informalidad laboral e inspección del trabajo en argentina. un

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INFORMALIDAD LABORAL E INSPECCIÓN DEL TRABAJO
EN ARGENTINA. UN ENFOQUE INSTITUCIONAL
Lucas Ronconi*
Documento 46
*
Marzo de 2001
Centro de Estudios para el Desarrollo Institucional, Fundación Gobierno y Sociedad. Agradezco la útil
colaboración de Esteban Aucejo como asistente de investigación, y los comentarios de los participantes del
seminario del CEDI fundamentalmente de Federico Weinschelbaum y Mariano Tommasi.
Resumen
El número de trabajadores informales ha crecido de manera significativa en Argentina
afectando principalmente a los trabajadores de menores recursos. Este fenómeno es
especialmente grave ya que la condición de informal los excluye de los beneficios de la
seguridad social.
Uno de los instrumentos que dispone el Estado para controlar la informalidad laboral es la
Inspección del Trabajo. Sin embargo, dicha función ha sido ejecutada de manera
deficiente. En el presente documento argumentamos que una de las principales razones que
explican su mal funcionamiento responde a problemas de índole institucional. En la
Argentina, las facultades y atribuciones de los organismos públicos se encuentran
distribuidos de manera tal que no existen los incentivos adecuados para el control del
empleo informal. Las provincias tienen la facultad de controlar el cumplimiento de la
normativa laboral y de la seguridad, pero no tienen los incentivos necesarios para hacerlo
eficazmente ya que los montos recaudados en concepto de aportes y contribuciones sobre
la nómina salarial tienen como destino único al gobierno nacional.
Con el objetivo de testear nuestra hipótesis analizamos la eficacia en el control de la
informalidad laboral en las 23 provincias y la Ciudad de Buenos Aires durante los años
1996-1998, período para el cual existe información estadística. La evidencia empírica nos
indica que en Jujuy y la Ciudad de Buenos Aires, las únicas dos jurisdicciones donde la
nación tiene facultades plenas en el control de la no registración, se observa mayor eficacia
que en las restantes 22 provincias, donde las facultades están en poder de la administración
local.
2
1.- Introducción
La informalidad laboral es un fenómeno de magnitudes considerables en todos los países
de América Latina. En la Argentina el fenómeno ha crecido significativamente en los
últimos 20 años, y actualmente cerca del 40% de los trabajadores en relación de
dependencia no están debidamente registrados, lo cual implica que aproximadamente 4
millones de trabajadores no acceden a los beneficios de la seguridad social.
Existe algún grado de controversia respecto a las causas y consecuencias del empleo
informal. Por un lado, están quienes entienden a la informalidad laboral como una forma
de explotación, y por ende la consideran un problema de gravedad mayúscula. Por otro
lado, algunos sostienen que el empleo informal es simplemente el producto de una
legislación inadecuada, y en dicho sentido no le asignan mayor gravedad1.
La cuestión es compleja y escapa al alcance del presente análisis. El único punto que
queremos señalar al respecto, es que la situación actual que existe en Argentina dista de ser
deseable. La condición de informal excluye a muchos trabajadores de los beneficios de la
seguridad social. Y dado que la gran mayoría de los trabajadores informales se encuentran
ubicados en los menores deciles de ingreso, son justamente los integrantes de los hogares
más pobres los que quedan excluidos del seguro de desempleo, asignaciones familiares,
cobertura de salud y jubilación. Por lo tanto, la informalidad laboral en Argentina desvirtúa
completamente el carácter solidario del régimen de seguridad social2. Es por dicha razón
que consideramos necesario instrumentar cambios dirigidos a reducir la informalidad
laboral.
Uno de los instrumentos que dispone el Estado para controlar la informalidad es la
inspección y fiscalización del cumplimiento de la normativa laboral y de la seguridad
social. Indudablemente existen otros instrumentos; y en dicho sentido la implementación
de políticas que permitan la reducción en el desempleo, reformas que modernicen la
1
Ver Soto (1987); Neffa et al (1999).
Este fenómeno es especialmente grave si se considera que el régimen de seguridad es, en términos de
recursos, el principal instrumento de política social que maneja el Estado. Para tener una idea de su magnitud,
nótese que en el año 1998 los recursos manejados por la Seguridad Social (sin incluir obras sociales y
2
3
normativa laboral y simplifiquen la registración, o campañas que informen a los
trabajadores de sus derechos, son todas medidas que potencialmente contribuirán a la
reducción de la informalidad. Pero consideramos que la inspección del trabajo merece
especial atención. Es un tema que ha sido escasamente analizado a pesar de que su
funcionamiento presente enormes falencias. Por dicho motivo el presente estudio se
centrará en la inspección del trabajo, para lo cual analizaremos sus problemas de
funcionamiento y presentaremos propuestas de reforma.
Los estudios existentes al respecto sostienen que la causa del mal funcionamiento de la
actividad inspectiva se debe a la falta de presupuesto3. Mas allá de estar de acuerdo o en
desacuerdo con dicho argumento, consideramos que es necesario profundizar más el
análisis. De poco sirve saber que el mal funcionamiento responde a la falta de recursos si
se ignoran cuales son los factores que en última instancia los determinan. Es en esta
dirección que avanzaremos. El argumento central de nuestro estudio indica que la falta de
eficacia en el control de la informalidad laboral, ya sea por pocos recursos o baja eficiencia
en el uso de los mismos, responde a problemas de índole institucional. Como
desarrollaremos en mayor detalle a lo largo del estudio, puede sostenerse que en la
Argentina, las facultades y atribuciones de los organismos públicos se encuentran
distribuidos de manera tal que no existen los incentivos adecuados para el control del
empleo informal. Las provincias tienen la facultad de controlar el cumplimiento de la
normativa laboral y de la seguridad social, pero no tienen los incentivos necesarios para
hacerlo eficazmente.
Pero antes de comenzar nuestro análisis conviene detenernos para considerar si es
necesario contar con un ente público que controle el cumplimiento de la normativa laboral,
en lugar de dejarla en manos de la justicia privada. De acuerdo a Polinsky y Shavell
(1999), un elemento importante a considerar se refiere a la información que tenga el
perjudicado de aquel que viola la ley. En dicho sentido, dado que los trabajadores tienen
conocimiento natural de quienes son sus empleadores, en principio no existen mayores
razones para que un ente público se encargue del control de la normativa laboral. Aquellos
administradoras de riesgo de trabajo) alcanzaron a $23 mil millones, lo cual representa un 40% del gasto
público social consolidado.
