Santiago, veintisiete de abril de dos mil dieciséis. Vistos: 1° Mediante presentación de fojas 1, don Luis Alberto Plaza Sánchez, Alcalde de la Ilustre Municipalidad de Cerro Navia, domiciliado en calle Del Consistorial N° 6645 de la comuna de Cerro Navia, interpone solicitud de desafuero de la diputada señora Cristina Girardi Lavín, con el fin de que se declare que hay mérito para la formación de causa, informando lo que resulte pertinente al Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago. Los delitos por los que solicita el desafuero son injurias y calumnias cometidos por la parlamentaria a la salida del edificio de la Contraloría General de la República, ubicada en calle Teatinos N° 56 el 26 de agosto de 2014, organismo al cual fue a denunciarlo y en el que la parlamentaria convocó a un “punto de prensa” y en ese lugar procedió a injuriarlo y calumniarlo. Dedujo querella por ambos ilícitos en el Séptimo Juzgado de Garantía, en el proceso RUC 1410036737-9, RIT 20686-2014. Expone que desde que asumió como Alcalde ha sido objeto de hostilidad y persecución de la diputada señora Girardi. Agrega que acepta la crítica política pero cuando ella es injusta y proviene de otras autoridades públicas, sus palabras “son tenidas por ciertas con mayor facilidad por los ciudadanos”. La persecución de la parlamentaria se materializa en 37 oficios remitidos, tanto al municipio como a la Contraloría General de la República por asuntos como apropiación de cotizaciones previsionales. Son requerimientos de información pero en realidad son denuncias disfrazadas. A continuación, reseña distintas actividades y actuaciones que ha llevado a cabo, referidos a la transparencia en la gestión municipal. La señora Girardi al momento de dejar el cargo de alcaldesa de la Municipalidad de Cerro Navia -año 2008- dejó un pasivo nominal superior a cuatro mil millones de pesos, una sobredotación docente, exceso de colegios en relación a los alumnos matriculados. Para enfrentar tales problemas, el peticionario dispuso la realización de distintas medidas para disminuir el déficit estructural que afecta al área educacional, pero la Diputada se opuso a dichas medidas señalando, en síntesis, que lo que ocurría era una mala distribución de los recursos. En suma, se ha opuesto sistemáticamente a las medidas de racionalización que ha diseñado. El hecho ilícito materia del desafuero se produjo el 26 de agosto de 2014, en la vía pública como se indicó, lugar en el que cometió el delito de injurias graves al sostener que “un alcalde no puede tener el nivel de impunidad y no comprar fármacos, no atender a la comunidad cuando recibe los recursos para ello”. Al señalar “al robarle la plata los trabajadores” el delito configurado es calumnia. Acompaña disco compacto que contiene las declaraciones, oficios a distintos organismos públicos y además impresión de la página web de la diputada señora Girardi. Pide, otorgar traslado, abrir un término probatorio o en su defecto, que la Diputada acompañe los fundamentos de su defensa; 2° El Excelentísimo Tribunal Constitucional, por resolución de 17 de marzo de 2015, suspendió el procedimiento en esta gestión. Mediante sentencia de 24 de diciembre pasado, dicho tribunal rechazó el requerimiento de inaplicabilidad por inconstitucionalidad del artículo 416 inciso 3° del Código Procesal Penal, promovido por la Diputada señora Girardi, dejando sin efecto la suspensión decretada en autos. Se acompañó copia autorizada de dicho fallo; 3° Que, seguidamente, según consta a fojas 85, la defensa de la señora parlamentaria procede a evacuar el traslado, pidiendo el rechazo del desafuero. Sostiene que los delitos no se configuran pues no se ha dañado la honra del querellante. La Diputada ha denunciado hechos y se formulan en un contexto de ejercicio del derecho a la libertad de expresión consagrado en la Constitución Política de la República y en Tratados Internacionales. Pretende amedrentar a la parlamentaria. No existió ánimo de injurias, pues se denunciaron hechos