El secreto profesional y el proceso penal por Domi1tgo Garcfa Rada Antes de ocuparnos de las exen · ciones a la obligación de declarar, recordemos en qué consiste y siguiendo a Manzini diremos que "El deber de testimoniar consiste en la obligación de declarar en el proceso toda la verdad conocida acerc.a de los hechos a probar o la proph ignorancia, total o parcial acerca de ellos·. Tiene carácter de deber jurídico (cívico) personalísimo y general y en el concepto (teóricamente discutible) de la ley penal vigente, constituye ejercicio temporal de una función judicial pública" ( 1). Llama a los testigos oficiales públicos para los fines penales. auxiliares, que están obligados a prestarla, sino también de la generalidad de las personas que moral y socialmente deben colaborar con la justicia. Frente a esta obligación, de car~~~> ter general, existen ciertas situar;iones que prevalecen sobre ella y e}. tmen de declarar. Tal es el caso con· templado en el primer párrafo del art. 141 del C.P.P. que dice: "No podrán ser obligados a declarar: Los eclesiásticos, abogados, médicos, no· tarios y obstetrices, respecto de los secretos que se les hubiere confiado en el ejercicio de su profesión". En este caso desaparece el carácter obligatorio, compulsivo podríamos agregar, de la declaración. Pero queda vigente el derecho de declarar. Puede decirse que el art. 141 exime de la obligación de declarar a las personas que indica pero no impide que las mismas voluntariamente ejerzan el derecho de testimoniar. Sólo en contados casos, previstos en la ley, el particular queda eximido de este deber: el interés general desaparece ante el interés particular, éste prevalece sobre aquél. El particular puede oponerse Jegtimamente a la divulgación de secretos confiados a su conocimiento, más aún, esta violación no sólo no está permitida por la ley, sino que está sancionada como delito. Un interés no menos elevado que La colaboración de los partícula· el de la justicia misma, se opone eu res con la justicia penal es indis. ciertos casos, a que el depositario pensable para investigar los hechos de un secreto conocido por razón de calificados de delictuosos, pues ra- su profesión Jo revele a la justicia ros son los casos en que el magis- cuando es citado como testigo. trado de "visu" puede descubrir el Este interés puede tener diversos delito. Por lo general requiere la ayuda y colaboración no sólo sus orígenes: es de Humanidad cuando -19- se trata de los secretos que ha conocido el médico al cuidar a un enfermo; es espiritual cuando se refiere a un sacerdote que lo ha recibido en confesión; es el de la defensa, cuando se trata del abogado que conoce las interioridades de su defendido y que le ha hecho confidencias para ayudar a su defensa. La justicia debe respetar el secreto que pesa sobre el médico, sobre el abogado, sobre el sacerdote, porque el cumplimiento de estos deberes · es de necesidad social. No se trata de liberar a tal o cual persona de la obligación de declarar, sino solamente a quienes ejercen determinadas profesiones. No constituye privilegio sino el reconocimiento de un elemento necesario en la vida de sociedad. entran en conflicto corresponde a Ja ley decir cuál prevalece y cuándo cede. En nuestro derecho el deber de guardar secreto prevalece sobre el de declarar, el interés privado so. bre el interés público. La profesión es una forma de actividad humana, cuyo ejercicio importa necesariamente el conocimien. to de secretos ajenos. El profesional se entera de hechos que le son revelados confidencialmente y que por esta razón son secretas. En el ejercicio de su ministerio, el sacerdote recibe secretos de confianza y revelaciones qu~ afectan los sentimientos y vida íntima de muchas personas, las que deben ser rigurosamente amparadas. Angel Gustavo Cornejo (2) hace notar que existe una situación objetiva que la El deber cívico de revelar los heley toma en cuenta: el secreto de la chos que se conozcan cuando la justicia los cita como testigos, reposa confesión está impuesto severamen. en que