3
Ministerio de Trabajo (1998), Ruiz-Tagle (2000), OIT (1989).
4
trabajadores perjudicados pueden presentar ante la justicia los cargos necesarios y de esa
forma hacer valer sus derechos.
Sin desconocer el argumento anterior, sería erróneo que el Estado se desentendiera
totalmente del problema. Hay razones para sostener que algún grado de participación
pública en el control del empleo informal es necesario. Una de las principales causas se
refiere al carácter solidario del régimen de la Seguridad Social. En todo sistema de reparto,
habrá trabajadores que realizan contribuciones superiores a los beneficios que perciben, y
en dicho sentido tienen los incentivos para llegar a acuerdos informales con sus
empleadores y de esa forma evadir los tributos. Otra razón se fundamenta por el hecho que
ciertas enfermedades laborales se hacen visibles mucho tiempo después de contraídas4.
Aclarada dicha cuestión, procedamos a presentar la estructura del estudio: En la siguiente
sección se resumen las características principales del régimen de seguridad social, así
como la normativa que regula la inspección del trabajo en Argentina. Dicho marco servirá
de insumo para la tercer sección donde se desarrollan las ideas centrales de nuestro estudio.
En la cuarta sección se brinda evidencia empírica con el objetivo de testear la validez de
nuestra hipótesis. Finalmente, las recomendaciones de política y conclusiones se presentan
en la quinta sección.
2.- Marco Legal
En la Argentina la seguridad social se financia principalmente a través de aportes y
contribuciones sobre la nómina salarial. Dichos tributos alcanzan aproximadamente al 35%
del salario, pero con importantes reducciones dependiendo del lugar geográfico en que
tiene lugar la relación laboral5.
Estos tributos son de carácter federal y no-coparticipable lo cual significa que los montos
recaudados tienen como destino exclusivo al gobierno nacional. Esta jurisdicción, es
asimismo la encargada de distribuir los recursos hacia las administradoras de jubilaciones y
pensiones (AFJP), de riesgos de trabajo (ART) y Obras Sociales, y brindar los beneficios
4
Ver Gray y Jones (1991). Para mayores referencias respecto a la justificación social de control público en
lugar de privado; ver Becker y Stigler (1974).
5
de asignaciones familiares, seguro de desempleo, jubilación y salud para las personas de
edad avanzada6.
En lo referido a la inspección de trabajo y el control del cumplimiento de la seguridad
social, las facultades y atribuciones están descentralizadas en las provincias7. De acuerdo al
Informe sobre Inspección del Trabajo elaborado por el Ministerio de Trabajo (1998) a
partir del retorno a la democracia, cada una de las provincias (con la excepción de Jujuy y
la Ciudad de Buenos Aires) organiza y realiza de manera autónoma la fiscalización y
cumplimiento de la normativa laboral.
A lo largo de la historia, las competencias en materia de inspección se repartieron entre la
nación y las provincias, con períodos en los cuales la nación concentró los poderes de
inspección del trabajo (1943 a 1957 y 1973 a 1984) y otros en los cuales las provincias se
reservaron exclusivamente dicha facultad (1904 a 1943, 1957 a 1970 y 1984 a 1996). A
partir de 1996 –al igual que durante el período 1970 a 1973- las facultades son
concurrentes y tanto el Ministerio de Trabajo nacional como los estados provinciales
realizan tareas de inspección guiados según el criterio de un federalismo cooperativo.
El Ministerio de Trabajo nacional tiene competencias en materia de inspección sólo en el
ámbito de la Ciudad de Buenos Aires y en la provincia de Jujuy; y cumple el rol de
Autoridad Central en materia de inspección del trabajo y la seguridad social8. Como
autoridad central, es el encargado de la coordinación de la actividad de los distintos
servicios de inspección y en los casos en que un servicio local de inspección no cumpla
adecuadamente sus funciones propone al Consejo Federal de Trabajo la elaboración de un
programa de reorganización. El Consejo Federal de Trabajo tiene a su vez atribuciones
propositivas pero no taxativas9.
5
Decretos Nº 2609/93, Nº492/95, Nº 96/99 entre otros. Ver Tabla 7 en el anexo estadístico.
El régimen de asignaciones familiares prevé mayores beneficios para los trabajadores radicados en
determinadas zonas geográficas. Ver tabla 7 en el anexo estadístico.
7
Neffa et. al (1999).
8
Durante 1999, a partir de la sanción del Pacto Federal la autoridad central es el Consejo Federal del
Trabajo; pero con el decreto 95/2001, que reglamenta la Ley Nº 25250, vuelve al Ministerio de Trabajo.
9
Pacto Federal de Trabajo, Ley Nº25212.
6
6
En síntesis, el punto que queremos destacar es que la nación tiene facultades exclusivas en
materia de inspección en la Ciudad de Buenos Aires y Jujuy; mientras que en el resto de
las provincias sus facultades son mucho más limitadas. Son las provincias las principales
encargadas de realizar la inspección del trabajo y de la seguridad social en sus respectivas
jurisdicciones.
3.- Marco Teórico y Análisis
“Resolver el problema (de la informalidad laboral)....es responsabilidad de todos los
actores sociales.....Los gobiernos provinciales, dejando atrás actitudes de malentendida
tolerancia del trabajo clandestino”10.
Caro Figueroa, entonces Ministro de Trabajo
“La fiscalización del trabajo a domicilio se paralizó en el país a partir de año 1986 con la
primera delegación a las provincias”11
Ex-funcionario de la Dirección Policía del Trabajo
La existencia del empleo informal es el resultado de un complejo entramado de actores y
circunstancias. Por un lado se encuentran los actores directos: empleadores y trabajadores;
por otro lado, la autoridad pública a cargo del control del cumplimiento de la normativa
laboral y de la seguridad social, en nuestro caso los gobiernos provinciales y en menor
medida el gobierno nacional. Asimismo, existen otros actores que tienen un potencial
interés al respecto como los sindicatos o las administradoras de jubilaciones y pensiones
(AFJP).
Este conjunto de actores se desenvuelve en un contexto social y económico que delimita su
accionar. Por ejemplo, el comportamiento de los actores será distinto en un contexto de
alto desempleo comparado a una situación de pleno empleo.
El enfoque que utilizaremos para analizar el comportamiento de los diversos actores se
centra en el concepto de incentivos y tiene como guía a la teoría económica. En dicho
sentido descartamos supuestos tales como asumir que los empleadores se preocupan
desinteresadamente por sus trabajadores, o que el Estado es benevolente y su objetivo es
maximizar el bienestar social.
10
11
Publicado en Ambito Financiero, febrero de 1997.
