NUTRICIÓN Y FACTORES AMBIENTALES QUE SE DEBEN CONTROLAR ANTES Y DURANTE EL EMBARAZO PARA PROTEGER AL BEBÉ Dra. María Cristina Márquez Orozco. Departamento de Embriología. Facultad de Medicina, UNAM [email protected] El conocer la manera en la que se desarrolla un bebé es equivalente a contemplar la creación, ya que al igual que las primeras células se pudieron formar a partir de la unión de unas cuantas moléculas, nosotros nos originamos de dos células diminutas, un óvulo y un espermatozoide, que durante su formación adquieren características genéticas propias. De los 200 a 300 millones de que se depositan en el tracto genital femenino en el momento de la concepción, sólo uno es el elegido para determinar el inicio del desarrollo de una ser humano único e irrepetible, pues si hubiera penetrado uno diferente, sería distinto su cuerpo, la estatura, el color de la piel, la mente, la personalidad, la inteligencia y los gustos; de la misma manera que son los hermanos o primos, con mucho o poco parecido. Lo ideal es planear un embarazo, en lugar de que, sin desearlo se inicie la gestación de un bebé, ya que en estas condiciones la salud física y psíquica de algunos padres, pudiera alejarse del óptimo. Cuando una pareja decide tener un hijo, es recomendable que acuda al médico para que les haga la historia clínica, que consiste en un interrogatorio detallado para registrar fecha y lugar de nacimiento, el de residencia, las labores a las que se dedican, los antecedentes familiares de enfermedades tanto congénitas como adquiridas, sus antecedentes de vacunación, los padecimientos que ha sufrido desde la infancia, el estado de salud actual, que incluye el nutricional y el emocional, el peso, la talla y la complexión y les solicite análisis rutinarios o los estudios que considere necesarios. La salud es un estado de equilibrio entre el cuerpo, la mente y el ambiente que nos rodea. Es un estado completo de bienestar físico, mental y social. Gracias al bienestar físico podemos desarrollar nuestras actividades con eficiencia, eficacia. El bienestar mental nos permite adaptarnos al mundo cambiante que nos rodea. Teniendo bienestar social podemos disfrutar de la vida en comunidad, empezando con la familiar. Al enfermar se pierde el bienestar físico, mental y social, hay un deterioro de la salud humana, que implican del sistema natural de defensa o el que regula el medio interno del organismo. Cualquier enfermedad se puede explicar por alteración de procesos fisiológicos o mentales. La nutrición de la madre antes y durante la gestación tiene una relación directa con el desarrollo de un bebé. Entre la sexta y séptima semanas de la gestación se debe cuidar la calidad, cantidad y especificidad de los nutrientes. Es importante adecuar la nutrición al peso, la talla y las condiciones físicas de la mujer embarazada y elegir alimentos de la región en la que vive, la posibilidad de adquirirlos y el precio. La obesidad, considerada como un tipo de desnutrición, en la actualidad es el problema de salud mundial y desafortunadamente México ocupó uno de los primeros lugares en cuanto al número de personas obesas o con sobrepeso. La alteración tiene causas múltiples una de las cuales es la modificación de los hábitos alimenticios, favorecidos por el bombardeo masivo de la publicidad en todos los medios de comunicación que promueven el consumo de comida con valores nutritivos bajos, con mayor cantidad de grasas, carbohidratos, vitaminas, y menor de proteínas, que las recomendadas en una dieta balanceada, en la que se deben incluir a diario 18% de proteínas, 22% de grasas y 60% de carbohidratos. A pesar de que una persona ingiera la dieta con los requerimientos ideales, puede acumular grasa por tener un gasto menor de energía debido al sedentarismo, tan común en la población de todas las edades, que pasa largas horas frente al televisor o a la computadora, comprometiendo su salud al obstaculizar la circulación sanguínea, al no dedicar al menos tres periodos de 10 minutos diarios a ejercicios tan simples como caminar o subir y bajar una escalera. Los malos hábitos son favorecidos por los padres que trabajan y ponen poca atención a los niños y adolescentes así como a las escuelas que carecen de programas educativos que incluyan la planeación de actividades que favorezcan el desarrollo integral y la promoción de la salud física y mental de los educandos, quienes son obligados a permanecer sentados en la escuela de cuatro a seis horas diarias y al menos un periodo