sus manos en la arena, en masa o en materiales similares. Evita andar descalzo especialmente en el pasto o en la arena De bebé sentía mucha incomodidad cuando le limpiaban la nariz o los oídos. En general, estos niños responden poco a mal a los esfuerzos de los profesores de educación especial, ya que necesitan un complemento con algo más. Lo que si funcionan muy bien, son las terapias destinadas a la mejora de la integración sensorial y, tras un año de tratamiento, estos empiezan a aprender con mayor fluidez, aunque sigan encontrando aún algunas dificultades. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Habrá que llevar a cabo actividades que impliquen: Experiencias de movimiento (columpiarse, deslizarse, saltar, etc.) Movimientos dirigidos por los propios niños. Movimientos rápidos, con muchos cambios de dirección. Equilibrios como patinar, montar en bicicleta, dar patadas, etc. Movimientos bilaterales, que impliquen el movimiento de ambos lados, como saltar a la comba, nadar, remar, etc. Coordinación de movimientos de los ojos, la cabeza y las manos, como juegos de tiro a diana, coger, tirar, etc. TEMA 1 – Ideas clave Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Pasos Detección de un caso de defensa táctil Paso 1. Disponer de una pauta de observación. Por ejemplo: Alumno Valoración Evita que le toquen lacara y mueva la cabeza cuando se le acerca algo Detesta tener que lavarse la cara o el pelo Huye del contacto con la gente incluso cuando este es afectuoso o amistoso Presenta diferentes respuestas al tacto dependiendo del momento Se estresa cuando la gente se coloca demasiado cerca Evita meter las manos en harina, pintura de dedos o materiales parecidos Muestra sensibilidad excesiva a la textura o temperatura de la comida Evita andar descalzo, especialmente en algunas superficies Es sensible a ciertas telas y evita la ropa hecha de ese material. TEMA 1 – Pasos Siempre A veces Nunca Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Paso 2. Observar tres alumnos y aplicar la pauta. Por ejemplo: Alumno Valoración Siempre A veces Luis Evita que le toquen lacara y mueva la cabeza cuando se le acerca algo Detesta tener que lavarse la cara o el pelo X X Huye del contacto con la gente incluso cuando X este es afectuoso o amistoso Presenta diferentes respuestas al tacto dependiendo del momento Se estresa cuando la gente se coloca demasiado cerca Evita meter las manos en harina, pintura de dedos o materiales parecidos X X X Muestra sensibilidad excesiva a la textura o temperatura de la comida Evita andar descalzo, especialmente en algunas superficies Es sensible a ciertas telas y evita la ropa hecha de ese material. Paso 3. Elaborar un programa de intervención. TEMA 1 – Pasos X X X Nunca Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Paso 4. Aplicar una intervención real. Por ejemplo: Por ejemplo: Utilizar pre sión firme al tocar al niño. No sorprenderle nunca, sino ase gurarse de que sabe que se le va a tocar. Actividade s de trabajo duro como lle var una mochila pe sada, trepar y saltar le pueden ayudar a calmarse y organizarse . Incorporar de manera gradual varie dad de e xperiencias táctile s con plastilina, are na u otros materiales. Ofre cer al niño toda una variedad de se nsaciones táctiles distintas proponie ndo actividade s con cepillos, esponjas, lociones, granos de arroz, le ntejas, maíz, are na y otras te xturas, con el objetivo de reducir los procesos defensivos al tacto. Dejar que sea e l niño e l que inicie e l juego. Colocar al niño o delante del todo o detrás del resto de los niños, pe ro no el me dio. Utilizar varios tipos de actividade s táctile s combinadas con movimiento y con e jercicios de presión física inte nsa, dado que las se nsacione s que producen contribuyen a una mayor organización en el niño. TEMA 1 – Pasos Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Caso Análisis de un caso práctico Gonzalo tenía 8 años y once meses cuando se le practicaron las primeras pruebas de integración sensorial. Estaba en cuarto curso, pero mostraba la destreza lectora de un niño de primero, mientras que su ortografía y sus habilidades matemáticas se correspondían con las de un niño de segundo. Al dar los test de inteligencia valores casi tan buenos como los del resto de los compañeros, le mandaron a una clase para niños con problemas de aprendizaje. Toma de datos Gonzalo: 8 años y once meses. Cursa 4º de primaria. Destreza lectora de un niño de 1º. Ortografía y habilidades matemáticas