Extraído de Jelin, Mercado y Wyczykier (1999).
7
Dado que nuestro objetivo central es el análisis de la autoridad pública, éste será el actor
que enfatizaremos, sin por ello desconocer la influencia que ejercen, tanto los actores
privados, como el contexto y las circunstancias sobre la informalidad laboral.
Respecto a los actores privados, asumiremos que el trabajador busca obtener el mayor
nivel de ingreso y seguridad para cada nivel de esfuerzo; mientras que el empleador tiene
como motivación principal la búsqueda de ganancias.
Utilizando dicho marco de análisis para el caso argentino, se desprende que el trabajador
tiene –generalmente- los incentivos para exigirle a su empleador el cumplimiento de la
normativa laboral y de la seguridad social12.
Por el lado del empleador, éste tiene mayores incentivos para no declarar la relación
laboral y de esa forma evadir los impuestos laborales13.
La informalidad en la relación laboral, no depende a priori de la voluntad de una de las
partes sino que requiere el mutuo consenso. En dicho sentido nuestro análisis sugiere que
existen algunas circunstancias en las cuales las partes llegarán a un acuerdo que viole los
requerimientos legales, por ejemplo no declarando la relación laboral y de esa forma
12
Los incentivos que tiene el trabajador a reclamar una relación laboral formal dependen en gran medida de
las características del sistema de Seguridad Social. Por el lado del los aportes, los mismos se computan como
porcentaje del salario ajustados por la zona geográfica en que tiene lugar la relación laboral. En dicho sentido
los trabajadores con mayores salarios y radicados en localidades más desarrolladas, en principio aportan un
monto superior al resto. Por el lado de los beneficios existen diferencias importantes entre los distintos
componentes (jubilación, seguro de desempleo, obra social, asignaciones familiares). En forma sintética es
correcto argumentar que existen subsidios hacia los trabajadores radicados en localidades menos
desarrolladas, con menores ingresos y con mayores cargas familiares. Sin la pretensión de demostrarlo
formalmente, creemos que en la Argentina existen trabajadores que si tuvieran la opción de elegir el tipo de
relación, escogerían trabajar en negro. El caso típico es aquel trabajador soltero de elevado salario, radicado
en una localidad desarrollada. Sin embargo, dado que una porción importante de los trabajadores informales
en Argentina percibe bajos salarios y tiene cargas de familia, es muy probable que si tuvieran la opción
escogerían trabajar en blanco.
13
La decisión del empleador de optar por contratar a sus trabajadores en blanco depende de una amplia gama
de variables, pero creemos que hay dos aspectos a destacar: Por un lado, de la formalidad de sus otras
actividades: Si el empleador tiene todas sus ventas declaradas, entonces tiene mayores incentivos a
formalizar la relación de sus trabajadores ya que puede deducir el salario de diversos impuestos; en caso
contrario preferirá la no registración. El otro aspecto que afecta su decisión de no declarar a sus trabajadores,
es el monto de la multa que debería pagar ajustado por la probabilidad de ser sancionado por la autoridad a
cargo de la inspección del trabajo.
8
evadiendo los impuestos laborales14. Pero este mismo análisis sugiere que dichas
relaciones tendrían lugar fundamentalmente en empresas pequeñas (donde es más fácil
evadir impuestos en general), ubicadas en zonas desarrolladas (donde la tasa impositiva es
mayor), con trabajadores calificados de elevado salario (para quienes los aportes son
mayores que los beneficios). Sin embargo la evidencia parecería indicar, que si bien en
dicho segmento se observa informalidad, la misma se concentra más entre los trabajadores
menos capacitados15.
Como mencionamos anteriormente, no pretendemos brindar una explicación completa
acerca de los factores que determinan que algunas relaciones laborales se formalicen y
otras se mantengan “ en negro” . Sólo a título de sugerencia, creemos que para explicar
dichas circunstancias es necesario relajar el supuesto de información completa por parte de
trabajadores y empleadores. En dicho sentido, es probable que entre los trabajadores menos
calificados radicados en zonas rurales y/o regiones menos desarrolladas de nuestro país
exista un gran desconocimiento de cuales son sus derechos.
Pero dejemos de lado por un momento el análisis de trabajadores y empleadores, para
pasar a ocuparnos del actor central de nuestro estudio: la autoridad pública.
Existe controversia respecto a cuales son los objetivos y motivaciones que tienen los
agentes públicos en cumplir sus funciones (en éste caso controlar la informalidad laboral).
De acuerdo a Polinsky y Shavell (1999) los análisis académicos al respecto han asumido
generalmente la figura del Estado benevolente donde los gobernantes actúan de manera de
maximizar el bienestar social16. Evidentemente, este supuesto puede estar alejado de la
realidad y por lo tanto su utilización podría brindar conclusiones erróneas. Consideramos
que en la Argentina es necesario un enfoque diferente, y en dicho sentido utilizaremos el
enfoque de la nueva economía institucional.
14
Puede demostrase formalmente que en un régimen de beneficios obligatorios con características de reparto,
donde las probabilidades de sanción son menores a uno, existirán algunos acuerdos cooperativos entre el
trabajador y el empleador donde ambos deciden no declarar la relación laboral.
15
Ver Tabla 6 en el anexo estadístico.
16
Una excepción es Becker y Stigler (1974).
9
Siguiendo dicho enfoque y basándonos en las características que tiene el régimen de la
seguridad social, de coparticipación federal y la normativa referida a inspección del trabajo
en Argentina, consideramos que la autoridad pública no tiene los incentivos suficientes
para controlar adecuadamente el cumplimiento de la normativa laboral y de la seguridad
social.
Los gobiernos provinciales, que disponen de la facultad de realizar la inspección del
trabajo, se enfrentan a una situación en la cual no les conviene destinar mayores esfuerzos
a reducir el empleo informal ya que los beneficios que obtendrán de una reducción en el
empleo en negro son menores, mientras que los potenciales costos son significativos. Hay
dos razones principales para sostener dicho argumento: Por un lado, el aumento de la
recaudación que se genera al regularizar trabajadores tiene como destino único el gobierno
nacional, y en dicho sentido el gobierno provincial no percibe el “premio” de la
regularización. Por otra parte, existe la posibilidad de que la actividad inspectiva genere
una caída en el nivel de empleo provincial. Empresas y/o trabajadores que eran
competitivos cuando operaban “en negro” podrían dejar de serlo si cumplieran sus
obligaciones impositivas, resultando en una destrucción de empleo o emigración a
provincias menos estrictas17.