irregulares. Por eso fueron solicitados una serie de oficios. Falta el elemento subjetivo del injusto. No resulta posible alterar el mandato ciudadano, afectando el principio de separación de los poderes del Estado. Por ello, el estándar debe ser elevado para acceder al desafuero. A fojas 100, la defensa de la parlamentaria solicita el abandono de la acción por inactividad del solicitante, al no haber solicitado o realizado gestión útil para dar curso progresivo la causa. Se fija de inmediato la audiencia del 31 de marzo pasado para la vista de la causa, ordenándose que tal petición se resolverá oportunamente. En la audiencia respectiva, el abogado del Alcalde señor Plaza se hace cargo de la solicitud de la contraria; Se trajeron los autos en relación, escuchándose los alegatos de los señores abogados, tanto del solicitante de desafuero y de la defensa de la Diputada; Considerando: En cuanto a la decisión de abandono: Primero: Que la defensa de doña Cristina Girardi, pide que se decrete el abandono de la acción de conformidad al artículo 402 del Código Procesal Penal, porque la parte querellante, según refiere, no ha efectuado gestión útil para dar curso progresivo a la causa, habiendo transcurrido más de 30 días. Sostiene que la inactividad del peticionario por más de 30 días, se produce al constatarse que la última gestión se realizó el 26 de enero de 2016, fecha en que se suspendió la vista de la causa, sin que se haya efectuado gestión para que se colocara en tabla, siendo la única actuación la de 23 de marzo último, en la que se solicita precisamente el abandono por la inactividad. Pide que se declare el sobreseimiento definitivo; Segundo: Que, siendo efectiva la secuencia cronológica apuntada por el incidentista, debe agregarse que el 24 de marzo pasado, el Presidente de esta Corte fijó oficiosamente la audiencia del jueves 31 de dicho mes para la vista de la causa, actuación en consonancia con lo dispuesto en el artículo 69 del Código Orgánico de Tribunales, ya que el estado procesal de la causa era, precisamente, la de fijar dicha audiencia. En este sentido el artículo 402 del Código Procesal Penal sanciona al querellante inactivo con el abandono de la acción, entendiendo por tal –inactividad- “la falta de realización de diligencias útiles para dar curso al proceso que fuesen del cargo del querellante”. En el caso, como se anotó, la presente causa se encontraba en estado de disponer fijación de audiencia para revisar la solicitud, escuchando relación y alegatos de los comparecientes, fijación que no era “de cargo de la querellante”, sino que su iniciativa estaba radicada en el tribunal, de manera que la carga de dar curso al procedimiento recae en el órgano jurisdiccional, por lo que se desestimará la petición de abandono y consecuentemente de sobreseimiento definitivo; En cuanto al fondo: Tercero: Que de conformidad al inciso 3° del artículo 416 del Código Procesal Penal, tratándose de delitos de acción privada, cuyo es el caso, pues se trata de los delitos de calumnia e injuria, el querellante deberá ocurrir ante la Corte de Apelaciones solicitando que, si hallare mérito, declare que ha lugar a la formación de causa, lo que debe efectuarse antes de que se admitiere a tramitación su querella por el juez de garantía respectivo; Cuarto: Que para establecer la existencia de mérito suficiente para dar curso a la solicitud, deben valorarse los hechos que se señalan en la querella y los demás antecedentes que se aportan, no solo por el querellante sino que también por la parlamentaria contra quien se pide la declaración jurisdiccional, lo que ha ocurrido en el caso sublite, pues su defensa no solo contestó la petición sino que acompañó numerosos documentos en apoyo de sus aseveraciones. De modo que ambas partes han sido oídas, pudiendo plantear en estrados sus defensas y alegaciones, por lo que no hay objeción al debido proceso; Quinto: Que la declaración de desafuero no acredita los ilícitos y la participación que se atribuye, materia que es privativa del juez que