Boletín Antropológico Título: 1325-2610 ISSN: enero - abril, 2005 Fecha: Vol 2 - Num 64 Numeración: Páginas/Colación: 101-255 Ver datos de edición en PDF (0.1 Mb) TABLA DE CONTENIDO ● Papas negras, papas de páramo. Black potatoes, high altitude variety. Romero, Liccia y Monasterio, Maximina ● Plantas útiles empleadas por los campesinos de la región de Bailadores, Venezuela. Useful plants cultivated by peasants in the Bailadores region of Venezuela. Aranguren B., Anairamiz ● Determinación del tipo de cara del hombre andino merideño: estudio morfoantropométrico del macizo facial. Male facial types in the andean region of Venezuela: a study of the morphic structures and their measurement. Díaz de Villabona, Nancy; García Sivoli, Carlos; Palacios S., María F.; Solórzano N., Eduvigis y Jarpa, Patricio ● Los personajes del mito: aproximación al lenguaje de un microuniverso mágicoreligioso. Mythical characters: an approach to the language of a magicalreligious micro universe. Alvarez Muro, María Alexandra ● Pedro Durant: evolución y relevancia de la educación ambiental en el estado Mérida, Venezuela a partir de su praxis pedagógica. Pedro Durant: evolution and relevance of environment conservation in the state of Merida, Venezuela from the viewpoint of academic practice. Camacho A., Carlos R. ● Recensión. Review. Portillo, Alfredo ● ● Boletín informativo. Informative bulletin. El Boletín Antropológico en la Web Centro de Investigación: Centro de Investigaciones Etnológicas (CIET) Dependencia: Museo Arqueológico "Gonzalo Rincón Gutiérrez" Publicación Electrónica: Boletín Antropológico Bolso con cinto para colgar (Menuri Wane) Samamo, Sierra de Perijá estado Zulia Registro: Nº E-127 Colección del Museo Arqueológico “Gonzalo Rincón Gutiérrez” Boletín Antropológico Comité Editorial: Gladys Gordones Rojas (Museo Arqueológico-ULA) Jacqueline Clarac de Briceño (GRIAL-CIET-ULA) Lino Meneses P. (Museo Arqueológico-ULA) Omar González Ñáñez (Maestría en Etnología-ULA) Asesores: José Manuel Briceño Guerrero (Universidad de Los Andes) Esteban Krotz (Universidad de Yucatán) Nelly García Gavidia (Universidad del Zulia) Miguel Ángel Rodríguez Lorenzo (Universidad de Los Andes) Catherine Alès (CNRS-París) Esteban Emilio Mosonyi (Universidad Central de Venezuela) Jean Chiappino (IRD- París) Mario Sanoja Obediente (Universidad Central de Venezuela) Morelva Leal (Universidad del Zulia) Alexander Mansutti (Universidad Nacional Experimental de Guayana) Entes Financieros Grupo de Investigaciones Antropológicas y Lingüísticas de la Universidad de Los Andes (GRIAL). Consejo de Desarrollo Científico, Humanístico y Tecnológico de la Universidad de Los Andes (CDCHT). Fondo Nacional de Ciencias y Tecnologías (FONACIT). Consejo Nacional de la Cultura (CONAC). Indización LATINDEX. CLASE. REVENCYT. Handbook of Latin American Studies Traducción de resúmenes al inglés: Alastair Beattie Distribución y Canje Alejandra Ayala y José Luis Lara Diseño y Diagramación: Amate C. A. Dirección de la Revista: Museo Arqueológico-ULA. Edif. del Rectorado, Avda. 3, Mérida-Venezuela. Telefax: 0058-0274-2402344. email: [email protected] Hecho el Depósito de Ley: Depósito Legal pp.198203ME91 ISSN: 1325-2610 Versión Electrónica: www.saber.ula.ve/boletin_antropologico Título: Papas negras, papas de páramo. Black potatoes, high altitude variety. Un pasivo socioambiental de la modernización agrícola en Los Andes de Venezuela. ¿Es posible recuperarlas?. Romero, Liccia ; Monasterio, Maximina Autor: Páginas/Colación: 107-138 En: / Boletín Antropológico Vol 2 - Num 64 enero - abril, 2005 Ver artículo en PDF (0.4 Mb) Papas negras, papas de páramo Romero, Liccia y Monasterio, Maximina Resumen En este trabajo se presenta el problema de la desaparición de las semillas indígenas o nativas, en el sistema papero de Los Andes de Mérida. Estas semillas, cuyas variedades son conocidas bajo el nombre popular de "papas Negras", se encuentran en una situación de ausencia total dentro de los sistemas productivos intensivos empresariales, y de presencia puntual en huertas de familias campesinas y de pequeños productores. Con base a la interpretación de datos tomados mediante entrevistas abiertas en cuatro comunidades campesinas, se señalan los factores determinantes de la desaparición de las Papas Negras en el contexto de la difusión del paquete modernizador de la agricultura altoandina: por una parte la muerte biológica debida a la contaminación con las plagas y enfermedades introducidas con las papas importadas, y simultáneamente, la muerte cultural: por la pérdida de las prácticas tradicionales de cultivo y por su exclusión de la mesa y del paladar de los venezolanos. Se plantean argumentos en favor de un trabajo de recuperación de estas semillas, las ventajas de la reintroducción de las papas Negras y se proponen dos escenarios en los que sería posible la reinserción del cultivo de papas Negras: en parcelas pequeñas de autoconsumo y en parcelas comerciales de mayor extensión. Black potatoes, high altitude variety Romero, Liccia y Monasterio, Maximina Abstract Potato seed stock for the variety known as the Black potato which is native to the high Andes is disappearing as it is no longer used by high tech agriculture nor by home growers. Data taken from 4 communities shows that modernization has introduced new varieties carrying diseases which attack the native variety. Foreign varieties have replaced the native which is no longer in demand nor cultivated. Arguments in favor of re-establishing the Black potato as a commercial venture and as a home grown product are set forth. Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 Papas Negras, papas de páramo áramo** Un pasiv o socioambiental de la modernización agrícola pasivo en Los Andes de Vene zuela. ¿Es posible rrecuperarlas? ecuperarlas?1 enezuela. LICCIA ROMERO Y MAXIMINA MONASTERIO Instituto de Ciencias Ambientales y Ecológicas (ICAE) Universidad de Los Andes RESUMEN En este trabajo se presenta el problema de la desaparición de las semillas indígenas o nativas, en el sistema papero de Los Andes de Mérida. Estas semillas, cuyas variedades son conocidas bajo el nombre popular de “papas Negras”, se encuentran en una situación de ausencia total dentro de los sistemas productivos intensivos empresariales, y de presencia puntual en huertas de familias campesinas y de pequeños productores. Con base a la interpretación de datos tomados mediante entrevistas abiertas en cuatro comunidades campesinas, se señalan los factores determinantes de la desaparición de las Papas Negras en el contexto de la difusión del paquete modernizador de la agricultura altoandina: por una parte la muerte biológica debida a la contaminación con las plagas y enfermedades introducidas con las papas importadas, y simultáneamente, la muerte cultural: por la pérdida de las prácticas tradicionales de cultivo y por su exclusión de la mesa y del paladar de los venezolanos. Se plantean argumentos en favor de un trabajo de recuperación de estas semillas, las ventajas de la reintroducción de las papas Negras y se proponen dos escenarios en los que sería posible la reinserción del cultivo de papas Negras: en parcelas pequeñas de autoconsumo y en parcelas comerciales de mayor extensión. Palabras clave: papa nativa, recuperación de patrimonio genético, diversidad agrícola autóctona Black Potatoes, High Altitude Variety ABSTRACT Potato seed stock for the variety known as the Black potato which is native to the high Andes is disappearing as it is no longer used by high tech agriculture nor by home growers. Data taken from 4 communities shows that modernization has introduced new varieties carrying diseases which attack the native variety. Foreign varieties have replaced the native which is no longer in demand nor cultivated. Arguments in favor of re-establishing the Black potato as a commercial venture and as a home grown product are set forth. Key words: native potato, re-introduction of native seed stock, diversity in native agriculture – 107 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 Introducción Dentro del complejo multidiverso de los tubérculos andinos, la papa constituye el legado de la civilización Andina al patrimonio de la biodiversidad agrícola y alimentaria de la humanidad que ha alcanzado mayor importancia económica y adaptación intercultural. La papa es el cuarto cultivo alimenticio en orden de importancia a escala mundial, luego del trigo, el arroz y el maíz. Se cultiva en 130 de los 167 países del mundo, llegando a más de mil millones de personas en todo el mundo, de los cuales, aproximadamente 500 millones pertenecen a los llamados países en vías de desarrollo (Masson, 1991; FAO-CIP, 1995). Se concretan así a escala global dos paradigmas indígenas andinos: el primero de ellos, la reciprocidad o ayni: el “gusto de dar y dejarse criar con cariño” y el segundo: un circuito de la semilla ampliado a escala mundial; las semillas de papa “caminan” hoy por todo el mundo. Y no otra cosa parece haber hecho la papa desde hace unos 7000 años cuando comenzó a florecer en las chacras de sus domesticadoras, caminar y hacer camino al andar, desde su nicho de amplia diversificación de especies y variedades en la meseta del Collao1 a 3850 m snm. Desde allí se extendió como cultivo a otras regiones de mayor y menor altitud, colonizando luego, latitudinalmente, la gran diversidad de nichos naturales y culturales del mundo andino, desde Los Andes del Norte en Venezuela y Colombia, pasando por Los Andes subtropicales en Noroeste de Argentina, hasta llegar a los Andes templados en la isla de Chiloe en Chile. Este amplio rango de expansión latitudinal y altitudinal creó así lo que puede llamarse el corredor papero andino, que sin duda debió constituirse sobre la base de un camino continental andino de la semilla, siguiendo el “modelo andino” de manejo territorial, es decir la constitución de grandes unidades socioculturales y territoriales para el manejo del múltiples recursos y ambientes disponibles a lo largo y ancho de la Cordillera andina (Monasterio, 1994). Bajo el influjo de distintas condiciones ecológico-ambienta- 108 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 les y con la administración selectiva de las poblaciones indígenas andinas, en las distintas unidades territoriales se dio un proceso de coevolución que resultó en la formación de poblaciones locales de este cultivo (formación de razas y especies politípicas) que se denominan papas nativas2 (Ochoa, 1990; Terrazas y Valdivia, 1999). Los Andes del Norte, insertos en lo que hoy son los territorios de Venezuela y Colombia, parecen constituir, respecto a los procesos de diversificación de la papa, una unidad con fuertes rasgos comunes3. En Los Andes de Venezuela, estas poblaciones o variedades locales formaron parte de los complejos agroalimentarios indígenas basados en el cultivo de tubérculos y coexistieron luego en el sistema agrícola mestizado de cereales-tubérculos de la etapa colonial, el cual fue heredado, ya en una etapa de decaimiento, por la República post-Independencia (Monasterio, 1980). Este sistema de papa-trigo, que hoy está circunscrito a relictos, permaneció sin mayores variaciones hasta las primeras tres décadas del siglo XX, cuando se inició un cambio en el sistema de cultivo, particularmente en el origen de la semilla y en las regiones dedicadas al cultivo de la papa en Venezuela. A partir de 1929, comienzan a registrarse las primeras importaciones de semilla de papa “mejoradas”, que no provenían de un ambiente andino, como en el antiguo corredor indígena, sino que luego de un periplo de selección y adaptación en latitudes templadas, regresaban a casa, “enseñoriadas” por la tecnología de fitomejoramiento desarrollada en los países, que durante este siglo, han dominado el sistema agroalimentario mundializado de la papa (Canadá, Holanda, Alemania y EEUU). Se inicia así el ingreso de Venezuela como país dependiente del circuito global de la agrodiversidad de la papa. Estas primeras importaciones o más bien “reintroducciones” de papa fueron asumidas por un número muy reducido de productores, quienes tenían acceso a información técnica y económica internacional y se arriesgaron a adoptarlas bajo el estímulo de los resul- – 109 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 tados de mayor rendimiento de estas variedades en los Estados Unidos y Europa (Moreno, 1968). El interés por estas variedades “mejoradas” también contagió la gestión oficial y en 1939, se inicia la investigación sobre papa en Venezuela con la creación de la Estación Experimental de Sartenejas, estado Miranda (en el Centro-Norte de Venezuela). Los esfuerzos investigativos de entonces se concentraron en ensayos para probar la adaptabilidad de 400 variedades importadas, con resultados negativos (CORPOANDES, 1973). La difusión y adopción a mayor escala de las variedades importadas fueron procesos lentos, por lo cual las papas de disponibilidad masiva durante los siguientes 20 años continuaron siendo las locales andinas. En 1946 se registró una colecta en el Municipio Piñango y en las localidades de Timotes, Pueblo Llano y San Rafael (localidades de la Cordillera de Mérida por encima de los 2000 m), la cual arrojó un total de doce variedades, cuyos nombres comunes eran: arbolona blanca, arbolona negra, asema, carraca, criolla tempranera, curuba, chibacú, china, griteña, laga, panche negra, panche blanca, pigua, plancheta, reinosa, rosada, tuñamera y viyorra (Moreno, 1968). Estas variedades, que fueron identificadas dentro de la especie Solanum andigena, hoy en día sólo pueden encontrarse en los relatos y en la memoria de los campesinos abuelos, quienes las valoran y rememoran por su alta calidad. Sin embargo, existen algunas evidencias de que la papa nativa cultivada en los páramos de Mérida podría incluir también a la especie S. curtilobum4. La presencia de esta especie con menor distancia genética de los materiales silvestres antecesores, considerada la “madre de todas las papas”, implicaría la posibilidad de que en Los Andes de Venezuela también ocurrieron procesos secundarios de diversificación de papas cultivadas y que no todas llegaron necesariamente por el camino continental indígena de las semillas. Las primeras importaciones de variedades de papas mejoradas en suelo venezolano fueron traídas con la intención de extender las áreas de cultivo hacia zonas de menor altitud en el radio andino y 110 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 otras regiones del Centro-Norte de Venezuela (Moreno, 1968). De hecho, estas primeras variedades importadas presentaron en general problemas de adaptabilidad, que se evidenciaron especialmente en condiciones altitudinales mayores a los 2500 m snm (Linares y Miettelholzer, 1960). Para el cultivo de papa en los altos Andes, la alternativa para la mayoría de los productores andinos, hasta la década de los 60, continuó siendo las variedades locales de “Papa Negra”, “Papa de Año” o Papa Paramera, las cuales eran la base de un sistema de secano, con ciclo de 8 a 11 meses (Mittelholzer y Toro, 1964). Con la llegada e instalación durante fines de los 50 e inicio de los 60, de un grupo de productores originarios de las Islas Canarias, se inicia una nueva era para la producción agrícola en Los Andes de Venezuela. Progresivamente, los productores canarios comienzan a liderar la producción de papa y la diversificación hortícola en los valles altos andinos de Trujillo y Mérida, mediante el arriendo de tierras y la introducción de un nuevo paquete tecnológico que incluía semillas importadas mejoradas con ciclo de 90 días (Solanum tuberosum, o Papa Blanca), riego por aspersión, fertilizantes minerales y biocidas (Moreno, 1968, Rojas, 1985). Este patrón se fue generalizando entre los productores locales, en la medida en que demostró éxito económico por la demanda creciente en las áreas urbanas del país de papa y hortalizas y gracias a que los mismos inmigrantes canarios difundieron el nuevo paquete tecnológico al actuar directamente como comerciantes de los insumos agrícolas y de los materiales para la fabricación de los sistemas de riego (Velásquez, 2004). El éxito de la papa Blanca importada y su paquete tecnológico de alta productividad marcó el desplazamiento y reducción a su mínima expresión de la papa Negra local. Esta es un apretado resumen, la historia de cómo en Los Andes de Venezuela se perdó la cultura de la semilla y los nexos con su camino ancestral para quedar en la situación de atadura y dependencia de los sistemas empresariales de mejoramiento mo- – 111 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 derno. El fenómeno tiene un nombre bien ganado en la literatura como “erosión genética en la agricultura”, el cual revestía un carácter de destino fatal en vista de que se preveía la desaparición paulatina de todos los sistemas campesinos e indígenas frente al también destino manifiesto de las inevitables transformaciones que promueve la agricultura de mercado y su tecnología de alta productividad (Brush, 1995)5. Afortunadamente, esta previsión no se cumplió sino muy parcialmente pues a estos destinos se opusieron otros fijados por “la barrera de Los Andes” (Ledezma, 2002), que no es otra cosa que una herencia de diversidad extraordinaria en especies y variedades, unas condiciones agroecológicas que impiden a las Waycha´s6 adaptarse y la posibilidad de un control político territorial indígena, que en las humildes Aynoqas bolivianas han demostrado no sólo que pueden conservar y diversificar las variedades papas, sino que pueden derribar un todopoderoso gobierno nacional. Sin embargo, el caso de Venezuela es otro. No heredamos esa diversidad de variedades y especies y mucho menos tenemos Aynoqas que armen barreras ni tranquen caminos. Por el contrario en nuestras condiciones ecológicas y socioculturales las variedades mejoradas sí se adaptan y con divisas petroleras disponibles para pagar por su importación, la tecnología y el mercado de la semilla mejorada terminaron sacando de los cultivos parameros (suponemos que no intencionalmente) a la mayoría de nuestras papas nativas. Métodos y sitios de trabajo a. Indagación regional Se realizaron entrevistas abiertas a un conjunto de productores paperos que conservan papa Negra o que conocieron y cultivaron dicha papa, en cuatro localidades de la Cordillera de Mérida: Gavidia, en el Municipio Rangel, La Ranchería y Cañada de Chinó, en el Municipio Pueblo Llano del Estado Mérida (Figura 1) y una localidad en Tuñame, Estado Trujillo. 112 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 Gavidia ocupa una pequeña cuenca tributaria del río Chama de aproximadamente 5000 ha. Ecológicamente corresponde con un Páramo bajo uso agrícola, que se extiende entre los 3000 y 3600 m de altitud, dentro del área del Parque Nacional Sierra Nevada de Mérida. La actividad agrícola se realiza sobre conos y terrazas estrechas formados por depósitos aluviales y coluviales, así como en laderas, limitadas altitudinalmente por la cota de los 3700 m, a partir de la cual no existen períodos libres de heladas durante un año (Monasterio y Reyes, 1980). La forma de organización social para la producción agrícola es tradicional familiar, en proceso de transición, debido a la entrada reciente de cultivos disrruptivos y de gran capital de inversión como el ajo. La Ranchería es un caserío ubicado en el piso de Páramo, bajo uso agrícola intensivo (2700 msnsm), en el sector superior de la cuenca del río Pueblo Llano. Corresponde con el área socialmente menos favorecida de este Municipio, en el que aceleradas transformaciones tecnológicas durante las décadas de los 70 y 80, convirtieron a sus pobladores en pequeños, medianos y grandes empresarios de la papa para el mercado nacional. Por su parte, la Quebarada de Chinó (2680 m snm) es una zona agrícola sobre laderas, de difícil acceso, ubicada en el sector medio del río Pueblo Llano, sobre la vertiente de su margen izquierda, en la cual un número reducido de familias realiza agricultura comercial de papa y zanahoria y una ganadería lechera para el autoconsumo. En Gavidia se realizaron seis entrevistas, seleccionándose a las personas de acuerdo con las informaciones obtenidas gracias a experiencia de trabajo iniciada desde 1985 en esta comunidad campesina (Sarmiento y Monasterio, 1993), mientras que en Pueblo Llano se realizaron cuatro entrevistas, con base en una selección de informaciones obtenidas en el trabajo de campo realizado durante el 2002. Finalmente, en el estado Trujillo, en el Páramo del Pajarito, que es el piso superior de cultivo de la producción intensiva de – 113 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 papas y hortalizas en la región de Tuñame, se realizó una entrevista en el año 2003. Las personas que aportaron la información fueron previamente informadas verbalmente y por escrito, sobre el propósito del trabajo y consultadas sobre su disposición a permitir la filmación y grabación de sus testimonios. Sólo aquellos que dieron su aprobación expresa y clara disposición a colaborar fueron entrevistados. Las preguntas realizadas a los entrevistados giraron en torno a si podían recordar los nombres de las papas Negras, la época en que las cultivaban y las consumían, cómo se realizaba su cultivo, el almacenamiento y la comercialización, por qué dejaron de sembrarlas, cuáles variedades aún se mantienen y si estarían dispuestos a sembrar nuevamente estas variedades. Las respuestas fueron registradas en video y cinta de grabación para su posterior edición de un material fílmico documental (Romero y Monasterio, 2002) 114 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 Figura 1. Ubicación de los sitios de estudio en el Estado Mérida b. Indagación internacional En Julio de 2002 se realizó una breve visita de trabajo al Centro Internacional de la Papa, ubicado en Lima, Perú, con la finalidad de conocer el Banco de Germoplasma de esta institución y tomar datos respecto a los materiales de papas cultivadas que se mantienen en dicho Banco. Se realizaron dos entrevistas personales e intercambio de información con funcionarios investigadores y administradores del Banco de Germoplasma quienes aportaron una serie de datos acerca del número Lago de Maracaibo de accesiones, viabilidad y estatus de clasificación de las papas nativas venezolanas. Así mismo se realizó una reunión interdisciplinaria con varios investigadores donde se discutió el tema de la repatriación del germoplasma y las condiciones para poder realizarla. A partir de lo discutido en este intercambio internacional se plantearon una serie de aspectos mínimos que deben ser abordados como condiciones de contexto de un posible proceso de repatriación del germoplasma nativo a Los Andes de Venezuela. – 115 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 Resultados a. Indagación regional La información recabada en las entrevistas da cuenta de una prolongada lista de nombres que presumimos, corresponderían con variedades que formaban parte del patrimonio agrícola y socio cultural de las comunidades incluidas en el estudio y muy probablemente de lo que comprendía todo el piso papero de la Cordillera de Mérida hasta hace unos 30 años. En la Tabla 1 se resumen los datos aportados por los campesinos entrevistados en cuanto a los nombres de las papas y algunas de sus características. De esta lista con 31 nombres que aportaron las personas entrevistadas, aparentemente sólo permanece cultivada en forma significativa en Gavidia, en Pueblo Llano y en el Páramo del Pajarito, la papa Arbolona Negra, mientras que Reinosa, Cucuba y Guadalupe sólo están presentes con escasa presencia en dos huertos de Gavidia. Por su parte, la papa Brava o de Indios, se puede encontrar como planta silvestre en puntos aislados del Páramo no pastoreado por el ganado. Las restantes variedades ya dejaron de cultivarse entre 10 y 60 años atrás. En Pueblo Llano es donde se indicaron los mayores períodos desde la desaparición: entre 40 y 60 años, mientras que en Gavidia, recuerdan muchas de estas variedades hace 10 y 15 años. Todas estas papas tomaban entre 7 y 9 meses para madurar y cosecharse y sus principales cualidades frecuentemente señaladas, eran, aparte de ofrecer alta calidad y diversidad en los sabores y texturas, su capacidad para permanecer en los terrenos (“Tinopós7”) y en almacenamiento, durante largos períodos sin dañarse o “ponerse suche”, así como también su baja tasa de degeneración o permanencia a lo largo de los años “sin avejentarse”. 116 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 Tabla 1 “Papas Negras” en tres localidades de la Cordillera de Mérida NOMBRE 1.Arbolona Negra LOCALIDAD Gavidia, Pueblo Llano CARACTERÍSTICA Corteza de color oscuro, pinta la uña al pincharla. Muy rendidora y aguantadora de hielos. Planta de gran tamaño en la tierra alta y más chaparra en la tierra baja. Flor morado intenso. Aun se siembra 2.Arbolona Blanca Gavidia, Pueblo Llano Corteza de color claro 3.Papa Brava, Papa de Indios o Cundinga Gavidia, Pueblo Llano Papa silvestre, que aun permanece donde no llega el ganado. Tubérculo pequeño, sabor picante y concha pintadita. Es la papa que sembraban "los antiguos". Florea en agosto 4.Plancheta Gavidia, Pueblo Llano Papa grande alargada y sin ojos 5.Reinosa Gavidia, Pueblo Llano Corteza y pulpa amarilla, aun se siembra 6.Marcialera Gavidia, Pueblo Llano 7.Arepita Gavidia Redondita 8.Colorada 9.Cucuba Gavidia Gavidia Tubérculo de corteza roja Corteza oscura, tubérculo redondo, presente en 1 huerto Corteza negra, con ojos claros ¤ 10.China Gavidia 11.Guadalupe Gavidia Tubérculo grande, corteza clara, pulpa blanca, presente en un huerto 12.Huevo 'e puerco Gavidia Tubérculo pequeño de color amarillo intenso 13.Martinera Gavidia Tubérculo rosado 14.Morada 15.Ojos catires Gavidia Gavidia ¤ Tubérculo redondo, corteza blanca de ojos rojos muy rendidora 16.Peonía 17.Petacona Gavidia Gavidia Muy rendidora, se daba donde quiera Muy rendidora, se daba donde quiera 18.Pigua Gavidia Tubérculo grande, alargado en forma de un dedo. Parecían unos perritos 19.Rusia 20.Sangre Toro 21.Tiniruca Gavidia Gavidia Gavidia 22.Tocana 23.Griteña Gavidia Pueblo Llano Concha gris, tubérculo aplanado Excelente para comer Concha negra, pulpa blanca con manchitas moradas Tubérculo rojo, aplanado Tubérculo grande, se cree que vino de “La Grita” (Edo. Táchira) 24.Timotera Pueblo Llano 25.Granadina Pueblo Llano ¤ Tubérculo rojo ¤ No se obtuvo una descripción particular – 117 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 En cuanto la forma de manejo del cultivo de las papas Negras, “estas se daban donde quiera” y existían algunas “muy duras para el hielo”. Destaca la ausencia de todo tipo de tratamiento o “curas” para plagas o enfermedades, ya que la papa “se criaba muy sana” y “no había que arrancarla verde como la de ahora”. Se mejoraba el rendimiento abonando con estiercol de ganado, aunque siempre rendía mayor cosecha en las tierras más descansadas. El almacenamiento se realizaba en el campo, o bien en cuevas naturales distantes y a gran altura, o bien en sitios subterráneos empedrados especialmente construidos para este fin; pero también se almacenaban en los patios de las casas en pequeñas habitaciones empedradas y techadas. La cosecha se trasladaba a “lomo de mula” hasta aquellos centros poblados de mayor dinamismo económico, que resultaban más cercanos: hasta Mucuchíes, en el caso de Gavidia y hasta Barinas en el caso de Pueblo Llano, donde se comercializaba por precios ahora considerados muy baratos, pero suficientes para las necesidades que tenían los productores para aquel momento. Los procesos mediante las cuales las papas Negras se fueron ausentando de los campos de cultivo hasta agotarse la mayoría de ellas, están encadenados con la introducción de las papas Blancas o de crecimiento rápido, que “fueron llegando”. En un principio, los productores comenzaron a preferir las papas mejoradas importadas por su período de maduración más corto (120 días) y los altos rendimientos que aportaban los primeros años, sobre todo en las tierras descansadas o nuevas. Estas variedades, además experimentaron un aumento en su “preferencia en los mercados”, por lo cual resultaban cada vez más fáciles de vender y en ocasiones con mejores precios. No obstante, junto con estas variedades importadas también ingresaron una serie de plagas y enfermedades, que comenzaron a mermar no sólo los rendimientos de las papas importadas, sino literalmente a devorar a las papas Negras, tanto en el campo como en los sitios de almacenamiento. Los más agresivos y 118 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 letales de estas plagas parecen haber sido los “gusanos”, probablemente la polilla o gusano guatemalteco Tecia solanivora y el gusano blanco Premnotrypes vorax, que ocasionan daños directos, ya que en el estado de larva se alimentan del tubérculo. Frente a esta situación, el descalabro de las variedades locales fue inevitable, ya que los campesinos no contaban con capacidad adquisitiva para acceder a tecnologías que le permitiesen combatir un ataque de plagas y enfermedades en la escala a la cual se presentó y con la rapidez con la que se propagó. Sin posibilidad de asumir el costo de los agroquímicos, ni de otros métodos de combate apropiados para protegerse de las plagas, se hizo también imposible guardar las semillas de papas Negras, que entonces fueron desapareciendo paulatinamente, hasta llegar a ser la mayoría de estas, un grato recuerdo para quienes hoy lamentan haberlas perdido. b. Indagación Internacional: Condiciones marco para evaluar un posible programa de repatriación de papas nativas en Los Andes de Mérida 1. El marco jurídico El marco jurídico que norma el acceso a los recursos biológicos y genéticos en Venezuela tiene como componentes jerárquicos internacionales al Convenio de Diversidad Biológica, ratificado en Venezuela con carácter de ley nacional el 12-09-04, la decisión 345 de la Comunidad Andina de Naciones “Régimen común de protección de obtentores de variedades vegetales del 29-10-93, la decisión 391 de la Comunidad Andina de Naciones “Régimen común sobre acceso a los recursos genéticos” del 17-07-96. En el plano de las leyes nacionales, están los nuevos derechos ambientales estipulados en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela de 1999, donde además se aprobó el reconocimiento de los derechos indígenas sobre sus territorios ancestrales, así como la – 119 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 Ley de Diversidad Biológica del 24-06-2000. Todo este marco normativo es coherente en cuanto a la idea de que los Estados tienen soberanía sobre la administración, aprovechamiento y conservación de los recursos biológicos y genéticos que se encuentran en el territorio de las respectivas naciones. Así mismo se encuentra explícita, aunque no especificado en su forma de aplicación concreta, el reconocimiento de los derechos indígenas y poblaciones locales sobre los recursos y hábitats y conocimientos que permiten la conservación de la diversidad biológica en sus distintas escalas de expresión (Aguilar, 2002). Dentro de este marco normativo, también existe coherencia en lo que algunos autores denominan una “posición andina” que reivindica la soberanía de los países de origen sobre los recursos que fueron sacados de los respectivos territorios e ingresaron a colecciones ex situ antes de