todas las consideraciones de te por la Iglesia y la ley acepta la índt>!e privada, deben ceder ante el necesidad de evitar al sacerdote la interés social que exige esta colabo- dura alternativa de violar los cánoración con la justicia. Cuando esas nes eclesiásticos o los preceptos de revelaciones han sido hechas a la la ley. persona por miembros de la socieLo mismo ocurre con el médico, dad, de modo personal y como seel notario, el abogado, la obsteltiz creto de profesión, entonces el juez que bio.w sea espontáneamente o no puede pedirles que traicionen esa porque ha sido necesario provocarconfianza. los, se enteran de hechos secretos, Esta dispensa de declarar no es verdaderas confidencias cuya divul absoluta para esos profesionales. gación podría causar evidente per.. Solamente se refiere a aquellos he- juicio al cliente. chos que el profesional ha conocido con motivo del ejercicio de su actividad profesional y como secreto. Salsmann, uno de los autores· que mejor ha estudiado los problemas de la moral profesional del abogaUno y otro se funda en motivos de do, al ·ocuparse del secreto profeinterés público. Si ambos deberes sional, declara que "La obligación -20 - de guardar escrupulosamente el se-· El profesional que conoce de los creto, constituye uno de los princi- secretos de sus clientes, contado por pales deberes de los abogados, no- éstos en la consulta que le formu. tarios, ~te." (3) laron, está obligado a guardar secreto absoluto de todo lo que ha Además del secreto de cQnfesión, sabido con este motivo. Un deóer Salsmann distingue el secreto con- de justicia le impone la obligación miso que nace cuando el confidente de silenciar todo aquello que pueda cuenta la cosa después que le ha si- perjudicar a su cliente. Todo lo sa-· do prometido que se guardará se- bido en la consulta constituye secre. creto; y el secreto natural que de- to profesional y obliga a la no diriva de ]a propia naturaleza de las vulgación. Ciertas circunstancias -cosas, de la cual nace la obligación pueden hacer más monstruosa la de silenciar hechos cuya divulgación violación de este deber: cuando el puede causar daño a otra persona. abogado aprovecha de lo contado por su cliente para ponerse en coEl secreto profesional dice Salsmunkación con el abogado de la mann es una variedad del secr~ to parte contraria, revelándole secre. conmiso. Abarca para los hombrrs tos; es igualmente grave, la divulde leyes "absolutamente todo lo que gación de estos secretos y su publipor razón de su cargo o profesión cación para que sea de todos cono.. h an sabido de sus clientes, bajo con- ciclos. Tales hechos constituyen dedición de no revelarlo y de no ha- lito. (Art. 363 C.P.) cer uso de ello contra la voluntad razonable de los mismos". No es 111.'· cesario que el cliente pida sec.rc:to ¿Quién es el que califica. lo que ni que el abogado ofrezca guard<~r·· constituye secreto profesional ? Con·· lo. Tácitamente se presta en el mosideramos que solamente el aboga.. mento en que el cliente va a consuldo, sacerdote, notario u obstetriz es tar a un profesional y con este mo. puede calificar si la persona que tivo le cuenta cosas privadas: toJo aquello por lo que se le pregunta lo que se hable en esta consul:-é• es constituye secreto profesional y no por naturaleza secreto. está obligado a declarar o al contrario, ·puede hacerlo. La razón reside en que siendo el profesional el ¿Cuál es el ftmdamento del secre- único que ha oído al cliente, tamto profesional? Es un deber de jus- bién es la única persona que puede ticia que obliga a la restitución en decir qué cosa constituye secreto y -casos de incumplirlo, dice Sals- cuál no. Es un derecho de la permann. Lo que la Iglesia lo estable- sona que ejerce alguna de estas acció para la confesión, el Estado lo tividades profesionales. La Corte na ampliadó para aquellas profesio- Suprema lo ha establecido -en la sines en las cuales el cliente tiene ne. guiente ejecutoria, que conscribi·c esidad de revelar la verdadera na- mos en sus considerandos porque turaleza de los hechos. Es una con- ampara la tesis ·del secreto profefesión laica. sional: - 21 - figura el delito previsto en el Art. 363 C. P. yo_ excluidos de todo interrogatm: io judicial. b ) El Censo General de la República (ley 8695) declara secretos de Estado, los datos que los habitantes de la República suministren y prohibe en forma absoluta su divulgación. Posteriormente la ley 13248 considera que estas informaciones tienen "carácter secreto" y no po. drán ser revelados "aunque medie orden judicial". Se entiende por razones de segt.