conozca sobre el fondo. No obstante, debe justificarse, para los efectos de esta gestión previa, que los antecedentes que se proporcionan tienen mérito suficiente del hecho punible y la intervención que haya tenido en él la querellada; Sexto: Que, el artículo 412 del Código Penal previene que es calumnia la imputación de un delito determinado pero falso y que puede actualmente perseguirse de oficio. Por su parte, el artículo 416 del mismo texto establece que es injuria toda expresión proferida o acción ejecutada en deshonra, descrédito o menosprecio de otra persona. En la especie, para configurar los delitos que son materia de la querella, es ineludible la concurrencia de los elementos propios de cada uno de los ilícitos; Séptimo: Que como se indicó en la parte expositiva, la parte querellante delimita los delitos que persigue de la siguiente manera: “El delito de injurias graves cuando dijo… “O un Alcalde tener el nivel de impunidad y… no comprar fármacos, no atender a la comunidad cuando recibe los recursos para ello”. A continuación, el delito de calumnia al decir: “… para robarle la plata a los trabajadores…”; Octavo: Que, también se expuso precedentemente, que las expresiones fueron vertidas en la vía pública el 24 de agosto de 2014, a la salida del edificio de la Contraloría General de la República, en la que textualmente la parlamentaria manifestó: “Aquí hay una situación sumamente grave desde el punto de vista de lo que está ocurriendo con los recursos y la forma como se están utilizando esos recursos. Nosotros eso se lo hemos denunciado al Contralor, hemos tenido reuniones con los dos concejales que hoy están presente, Judith Rodríguez y Nicolás Camus, quienes han sido los que además han reiterado estas situaciones en el Concejo municipal. Muchas veces, hemos venido a denunciar la situación ante el Contralor, yo diría estamos reiterando denuncias que ya hemos hecho en el pasado, o sea, profundizando denuncias que ya hemos hecho en el pasado, pero, aquí creemos que es necesario hacer una auditoría, meterse en este tema, porque no puede un municipio o un alcalde tener el nivel de impunidad para robarle la plata los trabajadores, no comprar los fármacos, no atender a la comunidad cuando recibe los recursos para ello”; Noveno: Que, por su parte, el mismo Alcalde señor Plaza en su libelo expresa que la Diputada lo hostiliza y lo persigue, y prueba de ello son los 37 oficios que ha solicitado que se envíen a reparticiones del Gobierno, a la Contraloría General de la República y al propio Municipio, exponiendo en uno de los oficios que el Alcalde se encontraba querellado y formalizado por apropiación indebida de cotizaciones previsionales, junto al que fue gerente de la Corporación de Desarrollo Social de Cerro Navia. Agrega que en la gestión de la señora Girardi como Alcaldesa dejó un pasivo o déficit de más de cuatro mil millones de pesos, una sobredotación docente y un exceso de colegios. La parlamentaria se opuso a las medidas de racionalización, señalando en su página web que los recursos están mal distribuidos por lo que los vecinos están sin medicamentos en los consultorios, los trabajadores con cotizaciones impagas y niños sin lugar donde estudiar. Ha efectuado múltiples denuncias por estos hechos. También deben consignarse fotocopias de diarios de diciembre de 2008, en la que el querellante “denuncia que recibió el municipio sin recursos y casi sin muebles” (La Segunda). “Alcalde RN dispara contra clan Girardi “, “En Cerro Navia nos dejaron sin nada” (Las Últimas Noticias); Décimo: Que el querellante señor Plaza admite en dicha querella que la actividad pública que se ejerce, de índole política, está sometida a críticas que son parte del sistema democrático, siendo algunas merecidas y otras inmerecidas. La situación es más delicada cuando la crítica es injusta y proviene de otras autoridades públicas; Undécimo: Que, en este sentido, tanto el Alcalde señor Plaza como la diputada señora Girardi mantienen, desde hace varios años una acerba y enconada