igual a la resolución de tareas, que con frecuencia hacen frente al televisor, lo que les impide hacer ejercicio y desarrollar actividades creativas y recreativas. Es recomendable que las mujeres en edad reproductiva que en la infancia o adolescencia desarrollaron obesidad o sobrepeso, antes de embarazarse consulten a un nutriólogo que les ayude a llegar al peso ideal, ya que durante la gestación debe evitarse la restricción de aporte protéico y energético, pues de hacerlo se pone en peligro el desarrollo cerebral del feto. Por estudios recientes, se ha comprobado que los hijos de madres obesas pueden nacer con un peso cercano a los 4 kg o tener peso bajo al nacer, menor a 2.5 kg, lo que representa un riesgo grande para el niño, que pueden prolongarse hasta convertirse en un problemas de salud en la vida adulta. El peso bajo al nacimiento se ha asociado con un desarrollo cerebral deficiente, aumento de la morbilidad en el periodo pre y postnatal, por la programación anómala de diversas vías metabólicas que determina un rendimiento bajo en las pruebas de inteligencia y en el escolar, problemas de aprendizaje que favorecen el abandono de los estudios lo que limita el desarrollo de los pueblos. Por otra parte, el peso bajo al nacimiento o complexión delgada excesiva para la talla del niño, incrementa la posibilidad de padecer en la vida adulta hipertensión arterial, enfermedad coronaria y pulmonar, resistencia a la insulina, intolerancia a la glucosa, disminución del peso del páncreas con reducción del número de células productoras de insulina (células beta), enfermedad pulmonar, obesidad y propensión a desarrollar diabetes. En los niños desnutridos disminuyen: la circunferencia de la cabeza, y del cerebro la concentración y síntesis de proteínas cerebrales, la división de sus células, la mielinización, migración y diferenciación neuronal. Si se evita sobrealimentar a los niños con peso bajo al nacer y/o se les sujeta a un programa de estimulación temprana se logra tener un número de células beta, tolerancia a la glucosa y a la insulina normales. En el caso contrario la sobrealimentación y el sedentarismo reduce el número de células beta, e induce baja tolerancia a la glucosa y resistencia a la insulina, características de la diabetes. La diabetes tipo II es un padecimiento en el que las personas tienen niveles de glucosa en la sangre mayores a 120 mg/100ml medidos antes del desayuno. En estas personas existe falta o disminución de la producción de insulina. Las mujeres diabéticas deben llevar un control estricto de los niveles de azúcar antes de embarazarse, de preferencia con insulina, pues de lo contrario aumenta la probabilidad de tener abortos espontáneos, mortalidad perinatal, nacimiento de niños con defectos del tubo neural y del corazón. En mujeres que han padecido la diabetes por 15 o más años abortan con mayor frecuencia y sus hijos pueden presentar el síndrome de regresión caudal, que se caracteriza por la falta de desarrollo de la última parte de la columna vertebral, la pelvis y acortamiento de las piernas por defectos del fémur. La diabetes gestacional se presenta durante la segunda mitad del embarazo en mujeres sin antecedentes de diabetes, que con frecuencia pasa desapercibida, este padecimiento aumenta la cantidad de grasa en el cuerpo del feto, por lo cual sus hijos pesan cerca de cuatro kilos o más, es decir son macrosómicos y durante la gestación el páncreas fetal produce mayor cantidad de insulina de lo normal, que pasa a través de la placenta a la sangre materna y controla su glucemia. Al nacimiento el niño continúa secretando más insulina de la requerida, que llegan a provocar hipoglucemia, e hipoxia, que pueden dañar su cerebro, por lo cual es necesario mantenerlo bajo vigilancia médica estrecha para reducir la probabilidad de muerte perinatal. Los hijos de estas mujeres también pueden desarrollar diabetes y en la etapa adulta presentar con mayor frecuencia enfermedad coronaria, intolerancia a la glucosa, disminución del peso del páncreas, hipertensión y enfermedades pulmonares. La pregnorexia es el padecimiento que se produce en las mujeres que hacen dietas rigurosas cuando se preparan para concebir a un niño o cuando restringen la ingesta de alimentos durante el embarazo, en ambos casos con la finalidad de conservar una figura esbelta. En este caso se produce una desnutrición que llega a ser severa, por lo cual altera el desarrollo del niño, sobre todo el del sistema nervioso central, puede provocar