Desesperanza, olor a muerte y algo de alivio en medio de la catástrofe

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La Plata, domingo 4 de septiembre de 2005
Susto en Francia: internaron al presidente Chirac
Tiene 72 años. Chirac sufrió un problema vascular que le afectó la vista
Las miles de personas que esperan
a ser evacuadas de Nueva Orleans, la
ciudad devastada por el huracán Katrina, comenzaron ayer a sentir algo
de alivio, en medio de la profunda
desesperanza y el olor a tragedia
que se percibe en el ambiente. Se calcula que unos 50.000 damnificados
aguardan algún tipo de movilidad
para salir de la “ciudad del infierno”.
El alivio, aunque tenue, se sustenta en las raciones de comida, agua y
productos de primera necesidad que
comenzaron a aterrizar en Nueva
Orleans, la cuna del jazz sumida hoy
a la peor catástrofe natural de la
historia de Estados Unidos. Allí, se
calcula que pueden haber muerto
unas 10.000 personas.
Luego de las durísimas críticas
recibidas por parte del alcalde Ray
Nagin, el presidente George W.
Bush ayer intentó mostrarse rápido
de reflejos: ordenó la movilización
de 17.000 militares más a la zona de
la hecatombe. Aseguró que la “evacuación se completará de manera segura rápidamente”.
Pasaron más de 24 horas desde
que decenas de vehículos militares
lograron adentrarse en el centro de
Nueva Orleans para repartir las primeras toneladas de provisiones. Pero unas 2.000 personas están todavía
en el estadio Superdome en condiciones infrahumanas. Otras 25.000
se agolpan en las inmediaciones del
Centro de Convenciones, a la espera
de poder subirse a uno de los micros
con aire acondicionado que ayer co-
El presidente francés, Jacques Chirac,
fue internado el viernes tras sufrir un
“pequeño accidente vascular” que
le afectó la vista y que lo obligará
a permanecer hospitalizado una
semana, informó el gobierno francés.
Chirac, de 72 años, fue internado en
el hospital militar de Val-de-Grace,
en el centro de París, cerca de los
señoriales Jardines de Luxemburgo
y del Senado, informaron las
autoridades del centro asistencial.
El hospital dijo en un comunicado
que el jefe de Estado francés padeció
un “pequeño accidente vascular, que
implicó un ligero desorden de la
visión que debería desaparecer
en algunos días”.
Desde La Baule, oeste de Francia,
el primer ministro Dominique de
Villepin confirmó la internación y dijo
haber hablado “largamente” por
teléfono con Chirac, en una aparente
indicación de que el mandatario
conservaba la conciencia y lucidez.
“Hablamos de la agenda de próximos
días y de los compromisos en curso,
en especial las propuestas de ayuda
y asistencia a nuestros amigos
estadounidenses ante el terrible
drama provocado por el huracán
Katrina”, señaló De Villepin.
Ni Villepin ni el hospital dieron más
detalles, pero un problema vascular
de este tipo puede oscilar desde una
leve lesión en algún vaso hasta
un accidente vascular propiamente
dicho, dijeron fuentes médicas.
El 80% de estos accidentes vasculares
ocurren por obstrucción parcial o
total de cualquiera de las arterias
que lleva sangre al cerebro.
Con poco más de 10 años en el
poder, esta es la primera vez que
Chirac debe ser hospitalizado.
NUEVA ORLEANS, CIUDAD DEL INFIERNO
Desesperanza, olor a muerte y algo
de alivio en medio de la catástrofe
Todavía hay 50.000 damnificados que esperan ser evacuados. Muchos están en condiciones infrahumanas en el
Superdome. Se movilizaron 17.000 soldados más. Regresaron tropas desde Irak y Afganistán para frenar el caos
menzaron a llegar, de nuevo, para
continuar las evacuaciones.
