PI.ES x La Tierra (Pibes y Pibas de las Esquinas por La Tierra) Asociación Civil Sin Fines de Lucro Personería jurídica: 27.047 Cosquín 2645, Piso 1 Puente La Noria Cuartel IX de Lomas de Zamora Provincia de Buenos Aires Teléfono: (+5411) 4273-1222 / Fax: (+5411) 4285-8804 E-mail: [email protected] www.piesporlatierra.com.ar PROYECTO 1. Identificación y delimitación del problema que origine la necesidad de implementar el proyecto en la zona. Es conocido por todos que en la década de los noventa, el neoliberalismo se encargo de espacir en todas las regiones más pobres del mundo, innumerables recetas con despiadadas reformas económicas, políticas y sociales. No sólo ha afectado impunemente la vida de los pueblos, en especial latinoamericanos, sino que también les ha confiscado cualquier posibilidad de Futuro. Argentina, no sólo ha corrido con la misma suerte que el resto del continente, sino que ha sido de las tierras más fértiles para la implementación y desarrollo de dichas medidas. Cuando hablamos del Futuro de los Pueblos, es imposible no referirse a los niños y jóvenes de estas sociedades desvastadas. Son ellos quienes siempre corren con la suerte de pagar el costo, de haber nacido con la vida hipotecada. En nuestro país, esas niñas y niños nacidos en los noventa, han crecido en familias cuyo sustento económico principal, ya no eran las quincenas que se cobraban en las fábricas o los sueldos mensuales de algún digno trabajo. Los adultos referentes de estos niños y niñas, durante la década entera, desfilaron en los centros urbanos haciendo largas colas en los bancos provinciales y/o nacionales para cobrar “el 1 plan mensual de $1501”. Los niños del los noventa iban a la escuela a comer, educar no podía ser la prioridad cuando había que garantizar el único plato del día. En los barrios periféricos, lejos de poder concretar esos viejos sueños de progreso con los que llegaron a estas zonas, los pobladores fueron viendo el avance indiscriminado de la pobreza. La casita o el rancho, en vez de extenderse, quedaba cada vez más chico; el hacinamiento, los niveles de contaminación crecían desmesuradamente, no así el acceso a los servicios de luz, gas y agua potable. En estas condiciones, la salud también padeció los recortes neoliberales, y enfermarse, paradójicamente, pasó a ser un lujo de otros. Estos son algunos de los aspectos del pasado reciente que caracteriza al Conurbano Bonaerense. Los jóvenes y niños bonaerenses de hoy, crecieron inevitablemente marcados y condicionados por ese escenario. No obstante, son jóvenes con un caudal inagotable de energía, para la cual, generalmente no encuentran el curso natural donde canalizarla. Son niños, pibes y pibas que nunca han sido testigos, en su cotidianeidad, de una sociedad organizada por el TRABAJO FORMAL, por lo tanto no tuvieron la posibilidad de incorporar nociones de organización temporal, espacial y social relacionados con este. Tampoco han concurrido a la escuela de manera sistemática, por lo tanto no han recibido ni aprehendido en profundidad los contenidos pedagógicos necesarios para su inclusión social. En la escuela se aburren y van de vez en cuando; si fueron seguido y terminaron la secundaria porque “querían ser alguien en la vida”, el terciario o la universidad se encargará de n de confirmarles que ser el “alguien en la vida” no es un derecho para todos, no pueden sostener ni los gastos económicos, ni los tiempos académicos, tampoco incluirse plenamente en la vida social estudiantil debido al origen domiciliario, ni les alcanzan los conocimientos pedagógicos previos. Hablamos de jóvenes y también de niños, que trabajan de noche y algunos días a la semana. Consiguen changas que como máximo duran tres meses de corrido. La relación que se acostumbraron a tener con las instituciones u organizaciones sociales es puramente transactiva, en la mayoría de los casos ha sido reducida al intercambio de bienes tangibles y/o simbólicos, ellos reciben alguna módica suma monetaria o la posibilidad de utilizar otros bienes y dan a cambio lo único que tienen: su presencia. Según la dimensión dada al beneficio recibido por los jóvenes, en esa proporción se les pedirá a cambio PARTICIPACION, siendo esta misma tan codiciada, que