43 ESTRUCTURA MAGNÉTICA DEL PLUTÓN GRANÍTICO DE VILLAVIEJA DE YELTES (SALAMANCA) D. Mellado 1, F. Álvarez Lobato 2 y M. Yenes 2 1 Instituto Geológico y Minero de España, C/ Azafranal 48 1º, 37002 Salamanca. [email protected] Departamento de Geología, Facultad de Ciencias, Universidad de Salamanca, Plaza de la Merced s/n, 37008 Salamanca 2 Resumen: El plutón granítico de Villavieja de Yeltes se encuentra situado en la parte oeste de la provincia de Salamanca, dentro de la Zona Centro Ibérica del Macizo Varisco. Este cuerpo forma parte de los granitoides considerados tradicionalmente tardihercínicos. El estudio de sus propiedades magnéticas demuestra que son materiales paramagnéticos, y que los principales portadores del magnetismo son los filosilicatos (biotita, moscovita y clorita). La lineación magnética presenta una orientación predominante N-S a NNE-SSO, preferentemente subhorizontal. La foliación magnética presenta fundamentalmente planos subverticales norteados, que se adaptan al contorno del plutón en los bordes este, sur y oeste. La zona central del plutón presenta una horizontalización de estos planos, coincidente con un aumento de la anisotropía y la planaridad, lo que ha permitido definir una zona de techo coincidente con el sinclinal de Villares de Yeltes en la cuarcita. Estos datos sugieren un emplazamiento relacionado con la cuarta fase de la deformación varisca, a través de una grieta extensional abierta por una cizalla N-S. La existencia de la Cuarcita Armoricana al sur del plutón actuaría como barrera reológica impidiendo el ascenso del magma a niveles superiores. El emplazamiento se habría producido en un contexto local extensional junto a la expansión lateral del granito. Palabras clave: Granitoide, anisotropía de susceptibilidad magnética, Cadena Varisca. Abstract: The Villavieja de Yeltes granitic pluton is located in the western Salamanca province, within the Centro-Iberian Zone of the Iberian Variscan Belt. This pluton belongs to the traditionally considered late Variscan granites. An study of the magnetic properties shows that the granite is paramagnetic and the phillosilicates (biotite, chlorite, muscovite) are the main magnetic holders. Magnetic lineations show a dominant N-S to NNE-SSW orientation, with sub-horizontal lines. The magnetic foliation has a sunvertical N-S orientation that follows the contour of the pluton in the east, south and west edges. The core of the intrusion is characterized by the presence of sub-horizontal foliations that coincides with an increase of the anisotropy and planarity. All these data suggest that the emplacement took place during the fourth Variscan phase of deformation, along an extensional structure related to a N-S shear zone. The Armorican Quartzite, located sout of the pluton, probably acted as a rheological barrier that inhibited its ascent to shallower levels, and the Villares de Yeltes syncline should form a roof zone in the core of the intrusion. Probably, the final emplacement took place in a extensional local context with the lateral expanding of the magma. Key words: Granitoid, anisotropy of magnetic susceptibility, Variscan belt. Mellado, D., Álvarez Lobato, F. y Yenes, M. (2006). Estructura magnética del plutón de Villavieja de Yeltes (Salamanca). Revista de la Sociedad Geológica de España, 19 (1-2): 43-58 Desde que en 1954, J.W. Graham utilizó por primera vez el método de la Anisotropía de la Susceptibilidad Magnética (ASM) en rocas, éste se ha constituido en un útil rápido y preciso, para la determinación de la fábrica preferente de algunos de los minerales que las componen. Concretamente, en rocas graníticas, frente a las dificultades para determinar la fábrica por métodos tradicionales (medidas tomadas en el campo sobre marcadores adecuados, estudio de láminas delgadas orientadas, etc.), esta técnica permite un estudio sistemático y relativamente rápido de la misma, proporcionando, además de las orientaciones de la fábrica (lineación y foliación), una serie de parámetros cuantitativos que están relacionados con la composición química y con la tasa de deformación (Bouchez et al., 1990, Rochette et al., 1992, Yenes et al., 1999). En este contexto, se pretende estudiar el plutón granítico de Villavieja de Yeltes, considerado tardío respecto las principales fases de la deformación varisca, situado al oeste de la provincia de Salamanca. Este granito está bien conocido petrológicamente (Carnicero, 1980; Carnicero et al., 1987) y presenta un interés especial desde el punto de vista estructural por su relación con la cizalla tardihercínica de JuzbadoPenalva do Castelo. Los objetivos de este trabajo son conocer la estructura interna del plutón, establecer un modelo de Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 44 D. Mellado, F. Álvarez Lobato y M. Yenes emplazamiento y determinar la relación de este cuerpo granítico con los demás materiales presentes en la zona y las distintas fases de deformación. Situación geológica El plutón de Villavieja