UNIVERSIDAD DEL TURABO ESCUELA DE CIENCIAS SOCIALES INTERVENCIONES PSICOTERAPÉUTICAS EN EL MANEJO DEL DESORDEN ALIMENTARIO IDENTIFICADO COMO EBRIOREXIA Rosaly Cartagena Quiñones DISERTACIÓN Presentada como requisito para la Obtención del Grado de Doctora en Consejería Psicológica Gurabo, Puerto Rico mayo, 2014 UNIVERSIDAD DEL TURABO CERTIFICACIÓN DE APROBACIÓN DE DISERTACIÓN La disertación de Rosaly Cartagena Quiñones fue revisada y aprobada por los miembros del Comité de Disertación. El formulario de Cumplimiento de Requisitos Académicos Doctorales con las firmas de los miembros del comité se encuentra depositado en el Registrador y en el Centro de Estudios Graduados e Investigación de la Universidad del Turabo. MIEMBROS DEL COMITÉ DE DISERTACIÓN Dra. María L. Villeneuve Román, PhD Sistema Universitario Ana G. Méndez Directora Dra. Vidamaris Zayas Velázquez, PsyD Universidad del Turabo Miembro Dr. Luis Rodríguez, PsyD Universidad del Turabo Miembro ©Copyright, 2014 Rosaly Cartagena Quiñones. Derechos Reservados. INTERVENCIONES PSICOTERAPÉUTICAS EN EL MANEJO DEL DESORDEN ALIMENTARIO IDENTIFICADO COMO EBRIOREXIA Rosaly Cartagena Quiñones Dra. María L. Villeneuve Román Directora Comité Disertación RESUMEN El término de Ebriorexia refiere a la práctica de consumir alcohol en exceso y restringir la ingesta de alimentos a los fines de no aumentar de peso por el alto consumo de calorías. No obstante, este término no está reconocido por la comunidad médica; de hecho el término fue acuñado por comunicadores en los medios (CBS News, 2008; Kershaw, 2008; Smith, 2008; Stopper, 2008). En este estudio se utiliza el término trastorno o desorden al referirse a la Ebriorexia. A pesar de que los Trastornos de Conducta Alimentaria han sido investigados sistemáticamente por los pasados 30 años, entre los menos estudiados se encuentra la Ebriorexia (Anderson, Simmons, Martens, Ferrier, Sheehy, 2006; Halmi, Sunday, Klump et al. (2003). Es a estos efectos, que el interés y objetivo de investigación estuvo dirigido a la búsqueda de información inherente a la Ebriorexia. Por consiguiente, el problema de investigación consistió en explorar y describir a través de diferentes estudios realizados en distintos países, incluyendo Puerto Rico, formas de intervención psicoterapéuticas para el manejo del desorden alimentario definido como Ebriorexia en los últimos doce años. iv En este estudio se adoptó como marco conceptual el Modelo Cognitivo Conductual, conocido por sus siglas TCC (Garner y Bemis, 1982; Fairburn, 1991; 1985; 1995; 2008; Fairburn, Cooper y Shafran, 2003). El diseño utilizado en la búsqueda de información fue el metanálisis (Jenicek, 1989). Fueron localizados por disponibilidad 24 estudios; distribuídos entre los Estados Unidos (n=13), Europa (n=3), Latinoamérica (n=6) y Puerto Rico (n=2) entre los años 2002 al 2014 (Villeneuve-Román, 2004). De acuerdo con el análisis crítico y profundo del contenido de cada investigación revisada se evidenció una participación total de 81,114 personas que incluyeron a hombres y mujeres, desde jóvenes universitarios y adultos de distintas edades. Entre los hallazgos observados se encontró que en seis (6) de las investigaciones se aplicaron estrategias psicoterapéuticas para manejar la condición del consumo de alcohol extremo y el desorden alimentario producto de la Ebriorexia como la Terapia Cognitiva-Conductual (TCC), de pareja, de Familia, Simulacion Mental y Manipulación de intenciones, Modificación de conducta y otras Terapias que no fueron identificadas en los estudios revisados. A su vez, se evidenció que en los restantes 18 estudios, se recomendaron concurrentemente el desarrollar programas de orientación, distribución de material educativo de salud en los cursos como parte del currículo y llevar a cabo más investigación en el tema de Ebriorexia y los Trastornos Alimentarios. Entre los hallazgos relacionados con los Factores Fisiológicos que originan el Trastorno de Ebriorexia se distinguen las prácticas extremas para el control del peso y la comorbilidad entre el régimen dietario y consumo de alcohol. Los Factores Psicológicos están relacionados principalmente con las presiones socioculturales, de grupo, académicas y financieras; así como la insatisfacción con la imagen/apariencia corporal y v personalidad adictiva. En los Síntomas Fisiológicos que mayormente caracterizan el Trastorno de la Ebriorexia se identificó aumento/ingesta de consumo de alcohol, dietas y ejercicios extremos para el control de peso y conductas compensatorias (purga inducida, laxantes, lesiones autoinfligidas, fármacos para control de apetito). Los Síntomas Psicológicos incluyen conductas negativas, antisociales y agresivas, cambios en actitudes estados de ánimo y depresión. Finalmente, se analizaron las Implicaciones en la conducta del Trastorno de Ebriorexia. Del análisis surge que las más recurrentes son: desarrollo de conductas comórbidas para controlar y evitar aumentar de peso, aumento en el consumo de alcohol y desórdenes en estados de ánimos, miedo y depresión. Entre las recomendaciones se sugiere el realizar estudios científicos en Puerto Rico vinculados con el Trastorno de Ebriorexia, desarrollar instrumentos confiables para el diagnóstico de este Trastorno, incluir en los currículos universitarios para la preparación de profesionales de la salud y psicología material educativo acerca del Trastorno de la Ebriorexia y su desarrollo, síntomas e implicaciones en el organismo y la conducta emocional y mental en la persona. vi DEDICATORIA Este trabajo se lo dedico a Dios, quién me dio la fortaleza para cumplir con este sueño y la perseverancia para no rendirme ante tantos retos, dificultades y agotamiento que encontré en el camino. “…porque tú eres mi roca y mi fortaleza y por amor de tu nombre me conducirás y me guiarás”. (Salmos 31:3) vii AGRADECIMIENTOS Con todo mi cariño y mi amor para las personas que hicieron todo en la vida para que yo pudiera lograr mis sueños, por motivarme y darme la mano cuando sentía que el camino se terminaba, a ustedes por siempre mi corazón y mi agradecimiento. A mi amado esposo Carlos Noel, por tu paciencia y comprensión, preferiste sacrificar tu tiempo para que yo pudiera cumplir con el mío. Por tu bondad y sacrificio me inspiraste a ser mejor para tí. A mis amados hijos Héctor y Matías quienes me inspiran cada día y me dan fuerzas para seguir adelante. A mis padres Héctor y Rosa por siempre apoyarme y motivarme a no rendirme. A mis adoradas hermanas Lynnette y Cynthia por su comprensión y ayuda incondicional para lograr este sueño. A mi cuñada Francia por estar siempre accesible cuando la necesité. A mi querida amiga Solmary por acompañarme en este largo camino y servir de inspiración para llegar a la meta. A mis maestros que en este andar por la vida, influyeron con sus lecciones y experiencias. A la Dra. María Villeneuve, por sus sabios consejos y ánimo para poder terminar este trabajo, por ser tan excelente educadora y por alentarme a no rendirme. Sin su ayuda no lo hubiera logrado. Agradezco a la Dra. Vidamaris Zayas y el Dr. Luis Rodríguez por la aportación de su tiempo, recomendaciones y apoyo académico. Gracias a todos por su ayuda, ahora me toca regresar un poquito de todo lo inmenso que me han otorgado. Con todo mi cariño este trabajo se los dedico a ustedes. viii TABLA DE CONTENIDO Página LISTA DE TABLAS .......................................................................................................xi CAPÍTULO I: INTRODUCCIÓN ...................................................................................1 Antecedentes ........................................................................................................1 Planteamiento del problema .................................................................................8 Objetivo y justificación de estudio ......................................................................9 Preguntas de investigación ...................................................................................10 Marco conceptual .................................................................................................11 Revisión de la literatura .......................................................................................19 Transfondo histórico de los trastornos de la conducta alimentaria ..........19 Definición de términos y variable (fenómeno) ....................................................26 CAPÍTULO II: MÉTODO ...............................................................................................29 Introducción .........................................................................................................29 Diseño de investigación .......................................................................................30 Descripción de la población y selección de la muestra........................................30 Descripción del instrumento de investigación .....................................................30 Proceso de validación ..........................................................................................31 Procedimiento ......................................................................................................32 Análisis cualitativo y cuantitativo ........................................................................33 CAPÍTULO III: RESULTADOS .....................................................................................34 Introducción .........................................................................................................34 Estudios realizados en los Estados Unidos ..........................................................35 ix Estudios realizados en Europa .............................................................................54 Estudios realizados en Latinoamérica ..................................................................58 Estudios realizados en Puerto Rico ......................................................................68 CAPITULO IV: DISCUSIÓN .........................................................................................73 Introducción .........................................................................................................73 Análisis crítico de acuerdo con las preguntas de investigación ...........................74 Conclusiones ........................................................................................................132 Recomendaciones ................................................................................................135 Limitaciones .........................................................................................................136 REFERENCIAS ...............................................................................................................138 x LISTA DE TABLAS Tabla 1 Página Resumen de resultados de estudios analizados en Estados Unidos de Norteamérica: Técnicas de Intervención .............................................................74 2 Resumen de resultados de estudios analizados en Europa: Técnicas de Intervención.....................................................................................................79 3 Resumen de resultados de estudios analizados en Latinoamérica: Técnicas de Intervención.....................................................................................................81 4 Resumen de resultados de estudios analizados en Puerto Rico: Técnicas de Intervención.....................................................................................................85 5 Resumen de resultados por países: Técnicas de Intervención .............................87 6 Resumen de resultados de estudios analizados en Estados Unidos de Norteamérica: Factores Fisiológicos y Psicológicos ...........................................90 7 Resumen de resultados de estudios analizados en Europa: Factores Fisiológicos y Psicológicos ..................................................................................95 8 Resumen de resultados analizados en Latinoamérica: Factores Fisiológicos y Psicológicos ..................................................................................98 9 Resumen de resultados de estudios analizados en Puerto Rico: Factores Fisiológicos y Psicológicos ..................................................................................102 10 Resumen de resultados por países: Factores Fisiológicos y Psicológicos ..................................................................................103 11 Resumen de resultados de estudios analizados en Estados Unidos de Norteamérica: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos ..........................................107 xi 12 Resumen de resultados de estudios analizados en Europa: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos ..................................................................................111 13 Resumen de resultados de estudios analizados en Latinoamérica: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos ..................................................................113 14 Resumen de resultados de estudios analizados en Puerto Rico: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos ..................................................................116 15 Resumen de resultados por países: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos ..........118 16 Resumen de resultados de estudios analizados en Estados Unidos de Norteamérica: Implicaciones en la conducta .......................................................122 17 Resumen de resultados de estudios analizados en Europa: Implicaciones en la conducta ......................................................................................................125 18 Resumen de resultados de estudios analizados en Latinoamérica: Implicaciones en la conducta ...............................................................................126 19 Resumen de resultados de estudios analizados en Puerto Rico: Implicaciones en la conducta ...............................................................................128 20 Resumen de resultados por países: Implicaciones en la conducta .......................130 xii CAPÍTULO 1 INTRODUCCIÓN Antecedentes Durante las últimas décadas la mayor ocurrencia de enfermedades de origen biopsicosocial, en especial los Trastornos Alimentarios, han ido en aumento. Estos trastornos involucran diferentes sistemas del cuerpo y aspectos inherentes a la persona vinculados con sus relaciones sociales (Portela de Santana, Da Costa Ribeiro Junior, Mora Giral y Raich, 2012). Sin embargo, los factores de riesgo que contribuyen al desarrollo de síntomas que caracterizan los Trastornos Alimentarios no están claramente identificados y se desconoce como se originan (Bruce, 2009). Los Trastornos del Comportamiento Alimentario (TCA) son enfermedades psiquiátricas consideradas graves porque alteran el comportamiento, las actitudes y la ingestión de alimentos. Tales conductas, por lo general, están acompañadas por una intensa preocupación por el peso y la imagen corporal (American Psychiatric Association, 2000). A su vez, son difíciles de tratar y perjudiciales para la salud y la nutrición a los efectos que predispone a la persona a la desnutrición, así como hacia la obesidad (American Dietetic Association, 2006). También se asocia con baja calidad de vida, altas tasas de comorbilidad psicosocial y mortalidad prematura (Konrad, Neufang, Hanisch, Fink y Herpetz, 2006). Plantean autores como Vaquero-Cristobal, Alacid, Muyor y López-Miñarro (2013) que existe una gran preocupación en muchas personas por la imagen corporal. Según ellos tal preocupación tiene diversas consecuencias que provocan alteraciones perceptuales conducentes en muchos casos a llevar dietas que ocasionan trastorno en la 1 conducta alimentaria para adecuar la imagen corporal a los ideales de la sociedad. En este aspecto, han señalado Park y Beaudet (2007) que los desórdenes de alimentación son uno de los trastornos conductuales más problemáticos en la sociedad actual. De acuerdo con Ballester y Guirado (2003) en las últimas décadas la preocupación por los Trastornos en la Conducta Alimentaria (TCA) y su relación con otros aspectos vitales en el ser humano se han incrementado en países más desarrollados. Por otra parte, según Lask y Bryant-Waugh (2000) las tasas de prevalencia de los TCA son bajas aunque la prevalencia de formas parciales del trastorno indicaron es elevada. La prevalencia se refiere al total de casos de una condición, en un grupo por cierto tiempo y se expresa como la proporción o porcentaje en una población de 1000,000 personas (Lucas, Beard, O’Fallon y Kurland, 1991). Los datos de prevalencia en el caso de las mujeres adolescentes y jóvenes adultas en países desarrollados presentan porcentajes entre 1 al 8% (Dorian y Garfinkil, 1995). En esta población se acepta un porcentaje de 0.5 al 1% de Anorexia, de 1 al 3% de Bulimia y de aproximadamente 3% de TCA no Especificados según el Protocolo de INSalud de los TCA del Instituto Nacional de la Salud (1995) y de la Asociación Americana de Psiquiatría (American Pshychiatric Association, 2000). Los Trastornos Alimentarios se han estudiado con metodología sistemática por los pasados 30 años (Halmi, Sunday, Klump, et al. 2003). De este proceso surge su clasificación fundamentada en los síntomas. A estos efectos, se identifica la Anorexia Nerviosa, Bulimia Nerviosa y otros seis diferentes tipos de Trastornos Alimentarios categorizados como Trastornos Alimentarios No Especificados. Estos tipos de trastornos por lo general se inician durante la adolescencia, en la adultez temprana y/o a través del 2 ciclo de vida. Cada uno de los Trastornos Alimentarios pueden tener efectos devastadores en los pacientes y sus familiares (Flament, Godart, Fermanian y Jeammet, 2001; Halmi, Eckert, Marchi, Sampugnaro, Apple y Cohen, 1991; Kaye, Bulik, Thornton, Barbarich, Masters, 2004). El Manual de Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales en su 5ta ed. descrito como DSM-5 (American Psychiatric Association, 2013) contiene una clasificación de los trastornos mentales y proporciona descripciones claras de las categorías de diagnóstico. Según el DSM-5, los trastornos de la nutrición y alimentación son caracterizados como una perturbación persistente de la alimentación o conductas relacionadas que resultan en la alteración o absorción de alimentos y que perjudica significativamente la salud física y el funcionamiento psicosocial (American Psychiatric Association, 2013). Mediante este Manual se proveen criterios para el diagnóstico de Trastornos definidos como: Rumiación, Evitación/Restricción de ingesta de alimentos, Anorexia Nerviosa, Bulimia Nerviosa y de Atracón. Las especificaciones del DSM-5 (American Psychiatric Association, 2013) para diagnosticar la Anorexia Nerviosa se caracteriza por la restricción de la ingesta de energía en relación con los requisitos dando lugar a un peso corporal significativamente bajo en el contexto de edad, género, trayectoria del desarrollo y salud física. La persona siente un miedo intenso de aumentar de peso, engordar y persiste en conductas que interfieren en la ganancia de peso a pesar de tener un peso significativamente bajo. Estas conductas alteran la forma en que se percibe el peso corporal; toda vez que ejerce una influencia excesiva en la auto-evaluación del peso corporal o una persistente carencia de reconocer la seriedad del bajo peso que tiene. En este aspecto, se encuentran dos 3 subtipos de Anorexia Nerviosa: tipo restrictivo y tipo atracón/purgativo. El tipo restrictivo ocurre cuando la pérdida de peso es lograda principalmente a través de la dieta, ayuno o ejercicio excesivo. El tipo atracón/purgativo resulta cuando la persona se compromete regularmente con vómitos autoinducidos o el mal uso de laxantes, diuréticos y enemas. La Anorexia Nerviosa tiene el nivel de mortalidad más alto de todos los trastornos mentales (Millar, Wardell, Vyvyan, Naji, Prescott y Eagles, 2005). A estos efectos, aproximadamente 1 en 20 pacientes mueren como resultado de esta condición (Keel, 2006). Birmingham, Su, Hlynsky, Golder y Gao (2005) expusieron que la mortalidad asociada con la Anorexia Nerviosa por décadas ha sido de un 5%. De igual forma, el riesgo de suicidio entre aquellos que lo padecen es 50 veces mayor que el de la población general (Park y Beaudet, 2007). La Bulimia Nerviosa es caracterizada por episodios recurrentes (al menos dos veces por semana por tres meses) de atracones, conductas compensatorias recurrentes inapropiadas para prevenir la ganancia de peso y auto-evaluación que es excesivamente influenciada por la forma y peso corporal (American Psychiatric Association, 2013). De acuerdo con los síntomas, la conducta compensatoria durante el episodio de Bulimia Nerviosa incluye vomito autoinducido, uso de laxantes, diuréticos y enema. Cuando la persona utiliza principalmente conductas compensatorias como ejercitarse excesivamente el diagnóstico establecido en el DSM-5 es del subtipo no-purgativo (American Psychiatric Association, 2013). Las características esenciales en el Trastorno de Atracones, de acuerdo con el DSM-5, son episodios recurrentes de Atracones (al menos dos días a la semana por seis meses), incluye un conjunto de características descriptivas vinculadas con sentimientos 4 de vergüenza, disgusto o angustia acerca de la cantidad del alimento consumido y la inhabilidad de parar de comer cuando está incómodamente lleno (American Psychiatric Association, 2013). En contraste, las personas con Bulimia Nerviosa y aquellas con Trastorno de Atracones no exhiben conductas compensatorias inapropiadas para contrarrestar el aumentar de peso (Fitcher, Quadflieg y Hedlund, 2006). Se ha encontrado que solo el 11% de las mujeres con síntomas de Atracones tienen un historial de Bulimia Nerviosa (Striegel-Moore, Cachelin, Dohm, Pike, Wilfley y Fairburn, 2001). Las mujeres con Trastornos de Alimentación, particularmente Anorexia Nerviosa, superan en número a los hombres en una proporción de 9 a 10 (Fairburn y Beglin, 1990; Wolf, 1991). En las mujeres parece haber una razón de prevalencia de .5% a 1% para Anorexia Nerviosa y una razón de 1% a 3% para la Bulimia Nerviosa (American Psychiatric Association, 2000). En relación a la Anorexia en Puerto Rico, según las estadísticas del Departamento de Salud Pública, no se tienen datos específicos acerca de la presencia de esta condición en la Isla (Sánchez y López 1998). La edad de inicio de los TCA se sitúa por lo regular en un rango entre las edades prepuberales y la primera adolescencia, aunque son poco frecuentes. Los mayores porcentajes de prevalencia entre los adultos jóvenes se encuentra en la población universitaria. Estimaciones corrientes de la prevalencia de los TCA entre los estudiantes universitarios van desde un 8% a un 17% (Hoerr, Bokram, Lugo, Bivins, Keast, 2002; Kirk, Singh, Getz, 2001; Prouty, Protinsky, 2002; Reinking, Alexander, 2005). Un alto porciento de estudiantes universitarias han expresado que se someten a dietas rigurosas para perder peso (Chamay-Weber, Narring y Michaud, 2005). Entre estos regímenes dietéticos se encuentran las dietas líquidas, bajas en calorías, el ayuno, eliminar comidas, 5 realizar actividades físicas excesivas y el utilizar purgantes. El hacer este tipo de dietas conlleva un alto riesgo para el desarrollo de conductas negativas a nivel físico y psicológico que redundan en alguno de los Trastornos Alimentaros (Chamay- Weber, Narring y Michaud, 2005). Los Trastornos Alimentarios, la obesidad y el consumo excesivo de alcohol son de los problemas más serios de salud entre los estudiantes universitarios. En específico, la incidencia de consumo de alcohol excesivo, para los varones es de cinco tragos y para las mujeres es de cuatro tragos en un periodo de dos horas (NIAAA, 2007). Datos Nacionales indican que cerca de la mitad (44%) de los estudiantes universitarios tienen episodios de consumo excesivo de alcohol (Wechsler, Kuo, Seibring, Nelson, y Lee, 2002). Keel, Dorer y Eddy (2003), así como los miembros del National Institute of Alcohol Abuse and Alcoholism (NIAAA, 2007), expusieron que toda esta incidencia ha despertado y llamado la atención de administradores universitarios, investigadores y médicos porque, a su vez, los Trastornos Alimentarios representan un elevado riesgo de que las personas puedan experimentar Trastornos del Estado de Animo (tasa de prevalencia = 25 a 50%), Trastornos de Ansiedad (20 a 70%), Trastorno de Abuso de Sustancias (10 a 55%) y Trastorno de Personalidad (30 a 90%) (Steiger y Seguin, 1999). Krahn, Kurth, Gomberg y Drewnoski (2005) han destacado la relación entre hacer dietas y el alto riesgo de desarrollar problemas relacionados al uso de sustancias entre los estudiantes universitarios. Por otra parte, está comprobado que existe una relación positiva entre los Trastornos Alimentarios, el abuso de alcohol y la dependencia de sustancias (Dansky, Brewerton y Kilpatrick, 2000; Goebel, Scheibe, Grahling y StriegelMoore, 1995; O’Brien y Vicent, 2003). También el TCA se ha vinculado con el uso del 6 cigarrillo según Crisp, Sedwick, Halek, Joughin, Humphrey (1999) y con el uso de otras sustancias como el Ectasy, Marihuana, inhalantes y medicamentos psicoterapéuticos no recetados según Cance, Ashley, Penne (2005) y Neumark-Sztainer, Story, Dixon y Murray (1998). En términos del uso de laxantes y vómito intencionado ha sido asociado con ideaciones suicidas, intentos de suicidio y práctica de actividades sexuales de alto riesgo (Neumark-Sztainer, et al. 1998). Estudiantes universitarios del género femenino con Trastornos Alimentarios y aquellas jóvenes que llevan dietas excesivas presentan conductas más negativas como consecuencia y resultado del uso del alcohol en comparación con aquellas que no tienen Trastornos Alimentarios (Anderson, Martens y Cimini, 2005; Dunn, Larimer y Neighbors, 2002). Cabe mencionar que mayormente la ocurrencia de los Trastornos Alimentarios y el consumo excesivo de alcohol ha sido estudiada exclusivamente en mujeres jóvenes universitarias (Anderson, Martens y Cimini, 2005; Benjamin y Wulfert, 2005; Krahn, Kurth, Gomberg y Drewnoski, 200; Piram y Robinson, 2006). Por otra parte, autores como Bulik, Klump, Thornton, Kaplan, Devin y Fitcher, et al. (2004), Holderness, Brooks-Gunn y Warren (1994), Hudson, Hiripi, Pope y Kessler (2007) concurren en que el uso del alcohol entre mujeres Bulímicas y con el Trastorno por Atracón ha aumentado. En particular existe poca investigación que examine la relativa importancia de la cantidad de sustancia consumida versus la consecuencia del uso de sustancias en personas con TCA. Los pocos estudios que han sido conducido con grupos de personas con Trastornos Alimentarios han revelado resultados contradictorios (Anderson, Martens y Cimini, 2005). Entre los trastornos menos estudiados está la Ebriorexia. El término 7 Ebriorexia fue acuñado por los medios de comunicación populares en el año 2008 para describir la práctica de restringir la ingesta de calorías para consumir más alcohol sin aumentar de peso (CBS New, 2008; Kershaw, 2008; Smith, 2008; Stopper, 2008). La Ebriorexia se une a una lista creciente de Trastornos Alimentarios no reconocidos o tolerados por la comunidad médica. Varios estudios exploran la relación entre los desórdenes de la conducta alimentaria y el consumo de alcohol, sin embargo, pocos examinan los motivos para alimentarse entre los individuos que se comprometen con esta conducta (Anderson, Simmons, Martens, Ferrier y Sheehy, 2006; Giles, Champion, Sutfin, McCoy, Wagoner, 2009). Planteamiento del problema El interés y objetivo del estudio está dirigido a conocer e identificar causas, efectos y terapias psicológicas que han sido investigados con la condición de Ebriorexia. De manera que, el problema de investigación consiste en explorar y describir a través de diferentes estudios realizados en distintos países, incluyendo a Puerto Rico formas de intervención psicoterapéutica para el manejo del desorden alimentario definido como Ebriorexia en los últimos doce años. De acuerdo con Chavez e Insel (2007) los conocimientos y tratamientos psicológicos para atender los Trastornos Alimentarios son significativamente limitados; más aún la condición de Ebriorexia. Estos autores señalan que existe la necesidad de investigar la psicopatología y patofisiología de los Trastornos Alimentarios a los fines de desarrollar tratamientos más efectivos y estrategias de consejería psicológica que permitan prevenir los desórdenes en la alimentación. Por su parte, Park y Beaudet (2007) plantean que una de las causas de la alta mortalidad relacionada con los desórdenes alimentarios resulta de la escases de investigaciones en el 8 tema. De aquí, la prioridad e importancia para la salud pública de investigar y descubrir obstáculos que dificultan el desarrollo, así como la aplicación de formas terapéuticas o tratamientos psicosociales, consejería psicológica e incluso medicación de forma objetiva y responsable. Objetivo y justificación del estudio Los desórdenes de alimentación por lo regular ocurren en conjunto con otros trastornos psiquiátricos y perturbaciones que incluyen, depresión, ansiedad, obsesiones, Trastornos de Abuso de Sustancias como el alcohol, drogas y un marcado impedimento en el funcionamiento social (Flament, Godart, Fermanian y Jeammet, 2001; Halmi, Eckert, Marchi, Sampugnaro, Apple y Cohen (1991); Kaye, Bulik, Thorton, Barbarich y Masters, 2004). Tales condiciones representan, a su vez, un grave riesgo para la comorbilidad psicosocial y mortalidad prematura (Konrad, Neufang, Hanish, Fink y Herpetz, 2006). La escasez de estudios en el tema de los Trastornos Alimentarios y, en particular, el desorden de la Ebriorexia, hacen necesaria el llevar a cabo investigaciones (Anderson, Martensy y Cimini, 2005). A su vez, según Bruce (2009), no existe suficiente información relacionada con los Trastornos Alimentarios al grado de que se desconoce cómo se originan estos desórdenes, como identificar los síntomas y la aplicación de tratamientos psicológicos más efectivos. Por cuanto, desde esta perspectiva se establece la pertinencia e importancia de llevar a cabo este estudio con el propósito de contribuir al avance del conocimiento en el tema del desorden alimentario definido como Ebriorexia para identificar y/o desarrollar estrategias de consejería psicológica efectivas y eficaces. Los resultados del análisis en este estudio proveen información actualizada que permite documentar la literatura existente en Puerto Rico en función al tema de interés de 9 forma objetiva; entiéndase la condición del Trastorno de Ebriorexia y la consejería psicológica necesaria. Además, estos resultados podrán ser utilizados como punto de partida para llevar a cabo estudios relacionados con los Trastornos Alimentarios y, en específico, con el desorden de Ebriorexia y formas de intervención psicológicas. Por otra parte, también podrán ser utilizados por las autoridades vinculadas a la salud (psicólogos, psiquiatras, terapeutas, entre otros) para desarrollar orientaciones, talleres y estrategias que permitan fortalecer las técnicas psicológicas, terapias, tratamientos en el diagnóstico e intervención de los Trastornos Alimentarios y para el desorden de Ebriorexia de forma que contribuya a la calidad de vida de estas personas. De acuerdo con Hernández Sampieri, Fernández Collado y Baptista Lucio (2006) toda investigación se justifica a la luz de cinco criterios fundamentales. Estos criterios son los siguientes: 1) el estudio y sus resultados deben ser de relevancia social, 2) tener valor práctico de forma que su aplicación sea útil a la sociedad, 3) debe contribuir al avance y adelanto del conocimiento, de la literatura y aportar a la teoría, 4) porque provee de métodos para la investigación y, 5) provee formas e instrumentos para medir y analizar conceptos, constructos, hechos de interés. Este estudio cumple con cada uno de los criterios establecidos por los autores de referencia. Preguntas de investigación El método científico establece que para desarrollar investigaciones formales, además de plantear el problema a ser analizado, se requiere de la formulación de la pregunta. A estos efectos, la pregunta permite indagar y profundizar a los fines de descubrir nueva información (Villeneuve Román, 2004). En este aspecto las mismas son las siguientes: 10 1. ¿Cuáles son las técnicas de intervención psicoterapéuticas utilizadas en el manejo del desorden alimentario de la Ebriorexia en los últimos doce años? 2. ¿Qué factores psicológicos y fisiológicos identifican y definen el origen del desorden de Ebriorexia según las investigaciones realizadas en los últimos doce años? 3. ¿Cuáles son los síntomas psicológicos y fisiológicos que identifican y definen la condición de Ebriorexia de acuerdo con los hallazgos en las investigaciones de los últimos años revisadas? 