puede consistir en una variada gama de modalidades y niveles. El paradigma de una sociedad concebida desde ejes centrales como lo son el pleno empleo y la educación como garante de igualdad de posibilidades, constituye la idea de un horizonte prometedor de justicia social para todos, sin lugar a dudas. Pero no podemos considerar que sus instituciones, tal y como las hemos conocido en un pasado nacional colmado de sindicatos, escuelas, familias vacacionando, etc. siguen siendo funcionales a ese objetivo. Los niños, adolescentes y jóvenes son la clara y directa expresión de que es tiempo de cuestionar y resignificar esos conceptos. No es a ellos a quienes hay que cambiar y amoldar, sino a las instituciones que deben recibirlos y aportarles las herramientas que necesitan para desenvolverse en un presente real y para que sean capaces de disfrutar del mejor futuro posible. Las condiciones económicas, políticas y sociales, en la actualidad aún a los ojos de los más desesperanzados, son indiscutiblemente más favorables que en la década anterior. 1 Subsidio Nacional para Desocupados, financiados con fondos Internacionales. 2 Los jóvenes están ahí, en los barrios, en las esquinas, en las casas, en los paredones, a las orillas de algún arroyo, resistiendo. Como pueden dan batalla a la muerte que viene con las manos llenas de PACO, de esas drogas modificadas y aprovechadas al máximo, para rendir el máximo beneficio de los poquitos que las venden y distribuyen. Es cierto que en muchos casos (como bien se encargan de “informar” o estigmatizar los monopolios de la comunicación), presos de los circuitos delictivos de las mafias institucionales organizadas, se convierten en fantasmas victimarios del nuevo flagelo social de la inseguridad. Pero también, forman nuevas familias, siguen trabajando a veces: cuando consiguen trabajo; siguen yendo a la escuela de vez en cuando, porque todavía se espera que alguno, el que aguanta más: “llegue a ser alguien”. Intentan como pueden, en cámara lenta, levantar “sus casitas”, que no llegan a ser más que piezas. Sino no encajan en las instituciones, si no pueden cumplir requisitos, mantener horarios, cumplir pautas, etc; quizás es porque reclaman ser escuchados, y tenidos en cuenta, y no quieren ser interpretados, quieren recuperar la voz y hablar a su manera. Talvez no quieren vender o intercambiar más su participación al mejor postor político. Si como adultos, como organizaciones responsables no estamos encontrando las claves para dar respuestas e intervenciones innovadoras que resuelvan milagrosamente los conflictos en los que se ven enredados los jóvenes, sino encontramos formas creativas para garantizar el diálogo, la convivencia y la participación de los niños adolescentes y jóvenes de los barrios populares. Si no estamos siendo capaces de motivarlos y reconciliarlos con el valor invaluable de LA VIDA, pues entonces habrá que acompañarlos en la búsqueda, resignificación y creación de nuevas formas de participación. Necesitan espacios capaces de abrir verdaderamente sus puertas, dispuestos a ser cuestionados y transformados, a abandonar las viejas formas instituidas. Sólo así podremos estar a la altura de estos nuevos niños, adolescentes y jóvenes globalizados, que a pesar de las innumerables restricciones que han padecido y padecen, son rehenes activos del consumo de las nuevas tecnologías que han transformado sus prácticas y usos culturales. Indudablemente, han cambiado abismalmente y de su manera de ser y estar en el mundo, de relacionarse con los otros, en comparación con otras generaciones. El desafío consiste en generar nuevas formas de Diálogo y Convivencia, los barrios deben y pueden recuperar su sentido identitario, superador de lo meramente geográfico. Los niños, adolescentes y jóvenes, pueden constituirse en la punta de lanza para lograr el retorno a ese lugar común que nos daba la “seguridad” de lo conocido, de sentirse en casa. Con ellos, es imperiosamente necesario comenzar la ardua tarea de recuperar y resignificar esos valores robados por el neoliberalismo, pueden y quieren ser los protagonistas de la transformación de sus barrios, quieren volver a convertirlos en ese lugar del que todos están orgullosos de ser parte. 