disputa política, inscribiéndose las que se denuncian en dicho campo de acusaciones cruzadas. Por de pronto, no se divisa el ánimo de injurias, pues la parlamentaria habla de una situación sumamente grave con el destino de los recursos. Se ha denunciado al Contralor y se ha hecho presente en el Consejo Municipal, en forma reiterada, solicitando una auditoría. Las expresiones “no puede un Municipio o un alcalde tener impunidad, no comprar fármacos y no atender a la comunidad…”, no revelan en forma precisa si el órgano municipal o el edil es el que, en esencia, descuida su función al no proporcionar a la comunidad los servicios que necesita. Queda en evidencia el carácter de crítica política a la gestión municipal, traducido en un debate entre ambos respecto del uso (o mal uso) de los recursos al no pagar remuneraciones a los trabajadores de la Salud, no comprar fármacos, no atender a la comunidad, etcétera. La opinión crítica de carácter político formulada a través de los medios de comunicación, se efectúa en ejercicio de la libertad de expresión aunque las palabras empleadas sean muy duras e hirientes, pero no puede soslayarse que la señora Diputada ejerce una actividad de fiscalización de la administración de la cual forma parte la Municipalidad de Cerro Navia y se trata de uso de recursos públicos en el que prevalece el interés público. No se divisa, en consecuencia, el ánimo de afectar la honra de la autoridad municipal; Duodécimo: Que en el caso del ilícito calumnia, la expresión que aisla el querellante: “… para robarle la plata los trabajadores…” no puede ser analizada sino en el contexto en el que fueron formuladas, siendo obligatorio incluir todo lo aseverado por la parlamentaria. Es así como, tratándose de una fuerte crítica política a la gestión, no se vislumbra la existencia de dolo o ánimo de provocar menoscabo o afectación a la honra del querellante, ya que no hay una imputación determinada y precisa de un delito cometido por éste, ni tampoco se precisa a la víctima, factores ineludibles para configurar la calumnia. Igual que en el caso anterior, se trata del ejercicio de la libertad de expresión frente a conductas de la querellada, requiriendo la intervención del órgano contralor y de otros servicios para cautelar el uso de recursos públicos; Que, en razón de lo expuesto, los antecedentes proporcionados carecen de mérito, por lo que se desestima la solicitud de abandono de la acción y SE RECHAZA la solicitud de desafuero de la H. Diputada doña Cristina Girardi Lavín, solicitada por don Luis Alberto Plaza Sánchez, Alcalde de la Ilustre Municipalidad de Cerro Navia. Previene el Ministro señor Silva que concurre al fallo de la manera que el redactor lo ha expresado, ahondando únicamente en lo concerniente a la imputación por el delito de calumnia del querellante a la diputada señora Girardi, que en la oración que el peticionario del desafuero de la parlamentaria funda este capítulo, no contiene en modo alguno un hecho determinado (que a la postre, además, debería resultar ser falso) que pueda llegar a configurar un delito definido, que asimismo sea actualmente perseguible de oficio. En efecto, no hay en ello más que una afirmación genérica y vaga, en atención a que la expresión “robar” frecuentemente es utilizada en términos de reproche ético-social y no en su sentido técnico. No se trata sólo de un problema de elementos subjetivos, ya que le imputación debe tener un carácter delictivo y para eso es necesario que tal acusación no sea abstracta, deben ser especificadas las circunstancias de comisión, de tiempo y lugar, de personas afectadas o de bienes jurídicos afectados en casos de delitos que no sean de resultado o no se refieran a personas determinadas, todo lo cual está ausente en la imputación conforme la atribución efectuada en la querella y según se desprende de los demás antecedentes conocidos con motivo de la solicitud de desafuero. Acordada contra el voto de los Ministros señores Gajardo y Mera, señora Rojas Moya, señor Poblete y señoras