INFORMALIDAD LABORAL E INSPECCIÓN DEL TRABAJO EN ARGENTINA. UN ENFOQUE INSTITUCIONAL Lucas Ronconi* Documento 46 * Marzo de 2001 Centro de Estudios para el Desarrollo Institucional, Fundación Gobierno y Sociedad. Agradezco la útil colaboración de Esteban Aucejo como asistente de investigación, y los comentarios de los participantes del seminario del CEDI fundamentalmente de Federico Weinschelbaum y Mariano Tommasi. Resumen El número de trabajadores informales ha crecido de manera significativa en Argentina afectando principalmente a los trabajadores de menores recursos. Este fenómeno es especialmente grave ya que la condición de informal los excluye de los beneficios de la seguridad social. Uno de los instrumentos que dispone el Estado para controlar la informalidad laboral es la Inspección del Trabajo. Sin embargo, dicha función ha sido ejecutada de manera deficiente. En el presente documento argumentamos que una de las principales razones que explican su mal funcionamiento responde a problemas de índole institucional. En la Argentina, las facultades y atribuciones de los organismos públicos se encuentran distribuidos de manera tal que no existen los incentivos adecuados para el control del empleo informal. Las provincias tienen la facultad de controlar el cumplimiento de la normativa laboral y de la seguridad, pero no tienen los incentivos necesarios para hacerlo eficazmente ya que los montos recaudados en concepto de aportes y contribuciones sobre la nómina salarial tienen como destino único al gobierno nacional. Con el objetivo de testear nuestra hipótesis analizamos la eficacia en el control de la informalidad laboral en las 23 provincias y la Ciudad de Buenos Aires durante los años 1996-1998, período para el cual existe información estadística. La evidencia empírica nos indica que en Jujuy y la Ciudad de Buenos Aires, las únicas dos jurisdicciones donde la nación tiene facultades plenas en el control de la no registración, se observa mayor eficacia que en las restantes 22 provincias, donde las facultades están en poder de la administración local. 2 1.- Introducción La informalidad laboral es un fenómeno de magnitudes considerables en todos los países de América Latina. En la Argentina el fenómeno ha crecido significativamente en los últimos 20 años, y actualmente cerca del 40% de los trabajadores en relación de dependencia no están debidamente registrados, lo cual implica que aproximadamente 4 millones de trabajadores no acceden a los beneficios de la seguridad social. Existe algún grado de controversia respecto a las causas y consecuencias del empleo informal. Por un lado, están quienes entienden a la informalidad laboral como una forma de explotación, y por ende la consideran un problema de gravedad mayúscula. Por otro lado, algunos sostienen que el empleo informal es simplemente el producto de una legislación inadecuada, y en dicho sentido no le asignan mayor gravedad1. La cuestión es compleja y escapa al alcance del presente análisis. El único punto que queremos señalar al respecto, es que la situación actual que existe en Argentina dista de ser deseable. La condición de informal excluye a muchos trabajadores de los beneficios de la seguridad social. Y dado que la gran mayoría de los trabajadores informales se encuentran ubicados en los menores deciles de ingreso, son justamente los integrantes de los hogares más pobres los que quedan excluidos del seguro de desempleo, asignaciones familiares, cobertura de salud y jubilación. Por lo tanto, la informalidad laboral en Argentina desvirtúa completamente el carácter solidario del régimen de seguridad social2. Es por dicha razón que consideramos necesario instrumentar cambios dirigidos a reducir la informalidad laboral. Uno de los instrumentos que dispone el Estado para controlar la informalidad es la inspección y fiscalización del cumplimiento de la normativa laboral y de la seguridad social. Indudablemente existen otros instrumentos; y en dicho sentido la implementación de políticas que permitan la reducción en el desempleo, reformas que modernicen la 1 Ver Soto (1987); Neffa et al (1999). Este fenómeno es especialmente grave si se considera que el régimen de seguridad es, en términos de recursos, el principal instrumento de política social que maneja el Estado. Para tener una idea de su magnitud, nótese que en el año 1998 los recursos manejados por la Seguridad Social (sin incluir obras sociales y 2 3 normativa laboral y simplifiquen la registración, o campañas que informen a los trabajadores de sus derechos, son todas medidas que potencialmente contribuirán a la reducción de la informalidad. Pero consideramos que la inspección del trabajo merece especial atención. Es un tema que ha sido escasamente analizado a pesar de que su funcionamiento presente enormes falencias. Por dicho motivo el presente estudio se centrará en la inspección del trabajo, para lo cual analizaremos sus problemas de funcionamiento y presentaremos propuestas de reforma. Los estudios existentes al respecto sostienen que la causa del mal funcionamiento de la actividad inspectiva se debe a la falta de presupuesto3. Mas allá de estar de acuerdo o en desacuerdo con dicho argumento, consideramos que es necesario profundizar más el análisis. De poco sirve saber que el mal funcionamiento responde a la falta de recursos si se ignoran cuales son los factores que en última instancia los determinan. Es en esta dirección que avanzaremos. El argumento central de nuestro estudio indica que la falta de eficacia en el control de la informalidad laboral, ya sea por pocos recursos o baja eficiencia en el uso de los mismos, responde a problemas de índole institucional. Como desarrollaremos en mayor detalle a lo largo del estudio, puede sostenerse que en la Argentina, las facultades y atribuciones de los organismos públicos se encuentran distribuidos de manera tal que no existen los incentivos adecuados para el control del empleo informal. Las provincias tienen la facultad de controlar el cumplimiento de la normativa laboral y de la seguridad social, pero no tienen los incentivos necesarios para hacerlo eficazmente. Pero antes de comenzar nuestro análisis conviene detenernos para considerar si es necesario contar con un ente público que controle el cumplimiento de la normativa laboral, en lugar de dejarla en manos de la justicia privada. De acuerdo a Polinsky y Shavell (1999), un elemento importante a considerar se refiere a la información que tenga el perjudicado de aquel que viola la ley. En dicho sentido, dado que los trabajadores tienen conocimiento natural de quienes son sus empleadores, en principio no existen mayores razones para que un ente público se encargue del control de la normativa laboral. Aquellos administradoras de riesgo de trabajo) alcanzaron a $23 mil millones, lo cual representa un 40% del gasto público social consolidado. 