4. ¿Que implicaciones tiene el Trastorno de la Ebriorexia en la conducta de la persona? Marco conceptual En este estudio se adopta como Marco conceptual el Modelo Cognitivo Conductual; por sus siglas TCC. Desde la década de los años ’50 hasta la actualidad se han elaborado múltiples modelos conceptuales tratando de explicar la etiología, el desarrollo y el mantenimiento de los Trastornos de la Conducta Alimentaria. Estudios relacionados con tratamientos psicológicos que se consideran eficaces para los trastornos alimentarios demuestran, por lo general, que la Terapia Cognitivo-Conductual (TCC) es la que obtiene mayor apoyo empírico (NICE, 2004, Wilson, 2005). Esta terapia ha sido el tratamiento estándar para atender el Trastorno de la Bulimia Nerviosa y establece la base teórica para el tratamiento de la Anorexia Nerviosa. De acuerdo con Garner y Bemis (1982) el Modelo Cognitivo-Conductual se fundamenta en la teoría del aprendizaje, principalmente en el refuerzo positivo y negativo de estar o no delgada/o. En concreto, se concibe que el Trastorno psicopatológico principal de estos pacientes está basado en ideas y sentimientos sobrevalorados acerca del peso y su forma corporal que determinan su conducta. Las primeras descripciones 11 respecto a la Terapia Cognitivo-Conductual como tratamiento para la Bulimia Nerviosa (Fairburn, 1981) y la Anorexia Nerviosa (Garner y Bemis, 1982) estuvieron dirigidas a la adaptación de los métodos estándares de esta terapia a las necesidades especiales de los pacientes con Trastornos de la Conducta Alimentaria. El primero de los Tratamientos Cognitivo-Conductuales (TCC) protocolizado y específico para los Trastornos de la Conducta Alimentaria que empezó a ofrecer resultados positivos fue el propuesto por Fairburn (1985) para la Bulimia Nerviosa a mediados de los años ’80. Esta Terapia Cognitivo-Conductual para la Bulimia Nerviosa tiene como objetivos: reducir los atracones y las conductas compensatorias (como las de tipo purgativo que incluyen vómitos y uso de laxantes o diuréticos), modificar la tendencia de hacer dietas extremas y cambiar las actitudes hacia el peso y la figura. Además de cumplir con estos objetivos, la TCC contribuye a disminuir los síntomas asociados tales como la depresión, baja autoestima y deterioro del funcionamiento social. La Terapia Cognitivo-Conductual (TCC) para la Bulimia Nerviosa es un Modelo explicativo para el Trastorno de Conducta Alimentaria (TCA) descrito en manuales de tratamiento para terapeutas (Fairburn y Wilson, 1993) y libros de autoayuda para los propios pacientes (Fairburn, 1995). Entre los supuestos fundamentales para tratar la Bulimia Nerviosa aplicando el Modelo Cognitivo-Conductual, uno de éstos tiene que ver con la premisa de que este Trastorno es un sistema disfuncional de autoevaluación. A estos efectos, la mayoría de las personas se perciben, se juzgan y autocritican su propio funcionamiento en distintas áreas de su vida como las relaciones interpersonales, el trabajo, la familia, los intereses personales de forma exclusiva y negativa en relación a sus hábitos en la ingesta de 12 alimentos, su figura, peso corporal y a su capacidad para controlarlos (Ekstrand y Roca Villanueva, 2011). Fairburn, Cooper y Shafran (2003) plantearon que la sobrevaloración en la importancia de la figura, del peso y de su control es la pieza clave en el mantenimiento del problema; el cual identificaron como núcleo psicopatológico (core psychopathology). A partir de éste núcleo se derivan las demás características clínicas del TCA tales como: 1) la dieta estricta y los comportamientos dirigidos a controlar el peso (restringir la ingesta, ejercicio excesivo), 2) la evitación (evitar mirarse ciertas partes del cuerpo), 3) los rituales de comprobación (mirarse continuamente en el espejo, pesarse frecuentemente) y, 4) la preocupación generada por los pensamientos acerca de la comida, la figura y el peso. El Modelo Cognitivo-Conductual resulta ser el único en el que se establece que el Trastorno de Conducta Alimentaria clínicamente no está directamente relacionado con el núcleo patológico de los atracones que aparecen como consecuencia de los intentos por restringir la ingesta de alimentos y el someterse a dietas extremas e inflexibles. La relación que se establece entre hacer dieta y los atracones forma un círculo vicioso porque la restricción dietética favorece la pérdida de control con ingesta de grandes cantidades de comida (atracones), no obstante, al mismo tiempo la dieta es una respuesta a la sobreingesta como una medida compensatoria. Cuando las pacientes fracasan en el cumplimiento de sus normas dietéticas estrictas con episodios de atracones lo interpretan como evidencia del poco control que tienen de la ingesta de alimentos, su figura y su peso. Romper las reglas dietéticas le resulta inaceptable, por lo que tienden a reforzar su conducta de hacer dieta y su idea sobrevalorada de la necesidad de mantener un 13 determinado peso corporal. Esta conducta da lugar a que surja un nuevo círculo vicioso que tiende a automantenerse (Fairburn, 1981). Las estrategias compensatorias de tipo purgativo (vómitos autoinducidos y uso de medicamentos laxantes y diuréticos) favorecen el mantenimiento de los atracones. En muchas ocasiones las personas con Bulimia Nerviosa tienen atracones cuando saben que podrán utilizar algún tipo de purga. Además, creen en algunas de estas prácticas como métodos para eliminar todas las calorías ingeridas en los episodios de atracones. Sin embargo, los laxantes no parecen afectar a la absorción de las calorías y los vómitos eliminan menos de la mitad de las calorías ingeridas, por cuanto, son prácticas ineficaces para controlar el peso (Ekstrand, Roca Villanueva, 2011). La formulación original del Modelo diseñado por Fairburn, Cooper y Shafran (2003) para el tratamiento de la Bulimia Nerviosa explica que los momentos en los que las pacientes se saltan sus reglas estrictas y tienen episodios de atracones, éstos no ocurren por azar sino que suelen desencadenarse como respuesta a cambios en el estado de ánimo. Los atracones tendrían una función reguladora de los estados disfóricos, neutralizando los estados de ánimo negativos y los síntomas de estrés. El tratamiento que se deriva del Modelo desarrollado por Fairburn, Cooper, et al. (2003) para el mantenimiento de la Bulimia Nerviosa no se centra principalmente en los atracones (que suelen ser la queja principal de éste tipo de pacientes) sino que abarca una respuesta más amplia y duradera al enfocar la terapia en la dieta estricta, las medidas compensatorias y, más aún, en el núcleo psicopatológico de la idea sobrevalorada acerca de la figura, el peso y su control. Se trata de un tratamiento diseñado para unas 15-20 sesiones, distribuidas en tres etapas con aproximadamente cinco meses de duración. 14 La primera Etapa se compone de siete sesiones de 50 minutos. Además de la sesión inicial se desarrolla a lo largo de cuatro semanas con una frecuencia de dos sesiones por semana. La segunda Etapa del tratamiento es de transición. Esta Etapa se compone de una o dos sesiones (una por semana) en las que se revisa el progreso obtenido hasta el momento y se toman decisiones con respecto a la tercera Etapa. Esta Etapa es la más larga del tratamiento porque se compone de ocho sesiones con periodicidad semanal. El trabajo a lo largo de esos dos meses se dirige a cuestionar los mecanismos mantenedores según la formulación de cada caso. La Etapa III del tratamiento no está estructurada por sesiones como lo están las etapas anteriores. Sin embargo, los autores distinguen tres bloques temáticos que han de ser tratados a lo largo de las ocho semanas: 1) preocupación por la figura, rituales de comprobación, sensación de sentirse gorda y pensamientos y creencias relacionados; 2) intentos de restringir la dieta, reglas dietéticas y control de la alimentación y, 3) eventos externos, estados de ánimo y hábitos de alimentación. La TCC-BN es el tratamiento de elección para éste tipo de pacientes. Sin embargo, su eficacia es limitada porque sólo la mitad de las pacientes tienen una respuesta completa y duradera (Fairburn, Cooper y Shafran, 2003). La eficacia limitada de la Terapia Cognitiva-Conductual para la Bulimia Nerviosa en su formulación original ha llevado a sus autores a reformular su Modelo añadiendo una serie de mecanismos mantenedores del trastorno, además de extenderlo a todos los TCA y no exclusivamente a la Bulimia Nerviosa (Ekstrand, Roca Villanueva, 2011). Fairbun, Cooper y Shafran (2003) han denominado a ésta extensión del modelo Teoría transdiagnóstica (Transdiagnostic Theory). Según ésta reformulación, en ciertos 15 pacientes (aquellos en los que la TCC-BN no supone una mejora duradera en el tiempo) uno o varios de los procesos mantenedores adicionales propuestos actuaría obstaculizado el cambio. Los cuatro mecanismos añadidos, mantenedores de los Trastornos Alimentarios propuestos por Fairburn, Cooper y Shafran (2003) son los siguientes: 1. Perfeccionismo Clínico. Este mecanismo hace referencia a un esquema disfuncional de autoevaluación donde la valía personal es juzgada principalmente por los esfuerzos destinados a alcanzar objetivos elevados y por el éxito al conseguirlos independientemente de las consecuencias perjudiciales que pueden tener dichos esfuerzos para el funcionamiento global. El perfeccionismo es una característica bastante común en los TCA. Existe un miedo al fracaso (comer en exceso, engordar, saltarse la dieta) una atención selectiva a determinadas actuaciones (contar calorías, vigilar el peso y la forma corporal) y una elevada autocrítica derivada de sesgos cognitivos negativos. 2. Baja autoestima. En algunas pacientes con TCA, la baja autoestima no consiste simplemente en pesar negativamente acerca de ellas mismas como resultado de la incapacidad de controlar la ingesta o el peso sino en la existencia de una autoimagen negativa permanente vista como parte de sus propia identidad. Esta baja autoestima dificulta el cambio, principalmente a través de dos mecanismos. Por un lado, les crea una sensación de desesperanza de la propia capacidad de cambio (perdiendo la confianza en el tratamiento) y, por otra parte, las lleva a perseguir con determinación logros en las áreas altamente valoradas (control de la sobreingesta de alimentos, peso y figura corporal) que son difíciles de alcanzar porque no son realistas ni están bajo su control (llegar a pesar una determinada cifra, utilizar una talla concreta de ropa, seguir dietas estrictas). Cuando no logran alcanzar estas metas, ese fracaso se sobregeneraliza y se 16 interpreta como confirmación de ser fracasada. Estas pacientes con autoimagen negativa crónica suelen responder mal al tratamiento. 3. Intolerancia a los cambios en el estado de ánimo. Algunas pacientes con TCA tienen problemas para afrontar de forma adecuada cierto estados emocionales negativos (ira, ansiedad o depresión) o positivos (euforia). Cuando experimentan cambios en su estado de ánimo, estas pacientes son incapaces de reconocerlos y aceptarlos e intentan modular su estado anímico con conductas que, en ocasiones, son muy desadaptativas como por ejemplo: autolesiones o consumo de sustancias psicoactivas. También recurren a otros comportamientos como atracones, vómitos y ejercicios físico intenso para modular su estado de ánimo. 4. Dificultades interpersonales. Algunas pacientes con TCA también presentan importantes problemas en sus relaciones interpersonales. La terapia interpersonal ha demostrado su eficacia como tratamiento para la Bulimia Nerviosa (Wilson, 2005) y es por ello que se han integrado algunos de sus elementos en el modelo transdiagnóstico y en la TCC derivada de él porque las dificultades en esta área pueden estar perpetuando el TCA. De acuerdo con uno de los últimos trabajos publicados por Fairburn (2008) en forma de manual para terapeutas, la visión transdiagnóstica permite utilizar básicamente una misma teoría y tratamiento para el conjunto de los trastornos alimentarios. Según este autor, en la práctica clínica los tres diagnósticos descritos en el DSM-IV-TR (American Psychiatric Association, 2000) se distribuyen de forma que la mayoría de estas pacientes cumplen los criterios para el diagnóstico de TCA no especificado (50 a 60%), seguido de las diagnosticadas como Bulimia Nerviosa (30%) y, en menor medida, 17 de aquellas con Anorexia Nerviosa (10-15%). Dentro de los diagnósticos no especificados entrarían los casos que no cumplen todos los criterios para la Bulimia Nerviosa o Anorexia Nerviosa (subclínicos), aquellos que combinan características de ambos diagnósticos (mixtos) y los que cumplen criterios para el trastorno pro atracón (el grupo más pequeño que compone menos del 10% de los casos). En concordancia con los datos relacionados con los desórdenes alimentarios, los tres diagnósticos de TCA comparten entre sí más características que diferencias. En función con el planteamiento de Fairburn (2008), estos Trastornos tienen una parte de psicopatología específica y otra serie de componentes de psicopatología general (compartidos con Trastornos no alimentarios) como síntomas de depresión, ansiedad o abuso de sustancias, entre otros. El Modelo propuesto inicialmente por Fairburn (2008) se amplía para abarcar distintas realidades clínicas en la teoría y tratamiento transdiagnótico como la Anorexia Nerviosa, Bulimia Nerviosa y otros que pueden incluirse en la categoría de no especificados. El Modelo transdiagnóstico destaca que la única diferencia básica entre Anorexia Nerviosa y Bulimia Nerviosa radica en el grado de éxito alcanzado en sus intentos de controlar su peso corporal. En la Bulimia Nerviosa el peso suele quedar compensado entre los otros episodios de sobreingesta y los periodos restrictivos (estas pacientes suelen tener un Índice de Masa Corporal (IMC) dentro del rango saludable) mientras que en la Anorexia Nerviosa los intentos por restringir la ingesta consiguen un bajo peso significativo (IMC<17.5). De modo que, los elementos que mantienen ambos TCA y que deben ser tratados durante la TCC son los mismos. 18 Cabe destacar en lo que se refiere a la propuesta transdiagnóstica, que es necesario realizar más estudios que demuestren la eficacia de este tratamiento para la Anorexia Nerviosa. Resulta prometedor que a través de los hallazgos se puedan llevar a cabo aproximaciones que permitan incorporar aspectos característicos de estas pacientes como el miedo a ganar peso o el perfeccionismo (Wilson, 2005). No obstante, a pesar de los esfuerzos realizados por los autores para mejorar la TCC para tratar los Trastornos de la Conducta Alimentaria en esta nueva versión mejorada, es necesario todavía optimizar su eficacia y, posiblemente, simplificar el procedimiento determinando cuáles son los ingredientes más activos del mismo y eliminando los restantes componentes (Fairburn, 2008). A estos efectos, existen tratamientos más sencillos y de menor costo como los manuales de autoayuda orientados en la evidencia que están considerados como una posible primera opción para algunas pacientes con Bulimia Nerviosa o Trastornos por Atracón (Fairburn, 1995; NICE, 2004; Wilson, 2005). Revisión de la Literatura Trasfondo histórico de los trastornos de la conducta alimentaria En las últimas décadas ha ido aumentando el interés en el estudio de los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA), su origen, síntomas y tratamiento. Los TCA se consideran un problema de salud propio de países desarrollados; convirtiéndose en una verdadera epidemia con una incidencia y prevalencia que va en aumento. Entre las razones para el incremento del TCA se encuentra la presión sociocultural hacia una imagen más esbelta y el rechazo a la obesidad (Cano, Castaño, Corredor, García, González, Lloreda, et al., 2007). 19 Silverman (1995) menciona que desde tiempos antiguos han existido informes de casos de autoinanición sin embargo, desde la perspectiva médica carecen de valor. Los escritos descriptivos de Epstein (1990) señalan que en la antigua Roma existían habitaciones llamadas vomitorium donde los hombre vaciaban sus estómagos después de haber ingerido grandes cantidades de alimentos con el fin de continuar la gula sin control consumiendo alimentos como una práctica placentera. Durante el siglo XIII, mujeres consideradas piadosas y santas presentaban lo que parecía ser casos de Anorexia y que según Rusell y Treasure (1989) llamaron Anorexia Santa. Bell (1985) narra las rigurosas abstinencias alimentarias y los episodios de ingesta masiva de Santa Catalina de Siena. También describe el tipo de caña que esta santa empleaba para inducirse el vómito y lista las hierbas purgantes que utilizaba. A estos efectos, en la Edad Media, el concepto de bondad, virtud y pureza era igualado a la delgadez y el ayuno (Neuman y Halvorson, 1983). A través de la historia, las conductas Anoréxicas han estado muy relacionadas con ejercicios religiosos dirigidos a la conquista del cuerpo o del espíritu (Yates, 1989). El escrito de Rausch y Bay (2004) presenta el caso de Richard Morton, un médico y religioso quien desarrolló una descripción clínica acerca de una joven que presentó una consunción o clorosis nerviosa en el año 1694. Según Morton, la joven de 18 años tuvo: una supresión total de su menstruación, a causa de una multiplicidad de inquietudes y pasiones en su mente…a partir de lo cual su apetito comenzó a mitigar y su digestión pasó a ser mala; también sus carnes comenzaron a ponerse flácidas y su rostro comenzó a palidecer. Sin embargo, no tenía fiebre sino, por el contrario, una frialdad en todo el cuerpo, 20 sólo su apetito había disminuido y su digestión habíase tranquilizado con episódicos desmayos que se repetían con frecuencia (Rausch y Bay, 2004; p.21). A raíz de las descripciones que realizó Morton de los casos de consunción o clorosis nerviosa es que se le atribuye el haber sido el primero en trazar las especificaciones clínicas para lo que hoy se conoce como Anorexia Nerviosa. De acuerdo con Gómez (2003), la descripción clínica que ofreció Morton sentó el precedente para la reflexión y análisis de casos en que una enfermedad puede ser de origen no orgánico. Rausch y Bay (2004) hacen referencia al escrito Nostalgia Metódica de Francois Boissier de Sauvages quien nombró la condición como Anorexia Anepithymiae y abordó la enfermedad como la extinción del deseo sexual y/o alimenticio. Las autoras mencionan que con la descripción de Boissier se estableció una relación entre los Trastornos gástricos, la melancolía, la Anorexia Mirabilis y focalizaron en la visión psicogénica u orgánica. Por otro parte, Djerine para el 1974 según Gómez, (2003) vinculó este Trastorno al rechazo de alimentos de origen psíquico y los separó de otros trastornos orgánicos. Sir William Gull para el 1874, menciona en Gordon (2000) escribió varios artículos relacionados a casos de inanición los cuales categorizó como un estado mental mórbido en jóvenes entre las edades de 15 y 23 años. Según los artículos estas jóvenes fueron conocidas por tener un estado mental perverso y detestable, de manera que se proponía un tratamiento moral. De acuerdo con Gordon (2000) Laségne hizo una descripción de este fenómeno como Apepsia Histérique al establecer que los desórdenes neuróticos femeninos estaban bajo la categoría de histeria. Añade Gordon (2000) que, 21 por su parte Guilles de la Tourette retomó las formulaciones de Laségne y Gull agregando que la Anorexia Mental no se trataba de una falta de apetito sino de un rechazo del alimento. Según Gordon (2000), a principios del siglo XX se tenía noción de que tal fenómeno se debía a una insuficiencia pituitaria dado que Simmons, un patólogo alemán, había realizado en 1914 una autopsia a una paciente caquéctica y encontró que la pituitaria estaba destruida formándose una confusión entre insuficiencia pituitaria y Anorexia Nerviosa. Cooper (1987) comentó que algunos casos que se identificaron como Anorexia Nerviosa en los siglos XVI o XVII eran más bien problemas de consunción o clorosis. Cabe destacar que en el siglo XVI se consideraba como símbolo de belleza las formas anchas y abundantes por lo que las figuras juveniles y delgadas se rellenaban para hacer ver a sus cuerpos pesados (Coiffman, 2005). Es en el siglo XX cuando se observa un cambio en el ideal de belleza dada la influencia de los medios de comunicación masiva (Fernández, 2005). Las imágenes del cuerpo ideal de la mujer cambiaron significativamente, de las antiguas imágenes de mujeres en sobrepeso que simbolizaban abundancia y productividad a las nuevas imágenes de mujeres esbeltas (Kogan, 2003). Desde los años ‘60 se han multiplicado los trabajos acerca la Anorexia; demostrándose un notable interés entre los investigadores en el tema, en las líneas terapéuticas del problema, en la génesis del Trastorno que influye en una serie de factores psicológicos, biológicos y sociales que en un momento concreto desencadenan el Trastorno (Turón, 1997). La historia de la Bulimia Nerviosa es más reciente. De acuerdo con Turón (1997) la Bulimia Nerviosa es un Trastorno del que no se hablaba desde hace 22 dos décadas y ha emergido en las sociedades con gran fuerza en los últimos quince años; aunque sólo se han encontramos referencias detalladas de hace 50 años atrás. El término Bulimia se deriva del griego Boulimos y que, a su vez, se deriva de la fusión de bous (buey) y limos (hambre); literalmente “hambre de buey”. La conducta alimentaria relacionada con el atracón y posterior vómito autoinducido con la intención de continuar comiendo se conoce desde la época de la antigua Roma (Crichton, 1996). Miján de la Torre (2004) señala que para el 1743, James describió la condición una entidad como true boulimus caracterizada por una intensa preocupación por la comida, ingesta de importantes cantidades de alimentos en periodos cortos de tiempo seguido de desmayos y otra variante que fue denominada como caninus appetitus, donde tras la ingesta se presentaba el vómito. En el siglo 19, el concepto de Bulimia Nerviosa se incluyó en la edición de la Enciclopedia Británica y en el Diccionario médico y quirúrgico publicado en Paris en 1830; que luego fue olvidada (Fairbun y Wilson, 1995; Stein y Laakso, 1988). El interés por la Bulimia Nerviosa resurge en la mitad de los años ’70 al publicarse una serie de informes que lo describen como Síndrome de atracones y purgas entre estudiantes universitarias americanas. El Trastorno captó más la atención con la publicación de un artículo titulado Bulimia Nerviosa: Una variante nefasta de la Anorexia Nerviosa escrito por el Dr. Rusell (1979) una autoridad en el campo de la Anorexia Nerviosa. Fairburn y Cooper (1982) hicieron referencia a un artículo publicado en la revista Cosmopolitan en que se describían los síntomas del Trastorno de Bulimia Nerviosa producto de un cuestionario en el que se le había solicitado a las lectoras que indicaran aquellos síntomas que ellas padecían y enviaran sus respuestas posteriormente 23 para ser analizadas. La mayoría de las mujeres que respondieron el cuestionario parecían tener Bulimia Nerviosa y, de éstas solo el 2.5% estaba recibiendo alguna forma de tratamiento para ese problema. En su artículo, indicó que el Trastorno de Bulimia Nerviosa era una enfermedad severa no detectada en la gran mayoría de los casos (Fairburn y Cooper, 1982). Posteriormente se han llevado a cabo numerosas investigaciones en el tema y han identificado que la Bulimia Nerviosa es un importante problema de salud en muchos países; concretamente en aquellos en que se presentan más casos de Anorexia Nerviosa. Además, se ha encontrado recientemente que en los países mediterráneos como Italia y España la incidencia de este Trastorno parece ser creciente (Fairburn, 1995). También autores como: Dansky, Brewerton y Kilpatrick (2000); Giles, Champion, Suffin, McCoy y Wagoner (2009); O’Brien y Vincent (2003) han vinculado de forma consistente los Trastornos de Alimentación al uso y abuso del alcohol. A tales efectos, Krahn, Kurth, Gomberg y Drewnoski (2005) han destacado la relación entre hacer dietas y el riesgo de desarrollar problemas relacionados al uso de sustancias entre los estudiantes universitarios. En el año 2002, O’Malley y Johnston plantearon que un consumo excesivo de alcohol se relacionaba con el Trastorno Alimentario. Sin embargo, desde el año 2001 Hingson, Heeren, Zakocs, Kopstein y Wechsler habían identificado una cantidad de cifras que evidenciaban la frecuencia en el consumo excesivo de alcohol entre los estudiantes y que demostraban que era una constante desde el 1993. De modo que los esfuerzos dirigidos a fomentar la educación y prevención en el tema no habían logrado su objetivo. Al respecto, Del Boca, Darkes, Greenbaun y Goldman (2004), así como 24 Harford, Weschsler y Seibring (2002) indicaron que los estudiantes de primer año componen un grupo mayoritario en las fiestas realizadas en los dormitorios y Casas Griegas donde el alcohol es consumido en forma excesiva las noches de los jueves, viernes y sábado. Cabe mencionar que se ha identificado que el rigor académico del primer año, las normas sociales universitarias que promueven el uso de alcohol y la drástica disminución en la supervisión de los padres durante la transición a la vida universitaria contribuyen a que los estudiantes universitarios de primer año recurran a la práctica de la Ebriorexia (Baer, 2002; Baer y Bray, 1991; Baer, Kivlahan y Marlatt, 1995; Schulenburg y Maggs, 2002; Schulenburg, Maggs, Sher, Gotham, Baer, et al, 2001). De acuerdo con Chambers (2008) el término Ebriorexia carece de una definición sistemática, aunque es caracterizado por las siguientes conductas: 1) omisión de comidas para ahorrar calorías y compensar las mismas con un incremento en la ingesta calórica proveniente del consumo de bebidas alcohólicas, 2) realizar ejercicios de forma excesiva con el propósito de compensar las calorías consumidas con bebidas alcohólicas y/o 3) consumo excesivo de alcohol con el propósito de enfermarse y vomitar previo a consumir alimentos. En síntesis, las características conductuales de referencia acerca del concepto Ebriorexia consisten de tres dimensiones diferentes: uso y abuso de alcohol, Trastorno de Alimentación y actividad física. Dimeff, Baer, Kivlahan y Marlatt (1999) plantean que existen intervenciones efectivas para trabajar con el problema de consumo de alcohol como lo es la Breve Evaluación e Intervención de Consumo de Alcohol para los Estudiantes Universitarios (Brief Alcohol Screening and Intervention for College Students BASICS). Tal intervención consiste en gran medida, en el adiestramiento de las destrezas cognitivas 25 conductuales y la Entrevista Motivacional. La misma ha sido clínicamente probada y puede ser utilizada como una estrategia de intervención centrada en el estudiante para promover cambios en la conducta. También es útil y efectiva para manejar la resistencia y ambivalencia al cambio en la conducta de estos estudiantes afectados por el consumo excesivo de alcohol. Según Rollnick, Miller y Butler (2008) la Entrevista Emocional se enfoca en las necesidades personales y motivaciones positivas y ha demostrado ser efectiva particularmente cuando los estudiantes están en una etapa de cambio de apertura y aceptación. Definiciones de términos y variables (fenómeno) Los términos y variables identificados para este estudio se definen conceptual y operacionalmente en esta sección. Estas definiciones tiene el objetivo de exponer y describir su significado e indicar los parámetros para su medición y análisis (Villeneuve Román, 2004). A partir de aquí se presenta en primer lugar las definiciones conceptuales de los términos y seguido las definiciones conceptuales y operacionales de las variales. Términos. 1. Trastornos del Comportamiento Alimentario. Enfermedades psiquiátricas graves, marcadas por alteraciones en el comportamiento, actitudes y la ingestión de alimentos generalmente acompañada de intensa preocupación con el peso o con la forma del cuerpo (American Psychiatric Association, 2000). 2. Salud Pública. El concepto de Salud Pública se ha definido desde múltiples y variadas perspectivas. Acheson (1988) describe la Salud Pública como: “…la ciencia y el arte de prevenir la enfermedad, prolongar la vida y promover la salud mediante los esfuerzos organizados de la sociedad” (p.1). 26 3. Anorexia Nerviosa. Se caracteriza por una imagen distorsionada del cuerpo, el individuo rechaza mantener un peso superior al peso saludable para su altura, lo que motiva la adopción de estrategias inadecuadas para prevenir el aumento de peso, a saber: la actividad física vigorosa y restricción drástica de ingesta de alimentos. Además la Anorexia Nerviosa puede estar asociada también a atracones de comida y/o conductas purgativas denominadas Anorexia del tipo purgativo (American Psychiatric Association, 2000). 4. Bulimia Nerviosa. Se manifiesta por episodios de consumo excesivo de alimentos seguido por conductas compensatorias con el fin de minimizar o eliminar los efectos del exceso a través de purgas, ayuno o ejercicio (American Psychiatric Association, 2000). 5. Trastorno Alimentario No Especificado. Incluyen el trastorno por atracón y otros TCA que no cumplen con los requisitos clínicos de Anorexia Nerviosa o Bulimia Nerviosa. Las personas con atracón tienen episodios de ingesta de comida en la que se consumen grandes cantidades de alimentos en un corto periodo, junto con la ausencia de conductas compensatorias inadecuadas y la sensación de ansiedad, depresión y culpa después de comer en exceso (American Psychiatric Association, 2000). 6. Clorosis. Anemia producida por la falta de hierro en los glóbulos rojos de la sangre, que afecta a las jóvenes y que se caracteriza por causar trastornos menstruales y otros síntomas nerviosos y digestivos (Bynum, 1987). Variables 1. Ebriorexia. Práctica de restringir la ingesta de calorías para consumir más alcohol sin aumentar de peso (CBS New, 2008; Kershaw, 2008; Smith, 2008). En este estudio se utiliza el término de trastorno o desorden al referirse a la Ebriorexia. El análisis se lleva a 27 cabo a través de la revisión de investigaciones realizadas en diferentes países y Puerto Rico en los últimos 12 años. 2. Síntomas. Fenómeno revelador de una enfermedad. Indicio de algo que está sucediendo o va a suceder (Real Academia Española, 2001). Los síntomas producto del TCA diagnosticado como Ebriorexia se identifican de acuerdo con los efectos en la conducta presentados en los estudios realizados en los diferentes países y Puerto Rico durante los últimos 12 años. 3. Psicoterapia. Tratamiento de trastornos emocionales o mentales a través del uso de técnicas psicológicas diseñadas para fomentar la comunicación y solución de conflictos con el objetivo de lograr un crecimiento personal y modificación de la conducta (The American Heritage Stedman’s Medical Dictionary, 2002). Las técnicas psicoterapéuticas utilizadas en el tratamiento de la Ebriorexia se identifican a través de la revisión de estudios realizados en el tema por diferentes autores en diferentes países y Puerto Rico durante los últimos 12 años. 28 CAPÍTULO II METODO Introducción La actividad investigativa requiere, según lo establece el método científico, definir el proceso a ser implementado para llevar a cabo un estudio (Villeneuve Román, 2004). A estos efectos, el problema de investigación consiste en explorar y describir a través de diferentes estudios realizados en distintos países, incluyendo a Puerto Rico, formas de intervención psicoterapéutica para el manejo del desorden alimentario definido como Ebriorexia en los últimos doce años. Las cuatro preguntas de investigación formuladas están dirigida a conocer: 1) ¿Cuáles son las técnicas de intervención psicoterapéuticas utilizadas en el manejo del desorden alimentario de la Ebriorexia en los últimos doce años?, 2) ¿Qué factores psicológicos y fisiológicos identifican y definen el origen del desorden de Ebriorexia según las investigaciones realizadas en los últimos doce años?, 3) ¿Cuáles son los síntomas psicológicos y fisiológicos que identifican y definen la condición de Ebriorexia de acuerdo con los hallazgos en las investigaciones de los últimos años revisadas? y, 4) ¿Que implicaciones tiene el Trastorno de la Ebriorexia en la conducta de la persona? En este capítulo se describe el diseño de investigación, la selección de la población y la muestra. También se describe en qué consiste el instrumento para recopilar datos e información, validación de la información, procedimiento a seguir para localizar e identificar la información requerida y el tipo de análisis para la interpretación y presentación de resultados. 