Solís y Barrientos -suplente del Ministro señor Carroza- quienes estuvieron por acoger la solicitud del querellante señor Luis Alberto Plaza Sánchez y disponer el desafuero de la diputada señora Cristina Girardi Lavín. Tuvieron presente para ello: A) Que ya se ha dicho en otra ocasión que el fuero parlamentario no es otra cosa que un privilegio propio de aquellos que forman parte del Poder Legislativo, como representantes de la soberanía popular, en cuya virtud no es posible seguir un proceso penal en su contra sin autorización de los tribunales superiores de justicia. Consecuentemente, el desaforar a un parlamentario importa privar a sus electores de su representante, de suerte que deben ser los más altos tribunales los que deben hacer un juicio de mérito, no uno de fondo, de las imputaciones formuladas contra un determinado parlamentario. B) Que, en efecto, los incisos primero y tercero del artículo 451 del Código Procesal Penal establecen que: “Una vez cerrada la investigación, si el fiscal estimare que procediere formular acusación por crimen o simple delito en contra de una persona que tenga el fuero a que se refieren los incisos segundo a cuarto del artículo 58 de la Constitución Política (hoy artículo 61), remitirá los antecedentes a la Corte de Apelaciones correspondiente, a fin de que, si hallare mérito, declare que ha lugar a formación de causa” “Si se tratare de un delito de acción privada, el querellante deberá ocurrir ante la Corte de Apelaciones solicitando igual declaración, antes de que se admitiere a tramitación su querella por el juez de garantía”. Por su parte, el artículo 61 de la Carta Fundamental refiere: “Los diputados y senadores sólo son inviolables por las opiniones que manifiesten y los votos que emitan en el desempeño de sus cargos, en sesiones de sala o de comisión”. “Ningún diputado o senador, desde el día de su elección o desde su juramento, según el caso, puede ser acusado o privado de su libertad, salvo el caso de delito flagrante, si el Tribunal de Alzada de la jurisdicción respectiva, en pleno, no autoriza previamente la acusación declarando haber lugar a formación de causa. De esta resolución podrá apelarse para ante la Corte Suprema”. “En caso de ser arrestado algún diputado o senador por delito flagrante, será puesto inmediatamente a disposición del Tribunal de Alzada respectivo, con la información sumaria correspondiente. El Tribunal procederá, entonces, conforme a lo dispuesto en el inciso anterior”. “Desde el momento en que se declare, por resolución firme, haber lugar a formación de causa, queda el diputado o senador imputado suspendido de su cargo y sujeto al juez competente”. C) Que, entonces, a la luz de las disposiciones citadas, entienden los disidentes que el nivel de exigencia que se debe tener para el desafuero de un diputado o senador es el que la ley requiere para la aplicación de medidas cautelares, esto es, el que entrega el artículo 140 del Código Procesal Penal, en sus letras a) y b): que existen antecedentes que justifiquen la existencia del delito que se investiga y que permiten presumir fundadamente que el imputado ha tenido participación en el delito como autor, cómplice o encubridor. D) Que básicamente la parte querellante imputa a la diputada señora Girardi Lavín que ésta habría dicho, a propósito de una denuncia que hizo a la Contraloría por la gestión Alcalde en la Municipalidad de Cerro Navia de su Alcalde, el señor Luis Alberto Plaza Sánchez, que existe una grave situación en el aludido municipio y que por ello ha ido hasta el órgano contralor, agregando que “…creemos que es necesario hacer una auditoría, meterse en este tema, porque no puede un municipio o un alcalde tener el nivel de impunidad para robarle la plata a los trabajadores, no comprar los fármacos, no atender a la comunidad cuando recibe los recursos para ello”. E) Que los dichos de la señora diputada, si bien no alcanzan, en el patrón de las letras a) y b) del artículo 140 del Código Procesal Penal para tener por justificado el delito