se sitúa en la Zona CentroIbérica, y dentro de ella, en la Zona de los Pliegues Verticales (Diez Balda et al., 1990). Los materiales presentes son fundamentalmente metasedimentos afectados por la Orogenia Varisca y rocas ígneas relacionadas con esta orogenia (Fig. 1A). Es un plutón de pequeña extensión (58 km2), con contactos netos, circunscrito y alargado hacia el noreste, perteneciente al grupo de los granitos de feldespato calcoalcalino (López Plaza y Carnicero, 1987, Fig. 1B). Desde el punto de vista textural se puede definir como un granito porfídico de dos micas, de grano grueso, con megacristales de feldespato potásico (Carnicero, 1980). Si bien se pueden determinar variaciones en el tamaño de grano y contenido de megacristales según las zonas, no se han diferenciado facies dentro de este granito. Los componentes mayoritarios son cuarzo, feldespato potásico, plagioclasa, biotita y moscovita, presentando como accesorios cordierita, andalucita, sillimanita, apatito, rutilo, circón y escasos opacos. La cordierita, principal representante de los silicatos alumínicos, se encuentra siempre desestabilizada a agregados de moscovita + biotita + clorita. La composición química de este granito ha sido estudiada por Bea et al., (1987) y Carnicero et al., (1987). E l p l u t ó n d e Vi l l a v i e j a h a o r i g i n a d o u n metamorfismo de contacto sobre los materiales del Complejo Esquisto Grauváquico. Las cordieritas formadas durante el metamorfismo de contacto definen una lineación dominante paralela a los pliegues N-S de plano axial vertical, desarrollados durante la cuarta fase varisca (Carnicero et al.,1987). Figura 1.- A) División en zonas del Macizo Ibérico (Julivert et al., 1972; Arenas et al., 1986; Farias et al., 1987; Crespo, 1989; Díez Balda et al., 1990, Martínez Catalán et al., 1992). B) Esquema estructural de la zona de estudio, modificado de Villar et al. (1990). Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 ESTRUCTURA DEL PLUTÓN DE VILLAVIEJA DE YELTES 45 Figura 2.- Esquema geológico del granito de Villavieja de Yeltes y encajante. Modificado de la hoja MAGNA 1:50.000 (Escuder et al., 2000), con la situación de las estaciones de muestreo. No se han realizado dataciones absolutas en el Granito de Villavieja, pero García Garzón y Locutura (1981) datan el granito de Villar del Ciervo, situado al sur (Fig. 1B), en 284 ± 8 m.a. mediante el método Rb/ Sr. Considerando el origen común establecido por Carnicero et al. (1987) y las similitudes petrológicas y texturales (Escuder et al., 2000), esta edad puede considerarse aceptable para el Granito de Villavieja. Los materiales que aparecen rodeando al plutón de Villavieja son (Figs. 1B y 2): 1. Al norte y noroeste afloran distintos tipos de granitoides prevariscos y el granito de Yecla de Yeltes, sinorogénico con la fase 2 de la deformación varisca (López Plaza y Carnicero, 1987). 2. Al sureste aparecen los materiales del Complejo Esquisto Grauváquico (Precámbrico superior, Rodríguez Alonso, 1985; Díez Balda, 1986). 3. Al suroeste afloran los metasedimentos ordovícicos del Sinclinal de Sequeros – Ahigal de los Aceiteros (García de Figuerola, 1971), formado por la Cuarcita Armoricana y pizarras de edad ordovícica. La Orogenia Varisca es el evento que configura la estructura presente en la zona. Todas las rocas ígneas y metamórficas se encuentran afectadas por esta orogenia, incluso los granitos más tardíos. En la primera fase de la deformación Varisca (D 1) se produce un engrosamiento cortical con pliegues subverticales, de longitudes de onda de varios kilómetros y dirección predominante NO-SE a E-O. Estos pliegues llevan asociada una foliación subvertical (Díez Balda, 1986). En la zona del estudio, al sur y este de Villavieja pueden observarse abundantes estructuras debidas a esta fase de deformación. Entre ellas destacan el sinclinal formado por la Cuarcita Armoricana al sur de Villavieja, que se interpreta como la continuación del Sinclinal de Sequeros – Ahigal de los Aceiteros, y el sinclinal de Villares de Yeltes, dibujado en cartografía por las intercalaciones conglomeráticas del Complejo Esquisto Grauváquico al este de Villavieja (Fig. 2). Durante esta fase, se alcanzaron unas condiciones de metamorfismo regional de grado bajo, que en algunas zonas alcanzó un grado medio. Se pueden distinguir las zonas de la clorita, biotita, almandino y estaurolita. Este metamorfismo M 1 alcanzó su máximo en el inicio de la segunda fase de deformación varisca D 2 (Díez Balda, 1986). Durante la segunda fase se produce un colapso extensional mediante zonas de cizalla. El adelgazamiento cortical y la caída de presión que lleva asociada, van a dar lugar a la formación y ascenso de magmas (Díez Balda, 1986, Díez Balda et al., 1992). En este momento se alcanza el pico metamórfico y Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 46 D. Mellado, F. Álvarez Lobato y M. Yenes comienza una caída de presión que desestabiliza la estaurolita hasta alcanzar un metamorfismo