LOS GNÓSTICOS Para llegar a comprender en algo el pensamiento gnóstico, podemos hacer una introducción tomando a la Filosofía desde dos aspectos: uno como viva, natural y vital. Surgida de la interpretación de un Cosmos vivo que rodea al hombre y del que la persona intenta alcanzar algún tipo de conocimiento. Ella sabe acerca de las mutaciones que en él se desarrollan y que no es posible alcanzar ninguna verdad que no sea aquella que sus sentidos e intelecto le permiten enunciar. El segundo, sería tomar a la Filosofía en el sentido de que surge sólo del intelecto, la matemática, y quiere ser rigurosa, estricta y verdad absoluta; surge de la razón y no admite error por eso se la considera perfecta, divina. Las personas en este ámbito buscan el paradigma de la perfección indubitable. En este deseo de perfección absoluta podemos centralizar el hecho religioso y el desarrollo del cristianismo en el seno, por ejemplo, de un neo-platonismo inspirado y sostenido desde las teorías del Uno, el universal absoluto y una racionalidad seleccionadora que excede lo humano y busca quitarle al hombre su ser humano, su incompletud, sus vicios, su imperfección. En este entorno se va vislumbrando la imposibilidad de aceptación de varias teorías que expliquen la comprensión de un mismo hecho. La filosofía para una parte del mundo griego clásico era un movimiento del Noûs en el tiempo, el discurrir por la physis. Si hay movimiento necesariamente hay cambio, por lo tanto, no se puede pensar un ser del transcurrir, esta visión ontológica estática deja de ser sostenida hasta por Platón en el diálogo Parménides. El transcurrir es tiempo, de otra forma lo universalizamos, lo anquilosamos en una idea fuera del alma (universal ante rem). Así podemos comprender el cuestionamiento entre distintas posturas. Los gnósticos incursionan en, por lo menos, las dos concepciones que hemos expuesto en forma amplia: Necesidad e imposibilidad de pensar desde lo diferente, ver la vida como un transcurrir, un continuum. El conflicto comienza en cualquier época en la que se transforme el contenido en algo acabado, fijo, representativo: modelizado, al que se quiere hacer valer ayer, hoy y mañana. Por ejemplo, cuando escuchamos o leemos un discurso crítico sobre la cosa en sí pero se vive como si la 1 cosa en sí fuese real. Las últimas escuelas griegas: cínicos, estoicos, epicúreos parten de un neoplatonismo, o sea de una unidad compositiva platónico/aristotélica, representado por ejemplo, por el paradigma platónico de la trascendencia y el paradigma aristotélico inmanentista. Los GNÓSTICOS (son grupos muy diversos entre sí pero que poseen un trasfondo platónico bastante notable. Por ejemplo Plotino escribe en contra de los gnósticos. En estos grupos encontramos mucha teología cristiana, pero la Iglesia ve en ellos una seria amenaza por lo que los considera herejes. Sus representantes más nombrados han sido Basílides en Alejandría, Valentino en Alejandría y en Roma y Marción de Sínope en Roma. TRASFONDO PLATÓNICO: SUPERIORIDAD DEL MUNDO ESPIRITUAL DUALISMO SUPERACIÓN DEL MUNDO PASAJERO PARA ALCANZAR (O VOLVER) AL MUNDO DIVINO HOMBRE ES MICROCOSMOS POSEER MITOS SOBRE LA CAÍDA DE LA PERFECCIÓN ORIGINAL COMO PUNTO ORIGINARIO DEL MUNDO ACTUAL BUSCABAR ESCAPAR DE LAS ATADURAS DE LA SITUACIÓN HUMANA PARA RECOMPONER LO DIVINO PERFECTO PARA ALGUNOS LO SEXUAL ES SÍMBOLO DE ESCLAVITUD, PARA OTROS ES LA SOCIEDAD EN SUS COSTUMBRES Y LEYES PERFECCIÓN ACCESIBLE EN ESTE MUNDO / SÓLO DESPUÉS DE LA MUERTE APURAR LA LLEGADA DEL FIN DEL MUNDO DIVIDIR A LOS HOMBRES: HYLICOS, PSÍQUICOS Y PNEUMÁTICOS. 2 RECORDAR: LA SALVACIÓN VIENE POR EL CONOCIMIENTO DE DETERMINADAS TEORÍAS QUE SÓLO LOS HOMBRES PNEUMÁTICOS POSEEN, ELLOS NO ESTÁN ATADOS A LAS PASIONES, Y NO YA POR LA FE EN UNA PERSONA: JESÚS MANIQUEÍSMO MANÉS/MANU (Persia 215-276?) versión radical del cristianismo dualismo y zoroastrismo principio religioso creacionista: Dios crea lo bueno entonces cómo se explica la existencia del mal. Si puede acabar con el mal y no lo hace entonces no es bueno; si quiere hacerlo y no puede entonces no es omnipotente principio emanacionista: cada emanación es inferior a la que antecede hasta llegar a una tan alejada del punto de partida que parece su opuesto problema del mal no hay un solo Dios sino dos uno bueno y otro malo el principio malo invade al bueno vivimos un mundo de lucha que tiene que terminar en un equilibrio los hombres somos la mezcla de ambos principios: cuerpo: malo; alma: buena. Para no ayudar al mal hay que evitar todo lo que fortalezca lo físico. Ascesis / negación de lo sexual / celibato, la generación es mala en sí misma. Evitaban comer carne El cuerpo es negativo/peligroso/necesita una disciplina para dominarlo/no tiene valor/ por lo tanto se puede hacer cualquier cosa con él: los puros, los «elegidos» que se contraponen a la masa de «oyentes», están más allá de lo material. El maniqueo que forma parte de los «elegidos» no deberá trabajar, pues por el trabajo se viola el mundo de la luz. 3 HEREJÍAS Las herejías surgen cuando se pretenden interpretar las doctrinas de Jesucristo y de sus discípulos en distintos ámbitos teóricos, muchos de los cuales fueron sucesivamente condenados por la Iglesia Católica, intérprete infalible de las doctrinas de Jesucristo, al considerarlas opuestas a la verdad