29 Diseño de investigación El diseño de investigación para realizar este estudio responde al meta-análisis. Por cuanto, el proceso metodológico del meta-análisis se fundamenta en la revisión y análisis de los hallazgos de distintos estudios a los fines de integrar datos que ofrezcan nuevos resultados, mayor conocimiento y evidencia científica. El meta-análisis fue descrito por el epidemiólogo clínico y bioestadístico Jenicek (1989) como una evaluación y análisis cualitativo y cuantitativo mediante el cual se logra la síntesis y la integración estructurada de información que se obtiene de los resultados médicos de diferentes fuentes informativas o de estudios independientes acerca de un mismo tema. Descripción de la población y selección de la muestra La población en este estudio resultan ser los documentos de investigaciones presentados en las revistas profesionales, informes de estudios no publicados, tesinas, tesis de maestría y doctorado de diferentes países y Puerto Rico que fueron realizados utilizando los conceptos de Ebriorexia y Desórdenes de la Conducta Alimentaria. Dada la amplitud y el alcance en términos de países y los años cuando fueron realizados los estudios, se seleccionó una muestra intencionalmente de la población de interés (Villeneuve Román, 2004). A estos efectos, se seleccionan estudios realizados en los Estados Unidos, Europa, Latinoamérica y Puerto Rico. El criterio de la selección para los países es el acceso y la disponibilidad de la información de investigaciones realizadas que utilizaron los conceptos de Ebriorexia y Desórdenes de la Conducta Alimentaria dentro de un cohorte de 12 desde el año 2002 al 2014. Descripción del instrumento de investigación El instrumento para recopilar la información y los datos específicos para este 30 estudio es la libreta de anotaciones o bitácora (Hernández Sampieri, Fernández Collado y Baptista Lucio, 2006). En este instrumento se resume la información de cada investigación seleccionada que forma parte del meta-análisis. En específico, se anota la referencia del autor, año, título del estudio, lugar donde se llevó a cabo, participantes, detalles metodológicos, hallazgos vinculados con el origen, síntomas y técnicas de intervención del Trastorno de la Conducta Alimentaria conocido como Ebriorexia para, finalmente lograr establecer las conclusiones y recomendaciones. Proceso de validación La técnica para la validar la información se obtendrá mediante la revisión de diferentes fuentes documentales conocida como triangulación de datos (Denzin, 1978). La triangulación de información cumple con el objetivo de explorar, analizar y establecer credibilidad de la misma. Por consiguiente, presupone su confiabilidad (Hernández Sampieri, et al., 2006). Arias Valencia (1999) indica que el modelo de triangulación de datos es una técnica que fue utilizada originalmente en los círculos de la navegación que consistió en anotar múltiples puntos de referencias para localizar una posición desconocida. La autora refiere que Campbell y Fiske en 1959 fueron los autores a quienes se les atribuyó el ser los primeros en aplicar la triangulación de datos a la investigación. De acuerdo con la técnica de triangulación de datos, la información en un mismo tema se corrobora a través de tres fuentes o medios diferentes. En este contexto, los resultados cuantitativos y cualitativos deben converger y llegar a conclusiones similares; razón por la cual se busca la convergencia como punto crucial para el análisis (Lowe y Ryan-Wenger, 1992). En este estudio, las tres estrategias utilizará para recopilar los datos incluirá: 31 1. Revisión de la literatura que ha sido publicada en libros de texto, revistas profesionales e informes en los conceptos de Ebriorexia y Desórdenes de la Conducta. 2. Investigaciones publicadas en revistas profesionales llevadas a cabo en Estados Unidos, Europa, Latinoamérica y Puerto Rico. 3. Estudios de grado, tesinas y/o tesis de maestría y/o doctorales, presentados en las instituciones universitarias en Puerto Rico que se encuentran en las bibliotecas del país y de universidades en los Estados Unidos y Latinoamérica que se encuentran incluidas en el sistema electrónico o Internet. Procedimiento El procedimiento para localizar e identificar la información pertinente al tema de intervención terapéutica para el manejo de la Ebriorexia representaran el plan de trabajo. A estos efectos, se procederá a acceder información a través de medios electrónicos tales como: Academic Search Complete, Medline, PsycArticles y Eric Education Resource Information Center. A su vez, se visitarán distintas bibliotecas tales como: la Universidad de Puerto Rico, Universidad Interamericana (Recinto Metropolitano), Universidad Metropolitana (Recintos de Cupey y del Turabo) y la Universidad Carlos Albizu. Por cuanto, se establecerá un calendario en el cual se programará cada actividad por etapas. En síntesis, el procedimiento incluye lo siguiente: 1. Revisión de la literatura. 2. Identificación de investigaciones y estudios de grado: tesinas y tesis de maestría y doctorado. 3. Resumen y análisis de información. 4. Redacción de resultados. 32 Análisis cualitativo y cuantitativo En la interpretación de la información se aplicará el análisis de contenido (Berelson, 1971). Este análisis permitirá la descripción objetiva, sistemática y crítica del contenido de la información y los datos de las investigaciones revisadas. En términos cuantitativos se procederá a ordenar cronológicamente por fechas, frecuencias y otras medidas de base numérica en tablas y/o gráficas, según fuese requerido, a los efectos de establecer tendencias, perfiles y/o comparaciones. A partir de este análisis se contestarán las preguntas de investigación y el problema planteado. 33 CAPÍTULO III RESULTADOS Introducción El problema investigado estuvo dirigido a explorar y describir a través de diferentes estudios realizados en distintos países, incluyendo Puerto Rico, formas de intervención psicoterapéuticas para el manejo del trastorno alimentario definido como Ebriorexia. El método para obtener la información corresponde al diseño de investigación de meta-análisis (Jenicek, 1989). A la luz de la revisión documentada, los resultados del análisis de contenido realizado incluye la presentación de 24 estudios en total llevados a cabo entre los años 2002 al 2013 en el tema de la Ebriorexia. Fueron seleccionados por disponibilidad estudios realizados en los Estados Unidos, Latinoamérica, Europa y Puerto Rico dado que resultaron ser los de mayor acceso. El análisis de cada estudio realizado en los países de referencia responde a las preguntas de investigación formuladas. Las preguntas leen como siguen: 1) ¿Cuáles son las técnicas de intervención psicoterapéuticas utilizadas en el manejo del desorden alimentario de la Ebriorexia en los últimos diez años?, 2) ¿Qué factores psicológicos y fisiológicos identifican y definen el origen del desorden de Ebriorexia según las investigaciones realizadas en los últimos diez años?, 3) ¿Cuáles son los síntomas psicológicos y fisiológicos que identifican y definen la condición de Ebriorexia de acuerdo con los hallazgos en las investigaciones de los últimos años revisadas? y 4) ¿Que implicaciones tiene el Trastorno de la Ebriorexia en la conducta de la persona? A continuación se presentan consecutivamente los estudios llevados a cabo en los Estados Unidos, Latinoamérica, Europa y Puerto Rico. Estos estudios están organizados 34 cronológicamente por cada lugar de procedencia; esto es, del estudio más antiguo al más reciente año 2013. Estudios realizados en los Estados Unidos Peralta (2002) de la Universidad de Akron en Ohio realizó un estudio titulado, Alcohol use and the fear of weight gain in college: Reconciling two social norms. El mismo estuvo dirigido a explorar la relación entre las conductas relacionadas a realizar dietas, la imagen corporal y el uso de alcohol. La metodología utilizada en la recopilación de la información fue de naturaleza cualitativa con el objetivo de obtener información de primera mano para entender los mecanismos socio-culturales asociados al consumo de alcohol entre los estudiantes universitarios. A tales efectos, se empleó la técnica de la entrevista semi estructurada para explorar el sentir y las vivencias de los estudiantes. La misma incluyó una guía de 12 preguntas abiertas. La muestra del estudio estuvo constituida por 78 estudiantes universitarios subgraduados distribuidos en 37 féminas y 41 varones. Los resultados demostraron una evidente relación entre el uso de alcohol y las conductas relacionadas con la dieta. La narrativa del estudiantado reveló cómo las presiones socioculturales hacia el uso de alcohol se entrelazan y son ajustadas a los estándares de belleza y con los esfuerzos para cumplir con la norma dominante para estar saludables. A estos efectos, los estudiantes (hombres y mujeres) expresaron bastante preocupación y ansiedad respecto al contenido calórico del alcohol como para adoptar conductas relacionadas a una dieta con varios niveles de severidad para controlar y evitar aumentar de peso. En conclusión, la investigación evidenció que los patrones de alimentación se 35 alteran con el consumo de alcohol a los efectos de mantener una imagen corporal de acuerdo a la norma sociocultural establecida (delgadez). En este aspecto, también se evidenció que se alteran las preferencias en el consumo de alcohol, el uso de ejercicios y la purga autoinducida con el propósito de evitar aumentar de peso. En el estudio, el investigador no relaciona los desordenes alimentarios por consumo de alcohol con el Trastornos de la Ebriorexia. De igual forma, no se evidencia que se haya administrado o recomendado algún tratamiento psicoterapéutico a los participantes. Larimer y Cronce (2002) de la Universidad de Washington realizaron un estudio titulado, Identtification, prevention and treatment: A review of individual-focused strategies to reduce problematic alcohol consumption by college students. El mismo estuvo dirigido a revisar y evaluar la literatura existente relacionada a la prevención y enfoques de tratamiento para el consumo de alcohol entre los estudiantes universitarios. Los investigadores analizaron un total de 30 estudios; lo cual evidenció una participación global de 3,635 personas. Los estudios comprendieron un periodo de 15 años desde el año 1984 al 1999. Sin embargo, del análisis se desprende que una minoría de estos estudios utilizaban un método confiable. También se evidenció que existe poca documentación acerca de la utilidad de los programas educativos y de concienciación respecto al consumo de alcohol entre los universitarios; incluyendo los enfoques con base informativa y clarificación de valores. No obstante, el programa conocido como Prime for Life incluyó unas guías de reducción de riesgo fundamentadas en los factores de riesgo personales, además de la información general con lo cual pretendía aumentar la eficacia de las intervenciones. Los investigadores concluyeron que el apoyo a los enfoques de clarificación de 36 valores y normativas de educación para la prevención y los tratamientos relacionados con el consumo de alcohol son mixtos. En este aspecto, la mayoría de los enfoques de prevención (información y educación) utilizados en los centros universitarios carecen de apoyo empírico y utilizan enfoques teóricos débiles. No obstante, son los que más frecuentemente se utilizan. Las intervenciones terapéuticas para el desarrollo de destrezas (auto monitoreo y auto evaluación) demostraron ser más efectivas en la reducción de consumo de alcohol cuando se compara con las intervenciones informativas. La entrevista motivacional breve demostró resultados positivos cuando se administró en varios contextos como en Salas de Emergencias médicas, centros de consejería, fraternidades, ambiente escolar y estudiantes universitarios. Los investigadores recomiendan que los programas dirigidos a reducir la problemática de consumo de alcohol entre los estudiantes universitarios deben incorporar enfoques con intervenciones breves, motivacionales o dirigidas al desarrollo de destrezas y habilidades. Lloyd-Richardson, Lucero, DiBello, Jacobson y Wing (2008) publicaron un estudio desde la Universidad de Dartmouth Massachusetts titulado, The relationship between alcohol use, eating habits and weight change in college freshmen. Este estudio tuvo como propósito ampliar el conocimiento para entender mejor cómo el consumo de alcohol en los estudiantes universitarios afecta los patrones de alimentación y los cambios en el peso corporal antes, durante y después de consumir alcohol. La muestra de participantes fue de 282 estudiantes de primer año que acostumbran ingerir bebidas alcohólicas. De este total, participaron 172 féminas y 110 varones. La recopilación de la información fue obtenida a través de los siguientes instrumentos: 37 1. Eating and Alcohol Use Questionnaire (EAUQ) desarrollada por los investigadores para evaluar la actividad de consumo de alcohol. 2. Alcohol Use Disorders Identification Test (AUDIT) desarrollada por Saunders en el 1993. 3. Medidas Antropométricas De acuerdo con el análisis de los datos, el 75% (n=211) de la muestra informó haber consumido alcohol. No obstante, el 65% (n=183) de estos fueron categorizados como tomadores de bajo riesgo y el 35% (n=98) de riesgo moderado. Sin embargo, el 66% del total (n=282) no estaba consciente del contenido calórico de las bebidas alcohólicas que consumían típicamente. Entre los tomadores de riesgo moderado el apetito aumentó después de ingerir alcohol; promoviendo una sobrealimentación y una selección inadecuada de alimentos. A tales efectos, los tomadores de riesgo moderado reflejaron un aumento en el Índice de Masa Corporal (IMC) durante el primer semestre. La proporción de individuos que estaban en sobrepeso y obeso al final del segundo semestre evidencia una tendencia de que los tomadores de riesgo moderado eran más propensos a estar en sobrepeso. Los resultados del estudio demostraron que el consumo de alcohol influye de forma significativa en los patrones o hábitos alimentarios de los estudiantes universitarios de primer año a pesar de que los investigadores durante el estudio no aluden en ningún momento o formato a la presencia del Trastorno de la Ebriorexia. Los investigadores recomendaron realizar estudios dirigidos a examinar programas de intervención aunque no se aplicó tratamiento alguno para el control de peso saludables a los efectos de 38 disminuir la prevalencia de conductas riesgosas como resultado del consumo desmesurado de alcohol. Heidelberg y Correira (2009) realizaron un estudio titulado, Dieting behavior and alcohol use behaviors among National Eating Disorders Screening Program Participants. El mismo estuvo dirigido a corroborar la hipótesis de que existe una relación entre conductas relacionadas al proceso de realizar dieta y el consumo de alcohol. La muestra de participantes fue de 70 personas pertenecientes a universidades de los Estados Unidos que formaron parte del Programa Nacional de Detección de Trastornos Alimentarios (PNDTA). A tales efectos, la muestra seleccionada incluyó estudiantes subgraduadas de 19 años o más. El procedimiento llevado a cabo para comprobar la hipótesis consistió en hacerles partícipes de las actividades del Programa el cual incluía entrega de material educativo relacionado a los trastornos alimentarios, medidas de detección y participar de una breve reunión con un médico como medida de orientación sin entrar en un proceso psicoterapéutico como tal. El estudio estuvo fundamentado por varios enfoques teóricos para explicar el patrón de comorbilidad. Entre estos enfoques se encuentra el planteamiento presentado en el 2000 por Stewart, Angelopoulos, Baker y Bolan. Según los autores la desregulación sugiere que la comorbilidad entre dietas y el uso de alcohol es el resultado de una disfunción general en la regulación conductual del individuo. De igual forma, Krahn, Kurth, Gomberg y Drewnowski en el 2005 plantearon al respecto que mientras más disfuncional sea la conducta relacionada a las dietas con las cuales está comprometido el individuo, más alta será la probabilidad de que se involucre en un uso riesgoso de alcohol. 39 Los resultados demostraron que el someterse a un régimen dietario exacerba la relación positiva entre el uso de alcohol y los problemas relacionados al mismo. Por consiguiente, surge un rango amplio de conductas negativas para la salud que incluyen trastornos alimentarios, depresión y ansiedad. Sin embargo, los investigadores no vinculan directamente la relación del consumo de alcohol y el régimen dietario que adoptan estos jóvenes. De igual forma, el análisis corroboró que los individuos con trastornos alimentarios están en un riesgo elevado de experimentar trastornos del ánimo, abuso de sustancias controladas y trastornos de personalidad. En conclusión, la investigación evidenció que las conductas relacionadas a la restricción de alimentos como parte de un régimen dietario esta asociado con un aumento en el riesgo de uso y abuso de alcohol. En síntesis, los investigadores indicaron que los eventos de detección que incluyen la administración de pruebas diagnósticas, material educativo y asistencia médica ayudan a identificar a los estudiantes que pueden presentar un rango de conductas negativas para la salud. Giles, Champion, Sutfin, McCoy y Wagoner (2009) realizaron un estudio titulado, Calorie restriction on drinking days: An examination of drinking consequences among college students. El estudio tuvo como propósito: 1) identificar la prevalencia del consumo de alcohol y las razones para restringir las calorías en los días que se ingiere alcohol, 2) determinar si la restricción de calorías en días de ingesta de alcohol está asociada con la frecuencia en que el estudiante se embriaga y 3) comprobar si los individuos que restringen las calorías en días de consumo de alcohol experimentan consecuencias mayores. La muestra del estudio quedó constituida por 4,271 estudiantes universitarios 40 subgraduados de 10 universidades (8 públicas y 2 privadas) en Carolina del Norte luego de circular una invitación a participar en el estudio. La información fue recopilada mediante varios cuestionarios enviados vía correo electrónico. A estos efectos, se utilizaron los siguientes instrumentos: 1. College Drinking Survey (web-based) 2. Core Institute Drug and Alcohol Survey 3. Yough Survey (utilizado en el National Evaluation of the Enforcing Underage Drinking Laws Program 4. CDS’s Youth Risk Behavior Survey El análisis demostró que un 67% (n=2,861) de los estudiantes habían ingerido alcohol durante los 30 días previos a enviar los cuestionarios electrónicamente. De ese total, el 39% (n=1,115) restringió el consumo de comidas altas en grasa y calorías. Se evidenció, que como consecuencia de la restricción de alimentos las probabilidades de embriaguez en una semana típica fueron mayores. También se encontró que las mujeres que limitaban su ingesta calórica eran más propensas a perder la memoria, ser lastimadas o ser blanco de actividades sexuales riesgosas mientras consumían alcohol y los hombres eran más propensos a involucrarse en peleas físicas. Dado los resultados, estos investigadores concluyeron que los individuos que adoptan la práctica de la Ebriorexia tienen un efecto embriagante más pronunciado en comparación con aquellos tomadores que no se comprometen en prácticas extremas para controlar el peso. En este aspecto, el estudio proveyó información importante para los educadores universitarios que buscan reducir esta peligrosa práctica. Ante este dato, los investigadores señalaron que los educadores deben estar conscientes y considerar que 41 muchos de los conflictos de los universitarios con el consumo de alcohol se debe a su deseo de mantener un aspecto físico particular. En este sentido, recomendaron que los educadores promoviesen como parte del currículo los buenos hábitos alimentarios para reducir o eliminar en los estudiantes universitarios el riesgo de desarrollar la Ebriorexia. El estudio no evidenció que los participantes recibiesen algún tipo de tratamiento psicoterapéutico para manejar la condición de Ebriorexia. Burke, Cremeens, Vail-Smith y Woolsey (2010) realizaron un estudio titulado, Drunkorexia: Calorie restriction prior to alcohol consumption among college freshman. El objetivo de este estudio fue evaluar la frecuencia de alteraciones alimentarias, en específico, la restricción de ingesta calórica en días donde el consumo de alcohol es excesivo. Los participantes del estudio debían cumplir con los siguientes criterios: ser estudiantes universitarios de primer año y haber ingerido alcohol 30 días previos a la administración del cuestionario. El procedimiento llevado a cabo consistió en administrar un cuestionario a través de la red cibernética a los estudiantes de una Universidad de la región del sudeste de los Estados Unidos, matriculados en el curso de Salud Personal. Los estudiantes completaban el mismo a su conveniencia, en horario fuera de clase con el incentivo de obtener crédito adicional. De los 2,005 estudiantes matriculados 1,349 completaron el cuestionario y sólo 692 cumplían con el criterio requerido para el estudio. El cuestionario administrado incluyó un total de 20 preguntas relacionadas con los datos personales, demográficos y tres preguntas referentes al uso de alcohol. Los resultados evidenciaron que 97 de los 692 (14%) estudiantes informaron restringir las calorías previos a la ingesta de alcohol. De este total, el 6% (n=41) indicó 42 recurrir a esta conducta, en específico, para evitar ganar peso y un 10% (n=69) indicó que restringían la ingesta de calorías para aumentar los efectos del alcohol. No se hallaron diferencias significativas en los resultados obtenidos entre hombres y mujeres. Además, los resultados revelaron que más del 75% (n=519) de la población (n=692) de estudiantes de primer año informó que esporádicamente ingerían alcohol de forma excesiva. Los investigadores comprobaron que existe un aumento en la cantidad y frecuencia en que los estudiantes universitarios de primer año ingieren alcohol. Sin embargo, concluyeron que la incidencia del problema de Ebriorexia no es tan extenso como se plantea a través de los medios de comunicación masiva que aluden a la Ebriorexia como un problema significativo para justificar su propio diagnóstico seudo médico. Los investigadores llegaron a la conclusión, dadas las razones que expusieron los estudiantes para explicar o justificar la ingesta de bebidas alcohólicas, que el consumo desmedido de alcohol en esta población era una conducta negativa copiada para manejar las presiones de la vida universitaria, la carga académica, el estrés financiero y el enfrentar una nueva independencia. De acuerdo con los resultados, los investigadores explicaron que la Ebriorexia era un asunto de salud de relevancia aunque no fuese extenso debido a que esta conducta aumenta la toxicidad del alcohol, ocasiona enfermedades, daños al cerebro y al organismo en general. También indicaron, que el alcohol promueve la filtración de vitaminas y nutrientes lo cual tiene como consecuencia una deficiencia nutricional. En el estudio no se observó que se auscultase formas de tratamiento para manejar la condición de la Ebriorexia. Stover (2011) publicó un estudio titutlado, Drunkorexia and eating up the media. Tuvo como propósito utilizar el análisis retórico y el discurso para desarrollar una 43 definición de Ebriorexia como un nuevo fenómeno entre los estudiantes universitarios. La metodología utilizada incluyó el análisis de diferentes expresiones emitidas a través de los medios de comunicación masiva tales como: prensa escrita, medios televisivos, radio e internet acerca del término. Luego de un proceso de recopilación de información respecto a las interpretaciones y definiciones vertidas en los medios de comunicación al público, el investigador indicó que aunque la Ebriorexia es una palabra nueva aparenta ser un término claramente entendido entre las personas que están familiarizadas con el mismo. A su vez, los resultados evidenciaron que existen discrepancias en cómo se origina la Ebriorexia. Al respecto encontró que algunos medios de comunicación planteaban que la condición se originaba como resultado de las presiones de pares y otros indicaban que la baja autoestima influía en el desarrollo de la Ebriorexia. De acuerdo con las recomendaciones, el investigador enfatizó en la necesidad de conducir investigaciones para conocer de manera más objetiva y científica las causas y efectos de la condición de la Ebriorexia y desarrollar programas dirigidos a la prevención. Según el investigador los riesgos a la salud asociados con esta conducta han sido identificados como peligrosos; por lo que se hace necesario y pertinente determinar la cantidad de personas que requieren tratamiento. Sin embargo, no se encontró, que mencionase algún tipo de psicoterapia o tratamiento para tratar la condición clínicamente. Barry y Piazza-Gardner (2012) llevaron a cabo un estudio titulado, Drunkorexia: Understanding the co-ocurrence of alcohol consumption and eating/exercise weight management behaviors. Este estudio tuvo como propósito examinar la relación entre el consumo de alcohol, la actividad física y los trastornos de la conducta alimentaria desde la perspectiva de la Ebriorexia. La muestra de participantes fue una nacionalmente 44 representativa de 22,488 estudiantes universitarios que completaron la Evaluación Nacional de Salud para Universitarios de otoño 2008 (American College Health Association’s 2008 National College Health Assessment - ACHA-NCHA). A estos efectos, la muestra incluyó estudiantes de 40 universidades públicas y privadas a través de los Estados Unidos y aquellas que ofrecen programas a nivel graduado y de licenciatura. En específico, el NCHA recopiló información acerca de conductas y condiciones de salud del estudiantado universitario vinculadas con el abuso de alcohol y sustancias ilícitas, hábitos alimentarios, actividad física sexual y salud mental. Una vez completada la encuesta se analizó la información creando resúmenes ejecutivos e informes de grupos de referencia conjunta de información agregada. A su vez, se procedió a realizar un análisis de regresión estadística. La variable dependiente fue el consumo excesivo de alcohol. Los resultados indicaron que la mayoría de los participantes no eran tomadores excesivos; siendo un 33% (n=7,421) de la muestra los que consumieron cinco tragos o más de bebidas alcohólicas en un periodo de dos semanas. Un porcentaje mayor de la muestra (76%; n=17,090) realizaron modalidades diversas de actividad física que fluctuaron desde una intensidad moderada a una vigorosa. A estos efectos, un 52% (n=11,693) llevaron a cabo ejercicios para perder peso y un porciento menor (38%; n=8,545) incurrió en conductas compensatorias (uso de laxantes, vómito inducido y pastillas dietéticas) para lograr la alcanzar su peso ideal. En este aspecto, los estudiantes universitarios físicamente activos y aquellos que realizan ejercicio vigorosos eran más propensos a consumir alcohol en exceso y presentar alteraciones en sus hábitos alimentarios en comparación con sus pares no activos y aquellos que se ejercitaban con poca frecuencia. 45 En conclusión, los investigadores evidenciaron que niveles altos de actividad física (intensidad vigorosa y entrenamiento de resistencia) se relacionaba positivamente con el consumo de bebidas alcohólicas. A su vez, concluyeron que la relación entre la actividad física y los trastornos de la conducta alimentaria son predictores del consumo excesivo de alcohol entre los estudiantes universitarios. La investigación establece que la perspectiva de la Ebriorexia sirve como una incursión para explicar por qué los tomadores de alcohol son más activos físicamente en comparación con sus pares que no consumen bebidas alcohólicas. A tales efectos, la actividad física es utilizada como conducta compensatoria y de contrapeso por el consumo elevado de calorías en las bebidas alcohólicas y su efecto negativo a la salud. El estudio no presenta, ni sugiere la implementación de terapias o tratamientos para manejar o contrarrestar el consumo de alcohol y las alteraciones en los hábitos alimentarios. Bryant, Darkes y Rahal (2012) desde una Universidad en Tampa Florida investigaron la conducta de estudiantes universitarios en respuesta a la ingesta de calorías provenientes del consumo de alcohol. A tales efectos, se exploraron los diferentes patrones de comportamiento, la frecuencia y severidad de las conductas y la combinación de estos comportamientos. El estudio fue titulado, College students’ compensatory eating and behaviors in response to alcohol consumption. La muestra de participantes fue de 274 estudiantes subgraduados matriculados en cursos de psicología que consumían bebidas alcohólicas. De éstos, 223 de los participantes fueron féminas y 51 varones. En la recopilación de los datos se administró un cuestionario en línea respecto a las conductas empleadas dirigidas a compensar las calorías consumidas en alcohol, embriagarse más efectivamente, sus motivaciones para adelgazar, trastornos alimentarios 46 y la creencia en un mundo justo. Luego de los análisis correspondientes, los resultados demostraron que los participantes recurren a la práctica de ejercicios y restricción de ingesta calórica como estrategia de control de forma proactiva y reactivamente durante el consumo de bebidas alcohólicas. Las conductas compensatorias más severas y poco sanas utilizadas fueron los diuréticos, laxantes, uso de pastillas dietéticas y purga. Por otra parte, el estudio evidenció que las mujeres demostraron ser más propensas en adoptar conductas alimentarias disfuncionales y estrategias para aumentar el efecto del alcohol en comparación con los hombres. A su vez, encontraron que los estudiantes que vivían con amigos eran más propensos a involucrarse en conductas compensatorias disfuncionales debido al consumo de alcohol comparado con estudiantes que vivían solos o con otros estudiantes universitarios desconocidos. Se encontró que los estudiantes restringían el consumo de alimentos, por un lado lo hacían para economizar dinero y comprar más bebidas alcohólicas y por otro lado para aumentar el efecto del alcohol y estar más intoxicadas porque al tener el estómago vacío el nivel de etanol en la sangre aumenta. También el estudio evidenció que el nivel de tolerancia al alcohol aumentaba en la medida que aumentaba la ingesta de bebidas alcohólicas. El investigador concluye que los estudiantes universitarios exhiben un rango de conductas compensatorias en respuesta a las calorías consumidas a través de las bebidas alcohólicas. Además señala que, los hallazgos tienen implicaciones importantes para crear iniciativas enfocadas en la salud de los universitarios. Recomendó que las autoridades y funcionarios en los centros de consejería de las universidades y de servicios de salud deben dirigir esfuerzos para manejar el problema relacionado a ingesta de alcohol, conductas alimentarias, factores cognitivos y sociales como la presión de pares. 