M 2 de baja presión caracterizado por la presencia de andalucitasillimanita. Se desarrolla en esta fase una esquistosidad S2 subhorizontal. La tercera fase de deformación varisca (D3) es un episodio compresivo con acortamiento máximo en dirección NNE-SSO, que origina suaves antiformas y sinformas de dirección N100ºE a N120ºE y plano axial subvertical, que llevan asociado un clivaje de crenulación S 3 poco desarrollado, el cual aparece en zonas con una S2 bien definida. Asociadas a esta tercera fase, aparecen varias zonas de cizalla dúctiles subverticales senestras de dirección N70º E, como la Cizalla de Juzbado-Penalva do Castelo (Villar Alonso et al., 1992) y otras dextras de dirección N120º E, como la Cizalla de Villalcampo (González Clavijo et al., 1991), Fig. 1B. Ambos sistemas podrían considerarse como conjugados, coincidiendo las direcciones y movimientos con el acortamiento citado anteriormente (Díez Balda, 1986, Diez Balda et al., 1990). Villar Alonso et al. (1992) asigna a la cizalla de Juzbado Penalva una edad post-D 3 argumentando que el antiforme de Martinamor, estructura generada en la tercera fase, está desplazado por esta cizalla. La cuarta fase de deformación varisca, D4, origina pequeños pliegues angulares en las pizarras y pliegues laxos de longitud de onda decimétrica en las formaciones cuarcíticas (Villar Alonso et al., 1992). Estos pliegues tienen planos axiales subverticales de dirección N-S a N20ºE y crenulan a las filonitas de la Zona de Cizalla de Juzbado – Penalva do Castelo. Al norte de Villavieja de Yeltes, Villar Alonso et al. (1992) han definido cizallas dextras D4 con dirección N-S, como la que pliega la traza de la Zona de Cizalla de Juzbado – Penalva (Fig. 1B). Estas cizallas verticales, de anchura métrica a decamétrica, presentan d i r e c c i o n e s v a r i a b l e s ( Vi l l a r et al., 1 9 9 2 ) , predominando en la zona del estudio las norteadas. En Portugal, al oeste de la zona de estudio, Valle Aguado et al. (2000) y Azevedo et al. (2000) interpretan la formación de las estructuras D 4 en la terminación de la Cizalla de Juzbado-Penalva para acomodar el movimiento realizado por la cizalla. Análisis de las microestructuras de deformación E n e l G r a n i t o d e Vi l l a v i e j a n o h a p o d i d o determinarse a escala de afloramiento la presencia de estructuras de deformación en estado sólido. Sin embargo, a escala microscópica pueden observarse algunas microestructuras que indican la existencia de una ligera deformación en estado sólido. La distribución de microestructuras de deformación es bastante uniforme en todo el Granito de Villavieja, sin e m b a rg o s e p u e d e a p r e c i a r , u n a u m e n t o d e deformación en las muestras localizadas en la parte centro-este. Deformación en cuarzos: de forma general, en todas las Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 láminas delgadas estudiadas aparece el cuarzo deformado en estado sólido, evidenciado por extinciones ondulantes y, en algunos casos, aparición de bordes rugosos y formación de subgranos (Fig. 3C). Deformación en filosilicatos: aparecen con extinciones ondulantes abundantes y en las láminas de mayor deformación, microkinks. Estas microestructuras de deformación son más frecuentes en la moscovita que en la biotita ya que, de forma general, el mayor tamaño de la moscovita favorece una deformación mayor (Fig. 3A). Por otro lado, aparece frecuentemente clorita, como mineral procedente de la biotita. Tribe y D’Lemos (1996) explican este tipo de transformaciones como consecuencia de deformación a baja temperatura. Deformación en feldespatos: las principales microestructuras de deformación que aparecen en feldespatos son extinciones ondulantes (Fig. 3D), desarrollo de mirmequitas (Fig. 3B) y aparición de maclas tipo Carsbald y polisintéticas. Estas estructuras han sido desarrolladas a temperaturas altas a medias (Simpson, 1985; Simpson y Wintsch, 1989; Hibbard, 1987; Pryer, 1993; Aranguren, 1993; Neves et al , 2003). En el granito de Villavieja no se han encontrado estructuras desarrolladas en estado intermedio, esto se puede atribuir a las pequeñas dimensiones y a las características composicionales del Granito de Villavieja, de forma que el magma, bastante viscoso, hubiese cristalizado de un modo rápido, impidiendo el desarrollo de estructuras en el estado intermedio. Este enfriamiento rápido explica la mayor deformación en la zona centro-este del granito, en la que la presión del magma subyacente afectase a una zona ya cristalizada, produciendo deformación en estado sólido. Por otro lado, en el Granito de Yecla aparece una deformación en estado sólido más elevada (Fig. 3F), caracterizada por recristalización completa y reorientación de granos de cuarzo (Fig. 3E), extinción ondulante, pandeo y formación de microkinks en biotitas y moscovitas, y formación de maclas, extinciones ondulantes, desarrollo de estructuras de desmezcla y recristalización reorientada en feldespatos. En este granito, la deformación en estado sólido es visible a escala de afloramiento, marcada por una orientación preferente y aplastamiento de los minerales. Análisis de ASM El análisis de ASM se fundamenta en que cuando un cuerpo es sometido a un campo magnético inductor H, se obtiene una imantación inducida M. La inducción generada depende de la temperatura y la intensidad del campo magnético. Tarling y Hrouda (1993) establecen que a temperatura ambiente y en un campo magnético débil (<1mT), la relación entre M y H es lineal, existiendo una constante de correlación K ESTRUCTURA DEL PLUTÓN DE VILLAVIEJA DE YELTES 47 Figura 3.