de u niño de 2º. Test de inteligencia con una buena puntuación. Resultado de la evaluación A Gonzalo se le practican pruebas de integración sensorial, destreza lingüística y rendimiento académico con los siguientes resultados: Problemas para mantenerse de pie sobre una sola pierna con los ojos cerrados, y aunque sus reacciones de equilibrio eran normales, no de una forma destacada. Podía jugar a casi todas las cosas del parque sin sentirse mal consigo mismo, aunque en los test lo pasaba bastante mal planificando el movimiento. A penas mostraba dificultad alguna para saber en qué dedo le estaban tocando cuando no veía sus manos. Presentaba problemas para distinguir diferentes problemas táctiles y, a veces, tenía serias dificultades para distinguir entre un triángulo y un cuadrado colocados en la mano. Su percepción visual del espacio también era pobre para su edad. Se distraía con mucha facilidad y tenía presentaba defensa táctil. La puntuación en las pruebas auditivas, estaban por debajo de lo normal para su edad e inteligencia. Tenía dificultades para entender lo que se decía, especialmente con ruidos de fondo. TEMA 1 – Caso Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Diagnóstico Por los resultados de todas estas pruebas se llegó a la conclusión de que el déficit básico de integración sensorial de Gonzalo estaba en el sistema vestibular y que este era el que estaba provocando los problemas de aprendizaje, planificación motriz, coordinación ojomano, de percepción visual y de desarrollo del lenguaje. Aquellas sensaciones vestibulares que su cerebro no era capaz de procesar le provocaban distracciones con facilidad, comportamientos hiperactivos y la adopción de reacciones defensivas ante el tacto. Aplicación de los programas de intervención En este caso se llevó a cabo un programa de intervención basado en actividades de movimiento que implicaban estimulación vestibular: Botar en un columpio de cuerdas elásticas, arriba y abajo y hacia delante y hacia detrás. Deslizamientos y saltos. Movimientos rápidos con cambios de dirección. A los pocos mese, Gonzalo empezó a treparlo todo y a saltar desde aquello que trepaba. Seguramente había acumulado suficiente alimento vestibular columpiándose. Subirse solo a cuerdas colgadas del techo. Dar patadas a un barril de cartón dando tumbos de un lado a otro de la habitación La terapia se llevó a cabo durante un periodo de seis meses, dos horas y media a la semana. Medición y análisis de los resultados Un año después de la terapia Gonzalo se sometió a una nueva batería de tests: Su destreza lectora era ahora la de un niño a punto de terminar cuarto, lo que había supuesto el avance de tres años en uno. Su ortografía se correspondía ahora con la de un niño que llevase dos meses en cuarto, lo que supone, otra vez, un avance de un año y medio. La habilidad aritmética se correspondía con la de un niño que empezase tercer curso, lo que supuso un avance de algo menos de un año. TEMA 1 – Caso Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Resumiendo: la terapia parecía haber aportado una mejoría significativa en la capacidad de Gonzalo para aprender destrezas académicas, especialmente la lectura. TEMA 1 – Caso Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje + Información A fondo A modo de resumen Es importante recordar cómo el sistema vestibular influye en el aprendizaje, ya que leer y escribir no son en realidad las “destrezas básicas”, sino que ambas necesitan que el cerebro procese todas y cada una de las precisas sensaciones y participe en la creación de respuestas motrices y mentales específicas. La corteza visual debe procesar los datos visuales conforme a una serie de reglas ortográficas y gramaticales y, para ello, todas las partes del cerebro que intervienen en el lenguaje deben comunicarse con las que participan en la percepción visual y la memoria. E l niño debe poseer una buena percepción espacial para ver las diferencias entre el 14 y el 41 y entre las y sal. El sistema visual debe distinguir las diferencias mínimas entre las letras del abecedario, números y signos de puntuación. En el caso de la escritura esto se complica aún más ya que además de todo lo anterior, el cerebro debe procesar las sensaciones de la mano y de los dedos, compárarla con recuerdos de cómo se supone que debe sentirse la mano y los dedos al escribir y organizar las contracciones musculares que mueven el lápiz. Si el cerebro no recibe y procesa las sensaciones del movimiento y de la