revelada. Definición: Etimológicamente herejía significa elección. En los primeros siglos del cristianismo el término se aplica a la elección que algunos hacen de forma contraria a la doctrina oficial. Procede de la palabra griega hairesis, haireo que en su origen significa «tomar con la mano» y después «elegir personalmente». Se basa en la opinión por la que opta una persona con respecto a un problema. Así pues, el herético es aquel que elige lo que debe creer. En Europa occidental la herejía se considera un crimen cívico-religioso castigable con la muerte. La constitución de la herejía necesita dos presupuestos: La existencia de dogmas, es decir de enseñanzas incuestionables recibidas como verdad única. Los dogmas se van estableciendo en forma dialéctica con las herejías. Es decir, aparece dentro de la comunidad alguien que afirma algo que hasta el momento no había sido predicado; o bien que niega algo por todos asumido. Entonces se reúnen los obispos en concilio, autoridad que tiene el poder de comprobar el crimen, fijan el dogma y ponen de manifiesto la posición herética y aplican la sanción. Hereje: la Iglesia intenta mostrar lo malvado de sus intenciones. No se le da la más mínima posibilidad de que el hereje pueda creer honradamente lo que dice y que pueda desear honradamente al decirlo el bienestar del grupo. Por el contrario se les considera orgullosos y maliciosos, lobo entre los corderos, serpiente en el jardín y 4 enviado secreto de Satanás en la tierra. La herejía es así sancionada durante los Concilios en los cuales, al mismo tiempo que define su ortodoxia, condena la herejía a ella. La Inquisición quemó a hombres y mujeres por este pecado en conjunción con el de brujería, es decir, por tener «relación con el diablo»; lo hicieron cada vez que mostraban cualquier tipo de independencia en el pensamiento llevando al enfrentamiento de la herejía: ortodoxia, con la heterodoxia de los hejes. La palabra heterodoxia es griega y significa diversidad en la enseñanza. Se consideran herejías contrarias al cristianismo: Gnosticismo: Doctrina filosófico-religiosa de los primeros siglos de la Iglesia. Mezcla de cristianismo con creencias orientales y judaicas, que pretende tener un conocimiento intuitivo y misterioso de las cosas divinas a través del conocimiento salvífico. Se divide en varios grupos o sectas. Se trata de una doctrina elitista, según la cual los iniciados no se salvan por la fe en el perdón gracias al sacrificio de Cristo, sino mediante la gnosis o conocimiento interior de lo divino. La gnosis es un conocimiento superior a la fe por eso la fe no basta y la muerte de Cristo tampoco. El hombre es autónomo para salvarse a si mismo. En esta doctrina se mezclan sincréticamente creencias orientalistas e ideas de la filosofía griega, principalmente platónica. Es una creencia dualista: el bien frente al mal, el espíritu frente a la materia, el ser supremo frente al demiurgo, el alma frente al cuerpo. En 1945 se descubre una biblioteca de manuscritos gnósticos en Nag Hammadi, Egipto, que permite un conocimiento mejor de sus doctrinas, anteriormente solo conocidas a través de citas, refutaciones, apologías y heresiologías realizadas por los Padres de la Iglesia. Se dice que el gnosticismo fue fundado por Simón el Mago, personaje que aparece en el Nuevo Testamento. Su representante más relevante sin duda fue Valentín de Alejandría, que llevó a Roma una doctrina gnóstica intelectualizante que juega un papel activo en la vida pública de la Iglesia. Su prestigio era tal que se le tuvo en consideración como posible obispo de Roma. Otros gnósticos de renombre 5 han sido Pablo de Samosata, autor de una celebre herejía sobre la naturaleza de Cristo. Carpócrates que concibe la idea de la libertad moral de los perfectos con ausencia total de reglas morales. La variación moral del gnosticismo es visto con recelo por el obispo Ireneo de Lyon que lo declara herejía en el 180, opinión continuada por los Padres de la Iglesia. Montanismo: Montano, heresiarca frigio muerto en 212, que asegura haber sido enviado por Dios para perfeccionar la religión y la moral. Arrianismo: Arrio, Obispo de Alejandría (280-336), enseña que el verbo o Hijo de Dios no es consubstancial al Padre, sino que es creado e inferior a Él. Niega la consubstancialidad e igualdad de las tres personas de la Santísima Trinidad. Esta herejía es condenada en el Concilio de Nicea, formulándose al efecto el Credo cristiano. Consubstanciación: Presencia de Jesucristo en la Eucaristía, conservando el pan y el vino su propia substancia y no una mera apariencia. Es la creencia de los luteranos. Los católicos en contraposición afirman la Transubstanciación de las especies de pan y vino; es decir, se conservan los accidentes y cambia la substancia, que es ahora cuerpo y sangre de Jesús. Herejías Cristológicas: La naturaleza de Jesús es el problema más complejo de los primeros siglos del cristianismo como lo revelan las discusiones teológicas. En estos primeros siglos se plantea el problema de la relación del Hijo con Dios Padre a las que se llamó disputas cristológicas. En sus orígenes el Mesías (Cristo), es considerado como un simple mortal elegido por Dios para realizar sus designios, concepción que da lugar a una doctrina llamada Adopcionismo. No obstante en la Iglesia va creciendo en