aborto espontáneo mortinatos y bajo peso al nacer. La potomanía, la anorexia y la bulimia son otros trastornos de la alimentación causados por el deseo de tener un cuerpo semejante al de la Barbie o a de las modelos y actrices del cine y la televisión. La potomanía consiste en la ingesta de hasta 10 litros diarios de agua en lugar de un de dos a dos y medio litros que deben incluir todos los líquidos que se toman con los alimentos como sopa, leche, jugos, café, te o cualquier otro líquido. Las personas en su mayoría mujeres empiezan a tomar un promedio de dos litros de agua y al comprobar que bajaron de peso creen que tomando más agua se acelerará el proceso, sin saber que de esta manera se están intoxicando al forzar el trabajo de los riñones, dejan de comer al mantener el estómago lleno lo que les produce una sensación de saciedad. Al principio por la baja de sales como sodio, potasio y magnesio tienen calambres, nausea, dolor de cabeza y en casos extremos aparecen convulsiones, letargo y si no se atienden a tiempo en un hospital pueden morir. La anorexia es un padecimiento en el que las jóvenes dejan de comer por creer que el ser flaca es sinónimo de éxito y llega a extremos en los que a los 16 años pesan 45 kg midiendo 1.70 m y creen que así, el mundo estará a sus pies. “La moda descarnada no perdona ni un gramo más que la piel y los huesos y ponen la muerte en la balanza”. La bulimia consiste en la ingestión abundante de alimentos y después se provocan vómito, lo que también puede suceder en la anorexia, por lo que es difícil encontrar casos puros. El 99% de las personas afectadas por los dos padecimientos son mujeres sobre todo adolescentes por la exigencia de tener un cuerpo perfecto sinónimo de “sexy”. Se pueden considerar como enfermedades mentales que tiene que ver con la persona, la familia y factores como el culto al cuerpo y sociales, como pedirle a las jóvenes que solicitan un trabajo que tengan un buen cuerpo. Se tiene una preocupación constante y miedo a engordar abusan de laxantes, diuréticos, sustitutos de azúcar, medicamentos adelgazantes, se someten a dietas rigurosas y abusan del ejercicio como la gimnasia. Pierden la menstruación, se les engrosan las glándulas del cuello, presentan disminución de peso, fatiga, dolores musculares, garganta irritada y pérdida inexplicable de piezas dentarias. Presentan cambios de actitud como depresión, sentimientos de culpa, severa autocrítica, pérdida de autoestima y necesidad de recibir aprobación de los demás respecto a su persona. Si los padecimientos se descubren a tiempo es posible curarlas y evitar consecuencias irreversibles que pueden llevarlas a la muerte. La desnutrición causada por estos padecimientos pueden ser semejantes a las que presentaron mujeres que estuvieron en campos de concentración en las que incluso se produjeron alteraciones de las células reproductoras y cuando se embarazan tienen abortos, niños malformados, niños que mueren o tienen bajo peso al nacer, pueden presentar problemas de aprendizaje, disminución del rendimiento en la escuela y en la vida adulta problemas cardiovasculares, obesidad, diabetes Los requerimientos de nutrientes y micronutrientes son mayores durante el embarazo y la lactancia. Por ejemplo, las proteínas, necesarias para formar los tejidos del niño, aumentan de 45 g a 60 g. El de calcio se incrementa de 800 mg a 1.2 g/día, su deficiencia causa raquitismo en el niño. La cantidad de hierro necesario en la gestación se duplica (de 15 a 30mg/día), su deficiencia puede provocar anemia y se asocia con aborto espontáneo, parto prematuro y recién nacidos de bajo peso. En los lugares con carencia de yodo aumenta el riesgo de retraso mental en los niños También se corre el riesgo de presentar niveles bajos de yodo cuando se disminuye de manara desmedida la ingesta de sal yodada. En las tres cuartas partes de la población existe carencia de ácido fólico debido a que en la dieta no incluyen alimentos que lo contienen como hojas verdes, brócoli o cereales en cantidad suficiente, (100 g diarios), que es alrededor de 0.4 mg, por lo que es necesario agregarlo a la dieta desde que se planea un embarazo, para disminuir al mínimo la probabilidad de que el niño tenga un defecto del tubo neural o anencefalia. En mujeres que han concebido un niño con algún defecto del tubo neural como espina bífida o anencefalia, antes de embarazarse de nuevo deben consultar al médico para que les prescriba la dosis adecuada de ácido fólico para favorecer el desarrollo