¿CÓMO PUEDEN CONTRIBUIR LAS POLÍTICAS PÚBLICAS EN LA LUCHA CONTRA LA DESIGUALDAD Y LA POBREZA? Los impuestos son necesarios para la existencia del Estado. Es un método –en la teoría- para financiar los bienes y servicios que éste ofrece, redistribuyéndolos entre la sociedad, de la que se sirve y se nutre para obtenerlos (los impuestos) aunque en la praxis no se le dé únicamente ese uso. Nuestro grupo estaría dispuesto a pagar más impuestos siempre y cuando éstos beneficien a todos los trabajadores, no acumulándose en manos avariciosas que les den un mal uso. Los impuestos son necesarios para mantener el Estado, y si este tiene como misión mejoras sociales en beneficio de todos con el fin de eliminar las diferencias socioeconómicas y abolir las clases sociales dando lugar a una sociedad igualitaria, estaríamos dispuestos a contribuir con estos impuestos además de con nuestro propio trabajo. Opinamos que todos deberíamos pagar impuestos, mientras sean necesarios para mantener un Estado que vele realmente por el interés de la mayoría -y no por los de una minoría explotadora- y sirva de puente conector, de método de cohesión entre sí mismo y una futura ``comunidad´´ mucho más igualitaria que la actual. En ese caso opinamos que todos deberíamos pagar impuestos y además, deberíamos hacerlo todos por igual. En España no ocurre así. Los impuestos no son los mismos para las personas con una alta renta y por tanto una alta capacidad adquisitiva como para la gente más ``modesta’’ y con menos posibilidades. No parece tener mucho sentido que las personas que más podrían contribuir sean las que intenten evadir el pago de estos impuestos y salgan impunes mientras que se ahoga a la gente más pobre subiendo los impuestos sobre los bienes y servicios; pero si se tienen en cuenta ciertos ‘intereses’ que no salen a la luz muy a menudo, ciertos chanchullos que tienen lugar entre las bambalinas del mundo empresarial ,político,… todo parece adquirir cierto sentido. Pero, ¿cómo consiguen éstos personajes escapar de las garras del Estado y no tener que pagar impuestos? La respuesta es ``paraísos fiscales’’. Esta evasión de impuestos, este fraude fiscal es posible en gran parte gracias a ellos; pero, ¿qué son exactamente? Los paraísos fiscales son territorios especialmente interesantes para los evasores fiscales pues aplican un régimen tributario que les beneficia mediante una exención total de los impuestos o una reducción drástica en ellos. Son clave para la búsqueda de la igualdad ya que su eliminación supondría un paso importante para evitar el enriquecimiento excesivo que se ve en todos lados hoy en día, pero sería necesario combinarlo con otros factores que llevaran a un cambio radical de las condiciones económicas actuales. No es solo que los ricos no paguen impuestos y salgan airosos de ello, es simplemente el hecho de la existencia de esta división entre ricos y pobres la que supone el problema principal que hay que tratar. Hay ciertas cosas que el Estado puede hacer para corregir estas diferencias –antes de desaparecer, que sería por supuesto, lo ideal- como medidas políticas de carácter social como puede ser, convertir la propiedad privada en propiedad colectiva, reducir los salarios –de todos esos cargos públicos que se llenan los bolsillos a nuestra costa- a un salario base de ``obrero´´, es decir, ajustar las diferencias de renta, garantizar ciertos derechos básicos que el Estado del Bienestar, a pesar de ser tan maravilloso no cubre,…. Hay que matizar que estas medidas sociales no están destinadas tan solo a mejorar el sistema presente en la actualidad, cosa que desembocaría en un regreso a éste mismo, disfrazado de progreso; estas medidas están encaminadas a la creación de una comunidad en la que el disfrute de las libertades sea pleno para todo el mundo, organizado y concienciado de tal manera que de por sí el Estado como tal, no sea necesario. David Milanov, Milton Camacho, Mayker Almonte, y Yuli Metodiev 1ºB