el salvador de burriana

Rebeca García Conde
EL SALVADOR DE BURRIANA
1.-CONTEXTO HISTÓRICO
Durante el periodo musulmán, Burriana fue la ciudad más significativa del norte de Valencia,
madinat Buryána, y adoptaba el nombre de "Medina Alhandra" (Ciudad Verde). En el año 1087 las
tropas de El Cid, dictadas por Alvar Fáñez, conquistaron Burriana. El Cid estuvo en la ciudad con
su aliado Pedro I de Aragón y Navarra. Vuelta a manos de los musulmanes, Jaume I la conquistó
finalmente el 16 de julio del año 1233, tras dos meses de asedio en su primera campaña para
recuperar Valencia, instante clave del inicio de la conquista del Reino. La población musulmana fue
desterrada y su territorio pasó a la Corona. Jaume I le dio carta de Puebla en el año 1233, y fue una
de las villas de realengo más importantes.
Jaume I el Conqueridor, viendo ardua la conquista diligente de las tierras valencianas, cree
indispensable la presencia de su amada Dª Violante de Hungría en los territorios que acaba de
conquistar para revelar, tanto a los musulmanes como a sus tropas y a sus súbditos de Cataluña y
Aragón, que la conquista del reino de Valencia es una empresa seria, con visión de futuro, y no un
simple paseo militar.
No debemos olvidar, sin embargo, que en la primera mitad del siglo XIII, Burriana es una villa de
frontera en el mundo islámico, rodeada de pueblos y alquerías islámicas bajo dominio señorial
cristiano; por lo tanto es un lugar inseguro en proceso de colonización por los cristianos del norte.
Burriana disponía de murallas desde la era musulmana, existiendo también escritos que la citan
como castillo. A pesar de ello en el siglo XVI estaban muy arruinadas por lo que Carlos I, primer
rey de la ya unificada España, ordenó su restauración y adaptación a las nuevas técnicas defensivas
con y contra la artillería. El método defensivo de la ciudad estaba configurado por un circulo
amurallado con fuertes y tres puertas situadas hacia Onda, Tortosa y Valencia, que se sostuvo
prácticamente entero hasta el siglo XVII, en el que fueron derrumbadas. Hoy en día solamente se
preservan unos pequeños tramos y dos torres cuadradas, una de ellas en la calle de San Pascual y
otra junto a la Iglesia Parroquial de El Salvador.
El rey conquistador cedió la Villa de Burriana de instituciones municipales y religiosas que
dinamizaron la vida urbana y fomentaron la repoblación con cristianos viejos.
De la Burriana medieval, hoy tan sólo vemos la iglesia de El Salvador que nos sugiere un pasado
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que se adentra más allá del siglo XIX, con la ayuda de un laberinto de callejuelas que siguen a duras
penas un trazado urbano de círculos concéntricos, casi irreconocible, en torno a las murallas de
origen musulmán. La singularidad de este trazado urbano ha sido protegida patrimonialmente con la
declaración como Conjunto Histórico Artístico.
Podemos imaginarla con la ayuda de la Xilografía de la villa de Burriana, publicada en 1564 por
Rafael Martín de Viciana, en el “Libro Tercero de la Crónica de la Ínclita y Coronada Ciudad de
Valencia y de su Reino”, donde da una visión de cómo era la villa en el siglo XIII tras la conquista
cristiana, pues en su época ya había crecido por los arrabales.
La actual trama urbana del centro histórico o «Vila» se asemeja a la medieval, aunque falta la isla
de casas que conformaba los edificios municipales y que ahora, derribada en 1939 a raíz de la
guerra civil de 1936, que está ocupada por el jardín actual.
Mosén Doménech Beltall fue el primer párroco de Burriana y de su comarca la Plana. Bien poco
sabemos de él; era hermano del Abad cisterciense de Benifassà, el que inició las obras
monumentales de aquel cenobio de fundación real, y en 1255 fue nombrado a párroco de Morella,
donde al poco tiempo de llegar se iniciaron, curiosamente, las obras de construcción de la parroquia
de Santa María. Es evidente que este rector era un hombre emprendedor y docto que estaba en
contacto con los maestros franceses constructores de la nueva arquitectura, conocida como gótico
meridional.