importancia el dogma según el cual Cristo había sido siempre Hijo de Dios, de la misma naturaleza que el Padre, que desciende a la Tierra para 6 redimir a los seres humanos: a esta nueva doctrina se la denomina Encarnacionismo. Esta nueva concepción de la naturaleza de Cristo trae aparejados varios problemas teológicos ya que se discute si en Cristo existe una naturaleza divina o una humana, o bien ambas, y si esto es así, se discute la relación entre ambas naturalezas completamente separadas o relacionadas de alguna manera. El Encarnacionismo es firmemente aceptado por el mundo gentil y especialmente en el occidente del Imperio Romano, mientras que las iglesias orientales defienden nociones más cercanas al Adopcionismo. Arrio, discípulo de Pablo de Samosata, predicador oriental del Siglo III, sostiene que Cristo es una criatura y no parte del Creador, aunque concede que había sido la primera criatura formada por el Creador. Es decir, mantenía una posición intermedia, aunque más inclinada al Adopcionismo tradicional. En la lucha de los encarnacionistas contra los arrianos hay varios factores a tener en cuenta como trasfondo de la discusión doctrinal: Hay una lucha de poder entre la Iglesia de Roma y las Iglesias orientales en una época en que la supremacía de la primera no está bien asentada todavía. Las Iglesias orientales apoyan a Arrio, mientras que las occidentales tienden a apoyar a los encarnacionistas. No obstante ello, el más ferviente defensor de la divinidad del verbo y su posterior asunción de la naturaleza humana (encarnación) fue Atanasio, obispo de Alejandría en Egipto. El Encarnacionismo es más aceptado por las clases acomodadas del Imperio que viven en Grecia o Roma, mientras que el Adopcionismo lo es por las clases empobrecidas que predominan en las regiones orientales del Imperio. CONCILIOS En el Concilio de Nicea del año 325, se aprueba el Credo propuesto por Eusebio de Cesarea, y la cerrada defensa del Encarnacionismo hecha por 7 Atanasio quien consigue el destierro de Arrio. La disputa entre ambas doctrinas se despliega durante todo el Siglo IV, llegando incluso a haber Emperadores arrianos, por ejemplo Juliano, denominado «el apóstata». Constantino «el grande» se «convierte» al catolicismo y proclama la libertad de culto en el imperio (los cristianos dejan aquí de ser perseguidos) El primer rey godo que se hizo arriano fue Ulfila. Pero después del Concilio de Calcedonia del año 381, siendo Teodosio emperador en Occidente, el arrianismo fue finalmente condenado. Teodocio proclamó al Catolicismo como religión «oficial» del imperio. De todos modos la herejía se mantiene entre los germanos hasta el Siglo VI. El último rey en abandonar el arrianismo fue Leovigildo, rey de los visigodos, el año 585. Su hijo Recaredo se hizo católico en 589. Nestorianismo: Afirma que en Cristo hay, además de dos naturalezas, dos personas: una divina: el Logos y otra humana: Jesús de Nazaret. Según esto, Cristo es verdadero hombre y verdadero Dios, pero ambas naturalezas tienen sólo una unión moral. La divinidad habita en la humanidad de Jesús como en un templo. En consecuencia, no se puede llamar a María madre de Dios sino madre de JesúsHombre. Fórmulas modernas de nestorianismo o arrianismo serán las que afirman que Cristo es solamente el hombre. O simplemente un hombre provisto excepcionalmente de gracia, o una manifestación extraordinaria de Dios. Reducen, pues, a Cristo a ser para los hombres sólo un ejemplo silenciando su divinidad. Eutiquianismo: Eutiques: monje griego (378?-454?). Consagrado desde su juventud a la vida monástica, fue acusado de herejía al negar la doble naturaleza de Cristo y su consubstancialidad con el hombre. Sus doctrinas, condenadas por el concilio de Calcedonia, se propagaron entre los siglos V y VI bajo diferentes formas y aún hoy las profesan muchos cristianos orientales. Enseñó que solo había una naturaleza en la persona de Cristo, la divina. Se oponía a la doctrina del Concilio de Calcedonia (451) sobre las dos naturalezas de Cristo. Surge en parte como una reacción contra el 8 nestorianismo. A pesar de haber sido condenado en el Segundo Concilio de Constantinopla en 553, el Monofisismo encontró apoyo en Siria, Armenia y especialmente entre los cristianos coptos en Egipto en donde todavía existe incluso con una estructura ordenada en las Iglesias Armenia y Copta entre otras. Monotelismo: Herejía del siglo VII sostenida por el emperador Heraclio (610-641) quien, en un encuentro con los monofisitas, formula que Cristo tendría dos naturalezas pero una sola voluntad, la divina. Así como en la Trinidad no había que confundir las personas ni dividir las sustancias, en Cristo no había que confundir las naturalezas ni dividir la persona. La herejía se origina de un intento de reconciliar las ideas de la herejía monofisita con la ortodoxia cristiana. Doctrina que recibe apoyo del patriarca de Constantinopla, Sergio. Es condenado posteriormente por la Iglesia de Occidente lo que genera un resquebrajamiento con la Iglesia de Oriente. Máximo el Confesor escribe una refutación teológica del monotelismo en la que sostiene que la voluntad es una función de la naturaleza y no de la persona. El Monotelismo es condenado definitivamente por el Tercer Concilio de Constantinopla en 680, en el cual se afirman «dos voluntades