2. Antecedentes institucionales que estén relacionados con la problemática a atender. Hace aproximadamente 13 años atrás, un grupo de jóvenes: pibes y pibas de las Esquinas de los barrios de Villa Albertina, Santa Marta, Santa Catalina I y III, Villa Centenario de Lomas de Zamora y de Villa Madero y Villa Scasso del Partido de La Matanza; junto con un grupito de jóvenes universitarios, decidieron crear un espacio propio en el que pudieran ser los protagonistas, donde pudieran tomar la palabra, decir y decidir qué proyectos ideas y sueños querían hacer realidad juntos. Así nace PI.ES X La Tierra. Ni bien se comenzó a caminar, los primeros pasos consistieron en consolidar esa nueva identidad, ese nuevo nombre para reconocerse y darse a conocer. “Andar de Gira” o recorrer los barrios, “Parar” o visitar cada esquina, mantenerse en contacto, ir discutiendo qué era lo que se quería y necesitaba, pensar 3 y buscar juntos cómo se podían lograr y concretar esos pequeños y grandes sueños, eran las prioridades del primer momento. La característica fundamental de esa etapa era que los mismos jóvenes, mezclados: de distintos barrios, provenientes de distintas clases sociales, con distintas experiencias y motivaciones, paso a paso hacían o al menos intentaban, hacer algo por ellos y por otros. Los adultos, referentes comunitarios, vecinas, profesionales, acompañaban, aconsejaban, pero el protagonismo era indiscutiblemente de los pibes y las pibas. A lo largo de estos años, PIES siempre acompaño y acompaña aún, el proceso de Organización Comunitaria de los barrios mencionados y también nuevos. Promoviendo y logrando que los jóvenes participen activamente y muchas veces hasta liderando todo tipo de actividades comunitarias. En trece años se han encarado Proyectos Culturales que han hecho sonar bombos y platillos murgueros en más de 10 barrios del norte al sur del Conurbano Bonaerense; se han implementado talleres teatrales y muchos de los barrios más pobres de las periferias Bonaerenses, han visto obras de Teatro por primera vez en sus barrios, en el marco de un programa cultural planificados por los mismos jóvenes. “Las Jodas”, como suelen llamarse los bailes en los barrios populares, siempre han sido una constante a la hora de organizar eventos, ya que siempre han sido y siguen siendo aún, la instancia de encuentro más propia, que más los representa culturalmente, el lugar de encuentro de los pibes y pibas, por excelencia. Se han organizado infinidad de Actividades Lúdico-Deportivas, los campeonatos de Truco y Fútbol, siempre han sido clásicos inevitables a la hora de pensar en recaudar fondos, integrar barrios, poner a prueba liderazgos y capacidades organizativas. Paseos, Viajes y Campamentos, se han vuelto sin lugar a dudas con el paso del tiempo, los mejores aliados a la hora de proponerse Abrir Horizontes, salir de la realidad cotidiana, “del Bajón del Barrio”, siempre permitió y permite a los pibes y pibas, confirmar que existen otros mundos posibles y accesibles, que es posible pensar en otras y nuevas oportunidades, que vivir distinto no es un sueño lejano para evadirse. Los campamentos, se han vuelto claves e imprescindibles para garantizar la participación directa y lo más representativa posible de todo el universo con el que PIES trabaja. En cada unos de esos encuentros de tres o cuatro días, participan promedio alrededor de 100 jóvenes entre 11 y 25 años de edad; esta actividad se ha realizado con una frecuencia de al menos uno por año. En estas instancias se realiza un Diagnóstico participativo, desde el cual los mismos jóvenes reflexionan sobre las realidades en que viven, identifican y discuten sobre sus causas y visualizan las consecuencias de las problemáticas expresadas; para luego pensar qué y cómo pueden hacer para transformar esas realidades y soñar juntos que el Futuro más Digno, Justo y Feliz es un derecho, posible y necesario de construir entre todos. En los procesos grupales y/o comunitarios que así lo han requerido, se han llevado a cabo diversas Actividades Económico-Productivas tanto en el ámbito urbano como el rural: microemprendimientos, ferias, ventas ambulantes, huertas orgánicas, cría de animales, construcciones alternativas, etc. PIES, con