la entrada en vigencia del Convenio de Diversidad Biológica y demás normativas posteriores (Febres, 2002). Esta posición andina es planteada en la decisión 391 que considera una definición ampliada de país de origen como: “País que posee los recursos genéticos en condiciones in situ, incluyendo aquellos que habiendo estado en dichas condiciones, se encuentran en condiciones ex situ” Así mismo la decisión 391 de la Comunidad Andina estableció que quienes detenten con fines de acceso recursos genéticos de estos países deben gestionar el acceso ante la Autoridad Nacional Competente, que en Venezuela es el Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales Renovables. Por lo tanto lo que debería ocurrir en un futuro, a instancias de Venezuela y sus autoridades, es que los centros de Conservación ex situ deben, “ponerse a derecho”, en cuanto a regularizar su autorización para poseer y acceder a los recursos que sacaron de nuestro territorio antes de la promulgación de las mencionadas leyes internacionales y nacionales. En este marco legal vigente, el germoplasma de las papas nativas sacadas de Venezuela no 120 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 podría utilizarse ni siquiera para fines científicos, sin la autorización expresa de las autoridades nacionales. Lo que se discute y analiza en la literatura sobre este tema, tiene que ver con el acceso por parte de un tercero, pero no del caso de “repatriación”, donde el solicitante es el propio país de origen. Sin embargo, en base a lo expresado anteriormente, es factible suponer que si Venezuela tiene soberanía sobre los recursos genéticos que se encuentran ex situ en instituciones extranjeras y puede autorizar su acceso a terceros, con mayor peso y razón debería poder solicitar la repatriación de un germoplasma que se encuentra extinto o de difícil localización in situ en nuestro territorio. Tal sería el caso de las papas nativas de Mérida depositadas en el Centro Internacional de la Papa (CIP) en Perú. 2. El mercado Desde el punto de vista de la demanda, existe una población local y regional que es consumidora regular de estas papas. Existen tradiciones familiares en torno a la preparación de platos acompañados por estas papas, cuya delicia hace “que también se pueden comer solas”. Cuando decimos mercado local nos referimos al entorno inmediato de las áreas donde se cultivan, concretamente los habitantes de las poblaciones de Pueblo Llano, Santo Domingo, Mucuchíes y Tuñame: que corresponde con municipios en crecimiento desde el punto de vista poblacional (Tabla 2). El consumo de estas papas es altamente apreciado por esta población local como “las mejores papas para comer”, pero por supuesto en este momento no son las mejores “para vender” en la escala comercial de las papas mejoradas. Entre otras características, las papas negras se prefieren por su sabor, su contextura arenosa y porque son más sanas, “sin tanto químico”. En el caso de la productora de papa Negra Arbolona de Pueblo Llano, expresa muy bien la situación local: “todos los años siembro y faltan papas para vender”.En el plano regional, los mercados de la ciudad de Mérida y la ciudad de – 121 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 Valera (en el estado Trujillo) dan cabida a un pequeño volumen de papas negras, en los períodos en que “las traen”. En una pequeña encuesta con 6 vendedores con tradición en la oferta de “verduras” (con más de 15 años en el negocio) en el mercado principal de la ciudad de Mérida, se confirmó que la oferta de papas negras en los últimos años ha bajado, por lo cual deben buscar buenos proveedores que las busquen y se las traigan del páramo. Cuando logran ofrecerla, la papa negra se vende rápidamente generalmente a un precio igual o superior a la papa comercial, siendo los principales compradores, aquellos visitantes en temporada vacacional que son originarios del estado Mérida, pero que han migrado a otras regiones del país. 3. Necesidad local En las entrevistas realizadas a las campesinas y campesinos de las áreas donde se mantienen papas negras se recogió una necesidad sentida de que las papas negras vuelvan a estar disponibles y todos reconocieron como un error el haberlas dejado perder, en favor de “la rinda” de las papas nuevas que fueron llegando. Esta necesidad de recuperarlas se expresa en tres argumentos expuestos por los entrevistados: uno de tipo agroecológico, pues estas papas se “daban donde quiera” sin necesidad de tanto abono; otro de identidad cultural, pues “con esas papas se criaron los abuelos sanos y felices y nuestros hijos ahora no las tienen” y otra relacionado con la seguridad alimentaria local, pues las papas mejoradas no se pueden guardar y en cambio las papas negras resisten cosecha tras cosecha y siempre hay semilla. 122 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 Tabla 2 Superficie y densidad poblacional en los municipios de estudio Fuente: Anuario Estadístico del Estado Mérida. Instituto Nacional de Estadística (INE, 2002) 3. La cultura andina en el contexto del país En el contexto de la historia social reciente de Venezuela, en la cual se dibujó un país reorganizado en función de la monoexportación petrolera y del crecimiento concentrado en urbes Superficie Densidad (Km ) (Hab/ del Centro Norte costero, el aspecto que se destaca en estos Andes Km ) agrícolas, es su perseverancia y más aun sus logros como sociedad, al mantenerse y prácticamente imponerse contra la corriente de un país que durante años1999 cultivó la de sus espaAbsoluta muchos % 2000subestimación 2001 cios rurales, por la súbita 11.300 encandilado 100 64,83 65,93riqueza 67,00petrolera y a la vez espantado agrícola lleno en las tierras 89 por su pasado 0,79 98,13 99,43de paludismo, 100,64 bajas, y de injusticias en todas las altitudes; empeñado a su vez en 517 4,58 32,71 33,22 33,70 intentar la reivindicación de sus habitantes con la adopción de nuevos estilos de vida, urbanizados y consumidores de un número cada vez mayor de bienes importados y dependientes de la renta petrolera que sabemos cada vez con más certeza, tiene un alcance finito. En este contexto el crecimiento y éxito de un conjunto de comunidades agrícolas de los altos Andes estuvo rodeada de costos y beneficios, cuyo balance podría haber resultado muy dispar en perjuicio de éstas, de no haber sido por el esfuerzo creador y la fuerte vocación agrícola de sus habitantes (Romero, 2003). En una prime2 2 Estado Mérida Pueblo Llano Rangel – 123 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 ra etapa, el petróleo costó a estas sociedades andinas la relegación cultural y una pérdida de sus propias capacidades vitales que sustentaban la autosuficiencia en la alimentación, en el vestido, en la vivienda y el despojo de las manos y las mentes para todo este trabajo físico y de creación espiritual. Un contingente importante de individuos y de familias enteras dejaron sus casas de tapia, sus huertos de papa, arveja y maíz para bajar hasta los campos lacustres petroleros y luego a las urbes de Maracaibo, Caracas, Valencia y Maracay buscando un beneficio directo del país que crecía en mejoras dadas por la modernización. Las tierras y la gente que permanecieron en las altas montañas andinas entraron en un período de receso regenerativo, que sirvió luego como base para aprovechar la otra cara positiva de la moneda petrolera. Gracias a esa dialéctica del petróleo, que ha sido para Venezuela “excremento del diablo” y “oro negro” a la vez, fue posible recrear y reconstruir toda una capacidad productiva y comercial agrícola perdida en Los Andes desde que el trigo introducido por la colonia, entró en decadencia paulatina, hasta su expresión relictual en el presente. En Los Andes la bonanza petrolera de los 70 permitió la acción estatal para una efectiva construcción de vías de comunicación y la instalación del riego por aspersión, Fueron éstos dos elementos básicos para la transformación productiva de los altos Andes, desde donde se pudo satisfacer una demanda creciente de productos agrícolas que respondían al patrón alimentario urbano que se estructuró en el país. Por esto se justifica que la papa y en segundo lugar las hortalizas, emergieran como las nuevas protagonistas de la moderna producción agrícola de esta región. Desde que conquistaron este espacio en el marco nacional y regional, el conjunto papa-hortaliza es el emblema productivo y cultural de los altos Andes venezolanos y es defendido en forma extraordinaria por los actores de esta producción, contra toda contingencia macro y macroeconómica (Romero, 2003). 124 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 5. Interés de la sociedad venezolana en recuperar y valorar sus recursos genéticos A partir de 1999, el país está viviendo un tenso proceso de redefiniciones políticas, en el que temas y paradigmas novedosos se han revalorizado en el discurso político de vanguardia y se han concretado en el marco del nuevo proyecto de país. Este proyecto tiene su expresión en el contenido de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, la cual fue discutida por una delegación elegida en comicios nacionales y finalmente sometida a referendo nacional en 1999. En el texto de dicha constitución se han incluido como derechos expresos, los derechos ambientales y de los pueblos indígenas, donde se contempla lo relativo a la protección de los procesos ecológicos, recursos genéticos y la cultura y conocimientos indígenas. Concretamente en el Capítulo VIII, artículo 124, se dice: “Se garantiza y protege la propiedad intelectual colectiva de los conocimientos, tecnologías e innovaciones de los pueblos indígenas. Toda actividad relacionada con los recursos genéticos y los conocimientos asociados a los mismos perseguirán beneficios colectivos. Se prohíbe el registro de patentes sobre estos recursos y conocimientos ancestrales”. Así mismo en el Capítulo IX, artículo 127 se contempla que: … “El Estado protegerá el ambiente, la diversidad biológica, los procesos ecológicos, los parques nacionales, monumentos naturales y demás áreas de especial importancia ecológica”. 6. El papel de la agroindustria La agroindustria papera se desempeña en la importación, el cultivo local, procesamiento y comercialización para papas fritas en hojuelas (“chips”). Este tipo de producto está reñido con las características de la única variedad de papa nativa que aún se cultiva, e incluso con las papas comerciales de altura, debido a su alto contenido de azúcares reductores. Por tanto su interés en este momento se vuelca hacia las papas con “aptitud” para la agroindustria orien- – 125 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 tada a los chips, y en consecuencia forman parte de la cadena de importación tanto de papa consumo como de papa semilla. El manejo del otorgamiento de las licencias de importación y su vinculación con la entrada de papa consumo para hacer “dumping” y participar en los llamados procesos de “triangulación” de la papa importada, han creado relaciones muy tensas entre la principal agroindustria de hojuela de papa y los agricultores paperos de la región, que han llegado hasta enfrentamientos con quema de camiones de papa consumo sin registro y una demanda legal de la empresa contra los dirigentes paperos en el año 2001. La crisis de la semilla y las medidas de control de cambio vigentes desde el año 2003 han obligado a la agroindustria a una mayor dependencia de la producción en suelo nacional, por lo que durante los últimos dos años han tratando de suavizar estas relaciones tensas y aparentemente existe un acercamiento de cooperación en la búsqueda de un punto común a través de la promoción de condiciones para hacer convenios con “semilleristas” para papa agroindustrial (Romero y Monasterio, 2005). Algunos de estos convenios ya se han concretado tanto para la producción de semilla, como para generar cantidades significativas de papa destinada al procesamiento. 7. La actualización del inventario de agrobiodiversidad de papas cultivadas y silvestres Es necesario emprender un verdadero inventario de papa nativa cultivada y profundizar el inventario de los parientes silvestres en Los Andes de Venezuela, una actividad que en realidad no se ha abordado con un esfuerzo sistemático y continuado, sino a través de colectas puntuales. La intervención de investigadores e instituciones extranjeras debe por supuesto adaptarse al marco jurídico vigente internacional y nacional que sin duda regula este tipo de intervención en función de la protección de la soberanía de los Estados nacionales sobre los recursos biológicos y genéticos. 126 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 Discusión Mediante este acercamiento testimonial a las papas Negras de los páramos de la Cordillera de Mérida, se comienzan a reconstruir algunos aspectos importantes para comprender su actual presencia relictual y para idear cualquier propuesta o posibilidad de recuperación de las mismas con posibilidad de éxito. Por una parte, se evidencia que se manejaba una diversidad importante de variedades distinguiéndolas con nombres relacionados con la morfología y con el color de las plantas y de los tubérculos, así como con sus posibles sitios de procedencia. Esta manera de diferenciar variedades es común con la utilizada por campesinos e indígenas de otras comunidades de países andinos como Perú (Brush et al, 1981), donde se ha encontrado un nivel de correlación alto entre la nomenclatura local y los patrones moleculares con los que se identifica la diversidad genética de las papas, así como alto índice de similaridad genética entre muestras de papas nativas y las colecciones del banco de germoplasma del CIP (Arnes et al, 2002). Dentro de los nombres asignados a las papas en las localidades estudiadas, algunos son coincidentes y otros no. Aunque con la información recabada aun no es posible discernir cuáles de estos nombres corresponden con variedades estrictamente diferentes entre sí, por el momento es posible suponer que existían al menos dos categorías: variedades de distribución amplia como la Arbolona Negra, Reinosa, Arbolona Blanca, Plancheta y Marcialera, mientras que las otras variedades tal vez estaban más circunscritas a localidades y condiciones específicas. En todo caso, esta primera aproximación al problema permite afirmar que las papas Negras constituían un patrimonio agroecológico del campesinado andino venezolano con diversidad suficiente para producir en todo el espectro de condiciones ambientales que ocurren tanto en el piso papero inferior (sin riesgos de heladas), como en el piso superior (con mayores probabilidades de heladas). Por otra parte, se comienza a interpretar el proceso de desaparición de estas variedades y cómo éste estuvo mediado por las – 127 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 condiciones cambiantes de mercado (precios y preferencias de la demanda urbana), así como también por severos problemas agroecológicos, que tuvieron como fuerza conductora las plagas introducidas por las variedades importadas. A pesar de que los campesinos aceptaron las variedades importadas por su ventaja de un crecimiento más rápido, en las entrevistas es claro y expreso el interés de los agricultores campesinos por conservar las papas Negras, dado que las consideran papas de alta calidad y excelente sabor, con fines de intercambio local de baja intensidad dedicado al autoconsumo familiar. Evidentemente sus esfuerzos fueron desbordados por la invasión de las plagas y desalentados por los altos costos que implican el combate convencional de las mismas mediante los agroquímicos, que formaban parte e del paquete tecnológico que se diseminó junto con las variedades importadas. Así mismo se evidencian algunas consecuencias negativas directas sobre los campesinos del Páramo, que tuvo la desaparición de las Papas Negras. Por una parte se debilitó el patrimonio genético, culinario y cultural de las comunidades, quedando la producción comercial y de autoconsumo por cuenta de un reducido número de variedades importadas, llamadas mejoradas, pero debilitadas por su homogeneidad en sabores y por su baja plasticidad culinaria. La introducción de estas variedades no sólo los empobreció, en términos agroecológicos y culturales, sin que en términos económicos se incorporó un fuerte elemento que presiona la descapitalización campesina, debido a que las nuevas variedades, si bien crecen más rápido, también se degeneran muy rápido. Esto implica que cada dos o tres años el agricultor debe renovar su stock de semilla, la cual debe comprar en pocas cantidades y por muy altos precios, si se trata de semilla certificada o registrada, ó comprarla por un precio menor, si se trata de semilla hija de importada o de la pasilla, pero con altos riesgos de incentivar la contaminación con más plagas en sus campos de cultivo. En el pasado, con las papas Negras, el escenario de la semilla era el de una tasa muy baja de degeneración y una oferta 128 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 permanente de semilla, aplicando métodos de selección desarrollados por los mismos campesinos. Bajo este esquema, aun permanece la papa Negra Arbolona, que de acuerdo con los datos obtenidos, lleva un record de 25 años de cultivo ininterrumpido, en la Cañada de Chinó en Pueblo Llano (Foto 2), a pesar de que está rodeada por la papa Granola, con todas sus plagas y enfermedades asociadas (Romero, 2005). En cuanto a la posibilidad de promover un proceso de rescate de estas variedades, localmente, existen condiciones favorables y desfavorables para ensayar esta vía. A favor se encuentra la disposición de los campesinos, incluyendo tanto a las anteriores y nuevas generaciones. En manos de los mayores está aun parte del conocimiento y la capacidad de reconocer estas variedades hoy ausentes. Por el contrario, como factor desfavorable se cuenta la muy ardua tarea de su recuperación con los materiales locales disponibles, puesto que aparentemente existe muy poca presencia in situ. Parece necesario una búsqueda minuciosa en los antiguos sitios y campos de almacenamiento, así como una exploración en comunidades más aisladas, donde probablemente la introducción de variedades importadas y los problemas de plagas hayan tenido menor incidencia. Asímismo la posibilidad de una “repatriación de germoplasma” a partir de los materiales colectados en décadas pasadas y guardados por el Centro Internacional de la Papa (CIP), constituye la otra opción dentro de un potencial proyecto de recuperación. La repatriación es un proceso que el CIP ya ha ensayado con éxito con algunas comunidades del Perú. De acuerdo con la información tomada directamente de los administradores del Banco de Germoplasma del CIP, allí se mantienen depositados 35 morfotipos de papas nativas provenientes de Venezuela, de los cuales se encuentran en condiciones de ser repatriadas (limpios de virus y activos biológicamente) un total de 22 (Gómez, R. 2002, Com. Per). La reintroducción sostenible de estas papas Negras, una vez recuperado el insumo genético por distintas vías, debe tomar en – 129 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 cuenta el proceso descrito por los campesinos, respecto al manejo de las plagas y las semillas importadas como vehículo de introducción de las mismas. Por lo tanto son previsibles tres escenarios que pueden promoverse paralelamente y en los que sería posible recuperar el cultivo de las papas Negras: 1. “Parcelas de autoconsumo”, de pequeñas extensiones, aledañas a las casas de habitación, donde es posible un cuidado permanente, incluyendo en el manejo, el uso de técnicas de Manejo Integrado de Plagas (MIP), que impliquen bajos costos de insumos y dosis controladas de agroquímicos, con bajos riesgos para la salud humana y del agroecosistema. Estas parcelas fortalecerían la autosuficiencia alimentaria familiar y la identidad socio-cultural de las comunidades involucradas. 2. “Parcelas comerciales” para el mercado local, más extensas y ubicadas en áreas de mayor altitud y relativamente aisladas, sometidas a un manejo con descansos largos o baja intensidad de uso agrícola. El largo ciclo de crecimiento y maduración, hace económicamente imposible su coexistencia con el sistema de altos insumos y agroquímicos con el que funciona la producción intensiva actual. Manejadas en condiciones de relativo aislamiento y con baja intensidad de uso de insumos, estas parcelas de orientación comercial contarían con el incentivo económico de un precio relativo mayor, debido al desbalance actual entre una demanda en los mercados locales, con relación a una muy baja oferta. Para el manejo de este sistema comercial sería necesario rescatar los procesos de selección y almacenamiento desarrollados por los campesinos, que no implican el traslado de la semilla hasta sitios de almacenamiento comercial, donde existen probados riesgos de contaminación. Otra alternativa para este escenario de rescate comercial, con miras a mercados de mayor escala, sería el uso de la semilla botánica, como mecanismo auxiliar de provisión de semilla, para tratar de solventar los problemas de contaminación en condiciones de almacenamiento. 130 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 La comercialización de semilla nativa en mercados locales, regionales e internacionales es una posibilidad que se ha concretado en otros países andinos, específicamente en Perú y Bolivia, donde se ha acuñado el término de “papa nativa comercial”, para variedades cosmopolitas que se venden en ferias regionales e internacionales y que se cotiza a mejores precios que las variedades convencionales. Estas variedades nativas comerciales se consideran una base para usar estrategias de mercado favorables a la conservación in situ y el eje para estructurar un programa de fitomejoramiento participativo que busque el impulso del cultivo papa, la conservación de agrobiodiversidad y la seguridad alimentaria local (Zimmerer, 2003). 3. “Parcelas tinopó”. El tinopó es un sistema que promueve la dinámica evolutiva del cultivo. Por tanto en áreas aisladas semi silvestres ó en aquellas de antiguos tinopós, se debe promover la reintroducción de los materiales rescatados y repatriados para tratar de retomar el camino evolutivo que se interrumpió hace varias décadas y del cual habrá un beneficio de mejoramiento y diversificación de indudable valor biológico para propósitos de investigación agroecológica y así mismo de valor estratégico dentro del inequitativo mercado de los recursos genéticos. Proposición final Este acercamiento, casi testimonial a las papas Negras, aporta algunas respuestas a las preguntas planteadas, pero a su vez revela nuevas y mayores preguntas, acerca de la posibilidad de reinsertarlas en la dinámica actual de la producción agrícola en la región de los altos Andes de Mérida. Cualquier esfuerzo en este sentido, cuenta con una base de conocimientos que aun se conservan y con la elocuente disposición de los campesinos, quienes han respondido afirmativamente a la proposición de promover un Encuentro de productores del páramo por la Conservación y Recuperación de las Papas Nativas. Dicho – 131 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 encuentro es un compromiso que esperamos impulsar con un doble propósito: como una instancia más de investigación para confrontar distintas versiones y datos de los asistentes, que nos permitan profundizar en los elementos aquí esbozados; y asimismo como un medio para impulsar una posible Red o movimiento de carácter más permanente que vincule a los productores que mantienen papas nativas, promoviendo entre ellos relaciones de intercambio y realimentación con las semillas que cada uno mantiene. En este trabajo se han expuesto una serie de factores que favorecen y otros que dificultan un eventual proyecto de rescate de las papas Negras en los Páramos de Mérida. Pero más allá de toda esta argumentación, durante los recorridos de campo, las risas y la belleza de los niños salen a nuestro encuentro y abogan por otro argumento de mucho peso. El derecho de las generaciones actuales y futuras a disfrutar y continuar en el camino de recrear una diversidad tan rica y largamente cultivada, ya pareciera ser argumento suficiente en favor de la apuesta por este rescate. Notas * 1 2 3 4 Este fue entregado en marzo de 2005 evaluado y arbitrado en mayo del mismo año (nota del Comité Editorial). Dedicado a la Sra. Candida Rosa Torres, quien en la comunidad de Gavidia conservó y permitió heredar buena parte de las semillas, datos y conocimientos que presentamos en este artículo (Pág. 138). Región que bordea el lago Titicaca en el altiplano peruano-boliviano, donde se concentra el mayor número de variedades y especies cultivadas de la papa, por lo que se considera una fuerte evidencia en favor de considerársele el área de domesticación y diversificación (Bukasov, 1981; Correl, 1962; Masson, 1991). Se considera papa nativa a toda variedad que se cultive tradicionalmente en una localidad y que no haya sido objeto del mejoramiento moderno. La permanencia de nombres comunes para las papas nativas entre regiones de Colombia y Venezuela refuerza esta idea del co- 132 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 5 6 7 8 rredor papero, tal como el nombre de Arbolona Negra, utilizado tanto en regiones de Boyacá (Salaman, 1985) como en Mérida y Tujillo. En 1976 se realizó la última colecta de papas silvestres y cultivadas por parte del CIP en Venezuela. Durante dicha colecta se reconocieron papas cultivadas de la especie S. curtilobum, además de S. andigena y S. tuberosum (Salas A. 2002, Com. Per. CIP) Bajo este argumento de la erosión genética en los cultivos campesinos e indígenas transformados por la modernización de la revolución verde, se promovió como solución la conservación ex situ, de los materiales colectados en las huertas campesinas y áreas vecinas, llevándolos hasta los bancos de germoplasma de la Red Internacional de Centros de Recursos Genéticos (Brush, 1995). Este material, de libre acceso a escala mundial, terminó siendo la materia prima gratuita con la que se realizó el mejoramiento genético de las variedades comerciales que se administran bajo sistema comercial de patentes y derechos de obtentores de variedades vegetales que adjudica la exclusividad de la explotación, producción y/o comercialización, mientras que los conocimientos y variedades indígenas quedan sin ningún resguardo ni derecho a retribución por su uso (Ponce y Aguilar, 2002). Este intercambio desigual plantea un reto ético respecto al acceso a las semillas nativas vs las semillas mejoradas, que está dentro del debate político internacional por sus implicaciones para la seguridad alimentaria y el desarrollo con equidad de las naciones pobres (Monasterio, 1997). Las Waycha´s son las papas mejoradas en idioma Quechua. Poca agua disponible, heladas y bajos inputs de fertilización son las condiciones menos favorables para su éxito y son estas las condiciones que con distintos niveles de incidencia, rodean a la producción indígena y campesina de Los Andes de Perú y Bolivia. Tinopó: Antes de la introducción de las variedades modernas con su carga de plagas y enfermedades, el tinopó fue una estrategia de almacenamiento y conservación de papas en el terre- – 133 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Liccia Romero y Maximina Monasterio. Papas Negras... pp. 107-138 no, generalmente en una parcela pequeña aislada del centro de cultivos más intensivos y rodeada de vegetación natural (páramo). La parcela cultivada se cosecha parcialmente y los tubérculos que quedan en el terreno se van cosechando posteriormente, en distintos momentos, según las necesidades. En estas circunstancias, el tinopó es el sistema ideal para los cruces o introgresión del germoplasma silvestre en el cultivo. En Perú existe un sistema indígena aparentemente sinónimo denominado como Kipa, Siya o Wacha (Brush, 1981; Gómez René, 2002 Com. Per. CIP). Bajo las actuales condiciones de fuerte incidencia de plagas y enfermedades ,la práctica del tinopó se considera contraproducente, por lo que se ha ido abandonando al identificársele como un mecanismo de multiplicación y permanencia de los ciclos de las plagas en el suelo. Referencias bibliográficas ARNES, M., R. Gómez, M. Tapia, M. Ghislain, F. Rodríguez y W. Roca. 2002. 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Cándida Rosa Torres, cuando narraba su experiencia como cultivadora de papas Negras, Las Piñuelas, Gavidia, Estado Mérida, año 2002. Sra. Carmen Santiago, cultiva y comercializa papa Arbolona Negra, Cañada de Chinó, Pueblo Llano, Estado Mérida. 