naturales o quereres y dos operaciones naturales, sin división, sin conmutación, sin separación, sin confusión», también sin oposición, pues la voluntad humana está plenamente subordinada a la divina: «Padre, que no se haga mi voluntad sino la tuya» (Lucas, 22,42). Pelagianismo: Pelagio (siglo V), negaba que el pecado de Adán, y sus consecuencias para la humana naturaleza, se hubiera transmitido a sus descendientes, y la necesidad de la gracia. Sostiene que basta con el libre albedrío para lograr la salvación. Maniqueísmo: Se aplica al que sigue las doctrinas de Manu o Manes heresiarca babilonio del siglo III, quien admite dos principios creadores: uno para el bien y otro para el mal. En el año 242, durante la coronación del rey Sapor I, se presenta como apóstol del verdadero Dios y da a conocer sus doctrinas, que se extienden por 9 diversos pueblos de Oriente en pugna con el Cristianismo. Gana muchas adhesiones con la promesa de una sabiduría superior y con sus prácticas misteriosas. Los maniqueos, a semejanza de los gnósticos y los mandeos, son dualistas, creen que había una eterna lucha entre dos principios opuestos e irreductibles del bien y el mal asociados a la luz (Ormuz) y a las tinieblas (Ahrimán). Según ellos, Dios es el creador de todo lo bueno y Satanás el creador de todo lo malo. Posteriormente, algunos maniqueos distinguen el Dios del Antiguo Testamento (malo) del Dios del Nuevo Testamento (bueno). Los maniqueos creen que el espíritu del hombre es de Dios pero el cuerpo del hombre es del demonio. En el hombre, el espíritu o luz se encuentra cautivo por causa de la materia corporal; por lo tanto creen que es necesario practicar un estricto ascetismo para iniciar el proceso de liberación de la luz atrapada. Desprecian por eso la materia, incluso el cuerpo. Los adherentes aspiraban a reencarnarse como elegidos porque estos ya no necesitarían reencarnarse más. Para ellos, Jesús era el Hijo de Dios, pero había venido a la Tierra a salvar su propia alma. Jesús, Buda y otras muchas figuras religiosas habían sido enviadas a la humanidad para ayudarla en su liberación espiritual. En la práctica el maniqueismo niega la responsabilidad humana por los males cometidos porque cree que no son producto de la libre voluntad sino del dominio de Satanás sobre la vida humana. Dicho dualismo es condenado por la Iglesia cristiana que reconoce un solo Dios Todopoderoso, el mismo del Antiguo y Nuevo Testamento y que vence sobre todos los demonios y las fuerzas del mal. También es condenado por el emperador Diocleciano en el año 297. Actualmente también se califica despectivamente maniqueísmo a toda doctrina que distingue en forma terminante a los elegidos de los réprobos. Docética y Marcionita: La primera herejía proviene del griego dokéo parecer o aparecer: Cristo únicamente pareció que sufría en la crucifixión. Abolía a Cristo como figura histórica y con ella negaba los acontecimientos de redención del mundo. La herejía marcionita refleja la influencia de lo económico. Marción fue un naviero de Sínope, (Ponto), anti judío de base gnóstica que trataba de identificar al Dios cristiano con el Dios de los judíos. Fundó varias Iglesias y se convirtió en cismático. 10 Sus obras se perdieron pero nos llegaron comentarios gracias a Tertuliano en sus feroces ataques hacia quines describe como: ferocísimas gentes… vida dura… libido promiscua… viviendas inciertas… donde nunca amanece… donde el sol nunca brilla… todo es torpe… nada rige…. Sabeliano: Sabelio (250), sostiene que Dios es el único Ser y las tres personas son tres aspectos de este único ser. Patripasiano: Dios Padre que se encarnó en el Jesús físico y por ello padeció sus sufrimientos. Tertuliano: (Quinto Septimio Florente) Apologista y heterodoxo latino nacido y muerto en Cartago (160-220). Descendiente de paganos y pagano él mismo. Durante su juventud recibió de sus padres una esmerada educación científica. Llevado de su fuerte carácter y rigurosidad, después de haberse convertido al cristianismo ingresa en la secta de los montanistas, donde pronto se constituye en jefe de una facción cuyos adeptos toman el nombre de tertulianistas. Es autor de numerosos escritos pero la obra que le da fama universal es El apologético. Sobresale por sus pasionales e inteligentes polémicas y por su elocuencia. Tertuliano aborda todas las materias en su pasión y afán desbordados para aniquilar al adversario. Una vez afiliado a la secta de Montano, ataca con la misma violencia a los paganos convertidos al cristianismo que a los cristianos. Exageró los principios de la moral y la hizo impracticable para la mayoría de los mortales. http://enciclopedia.us.es/index.php/Manique%EDsmoGNU Free Documentation License 1.2 El término herejía se aplica solamente a los sistemas de creencia declarados tales por los Concilios Ecuménicos: NICEA en 325: Reunido por el Emperador Constantino durante el pontificado 11 de San Silvestre. Se dirige contra el arrianismo. Define la consubstancialidad de Cristo: homo-ousios. Sanciona los privilegios de las tres sedes patriarcales de Roma, Alejandría y Antioquía, y extiende a toda la Iglesia la costumbre romana concertando la fecha de la celebración de Pascua. El Verbo es verdadero Hijo de Dios, de la misma substancia del Padre y, por lo tanto, verdadero Dios. CONSTANTINOPLA en 381: En contra