3 Ministerio de Trabajo (1998), Ruiz-Tagle (2000), OIT (1989). 4 trabajadores perjudicados pueden presentar ante la justicia los cargos necesarios y de esa forma hacer valer sus derechos. Sin desconocer el argumento anterior, sería erróneo que el Estado se desentendiera totalmente del problema. Hay razones para sostener que algún grado de participación pública en el control del empleo informal es necesario. Una de las principales causas se refiere al carácter solidario del régimen de la Seguridad Social. En todo sistema de reparto, habrá trabajadores que realizan contribuciones superiores a los beneficios que perciben, y en dicho sentido tienen los incentivos para llegar a acuerdos informales con sus empleadores y de esa forma evadir los tributos. Otra razón se fundamenta por el hecho que ciertas enfermedades laborales se hacen visibles mucho tiempo después de contraídas4. Aclarada dicha cuestión, procedamos a presentar la estructura del estudio: En la siguiente sección se resumen las características principales del régimen de seguridad social, así como la normativa que regula la inspección del trabajo en Argentina. Dicho marco servirá de insumo para la tercer sección donde se desarrollan las ideas centrales de nuestro estudio. En la cuarta sección se brinda evidencia empírica con el objetivo de testear la validez de nuestra hipótesis. Finalmente, las recomendaciones de política y conclusiones se presentan en la quinta sección. 2.- Marco Legal En la Argentina la seguridad social se financia principalmente a través de aportes y contribuciones sobre la nómina salarial. Dichos tributos alcanzan aproximadamente al 35% del salario, pero con importantes reducciones dependiendo del lugar geográfico en que tiene lugar la relación laboral5. Estos tributos son de carácter federal y no-coparticipable lo cual significa que los montos recaudados tienen como destino exclusivo al gobierno nacional. Esta jurisdicción, es asimismo la encargada de distribuir los recursos hacia las administradoras de jubilaciones y pensiones (AFJP), de riesgos de trabajo (ART) y Obras Sociales, y brindar los beneficios 4 Ver Gray y Jones (1991). Para mayores referencias respecto a la justificación social de control público en lugar de privado; ver Becker y Stigler (1974). 5 de asignaciones familiares, seguro de desempleo, jubilación y salud para las personas de edad avanzada6. En lo referido a la inspección de trabajo y el control del cumplimiento de la seguridad social, las facultades y atribuciones están descentralizadas en las provincias7. De acuerdo al Informe sobre Inspección del Trabajo elaborado por el Ministerio de Trabajo (1998) a partir del retorno a la democracia, cada una de las provincias (con la excepción de Jujuy y la Ciudad de Buenos Aires) organiza y realiza de manera autónoma la fiscalización y cumplimiento de la normativa laboral. A lo largo de la historia, las competencias en materia de inspección se repartieron entre la nación y las provincias, con períodos en los cuales la nación concentró los poderes de inspección del trabajo (1943 a 1957 y 1973 a 1984) y otros en los cuales las provincias se reservaron exclusivamente dicha facultad (1904 a 1943, 1957 a 1970 y 1984 a 1996). A partir de 1996 –al igual que durante el período 1970 a 1973- las facultades son concurrentes y tanto el Ministerio de Trabajo nacional como los estados provinciales realizan tareas de inspección guiados según el criterio de un federalismo cooperativo. El Ministerio de Trabajo nacional tiene competencias en materia de inspección sólo en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires y en la provincia de Jujuy; y cumple el rol de Autoridad Central en materia de inspección del trabajo y la seguridad social8. Como autoridad central, es el encargado de la coordinación de la actividad de los distintos servicios de inspección y en los casos en que un servicio local de inspección no cumpla adecuadamente sus funciones propone al Consejo Federal de Trabajo la elaboración de un programa de reorganización. El Consejo Federal de Trabajo tiene a su vez atribuciones propositivas pero no taxativas9. 5 Decretos Nº 2609/93, Nº492/95, Nº 96/99 entre otros. Ver Tabla 7 en el anexo estadístico. El régimen de asignaciones familiares prevé mayores beneficios para los trabajadores radicados en determinadas zonas geográficas. Ver tabla 7 en el anexo estadístico. 7 Neffa et. al (1999). 8 Durante 1999, a partir de la sanción del Pacto Federal la autoridad central es el Consejo Federal del Trabajo; pero con el decreto 95/2001, que reglamenta la Ley Nº 25250, vuelve al Ministerio de Trabajo. 9 Pacto Federal de Trabajo, Ley Nº25212. 6 6 En síntesis, el punto que queremos destacar es que la nación tiene facultades exclusivas en materia de inspección en la Ciudad de Buenos Aires y Jujuy; mientras que en el resto de las provincias sus facultades son mucho más limitadas. Son las provincias las principales encargadas de realizar la inspección del trabajo y de la seguridad social en sus respectivas jurisdicciones. 3.