El gobierno nacional en cambio, tiene mayores incentivos para regularizar trabajadores ya
que pasa a disponer de mayores recursos tributarios y no enfrenta el problema de
migraciones internas.
Finalmente, existe un tercer grupo de actores que potencialmente estaría interesado en la
formalización de las relaciones laborales como los sindicatos y las AFJP. En principio
podría sostenerse que dichas entidades presionarán para la regularización de las relaciones
laborales ya que de esa forma lograrán un incremento en el tamaño de su mercado. Sin
pretender brindar un análisis detallado, consideramos que estos grupos tienen especial
interés en que los trabajadores de salarios elevados se encuentren registrados, pero un
interés menor en que se regularicen las relaciones laborales que incluyen trabajadores poco
calificados.
10
4.- Análisis Empírico
Teniendo en cuenta los cambios a lo largo del tiempo de las competencias en materia de
inspección en Argentina, podría ensayarse un análisis estadístico con el objetivo de testear
la hipótesis que hemos presentado. De acuerdo a la misma uno esperaría que –luego de
controlar por otros factores- los períodos en los cuales la nación concentró las facultades de
inspección presenten una tasa de empleo en negro, o un mayor número de controles e
infracciones por incumplimiento de la normativa laboral, que los períodos donde la
facultad estuvo en manos exclusivamente de las provincias.
Lamentablemente solo disponemos de información referida a la actividad de inspección
para los años 1996, 1997 y 1998 lo cual no nos permite realizar dicho análisis. Tan sólo a
modo de ilustración puede observarse el gráfico 1, que si bien no es en absoluto evidencia
robusta a favor de nuestra hipótesis muestra un marcado aumento del empleo informal a
partir de los ochenta, período en el cual la nación le devolvió a las provincias las facultades
de inspección.
Gráfico 1
Porcentaje de asalariados informales
Aglomerado Gran Buenos Aires, 1980-1999
40%
35%
30%
25%
20%
15%
1980
1982
1985
1986
1987
1988
1989
1990
1991
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
Fuente: Gasparini (2000) en base a Encuesta Permanente de Hogares, INDEC.
17
Asumir que la autoridad pública se preocupe por mantener baja la desocupación de ninguna manera
implica que el gobierno sea necesariamente benevolente. Un gobierno interesado en maximizar sus
probabilidades de reelección tiene incentivos en reducir el desempleo.
11
Dado que para los años que existe información estadística, el gobierno nacional tuvo las
facultades de inspección en la provincia de Jujuy y en la Ciudad de Buenos Aires surge la
posibilidad de constatar si en dichas jurisdicciones hubo mayor eficacia en el control del
empleo informal que en las restantes veintidós. Es un experimento natural interesante si se
considera la gran disparidad en las características geográficas, económicas, políticas y
sociales que existen entre Jujuy y la Ciudad de Buenos Aires18.
Consideramos que hay dos categorías de factores que determinan cuan eficaz (E) es la
autoridad publica en el control del empleo informal:
Indicadores de Factibilidad Técnica (FT): Ciertamente las características socioeconómicas,
demográficas y geográficas de la provincia influyen sobre la eficacia que tenga la
autoridad publica en el control del empleo informal. Teniendo en cuenta las importantes
diferencias que existen entre las provincias argentinas al respecto, consideramos necesaria
incluirlas en nuestro análisis. En este sentido es de esperar una mayor eficacia cuanto
mayor sea el porcentaje de concentración de la población, y cuanto mayor sea el nivel de
desarrollo económico en la provincia.
Indicadores de Incentivos (I): Los esfuerzos que realice el gobierno provincial para
combatir la informalidad dependen tanto de la potencial destrucción de empleo que podría
generar la actividad inspectiva, como del estado de situación del mercado de trabajo local.
Teniendo en cuenta las significativas diferencias que existen en los niveles de impuesto al
trabajo y en los beneficios de la seguridad social entre las distintas jurisdicciones, cabe
esperar que en aquellas provincias donde los impuestos son menores y los beneficios
mayores, la probabilidad de que se destruya empleo producto de la formalización es
menor19. Por otra parte, para una probabilidad dada de destrucción de empleo, aquellas
provincias donde el nivel de desempleo es mayor tenderán a ser menos estrictas en el
control de la informalidad.
18
Dichas diferencias sirven de control natural en un ejercicio econométrico, ya que reducen de manera
significativa el problema de omisión de variables explicativas.
19
Fundamentamos dicho argumento por el hecho que las principales deducciones impositivas por zona
geográfica se implementan en 1994 y 1996.
12
Por ultimo, siguiendo el argumento central del nuestro análisis es de esperar que en Jujuy y
la Ciudad de Buenos Aires, jurisdicciones en donde la nación tiene las facultades de
inspección, la eficacia en el control de la informalidad laboral sea mayor.
Dentro de los indicadores de incentivos incluimos también una variable sindical. Tal como
hemos señalado, existen razones para suponer que en las provincias donde el sindicato
tenga mayor participación, los gobiernos enfrentarán mayores presiones para controlar la
informalidad laboral.
Un párrafo aparte merece el tema de recursos. Es lógico suponer que las jurisdicciones que
cuentan con mayores recursos (R) para controlar la informalidad resultarán más efectivas,
y en dicho sentido uno estaría tentado a incluir dicho factor como variable explicativa.
Pero de acuerdo a nuestro enfoque esto sería incorrecto, ya que los recursos que las
jurisdicciones destinan son endógenos a sus incentivos. Para ser más claros, imaginemos el
siguiente escenario: Supongamos que en la Ciudad de Buenos Aires se observa mayor
eficacia en el control de la informalidad y que dicha jurisdicción destina mayores recursos
a tal fin. Uno estaría tentado a concluir que son los recursos los que explican la mayor
eficacia, pero entonces cabría preguntarse por qué dicha jurisdicción destina mayores
recursos que las restantes. Consideramos que ésta es la pregunta relevante a responder (es
obvio que ceteris paribus mayores recursos resultarán en mayor eficacia) y de ahí que
asumimos que los recursos son endógenos a los incentivos.
Formalmente,
Eit = f [FTit,; Rit (Iit)]
La información estadística que utilizaremos ha sido recopilada por la Dirección Nacional
de Relaciones del Trabajo sobre la base de información suministrada por las
administraciones de trabajo provinciales. Los datos son anuales para el período 1996-1998
y tienen un nivel de apertura provincial, lo cual resulta en 72 observaciones. Las restantes
variables surgen de la Encuesta Permanente de Hogares, Censo Nacional de Población y
Vivienda y la Encuesta de Desarrollo Social20.
