DESCRIPCIÓN BREVE Muy a menudo los docentes piensan que los niños que necesitan moverse estar en acción, no aprenden. Probablemente esos niños sólo sean estudiantes kinestésicos o prácticos. Aprenden mejor cuando usan sus manos, mueven sus cuerpos o garabateando o apuntando algo Doris Isabel MezaRuiz Teoría pedagógica APRENDIZAJE KINESTESICO ¿Cómo enseñar a estudiantes en movimiento? Introducción Esta inteligencia incluye habilidades físicas como la coordinación, el equilibrio, la destreza, la fuerza, la flexibilidad y la velocidad así como las capacidades auto perceptivos, las táctiles y la percepción de medidas y volúmenes. Esta nos ayuda adquirir información y la desarrollamos a la edad de los 3 a los 10 años. Estos perciben los estímulos a través del tacto, gusto u olfato. Son personas con mucha capacidad de concentración. Para merecer su confianza tenemos que demostrarles cercanía, que estamos dispuestos a ir de su mano a cualquier lugar. Les gusta ir despacio en las negociaciones, más aún que a los auditivos. Tratan tema por tema con una lentitud que suele poner nerviosos a los visuales. Les gusta saludar muy amistosamente, no se sienten incómodos si se les habla muy cerca. Habitualmente saludan dando una palmada en la espalda o te toman del brazo para hablar contigo, también agradecen que este tipo de comportamiento se utilice para con ellos. Para que se sientan a gusto con nosotros tenemos que demostrarles proximidad. En el acercamiento inicial es bueno tratar temas relacionados con sus sensaciones. Siempre debemos comenzar el diálogo preguntando ¿Cómo estás? O expresiones similares que demuestren nuestro interés por ellos. Mientras hablamos debemos utilizar palabras que reflejen sensaciones. Pueden ser: palpar, tentar, sonar, pulsar, corresponder, competer, incumbir, pertenecer, repartir, importar, olfatear, inquirir, indagar, averiguar, investigar, probar, paladear, saborear, degustar, catar , agradar, placer, satisfacer, complacer, disgustar, desagradar. Características de la inteligencia kinestésica Es sensible Es emocional Es cariñoso Tiene voz lenta y pausada Siente el mundo exterior por medio de los sentimientos Siente el mundo exterior por medio de movimientos Habilidad para controlar los movimientos del cuerpo Le gusta tocar y ser tocado Como se utiliza la inteligencia kinestésica Con el niño kinestésico nos podemos comunicar de la siguiente manera: Abrazarlo, acariciarlo constantemente. Diviértanse activamente, jueguen y hagan deportes juntos. Facilite juegos de aprendizaje. Le gusta trabajar con arcilla y otros elementos táctiles. Actividades kinestésicas Diseñar zonas y cambiar de sitio el mobiliario para satisfacer las necesidades táctiles y de movimiento de los niños proporcionándoles así la oportunidad de desplazarse de un sitio a otro, para que puedan estirarse, moverse y mantenerse activos. Patricia Stokoe menciona: Tomaremos en cuenta la habilidad kinestésica se toma en cuenta el cómo aprende el mismo alumno relacionando el movimiento, el tacto con el aprendizaje proponiendo simultáneamente objetivos aseguran, por consiguiente, las condiciones necesarias e indispensables para todo trabajo escolar eficiente. a) Asegurar el orden y la disciplina necesarios para el trabajo en el aula. b) Garantizar el mejor aprovechamiento del tiempo, llevando a los alumnos a rendir más en los estudios. CONCLUSIÓN Muchas veces como docentes nos hacemos prejuicios sobre nuestros alumnos, pues si el niño se mueve demasiado, damos por hecho que sufre de TDAH o de otras enfermedades. Ni siquiera nos percatamos que existen 3 tipos de aprendizajes (auditivo, visual y kinestésico). Por lo tanto es necesario leer mas para saber como tatrar a la diversidad de alumnos que se nos presentarán a lo largo de nuestra práctica docente. Fuentes bibliográficas Andreas, C y Andreas, S (1980). Corazón de la Mente. Santiago de Chiles. Cuatro vientos editorial. Cudicio, C (1992) Como Comprender la Programación Neuro-lingüística. Introducción a la Programación Neuro-lingüística. España. Editores Granica Patricia Sokoe y Alex Schachter, (1967). La expresión corporal y el niño. Buenos Aires. Ricordi Americana S.A.E.C.