- Marco Teórico y Análisis “Resolver el problema (de la informalidad laboral)....es responsabilidad de todos los actores sociales.....Los gobiernos provinciales, dejando atrás actitudes de malentendida tolerancia del trabajo clandestino”10. Caro Figueroa, entonces Ministro de Trabajo “La fiscalización del trabajo a domicilio se paralizó en el país a partir de año 1986 con la primera delegación a las provincias”11 Ex-funcionario de la Dirección Policía del Trabajo La existencia del empleo informal es el resultado de un complejo entramado de actores y circunstancias. Por un lado se encuentran los actores directos: empleadores y trabajadores; por otro lado, la autoridad pública a cargo del control del cumplimiento de la normativa laboral y de la seguridad social, en nuestro caso los gobiernos provinciales y en menor medida el gobierno nacional. Asimismo, existen otros actores que tienen un potencial interés al respecto como los sindicatos o las administradoras de jubilaciones y pensiones (AFJP). Este conjunto de actores se desenvuelve en un contexto social y económico que delimita su accionar. Por ejemplo, el comportamiento de los actores será distinto en un contexto de alto desempleo comparado a una situación de pleno empleo. El enfoque que utilizaremos para analizar el comportamiento de los diversos actores se centra en el concepto de incentivos y tiene como guía a la teoría económica. En dicho sentido descartamos supuestos tales como asumir que los empleadores se preocupan desinteresadamente por sus trabajadores, o que el Estado es benevolente y su objetivo es maximizar el bienestar social. 10 11 Publicado en Ambito Financiero, febrero de 1997. Extraído de Jelin, Mercado y Wyczykier (1999). 7 Dado que nuestro objetivo central es el análisis de la autoridad pública, éste será el actor que enfatizaremos, sin por ello desconocer la influencia que ejercen, tanto los actores privados, como el contexto y las circunstancias sobre la informalidad laboral. Respecto a los actores privados, asumiremos que el trabajador busca obtener el mayor nivel de ingreso y seguridad para cada nivel de esfuerzo; mientras que el empleador tiene como motivación principal la búsqueda de ganancias. Utilizando dicho marco de análisis para el caso argentino, se desprende que el trabajador tiene –generalmente- los incentivos para exigirle a su empleador el cumplimiento de la normativa laboral y de la seguridad social12. Por el lado del empleador, éste tiene mayores incentivos para no declarar la relación laboral y de esa forma evadir los impuestos laborales13. La informalidad en la relación laboral, no depende a priori de la voluntad de una de las partes sino que requiere el mutuo consenso. En dicho sentido nuestro análisis sugiere que existen algunas circunstancias en las cuales las partes llegarán a un acuerdo que viole los requerimientos legales, por ejemplo no declarando la relación laboral y de esa forma 12 Los incentivos que tiene el trabajador a reclamar una relación laboral formal dependen en gran medida de las características del sistema de Seguridad Social. Por el lado del los aportes, los mismos se computan como porcentaje del salario ajustados por la zona geográfica en que tiene lugar la relación laboral. En dicho sentido los trabajadores con mayores salarios y radicados en localidades más desarrolladas, en principio aportan un monto superior al resto. Por el lado de los beneficios existen diferencias importantes entre los distintos componentes (jubilación, seguro de desempleo, obra social, asignaciones familiares). En forma sintética es correcto argumentar que existen subsidios hacia los trabajadores radicados en localidades menos desarrolladas, con menores ingresos y con mayores cargas familiares. Sin la pretensión de demostrarlo formalmente, creemos que en la Argentina existen trabajadores que si tuvieran la opción de elegir el tipo de relación, escogerían trabajar en negro. El caso típico es aquel trabajador soltero de elevado salario, radicado en una localidad desarrollada. Sin embargo, dado que una porción importante de los trabajadores informales en Argentina percibe bajos salarios y tiene cargas de familia, es muy probable que si tuvieran la opción escogerían trabajar en blanco. 13 La decisión del empleador de optar por contratar a sus trabajadores en blanco depende de una amplia gama de variables, pero creemos que hay dos aspectos a destacar: Por un lado, de la formalidad de sus otras actividades: Si el empleador tiene todas sus ventas declaradas, entonces tiene mayores incentivos a formalizar la relación de sus trabajadores ya que puede deducir el salario de diversos impuestos; en caso contrario preferirá la no registración. El otro aspecto que afecta su decisión de no declarar a sus trabajadores, es el monto de la multa que debería pagar ajustado por la probabilidad de ser sancionado por la autoridad a cargo de la inspección del trabajo. 8 evadiendo los impuestos laborales14. Pero este mismo análisis sugiere que dichas relaciones tendrían lugar fundamentalmente en empresas pequeñas (donde es más fácil evadir impuestos en general), ubicadas en zonas desarrolladas (donde la tasa impositiva es mayor), con trabajadores calificados de elevado salario (para quienes los aportes son mayores que los beneficios). Sin embargo la evidencia parecería indicar, que si bien en dicho segmento se observa informalidad, la misma se concentra más entre los trabajadores menos capacitados15. Como mencionamos anteriormente, no pretendemos brindar una explicación completa acerca de los factores que determinan que algunas relaciones laborales se formalicen y otras se mantengan “ en negro” . Sólo a título de sugerencia, creemos que para explicar dichas circunstancias es necesario relajar el supuesto de información completa por parte de trabajadores y empleadores. En dicho sentido, es probable que entre los trabajadores menos calificados radicados en zonas rurales y/o regiones menos desarrolladas de nuestro país exista un gran desconocimiento de cuales son sus derechos. Pero dejemos de lado por un momento el análisis de trabajadores y empleadores, para pasar a ocuparnos del actor central de nuestro estudio: la autoridad pública. Existe controversia respecto a cuales son los objetivos y motivaciones que tienen los agentes públicos en cumplir sus funciones (en éste caso controlar la informalidad laboral). De acuerdo a Polinsky y Shavell (1999) los análisis académicos al respecto han asumido generalmente la figura del Estado benevolente donde los gobernantes actúan de manera de maximizar el bienestar social16. Evidentemente, este supuesto puede estar alejado de la realidad y por lo tanto su utilización podría brindar conclusiones erróneas. Consideramos que en la Argentina es necesario un enfoque diferente, y en dicho sentido utilizaremos el enfoque de la nueva economía institucional. 14 Puede demostrase formalmente que en un régimen de beneficios obligatorios con características de reparto, donde las probabilidades de sanción son menores a uno, existirán algunos acuerdos cooperativos entre el trabajador y el empleador donde ambos deciden no declarar la relación laboral. 