Legalización drogas

LA LEGALIZACIÓN DE LAS DROGAS, UN TEMA A DEBATIR 1. Introducción Un breve acercamiento al significado del término La OMS (Organización Mundial de la Salud) define como droga a toda aquella sustancia que introducida en un ser vivo, sea cual sea el medio por el que se haga (vía respiratoria, cabidad bucal, inyección intravenosa, etc), es capaz de modificar una o más funciones del organismo que se relacionen con la conducta, comportamiento, juicio, percepción o estado de ánimo. Por consiguiente, se engloba en esta definición a todo tipo de sustancias psicoactivas, tanto legales (alcohol, tabaco, medicamentos, etc.) como ilegales (cannabis, cocaína, heroína, etc..). Asimismo, el dogma ha establecido una serie de criterios para marcar una cierta diferenciación entre unas substancias y otras, estos son tales como la adicción, el grado de alteración de las funciones psíquicas de quien las consume, el malestar y dependencia física o psicológica en el cese de su consumo y los fines terapeuticos o no de las mismas. No obstante, hay quienes prefieren restringir de forma exclusiva el significado del vocablo droga a aquellas sustancias que se usan sin fines terapéuticos. Sea como fuere, los criterios diferenciadores no dejan fuera del más restrictivo significado del término al alcohol y el tabaco, drogas que generan miles de millones de euros (muchos de los cuales son impuestos) en un marco de legalidad bastante amplio y con una aceptación social, cuanto menos, elevada. Por otro lado, también resulta interesante dejar constancia de las acepciones de la palabra droga según el diccionario de la RAE (Real Academia Española), así las tres que nos conciernen son: 1. f. Sustancia mineral, vegetal o animal, que se emplea en la medicina, en la industria o en las bellas artes. 2. f. Sustancia o preparado medicamentoso de efecto estimulante, deprimente, narcótico o alucinógeno. [...] 4. f. medicamento. 1 La RAE, por tanto, resalta particularmente la vinculación del vocablo a la medicina y a los fines terapéuticos sin dejar de lado, por supuesto, la posibilidad (que se lee entre líneas) de que tenga fines lúdicos. Tipos de drogas Siguiendo con la definición expuesta por los académicos de la lengua en la vigésimo tercera edición de su diccionario, en la entrada referente a este concepto se añaden tres acepciones más del término unido a otras palabras. Veamos: ~ blanda. 1. f. droga que no es adictiva o lo es en bajo grado, como las variedades del cáñamo índico. [...] ~ dura. 1. f. droga que es fuertemente adictiva, como la heroína y la cocaína. Como bien dice Arturo Pérez Reverte en su texto “Limpia, fija y da esplendor”, los académicos son expertos en lanzada a moro muerto. Esta clasificación de las drogas está más que extendida y a la hora de hablar de ellas siempre se suelen diferenciar entre drogas duras y drogas blandas. Dentro de el primer grupo nos encontramos al alcohol (legalizada), que es un depresivo de consumo oral y causa efectos como mareos, náuseas, vómitos, complicaciones en la locución, problemas motores e incluso la muerte en dosis elevadas; las anfetaminas (legalizada), también de consumo oral pero a su vez con posibilidad de ser inyectada, ingerida o fumada/inhalada que se emplea para tratar la hiperactividad y en algunos casos extremos la obesidad; el MDMA o éxtasis, de consumo oral e ilegal que provoca disturbios psiquiátricos además de tensión muscular, náuseas, falta de visión, palpitaciones elevadas, etc.; la metanfetamina (legal), que puede consumirse por vía oral, ser inyectada, ingerida o fumada y causa irritabilidad, agresión, hipertermia, paranoia, convulsiones, alucinaciones, etc.; speed, que provoca euforia y disminución del cansancio y un incremento de la actividad física con efectos adversos como las convulsiones, ansiedad o irritabilidad; benzodiapesinas (legal), son estimulantes y relajantes que se emplean en expedientes de elevada ansiedad y ataques de pánico y tiene un efecto sedante similar al del alcohol; cocaína, es un estimulante que provoca una respiración elevada, aumenta el ritmo cardíaco y provoca ataques epilépticos, infartos, insomnio, ansiedad, inquietud, irritabilidad y puede causar muerte por sobredosis; crack, se forma a través de residuos de la cocaína provocando los mismo efectos que esta; el PCP o polvo de ángel, es una droga sintética alucinógena que se consume mediante la ingesta, inhalación o inyección y provoca 2 problemas de coordinación motriz, ataques respiratorios, desorientación, temor, pánico o agresión, y es propensa al contagio de enfermedades como el VIH o la hepatitis cuando se consume mediante inyección; LSD, son las siglas de dietilamida de ácido lisérgico, droga que produce alucinaciones con efectos como un aumento de la temperatura y la presión, la falta de apetito y sueño, estremecimiento o alucinaciones crónica; y los esteroides (legal), que se consumen por vía oral o mediane inyección y provocan cambios continuos de ánimo, irritabilidad y agresividad, además de dañar profundamente a órganos vitales como el riñón, el hígado y el corazón. En el otro grupo, el de