2.- El SALVADOR
La iglesia fue declarada como bien de interés cultural el 24 de abril de 1969.
La basílica de El Salvador, localizada en la plaza del ayuntamiento de Burriana (Provincia de
Castellón, España), es un monumento de estilo gótico que empezó a edificarse a finales del siglo
XIII. Es la iglesia matriz del cristianismo medieval en las comarcas septentrionales del antiguo
Reino de Valencia y la primera iglesia de tipo parroquial que se construye en las tierras recién
conquistadas a los musulmanes.
En el siglo XVII tuvo una intromisión barroca que alteró la imagen de la iglesia; en el siglo XVIII
se erigió la capilla de la Comunión y en el siglo XIX se ensanchó la nave con dos tramos. En el
siglo XX, tras la Guerra Civil se retornó el aspecto primitivo gótico a la cabecera de la iglesia.
Se construirá con buenos fundamentos y piedra picada traída de las canteras de los alrededores,
siendo por muchos años el orgullo de los nuevos colonos y la admiración de los vecinos de las otras
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villas de la Plana.
Este templo es un edificio conmemorativo y propagandístico a la vez. Conmemorativo porque
simboliza la primera gran victoria militar de Jaume I en la conquista del reino musulmán de AlBalensiya, siendo ofrendada su vocación a la Virgen María tal y como se hizo en el resto de
instauraciones a lo largo de las ciudades conquistadas, siendo más tardía su advocación a Jesucristo
Salvador a mediados del XIV. El sentido propagandístico hay que verlo en la monumentalidad y
grandeza del nuevo templo todo de piedra, que no tendrá punto de comparación con las humildes
mezquitas de las medinas rurales de los alrededores, y en el choque que creará sobre los
musulmanes cercanos de las demás villas de la Plana.
Allí nacerá en la arquitectura gótica valenciana, la bóveda de ladrillo a rosca y los nervios de
piedra, con la construcción edilicia de sillares. Se dará aquí, por primera vez, la conjunción de
ábsides cubiertos de bóvedas (bien de ladrillo, bien de piedra) con una nave única, cubierta con
bóvedas de crucería nervada y plementos de ladrillo, siendo pionera en acoger las nuevas directrices
de los frailes mendicantes para edificar iglesias anchas y diáfanas, aptas para el seguimiento de la
predicación, siguiendo el modelo de la catedral de San Esteban de Toulouse del Languedoc.
El ritmo de las obras es lento. El templo, ábsides y nave, debió de acabarse en el último tercio del
siglo XIII ya que el 20 de septiembre de 1286 Alfonso III de Aragón celebra aquí sesión de las
Cortes Valencianas y jura los fueros del Reino de Valencia.
También se celebrarán recepciones reales como la que le rindió la Villa de Burriana a Pedro IV el
Ceremonioso (En València, Pere II el del Punyalet), con motivo de anular el enfeudamiento de
Burriana a su hermanastro el Infante Juan, después de haberles cerrado las puertas de la Villa y
apedrearlos por tan arbitraría decisión, el rey fue recibido y acompañado por toda la vecindad desde
el Portal de Valencia hasta la Iglesia donde cantaron la "Te Deum" en acción de gracias.
3.- DESCRIPCIÓN DE LA BASÍLICA
De planta románica, la Iglesia del Salvador empezó a construirse bajo las ordenes arquitectónicas
del estilo gótico primitivo, al que se le fueron alternando algunos elementos románicos.