15 Ver Tabla 6 en el anexo estadístico. 16 Una excepción es Becker y Stigler (1974). 9 Siguiendo dicho enfoque y basándonos en las características que tiene el régimen de la seguridad social, de coparticipación federal y la normativa referida a inspección del trabajo en Argentina, consideramos que la autoridad pública no tiene los incentivos suficientes para controlar adecuadamente el cumplimiento de la normativa laboral y de la seguridad social. Los gobiernos provinciales, que disponen de la facultad de realizar la inspección del trabajo, se enfrentan a una situación en la cual no les conviene destinar mayores esfuerzos a reducir el empleo informal ya que los beneficios que obtendrán de una reducción en el empleo en negro son menores, mientras que los potenciales costos son significativos. Hay dos razones principales para sostener dicho argumento: Por un lado, el aumento de la recaudación que se genera al regularizar trabajadores tiene como destino único el gobierno nacional, y en dicho sentido el gobierno provincial no percibe el “premio” de la regularización. Por otra parte, existe la posibilidad de que la actividad inspectiva genere una caída en el nivel de empleo provincial. Empresas y/o trabajadores que eran competitivos cuando operaban “en negro” podrían dejar de serlo si cumplieran sus obligaciones impositivas, resultando en una destrucción de empleo o emigración a provincias menos estrictas17. El gobierno nacional en cambio, tiene mayores incentivos para regularizar trabajadores ya que pasa a disponer de mayores recursos tributarios y no enfrenta el problema de migraciones internas. Finalmente, existe un tercer grupo de actores que potencialmente estaría interesado en la formalización de las relaciones laborales como los sindicatos y las AFJP. En principio podría sostenerse que dichas entidades presionarán para la regularización de las relaciones laborales ya que de esa forma lograrán un incremento en el tamaño de su mercado. Sin pretender brindar un análisis detallado, consideramos que estos grupos tienen especial interés en que los trabajadores de salarios elevados se encuentren registrados, pero un interés menor en que se regularicen las relaciones laborales que incluyen trabajadores poco calificados. 10 4.- Análisis Empírico Teniendo en cuenta los cambios a lo largo del tiempo de las competencias en materia de inspección en Argentina, podría ensayarse un análisis estadístico con el objetivo de testear la hipótesis que hemos presentado. De acuerdo a la misma uno esperaría que –luego de controlar por otros factores- los períodos en los cuales la nación concentró las facultades de inspección presenten una tasa de empleo en negro, o un mayor número de controles e infracciones por incumplimiento de la normativa laboral, que los períodos donde la facultad estuvo en manos exclusivamente de las provincias. Lamentablemente solo disponemos de información referida a la actividad de inspección para los años 1996, 1997 y 1998 lo cual no nos permite realizar dicho análisis. Tan sólo a modo de ilustración puede observarse el gráfico 1, que si bien no es en absoluto evidencia robusta a favor de nuestra hipótesis muestra un marcado aumento del empleo informal a partir de los ochenta, período en el cual la nación le devolvió a las provincias las facultades de inspección. Gráfico 1 Porcentaje de asalariados informales Aglomerado Gran Buenos Aires, 1980-1999 40% 35% 30% 25% 20% 15% 1980 1982 1985 1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 Fuente: Gasparini (2000) en base a Encuesta Permanente de Hogares, INDEC. 17 Asumir que la autoridad pública se preocupe por mantener baja la desocupación de ninguna manera implica que el gobierno sea necesariamente benevolente. Un gobierno interesado en maximizar sus probabilidades de reelección tiene incentivos en reducir el desempleo. 11 Dado que para los años que existe información estadística, el gobierno nacional tuvo las facultades de inspección en la provincia de Jujuy y en la Ciudad de Buenos Aires surge la posibilidad de constatar si en dichas jurisdicciones hubo mayor eficacia en el control del empleo informal que en las restantes veintidós. Es un experimento natural interesante si se considera la gran disparidad en las características geográficas, económicas, políticas y sociales que existen entre Jujuy y la Ciudad de Buenos Aires18. Consideramos que hay dos categorías de factores que determinan cuan eficaz (E) es la autoridad publica en el control del empleo informal: Indicadores de Factibilidad Técnica (FT): Ciertamente las características socioeconómicas, demográficas y geográficas de la provincia influyen sobre la eficacia que tenga la autoridad publica en el control del empleo informal. Teniendo en cuenta las importantes diferencias que existen entre las provincias argentinas al respecto, consideramos necesaria incluirlas en nuestro análisis. En este sentido es de esperar una mayor eficacia cuanto mayor sea el porcentaje de concentración de la población, y cuanto mayor sea el nivel de desarrollo económico en la provincia. Indicadores de Incentivos (I): Los esfuerzos que realice el gobierno provincial para combatir la informalidad dependen tanto de la potencial destrucción de empleo que podría generar la actividad inspectiva, como del estado de situación del mercado de trabajo local. Teniendo en cuenta las significativas diferencias que existen en los niveles de impuesto al trabajo y en los beneficios de la seguridad social entre las distintas jurisdicciones, cabe esperar que en aquellas provincias donde los impuestos son menores y los beneficios mayores, la probabilidad de que se destruya empleo producto de la formalización es menor19. Por otra parte, para una probabilidad dada de destrucción de empleo, aquellas provincias donde el nivel de desempleo es mayor tenderán a ser menos estrictas en el control de la informalidad. 18 Dichas diferencias sirven de control natural en un ejercicio econométrico, ya que reducen de manera significativa el problema de omisión de variables explicativas. 19 Fundamentamos dicho argumento por el hecho que las principales deducciones impositivas por zona geográfica se implementan en 1994 y 1996. 