- Análisis de microestructuras en láminas delgadas. A) Microkinks en moscovita. B) Desarrollo de mirmequitas en feldespato potásico. C) Deformación en estado sólido de cuarzos, con extinciones ondulantes. D) Extinción ondulante en plagioclasas. Las láminas A, B, C y D, tomadas en el Granito de Villavieja. E) Recristalización completa y reorientación de cuarzos en el Granito de Yecla. F) Deformación en estado sólido en el Granito de Yecla. (susceptibilidad magnética, Daly, 1970), que en un cuerpo anisótropo debe expresarse como un tensor de segundo orden (M i = K ij x Hj ), cuya representación gráfica es un elipsoide. Para el estudio de ASM se calcula el valor de K en cada una de las direcciones que definen los ejes principales del elipsoide, obteniéndose así un valor de Kmax=K 1, Kint =K2 y K min=K3. La diferencia de intensidad de los tres semiejes permite establecer la anisotropía de susceptibilidad magnética (ASM). Los parámetros direccionales obtenidos de los estudios de ASM se interpretan a partir de la relación entre la fábrica magnética, obtenida del elipsoide de ASM y la fábrica definida por la orientación preferente de los minerales que constituyen las rocas ígneas. Varios autores han demostrado que la foliación magmática es equivalente a la foliación magnética y la lineación magmática es equivalente a la lineación magnética (Rousset y Daly, 1969; Launeau, 1990; Bouchez et al., 1990, Rochette et al.,1992). Se ha realizado un muestreo en 60 estaciones, de las cuales 52 corresponden al Granito de Villavieja y 8 al Granito de Yecla, tomadas para observar la diferencia de la estructura interna de ambos granitos (Fig. 2). La superficie cubierta por el muestreo del Granito de Villavieja ha sido de 58,07 km2, por lo que se obtiene una densidad de muestreo de 0,9 estaciones / km 2. En cada estación se han tomado dos cilindros de muestra, que a su vez se han dividido en dos, obteniendo un total de cuatro muestras para la estación. Las características petrográficas del Granito de Villavieja, de grano grueso a muy grueso, con abundantes megacristales de feldespato alcalino, así como la presencia de cristales Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 48 D. Mellado, F. Álvarez Lobato y M. Yenes de cordierita han causado una disminución de la homogeneidad de muestreo, que puede suponer una dispersión en los datos obtenidos (Tabla I). Las mediciones de ASM se han realizado mediante el susceptómetro Kappabridge KLY-2, que trabaja en campo magnético débil (4 x 10 -4 T, 920 Hz). Se ha medido la susceptibilidad de cada muestra para obtener el tensor de segundo orden que define el elipsoide de ASM, las intensidades de los ejes del elipsoide, así como su orientación referida a la muestra y al norte geográfico. Las direcciones de los ejes K 1, K 2 y K3 se han representado en una plantilla estereográfica equiareal, en el hemisferio inferior. Susceptibilidad Magnética Media (Km ) Es la media aritmética de las magnitudes de susceptibilidad magnética correspondiente a cada uno de los ejes del elipsoide de ASM (Km = (K1 + K2 + K3) / 3). Se ha determinado que existe una relación directa entre el valor de Km y el contenido en hierro de la roca. Varios autores han observado buenas correlaciones entre los mapas de isovalores de Km y las distintas facies petrográficas (Diot et al.,1987; Amice y Bouchez, 1989; etc). Los valores de susceptibilidad magnética obtenidos oscilan entre 16 x 10 -6 SI y 100 x 10-6 SI. Debemos asumir que los valores son fundamentalmente paramagnéticos a partir de la mineralogía del Granito de Villavieja estudiada en lámina delgada, permitiendo atribuir a la biotita fundamentalmente y en menor proporción, moscovita y clorita, la susceptibilidad de la roca. En la disposición de valores de susceptibilidad magnética dentro del plutón de Villavieja, se aprecia cierta tendencia a una zonación concéntrica normal, presentando los valores de Km inferiores en las zonas centrales, y aumentando hacia la periferia (Fig. 4). Aunque únicamente con el estudio petrográfico no se puede afirmar una ausencia total de minerales ferromagnéticos (Román Berdiel et al , 2004), la contribución de los mismos en pequeñas cantidades no modificarían la correlación entre la fábrica magmática y magnética (Pignotta y Benn, 1999). La cordierita presenta una anisotropía magnetocristalina inversa, por lo que puede dar lugar a inversiones de los ejes K1 y K 3 (Amice et al., 1991). En cualquier caso, todas las cordieritas encontradas en el Granito de Villavieja, se encuentran desestabilizadas y transformadas en pinnita y clorita. Esto supone un efecto Figura 4.