CONSTITUCIÓN DE QUERELLANTE - Art. 404 del C.P.P.S.F Art. 44 del CPP – ART. 67 V. CPP - (…) A la conclusión precedente arribo tras considerar que el trámite y formato resolutivo adoptado por el A-quo se acopla perfectamente al nuevo esquema realizativo que ya se encuentra parcialmente vigente (vía ley 12.912) y hasta tanto adquiera plena operatividad el nuevo Código Procesal Penal, según ley 12.734. (...) (…) Por otra parte y en relación a la afectación, alegada por el recurrente, del derecho de defensa en general y al de contradicción en instancias de revisión en particular, tampoco se advierte que el apelante no haya podido efectuar observaciones y/o cuestionamientos a la decisión dictada por el A-quo o que tuviera dificultades para hacerlo, ya que del propio contenido del escrito de agravios presentado ante ésta Cámara se aprecia que el impugnante contó con una base impugnativa suficiente como para volcar sus quejas. (...) --------------Nº 217 T. 26 F. 734/737 Y VISTOS: Los Venado Tuerto, 6/11/ 2013. presentes autos Nº 116/2013 caratulados “DENUNCIA DE B.,F.E., A., S.D.M. Y A., M.A.” CONSIDERANDO: I) Contra lo resuelto en la audiencia oral y pública desarrollada el 27/05/2013, protocolizada con el N° 161, T. XVI, F. 55, por la que el Dr. Leandro Martin, Juez en lo Penal de Instrucción de Melincué resolvió: “hacer lugar a la solicitud del Sr. Fiscal de constitución de querellante admitiendo como querellantes a los llamados F.E.B. y M.A.A. y ordenando al Fiscal que les acuerde la intervención que por derecho les corresponde. Tener por presente las reservas establecidas e introducidas por la Defensa de los señores O.A.A. y F.D.A.”, el Dr. P.J.Z., por la defensa de D. A. y O.A., interpone recurso de apelación (fs. 643), el que es concedido -en relación y sin efecto suspensivo- por decreto del 30/05/2013. 1.- El Dr. Pedro Zanini, en representación de D.A. y O.A., expresa agravios a fs. 657 de autos. El curial detalla que por las características de la decisión tomada en autos, se está frente a un acto procesal 1 inequívocamente nulo y que debe aplicarse la regla del art. 404 del C.P.P.S.F en cuanto manda el “reenvío para la renovación de la actividad que se trate, indicándose en su caso el objeto concreto del nuevo...resolución”. El Dr. Zanini se agravia, en primer lugar, por la ausencia de fundamentación, hecho que provoca un severo perjuicio procesal y afecta el derecho de defensa y el debido proceso. Considera esencial que este tipo de resoluciones resulten “suficientemente” fundadas, más allá que la decisión se anticipe en el mismo acto de la audiencia oral. Resume que la intención del A-quo de celeridad violenta la exigencia de la debida fundamentación que exige el art. 127 del C.P.P.S.F. Destaca que la inobservancia al mencionado artículo genera un grave menoscabo al derecho de defensa material y al debido proceso que la ley y la constitución resguardan con extremo cuidado. A continuación, el Dr. Zanini se refiere a la regla de congruencia. Tras citar doctrina sobre el principio de congruencia, señala que el A quo resuelve una cuestión de importancia sustancial verbalmente y la única y casi nula fundamentación la concreta en el curso de la audiencia, hecho que se vuelca en una pequeña reseña en el acta. Reitera que ese proceder, más allá de reconocer el bienintencionado propósito, produce una afectación y un perjuicio sustancial que torna nula la decisión atacada. En ese mismo marco, recuerda que la regla del debido proceso impone al Juez la necesidad de fundar adecuadamente estas decisiones a efectos de evitar incurrir en hipótesis de arbitrariedad. Interpreta que esas directivas elementales para un respeto de la defensa en juicio fueron desatendidas en la decisión recurrida. La Defensa agrega que se perjudica el derecho de defensa porque se convierte en letra muerta la disposición constitucional de sentencia con motivación suficiente e impide reconocer inclusive el carácter específico del acto atacado. Asimismo, señala que desnaturaliza el derecho de contradicción y defensa por cuanto a la falta de