el camino andado en estos años, ha contribuido a que muchos jóvenes que han participado en distintas de las instancias descriptas, pudieran conformarse en jefes de hogar comprometidos y responsables, que intentan consolidar sus familias otorgándole a esta institución social, un valor invaluable que como tal debe cuidarse. Otros, se desenvuelven como líderes indiscutidos en distintos ámbitos de participación social, sindical, política y/o religiosa. Algunos, luego de pasar períodos de tiempo sin participar activamente en las actividades cotidianas de la institución, sin esto significar cortar o perder los vínculos, retornan tomando roles de Conducción Territorial, organizan, transfirieren y multiplican saberes, experiencias y acciones transformadoras, con los nuevos jóvenes de sus barrios. Paralelo a estos procesos y en función de los mismos, los jóvenes universitarios de entonces, son hoy los profesionales que facilitan que los conocimientos técnico-académicos se vuelvan saberes y herramientas colectivas al servicio de la organización barrial. Transfiriendo y acompañando además, el proceso de formación pre-profesional de los jóvenes universitarios que en la actualidad estudian carreras sociales, con la intención de poder contribuir siempre en los procesos de organización popular 4 Debido a nuestro origen institucional, nuestra misión y ocupación principal, a pesar de los cambios y aggiornamientos propios del paso de los años, siempre ha consistido en Promover y Garantizar que los jóvenes, en especial aquellos que viven y/o subsisten en las periferias bonaerenses sean capaces de poder Elegir y Decidir qué quieren para sus vidas y para su Futuro; que logren comprender que sus realidades no son producto de la mala suerte sino de las reglas de juego del sistema capitalista, que implementa sistemáticamente políticas injustas, que lo único que hacen es perpetuar la pobreza para los pobres y la riqueza para los ricos. Hemos comprobado que si los jóvenes acceden a la información necesaria para reflexionar y comprender sobre estas cuestiones, se suman o gestan procesos colectivos transformadores o al menos, intentan cambiar el destino de sus historias individuales. 3. Delimitaciòn de población destinataria fundamentando la necesidad de trabajar con la población específica establecida. En la Actualidad trabajamos en tres distritos del Conurbano Bonaerense, en la partido de Lomas de Zamora en los barrios de Santa Catalina I, II y III; Villa Lamadrid; Villa Amelia, Texaco y Villa Urbana. En los barrios de Villa Caraza, 10 de Enero, Barrio Obrero y Villa Jardín del Municipio de Lanus y del Municipio de La Matanza, en las zonas de Villa Scasso, San José Obrero, Isidro Casanova, Rafael Castillo y Villa Madero. Nuestro trabajo consiste específicamente en el acompañamiento y fortalecimiento de alrededor de 15 grupos de jóvenes y niños, cuyas franjas etáreas oscilan entre los 5 años de edad y los 25. Implicando esto un trabajo directo con 500 niños y jóvenes, que participan en distintos niveles y proyectos. En cada uno de los barrios, el proceso de organización misma es el que le da una impronta propia e irrepetible en cada lugar. Aún así, las constantes sistematizadas e incorporadas como aprendizajes productos de la experiencia, hacen que con cada grupo se identifique un proyecto de índoles social, económica, política y/o cultural cuyas acciones signifiquen beneficios para el grupo y/o barrio, instando a generar espacios de articulación, gestión y comunicación entre los distintos actores barriales. A través del uso de diversas Metodologías Participativas y de Educación Popular vamos logrando que los jóvenes, en casi todos los casos terminen liderando el proceso de trabajo y formación de las generaciones más pequeñas de sus barrios, por medio de un proceso que los convierte a fuerza de mucho tiempo, trabajo, reflexión y compromiso, en los “referentes adultos que deben dar el ejemplo” a los niños. Tanto en estas tareas, como en las de organización de espacios juveniles de pertenencia e identidad local, se insta a que los pibes y pibas transiten por un proceso de conformación y consolidación de grupos operativos de jóvenes, en el que descubran y comprueben que son capaces de concretar proyectos a corto plazo y a pequeña escala. Para ir avanzando en dicho proceso, se comienza a articular y gestionar proyectos a mayor escala con incidencias e impactos barriales más significativos, que les permite, no sólo empoderarse sino modificar la imagen negativa que se auto adjudican y adjudican los adultos del barrio, debido a sus conductas y trayectorias oscilantes entre los hechos legales y delictivos que cometen y/o han cometido antes de participar en estos espacios. 