de Macedonio, patriarca de Constantinopla, que admite la divinidad de Cristo pero la niega en el Espíritu Santo; sostiene que es una criatura de Dios para administrar la gracia. Reunido durante el pontificado del Papa San Damaso y el Emperador Teodosio el Grande, reafirma la divinidad del Espíritu Santo contra los macedonianos. El Espíritu Santo es verdadero Dios, como el Hijo y el Padre. (Símbolo Niceno– Constantinopolitano). Nestorio, patriarca de Constantinopla, niega la unión del Logos Divino con la humanidad en unidad de persona; afirma que Jesús es solamente un hombre en quien habita el Hijo del Eterno Padre, y si Jesús no es Dios tampoco María puede ser Madre de Dios. También en este Concilio es condenada la doctrina de Pelagio y Celestino que niegan la transmisión del pecado de Adán a su descendencia y defienden la bondad puramente humana para hacer el bien sin el concurso del auxilio divino. ÉFESO en 431: San Celestino I, reinado de Teodosio el Joven, se dirige contra el nestorianismo. Define la unidad de persona en Cristo y la maternidad divina de María. El dogma de María como «Teo-tokos» fue constituido, podríamos decir, por pedido de los fieles. Los obispos dudaban acerca de si era ortodoxo llamar así a María. Se define entonces el dogma a partir de lo que se conoce como «sensus fidei» o sentido de la Fe del Pueblo de Dios: cuando toda la comunidad de fieles cree unánimemente una cosa, no puede estar en el error. Cristo, Dios-Hombre es un solo sujeto (=Persona) hypóstasis – prósopon – 12 physis: la unión hipostática es substancial, no accidental; es física, no moral. Se condena también el pelagianismo. CALCEDONIA en 451: León I, El Magno, se dirige contra los monofisitas. El Emperador Marciano condena el eutiquianismo porque no reconoce en Cristo la distinción de las dos naturalezas perfectas. Sostiene que las dos naturalezas en Cristo están unidas (personalmente), no confundidas ni mudadas ni alterada de ninguna manera. Dióscoro, patriarca de Alejandría y el abad Eutiques sostienen la opinión de una sola naturaleza en Cristo, una especie de fusión de las dos naturalezas o más bien de absorción de la naturaleza humana por la divina. Esta herejía se llama Monofisismo, una sola naturaleza. Calcedonia sigue a Éfeso en la aceptación de la hypóstasis y su subsistencia. CONSTANTINOPLA II en 553: Este concilio se convoca para solucionar discrepancias y atraer a los monofisitas de quienes se habían formado muchas fracciones, sobre todo en Medio Oriente y el Norte de África. El gran interesado en la unión es el emperador Justiniano quien convoca el Concilio en ausencia del papa Vigilio. Condena los escritos de Teodoro de Mopsuestia y de Teodoro de Ciro contra San Cirilo y el Concilio de Efeso. Se confirma la condenación de los errores precedentes (trinitarios y cristológicos), ratificando el sentido genérico de las definiciones conciliares. Se condenan también los errores derivados de Orígenes junto con los Tres Capítulos influidos de Nestorianismo. A Sergio, patriarca de Constantinopla, se le atribuye una nueva herejía llamada Monotelismo, una sola voluntad. El Monotelismo sostiene que en Cristo hay dos voluntades, como hay dos naturalezas, aunque sea una sola la Persona, que es la del Logos. physis-ousía – materia/sustancia, subsistencia de la persona. CONSTANTINOPLA III en 680-681: El papa Agatón I y el papa León II se 13 dirigen contra el monotelismo. Condenan el culto de las imágenes, Iconoclastia. En los siglos VIII y IX se procede a la destrucción de imágenes, y a las persecuciones promovidas por los emperadores orientales. No faltaron grandes defensores del culto de veneración a las imágenes como San Juan Damasceno y San Germán de Constantinopla, y muchos otros que fueron mártires por defender ese culto. NICEA II en 787: El papa Adriano I se dirige contra los iconoclastas. El Concilio regula la querella de los iconoclastas pronunciándose por el culto de las imágenes, pero distinguiendo cuidadosamente el culto de veneración del culto de adoración, que sólo es debido a Dios. Entre Oriente y Occidente, y entre sus capitales imperiales como fueron Roma y Constantinopla hubo siempre antagonismo ya en el aspecto político como en el religioso. Si el Papa es el primero en la cristiandad, el segundo lugar lo ocupa, sin duda, el patriarca de Constantinopla. A mediados del siglo noveno un ambicioso personaje ocupó la silla patriarcal, su nombre fue Focio; cometió toda clase de arbitrariedades y exacerbó los ánimos de los orientales contra Roma. Esta grave situación decide la apertura de un nuevo concilio. CONSTANTINOPLA IV en 869-970: El papa Adriano II contra el Cisma del emperador Focio. Se confirma el culto de las imágenes y la afirmación del Primado del Romano Pontífice. Los ocho primeros concilios se desarrollaron en Oriente por ser ahí donde se originaron las controversias. En el siglo XI Oriente se separa de Roma y los concilios -trece más hasta el presente- se celebran en el Occidente de Europa. LETRÁN I en 1123: El papa Calixto II se dirige contra las investiduras. Ratifica el arreglo entre el papa Calixto II y el emperador Enrique V. Es conocido con el nombre de Concordato de Worms, referente a las investiduras eclesiásticas. Propone a los príncipes cristianos emprender las 14 cruzadas. A partir del siglo cuarto la Iglesia