Se trata de una templo de una única nave con capillas entre contrafuertes. El ábside data del siglo
XIII.La cabecera poligonal tiene siete lados con cinco capillas absidiales radiales sin girola en la
parte del centro, mientras que las dos de los extremos son cuadradas, una amparaba la sacristía del
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siglo XIII, y la otra es la torre medieval. Las cinco capillas son también poligonales, todas están
adornadas con ventanales góticos, es decir, apuntados y con vidrieras; la del centro tiene tres
ventanas como simbolo religioso (La Trinidad). Cada una tiene un soporte externo de dos
contrafuertes. La cabecera esta envuelta por una bóveda de crucería cuya plementeria es de ladrillo.
La iglesia actual tiene seis trechos de los que cuatro son los primarios u originales, mientras que los
dos más cercanos a los pies son el resultado de la extensión del siglo XIX para fusionar la iglesia
con la capilla de la Comunión, y con el campanario (siglo XIV). En el siglo XVIII se edificó la
capilla de la Comunión. De planta de cruz griega inscrita y estilo neoclásico en un cuadrado, está
encubierta por una cúpula dorada con linterna sobre un tambor octogonal. En su interior con frescos
de Vergara
La nave y las capillas contiguas sostienen el recubrimiento barroco, mientras que la cabecera es de
estilo gótico debido a una restauración llevada a cabo en el siglo XX. La cubierta original de la nave
es de bóveda de crucería simple, oculta hoy por el revestimiento dando la imagen de bóveda de
cañón con lunetos.
En el exterior se encuentran dos portadas barrocas del siglo XVII, que vinieron a reemplazar a las
dos góticas. Ambas se situan en la plaza. La portada más próxima a la cabecera fecha de 1695-1696,
es de un solo cuerpo de orden toscano con pilastras y retropilastras, la línea de cornisa varía para
guarecer el escudo de la ciudad quebrando el entablamento. Encima de éste hay una hornacina
avenerada flanqueada por volutas y pirámides. La otra, más próxima a los pies, fue realizada en
1697. Tiene tres cuerpos menguantes en orden ascendente. El cuerpo inferior con el acceso
flanqueado por columnas con el fuste adornado con estrías y motivos figurativos sobre un podio. El
cuerpo superior con una hornacina encuadrada por columnas y pilastras; mientras que el tercer
cuerpo a modo de remate tiene un óculo oval sobre el que se establece una línea de cornisa
cóncava-convexa, al estilo barroco.
La iglesia se complementará con modificaciones para reconvertila en una iglesia fortaleza, con la
construcción de dos torres gemelas que flanquean el ábside comunicado por un paso de ronda.
La torre de campanas del lado del evangelio (del Crist ratat) se construyó con dos salas de
campanas, abiertas por dos arcadas de medio punto en cada una de sus caras. La otra torre contenía,
en la planta baja la sacristía y en la planta alta una cámara o cuerpo de guardia con barbacana, sobre
la que había una terraza rodeada de almenas. Es posible que esta cámara hubiese tenido, también,
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función de tribuna sobre el presbiterio, pero desmochada en la Guerra de las Germanías quedó
inutilizada para el uso, al situar en su lugar, en el siglo XVI, una bóveda de cañón que protegía la
maquinaria del nuevo órgano.
Hay que puntualizar que en la primera capilla de la cabecera en el lado del evangelio (el de la
izquierda) bajo un arco solio, según cuenta la tradición, hay una urna sepulcral de piedra en la que
yace un hijo abortivo de Violante de Hungría y de Jaime I. La iglesia cuenta con una cripta bajo el
ábside donde eran enterrados, bajo su expreso deseo, los párrocos que habían estado dirigiendo la
iglesia.
A fines del siglo XIII un cataclismo sacude fuertemente los muros y bóvedas de la iglesia, lo que
obligará a importantes obras de reconstrucción visibles todavía en los ventanales superiores del
ábside, y será la entonces la Señora de Burriana, D.ª Constanza de Hohenstaufen, emperatriz de
Grecia, quien tomará empeño en su reconstrucción, así como las aportaciones del rey Jaume II, con
lo que podemos considerarla acabada en el segundo tercio del siglo XIV; ya que con motivo del
cambio de Fuero de Zaragoza por el de Valencia, que se firmó en la Villa de Burriana, en las Cortes
Valencianas, en ella celebradas por el rey Alfonso IV el Benigno, el rey concedió a la Villa, como
contrapartida, el derecho y el uso consuetudinario de percibir las primicias para la construcción y la
reparación de la iglesia y de otros edificios públicos.