47 Otra de sus recomendaciones estuvo dirigida a los padres como agentes protectores; indicando que estos padres hiciesen arreglos de vivienda con otro familiar y no en residencias comunales. Planteó, como parte de sus recomendaciones, que se debe tomar en cuenta en la aplicación psicoterapéutica el enfoque cognitivo conductual para motivar conductas positivas relacionadas al consumo de alcohol. Dierks (2013) desde la Universidad de Miami llevó a cabo un estudio que abarcó la región del medio oeste de los Estados Unidos. El estudio se tituló: A risky cocktail: An examination of drunkorexia behaviors and alcohol consumption based on gender. El mismo estuvo dirigido a examinar la relación entre la conducta de ingerir alcohol entre los estudiantes universitarios y sus conductas relacionadas a la Ebriorexia de acuerdo con el género con el propósito de aportar y ampliar la literatura existente en torno a este trastorno alimentario. La selección de la muestra y distribución de la encuesta se llevo a cabo mediante la técnica de muestreo de bola de nieve y muestra de conveniencia. A estos efectos, se envió una invitación a los diferentes grupos. Finalmente, participaron en la investigación 254 estudiantes universitarios. De este total 70% (n=178) fueron féminas y el restante 30% (n=76) fueron varones. La información del estudio se obtuvo a través de la administración de una encuesta en línea. De acuerdo con los resultados un 94% (n=239) de los participantes consumió bebidas alcohólicas y un 2% (n=5) indicaron haber recibido tratamiento para manejar un trastorno alimentario. Se evidenció que existe una diferencia por género; siendo los hombres los que tienen un mayor consumo de bebidas alcohólicas. Sin embargo, no se identificó una diferencia significativa al correlacionar el consumo de alcohol con el 48 trastorno de Ebriorexia. El estudio alude a que la frecuencia en el consumo de alcohol por los estudiantes puede llegar hasta tres noches por semana; lo que implica que los universitarios ingieren alcohol durante las noches que cursan estudios. El número promedio de tragos consumidos en una ocasión típica es de cinco o más para los hombres y cuatro o más para las mujeres; lo cual demostró que los participantes ingieren bebidas alcohólicas de forma excesiva. En conclusión, la investigación evidenció que existe una diferencia significativa en el consumo de alcohol entre géneros; siendo los hombres quienes tienen un mayor consumo. Según el investigador, los hombres exhibieron más conductas relacionadas con la Ebriorexia contrario a lo establecido por la literatura y en los resultados de otras investigaciones. Entre las recomendaciones se indicó la necesidad de realizar más investigaciones dentro del campo de la Ebriorexia y el consumo de bebidas alcohólicas de forma que se logren realizar correlaciones entre los distintos comportamientos que adoptan hombres y mujeres. Buenger (2013) realizó un estudio titulado, Drinking your way to success? Discovering the correlation between academic major and drunkorexic tendencies. Este estudio tuvo como propósito analizar la forma en que las especializaciones académicas influyen en las conductas relacionadas al Trastorno de Ebriorexia. Las especializaciones académicas con mayor representación fueron Educación, Ciencias Sociales, Humanidades y Ciencias Naturales. La información fue recopilada mediante la administración de un cuestionario a un total de 254 estudiantes de una universidad del sur del estado de Ohio; distribuidos entre 178 féminas y 76 varones. Los estudiantes participaron de forma voluntaria mediante invitación enviada por computadora (en línea). 49 El cuestionario distribuido incluyó tres preguntas concernientes a la frecuencia y cantidad de bebidas alcohólicas consumidas. La escala de Ebriorexia fue desarrollada por Burke y examinó el tipo y frecuencia de las conductas de los participantes que restringían las calorías en los días que comprometían para ingerir alcohol. Además, la escala evaluó la tendencia de los participantes a ejercitarse para compensar el exceso de calorías liquidas en su organismo. El estudio y las preguntas del cuestionario estuvieron fundamentadas en el Modelo Transteórico o emergente. Posterior a los análisis estadísticos llevados a cabo, los resultados demostraron que no se encontró una correlación significativa entre la mayoría de las especializaciones académica y la conducta de Ebriorexia. No obstante, la correlación entre el consumo de bebidas alcohólicas por especialidad académica fue significativa. También se evidenció que la mayoría de los estudiantes estaban satisfechos o casi satisfechos con su peso actual aunque consumían alcohol. Un 89% (n=226) del estudiantado admitió haber consumido al menos una bebida alcohólica. Señaló el investigador que los participantes ingirieron al menos entre cuatro a siete bebidas embriagantes en un promedio de dos a tres días por semana. Las concentraciones en las especializaciones académicas donde los estudiantes demostraron un consumo mayor de alcohol fueron Administración de Empresas, Humanidades y Educación, las de menor consumo fueron estudiantes de Salud, Ciencias Naturales y Ciencias Sociales. Del estudio no se desprende la aplicación de tratamientos o terapias para manejar tendencias a la condición de la Ebriorexia. El investigador concluye que es esencial entender los factores que contribuyen al Trastornos de la Ebriorexia para crear e implementar estrategias efectivas de prevención. A tales efectos, apuntó en la necesidad de conducir investigaciones dirigidas a explorar 50 las motivaciones que pudieran existir y que inducen al consumo excesivo de alcohol y la restricción calórica. Babiaz, Rose Marie y Brinkman (2013) desde la Universidad de Miami llevaron a cabo un estudio titulado, Examination of drunkorexia, excessive exercising and extreme drinking. A través de este estudio se buscó conocer la relación entre los el consumo extremo de alcohol, ejercitarse en forma excesiva y la Ebriorexia. Se definió el ingerir alcohol de forma extrema como un consumo de alcohol en una cantidad mayor a la que normalmente se ingiere y el ejercicio excesivo como aquel que influye en el peso, figura y tono corporal y conduce al individuo a experimentar sentimientos de culpa cuando el mismo es cancelado o pospuesto. La recopilación de los datos fue llevada a cabo mediante la administración de un cuestionario en línea. Los participantes fueron reclutados a través del método de muestreo de bola de nieve por invitación en línea de listas de listas de servicio y anuncios en los cursos impartidos en la universidad. Finalmente, la muestra de participantes estuvo compuesta por un total de 254 estudiantes; siendo la mayoría féminas (70%; n=178) y en menor proporción los varones (30%; n=76) Los resultados no demostraron una interrelación entre las tres variables del estudio, sin embargo, evidenciaron hallazgos significativos que aportan al área de estudio y pueden ser de gran utilidad en investigaciones futuras. Por ejemplo, los investigadores indicaron que la falta de correlación entre las variables podría deberse a la amplia definición ofrecida en el estudio para el término consumo excesivo de alcohol. Por otra parte, se encontró una correlación significativa entre la Ebriorexia y el ejercitarse de forma excesiva a los efectos de controlar el peso. Los investigadores señalaron que el 51 estudio aporta a la expansión de la literatura al examinar un subtipo de trastorno alimentario identificado como Ebriorexa. En conclusión, la investigación evidenció que no se debe descartar una relación entre la actividad física, el ejercicio excesivo y la Ebriorexia. Indicaron que los adolescentes y adultos jóvenes apelan a la Ebriorexia debido a que pueden consumir grandes cantidades de alcohol mientras mantienen o pierden peso corporal. De igual forma, señalaron que las presiones sociales para mantener un físico ideal y consumir grandes cantidades de alcohol influencian en la población joven adulta llevándolos a recurrir a medidas extremas como la Ebriorexia y la práctica de actividad física excesiva para lograr aceptación entre los pares. En el estudio no se indican formas psicoterapéuticas para el manejo del Trastorno de la Ebriorexia. Scott-Sheldon, Carey, [K.], Elliott, Garey y Carey, [M.] (2014) publicaron un estudio desde las Universidades de Rhode Island, Syracuse y Brown titulado, Efficacy of alcohol interventions for first-year college students: A meta-analytic review of randomized controlled trials. El mismo respondió a un diseño de metanálisis. El estudio fue dirigido a recopilar y revisar investigaciones relacionadas con la eficacia y los componentes de las intervenciones terapéuticas para reducir el consumo de alcohol entre los estudiantes universitarios de primer año. En la investigación no se aborda la Ebriorexia como un trastorno derivado del consumo del alcohol. Sin embargo, los investigadores señalan que durante el primer año los estudiantes universitarios aumentan el consumo de alcohol como resultado de las nuevas libertades que enfrentan y que, a su vez, se caracterizan por el aumento en la exploración de la identidad, entre otros cambios conductuales que ocurren rápidamente. 52 Los investigadores analizaron un total de 41 estudios en los cuales se ofrecieron 62 intervenciones que incluyeron: retrocomunicación personalizada de los problemas y del riesgo en el consumo de alcohol, estrategias de modificación de consumo de alcohol, establecimiento de metas, identificación de situaciones de alto riesgo, adiestramiento de destrezas, ejercicios de balance decisional, clarificación de valores y estrategias de modificación de conducta. A tales efectos, se ofrecieron intervenciones a nivel individual y grupal mediante contacto directo y a través de programas de computadora. Los resultados demostraron que las intervenciones individuales y grupales son efectivas para reducir el consumo del alcohol, sin embargo, en aquellos estudiantes con un consumo elevado de alcohol la intervención individual resultó ser más efectiva para reducir la frecuencia de consumo de alcohol. Las intervenciones terapéuticas con programas de computadora resultaron ser eficientes al igual que las ofrecidas a través de contacto directo. Los investigadores indicaron que utilizar varios componentes de intervención ayuda a reducir la cantidad y frecuencia del uso de alcohol entre el estudiantado. La retrocomunicación personalizada y las estrategias terapéuticas orientadas a la moderación fueron componentes constantes en todos los estudios incluidos en la investigación. Los investigadores concluyeron que las intervenciones terapéuticas conductuales son exitosas para reducir el consumo de alcohol y los problemas relacionados con el consumo de alcohol entre los jóvenes universitarios. Recomiendan que todo estudiante de nuevo ingreso sea evaluado para determinar el riesgo de alto consumo de alcohol y se provea intervenciones terapéuticas proactivas cónsonas con los componentes identificados en este metanálisis. 53 Estudio realizados en Europa Peláez-Fernández, Labrador-Encinas y Raich-Escursell (2004) llevaron a cabo un estudio titulado, Epidemiología de los trastornos de la conducta alimentaria en España: Revisión y estado de la cuestión. El mismo respondió a un diseño de metanálisis y estuvo dirigido a recopilar y revisar estudios epidemiológicos de Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) realizados en España. En este aspecto, el investigador señala que los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA), entre los que se encuentran la Anorexia Nerviosa (AN), Bulimia Nerviosa (BN) y cuadros afines o No Especificados (TCANE), han alcanzado una especial relevancia en las tres últimas décadas. Indicó que estos Trastornos Alimentarios constituyen la tercera enfermedad crónica entre la población femenina adolescente y juvenil en las sociedades desarrolladas y occidentalizadas por la creciente incidencia de diferentes sustancias, tabaco, alcohol, entre otras drogas, por la gravedad de sintomatología y resistencia al tratamiento. De acuerdo con la revisión llevada a cabo, encontraron que en España se habían realizado estudios epidemiológicos en TCA a partir de los años 90. Los investigadores analizaron un total de 21 estudios; lo cual evidenció una participación global de 28,858 personas. Sin embargo, del análisis se desprende que una minoría de estos estudios utilizaban un método confiable para la detección de casos y que solamente se hacía una entrevista diagnóstica según los criterios DSM-IV-TR vigentes durante esa época. Por cuanto, la mayoría de las investigaciones realizadas habían empleado cuestionarios de auto informe para evaluar actitudes en la alimentación, el peso y la figura corporal. Los investigadores concluyeron que existía la necesidad de establecer una cifra de prevalencia de TCA confiable, en específico, de la población en riesgo a desarrollar 54 Trastorno de Conducta Alimentaria. A su vez, indicaron que la mayoría de los estudios analizados carecían de un instrumento para la identificación de casos. A tales efectos, se planteó la necesidad de realizar estudios mas confiables y precisos acerca de la prevalencia del TCA en España. Aunque este estudio no alude directamente a la Ebriorexia incluye una sintomatología que se relaciona con este Trastorno. De igual forma, evidencia el interés de conocer cuáles eran las necesidades terapéuticas, sociales y asistenciales que debían cubrirse para afrontar este tipo de patología. Por otra parte, no se mencionan formas de tratamiento o terapias, sin embargo, plantea que la resistencia a los tratamientos es una de las condiciones que incrementan los trastornos alimentarios. Hagger, Lonsdale y Chatzisarantis (2012) publicaron los resultados del estudio titulado, A theory-based intervention to reduce alcohol drinking in excess of guideline limits among undergraduates students. Los investigadores plantearon como hipótesis que los participantes que reciben simulación mental e implementación de manipulaciones intencionales tendrían un consumo menor de bebidas alcohólicas. Por consiguiente, la actividad investigativa estuvo dirigida a evaluar la eficacia de las dos estrategias psicoterapéuticas de intervención: simulación mental y manipulación de intenciones. Ambas estrategias están dirigidas a reducir el consumo de alcohol en exceso de los límites recomendados en ocasiones individuales entre los estudiantes sub graduados. Los investigadores adoptaron este enfoque para intervenir en dos etapas del proceso de toma de decisiones: la etapa motivación y la etapa de acción voluntaria. Ambas etapas cumplen con el propósito de promover cambios en las conductas relacionadas a la salud. La muestra de participantes fue de 638 estudiantes subgraduados de la Universidad de Nottingham en el Reino Unido. El diseño de investigación fue 55 correlacional en el que se distribuyeron los participantes en dos grupos experimentales y dos grupos control. El primer grupo experimental recibió las estrategias de simulación mental y al grupo de comparación no se le presentaron. El segundo grupo experimental recibió estrategias de manipulación de intensiones y al grupo control no se le presentaron. Cada grupo experimental recibió por correo electrónico el material correspondiente a cada estrategia excepto los grupos de control. Las intervenciones se efectuaron al iniciar el estudio y un mes después de finalizadas las intervenciones. Luego fueron analizadas estadísticamente. Los resultados del análisis demostraron que la administración de estrategias de simulación mental ayudan a reducir el consumo de bebidas alcohólicas; resultando ser más efectiva en los participantes que tenían niveles más altos de consumo de alcohol. A tales efectos, el proceso de simulación tiende a enfocar en el ensayo de acciones voluntarias del comportamiento concreto que acerca a una persona a alcanzar su meta de comportamiento. Estos ensayos tienden a aumentar la autoeficacia y las percepciones de control en el compromiso con el comportamiento, sin embargo, no se obtuvo el mismo resultado implementando estrategias de manipulación de intenciones que se relacionan con las motivaciones. La hipótesis del estudio quedó parcialmente confirmada. El estudio no alude directamente al Trastorno de la Ebriorexia, no obstante, la relevancia del mismo radica en el interés por conocer estrategias de intervención psicoterapéuticas para manejar el consumo excesivo de alcohol. En síntesis, la investigación evidenció que enfocarse en las etapas de acción voluntaria motivacional como parte de las estrategias de modificación conductual tienen un efecto positivo en la reducción del consumo de alcohol en la población estudiada. Los investigadores 56 recomendaron que los psicólogos, profesionales de la salud y servicios de salud en las universidades implementen estas intervenciones de un modo relativamente sencillo y costo efectivo. Knight y Simpson (2013) llevaron a cabo un estudio titulado Drunkorexia: An empirical investigation of disordered eating in direct response to saving calories for alcohol use amongst Australian female university students. El estudio tuvo como propósito analizar conductas que caracterizan el trastorno de Ebriorexia en estudiantes femeninas subgraduadas de una Universidad de Australia. La muestra de las participantes fue de 139 universitarias que evidenciaron estar saludables. Los datos fueron recopilados mediante un cuestionario llamado Compensatory Eating and Behaviors in Response to Alcohol Consumption Scale (CEBRACS). Del análisis estadístico de los datos obtenidos a través del instrumento de investigación surge que el 79% (n=110) de las participantes presentaban conductas que resultan ser características de la Ebriorexia tales como la alteración de hábitos alimentarios y el control excesivo del peso. A estos efectos, se encontró una relación positiva entre la ingesta de alcohol en exceso con la norma social de delgadez y la presión normativa del grupo social. Los investigadores concluyeron que estos hallazgos proporcionan evidencia empírica que sirve como preámbulo para el estudio de la Ebriorexia y el desarrollo de implicaciones teóricas y clínicas en el área de la salud y bienestar de las estudiantes universitarias de esa región. En general, el estudio no presenta datos acerca del manejo de la condición de Ebriorexia mediante terapias o tratamientos clínicos. 57 Estudios realizados en Latinoamérica Behar (2004) realizó un estudio en Chile titulado, Consumo de alcohol y trastornos de la conducta alimentaria: Evidencia, similitudes e implicancias. El investigador analizó cinco estudios publicados que relacionaban los Trastornos de la Conducta Alimentaria y los Trastornos por abuso de sustancias; en particular el consumo de alcohol. Esta revisión documental focalizó en el análisis de tres áreas: 1) la presencia de abuso y/o dependencia de alcohol en pacientes con afecciones alimentarias, 2) coexistencia de cuadros alimentarios en pacientes portadores de abuso y/o dependencia de alcohol y, 3) ocurrencia de abuso y/o dependencia de alcohol de familiares de pacientes con patologías en la alimentación. Los resultado del análisis de estos cinco estudios, según el investigador, claramente sugieren que concurren en que existe comorbilidad entre Trastornos de la Conducta Alimentaria y abuso de drogas en las que está incluido el alcohol. Indicó que otro punto de convergencia entre estas cinco investigaciones fue el hecho de que en todos los estudios se plantea que las razones de este fenómeno todavía permanecen oscuras y que la especificidad de esta asociación con otros trastornos psicopatológicos deben ser investigados apropiadamente. En todos los estudios se alude al hecho de que clínicamente se ha relacionado la presencia de insatisfacción corporal y la motivación por la delgadez como la causa para la adopción de conductas que alteran negativamente los patrones o hábitos alimenticios. También encontró, que se señala consistentemente que clínicamente el abuso de alcohol y otras substancias supone un importante riesgo médico que puede llegar a alcanzar proporciones de una amenaza vital, dadas las condiciones nutricionales y metabólicas de estos pacientes. 58 La investigación no alude directamente al Trastornos de Ebriorexia. Sin embargo, el cuadro clínico y sistemático que se presenta en relación a los Trastornos de la Conducta Alimentaria y el consumo de alcohol, forman parte de la triada de conductas relacionadas con el Trastorno de la Ebriorexia. El investigador recomendó que las estrategias terapéuticas deben fundamentarse en el esclarecimiento cuidadoso de la historia longitudinal del consumo de alcohol y otras substancias y sus interacciones temporales sustitutivas y/o compensatorias entre si. Mencionó que se debe decidir la urgencia jerárquica de la terapia dirigida a uno de los dos cuadros o, a uno y otro simultáneamente, considerando principalmente variados factores tales como: la disponibilidad de especialistas, de las condiciones médicas del paciente y de la severidad del consumo de alcohol y/o substancias. El investigador menciona la urgencia e importancia de aplicar terapias dirigidas aunque no profundizó en este aspecto. Londoño y Vinaccia (2005) llevaron a cabo un estudio en Colombia titulado, Prevención del abuso en el consumo de alcohol en jóvenes universitarios: Lineamientos en el diseño de programas costo-efectivos. Este estudio tuvo como propósito identificar los elementos o acciones considerados clave en el desarrollo de programas efectivos y eficaces de prevención del abuso en el consumo de alcohol. El procedimiento llevado a cabo respondió a un diseño de metanálisis y estuvo dirigido a recopilar y revisar estudios durante los últimos diez años acerca de prevención del consumo y abuso de alcohol en los jóvenes. En este aspecto el investigador señala que el consumo de alcohol es uno de los principales problemas de salud pública, siendo el grupo de adolescentes y jóvenes los más afectados. Indicó que aproximadamente el 75% de la población de jóvenes en Colombia consumen alcohol. El consumo de alcohol se asocia a una evitación o 59 afrontamiento de los problemas que vive el joven, la necesidad de interactuar socialmente y ser aceptado, la búsqueda de una mayor potencia sexual y la disminución de la tensión. En la revisión literaria se identificaron diversos factores asociados a las acciones preventivas y efectividad de los programas dirigidos a disminuir el consumo de bebidas alcohólicas. Del análisis se desprende que estos programas deben ser específicos más que universales. Por cuanto, deben incluir métodos de enseñanza centrados en orientar al individuo acerca de cuando, cómo y en qué dirección debe ocurrir el cambio. Por consiguiente, las acciones preventivas deben estar sustentadas en una teoría explicativa del fenómeno que guíe la elección de la estrategia y los aspectos relevantes en lo que hay que intervenir. Indicaron los investigadores que los programas de prevención de consumo de alcohol deben incluir una variedad de métodos terapéuticos de intervención, ser socioculturalmente relevantes y proveer la oportunidad de construir relaciones positivas entre los adultos (maestros, padres y profesionales de la salud). Los investigadores identificaron como predictores de la disminución del consumo de alcohol la información, la toma de decisiones, el compromiso personal en torno a una conducta, el manejo de estrés (estrategias terapéuticas para afrontar situaciones evaluadas como difíciles), las habilidades de resistencia y la autoestima. En síntesis, concluyeron que la formulación de programas de prevención del abuso en el consumo de alcohol dirigida a los adolescentes debe hacerse atendiendo el problema en múltiples niveles incluyendo el máximo de componentes psicosociales y utilizando una metodología terapéutica variada. El estudio no alude directamente a la Ebriorexia. No obstante, incluye información característica del Trastorno de la Ebriorexia y, acerca de la prevención mediante la aplicación de diversos o tipos de estrategias de intervención 60 terapéutica para manejar con mayor efectividad el consumo de alcohol. Díaz Martínez, [A.], Díaz Martínez, [L.], Hernández-Ávila, Narro Robles, Fernández Varela y Solís Torres (2008) realizaron un estudio titulado, Prevalencia del consumo riesgoso y dañino de alcohol y factores de riesgo en estudiantes universitarios de primer ingreso. El mismo estuvo dirigido a evaluar la frecuencia y los factores de riesgo demográficos para el consumo riesgoso y dañino de alcohol en una muestra de estudiantes universitarios mexicanos. La muestra de participantes fue de 15,842 estudiantes del primer año pertenecientes a la Universidad Nacional Autónoma de México. El procedimiento llevado a cabo consistió en administrar una prueba para identificar el trastorno por consumo de alcohol conocido por sus siglas en inglés como AUDIT (Alcohol use Disorder Identification Test). El análisis demostró que en la muestra total así como al separar el grupo en hombres y mujeres se observó que la mayor prevalencia y probabilidad de Consumo Riesgoso y Dañino de Alcohol (CRDA) ocurrió en los estudiantes que informaron estar trabajando. También se observó que la frecuencia y el riesgo de CRDA aumentaba en la medida que aumentaba el número de horas trabajadas semanalmente. A tales efectos, los estudiantes que informaron trabajar 32 horas o más fueron los que experimentaron la mayor probabilidad de ser afectados por el CRDA. Sin embargo, este efecto sólo se detectó, en específico, en los estudiantes del género masculino. Por otro lado, se observó que en la totalidad de la muestra la prevalencia y la probabilidad del CRDA se incrementaba de acuerdo con el ingreso mensual familiar; esto es, a mayor ingresos mensuales en la familia mayor era el riesgo de CRDA. En el total de la muestra, las prevalencias y probabilidad del CRDA también se 61 incrementaron con el número de años de educación del padre. No obstante, en las mujeres el riesgo de ser afectadas por el CRDA fue mucho mayor que en los varones. De manera similar, sólo en las mujeres se detectó un efecto del nivel de educación materna pues el mayor riesgo para el CRDA se observó en aquellas estudiantes que informaron tener una madre con doce o más años de educación. Los investigadores indicaron que se encontró que la probabilidad de CRDA en hombres y mujeres se redujo en los estudiantes que indicaron estar casados. No se observó que otro tipo de parentescos o relaciones de personas con quien los estudiantes residían tuviesen mayor influencia en el riesgo de ser afectados por el CRDA. En cuanto al efecto del alcohol, los investigadores encontraron que debido a que la mujer tienen menor masa y volumen de distribución corporal y menor capacidad para metabolizar el alcohol, al ingerir menos bebidas alcohólicas alcanzan niveles sanguíneos de alcohol y de intoxicación similares al de los hombres. También indicaron que existe una diferencia entre los géneros en cuanto a las consecuencias derivadas del consumo excesivo de alcohol. En general, los hombres tienden a experimentar con más frecuencia consecuencias relacionadas con conductas antisociales (discusiones y violencias) que afectarían al individuo y personas en su entorno. En la mujer es más común observar consecuencias en el ámbito privado y personal (desempeño académico deficiente, actividad sexual no consentida, lagunas mentales, pérdida de la memoria y lesiones autoinfligidas). Los investigadores concluyeron que el consumo riesgoso y dañino de alcohol entre los estudiantes de nuevo ingreso es un problema frecuente que al parecer se relaciona con variables que facilitarían la disponibilidad, el acceso a bebidas alcohólicas 62 y la exposición a actividades de alto riesgo para el consumo. La investigación no alude directamente a la Ebriorexia, sin embargo, los hallazgos son pertinentes debido a que ofrece información respecto a los factores de riesgo en los grupos de jóvenes. En este aspecto, contribuye al diseño de políticas de prevención e intervenciones terapéuticas potencialmente más efectivas en esta población. Cano Correa, Castaño Castrillón, Corredor Zuluaga, García Ortiz, González Bedoya, Lloreda Chala y Lucero Angulo (2007) realizaron un estudio titulado, Factores de riesgo para trastornos de la alimentación en alumnos de la Universidad de Manizales, Colombia. El estudio no alude directamente a las conductas relacionadas a la Ebriorexia, no obstante, contribuye a ampliar el conocimiento acerca del tema del Trastorno de la Conducta Alimentaria (TCA). El diseño de investigación fue de tipo descriptivocorrelacional. La muestra del estudio estuvo constituida por 165 estudiantes universitarios a tiempo completo. Las variables consideradas fueron: edad, género, facultad, seis categorías para identificar el estrato o nivel socioeconómico, antecedentes familiares de tensión arterial, tipo de actividad extracurricular, Índice de Masa Muscular según el peso y la talla, porcentaje de grasa, ansiedad y depresión. Se utilizaron como instrumentos de medición la Prueba de Zung, rendimiento académico y dimensiones del Inventario de Trastornos Alimentarios para establecer el riesgo para los Trastornos de la Conducta Alimentaria. Los resultados demostraron una mayor participación de féminas (63%; n=104) y de los estudiantes de la facultad de Mercadeo (17%; n=28). Los estudiantes que presentaron mayores factores de riesgo fueron las féminas en la facultad de Comunicación Social y Periodismo (24%; n=40). De acuerdo con los análisis, no se 63 encontró relación entre el riesgo de Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) e impulso de delgadez con las actividades extracurriculares como danza, deporte, modelaje, música y actividad cultural. A tales efectos, mencionan que aunque el modelaje y la danza son considerados factores de riesgo para los trastornos de la alimentación, sólo se identificaron dos o tres personas en la investigación vinculadas a estas actividades respectivamente. Se realizó un ajuste lineal entre el impulso por la delgadez y el Índice de Masa Corporal (IMC) y el impulso a la delgadez con el porcentaje de grasa encontrando que la relación fue significativa; a medida que se incrementa el impulso por la delgadez aumenta el porcentaje de grasa y el IMC. Los investigadores señalaron acerca del rendimiento académico que los participantes le dedicaban al estudio un promedio de 25 horas presenciales a la semana y 14 horas no presenciales. Un 48% (n=79) de esta población ha perdido al menos un curso durante su carrera. No obstante, indicaron que no existe asociación entre el promedio de notas, el impulso por la delgadez ni el número de materias perdidas con los riesgos de TCA. Dado los resultados, estos investigadores concluyeron que el riesgo para desarrollar Trastornos de la Conducta Alimentaria es menor en la población estudiada cuando se compara con las poblaciones de otras ciudades del país, aunque continúa siendo apreciable. Cordero [M], Cordero [R], Natera y Caraveo (2009) realizaron un estudio titulado, La Terapia Centrada en Soluciones. Una opción de tratamiento para la dependencia al alcohol. Esta investigación, aunque no estuvo relacionada directamente con el Trastorno de Ebriorexia tuvo como objetivo analizar los resultados de la Terapia Centrada en Soluciones en pacientes dependientes de alcohol y determinar las diferencias 64 entre quiénes buscaban modificar los problemas asociados al consumo de alcohol y los que pretendían cambiar la forma de consumir bebidas alcohólicas. El estudio se llevó a cabo durante 12 meses; de abril, 2002-2003. La muestra final del estudio estuvo constituida por 60 consumidores de alcohol, que acudían por primera vez a solicitar atención al Centro de Ayuda al Alcohólico y sus Familiares (CAAF) adscrito al Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente en México. La muestra se dividió en 30 dependientes al etanol que acudieron al CAAF en busca de modificar su nivel de consumo y otros 30 dependientes que pretendían modificar los problemas asociados a su consumo. Las edades de los participantes fluctuaron entre los 18-50 años. La información fue obtenida a través de los siguientes instrumentos: 1. Pre consulta y consulta inicial del CAAF 2. Escala de Dependencia al Etanol 3. Índice de Severidad de la Adicción El procedimiento llevado a cabo consistió en tres fases. La primera concierne a la línea base para identificar a los consumidores candidatos a participar caracterizada por su historial de consumo de alcohol. La segunda fase fue la aplicación de la Terapia Centrada en Soluciones y la última fase consistió en el seguimiento durante doce meses después de la última sesión de terapia. Desde la óptica de la investigación, el análisis de los resultados se estableció a partir del tiempo transcurrido desde que un dependiente de bebidas alcohólicas asistió a la última sesión de terapia por los subsiguientes 12 meses y/o hasta que presentaba una recaída. Como parte de los procedimientos de investigación, sólo se consideró a los consumidores de alcohol que se presentaron al menos a una sesión de terapia hasta cubrirse la cuota establecida. No obstante, los 65 consumidores de alcohol acudieron en promedio a tres sesiones de psicoterapia. De estas sesiones psicoterapéuticas, el 45% (n=22), acudió a dos servicios ofrecidos por el Programa (psiquiatría y medicina general) y el 55% (n=38) de los dependientes de alcohol recibieron atención únicamente en el CAAF. Sin embargo, el 30% (n=15) interrumpieron el tratamiento porque no querían dejar de beber y expresaron que no necesitaban ayuda. El 28% (n=14) dejó de asistir por motivos laborales y económicos. El 2% (n=1) indicó que el tratamiento no cubrió sus expectativas. De los consumidores de alcohol que acudieron finalmente a las sesiones de seguimiento, 28 (56%) no recayeron y lograron modificar los problemas asociados al consumo de alcohol; 16 (32%) de los participantes recayeron y no modificaron sus problemas asociados con el consumo y seis (12%) recayeron, sin embargo, modificaron sus niveles de consumo y buscaron cambiar los problemas asociados al consumo de alcohol (esfera médica, psiquiátrica y psicosocial). El seguimiento no se efectuó en 10 pacientes que proveyeron datos incorrectos o cambiaron de domicilio lo que representó un desgaste de 17% (n=10) de la muestra. Los investigadores señalaron que los primeros cuatro meses después de la última sesión de terapia son los de mayor riesgo para recaer y continuar con los problemas asociados al consumo de alcohol. Se observó que la Terapia Centrada en Soluciones (TCS) tuvo mejores resultados en dependientes que buscaban modificar los problemas asociados al consumo de alcohol. En el 48% (n=29) de los participantes evidenciaron que el área de mayor conflicto eran los problemas familiares como consecuencia de la dependencia al alcohol. En conclusión, la investigación evidenció que la Terapia Centrada en Soluciones se consolida en la población del estudio como una alternativa de intervención y se 66 mantiene independientemente de variables como la edad, el estado civil y la escolaridad. Los investigadores recomendaron considerar este tipo de intervención en la planificación de los servicios y programas de tratamiento dirigidos a personas que consumen alcohol en exceso. Lefio, Villarroel, Rebolledo, Zamorano y Rivas (2013) publicaron un estudio en Chile titulado, Intervenciones eficaces en el consumo problemático de alcohol y otras drogas. El mismo estuvo dirigido al análisis evaluativo de la evidencia científica disponible durante el periodo 2008-2012 respecto a la eficacia de las intervenciones realizadas en la rehabilitación de personas adolescentes y adultas dependientes al alcohol y otras drogas. La información se obtuvo mediante una revisión documental sistemática a través de distintas bases de datos internacionales tales como: Pub/Med/MEDLINE, LILACS, EMBASE, PsycINFO, SciELO, bases de datos del Centro para Revisión y Diseminación de la Universidad de York (DARE, HTA Database), Cochrane Library, Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas, el Centro para la Adicción y la Salud Mental de Canadá, el Instituto Nacional de Abuso de Alcohol y Alcoholismo de los Estados Unidos, el Observatorio Europeo de Drogas y Adicciones de la Unión Europea, la Fuerza de Tarea en Prevención de los Estados Unidos y Google Académico. De esta revisión fueron seleccionados 69 presentaciones de informes científicos descriptivos alusivos a la rehabilitación de personas con problemas de alcoholismo y drogas. De acuerdo con el análisis de los datos, el efecto de la Terapia Cognitivo Conductual en consumidores de alcohol, marihuana, cocaína y opioides fue menor durante los doce meses de seguimiento que el efecto de las intervenciones de tipo familia. 