- A) Mapa de isovalores de K m. B) Histograma de frecuencia del valor Km para el Granito de Villavieja. C) Representación del valor de Vk frente al porcentaje acumulado de estaciones. Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 ESTRUCTURA DEL PLUTÓN DE VILLAVIEJA DE YELTES 49 Tabla I.- Estaciones de medida y datos de susceptibilidad magnética. Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 50 D. Mellado, F. Álvarez Lobato y M. Yenes Figura 5.- A) Representación de los valores α95K1 frente a α95K3, donde se observan las zonas con disposición planar, linear, plano-linear y sin fábrica magnética preferente. Se muestran los estereogramas de estaciones tipo para cada una de las zonas. B) Gráfico del grado de anisotropía Pp% frente a los conos de confianza α95K1, α 95K3 . Para valores de Pp % mayores de 3% los valores α95 son mayoritariamente menores de 40º. Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 ESTRUCTURA DEL PLUTÓN DE VILLAVIEJA DE YELTES de dispersión de la fábrica magnética que debe ser tenido en cuenta en el análisis de los datos. En la figura 4 se muestra el mapa de isovalores de Km realizado con los datos correspondientes a cada estación. Se ha calculado la variabilidad media (V k) de la susceptibilidad mediante la expresión (Leblanc et al., 1994, Yenes et al., 1999): donde n es el número de muestras por estación, Ki es la susceptibilidad en cada muestra y K es la susceptibilidad media de la estación, calculada como media aritmética de todas las muestras que componen la estación. La variabilidad media es de 17,3 % para las 60 estaciones de muestreo. Se ha establecido un valor máximo de Vk=25% para admitir las dispersiones como aceptables. En el caso del Granito de Villavieja, Vk es menor que 25% en un 80,0% de las estaciones (Fig. 4C). La fiabilidad de los resultados ha sido comprobada mediante la función de probabilidad de Fischer (1953), que calcula la dirección media en cada estación y proporciona el cono de confianza a95 . Este es uno de los métodos más comunes empleados para calcular la dirección media del tensor K. A pesar de que los ejes p r i n c i p a l e s d e l e l i p s o i d e d e ASM no siguen necesariamente una distribución unimodal, este método produce resultados aceptables (Ernst y Pearce, 1989; Román Berdiel et al., 1995a; Yenes et al ., 1999). Ninguno de los otros métodos propuestos (ver recopilación en Tarling y Hrouda, 1993) consigue un tratamiento estadístico óptimo de los datos direccionales. De acuerdo con este método, se calcula un cono de confianza α 95 para los ejes K 1 y K 3, considerándose aceptables valores menores de 40º (Yenes et al., 1999). El análisis de datos estudiados muestra los siguientes grupos (Fig. 5A): - 37 estaciones con α95 K1 < 40º, α95 K3 < 40º: fábrica plano-linear. - 4 estaciones con α95 K1 > 40º, α95 K3 < 40º: fábrica planar. - 14 estaciones con α95 K1 < 40º, α95 K3 > 40º: fábrica linear. - 5 estaciones con α 95K 1 > 40º, α 95K 3 > 40º: no definen fábrica: estaciones eliminadas (Ver en tabla anexa de datos). Las estaciones correspondientes al Granito de Yecla, con una importante deformación en estado sólido, presentan conos de confianza bajos, con fábricas planolineares o lineares muy bien definidas, sin embargo, la dispersión de datos es más elevada en el Granito de Villavieja, correspondiendo a este granito las 5 muestras eliminadas. También en este caso son más abundantes las fábricas planares y planolineares (aunque también presentan fábricas más planares que lineares). 51 Se ha comprobado la dependencia entre el grado de anisotropía P p% y los conos de confianza (Leblanc et al., 1992; 1994; Yenes et al., 1999). De este modo, se comprueba que al aumentar la anisotropía de la fábrica magnética, los datos direccionales están mejor definidos. Los valores de P p% superiores a 3, se corresponden en bastantes casos con conos de confianza (α95) inferiores a 40º, lo que indica que cuanto mayor es la anisotropía de la fábrica, mejor es la definición de los datos direccionales (Fig. 5B). Los conos de confianza mayores de 40º en estaciones con P p% mayor que 3 corresponden fundamentalmente al eje K 3, indicando, de nuevo, una menor definición del carácter planar frente al linear. Existe una relación directa entre la variabilidad de Km y la textura del granito, debido a que el cuarzo y el feldespato poseen susceptibilidades inferiores a la biotita. Así, un granito de grano fino, más homogéneo, presenta variabilidades de K m inferiores a las que puede presentar un granito de grano grueso o porfídico. El Granito de Villavieja presenta un grano muy grueso, con abundantes megacristales de feldespato, que pueden disminuir considerablemente el valor de la susceptibilidad de la muestra que los contenga. De la misma manera, la