138 – Título: Plantas útiles empleadas por los campesinos de la región de Bailadores, Venezuela. Useful plants cultivated by peasants in the Bailadores region of Venezuela. Aranguren B., Anairamiz Autor: Páginas/Colación: 139-165 En: / Boletín Antropológico Vol 2 - Num 64 enero - abril, 2005 Ver artículo en PDF (0.2 Mb) Plantas útiles empleadas por los campesinos de la región de Bailadores, Venezuela Aranguren B., Anairamiz Resumen Se presentan los resultados de una evaluación del conocimiento tradicional en el uso de plantas por parte de los campesinos de un municipio agrícola de la Cordillera de los Andes, quienes tradicionalmente las emplean como medicina, alimentos, extracción de recursos maderables y en la elaboración de artesanías (que incluye tallas de madera y cestería). Esta evaluación se realizó a través de entrevistas estructuradas y de la técnica de enlistado libre. Los resultados arrojan 287 plantas útiles de las cuales la mayor cantidad corresponden a las medicinales, seguidas por las maderables, comestibles y de artesanía. Los listados obtenidos por cada informante tienen un bajo nivel de coincidencia entre ellos. Estos últimos resaltan la pérdida de este tipo de conocimiento debido a las transformaciones que ha sufrido este valle agrícola y a todo un proceso de modernización. Además se concluye que la mayor parte de las especies útiles que son cultivadas provienen de América y de Europa; las especies silvestres provienen principalmente de la unidad ecológica selva nublada y existen especies asilvestradas o naturalizadas que son "reconocidas" por los habitantes como especies silvestres aunque provengan de otros ecosistemas tropicales y extratropicales. Useful plants cultivated by peasants in the Bailadores region of Venezuela Aranguren B., Anairamiz Abstract An evaluation of traditional knowledge possessed by peasants of the mountain regions in respect to plants used for medicine, foods and structural materials in woodwork and basketry. Data was secured through interviews and showed the use of 287 different plant species, most of which are medicinal, as well as structural use, food use and handicraft use. Knowledge concerning the use of these plants is not general and is falling out of currency due to modernization. Many plants are imported from other regions in the Americas and from Europe. Native species originate from the rain forest and imported species "recognized" as wild from various ecosystems both tropical and extra-tropical are cultivated. Centro de Investigación: Centro de Investigaciones Etnológicas (CIET) Dependencia: Museo Arqueológico "Gonzalo Rincón Gutiérrez" Key Words: Ethnobotanic , Ethnoecology , Peasants Publicación Electrónica: Boletín Antropológico Descriptor Temático: Etnobotánica , Etnoecología , Campesinos Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 Plantas útiles empleadas por los campesinos de la rregión egión de B ailador es, Vene zuela* Bailador ailadores, enezuela* ANAIRAMIZ ARANGUREN B. Instituto de Ciencias Ambientales y Ecológicas Facultad de Ciencias. Universidad de Los Andes RESUMEN Se presentan los resultados de una evaluación del conocimiento tradicional en el uso de plantas por parte de los campesinos de un municipio agrícola de la Cordillera de los Andes, quienes tradicionalmente las emplean como medicina, alimentos, extracción de recursos maderables y en la elaboración de artesanías (que incluye tallas de madera y cestería). Esta evaluación se realizó a través de entrevistas estructuradas y de la técnica de enlistado libre. Los resultados arrojan 287 plantas útiles de las cuales la mayor cantidad corresponden a las medicinales, seguidas por las maderables, comestibles y de artesanía. Los listados obtenidos por cada informante tienen un bajo nivel de coincidencia entre ellos. Estos últimos resaltan la pérdida de este tipo de conocimiento debido a las transformaciones que ha sufrido este valle agrícola y a todo un proceso de modernización. Además se concluye que la mayor parte de las especies útiles que son cultivadas provienen de América y de Europa; las especies silvestres provienen principalmente de la unidad ecológica selva nublada y existen especies asilvestradas o naturalizadas que son “reconocidas” por los habitantes como especies silvestres aunque provengan de otros ecosistemas tropicales y extratropicales. Palabras claves: etnobotánica, etnoecología, campesinos. Useful plants cultivated by peasants in the Bailadores region of Venezuela ABSTRACT An evaluation of traditional knowledge possessed by peasants of the mountain regions in respect to plants used for medicine, foods and structural materials in woodwork and basketry. Data was secured through interviews and showed the use of 287 different plant species, most of which are medicinal, as well as structural use, food use and handicraft use. Knowledge concerning the use of these plants is not general and is falling out of currency due to modernization. Many plants are imported from other regions in the Americas and from Europe. Native species originate from the rain forest and imported species “recognized” as wild from various ecosystems both tropical and extra-tropical are cultivated. Key words: ethno-botany, ethno-ecology, peasants.. – 139 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 Introducción Diferentes autores, entre los cuales destaca Toledo (1992) han manifestado que la ciencia contemporánea ha avanzado muy poco en la comprensión y el análisis de la manera como los grupos indígenas, y los campesinos manejan y utilizan los recursos naturales. Una aproximación a este conocimiento proviene de las etnociencias, las cuales se acercan a este conocimiento usando las herramientas del método científico y los conocimientos tradicionales de los grupos indígenas y de los campesinos. Dentro de estas etnociencias se encuentran la etnohistoria, etnolingüística, la etnobotánica, etnozoología, entre otras. Con relación al universo de las ciencias naturales, existen algunas que consideran una parte de este conocimiento, ya sea en lo que se ha llamado etnobiología (Berlín, 1992) o en algunas subdisciplinas de la biología como la etnobotánica (Bye, 1993; Caballero, J. 1994; López del Pozo, 1990; Martín y Hoare, 1998; Martin, 1995; Prance, 1991; Tran Van On et al., 2001); la etnozoología, y de otras ciencias como la etnopedología, y la etnomedicina (Clarac de Briceño, 1985, 2004; Delascio, 1985). Dentro de estas ciencias en una etapa inicial se pueden obtener listados de plantas, animales, tipos de suelo y usos medicinales o rituales, etc., ya sea en comunidades indígenas hasta comunidades campesinas o rurales (Aranguren 1994; Aranguren et al., 1996; Ladio, 2001; Wong, 2000). O bien aplicar métodos cuantitativos para evaluar la coincidencia en el conocimiento de nombres y usos entre grupos humanos (Donovan y Pury, 2004; Phillips y Gentry, 1993) y verificar algunas hipótesis y proponer pautas de conservación. En una visión un poco más amplia de las etnociencias, Toledo (1992) propone el concepto de etnoecología como la disciplina encargada de estudiar las concepciones, percepciones y conocimientos de la naturaleza que permiten a las sociedades rurales producir y reproducir las condiciones materiales y espirituales de su existencia a través de un adecuado uso de los recursos naturales más que una 140 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 simple evaluación de usos medicinales. Desde este punto de vista la etnoecología es una nueva disciplina que aborda el estudio de las concepciones, percepciones y conocimientos de los sistemas ecológicos por parte de la sociedad, que podrían conducir a un uso sustentable de los recursos naturales en estrecha relación con las necesidades materiales y espirituales del hombre. Este concepto nos permite incluir elementos propios de la ecología (estructura y funcionamiento de los sistemas ecológicos, sucesión ecológica) para plantear un nuevo modelo de conservación y desarrollo. Por otra parte, diferentes autores hay enfatizado el hecho de que la pérdida del conocimiento sobre la naturaleza es parte de la pérdida de la biodiversidad, e incluso se ha hablado de la erosión del conocimiento (Martín y Hoare, 1998) como una de las preocupaciones de la biología y especialmente de la ecología (Bye, 1993). Bates (1985) resalta este hecho afirmando que los cambios en los patrones de uso de la tierra pueden significar la pérdida de especies y de la diversidad genética especialmente de la biota tropical y de las razas cultivadas por los indígenas. En este estudio se aplicó el concepto de etnoecología dentro de un municipio del estado Mérida en los Andes Venezolanos. Rivas Dávila, es un municipio campesino que a partir de la década de los cincuenta sufrió un cambio notable en sus actividades productivas y cambió su relación con la naturaleza ya que experimento un proceso de transformación agrícola pasando desde pequeñas áreas con pocos cultivos hacia una agricultura comercial bastante tecnificada y completamente dedicada a la exportación (Rojas López, 1985, FARMER, 1977). Es evidente que las condiciones climáticas favorables, aunadas al aporte de los conocimientos y la experiencia agrícolas de algunos productores locales e inmigrantes de otros países andinos y europeos, y al aumento de la demanda agroalimentaria dentro del estado Mérida y del país ayudaron a que ocurriera este proceso de cambios en todo el valle. Sin embargo, en lo que respecta al conocimiento tradicional sobre las plantas silvestres podría es- – 141 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 tar ocurriendo un proceso de pérdida u olvido de técnicas de uso y apropiación de la naturaleza debido a este proceso de transformación acelerado. Área de estudio El municipio Rivas Dávila en el año 2000 estaba habitado por 16.001 personas, distribuidas en la parroquia Rivas Dávila (13.028 hab.) y la parroquia Gerónimo Maldonado (2.973 habitantes) (INE, 2001). De acuerdo a la información reportada por la alcaldía del municipio para el censo de 1991 la población estaba agrupada en aldeas con núcleos urbanos relativamente pequeños ya que la aldea más grande, Bodoque, apenas tenía 2.250 habitantes y la más pequeña, Las Tapias, tiene 686 habitantes (Tabla 1). En este municipio se reportó la presencia de grupos indígenas en el momento de la conquista llamados Bailadores, que pertenecen a la lengua Muku-Chama (Clarac de Briceño, 1998 y González Ñañez, 2000) pero actualmente sólo hay campesinos o habitantes rurales que viven de las actividades agrícolas (Guerrero, et al., 2001, Parada, 2001) pero que siguen viviendo en una estrecha relación con su ambiente y que utilizan parte de las tradiciones indígenas del aprovechamiento de las plantas y animales mezclada con el conocimiento actual. Tabla 1. Número de habitantes del municipio Rivas Dávila. Nombre de la aldea Bailadores Bodoque Las Tapias Las Playitas Mariño La Otrabanda San Pablo Población* 5.117 2.250 686 1.956 1.006 1.309 949 13.273 *datos tomados de la Alcaldía del Municipio Rivas Dávila, 1992. 142 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 La población se distribuye a lo largo de pequeñas microcuencas afluentes del río Mocotíes, en terrazas aluviales que se encuentran enmarcadas en la Cordillera de los Andes en un gradiente altitudinal que va desde 1200 hasta 3.400 msnm., atravesando al menos tres tipos de unidades litológicas, con características climáticas diferentes (Ferrer et al., 1976). La forma de este estrecho valle permite delimitar dos tipos de vertientes: la seca y la húmeda que claramente muestran tipos de vegetación diferente. Como resultante de estos factores ambientales se presentan cuatro de las unidades ecológicas descritas por Ataroff y Sarmiento (2003) para el estado Mérida, que son el bosque siempre verde seco, selva subcaducifolia montana, la selva nublada y el páramo andino. El bosque siempreverde seco crece en las vertientes secas entre 1600 a 2700 msnm, en donde se registran temperaturas entre 11 a 15°C. La característica principal es que durante 3 a 5 meses del año hay sequía y que la precipitación total es de 500 a 900 mm. Son bosques con un dosel entre 10 y 15 metros de altura formado por especies arbóreas como Roupala aff. pseudocordata, Escallonia floribunda, Psidium caudatum, Psidium guianense, Myrsine ferruginea, Clusia multiflora, Weinmannia glabra, Dodonea viscosa Clusia aff. minor, Toxicodendron striatum, Viburnum tinoides, Roupala aff. pseudocordata, Escallonia floribunda. En el sotobosque encontramos Myrsine coriacea, Cassia aff. mutisiana, Stevia lucida, Baccharis nitida, Cassia jhanii, Berberis discolor, Myrsine coriacea, Cassia aff. mutisiana, Croton rhamnifolius, Croton meridensis, Croton turimiquirensis, Trachypogon plumosus, Stevia rhombifolia. La selva subcaducifolia montana, ocupa alturas entre 800 a 1700 m, en vertientes húmedas o márgenes de ríos en vertientes secas, allí la temperatura promedio oscila entre 17 a 22°C y la precipitación esta distribuida entre 9 a 11 meses (1200 a 1900 mm) El dosel es muy irregular entre 20 y 35 m, con árboles emergentes de 40 m. Las especies importantes son Tabebuia guayacam, Tabebuia – 143 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 ochracea, Cedrela sp, Heliocarpus popayanensis, Erythrina poeppigiana, Erythrina glauca, Inga oerstediana, Inga edulis, Spondias mombim, Ficus maitin, Solanum arboreum. Y en el estrato menor a 12 metros encontramos Vismia baccifera, Miconia lonchophylla, Piper prunifolium, Solanum leucocarpon, Urera caracasana. Las lianas y epifitas son escasas en comparación con las otras selvas andinas (Ataroff y Sarmiento, 2003). La selva nublada se encuentra entre 1700 a 3000 msnm, en las vertientes húmedas, con temperaturas entre 9 a 17°C. La precipitación es de 1000 a 3000 mm, y no hay meses secos. La característica resaltante de esta unidad ecológica es la alta nubosidad, la alta humedad relativa y la baja insolación todo el año. Es una selva siempreverde, con más de 150 especies de árboles formada por un dosel muy irregular, de 20 a 30 metros. Encontramos árboles como Podocarpus oleifolius, Oreopanax moritzii, Hedyosmum brasiliense, Havetia laurifolia, Ocotea calophylla, Billia columbiana, Brunellia acutangula, Persea mutisii, Weinmannia jahnii, Clusia multiflor, Decussocarpus rospigliosii, Montanoa quadrangularis, Alchornea grandiflora, Cecropia santanderensis, Billia columbiana, Ilex laurina, Protium tovarense, Guettarda steyermarkii, Brunellia integrifolia, Weinmannia balbisiana. El sotobosque esta formado por Palicourea demissa, P. venezuelensis, Psychotria aubletiana, Solanum meridense, Monochaetum meridense, Fuchsia venusta, Begonia mariae, Dodonea viscosa, Miconia meridensis, Piper diffamatum, Psychotria meridensis, Chusquea fendleri, Solanum perfidum. Las trepadoras son Anthurium gehrigeri, A. julianii, A. subsagittatum, Passiflora mollissima, Mikania spp., Bomarea multiflora, Philodendron karstenianum, Bomarea purpurea. Las epifitas son muy importantes como Tillandsia tetrantha, T. biflora, T. usneoides, Epidendrum dendrobii, Oncidium falcipetalum, Pleurothallis roseo-punctata, Peperomia microphylla, T. denudata, Odontoglossum odoratum, Oncidium zebrinum, Peperomia aquilae (Ataroff y Sarmiento, 2003). 144 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 El páramo andino se puede encontrar tanto en las vertientes secas (2700 a 4000 msnm) como en las vertientes húmedas (3000 a 4300 msnm), la temperatura esta entre 7-10 a 3 °C. La característica ecológica es la presencia de bajas temperaturas. La vegetación es un mosaico de comunidades arbustivas y herbáceas, la más común tiene un estrato superior entre 50 y 150 cm., con rosetas y arbustos, un estrato intermedio de arbustos y hierbas entre 20 y 50 cm. y un estrato inferior formado por cojines y hierbas menores de 10 cm. Allí encontramos especies que crecen en forma arrosetada como Espeletia schultzii, Espeletia batata, formas arbustivas como Hypericum laricifolium, Baccharis prunifolia, Stevia lucida, y hierbas como Sisyrinchium micranthum, Lachemilla moritziana, Geranium multiceps, Agrostis trichodes (Ataroff y Sarmiento, 2003). Objetivos Evaluar con criterios etnoecológicos la relación existente entre la población campesina del municipio Rivas Dávila y los recursos naturales de los ecosistemas naturales de la región. 1. Obtener una lista de plantas útiles y una valoración de la importancia relativa de estas especies para los habitantes del municipio Rivas Dávila. 2. Determinar la presencia de estas especies dentro de las unidades ecológicas y dentro de los agroecosistemas del municipio. Metodología Una primera aproximación al conocimiento tradicional se puede hacer siguiendo para ello diferentes métodos como son el Inventario de Biodiversidad y Etnobotánico (Martín, 1997, Wong, 2000). Esta última autora citando a Stork y Davies (1996) menciona que un inventario de biodiversidad es una lista de entidades biológicas de un sitio particular o un área dada. La recopilación de este inventario se puede hacer con entrevistas no estructuradas y la técnica de enlistado libre (free listing) (Weller y Romney, 1988) como – 145 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 técnicas en las que el investigador puede tener un acercamiento al conocimiento tradicional. En este trabajo se realizaron entrevistas estructuradas a 20 informantes y 10 enlistados libres para evaluar el conocimiento tradicional de los habitantes del municipio, durante el período comprendido desde enero 2001 hasta agosto del 2002. Los informantes fueron hombres y mujeres mayores de 35 años y se seleccionaron por ser personas reconocidas por el resto de la comunidad por tener mayor conocimiento del mundo vegetal. Este trabajo se realizó conjuntamente con el Bachiller Freddy Parada, un habitante de la capital del municipio, quien realizó algunas de las entrevistas. Además se contó con el apoyo de la Bióloga Irama Sodja Vela quien colectó, determinó y depósito el material botánico de ochenta números a los herbarios MER y MERC de la Facultad de Ciencias Forestales y Ambientales y del Jardín Botánico de la Universidad de los Andes respectivamente. En la primera prospección etnoecológica realizada en Febrero 2001 se pudo evidenciar que los habitantes del municipio Rivas Dávila realizan al menos dos tipos de actividades extractivas basadas en el uso de los recursos naturales de la zona, estas actividades incluyen el uso de recursos maderables y recursos no maderables (Tabla 2). Tabla 2 Tipo de productos utilizados por la comunidad campesina en sus diferentes actividades Tipo de Producto Productos maderables Productos no maderables Actividades Tallas de madera, leña para combustión, cercas, materia para la construcción. Medicina natural, alimentación humana y animal, cestería, extracto de aceites, flores, material para adornos navideños y actividades religiosas. Esta información permitió diseñar, y elaborar la entrevista estructurada siguiendo un formato y dirigir las preguntas sobre cuatro categorías de utilización y del conocimiento de las plantas sil146 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 vestres, que fueron: medicinales, comestibles, maderables y artesanías. Esta prospección muestra evidencias de que las poblaciones campesinas de la región tuvieron y siguen teniendo a la vegetación natural como una “proveedora de recursos” como ha sido referido por Jones (1964). Tanto en las entrevistas como en los enlistados libres se realizaron listados de plantas (nombre común, nombre científico) para todas las plantas mencionadas por cada informante. Se compararon estos listados entre los 20 informante elaborando una categorización de la importancia de mención de acuerdo al número de veces que cada especie fue mencionada (muy importantes, importantes y raras). La categoría muy importante se consideró cuando una especie era mencionada por más de 10 personas (50 % de las personas entrevistadas), es decir más de 10 personas. La categoría importante se empleó cuando la planta era mencionada por 3 hasta 9 personas diferentes. Y la categoría rara se utilizó para las especies que fueron mencionadas por dos o menos personas. Finalmente, para determinar la procedencia del material utilizado y tener una estimación relativa del impacto que la actividad extractiva tiene en los ecosistemas naturales de la región todas las especies determinadas fueron clasificadas bajo el siguiente sistema (modificado de Caballero, 1987). Estas clases contienen especies que son: 1. Cultivadas o fomentadas a nivel doméstico 2. Silvestre distribuidas en las unidades ecológicas 3. Introducidas que se encuentran en un proceso de asilvestramiento y naturalización y que están asociada a sitios intervenidos y/o secundarios La clasificación se hizo empleando la información proporcionada por algunos informantes, la revisión bibliográfica de fuentes documentales (Bono, 1996; Mabberley, 1997), la revisión de la bases electrónicas de consulta pública como el Indice Kewensis, el Kew Garden, y el Missouri Botanical Garden (Index Kewensis, http:/ – 147 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 /mobot.mobot.org/W3T/Search/vast.html y http://www.ipni.org/ipni/ query_ipni.html) y se realizaron algunos recorridos de campo con informantes claves para verificar la procedencia de las especies. V. Resultados y discusión Las personas a quienes se entrevistó en este estudio y que facilitaron información sobre plantas útiles fueron 20, todas mayores de 30 años de edad y menores de 90 años (tabla 3) y que habitan en las diferentes aldeas de municipio. Tabla 3 Nombre, edad de las personas entrevistadas y ubicación de sus viviendas Nombre Edad Aldea Eduardo Rojas Ovalles 78 Bodoque Josefa de Pereira 70 Bodoque Alfonzo Morales 73 La Otrabanda Ramón Devia 78 La Otrabanda Santiago Hernández 80 La Otrabanda Camilo Rosales 70 La Villa Carmen Jaimes 53 La Villa Guillermina Molina 56 La Villa Gustavo Ramírez 60 La Villa Isolina de Medina 70 La Villa José Pereira 64 La Villa Juan Carrero 35 La Villa Julio Benavides 40 La Villa Luís Varón 60 La Villa Rafael Contreras 57 La Villa Benjamín Ovallos 62 Las Playitas Claudio Morales 71 Las Playitas Arcángel Belandría 47 Las Tapias Pablo Belandría 56 Las Tapias Antonio Medina 76 Mariño 148 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 Los resultados de las 20 entrevistas permiten diferenciar al menos 287 nombres diferentes de plantas dentro de los cuatro usos definidos en este estudio: medicinales, comestibles, maderables y artesanales. Algunas de estas plantas permiten evidenciar una estrategia de uso múltiple de recursos por parte de los campesinos, ya que una planta es usada para al menos tres actividades diferentes. Por ejemplo, fueron mencionadas como medicinales, comestibles y maderables. Pocas especies eran usadas con un solo propósito. Esto parece indicar una estrategia de uso múltiple de los recursos la cual ya fue definida por Toledo y colaboradores (2005) en México, como una forma de manejo sustentable de los bosques tropicales de México por parte de comunidades indígenas que usan cada recurso natural de muchas formas diferentes y usan más de una especie para un mismo fin. Esta forma de manejo adaptativo permite que sean utilizados uno de los ecosistemas tropicales más diversos y al mismo tiempo más vulnerable como son los bosques tropicales húmedos sin deteriorar sensiblemente el ambiente. Nuestros resultados muestran que el mayor porcentaje corresponde las plantas medicinales (101 nombres diferentes) seguidas por las maderables (82), las comestibles (57) y las empleadas en la elaboración de artesanía (47) (Fig. 1). 287 nombres diferentes Artesanía Comestible Maderable Medicinal 0 10 20 30 40 Porcentaje Fig. 1. Porcentaje de plantas mencionadas en cada una de las categorías de uso definidas – 149 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 Este resultado coincide con los referidos por Kappelle et al., (2000) en una comunidad campesina similar en Costa Rica y con los resultados de Caballero (1994) y Padoch (1990) para grupos indígenas en México y Brasil respectivamente, en donde las mayor cantidad de especies vegetales son empleadas como medicina seguida de los usos maderables, comestibles y artesanales. En todos estos casos (Costa Rica, México y Brasil) las comunidades campesinas e indígenas estaban asentadas en zonas boscosas y en donde la fitoterapia es una alternativa usada (Aranguren, 2004, Delascio, 1985, 2003) en contraposición con la medicina alopática de altos costos y disponible en áreas más pobladas en donde hay farmacias y boticas que las venden. Las categorías de uso fueron cuatro, medicinales, maderables, comestibles y artesanales: Medicinales: Las 101 plantas diferentes que son usadas como medicinales son empleadas para un gran número de dolencias que van desde el dolor de cabeza hasta cáncer y otras enfermedades. Al observar el número de personas que coincidieron con la misma planta vemos que ninguna fue mencionada por más del 50% de los informantes (Tabla 4) por lo que no existen plantas con el valor relativo de muy importante. Por otra parte, las plantas importantes fueron veinte, las que corresponden a una frecuencia de mención entre nueve y tres informantes, estas fueron: el diente de león, el paico, la viravira, bledo colorado, cardosanto, dictamo real, frailejón, hinojo, limoncillo, saúco, vinagrera, zen, cadillo de perro, cidrón, geranio, hierba mora, salvia, llantén, toronjil, verbena. 150 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 Tabla 4 Número de plantas medicinales, nombres y valor relativo de uso empleado No. Plantas Nombre común 0 Ninguna 20 Diente de león Paico Viravira Bledo colorado Cardosanto Dictamo real Frailejón Hinojo Limoncillo Saúco Zen Vinagrera Cadillo de perro Cidrón Geranio Hierba Mora Jarilla Llantén Toronjil Verbena 81 Nombre científico Sonchus asper Chenopodium ambrosioides Gnaphalium moritzianum) Amaranthus dubius Argemone mexicana No determinada Diferentes especies de la Subtribu Espelitinae Foeniculum vulgare Cymbopogon citratus Sambucus peruviana Dodonea viscosa Trifolium repens Bidens bipinnata Lippia alba Geranium sp. Solanum americanum Aristeguietia glutinosa Plantago major Melissa officinalis Verbena litorales Valor relativo Muy importante Importante Raras Finalmente, las especies raras, es decir aquellas plantas medicinales que fueron mencionadas por menos de dos informantes son 81 especies diferentes. Esta gran cantidad de plantas parece indicar un gran “arsenal” de especies útiles en fitoterapia, que sería importante estudiar en futuros proyectos y que constituyen un almacén de alternativas. Maderables: Del inventario de plantas maderables (Tabla 5) encontramos que dos especies de árboles aparecen como muy importantes. Estas fueron el fresno y el cedro. Trece especies de árboles fueron mencionados por entre nueve y tres informantes, estas fueron cochinito, pino, guayabo, sauce, guamo, eucalipto, dividive, saisai, peralejo, cinare, anime, uvochipio y orumo. Finalmente se – 151 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 encontraron sesenta y siete especies que apenas fueron mencionadas por menos de dos informantes. Tabla 5 Número de plantas maderables, nombres y valor relativo de uso empleado No. Plantas Nombre común 2 Fresno Cedro 13 Cochinito Pino Guayabo Sauce Guamo Eucalipto Dividive Saisai Peralejo Cinare Anime Uvo chipio Orumo 67 Nombre científico Fraxinus chinensis Cedrella montana Escallonia floribundia Diferentes especies Psidium dubium Salix chilensis Inga edulis Eucaliptus spp. Caesalpinia coriaria Weinmania fagaroides sin determinar Psidium caudatum Montanoa cuadrangulares Ficus sp. sin determinar Valor relativo Muy Importante Importante Rara En general, las especies maderables en zonas boscosas suelen ser importantes como proveedoras de recursos ya que se emplean no sólo como material para la construcción de casas (vigas, “madrinas”, etc.), construcción de cercas perimetrales, puentes, leña para los fogones caseros, leña para los hornos tradicionales de tejas y pan, herramientas para la agricultura (“cabos de hacha”, regletas, bordones), extracción de tintas y pigmentos y un sinnúmero de usos. Comestibles: En relación a las plantas comestibles (Tabla 6) los resultados muestran tres categorías de mención, las muy importantes mencionadas por más del 50% de los informantes, fueron el surure, mortiño, cinare. Las especies importantes fueron trece especies: Mora, chirimoya, guayaba, la uva de oso, la quemadera, 152 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 la curuba, el níspero, el camarero, la fresa paramera, la guarca, la lengua de vaca, la palchagua y la pumarosa. Tabla 6 Número de plantas comestibles, nombres y valor relativo de uso empleado No. Plantas 3 13 41 Nombre común Surure Mortiño Cinare Mora Chirimoya Guayabo Uva de oso Quemadera Curaba Níspero Camarero Fresa paramera Guarca Lengua de vaca Palchagua Pumarosa Nombre científico Myrcia acuminata Hesperomeles glabrata Psidium caudatum Rubus floribundus Annona cherimolia Psidium dubium Sin determinar Sin determinar Passiflora mixta Manikara achras Sin determinar Geranium sp. Mikania sp. Rumex sp. Passiflora sp. Jambosa vulgaris Valor relativo Muy importante Importante Rara Por otra parte, se reportan 41 especies como raras. Al igual que las plantas utilizadas como medicina casera esta gran cantidad de plantas comestibles parece indicar un gran potencial de frutas silvestres que son y fueron usadas por la población para cubrir sus necesidades alimenticias. En futuros estudios de prospección alimenticia estas plantas podrían ser estudiadas con más detalle ya que representan un material promisorio para la garantizar la seguridad alimentaría. Artesanías: Las plantas utilizadas en la región como materia prima para la elaboración de artesanías (Tabla 7) fueron cuarenta y siete, de las cuáles la más importante es la enea. En la categoría de especies importantes se encontraron diez especies que fueron el cañuto, el anime, el bejuco carrero, junco, bejuco, gaita, palma, cañuto de trigo, cucharo, lata. De la mayor parte de estas especies se – 153 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 extrae una fibra vegetal con la cuál se elaboran cestas o “canastos” de uso doméstico y para la recolección de café aunque también se obtiene el anime que es el material parecido al corcho y con el cual se elaboran adornos navideños, específicamente ovejas para el pesebre. Esta tradición se ha ido perdiendo en toda la región y en el municipio Rivas Dávila. En la categoría de las especies pocos mencionadas se encuentran 36. Entre las que vale la pena resaltar algunas especies utilizadas para la elaboración de instrumentos musicales como violines y cuatros, que también se está olvidando. Tabla 7 Número de plantas usadas como artesanía, nombres y valor relativo de uso empleado No. Plantas 1 10 36 Nombres común Enea Cañuto Anime Junco Bejuco carrero Bejuco Gaita Palma Cañuto de trigo Cucharo Lata Nombre científico Cyperus articulatus Grupo Bambucea Montanoa cuadrangularis Familia cyperaceae Smilax sp. Sin determinar Rhipidocladum sp. Sin determinar Triticum spp. Myrsine ferruginea Chusquea spencei Valor relativo Muy importante Importante Raras En las encuestas resultó evidente que el 60 % de los entrevistados coincidieron en que ahora se usan menos las plantas que en el pasado (Tabla 8) y que esa disminución puede explicarse como consecuencia de la introducción de la medicina moderna o alopática, a los cambios relacionados con el modernismo, a la pérdida del conocimiento y a la pérdida de la vegetación natural por el cambio de uso del suelo. Sin embargo, un 30% no contestó la pregunta sobre la pérdida de la tradición de uso de las especies y de los ecosistemas naturales. Y solo una persona contestó que ahora se usan más las plantas en la región, pero particularmente se refería al 154 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 uso de las plantas medicinales y un surgimiento de las terapias alternativas debido a que este señor comercializa y vende plantas dentro de la región. Tabla 8 Nombre de los informantes, ubicación de sus viviendas y razón argumentada por la que han dejado de usar la fitoterapia Nombre Eduardo Rojas Ovalles Juan Carrero Luís Varón Alfonso Morales Antonio Medina Santiago Hernández Pablo Belandría Camilo Rosales Guillermina Molina Carmen Jaimes Rafael Contreras Ramón Devia Gustavo Ramírez Julio Benavides Claudio Morales José Pereira Arcángel Belandría Benjamín Ovallos Isolina de Medina Josefa de Pereira Tipo de área en donde vive Zona agrícola Zona urbana Zona agrícola Zona agrícola Zona pecuaria Bosque siempreverde seco Zona pecuaria Zona urbana Zona urbana Zona urbana Bosque siempreverde seco Selva nublada Bosque siempreverde seco Zona urbana Zona agrícola Zona urbana Bosque siempreverde seco Selva nublada Bosque siempreverde seco Zona agrícola ¿Por qué se ha dejado de usar las plantas? Cambio a la medicina moderna Modernismo Modernismo Modernismo ¿ ¿ ¿ ¿ Pérdida de conocimientos ¿ Pérdida de la vegetación Pérdida del conocimientos Pérdida de la vegetación ¿ Cambio a la medicina moderna Cambio a la medicina moderna Pérdida de conocimientos Se usan más que antes ¿ Modernismo Los informantes aparecen en el orden en que fueron entrevistados Finalmente, para la evaluación de la procedencia de las especies se clasificaron todas las especies de acuerdo al sitio en donde crecían de manera natural o están naturalizadas o cuando eran cultivadas y requerían de cuidados agrícolas. Se hicieron tres grupos: Las cultivadas y fomentadas a nivel domestico; las especies silvestres que crecen solas y que provienen de los ecosistemas naturales de la región; y un tercer grupo de las especies introducidas que parecieran estar dentro de un proceso de asilvestramiento y domesticación. Grupo I. Cultivadas y fomentadas a nivel doméstico: dentro de este grupo se encuentran 50 especies empleadas, de éstas se – 155 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 usan en medicina (52%), comestibles (28%), maderables (14%), y artesanales (6%) (Fig. 2). Es decir, el mayor porcentaje corresponde a las plantas medicinales muchas de las cuáles son sembradas en las cercanías de las viviendas, en los patios, en las áreas cercanas a los cultivares y que ameritan pequeños cuidados como siembra, deshierbe, y cosecha. Estas forman parte de la farmacia familiar al alcance de cualquier emergencia y que no hay que pagar por ellas. % de mención 60 52 40 28 14 20 6 0 Medicinal Comestible Maderable Artesanal Usos Fig. 2. Principales usos de las especies útiles que fueron mencionadas por los informantes Analizando la procedencia biogeográfica de estas especies cultivadas podemos concluir que un 31 % son especies nativas de América, un 31% son especies introducidas desde Europa, y seguramente son parte de la herencia cultural que trajo consigo la colonia y la conquista. Un 29 % proviene de Asía, un 6 % provienen de Afríca y un 2 % provienen de Oceanía (Fig. 3). Es decir, se cultivan plantas de origen americano, europeo y asiático casi en la misma proporción y una pequeña cantidad que provienen de Afríca y de Oceanía. 