12 Por ultimo, siguiendo el argumento central del nuestro análisis es de esperar que en Jujuy y la Ciudad de Buenos Aires, jurisdicciones en donde la nación tiene las facultades de inspección, la eficacia en el control de la informalidad laboral sea mayor. Dentro de los indicadores de incentivos incluimos también una variable sindical. Tal como hemos señalado, existen razones para suponer que en las provincias donde el sindicato tenga mayor participación, los gobiernos enfrentarán mayores presiones para controlar la informalidad laboral. Un párrafo aparte merece el tema de recursos. Es lógico suponer que las jurisdicciones que cuentan con mayores recursos (R) para controlar la informalidad resultarán más efectivas, y en dicho sentido uno estaría tentado a incluir dicho factor como variable explicativa. Pero de acuerdo a nuestro enfoque esto sería incorrecto, ya que los recursos que las jurisdicciones destinan son endógenos a sus incentivos. Para ser más claros, imaginemos el siguiente escenario: Supongamos que en la Ciudad de Buenos Aires se observa mayor eficacia en el control de la informalidad y que dicha jurisdicción destina mayores recursos a tal fin. Uno estaría tentado a concluir que son los recursos los que explican la mayor eficacia, pero entonces cabría preguntarse por qué dicha jurisdicción destina mayores recursos que las restantes. Consideramos que ésta es la pregunta relevante a responder (es obvio que ceteris paribus mayores recursos resultarán en mayor eficacia) y de ahí que asumimos que los recursos son endógenos a los incentivos. Formalmente, Eit = f [FTit,; Rit (Iit)] La información estadística que utilizaremos ha sido recopilada por la Dirección Nacional de Relaciones del Trabajo sobre la base de información suministrada por las administraciones de trabajo provinciales. Los datos son anuales para el período 1996-1998 y tienen un nivel de apertura provincial, lo cual resulta en 72 observaciones. Las restantes variables surgen de la Encuesta Permanente de Hogares, Censo Nacional de Población y Vivienda y la Encuesta de Desarrollo Social20. 13 Utilizamos cuatro indicadores distintos de eficacia (E) en el control de la informalidad para comprobar la robustez de los resultados. El numero de infracciones (INF_N), el número de infracciones que tienen como origen las inspecciones programadas y de oficio21 (INFP_P), el numero de multas impuestas (M_N) y el monto de las mismas (MM_N). En todos los casos se pondera la variable dependiente por el numero de trabajadores informales22. Para constatar la hipótesis central de nuestro estudio, utilizamos dos alternativas. Por un lado, una dummy (D) que adquiere el valor D=1 en Jujuy y la Ciudad de Buenos Aires, y D=0 en el resto de las provincias. La segunda alternativa consiste en utilizar una variable (IF) que cuantifique los incentivos fiscales que tiene la jurisdicción a cargo de realizar la inspección. Utilizaremos como indicador aquella porción del impuesto sobre la nómina salarial que tiene como destino las arcas de la jurisdicción a cargo de la inspección. Por ejemplo, en la Ciudad de Buenos Aires, IF adquiere el valor de 27 ya que la alícuota en concepto de contribuciones patronales equivale a 27% y dicho monto está dirigido al gobierno nacional, jurisdicción a cargo de la inspección23. En Córdoba la variable IF equivale a 0, ya que si bien las contribuciones patronales ascienden a 26%, los montos recaudados por dicho concepto tienen como destino las arcas del gobierno nacional, mientras que la actividad inspectiva está a cargo del gobierno provincial. Para captar los restantes indicadores de incentivos utilizamos la tasa de desempleo (TD), una variable (PROB) que capta la probabilidad de destrucción de empleo24, y el porcentaje de la población con participación en asociaciones sindicales (U), como indicador de poder sindical. 20 En el anexo estadístico se brindan mayores detalles de las fuentes y variables utilizadas. Las infracciones pueden tener como origen inspecciones por denuncias individuales, sindicales o inspecciones programas y de oficio. 22 Lamentablemente la información disponible no permite distinguir por provincia, las infracciones y multas que se deben al incumplimiento de normas de higiene, trabajo infantil, convencionales, etcétera, de aquellas que tienen como origen la no registración y el incumplimiento con la seguridad social. Dado que nuestro análisis tiene lógica para estas últimas, los resultados deben tomarse con precaución. Al respecto, cabe señalar que las denuncias por no registración representan aproximadamente dos terceras parte del total de denuncias en el país. 23 Ver Tabla 8 en el Anexo estadístico. 24 Ver Tabla 7 en el Anexo estadístico. 21 14 Como indicadores de factibilidad técnica utilizamos el porcentaje de población urbana (UR) para medir el grado de concentración demográfica y el porcentaje de viviendas salubres (ND) como indicador de desarrollo económico de la provincia25. En una primera mirada a los datos se observa mayor eficacia en el control de la informalidad en Jujuy y fundamentalmente en la Ciudad de Buenos Aires, respecto a las restantes jurisdicciones. Cuadro 1 Eficacia en el control de la Informalidad (Promedio anual para el período 1996-1998) Jurisdicción Nº Multas cada mil trabajadores informales Ciudad Bs. As. Jujuy Resto País 27,5 6,6 2,3 Nº Infracciones c/mil Nº Infracciones Programadas trabajadores informales c/mil trabajadores informales 35,5 10,4 4,6 21,9 6,2 1,6 Fuente: Elaboración propia. Si bien dicha evidencia sirve de primer indicio a favor de nuestra hipótesis, es necesario controlar por los restantes factores, ya que bien podría ocurrir que la alta eficacia observada en la Ciudad de Bs.As. sea consecuencia de otros factores. Por ende, procederemos a implementear el análisis econométrico. En la tabla 1 se presentan los estadísticos básicos de las variables que utilizaremos. 25 La alta correlación entre el nivel de desarrollo económico y el porcentaje de población urbana (coef.correlación (ND y UR) = 0.77) genera problemas de multicolinealidad, por lo cual sólo incluimos una variable en las regresiones. 