presencia de cristales de cordierita desestabilizada a clorita + biotita + moscovita puede aumentar el valor de la susceptibilidad en la muestra que las contenga. Grado de anisotropía o Anisotropía Total (Pp%) Se define como la relación entre los ejes máximo y mínimo del elipsoide de ASM (Nagata, 1961), definido por la siguiente expresión: El Granito de Villavieja presenta un P p% medio de 2,8%, máximo de 5,7% y mínimo de 1,6%, por lo que las tasas de anisotropía pueden considerarse debidas al carácter magmático de la fábrica, ya que cuando existen deformaciones importantes en estado sólido, el grado de anisotropía Pp % es superior al 4% (Leblanc et al., 1994; Bouchez y Gleizes, 1995; Yenes et al., 1999). Este hecho se constata en el Granito de Yecla, con un valor medio de P p% de 5,9% debido a la deformación en estado sólido, muy superior a los valores obtenidos en el Granito de Villavieja. En el mapa de isovalores de P p% del plutón de Villavieja (Fig. 6A), se observa que existe una zona alargada en dirección NE-SO en la parte centro-este, donde se produce un aumento considerable de los valores de P p %, alcanzando el valor máximo de 5,7%. Este aumento de P p% coincide con una zona de Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 52 D. Mellado, F. Álvarez Lobato y M. Yenes Figura 6.- A), B) y C) Mapa de isovalores de los parámetros P p%, FS p% y LSp% , donde se observa el aumento de la anisotropía en la franja central NE-SO para el Granito de Villavieja. D) Histograma de frecuencia del parámetro Pp %. anisotropía planar FS p% muy elevada, (Fig. 6B), mientras que la anisotropía linear LS p% presenta una zona de mínimo (Fig. 6C). Estos valores indican que en esta zona centro-este se habría producido deformación en estado sólido (Leblanc et al., 1994; Bouchez y Gleizes, 1995; Yenes et al., 1999). Datos direccionales Las direcciones de lineación magnética en el Granito de Villavieja son preferentemente norteadas y con bajas inmersiones, presentando en un intervalo de direcciones N-N20ºE un 27,9% de las estaciones, entre N20ºE-N40ºE un 13,9% y entre N160ºE-N180ºE un 27,9%, correspondiendo a otras direcciones dispersas las restantes estaciones. El vector medio de la lineación magnética es preferentemente subhorizontal, presentando una inclinación menor de 20º en el 58,1% y menor de 40º en el 83,7% del total de las estaciones (Fig. 7A). La orientación de los planos magnéticos se puede agrupar bajo una tendencia generalizada de planos norteados subverticales, que presentan un buzamiento mayor de 50º un 48,6% de las estaciones. Se observa que se orientan en la zona central del plutón de manera concéntrica y en los bordes del mismo, adaptándose a ellos (Fig. 7B). La coexistencia de valores subverticales y subhorizontales en zonas próximas del granito pueden ser explicadas según los siguientes puntos: - Existencia de irregularidades previas en la morfología del encajante. - Variaciones de la cota topográfica de observación. - Irregularidades locales de flujo magmático. En la zona norte del Granito de Villavieja, se observa que la tendencia de las líneas y planos no se adapta al contacto del plutón sino que choca contra él. Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 Este hecho se ha interpretado como una continuidad del Granito de Villavieja bajo el Granito de Yecla de Yeltes, manteniendo la dirección SSO-NNE que se observa en la parte aflorante del plutón. En la zona central del Granito de Villavieja se nota un cambio de tendencia en el buzamiento de los planos magnéticos, pasando de ser subverticales a subhorizontales. Este cambio coincide con un aumento i m p o r t a n t e e n e l g r a d o d e a n i s o t r o p í a P p% , y particularmente de la planaridad definida por FSp%. En el Granito de Yecla, la dirección de la lineación se sitúa de forma preferente entre N120ºE y N150ºE. La inclinación es escasa, menor de 20º en todos los casos. Estas orientaciones son compatibles con la deformación en estado sólido descrita en estos granitos (López Plaza y Carnicero, 1987). La reorientación por esta deformación de las biotitas proporciona un elipsoide magnético compatible con el elipsoide de la deformación tal y como se ha observado en otros casos (Rousset y Daly, 1969; Launeau, 1990; Bouchez et al., 1990, Rochette et al., 1992). Asimismo, los planos magnéticos presentan una dirección N120ºE-N150ºE, coincidente con la orientación general del granito, generada por deformación en estado sólido. La lineación y foliación magnética de la estación nº 11, no coinciden con las que presentan el resto de muestras del Granito de Yecla, lo que puede deberse a una deformación en el granito causada por la zona de Cizalla de Juzbado-Penalva. Discusión y conclusiones A partir de las fábricas magnéticas y del estudio de las microestructuras del plutón granítico de Villavieja de Yeltes, se ha establecido un modelo que supone un ESTRUCTURA DEL PLUTÓN DE VILLAVIEJA DE YELTES 53 Figura 7.