Según el teniente general responsable de las operaciones de rescate en
Calculan que el agua
tardará en drenarse
entre uno y tres
meses. Pero nada
será como antes
la ciudad, Russel Honere, “las próximas 24 horas serán vitales para nosotros, ya que queremos evacuar por
completo el Centro de Convenciones”.
Honore puso a los 4.000 efectivos
desplazados en el área de Nueva Orleans a patrullar las calles y poner fin
a los continuos episodios de violencia registrados desde que el pasado
lunes el huracán azotó la ciudad. Numerosas personas denunciaron viola-
Retrato. Es lo único que quedó de esta pareja sepultada por el agua
ciones y asaltos a los refugiados.
La violencia fue tan grande que
300 soldados fueron traídos desde
Irak y Afganistán para ser desplegados en las diferentes zonas afectadas
por el demoledor paso del huracán,
con orden de tirar a matar a los saqueadores.
La noche de anteayer fue la primera desde Katrina en la que no se escucharon disparos. La ciudad se
mostró quieta, apenas alterada por
los ruidos de los generadores de electricidad, los vehículos militares y los
policías que recorrían las calles.
Fuerzas de elite,
como en la guerra
Es inusual para la historia norteamericana un movimiento tan
importante y numeroso de militares dentro del mismo país
De película
Las imágenes de las cadenas de televisión siguen mostrando un escenario que se parece más a una ciudad arrasada en la Segunda Guerra
Mundial: calles anegadas, llenas de
escombros, cadáveres flotando, incendios por filtraciones de gas, aguas
contaminadas, excrementos y basuras amontonados.
Mientras, la mayoría de los pacientes que están en los dos hospitales de
la ciudad (ya no tienen más insumos), comenzaron a ser evacuados al
aeropuerto, desde donde los trasladan a otros centros sanitarios.
Las criticadas compañías aéreas estadounidenses, que habían cortado
los vuelos, organizaron ahora un
puente aéreo para evacuar a 25.000
refugiados.
Los primeros cálculos del Cuerpo
de Ingenieros del Ejército apuntan a
que se tardará de dos a tres meses
en drenar el agua que todavía
inunda las calles de la ciudad y reparar sus diques de contención. La
metrópolis, además, fue construida
bajo el nivel del mar, lo que complica aún más la salida del líquido.
El costo de las operaciones en toda
la zona afectada por la fuerza del huracán puede alcanzar los 100.000
millones de dólares, según las primeras estimaciones.
Ataúdes. El agua destrozó hasta el cementerio estatal
El presidente de los Estados
Unidos, George W. Bush,
enviará en los próximos tres días
militares de tres cuerpos de elite
del ejército, algo inusual en la
historia del país ya que el ejército
no interviene en asuntos internos.
Estas son las descripciones e
historias de las unidades que
serán despachadas a Luisiana,
uno de los tres estados sureños
devastados por el huracán
Katrina.
Š La División Aerotransportada
82: acuartelada en Fort Bragg,
Carolina del Norte, esta fuerza
del Ejército de Tierra es capaz
de desplegarse a cualquier lugar
del mundo en un máximo plazo
de 18 horas. Su principal función
es apoderarse de aeropuertos y
puertos navales, para asegurar
el terreno y las instalaciones
necesarias para la llegada de
tropas adicionales. Está
considerada como la fuerza de
ataque estratégica del país, y
mantiene rigurosos niveles de
disposición para el combate.
Š La Primera División de
Caballería: con más de 17.000
efectivos, es la división
acorazada de elite del Ejército
de Tierra. Fue parte esencial del
esfuerzo militar del país en Irak,
con la responsabilidad de
custodiar Bagdad.
Š Las Fuerzas Expedicionarias 1ra
y 2da de la Infantería de Marina:
consta en total de 47.000
marines. Es una fuerza de mar,
tierra y aire con capacidad de
atacar con gran poder ofensivo,
sin ayuda externa de ningún
tipo durante un período
de 60 días.