13
Utilizamos cuatro indicadores distintos de eficacia (E) en el control de la informalidad para
comprobar la robustez de los resultados. El numero de infracciones (INF_N), el número de
infracciones que tienen como origen las inspecciones programadas y de oficio21 (INFP_P),
el numero de multas impuestas (M_N) y el monto de las mismas (MM_N). En todos los
casos se pondera la variable dependiente por el numero de trabajadores informales22.
Para constatar la hipótesis central de nuestro estudio, utilizamos dos alternativas. Por un
lado, una dummy (D) que adquiere el valor D=1 en Jujuy y la Ciudad de Buenos Aires, y
D=0 en el resto de las provincias. La segunda alternativa consiste en utilizar una variable
(IF) que cuantifique los incentivos fiscales que tiene la jurisdicción a cargo de realizar la
inspección. Utilizaremos como indicador aquella porción del impuesto sobre la nómina
salarial que tiene como destino las arcas de la jurisdicción a cargo de la inspección. Por
ejemplo, en la Ciudad de Buenos Aires, IF adquiere el valor de 27 ya que la alícuota en
concepto de contribuciones patronales equivale a 27% y dicho monto está dirigido al
gobierno nacional, jurisdicción a cargo de la inspección23. En Córdoba la variable IF
equivale a 0, ya que si bien las contribuciones patronales ascienden a 26%, los montos
recaudados por dicho concepto tienen como destino las arcas del gobierno nacional,
mientras que la actividad inspectiva está a cargo del gobierno provincial.
Para captar los restantes indicadores de incentivos utilizamos la tasa de desempleo (TD),
una variable (PROB) que capta la probabilidad de destrucción de empleo24, y el porcentaje
de la población con participación en asociaciones sindicales (U), como indicador de poder
sindical.
20
En el anexo estadístico se brindan mayores detalles de las fuentes y variables utilizadas.
Las infracciones pueden tener como origen inspecciones por denuncias individuales, sindicales o
inspecciones programas y de oficio.
22
Lamentablemente la información disponible no permite distinguir por provincia, las infracciones y multas
que se deben al incumplimiento de normas de higiene, trabajo infantil, convencionales, etcétera, de aquellas
que tienen como origen la no registración y el incumplimiento con la seguridad social. Dado que nuestro
análisis tiene lógica para estas últimas, los resultados deben tomarse con precaución. Al respecto, cabe
señalar que las denuncias por no registración representan aproximadamente dos terceras parte del total de
denuncias en el país.
23
Ver Tabla 8 en el Anexo estadístico.
24
Ver Tabla 7 en el Anexo estadístico.
21
14
Como indicadores de factibilidad técnica utilizamos el porcentaje de población urbana
(UR) para medir el grado de concentración demográfica y el porcentaje de viviendas
salubres (ND) como indicador de desarrollo económico de la provincia25.
En una primera mirada a los datos se observa mayor eficacia en el control de la
informalidad en Jujuy y fundamentalmente en la Ciudad de Buenos Aires, respecto a las
restantes jurisdicciones.
Cuadro 1
Eficacia en el control de la Informalidad (Promedio anual para el período 1996-1998)
Jurisdicción
Nº Multas cada mil
trabajadores
informales
Ciudad Bs. As.
Jujuy
Resto País
27,5
6,6
2,3
Nº Infracciones c/mil Nº Infracciones Programadas
trabajadores informales c/mil trabajadores informales
35,5
10,4
4,6
21,9
6,2
1,6
Fuente: Elaboración propia.
Si bien dicha evidencia sirve de primer indicio a favor de nuestra hipótesis, es necesario
controlar por los restantes factores, ya que bien podría ocurrir que la alta eficacia
observada en la Ciudad de Bs.As. sea consecuencia de otros factores. Por ende,
procederemos a implementear el análisis econométrico. En la tabla 1 se presentan los
estadísticos básicos de las variables que utilizaremos.
25
La alta correlación entre el nivel de desarrollo económico y el porcentaje de población urbana
(coef.correlación (ND y UR) = 0.77) genera problemas de multicolinealidad, por lo cual sólo incluimos una
variable en las regresiones.
15
Tabla 1
Variable
Nº observaciones
MM_N
M_N
INF_N
INFP_N
D
IF
PROB
TD
ND
UR
U
Media
48
56
62
61
72
72
72
72
72
72
72
Desvío Std.
5,3
5,9
14,6
6,9
0,1
2,2
3,7
12,2
74,9
81,5
38,3
8,3
8,9
18,3
13,4
0,3
6,0
1,4
3,8
13,4
10,6
16,5
Mínimo
Máximo
0
0
1
0
0
0
1
4
50
47
15
33
43
89
80
1
27
6
21
98
100
91
Fuente: Elaboración propia.
En la tabla 2 se presentan los coeficientes de los cuatro modelos estimados, que resultan al
utilizar D como indicador de incentivos institucionales. Para las cuatro variables
dependientes se observa que Jujuy y la Ciudad de Buenos Aires presentan un mayor grado
de eficacia en el control del empleo informal, corroborando la hipótesis central del presente
estudio. Nuestra variable explicativa D es positiva y significativa en los cuatro modelos
alternativos.
Tabla 2. Eficacia en la Inspección del Trabajo
Variable
independiente
Variable Dependiente
MM_N (1)
M_N (2)
INF_N (3)
INFP_N (4)
9.94***
12.31***
11.18*
9.84**
(2.40)
(3.08)
(6.51)
(4.54)
-2.36***
-2.01***
-4.88***
-3.95***
(0.65)
(0.75)
(1.55)
(1.08)
-0.53**
-0.68**
-1.48***
-0.69*
(0.22)
(0.28)
(0.55)
(0.39)
0.28***
0.32***
0.52***
0.37***
(0.07)
(0.08)
(0.17)
(0.12)
0.17***
-0.06
0.24*
0.28***
(0.06)
(0.07)
(0.14)
(0.10)
Constante
-24.29
15.43
-31.55
-36.34
R-ajustado
0.58
0.39
0.34
0.40
Nº observaciones
48
56
62
61
D
PROB
TD
ND
U
16
Las regresiones fueron estimadas por mínimos cuadrados ordinarios. Entre paréntesis se presenta el desvío estándar. ***
significativo al nivel 1%
** significativo al nivel 5%
* significativo al nivel 10%
Del modelo (3) resulta un coeficiente para la variable D de 11.2. Esto indica que en las
jurisdicciones donde la nación tiene plenas facultades inspectivas, se realizan 11
infracciones mas cada 1000 trabajadores informales que en las jurisdicciones donde la
facultad es de la provincia. Si bien el numero absoluto en relativamente pequeño, al
considerar que la media de infracciones por trabajadores en negro en el resto del país es de
4.6 resulta en un incremento de aproximadamente 150%.