4. Especificación de los objetivos generales y específicos. Objetivo General: Generar escenarios locales de participación comunitaria, que promuevan el desarrollo de nuevas formas de Diálogo y Convivencia, tendientes a garantizar una Inclusión Social Plena de los niños, 5 adolescentes y jóvenes de los barrios más pobres del conurbano, a través de la implementación de acciones colectivas(de índole social, deportiva, política y económicas, en concordancia con sus intereses y pautas culturales. Objetivos Específicos: a) Contribuir en la organización de Acciones Colectivas surgidas de los intereses y pautas culturales de los pibes y pibas de distintos barrios populares del Conurbano Bonaerense. b) Implementar un programa de Investigación Acción Participativa tendiente a la resignificación, promoción y recuperación de valores culturales que facilite el desarrollo de los jóvenes y niños como sujetos activos y protagonistas de la transformación comunitaria. c) Fortalecer aquellos escenarios locales de encuentro y participación, en el que confluyen cotidianamente distintos actores de la comunidad, a través del aporte de herramientas que favorezcan el diálogo, la comprensión y acuerdos de convivencia entre las distintas generaciones de cada comunidad. 5. Determinación de metas a alcanzar. A.1 Sostener el vínculo con los niños y jóvenes, durante el periodo de dos años, con vistas barriales sistemáticas a 15 barrios con más de 15 grupos. A.2 Mantener la participación activa de al menos 500 niños y jóvenes durante dos años, en actividades comunitarias. A.3 Aumentar en 50%, la cantidad de proyectos realizados por jóvenes, en el plazo de dos años. B.1 Acrecentar el interés por las cuestiones históricas y culturales que hacen a los valores de la identidad barrial, de 500 jóvenes, en plazo de dos años. B.2 Realizar al menos 48 talleres y 20 acciones formativas para 150 jóvenes en el plazo de 2 años. B.3 Formar al menos 30 líderes barriales, en plazo de dos años. C.1 Reducir el nivel de violencia y conflictividad generado por los jóvenes en los barrios mencionados. C.2 Articular y coordinar actividades con al menos 20 organizaciones que trabajan con niños adolescentes. C.3. Incrementar la participación de por lo menos 200 jóvenes involucrados en los procesos de organización comunitaria. 6. Descripción y fundamentación de las actividades previstas. - Visitas semanales a esquinas y espacios de encuentro. - talleres. - salidas y paseos. - campamentos. - Encuentros barriales. - realización de proyectos culturales, deportivos, recreativos, sociales y económicos. - talleres de Educación Popular. - talleres de análisis políticos y procesos históricos. - salidas temáticas (visitas a museos, congresos, conferencias, universidades, organizaciones etc.) 6 - encuentros intensivos de diagnosticó y planificación participativa. - realización de entrevistas y sistematización. - recorridas barriales. - articulación con organizaciones barriales. - participación en fiestas y encuentros populares locales. - organización de eventos culturales. - generación y participación en escenarios locales. - difusión y prensa. 7. Especificación de la forma de evaluación y supervisión que la institución tiene prevista para el proceso de implementación del Proyecto. Además de la implementación de distintos instrumentos técnicos que garanticen la supervisión y evaluación ex ante, de procesos y resultados de la implementación del presente proyecto, el método utilizado por excelencia, dadas las características autogestivas de los trabajos realizados en las distintas comunidades, se basa principalmente en la utilización del PIM (Participatory Impact Monitoring) Monitoreo Participativo de Impactos que permite documentar los impactos socio-culturales y refuerza los procesos de aprendizaje. Así mismo, por la impronta que imprime la Educación Popular, se tiende a que cada uno de los procesos comunitarios, tanto de grupos de niños, jóvenes como así también en diversos espacios participativos puedan sistematizar sus procesos de aprendizajes y de transformación de la realidad, por lo tanto se construyen participativamente instrumentos capaces de generar instancias de autoevaluación acordes a sus formas. 