- Mapas de lineaciones magnéticas y foliaciones magnéticas, con las correspondientes representaciones estereográficas. Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 54 D. Mellado, F. Álvarez Lobato y M. Yenes Figura 8.- Mapa esquemático de la estructura en la zona de Villavieja de Yeltes y perfil del mismo, donde se observa la zona de máximo aplastamiento en el techo del Granito de Villavieja coincidiendo con el sinclinal de Villares de Yeltes y la continuación del Granito de Villavieja bajo el Granito de Yecla. Modificado de Escuder et al. (2000). Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 ESTRUCTURA DEL PLUTÓN DE VILLAVIEJA DE YELTES avance en el conocimiento del plutón. Es posible asumir, con las limitaciones adecuadas, que la estructura interna del plutón en superficie es un reflejo de su forma y de la cinemática de su emplazamiento. E l G r a n i t o d e Vi l l a v i e j a p r e s e n t a u n a s características, tanto petrológicas como estructurales, propias de granitos emplazados en niveles estructurales elevados. Asimismo, el carácter leucocrático de este granito, establecido también por el contenido en hierro que se deduce tanto de los análisis químicos realizados por Bea et al., (1987) y Carnicero et al., (1987), como del análisis de ASM, junto con la edad relativa del plutón, son hechos que pueden indicar que se trata de un magma evolucionado que se emplazaría de modo tardío en la parte superior de la corteza. A este respecto, resulta significativo la ausencia de estructuras de deformación generadas en estado intermedio, las pequeñas dimensiones del plutón y el hecho de que el metamorfismo de contacto producido sobre las metapelitas del Complejo Esquisto-Grauváquico sea muy reducido. Estos hechos pueden corroborar un enfriamiento muy rápido del magma. El estudio de la estructura del granito se ha realizado fundamentalmente a partir de los datos direccionales obtenidos mediante la técnica de ASM. Las fábricas magnéticas obtenidas muestran una estructuración magmática del plutón caracterizada por unos planos de flujo magmático subverticales, con buzamiento elevado y dirección norteada y unas direcciones de flujo magmático preferentes N20ºE a N40ºE, con suave inclinación hacia el norte. En los bordes este, sur y oeste del plutón, se observa la adaptación de la orientación de los planos a la geometría del contacto, lo que puede interpretarse como un efecto de pared debido a la presión del magma sobre los materiales encajantes. Sin embargo, en la zona norte del Granito de Villavieja, se observa que la tendencia de las líneas y planos no se adapta al contacto del plutón sino que choca contra él (Fig. 8). Este hecho sugiere una continuidad del Granito de Villavieja debajo del Granito de Yecla de Yeltes, manteniendo la dirección SSO-NNE que se observa en la parte aflorante del plutón. Otro hecho relevante es la existencia de planos magmáticos subhorizontales en algunos sectores de la parte central del plutón. Este cambio coincide con un aumento importante en el grado de anisotropía P p%, y particularmente la planaridad definida por el parámetro FS p% (Fig. 5). Estas zonas pueden ser interpretadas como el efecto de techo generado en la cúpula granítica, al incidir el magma sobre un material encajante que actuó de barrera. A este respecto resulta especialmente significativa la coincidencia de estas zonas con mayor planaridad con la prolongación del Sinclinal de Villares de Yeltes, observable en los materiales del Complejo Esquisto Grauváquico. Si bien sería posible atribuir estos hechos a una deformación D 4, ésta sería más generalizada y no tan localizada como aparece en el granito de Villavieja. 55 La interpretación de la estructura regional indica que la capa de la Cuarcita Armoricana, situada estratigráficamente por encima del Complejo Esquisto Grauváquico, adoptaría la forma sinclinal definida en el Sinclinal de Villares de Yeltes, en una posición topográfica superior al nivel de afloramiento actual, por lo que se puede establecer que el magma granítico chocó con la Cuarcita Armoricana, que posteriormente hubiese sido denudada (Fig. 8). El comportamiento de la Cuarcita Armoricana como una barrera reológica, impidiendo el ascenso del magma granítico a niveles superiores ha sido puesto de manifiesto en otros trabajos sobre emplazamiento de granitos (Yenes et al., 1999) y concuerda con modelos de emplazamiento propuestos por otros autores (Lagarde et al. 1990). Aunque no se han encontrado evidencias, las direcciones de flujo determinadas y la presencia de la cuarcita armoricana permiten sugerir que el conducto de alimentación podría estar situado en la parte centralsur del plutón, según se muestra en la figura 8. La formación y ascenso de los magmas que han dado lugar a los cuerpos graníticos presentes en la zona tiene lugar durante el engrosamiento cortical y la posterior tectónica extensional desarrollados en las primeras fases variscas. Durante la fase D 3 en la zona de estudio se desarrolla la Zona de Cizalla de Juzbado-Penalva (Fig. 9), un