67 En este caso, las intervenciones de tipo familiar demostraron significativamente el retardar el inicio de consumo de alcohol y disminuir la frecuencia del consumo. En cuanto a las intervenciones de autoayuda vía internet se encontró que el efecto para disminuir la frecuencia y la cantidad de consumo de alcohol era menor. Referente a la Terapia Conductual de pareja, los resultados demostraron que la misma tiene mejor resultado cuando se trata la dependencia de alcohol, opioides y poliadicciones en comparación con terapias de enfoque individual (cognitivo conductual). Las estrategias de refuerzo comunitario y adiestramiento familiar demostraron un aumento en las tasas de compromiso de los pacientes con la terapia comparado con terapias alternativas como el Modelo de Alcohólicos Anónimos y Narcóticos Anónimos. El seguimiento activo vía telefónica demostró tener un efecto significativo en mejorar las tasas de abstinencia y el porcentaje de días de consumo a partir de los dieciocho meses de seguimiento; efecto que se mantiene durante los 24 meses subsiguientes. Los investigadores concluyeron que las intervenciones marcadamente multidisciplinarias, con un enfoque conductual e involucramiento de allegados importantes para la persona con consumo problemático de alcohol y otras sustancias son las estrategias de mayor valor para el paciente en el manejo de contingencia y proceso terapéutico. La revisión documental no menciona directamente al Trastorno de la Ebriorexia aunque alude a la dependencia excesiva de alcohol y medidas de tratamiento terapéutico. Estudios realizados en Puerto Rico Reyes-Rodríguez, Franko, Matos-Lamourt, Bulik, Von Holle, Cámara-Fuentes, Rodríguez-Angleró, Cervantes-López y Suárez-Torres (2010) publicaron un estudio titulado, Eating disorder symptomatology: Prevalence among latino college freshmen 68 students. El mismo estuvo dirigido a conducir el primer estudio de prevalencia de los síntomas de los Trastornos Alimentarios en la población estudiantil de primer año de la Universidad de Puerto Rico y evaluar los síntomas relacionados a la depresión. En el estudio no se menciona el Trastorno de Ebriorexia por consumo de alcohol aunque atiende y describe síntomas y conductas relacionadas con esta condición. La muestra del estudio quedó constituida por 2,163 estudiantes (1,429 mujeres y 722 hombres) de 9 de los 11 recintos que comprenden el sistema de la Universidad de Puerto Rico. La información fue recopilada mediante la administración dos cuestionarios dirigidos a identificar Trastornos de la Conducta Alimentaria y Depresión. Cada medida de evaluación fue traducida al español y adaptada a los latinos para mantener la equivalencia cultural entre las versiones en inglés y español. A tales efectos se utilizaron los siguientes instrumentos: 1. Bulimia Test-Revised 2. Eating Attitudes Test 3. Beck Depression Inventory El análisis demostró que un 32% (n=692) de los estudiantes indicaron que incurren en dietas con la intención de perder peso y un 40% (n=865) admitió haber intentado de una a tres veces dietas dirigidas al mismo propósito. Un total de 3% (n=65) de los estudiantes presentaron síntomas asociados al Trastorno de Atracón y un 10% (n=216) evidenciaron otros síntomas de Trastornos Alimentarios. Los resultados de la investigación reveló que el grupo de estudiantes con Trastornos Alimentarios recurren a la purga y conductas compensatorias como medidas para alcanzar el peso deseado y lidiar con su insatisfacción corporal. A tales efectos, se identificó una relación entre los 69 síntomas asociados a la depresión y los Trastornos Alimentarios siendo el grupo con el Trastorno los que presentaron mayores indicadores de depresión y tendencias suicidas. Estos hallazgos confirman la necesidad de evaluar ambos indicadores en los estudiantes con Trastornos de la Conducta Alimentaria. Los investigadores concluyeron que la presencia de Trastornos Alimentarios en la población latina es un problema sustancial entre la población universitaria femenina y masculina. Recomiendan éstos que se realicen estudios dirigidos a la evaluación y tratamientos para atender los Trastornos Alimentarios en la población latina. Reyes-Rodríguez, Sala, Holle, Unikel, Bulik, Cámara-Fuentes, Suárez-Torres (2011) publicaron un estudio titulado, A description of disorderes eating behaviors in latino males. El mismo estuvo dirigido a determinar la prevalencia de Trastornos de la Conducta Alimentaria, aunque no se menciona directamente el Trastorno de Ebriorexia, estuvo dirigido a describir las características de estos trastornos en los hombres. En específico, para comparar las puntuaciones altas y bajas en las medidas de los trastornos alimentarios en la depresión y los eventos estresantes en la vida de los hombres. La muestra de este estudio quedó constituida por 709 estudiantes varones pertenecientes a nueve de los 11 Recintos del sistema de la Universidad de Puerto Rico durante los años académicos del 2004 al 2006. El procedimiento llevado a cabo consistió en administrar un cuestionario en los salones de clase donde se impartían cursos requisito para los estudiantes de primer año. La información fue obtenida a través de los siguientes instrumentos: 1. Bulimia Test-Revised (BULIT-R) 2. Eating Attitudes Test (EAT-26) 70 3. Beck Depression Inventory (BDI) Los resultados demostraron que los participantes presentaron síntomas que cumplen con los criterios de diagnóstico de Bulimia Nerviosa y trastorno por Atracón descritos en el Manual de Diagnóstico y Estadísticos de los Trastornos Mentales (DSMIV). A tales efectos, un total de 21% (n=148) realizaron dietas con la intención de perder peso y 37% (n=260) indicó haberse sometido al menos a un régimen dietético durante el pasado año. Los investigadores señalaron que un 37% (n=262) de los participantes estaban en sobrepeso u obeso, sin embargo, sólo el un 25% (n=177) se evaluaba como sobrepeso. Indicaron que del grupo de los participantes con Trastornos Alimentarios, un 34% (n=14) presentaron una o más veces por semana conductas relacionadas al Trastorno por Atracón. También se evidenció que en el grupo de Trastornos Alimentarios las conductas compensatorias más prevalentes utilizadas eran laxantes, diuréticos, vomito autoinducido y pastillas dietéticas. Comparado con la población de estudiantes de tez blanca, se encontró que los latinos recurren a conductas más extremas para perder peso. De igual forma, el análisis evidenció que un 30% (n=12) de los estudiantes varones presentaron síntomas relacionados a la depresión y un 63% (n=29) demostró haber experimentado uno o más eventos estresantes. A tales efectos, se identificó la muerte de miembros de la familia, rupturas de relaciones sentimentales y enfermedad como los causantes. Los investigadores encontraron que a diferencia de las féminas que realizan dietas para bajar de peso, los varones recurren al Atracón con el fin de aumentar masa muscular. Los investigadores concluyeron que los resultados obtenidos confirman que los Trastornos de Alimentación afectan a los hombres latinos contrario al estereotipo 71 generalizado de que estos Trastornos sólo afectan a las féminas. Algunas de las barreras informadas por los estudiantes en de la búsqueda de tratamiento fueron: falta de percepción de la necesidad de ayuda, estar ajeno a la cubierta de salud, escepticismo en relación a la efectividad del tratamiento, preocupación por la privacidad y falta de conocimiento de los servicios disponibles en la universidad. En este aspecto, se recomendó desarrollar programas de detección temprana y de referidos para los Trastornos Alimentarios en los cuales se considere las circunstancias únicas asociadas a la vida estudiantil incluyendo la población masculina. Los investigadores sugieren que los primeros paso, a nivel administrativo, son el diseño y desarrollo de enfoques para detectar las conductas relacionadas a la alimentación que ponen a los estudiantes en riesgo y la implementación de servicios en línea como una alternativa eficaz. Los programas dirigidos a la detección de los Trastornos Alimentarios deben ser culturalmente adaptados para cumplir con las necesidades de estudiantes femeninas y masculinos de varios trasfondos raciales y culturales. 72 CAPÍTULO IV DISCUSIÓN Introducción Los resultados obtenidos a través del proceso investigativo se discuten en este capítulo. Cada una de las secciones incluidas son producto del análisis crítico y reflexivo de investigaciones relacionadas a trastornos alimentarios y la Ebriorexia. El diseño de investigación para llevar a cabo este estudio fue el metanálisis (Jenicek, 1989). Desde esta perspectiva el problema objeto de estudio consistió en explorar y describir a través de diferentes estudios realizados en distintos países, incluyendo Puerto Rico, formas de intervención psicoterapéutica para el manejo del desorden alimentario definido como Ebriorexia. Fueron seleccionados intencionalmente y por disponibilidad 24 estudios en el tema de interés (Villeneuve Román, 2004). Esta investigación se fundamenta en los planteamientos de Garner y Bemis (1982) acerca del Modelo de Tratamiento Cognitivo Conductual (TCC). Según Garner y Bermis en el modelo TCC se pone en práctica la teoría del aprendizaje, principalmente los conceptos del refuerzo positivo y negativo para adelgazar. A tales efectos, la adopción de un régimen dietario para adelgazar refuerza la conducta negativa de evitación y aversión. Por cuanto, de acuerdo con los autores, el Trastorno psicopatológico principal de estos pacientes surge de las ideas y sentimientos sobrevalorados acerca del peso y la forma corporal que determinan su conducta. Garner y Bemis (1982) plantearon al respecto que tales ideas y sentimientos generan el esquema de distorsiones cognitivas que representan el origen de los Trastornos de la Conducta Alimentaria. A partir de aquí, se presenta el 73 análisis crítico de acuerdo con cada pregunta de investigación, las conclusiones, recomendaciones y limitaciones del estudio de forma consecutiva. Análisis crítico de acuerdo con cada preguntas de investigación En este estudio se formularon cuatro preguntas de investigación. A los efectos de dar respuesta a las cuatro preguntas, se lograron localizar 13 investigaciones realizadas en los Estados Unidos de Norteamérica, tres en Europa, seis en Latinoamérica y dos en Puerto Rico; todas vinculadas al tema de la Ebriorexia, Consumo de Alcohol y Trastornos de la Conducta Alimentaria. La primera pregunta a ser discutida lee como sigue: ¿Cuáles son las técnicas de intervención psicoterapéuticas utilizadas en el manejo del desorden alimentario de la Ebriorexia en los últimos diez años? La Tabla 1 resume los resultados del análisis de las investigaciones llevadas a cabo en los Estados Unidos de Norteamérica. Tabla 1 Resumen de resultados de estudios analizados en los Estados Unidos de Norteamérica: Técnicas de Intervención Estados Unidos (n=13) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Técnicas de Intervención Peralta (2002) Ohio Alcohol use and the fear of weight gain in college: Reconciling two social norms 37 41 Consumo de Alcohol y la dieta (cambios patrones alimentarios) No hubo intervención psicoterapéutica (Recopilación de información) Larimer y Cronce (2002) Washington Identification, prevention and treatment: A review of individual-focused strategies to reduce problematic alcohol consumption by college students −− −− (3,635) Consumo de Alcohol (Factores de riesgo) Intervenciones breves, motivacionales y desarrollo de destrezas Lloyd-Richardson, Lucero, DiBello, Jacobson y Wing (2008) Massachusetts The relationship between alcohol use, eating habits and weight change in college freshmen 172 110 (282) Consumo de Alcohol (cambios patrones alimentarios) No hubo intervención psicoterapéutica (se recomendó examinar programas de intervención) 74 (78) Tabla 1 continuación Resumen de resultados de estudios analizados en los Estados Unidos de Norteamérica: Técnica de Intervención Estados Unidos (n=13) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Técnicas de Intervención Heidelberg y Correa (2009) Estados Unidos Dieting behavior and alcohol use behaviors among National Eating Disorders Screening Program Participants −− Consumo de alcohol (Trastornos Alimentarios) No se indica tipo de intervención psicoterapéutica al paciente PNDT. (Administración de pruebas diagnósticas, orientación médica y distribución de material educativo) Giles, Champion, Sutfin, McCoy, Wagoner (2009) Carolina del Norte Burke, Cremeens y Vail-Smith (2010) Sudeste EU Bryant, Darkes y Rahal (2010) Tampa −− (70) −− −− (4,271) Calorie restriction on drinking days: An examination of drinking consequences among college students. Ebriorexia −− −− (692) Ebriorexia Drunkorexia: Calorie restriction prior to alcohol consumption among college freshman 223 No hubo intervención psicoterapéutica. Recopilación de información (se recomendó incluir en el currículo material de orientación de buenos hábitos alimentarios para reducir riesgos de desarrollar Ebriorexia) No hubo intervención psicoterapéutica. Recopilación de información, incidencia no representaba un problema significativo que justificase un diagnóstico seudo médico. 51 (274) College students’ compensatory eating and behaviors in response to alcohol consumption Consumo de alcohol, (Conductas Alimentarias compensatorias) No hubo intervención psicoterapéutica. (Recomendación enfoque cognitivo conductual debe tomarse en cuenta en la aplicación psicoterapéutica) Stover (2011) EU Drunkorexia and eating up the media (No se indica) Ebriorexia No hubo intervenciones psicoterapéutica Barry y PiazzaGardner (2012) Drunkorexia: Understanding the co-ocurrence of alcohol consumption and eating/exercise weight managment behaviors −− −− Ebriorexia No hubo intervención psicoterapéutica Dierks (2013) Miami A risky cocktail: An examination of drunkorexia behaviors and alcohol consumption base on gender 178 76 (254) Ebriorexia Recopilación de información. Algunos recibieron tratamiento, No se indicó cual. (Se recomendó incluir como parte del currículo curso acerca del consumo de alcohol y trastornos 75 (22,488) alimentarios Tabla 1 continuación Resumen de resultados de estudios analizados en los Estados Unidos de Norteamérica: Técnica de Intervención Estados Unidos (n=13) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculadas con Ebriorexia Técnicas de Intervención Buenger (2013) Ohio Drinking your way to success? discovering the correlation between academic major and drunkorexic tendencies 178 76 (254) Ebriorexia No hubo intervención psicoterapéutica. (Recopilación de información) 178 76 Ebriorexia No hubo intervención psicoterapéutica. (Recopilación de información) Consumo de alcohol Intervenciones individuales y grupales: personales y por computadora (Retrocomunicación personalizada, estrategias de modificación de conducta, entrevista motivacional, identificación de situaciones de riesgo, establecimiento de metas) Babiaz, Rose Marie y Brinkman (2013) Miami Scott-Sheldon, Carey, Elliott, Garey (2014) Providence, Rhode Island Total (254) Examination of Drunkorexia, excessive exercising and extremen drinking −− −− −− Efficacy of alcohol interventions for the firstyear college students: A meta-analytic review of randomized controlled trials 966 279 32,552 Los trece estudios llevados a cabo en los Estados Unidos de Norteamérica objeto de análisis en la presente investigación fueron realizados entre los años 2002 al 2014. Del análisis se desprende una participación de 32,552 personas de ambos géneros; hombres y mujeres. De esta muestra de la población sólo fueron identificados por género 966 féminas, 279 varones y 31,307 personas no fueron identificadas por su género. Cabe señalar, que de los 13 estudios revisados, aunque todos están vinculados con síntomas relacionados al trastorno de la Ebriorexia, en seis de éstos no se menciona la condición como tal y en los restantes siete se alude directamente al análisis de la condición. 76 Los datos recopilados corroboran los planteamientos emitidos por autores como: Ballester y Guillado (2003), Portela de Santana, Da Costa Ribeiro Junior, Mora Giral y Raich (2012) y Vaquero Cristobal, Alacid, Muyor, López-Miñarro (2013) en cuanto a que en las últimas décadas ha ido en aumento la preocupación por conocer más de los Trastornos Alimentarios en función de su origen y síntomas para desarrollar estrategias de tratamiento. A su vez, según han señalado Anderson, Martens y Cimini (2005), Benjamin Wulfert (2005), Dunn, Larimer y Neishbors (2002), el interés en conocer acerca del TCA ha sido dirigido mayormente a poblaciones de jóvenes que se inician en la vida universitaria. A estos efectos, los estudios vinculados al tema del TCA localizados han estado orientados a conocer las prácticas utilizadas por jóvenes estudiantes universitarios en el consumo elevado de alcohol y el someterse a una restricción de alimentos inadecuada en general. De acuerdo con la primera pregunta de investigación en el presente estudio acerca de las intervenciones psicoterapéuticas utilizadas para atender la Ebriorexia se evidencia que mayormente no hubo una intervención psicoterapéutica en diez de estos estudios. En tres de los estudios se alude a que los participantes recibieron algún tipo de terapia aunque no se indica cual. Sin embargo, en todos los estudios se evidencia que entre las técnicas de intervención recomendadas y/o utilizadas se encuentran el desarrollar programas educativos para la concienciación, intervenciones cognitivo-conductuales, clarificación de normas, enfoques ambientales y sociales y realizar entrevistas motivacionales. La aplicación de las intervenciones sugeridas por los investigadores de referencia, en general, son cónsonas con el enfoque Terapéutico Cognitivo Conductual desde la 77 perspectiva presentada por Garner y Bemis (1982). Ambos autores establecieron que la Terapia Cognitivo-Conductual es la que obtiene mayor apoyo empírico. Por otra parte las Terapias Cognitivo-Conductuales representan la integración de los principios derivados de la Teoría del Comportamiento, la Teoría de Aprendizaje Social y Terapia Cognitiva (Finney, Wilbourne y Moss, 2007). Wilson (2005) supone que representa el enfoque más comprensivo y consistente en el desarrollo de estrategias destinadas a aumentar el control que tiene la persona sobre si misma. La filosofía de las intervenciones están fundamentadas en la consideración del paciente como un científico, en el sentido que se le anima a recurrir al método científico para contrastar empíricamente sus ideas y creencias y lograr el control y metas propuestas (Fairburn, 1995; Fairburn, Cooper y Shafran, 2003; Garner y Bemis (1982); Wilson, 2005). Las intervenciones identificadas en las investigaciones estuvieron dirigidas para trabajar mayormente con la dependencia al alcohol y, como consecuencia con los cambios en los patrones alimentarios. Por consiguiente, reconocer tales características en los individuos provee información importante y pertinente para el diagnóstico, tratamiento y recuperación de la Ebriorexia. De aquí, que el énfasis en los estudios fue el recopilar información conducente al desarrollo de intervenciones efectivas. En síntesis, a partir de los hallazgos de las investigaciones analizadas en los Estados Unidos se corrobora la importancia para el desarrollo y aplicación de intervenciones para la prevención y tratamiento de la Ebriorexia; en particular la Terapia Cognitivo-Conductual. A estos efectos, Garder y Bemis (1982) así como Fairburn (1995) han señalado la importancia de modificar la tendencia de hacer dietas extremas y cambiar actitudes hacia 78 el peso y la figura. La Tabla 2 resume los resultados del análisis de las investigaciones llevadas a cabo en Europa. Tabla 2 Resumen de resultados de estudios analizados en Europa: Técnicas de Intervención Europa (n=3) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculadas con Ebriorexia Técnicas de Intervención Peláez, Labrador y Raich (2004) España Epidemiología de los trastornos de la conducta alimentaria en España: Revisión y estado de la cuestión −− −− Trastornos de la Conducta Alimentaria No hubo intervención psicoterapéutica (interés en conocer necesidades terapéuticas asistenciales) Hagger, Lonsdale y Nikos (2012) Reino Unido A theory-based intervention to reduce alcohol drinking in excess of guideline limits among undergraduates students −− −− (638) Consumo de alcohol Evaluación de estrategias volitivas y de motivación: simulación mental y manipulación de intenciones Knight y Simpson (2013) Australia Drunkorexia: An empirical investigation of disordered eating in direct response to saving calories for alcohol use amongst Australian female university students 139 −− −− Ebriorexia No hubo intervención psicoterapéutica (Recopilación de información como preámbulo al desarrollo de implicaciones teóricas y clínicas). Total (28,858) 139 −− 29,635 Los estudios localizados relacionados al tema de la Ebriorexia llevados a cabo en Europa datan de los años 2004, 2012 y 2013. Fue contabilizada una participación total entre las tres investigaciones una muestra de 29, 635 personas de ambos géneros. De este total, 139 indicaron que pertenecen al género femenino y 29,496 no fueron identificadas por su género. El interés principal de cada investigación estuvo dirigido al análisis de la prevalencia e incremento de los TCA y los síntomas ocasionados por el exceso en el consumo de alcohol. Se encontró que de los tres estudios, sólo uno aplicó técnicas de intervención psicoterapéuticas para reducir el consumo de alcohol. De acuerdo con el análisis, las técnicas de intervención psicoterapéutica utilizadas demostraron que las 79 acciones volitivas y de motivación respecto a la simulación mental y estrategias de manipulación de intensiones contribuyen significativamente al cambio en la conducta. En específico, encontraron que la simulación mental tiene un efecto sinérgico que conduce a la reducción del consumo de alcohol. En síntesis, el estudio de Hagger, Lonsdale y Nikos (2012) apoya el modelo conceptual acerca de la Terapia ConductualCognitiva (TCC) propuesta por Garner y Bemis (1982) y Fairbun (2008) en cuanto a utilizar la modificación de conducta de forma efectiva para reducir el consumo de bebidas alcohólicas. Entre los hallazgos, se evidenció consistentemente, que los investigadores señalaron que en la mayoría de los estudios se carecían de instrumentos confiables que permitiesen identificar las diferentes condiciones asociadas con los TCA, síntomas y tratamientos (Hagger, Lonsdale y Nikos et al., 2012; Knight y Simpson, 2013; Peláez, Labrador y Raich, 2004). Este señalamiento, es cónsono con el planteamiento hecho por Chavez e Insel (2007) acerca de la escases de investigaciones en el tema de TCA y formas terapéuticas para el manejo efectivo de esta condición psicopatológica y psicosocial. En este sentido, se observa que la condición del Trastorno de Ebriorexia tampoco es investigada de forma directa como tal. A estos efectos, autores como Bruce (2009) y Chambers (2008) han indicado que los TCA, al igual que la Ebriorexia no están claramente definidos. Por consiguiente, esta falta de definición sugiere o implica que estos trastornos no se les de la importancia que requieren y sea un tema poco investigado. Las investigaciones realizadas en Latinoamérica vinculadas con la utilización de los conceptos de Ebriorexia y consumo de alcohol estuvo constituida por seis estudios en 80 total. La Tabla 3 resume los resultados del análisis de las investigaciones llevadas a cabo. Tabla 3 Resumen de resultados de estudios analizados en Latinoamérica : Técnicas de Intervención Latinoamérica (n=6) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculadas con Ebriorexia Técnicas de Intervención Behar (2004) Chile Consumo de alcohol y trastornos de la conducta alimentaria: Evidencia, similitudes e implicancias (No se indica) Consumo de alcohol (Cambios patrones alimentarios) No hubo intervención terapéutica (Se recomienda que las estrategias terapéuticas se fundamenten en la historia longitudinal del consumo de alcohol) Londoño, Vinaccia (2005) Colombia Prevención del abuso en el consumo de alcohol en jóvenes universitarios: Lineamientos en el diseño de programas costo-efectivos (No se indica) Consumo de alcohol (Cambios patrones alimentarios) No hubo intervención terapéutica (Identificación y desarrollo de programa de prevención educativos e intervención estrategias de afrontamiento, manejo de estrés, habilidades de resistencia, fortalecimiento de autoestima) Cano Correa, Castaño, Corredor Zuluaga, García Ortíz, Bedoya, Lloreda Chala y Cardona (2007) Colombia Factores de riesgo para trastorno de la alimentación en alumnos de la Universidad de Manizales −− −− (165) Trastornos de Alimentación No hubo intervención psicoterapéutica (recopilación de información en riesgos y efectos) Díaz Martínez, [A]., Díaz Martínez, [R]., Hernández-Ávila, Narro Robles, Fernández Varela y Solís Torres (2008) México Prevalencia del consumo riesgoso y dañino de alcohol y factores de riesgo en estudiantes universitarios de primer ingreso −− −− (15,842) Consumo de alcohol (Factores sociodemográficos de riesgo) No hubo intervención psicoterapéutica (Recopilación de información, prevalencia) Cordero, [M]., Cordero, [R]., Natera y Caraveo (2009) La Terapia Centrada en Soluciones. Una opción de tratamiento para la dependencia al alcohol −− −− (60) Trastornos de Alimentación Terapia Centrada en Soluciones (TCS), intervenciones orientadas a la modificación del nivel de consumo de alcohol 81 Tabla 3 continuación Resumen de resultados de estudios analizados en Latinoamérica : Técnicas de Intervención Latinoamérica (n=6) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculadas con Ebriorexia Técnicas de Intervención Lefio, Villarroel, Rebolledo, Zamorano y Rivas (2013) Chile Intervenciones eficaces en consumo problemático de alcohol y otras drogas (No se indica) Consumo de alcohol Y drogas Terapia Cognitivo Conductual (TCC), (Intervenciones de tipo familiar, intervenciones de autoayuda vía internet, terapia conductual de pareja, refuerzo comunitario y entrenamiento familiar, seguimiento y apoyo telefónico y terapia integrada del trastorno por abuso de sustancia con comorbilidad ansiosa y depresión) Total −− −− (16,067) Los estudios llevados a cabo en Latinoamérica abarcaron los años 2004 al 2013. Del análisis se desprende una participación de 16,067 personas de ambos géneros, hombres y mujeres. No obstante, se observa que hubo mayor participación en el sentido de que en tres de las investigaciones no se indicó el número de participantes en estos estudios en específico. Los mismos no aluden directamente al Trastorno de Ebriorexia aunque todos tienen que ver con el análisis acerca del consumo excesivo del alcohol y drogas y su efecto en la salud y la conducta de estos consumidores. Las condiciones de salud física, emocional/mental de interés fueron: dependencia y abuso de alcohol, drogas y Trastornos de la Conducta Alimentaria. Los resultados sugieren claramente una comorbilidad entre los trastornos de la conducta alimentaria y abuso de drogas, incluyendo el alcohol. A tales efectos, avalaron la importancia de aplicar estrategias encaminadas a modificar los problemas psicológicos, familiares, sociales y/o médicos 82 asociados al consumo de alcohol. Entre las estrategias de intervención psicológicas mencionadas utilizadas en los estudios analizados