Un aspecto interesante para analizar es el origen de la infracciones. En principio, las
infracciones pueden estar originadas en denuncias individuales, sindicales o en
inspecciones programadas y de oficio. Nuestra teoría predice que, dados los mayores
incentivos que tiene la nación para controlar la informalidad laboral, deberíamos observar
en la Ciudad de Bs.As. y en Jujuy un mayor número de infracciones, pero
fundamentalmente de aquellas que se originaron en inspecciones programadas y de oficio.
Del modelo 4 surge un coeficiente de 9.8 (para una media de 1.6) resultando en un
incremento de más del 500% en las infracciones programadas, comparado con un
incremento del 150% para las infracciones totales.
En la tabla 3 se presentan los resultados luego de utilizar IF como variable explicativa.
Dicha variable resulta positiva y significativa en los cuatros modelos alternativos,
brindando evidencia adicional acerca de la importancia que tienen los incentivos fiscales
sobre la eficacia en el control de la informalidad. En aquellas jurisdicciones donde la
autoridad a cargo de la inspección obtiene mayores beneficios por regularizar trabajadores
(vía aumentos en los ingresos tributarios), se observa mayor eficacia en el control del
empleo “en negro”.
17
Tabla 3. Eficacia en la Inspección del Trabajo.
Variable
independiente
Variable Dependiente
MM_N (5)
M_N (6)
INF_N (7)
INFP_N (8)
0.58***
0.68***
0.62**
0.55**
(0.10)
(0.14)
(0.31)
(0.21)
-2.67***
-2.33***
-5.14***
-4.18***
(0.58)
(0.72)
(1.55)
(1.07)
-0.52***
-0.65**
-1.45***
-0.66*
(0.20)
(0.26)
(0.55)
(0.38)
0.24***
0.29***
0.50***
0.35***
(0.07)
(0.08)
(0.17)
(0.11)
0.18***
-0.06
0.24*
0.29***
(0.05)
(0.06)
(0.14)
(0.10)
Constante
-4.79
0.82
-4.16
-7.36
R-ajustado
0.66
0.45
0.35
0.42
Nº observaciones
48
56
62
61
IF
PROB
TD
ND
U
Las regresiones fueron estimadas por mínimos cuadrados ordinarios. Entre paréntesis se presenta el desvío estándar.
***, **, * significativos al nivel 1%, 5% y 10% respectivamente.
El ejercicio econométrico también nos permite comprobar si las restantes variables
independientes tienen el poder explicativo que nuestra hipótesis predice. Como se
desprende de las tablas 2 y 3, en aquellas jurisdicciones donde los costos sociales del
control del empleo informal son menores (medidos como baja probabilidad de destrucción
de empleo), se realizan mayores esfuerzos para controlar la informalidad. En el mismo
sentido, y tal como predice nuestro análisis, las jurisdicciones con mayor tasa de
desocupación presentan menor eficacia en el control de la informalidad26.
Las provincias donde la población tienen mayor participación en las asociaciones
sindicales, presentan mayor eficacia en el control de la informalidad (con la excepción del
modelo 2 y 6 donde el coeficiente es negativo y no significativo). Si bien es cierto que U es
26
Vale aclarar que el coeficiente correspondiente a TD podría estar sobreestimado, ya que existen razones
para sospechar que en mercados de trabajo con alto desempleo habrá mayor informalidad. Sin embargo,
consideramos que la posible sobreestimación sería relativamente pequeña. Note el lector que informalidad
laboral aparece como denominador en nuestros indicadores de eficacia, y que dichos ratios son pequeños (por
ejemplo 6 multas cada mil trabajadores informales). En consecuencia, bajo parámetros normales en la
relación desempleo-informalidad, si se “ corrigiera” el número de trabajadores informales, no cambiaría
demasiado los indicadores de eficacia. Similar consideración se aplica al coeficiente correspondiente a la
variable PROB e IF, aunque para ésta última el coeficiente no estaría sobreestimado sino subestimado.
18
un indicador imperfecto de “ presión sindical”; consideramos que esta variable está
captando razonablemente la presión que ejercen los sindicatos y sus afiliados sobre el
gobierno para que éste cumpla con sus responsabilidades fiscalizadoras.
Estos resultados son consistentes con nuestros supuestos sobre las motivaciones de los
actores sociales. No se trata de gobiernos benevolentes preocupados por el bienestar social
sino más bien por su propio poder. Si la autoridad pública fuera benevolente cabría esperar
que la descentralización en la actividad inspectiva redundaría en mayor eficacia en el
control del empleo informal, ya que en principio los gobiernos locales disponen de mayor
información de los problemas que tienen lugar en su jurisdicción. Pero dado que los
recursos de la seguridad social los maneja el gobierno nacional, es éste y no las provincias
el que tiene mayores incentivos para controlar la informalidad.
Finalmente, se observa que las provincias en donde es más factible técnicamente controlar
la informalidad, la actividad inspectiva resulta ser más eficaz27.
4.1 ¿Mayor eficacia debido a mayores recursos o a mayor eficiencia?
Nuestra hipótesis predice que en las jurisdicciones donde la nación tiene plenas facultades
inspectivas, será mayor la eficacia en el control del empleo informal. Pero nada nos dice
respecto a que medios utilizará para lograr mayor eficacia. En principio, podría ser
mediante el uso de mayores recursos o través de un uso más eficiente de los mismos.
Con fines puramente ilustrativos, presentamos evidencia al respecto. Como se observa en
la Tabla 4, los recursos que ha dispuesto la nación para realizar el control de la
informalidad en la Ciudad de Buenos Aires y en Jujuy no son muy diferentes a los que han
destinado las restantes provincias. La educación de los inspectores en éstas dos
jurisdicciones es similar a la media nacional28; así como tampoco se observan mayores
diferencias en el personal destinado a la actividad inspectiva.
27
En las Tablas 2 y 3 se presentan los resultados utilizando únicamente al nivel de desarrollo económico
(ND) como indicador de factibilidad técnica. No se incluyen ND y UR conjuntamente por las razones
señaladas en la nota 26. Cabe destacar que al utilizar el porcentaje de población urbana como indicador de
factibilidad los resultados no se modifican sustancialmente, aunque algunas variables pierden cierto grado de
significatividad. Ver Tabla 9 en el anexo estadístico.