cizallamiento dúctil de dirección N70ºE, con un buzamiento entre 55º y 75º al sur, que presenta una longitud de más de 150 Km. y cuyo desplazamiento se ha establecido en al menos 65 Km. (Villar et al., 1992). Al norte del plutón de Villavieja, la cizalla actúa deformando el Granito de Yecla, emplazado durante D3. Más tarde, las cizallas dextras de dirección N-S desarrolladas durante D 4, van a deformar la cizalla de Juzbado – Penalva, generando en una zona previamente debilitada la apertura de una grieta de dirección NNE – SSO (Fig. 9). La ascensión de los magmas graníticos desde la zona de generación (corteza inferior) hasta niveles estructurales elevados, como es el caso del plutón de Villavieja, no puede realizarse por una simple ascensión diapírica que atraviese un encajante frío (Marsh, 1982). Actualmente, en general, se acepta que el mecanismo más eficiente para transportar magma a través de la corteza es el de propagación de diques (Clemens y Mawer, 1992). Según estos autores, el magma ascendería por fracturas previas que son reactivadas. Estas fracturas presentarían en la zona de estudio, una dirección NNE-SSO, y estarían reactivadas por las zonas de cizalla N-S desarrolladas durante la fase de deformación D 4. El emplazamiento del magma parece estar condicionado por la existencia de una barrera reológica, definida por la Cuarcita Armoricana que impide la ascensión del magma a niveles corticales superiores. Al llegar a este nivel, el magma rellena el espacio que está generando el desarrollo de la grieta de extensión y se emplaza con líneas de flujo paralelas a la dirección de alargamiento, N20ºE a N40ºE. La Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 56 D. Mellado, F. Álvarez Lobato y M. Yenes Figura 9.- Esquema del emplazamiento del Granito de Villavieja de Yeltes: 1) Formación de la Zona de Cizalla de Juzbado-Penalva (ZCJP) durante la fase D3 . 2) Plegamiento de ZCJP e inicio de apertura de la grieta extensional durante D4. 3) Inicio del emplazamiento del Granito de Villavieja. 4) Emplazamiento final del Granito de Villavieja. (Ver texto para explicación completa). orientación del flujo no depende tanto de los esfuerzos tectónicos generales como de la adaptación del magma a la geometría del espacio que se está creando (Brun y Pons, 1981, Román Berdiel et al., 1995b, Neves et al., 2003). Es destacable el hecho de que estas mismas direcciones han sido puestas de manifiesto en distintos granitoides variscos de la Zona Centro-Ibérica (Yenes et al., 1999; García López-Davalillo, 1993, entre otros). Además, la forma final del plutón debe ser consecuencia en alguna medida de la expansión lateral del magma en el nivel del emplazamiento. Esta expansión se realiza a favor de discontinuidades tendidas, como la estratificación de los metasedimentos o los planos de esquistosidad S2, que pueden actuar como superficies de anisotropía, adoptando el plutón la forma final de sill o lacolito típico de los plutones tardíos emplazados en niveles epizonales (Román Berdiel et al., 1995b; Yenes et al., 1999). Se puede sugerir que el espacio necesario para el emplazamiento del plutón granítico de Villavieja habría sido generado, por lo tanto, por una combinación de la apertura de la grieta extensional con un mecanismo de expansión lateral del magma. El flujo magmático estaría controlado fundamentalmente por la geometría Revista de la Sociedad Geológica de España, 19(1-2), 2006 del espacio que se está creando, siendo menos importante la fuerza ascensional y el empuje del propio magma. La interacción del flujo magmático con los materiales del encajante dan lugar a anisotropías magmáticas por efecto de pared en los bordes este, sur y oeste del plutón, así como la zona de techo definida en la parte central del mismo. El escaso metamorfismo de contacto producido en los materiales del Complejo Esquisto-Grauváquico, formando blastos de cordierita, permite deducir un enfriamiento rápido del magma. La orientación N-S de estos minerales pone de manifiesto la continuación de los esfuerzos de D4 durante este periodo. De la misma manera, la deformación en estado sólido observada en los granitos también es evidencia de estos esfuerzos posteriores a la cristalización, lo que permite establecer la relación temporal entre el ascenso, el emplazamiento del magma y la Orogenia Varisca. Agradecimientos. Queremos agradecer a la Dra. Asunción Carnicero GómezRodulfo el asesoramiento y apoyo prestado durante toda la realización del trabajo y a los Dres. Teresa Román Berdiel y José María Tubía por sus revisiones y críticas, que han contribuido a mejorar el presente trabajo. ESTRUCTURA DEL PLUTÓN DE VILLAVIEJA DE YELTES Referencias. Amice, M. y Bouchez, J.L. (1989) : Susceptibilité magnétique et zonation du batholite de Cabeza de Araya (Extremadura, Espagne). Contes Rendus Académie Sciences Paris, Série II, 308 : 1171-1178. Amice, M., Bouchez, J. L., Aranguren, A., Álvarez, F. y Vigneresse, J. L. 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