de un niño sin el mismo defecto. Si se inicia la administración de ácido fólico cuando se confirma el embarazo el cierre del tubo neural ya se produjo (se cierra en la cuarta semana del desarrollo, cuando la madre tiene semana y media de haberse suspendido la menstruación)y el ácido fólico no puede evitar el daño. La administración debe continuase durante la gestación, siempre bajo vigilancia médica, ya que la ingesta de ácido fólico en exceso y sobre todo por automedicación, causa un tipo de anemia. Aproximadamente el 60% de las mujeres padece vómito (hiperemesis gravídica) durante el primer trimestre de la gestación, que puede provocar deficiencias de magnesio, vitamina A, B2 y B6. Las consecuencias de la reducción de los niveles sanguíneos de magnesio en la sangre materna, se han asociado con parto prematuro y bajo peso al nacer. La deficiencia de vitamina A provoca defectos del tubo neural, sin embargo, su administración sin supervisión médica o por el uso frecuente de cremas que contienen ácido retinoico (retina A) o isotretinoína (ácido 13cis-retinoico), utilizado para combatir el acné, pueden causar el nacimiento de niños con anencefalia labio y paladar hendidos, o alteraciones del esqueleto y de los miembros. En Estados Unidos a las mujeres a las que se les administra isotretinoína se comprometen por escrito a no embarazarse mientras son tratadas. La deficiencia de vitamina B2 o riboflavina, puede producir paladar hendido, y alteraciones de los miembros. Si la vitamina B6 que se administra en el primer trimestre de la gestación para evitar el vómito se sigue utilizando después de este periodo, produce en el recién nacido un tipo de epilepsia-B6 dependiente, como si fueran adictos a la vitamina. La deficiencia de vitaminas en las mujeres embarazadas se ha asociado con el nacimiento de niños con defectos del cierre del tubo neural, anencefalia, obstrucciones de vías urinarias, defectos cardiovasculares así como labio o paladar hendido, pero su administración debe ser controlada, de preferencia por un ginecólogo, puesto que los excesos también dañan el desarrollo del sistema nervioso del bebé. Los aditivos de alimentos como el colorante rojo 40 empleado en dulces, bebidas, refrescos, productos lácteos es carcinogénico. En Canadá está prohibido su uso, pero en los México y Estados Unidos, de manera inexplicable e irresponsable se sigue empleando. El amarillo 5 o tartracina puede causar hiperactividad y bronco espasmo en asmáticos. El amarillo 6 o sunset causa lesiones renales. Es recomendable leer las etiquetas de los productos mencionados y evitar ingerirlos. Es preferible consumir alimentos sin colorantes, sobre todo los que se incluyen en la diete de las mujeres embarazadas y los niños, aunque por fortuna ya existen algunos que tienen colorantes naturales como carotenos o rojo del betabel. Un problema de salud actual es la intoxicación de miles de bebés por melamina, sustancia prohibida, que en China se usó como adulterante de la leche en polvo elaborada por el Grupo Sanlu Co., el mayor productor de leche en China, leche que también fue vendida a Nueva Zelanda. La señal de alarma se inició cuando en marzo del presente año, 432 bebés chinos que consumieron leche adulterada tuvieron abundantes cálculos renales en proporción anormal e infrecuente en los niños, en quienes disminuyó o dejó de excretarse orina, y les causó la muerte, cuando no se atendieron a tiempo en un hospital. La alta toxicidad de la melamina provocó la muerte de cuatro niños y aproximadamente 54,000 enfermaron. La distribución de productos con melamina fue a más de 30 países de todo el mundo, de donde han sido retirados del mercado. La melamina es un producto que se usa en la fabricación de plásticos, pinturas y adhesivos, como en su fórmula existe una cantidad de nitrógeno muy alta los productores de leche, la diluyen y agregan la melamina para simular en los análisis de calidad que tienen un alto contenido protéico. También se usó en la elaboración de dulces, chocolates, cremas para café y otros productos lácteos. En la actualidad la melamina se sigue empleando en una cantidad menor (una parte por millón), que supuestamente no es tóxica. Otro factor que pueden alterar el desarrollo es el tabaquismo materno, ya que el cigarro contiene más de 4,000 sustancias tóxicas una de las cuales es la nicotina, molécula que pasa por la placenta y causa el nacimiento de niños de bajo peso, aborto, altera el desarrollo del sistema nervioso, el cardiovascular, en