156 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 Fig. 3. Centros de origen biogeográficos de las especies cultivadas Dentro de este grupo de plantas introducidas de otros continentes encontramos especies como la albahaca, la artemisa, el ajenjo, la calendula, el capacho, la cayena, el cidrón, el durazno, el orégano, el sauce, el zapallo, por mencionar algunos. 40 % Relativo 31 30 20 10 0 31 Grupo II.29 Silvestre distribuidas en las unidades ecológicas: se obtuvieron 135 especies diferentes que provienen de la vegetación natural del área, estas especies son usadas como medicina (41%), maderable (24%), comestible (18%) y artesanía (17%) (Fig. 6 2 4). Este resultado muestra que 55 especies usadas como medicina natural son extraídas de la vegetación natural. América Europa Africa Oceanía Dentro deAsia este grupo encontramos las albricias, el anime, el Continentes araguaney, el cucharo, el damocre, el coral, el dictamo real, el frailejón, el guardarocio, el yagrumo, por mencionar algunos. Estas plantas forman parte de las siguientes unidades ecológicas (Fig. 5): páramo (21%), selva nublada (44 %), bosque siempreverde seco (10%), selva subcaducifolia (13%) y el ecotono entre estas (12%). Se observó que muchas de las especies usadas se – 157 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 Porcentaje % de mención Fig. 4. Principales usos dados a las especies silvestres 50 60 41 40 30 40 20 10 21 20 0 Medicina 0 Páramo Fig. 5. Unidad ecológica de donde proviene las especies útiles 158 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 encuentran en la selva nublada y que el páramo provee veintiocho especies utilizadas por los campesinos de la región. Por otra parte, las unidades ecológicas de bosques siempreverde seco, selva subcaducifolia montana, el ecotono entre ambas y aquellas especies que tienen un rango distribución amplio ya que tienen 14, 17 y 16 especies respectivamente. Esta observación permite llamar la atención sobre un ecosistema tan rico y diverso como las selvas nubladas en donde se encuentran un gran porcentaje de especies útiles para los campesinos de Rivas Dávila, quienes normalmente sólo tienen que colectar estas plantas para suplir sus necesidades medicinales, alimenticias, maderables o de materiales para artesanía sin necesidad de pagar nada. Estas plantas son parte de los servicios ecosistemicos que los sistemas naturales proveen a las sociedades humanas y forman parte de su bienestar y calidad de vida (Aranguren, 2005; http:// www.maweb.org/en/index.aspx). Grupo III. Especies introducidas que se encuentran en un proceso de asilvestramiento y naturalización y que están asociadas a sitios intervenidos y/o secundarios. En este grupo encontramos aquellas especies provenientes del primer grupo pero que han sufrido un proceso de asilvestramiento notable, de tal manera que las personas entrevistadas las reconocen como parte de la vegetación natural. Tal es el caso del cardosanto, el llantén, el paico, el fresno, la árnica y el tártaro; especies que crecen sin ningún cuidado en las áreas perturbadas aunque provengan de otro tipo de condiciones ambientales y otros ecosistemas extratropicales. Estas especies compiten con las especies nativas y ha generado conceptos como el de Bosques Bioculturales en donde la biodiversidad es la resultante de las alteraciones causadas por el hombre además de la dinámica natural. – 159 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 Conclusiones Este estudio revela la presencia de 287 especies vasculares útiles que son usadas por los campesinos del municipio Rivas Dávila del Estado Mérida. Un total de 101 que son empleadas con fines medicinales, 82 maderables, 57 comestibles, y 47 que se usan y se usaran para la elaboración de artesanía. Dentro de la alta fitodiversidad que existe en las unidades ecológicas del valle este puede considerarse un porcentaje alto de especies útiles. Sin embargo, hay un bajo nivel de coincidencia entres los informantes que parece revelar que las plantas muy importantes e importantes para la comunidad no son mencionadas por todos los informantes mientras que hay un gran pool de plantas raras que seguramente se usan con baja frecuencia o cuyo uso se esta perdiendo por diferentes razones. Este aspecto deberá ser objeto de estudio de trabajos posteriores ya que entran dentro de la categoría de erosión del conocimiento y erosión cultural. En lo que se refiere a esfuerzos de conservación todas las especies consideradas como muy importantes deberán ser objeto de estudios autoecológicos y posterior reintroducción en las áreas ó unidades ecológicas en donde crecen de manera natural. Este puede ser el caso del cedro, el surure, el mortiño, el cinaro, la enea y el dividive; especies que antes eran frecuentes en las unidades ecológicas pero que ahora son escasas debido a la extracción selectiva. Algunas de las especie útiles podrían estar en la lista de especies de la flora del libro rojo (en peligro crítico, en peligro, vulnerables, de menor riesgo o insuficientemente conocidas (Llamosas et al., 2003) aunque aun no sepamos que crecen en el municipio o que se sigan extrayendo sin ningún cuidado. Se actualizaron los nombres comunes y científicos de las plantas útiles en el municipio Rivas Dávila, las cuáles ya habían sido inventariadas a mitad de la década de los sesenta (Jones, 1964) y que mostraban que los pobladores del municipio como el Rivas Dávila vivían en una tierra de riqueza natural con alta diversidad de 160 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Anairamiz Aranguren B. Plantas útiles empleadas... pp. 139-165 plantas útiles y que tenían un legado de técnicas y conocimientos que en los últimos años han tendido a perderse por los diferentes procesos de transformación del uso del suelo y de todo el medio rural venezolano. Se muestra que hay una estrategia de uso múltiple de los recursos ya sea por que se extraen recursos de varias unidades ecológicas dentro de este valle, que van desde páramos, selvas nubladas, bosques siempre verde seco y por que además cada planta puede ser utilizada con varios fines dependiendo de la parte empleada.. Finalmente este trabajo evidenció que el impacto de la deforestación y de los cambios de uso del suelo puede tener sobre la tradición de uso de las plantas y sobre todo sobre la disponibilidad inmediata de recursos que puede hacer a los campesinos más dependientes de insumos o recursos manufacturados o importados de otras regiones. Nota * Este fue entregado en febrero de 2005 evaluado y arbitrado en marzo del mismo año (nota del Comité Editorial) Referencias bibliográficas ARANGUREN, A. 1994. Caracterización de los bosques tropicales caducifolios y del aprovechamiento de sus recursos por comunidades Nahuatl de la Montaña de Guerrero. Tesis de Maestría. 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Autor: Díaz de Villabona, Nancy ; García Sivoli, Carlos ; Palacios S., María F.; Solórzano N., Eduvigis; Jarpa, Patricio Páginas/Colación: 167-180 En: / Boletín Antropológico Vol 2 - Num 64 enero - abril, 2005 Ver artículo en PDF (0.1 Mb) Determinación del tipo de cara del hombre andino merideño: estudio morfoantropométrico del macizo facial Díaz de Villabona, Nancy; García Sivoli, Carlos; Palacios S., María F.; Solórzano N., Eduvigis y Jarpa, Patricio Resumen Los factores epigenéticos y genéticos juegan un papel fundamental en la configuración del cráneo y de la cara, determinando así los rasgos característicos del individuo y, por tanto, del grupo étnico. La necesidad de conocer la tipología facial así como los índices faciales predominantes en nuestro medio obedece a la carencia de estudios en esta área del conocimiento que permitan identificar las características faciales del hombre andino merideño. La condición étnica, caracterizada fundamentalmente por el mestizaje, hace pensar que esta población debería presentar una variabilidad morfológica con características propias, diferentes a las tipologías faciales hasta ahora establecidas. En el presente trabajo se estudia una muestra de 60 individuos, 30 del sexo femenino y 30 del sexo masculino, estudiantes de la Facultad de Odontología, con edades comprendidas entre los 18 y 25 años, oriundos del Estado Mérida y que no han sido sometidos a ningún tratamiento ortodóntico. Para las mediciones antropométricas, se empleó la metodología propuesta por Comas (1966); utilizando para ello un compás de brazos curvos con puntas en forma de bolilla y un vernier, calibrados en milímetros. Los promedios de las medidas faciales para el índice facial (morfológico y superior) tanto en el sexo femenino como el masculino, determinaron como tipo de cara más común la euriprosopa o cara ancha. Male facial types in the andean region of Venezuela: a study of the morphic structures and their measurement Díaz de Villabona, Nancy; García Sivoli, Carlos; Palacios S., María F.; Solórzano N., Eduvigis y Jarpa, Patricio Abstract Genetic factors in respect to craniology and facial structure determine individual characteristics and indicate ethnic grouping. Knowledge of facial types and their distribution is sparse. Racial types, basically mestizo, would in theory present a variation in morphology with its own characteristics which are different from the original types. 60 individuals were studied, 30 males and 30 females who were students at the Faculty of Dentistry at the University of the Andes with ages between 18 and 25 who originate from the area around Merida, Venezuela and who have recieved no dental treatment. Measurements were made according to methods proposed by Comas (1966), and were calibrated in millimeters. The average measurements of the face and cranium in females and males indicated the categories (euriprosopa or wide-face) into which the physiognomy would fall. Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Díaz, García, Palacios, Solórzano, Jarpa. Determinación... pp. 167-180 Determinación del tipo de cara del hombr hombree andino merideño: estudio morfoantropométrico del macizo facial* NANCY DÍAZ G.1,2, CARLOS GARCÍA S.1, 2, MARÍA F. PALACIOS S.3 EDUVIGIS SOLÓRZANO N. 1, 2, PATRICIO JARPA R., 1,4 1 2 Universidad de Los Andes, Mérida-Venezuela Universidad Autónoma de Barcelona. España. 3 Universidad de Barcelona. España. 4 Universidad de Iowa. Estados Unidos. RESUMEN Los factores epigenéticos y genéticos juegan un papel fundamental en la configuración del cráneo y de la cara, determinando así los rasgos característicos del individuo y, por tanto, del grupo étnico. La necesidad de conocer la tipología facial así como los índices faciales predominantes en nuestro medio obedece a la carencia de estudios en esta área del conocimiento que permitan identificar las características faciales del hombre andino merideño. La condición étnica, caracterizada fundamentalmente por el mestizaje, hace pensar que esta población debería presentar una variabilidad morfológica con características propias, diferentes a las tipologías faciales hasta ahora establecidas. En el presente trabajo se estudia una muestra de 60 individuos, 30 del sexo femenino y 30 del sexo masculino, estudiantes de la Facultad de Odontología, con edades comprendidas entre los 18 y 25 años, oriundos del Estado Mérida y que no han sido sometidos a ningún tratamiento ortodóntico. Para las mediciones antropométricas, se empleó la metodología propuesta por Comas (1966); utilizando para ello un compás de brazos curvos con puntas en forma de bolilla y un vernier, calibrados en milímetros. Los promedios de las medidas faciales para el índice facial (morfológico y superior) tanto en el sexo femenino como el masculino, determinaron como tipo de cara más común la euriprosopa o cara ancha. Palabras claves: tipología facial – factores epigenéticos – cordillera andina – factores genéticos – medidas antropométricas. – 167 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Díaz, García, Palacios, Solórzano, Jarpa. Determinación... pp. 167-180 Male facial types in the andean region of Venezuela: a study of the morphic structures and their measurement ABSTRACT Genetic factors in respect to craniology and facial structure determine individual characteristics and indicate ethnic grouping. Knowledge of facial types and their distribution is sparse. Racial types, basically mestizo, would in theory present a variation in morphology with its own characteristics which are different from the original types. 60 individuals were studied, 30 males and 30 females who were students at the Faculty of Dentistry at the University of the Andes with ages between 18 and 25 who originate from the area around Merida, Venezuela and who have recieved no dental treatment. Measurements were made according to methods proposed by Comas (1966), and were calibrated in millimeters. The average measurements of the face and cranium in females and males indicated the categories (euriprosopa or wide-face) into which the physiognomy would fall. Key words: facial typology, genetic characteristics, Andean region, genetic factors, anthropometric averages. Introducción Los seres humanos se diferencian en muchos aspectos. En cualquier grupo de personas hay variación de estatura, peso, color del cabello, de los ojos, etc. La gente, dependiendo de su origen, también es diferente. Por ejemplo, la mayoría de la gente del norte de Europa tiene el pelo rubio y piel pálida, mientras que la mayoría de la gente del sur de Asia tiene el pelo y la piel oscuros. La gente del Ártico es generalmente más baja y robusta que la gente que vive en la sabana del este de africano. Esta variación es debida a diferencias genéticas, que supone la ejecución de un programa codificado siguiendo una pautas jerarquizadas y ordenadas (Bermúdez de Castro, 2002), y ambientales, que supone la plasticidad y/o flexibilidad de ciertas estructuras óseas siguiendo pautas de presión ambiental, entre los individuos (Boyd y Silk, 2001). El azar es otro factor importante en la diversidad morfológica entre individuos (Arsuaga et al., 2001). El tiempo también ayuda a incrementar la diversidad morfológica, así como los cambios graduales (anagenesis) de una 168 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Díaz, García, Palacios, Solórzano, Jarpa. Determinación... pp. 167-180 especie (Foote, 1997; Ricklefs, 2004). En este sentido, la antropología física, ayuda a entender el proceso evolutivo del hombre y la incidencia de factores genético y ambientales (Nanda, 1999). Por largas décadas, la antropología física ha aportado bases sólidas para el estudio de la anatomía humana y por ende para el estudio de la variabilidad morfológica del cuerpo humano. Para valorar este último aspecto, se usan métodos que sirven para estimar la variación de ciertos caracteres morfológicos, los cuales nos ayudan a determinar con mayor precisión: distancias, diámetros, índices y medidas, entre otros (Rouvière, 1987). En las investigaciones antropológicas, los diámetros faciales son de gran ayuda ya que permiten determinar dimensiones de la cara tanto en sentido vertical como horizontal y que al ser conjugados a través de los índices faciales, contribuyen a establecer los tipos de cara permitiendo así establecer una clasificación de los individuos y las etnias. Una de las formas de estudiar la cara o macizo facial en su conjunto, es conociendo su forma y dimensiones. Así, la anatomía se apoya en la antropología física para el establecimiento de medidas, aplicación de índices y en fin para lograr la clasificación adecuada según los rasgos físicos y características étnicas. Es por esto, que la antropología como ciencias le sirve de base al ortodoncista (Guardo, 1953).Al respecto, autores como Kohn de Brief (1972), acotan que “la apariencia facial de un individuo resulta no solamente de las características cuantitativas, sino de un conjunto muy sutil de elementos difícilmente delimitables en forma objetiva”. Es decir, que tanto los factores epigenéticos o discretos (genes funcionales) y genéticos (genes estructurales) juegan un papel fundamental en la configuración del cráneo y de la cara, determinando así, los rasgos morfológicos característicos del individuo y, por lo tanto, del grupo étnico (Reyes, 1997). La Morfología nos ayuda en la descripción y estudio de los diferentes elementos anatómicos que estructuran el organismo humano. En especial, la anatomía humana constituye la piedra angu- – 169 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Díaz, García, Palacios, Solórzano, Jarpa. Determinación... pp. 167-180 lar para comprender las estructuras que conforman la cabeza ósea como lo son el cráneo y la cara (Pansky, 1998). La región cráneo facial, por poseer diversos detalles individuales y variaciones significativas, representa la región del ser humano más compleja y complicada para su estudio, no solo por su constitución ósea sino también por contener elementos viscerales importantes tanto en su origen como en su función como lo son los órganos sensoriales, el sistema nervioso central (masa encefálica) y los órganos iniciales de los sistemas respiratorio y digestivo. (Guando, 1953) Desde el punto de vista descriptivo, el macizo facial es una entidad anatómica que forma parte de la cabeza ósea, ocupando la porción ventral o anterior de la misma. Está constituida por un conjunto de huesos 14 en total: 2 nasales, 2 lagrimales o unguis, 2 malares, 2 palatinos, 2 maxilares, 2 conchas o cornetes inferiores, 1 vómer y 1 mandíbula. Desde el punto de vista embriológico, la mayoría de los cambios más importantes que tienen relación con el desarrollo del macizo cráneo facial ocurren entre la quinta y séptima semana de vida prenatal. En este sentido, el proceso fronto nasal, el arco mandibular, y el arco hioideo, contribuyen en la formación de las estructuras faciales. El proceso fronto nasal da origen a la frente y a los procesos naso medial y naso laterales. El proceso naso medial participa en la formación del dorso y punta de la nariz, el septum nasal, la porción central del labio superior, y el paladar primario. Los procesos naso laterales forman las alas de la nariz. El arco mandibular da origen a los procesos que forman el maxilar superior y la mandíbula. El proceso maxilar forma las partes laterales del maxilar superior, el paladar secundario, la parte superior de las mejillas y las partes laterales del labio superior (Sadler, 1996). De igual manera, el arco mandibular también contribuye con la formación de la porción inferior de la cara y el cuerpo de la lengua. El arco hioideo contribuye a la formación del oído y da origen a los músculos de la expresión facial. El paladar se desarrolla a 170 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Díaz, García, Palacios, Solórzano, Jarpa. Determinación... pp. 167-180 partir de los procesos naso medial y procesos palatinos del maxilar superior (paladar primario y secundario). El paladar primario constituye el piso de las fosas nasales y se desarrolla durante la sexta semana de vida intrauterina. El paladar secundario se desarrolla posteriormente a partir de los procesos palatinos del maxilar superior y que se proyectan hacia la línea media palatina. Estos procesos palatinos adquieren una posición horizontal y crecen hasta fusionarse entre si y con el paladar primario y el septum nasal, trayendo como consecuencia la separación definitiva de la cavidad bucal de las fosas nasales (Sadler, 1996). Para el estudio de la cabeza ósea y específicamente en lo que se refiere al esqueleto facial, se emplean puntos precisos de ubicación anatómica, que dependiendo si son empleados sobre cráneos secos se denominarán puntos craneométricos, pero si son ubicados en seres vivos empleando como medio las radiografías, toman el nombre de puntos cefalométricos. Estos últimos son los que básicamente se utilizan en la clínica odontológica (Enlow, 1984). Para tener un conocimiento exacto de las dimensiones y forma de la cara, las investigaciones deben basarse en los estudios que sobre el macizo facial y el cráneo, establece la antropometría, de forma tal que se puedan obtener mediciones y que más tarde sirvan de base a la ortodoncia. Razón por la cual, se hace necesario establecer la verdadera relación que existe entre los puntos antropométricos y la cefalometría. Basado en lo anteriormente expuesto, se propuso realizar la siguiente investigación, para determinar si existen diferencias entre los índices faciales establecidos y los índices reales obtenidos entre los estudiantes de Odontología de la Universidad de Los Andes y nativos del estado Mérida, de tal manera que estos datos nos permitan determinar la tipología facial que predomina en la región andina merideña. Permitiendo, además, ampliar los conocimientos entre las diferentes poblaciones y, en consecuencia, conocer la variabilidad morfológica del hombre que puebla nuestro país, especialmen- – 171 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Díaz, García, Palacios, Solórzano, Jarpa. Determinación... pp. 167-180 te al hombre de la zona andina merideña (García, 1997). No cabe duda que debido a nuestra diversidad étnica, caracterizada fundamentalmente por el mestizaje, debería esperarse una variabilidad morfológica con características propias diferentes a la tipología facial hasta ahora, establecida. Materiales y métodos La muestra la conforma 60 individuos, 30 del sexo femenino y 30 del sexo masculino, estudiantes de la Facultad de Odontología en edades comprendidas entre los 18 y 25 años, oriundos del Estado Mérida y que no han sido sometidos a ningún tratamiento ortodóntico. Para las mediciones clínicas antropométricas, se empleó la metodología propuesta por Juan Comas, (1966). Se utilizó un compás de brazos curvos con puntas en forma de bolilla, marca Gneupel® y un vernier. Ambos instrumentos están calibrados en milímetros. Las mediciones se realizaron en horas de la mañana, para aprovechar la luz natural y fueron recopiladas en la ficha que se elaboró para tal fin. Una vez obtenidas estas mediciones, se emplearon los índices facial morfológico y facial superior, que ayudan a determinar la tipología facial. Resultados Los resultados obtenidos de las mediciones realizadas en la muestra seleccionada, se presentaron tomando en cuenta las medidas promedios de los índices faciales (morfológico y superior), edad y sexo. En total se estudiaron los índices de 60 personas: 30 del sexo masculino (50%) y 30 del sexo femenino (50%) con una edad promedio de 20. 1 años (tabla 1) 172 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Díaz, García, Palacios, Solórzano, Jarpa. Determinación... pp. 167-180 Tabla 1 Distribución de la muestra estudiada por edad y sexo EDAD SEXO SEXO MASCULINO FEMENINO 18 años 07 06 19 años 05 10 20 años 08 05 21 años 02 02 22 años 05 03 23 años 02 02 24 años 01 - 25 años - 02 X= 20.1 30 30 Índice facial morfológico: los valores obtenidos para el sexo femenino, se encuentran en un rango comprendido entre 57.1 mm y 91.6 mm con un valor promedio de73.2.mm. Para el sexo Masculino, los valores obtenidos arrojan resultados cuyos rangos están comprendidos entre 68.4 mm y 85.8 mm con un valor promedio de 78.82 mm (tabla 2). – 173 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Díaz, García, Palacios, Solórzano, Jarpa. Determinación... pp. 167-180 Tabla 2 Índice facial superior (mm). Sexo femenino y masculino SEXO SEXO FEMENINO MASCULIN O MEDIDA Nº DE CASOS % MEDIDA Nº DE CASOS % 57.1 mm 01 3.3 68.4 mm 02 6.6 60.7 mm 01 3.3 69.2 mm 01 3.3 61.5 mm 01 3.3 72.2 mm 03 10 64.2 mm 01 3.3 73.3 mm 01 3.3 64.5 mm 01 3.3 73.6 mm 01 3.3 69.2 mm 04 13.3 77.7 mm 08 26.6 71.4 mm 05 16.6 78.5 mm 01 3.3 75.0 mm 02 6.6 78.9 mm 01 3.3 76.9 mm 07 23.3 82.3 mm 02 6.6 77.0 mm 01 3.3 83.3 mm 04 13.3 78.5 mm 03 10 84.6 mm 01 3.3 79.0 mm 01 3.3 88.8 mm 02 6.6 83.3 mm 01 3.3 85.8 mm 03 10 91.6 mm 01 3.3 - - X= 73.2 mm 30 100 % X= 78.83 mm 30 100% Índice facial superior: En los datos arrojados, se observa, que en el sexo femenino, los resultados se ubican en rangos comprendidos entre 28.5 mm y 53.8 mm con un valor promedio de 39 8mm mientras que en el sexo masculino, los resultados se ubican en rangos comprendidos entre los 30.7 mm y 50.0 mm con un valor promedio de 36.52 (tabla 3). 174 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Díaz, García, Palacios, Solórzano, Jarpa. Determinación... pp. 167-180 Tabla 3 Índice facial superior (mm). Sexo femenino y masculino. SEXO FEMENINO MEDIDA SEXO MASCULIN O Nº DE CASOS % MEDIDA Nº DE CASOS % 28.5 mm 02 6.6 30.7 mm 01 3.3 30.7 mm 03 10 31.2 mm 02 6.6 32.1 mm 01 3.3 32.2 mm 01 3.3 33.3 mm 01 3.3 33.3 mm 04 13.3 35.7 mm 06 20 35.7 mm 09 30 38.0 mm 01 3.3 38.4 mm 03 10 38.4 mm 03 10 40.0 mm 02 6.6 41.6 mm 01 3.3 42.8 mm 03 10 42.8 mm 03 10 46.1 mm 02 6.6 43.0 mm 01 3.3 50.0 mm 03 10 46.1 mm 03 10 - - - 50.0 mm 02 6.6 - - - 53.8 mm 03 10 - - - X= 39.8 mm 30 100% X= 36.52 mm 30 100% Los valores promedios de estos índices faciales se expresan en la tabla 4: – 175 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Díaz, García, Palacios, Solórzano, Jarpa. Determinación... pp. 167-180 Tabla 4 Valores promedios obtenidos (m.m.). Sexo femenino y masculino INDICE SEXO FEMENINO SEXO MASCULINO FACIAL MORFOLÓGICO 73.2 mm 78.83 mm FACIAL SUPERIOR 39.8 mm 36.52 mm Análisis y discusión de los resultados Una vez obtenido los resultados, se procedió a realizar el análisis de los mismos, tomando en cuenta los parámetros de clasificación de Comas, J. (1966), Konh de Brief (1972), Sicher, H. (1978) y Silva (1989). Índice facial morfológico. Los resultados de la medición de este índice, expresados en la tabla II, demuestran que para el sexo femenino, existen valores bimodales en cuanto a la mayor frecuencia ya que la misma fue para los rangos de 76.9 mm y 71.4 mm, en 7 y 4 casos respectivamente. Si se toma en cuenta el valor promedio obtenido (73.2 mm) podemos observar que, según Juan Comas (1966), corresponde a caras del tipo cameprosopas o euriprosopas (tabla 5), encontrando similitud entre la moda y el promedio con respecto al rango facial. Paralelamente, al ser comparado dicho promedio con el de Silva (1989) el cual es de 83.33 mm encontramos que los valores difieren e igualmente si se compara con los valores de Sicher (1978) y de Rodríguez (1987), se observa que el tipo de cara es Hipereuriprosopa o cara muy baja o ancha. Con respecto al sexo masculino, los datos reportados para este índice, demuestran que la mayor frecuencia se observa en 8 casos (32%) con un valor de 77.7mm. El valor promedio obtenido (78.83 mm).correspondiendo según la clasificación de Comas (1966) y Silva (1989) al tipo de cara cameprosopa (Ver tabla 5), encontrándose a su vez, similitud entre la moda y el promedio obtenido. Sicher (1978) y Konh de Brief (1972) clasifican las caras como hipercameprosopas, cuyo índice facial morfológico tiene este promedio. 176 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Díaz, García, Palacios, Solórzano, Jarpa. Determinación... pp. 167-180 Tabla 5 Índice facial morfológico. Sexo femenino y masculino Nº DE TIPO DE PROMEDIO CARA CASOS OBTENI DOS Obtenido SEXO SEXO FEMENI MASCULI NO NO Sexo Femenino Sexo Masculino 29 24 73.2mm 78.83mm 0 06 01 0 Patrón de en la clasificación investigac ión EURIPROSOPA MESOPROSOP A LEPTEPROSOP A x- 83.9 84 – 87.9 88 – x Índice facial superior: para el sexo femenino, este índice, reporta un valor promedio de 39.8 mm, ubicándolo dentro de la clasificación de comas (1966) como caras anchas o eurienos. Tanto la moda como el promedio obtenido son coincidentes con el patrón de clasificación (tabla 6). En lo que respecta al sexo masculino, considerando el patrón de clasificación, el valor promedio (36.52 mm) se corresponde con el tipo de cara ancha o eurieno (Ver tabla 6). Los datos reportados indican que la mayor frecuencia se aprecia en 9 casos (36%) con un valor 35.7 mm (tabla 6). – 177 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Díaz, García, Palacios, Solórzano, Jarpa. Determinación... pp. 167-180 Tabla 6 Índice facial superior. Sexo femenino y masculino PROMEDIO Nº DE TIPO DE CASOS CARA OBTENI DOS Patrón de Obtenido clasificación en la investigac SEXO SEXO FEMENI MASCULI NO NO ión EURIENOS X- 47.9 MESENOS 48 – 52.9 LEPTENOS 53 – X Sexo Femenino Sexo Masculino 39.8 mm 36.52mm 25 27 02 03 03 0 Conclusiones Basados en la interpretación de los datos obtenidos del presente estudio antropométrico, se concluye lo siguiente: 1. El índice facial morfológico, presenta un valor promedio mayor para el sexo masculino, mientras que para el índice facial superior, este valor es mayor para el sexo femenino. 2. Los promedios de las medidas faciales para el índice facial morfológico tanto en el sexo femenino como el masculino, para la altura facial (nasión- gnatión) y ancho facial (diámetro bicigomático) al conjugarse determinan como tipo de cara euriprosopa o cara ancha. 3. A pesar de las limitaciones en el análisis estadístico, los resultados nos hacen pensar en la posibilidad de observar, en la población merideña, una variabilidad morfológica con características propias, diferentes a las tipologías faciales hasta ahora establecidas. Lo anterior podría apoyarse en la condición étnica de nuestros pueblos, caracterizada fundamentalmente por el mestizaje. 178 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Díaz, García, Palacios, Solórzano, Jarpa. Determinación... pp. 167-180 4. Estamos conscientes que los resultados del presente trabajo no son tan contundentes desde el punto de vista estadístico, sino que más bien deben contemplarse como una primera aproximación al estudio de la variabilidad morfológica del tipo de cara del hombre andino merideño. Nota * Este fue entregado en marzo de 2005 evaluado y arbitrado en abril del mismo año (nota del Comité Editorial) Referencias bibliográficas ARSUAGA, J.L., y Martínez, I. 2001. La especie elegida. La larga marcha de la evolución humana. Ediciones Temas de Hoy, S.A. Madrid, España. BERMÚDEZ DE CASTRO, J.M. 2002. El chico de la Gran Dolina. En los orígenes de lo humano. Editorial Critica, S.L. Provença, Barcelona. BOYD, R. y Silk, J. 2001. Cómo evolucionaron los humanos. Editorial Ariel, S.A. Barcelona. pp. 452- 479. COMAS, J. 1966. Manual de Antropología Física. Instituto de Investigaciones Históricas. Universidad Nacional de México. México. pp. 380-394. ENLOW, D.1984. “cefalometría”, en: crecimiento maxilofacial. 