drogas blandas, nos encontramos a algunos tipos de setas que se consumen mediante la ingesta y aumentan la presión, producen náuseas y alucinaciones; la marihuana que se consume generalmente mediante la inhalación, generalmente fumándola, o mediante la ingesta y provoca pérdida de la noción temporal y la falta de coordinación, además de sequedad bucal e irritación ocular, asimismo, también tiene efectos muy positivos en el tratamiento de enfermedades graves como algunos tumores; el hachís, es un derivado de la marihuana que se consume de forma similar a esta y con efectos muy parecidos; tabaco (legal), contiene nicotina y se consume de forma general fumándolo, genera problemas de corazón, laringe, esófago, vejiga páncreas y pulmón entre otros; opiáceos (legal), estamos hablando analgésicos como el Perconet, Vicodin, la morfina e incluso los jarabes para la tos, se usan para radicar fuertes dolores en breves periodos de tiempos y contienen derivados de la heroína; cafeína (legal), es una droga psicoactiva que se consume en infusiones de las plantas que la contienen como el café, el té, el mate o el guaraná y tiene efectos estimulantes, asimismo, un excesos puede provocar intoxicación. ¿Debe legalizarse la producción, el comercio y, por tanto, el consumo de las drogas? En el grupo DocPost, defendemos la postura a favor a raíz de la anterior pregunta. Consideramos que sería un gran cambio, que favorecería a todo el mundo, directa o indirectamente. Y defendemos un consumo controlado y responsable, igual que sucede, en nuestro país, con el caso del tabaco y el alcohol. La opinión más generalizada de la sociedad, al respecto, es que las drogas permanezcan fuera de la legalidad; muchas de ellas pueden estar causadas por el miedo a los múltiples efectos negativos que pueden tener en las personas; dentro de un marco más que abundante de argumentos en contra. ¿Cómo alguien va a desear la legalización de unas sustancias que hacen daño a la gente? Si las drogas se legalizan, la sociedad va a terminar por degradarse. Estos son algunos de los pensamientos más comunes y comprensibles de la sociedad, pero los argumentos a favor de la legalización de dichas sustancias, demuestran que un marco no prohibicionista es mucho mejor que la ilegalidad. No es una solución perfecta, pero sí menos costosa, en todos los sentidos de la palabra, que su prohibición. 3 Nos posicionamos a favor de una legalización regulada de las drogas, para así fomentar un consumo responsable de dichas sustancias; el cual deja al margen, al igual que ocurre con el tabaco y el alcohol, a menores de 18 años. Y como ya hemos explicado en la definición de droga; el alcohol y el tabaco también están como tales, generan adicción y ciertos efectos en el cuerpo humano; lo que lleva a preguntarnos: ¿por qué, si son tan adictivas unas como otras, unas son legales y otras no? 2. Argumentos a favor de la legalización La legalización pondría fin a la parte lucrativa del negocio del narcotráfico, al traer a la superficie el mercado negro existente. Con la desaparición de la clandestinidad del narcotráfico disminuiría drásticamente ya que aquellos que se dedican a ello tendrían que adaptarse a las condiciones legales lo que les llevaría a abandonar el narcotráfico. Con él desaparecería, en consecuencia, la problemática social ligada a dicha actividad. Con la prohibición de las drogas no se detiene el mercado, lo único que se consigue es la falta de control sobre él, se sumerge en la ilegalidad. Legalizar las drogas haría que la fabricación de dichas sustancias se encuentre dentro del alcance de las regulaciones propias de un mercado legal, con los controles de calidad pertinentes. Bajo la prohibición, este control no se lleva a cabo y esto hace que existan problemas derivados de la alteración de las substancias. Legalizar las drogas, como ya dijimos, acabaría con, por lo menos, parte de el mercado negro y delincuencia que en la actualidad se asocia a esta. Por tanto, podría reducirse la parte del presupuesto público que se destina a tratar de luchar contra esto podría emplearse en combatir a verdaderos criminales o incluso a llevar a cabo campañas de ayuda a personas que tienen problemas con las drogas o el alcohol. Las cárceles se verían descongestionadas, ya que gran parte de los que hoy se encuentran en ellas están por motivos de narcotráfico. “Tras años de insistir en la misma estrategia, hay que constatar el fracaso de las actuales políticas punitivas, que tienden a convertir a los adictos en delincuentes y nutren una economía criminal cada vez más poderosa” (El País, Legalizar las Drogas. 14 de septiembre de 2014). Con la no prohibición de las drogas, o lo que es lo mismo, su legalización, pondría fin a un foco importante de corrupción, la cual está muy presente en el gobierno. Ya que en gran cantidad de países, multitud de policías, controladores de aduana, jueces y demás autoridades, han sido comprados, sobornados o coaccionados, por narcotraficantes, para hacer la vista gorda. esta situación crea una gran desconfianza por parte de la población hacia los que, en teoría, la protegen.