8. Detalle de los recursos humanos, determinando: coordinador, equipo técnico, voluntariado, administrativos, etc. El equipo de trabajo está compuesto por: - 2 Coordinadoras Generales que tiene a su cargo las áreas de administración de recursos y planificación institucional, desde las cuales se encargan de delimitar y definir las acciones más propicias para llevar adelante las propuestas realizadas por los niños y jóvenes. - 2 coordinadores barriales por grupo de los cuales el 85 % son voluntarios. - 2 administrativas a disposición full time. - 15 profesionales externos (psiquiatra, psicólogo, trabajador social, docentes, contador, abogado) de permanente consulta y de manera voluntaria. - Estudiantes de carreras sociales, fundamentalmente de Trabajo Social de las Universidades Nacionales de Lanús, La Matanza y Madres de Plaza de Mayo, que realizan su práctica pre profesional en la institución acompañando los procesos comunitarios. 7 9. Mención de los recursos financieros con los que cuenta la institución. Además de contar con el aporte del presente organismo; nuestra institución cuenta financiamientos de diferentes tipos, tales como: - Fondos para Microcréditos, provenientes del Programa Nacional Banco Popular de la Buena Fe; - Proyectos de promoción para el desarrollo comunitario, provenientes de distintas convocatorias y programas públicos y privados, nacionales e internacionales, presentados en sintonía con los procesos de cada grupo y de sus intereses particulares. - Donaciones particulares esporádicas. 10. Indicación de los instrumentos donde la institución prevea registrar la información necesaria (legajos, planificación día a día, etc.). Debido a las metodologías que implementamos en el Trabajo Comunitario, nuestros instrumentos de Registro utilizados varían según los grupos y las actividades previstas. Los mismos son: - Cuadernos de Campo: cada referente y/o coordinador grupal, lleva registro de los acontecimientos relevantes tanto individuales como grupales, así como también se incluyen interrogantes y líneas de acción a desarrollar. - Planificaciones y registros de los equipos de coordinación grupal. - Registros colectivos realizados por los mismos participantes de los grupos y/o actividades, los mismos pueden constar de un cuaderno grupal que funciona a modo de bitácora de viaje en el que se registran anécdotas, o a modo de acta de acuerdos, o también papelógrafos que pueden ser transcriptos, y son distribuidos entre todos los integrantes del grupo. - Crónicas de eventos y/o actividades en las que se relatan los acontecimientos, los temas trabajados y se incorporan los aportes de los integrantes del grupo sistematizándolos de manera tal que nutra los conocimientos colectivos de ese y otros grupos. Para nosotros se han constituido de gran importancia los registros fílmicos y fotográficos de cada actividad, teniendo en cuenta las nuevas pautas y gustos de los jóvenes. Como así también subir los mismos a blogs, página Web y facebook. 11. Descripción del espacio físico donde se desarrolla el proyecto considerando: aspecto edilicio, condiciones habitacionales, mantenimiento e higiene. Por ser nuestro trabajo exclusivamente en el ámbito comunitario, los lugares de reunión son los puntos de encuentro que utilizan en lo cotidiano los jóvenes y niños, estos son las esquinas, paredones, arroyos, canchitas de fútbol, casas de los pibes y/o vecinos, instituciones barriales. Cuando las actividades que realizamos requieren infraestructuras mayores, tales como predios deportivos, campings municipales, universidades, etc, se establecen acuerdos con dichas instituciones u organismos las implicancias en las responsabilidades y deberes referidas a seguros y optimas condiciones de seguridad e higiene. 8