2da ed. editorial interamericana. México. pp. 308-349. FOOTE, M. 1997. The evolution of morphological diversity. Annu. Rev. Ecol. Syst. 28, 129–152 GARCÍA, C. 1997. Antropología dental: estudio en un caso de momificación. La ovejera, estado Mérida, Venezuela. 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Mythical characters: an approach to the language of a magicalreligious micro universe Alvarez Muro, María Alexandra Autor: Páginas/Colación: 181-205 En: / Boletín Antropológico Vol 2 - Num 64 enero - abril, 2005 Ver artículo en PDF (0.2 Mb) Los personajes del mito: aproximación al lenguaje de un microuniverso mágico-religioso Alvarez Muro, María Alexandra Resumen El presente trabajo estudia las creencias expresadas en textos extraídos de un corpus de lengua hablada (Domínguez y Mora 1998). Tanto a partir de lo dicho por los hablantes, de marcas lingüísticas tales como repeticiones, y de los marcadores de consenso y de enganche, se infiere la actitud de los entrevistados frente a las creencias que reportan. Se estudia la cohesión y la coherencia discursivas y se analiza la posición de las figuras objeto de culto en el micro universo mítico religioso. Según sus funciones, éstas se aparejan de la manera siguiente: el Divino Niño y el encanto, y el muerto milagroso y el espanto. Se establece luego un cuadrado lógico para reunir a todos los elementos analizados. Este estudio contribuye al conocimiento de la identidad y la ideología regionales a partir del lenguaje. Mythical characters: an approach to the language of a magicalreligious micro universe Alvarez Muro, María Alexandra Abstract Beliefs expressed in texts taken directly from spoken language (Domingo y Mora 1998) are studied. Besides oral communication, linguistic phenomena such as repetition, as well as such parameters as the consensus of belief and concepts of engagement come under consideration. Comprehension and coherency of discourse are discussed along with cult figures pertinent to the magical religious realm. In accordance with their particular function figures such as the Sacred Child and concepts of enchantment, as well as miraculous death and apparition are discussed. A logical framework which includes the above mentioned elements and their analysis is put forward. The paper contributes to the understanding of ethnic identity and regional ideology which is transmitted by means of language. Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 Los personajes del mito: aproximación al lenguaje de un micr ouniv erso mágico-r eligioso* microuniv ouniverso mágico-religioso* ALEXANDRA ÁLVAREZ Universidad de Los Andes RESUMEN El presente trabajo estudia las creencias expresadas en textos extraídos de un corpus de lengua hablada (Domínguez y Mora 1998). Tanto a partir de lo dicho por los hablantes, de marcas lingüísticas tales como repeticiones, y de los marcadores de consenso y de enganche, se infiere la actitud de los entrevistados frente a las creencias que reportan. Se estudia la cohesión y la coherencia discursivas y se analiza la posición de las figuras objeto de culto en el micro universo mítico religioso. Según sus funciones, éstas se aparejan de la manera siguiente: el Divino Niño y el encanto, y el muerto milagroso y el espanto. Se establece luego un cuadrado lógico para reunir a todos los elementos analizados. Este estudio contribuye al conocimiento de la identidad y la ideología regionales a partir del lenguaje. Palabras clave: análisis del discurso, ideología, micro universo mítico religioso. Mythical characters: an approach to the language of a magical-religious micro universe ABSTRACT Beliefs expressed in texts taken directly from spoken language (Domingo y Mora 1998) are studied. Besides oral communication, linguistic phenomena such as repetition, as well as such parameters as the consensus of belief and concepts of engagement come under consideration. Comprehension and coherency of discourse are discussed along with cult figures pertinent to the magical religious realm. In accordance with their particular function figures such as the Sacred Child and concepts of enchantment, as well as miraculous death and apparition are discussed. A logical framework which includes the above mentioned elements and their analysis is put forward. The paper contributes to the understanding of ethnic identity and regional ideology which is transmitted by means of language. Key words: discourse analysis, ideology, micro universe, mythical-religious. – 181 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 Introducción Además de las creencias católicas tradicionales que se encuentran en la población merideña, el visitante que llega a tierras andinas percibe inmediatamente un clima sobrenatural. Aquí habitan encantos en las lagunas, las cosas no son lo que parecen y, además, el tiempo religioso parece marcarse más que en otras regiones del país: hay rituales que no se conocen en el resto de Venezuela, como es el caso de las paraduras, y prácticas medicinales que revelan una concepción diferente del cuerpo humano, de las enfermedades y de las formas de aliviarlas. En lo relativo al mundo espiritual, ya en otra oportunidad (Álvarez, en prensa) nos hemos referido a los rituales que acercan al ser humano a los espacios divinos. Aquí estudiaremos, a partir de textos de la oralidad, las creencias que los hablantes merideños tienen sobre lo mágico-religioso, refiriéndonos más específicamente a los objetos de culto, esto es, a las “personas” que forman parte del mundo sobrenatural. Entendemos como figuras mágico religiosas a aquellas que son objeto de veneración, respeto, culto, o simplemente miedo, que pueblan los relatos merideños. Nos valemos, para ello, de lo dicho por los hablantes de un corpus de materiales grabados para otros fines. El estudio de las creencias y valores que subyacen el discurso contribuye al conocimiento de la cultura regional y nacional. De ahí la importancia de la aplicación de la lingüística a estos temas. Problema Los estudios antropológicos realizados en Mérida conducen al conocimiento de que, en esta zona, lo mágico religioso organiza el tiempo y el espacio de los andinos. En su paradigmático estudio, Clarac (2003) muestra cómo las familias se distribuyen el espacio de las localidades urbanas, por ejemplo en La Pedregosa, que es el centro de su interés, siguiendo la dualidad que la autora atribuye a la cultura regional.1 182 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 La autora describe, además, el tiempo religioso que dura casi la mitad del año: “Del primero de octubre al tres de febrero encontramos los tiempos fuertes, mientras que los tiempos débiles van del cuatro de febrero al treinta de septiembre, con sólo un paréntesis entre el quince y el veintidós de mayo (p. 223). En efecto, Clarac encuentra un “hilo conductor” desde las fiestas de San Rafael, en octubre, que desembocan en los bailes de San Benito, de diciembre a enero, los cuales están “estrechamente asociadas” a las paraduras de enero que, a su vez, culminan en la fiesta de la Candelaria, el 2 y 3 de febrero (p. 223).2 Otros trabajos hacen análisis del significado de elementos del área andina, como el de Molina Molina (1992) sobre encantos en la zona rural, de la coexistencia en ellos de la esfera de lo real y de lo irreal; la aventura del héroe que transgrede el límite de lo cotidiano para buscar el trofeo (el buey que había perdido) en el mundo prohibido de las lagunas. Muy interesante es también el análisis sociológico y semiótico que de los muertos milagrosos hace Franco (2003), un culto muy arraigado en todo el país. El presente estudio pretende sistematizar el micro universo de los personajes de estas creencias basándonos, claro está, en los conocimientos sobre la ideología de la zona que nos confieren los anteriores citados, pero partiendo de lo que dicen los hablantes de nuestro corpus, merideños de la zona urbana. Metodología El estudio se hizo a partir de fragmentos del corpus sociolingüístico de Mérida, recogido en Domínguez y Mora (1998). Se trata de grabaciones y transcripciones de entrevistas semi-dirigidas, conducidas por hablantes también merideños. Para la elección de los textos, tomamos aquellos en que se hacía mención de elementos mágico-religiosos y que, además, nos parecieron representativos del discurso de las creencias que se plasma en el conjunto de materiales arriba mencionados. Tomaremos en cuenta la religión y el mito que, según Clarac (2003), son respectivamente: – 183 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 Toda actividad que implica: a) La creencia en seres sobrenaturales capaces de favorecer o desfavorecer al hombre, b) ceremonias (rituales) en honor a tales seres a fin de aplicarlos y de atraer sus favores. Tales ceremonias incluyen: actos de ofrenda, sacrificios, bailes, cantos, música, rezos, oraciones, utilización de “contras” (es decir, de objetos o palabras de protección), lenguaje sagrado. (Clarac 2003: 29) Llamaré “mito”, no sólo al mito relatado [...] sino también “todas las creencias que implican una práctica simbólica muy viva y relacionada de algún modo con el mito de origen. Tales creencias constituyen lo que llamo “mito vivido”. (Clarac 2003: 29) En el análisis, no distinguimos entre lo dicho por entrevistados y entrevistadores dado que ambos pertenecen a la misma comunidad de habla, por lo cual suponemos que comparten la cultura andina y, a la vez, su ideología religiosa, esto es, el conjunto de representaciones y prácticas del grupo relativas, en este caso, a la religión que, a su vez, puede definirse como un sistema de creencias. Las ideologías se distinguen de las culturas, según van Dijk (1998) entre otras cosas porque las primeras son globales y agrupan a un conjunto mayor de personas y las segundas son distintivas de un grupo particular.3 Por otra parte, porque los entrevistadores hicieron su trabajo buscando particularidades lingüísticas, por lo cual no pusieron atención a los temas, que les servían más bien de instrumento para elicitar habla espontánea. Ellos les explicaron a los hablantes que buscaban rescatar la tradición merideña, por lo cual les preguntaban cómo era la ciudad antiguamente y qué sabían de sus costumbres y tradiciones; el estudio buscaba temas que hicieran hablar a los entrevistados, suponiendo que mientras más se interesaran en los tópicos, menos atención pondrían al estilo. Empleamos, en el análisis, los siguientes conceptos: cultura, como el conjunto de esquemas mentales y prácticas sociales de una comunidad; ideologías, como sistemas de creencias de un grupo, creencias, como unidades de información o proposiciones (van 184 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 Dijk, 1998). Buscamos elementos del significado, y nos basamos para ello en los rasgos textuales, procediendo más o menos en el siguiente orden: 1. Revisamos las cadenas cohesivas formadas por elementos léxicos repetidos textualmente, o como sinónimos que conferían unidad al texto pero que, además, nos permitían observar el énfasis que hacían los hablantes en ciertos temas. 2. Estudiamos la cohesión para determinar cuáles eran las relaciones establecidas por los hablantes y, por lo tanto, qué elementos se integraban en los diferentes discursos, en otras palabras, con la finalidad de observar los elementos con los cuales se formaba un mundo coherente 3. Describimos las modalidades epistémicas (saber), deónticas (deber), aléticas (verdad) que caracterizan los textos; ello nos permitió conocer cuál era la posición del sujeto de la enunciación con respecto a los objetos que presentaba. 4. Hicimos un esbozo de los semas que integraban cada uno de los lexemas que denotan los personajes del mundo mágico-religioso, tal y como se presentaban en los textos estudiados; 5. A partir de elementos que aparentemente constituían la isotopía de las creencias, intentamos la construcción de hipótesis sobre el micro universo de las creencias mágico religiosas en Mérida. 6. Se procedió finalmente a elaborar un cuadrado lógico que permitiera situar los elementos del mundo mágico religioso en un todo significante, a partir de las relaciones que estos elementos parecen tener entre sí. Análisis Esta sección estará dedicada a la descripción y análisis de los personajes más relevantes del mundo mágico religioso de los hablantes merideños, según aparecen en los textos estudiados. Nos referiremos, en primer lugar, al Divino Niño y a los encantos y, luego, a los espantos y muertos milagrosos. – 185 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 1. El divino niño Cuando nos referimos al niño, estamos hablando del niño del pesebre al cual, desde el 2 de enero hasta el 2 de febrero, día de la Virgen de la Candelaria, se le hacen “paraduras”. Ellas consisten en rituales, más o menos complicados, en el sentido de que pueden o no constar de varias etapas sucesivas y que tienen como finalidad poner al niño de pie en el pesebre, por entenderse que se trata de un niño mayorcito, que puede caminar y que ya está lleno de sabiduría.4 Las paraduras varían, no solo en cuanto a los tiempos realizados, sino también a la pompa con que se celebran y van desde las rezadas hasta las cantadas, ofreciéndose en ellas respectivamente bizcochuelo y vino o, además de esto, grandes comilonas. Obsérvese el siguiente texto (1): (1) Enc.: ¿Y cómo eran las paraduras? Hab.: ¿Las paraduras de niño? También... eso... Enc.: ¿Cómo hacían... cómo es la fiesta de la paradura? Hab.: Ah, la fiesta era... bueno, hay gente que acostumbran, al niño, a hacerle... su rosario cantado... cantado y rezado, por ejemplo, donde un hermano mío que... que... él ya tiene acostumbrado el... así, entonces allá le rezan que si... para el niño, que si otro para San Benito, que si otro para las ánimas, y así... le cantan, le rezan y... tocan, pero, como se dice el dicho, hubo un año que... no fueron los músicos allá, no lo pudieron hacer, entonces hicieron el rosario ahí... rezado y eso es muy malo, cuando acostumbran al niño a hacerle su fiesta... cantado, que le tienen su fiesta de... cantado, con sus veladoras, con sus... músicas, con su paseo... y tiene... entonces ya después que se acostumbra le dicen que le cae una... como se dice... como una pava la... a la casa, o sea, se empava la gente, o sea, ya como que no ve una, porque tienen a ese niño ya acostumbrado a... hacerle su... fiesta, ya de ahí... no es como a uno, por ejemplo yo aquí no lo tengo acostumbrado ni e... se reza su rosario, e... se limita una a... a rezar, se reza su rosario, se da su bizcochuelo y eso... y lo paseo por aquí mismo... de paradura... (18) Como puede observarse, la hablante –que seguramente hará paradura, como es habitual en todas las casas de Mérida– se separa 186 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 de aquellos que le hacen el rosario cantado y rezado, como su hermano y quienes, en la misma fiesta, aprovechan para rezarle a San Benito y a las Ánimas, abarcando entonces todos estos rosarios la misma situación comunicativa (Hymes 1974); esto revelaría la idea sostenida por Clarac (2003) de que hay un hilo conductor entre todo lo que aquí se celebra. Textualmente afirma después que “se limita” a rezar el rosario, a dar bizcochuelo y pasear al niño por aquí mismo, de paradura. Se da una cadena cohesiva en la idea de: fiesta –que se repite varias veces; rosario cantado... cantado y rezado, le cantan, le rezan y... tocan, fiesta de... cantado, con sus veladoras, con sus... músicas; con su paseo... y otra en la idea del “límite” esto es rezar, rezar el rosario, bizcochuelo, y paseo por aquí mismo, de paradura. Los discursos subyacentes a ambas cadenas se oponen entre sí. Los rituales más elaborados parecen corresponder a la “promesa” y por lo tanto conllevan una obligación: de repetir el ritual siempre de la misma manera. Por el contrario, el incumplimiento de la misma acarrea una sanción negativa –no es que el niño castigue, sino que a la gente le cae una... como se dice...como una pava la...a la casa, o sea, se empava la gente... Sin embargo, a pesar de lo dicho, esa figura de niño tiene características humanas y es que es ese niño particular el que se acostumbra a la fiesta. En otras palabras, el niño celebrado en la paradura tendría cierto carácter totémico, puesto que viene a representar a la familia a la cual pertenece, en vez de tratarse de una imagen del Niño Dios que está en el cielo. De ahí también la disyunción del sujeto de la celebración, puesto que la aceptación del mandamiento acarrea una obligación, por parte del celebrante, de continuar la celebración a partir de ese momento. La hablante anterior se niega a la celebración del contrato con el Niño, al igual que el hablante del texto (2) que cito a continuación, que ni va a paraduras, ni sabe los versos, ni tampoco sabe hacer bizcochuelo, alimento principal del conjunto de dones repartidos entre los asistentes en estas celebraciones. El tercero de los textos de – 187 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 paraduras (3) refiere a los mismos discursos, del mandamiento de la fiesta de donde la obligación de celebrarla, y de aquellas paraduras que se eximen de ese contrato: digo yo que es como promesa que ofrece la gente. (2) Enc.: ¿Usted sabe algún versito de esos? Hab.: No, nada, de eso sí no sé yo... Enc.: Ande, cánteme uno de eso... Hab.: No... no sé... Enc.: ... de cuando va a las paraduras... Hab.: ... no... no voy, yo no voy... y entonces ahí viene el brindis... el brindis, y le dan... vino y este... el bizcochuelo. Enc.: ¿Usted sabe hacer bizcochuelo? Hab.: No, no, tampoco sé hacer bizcochuelo. Y ahorita está muy caro eso [...] (11) (3) Enc.: Dicen que es malo ¿no? si uno no hace la paradura, o sea que no se debe... Hab.: ¿Sí?... sí, bueno nosotros a la... hacemos es rezar el rosario y... el bizcochuelo y el vino que se brinda, pero así fiesta digo yo que es como promesa que ofrece la gente... Este Niño, que en principio es divino, adquiere algunos rasgos humanos: se encapricha, de alguna forma, por la fiesta. Sin embargo, también acepta dones, como divinidad que es, que forman parte del ritual positivo de la fiesta (Durkheim 2001). Recuérdese que, en los pesebres más tradicionales, se le ofrecen frutos al niño que se van renovando para que no se dañen, además de los dones que se reparten el día de la paradura. El Niño va a favorecer a los celebrantes, a su vez, con bienestar a lo largo del año: con el beso del Niño, se pide un deseo. No entraremos en detalle sobre los orígenes de esta celebración (para ello, consúltese Clarac 2003). Sin embargo, puede decirse que la celebración de la Paradura está oficializada, y es aceptada por la iglesia como un ritual católico de la zona. 188 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 Queda por mencionar un detalle que parece importante por ser la esencia de la celebración como es el hecho de la elevación del niño hacia el cielo. Así lo corroboran algunos de sus versos: Paren ese Niño párenlo ligero que llegó el momento de subirlo al cielo. Al Niño Jesús váyanlo subiendo San José y la Virgen lo están recibiendo. (Clarac 2003: 251) 2. Encantos No hemos encontrado, en los antecedentes, ninguna definición de “encanto”. Limitémonos a decir que son divinidades acuáticas de las lagunas andinas y a repetir aquel texto rescatado por Molina Molina (1992). Encanto es como que en el páramo han tantas lagunas, hay tantas cosas. Y en el páramo hay un viejo, y no serán uno sino dos, que son los legítimos dueños del páramo, y esos son los que mandan en las lagunas [...] pero el que está para encantarse por lo menos va uno a un páramo désos y puede haber un lagunón del tamaño del centro de Mucunután, y uno si está para irse a encantar, no permita Dios, uno no ve laguna sino un caserío de teja [...] (p.36).5 Se observa la relación necesaria existente entre los encantos y las lagunas, lo que explica las numerosas alusiones que hace el texto que analizaremos al agua, las acequias y los manantiales o “manas”; por otra parte también a los juncos –el junco aquél– que crece a orillas de la laguna de Lagunillas. Todos ellos forman una cadena cohesiva que remite a una isotopía donde el encanto se nombra apenas: lo que se nombra son los elementos unidos a él. Esta agua baja, como lo dice la hablante: las calles eran, bueno pues, – 189 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 empedradas y por la mitad era una acequia que bajaba. Porque el agua mítica de las lagunas baja, siempre. Franco (1999:123) sugiere que algunos espíritus encantados parecen representar a las fuerzas de la naturaleza. Queremos aquí hacer una diferencia entre los “encantos”, seres sobrenaturales, y los “encantados” o personas desaparecidas por la acción de los encantos. En la cita de Franco entendemos que esos seres que representan las fuerzas de la naturaleza son los encantos. Sobre los segundos, ha dicho: Los encantados son personas que “parecen haber sorteado la muerte por ‘encantamiento’ (Franco 1999:122). El texto se caracteriza por el rapport que se establece entre entrevistadora y hablante, puesto que aquella, desde un principio, afirma que Mérida es muy mística. Marcas del habla del grupo, como es el uso del usted de solidaridad (Álvarez y Carrera, en prensa), así como los marcadores de interlocución ¿no? (Domínguez 2005), de consenso (tradiciones así) (cf. Álvarez 2002) y las marcas de asentimiento (mjm) señalan un conocimiento compartido y un acuerdo de veracidad sobre el tema. Con ello se manifiesta la modalidad epistémica (saber/no saber). (Casamiglia y Tusón 2000: 177) Contrario a los textos anteriores sobre el Niño, ésta es habla reportada, en la cual el hablante no asume la responsabilidad de lo dicho: se basa en la autoridad, la de la suegra mía, o la de las gentecitas de antes. Sin embargo, es pertinente observar el cambio de tiempo, que sugiere la actualidad de esta creencia: si bien la referencia a los manantiales remontan al tiempo mítico, que se reporta generalmente en pretérito imperfecto, aquí se emplea el presente: Mérida está sobre agua, nosotros estamos flotando, aquí hay mucha agua debajo. Ello implica que esta es una verdad que todo el mundo conoce, puesto se presenta como un problema para la ingeniería del lugar: para construir hay que drenar y hay que hacer un trabajo especial para drenar aquello. 190 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 (4) Enc 1: [...] Mire y... y aparte, así, de las tradiciones, cosa que a mí me interesa una... siempre me echan muchos cuentos que de aquí en... que Mérida es muy mística, muy... muy que pasan cosas muy extrañas ¿usted qué sabe? Hab.: ¡Ay¡ eso a mí también me... me hablaban, sobre todo la suegra mía... Enc. A: Mjm. Hab.: ...me hablaba muchísimo de... tantas cosas que acontecían aquí, de que en... tiempos de antes ¿no? las calles eran, bueno pues, empedradas y por la mitad era una acequia que bajaba... Enc. A: Mjm. Hab.: Por eso era que aquí en Mérida habían muchos manantiales, la gente les decía manas... las gentecitas de antes “ay, hay una mana y otra mana, y otra mana”, y claro, usted sabe lo lo que son manantiales ¿no?... Enc. A: Mjm. Hab.: ...esos los taparon, por eso... Mérida está sobre agua, nosotros estamos flotando, aquí hay mucha agua debajo, en todas partes ustedes habrán oído nombrar... a los edificios, a los principales edificios que han hecho aquí, que han tenido que secar, hacer un trabajo especial para que esa agua se... e... para drenar aquello ¿no?... Enc. B: Sí. Hab.: Porque hay mucha agua debajo de... de Mérida. Y... este... y asunto de... e... en cuanto a eso ¿no?, a situación, y... a tradiciones así... habían encantados, los cuentos, ¿no?... (22) Otro texto, del mismo corpus (5), refiere al hecho –una cosa rara– de que la gente se ahoga en la laguna de Lagunillas. El detalle verosímil –más abajito del Liceo Libertador–, el hecho de que no se haya podido construir en ese terreno, de la existencia del junco aquel, habla nuevamente de la veracidad del mito. El tiempo empleado no es el pretérito imperfecto de la irrealidad, sino el perfecto de la realidad, y el presente –nada han podido construir ahí, es hondo, es una ciénaga completa...es lo mismo que sale en la laguna de Lagunillas. Aquí hay una evaluación por acción paralela (Labov 1983) y a la vez un argumento por analogía: si el pasto es el mismo que en Lagunillas, se trata del mismo fenómeno sobrenatu- – 191 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 ral. La hablante considera esto como una “prueba” de que hay agua, eso es una prueba más que Mérida tiene mucha agua... además del hecho de que, en los sótanos de la misma Catedral, se haya encontrado agua, lo cual reúne el mundo mítico con el mundo religioso. La isotopía del agua es cercana a la isotopía del peligro latente, en esa unión subterránea y misteriosa con la Laguna de Lagunillas; de modo que el agua, lo húmedo representa una amenaza permanente, –muy peligroso, sí sí sí sí sí ¿da miedo no?–. Con ello se cierra la idea de verdad, de cosa rara, pero real; la evidencia de los desaparecidos y el hecho de que bajo la catedral haya agua constituyen pruebas de la existencia de los encantos. Pero además, de la continuidad del hecho, lo durativo: así como eran antes los manantiales, todavía está Mérida sobre agua y lo seguirá estando: las lagunas y sus encantos representan un peligro para la población que no tiene remedio, más que a través de la prohibición de acercarse a ellas, así como de no intentar rescatar a los niños que en ellas desaparecen porque, según Clarac (2003), ellos reaparecerían más tarde convertidos en mohanes). (5) Enc. A: Y Lagunillas también, ¿usted no conoce Lag... Hab.: Sí, ¿cómo no? Enc. A: ¿Sí? Hab.: Sí, allá lo tradicional es... la gente que se ahoga en la laguna, ¿no? Enc. A: ¡Ah... [[risas]] Hab.: ¡Ay!... y... y una cosa rara que hay aquí, por ejemplo, más abajito del Liceo Libertador... hay una esquina que no han construido ¿no?, más al... más abajito de la cancha [...] Hab.: ...del Libertador, una cuadra abajo, hay una esquina... donde no han construido y hay pura... puro pasto y esas es... ese pasto que hay ahí es el mismo que hay en la laguna de Lagunillas... y no han podido construir porque aquello el agua es abundante... y muy profundo, total de que eso tiene una comunicación... con la laguna de Lagunillas. Enc. A: Con la laguna de Urao. 192 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 Hab.: Ajá, yo recuerdo que había una prefectura, una quinta muy bonita... y la tumbaron que para hacer un edificio y resulta que nada han podido construir ahí, es hondo, aquello es una ciénaga [ciénega] completa, muy peligroso, y ya les digo que la... lo... lo que se produce ahí... es lo mismo que sale en la laguna de Lagunillas, el junco aquel... Enc. A: Mjm. Hab.: ... la enea, matas propias, características de allá de la laguna. Sí, eso es una prueba más que en Mérida tiene mucha agua... Enc. A: Mucha agua. Hab.: ...subterránea. Enc. B: Bueno, se dice que e... por el... en la catedral uno incluso llega a bajar a los sótanos y llega al agua. Hab.: Está húmedo, sí sí sí sí sí ¿da miedo no? Enc. B: Sí. ¿Y cómo harían para armar el tremendo edificio ese que hicieron donde estaba el mercado? Enc. A: Ah, verdad, el... Hab.: De ahí no se ha oído nada. Enc. A: No, de ahí sí han... yo he oído que han tenido que sacar agua... Hab.: ¿Del edificio ese? Enc. A: Sí, porque tiene una especie como de sótano... Hab.: Ajá. Enc. A: ...y han... y tienen que... que drenar... Hab.: Bueno, lo mismo que han utilizado en otros... una especie de... un método... una técnica, pues, en ingeniería ¿no?, que... tratan de... drenar el lugar y van tapando, yo no sé; y en realidad ¿quién viera eso, no? Enc. A: Ay, sí. (22) Hasta aquí hemos descrito a dos personajes del micro universo mítico religioso merideño: el Divino Niño y el encanto, este último confundido con el agua en sus diversas formas. Además de la asociación del subir y del bajar, o de arriba y abajo con lo eufórico y lo disfórico (Greimás 1987:212), ambos personajes parecen aparejarse en virtud de sus funciones, protectora del primero y amenazante del segundo.6 Ambos personajes comparten el ser sobrenaturales, pero se oponen por su duratividad en su contacto con éstos: – 193 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 el Niño, porque protege a lo largo de todo el año, en un tiempo circular que recomienza el día de Navidad todos los diciembres; el segundo, porque sale reiterada pero puntualmente de las lagunas, charcos y pozos para robarse a la gente. Es interesante observar como la aparición del encanto es puntual, mientras que la presencia del agua es permanente; de ahí que consideramos al encanto como –durativo en el Cuadro 1. Hay otras oposiciones, además de éstas, como hemos visto: el mandamiento que emana del contrato con el Niño –de celebrar las paraduras– y la prohibición del contrato con la laguna, que veda, para los humanos, acercarse a ella so pena de una sanción negativa. Además, está la protección y desprotección que representan, respectivamente, ambas figuras que se refleja en la relación eufórica con el Niño y disfórica con el encanto. También hay una oposición que podría considerarse como social: el primero está oficializado, el segundo no pertenece a la iglesia católica. Cuadro 1. La pareja del Divino Niño y el encanto Divino Niño Encanto -humano +durativo +oficial Mandamiento Subir Eufórico -humano -durativo -oficial Prohibición Bajar Disfórico 3. Espantos Los espantos habitan también el espacio mítico merideño. Sin embargo se trata de manifestaciones ocasionales y súbitas, o puntuales, o tensas7 (Comrie 1989; Barros 2001, citando a Zilberberg 1981 respectivamente), que aterrorizan a quienes se enfrentan a ellas: “espantados” llama Clarac (2003) al que “recibió un susto por un espanto”, pudiendo ser tal espanto una especie de fantasma, algún muerto, o un mal espíritu del aire” (p.399). 