y el Estado van estrechando sus relaciones y lo mismo sucede con los pueblos bárbaros a medida que van abrazando el Cristianismo. Esta situación si bien es benéfica tanto para el orden civil como para el religioso, sin embargo, con el correr de los siglos surgen graves dificultades y en especial para la Iglesia. Los reyes van transmitiendo cierta autoridad política a los obispos y abades de los monasterios en el ámbito de sus jurisdicciones religiosas, y aún títulos de nobleza. Todo esto trae una intervención directa de los laicos en asuntos totalmente eclesiásticos, como el nombramiento de obispos y abades, y aún la entrega del báculo y del anillo propios del cargo; en esto consistía el derecho de investidura laical. A este exceso se lo conoce como Querella por las Investiduras y Simonía. Hubo muchos abusos derivados de influencias políticas, parentesco, etc.; candidatos indignos y sin vocación lograron puestos de relevancia en la Iglesia. Para atajar esos escándalos y evitar las intromisiones ajenas se convocó el concilio. Se reivindica el derecho de la Iglesia en la elección y consagración de los Obispos contra la investidura de los laicos. Se condenan la simonía (Simón el Mago -contemporáneo de los apóstoles- oyendo al apóstol Felipe anunciar el Evangelio y confirmándolo con milagros se convirtió y fue bautizado. En los Hechos de los apóstoles se lee: "Habiendo visto, Simón que por la imposición de las manos de los apóstoles se daba el Espíritu Santo, les ofreció dinero, diciendo: Dadme también a mí esa potestad, para que cualquiera a quien imponga yo las manos, reciba el Espíritu Santo. Mas Pedro le respondió: Perezca tu dinero contigo; pues has juzgado que se alcanzaba por dinero el don de Dios") y el concubinato, Nicolaísmo, de los eclesiásticos como herejías. En la historia de la Iglesia ha habido hasta ahora 265 Papas como también unos 35 antipapas, que usurparon la dignidad pontificia durante algún tiempo, debido a influencias políticas de los reyes o desavenencias entre obispos y cardenales. LETRÁN II en 1139: El papa Inocencio II lo convoca por la disciplina y 15 buenas costumbres. Condena los cismas de varios antipapas y los errores de Arnaldo de Brescia y publica medidas destinadas a que reine la continencia en el clero. Condenación del antipapa Anacleto y de sus partidarios, condena de Arnaldo de Brescia, revolucionario que tenía soliviantada la ciudadanía romana contra la Iglesia. Surge el grupo Cátaro, palabra que significa puros, eran muy rebeldes a la autoridad religiosa y anárquicos con respecto a la fe y a la moral. Negaban la resurrección de los muertos y la vida futura y admitían, al estilo oriental, la transmigración de las almas, además de otros considerados errores doctrinales. LETRÁN III en 1179: El papa Alejandro III se dirige contra los albigenses, cátaros y valdenses. Condena a los cátaros y regulariza la elección del Papa, declarando válidamente elegido al candidato que hubiera obtenido los dos tercios de los votos de los cardenales. Los Albigenses y los Valdenses eran sectas cristianas contestatarias, que si bien en algunos aspectos retrotraían la sencillez y caridad de las primitivas comunidades cristianas, tenían una abierta insubordinación a la jerarquía. Practicaban la hechicería, negaban algunos sacramentos y fomentaban la libre interpretación de la Biblia. LETRÁN IV en 1215: El papa Inocencio III lo convoca por la fe y la moral. Condena a los albigenses y a los valdenses. Decide la organización de una cruzada. Revisa y fija la legislación eclesiástica sobre los impedimentos matrimoniales e impone a los fieles la obligación de la confesión anual y de la comunión pascual. Se condena la herejía de los Albigenses y de los Valdenses. Hay importantes definiciones sobre la Trinidad, la creación, Cristo Redentor, los Sacramentos y otros errores. El emperador Federico II es al principio obediente y sumiso al Papa Inocencio III, que había actuado como su tutor e incluso participó en una Cruzada a Tierra Santa, por la ambición política se opuso a la Iglesia y fue condenado. Los griegos, que en el siglo XI forman parte del bloque oriental que se separa de la Iglesia, dos siglos más tarde, desean que se reanuden la relaciones con el Papado para concretar la doctrina 16 en discusión. LYON I en 1245: El papa Inocencio IV se dirige contra el Emperador Federico II y por la reforma del clero. Lleva a cabo una sentencia de deposición contra el emperador Federico II, usurpador de bienes y opresor de la Iglesia, y regula el proceso de los juicios eclesiásticos. Condena de Federico II. Declaraciones rituales y doctrinales para los griegos (Sacramentos, legitimidad de las segundas nupcias, Purgatorio, Paraíso, Infierno.) Los griegos orientales deseosos de coincidir con Roma y alcanzar la unión, incentivan la convocación de un nuevo concilio a sólo treinta años del anterior. Concretan los temas discutidos y los aprueban y firman en su gran mayoría. Cuando regresan a sus respectivas comunidades, las autoridades, monjes, clero y pueblo se oponen rotundamente y los llaman traidores y vendidos a los romanos; la unión fracasa. Sin embargo, algunos grupos aislados quedan adheridos a Roma y se les llama «Unitas», aún hoy mantienen lazos de jerarquía y de fidelidad a la Iglesia Católica. LYON II en 1274: El papa Gregorio X lo