especial del músculo del corazón y los riñones. También provoca la muerte prenatal y neonatal, insuficiencia placentaria, hemorragias durante el embarazo, ruptura prematura de membranas y parto prematuro. En los fetos del sexo masculino de madres adictas al cigarro, los testículos son de menor tamaño y en la etapa adulta disminuyen los niveles de testosterona, la producción de semen, que además es de mala calidad, impotencia y trastornos de la conducta sexual y en las niñas se adelanta la pubertad y la aparición de la primera menstruación o menarca. Un problema grave para la salud de las personas expuestas al humo del cigarro, de manera activa o pasiva, es la asociación que tiene con el riesgo de potenciar la aparición de todos los tipos de cáncer. El monóxido de carbono producido por la combustión de cualquier energético, es otro de los contaminantes ambientales que también se genera por el tabaquismo. El monóxido de carbono produce una intoxicación al sustituir en la sangre el lugar, que en condiciones normales ocupa el oxígeno, efecto que se prolonga por lo menos seis horas posteriores a la inhalación del humo del cigarro y la disminución del oxígeno en la sangre de la madre provoca en el feto bajo peso al nacer, aborto por infarto agudo del miocardio, muerte súbita, arterioesclerosis, enfermedad respiratoria crónica y mayor propensión a desarrollar cáncer. Las mujeres fumadoras están expuestas a cáncer pulmonar, laríngeo, de la boca, enfermedad coronaria, infarto agudo del miocardio, aumento de colesterol, desarrollo de enfermedad obstructiva crónica (EPOC), caracterizada por tos y secreción de moco que impide la función normal de los cilios respiratorios, causa asma, gastritis, úlcera gástrica, caries, inflamación de las encías, reflujo, acelera la osteoporosis, provoca trastornos menstruales, fibrosis quística mamaria, precedente al cáncer, aceleración de la menopausia, aparición prematura de arrugas y envejecimiento, debido a que el monóxido de carbono provoca la contracción de los vasos de la piel, sobre todo de la cara. En los hombres el envejecimiento es menos acentuado, pero los efectos sobre el corazón el sistema digestivo y respiratorio son los mismos que causa en las mujeres. El tabaquismo paterno, expone a los niños durante el desarrollo intrauterino a mayores problemas que el materno, en este caso por hacer a la madre fumadora pasiva, que está expuesta a la corriente colateral del humo del cigarro (la principal es la que inhala el fumador), la cual contiene 2.5 veces más monóxido de carbono y partículas muy pequeñas, que se introducen a zonas más profundas del pulmón y causan mayor daño. Además de que la intoxicación producida por el monóxido es más severa para el bebé, provocan en la madre irritación de los ojos y nariz y jaqueca. El alquitrán liberado por la combustión del cigarro, es una sustancia de color amarillo que pigmenta los dedos y dientes de los fumadores, induce el desarrollo de tumores cancerosos en el pulmón y otros órganos al igual que otras enfermedades respiratorias que pueden alterar el desarrollo intrauterino humano. La contaminación por cadmio aumenta 50% en ambientes ricos en humo de cigarro y en el gas desprendido por la combustión de plásticos, puede producir infertilidad, alteraciones en la espermatogénesis, elevación de los niveles de testosterona en suero, esterilidad, trastornos del ciclo sexual, de la menstruación y durante el embarazo aborto espontáneo, mortinatos y daño en la placenta. Durante la combustión del cigarro también se libera benceno que produce leucemia y elementos radioactivos como el radón, plomo y polonio que pueden producir mutaciones genéticas que se trasmiten a la siguiente generación y la que puede padecer múltiples enfermedades entre las que se encuentra el cáncer. El radón es responsable del 50% del cáncer pulmonar. La cantidad de cafeína que debe ingerir una mujer embarazada es de 50 mg diarios, lo que equivale a tomar media taza de café o medio refresco de cola, pues se ha comprobado experimentalmente que es una de las causas de hiperactividad y disminución de la emotividad en la vida adulta. En los fetos humanos reduce la producción de la cantidad de las células que secretan la testosterona en el testículo fetal, efecto que es irreversible, por lo cual persiste hasta la etapa adulta y altera la conducta sexual provocando tendencia a la homosexualidad. Las mujeres que trabajan en gasolineras están expuestas a sustancias tóxicas como dosis el plomo, que les