fundamentación adecuada le sigue naturalmente la dificultad 2 de evaluación de la materia sometida a impugnación. Es imposible, en este contexto, señalar con qué aspectos específicos se concuerde y con cuales no. A su criterio, esa situación puede conducir a un sinfín de planteos nulificatorios que terminarán contradiciendo abiertamente el principio de economía procesal y celeridad que se pretende defender. Agrega que la exigencia de una decisión con fundamentación suficiente va mucho más allá de la convicción íntima del Juzgador. Explica que fundar una decisión de importancia, en sentido estricto, no es simplemente definir qué parte tiene razón, sino explicar la totalidad de los motivos que conducen a esa decisión, contabilizando y dictaminando sobre cada una de las defensas articuladas. El Dr. Zanini remarca que la decisión recurrida observa esas falencias y estima que termina vulnerando sentidos principios constitucionales, en desmedro concreto del derecho de defensa. Destaca que la garantía constitucional del debido proceso y la defensa en juicio presupone un procedimiento que brinde seguridades a la persona humana sobre la base de un marco normativo instituido. Cita doctrina. Agrega que más allá de la injusticia que el decisorio encierra, la nulidad que propugna tiene como finalidad reclamar una nueva directiva que ordene la adecuada fundamentación de ese tipo de decisiones. A su entender, en autos, el A quo concretó una valoración parcial, incompleta, lo cual conllevó en su génesis a afectar o poner en crisis principios y garantías esenciales, cuyo apoyo final está en la Constitución Nacional. Cita jurisprudencia. El Dr. Zanini señala, asimismo, que en autos se da ausencia de mandato suficiente. Explica que el poder utilizado por el denunciante en representación de la Sra. S.d.M. A., radicada en Bolivia, es insuficiente y no le permite advertir la representación necesaria para llevar adelante esta denuncia y el carácter de querellante que se pretende. En el mismo orden, explica que es contradictoria la pretensión ejercida por M.A.A. al cuestionar aspectos de la administración de las que él mismo resulta responsable. 3 Por lo expuesto, sostiene la necesidad de rechazar la constitución de querellante a los denunciantes. El Dr. Zanini efectúa expresamente la correspondiente reserva constitucional (Ley N° 7055 y Ley N° 48). Por lo expresado, el Dr. Zanini solicita la nulidad del decisorio recurrido y que se ordene que los presentes vuelvan a la instancia inferior a efectos de que se dicte una nueva resolución con fundamentación suficiente y que se tenga presente la reserva de Cuestión Constitucional. 2.- El Dr. Richard Nisi, en representación de la parte querellante, contesta agravios en fecha 18/09/2013. En primer lugar, el Dr. Nisi sostiene que -conforme surge de las constancias de autos- la expresión de agravios fue concretada una vez vencido el plazo legal. Explica que la parte querellada fue notificada en fecha 26/06/2013 (cédula a fs. 654) y expresa agravios en fecha 27/08/2013 bajo escrito cargo N° 876, una vez vencido -con creces, remarca- el plazo legal contemplado para dicho acto procesal (art. 440 CPP). Agrega que habiéndose concedido el recurso “en relación” (decreto de fs. 644), rige el art. 44 del CPP que norma el plazo de cinco días y que ante la situación procesal descripta, se debe aplicar el art. 428 que señala que cuando el apelante no expresa agravios o lo hace fuera del término legal, el recurso será declarado desierto. No obstante ello, remarca que más allá del esfuerzo intelectual del curial a cargo de la defensa, el único argumento que esgrime es la falta de fundamentación del resolutorio impugnado. Al respecto, señala que no es cierto que el A-quo no haya expresado fundamentación alguna. Dice que sólo basta leer el acta de donde surge la misma y la transcribe. Agrega que a todo evento, podrá recurrirse a la copia fílmica de la audiencia. Recuerda que en la audiencia (fs. 637/8) la parte querellada no atacó la legitimidad de sus representados para ser querellantes y tampoco lo