se encuentran: la Terapia Cognitivo Conductual que incluye intervenciones familiares, Terapia de pareja, estrategias de autoayuda y la Terapia Centrada en Soluciones (TCS). Los resultados avalaron la importancia de aplicar intervenciones psicoterapéuticas orientadas a buscar soluciones eficaces para cada individuo. A tales efectos, Cordero, [M]., Cordero, [R]., Natera y Caraveo (2009) exponen que la TCS se consolida como una alternativa de intervención en la población universitaria al demostrar mejores resultados en consumidores que se ubican en los primeros tres niveles socioeconómicos, se caracterizan por tener una gravedad de consumo de alcohol alta y únicamente son tratados bajo este modelo psicoterapéutico. Los investigadores mencionan que autores como Longabaugh y Morgensten en 1999 plantearon que las estrategias de afrontamiento resultan ser eficaces para la disminución de la frecuencia de consumo de alcohol. En términos generales, esta estrategia agrupa un conjunto de tratamientos relacionados que tienen en común el intento de mejorar las conceptualizaciones cognitivas del paciente; facilitándole de este modo poder cambiar su conducta adictiva. Por otra parte, Lefio, Villarroel, Rebolledo, Zamorano y Rivas (2013) evidenciaron que las intervenciones de tipo familiar demostraron ser eficaces significativamente al retardar el inicio de consumo de alcohol y disminuir la frecuencia del consumo. También encontraron que la Terapia Conductual de pareja tuvo mejores resultados que la de tipo individual y las estrategias de refuerzo comunitario y adiestramiento familiar demostraron un aumento en las tasas de compromiso de los 83 pacientes con la terapia al compararse con terapias alternativas como el Modelo de Alcohólicos Anónimos y Narcóticos Anónimos. La evidencia disponible a través del estudio de Lefio et al. (2013) ha demostrado que las intervenciones con un enfoque cognitivo conductual tienen mejores resultados en indicadores de abstinencia y prevención de recaídas de consumo problemático de alcohol. Las intervenciones de autoayuda por Internet también parecen ser una estrategia promisoria de apoyo al tratamiento y que, a su vez, puede facilitar aspectos de la cobertura y acceso al apoyo terapéutico en el consumo de problemático de alcohol y otras sustancias. A través de los estudios realizados en Latinoamérica analizados en esta investigación se corrobora lo expuesto por Dimeff, Baer, Kivlahan y Martatt (1999) en cuanto al interés en atender la problemática relacionada con el exceso de consumo de alcohol/drogas y el hecho de que existen formas efectivas para trabajar terapéuticamente con estas condiciones que afectan la salud física y emocional/mental en la persona. En la revisión y análisis de las investigaciones vinculadas con la Ebriorexia y el consumo de alcohol en Puerto Rico sólo se lograron localizar dos estudios. La Tabla 4 resume los resultados del análisis de las investigaciones llevadas a cabo. 84 Tabla 4 Resumen de estudios analizados en Puerto Rico: Técnicas de Intervención Puerto Rico (n=2) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Técnicas de Intervención Reyes-Rodríguez, Franko, MatosLamourt, Bulik, Von Holle, CámaraFuentes, RodríguezAngleró, CervantesLópez y SuárezTorres (2010) Eating disorder symptomatology: Prevalence among latino college freshmen students 1,429 722 (2,151) Trastornos Alimentarios No hubo intervención psicoterapéutica (Recopilación de información para el desarrollo de enfoques educativos, servicios en línea). Reyes-Rodríguez, Sala, Holle, Unikel, Bulik, CámaraFuentes, SuárezTorres (2011) Rio Piedras A description of disorders eating behaviors in latino males −− (−−) Trastornos Alimentarios No hubo intervención psicoterapéutica (Recopilación de información conducente al desarrollo de investigaciones, evaluación y tratamientos) 709 1,429 1,431 2,860 Total Los dos estudios llevados a cabo en Puerto Rico se realizaron durante los años 2010 y 2011. Entre ambos estudios se contabilizó una muestra total de 2,860 participantes; siendo identificados 1,431 pertenecientes al género masculino y 1,429 al género femenino. Los estudios estuvieron dirigidos a identificar la prevalencia de los Trastornos Alimentarios en la población de latina. Sin embargo, no se observó la utilización de intervenciones psicoterapéuticas dirigidas al tratamiento y prevención de los Trastornos Alimentarios. A estos efectos, los investigadores recomendaron el desarrollo de enfoques educativos, ofrecer servicios en línea, tratamientos, evaluar y realizar más investigaciones. Los investigadores señalan la importancia de explorar a profundidad la problemática sintomatológica que generan los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) dado que son asociados con repercusiones fisiológicas, emocionales, psicológicas y conductuales. Un dato importante evidenciado en el estudio de Reyes-Rodríguez, 85 Franko, et al. (2011) es que indicaron que a diferencia de la mujer con TCA que hace dietas extremas para bajar de peso, los varones recurren al atracón para aumentar la masa corporal. Por cuanto, mencionan que el TCA afecta igual a hombres y mujeres latinos. De otra parte, encontró Reyes-Rodríguez, Sala et al. (2010) que ambas poblaciones (hombres y mujeres) recurren a conductas compensatorias para lidiar con su insatisfacción corporal. Estos resultados validan la visión presentada por Garnes y Bemis (1982) en función de la teoría del aprendizaje y el Modelo Cognitivo-Conductual diseñado por éstos. Los autores plantearon al respecto que el trastorno psicopatológico para estar o no más delgado se genera mayormente de las ideas en términos de la sobrevaloración respecto al peso, su forma corporal y del refuerzo positivo o negativo que determina su conducta. Según Fairburn (1995) el TCA tiene como base un sistema disfuncional de autoevaluación. No obstante, a pesar que en los estudios no se observaron que se implementasen intervenciones terapéuticas, Reyes-Rodríguez, Franko et al. (2011) identificaron algunas de las barreras que obstaculizan el que estas poblaciones no busquen tratamiento. Tales obstáculos son: los jóvenes perciben que no necesitan ayuda, desconocen las cubiertas de los planes de salud, son escépticos a la efectividad del tratamiento, les preocupa la privacidad y desconocen qué servicios están disponibles en las Universidades. La Tabla 5 resume los resultados de mayor relevancia evidenciados respecto a las Técnicas de Intervención de forma integrada. 86 Tabla 5 Resumen de resultados por países: Técnicas de Intervención País Año Estados Unidos (2002-2014) Europa (2004-2013) Latinoamérica (2004-2013) Puerto Rico (2010-2011) Total Total de Estudios 13 3 6 2 24 Total de Participantes Condición Vinculada a la Ebriorexia f Técnicas de Intervención 32,552 Consumo de Alcohol 13 No hubo intervención psicoterapéutica 10 Ebriorexia 7 Recopilación de información 5 Cambios patrones alimentarios 2 Recomendaciones: Programas Enfoque Cognitivo Conductual Administración de pruebas 3 Trastornos Alimentarios 1 Distribución de Material Educativo 3 Conductas Alimentarias 1 Compensatorias Intervención: Modificación de conducta Desarrollo de destrezas Terapia no identificada 4 Consumo de alcohol 1 No hubo intervención psicoterapéutica 2 Trastorno Conducta Alimentaria 1 Recopilación de información 1 Ebriorexia 1 Intervención Evaluación estrategias motivacionales (simulación mental, manipulación intensiones) 1 Consumo/dependencia de alcohol 4 No hubo intervención psicoterapéutica 4 Cambios patrones alimentarios 4 Recopilación de información 2 Factores de riesgo 1 Recomendaciones: Estudios longitudinales Desarrollo de programas Manejo de estrés Resistencia Autoestima 5 Trastornos Alimentarios 2 Intervención Terapia Cognitivo Conductual Tipo familiar, autoayuda, de pareja, refuerzo comunitario, apoyo telefónico, de seguimiento 1 Trastorno Alimentario 2 No hubo intervención psicoterapéutica Recopilación de información Recomendaciones: Desarrollo enfoque educativo De servicios Investigaciones, evaluación y tratamiento 2 29,635 16,067 2,860 81,114 87 f 2 2 De acuerdo con el análisis producto de los 24 estudios llevados a cabo entre los años 2002 al 2014 en los Estados Unidos de Norteamérica, Europa, Latinoamérica y Puerto Rico se evidenció una participación total de 81,114 persona, adultos, de diferentes edades y género. Los procedimientos utilizados en las investigaciones analizadas incluyeron la aplicación de los conceptos de Ebriorexia, Trastornos Alimentarios, consumo y dependencia de alcohol y Conductas Alimentarias Compensatorias. Entre éstos, la muestra mayor fue la de Estados Unidos de Norteamérica con 32,552, le sigue Europa con 29,632, luego Latinoamérica con 16,067 y por último Puerto Rico con una muestra de 2,860 participantes. La combinación de Trastornos relacionados con la Ebriorexia directa e indirecta en los países de estudios fueron: consumo de alcohol (f=18), Ebriorexia (f=8), cambios de patrones alimentarios (f=6), trastornos alimentarios (f=4) y conducta alimentaria compensatoria (f=1). El interés y/o objetivo más común en las investigaciones analizadas incluyeron recopilación de información (f=10), presentar recomendaciones (10) y la distribución de material educativo (3). En síntesis, en 18 de los estudios no se encontró que se aplicase algún tipo de intervención psicoterapéutica. No obstante, se identificó que en seis (6) de las investigaciones se aplicaron distintas técnicas de intervención terapéutica tales como: Terapia Cognitivo-Conductual, de Pareja, de Familia, Simulación mental y Manipulación de intenciones, Modificación de conducta y Terapia no identificada. Las intervenciones psicoterapéuticas aplicadas por los investigadores de referencia, en general, son cónsonas con el enfoque presentado por el Modelo Cognitivo Conductual desde la perspectiva de Garner y Bemis (1982). Wilson (2005) planteó que esta perspectiva es la que obtiene mayor apoyo empírico y se considera eficaz para tratar 88 los Trastornos Alimentarios, incluyendo la Ebriorexia. La preocupación por el peso corporal durante el consumo de alcohol resulta ser uno de los síntomas principales que desencadena los Trastornos Alimentarios que afecta significativamente la salud entre los estudiantes universitarios. Krahn, Kurth, Gomberg y Drewnoski (2005) han destacado la relación entre hacer dietas y el alto riesgo de desarrollar problemas relacionados al uso de sustancia psicoactivas entre esta población. A tales efectos, las intervenciones realizadas y recomendadas estuvieron dirigidas a la modificación de conducta, desarrollo de destrezas y motivación para disminuir la frecuencia de consumo de alcohol y promoción de patrones alimentarios saludables. Cabe señalar que en la mayoría de las investigaciones las recomendaciones estuvieron orientadas a la recopilación de información y el desarrollo de programas y modelos de intervención terapéutica. El hecho de que el término Ebriorexia es uno novel e innovador, aunque ampliamente difundido en los medios de comunicación no está reconocido por la clase médica. Esta falta de reconocimiento por la clase médica hasta cierto punto explica la carencia de estudios dirigidos a las intervenciones psicoterapéuticas para tratar y prevenir el Trastorno de Ebriorexia. La segunda pregunta formulada en este estudio estuvo dirigida al análisis acerca de, ¿Qué factores psicológicos y fisiológicos identifican y definen el origen del desorden de Ebriorexia según las investigaciones realizadas en los últimos diez años. La Tabla 6 resume los resultados del análisis de las investigaciones llevadas a cabo en los Estados Unidos vinculadas con el origen fisiológico y psicológico del Trastorno de Ebriorexia. 89 Tabla 6 Resumen de resultados de estudios analizados en los Estados Unidos de Norteamérica: Factores Fisiológicos y Psicológicos Estados Unidos (n=13) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Factores Fisiológicos Factores Psicológicos Peralta (2002) Ohio Alcohol use and the fear of weight gain in college: Reconciling two social norms 37 41 Consumo de alcohol y la dieta (cambios patrones alimentarios) Control de calorías ajustados a estándares de belleza (delgadez) Ingesta de alcohol por presión sociocultural (grupo) Larimer y Cronce (2002) Washington Identification, prevention and treatment: A review of individual-focused strategies to reduce problematic alcohol consumption by college students −− −− (3,635) Consumo de Alcohol (Factores de riesgo) No se identificaron factores fisiológicos No se identificaron factores psicológicos 172 110 (282) LloydRichardson, Lucero, DiBello, Jacobson y Wing (2008) Massachusetts The relationship between alcohol use, eating habits and weight change in college freshmen Consumo de Alcohol (cambios patrones alimentarios) Heidelberg y Correa (2009) Estados Unidos (78) Desconocimiento del contenido calórico de bebidas alcohólicas y efectos en la salud Atracón por consumo desmedido de alcohol −− −− (70) Consumo de alcohol, Trastornos Alimentarios Comorbilidad entre régimen dietario y consumo de alcohol Disfunción general de la conducta (Trastorno de Ánimo, personalidad) Dieting behavior and alcohol use behaviors among National Eating Disorders Screening Program Participants Giles, Champion, Sutfin, McCoy y Wagoner (2009) Carolina del Norte Calorie restriction on drinking days: An examination of drinking consequences among college students. −− −− (4,271) Ebriorexia Restricción de alimentos o ingesta calórica, prácticas extremas para el control del peso (mantener un aspecto físico particular) No se indican Burke, Cremeens y Vail-Smith (2010) Sudeste EU Drunkorexia: Calorie restriction prior to alcohol consumption among college freshman −− −− (692) Ebriorexia Restricción de calorías para el control del peso y aumentar efectos del alcohol Manejo de conducta independiente, modelaje (conductas copiadas), presiones (de grupo y carga académica), estrés financiero 90 Tabla 6 continuación Resumen de resultados de estudios analizados en los Estados Unidos de Norteamérica: Factores Fisiológicos y Psicológicos Estados Unidos (n=13) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Factores Fisiológicos Factores Psicológicos Bryant, Darkes y Rahal (2010) Tampa College students’ compensatory eating and behaviors in response to alcohol consumption 223 51 (274) Consumo de Alcohol, (Conductas Alimentarias Compensatorias) Comorbilidad entre dietas y consumo de alcohol, prácticas extremas para control de peso, restricción calórica para aumentar efecto del alcohol ngesta de alcohol por presión sociocultural (de grupo), temor a perder el control y aumentar de peso Stover (2011) EU Drunkorexia and eating up the media (No se indica) Ebriorexia Barry y PiazzaGardner (2012) Drunkorexia: Understanding the co-ocurrence of alcohol consumption and eating/exercise weight managment behaviors −− −− (22,488) Dierks (2013) Miami A risky cocktail: An examination of drunkorexia behaviors and alcohol consumption base on gender 178 76 (254) Comorbilidad entre régimen dietario y uso de alcohol Ebriorexia Prácticas extremas para control de peso Ebriorexia Comorbilidad entre régimen dietario y consumo de alcohol, aumento efecto embriagante 91 Ingesta de alcohol por presiones sociocultural (grupo), baja autoestima, disfunción en la regulación de la conducta del individuo Ingesta de alcohol por presión sociocultural (de grupo), temor a perder el control y aumentar de peso Mayor ingesta de alcohol en varones que en féminas, disfunción general de la conducta Tabla 6 continuación Resumen de resultados de estudios analizados en los Estados Unidos de Norteamérica: Factores Fisiológicos y Psicológicos Estados Unidos (n=13) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Factores Fisiológicos Factores Psicológicos Buenger (2013) Drinking your way to success? Discovering the correlation between academic major and drunkorexic tendencies 178 76 (254) Ebriorexia Control de calorías ajustado a estándares de belleza Disfunción general de la conducta, insatisfacción de la imagen corporal Babiaz, Rose Marie y Brinkman (2013) Miami Examination of Drunkorexia, excessive exercising and extremen drinking 178 76 (254) Ebriorexia Prácticas extremas para el control de peso (ejercicio excesivo), restricción de calorías para aumentar el efecto del alcohol Presiones (carga académica, estrés financiero, nueva independencia) Scott-Sheldon, Carey, Elliott, Garey (2014), Providence, Rhode Island Efficacy of alcohol interventions for the first-year college students: A metaanalytic review of randomized controlled trials (No se indica) Consumo de alcohol No se indican (No se indican) Total 966 279 (32,552) De acuerdo con el análisis para identificar qué factores fisiológicos y psicológicos permiten identificar el origen de la Ebriorexia se comprueba que este Trastorno, según señalan autores como Portela de Santana, Da Costa Ribeiro Junior, Mora Giral y Raich (2012) es un fenómeno complejo que incluye aspectos sociales, fisiológicos y psicológicos. El término Ebriorexia no ha sido oficialmente adoptado por la clase médica, no obstante, existe un consenso en los medios de comunicación acerca de las características del trastorno (CBS News, 2008; Chambers, 2008). Los datos recopilados corroboran los planeamientos emitido por autores como Chamay-Weber, Narring y 92 Michaud (2005) en cuanto a que un alto porciento de estudiantes universitarios han expresado que se someten a dietas rigurosas para perder peso. Los autores indican que entre estos regímenes se encuentran las dietas líquidas, bajas en calorías, el ayuno, eliminar comidas, realizar actividades físicas excesivas y la purga inducida. Además, plantean que el hacer este tipo de dietas conlleva un alto riesgo para el desarrollo de conductas negativas a nivel físico y psicológico que redundan en alguno de los Trastornos Alimentarios. Los datos recopilados a través de los 13 estudios llevados a cabo en los Estados Unidos evidenciaron que la comorbilidad entre régimen dietario y el consumo de alcohol tiene un efecto fisiológico en la población estudiada. Dansky, Brewerton y Kilpatrick (2000); Goebel, Scheibe, Grahling y Striegel-Moore (1995); O’Brien y Vicent (2003) coinciden en que existe una relación positiva entre los Trastornos Alimentarios, el abuso de alcohol y la dependencia de sustancias psicoactivas. Por otra parte, los hallazgos demostraron que los jóvenes universitarios controlan la ingesta de calorías buscando ajustarse a los estándares de belleza y recurren a prácticas extremas para el control del peso (mantener un aspecto físico particular). Como parte de las prácticas que adoptan los jóvenes se encuentra el consumo de bebidas alcohólicas con el estómago vacío para mantener un aspecto físico en particular y aumentar los efectos del alcohol. Estos hallazgos son cónsono con lo establecido por Vaquero-Cristóbal, Alacid, Muyor y LópezMiñarro (2013) quienes indicaron que existe gran preocupación por la imagen corporal lo que resulta en diversas consecuencias que provocan alteraciones perceptuales. A su vez el Manual de Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, en su 5ta edición, conocido como DSM5 se indica que una perturbación persistente de la alimentación 93 resulta en la alteración o absorción de alimentos que perjudica significativamente la salud física y el funcionamiento psicosocial. Existen una serie de factores psicológicos comunes que influyen en el desarrollo de la Ebriorexia, Trastornos Alimentarios y consumo de alcohol. Esto es, según se evidencia, la presión sociocultural, de grupo y disfunción general de la conducta ante sentimientos de insatisfacción con su imagen corporal (trastorno de ánimo, personalidad) forman parte de esos factores. A su vez, el manejo de la nueva independencia, presiones, estrés financiero, el temor a perder el control y aumentar de peso fueron evidenciados como causales psicológicas que contribuyen al desarrollo de los Trastornos antes mencionados. En concordancia con los datos expuestos por Baer (2002); Baer y Bray (1991); Baer, Kivlahan y Marlatt (1995); Schulenburg y Maggs (2002); Schulenburg, Maggs, Sher, Gothman, Baer, et al. (2001), el rigor académico del primer año, las normas sociales universitarias que promueven el uso de alcohol y la drástica disminución en la supervisión de los padres contribuyen a que los estudiantes universitarios recurran a la practica de la Ebriorexia. A su vez, los planteamientos de Steiger y Seguin (1999) son cónsonos con los hallazgos al plantear que los Trastornos Alimentarios representan un riesgo elevado de que las personas puedan experimentar Trastornos del Estado de Ánimo, Trastornos de Ansiedad, Trastornos de Sustancias/drogas y Trastornos de Personalidad. En síntesis, a partir de los hallazgos en la muestra de investigaciones analizadas en los Estados Unidos de Norteamérica se corrobora la asociación entre el consumo de alcohol con las dietas, la influencia de las presiones socioculturales, de grupo e insatisfacción con la imagen corporal en el desarrollo de conductas relacionadas a la Ebriorexia. A pesar de los avances en la tecnología, la difusión masiva de los efectos 94 negativos de esas conductas y las estrategias que se han implementado durante el pasado y el presente siglo, no se ha encontrado aún la manera de evitar esos problemas entre los jóvenes. De acuerdo con Chavez e Insel (2007) los conocimientos y tratamiento psicológicos para atender los Trastornos Alimentarios son significativamente limitados; más aún la condición de Ebriorexia. Por cuanto, resulta revelador identificar factores que originan el Trastornos de la Ebriorexia entre los jóvenes para desarrollar programas enfocados a la prevención y promoción de la salud. La Tabla 7 resume los resultados del análisis de las investigaciones llevadas a cabo en Europa vinculadas con los factores fisiológicos y psicológicos vinculados con la Ebriorexia. Tabla 7 Resumen de resultados analizados de Europa: Factores Fisiológicos y Psicológicos Latinoamérica Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vincualada con Ebriorexia Factores Fisiológicos Factores Psicológicos Peláez, Labrador y Raich (2004) España Epidemiología de los trastornos de la conducta alimentaria en España: Revisión y estado de la cuestión −− −− (28,858) Trastornos de la Conducta Alimentaria Control régimen dietético (peso, figura corporal) Incidencia (modelaje) consumo adictivo de drogas, alcohol, tabaco. Imagen/apariencia física (delgadez). Resistencia a tratamientos −− −− Hagger, Lonsdale y Nikos (2012) Reino Unido A theory-based intervention to reduce alcohol drinking in excess of guideline limits among undergraduates students Consumo de alcohol Consumo excesivo de alcohol Presión de grupo (pares) (638) 95 Tabla 7 continuación Resumen de resultados analizados de Europa: Factores Fisiológicos y Psicológicos Latinoamérica Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Factores Fisiológicos Factores Psicológicos Knight y Simpson (2013) Australia Drunkorexia: An empirical investigation of disordered eating in direct response to saving calories for alcohol use amongst Australian female university students 139 Ebriorexia Control régimen dietético (peso, figura corporal) Imagen/apariencia (delgadez) Total −− (−−) 139 −− (29,635) Del análisis de los datos obtenidos a través de los tres estudios localizados en Europa (España, Reino Unido, Australia) vinculados al Trastorno de la Ebriorexia se desprende que aparenta ser que el origen de la condición, desde la perspectiva de los Factores Fisiológicos se relaciona con el control del régimen en las dietas para reducir el peso con el fin de mantener una figura corporal esbelta y a la pobre atención al aspecto de la salud personal. Al respecto, Park y Beaudet (2007), así como Vaquero-Cristóbal, Alacid, Muyor y López-Miñarro (2013) mencionan que los regímenes alimentarios extremos a los fines de obtener y/o mantener una figura esbelta atemperada al ideal que prevalece socialmente representa una de las causas que conduce al desarrollo de los Trastornos en la conducta Alimentaria. Esta condición, como la pobre atención que las personas prestan a su salud deteriora la calidad de vida de acuerdo con Konrad, Neufang, Hanisch, Fink, Herpetz (2006). Estos hallazgos, también son cónsonos con lo planteado por Chambers (2008) quien indica que este trastorno es caracterizado por la omisión de comidas para ahorrar calorías y compensar las mismos con un incremento en la ingesta 96 calórica proveniente del consumo de bebidas alcohólicas. Añade que la ingesta de alcohol sin tener los nutrientes necesarios puede provocar alteraciones graves de la conducta a corto y medio plazo. A su vez, menciona que produce daño en los órganos vitales cuando se consume en exceso en edades tempranas y sin estar alimentado puede significar el desarrollo de enfermedades crónicas. Por otra parte, de acuerdo con las especificaciones del DSM-5, el TCA se caracteriza por una perturbación persistente de alteraciones en los hábitos o patrones alimentarios que afecta directamente a la salud física y emocional; alterando como consecuencia la conducta y el funcionamiento social de la persona (American Psychiatric Association, 2013). No obstante, entre las categorías diagnosticadas principalmente se circunscribe a los Trastornos de Anorexia y Bulimia Nerviosa, aunque incluye descripciones para el TCA No diferenciadas o especificadas en la que no se menciona la condición de la Ebriorexia. Sin embargo, la comorbilidad y el deterioro de la salud física y psicológica que se genera como consecuencia del alto consumo de alcohol en la persona según evidenciado en las investigaciones analizadas en este estudio, amerita que las autoridades a cargo de la revisión del DSM reconozcan y clasifiquen formalmente la condición como Trastornos de Ebriorexia, Desde la perspectiva de los Factores Psicológicos de igual forma, el origen parece ser producto de condiciones tales como: incidencia adictiva por modelaje, conservar una imagen/apariencia delgada y la presión de grupo a consumir en exceso drogas, alcohol y tabaco. En este sentido, Portela de Santana, da Costa Ribeiro Junior, Mora Giral y Raich (2012) plantearon que los TCA al alterar los diferentes sistemas del organismo se altera igualmente aspectos que tienen que ver con las relaciones sociales. En otras palabras, 97 ocurre un cambio en la forma y manera en que las personas se relacionan con otras personas, en su forma de actuar; lo cual trastoca las estructuras psico-emocionales y mentales. Autores como Flament, Godart, Fermanian y Jeammet (2001); Konrad, Neufang, Hanish, Fink y Herpetz (2006) concurren en que las perturbaciones psicosociales implican graves riesgos para la comorbilidad y daños a la salud en general. De acuerdo con los hallazgos, la psicopatología que emerge consistentemente valida los planteamientos de Garner y Bemis (1982), acerca de que las ideas y sentimientos en la persona al sobrevalorar el peso y la imagen corporal o apariencia física de delgadez u obesidad provocan e inician estos trastornos de conductas disfuncionales. Al respecto señalan Ekstrand y Roca Villanueva (2011) que la persona al percibir su figura, peso corporal, imagen o apariencia se juzgan y se autocritican dando lugar a conductas disfuncionales tal y como se describen y se evidencia en los estudios analizados. A continuación se presenta la Tabla 8 que incluye los resultados del análisis de investigaciones en el tema de la Ebriorexia realizadas en Latinoamérica. Tabla 8 Resumen de resultados analizados en Latinoamérica: Factores Fisiológicos y Psicológicos Latinoamérica (n=6) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculadas con Ebriorexia Factores Fisiológicos Factores Psicológicos Behan (2004) Chile Consumo de alcohol y trastornos de la conducta alimentaria: Evidencia, similitudes e implicancias (No se indica) Consumo de alcohol (cambios patrones alimentarios) Cambio régimen alimentario/dietético Figura corporal (peso) Personalidad adictiva Insatisfacción corporal (delgadez) 98 Tabla 8 continuación Resumen de resultados analizados en Latinoamérica: Factores Fisiológicos y Psicológicos Latinoamérica (n=6) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Londoño, Vinaccia (2005) Colombia Prevención del abuso en el consumo de alcohol en jóvenes universitarios: Lineamientos en el diseño de programas costo efectivos (No se indica) Cano, Castaño, Corredor, García, González, Lloreda y Lucero (2007) Colombia Factores de riesgo para trastornos de la alimentación en los alumnos de la Universidad de Manizales −− −− (165) Trastornos Alimentarios Aumento índice masa corporal (Varones) Disminución peso (féminas) Preocupación por imagen corporal Antecedentes familiares (Historial obesidad, sobrepeso, Anorexia, Bulimia) Díaz Martínez [A]., Díaz Martínez [R]., Hernández-Ávila, Narro, Fernández y Solís (2008) México Prevalencia del consumo riesgoso y dañino de alcohol y factores de riesgo en estudiantes universitarios de primer ingreso −− −− (15,842) Consumo de alcohol (factor sociodemográfico de riesgo) Cambio en conducta: Nivel socioeconómico (Ingreso, Educación, carga laboral) Presión sociocultural (grupos, acceso/exposición ingesta de alcohol) Cordero, [M]., Cordero, [R]., Natera y Caraveo (2009) La Terapia Centrada en Soluciones. Una opción de tratamiento para la dependencia al alcohol −− −− (60) Trastorno de Alimentación Comorbilidad (adicción severa al alcohol) Resistencia a tratamientos (Inconsistencia) Lefio, Villarroel, Rebolledo, Zamorano, Rivas (2013) Chile Intervenciones eficaces en consumo problemático de alcohol y otras drogas (No se indica) Consumo de alcohol y drogas Comorbilidad (adicción severa al alcohol) Personalidad adictiva Total Condición Tratada Vinculadas con Eriorexia Consumo de alcohol (cambios patrones alimentarios) −− −− (16,067) 99 Factores Fisiológicos Cambio en conducta (afrontamiento de problemas) Factores Psicológicos Presión sociocultural (ingesta de Alcohol) Aumentar potencia sexual. Disminución de estrés De acuerdo con la segunda pregunta, las investigaciones analizadas en Latinoamérica (n= 6) vinculadas con el Trastorno de Ebriorexia evidencian entre los Factores Fisiológicos la existencia de comorbilidad , cambios en el régimen alimentario/dietético, aumento o disminución del peso de la figura corporal, formas de afrontar problemas y que el nivel socioeconómico inician conductas que afectan directamente la salud física en la persona. Este hallazgo es cónsono con los planteamientos de Cano, Castaño, García, González, Lloreda y Lucero (2007) quienes señalan que la tendencia al perfeccionamiento y el control excesivo son un detonante en el desarrollo de Trastornos de la Conducta Alimentaria (TAC). De igual forma, en el DSM-5 se establece que la alteración sistemática en el patrón de hábitos alimentarios por condiciones adictivas, en la que se incluye el exceso de consumo de alcohol, perjudica significativamente la salud física y el funcionamiento psicosociales (American Psychatric Association, 2013). En específico, Behan (2004) señaló que clínicamente el abuso de alcohol, entre otras sustancias controladas, son un riesgo de tal magnitud que representa una amenaza vital a la salud física e incluso la pérdida de la vida dada las condiciones nutricionales y metabólicas que desarrollan de estos pacientes. También Fairburn, Cooper y Shafran (2003) identificaron como un aspecto clave en el desarrollo de conductas psicopatologícas que afectan, la salud física resulta ser el control excesivo que la persona genera para evitar aumentar de peso y mantener el peso que se considera ideal. Por otra parte, entre los Factores Psicológicos que originan conductas disfuncionales vinculadas con la Ebriorexia se destacan: personalidad adictiva, insatisfacción corporal (delgadez), presiones socioculturales, preocupaciones por 100 aumentar potencia sexual, disminuir el estress y la resistencia/inconsistencia a recibir tratamientos. En este sentido, señalan Díaz Martinez[A], Díaz Martinez[R], HernándezÁvila, Narro, Fernández y Solís (2008) que la presión sociocultural es un factor que afecta psicológicamente en la persona. Indicaron al respecto que desencadenan conductas que les desestabilizan en el ámbito privado y personal vinculadas con su desempeño en diferentes contextos/ambientes con los que se relacionan. Los hallazgos, a su vez, avalan lo expuesto en el Modelo Conductual desarrollado por Farburn (1985; 2003; 2008). Según este Modelo el Trastornos de Conducta Alimentaria (TCA) se caracteriza por la incapacidad de autocontrol frente a las distintas situaciones, toda vez que les conduce al desarrollo de distorsiones cognitivas vinculadas con la autoevaluación, autoestima, los cambios de ánimo y dificultades en sus relaciones interpersonales. Añade el autor que tales condiciones se encuentran en las descripciones que llamó el transdiagnóstico poque incluye: la Anorexia, Bulimia y el TCA No Específico establecidas por las autoridades en la American Psychiatric Association (2000). En este aspecto, el Trastorno de Ebriorexia estaría contenido en el diagnóstico del TCA No Específico. Las dos investigaciones realizadas en Puerto Rico y analizada para este estudio se incluyen a continuación. La Tabla 9 resume los hallazgos por cada estudio. 