gravedad, ninguna de estas funciones cerebrales puede desarrollarse de forma adecuada. En niños con desórdenes vestibulares, muchos de los patrones sensomotores del cerebro están desorganizados, lo que va a hacer que no encuentren la manera de recordar el significado de una palabra impresa o no sepa escribirla sin ayuda. ¿Cómo puede leer un niño si a penas es capaz de conectar lo que ve con lo que oye? ¿Cómo puede escribir su nombre cuando lo que requiere todo su esfuerzo es mantener el equilibrio sobre la silla? TEMA 1 – + Información Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Estas capacidades sensomotoras constituyen las verdaderas “destrezas básicas” y hasta que no se preste atención a su desarrollo, los problemas de aprendizaje no desaparecerán. Algunos niños siguen un patrón de desarrollo normal en la adquisición de estas destrezas y están preparados para aprender a escribir a los cinco o seis años de edad, pero hay otros que, debido a una irregularidad neuronal, no alcanzan el grado de dominio básico necesario. Cuando intentamos enseñar a leer a estos niños a la edad de seis años, les estamos invitando al fracaso y probablemente adopten actitudes defensivas provocando un mal comportamiento. ¿Por qué los niños dan volteretas? Sally Goddard Blythe explica como el primer sentido que desarrollamos es el del equilibrio y el resto de nuestros sentidos, de los que dependerán el aprendizaje del niño, están vinculados a éste. El documento está disponible en el aula virtual y en la siguiente dirección web: http://jugarijugarcast.wordpress.com/2011/08/ Bibliografía GODDARD, S. Reflejos, aprendizaje y comportamiento. Barcelona: Vida kinesiología. 2005. JEAN, A. La integración sensorial en los niños. Madrid: TEA Ediciones. 2008. MARTÍN, P. La lectura. Procesos neuropsicológicos del aprendizaje, dificultades, programas de intervención y estudio de casos. Barcelona: Lebón. 2003. REDÓN, C., L. HAY, R. RIGAL et J.P. ROLL. “Contributionof the propriomuscular cannel to movement coding in children: a study involving the use of vibracioninduced kianesthetic illusion”, Human Movement Studies, 13, p. 95-108. 1994. RIGAL, R. Educación Motriz y educación psicomotriz en Preescolar y Primaria. Barcelona: Inde. 2006 TEMA 1 – + Información Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje Test 1. El nivel de intensidad mínimo a partir del cual el estímulo es captado por el receptor y por debajo del cual no va a provocar estimulación alguna es: A. Grado de excitabilidad. B. Umbral de excitabilidad. C. Mínimo nivel excitable. 2. La primera respuesta observable a un estímulo táctil tiene lugar aproximadamente a las cinco semanas de la concepción: A. Nada más nacer. B. A las cinco semanas de la concepción. C. A lo largo del primer año de vida. 3. ¿Cuáles de los siguientes receptores contribuyen a la acción motriz? A. Exteriores o exterotipados. B. Interoceptivos. C. Exteroceptivos y propioceptivos. 4. Las sensaciones cinestésicas provienen de cualquier conjunto de receptores diseminados por: A. Los músculos, los huesos y las articulaciones. B. Los músculos, los tendones musculares y las cápsulas articulares. C. Los receptores de la piel y de los músculos. 5. Las sensaciones que provienen del cuerpo, que incluyen las sensaciones táctiles y propioceptivas forman: A. La somatognosia. B. La somestesia. C. La kinestesia 6. La capacidad de planificar el movimiento depende en gran medida: A. Del grado de precisión que haya adquirido el sistema táctil del niño. B. Del desarrollo de la propiocepción. C. De un buen desarrollo del esquema corporal. TEMA 1 – Test Niveles táctiles y neuromotores, escritura y aprendizaje 7. La dispraxia del desarrollo supone: A. Una dificultad en aspectos del lenguaje como el habla y la escritura. B. Básicamente un problema motriz. C. Un problema de la integración sensorial. 8. La defensa táctil provoca: A. Reacciones excesivas y negativas a las sensaciones táctiles. B. Que no reaccione ante estímulos táctiles ya que su umbral táctil es inferior. C. Hipercinesia gráfica. 9. ¿Qué aspecto obliga a exagerar la tensión de los dedos de la mano al escribir? A. Un lápiz demasiado fino o corto. B. El papel de escritura excesivamente girado. C. Que el tacto del utensilio de escritura no le resulte agradable al niño. 10. Personas felices, productivas y bien coordinadas suelen ser consecuencia de: A. Un buen desarrollo del esquema corporal. B. Una buena integración sensorial. C. Un buen desarrollo motriz. TEMA 1 – Test