•ridad o de política internaciom·J aquellas informaciones que se vinculan íntimamente con la segurid~1 d interna y externa del Estado y que no deben ser divulgadas, es dt~:: :r que requieren ser guardadas como secreto de Estado. Las grandes directivas de la política nacional, t aP to en lo interno como en lo int !!'nacional, que se mantienen secreté:ls por altas razones de Estado, no pueden ser matena de interrogato· rio a testigos. e) La Ley de Promoción I ndustrial ( N~ 13270) es tablece que los datos que las empresas industriales proporcionen son secretos y sólo Si el empleado o funcionario cipodrán ser usados para los fines de promoción de las actividades in- vil o m ilitar que desempeña labores en alguno de los Ministerios y pO! dustriales que persigue esta ley. razón de su oficio, conoce el archid) La Ley del Seguro Social del vo secreto, documento<> privado5 y Empleado (ley 13274) declara que papeles reservados de la. Admhlislos d~tos que proporcionen los em- tración, no puede absolver pregunpleados tienen carácter reservado. tas sobre el contenido de tales de cumentos, es decir, llamado a dee ) En cuanto al Impuesto sobre clarar por el juez de inst rucción, la Renta, la ley establece que lac; no está obligado a absolver el intedeclaraciones de los cont ribuyentes rrogatorio siempre que se relaciotienen carácter reservado, por ser ne con el secreto profesional. estrictamente confidenciales y no Manzini dice que citado con c~tc pueden ser divulgados. objeto, el empleado público ni siLos secretos de Estado están pro- quiera debe comp~recer, no puede tegidos en forma más severa aún. deponer sobre aquello relativo a seNi siquiera deben ser preguntados cretos conocidos por su función. sobre ello, si es que su divulgación El juez no puede interrogarlo sob1·e afecta la seguridad del Estado, ~~ hechos que el testigo conoce ~~-lll interés nacional, la política inten1.J· motivo del cargo que desempeña cional, los secretos militares o cual- en la Administración Pública y qu·~ quier otro que se relacione estre- por su propia naturaleza son sec.c~­ cha mente con ellas. Si se formub- tos y así deben permanecer. D ie~ cen preguntas de esta índole el j uez Manzini que si el magistrado insisdebe rechazarlas de plano, es dév'r tiera en interrogarlo incurre en "el ni siquiera debe tratar de obt~a.;r delito de revelación de secretos de respuesta sobre estos temas de su- Estado por lo menos en forma cul· -26 - "Considerando: que la prohibición contenida en el inciso tercero del art. 252 del C.P .C. redactada en presente del indicativo del verbo correspondiente, se refiere al abogado que en el momento en que se solicite su testimonio, patrocina a una de las partes, situación ésta en la cual la prohibición legal es amplia y general; que en el caso de autos, se pide la declaración del doctor M.M. que prestó sus servicios profesionales a los demandantes en juicios ya fenecidos, pues de autos no aparece que en la actualidad los patrocine; que si la declaración se refiere a aspectos generales de las relaciones entre las partes, sin tocar nada de lo relativo a los indicados procesos, no existe inconveniente para que sea interrogado, pero si las preguntas tienen relación con lo que el dec1arante considere secreto profesional, debe excusarse de absolverla".