101 Tabla 9 Resumen de resultados de estudios analizados en Puerto Rico: Factores Fisiológicos y Psicológicos Puerto Rico Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculadas con Ebriorexia Factores Fisiológicos Factores Psicológicos Reyes-Rodríguez, Franko, MatosLamourt, Bulik, Von Holle, Cámara-Fuentes, RodríguezAngleró, Cervantes-López y Suárez-Torres (2011) Río Piedras Eating disorder symptomatology: Prevalence among latino college freshmen students 1,429 722 (2,151) Trastornos Alimentarios Control régimen alimentario (peso) Insatisfacción imagen corporal Reyes-Rodríguez, Sala, Von Holle, Unikel, Bulik, Cámara-Fuentes, Suárez-Torres (2011) Río Piedras A Description of disordered eating behaviors in latino males −− Trastornos Alimentarios Control régimen alimentario (peso) Insatisfacción imagen corporal. Presiones (carga académica, estrés, estatus independencia Personal) 709 (709) 1,429 1,431 (2,860) Total Del análisis se desprende que el Factor Fisiológico que se destaca en el origen del trastorno de la Ebriorexia tiene que ver con el control y régimen alimentario para controlar el peso. A pesar de que sólo se localizaron dos estudios realizados en la Isla, una vez más se valida el hecho de que las dietas rigurosas para contrarrestar el incremento calórico de las bebidas alcohólicas y perder peso tienen efectos nocivos en la salud física de las personas que redunda en Trastornos Alimentarios como consecuencia según señalan autores como Chamay-Weber, Narring y Michaud (2005). De forma consistente los hallazgos evidencian, de acuerdo con Fairburn, Cooper y Shafran (2003), que este tipo de comportamiento tiene consecuencias perjudiciales en la salud que correlacionan con los desórdenes alimentarios dado que comparten más características entre sí que diferencias. 102 En términos de Factores Psicológicos se observó, en general, que en ambos estudios surge la insatisfacción con la imagen corporal; aunque en uno se destacan las presiones a las que se enfrentan que afectan su funcionamiento y desempeño en los diferentes escenarios que confrontan. A estos efectos, mencionan Portela de Santana, Da Costa Ribeiro Junior, Mora Giral y Raich (2012) que los TCA involucran, como se evidencia, diferentes sistemas de origen bio-psico-social. Indican que estos sistemas incluyen las relaciones interpersonales, emocionales y mentales que se alteran según el diagnóstico de Anorexia Nerviosa que se presenta en el DSMA-5 (American Psychiatric Association, 2013) en el sentido de que están vinculadas con el miedo de aumentar de peso y por otro lado con el adoptar conductas antisociales y de intensa preocupación. La Tabla 10 incluye los hallazgos acerca de los Factores Fisiológicos y Psicológicos por cada país. Tabla 10 Resumen de resultados por países: Factores Fisiológicos y Psicológicos País Año Total de Estudios Total de Participantes Condición Vinculada con Ebriorexia Estados Unidos (2002-2014) 13 32,552 Consumo de 13 alcohol Ebriorexia 7 Cambios 2 patrones alimentarios Trastornos 1 Alimentarios 1 Conductas Alimentarias Compensatorias f 103 Factores Fisiológicos f Factores Psicológicos Control de calorías ajustado a los estándares de belleza Desconocimiento del contenido calórico de las bebidas alcohólicas y efectos de salud Comorbilidad entre dietas y consumo de alcohol Restricción de alimentos o ingesta calórica Prácticas extremas para el control del peso Restricción extrema de calorías para aumentar efecto del alcohol 2 Consumo de alcohol por presión sociocultural 1 Atracón por ingesta desmedida de alcohol Disfunción general de la conducta 4 adictiva Manejo de conducta independiente 1 Temor a perder control y aumentar de peso 3 Insatisfacción imagen corporal 3 Baja autoestima f 7 1 3 2 4 3 3 Tabla 10 continuación Resumen de resultados por país: Factores Fisiológicos y Psicológicos País Año Total de Estudios Total de Participantes Condición Vinculada con Ebriorexia f Factores Fisiológicos f Factores Psicológicos f Europa (2004-2013) 3 29,635 Consumo de alcohol Trastornos Alimentarios Ebriorexia 1 Control régimen dietario (peso, figura corporal) Consumo excesivo de alcohol, restricción dietética 2 Consumo/Ingesta de alcohol por modelaje de drogas, tabaco Imagen/apariencia física (delgadez) Resistencia al tratamiento Presión de grupo (pares) 1 Personalidad adictiva Insatisfacción corporal Presiones socioculturales Antecedentes familiares de obesidad, sobrepeso, anorexia o bulimia 2 Latinoamérica (2004-2013) 6 16,067 Puerto Rico (2010-2011) 2 2,860 Total 24 81,114 Consumo de alcohol Trastornos Alimentarios 1 1 5 1 Trastorno Alimentario 1 Comorbilidad entre trastorno de la conducta alimentaria y abuso de alcohol Aumento por la delgadez se incrementa con el aumento del índice de masa corporal 1 Prácticas alimentarias extremas para el control de peso 2 1 Insatisfacción Imagen Corporal 2 1 1 2 1 1 2 El análisis de los estudios llevados a cabo en los Estados Unidos de Norteamérica, Europa, Latinoamérica y Puerto Rico evidenciaron Factores Fisiológicos y Psicológicos que originan conductas disfuncionales vinculadas con la Ebriorexia. En términos globales los Factores Fisiológicos que se destacaron fueron los siguientes: prácticas extremas para el control del peso (f=12), comorbilidad entre régimen dietario y consumo de alcohol (f=6), control de calorías ajustado a los estándares de belleza (f=2), cambio conducta para aumento del índice de masa corporal (f=1) y desconocimiento del contenido calórico de las bebidas alcohólicas y efectos de salud (f=1). Por otra parte, los 104 Factores Psicológicos identificados fueron: presiones socioculturales, académicas, financieras (f=9), insatisfacción con la imagen/apariencia corporal (f=9), personalidad adictiva (f=6), temor a perder control y aumentar de peso (f=4) y manejo de conducta independiente (f=2). En menor frecuencia se identificaron: atracón por ingesta desmedida de alcohol (f=1), baja autoestima (f=1), resistencia al tratamiento (f=1) y antecedentes familiares de obesidad, sobrepeso, anorexia o bulimia (f=1). En términos Fisiológicos, estos hallazgos consistentemente corroboran los planteamiento acerca de los Trastornos de Conductas Alimentarias incluyendo la Ebriorexia que han presentado autores como: Krahn, Kurth, Gomberg y Drewnoski (2005). Éstos destacaron la relación entre hacer dietas y el alto riesgo de desarrollar problemas de salud relacionados al uso de diversos tipos de sustancias psicoactivas y aumento en la sangre de etanol ante el consumo excesivo de alcohol entre los estudiantes universitarios. Por otra parte, Danksy, Brewerton y Kilpatrick (2000), Goebel, Scheibe, Grahling y Striegel-Moore (1995), O’Brien y Vicent (2003) indicaron que existe una relación positiva entre los Trastornos Alimentarios, el abuso de alcohol y la dependencia a otras sustancias de carácter adictivo. Según se evidencia las prácticas extremas para el control de peso son resultado de la dificultad que enfrentan los jóvenes universitarios para mantener un peso normal a lo largo de la vida universitaria como consecuencia del desajuste entre la ingesta de alcohol, consumo de calorías y el gasto energético. Fairbun, Cooper y Shafran (2003) por su parte, definieron estas conductas como un núcleo psicopatológico, incluso de comorbilidad, que tiende a automantenerse de no intervenir y atender la condición disfuncional. 105 En términos de los Factores Psicológicos se evidencia que las presiones socioculturales y de grupo para cumplir con las normas de delgadez, académicas y económicas ejercen gran influencia en el desarrollo de la Ebriorexia. Concurrentemente surge la preocupación por la imagen corporal lo cual conduce a la adopción de conductas extremas para el control del peso. Por consiguiente, se observa que los Factores Fisiológicos y Psicológicos convergen en el desarrollo de este trastorno que finalmente afecta significativamente la salud. Estos hallazgos concuerdan con lo planteado por Baer, (2002), Baer y Bary (1991), Baer, Kivlahan y Marlatt (1995), Schulenburg y Maggs (2002), Schulenburg, Maggs, Sher, Gotham, Baer, et al. (2001) acerca de que durante el primer año de estudio universitario el estudiante se enfrenta a serios cambios académicos, sociales y a la disminución en la supervisión de los padres; toda vez que esta combinación de eventos promueve que recurran a la práctica de la Ebriorexia. Cónsono con los postulados de Vaquero-Cristobal, Alacid, Muyor y López-Miñarro (2013), se desencadena la preocupación por la imagen corporal. Según estos autores, tal preocupación provoca alteraciones perceptuales y psicológicas que alteran la conducta alimentaria. A estos efectos, indicaron Keel, Dorer y Eddy (2003) que estas alteraciones representan un riesgo para desarrollar posteriormente Trastornos del Estado de Animo, Trastornos de Ansiedad, Abuso de sustancias psicoactivas y de Personalidad. La tercera pregunta de investigación a discutir lee como sigue: ¿Cuáles son lo síntomas psicológicos y fisiológicos que identifican y definen la condición de Ebriorexia de acuerdo con los hallazgos en las investigaciones de los últimos años revisados? A los fines de dar respuesta a la pregunta formulada, la Tabla 11 resume los resultados del análisis de las investigaciones llevadas a cabo en los Estados Unidos. 106 Tabla 11 Resumen de resultados de estudios analizados en los Estados Unidos: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos Estados Unidos Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Síntomas Fisiológicos Síntomas Psicológicos Peralta (2002) Ohio Alcohol use and the fear of weight gain in college: Reconciling two social norms 37 Consumo de Alcohol y régimen dietario (Cambios patrones alimentarios) Dietas extremas, purga inducida, ejercicio excesivo Preocupación y ansiedad Larimer y Cronce (2002) Washington Identification, prevention and treatment: A review of indiviual-focused strategies to reduce problematic alcohol consumption by college students −− −− 3,635 Consumo de alcohol (Factores de riesgo) Cambios actividades educativas universitarias Cambios en valores Lloyd-Richarson, Lucero, DiBello, Jacobson y Wing (2008) Massachusetts The relationship between alcohol use, eating habits and weight change in college freshman 172 110 (282) Consumo de Alcohol (Cambios patrones alimentarios) Sobrealimentación (aumento de apetito), selección inadecuada de alimentos, aumento en masa corporal: sobrepeso y obesidad Pobre compromiso con la salud, no estar conscientes o indiferencia a los efectos en el consumo de alcohol Heidelberg, Correia (2009) Estados Unidos Dieting behavior and alcohol use behaviors among national eating disorders screening program participants −− −− (70) Consumo de Alcohol Trastornos Alimentarios Aumento en la ingesta de alcohol y sustancias controladas. Disminución en el consumo de alimento Depresión, ansiedad, trastornos de ánimo, trastornos de personalidad Giles, Champion, Sutfin, McCoy, Wagoner (2009) Calorie restriction on drinking consequences among college students −− −− (4,271) Ebriorexia Pérdida de memoria, involucración en peleas físicamente, actividades sexuales de riesgo Desinhibición de la conducta sexual, Agresividad en la conducta 41 (78) 107 Tabla 11 continuación Resumen de resultados de estudios analizados en los Estados Unidos: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos Estados Unidos Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Síntomas Fisiológicos Síntomas Psicológicos Burke, Cremeens y Vail-Smith (2010) Drunkorexia: Calorie restriction prior to alcohol consumption among college freshman −− −− (692) Ebriorexia Pérdida de memoria momentánea. Aumento en la toxicidad de alcohol puede llevar a daño cerebral, de órganos, alteración del proceso metabólico y regulación de los niveles de azúcar en sangre. Hipoglicemia Conductas negativas copiadas de su pares/grupos Stover (2011) EU Drunkorexia and eating up the media (No se indica) Ebriorexia No se indica Baja autoestima y presión pares/grupo Barry, PiazzaGardner (2012) EU Drunkorexia: Understanding the co-occurrence of alcohol consumption and eating/exercise weight management behaviors −− −− (22,488) Ebriorexia Conductas compensatoria: Purga inducida, uso laxantes y fármacos para control de apetito. Actividad física excesiva Cambio en actitudes hacia la alimentación Bryant, Darkes y Rahal (2012) Tampa College students’ compensatory eating and behaviors in response to alcohol consumption 223 51 (274) Consumo de Alcohol, (Conductas Alimentarias Compensatorias) Conducta compensatoria: Intoxicación por alcohol, purga inducida, uso de laxantes, actividad física excesiva Cambio en actitudes hacia la alimentación Dierks (2013) Miami A risky cocktail: An examination of drunkorexia behaviors and alcohol consumption base on gender 178 76 (254) Ebriorexa Aumento en la ingesta de alcohol Cambios en las actitudes hacia la alimentación Buenger (2013) Ohio Drinking your way to success? Discovering the correlation between academic major and drunkorexic tendencies 178 76 (254) Ebriorexia Ingesta excesivo de alcohol Influencias especialidades académicas 108 Tabla 11 continuación Resumen de resultados de estudios analizados en los Estados Unidos: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos Estados Unidos Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Síntomas Fisiológicos Síntomas Psicológicos Babiaz, Ward y Brinkman (2013) Miami Examination of drunkorexia, excessive exercising, and extreme drinking 177 77 (254) Ebriorexia Actividad física excesiva Obsesión por imagen corporal Scott-Sheldon, Carey, Elliot, Garey (2014) Providence, Rhode Island Efficacy of alcohol intervention for the first-year college students: A metaanalytic review of randomized controlled trials (No se indica) Consumo de alcohol Aumento en la ingesta de alcohol Exploración de identidad y nuevas libertades Total 966 279 32,552 Cabe destacar que los Trastornos Alimentarios se han estado estudiando sistemáticamente por los pasados 30 años (Halmi, Sunday, et al. 2003). De este proceso surge su clasificación fundamentada en los síntoma. La tercera pregunta de investigación identifica en el presente estudio los Síntomas Fisiológicos y Psicológicos vinculados a la Ebriorexia. Se evidencia entre los Síntomas Fisiológicos que la disminución o aumento en la ingesta de alimentos, el aumento en consumo de alcohol, la práctica excesiva de ejercicios, las dietas extremas, la obesidad, el sobrepeso, la sobrealimentación y las conductas compensatorias (purga inducida, uso de laxantes y fármacos para control de apetito) tienen repercusión en la salud física de la población estudiada. De igual forma, la pérdida de memoria, la agresividad y las actividades sexuales de riesgo fueron mencionadas. Estos hallazgos son cónsono con los planteamientos de Barry, PiazzaGardner (2002), Bryant, Darkes y Rahal, (2012) y Dierks (2013) quienes señalan que la 109 presión de cumplir con las normas sociales y los estándares de belleza (delgadez) lleva a los estudiantes a recurrir a prácticas perjudiciales a la salud como la inducción del vómito, uso de laxantes, diuréticos, fármacos para reducir el apetito y el ejercicio intenso. También Chamay-Weber, Narring y Michaud (2005) identificaron que realizar ese tipo de dietas extremas , recurrir al ayuno, eliminar comidas, realizar ejercicios de forma excesiva e inducir el vómito conlleva un alto riesgo para el desarrollo de conductas negativas a nivel físico y psicológico que redundan en alguno de los Trastornos Alimentarios; desde la Anorexia, la Bulimia y los Trastornos No Especificados. Por otra parte, entre los Síntomas Psicológicos que originan conductas disfuncionales vinculadas con la Ebriorexia se destacan: depresión, ansiedad, trastornos de ánimo, de personalidad, desinhibición sexual, baja autoestima, agresividad, compulsividad por la comida, cambios en valores, actitudes, inlfluencia de pares/grupos y manejo de libertades. En este sentido, señalan Flament, Godart, Fermanian y Jeammet (2001); Halmi, Eckert, Marchi, Sampugnaro, Apple y Cohen (1991); Kaye, Bulik, Thorton, Barbarich y Masters (2004) que los desórdenes alimentarios por lo regular ocurren en conjunto con otros trastornos psiquiátricos y perturbaciones que incluyen, depresión, ansiedad, obsesiones, Trastornos de Abuso de Sustancias como el alcohol y un marcado impedimento en el funcionamiento social. A tales efectos, Konrad, Neufang, Hanish, Fink y Herpetz (2006) indican que tales condiciones representan un grave riesgo para la comorbilidad psicosocial y mortalidad prematura. En síntesis, los resultados de las investigaciones reflejan que los trastornos alimenticios tienen una alta tasa de comorbilidad, en otras palabras, que a menudo se presentan junto con otros trastornos psicológicos. 110 Las investigaciones realizadas en Europa vinculadas con la utilización de los conceptos de Ebriorexia ,Trastornos Alimentarios y consumo de alcohol estuvo constituida por tres estudios. La Tabla 12 resume los resultados del análisis de las investigaciones analizadas. Tabla 12 Resumen de resultados de estudios analizados en Europa: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos Europa (n=3) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Peláez, Labrador y Raich (2004) España Epidemiología de los trastornos de la conducta alimentaria en España: Revisión y estado de la cuestión Hagger, Lonsdale y Nikos (2012) Reino Unido A theory-based intervention to reduce alcohol drinking in excess of guideline limits among undergraduates students Knight y Simpson (2013) Australia Drunkorexia: An 139 −− −− empirical investigation of disordered eating in direct response to saving calories for alcohol use amongst Australian female university students 139 −− 29,635 Total Participantes Género F M Ambos −− −− (28,858) −− −− (638) Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Síntomas Fisiológicos Síntomas Psicológicos Trastornos de la Conducta Alimentaria Alteración hábitos alimentarios Cambios en actitudes hacia la alimentación Consumo de alcohol Consumo/ingesta excesiva de alcohol Pobre compromiso con la salud Ebriorexia Alteración hábitos alimentarios, aumento en la ingesta de alcohol Cambios en la percepción/preocupación de imagen hacia la delgadez De acuerdo con la tercera pregunta de investigación acerca de los Síntomas Fisiológicos y Psicológicos para atender la Ebriorexia se evidencia, en términos fisiológicos, que mayormente los jóvenes universitarios alteran sus hábitos alimentarios a los efectos de restringir su ingesta calórica y aumentar el consumo de alcohol como 111 respuesta según se evidencia consecutivamente, a las presiones socioculturales de grupo relacionadas al peso y a la imagen corporal (delgadez). Estos síntomas convergen simultáneamente con los cambios en las actitudes y percepciones conducentes a la adopción de conductas poco saludables ante la preocupación de conservar una imagen corporal delgada y mantener altos niveles de consumo de alcohol. Estos hallazgos son cónsono con lo planteado por Chamay-Weber, Narring y Michaud (2005) en cuanto a que un porciento elevado de estudiantes universitarios han expresado someterse a dietas rigurosas para perder peso. En específico, Knight y Simpson (2013) señalaron que los estudiantes adoptan conductas relacionadas a la Ebriorexia para cumplir con las normas sociales relacionadas a la imagen corporal y al consumo de alcohol. Chambers (2008) plantea que la Ebriorexia se caracteriza por la restricción de calorías con el propósito de consumir bebidas alcohólicas sin aumentar de peso por, la actividad física en exceso el consumo excesivo de alcohol, el enfermarse y vomitar antes de consumir alimentos. ChamayWeber, Narring y Michaud (2005) sostienen que la práctica de someter el cuerpo a un régimen dietario inadecuado conlleva un alto riesgo de desarrollo de conductas negativas a nivel físico y psicológico. Flament, Godart, Fermanian y Jeammet (2001); Halmi, Eckert, Marchi, Sampugnaro, Apple y Cohen (1991); Kaye, Bulik, Thorton, Barbarich y Master (2004), plantearon que los desórdenes de alimentación por lo regular ocurren en conjunto con trastornos psiquiátricos y perturbaciones en lo que subyacen cambios significativos en las actitudes y percepciones que progresivamente se generan. Entre estos cambios en la conducta los autores de referencia incluyen la depresión, ansiedad, obsesiones, abuso de 112 sustancias como el alcohol, drogas y un marcado impedimento en el funcionamiento social. Según se evidencia, consistentemente aparenta ser que mayormente estas perturbaciones y trastornos psicopatológicos tienen sus raíces en las ideas y sentimientos sobre-exagerados que construye la persona acerca de si mismo tal y como lo plantean Garner y Bemis (1982). La Tabla 13 presenta los resultados obtenidos en el análisis acerca de los síntomas fisiológicos y psicológicos evidenciados en las investigaciones llevadas a cabo en Latinoamérica. Tabla 13 Resumen de resultados de estudios analizados en Latinoamérica: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos Latinoamérica Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Síntomas Fisiológicos Síntomas Psicológicos Behan (2004) Chile Consumo de alcohol y trastornos de la conducta alimentaria: Evidencia, similitudes e implicancias (No se indica) Consumo de alcohol (Cambios patrones alimentarios) Atracones de comida, vomito inducido Compulsividad con la comida, rasgos anoréxicos y bulímicos, depresión y tensión crónica Londoño y Vinaccia (2005) Colombia Prevención del abuso en el consumo de alcohol en jóvenes universitarios: lineamientos en el diseño de programas costo efectivos (No se indica) Consumo de alcohol (cambios patrones alimentarios) Aumento en la ingesta de alcohol Evasión/afrontamiento de problemas Necesidades de relacionarse/interactuar socialmente 113 Tabla 13 continuación Resumen de resultados de estudios analizados en Latinoamérica: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos Latinoamérica Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Síntomas Fisiológicos Síntomas Psicológicos Cano, Castaño, Corredor, García, González, Lloreda y Lucero (2007) Factores de riesgo para trastornos de la alimentación en los alumnos de la Universidad de Manizales −− −− (165) Trastornos de la Conducta Alimentaria Exceso de actividades extracurriculares, sobrealimentación, aumento en el índice de masa corporal Conducta impulsiva para adelgazar Díaz Martínez [A]., Díaz Martínez [R]., Hernández-Ávila, Narro, Fernández y Solís (2008) México Prevalencia del consumo riesgoso y dañino de alcohol y factores de riesgo en estudiantes universitarios de primer ingreso −− −− (15,842) Consumo de alcohol Lagunas mentales, lesiones autoinfligidas, actividades sexuales de riesgo Desinhibición de la conducta sexual Conductas antisociales Cordero, [M]., Cordero, [R]., Natera y Caraveo (2009) México La Terapia Centrada en Soluciones. Una opción de tratamiento para la dependencia al alcohol −− −− (60) Dependencia la alcohol Dependencia compulsiva al alcohol Relaciones familiares conflictivas Lefio, Villarroel, Rebolledo, Zamorano, Rivas (2013) Chile Intervenciones eficaces en consumo problemático de alcohol y otras drogas (No se indica) Consumo de alcohol y otras drogas (No se indica) Total No se identificaron síntomas psicológicos −− −− (16,067) A la luz del análisis se evidencia que a través de los seis estudios llevados a cabo en Latinoamérica vinculadas con el Trastorno de Ebriorexia, entre los Síntomas Fisiológicos se encuentran conductas alusivas a los atracones, vómito inducido, sobrealimentación, exceso de actividades físicas (ejercicios), aumento de índice de masa corporal, lagunas mentales, lesiones autoinfligidas, actividad sexual de alto riesgo y la dependencia compulsiva al alcohol. Este hallazgo es cónsono con los planteamientos 114 establecidos por la American Psychiatric Association (2013) y presentados en el DSM-5. En el DSM-5 se describe categóricamente que en las personas surge un miedo intenso ante el efecto de aumentar de peso y engordar. De modo que este sentimiento se convierte en uno persistente el cual conduce a la persona a adoptar conductas obsesivas e irracionales para bajar de peso. Cabe destacar que los Síntomas Fisiológicos identificados en los estudios relacionados a la Ebriorexia concurren con los criterios para el diagnóstico de Anorexia Nerviosa, Bulimia y Trastorno de Atracones. En este aspecto Cano, Castaño, Corredor, García, González, Lloreda y Lucero (2007) plantearon que entre los factores de riesgo en los Trastornos de la Conducta Alimentaria está el recurrir a conductas compensatorias como inducir el vómito, usar laxantes o diuréticos y hacer ejercicio en forma excesiva ante la preocupación por el aumento de masa corporal (engordar). Investigadores como Flament, Godart, Fermanian y Jeammet (2001); Halmi, Eckert, Marchi, Sampugnaro, Apple y Cohen (1991); Kaye, Bullik, Thornton, Barbarich, Masters (2004) han descrito los efectos devastadores que estas conductas tienen en los pacientes y familiares. Por otra parte, entre los Síntomas Psicológicos vinculados a la Ebriorexia se destacan la depresión, ansiedad, compulsividad por la comida, rasgos anoréxicos y bulímicos, tensión crónica, necesidad de relacionarse socialmente, desinhibición de la conducta sexual, conductas impulsivas, conflictivas y antisociales. En ese sentido, el estudio de Cano, Castaño, Corredor, García, González, Lloreda y Lucero (2007) evidenció una relación significativa entre el impulso por la delgadez, la ansiedad y la depresión. A su vez, la investigación de Díaz Martínez, [A.], Díaz Martínez, [R.], Hernández-Ávila, Narro Robles, Fernández Varela y Solís Torres (2008) evidenció que 115 los hombres tienden a experimentar con más frecuencia consecuencias relacionadas con conductas antisociales (discusiones y violencias) que afectarían al individuo y personas en su entorno y en la mujer es más común observar consecuencias en el ámbito privado y personal (desempeño académico deficiente, actividad sexual no consentida, lagunas mentales, pérdida de la memoria y lesiones autoinfligidas). Según queda evidenciado mediante el análisis a través de los estudios los síntomas fisiológicos y psicológicos aluden al desarrollo de estados mentales mórbidos y neuróticos análogos a las descripciones presentadas por Gordon (2000). Los Síntomas Fisiológicos y Psicológicos identificados en los estudios realizados en Puerto Rico se presentan a continuación. La Tabla 14 resume los resultados del análisis por cada estudio. Tabla 14 Resumen de resultados de estudios analizados en Puerto Rico: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos Puerto Rico Autor/Año Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Síntomas Fisiológicos Síntomas Psicológicos Reyes-Rodríguez, Franko, MatosLamourt, Bulik, Von Holle, Cámara-Fuentes, RodríguezAngleró, Cervantes-López y Suárez-Torres (2010) Río Piedras Eating disorder symptomatology: Prevalence among latino college freshmen students. 