provoca muerte neuronal mayor a la normal y durante el embarazo altera el sistema nervioso del niño, causante de problemas de aprendizaje, disminución de la inteligencia y bajo rendimiento escolar, fracaso escolar, dificultades en la lectura y en la coordinación visual-motora. Se ha comprobado que en las personas que viven en ambientes muy contaminados por plomo, presentan mayores trastornos neuroconductuales y que en su cerebro se causa el desarrollo de sustancias químicas que favorecen adicciones a drogas, aumento de la delincuencia, homosexualidad, infertilidad y disfunción eréctil. Los trastornos mencionados pudieron ser una de las causas de la decadencia del Imperio Romano, ya que ingerían grandes cantidades de vino almacenado en vasijas de plomo. Cuando se vacían refrescos (que son muy ácidos) en bolsas de plástico comunes y corrientes, que no son de grado alimenticio, las cuales contienen plomo, éste pasa al refresco y produce muerte neuronal y los trastornos descritos. También debe evitarse el uso de recipientes de barro vidriado ricos en plomo. Alcoholismo materno Se calcula que entre el 1 y 2 % de las mujeres en edad reproductiva presentan problemas de alcoholismo y que ésta sea la causa más frecuente de las alteraciones del sistema nervioso central de los niños. Por lo tanto la ingesta de alcohol durante el embarazo debe evitarse o reducirse a un nivel tan bajo como una copa pequeña de (60 ml) una a dos veces por semana, puesto que los hijos de bebedoras sociales que toman de 60 a 90 ml. de bebidas alcohólicas diarios o las ingieren en cantidades abundantes por tres días consecutivos durante el primer trimestre de la gestación, pueden causarles a sus del sus hijos daños tan severos como los que conforman el síndrome alcohólico fetal (SAF o en inglés FAS), caracterizado por retardo del crecimiento intrauterino, retardo mental (cociente intelectual entre 50 y 65), cabeza más pequeña de lo normal (microcefalia) alteraciones de la forma de la cara, de los ojos, párpados cortos, bajo peso testicular, desarrollo de cáncer mamario y pubertad tardía, anomalías cardíacas y deformaciones de los miembros. De manera experimental se ha visto que la ingestión de alcohol en dosis menores a las que causan el síndrome alcohólico fetal puede provocar un aumento del estradiol, que induce tumores y cáncer mamario, pubertad tardía y trastornos del ciclo menstrual. El alcoholismo paterno se ha asociado con problemas testiculares que alteran el desarrollo de los espermatozoides, causada por la producción baja de testosterona y la atrofia progresiva de los testículos, que a la larga provocan impotencia. Una consecuencia del alcoholismo paterno es el desarrollo deficiente del sistema inmunológico de sus hijos, que por esta razón padecen infecciones con mayor frecuencia. Un problema mayor es el estrés emocional la desnutrición y el maltrato que puede sufrir la mujer embarazada, que en estas condiciones aporta menor cantidad de nutrientes al niño en desarrollo e induce bajo peso al nacer, disminución del rendimiento escolar y homosexualidad, por alteración de la secreción de hormonas maternas y de las del testículo fetal. El estrés materno es una condición frecuente en las mujeres embarazadas por tener sentimientos que varían entre la felicidad, momentos de tristeza y temor. El abuso del ejercicio sin vigilancia médica puede causar estrés así como problemas económicos, la pérdida del empleo, divorcio, abandono, muerte de un familiar cercano, enviudar, ser madre soltera no aceptada por la familia o la sociedad, sufrir un accidente o un traumatismo severo. Dependiendo de las causas, el estrés se puede controlar de varias maneras, sin embargo, todas las personas que lo padece deben buscar que la comida sea sana y establecer horarios regulares para la alimentación, descansar cuando lo necesiten, hacer ejercicio bajo vigilancia médica, resistir cualquier deseo de ingerir bebidas alcohólicas, fumar, tomar productos a base de hierbas o drogas, evitar el trato con personas que motivan el estrés, hablar con un terapeuta o profesional de la salud, acudir con regularidad a sus citas médicas para que se detecte a tiempo cualquier problema y se trate de resolver, con lo que se tendrá la tranquilidad de estar haciendo lo mejor para su bebé. Las mujeres sometidas a estrés constante por periodos prolongados secretan mayor cantidad de adrenalina que provocan vasoconstricción y en especial a nivel del útero, reduce el oxígeno y los nutrientes que deben pasar