- (Causa N~ 211/ 65, 4~ Sala. Setiembre 1965, Lima. relacionan con aquello que considera secreto de profesión, sin menoscabo de este deber de silencio, puede declarar. La ley le faculta para abstenerse de contestar todas o una o más preguntas, cuando considera que se relacionan íntimamente con el secreto que está obligado a guardar. La negRtiva no tiene por qué ser total y absoluta: solamente se refiere a las preguntas cuya absolución significaría divulgar lo que constituye secreto de profesión, pudiendo declarar en todo aquello que no lo afecten. Por eso es conveniente que el testigo, aun cuando se sienta dis.J?.ensado de declarar, concurra al juzgado, acatando el mandato judicial, se entere de las preguntas y después de su lectura, cuando está convencido que al absolverlas tendría que descubrir algo que constituye secreto, entonces ma. nifestará al juez que estando a lo dispuesto en el art. 141 del C.P.P., rehusa prestar declaración o que solamente lo hará en aquello que considere pertinente. La decisión del testigo es irrevisable, es decir ni el La Corte Suprema declaró infun- juez ni el Tribunal pueden ordenardada la oposición a declarar y en le que declare sobre aquello que él consecuencia, que era procedente la califica como secreto profesional. declaración del abogado, debiendo Siendo esa su opinión, el juez tiene tener presente los considerandos an- que aceptarla y eximirlo de deteriores, es decir que si el letrado clarar. cuya declaración se solicitaba, consideraba que ]as preguntas se referían a aspectos del secreto profesional, estaba autorizado para no contestar el interrogatorio. Esta ejeEstudio especial merece la situacutoria consagra los mismos prin- ción de los empleados públicos. Es cipios de una resolución anterior. regla general que todos los ciudada(A. J. 1909 pág. 252). nos están obligados .a colaborar con la justicia penal y de manera espeSi el testigo encuentra que las cial aquellos a quienes el Estado ha, preguntas del interrogatorio no se encomendado alguna función. -22 - La función pública permite conoLos empleados y funcionarios públicos tienen obligación no sólo mo- cer y enterarse de hechos que afee· ral sino también legal de prestar tan Ja vida privada de los ciudadanos. Es inevitable que como consetestimonio. cuencia de su labor el empleado se Los funcionarios públicos deben entere de asuntos reservados, aun denunciar los delitos conocidos en secretos. Pero d~b e tener presente el ·ejercicio de sus funciones (Art. que tales conocimientos únicamente 333 C. P. y D. S. 9 agosto 1937) y pueden servirle para cumplir con poner a disposición de la justicia los fines de su función, no para los elementos probatorios que pue- darlos a conocer a terceras persodan haber recogido en el ejercicio nas. El principio general de la oblidel cargo. La colaboración del buen gación de colaborar con la admifuncionario con la administración nistración de justicia r ige también de justicia debe ser pronta y efipara la Administraci6n Pública y caz. No pueden rehusar los daen forma más severa: todos los funtos ni denegar los elementos de cionarios y empleados públicos esprueba que les solicita la justicia. tán obligados a comparecer al juzExisten autores que niegan a los gado cuando son llamados a declajueces la facultad de interrogar a rar, proporcionando los datos y dolos funcionarios estatales ( 4). Di- cumentos que posean en ayuda a cen que la separación de los pode- la investigación de los delitos. Sr· res impide que el Poder Judicial se enteran de la comisión de un dedicte órdenes al Poder Administra- lito, están obligados a denunciar al tivo y que la citación a sus funcio. delincuente y de ser posible a denarios constituye mandato que im- tenerlo. Su obligación, abarca no plica subordinación de un Poder a sólo la comparecencia al juzgado, otro. sino también la denuncia del delito. Los empleados y funcionarios Tal concepción es equivocada, públicos, aún más que los particupues no son órdenes las que el juez lares, están obligados a colaborar expide para llevar a cabo una fun- con la justicia. Si rehusan hacerlo, ción administrativa sino es manda- deberán ser sancionados disciplinato para cumplir una función judicial riamente. y para ello todo juez tiene competencia. El juez no puede emitir