15 Tabla 1 Variable Nº observaciones MM_N M_N INF_N INFP_N D IF PROB TD ND UR U Media 48 56 62 61 72 72 72 72 72 72 72 Desvío Std. 5,3 5,9 14,6 6,9 0,1 2,2 3,7 12,2 74,9 81,5 38,3 8,3 8,9 18,3 13,4 0,3 6,0 1,4 3,8 13,4 10,6 16,5 Mínimo Máximo 0 0 1 0 0 0 1 4 50 47 15 33 43 89 80 1 27 6 21 98 100 91 Fuente: Elaboración propia. En la tabla 2 se presentan los coeficientes de los cuatro modelos estimados, que resultan al utilizar D como indicador de incentivos institucionales. Para las cuatro variables dependientes se observa que Jujuy y la Ciudad de Buenos Aires presentan un mayor grado de eficacia en el control del empleo informal, corroborando la hipótesis central del presente estudio. Nuestra variable explicativa D es positiva y significativa en los cuatro modelos alternativos. Tabla 2. Eficacia en la Inspección del Trabajo Variable independiente Variable Dependiente MM_N (1) M_N (2) INF_N (3) INFP_N (4) 9.94*** 12.31*** 11.18* 9.84** (2.40) (3.08) (6.51) (4.54) -2.36*** -2.01*** -4.88*** -3.95*** (0.65) (0.75) (1.55) (1.08) -0.53** -0.68** -1.48*** -0.69* (0.22) (0.28) (0.55) (0.39) 0.28*** 0.32*** 0.52*** 0.37*** (0.07) (0.08) (0.17) (0.12) 0.17*** -0.06 0.24* 0.28*** (0.06) (0.07) (0.14) (0.10) Constante -24.29 15.43 -31.55 -36.34 R-ajustado 0.58 0.39 0.34 0.40 Nº observaciones 48 56 62 61 D PROB TD ND U 16 Las regresiones fueron estimadas por mínimos cuadrados ordinarios. Entre paréntesis se presenta el desvío estándar. *** significativo al nivel 1% ** significativo al nivel 5% * significativo al nivel 10% Del modelo (3) resulta un coeficiente para la variable D de 11.2. Esto indica que en las jurisdicciones donde la nación tiene plenas facultades inspectivas, se realizan 11 infracciones mas cada 1000 trabajadores informales que en las jurisdicciones donde la facultad es de la provincia. Si bien el numero absoluto en relativamente pequeño, al considerar que la media de infracciones por trabajadores en negro en el resto del país es de 4.6 resulta en un incremento de aproximadamente 150%. Un aspecto interesante para analizar es el origen de la infracciones. En principio, las infracciones pueden estar originadas en denuncias individuales, sindicales o en inspecciones programadas y de oficio. Nuestra teoría predice que, dados los mayores incentivos que tiene la nación para controlar la informalidad laboral, deberíamos observar en la Ciudad de Bs.As. y en Jujuy un mayor número de infracciones, pero fundamentalmente de aquellas que se originaron en inspecciones programadas y de oficio. Del modelo 4 surge un coeficiente de 9.8 (para una media de 1.6) resultando en un incremento de más del 500% en las infracciones programadas, comparado con un incremento del 150% para las infracciones totales. En la tabla 3 se presentan los resultados luego de utilizar IF como variable explicativa. Dicha variable resulta positiva y significativa en los cuatros modelos alternativos, brindando evidencia adicional acerca de la importancia que tienen los incentivos fiscales sobre la eficacia en el control de la informalidad. En aquellas jurisdicciones donde la autoridad a cargo de la inspección obtiene mayores beneficios por regularizar trabajadores (vía aumentos en los ingresos tributarios), se observa mayor eficacia en el control del empleo “en negro”. 17 Tabla 3. Eficacia en la Inspección del Trabajo. Variable independiente Variable Dependiente MM_N (5) M_N (6) INF_N (7) INFP_N (8) 0.58*** 0.68*** 0.62** 0.55** (0.10) (0.14) (0.31) (0.21) -2.67*** -2.33*** -5.14*** -4.18*** (0.58) (0.72) (1.55) (1.07) -0.52*** -0.65** -1.45*** -0.66* (0.20) (0.26) (0.55) (0.38) 0.24*** 0.29*** 0.50*** 0.35*** (0.07) (0.08) (0.17) (0.11) 0.18*** -0.06 0.24* 0.29*** (0.05) (0.06) (0.14) (0.10) Constante -4.79 0.82 -4.16 -7.36 R-ajustado 0.66 0.45 0.35 0.42 Nº observaciones 48 56 62 61 IF PROB TD ND U Las regresiones fueron estimadas por mínimos cuadrados ordinarios. Entre paréntesis se presenta el desvío estándar. ***, **, * significativos al nivel 1%, 5% y 10% respectivamente. El ejercicio econométrico también nos permite comprobar si las restantes variables independientes tienen el poder explicativo que nuestra hipótesis predice. Como se desprende de las tablas 2 y 3, en aquellas jurisdicciones donde los costos sociales del control del empleo informal son menores (medidos como baja probabilidad de destrucción de empleo), se realizan mayores esfuerzos para controlar la informalidad. En el mismo sentido, y tal como predice nuestro análisis, las jurisdicciones con mayor tasa de desocupación presentan menor eficacia en el control de la informalidad26. Las provincias donde la población tienen mayor participación en las asociaciones sindicales, presentan mayor eficacia en el control de la informalidad (con la excepción del modelo 2 y 6 donde el coeficiente es negativo y no significativo). Si bien es cierto que U es 26 Vale aclarar que el coeficiente correspondiente a TD podría estar sobreestimado, ya que existen razones para sospechar que en mercados de trabajo con alto desempleo habrá mayor informalidad. Sin embargo, consideramos que la posible sobreestimación sería relativamente pequeña. Note el lector que informalidad laboral aparece como denominador en nuestros indicadores de eficacia, y que dichos ratios son pequeños (por ejemplo 6 multas cada mil trabajadores informales). En consecuencia, bajo parámetros normales en la relación desempleo-informalidad, si se “ corrigiera” el número de trabajadores informales, no cambiaría demasiado los indicadores de eficacia. Similar consideración se aplica al coeficiente correspondiente a la variable PROB e IF, aunque para ésta última el coeficiente no estaría sobreestimado sino subestimado. 18 un indicador imperfecto de “ presión sindical”; consideramos que esta variable está captando razonablemente la presión que ejercen los sindicatos y sus afiliados sobre el gobierno para que éste cumpla con sus responsabilidades fiscalizadoras. Estos resultados son consistentes con nuestros supuestos sobre las motivaciones de los actores sociales. No se trata de gobiernos benevolentes preocupados por el bienestar social sino más bien por su propio poder. Si la autoridad pública fuera benevolente cabría esperar que la descentralización en la actividad inspectiva redundaría en mayor eficacia en el control del empleo informal, ya que en principio los gobiernos locales disponen de mayor información de los problemas que tienen lugar en su jurisdicción. Pero dado que los recursos de la seguridad social los maneja el gobierno nacional, es éste y no las provincias el que tiene mayores incentivos para controlar la informalidad. Finalmente, se observa que las provincias en donde es más factible técnicamente controlar la informalidad, la actividad inspectiva resulta ser más eficaz27. 