1429 722 (2151) Trastornos Alimentarios Dietas con niveles de severidad, purga autoinducida, Depresión, tendencias suicidas 116 Tabla 14 Resumen de resultados de estudios analizados en Puerto Rico: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos Puerto Rico Autor/Año Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Síntomas Fisiológicos Síntomas Psicológicos Reyes-Rodríguez, Sala, Von Holle, Unikel, Bulik, Cámara-Fuentes, Suárez-Torres (2011) Río Piedras A description of disordered eating behaviors in latino males −− Trastornos Alimentarios Purga inducida Depresión, baja autoestima, rasgos obsesivocompulsivo, ansiedad, intentos suicidas, perturbación en el funcionamiento social 709 (−−) 1,429 1,431 2,860 Total En los estudios realizados en Puerto Rico no se menciona directamente el Trastorno de la Ebriorexia, sin embargo, describen Síntomas Fisiológicos y Psicológicos relacionadas con esta condición. En términos de los Síntomas que afectan físicamente a la población estudiada se destacan: la purga inducida y el hacer dietas con niveles de severidad. Fairburn, Cooper y Shafran (2003) que plantean que estas conductas responden a un esquema disfuncional de autoevaluación donde la valía personal es juzgada principalmente por los esfuerzos destinados a alcanzar objetivos elevados y por el éxito de conseguirlos. En términos de Síntomas Psicológicos, se observó, en general, que en ambos estudios surge la depresión, baja autoestima, rasgos obsesivos compulsivo, ansiedad, intentos suicidas y perturbación social. A estos efectos, mencionan Fairburn, Cooper y Shafran (2003) que existen unos mecanismos mantenedores de los Trastornos 117 Alimentarios. Según los autores, estos mecanismos son: logro del perfeccionismo clínico, la baja autoestima y la intolerancia a los cambios del estado de ánimo como parte del esquema disfuncional en estas personas. Smolak y Striegel-Moore (2002) señalan que los Trastornos Alimentarios se caracterizan por disturbios clínicamente significativos acerca de la imagen corporal y las conductas alimentarias. La Tabla 15 resume los resultados de mayor relevancia evidenciados respecto a los Síntomas Fisiológicos y Psicológicos de forma integrada. Tabla 15 Resumen de resultados por países: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos País Años Total de Estudios Total de Participantes Estados Unidos (2002-2014) 13 32,552 Condición Vinculada con Ebriorexia Consumo de alcohol f Síntomas Fisiológicos f Síntomas Psicológicos f 13 2 Preocupación/Ansiedad Depresión 1 1 Ebriorexia 7 Trastornos de Ánimo, de Personalidad 1 Cambios en patrones alimentarios Trastornos Alimentarios 2 Ejercicios extremos para el control de peso Dietas Extremas Conductas compensatorias (purga inducida, laxantes, fármacos) Cambios educativos 1 Exploración de identidad y nuevas libertades 1 1 Pobre compromiso con la salud/Indiferencia a los efectos del consumo de alcohol 1 Conductas Alimentarias Compensatorias 1 Sobrealimentación (aumento masa corporal, sobrepeso, obesidad) Aumento/ingesta consumo de alcohol 5 Desinhibición conducta sexual de riesgo 1 Cambios en actitudes hacia la alimentación Conductas negativas copiadas Influencia por especialidad académica (consumo de alcohol) Obsesión imagen corporal 3 1 118 1 2 1 1 1 Tabla 15 continuación Resumen de resultados por países: Síntomas Fisiológicos y Psicológicos País Años Total de Estudios Total de Participantes Condición Vinculada con Ebriorexia Síntomas Fisiológicos f Síntomas Psicológicos f Estados Unidos (2002-2014) 3 Europa (2004-2013) 6 Latinoamérica (2004-2013) Puerto Rico (2010-2011) Total 2 24 29,635 16,0671 2,860 Consumo de alcohol Trastornos Alimentarios 1 Ebriorexia 1 Consumo/ dependencia de alcohol Cambios en patrones alimentarios Factores de riesgo Trastornos Alimentarios 4 Trastorno Alimentario 1 4 Alteración hábitos alimentarios Consumo/Ingesta de alcohol Atracones de comida Actividad Física excesiva/ extracurriculares Sobrealimentación (Aumento de masa corporal) 2 2 1 1 1 1 2 2 f Baja autoestima/valores 1 Pobre compromiso con la salud Cambio en actitudes, percepción, alimentación e imagen corporal 1 Percepción distorsionada de sí mismo Rasgo conducta obsesivo-compulsivo 1 2 1 Depresión 2 Tensión crónica/ansiedad 1 Lagunas mentales 1 Ansiedad 1 Lesiones autoinfligidas Actividad sexual de riesgo Aumento/ingesta de alcohol 1 Desinhibición conducta sexual Conductas antisociales conflictivas 1 Purga inducida 1 Depresión 2 Dietas severas 1 Baja autoestima Rasgos conductas obsesivo compulsivo Ansiedad Ideaciones suicidas Perturbación del funcionamiento social 1 1 1 2 3 1 2 1 81,114 El análisis de los estudios llevados a cabo en los Estados Unidos de Norteamérica, Europa, Latinoamérica y Puerto Rico evidenciaron Síntomas Fisiológicos y Psicológicos que identifican y definen conductas disfuncionales vinculadas con la Ebriorexia. En términos amplios los Síntomas Fisiológicos que se destacaron fueron los siguientes: aumento en el consumo/ingesta de alcohol (f=10), dietas y ejercicios extremos para el control de peso (f=6), conductas compensatorias (purga inducida, laxantes, lesiones 119 autoinfligidas, fármacos para control de apetito) (f=4), sobrealimentación, atracones (f=4), cambios educativos (f=1), pérdida de memoria y actividad sexual de alto riesgo (f=1), daños al organismo (cerebro; metabolismo, azúcares). En términos Fisiológicos, el consumo/ingesta de alcohol, la alteración de hábitos alimentarios, dietas y ejercicios extremos, así como las conductas compensatorias como la purga inducida, uso de laxantes, diuréticos, la sobrealimentación dietas, pérdida de memoria y conductas sexuales de riesgo son síntomas que caracterizan el Trastorno de la Ebriorexia. Estos hallazgos son cónsonos con síntomas descritos por las autoridades en la American Psychiatric Association (2013) acerca de los Trastornos Alimentarios. Las personas afectadas por el alto consumo de alcohol, según se evidencia, atraviesan por episodios igualmente disfuncionales para prevenir la ganancia de peso en función de la auto-evaluación que hacen del peso e imagen corporal. Estas conductas resultan en la alteración o pobre absorción de alimentos que perjudica significativamente la salud física y su funcionamiento psicosocial (American Psychiatric Association, 2013). De igual forma, la persona afectada por el alto consumo de alcohol que adopta conductas compensatorias para controlar y evitar aumentar de peso hace uso de laxantes y del vómito intencionado, entre otras conductas negativas a nivel físico y psicológico conducentes a los Trastornos Alimentarios (Chamay-Weber, Narring y Michaud, 2005). En términos de Síntomas Psicológicos se observó que la percepción distorsionada de sí mismo y la preocupación por la imagen corporal desencadenan una serie de síntomas que afectan emocionalmente en la persona. De acuerdo con el análisis, destacaron las conductas negativas, antisociales, agresivas (f=11), cambios en actitudes y estados de ánimo (f=6), la depresión (f=5), ansiedad (f=4), rasgos obsesivos-compulsivos 120 (f=3), baja autoestima (f=2), percepción distorsionada imagen corporal (f=1) y exploración de identidad y nuevas libertades (f=1). Estos síntomas concuerdan con los síntomas planteado por Flament, Godart, Fermanian y Jeammet (2001); Halmi, Eckert, Marchi, Sampugnaro, Apple y Cohen (1991); Kaye, Bulik, Thorton, Bararich y Masters (2004) acerca de que los Trastornos Alimentarios. Estos autores concurren en que por lo regular las perturbaciones que incluyen depresión, ansiedad, obsesiones, Abuso de sustancias como el alcohol y drogas degeneran el funcionamiento psicosocial de las personas al grado de generar trastornos psiquiátricos. Konrad, Neufang, Hanish, Fink y Herpetz (2006) también plantean que tales condiciones representan un grave riesgo para la comorbilidad psicosocial y mortalidad prematura. Por otra parte, Fairburn, Cooper y Shafran (2003) expusieron que la baja autoestima, además de generar actitudes y percepciones distorsionadas de su persona, es uno de los mecanismos mantenedores de los Trastornos Alimentarios. Indicaron que la persona que desarrolla una autoimagen negativa permanente se le dificulta el cambio y les crea una sensación de desesperanza de la propia capacidad de cambio. A su vez, plantearon que en algunos pacientes con Trastornos Alimentarios tienen problemas para afrontar de forma adecuada ciertos estados emocionales negativos (ira, ansiedad y depresión) e intentan modularlos con conductas desadaptativas como autolesiones o consumo de sustancias psicoactivas. También recurren a otros comportamiento como atracones, vómito inducido y ejercicios físico intenso para modular su estado de ánimo. Por consiguiente, los Síntomas Psicológicos, incluyendo los Fisiológicos, de la Ebriorexia se encadenan de forma reactiva alterando el bienestar y la salud del consumidor de alcohol. 121 La cuarta y última pregunta de investigación formulada está dirigida a conocer: ¿Qué implicaciones tiene el Trastorno de la Ebriorexia en la conducta de la persona? La Tabla 16 resume los resultados del análisis de las investigaciones llevadas a cabo en los Estados Unidos relacionados con las implicaciones en la conducta del Trastorno de Ebriorexia. Tabla 16 Resumen de resultados de estudios analizados en Estados Unidos: Implicaciones en la conducta Estados Unidos Autor/Año (n=13) Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Implicaciones en la conducta Peralta (2002) Ohio Alcohol use and the fear of weight gain in college: Reconciling two social norms 37 41 (78) Consumo de alcohol y la dieta (cambios patrones alimentarios) Desarrollo de conductas comórbidas para controlar y evitar aumentar de peso. Miedo y angustia ante la pérdida de su imagen corporal según la norma social de belleza y delgadez Larimer y Cronce (2002) Washington Identification, prevention and treatment: A review of individual-focused strategies to reduce problematic alcohol consumption by college students −− −− (3,635) Consumo de alcohol Deterioro de habilidades y destrezas funcionales Lloyd-Richarson, Lucero, DiBello, Jacobson y Wing (2008) Massachusetts The relationship between alcohol use, eating habits and weight change in college freshman 172 110 (282) Consumo de alcohol (cambios patrones alimentarios) Cambios significativos en la selección de alimentos de alto contenido calórico ocasionando el sobrepeso, obesidad y posibles estados de ánimo negativos Heidelberg, Correia (2009) Dieting behavior and alcohol use behaviors among national eating disorders screening program participants −− −− Consumo de alcohol Trastornos Alimentarios Desarrollo de conductas comórbidas disfuncionales para evitar aumentar de peso. Desórdenes en estados de ánimo, depresión y ansiedad. (70) 122 Tabla 16 continuación Resumen de estudios analizados en los Estados Unidos: Implicaciones en la conducta Estados Unidos Autor/Año (n=13) Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Implicaciones en la conducta Giles, Champion, Sutfin, McCoy, Wagoner (2009) Carolina del Norte Calorie restriction on drinking consequences among college students −− −− (4,271) Ebriorexia Prácticas extremas para controlar el peso en los patrones alimentarios Agresividad Actividad sexual de alto riesgo Burke, Cremeens y Vail-Smith (2010) Sudeste EU Drunkorexia: Calorie restriction prior to alcohol consumption among college freshman −− −− (692) Ebriorexia Desarrollo de conductas de riesgo negativas como dejar o restringir el ingerir alimentos ocasionando posibles daños al cerebro, enfermedades orgánicas Stover (2011) Drunkorexia and eating up the media (No se indica) (No se indica) Conducta disfuncional, devaluación autoestima, manipulable ante presión de grupo Barry, PiazzaGardner (2012) Drunkorexia: Understanding the cooccurrence of alcohol consumption and eating/exercise weight management behaviors −− −− Ebriorexia Desarrollo de conducta comórbidas compensatorias para controlar y evitar aumentar de peso y lograr el peso ideal Bryant, Darkes y Rahal (2012) Tampa College Students compensatory eating and behaviors in response to alcohol consumption 223 51 Consumo de Alcohol, Conductas Alimentarias Compensatorias Desarrollo de conducta comórbida, disfuncional, sobre exitación (eufórica) Dierks (2013) Miami A risky cocktail: An examination of drunkorexia behaviors and alcohol consumption base on gender 178 76 (254) Ebriorexia Desarrollo de conducta comórbida, disfuncional mayores en varones, aumento efecto de embriaguez Buenger (2013) Drinking your way to success? Discovering the correlation between academic major and drunkorexic tendencies 178 76 (254) Ebriorexia Aumento en el consumo de alcohol según la especialidad académica universitaria Desarrollo de conductas de riesgo negativas (desadaptativas/antisociales), deterioro en destrezas funcionales para atender estudios universitario Babiaz, Ward y Brinkman (2013) Miami Examination of drunorexia, excessive exercising and extreme drinking 178 76 (254) Ebriorexia Desarrollo de conducta comórbidas, restricción de alimentos, actividad física excesiva. Aumento del consumo de alcohol, deterioro en la salud (22,488) (274) 123 Tabla 16 continuación Resumen de estudios analizados en los Estados Unidos: Implicaciones en la conducta Estados Unidos Autor/Año (n=13) Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Implicaciones en la conducta Scott-Sheldom, Carey, Elliot y Garey (2014) Providence, Rhode Island Efficacy of alcohol intervention for the firstyear college students: A metanalytic review of randomized controlled trials (No se indica) Consumo de alcohol Desarrollo de conductas de riesgo o negativa a la salud como restringir ingesta de alimentos, deterioro en destrezas para atender estudios universitarios Total 966 279 32,552 La cuarta pregunta de investigación identifica en el presente estudio las Implicaciones en la conducta vinculadas a la Ebriorexia. En este aspecto, del análisis surge que el Trastorno de Ebriorexia implica mayormente el desarrollo de conductas comórbidas y compensatorias dado el hecho de que se alteran de forma significativa los hábitos alimentarios ante la preocupación, el miedo y la angustia por el peso y la imagen corporal. Otra de las implicaciones en la conducta, se encuentra en los cambios de actitudes y estados de ánimo en la persona tales como: conductas antisociales, violentas, conflictivas, depresión, ansiedad, devaluación de estima personal, deterioro en las destrezas y desarrollo de enfermedades que afectan su funcionamiento y la calidad de vida. Las Implicaciones en la conducta de la Ebriorexia son cónsonos con lo planteado en el Modelo Cognitivo Conductual por Fairburn, Cooper y Shafran (2003) y Garner y Bemis (1982) acerca de que las ideas, sentimientos sobrevalorados e importancia que la persona le otorga a la imagen corporal y el peso desencadenan una serie de conductas negativas perjudiciales para la salud. Exponen que algunos pacientes con Trastornos Alimentario tienen dificultad en afrontar de forma adecuada cierto estados emocionales 124 negativos. Por consiguiente, cuando experimentan cambios en su estado de ánimo son incapaces de reconocerlos y aceptarlos e intentan modular su estado anímico con conductas desadaptativas como las de tipo restrictivo, purgativo y realizar ejercicios físico intenso. A su vez, exponen Heidelberg y Correira (2009) que el someterse a un régimen dietario exacerba la relación positiva entre el uso de alcohol y los problemas relacionados al mismo. Por lo que surgen un amplio rango de conductas negativas para la salud. En síntesis, las implicaciones en la conducta de la Ebriorexia afectan y alteran el funcionamiento total de la persona en todas sus dimensiones; sociales y personales (salud física emocional/mental y espiritual). La Tabla 17 resume los resultados del análisis de las investigaciones llevadas a cabo en Europa. Tabla 17 Resumen de resultados de estudios analizados enEuropa: Implicaciones en la conducta Europa (n=3) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Implicaciones en la conducta Peláez, Labrador y Raich (2004) España Epidemiología de los trastornos de la conducta alimentaria en España: Revisión y estado de la cuestión −− −− (28,858) Trastorno de la Conducta Alimentaria Desarrollo de conductas negativas, autodegenerativas por consumo de sustancias, alcohol y de resistencia al tratamiento Hagger, Lonsdale y Nikos (2012) Reino Unido A theory-based intervention to reduce alcohol drinking in excess of guideline limits among undergraduates students −− −− (638) Consumo de alcohol Deterioro en el funcionamiento social Knight y Simpson (2013) Australia Drunkorexia: An empirical investigation of disordered eating in direct response to saving calories for alcohol use amongst Australian female university students 139 −− −− Ebriorexia Desarrollo de conductas comórbidas para controlar y evitar aumento de peso Total 139 29,635 125 De acuerdo con los resultados presentados en cada investigación realizada en Europa vinculadas con el Trastorno de Ebriorexia se evidencia que las Implicaciones en la conducta de esta condición tiene que ver con el desarrollo de conductas negativas, autodegenerativas, comórbidas y de deterioro en el funcionamiento social. A estos efectos, Knight y Simpson (2013) evidenciaron que existe una relación positiva entre consumir alcohol en exceso y el desarrollo de Trastornos Alimentarios en el sentido de que se altera el comportamiento y las actitudes en función de controlar y evitar el aumento de peso. El desarrollo de conductas negativas a nivel físico y psicológico resulta, por una parte, de que la persona afectada por el alcohol no reconoce la seriedad de la condición; por lo que se resiste a buscar ayuda. Por otro lado, de acuerdo con el Modelo Cognitivo-Conductual, la persona afectada desarrollo un sistema disfuncional de autoevaluación al percibir y juzgar críticamente su imagen, relaciones interpersonales, entre otras áreas de su vida de forma negativa (Ekstrand y Roca Villanueva, 2011). La Tabla 18 resume los resultados del análisis de las investigaciones llevadas a acabo en Latinoamérica. Tabla 18 Resumen de resultados de estudios analizados en Latinoamérica: Implicaciones en la conducta Latinoamérica (n=6) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Implicaciones en la conducta Behar (2004) Chile Consumo de alcohol y trastornos de la conducta alimentaria: Evidencia, similitudes e implicancias (No se indica) Consumo de alcohol (cambios patrones alimentarios) Desarrollo de conductas comórbidas. 126 Tabla 18 continuación Resumen de resultados de estudios analizados en Latinoamérica: Implicaciones en la conducta Latinoamérica (n=6) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Implicaciones en la conducta Londoño, Vinaccia (2005) Colombia Prevención del abuso en el consumo de alcohol en jóvenes universitarios: Lineamientos en el diseño de programas costo-efectivos (No se indica) Consumo de alcohol (cambios patrones alimentarios) Desarrollo de conductas evasivas para afrontar conflictos y búsqueda de aceptación social. Cano Correa, Castaño, Corredor Zuluaga, García Ortíz, Bedoya, Lloreda Chala y Cardona (2007) Colombia Factores de riesgo para trastorno de la alimentación en alumnos de la Universidad de Manizales −− −− (165) Trastornos de Alimentación Desarrollo de conductas de riesgo según el impulso a la delgadez Díaz Martínez, [A]., Díaz Martínez, [R]., Hernández-Ávila, Narro Robles, Fernández Varela y Solís Torres (2008) México Prevalencia del consumo riesgoso y dañino de alcohol y factores de riesgo en estudiantes universitarios de primer ingreso −− −− (15,842) Dependencia al alcohol Desarrollo de conductas antisociales y violentas, autodestructivas Cordero, [M]., Cordero, [R]., Natera y Caraveo (2009) La Terapia Centrada en Soluciones. Una opción de tratamiento para la dependencia al alcohol −− −− (60) Trastornos de Alimentación Lefio, Villarroel, Rebolledo, Zamorano y Rivas (2013) Chile Intervenciones eficaces en consumo problemático de alcohol y otras drogas (No se indica) Dependencia de alcohol Desarrollo de conducta dependiente drogas y alcohol, deterioro funcionamiento social y familiar Desarrollo de conducta dependiente drogas y alcohol, deterioro funcionamiento social y familiar Total −− −− (16,067) Las Implicaciones en la conducta como resultado de los Trastornos Alimenticios relacionados con la Ebriorexia que surgen del análisis de los estudios realizados en Latinoamérica consistentemente están relacionados con el desarrollo de conductas comorbidas según el impulso hacia la delgadez, evasivas al conflictos y de riesgo en búsqueda de aceptación social. Otras implicaciones de la condición es el desarrollo de conductas antisociales, violentas, autodestructivas y dependientes a drogas. 127 Las implicaciones en la conducta como resultado de los Trastornos Alimentarios relacionados con la Ebriorexia son cónsono con lo expuesto por Steiger y Seguin (1999). Los autores plantearon que estas disfunciones representan un riesgo elevado de que las personas puedan experimentar Trastornos de Ánimo, Ansiedad, de Abuso de Sustancias y de Personalidad. De igual forma, han indicado autores como Baer (2002); Baer y Bary, (1991); Baer, Kivlahan y Marlatt, (1995); Schulenburg y Maggs (2002); Schulenburg, Maggs, Sher, Gotham, Baer, et al. (2001) que en la medida que las normas sociales universitarias promuevan el uso de alcohol y el que los padres disminuyan drásticamente la supervisión de sus hijos durante la transición a la vida universitaria se propicia que los estudiantes recurran a la práctica de conductas negativas relacionadas a la Ebriorexia (actividad física intensa, restricción calórica y consumo excesivo de alcohol). La Tabla 19 resume los resultados de la investigación encontrada en Puerto Rico. Tabla 19 Resumen de resultados de estudios analizados en Puerto Rico: Implicaciones en la conducta Puerto Rico (n=2) Autor/Año/Lugar Tema de estudio Participantes Género F M Ambos Condición Tratada Vinculada con Ebriorexia Implicaciones en la Conducta Reyes-Rodríguez, Franko, MatosLamourt, Bulik, Von Holle, CámaraFuentes, RodríguezAngleró, CervantesLópez y SuárezTorres (2010) Río Piedras Eating disorder symptomatology: Prevalence among latino college freshmen students. 1429 722 (2,151) Trastornos Alimentarios Desarrollo de conductas comórbida para perder peso. Desórdenes de estados de ánimo, depresión Reyes-Rodríguez, Sala, Von Holle, Unikel, Bulik, Cámara-Fuentes, Suárez-Torres (2011) A description of disordered eating behaviors in latino males −− 709 Trastornos Alimentarios Desarrollo de conducta comórbida, para perder peso. Desórdenes de estado de ánimo, depresión. (−−) . Total 1,429 1,431 2,860 128 Al explorar las implicaciones en la conducta como resultado del desorden alimentario ocasionado por le consumo excesivo de alcohol, definido como Ebriorexia, en los estudios realizados en Puerto Rico se evidencia consistentemente la tendencia a desarrollar conducta comórbida con el fin de perder peso y desordenes del estado de ánimo como la depresión. Según establece la American Psychiatric Association (2000) este comportamiento se considera una enfermedad de carácter psiquiátrico porque se altera el comportamiento, las actitudes y la ingestión de alimentos. Vaquero-Cristobal, Alacid, Muyor y López-Miñarro (2013) también indican que existe una gran preocupación en muchas personas por la imagen corporal y que tal preocupación tiene consecuencias que provocan alteraciones en la conducta alimentaria. Park y Beaudet (2007) consideran que los Trastornos Alimentarios son uno de los trastornos conductuales más problemáticos en la sociedad actual. De acuerdo con las tendencias de consumir alcohol de manera exagerada y frecuentemente aparenta ser uno de los detonadores para el desarrollo de Trastornos Alimentarios. La Tabla 20 resume los resultados del análisis acerca de las implicaciones en la conducta que tiene el Trastorno de Ebriorexia por cada país. Tabla 20 Resumen de resultados por país: Implicaciones en la conducta País Año Total de Estudios Total de Participantes Condición Vinculada con Ebriorexia Estados Unidos (2002-2014) 13 32,552 Consumo de alcohol Ebriorexia 129 Implicaciones en la Conducta f 13 Desarrollo de conductas comórbida para controlar y evitar aumentar de peso 6 7 Miedo y angustia ante la pérdida de su imagen corporal según la norma social de belleza y delgadez 1 f Tabla 20 continuación Resumen de resultados por país: Implicaciones en la conducta País Año Total de Estudios Total de Participantes Condición Vinculada con Ebriorexia Cambios patrones alimentarios Estados Unidos (2002-2014) f 2 Implicaciones en la Conducta f Cambios significativos en la selección de alimentos de alto contenido calórico ocasionando el sobrepeso, obesidad y posibles 1 Estados de ánimo negativo depresión y ansiedad 2 1 Desarrollo de conductas antisociales, violentas, amnesia temporal ante la pérdida de memoria Actividad sexual de alto riesgo Desarrollo de conductas de riesgo negativas como delgadez al restringir al restringir alimentos ocasionando posibles daños al cerebro, enfermedades orgánicas, actividad física excesiva 1 2 1 Conducta disfuncional, devaluación autoestima, manipulable ante la presión del grupo. 1 1 Aumento de embriaguez 1 Aumento en el consumo de alcohol según especialidad académica universitaria Deterioro en destrezas funcionales para atender estudios universitarios Europa (2004-2013) 3 29,635 Consumo de alcohol 1 Desarrollo de conductas negativas, autodegenerativas por consumo de sustancias, alcohol y de resistencia la tratamiento 1 Trastornos Alimentarios 1 1 Ebriorexia 1 Deterioro en el funcionamiento social Desarrollo de conductas comórbidas para controlar y evitar aumentar de peso 130 1 Tabla 20 continuación Resumen de resultados por país: Implicaciones en la conducta País Año Latinoamérica (2004-2013) Total de Estudios 6 Total de Participantes 16.067 Latinoamérica (2004-2013) 13 16,067 Puerto Rico (2010-2011) 2 2,860 Total 24 81,114 Condición Vinculada con Ebriorexia Consumo de alcohol 5 Trastornos Alimentarios 1 f Implicaciones en la Conducta Desarrollo de conductas comórbidas f Desarrollo de conductas evasivas para afrontar conflictos y búsqueda de aceptación social Desarrollo de conductas antisociales y violentas, autodestructivas 1 1 1 Del análisis total surge que entre los 24 estudios se contabilizó una participación de 81,114 personas, que incluyeron a hombres y mujeres de distintas edades. El análisis de los estudios llevados a cabo en los Estados Unidos de Norteamérica, Europa, Latinoamérica y Puerto Rico evidenciaron Implicaciones en la conducta vinculadas a la Ebriorexia. En términos amplios, las Implicaciones en la conducta que se destacaron fueron los siguientes: desarrollo de conductas comórbidas para controlar y evitar aumentar de peso (f=10), aumento en el consumo de alcohol (f=5), desórdenes en estados de ánimo, miedos y depresión (f=4), desarrollo de conductas de riesgo según impulso por delgadez (f=3), desarrollo de conductas antisociales y violentas (f=3), cambios significativos en la selección de alimentos de alto contenido calórico (f=1), amnesia temporal ante la pérdida de memoria (f=1) devaluación autoestima (f=1), manipulable 131 ante presión del grupo (f=1), deterioro en destrezas funcionales para atender estudios universitarios (f=1) y desarrollo de conductas evasivas ante conflictos (f=1). En síntesis, las Implicaciones en la conducta del Trastorno de la Ebriorexia, según se evidencia a través del análisis realizado, consistentemente se relaciona con el evitar aumentar de peso, frente a su preocupación por la imagen corporal. Por cuanto, fisiológica y psicológicamente la persona compromete su bienestar y salud al optar por conductas comórbidas de tipo restrictivo o purgativo. A estos efectos, de acuerdo con los resultados de este análisis se constata que el Trastorno de la Ebriorexia aparentemente se une a la creciente lista de Trastornos Alimentarios tal y como han señalado autores como: Anderson, Simons et al. (2006); Giles, Champio et al. (2009) y Luce, Englery Crowther (2007). Conclusiones Las conclusiones en la investigación corresponden al consenso que evidencian los hallazgos o resultados luego del análisis de los datos. Por cuanto, las conclusiones producto del consenso investigativo de este estudio se presentan a continuación. 1. Fueron revisadas y analizadas un total de 24 investigaciones distribuidas entre los Estados Unidos (n-13), Europa (n-3), Latinoamérica (n=6) y Puerto Rico (n=2); contabilizando una participación total de 81,147 personas representativas de hombres y mujeres de distintas edades, mayormente universitarios. 2. De acuerdo con el análisis, consistentemente se evidenció que la Ebriorexia no se ha investigado de forma directa y que existe una carencia de instrumentos confiables para identificar las diferentes condiciones asociadas con los Trastornos Alimentarios 132 vinculados al consumo excesivo de alcohol. Esto como resultado de que no se cuenta con una definición clara del Trastorno de Ebriorexia. 3. A través del análisis de las 24 investigaciones se evidenció que 18 de los estudios estuvieron orientados a la búsqueda de información, hacer recomendaciones, promover programas educativas de concienciación acerca de los efectos negativos en la salud del uso y abuso de alcohol. En seis (6) de estos estudios se observó que utilizaron intervenciones de Terapia Cognitivo-Conductuales para la modificación de conductas, Terapia Centrada en Soluciones, Entrevistas motivacionales y Simulaciones Mentales a través del Internet para trabajar con la dependencia al alcohol y cambios en patrones alimentarios. 4. Se evidencia que las intervenciones psicoterapéuticas aplicadas por los investigadores son cónsonas con el enfoque presentado en el Modelo Cognitivo-Conductual desarrollado por Garner y Bemis (1982). 5. Se evidenció que los Trastornos Alimentarios por consumo de alcohol afectan por igual a hombre y mujeres y que en ambos casos recurren a conductas compensatorias para lidiar con su insatisfacción corporal. En el caso de la mujer recurre a hacer dietas extremas mientras que el varón recurre al atracón para aumentar la masa corporal. 6. Entre los obstáculos identificados en los estudios analizados para que los consumidores de alcohol busquen tratamiento están el que no se percibe que necesitan ayuda, desconocimiento de las cubiertas de los planes de salud, escepticismo respecto a la efectividad del tratamiento, preocupación por la privacidad y desconocimiento de servicios disponibles en las universidades. 133 7. Entre los Factores Fisiológicos que aparentemente originan el Trastornos de Ebriorexia se encuentran las prácticas extremas para el control del peso, la comorbilidad entre el régimen dietario y el consumo del alcohol, restricción de calorías para aumentar efectos del alcohol y el aumento del índice de masa corporal. 8. Entre los Factores Psicológicos que aparentan originar el Trastornos de Ebriorexia están: las presiones socioculturales, académicas y financieras, insatisfacción por la imagen corporal, ingesta-consumo de alcohol como estrategia de control, manejo de conducta independiente, baja autoestima, resistencia a tratamientos, personalidad adictiva y antecedentes familiares de obesidad, sobrepeso, Anorexia o Bulimia. 9. Los Factores Fisiológicos y Psicológicos, según se evidencia, convergen en el desarrollo de la Ebriorexia lo cual, finalmente, afecta la salud y calidad de vida de la persona que lo desarrolla. 10. Los Síntomas Fisiológicos identificados que definen el Trastorno de Ebriorexia están caracterizados por el aumento en la ingesta de alcohol, dietas y ejercicios extremos para el control de peso, conductas compensatorias (purga inducida, uso de laxantes, fármacos, lesiones autonfligidas), sobrealimentación y atracones. 11. Los Síntomas Psicológicos que definen y caracterizan el Trastorno de Ebriorexia están relacionados con el desarrollo de conductas negativas y agresivas, cambios en las actitudes y estados de ánimo, depresión y ansiedad. 12. Las Implicaciones en la conducta del Trastorno de Ebriorexia involucran el desarrollo de formas comórbidas (tipo restrictivo y purgativo) para evitar aumentar de peso, aumento en el consumo de alcohol y desórdenes en estados de ánimo, miedos y depresión principalmente. 134 13. A través del análisis se confirman los planteamientos según Garnes y Bemis (1982), Fairburn (1981; 1985; 1995), Fairburn, Cooper y Shafran (2003) en cuanto a que los Trastornos psicopatológicos vinculados con los desórdenes alimentarios surgen principalmente de las ideas sobrevaloradas que desarrolla la persona acerca del peso y su imagen corporal; por lo que son determinantes en su conducta al generar esquemas cognitivos distorsionados. 14. Las Implicaciones de la conducta del Trastorno de Ebriorexia afecta y altera de forma reactiva el funcionamiento total de la persona en todas sus dimensiones; sociales y personales (salud física, emocional/mental y espiritual). 15. El Trastorno de Ebriorexia aparenta ser un detonador para el desarrollo de Trastornos Alimentarios severos y crónicos como la Anorexia y Bulimia Nerviosa. 16. A través del análisis realizado se evidencia una serie de rasgos que permiten delinear un perfil clínico del trastorno de Ebriorexia. Recomendaciones Las recomendaciones que en toda investigación se presentan cumplen con el objetivo de promover y ampliar el conocimiento del tema investigativo. A estos efectos, se sugieren las siguientes. 1. Promover y realizar más estudios científicos en el tema del Trastorno de la Ebriorexia. 2. Desarrollar instrumentos confiables que permiten el diagnóstico clínico del Trastorno de la Ebriorexia. 3. Incluir en los currículos universitario material educativo para la preparación de profesionales de la salud y la psicología acerca del Trastorno de Ebriorexia que incluye 135 rasgos acerca del perfil clínico, su desarrollo, síntomas e implicaciones en el organismo y la conducta emocional y mental en la persona. 4. Divulgar a través de orientaciones las posibles consecuencias en la salud física y emocional que conlleva el Trastorno de la Ebriorexia como medida preventiva entre el adolescente-joven y jóvenes-adultos y adultos como tal incluyendo orientaciones acerca de las cubiertas de planes médicos y los servicios al respecto que ofrecen las universidades. 5. Llevar a cabo un estudio para estimar la prevalencia del consumo extremo de alcohol entre los estudiantes universitarios en general. 6. Realizar estudios comparativos de prevalencia del consumo de alcohol entre estudiantes por género (féminas y varones) de nuevo ingreso (1er y 2do año de estudio) y estudiantes con tres o más años de estudios universitarios. 7. Solicitar y promover a través de diferentes organizaciones profesionales de la salud de la comunidad médica, Psicólogos, Psiquiatras, la Asociación de Psicólogos de Puerto Rico, la American Psychology Association (APA) y todos aquellos concernidos el incluir formalmente en el Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders el Trastorno de Ebriorexia como uno de los Trastornos Alimentarios. Limitaciones Es menester indicar que en toda investigación existen limitaciones. En este estudio, la mayor limitación fue la representatividad en el número de estudios seleccionados como muestra dado que la misma sólo abarcó poblaciones de Estados Unidos de Norteamérica, Latinoamérica, Europa y Puerto Rico y se excluyeron a otros países. A estos efectos, se dificultó la generalización de los resultados a la población 136 mundial. Por otra parte, no se logró encontrar en la literatura revisada suficientes estudios en el tema analizado en Puerto Rico que avalaran la existencia del desorden alimentario identificado como Ebriorexia. 137 REFERENCIA Acheson, D. (1988). Report of the Committee of Inquiry into the future development of the Public Health Functions and Community Medicine. London : HMSO. American Dietetic Association (2006). Position of the American Dietetic Association: Nutrition intervention in the Treatment of Anorexia Nervosa, Bulimia Nervosa, and other eating disorders. Journal of American Dietetic Association, 106 (12): 2073-2082. American Psychiatric Association (2000). Diagnostic and statistical manual of mental disorders. (4th ed., text rev.). Washington, DC: Author. American Psychiatric Association (2013). Diagnostic and statistical manual of mental disorders. (5th ed.). 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