órPero no debe olvidarse que los denes sobre asuntos de índole ad- agentes de la Administración Públiministrativa, como sería señalar el ca están ligados por una obligación horario de trabajo, pero sí puede general: la discreslón profesional mandar que a quien se cita como que en algunos casos llega al secretestigo, comparezca ante el juzgado to. Por razón de la función que a declarar, sea empleado público o desempeñan están en estrecho contacto con la vida privada de los ciuprivado. dadanos y conocen datos confiden· ciales. -23-. Consideramos que esta exención pQsa". Nuestro Código Penal en de prestar testimonio debe comsu Art. 363 sanciona como delito prender dentro de su ámbito, a tola revelación de secretos, conocido!> por razones de l>U empleo o ;wc · das aquellas personas hombres y mujeres que por abrazar el estado fesión. religioso reciben confidencias sobre Examinando el primer inciso del hechos que no pueden ser divulgaart. 141 del C.P.P. vemos que estan dos sin grave daño para la persona comprendidos los siguientes profe- del confidente. tales revelaciones no se hacen en la confesión, cuyo sionales: secreto la Iglesia manda guardar a) Los Eclesiásticos. Cabanellas rígidamente, pero eso no les quita Jos define diciendo que: "Eclesiasti· su carácter. Es frecuente que en co: el que en virtud de órdenes sa- conversaciones privadas, los laicos gradas, a que ha sido promovido, se cuenten cosas íntimas a quien por halla dedicado al servicio del altar haber abrazado el estado religio~o, y culto divino" (5). Esta definición los consideren aptos para que les debe entenderse en sentido estricto brinden consejos espirituales, para y comprende a sacerdotes y religio- los cual es necesario franquearse sos clérigos. En sentido amplio y con espontánea sinceridad. Tales solo para los efectos procesales, confidencias deben mantenerse en consideramos que también puede secreto y no pueden ser contadas al prestar testimonio. comprender a quienes abrazan el estado religioso, sin llegar a la digLa forma como se hace la confinidad secerdotal, asi como a las con- dencia carece de importancia. Lo gregaciones laicales: v.g. la Orden que decide es la materia secreta y la de San Juan de Dios, Los Hermanos condición de quien la recibe. Exisde las Escuelas Cristianas, etc. Tam- tiendo estos supuestos, es indudabién debe entenderse que estan ble que si el eclesiastico fuere llacomprendidas en esta exención las mado a declarar, puede excusarse mujeres que pertenecen a órdenes de hacerlo manifestando que por constituir secreto de confesión y congregaciones religiosas. secreto profesional para la ley- no Con este mismo criterio, derivado puede absolver el interrogatorio cude razones procesales, considera- yo contenido le ha sido mostrado. mos que puede englobarse a los El juzgado deberá aceptar esta exministros de las diversas religiones cusa y eximirlo de la declaración. cristianas. Es cierto que, salvo la Por otra parte la violación de esIglesia Anglicana, carecen del Sacra- tos secretos, constituye el delito del mento de la Confesión, pero sus mi- Art. 363 del C.P. Los auxiliares de nistros pueden recibir confidencias los eclesiasticos que por razón de sobre asuntos de natu raleza secreta, su oficio, se enteran del secreto, eslas mismas que son hechas por su tan prohibidos de divulgarlos, pues caracter de ministros de la religión de hacerlo comete el mismo delito que el confidente pract ica. q ue sanciona el referido ar t. 363. -27- Administración Pública se arroga el derecho de examinar los libros de registro de los establecimientos comerciales, tomando datos que pertenecen a terceros. En esta forma pueden descubrir informaciones de toda clase. Los inspectores y cobradores llegan al domicilio particular y conocen datos familiares que son de índole privada o en el establecimiento comercial u industrial se enteran de deudas cuya publicación afectaría el prestigio comercial del negocio. La Pero al llevarlos a cabo el encarg:;do se entera de los hechos secret.M de los ciudadanos y · contribuyentes, tanto