194 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 Para Franco (2001), los espantos son visiones aterradoras de difuntos que todavía deambulan por lugares donde estuvieron y consideran propios y que, de alguna manera, los defienden contra la invasión de los vivos. Son almas atormentadas de personas que en vida, o bien cometieron crímenes, o bien murieron violentamente. Lo que llama más atención de los relatos de espantos en el corpus merideño es la actitud que asumen los hablantes ante ellos. La mayoría no “sabe” realmente sobre los espantos (6,7,8); solo una hablante dice haber sido espantada cuando niña (9). Su conocimiento se debe a los relatos de otros, y a los indicios que otros perciben. (6) Hab.: No sé, no sé si será o no verdad... que aquí espantan. No sé. Enc.: Y a usted hasta ahorita... Hab.: No a mí no me han espantado. (12) (7) Hab.: Sí, pero... pero no... no tengo nada de cierto. Enc.: Hasta ahorita usted.. Hab.: No, yo no... (12) (8) Hab.: [...] Pero... los que han estado aquí... bueno han dicho que los... que los han espantado, que han escuchado bulla y eso. Enc.: ¿Verdad? Hab.: No sé... que será de cierto eso. (12) La narración es evaluada por la acción paralela, esto es, una acción que señala lo terrible que fue el hecho ocurrido, el miedo que se siente, la carrera que se da: “porque eso le dio pánico”, “ese día se fue y no volvió más del miedo que le dio”: corra, corra, y aquellas piernas no le daban, Dios mío, y mirando para atrás.O bien: y salí en carrera, más nunca me les volví a acercar ... (9, 10). (9) Hab.: No, yo no... Enc.: No ha escuchado nada... ¿Y qué... y qué le dicen que escuchan, qué...? – 195 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 Hab.: Bueno, e... de un muchacho que hasta, por cierto, se fue, y no volvió a trabajar más aquí... Enc.: ¿Sí? Hab.: ... porque eso le dio pánico. [...] Hab.: Ese día se fue y no volvió más, del miedo que le dio. (12) (10) [...] aprendí el reloj en esta forma: me paraban a decir qué... qué aguja estaba en el dos, la aguja grande, la aguja pequeña, qué número y tal... hasta que una vez... me espantaron... me... me sonaron un fósforo así... había un cimiento en el pa... sí, lo que antes usaban mucho, cimientos así en el rededor de la cocina, y me paro yo a ver... lo tenían así en el comedor, un reloj de... de esos que... suenan... Enc.: Ajá. Hab.: ... que dan las campanadas... y yo estaba mirando, yo así en qué... número estaba la aguja grande, en qué número, así fue que yo me aprendí el reloj, y me pararon, con esa... eran la una de la mañana8... Ay, cuando sentí yo que me rasparon un fósforo... así, en esa casa... y digo yo “¡ay!, me espantaron, me espantaron” y salí en carrera, más nunca me les volví a acercar ... (18) Los espantos se conocen por los indicios que producen, ruido, golpes, gritos, bulla, son algunos de los elementos léxicos que refieren a un sonido molesto (11); otra es el frío, típicamente relacionado con la muerte y que forma, en el texto citado, una cadena cohesiva por repeticiones idénticas pero que, sin embargo, son utilizadas metonímicamente: por una parte el frío “que hace aquí”, que “siempre se ha sentido” y, por la otra, el frío de los muertos (12). Tanto el ruido como el frío son elementos que producen disforia en los hablantes y no los dejan dormir. Estos seres no descansan porque están fuera de la religión: curioso es ver cómo una hablante describe a los evangélicos de la misma manera que a los espantos (13). (11) Hab.: Me... me cuenta él y que... y que él escuchó que golpeaban ahí, en esa habitación, y que... que oyó gritos... y que subieron las escaleras y todas esas cuestiones. (12) 196 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 (12) Enc.: Porque más que sea... no, y frío que hace aquí... Hab.: Sí... bueno aquí siempre ha sido... eso como... bastante frío. Enc.: Debe ser porque... era antes la PTJ aquí. Hab.: Ah sí... Enc.: Se mantiene ¿verdad? Hab.: Sí, se mantiene el frío de los muertos que dejaron ahí. (12) (13) Enc.: Bueno yo no... yo no estaba ¿no? pero cuando llegaba a las siete estaban en esa gritadera todavía. Enc.: Sí eso desde a las cinco de la mañana, que empezaban. Hab.: Sí, eso decía R. que... que es el recepcionista en la... en la noche, que amanece, pues él dice que no lo habían dejado dormir. (12) Cabe resaltar el hecho de que se trata, salvo en un caso, sistemáticamente de habla reportada; la tercera persona relata los cuentos de espantos; resaltan las oraciones relativas “que él y que escuchó”9, asimismo hay que hacer ver los paralelismos sintácticos que se dan, como habían llegado, y lo habían tocado, y él había sentido; me espantaron, me espantaron; me sonaron un fósforo o bien, y la seguía y la seguía, y la mujer caminaba y caminaba: la afectividad expresada en estas construcciones sinónimas contribuye a convencer al oyente de la “verdad” de estos hechos. El marcador “ay”, característico del habla merideña trasmite un estado de ánimo, un sentimiento disfórico (cf. Agelvis 2001-2002: 21) y establece una comunión entre los hablantes, “un alto grado de intimidad” (p. 26) También la repetición del marcador ay, connota el enganche (cf. Domínguez 2005) entre las dos hablantes y enfatiza su identidad regional (15) (14) Hab.: Sí, el duerme ahí, entonces... y que habían llegado, y lo habían tocado, y él había sentido bien que... que a... escuchó pasos pues... (12) (15) Hab.: ¡Ay, los espantos! no... Enc.: Ay, écheme cuentos... Hab.: ... los espantos, y en realidad existen. (22) – 197 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 Nótese también el uso del pretérito simple para el tiempo de la narración y el presente histórico para lo súbito, la aparición del espanto. La sorpresa es puntual: rompe la continuidad, la duratividad del tiempo repentinamente, cuando menos se lo espera el espantado. Otros espantos botan candela, o pelan esos dientes tan horribles, sorpresivamente. Mujeres lindas, muchachas simpáticas, se convierten repentinamente en monstruos de ultratumba (16,17) (16) Hab.: [...] y entonces lo... lo sorprendió... una... muchacha muy simpática, y él la siguió, y es tarde, eran las doce de la noche, “no, esto puede ser una cosa muy importante, esta muchacha”, y la seguía y la seguía, y la mujer caminaba y caminaba, y nunca la podía alcanzar, al fin, cuando él se dio cuenta... era que... lo estaba internando en esas matas, y voltea y lo mira y le pela esos dientes tan horribles... Enc. A: [[aspiración]] Hab.: Y... Enc. B: ¡Diablo! (22) (17) Hab.: ...aquello botó... candela, y eso y... y eso fue... y eso fue cierto, porque... ese... señor me lo contó a mí, el susto de él tan grande que pasó, corra, corra, y aquellas piernas no le daban, Dios mío, y mirando para atrás, pero no, el espanto se quedó en... Enc. B: Se quedó en... Hab.: ...en en la Plaza de... de los Piscos, que la llamaban. (22) 4. Muertos milagrosos Para Franco (1999, 2001), el culto a los muertos milagrosos garantiza la continuidad entre el mundo de los vivos y el de los muertos, la posibilidad de reencuentros entre estos mundos y el transcurso cíclico del alma, con la superación ayudada por la intercesión de los vivos a través del recuerdo mismo o de rituales (2001: 123). Los muertos milagrosos serían expresión de la solidaridad de los miembros de la comunidad con el difunto menospreciado socialmente (2001: 112). Esto está expresado en la narración que nos ocupa en la atenuación de la hablante, una mujer así de vida... más 198 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 o menos... no correcta, para referirse al personaje. En lo que concierne a los muertos milagrosos, la comunidad y Dios parecen estar de un lado distinto del de la iglesia10, que impone normas estrictas e impopulares. Así lo expresa el autor: Para los devotos el no reconocimiento de la santidad de sus muertos milagrosos por parte de la Iglesia católica no es algo decisivo para el culto que ellos le profesan; sin embargo, para ellos el reconocimiento eclesiástico confirmaría la elevación, el poder, la purificación, la “mucha luz” que han alcanzado sus muertos, su cercanía a dios, etc.(2001: 113) En (18) lo afectivo confiere interés al relato, cuando la hablante lo evalúa positivamente y busca, con el marcador de interlocución, el consenso de la encuestadora: muy bonito aquello, ¿no? La autenticidad de los hechos, la veracidad, está fundamentada en la autoridad de los destinadores, el mismo obispo –porque ¿quién más podría haberlo contado, si estaba solo?– y la suegra, una persona de respeto; el habla es, obviamente, reportada. El pretérito imperfecto y el pluscuamperfecto constituyen el tiempo de la narración, tiempos de lo irreal y del mito. (18) Hab.: ... y aquello que... ¿no han oído ustedes hablar de... de una... una mujer así de vida... más o menos... no correcta ¿no?... Enc. A: Mjm. Hab.: ...que la llamaban... ¿cómo era que la llamaban? Pata de clavo... Enc. A: ¿Pata de clavo? Hab.: Ajá, y que la llamaban así, era... mundana, pobrecita ¿no? bueno, y dicen que cuando murió, a que la de... la de... la gente la despreciaba porque... por el estado... Enc. B: Por la vida que llevaba. Hab.: Sí, claro, y... al tiempo, donde la enterraron... salió una mata de rosa, y se le apareció a un obispo S., Mon... un obispo, Monseñor S. ... Enc. A: Ajá. Hab.: ...se le apareció a él, él iba a decir la misa al Espejo, muy de mañanita, como a las cinco de la mañana, se le apareció y le dijo... – 199 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 que ella estaba... a ella la enterraron, no en el cementerio, sino... a las afueras, porque la consideraban no digna del cementerio... Enc. A: Ajá. Hab.: ...total de que entonces el el sa... el sacerdote, el obispo, habló con ella, y... donde le dijo que ella estaba sana y salva, que todos los desprecios y la vida que ella ya había llevado... Dios la había perdonado, y que para prueba fuera al lugar donde la habían enterrado, y que donde había una mata de rosa, la podían arrancar... y que salía de la boca, las raíces... Enc. A: Ay... Hab.: ...la mata de rosa salía de ella, del cuerpo de ella; muy bonito aquello ¿verdad? Enc. B: Sí... Hab.: Sí. Enc. A: Nunca había oído... Hab.: Sí. Enc. B: Eso sí no lo había escuchado yo. ¿Y ésa quién la echaba, el mismo Arzobispo, supongo? Hab.: Sí, eso me lo contaba a mí la... la suegra, que había sucedido... (22) Mircea Eliade (1978) sostiene la veracidad de este tipo de historias: “se considera absolutamente verdadera (porque se refiere a realidades) y sagrada (porque es obra de seres sobrenaturales”) (p.25 en Franco 2001: 113). Según Franco, en el culto a los muertos milagrosos hay un sentimiento de solidaridad social hacia quienes no fueron valorados en vida, lo cual implica la valoración del difunto como un símbolo de la comunidad, su elevación social y también –en esto se basa en Clarac de Briceño (1992)– una eufemización o inversión de los valores que lo caracterizaban en vida. Esto sirve, según el mismo autor y entre otras cosas, a la formación de una memoria colectiva distinta a la historia culta u oficial, la negación de los valores más caros de la sociedad (p.35). 200 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 Cuadro 2. La pareja del espanto y el muerto milagroso Espanto Muerto Milagroso + humano -durativo -oficial Investigación (Indicios: frío, ruido) Disfórico + humano + durativo +oficializado Demostración (Pruebas: rosas) Eufórico Nuevamente podemos aparejar dos personajes, los muertos milagrosos y los espantos, por las similitudes que presentan pero, a la vez, por la distinción de las funciones que cumplen en el espacio mítico religioso. El concepto de muerto milagroso se caracteriza, al igual que el del espanto, por la presencia del clasema +humano, por ser simplemente almas de personas fallecidas. La aparición del espanto es súbita e interrumpida, lo cual le confiere el sema –durativo o puntual, mientras que la del muerto milagroso, que ha alcanzado la vida eterna, es durativa, porque es un santo –si bien popular– a quien siempre se puede acudir. Los diferencia la aceptación oficial de la iglesia católica– el muerto milagroso experimenta una oficialización en el relato; nótese que el personaje de Pata de Clavo se le aparece al obispo de Mérida –autoridad de la iglesia católica– al alba –símbolo de vida y resurrección–. Su redención –no se había podido enterrar en el cementerio por la vida que llevaba, y sufría el desprecio de la comunidad por ambas cosas– se da por un acontecimiento paralelo, que produce en el relato una evaluación, esto es, el nacimiento de una mata de rosas en el lugar donde yacía. Lo más curioso es que la planta se alimenta de su cuerpo –antes impuro–... y que salía de la boca, las raíces... la mata de rosa salía de ella, del cuerpo de ella, hecho que se interpreta como una prueba del perdón divino. La iglesia, en la persona del obispo, no tenía sino que ir al lugar donde estaba enterrada y arrancarla. – 201 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 Conclusión En un intento por comprender la forma cómo se distribuyen los personajes estudiados en el espacio comprendido por el micro universo de lo mágico religioso en Mérida, hemos reunido estos cuatro personajes en el Cuadro 3. Cuadro 3. Los personajes del mito Divino Niño Espanto Muerto Milagroso Encanto Relación de contrariedad Relación de contradicción Relación de complementariedad Lo que aquí nos interesa es observar la relación en que viven hoy en día estos personajes en el pensamiento de los merideños. Podemos considerar al Divino Niño y al encanto como opuestos, dado que ambos son personajes sobrenaturales, humanizados, con apariencia de niños, o jóvenes lindos, frecuentemente rubios y de ojos azules; el primero pertenece a la iglesia católica y el segundo es de la mitología regional11. A partir del encanto se crea el elemento complementario que sería, en este caso, el espanto: este es de origen humano y no ha logrado el descanso de la muerte. El muerto milagroso, contrario del espanto, es contradictorio del encanto. Es un personaje de origen humano, que transciende el umbral de la muerte en el fervor de los creyentes, pero no es aceptado como santo por la iglesia católica. Es también complementario del Divino Niño. Dos de estos personajes son en nuestra opinión de aspecto durativo en su relación con los creyentes: el Divino Niño y el muerto milagroso, porque ellos están siempre presentes para favorecer a 202 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 sus fieles. Los otros dos aparecen repentinamente para desfavorecer a los humanos, el espanto y el encanto, por lo que los consideramos como no durativos o puntuales.12 Así mismo, con el Niño y el muerto milagroso, se produce un deseo de conjunción de los fieles: se les ofrecen dones y se espera protección, son bellos; en cambio, con el espanto y el encanto hay un deseo de disyunción: nadie quiere verlos, ni tenerlos cerca; se temen sus indicios: el frío o la bulla, el agua o la humedad constituyen amenazas, por ello hemos considerado eufóricos a los primeros y disfóricos a los segundos. Queda, obviamente mucho que decir en este terreno. Este trabajo ha sido una aproximación al tema del mundo mágico religioso a partir de la oralidad. El lenguaje es una fuente inagotable de información y, en temas de identidad e ideología ha sido, todavía, poco explorado. Nota * Este fue entregado en abril de 2005 evaluado y arbitrado en mayo del mismo año (nota del Comité Editorial) Referencias bibliográficas AGELVIS, Valmore. 2001-2002. Ay, marcador discursivo en el habla de Mérida, en: Domínguez, Pietrosemoli y Alvarez (eds). Homenaje a Paola Bentivoglio. Estudios Lingüísticos. Mérida: Cuadernos de Lengua y Habla. Universidad de Los Andes: 19-28. ÁLVAREZ, Alexandra. 1995. El habla rural de la Cordillera de Mérida Estrategias discursivas: más sobre la función poética. Boletín Antropológico, 33: 105-133. Mérida: Universidad de Los Andes. ÁLVAREZ, Alexandra. 2002. La expresión del consenso en dos marcadores venezolanos. Oralia.5: 7-28. ÁLVAREZ, Alexandra (en prensa). Modos de decir, modos de pensar: la expresión del mundo mágico-religioso en Mérida, – 203 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Alexandra Álvarez. Los personajes del mito... pp. 181-205 en Bolívar, Adriana (ed). 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Resumen Pedro Durant es docente en la Universidad de los Andes, ha tenido una destacada trayectoria con Educación Ambiental y los Centros de Ciencia en el estado Mérida, lo cual constituye la temática de esta investigación. Acá investigar sus aportes en las áreas mencionadas a partir de su praxis, con el fin de generar un cuerpo de ideas que puedan servir de base para la educación ambiental. La investigación fue cualitativa dentro del paradigma interpretativo. El procedimiento se organizó en etapas: (a) selección de los tópicos a desarrollar en las entrevistas; (b) realización de las entrevistas; (c) transcripción y categorización de las entrevistas y (d) análisis e interpretación de los resultados. Entre los resultados se encontró que Durant es un promotor de una cultura conservacionista ambientalista en el estado Mérida desde la creación del primer centro de ciencia; y ha tenido un impacto en la formación de nuevas generaciones promotoras de la Educación Ambiental y los Centros de Ciencia. Pedro Durant: evolution and relevance of environment conservation in the state of Merida, Venezuela from the viewpoint of academic practice Camacho A., Carlos R. Abstract Pedro Durant teaches at the University of the Andes in the area of conservation of natural resources from an applied scientific viewpoint directed toward education. A body of knowledge gained from long experience serves as a basis for qualitative interpretation. Method involves several steps: (a) selection of topics to be developed for interviews, (b) interviews, (c) transcription and categorization of the material covered in the interviews, (d) analysis of the results. From the results it may be deduced that Durant considers environment protection to be a cultural factor which should be promoted by a scientific approach and with this in mind he established the first centers to propagate scientific information. His work in conservation is continuing as the upcoming generation follows his lead. Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 Pedr oD urant: ev olución y rrelev elev ancia edro Durant: evolución elevancia de la educación ambiental en el estado Mérida, Vene zuela enezuela a partir de su praxis pedagógica* CARLOS CAMACHO Universidad de Los Andes RESUMEN Pedro Durant es docente en la Universidad de los Andes, ha tenido una destacada trayectoria con Educación Ambiental y los Centros de Ciencia en el estado Mérida, lo cual constituye la temática de esta investigación. Acá investigar sus aportes en las áreas mencionadas a partir de su praxis, con el fin de generar un cuerpo de ideas que puedan servir de base para la educación ambiental. La investigación fue cualitativa dentro del paradigma interpretativo. El procedimiento se organizó en etapas: (a) selección de los tópicos a desarrollar en las entrevistas; (b) realización de las entrevistas; (c) transcripción y categorización de las entrevistas y (d) análisis e interpretación de los resultados. Entre los resultados se encontró que Durant es un promotor de una cultura conservacionistaambientalista en el estado Mérida desde la creación del primer centro de ciencia; y ha tenido un impacto en la formación de nuevas generaciones promotoras de la Educación Ambiental y los Centros de Ciencia. Palabras Clave: educación ambiental, centros de ciencia, historias de vida. Pedro Durant: evolution and relevance of environment conservation in the state of Merida, Venezuela from the viewpoint of academic practice ABSTRACT Pedro Durant teaches at the University of the Andes in the area of conservation of natural resources from an applied scientific viewpoint directed toward education. A body of knowledge gained from long experience serves as a basis for qualitative interpretation. Method involves several steps: (a) selection of topics to be developed for interviews, (b) interviews, (c) transcription and categorization of the material covered in the interviews, (d) analysis of the results. From the results it may be deduced that Durant considers environment protection to be a cultural factor which should be promoted by a scientific approach and with this in mind he established the first centers to propagate – 207 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 scientific information. His work in conservation is continuing as the upcoming generation follows his lead. Key words: environment conservation, education, scientific centers, history. Introducción En esta investigación se conceptualiza la Educación Ambiental (EA), según lo planteado por el Congreso Internacional de Educación y Formación sobre Medio Ambiente, realizado en Moscú (1987), como un proceso permanente en el cual los individuos y las comunidades adquieren conciencia de su medio y aprenden los conocimientos, valores, destrezas y experiencias para actuar individual y colectivamente en la resolución de los problemas ambientales presentes y futuros. (Libro Blanco de la Educación Ambiental en España, 1999). Para operacionalizar tal educación ambiental se necesita contar con docentes que tengan competencias. A pesar de que existen acciones públicas, privadas e individuales dirigidas a la capacitación y actualización de docentes en su formación inicial y en servicio, se observa que la mayoría de los docentes que trabajan en el sistema educativo venezolano no están facilitando una educación ambiental acorde con la conceptualización anteriormente expresada, lo que constituye un problema para la educación de nuestro país. Por lo tanto existe la necesidad de identificar experiencias en Educación Ambiental para mejorar la calidad educativa. En Venezuela se han hecho intentos para considerar lo ambiental como una estrategia de desarrollo, destacándose diversas personalidades e instituciones. Entre los primeros se mencionan: los decretos conservacionistas del Libertador Simón Bolívar (182029), José María Vargas (1824-1830), Antonio José Uzcátegui, Francisco Tamayo y Arturo Eichler (1930 y 1990), entre otros. Entre las instituciones, destacan: la Sociedad Venezolana de Ciencias Naturales (SVCN), en el año de 1931, los ministerios de Agricultura y Cría (MAC) y de Energía y Minas (MEM) en el año 1936 y el 208 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 Ministerio del Ambiente y de los Recursos Naturales (MARNR) a partir del año 1975. El Ministerio de Educación (ME) y la creación del Instituto Pedagógico Nacional en el año 1936, hoy día Instituto Pedagógico de Caracas (IPC). En esta última institución convergieron docentes destacados en la enseñanza de las ciencias naturales que sirvieron para formar generaciones con conciencia conservacionista, ecológica y ambientalista, quienes han generado una cosecha de docentes representantes de esos ideales, tal es el caso del profesor Pedro Durant, quien desde que egresó del IPC en el año 1957, se ha constituido en multiplicador de esa enseñanza, en el estado Mérida, trabajando en el liceo Libertador (1958-65) y en la Universidad de Los Andes (ULA) desde el año 1967. Las leyes de educación de los años 1940, 1955 y 1980, el decreto presidencial N° 108 de 1974, la Ley Orgánica del Ambiente de 1976, la Constitución de Venezuela de 1961 y la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela de 1999, han sido el fundamento legal de la educación conservacionista y ambiental en Venezuela.. La situación descrita sirve de partida para esta investigación cuyo propósito general es explicitar cómo ha sido la evolución y la relevancia de la educación ambiental en Mérida partiendo de la praxis pedagógica del profesor Pedro Durant, con el fin de producir un cuerpo estable de ideas que pudieran contribuir a mejorar la calidad de la educación en el estado Mérida y Venezuela. Metodología Esta investigación fue de tipo cualitativa dentro del paradigma interpretativo y se usó el método de historias de vida, lo cual se concretó mediante la técnica de entrevistas en profundidad a Durant y a personas relacionadas con su desempeño profesional. Se procedió a la revisión de referencias sobre Educación Ambiental en el ámbito internacional y nacional; sobre los centros de ciencia y las diferentes normativas que conforman el marco legal – 209 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 de estos centros en Venezuela, entre los años 1974 y 1999; se consultó la fundamentación legal de la Educación Ambiental en Venezuela; consultas sobre la formación inicial de docentes en educación ambiental; sobre la formación permanente de docentes en educación ambiental y sobre el objetivo referido a la investigación en educación ambiental. El grupo de estudio se dividió en cinco subgrupos: el primero, conformado por la profesora Elena Martínez vinculada a la formación académica universitaria de Pedro Durant en el IPC; el segundo subgrupo integrado por 03 informantes relacionados con la creación del primer centro de ciencia en la ciudad de Guanare y en Mérida; el tercer subgrupo integrado por egresados de la Facultad de Humanidades y Educación en la Universidad de Los Andes, Mérida, quienes recibieron formación inicial en educación ambiental por el profesor Pedro Durant; el cuarto subgrupo compuesto por 03 ex alumnos participantes en los programas de formación permanente en educación ambiental facilitados por Pedro Durant y el quinto subgrupo integrado por Jaime Péfaur, vinculado a Durant por el trabajo de investigación con el grupo de ecología animal (GEA) en la facultad de ciencias de la Universidad de Los Andes. Para la conducción de las entrevistas, se consideró a Martínez (1998): la entrevista se realizó en forma de diálogo coloquial, lo que permitió formarse una imagen de la personalidad de Pedro Durant y de los informantes con el propósito de cumplir con los objetivos de esta investigación. De igual manera, se realizó un video con el apoyo del Lic. José Antonio Flores, adscrito a ULAtv. El procedimiento se organizó en etapas: (a) guía de entrevistas y aspectos administrativos; (b) desarrollo de las entrevistas; (c) transcripción; (d) categorización de las entrevistas y procesamiento de la información y (d) discusión de los resultados. Posteriormente se fue considerando lo expresado por Pedro Durant; por cada informante y lo encontrado en documentos. Esto permitió construir la historia de vida académica de Pedro Durant 210 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 basándose en la técnica de la triangulación según Kemmis citado por Pérez (1998). Los documentos fueron sometidos al análisis de contenido y para el análisis de la historia de vida, se consideró a Chevalier citado por Córdova (2003), quien recomienda “tres lecturas” propuestas por Selin Abou: la lectura factual relacionada con tres temporalidades distintas; la lectura temática, permitió un análisis de temas relativos al ciclo de vida, y a través de él, las normas y los valores sociales y culturales del contexto donde se desenvuelve el narrador. Está lectura se apoyo en el esquema del ciclo de vida profesional presentado Huberman en Marchesi y Martín (1998). Finalmente, la lectura simbólica permitió captar cómo el sistema de normas y valores actúan en la vida social, en el espacio donde se ubicaron las experiencias y donde se articuló la vida individual. Del análisis e interpretación de las entrevistas efectuadas al profesor Pedro Durant y al grupo de informantes surge un cuerpo de ideas estables que pudieran contribuir a mejorar la educación ambiental en Mérida.. Resultados y discusión Pedro Durant: Creador del Primer Centro de Ciencia en Mérida, Venezuela Para demostrar que el profesor Pedro Durant fue el creador del primer centro de ciencia en el liceo Libertador, en Mérida, Venezuela, registrado como “Dr. José Francisco Torrealba” en el año escolar 1958-59, se procedió a contrastar la información suministrada por Pedro Durant (PD) y los informantes Jaime Grimaldo (JG) y José Francisco Muñoz (JFM), ambos exalumnos del centro de ciencia antes mencionado. PD: Llegué a Mérida el 06 de Octubre de 1958 como profesor conservacionista ... me presenté al liceo Libertador ... aproveché la iniciativa de estudiantes que venían de Valencia que habían escuchado ... que se había creado un centro de ciencia ... ayudé a organizar la creación del centro de ciencia en febrero de 1959 ... venía con – 211 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 la experiencia de Caracas ... de Guanare ... seleccionaron el nombre del Dr. José Francisco Torrealba. JG: ... yo venía del Táchira a estudiar en el liceo Libertador de Mérida y ... me conseguí en el plantel al profesor Pedro Durant, que ya tenía tiempo con el centro de ciencia ... actué a partir de 1963 hasta el 65. Recuerdo que el profesor... captó un grupo de estudiantes, y nos daba ... aspectos relativos a la necesidad de implementar la educación ambiental ... Conocí estudiantes sobresalientes como Fernando Gabaldón y José F. Muñoz, entre otros. JFM: ... ingresé al liceo Libertador en el año 1959 y ... el profesor Pedro Durant andaba en la tarea de reclutar estudiantes ... para crear lo que él llamaba centro de ciencia ... estaba muy orientado hacia ... preservar los recursos naturales, ... Respecto a lo contrastado anteriormente, el autor de esta investigación considera que la iniciativa del profesor Pedro Durant al crear el centro de ciencia “Dr. José Francisco Torrealba”, obedece a sus experiencias con el centro de ciencia “Alejandro Humboldt” en Caracas y con el centro de ciencia “Br. Rafael Rangel” en Guanare, y al interés de los estudiantes del liceo Libertador. También se observan algunas categorías y subcategorías que se resumen en el cuadro 1 y que seguidamente se ilustran con algunas ideas expresadas por él. 212 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 Cuadro 1 Categorías y Subcategorías derivadas de la Entrevista a Pedro Durant relativa a la Creación del Centro de Ciencia “Dr. José Francisco Torrealba” en el Liceo Libertador Mérida, Venezuela. 1958-59 Categorías Subcategorías Categorías Subcategorías creo que esasExperiencia series de trabajos de campo fue Aprendizajea) Aprendizaje: Observación una forma de enriquecer a estos estudiantes de ciencia ... Colaboración Organización del centro Planificación Conocimientosb) Colaboración: ... CORPOANDES Desarrollo Habilidades ... nos donaron diez Responsabilidad Participación Entrenamiento mil ejemplares de la Charla Única de Conservación y nos asignaActores ambientalistas ron dos equipos audiovisuales. Aceptación social Estrategia didáctica Centro de Ciencia Transferencia c) Responsabilidad: formaron un grupo de trabajo que desaSalida o trabajos de Motivación rrollaban la Charla Única de Conservación ... la obligación que uno campo. adquiere, no impuesta ...de Orientación vocacional Charla Única Conservación d) Actores ambientales: ... llegaron a conocer al Dr. José Programa de radio Interacción Francisco TorrealbaCartelera ... al profesorSeguimiento Arturo Eichler ... al Dr. Pedro Rincón GutiérrezConferencias ... Formación de e) Estrategias didácticas: ...personalidad se originó la necesidad de los trabajos de campo ... La Charla Única de Conservación ... 