4.1 ¿Mayor eficacia debido a mayores recursos o a mayor eficiencia? Nuestra hipótesis predice que en las jurisdicciones donde la nación tiene plenas facultades inspectivas, será mayor la eficacia en el control del empleo informal. Pero nada nos dice respecto a que medios utilizará para lograr mayor eficacia. En principio, podría ser mediante el uso de mayores recursos o través de un uso más eficiente de los mismos. Con fines puramente ilustrativos, presentamos evidencia al respecto. Como se observa en la Tabla 4, los recursos que ha dispuesto la nación para realizar el control de la informalidad en la Ciudad de Buenos Aires y en Jujuy no son muy diferentes a los que han destinado las restantes provincias. La educación de los inspectores en éstas dos jurisdicciones es similar a la media nacional28; así como tampoco se observan mayores diferencias en el personal destinado a la actividad inspectiva. 27 En las Tablas 2 y 3 se presentan los resultados utilizando únicamente al nivel de desarrollo económico (ND) como indicador de factibilidad técnica. No se incluyen ND y UR conjuntamente por las razones señaladas en la nota 26. Cabe destacar que al utilizar el porcentaje de población urbana como indicador de factibilidad los resultados no se modifican sustancialmente, aunque algunas variables pierden cierto grado de significatividad. Ver Tabla 9 en el anexo estadístico. 28 De acuerdo a entrevistas con funcionarios del Ministerio de Trabajo, los inspectores nacionales acceden a mejores y mayores cursos de capacitación específicos; pero no disponemos de la información para poder incorporarla al análisis. 19 Tabla 4 Indicadores de Recursos. (Promedio anual para el periodo 1996-1998) Jurisdicción Ciudad Bs. As. Jujuy Media Resto País Nº de Inspectores Personal Total1 54.0 6.3 18.5 82.3 7.7 26.2 Años de PEA2/Personal Trabajadores Escolaridad (miles) Informales/Inspectores (miles) 11.3 9.7 11.9 18.8 23.8 23.2 7.1 10.1 9.8 Fuente: Elaboración propia en base a Ministerio de Trabajo e INDEC. 1. El personal total equivale a la suma de inspectores más personal administrativo. 2. Población Económicamente Activa. Donde se observan importantes diferencias es en la productividad por inspector29. Tanto en la Ciudad de Buenos Aires como en Jujuy, los inspectores han sido mucho mas eficientes en el control de la informalidad que en el resto de las jurisdicciones tal como se desprende de la Tabla 5. Tabla 5 Indicadores de Eficiencia. (Promedio anual para el período 1996-1998) Jurisdicción Ciudad de Bs.As. Jujuy Media Resto País Infracciones Infracciones Programadas Multas por Monto de las Multas por Inspector por Inspector Inspector por Inspector (miles $) 246 103 43 152 62 15 191 66 17 158 34 15 Fuente: Elaboración propia en base a Ministerio de Trabajo e INDEC 5.- Conclusiones y Recomendaciones Con el actual diseño institucional no podemos esperar mejoras significativas en el control del empleo informal. Esto es particularmente grave si se considera que la actividad 29 Una posible explicación radica en el régimen de contratación. Mientras los inspectores provinciales perciben un salario fijo; los inspectores que dependen del gobierno nacional perciben un ingreso que está compuesto por un salario fijo más un componenete variable equivalente al 10% del monto de las multas recaudadas. Ciertamente, los inspectores nacionales tienen mayor incentivo en penalizar el empleo no registrado. Pero la pregunta más interesante, es por qué el gobierno nacional ha decidido implementar un régimen de contratación diferente al de las provincias. Nuestra primera y tentativa respuesta es que dicha elección responde a los incentivos institucionales. Dado que el gobierno nacional tiene mayores incentivos que los gobiernos provinciales en controlar la informalidad laboral, ha introducido un régimen de retribución para sus inspectores donde se premia la “ productividad” . 20 inspectiva es uno de los potenciales instrumentos a disposición del Estado para lograr que una gran mayoría de los trabajadores y hogares de menores ingresos puedan acceder a los beneficios de la seguridad social. Consideramos necesario dotar a la autoridad central de facultades plenas en el control del empleo informal. Esto implica una delegación de facultades desde las provincias hacia el gobierno central o algún órgano federal30. Si bien consideramos que el traspaso de facultades producirá una mejora significativa en el control de la informalidad, tentativamente consideramos que se requieren cambios adicionales para que la autoridad pública cumpla eficazmente dicho rol. Regímenes de contratación para los inspectores que resuelvan al menos parcialmente los problemas de principal-agente; mayor coordinación entre las distintas dependencias públicas encargadas de la fiscalización en general (por ejemplo con la AFIP y el ANSEES); o la participación de algún organismo internacional en el control, que sirva de factor exógeno de presión. Pero éstas son sólo sugerencias y temas que requieren mayor investigación. Unas palabras de precaución antes de concluir. Si bien consideramos que deben implementarse los cambios necesarios para aumentar la eficacia en el control del empleo informal, la secuencia temporal en la implementación de políticas es un elemento clave a considerar. En dicho sentido, podría resultar conveniente implementar, en una primera instancia, reformas tendientes a modernizar la normativa laboral, simplificar la registración y reducir los impuestos al trabajo, junto a una amplia campaña que informe a los trabajadores y empleadores de sus derechos y obligaciones. Sólo después de implementados dichos cambios, será el momento oportuno para mejorar la eficacia en el control del empleo informal. Sería equivocado hacer cumplir leyes obsoletas, máxime en un contexto con alto desempleo. 30 Si es la nación o un órgano federal el organismo más adecuado, es un tema que excede los límites del presente estudio y requiere mayor investigación. 21 Bibliografía Becker G. y Stigler G. (1974), “ Law Enforcement, Malfeasance, and Compensation of Enforcers”. Journal of Legal Studies, 3 (1), pág. 1-18. Bour J. y Susmel N. (2000), “Los Determinantes de la Informalidad Laboral”; en La Economía Oculta en la Argentina; FIEL. Gasparini (2000), “ La Informalidad Laboral en la Argentina: Evolución y Caracterización” en La Economía Oculta en la Argentina; FIEL. Gray W. y Jones C. (1991), “ Are OSHA Health Inspections Effective?”