al bebé, por esta razón sus hijos pueden presentar, desnutrición, bajo peso al nacer, retardo en la diferenciación del sistema nervioso central, parto prematuro, retraso psicomotor de grado variable y en los varones alteración de la conducta sexual por alteración de los niveles de testosterona que favorecen el desarrollo de homosexualidad. Experimentalmente los hembras de ratones sometidos a estrés por inmovilidad, presentan reducción de células reproductoras y habría que comprobar si también su conducta sexual se altera. Ningún tipo de plástico se puede considerar libre de efectos secundarios que afectan la salud humana, en particular los envases de policarbonato, como los empleados para fabricar los biberones liberan bisfenol A, sustancia con efectos estrogénicos, que altera las funciones hormonales de cualquier humano, siendo sus efectos más peligrosos en mujeres gestantes, fetos y niños pequeños que tienen una tasa de crecimiento acelerada. El bisfenol A se desprende de los envases de policarbonato y de otros recipientes de plástico cuando se calientan a 80ºC, ya sea por lavarlos con agua caliente, por calentarlos en hornos de microondas, exponerlos a los rayos del sol o por dejarlos dentro de los automóviles. El bisfenol A se metaboliza con rapidez y en los hijos de madres expuestas a este tóxico pueden causar desarrollo de hiperactividad, pubertad precoz, crecimiento excesivo de las mamas, esterilidad, diabetes, obesidad, cáncer de mama, daño uterino, cuentas espermáticas bajas, y cáncer de próstata, así como alteraciones del sistema inmunológico. En la etapa fetal puede suprimir la actividad de las hormonas de la tiroides, indispensables para el desarrollo del sistema nervioso, por lo cual pueden presentar retraso mental y trastornos del comportamiento además de alteración del sistema inmunológico. En el recién nacido los sistemas de destoxificación son inmaduros por lo que el riesgo de daño aumenta. Por estudios en voluntarios se encontró que el 95% tenían bisfenol A en la orina, que permanece en el cuerpo por lo menos durante 10 horas y sus residuos se conservan por varios días en el intestino, el hígado y los riñones. En una investigación realizada en ni niños de edad preescolar se encontraron niveles altos de bisfenol A en la sangre y en un muestro que duró 48 horas, se demostró la presencia del tóxico en el 68% de sus alimentos líquidos y en el 83% de los sólidos. Los niveles más altos de bisfenol A se encontraron en los niños, los medios en adolescente y los más bajos en los adultos. Aunque en todos los casos tienen una alta toxicidad. El bisfenol A se encuentra en comidas enlatadas, fórmulas infantiles, ravioles y sopas de pollo, que se calientan en hornos de microondas o se hidratan con agua hirviendo. Con la finalidad de reducir la contaminación por bisfenol A, se recomienda evitar el calentamiento de alimentos, agua o leche en recipientes de cualquier tipo de plástico, en especias en los de policarbonato, en hornos de microondas o en el coche, lavarlos con agua fría, mantenerlos de preferencia en refrigeración, protegerlos de la luz y jamás llenar las botellas desechables de agua o refrescos con bebidas calentadas a 80 o más ºC, para elaborar te o café Los alimentos ácidos y con grasas aumentan la degradación de los recipientes y botellas de policarbonato u otros plásticos. En la actualidad las adicciones a drogas constituyen un problema grave de salud mundial que desafortunadamente se ha incrementado en años recientes en algunos países, entre los que se encuentra México. De madres adictas a la marihuana han nacido niños con múltiples malformaciones retardo mental y del crecimiento intrauterino. Aunque es difícil encontrar personas con adictas exclusivamente a marihuana pues la mezclan con alcohol, tabaquismo y otra drogas La cocaína, cuyo consumo va en aumento en todo el planeta, cuando es consumida por mujeres embarazadas, pueden causar aborto, nacimiento de niños malformados con alteraciones severas del sistema nervioso, como microcefalia, infarto cerebral, retraso del crecimiento intrauterino, alteraciones neuroconductuales y anomalías urinarias y genitales. El LSD o ácido lisérgico ingerido antes o durante el embarazo provoca el nacimiento de niños con alteraciones del sistema nervioso y de los miembros. El tinner de pintura, produce alteraciones conductuales, daña el sistema nervioso, el corazón, el hígado y en los varones induce daños testiculares que pueden inducir infertilidad. Los campesinos y