convoca por la unión de las iglesias. Restablece, a petición de Miguel Paleólogo, la unión con los griegos y toma nuevas medidas para una posible Cruzada. Se confirman los principios: El Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo como de un solo principio; Suerte de las almas después de la muerte. Sobre los siete Sacramentos y sobre el Primado del Romano Pontífice. Los Caballeros Templarios nacen y crecen en los siglos XI, XII, y XIII; el ambiente que lo propicia es el de las Cruzadas para la reconquista de los Santos Lugares en poder de los árabes. Las llamadas Órdenes Militares, que proliferan en esos siglos, consisten en combinar la vida monacal en tiempo de paz y la militar cuando las circunstancias lo requieran. Mitad monjes y mitad guerreros, también ejercen la caridad en centros de beneficencia como el gran hospital de Jerusalén, que es tendido por los Caballeros Hospitalarios de San Juan. Tienen casas en Europa para reclutar voluntarios y mandarlos al Oriente a fin de que protejan a los cristianos que 17 peregrinan a la Tierra Santa, ya que eran objeto de agresión de parte de los musulmanes. La envidia y la codicia de los poderosos les declaran la guerra y consiguen, al fin, que extinguir oficialmente la Orden de los Templarios. Los Begardos y Beguinas son asociaciones de ambos sexos que se dedican a la oración y a la ejecución de todo lo que pueda entenderse por «caridad»; pasado algún tiempo muchos de ellos caen en lo que se consideran errores y son condenados. En este momento muere Tomás de Aquino a causa de una enfermedad, cuando se dirigía desde Nápoles al Concilio por pedido del Papa. VIENNE, Francia, en 1311: El papa Clemente V lo convoca a causa de los templarios. Decide la supresión de la Orden y condena los errores de los Begardos sobre la perfección espiritual. El alma es verdadera y esencialmente forma del cuerpo. Juan Wyclef, inglés; y Juan Huss, bohemio, pueden considerarse como los precursores del luteranismo que había de aparecer un siglo más tarde. Ambos se rebelan abiertamente contra Roma, promueven y defienden graves errores doctrinales; son apoyados por las esferas más influyentes de sus respectivos pueblos, que detestan la injerencia de la autoridad romana en sus asuntos eclesiásticos. Todo ello puede conceptuarse como un nacionalismo político que busca también la independencia en la esfera religiosa. CONSTANZA, Alemania, 1414-1418: El papa Gregorio XII lo convoca contra el cisma de Martín V Occidente, Wyclef, Juan Huss y Jerónimo de Praga. Fin del Cisma Occidental. Se condenan los errores de Wyclef sobre los Sacramentos y la constitución de la Iglesia, y también los errores de Juan Huss sobre la Iglesia invisible de los predestinados. FERRARA – FLORENCIA entre 1438-1442: El papa Eugenio IV lo convoca por la reconciliación de griegos y latinos. Se celebra en Roma los dos últimos años. Se aboca al estudio de la Reforma de la Iglesia y establece un nuevo intento de reconciliación con los griegos de Constantinopla. Ellos entraron en el seno de la Iglesia con los armenios, los jacobitas, los 18 mesopotamios, los caldeos y los maronitas. Este concilio fue en varias etapas y sedes diferentes lo que ocasiona situaciones tirantes. Fundamentalmente trata de la unión con Roma de diferentes Iglesias Orientales Autónomas y para unificar criterios. Declara sobre la procesión del Espíritu Santo que procede del Padre y del Hijo, la Eucaristía y los Novísimos (para los griegos) Decreto sobre los Sacramentos (para los armenios); Sobre la Trinidad y la Encarnación (para los jacobitas). LETRÁN V entre 1512-1517: Papa Julio II. Contra el concilio León X de Pisa y por la reforma de la Iglesia. Tiene como misión la reforma del clero y de los fieles pero tuvo que dejar lo más importante de esta tarea al Concilio siguiente. Busca fórmulas conciliatorias para tratar las relaciones entre los príncipes cristianos sin recurrir a la guerra. Trata de reformar costumbres disciplinarias en las que se habían introducido abusos escandalosos. Dicta normas para las instituciones religiosas y condena unas herejías contrarias a la inmortalidad del alma; definiciones sobre el alma humana, la cual no es única para todos, sino propia para cada hombre, forma del cuerpo e inmortal. TRENTO en 1545-1563: Papa Paulo III. Julio III. Pío IV. Contra los errores del protestantismo y por la disciplina eclesiástica. Es transferido durante dos años a Bolonia. En veintidós reuniones logra oponer una verdadera y sabia reforma de la Iglesia a los excesos y a los innumerables errores de la reforma protestante. El Concilio de Trento señala un cambio en la historia del mundo cristiano, pues muestra el dogma católico no sólo en su esplendor de verdad revelada, sino con su valor de vida sobrenatural. Comienza en 1547 siendo papa Pablo III, y termina en el año 1563, después de varias interrupciones. Conviene distinguir en él tres partes: el concilio de Paulo III, de 1545 a 1547; el concilio de Julio III, de 1549 a 1551; y, finalmente, el concilio de Pío IV, de 1561 a 1563. La obra doctrinal del Concilio de Trento fortifica la disciplina eclesiástica frente al protestantismo; renueva la disciplina eclesiástica y estrecha los lazos entre el Papa y los miembros de la Iglesia. El concilio de 19 Trento, el más largo de todos, dieciocho años, fue suspendido en varias