. The Review of Economics and Statistics. Jelin, Mercado y Wyczykier (1999), El Trabajo a Domicilio en Argentina. OIT Ministerio de Trabajo (1998), Inspección del Trabajo en Argentina. Informe Anual 1998. Neffa J., Battistini O., Panigo D. y Pérez P. (1999), Exclusión Social en el Mercado de Trabajo. El Caso de Argentina. OIT OIT (1989), Informe de la Misión Tripartita para Evaluar la Eficacia de la Inspección del Trabajo en Argentina. OIT. Polinsky y Shavell (1999), The Economic Theory of Public Enforcement of Law, Working Paper 6993, NBER. Ruiz-Tagle (2000), Exclusión Social en el Mercado de Trabajo. En Mercosur y Chile. OIT. Soto H. de (1987), The Other Path: The Invisible Revolution in the Third World. 22 Anexo Estadístico I Tabla 6 Empleo Informal según quintiles de ingreso per capita. Porcentaje de la población que percibe beneficios de la seguridad social. (Total País. Año 1997) Percepción de beneficios Total Quintil de ingreso per capita del hogar 1 2 3 4 5 Todos 54.3 25.9 46.5 56.1 65.1 73.9 Algunos 12.1 14.3 12.9 13.3 11.4 8.9 Ningún 27.9 53.2 35.8 24.3 18.5 11.4 Ignorado 5.7 6.6 4.9 6.3 5.0 5.7 Fuente: Encuesta de Desarrollo Social. Anexo estadístico II A) Fuentes La información referida a la actividad de inspección del trabajo y la seguridad social surge del Ministerio de Trabajo (1996), (1997) y (1998); en base a información suministrada por las administraciones provinciales de trabajo y el propio ministerio. El porcentaje de población urbana (UR) y el porcentaje de viviendas con servicios sanitarios salubres (ND) surgen del Censo Nacional de Población y Vivienda 1991, INDEC. El número de trabajadores informales (N) y la tasa de desempleo (TD) se computan en base a la Encuesta Permanente de Hogares, para los años 1996, 1997 y 1998. INDEC. Participación sindical (U) se computó en base a la Encuesta de Desarrollo Social, 1997. B) Definición de variables MMi,t Monto total de las multas impuestas por provincia y por año. (En pesos) 23 Mi,t Número de multas impuestas por provincia y por año INFi,t Número de infracciones por provincia y por año INFPi,t Número de infracciones con origen en inspecciones programadas y de oficio por provincia y por año Ni,t Número de trabajadores informales por provincia y por año MM_Ni,t = MMi,t / Ni,t M_Ni,t = (Mi,t / Ni,t ) x 1000 INF_Ni,t = (INFi,t / Ni,t ) x 1000 INFP_Ni,t = (INFPi,t / Ni,t ) x 1000 NDi Medido como porcentaje de viviendas con condiciones sanitarias salubres. URi Medido como porcentaje de la población total radicada en zonas urbanas. TDi,t Tasa de desempleo por aglomerado urbano por año. Di Es una variables dummy que adopta el valor de 1 para Jujuy y la Ciudad de Buenos Aires y 0 para el resto de las provincias. Ui Medido como el número de personas que participa en asociaciones sindicales cada mil habitantes. PROBi Es una variable que adquiere valores de 1 a 6 de acuerdo a la siguiente escala: PROBi = 6 en aquellas jurisdicciones donde los aportes patronales superaban el 25% de la nómina salarial en enero de 1996 y que no tienen ningún beneficio particular en el régimen de asignaciones familiares. PROBi = 5 impuestos entre 20-25% y sin beneficios. PROBi = 4 impuestos entre 15-20% y sin beneficios o impuestos entre 20-25% y beneficios moderados. PROBi = 3 impuestos menores a 15% y sin beneficios o impuestos entre 15-20% y beneficios moderados. PROBi = 2 impuestos menores a 15% y beneficios moderados. PROBi = 1 impuestos menores a 15% y beneficios elevados. 24 Tabla 7 Cómputo de la variable PROBi Provincia Aportes Patronales Buenos Aires Catamarca Chaco Chubut Ciudad de Bs. As. Córdoba Corrientes Entre Ríos Formosa Jujuy La Pampa La Rioja Mendoza Misiones Neuquén Río Negro Salta San Juan San Luis Santa Cruz Santa Fe Santiago del Estero Tierra del Fuego Tucumán 0,26 0,18 0,14 0,15 0,27 0,23 0,16 0,21 0,14 0,15 0,22 0,18 0,21 0,15 0,20 0,20 0,15 0,19 0,20 0,14 0,22 0,14 0,15 0,18 Asignaciones Familiares Sin beneficios Beneficios moderados Sin beneficios Beneficios elevados Sin beneficios Sin beneficios Sin beneficios Sin beneficios Beneficios moderados Beneficios moderados Beneficios moderados Sin beneficios Sin beneficios Sin beneficios Beneficios moderados Beneficios moderados Beneficios moderados Sin beneficios Sin beneficios Beneficios elevados Sin beneficios Sin beneficios Beneficios elevados Sin beneficios PROBi 6 3 3 1 6 5 4 5 2 3 4 4 5 4 4 4 3 4 5 1 5 3 1 4 Fuente: Elaboración propia en base a Ministerio de Trabajo (1999) y legislación pertinente. Nota: El decreto 492/95 establece reducciones en los impuestos al trabajo según zona geográfica. El decreto 1245/96 establece beneficios especiales en el régimen de asignaciones familiares en determinadas zonas geográficas. Tabla 8 Cómputo de la variable IFi Provincia IFi Buenos Aires Catamarca Chaco* Chubut Ciudad de Bs. As. Córdoba Corrientes Entre Ríos Formosa Jujuy La Pampa La Rioja Mendoza Misiones Neuquén Río Negro Salta* San Juan San Luis Santa Cruz Santa Fe* Santiago del Estero* Tierra del Fuego Tucumán* 0 0 1 0 27 0 0 0 0 15 0 0 0 0 0 0 2 0 0 0 3 2 0 2.5 * Provincias con impuestos provinciales específicos que se aplican sobre la nómina salarial 25 Tabla 9 Eficacia en la inspección del trabajo Variab. Indep. D IF PROB Variable Dependiente MM_N M_N INF_N INFP_N MM_N M_N INF_N INFP_N 7.14*** 9.34*** 7.14 7.66 - - - - (2.56) (3.30) (6.92) (4.92) - - - - 0.48*** 0.56*** 0.48 0.48** (0.11) (0.15) (0.33) (0.23) -1.39** -0.91 -3.19** -2.74*** -1.76* -1.28* -3.48** -3.03*** (0.58) (0.70) (1.45) (1.03) (0.55) (0.67) (1.46) (1.03) -0.71*** -0.86*** -1.68*** -0.79* -0.68*** -0.81*** -1.65*** -0.75* (0.23) (0.29) (0.58) (0.41) (0.21) (0.28) (0.56) (0.41) 0.34*** 0.38*** 0.54*** 0.32** 0.29*** 0.34*** 0.51** 0.30** (0.09) (0.10) (0.20) (0.14) (0.09) (0.10) (0.20) (0.14) 0.19*** -0.06 0.23 0.29*** 0.19*** -0.05 0.24* 0.30*** (0.06) (0.07) (0.15) (0.10) (0.05) (0.07) (0.15) (0.10) -26.42 16.49 -28.41 -30.30 -11.58 8.20 -3.75 -9.02 R-ajust. 0.58 0.37 0.31 0.36 0.65 0.43 0.33 0.38 Nº obs. 48 56 62 61 48 56 62 61 TD UR U Const. Todas las regresiones fueron estimadas por mínimos cuadrados ordinarios. Entre paréntesis se presenta el desvío estándar *** significativo al nivel 1% ** significativo al nivel 5% * significativo al nivel 10% 26