agricultores son las personas con exposición directa a los pesticidas, que con frecuencia se colocan a mano o por medio de avionetas a los cultivos y provocan la contaminación humana, del ganado, otros animales domésticos, las habitaciones, el agua y el suelo en los que permanecen por periodos muy prolongados. Se fijan a los huesos, alteran el sistema nervioso provocan daño a las células reproductoras aumentan de aparición de cáncer, abortos y niños con malformaciones congénitas. Un peligro del uso de los pesticidas que se utilizan para fumigar inclusive guarderías y escuelas públicas y privadas debido a que contaminan alimentos o los recipientes que los contienen, paredes y mobiliario que tendrían que en unos casos eliminarse o descontaminarse antes de que los niños y el personal pueda utilizarlos. Las mujeres que utilizan anticonceptivos hormonales deben suspenderlos al menos cuatro meses antes del inicio de la gestación, porque si por descuido en su uso una mujer se embaraza, las hormonas que contienen provocan en las niñas, que sus genitales externos se parezcan a los de un varón y en los niños aparezca una pubertad precoz. Otra fuente de contaminación por hormonas esteroides (principalmente estrógenos y sus derivados) presentes en la carne de res, la leche y el pollo, empleadas por los productores para acelerar el crecimiento del ganado o las aves. El uso de hormonas es tan frecuente, que en un estudio recientes se encontró que pueden provocar enfermedades auto inmunes como el lupus y la artritis reumatoide, infecciones respiratorias y asma bronquial. Por lo que se recomienda buscar productos orgánicos sin hormonas, antibióticos, ni pesticidas. Los medicamentos que toma una mujer durante el embarazo deben ser sólo los que un médico especialista prescriba, por ejemplo, existen vitaminas y minerales especialmente dosificadas para favorecer el desarrollo normal del bebé y la salud materna, aunque es preferible ingerir las vitaminas contenidas en los alimentos. Antibióticos como la estreptomicina causan sordera, las tetraciclinas como la terramicina provoca retardo en el crecimiento intrauterino, alteraciones óseas, anemia, que los dientes estén pigmentados y el esmalte esté poco desarrollado. También es importante cerciorarse de que las mujeres están inmunizadas contra rubéola, herpes, citomegalovirus y toxoplasmosis haciendo un análisis, para evitar el riesgo de alteraciones en los bebés en desarrollo. En casos de carecer de defensas a estos padecimientos las vacunas se aplicarán meses antes del inicio del embarazo, puesto que las elaboradas con organismos vivo son peligrosas para el embrión. Aunque existen datos contradictorios es recomendable evitar conversaciones de más de tres minutos en teléfonos celulares y permanecer a una distancia mínima de metro y medio del horno de microondas y la televisión mientras están encendidos, para evitar efectos nocivos. Es importante considerar que el 70% del cerebro crece durante los dos primeros años de vida y que la maduración del área prefrontal termina de mielinizarse aproximadamente a los 24 años. Por lo anterior el hombre nace con un cerebro fetal y es muy importante mantener el cuidado de la alimentación y el ambiente desde el embarazo hasta que completa su desarrollo. La influencia positiva de los padres, los familiares, los equipos de educadores, psicólogos, trabajadores sociales y personal médico es indispensable para obtener resultados óptimos. Si los padres se preparan para concebir un hijo aumenta la probabilidad de que el niño se desarrolle, nazca y crezca sano, lo que les dará la satisfacción y la felicidad de haber contribuido dentro de sus posibilidades a su protección. El talento de los niños se cultiva desde la educación que se le da a la niñez para que cuando lleguen a la edad reproductiva se preparen para ser padres, planeando el embarazo en las mejores condiciones procurando tener una nutrición sana, evitar la exposición a los factores que pueden alterar el desarrollo del bebé entre estos el estrés procurar que la futura madre esté rodeada de afecto y amor que podrá trasmitir a su bebé e incluso participe en un programa prenatal en el que se estimule el sistema nervioso del niño y que después del nacimiento se les incluya en programas de estimulación temprana controlada para que puedan utilizar a su máxima capacidad el enorme potencial con el que nacen. Continúo pensando que ¡Prevenir las alteraciones congénitas es un acto de amor!, y que ¡El amor es el motor del mundo!