hace ahora en la Alzada. Destaca que resulta jurídicamente inconsistente y técnicamente deficiente la expresión de agravios. Cita doctrina. Reitera que la parte querellada expresa agravios en forma 4 extemporánea, que el Tribunal por decreto glosado a fs. 655 intimó al defensor a devolver el expediente y que por ello no cabe otra consecuencia que la deserción del recurso. Asimismo, solicita que las costas derivadas del desgaste jurisdiccional provocado inútilmente por la parte querellada, le sean expresamente impuestas al momento de declararse desierto el recurso. Por lo argumentado, solicita que se declare desierto el recurso y que se condene en costas al querellado. II) Corresponde en las presentes actuaciones resolver el recurso de apelación interpuesto por el Dr. Pedro Zannini -en representación de O.A. y F. D. A.- contra lo decidido por el Dr. Leandro Martín -Juez en lo Penal de Instrucción, Correccional y Faltas de Melincué- en los autos caratulados “Denuncia de F.E.B. y otros”, en el marco de una audiencia oral celebrada el 27 de Mayo de 2013 y en la que se admitió como parte querellante a F.E.B. y M.A.A. Primeramente corresponde destacar, tal como lo señaló el Dr. Richard Nisi -representante de la parte querellante- que los agravios expresados por el Dr. Zanini deben ser liminarmente rechazados en virtud de haber sido expresados extemporáneamente. En tal sentido surge de autos que el citado profesional fue debidamente notificado del traslado corrido para expresar agravios, mediante cédula diligenciada el día 26 de Junio de 2013 y glosada a fojas 654, habiendo sido finalmente presentado el mismo el día 27 de Agosto de 2013, es decir en un lapso temporal muy superior al decenal establecido legalmente (art. 428, primera parte, CPP) y luego de que fuera intimido a devolver las actuaciones en el término de 48 horas, conforme a proveído incorporado a fojas 655. En virtud de ello y atento a su ostensible extemporaneidad el recurso de apelación oportunamente interpuesto limimarmente no puede prosperar. Sin embargo, aún prescindiendo del planteo de deserción recursiva opuesta por el Dr. Nisi, de todos modos considero que la vía impugnativa no puede ser receptada favorablemente, por las consideraciones que seguidamente se expondrán. En tal sentido cabe señalar que el apelante cuestiona el decisorio dictado en primera instancia afirmando que el mismo adolece de diversos vicios los que serán enunciados a continuación: 1. Solicita la nulidad del decisorio dictado por el 5 Juez de Grado, para lo cual argumenta que el Magistrado no motivó -o lo hizo insuficientemente- lo decidido luego de escuchar a las partes en la audiencia, lo cual afecta al debido proceso y genera estado de indefensión ya que impide ejercer adecuadamente el derecho de contradicción en instancias de revisión y autoriza a expresar agravios prácticamente de un modo libre. 2. El recurrente sostiene que el denunciante perdió facultades debido al fallecimiento de su madre -M.A.- quien falleciera a la fecha de la presentación del escrito de agravios y agrega, en relación a S.d. M.A., que el poder otorgado por la misma resulta insuficiente ya que el mismo no comprende la presente instancia de constitución de querellante. 3. Sostiene que no puede admitirse como querellante al Sr. M.A.A., atento a que el mismo cuestiona aspectos administrativos en los que también resulta responsable. Luego de analizar detenidamente los agravios precedentemente reseñados, a la luz de las constancias de autos y teniendo en cuenta la normativa provincial, nacional y supranacional vinculada al tema que nos ocupa, adelanto que habré de propiciar la íntegra confirmación del decisorio recurrido, por las siguientes razones: Respecto al primer agravio -el apelante solicita la nulidad del decisorio dictado por el Juez de Grado, para lo cual argumenta que el Magistrado no motivó (o lo hizo insuficientemente) lo decidido luego de escuchar a las partes en la audiencia, lo cual afecta al debido proceso y genera estado de indefensión ya que impide ejercer adecuadamente el derecho de