4 La legalización conducirá a que la sociedad aprenda a convivir con las drogas, tal y como lo ha hecho con otras sustancias como el alcohol y el tabaco. Se ha visto que las políticas de prohibición que hacen ver a los consumidores como criminales no ayudan al surgimiento de comportamientos que permitan lidiar con los problemas de adicción y el consumo precoz de estas sustancias. El aprendizaje que se produciría derivado de la convivencia con las drogas sería valioso para toda la sociedad y permitiría internalizar los efectos negativos que tiene el consumo de ciertas sustancias. Viéndolo desde otra perspectiva, la prohibición de las drogas, comparándola con la del alcohol; no conseguiría nada bueno, en realidad, lo único que ocasiona son problemas de mayor envergadura que la de el consumo de dichas sustancias. Como se produjo en los Estados Unidos,entre el 17 de enero de 1920 y el 5 de diciembre de 1933, la llamada Ley Seca. Esta experiencia no fue favorable para el país como se esperaba, sino que ocasionó varios problemas; una vez instaurada la ley, la población cambió su parecer, opinaban que había sido peor el remedio que la enfermedad y que lo único que habían conseguido era potenciar el crimen organizado y el control del mercado negro por las mafias. Y en el caso actual con las drogas, nos encontramos en una situación parecida a la ocasionada por la Ley Seca en aquellos años. Los narcotraficantes gallegos que se dedicaban a comercializar con tabaco rubio, se cambiaron al narcotráfico de drogas. Esto ocurre porque el tabaco es un producto legalizado, el cual no tiene los beneficios que podría llegar a tener de forma ilegal; de modo que decidieron cambiarse a las drogas, ya que estas, al tratarse de un producto ilegal, genera muchos más beneficios, porque no hay otra manera de obtenerlos, que no sea ilegal. Llegados a este punto, nuestro argumento es el siguiente; si el tabaco no genera todos los beneficios que podría generar, por ser un producto legalizado, si se legalizasen las drogas ocurriría lo mismo, el narcotráfico disminuiría drásticamente. 3. Legalización La incapacidad por parte de los gobiernos para detener el tráfico y consumo de drogas ha llevado a que muchos estados se hayan visto obligados, respaldados por el poder popular, a abrir la mano y adoptar medidas y políticas más permisivas en relación al consumo y venta de estas sustancias. En los últimos años hemos visto avanzar a propuestas que se han ido aplicando poco a poco en diversos países y que han llevado en algunos a la muerte de la penalización. 5 4. Conclusión Cada persona es dueña de su cuerpo, libre de hacer con el suyo propio aquello que desee, siempre que esa libertad de la que hace uso, no ataña, o no dañe o afecte a otra persona que también tiene sus propias libertades. Con lo cual, aquella persona, consumidora de cualquier tipo de droga, debería disponer de la libertad de hacerlo, siempre y cuando no involucre negativamente a otros. Por esto hay que tener en cuenta, a la hora de permitir el libre consumo de dichas sustancias, el nivel de gravedad de los efectos que puedan causar en el ser humano. Freud demostró, con unos estudios, los efectos que tenía, a largo plazo, la cocaína en su consumidor; “El cocainómano comienza a sentirse celoso, colérico, brutal y empiezan las alucinaciones, siente correr sobre su piel miles de insectos (pulgas, chinches, etc). Además oye sonidos raros, de carrillión o de leña seca, a veces ve manchas coloreadas de tonos cambiantes y, finalmente, puede llegar a estados de intoxicación que en ocasiones derivan en homicidios y suicidios”. Lo cierto es que la legalización terminará por llegar tarde o temprano a todas partes como parte de un proceso evolutivo hacia una sociedad más moderna, democrática y libre. Teniendo en cuenta esta verdad ¿no sería mejor entrar a la legalización por la puerta grande que hacerlo tarde y por la puerta trasera cuando el resto ya están dentro? 5. Bibliografía Aceprensa. 2010. “Legalizar las drogas: por qué sí o por qué no” Noticias Jóvenes, 30 de Octubre. Consultado 30 de noviembre 2014. http://www.noticiasjovenes.com/index.php?name=News&file=article&sid=30052&theme=Print
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