10 años de programa radial de los centros de ciencia que se llamaba: “Por los caminos de la ciencia” ... recordemos que los muchacho tenían su cartelera y crearon su periódico ... – 213 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 f) Experiencia: ... la pasantía por estos centros de ciencia, enriqueció la experiencia que traía del Pedagógico, desde el centro Alejando Humboldt y desde Guanare ... g) Orientación vocacional:... es la claridad que el estudiante adquiere para seleccionar una profesión o una carrera de estudio ... h) Organización: se planificaban las salidas con 2 ó 3 meses de anticipación. i) Participación: cada alumno tenía una hora para desarrollar en las escuelas o liceos la Charla Única de Conservación ... j) Aceptación social: ... en ese programa radial ... se agregó el profesor Francisco Tamayo ... se presentaban concurso para la comunidad ... k) Transferencia: ... con el tiempo ellos sintieron la necesidad de continuar en la universidad las inquietudes que habían desarrollado en el liceo Libertador... l) Motivación: ... participó voluntariamente con los centros de ciencia y se entusiasmó porque leía los originales de Arturo Eichler ... m) Seguimiento: ... el gobernador nos puso un seguimiento en las escuelas ... los directores informaba, qué se había realizado por parte de los centros de ciencia. Formación Inicial de Docentes en el Área de Educación Ambiental en la Universidad de Los Andes, Mérida Para describir este objetivo, se procedió al análisis e interpretación de la información contenida en la entrevista realizada para tal fin, la cual se contrastó con la de los informantes María del C. Rodríguez (CR) y Luis A. Ramírez (LAR), ambos exalumnos en la facultad de Humanidades y Educación en la Universidad de Los Andes. PD: ... a partir de 1970, el componente biológico del futuro licenciado en educación, mención biología, quedó a cargo del departamento de biología de la facultad de ciencia. Varios cursos fueron 214 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 asignados al Grupo de Ecología Animal, al cual pertenezco. Con ese grupo planificamos los cursos de ecología general, de biología animal y los cursos de ecología ambiental. En esos tres cursos quisimos desarrollar el método de los talleres de campo, el trabajo en el laboratorio y la discusión en las horas teórica, con el propósito de que fuera el alumno el que aprendiera y no el profesor el que enseñara solamente. Los trabajos de campo se hicieron rutinarios. CR: ... En el semestre “B” del año 1979 la asignatura Ecología me fue impartida por el profesor Pedro Durant naciendo en mí una forma diferente de pensar sobre mi futuro desempeño como docente, ... me sentí atrapada por su método en el que utilizaba el entorno. Para ese entonces realizamos salidas hacia Monte Zerpa, Páramo “La Culata”, Lagunillas y Río Albarregas. LAR: ... Sí, fui alumno del profesor Pedro Durant en el año 1985, en dos cátedras: en Ecología Ambiental y Biología Animal. En verdad recibimos una gran enseñanza de este profesor, porque sus cátedras eran muy particulares ... La metodología del trabajo de campo y discusión en laboratorio, era por decirlo así, la estrategia integradora al aire libre, que permitieron la formación ambiental. Respecto a lo contrastado anteriormente, el autor de esta investigación evidencia al profesor Pedro Durant responsable de los cursos del componente biológico en la licenciatura de la Escuela de Educación en la ULA, y posiblemente andaba en la búsqueda de espacios académicos para transferir hacia la educación superior sus experiencias con los centros de ciencia. Además de utilizar los trabajos de campo para facilitar una formación ambiental en los futuros docentes, que quizás utilizaron al trabajar en el sistema educativo venezolano. Al analizar la entrevista realizada a Pedro Durant se observan algunas categorías y subcategorías que se resumen en el Cuadro 2. – 215 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 Cuadro 2 Categorías y Subcategorías Derivadas de la Entrevista a Pedro Durant Relativa a la Formación Inicial de Docentes en el Área de la Educación Ambiental en Mérida, Venezuela. 1970 -2003 Categorías Subcategorías Categorías Aprendizaje Observación Participación Apoyo a centros de ciencias Estrategia didáctica Conocimientos Subcategorías Productos Trabajo de campo Organización Discusión Orientación Laboratorio Aportes Conferencias Actores docentes Cursos Especialistas Planificación Egresados A continuación se presentan algunas categorías y subcategorías del Cuadro 2 con el contenido de ideas expresadas por Pedro Durant. (a) Aprendizaje: ... muchos de ellos se beneficiaron en cuanto a la facilidad con que aprendieron. (b) Apoyo a centros de ciencia: ... en nuestros cursos también mencionábamos la importancia de los centros de ciencia en este tipo de aprendizaje ... (c) Estrategias didácticas: ... realizamos los trabajos de campo ... Estos cursos se reforzaban en las discusiones con los ejemplos de los centros de ciencia ... se complementaban con conferencistas de estos aspectos de ciencias ambientales ... (d) Cursos: ... me tocó enseñar biología y ecología animal, ecología experimental, biología de vertebrados .... en Farmacia se creó un curso de ecología ... en Bioanálisis se creó un seminario ... en Economía existe un curso de ecología básica ... en Medicina, teníamos los cursos de biología, conferencias sobre ambiente y medicina ... en Derecho participamos con política, desarrollo y ambiente ... 216 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 (e) Conocimientos: ... pero estudios recientes, demuestran que el consumo de queso ahumado, participa en el incremento del cáncer gástrico, debido a que es envuelto con frondas de helecho macho y ahí quedan disueltas las sustancias cancerígenas... (f) Productos: ... aprovechamos esta contribución de la Universidad de Los Andes para crear en el cerro de la Bandera el Aula Ambiental de la Universidad de Los Andes ... Del protocolo de la entrevista de Durant emergen las categorías aprendizaje, apoyo a los centros de ciencia, estrategias didácticas y conocimientos, entre otras, lo que demuestra que el profesor Pedro Durant, encontró en el proceso de formación inicial de docentes en la facultad de humanidades y educación y en la facultad de ciencias de la Universidad de Los Andes, Mérida un sustrato para promover el aprendizaje de conocimientos especializados, utilizando estrategias didácticas apropiadas como el trabajo de campo, de laboratorio, la discusión y promocionar los centros de ciencia. Formación Permanente de Docentes en Servicio en el Área de Educación Ambiental Para describir este objetivo, se procedió al análisis e interpretación de la información contenida en la entrevista realizada para tal fin, la cual se contrastó con la de los informantes Dora Paredes (DP), Desyré Castillo (DC) y Lisbeth Borregales (LB). Exalumnas de Durant en los programas de formación permanente en educación ambiental. PD: La respuesta se puede organizar en cuatro etapas: (a) como miembro del centro de ciencia en el liceo Libertador en 1964 se organizó un curso de conservación para docentes de la zona educativa (b) otro compromiso fue con el gobernador en 1970 para un taller a prefectos del estado Mérida, donde participó Jaime Grimaldo como representante del PN Sierra Nevada y mi persona por la ULA, las prácticas se hicieron mediante un paseo por la ciudad, una visita – 217 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 al río Albarregas y a Monte Zerpa; (c) el otro compromiso es el que existe entre la Universidad y el Grupo de Ecología Animal con la Zona Educativa con los talleres de campo que se dictan una o dos veces por año, a motu proprio a través de un acuerdo permanente con la coordinación regional de centros de ciencia y mi persona y (d) participamos a motu proprio, junto al profesor Pedro Salinas, en los cursos del CIDIAT, cuando el gobierno nacional asignó el compromiso de formar los primeros directores del Ministerio del Ambiente en 1977 ... DP: ... en el año de 1980 comienzo a ser asesor del centro de ciencia en Mérida ... la formación ambiental no la tenía ... es a través de los centros de ciencia, los trabajos de campo y las discusiones con Pedro Durant lo que me permitió aprender para luego transferir ese aprendizaje ... DC: En el plan de capacitación mi trabajo se orientó hacia las prácticas de campo, fuimos a la plaza Bolívar de Tovar para discutir aspectos sociales ... participé en trabajos de campo en El Vigía ... en Mérida se trabajó en Monte Zerpa ... en 1997 me incorporé al grupo de trabajo de Pedro Durant ... LB: El ingeniero José Zambrano profesor jubilado de la ULA, nos dio a conocer el trabajo de Pedro Durant con los centros de ciencia en Mérida. Le planteamos la necesidad en cuanto a capacitación de nuestros docentes y consideramos la posibilidad de contactar al profesor Pedro Durant. Fue así como tuvimos esa experiencia en el mes de noviembre de 1999, donde realizamos talleres como: “la hoja desde el punto de vista cualitativo y cuantitativo”, un reconocimiento de especies vegetales en la zona y un “malleo en el herbazal” para determinar invertebrados...aprendimos a observar, a colectar datos, a trabajar en equipo ... Respecto a lo contrastado anteriormente, el autor de esta investigación evidencia la responsabilidad del profesor Pedro Durant en la formación conservacionista y ambiental permanente de los informantes y posiblemente del resto de docentes en servicio dependiente de la zona educativa del estado Mérida y de otras regiones del país, desde el año 1964 hasta la presente fecha, además de 218 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 la facilitada a entes oficiales. En todas las situaciones se observa el uso de los trabajos de campo como la estrategia didáctica mas usadas para facilitar formación ambiental. Al analizar la entrevista a Pedro Durant se observan algunas categorías en el Cuadro 3. Cuadro 3 Categorías y Subcategorías Derivadas de la Entrevista a Pedro Durant Relativa a la Formación Permanente de Docentes en Servicio en el Área de la Educación Ambiental Mérida, Venezuela. 1964 -2003 Categorías Subcategorías Experiencias Estrategias didácticas Categorías Subcategorías Habilidades Talleres Productos Trabajos de campo Transferencia Centros de ciencia Actores ambientalistas Técnica de malleo Necesidad de formación Investigaciones y Publicaciones Grupo de Ecología Animal Cursos Utilidad Uso de instrumentos Planificación Cerro La Bandera - Aula Ambiental Motivación Conocimientos Facilitadores Aprendizaje comprensión Trabajo en equipo Solidaridad Egresados Entrenamiento Seguidamente se presentan algunas categorías y subcategorías del Cuadro 3 con el contenido de ideas expresadas por Pedro Durant. (a) Experiencias: ... en la Azulita tuvimos la experiencia de ver a la maestra y sus muchachos de barriga en la hojarasca estudiando los animales ... en 1994 estuvimos en el Pedagógico Rural Gervasio Rubio en el Táchira, para crear un aula ambiental ... la experiencia de Cumaná: trabajamos en la Laguna de los Patos para – 219 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 estudiar el ambiente manglar y el lagunar, ... y mostrar a los profesores de Biología de la UDO cómo se crea un aula ambiental ... en 1986 coordinamos los trabajos de campo de la convención nacional de centros de ciencia en Táchira ... (b) Estrategias didácticas: ... fue una visita a la cuenca del Río Mucujún, para enterarse de lo que estaba pasando con el agua que consumíamos en Mérida ... el taller de campo que dimos en Mene Grande, estado Zulia en 1979 ... en la región Panamericana ... con el método del malleo en el herbazal, ellos pudieron asombrase de la cantidad de animales que se podía colectar, contar y conocer ... en Mérida existen dos experiencias en el Cerro La Bandera: los seis seminarios donde se mantuvieron 300 personas. Y la otra experiencia, fue un taller con representantes del Concejo Municipal del Distrito Libertador ... (c) Conocimientos: ... entre el estrato herbáceo y el conejo de Monay, es determinante la cobertura, la densidad, la altura y la sociabilidad de estas plantas con el número de animales ... cambio de temperatura en el Páramo, muchos grado por debajo de cero, y ese mismo día el termómetro marca 36ºC por encima de cero grado, en ninguna parte del mundo se observan esas condiciones y por eso no hay Frailejones ... (d) Aprendizaje: ... ellos aprenden a elaborar tablas y gráficos. Aprenden a contar, a medir y a hablar con precisión lo que están proporcionando ... (e) Trabajo en equipo: ... los que acompañaban a esta colega se pusieron de acuerdo para que ella demostrara que sí puede trabajar con anfibios, ella se decidió y lo logró tranquilamente ... se celebraba la XV convención nacional de centros de ciencia y los docentes del estado Táchira, pidieron colaborar con la organización de la reunión ... (f) Habilidades: ... logramos que un docente cambiará un mal hábito adquirido por un buen hábito adquirido, para enseñar lo que puede enseñar ... 220 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 La participación del profesor Pedro Durant en la formación permanente de docentes en el área de educación ambiental obedece a la necesidad de los docentes de actualizarse en cuanto a conocimientos, habilidades, valores y actitudes para lograr un mejoramiento humano y desarrollar la profesión de la docencia, tal como lo señala Villar citado por De la Torre (1998). También sus experiencias con cursos de educación ambiental y con los centros de ciencia, el trabajo permanente fuera del aula y el dominio del conocimiento ambiental facilitan la formación permanente. Contribución del Trabajo Investigativo de Pedro Durant a la Educación Ambiental en Mérida. Venezuela Para describir este objetivo se procedió a precisar la información suministrada por el mismo Durant y contrastarla con la información suministrada por Jaime Péfaur (JP) compañero de trabajo y del Grupo de Ecología Animal de la Universidad de Los Andes. Categoría: proyectos de investigación PD: en la autoecología nos hemos concretado a la ecología de los anfibios en Mérida y Barinas ... los conejos silvestres de Venezuela ... el estudio de los marsupiales ... en el aspecto Sinecológico ... el proyecto relacionado con la calidad ambiental de las cuencas hidrográficas del estado Mérida ... complementado desde 1993 con el estudio de calidad de agua ... el aporte en el campo de la investigación ha sido un modelo para el estudio de la Hojarasca ... JP:... Durant en sus estudios de Conejo de Páramo ... diez años en el Páramo Mucubají ... para trabajar con el proyecto de la musaraña ... él había participado con estudios en la ecología de anfibios y en mamíferos ... hay un estudio con marsupiales ... Después de Uribante - Caparo, comienza unos estudios sobre cinco ríos en la región andina ... por la comprensión de contaminación del agua y su calidad... proyectos sobre calidad de agua del Río Albarregas ... – 221 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 Respecto a lo contrastado anteriormente, el autor de esta investigación observa que el trabajo investigativo de Pedro Durant se resume en dos líneas de trabajo: la Autoecología y la Sinecología. La autoecología se refiere a estudios de organismos individuales y sus relaciones con el ambiente. La sinecología, designa estudios de grupos de organismos asociados formando una unidad funcional del ambiente. Los grupos de organismos pueden estar asociados a tres niveles de organización: poblaciones, comunidades y ecosistemas. Monografias.com (2004, Mayo 1). Al analizar la entrevista efectuada a Pedro Durant se observan algunas categoría, subcategorías y productos que se resumen en el Cuadro 4. 222 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 Cuadro 4 Categorías, Subcategorías y Productos Derivados de la Entrevista a Pedro Durant Relativo a su Trabajo como Investigador en el Área de Educación Ambiental en la Universidad de Los Andes. 1967-2004 Categorías Subcategorías Productos Proyectos de Investigación Autoecología Ecología de anfibios, conejos silvestres de Venezuela, musaraña de páramo, marsupiales, rata Casiragua, Ictiofauna, Hojarasca, lombrices de Páramo, Mesofauna como indicadora de calidad de agua Sinecología Calidad de Cuencas hidrográfica en la región andino-venezolana. Emponzoñamiento en la Zona sur del Lago de Maracaibo Grupo de Ecología Animal La integración de los dos productos (GEA) anteriores Personal Conejos Silvestres de Venezuela Anfibios como recurso para la enseñanza de la Educación Ambiental Compañeros de investigación Alba Díaz, Jaime Péfaur, Amelia Díaz de Pascual, Pascual Soriano. Conocimientos Uso de ambientes locales Local, Regional y Nacional Mérida, Táchira, Trujillo, Barinas, Portuguesa, Zulia. Producción Conocimientos Autoecología, Sinecología y Publicaciones de artículos en Nacionales e Internacionales Educación Ambiental revistas Publicaciones de textos Mesofauna como Indicadora de educativos Calidad de Agua del Río Albarregas Programas educativos Emponzoñamiento en la zona Sur del Materiales educativos Colección de vertebrados de la lago de Maracaibo Universidad de Los Andes (CVULA). Pág. Web Mejorar la Calidad de Vida Participación Instrumentos Clinómetros Soluciones a problemas Agricultura, calidad de agua, ambientales educativos Eventos nacionales e Cursos, talleres, Convenciones de internacionales Centros de Ciencia, Comisión Universitaria del Ambiente, Cátedra Francisco Tamayo, Aula Ambiental – 223 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 A continuación se presenta algunas categorías y subcategorías del Cuadro 4 con el contenido de ideas expresadas por Pedro Durant. a) Compañeros de investigación: ... El Grupo de Ecología Animal: Alba Díaz, Amelia Díaz de Pascual, Pascual Soriano y Jaime Péfaur ... b) Conocimientos: ... tenemos un patrón de las condiciones ambientales en cuencas hidrográficas en las que se demuestra que en la medida en que se incrementa la deforestación se cambia la diversidad animal y aparece la dominancia de otros grupos ... en la cuenca baja del Escalante o del Chama hemos encontrado que la densidad de estos animales es de 15 a 50 individuos por hectárea ... c) Uso de ambientes locales: ... los anfibios del estado Mérida y Barinas ... anfibios del Zulia ... Encontrados, correspondiente a la frontera Zulia y Colombia ... d) Producción: ... los datos que se vayan procesando, se utilizarán para desarrollar un programa de Educación Ambiental en la mayoría de las instituciones educativas ... existen publicaciones relacionadas con estos trabajos ... e) Mejorar la calidad de Vida: ... Esa es la lucha que hemos tenido en Mérida, en Guanare y donde hemos estado. La lucha se refiere a mejorar la educación ... f) Participación: ... coordinamos con Jaime Péfaur el III Congreso Latinoamericano de Herpetología en 1990, el Congreso Latinoamericano de Ecología en 1996. Fuera de Venezuela, hemos asistido a Canadá, Estados Unidos, Brasil, Uruguay y Perú ... al V Congreso Mundial del ambiente en la USB ... Del protocolo de la entrevista de Durant emergen estas categorías que están en concordancia con lo sugerido por la UNESCO (1977) en la Recomendación Nº 21 del informe Final de Tbilisi, al señalar que se deben promover proyectos de investigación que permitan incorporar sus resultados al proceso general de la enseñanza. 224 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 Método de las tres lecturas propuestas por Selin Abou para el análisis de la Historia de Vida académica de Pedro Durant Lectura factual: es una sucesión cronológica de hechos que conjugan tres temporalidades y permite la continuidad histórica del relato académico de Pedro Durant. La primera temporalidad, entre los años 1953 y 1957, representada por la permanencia de Durant en el IPC, donde recibió formación universitaria y se inició con el centro de ciencia “Alejandro de Humboldt” en el liceo de Aplicación, por iniciativa de la profesora Elena Martínez. Esta etapa ocurre durante la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez y las reuniones de estudiantes eran mal vista por la policía política del régimen, en este sentido las salidas de campo efectuadas por los profesores Francisco Tamayo (t), Gisela Muskus de Falcón y Royo y Gómez se debieron realizar con mucha cautela. (P. Durant, entrevista personal, Abril 30, 1999). La segunda temporalidad, entre los años 1957 y 1959. Cuando Durant crea el centro de ciencia “Br. Rafael Rangel en el liceo José Vicente de Unda en Guanare con participación de Metodio Flores. Todavía permanecía el régimen dictatorial del general Marcos Pérez Jiménez, al respecto Metodio Flores informa: ... recuerdo el director de liceo, profesor Jeremías Núñez ... le sugirió a Pedro Durant, que no era conveniente que nos reuniéramos, porque la Seguridad Nacional le habían dicho que esas reuniones eran sospechosa ... Al culminar el periodo escolar 1957-58, Durant recibe una oferta de trabajo del profesor Francisco Tamayo para participar en el proyecto de educación conservacionista, en la ciudad de San Cristóbal. El autor de esta investigación, interpreta que el proceder de Durant, al crear el centro de ciencia y el aceptar la propuesta del profesor Tamayo, tal vez se debió a dos motivos: (a) como una manera de replicar lo aprendido en Caracas y (b) en correspondencia con lo expresado por Huberman al señalar que, la primera fase del ciclo profesional de un profesor es la “de entrada” y se caracteriza por la supervivencia y el descubrimiento. – 225 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 La tercera temporalidad entre los años 1959 y hasta la presente fecha (2004). Está referida a la vida académica de Durant en el estado Mérida, al desarrollo de los centros de ciencia y la educación ambiental en esta región, a través del Ministerio de Educación y la Universidad de Los Andes. Pedro Durant, llega a Mérida y funda el centro de ciencia “Dr. José Francisco Torrealba” en febrero de 1959. En el año 1967 ingresa a la Facultad de Ciencias en la Universidad de Los Andes y en el año 1970 colabora con la Facultad de Humanidades y Educación para la elaboración de los programas de la mención Biología. En el año 1977, crea el Grupo de Ecología Animal, para ejecutar proyectos en ecología animal y posteriormente en educación ambiental. En el año 1982, Durant participa en la Comisión Universitaria de Asuntos Ambientales como representante de la Facultad de Ciencias. En el año de 1990 creó la Cátedra Libre de Estudios Ambientales “Prof. Francisco Tamayo” y en el año 1992 crea el aula ambiental de la Universidad de Los Andes, en el cerro La Bandera, de la ciudad de Mérida. Lectura temática: la síntesis de esta lectura de la historia de vida académica de Pedro Durant, se presenta en seis fases: Fase I, denominada “de entrada a la profesión” y caracterizada por la supervivencia y el descubrimiento. Comprende los tres primeros años de docencia de Pedro Durant (1957-1960), se considera la fase de creación de centros de ciencia en la ciudad de Guanare y en el estado Mérida. Se promueven valores y normas tales como orientación hacia la conservación de los recursos naturales, cultura hacia lo ambiental y la planificación, formación de líderes conservacionistas, la responsabilidad social, la solidaridad, el trabajo en equipo, la orientación vocacional, la disciplina hacia el estudio, la formación integral, una visión ambiental humana, la actitud hacia la docencia y el amor a la institución educativa. Para el año 1959 crea el primer centro de ciencia en Mérida como un modelo novedoso de educación no escolarizada para la región andino - venezolana, con actividades de salidas de campo, la creación del 226 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 periódico escolar “Avance Conservacionista”, la elaboración de la cartelera y el programa radial. Inicia relaciones con la Universidad de Los Andes y participa en la creación del primer bosque universitario Emilio Menotti Spósito. Asimismo se inician relaciones con el Dr. Arturo Eichler y junto a los alumnos de los centros de ciencia crea la Charla Única de Conservación como un modelo educativo para transferir conocimiento ambiental. La fase II, comprendida entre los 4 a 6 años de su labor educativa, durante los años 1960 -1963. Se caracteriza por la estabilización y dominio del proceso de enseñanza, por la tranquilidad y aspiraciones profesionales. Comienza a fundar centros de ciencia en Mérida y Táchira, tales como el del liceo “Caracciolo Parra y Olmedo” y el de la Escuela Normal “Alberto Carnevalli”. Sus aspiraciones profesionales están orientadas hacia la realización de estudios de postgrado y su ingreso a la Universidad de Los Andes, Mérida. La fase III denominada por Huberman: “Experimentación”, comprende entre los 7 y 18 años de labor educativa. Acá el profesor Pedro Durant desarrolla nuevas iniciativas: viaja en el año 1965 a la ciudad de Michigan en USA para estudiar la maestría en ecología de poblaciones; su ingreso a la Universidad de Los Andes, Mérida en el año 1967; el asesoramiento al centro de ciencia de la Universidad de Los Andes entre los años 1967 y 1970. Asimismo, los cambios en la educación en Mérida se evidencian al participar, junto al Dr. José V. Scorza y otros docentes, en la elaboración del pensun de estudio para la licenciatura en educación, mención Biología de la Facultad de Humanidades y Educación, donde se crean cursos de Biología y Ecología General, Biología y Ecología Animal y Ecología Ambiental, entre otros. También en los programas de formación permanente en educación ambiental, promueve la participación de docentes en servicio como una manera de actualizar conocimientos. Utiliza los trabajos de campo como una estrategia de “aprender haciendo”. En este proceso de formación demuestra pedagogía, autoridad moral y – 227 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 académica, sencillez y humildad. Los informantes señalan que estas experiencias se convirtieron en aprendizajes útiles y generaron en el estado Mérida un equipo de docentes ambientalistas y consideran a los centros de ciencia como una alternativa para la Educación Ambiental no escolarizada en Venezuela. La fase IV, denominada de “Serenidad relacional” comprende entre los 19 y 30 años de labor educativa, ubicada entre los años de 1975 y 1987 se caracteriza por el dominio de su práctica docente. En cuanto a normas y valores promovidos destacan: rigor científico, el interés y la motivación por el ambiente, el apoyo técnico en programas de formación permanente en educación ambiental y hacia algunas convenciones nacionales de centros de ciencia. Incentiva en sus exalumnos la necesidad de realizar estudios de postgrado relacionados con la educación ambiental. El uso de publicaciones contribuye a actualizar la información que se transmite a los alumnos. Durante esta fase crea en el año de 1977, el Grupo de Ecología Animal en la Facultad de Ciencias. En el año 1982, se inicia en la Comisión de Asuntos Ambientales de la Universidad de Los Andes. Crea los modelos de la Hoja y la Hojarasca como una estrategia didáctica para la comprensión de Cuencas Hidrográficas y comunidades edáficas en bosques nublados. Las fases V y VI denominada de “De compromiso”, comprende entre los 31 y mas de 40 años de servicio, entre los años lectivos 1987 y 1997, y entre los años 1997 y la actualidad. En el caso de Durant, se caracteriza por los compromisos con la sociedad merideña a través de la creación de la Cátedra Libre de Estudios Ambientales “Profesor Francisco Tamayo” en el año 1990 y el Aula Ambiental de la Universidad de Los Andes en el año 1992. Además de ser promovido como individuo de número en ciencias naturales en la Academia de Mérida, en el año de 1993. Desde 1996, es docente jubilado activo de la Universidad de Los Andes y los compromisos se incrementan: es evaluador de la Fundación Polar, año 1998; miembro evaluador de CONABA, año 1999; docente cola- 228 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 borador en el CIDIAT, año 1999 y en la UNELLEZ, año 2000 y Director del BIOTERIO - Universidad de Los Andes, desde el 2001 hasta la actualidad. Para el autor de esta investigación, uno de los logros importantes del profesor Pedro Durant y que le ha valido el reconocimiento internacional como especialista en Lagomorfos, fue la descripción de una nueva especie de conejo silvestre en Venezuela, el Sylvilagus varynaensis, esto fue en el año 2001. Lectura simbólica: según Córdova (2003), es una síntesis de las dos anteriores. Apunta a la sujeción de la incidencia del sistema de contradicciones sociales y culturales en el desarrollo de la vida individual. A tal efecto Pedro Durant sostiene que el trabajo realizado a motu proprio con los centros de ciencia y la educación ambiental no es, ni ha sido reconocido por el Ministerio de Educación y Deportes ni por la Universidad de Los Andes. Esto tiene su fundamento por la inexistencia de una evaluación y seguimiento de lo que hasta el momento se ha venido realizando, a pesar de los productos obtenidos, identificados en el éxito de alumnos y docentes que han participado en actividades de educación ambiental en Mérida. De la historia de vida académica de Pedro Durant, al considerar su descripción al participar en la formación inicial de docentes en la Facultad de Humanidades y Educación en la ULA, se observa que a pesar de su contribución en el pensun de estudio para la licenciatura en Biología, hoy día esta mención fue eliminada, en función a los nuevos pensun y a la culminación del convenio entre ambas facultades. Los cursos que se facilitaron se reforzaban con los ejemplos de los centros de ciencia en el estado Mérida, trabajos de campo y conferencistas de la ULA. De aquí egresaron los docentes que se beneficiaron con ese tipo de aprendizaje y están distribuidos en la geografía merideña, desarrollando sus cursos en base a estas metodologías, trabajando con centros de ciencia y conformando el actual equipo de docentes ambientalistas en el estado Mérida. – 229 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 El autor de esta investigación, quien fue alumno de Pedro Durant en los programas de formación permanente, es el responsable de facilitar educación ambiental en la facultad de Humanidades y Educación en la ULA desde el año 1992, esta asignatura incluye trabajos de campo, experiencias con los centros de ciencia y la elaboración de proyectos de investigación, esto como una forma de transferir lo aprendido con Pedro Durant. Respecto a los programas de formación permanente facilitados por Pedro Durant, para este análisis se destacan las actividades mas relevantes: sus inicios en el año 1964, con un curso dirigido a docentes de la zona educativa del estado Mérida en colaboración con miembros del centro de ciencia del liceo Libertador y la ULA. Quizás fue una de las “pocas veces” en que la zona educativa adquirió un compromiso con sus maestros y con la universidad. A Durant sólo lo mueve su deseo de servir a la comunidad merideña y promover el ejemplo de la responsabilidad social con sus alumnos del centro de ciencia. En el año de 1970, se facilita un taller a los prefectos del estado Mérida con la colaboración de Jaime Grimaldo, funcionario del Parque Nacional “Sierra Nevada”, y Pedro Durant. Grimaldo viene de ser alumno del centro de ciencia del liceo Libertador y de la ULA. Otro compromiso, es el que existe entre la ULA, el Grupo de Ecología Animal y la zona educativa de Mérida, sobre los talleres de campo que se dictan una o dos veces al año a los coordinadores de centros de ciencia, como una acción a motu proprio de Pedro Durant, quien logró comprometer a sus compañeros de investigación en el fortalecimiento de estos programas educativos. A pesar de esta realidad, todavía hoy día es inexistente un convenio entre el Ministerio de Educación y la ULA. Con todos los beneficios que se han considerado anteriormente, Durant ha podido observar que no todos los docentes tienen el mismo deseo de aprender, de actualizarse, de incrementar su calidad académica y docente. 