28
De acuerdo a entrevistas con funcionarios del Ministerio de Trabajo, los inspectores nacionales acceden a
mejores y mayores cursos de capacitación específicos; pero no disponemos de la información para poder
incorporarla al análisis.
19
Tabla 4
Indicadores de Recursos. (Promedio anual para el periodo 1996-1998)
Jurisdicción
Ciudad Bs. As.
Jujuy
Media Resto País
Nº de
Inspectores
Personal
Total1
54.0
6.3
18.5
82.3
7.7
26.2
Años de PEA2/Personal
Trabajadores
Escolaridad
(miles)
Informales/Inspectores
(miles)
11.3
9.7
11.9
18.8
23.8
23.2
7.1
10.1
9.8
Fuente: Elaboración propia en base a Ministerio de Trabajo e INDEC.
1. El personal total equivale a la suma de inspectores más personal administrativo.
2. Población Económicamente Activa.
Donde se observan importantes diferencias es en la productividad por inspector29. Tanto en
la Ciudad de Buenos Aires como en Jujuy, los inspectores han sido mucho mas eficientes
en el control de la informalidad que en el resto de las jurisdicciones tal como se desprende
de la Tabla 5.
Tabla 5
Indicadores de Eficiencia. (Promedio anual para el período 1996-1998)
Jurisdicción
Ciudad de Bs.As.
Jujuy
Media Resto País
Infracciones Infracciones Programadas Multas por Monto de las Multas
por Inspector
por Inspector
Inspector por Inspector (miles $)
246
103
43
152
62
15
191
66
17
158
34
15
Fuente: Elaboración propia en base a Ministerio de Trabajo e INDEC
5.- Conclusiones y Recomendaciones
Con el actual diseño institucional no podemos esperar mejoras significativas en el control
del empleo informal. Esto es particularmente grave si se considera que la actividad
29
Una posible explicación radica en el régimen de contratación. Mientras los inspectores provinciales
perciben un salario fijo; los inspectores que dependen del gobierno nacional perciben un ingreso que está
compuesto por un salario fijo más un componenete variable equivalente al 10% del monto de las multas
recaudadas. Ciertamente, los inspectores nacionales tienen mayor incentivo en penalizar el empleo no
registrado. Pero la pregunta más interesante, es por qué el gobierno nacional ha decidido implementar un
régimen de contratación diferente al de las provincias. Nuestra primera y tentativa respuesta es que dicha
elección responde a los incentivos institucionales. Dado que el gobierno nacional tiene mayores incentivos
que los gobiernos provinciales en controlar la informalidad laboral, ha introducido un régimen de retribución
para sus inspectores donde se premia la “ productividad” .
20
inspectiva es uno de los potenciales instrumentos a disposición del Estado para lograr que
una gran mayoría de los trabajadores y hogares de menores ingresos puedan acceder a los
beneficios de la seguridad social. Consideramos necesario dotar a la autoridad central de
facultades plenas en el control del empleo informal. Esto implica una delegación de
facultades desde las provincias hacia el gobierno central o algún órgano federal30.
Si bien consideramos que el traspaso de facultades producirá una mejora significativa en el
control de la informalidad, tentativamente consideramos que se requieren cambios
adicionales para que la autoridad pública cumpla eficazmente dicho rol. Regímenes de
contratación para los inspectores que resuelvan al menos parcialmente los problemas de
principal-agente; mayor coordinación entre las distintas dependencias públicas encargadas
de la fiscalización en general (por ejemplo con la AFIP y el ANSEES); o la participación
de algún organismo internacional en el control, que sirva de factor exógeno de presión.
Pero éstas son sólo sugerencias y temas que requieren mayor investigación.
Unas palabras de precaución antes de concluir. Si bien consideramos que deben
implementarse los cambios necesarios para aumentar la eficacia en el control del empleo
informal, la secuencia temporal en la implementación de políticas es un elemento clave a
considerar. En dicho sentido, podría resultar conveniente implementar, en una primera
instancia, reformas tendientes a modernizar la normativa laboral, simplificar la registración
y reducir los impuestos al trabajo, junto a una amplia campaña que informe a los
trabajadores y empleadores de sus derechos y obligaciones. Sólo después de
implementados dichos cambios, será el momento oportuno para mejorar la eficacia en el
control del empleo informal. Sería equivocado hacer cumplir leyes obsoletas, máxime en
un contexto con alto desempleo.
30
Si es la nación o un órgano federal el organismo más adecuado, es un tema que excede los límites del
presente estudio y requiere mayor investigación.
21
Bibliografía
Becker G. y Stigler G. (1974), “ Law Enforcement, Malfeasance, and Compensation of
Enforcers”. Journal of Legal Studies, 3 (1), pág. 1-18.
Bour J. y Susmel N. (2000), “Los Determinantes de la Informalidad Laboral”; en La
Economía Oculta en la Argentina; FIEL.
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Gray W. y Jones C. (1991), “ Are OSHA Health Inspections Effective?”. The Review of
Economics and Statistics.
Jelin, Mercado y Wyczykier (1999), El Trabajo a Domicilio en Argentina. OIT
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Neffa J., Battistini O., Panigo D. y Pérez P. (1999), Exclusión Social en el Mercado de
Trabajo. El Caso de Argentina. OIT
OIT (1989), Informe de la Misión Tripartita para Evaluar la Eficacia de la Inspección del
Trabajo en Argentina. OIT.
Polinsky y Shavell (1999), The Economic Theory of Public Enforcement of Law, Working
Paper 6993, NBER.
Ruiz-Tagle (2000), Exclusión Social en el Mercado de Trabajo. En Mercosur y Chile. OIT.
Soto H. de (1987), The Other Path: The Invisible Revolution in the Third World.
22
Anexo Estadístico I
Tabla 6
Empleo Informal según quintiles de ingreso per capita. Porcentaje de la población que
percibe beneficios de la seguridad social.
(Total País. Año 1997)
Percepción de
beneficios
Total
Quintil de ingreso per capita del hogar
1
2
3
4
5
Todos
54.3
25.9
46.5
56.1
65.1
73.9
Algunos
12.1
14.3
12.9
13.3
11.4
8.9
Ningún
27.9
53.2
35.8
24.3
18.5
11.4
Ignorado
5.7
6.6
4.9
6.3
5.0
5.7
Fuente: Encuesta de Desarrollo Social.
Anexo estadístico II
A) Fuentes
La información referida a la actividad de inspección del trabajo y la seguridad social surge
del Ministerio de Trabajo (1996), (1997) y (1998); en base a información suministrada por
las administraciones provinciales de trabajo y el propio ministerio.