contradicción en instancias de revisión y autoriza a expresar agravios prácticamente de un modo libre- entiendo que el mismo no puede ser receptado favorablemente. A la conclusión precedente arribo tras considerar que el trámite y formato resolutivo adoptado por el A-quo se acopla perfectamente al nuevo esquema realizativo que ya se encuentra parcialmente vigente (vía ley 12.912) y hasta tanto adquiera plena operatividad el nuevo Código Procesal Penal, según ley 12.734. En el concreto caso de autos se aprecia que la solicitud de 6 constitución de parte querellante fue sustanciada adecuadamente -ya que se cumplimentó con el trámite dispuesto en el art. 67 V del actual ordenamiento procesal de transición- y en el decisorio recurrido el magistrado explicitó, suscinta pero suficientemente, las fácticas y jurídicas por las cuales consideraba que la razones instancia constitutiva debía ser acogida. Analizando detenidamente el desarrollo argumental contenido en el decisorio -y verificando lo sucedido en la audiencia a través de su soporte fílmico- no advierto que se haya omitido el examen de cuestiones dirimentes introducidas por las partes en el marco de la audiencia oral. Además de lo antes indicado se desprende de lo actuado que el Magistrado se pronunció después de verificar el cumplimiento de los requisitos de legitimación sustantiva (previsto en el art. 67 II del CPP), los formales de la instancia (art. 67 III CPP), los de oportunidad (art. 67 IV CPP) y luego de tener en cuenta lo expresado por el representante -ahora apelante- de los querellados y considerar que si bien el mismo planteó un eventual conflicto de intereses entre sus asistidos y los pretensos querellantes en ningún momento negó la calidad de ofendidos de los mismos, para finalmente hacer mención a otras disposiciones contenidas en el ordenamiento procesal provincial – trae a colación uno de los principios rectores (art. 7) contenidos en la primera parte del digesto formal- y en instrumentos internacionales. En función de lo expuesto considero que la referida sustanciación y posterior desarrollo argumental examinados no merecen objeción alguna, habiendo efectuado el Magistrado un tratamiento jurisdiccional escueto pero adecuado. Por otra parte y en relación a la afectación, alegada por el recurrente, del derecho de defensa en general y al de contradicción en instancias de revisión en particular, tampoco se advierte que el apelante no haya podido efectuar observaciones y/o cuestionamientos a la decisión dictada por el A-quo o que tuviera dificultades para hacerlo, ya que del propio contenido del escrito de agravios presentado ante ésta Cámara se aprecia que el impugnante contó con una base impugnativa suficiente como para volcar sus quejas. En función de lo expuesto no se advierte que el requisito de fundamentación, exigidos en los arts. 127 CPP y 95 de la Constitución 7 de Santa Fe, se haya incumplido, resultando irreprochable la actuación que le cupo al Dr. Leandro Martín, en tanto y en cuanto el formato de resolución escogido por el mismo se adecua perfectamente y resulta compatible con el nuevo paradigma procesal penal que se adoptó para nuestra provincia -que pasó de un sistema inquisitivo, escriturista y secreto a uno acusatorio, oral y público- y en el que los pronunciamientos deben adoptarse, en la medida de lo posible (no se me escapa que pueden existir planteos que requieran de un mayor análisis y reflexión, para lo cual el magistrado puede diferir por un tiempo breve su decisión y la correspondiente fundamentación) en el marco de la misma audiencia -“decidirá de inmediato”, reza el segundo párrafo del art. 67 V CPP- tras haber escuchado a todas las partes. Similar tesitura ya fue adoptada por este Tribunal de Segunda Instancia en S/ADMINISTRACIÓN el precedente FRAUDULENTA “ALMENAR, (Denuncia RICARDO formulada ante Fiscalía por apoderados de la empresa “LOS PRADOS S.A.” Dres. Jorge García de la Cruz – Luciano Vincentis Rocci”, Expte. N° 101/2012, Resolución N° 137, T. 24, F. 623 del 26/09/2012, (en el que se indicó que “respecto al