En 1938 la iglesia y la torre campanario fueron dinamitados, cayendo las bóvedas y la cubierta de la
nave. Una vez finalizada la guerra civil se procedió a su reconstrucción.
El Campanario de Burriana, no es una torre exenta, sino que es el complemento defensivo y cívico,
señal y emblema del poder municipal, por lo que la Universidad de Burriana puso en él el escudo
municipal. La otra cara de este sillar con la heráldica municipal, nos muestra el autor de la torre, el
maestro cantero Bertomeu Bataller, que signó su obra en la cara Sudoeste de dicho sillar, a mitad
del siglo XIV.
El Campanario de Burriana fue edificado como torre fuerte del Palacio Municipal o Casa de la
Villa, no como campanario de la iglesia, y debía tener una dependencia que servía de armería y
aljibe con acceso directo a la torre, mediante un menudo portal ojival, que en el último tercio del
siglo XIX comunicaba con la casa del campanero. En estos momentos recae en la vía pública y está
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custodiado por dos gárgolas con forma de leones, procedentes de la reforma del siglo XVIII, las
únicas que se conservaron enteras después de la voladura del Campanario en 1938. Por su porte
gallardo, es conocido popularmente como "El Templat".
4.- DATOS ACTUALES
El día 19 de mayo del año 2013, en el periódico El Mundo de Castellón, informaron públicamente
que el obispo de la diócesis de Castellón -Casimiro López Llorente- había anunciado el domingo de
esa misma semana a la comunidad parroquial del templo de El Salvador de Burriana (Castellón) que
tenía a partir de ese momento la categoría de Basílica Menor.
«En un escrito con fecha del 17 de mayo, fiesta de San Pascual Baylón y patrón de la Diócesis, el
obispo ha comunicado la concesión de este título, "que establece un peculiar vínculo de El
Salvador con la Iglesia de Roma y el sumo Pontífice con diversas prerrogativas, tareas y
obligaciones", indican fuentes del Obispado en un comunicado.
"Este privilegio" es concedido por la 'Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los
Sacramentos' "en virtud de las facultades especiales recibidas del Santo Padre". Un decreto que se
firmó el 26 de febrero de este año, y se entregó al Obispo de Segorbe-Castellón el pasado 26 de
marzo.
El hecho de ser Basílica menor implica "una especial responsabilidad en promover la formación
litúrgica de los fieles así como el estudio y divulgación de los documentos de los Pontífices y de la
Santa Sede, principalmente de aquellos que traten sobre la sagrada Liturgia".
El 16 de junio de 2013, la Iglesia de El Salvador, fue ascendida al rango de Basílica Menor por el
Papa Francisco.»
Rebeca García Conde
BIBLIOGRAFÍA
Josep Lluís GIL i CABRERA: La Iglesia Parroquial del Salvador. Catálogo de Monumentos y
Conjuntos de la Comunidad Valenciana. (Consellería de Cultura, Educación y Ciencia de la
Generalitat Valenciana), Valencia, 1983, vol. I, págs. 249-259.
Vicente TRAVER TOMAS: La cabecera de la Iglesia Mayor de Burriana. Boletín de la sociedad
castellonense de Cultura, Castellón, 1960, t. XXXVI, págs. 83-90.
Josep Lluís GIL i CABRERA: La histórica capilla de los Viciana. Catálogo de la Exposición de
la restauración del lienzo «Santa Ana, la Virgen y el Niño». Pintura del siglo XVII en la parroquia
del Salvador, Burriana, 24-29 de enero de 1985.
Josep Lluís GIL i CABRERA: La Iglesia Parroquial del Salvador. Burriana en su Historia
(Magnífico Ayuntamiento de Burriana), Burriana, 1987, pags. 99 a 129.