El porcentaje de población urbana (UR) y el porcentaje de viviendas con servicios
sanitarios salubres (ND) surgen del Censo Nacional de Población y Vivienda 1991,
INDEC.
El número de trabajadores informales (N) y la tasa de desempleo (TD) se computan en
base a la Encuesta Permanente de Hogares, para los años 1996, 1997 y 1998. INDEC.
Participación sindical (U) se computó en base a la Encuesta de Desarrollo Social, 1997.
B) Definición de variables
MMi,t Monto total de las multas impuestas por provincia y por año. (En pesos)
23
Mi,t
Número de multas impuestas por provincia y por año
INFi,t Número de infracciones por provincia y por año
INFPi,t Número de infracciones con origen en inspecciones programadas y de oficio por
provincia y por año
Ni,t
Número de trabajadores informales por provincia y por año
MM_Ni,t = MMi,t / Ni,t
M_Ni,t = (Mi,t / Ni,t ) x 1000
INF_Ni,t = (INFi,t / Ni,t ) x 1000
INFP_Ni,t = (INFPi,t / Ni,t ) x 1000
NDi
Medido como porcentaje de viviendas con condiciones sanitarias salubres.
URi
Medido como porcentaje de la población total radicada en zonas urbanas.
TDi,t
Tasa de desempleo por aglomerado urbano por año.
Di
Es una variables dummy que adopta el valor de 1 para Jujuy y la Ciudad de Buenos
Aires y 0 para el resto de las provincias.
Ui
Medido como el número de personas que participa en asociaciones sindicales cada
mil habitantes.
PROBi Es una variable que adquiere valores de 1 a 6 de acuerdo a la siguiente escala:
PROBi = 6 en aquellas jurisdicciones donde los aportes patronales superaban el 25% de la
nómina salarial en enero de 1996 y que no tienen ningún beneficio particular en el régimen
de asignaciones familiares.
PROBi = 5 impuestos entre 20-25% y sin beneficios.
PROBi = 4 impuestos entre 15-20% y sin beneficios o impuestos entre 20-25% y
beneficios moderados.
PROBi = 3 impuestos menores a 15% y sin beneficios o impuestos entre 15-20% y
beneficios moderados.
PROBi = 2 impuestos menores a 15% y beneficios moderados.
PROBi = 1 impuestos menores a 15% y beneficios elevados.
24
Tabla 7 Cómputo de la variable PROBi
Provincia
Aportes Patronales
Buenos Aires
Catamarca
Chaco
Chubut
Ciudad de Bs. As.
Córdoba
Corrientes
Entre Ríos
Formosa
Jujuy
La Pampa
La Rioja
Mendoza
Misiones
Neuquén
Río Negro
Salta
San Juan
San Luis
Santa Cruz
Santa Fe
Santiago del Estero
Tierra del Fuego
Tucumán
0,26
0,18
0,14
0,15
0,27
0,23
0,16
0,21
0,14
0,15
0,22
0,18
0,21
0,15
0,20
0,20
0,15
0,19
0,20
0,14
0,22
0,14
0,15
0,18
Asignaciones Familiares
Sin beneficios
Beneficios moderados
Sin beneficios
Beneficios elevados
Sin beneficios
Sin beneficios
Sin beneficios
Sin beneficios
Beneficios moderados
Beneficios moderados
Beneficios moderados
Sin beneficios
Sin beneficios
Sin beneficios
Beneficios moderados
Beneficios moderados
Beneficios moderados
Sin beneficios
Sin beneficios
Beneficios elevados
Sin beneficios
Sin beneficios
Beneficios elevados
Sin beneficios
PROBi
6
3
3
1
6
5
4
5
2
3
4
4
5
4
4
4
3
4
5
1
5
3
1
4
Fuente: Elaboración propia en base a Ministerio de Trabajo (1999) y legislación pertinente.
Nota: El decreto 492/95 establece reducciones en los impuestos al trabajo según zona geográfica. El decreto 1245/96
establece beneficios especiales en el régimen de asignaciones familiares en determinadas zonas geográficas.
Tabla 8 Cómputo de la variable IFi
Provincia
IFi
Buenos Aires
Catamarca
Chaco*
Chubut
Ciudad de Bs. As.
Córdoba
Corrientes
Entre Ríos
Formosa
Jujuy
La Pampa
La Rioja
Mendoza
Misiones
Neuquén
Río Negro
Salta*
San Juan
San Luis
Santa Cruz
Santa Fe*
Santiago del Estero*
Tierra del Fuego
Tucumán*
0
0
1
0
27
0
0
0
0
15
0
0
0
0
0
0
2
0
0
0
3
2
0
2.5
* Provincias con impuestos provinciales específicos que se aplican sobre la nómina salarial
25
Tabla 9
Eficacia en la inspección del trabajo
Variab.
Indep.
D
IF
PROB
Variable Dependiente
MM_N
M_N
INF_N
INFP_N
MM_N
M_N
INF_N
INFP_N
7.14***
9.34***
7.14
7.66
-
-
-
-
(2.56)
(3.30)
(6.92)
(4.92)
-
-
-
-
0.48***
0.56***
0.48
0.48**
(0.11)
(0.15)
(0.33)
(0.23)
-1.39**
-0.91
-3.19**
-2.74***
-1.76*
-1.28*
-3.48**
-3.03***
(0.58)
(0.70)
(1.45)
(1.03)
(0.55)
(0.67)
(1.46)
(1.03)
-0.71***
-0.86***
-1.68***
-0.79*
-0.68***
-0.81***
-1.65***
-0.75*
(0.23)
(0.29)
(0.58)
(0.41)
(0.21)
(0.28)
(0.56)
(0.41)
0.34***
0.38***
0.54***
0.32**
0.29***
0.34***
0.51**
0.30**
(0.09)
(0.10)
(0.20)
(0.14)
(0.09)
(0.10)
(0.20)
(0.14)
0.19***
-0.06
0.23
0.29***
0.19***
-0.05
0.24*
0.30***
(0.06)
(0.07)
(0.15)
(0.10)
(0.05)
(0.07)
(0.15)
(0.10)
-26.42
16.49
-28.41
-30.30
-11.58
8.20
-3.75
-9.02
R-ajust.
0.58
0.37
0.31
0.36
0.65
0.43
0.33
0.38
Nº obs.
48
56
62
61
48
56
62
61
TD
UR
U
Const.
Todas las regresiones fueron estimadas por mínimos cuadrados ordinarios. Entre paréntesis se presenta el
desvío estándar
*** significativo al nivel 1%
** significativo al nivel 5%
* significativo al nivel 10%
26
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