de calumnia, sí son suficientes para hacerlo respecto del delito de injuria. En efecto, es calumnia la imputación de un delito determinado pero falso y que pueda actualmente perseguirse de oficio, y la expresión general de “robarle la plata a sus trabajadores” excluye ciertamente la determinación que el tipo penal exige. F) Que la injuria, en cambio, está descrita en el artículo 416 del Código Penal como “toda expresión proferida o acción ejecutada en deshonra, descrédito o menosprecio de otra persona” y parece claro que una expresión como la anotada, esto es, que el señor Alcalde de Cerro Navia, tiene impunidad “para robarle la plata a los trabajadores” (del municipio, se entiende), tiene características injuriosas. G) Que las más de las veces la brega política lleva consigo el ataque de un actor a otro de corriente distinta -o a veces de la misma-, y tales expresiones, fuertes o impetuosas, son propias del ejercicio de esta actividad, de manera que las denuncias en Contraloría General de la República o las expresiones de “graves irregularidades” en la Municipalidad de Cerro Navia o “no atender a la comunidad” o que sucede algo grave “con los recursos y en la forma en que se están utilizando”, no pueden ser consideradas injuriosas, ni siquiera para los efectos de las exigencias del citado artículo 140 del Código Procesal Penal. Pero claramente el límite entre el ímpetu de la lucha política y lo injurioso se rompe cuando la querellada refiere que el querellante tiene impunidad “para robarle la plata a los trabajadores”, pues aparece cierto un ánimo ofensivo que va más allá de la contienda política por lo que la petición de desafuero debe acogerse. H) Que se ha dicho que las expresiones ofensivas referidas, esto es, que el señor Alcalde tiene impunidad para robarle su dinero a los trabajadores de la Municipalidad, debe examinarse en el contexto en que fueron vertidas por la señora diputada, y que se evidencia un conflicto entre las partes que excluye el ánimo de afectar la honra de la autoridad municipal. Empero, parece extraño que alguien que afirma de otro que “se roba la plata de sus trabajadores” no tenga la intención de menoscabar su honra. Pero sea como fuere, ello debe ser resuelto en el juicio respectivo y no en el antejuicio que constituye el desafuero: es claro que con el nivel de exigencia de las letras a) y b) del artículo 140 del Código Procesal Penal, los dichos de la señora diputada constituyen una injuria, sin perjuicio de lo que resuelva el tribunal de fondo en su oportunidad. Redacción del fallo del Ministro señor Juan Manuel Muñoz Pardo y del voto en contra del Ministro señor Mera. Regístrese, notifíquese y archívese en su oportunidad. Rol Corte N° 16-2015. Pronunciada por el Presidente don Jorge Zepeda Arancibia y por los ministros señores Pfeiffer, Muñoz, Silva, Gajardo y Vázquez, señora Lusic, señor Moya, señora González Sepúlveda, señores Llanos, Crisosto, Madrid, Rojas González y Mera, señoras Ravanales, Melo, González Troncoso y Rojas Moya, señores Balmaceda y Rivera, señoras Villadangos, Rutherford, Aguayo y Kittsteiner, señor Poblete, señoras Book, Solís, Toro y Barrientos – suplente del ministro señor Carroza- y señores Norambuena – suplente de la ministra señora López- y Gray –suplente del ministro señor Astudillo-. No firman los Ministros señores Vázquez, por encontrarse en comisión de servicio y señor Rojas González, por encontrarse haciendo uso de permiso del artículo 347 del Código Orgánico de Tribunales. Santiago, 3 de mayo de 2016. Santiago, tres de mayo de dos mil dieciséis. Por no haberse notificado, ni bloqueado la resolución de veintisiete de abril de dos mil dieciséis, escrita a fojas 111 y siguientes, hágase con esta fecha conjuntamente con la presente resolución. Rol N° 16-2015 (Criminal). Resolvió don Jorge Zepeda Arancibia, Presidente de la Iltma. Corte de Apelaciones de Santiago. En Santiago, tres de mayo de dos mil dieciséis, autoriza la resolución que antecede, la que se notifica por el estado diario con esta fecha.