ocasiones y se reanudó hasta su conclusión en l563. La causa principal es la revolución protestante de Martín Lutero, que socava profundamente los cimientos de la fe cristiana. El concilio hace una revisión general de toda la doctrina, ya sea sobre la Biblia, sobre cada uno de los Sacramentos, como la legítima autoridad que le asiste a la Iglesia y la misión que debe cumplir en el mundo. La Iglesia, como madre y maestra de la fe, tiene que aclarar conceptos dudosos, afianzar verdades, promulgar nuevas leyes y anunciar sanciones disciplinarias a los infractores. Defiende la Sagrada Escritura, doctrina sobre el pecado original, la santificación y la gracia, sobre los Sacramentos, especialmente sobre la Eucaristía y la Misa, sobre el culto de las imágenes y las indulgencias. Condenación de los errores de Lutero. VATICANO I entre 1869-1870: Se celebra en la Basílica de San Pedro en el Vaticano, por lo que se denomina Concilio Vaticano I. El papa Pío IX se dirige contra el racionalismo y el galicanismo, es una tendencia que concede al Papa la parte más importante de las decisiones en materia de fe, pero sostienen que estas se hacen infalibles sólo si las acepta la Iglesia, es decir, el Concilio. Tiene que definir solemnemente la infalibilidad Pontificia como dogma de fe, cuando habla "Ex Cathedra". Esto es cuando en calidad de pastor y maestro de todos los cristianos, y haciendo uso de su suprema autoridad apostólica define una doctrina sobre la fe y las costumbres. Esto sucede cuando: a) enseña una cosa referente al dogma o moral cristianos; b) se dirige a la Iglesia Universal; c) habla en su calidad de Maestro supremo de la cristiandad; Si falta una de estas condiciones, el Papa no es infalible. El concilio enseña que únicamente a Pedro se prometió y confirió de modo directo el primado de jurisdicción sobre toda la Iglesia y su autoridad no deriva precisamente de la Iglesia. El Concilio añade «La Iglesia Romana posee por derecho divino la primacía de potestad ordinaria sobre todas las demás iglesias. La jurisdicción del 20 pontífice es verdaderamente episcopal e inmediata. La Iglesia es, pues, monarquía de derecho divino, y el Papa recibe plena potestad directamente de Dios». El Papa Pío IX define también el dogma de la Inmaculada Concepción (1854) y definiciones sobre Dios creador, sobre la Revelación divina, sobre la Fe en relación con la razón, sobre la Iglesia y sobre el Primado e infalibilidad del Romano Pontífice. En el siglo pasado la Iglesia tuvo que afrontar gravísimos males de diferente índole: políticos, territoriales, ateísmo pujante y el incremento de sociedades secretas sectarias. Y, dentro, la Iglesia tuvo que mediar buscando elementos de concordia para atraer a las dos tendencias opuestas, la liberal y la conservadora. Pío IX a pesar de estar reducido y confinado en el Vaticano, desplega una gran actividad apostólica en su largo pontificado. Se definen los dogmas de la Inmaculada Concepción y el de la Infalibilidad del Romano Pontífice. Se convoca al vigésimo Concilio Ecuménico en el Vaticano. Se establecen, una vez más, los principios básicos sobre la Fe; sobre Dios creador del universo y de todo lo que él contiene; sobre la Revelación divina, ya fuere la escrita (Biblia), ya la oral (Tradición); sobre la Iglesia y su magisterio, como también puntualizar y aclarar las relaciones entre la fe y la razón, que de un siglo a esa parte habían adquirido una gran preponderancia. El tema más controvertido es sobre la infalibilidad del Romano Pontífice. VATICANO II entre 1962-1965: El gran acontecimiento del siglo XX en el ámbito de la Iglesia fue el Concilio Vaticano II, convocado por el Papa Juan XXIII y seguido y clausurado por el Papa Pablo VI. Se pretendió que fuera una especie de «agiornamento» ya que fue un concilio de índole Pastoral y no de carácter dogmático, es decir, una puesta al día de la Iglesia, renovando en sí misma los elementos que necesitaban de ello y revisando el fondo y la forma de todas sus actividades. Proporcionó una apertura dialogante con el mundo moderno, incluso con nuevo lenguaje conciliatorio frente a problemáticas actuales y antiguas. Ha sido el concilio más representativo de todos. Consta de cuatro etapas, con una media de asistencia de unos dos mil Padres Conciliares 21 procedentes de todas las partes del mundo y de una gran diversidad de lenguas y razas. La reforma interior de la vida eclesiástica y la búsqueda de un camino nuevo para tratar de conciliar a los cristianos separados de la unidad católica de la Iglesia. Se propuso actualizar la vida de la Iglesia sin definir ningún dogma. Trató de la Iglesia, la Revelación, la Liturgia, la libertad religiosa, etc. Recordó el Concilio la llamada universal a la santidad. El Concilio Vaticano II fue el hecho más decisivo de la historia de la Iglesia en el siglo XX. El Concilio se convoca con el fin principal de: - Promover el desarrollo de la fe católica. - Lograr una renovación moral de la vida cristiana de los fieles. - Adaptar la disciplina eclesiástica a las necesidades y métodos de nuestro tiempo. Tras un largo trabajo concluye en 16 documentos, cuyo conjunto constituye una toma de conciencia de la situación actual de la Iglesia y define las orientaciones que se imponen. Las características del Concilio Vaticano II, son Renovación y Tradición. 22