formato decisional y al grado convictivo que debe poseer el Juez, al momento de resolver pretensiones como la de autos, la doctrina ha dicho que “la audiencia de constitución de querellante es la típica audiencia previa al juicio que no se rige con los mismos cánones de la audiencia de juicio oral. Deben ser audiencias rápidas y sencillas, básicamente argumentativas en las que el tribunal decide con bajos niveles de convicción, donde todo lo que no se contradice se lo tiene por aceptado y si hay controversia se puede requerir la evidencia de respaldo que tengan las partes (lectura de la parte pertinente de un testimonio, informe de antecedentes, partida de nacimiento, etc.) y muy excepcionalmente admitir la producción de pruebas (recibir declaraciones, etc.). Respecto al referido grado de convicción es de hacer nota que para la constitución de querellante es suficiente con la “apariencia”. Ya señalaba Oderigo que “el carácter de ofendido por el delito sólo se requiere a título de hipótesis, puesto que si se exigiera su previa comprobación significaría imponer, para iniciar y proseguir el proceso, la demostración de la realidad del delito, que es precisamente lo que se debe investigar”. Además, la jurisprudencia de la CSJN (fallos 297:991) sostuvo que se viola el derecho de defensa y llega a ser 8 arbitrario supeditar la actuación del acusador a tamaña exigencia.” (Franceschetti, G. y Gamba, S., El querellante, La reivindicación de la víctima en el proceso penal, Nova Tesis, 2010, pag. 193). Por todo ello considero que tales agravios no pueden ser acogidos favorablemente, correspondiendo en consecuencia su rechazo. En el segundo agravio el recurrente sostiene que el denunciante perdió facultades debido a que M.A. falleció a la fecha de la presentación del escrito de agravios y agrega, en relación a S.d.M.A., que el poder otorgado por la misma resulta insuficiente ya que el mismo no comprende la presente instancia de constitución de querellante. Analizando la entidad que corresponde asignarle al agravio precedentemente resumido considero que el mismo debe correr igual suerte que el anterior, es decir que corresponde su rechazo. Basó tal estimación en las siguientes razones: • En primer lugar cabe destacar que el apelante no acreditó el extremo invocado ni ofreció prueba o requirió medidas tendientes a demostrarlo. • Además de lo antes señalado, aún prescindiendo de la ausente acreditación, tampoco surte efecto el eventual deceso invocado atento a que existe otra poderdante, tal como resulta S.d.M.A. • Finalmente y en relación a ésta última corresponde señalar que del poder glosado en copia a fojas 21 no se aprecia que tal instrumento resulte insuficiente a los fines para los cuales fue presentado, resultando claro y amplio respecto a las facultades que a través del mismo se otorgan. Por todo ello considero que el agravio debe ser rechazado. Por último y en lo que atañe al tercer agravio -el recurrente sostiene que no puede admitirse como querellante al Sr. M.A.A., atento a que el mismo cuestiona aspectos administrativos en los que también resulta responsable- cabe desestimarlo toda vez que, más allá de las invocaciones efectuadas por el apelante, no surge de autos que el Sr. M.A. haya sido convocado a declarar en condición de imputado -ni siquiera a título de declaración informativa- por lo que 9 recién en caso de ocurrir ello el Sr. Defensor podrá reintroducir la cuestión. Por todo lo argumentado, doctrina y jurisprudencia citadas propongo se rechacen los agravios y consecuentemente se confirme íntegramente el decisorio apelado, imponiéndose las costas al apelante. Finalmente, deberán tenerse presentes las reservas de derechos formuladas. En definitiva, leídas que han sido las partes, la Cámara de Apelación en lo Penal RESUELVE: I) Confirmar íntegramente el decisorio apelado, con costas al apelante. II) Tener presentes las reservas de derechos formuladas. Insértese copia autorizada, hágase saber y bajen. Dres. Tomás Gabriel Orso - Fernando Vidal - Carlos Alberto Chasco -Art. 26 LOPJ- Sergio Raúl Fenice 1