230 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 En cuanto a la contribución del trabajo investigativo de Pedro Durant a la Educación Ambiental en el estado Mérida, son muchos los conocimientos productos de sus investigaciones, sin embargo, son pocas las instituciones que han hecho uso apropiado de estos. A tal efecto, mostramos dos entrevistas y su lectura simbólica. Díaz (1992, junio 01) docente de la Facultad de Ciencia de la ULA, realizó un ensayo para el diario El Vigilante intitulado “Semblanza del profesor Pedro Durant. Premio Francisco de Venanzi” que consistió en describir la vida académica del profesor Durant durante su permanencia en la ULA y el trabajo realizado con los Centros de Ciencia. En cuanto a la Docencia, señala Díaz que la preocupación de Durant ha sido la de “hacer algo mas que dar clases”, esto incentivado por algunos de sus profesores del IPC, entre los que destacan Francisco Tamayo y Elena Martínez. De esta manera se involucra en el proyecto de los Centros de Ciencia. En cuanto a la Investigación, Durant ha ejecutado proyectos enmarcado en el área de la Educación Ambiental y estudios ecológicos de: anfibios en los bosques nublados del estado Mérida, conejos silvestres venezolanos y pequeños mamíferos en la cuencas hidrográficas andino – venezolanas. Sus resultados, señala Díaz “han sido traducidos al lenguaje docente para imprimir el dinamismo integracionista y multidisciplinario que corresponde a la enseñanza de la Biología del Neotrópico en cualquier nivel educativo”. Su actividad de extensión, se puede medir por la cantidad de llamadas y visitas provenientes de personas o instituciones para invitarlo a participar en actividades en Mérida y en otras ciudades. Finalmente, Díaz destaca algunas cualidades en el profesor Durant, tales como la sencillez, la modestia y la austeridad. Rojas (1999, Abril 29) realizó una entrevista a Carlos G. Cárdenas, vicerrector académico de la ULA para el Diario Frontera intitulada “Pedro Durant es uno de los especialistas mas reconocidos en América Latina”. Este trabajo consistió en demostrar que la vida de este educador cuenta con una trayectoria exitosa y – 231 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 paradigmática que nos reta desde su condición creadora. Cárdenas señala que Durant es uno de esos hombres cuya obra traza caminos y abre ventanas para las nuevas generaciones, que tiene en él una visión renovada sobre el problema ecológico, visto desde una perspectiva responsable, científica y capaz de propuestas efectivas para su utilización en el desarrollo nacional. Declara que Pedro Durant es uno de los baluartes de la ULA y que resulta de interés en su vida, el hecho de que abarca diferentes dimensiones del hacer universitario, con proyección histórica totalizadora y responde a los mas nobles intereses de la patria. Entre sus cualidades lo caracteriza el ser un profesor responsable y estricto, que logró formar toda una escuela de estudiosos, que lo siguen y admiran, porque lo reconocen como guía espiritual. Durant es un humanista de antigua estirpe, porque ha fomentado talleres y actos en defensa del ambiente. Finalmente la obra de Durant ratifica, que la historia de los pueblos la hace el espíritu renovador de quienes, como él, están dispuestos a sacrificarlo todo por una nación digna. El análisis semántico de lo expresado por Díaz y Rojas manifiestan el sentir hacia Pedro Durant en base a las experiencias observadas durante muchos años a favor de la sociedad merideña. También por las experiencias compartida en la actividad académica, de extensión e investigación. Se trata de evidenciar las responsabilidades asumidas a motu proprio, de una persona que se ha formado académicamente y con sentido humano hacia los que fueron sus docentes y con la generación de relevo. Cuerpo estable de ideas para contribuir al mejoramiento de la Educación Ambiental en el estado Mérida a partir de la interpretación de la praxis pedagógica del Profesor Pedro Durant. Se coincide con Durant (1989) al sostener que el éxito de los centros de ciencia dependen de dos factores: (a) de la capacidad que tiene el profesor asesor de captar y canalizar las iniciativas de los estudiantes hacia la problemática ambiental de la región y del país y (b) la actitud que adopta el director del plantel frente al desa- 232 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 rrollo del centro de ciencia. La experiencia del autor de esta investigación permite agregar otras variables para mejorar el desarrollo de los centros de ciencia en Mérida. Tal vez, lo que se quiere es que los futuros docentes coordinadores de Centros de Ciencia hayan tenido experiencias en un centro de ciencia como alumnos de pregrado para que transfieran el deseo de enseñar a sus alumnos como a ellos le enseñaron, utilizando el ambiente como el aula de clase. En este sentido, esta es la continuidad que el autor de esta investigación propone para la perpetuidad de los centros de ciencia en el sistema educativo venezolano, reconociendo su importancia en la creación de una conciencia ambientalista como lo refiere Cárdenas (1978). También las experiencias hay que evaluarlas y sistematizarlas para difundirlas, lo que facilitaría la creación de material educativo con información local, tal como lo sugiere la UNESCO (1977). Para el caso de Mérida, se puede solicitar la evaluación del material educativo “La Charla Única de Conservación”, con el propósito de publicarlo. En cuanto a la formación permanente de docentes en servicio, en estos programas los participantes deben estar conscientes que todos los días se aprende y permanentemente nos estamos formando. Un docente que asista a un trabajo de campo para aprender estrategia didácticas y técnicas para identificar elementos de su entorno, una vez culminado el trabajo, debe incorporar la estrategia a su esquema de vida mediante la praxis diaria. Cuando el docente se ejercita de esta manera, siente que ha avanzado en cuanto a formación académica y dominio de su entorno inmediato, entonces valora este tipo de aprendizaje y lo disfruta. Promover los círculos de estudios con participación de alumnos, esto permitiría preparar generación de relevo en aspectos ambientales y con una vocación definida. También la CLEA “Prof. Francisco Tamayo”, el equipo de docentes ambientalistas en Mérida y los docentes coordinadores de – 233 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 centros de ciencia pueden adquirir y generar compromisos hacia la actividad de investigación en Educación Ambiental. Conclusiones y recomendaciones 1. El aporte de Pedro Durant para la creación de los centros de ciencia en el estado Mérida se concreta con la creación del centro “Dr. José Francisco Torrealba” en el liceo Libertador en febrero de 1959. Y con una primera experiencia en el centro “Alejandro de Humboldt” en el liceo de Aplicación en Caracas durante 1956-57 a solicitud de la profesora Elena Martínez. Una segunda experiencia, con el centro de ciencia “Dr. Fernández Morán” posteriormente “Br. Rafael Rangel” en el liceo José Vicente de Unda en la ciudad de Guanare en el año escolar 1957-58. El fortalecimiento de la educación ambiental se evidencia en 1959 cuando Durant promueve una nueva cultura conservacionista-ambiental en el estado Mérida incorporada a planteles educativos dependientes del Ministerio de Educación, al usar los entornos ambientales para enseñar mediante los trabajos de campo. 2. La participación del profesor Pedro Durant en la formación inicial de docentes en el área de la educación ambiental se inició en el año de 1970 al facilitar cursos de biología general, ecología general y ecología ambiental a los estudiantes de la mención biología de la facultad de Humanidades y Educación y a los alumnos de la mención biología en la facultad de Ciencias en la ULA. En estos cursos utilizó las salidas de campo, discusión en el laboratorio, elaboración de informes y promoción de experiencias de los centros de ciencia. Hoy día estos profesionales están trabajando sus cursos con enfoque ambiental y asesorando centros de ciencia. 3. La participación del profesor Pedro Durant en la formación permanente de docentes al servicio de los diferentes niveles y modalidades de nuestro sistema educativo en el área de la educación ambiental se remonta al año de 1964, al facilitar el curso de conservación para docentes de la Zona Educativa del estado Mérida, 234 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 dejando claro que aunque no fue de Educación Ambiental, los contenidos y las estrategias didácticas usadas permitieron el aprendizaje de la estructura y función de algunos ambientes merideños. Posteriormente y a motu proprio ha facilitado talleres, durante una o dos veces por año a centros de ciencia y grupos de docentes, utilizando la metodología de los trabajos de campo, discusión y elaboración de informes. Estas actividades han generado la creación de un equipo de educadores ambientalistas, la creación de la Cátedra Libre de Estudios Ambientales “Prof. Francisco Tamayo” y el Aula Ambiental de la Universidad de Los Andes, Mérida. 4. La contribución del trabajo investigativo de Pedro Durant para la promoción de la Educación Ambiental en el estado Mérida durante su desempeño en la Universidad de Los Andes se concreta al uso que se le ha dado a la información científica producto de los proyectos ejecutados. Específicamente el proyecto de cuencas hidrográficas en la región andino venezolana de donde se generaron productos como el uso de la mesofauna dulceacuícola como indicadora de calidad de agua y el modelo de la hojarasca. Ambos incorporados a los contenidos que se imparten en algunos planteles educativos de la región merideña. Asimismo, se incorporaran los resultados del proyecto de Emponzoñamiento en la Zona Sur del Lago de Maracaibo mediante un programa de Educación Ambiental. También se han dado a conocer los resultados de la nueva especie del conejo de Barinas (Sylvilagus varynaensis) descrita por Pedro Durant. 5. La propuesta de un cuerpo estable de ideas intenta reforzar el trabajo que ha venido realizando el Profesor Pedro Durant en favor de los centros de ciencia y la educación ambiental en el estado Mérida. Se aspira al fortalecimiento de los centros de ciencia y promover la incorporación de la Educación Ambiental en todas las menciones en la Facultad de Humanidades y Educación para garantizar la formación inicial de los docentes desde la Universidad de Los Andes. También promover la formación permanente de los – 235 Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 docentes en servicio desde el Ministerio de Educación en Mérida y fortalecer el trabajo desde la Universidad de Los Andes, esto a través de un convenio entre ambas instituciones. Finalmente, considerando el ejemplo del profesor Pedro Durant, impulsar la investigación en Educación Ambiental desde la Facultad de Humanidades y Educación e incentivar a los docentes dependientes del Ministerio de Educación a participar en las mismas. A partir de las conclusiones se recomienda: al Ministerio de Educación y Deportes en el estado Mérida, a través de la coordinación regional de centros de ciencia, tecnología y educación ambiental: incorporar el programa de centros de ciencia al proyecto de Casas de Ciencia promovido por Fundacite Mérida; a la Facultad de Ciencias de la ULA: reactivar la propuesta sobre una maestría en Educación Ambiental presentada por Pedro Durant al Decanato de esa facultad y a las autoridades del Doctorado en Educación de la UPEL se les recomienda: dar a conocer la experiencia de esta investigación como una forma de operacionalizar el uso del método de las historias de vida en la línea de investigación “Educación, Ambiente y Calidad de Vida”. Agradecimiento El autor agradece al CDCHT-ULA por el financiamiento a esta investigación a través del proyecto H-395-96-C-04. Nota * Este fue entregado en abril de 2005 evaluado y arbitrado en mayo del mismo año (nota del Comité Editorial) Referencias bibliográficas CÁRDENAS, A, L. (1978). La Educación Venezolana y la implantación de una Educación Ambiental. En Rincón, P. (edit.) Educación, Participación Ciudadana y Conservación. Universidad 236 – Boletín Antropológico. Año 23, Nº 64, Mayo-Agosto, 2005. ISSN:1325-2610. Universidad de Los Andes. Mérida. Carlos Camacho. Pedro Durant: evolución y relevancia... pp. 207-237 de Los Andes 1er. Congreso Venezolano de Conservación. Caracas. Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. (1999). Gaceta Oficial Nro. 38.860 del 30-12-1999. CÓRDOVA V. (2003). Historias de Vida. Una metodología alternativa para sociología. Caracas: Ediciones FACES-UCV y Fondo Editorial Tropykos. DE LA TORRE, S. (1998). Cómo innovar en los centros educativos. Estudio de caso. España: Editorial Escuela española. Decreto Presidencial No. 108 (1974). Gaceta Oficial de la República de Venezuela. Mayo 26, 1974. Caracas. DÍAZ, A. (Junio, 1992). Semblanza del profesor Pedro Durant. Premio Francisco de Venanzi. El Vigilante, p.5. Mérida, Venezuela. DURANT, P. (1989). Evolución y significado de los centros de ciencia en Venezuela. Mérida: Ediciones Decanato de la facultad de ciencia de la Universidad de Los Andes. Ley Orgánica del Ambiente (1976). Gaceta Oficial de la República de Venezuela. Nro. 31.004, del 16-06-76. Ley Orgánica del Educación (1980). Gaceta Oficial de la República de Venezuela. Nro.2635, del 28-07-80. Libro Blanco de la Educación Ambiental en España (1999). Centro de innovaciones y formación permanente “Las Acacias”. Madrid: Autor. MARCHESI, A. y Martín, E. (1998). Calidad de la enseñanza en tiempos de cambio. Madrid: Alianza Editorial. MARTÍNEZ, M. (1998). La investigación cualitativa etnográfica en educación. Manual teórico- práctico. México: Trillas. Monografias.com (2004, Mayo 1). La Ecología. 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Éditions La Découverte, Paris. 177 p. ALFREDO PORTILLO Cursante del Doctorado en Educación Facultad de Humanidades y Educación Universidad de Los Andes La edición N° 119 de Hérodote, revista de geografía y geopolítica (disponible en la Biblioteca del Instituto de Geografía de la Facultad de Ciencias Forestales y Ambientales), está dedicada al tema del asalto del mundo por parte de los evangélicos, tema que es desarrollado a través de once artículos, incluyendo la editorial de su Director, Ives Lacoste. Este tema resulta de gran interés debido a que también en Venezuela, durante los últimos años, se ha acentuado la presencia de grupos religiosos considerados de manera general como evangélicos (Pentecostales, Testigos de Jehová, Mormones, Iglesia de Cristo, Iglesia Renacer, entre otros), asentados fundamentalmente en zonas urbanas clasificadas desde el punto de vista socioeconómico como pobres. Igualmente está el caso de las misiones evangélicas Nuevas Tribus, que han venido actuando desde hace varias décadas en la región sur de Venezuela, específicamente en las comunidades indígenas pemones, piaroas y yanomami. Es de destacar, por cierto, que a las Nuevas Tribus el gobierno del Presidente Hugo Chávez les ha ordenado su salida del país. En la editorial Lacoste comienza citando al diario Le Monde, en su edición del 25 de agosto de 2005, al publicar la noticia del llamado que hiciera el evangelista conservador estadounidense Pat Robertson, a darle muerte al Presidente de Venezuela Hugo Chávez. – 239 B o l e t í n A n t r o p o l ó g i c o . A ñ o 2 3 , Nº 6 4, Mayo-A gosto, 2 0 0 5 . I S S N : 1 3 2 5 - 2 6 1 0 . U n i v e r s i d a d d e Los And e s . M u s e o A rq u e o l ó g i c o . Recensión. . . p . p . 23 9 - 24 3 Luego explica la influencia que este personaje tiene en la derecha cristiana de Estados Unidos, influencia que es ejercida por medio de la Christian Coalition, organización que agrupa a numerosas iglesias evangélicas, cuyos tentáculos llegan hasta la Casa Blanca y el Pentágono. Lacoste considera que las iglesias evangélicas son agentes de influencia geopolítica de los principales dirigentes de Estados Unidos y cita como ejemplos concretos el papel que tuvieron los evangélicos, con financiamiento estadounidense, en la revolución de las rosas en Georgia y en la revolución naranja en Ukrania. En el siguiente artículo Isabelle Richet analiza el papel de los evangélicos en la vida política y social de Estados Unidos, en especial la llamada «revolución conservadora» que se viene desarrollando desde hace tres décadas y que busca transformar a la sociedad estadounidense de acuerdo a sus valores tradicionales. Señala Richet que los grupos evangélicos abordan la política con los mismos principios que guían su vida religiosa, para quienes no existe ninguna diferencia entre la esfera privada y la esfera pública, por lo que todos los dominios de la sociedad están por igual sometidos a la autoridad divina. Sin embargo, entre ellos existen diferencias, expresadas por una parte, entre los llamados «puristas» y «pragmáticos» y, por la otra, entre los «libertarios» (conservadores en lo económico) y los conservadores religiosos y morales. El análisis lo continúa Sebastián Fath, con el caso del peso geopolítico de los evangélicos estadounidenses a favor de Israel, para mostrar cómo la influencia evangélica no se limita al interior de los Estados Unidos, sino que se proyecta al exterior. El interés de los evangélicos por Israel, explica Fath, está fundamentado en lo que dice la Biblia y por eso lo ven a través de los anteojos de Abraham. A pesar de que también ha habido grupos evangélicos propalestinos, la islamización de Palestina ha conducido al fortalecimiento de los llamados sionistas cristianos, de los cuales se estima que hay unos 40 millones, quienes creen en el retorno de los judíos a Israel y en la conversión de estos al cristianismo. 240 – B o l e t í n A n t r o p o l ó g i c o . A ñ o 2 3 , Nº 6 4, Mayo-A gosto, 2 0 0 5 . I S S N : 1 3 2 5 - 2 6 1 0 . U n i v e r s i d a d d e Los And e s . M u s e o A rq u e o l ó g i c o . Recensión. . . p . p . 23 9 - 24 3 Sobre el sionismo cristiano y su desarrollo diserta Frédéric Encel, al referirse a las palabras de románticos, las espadas de combatientes y la influencia de evangelistas. Las palabras de cristianos como Palmerston, Shatesbury y Laharanne, quienes a lo largo del siglo XIX plantearon el retorno de los judíos a Palestina. Las espadas de combatientes como la del cristiano escocés Charles Orde Wingate, ferviente devoto del ideal sionista, quien en la década de los 30 adiestró en el arte militar a inexpertos reclutas judíos. La influencia de evangelistas, como la de los miembros de la Fraternidad Internacional de Cristianos y Judíos, quienes entre 1994 y 2002 recolectaron cerca de 65 millones de dólares, en beneficio de la inmigración judía a Israel. En otro artículo Bruno Gomes analiza el caso de las estrategias territoriales y la participación política de los evangélicos en Brasil. Se considera que la expansión evangélica en el país más poblado de América Latina es uno de los fenómenos religiosos más destacables de la segunda mitad del siglo XX y se estima que el 20% (34 millones) de la población pertenece a una de las numerosas denominaciones que constituyen el universo evangélico brasileño. Gomes contrasta la organización centralizada y jerárquica de la Iglesia Católica, con el funcionamiento en red de los evangélicos. Las redes se conforman en dos niveles: un primer nivel de adeptos que actúan de forma solidaria para enfrentar las dificultades económicas y sociales; un segundo nivel de iglesias y organizaciones que no conocen una autoridad jerárquica claramente definida, pero que unen sus fuerzas en ciertas acciones puntuales. En cuanto a su participación política, los evangélicos obtuvieron el 17,9% de los votos en la primera vuelta de las últimas elecciones presidenciales en Brasil y decidieron con sus votos el triunfo de Lula en la segunda vuelta. En el siguiente artículo Michel Leplay se refiere a la teopolítica de los protestantismos, explicando que el neologismo «teopolítica» sugiere que el hombre es habitado por algo más gran- – 241 B o l e t í n A n t r o p o l ó g i c o . A ñ o 2 3 , Nº 6 4, Mayo-A gosto, 2 0 0 5 . I S S N : 1 3 2 5 - 2 6 1 0 . U n i v e r s i d a d d e Los And e s . M u s e o A rq u e o l ó g i c o . Recensión. . . p . p . 23 9 - 24 3 de que él, y que protestantismos (en plural) expresa la pluralidad o el estallido político del protestantismo, en tanto que éste es congenitalmente políglota y multinacional. El autor analiza el fenómeno desde tres perspectivas: la histórica-social, la religiosa-espiritual y la teológica Otro artículo es el escrito por Morgan Garo y tiene por título «Los Rroms y las organizaciones evangélicas: ¿Entre el culto religioso y la estrategia política?». La palabra «Rrom» significa hombre en lengua rromani. Los Rroms (gente que viaja) están presentes en los diferentes países europeos y representan el 1% de la población total de Europa. Específicamente en Francia este grupo humano se vio expuesto desde 1950 a un doble proceso de evangelización, tanto por parte de los católicos como por parte de los evangélicos. Para el año 2005 los evangélicos han logrado tener una mayor influencia sobre ellos, entre otras razones, porque han logrado revertir la imagen negativa que los caracterizaba y los han hecho sentir como un «nuevo pueblo elegido que Dios ha escogido para que difundan la buenas nuevas sobre toda la Tierra». A continuación Alain Gascon presenta el conflicto religioso que existe en Etiopía, país caracterizado por su multirreligiosidad, en el cual es posible diferenciar regiones según la preponderancia que tiene determinado credo. De manera general, se puede diferenciar una franja norte-sur oriental con mayoría musulmana, una región centro-norte con mayoría cristiana (täwahedo), una región sur equilibrada entre cristianos y musulmanes y una franja centro-occidental con mayoría cristiana protestante. Los autores destacan la «revolución religiosa» impuesta por el crecimiento exponencial de los cristianos pentecostales, quienes utilizan técnicas modernas de comunicación y las lenguas vernáculas locales y se apoyan en una red de ONG nacionales y locales para reclutar adeptos entre los etíopes educados. En otro artículo Sandrine Raynal analiza el conflicto entre «las fuerzas del bien contra las fuerzas del mal» que se ha venido 242 – B o l e t í n A n t r o p o l ó g i c o . A ñ o 2 3 , Nº 6 4, Mayo-A gosto, 2 0 0 5 . I S S N : 1 3 2 5 - 2 6 1 0 . U n i v e r s i d a d d e Los And e s . M u s e o A rq u e o l ó g i c o . Recensión. . . p . p . 23 9 - 24 3 manifestando desde el año 2002 en Costa de Marfil (Côte-d´Ivoire), país ubicado en el occidente de África. Las fuerzas del bien, localizadas al sur del país, están representadas por el gobierno, al frente del cual se encuentra Laurent Gbagbo, convertido al pentecostalismo bajo la influencia del pastor Moïse Koré. Las fuerzas del mal son los rebeldes musulmanes, localizados al norte, conocidos también como los «Dioulas». Gbagbo utiliza de manera sistemática un discurso evangelizante, en el que el Apocalipsis tiene un papel de gran significación. La difusión de la cultura evangélica en Africa Central, específicamente en Brazaville (Congo), es luego abordada por los autores Élisabeth Dossier-Apprill y Robert Ziavoula. Destacan estos autores que el discurso ético de las principales iglesias evangélicas que allí operan está basado en la rigurosidad moral y el rechazo a las religiones ancestrales. Funcionan de manera igualitaria y descentralizada y tienen una estructura en redes flexibles que busca su ramificación en el conjunto del país, trascendiendo los clivajes étnico-religiosos. Valorizan la iniciativa individual en la producción de riqueza, fundamentando en la palabra bíblica la necesidad del trabajo y el espíritu empresarial, desarrollando una suerte de «teología de la prosperidad». El último de los artículos es desarrollado por Philip Poupin y trata de la acción desplegada por los «angeles» cristianos para socorrer a los musulmanes de Darfour, la región ubicada al sudoeste de Sudán, en la frontera con Chad. En esta región estalló un conflicto en el año 2003, entre los milicianos «árabes», apoyados por el gobierno islamita de Jartum, y los «africanos» rebeldes, también musulmanes. Poupin explica que, con motivo de la crisis humanitaria en que se ha visto envuelta dicha región, varias organizaciones evangélicas estadounidenses, entre las que destaca la Samaritanian’s Purse, dirigida por Franklin Graham, el hijo del predicador Bill Graham, se han hecho presentes (bajo mandato de la ONU) para ocuparse de la seguridad alimentaria, la agricultura, el agua y los servicios sanitarios de los refugiados musulmanes. – 243 Título: Boletín informativo. Informative bulletin. Páginas/Colación: 245-248 En: / Boletín Antropológico Vol 2 - Num 64 enero - abril, 2005 Ver boletín en PDF (0.1 Mb) B o l e t í n A n t r o p o l ó g i c o . A ñ o 2 3 , Nº 6 4, Mayo-A gosto, 2 0 0 5 . I S S N : 1 3 2 5 - 2 6 1 0 . Universidad de Los Andes. Museo Arqueológico. Boletín Informativo ... p.p. 245-248 Boletín Informativo 1. El Doctorado en Antropología.Empezó en abril 2005 el Curso de Actualización para el Doctorado en Antropología de la Universidad de Los Andes, dirigido a la formación antropológicas de otros humanistas y científicos con interés en la antropología, los cuales ya tienen una maestría en una disciplina afín a la nuestra (es decir: para sociólogos, psicólogos, psiquiatras, historiadores, historiadores del arte, educadores, botánicos –disciplinas a las cuales pertenecen hasta el momento los inscritos en dicho curso). Este curso incluye seminarios obligatorios (de 16 horas (1 crédito) o 32 horas, con 2 créditos cada uno) y seminarios optativos (de 16 horas y 1 crédito, o de 32 horas y 2 créditos), los cuales fueron aprobados por el Consejo de Estudios de Postgrado de la Universidad de Los Andes. Los seminarios aprobados para dicho curso han sido los siguientes:a) Obligatorios: Antropología Fundamental, Niveles I (1 crédito), II (2 créditos), III (2 créditos) y IV (2 créditos), Etnografía general y Etnografía de Venezuela, Niveles I (1 crédito) y II (2 créditos), Cultura, Herencia cultural e identidad cultural (2 créditos) – b) Optativos: El campo semántico: un instrumento para el antropólogo (1 crédito), Representación y transcultura. El complejo mito/rito (1 crédito), Antropología y Salud (niveles I y II – 2 créditos), Análisis del discurso como estrategia metodológica de investigación psicosocial de la cognición (1 crédito), Antropología del Género (1 crédito). – 245 B o l e t í n A n t r o p o l ó g i c o . A ñ o 2 3 , Nº 6 4, Mayo-A gosto, 2 0 0 5 . I S S N : 1 3 2 5 - 2 6 1 0 . Universidad de Los Andes. Museo Arqueológico. Boletín Informativo ... p.p. 245-248 El curso definitivo del Doctorado (en el cual podrán inscribirse antropólogos con maestría en una de las ramas de la antropología, u otros profesionales que hayan aprobado el Curso de Actualización para el Doctorado en Antropología) empezará en 2006. Ha sido concebido como un postgrado interinstitucional y personalizado (cada estudiante de este curso hará con su profesortutor su propio programa de formación –a ser aprobado por el Consejo Directivo de este Doctorado- y deberá presentar en el primer semestre su proyecto de tesis). El programa de formación podrá realizarse en cualquier institución universitaria reconocida, venezolana o del extranjero. Mayores informaciones al respecto pueden pedirse a los correos, fax y teléfono como sigue: [email protected], [email protected], [email protected]. Fax: 00 48 (0)274 – 240 1919, o 240 2344. Teléfono: 00 48 (0) 240 1739. 2. Termina la quinta cohorte de nuestra Maestría en Etnología su escolaridad, en octubre 2005, ingresando ahora estos estudiantes a su cuarto semestre bajo la sola dirección de su tutor(a), a fin de seguir desarrollando su trabajo de investigación para la tesis (investigación que empezó desde el primer semestre, ya que esta maestría tiene su eje en la investigación). 3. Empezó en abril 2005 el Curso Propedéutico de esta Maestría, de modo que se abrirán nuevamente las inscripciones definitivas en la Maestría de Etnología (sexta cohorte) en enero-febrero 2006. 4.Grupo de Investigaciones Antropológicas y Etnológicas (GRIAL): Está terminando el grupo este año la segunda etapa de su proyecto grupal “Estudio antropológico integral y pluridisciplinario del Occidente de Venezuela, pasado y presente. Aplicaciones sociales”, proyecto que ha sido financiado desde el principio por el CDCHT (Consejo de Desarrollo 246 – B o l e t í n A n t r o p o l ó g i c o . A ñ o 2 3 , Nº 6 4, Mayo-A gosto, 2 0 0 5 . I S S N : 1 3 2 5 - 2 6 1 0 . Universidad de Los Andes. Museo Arqueológico. Boletín Informativo ... p.p. 245-248 Científico, Humanístico y Tecnológico) de la Universidad de Los Andes, bajo el código H-743-03-09-AA. Dentro de la línea de investigación de nuestro grupo trabajan también los estudiantes de la Maestría en Etnología. 5. En la sede del Museo Arqueológico de la Universidad de Los Andes se inauguró la exposición “Petroglifos del estado Mérida”. Esta muestra expositiva, diseñada para ponerla a circular por toda la región, muestra al público merideño las representaciones rupestres que existen en la cuenca del río Mocotíes, más específicamente en las poblaciones de Santa Cruz de Mora y Zea. Petroglifos de Mérida contó con los auspicios del Ministerio de la Cultura/CONAC y con el apoyo fotográfico de Miguel Ángel Salamanca. 6. Se prepara con la publicación de tres libros dedicados a la antropología y la arqueología, la aparición pública de Ediciones Dàbanatá. La palabra dábanatà es una palabra del idioma Baniva, lengua perteneciente a la familia lingüística MaipureArawaka (o Arahuaca) hablada aún hoy en las riberas del río Guainía-Río Negro, especialmente en la población de Maroa, capital del Municipio del mismo nombre en el Estado Amazonas. También la lengua baniva se habla por banivas que habitan en Puerto Ayacucho que hace años migraron desde el Guainía a la capital de ese Estado. En la actualidad la lengua se encuentra en un interesante proceso de revitalización lingüística no sólo en Maroa sino en Puerto Ayacucho. Dábanatà, voz derivada del verbo dabanâtasri significa comenzar, iniciar; pero es una palabra fundamentalmente utilizada en los textos míticos que al inicio de las narrativas sagradas del origen de éste y otros pueblos arawakos siempre comienzan con la expresión Dábanàta Pêepusri “Cuando comenzó el Mundo”; es – 247 B o l e t í n A n t r o p o l ó g i c o . A ñ o 2 3 , Nº 6 4, Mayo-A gosto, 2 0 0 5 . I S S N : 1 3 2 5 - 2 6 1 0 . Universidad de Los Andes. Museo Arqueológico. Boletín Informativo ... p.p. 245-248 pues el comienzo, el inicio de los hechos trascendentales del mundo de vida de los pueblos Arawakos. Ediciones Dábanatà será un esfuerzo editorial para la divulgación de las investigaciones antropológicas, lingüísticas y arqueológicas que se producen en territorio venezolano. También Ediciones Dábanatà estará abierta a la difusión y revitalización de los saberes indígenas panamerindios. 248 – El Boletín Antropológico en la Web Título: Páginas/Colación: 249 En: / Boletín Antropológico Vol 2 - Num 64 enero - abril, 2005 Ver boletín en PDF (0.06 Mb) B o l e t í n A n t r o p o l ó g i c o . A ñ o 2 3 , Nº 6 4, Mayo-A gosto, 2 0 0 5 . I S S N : 1 3 2 5 - 2 6 1 0 . Universidad de Los Andes. Centro de Investigaciones Etnológicas / Museo Arqueológico. El Boletín Antr opológico en la Web Antropológico 1. Boletín Antropológico www.Saber.ula.ve/boletín_antropologico 2. Observatorio Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación http://www.octi.gov.ve/revistas/revista.asp?vPK=170 3. El Rincón del Antropólogo. Revistas de Antropología http://www.plazamayor.net/antropologia/revistas/index2.html 4. Biblioteca Digital Andina. Comunidad Andina de Naciones http://www.comunidadandina.org/bda/revistas_digitales.html 5. LATINDEX http://www.latindex.org/busquedas/directoriotitulo.html 6. Citas Latinoamericanas en Ciencias Sociales y Humanidades -C L A S E http://www.dgbiblio.unam.mx/clase.html 7. Indice de Revistas Venezolanas de Ciencia y Tecnología Scielo-REVENCYT http://scielorevencyt.funmrd.gov.ve/scielo.php 8. Handbook of Latin American Studies. Journals Indexed. http://www.rlg.org/en/page.php?Page_ID=189 – 249