sean personales como relativos a su patrimonio. Nos p ~e­ guntamos: si el encargado de estos servicios es llamado por el juzgado y preguntado sobre estos hechos secretos, conocidos de manera directa e inmediata por su función, ¿está obligado a declarar? Nos encontramos frente a dos principios: la colaboración con la justicia, a la que están especialmente obligados los funcionarios públicos; y la necesidad de silenciar hechos cuya publicidad acarrearía perjuicio a los declarantes. Son los denominados datos reservados que en virtud de la discreció.1 profesional no se pueden hacer piJ.blicos. No llegan a constituir sec.,:r~­ to por la materia ni por la forma La solución se encuentran examicómo se enteran, pero indudab~e­ mente no deben ser publicados. La nando la materia del interrogatorip Administración los utiliza para ia y en la forma como se adquirió ese acotación del impuesto y son cono- conocimiento. Si aquella es de sucidos de los empleados. pero no d~­ yo secreta y el agente de la Admiben trascender ni por quien los co. nistración Pública toma conocinoció ni por los que de ellos se en- miento en el ejercicio de su funteraron en la oficina. La discreci·)n ción, entonces es secreto profesiolos obliga a no decirlos y menos a nal y no puede absolver preguntas que se refieren a este tema. publicarlos. Existen además otros emplead~.:-s y funcionarios que conocen dates en ejercicio de su cargo, los cua!t?s tienen naturaleza secreta. Es el e;~. so de los empleados y funcionarios de Contribuciones, Correos y Telecomunicaciones, Teléfonos, Inspt~e­ tores de Salud Pública y del servicio ~unicipal de salubridad, control de actividades comerciales, servicio de estadísticas, produc~ión económica, etc. Estos servicios responden a n:ec esidades urgentes del País y no pueden ser postergados ni eliminados. Pero si el interroga torio no tuviera ese carácter, aunque el funcionario adquiera ese conocimiento en la función, no como consecuencia directa de ella, entonces puede contestar las preguntas que el juzgado le formule. Veamos ejemplos: en la acotación tributaria la' Administración se entera de la renta que percibe el contribuyente. Si el empleado encargado de esta labor es citado al juzgado para que indique la renta de determinada persona, cuya acotación ha verificado, entonces debe negar- - 24 - se a declarar porque la materia es secreta y ha tomado conocimiento como consecuencia de su labor. Pero si el cobrador de determinada repartición pública al realizar su labor visitando a particulares, ha conocido el recibo de la casa, si más tarde se le pregunta sobre la distribución de esa habitación, puede declarar, pues ello no tiene carácter secreto, pues para una contribución no era necesario ingresar al interior de una casa. En el primer caso existe secreto profesional; en el segundo, la discreción impedirá publicar los datos conocidos en los periódicos, pero podrá informar al juez si fuera interrogado. El límite a este sometimiento es el secreto profesional. Esto permite al funcionario requerido negar los datos conocidos en el cumplimiento de su deber, en las denominadas "confidencias necesarias". ción al principio gerÍeral de la colaboración del público en general y de Jos empleados y funcionarios públicos en especial con quienes administran justicia y como tal tienen la limitación que hemos señalado. En nuestro ordenamiento legal, existen diversas disposiciones que establecen que los datos recogidos · constituyen secreto y no pueden ser divulgados. Su revelación ·configura el delito previsto en el Art. 363 del C. P. Dos requisitos exige este artículo: que la divulgación pueda causar daño; y que se realice sin consentimiento del interesado. Lo primero constituye el daño potencial, es decir que la publicidad del secreto sea capaz de causar daño, aunque por diversos motivos no llegue a ocasionarlo. En cuanto al consentimiento, si existiere, deja de ser secreto por cuanto el interesado autoriza su divulgación. En el ejercicio de su funCión, los Diversas leyes contemplan este empleados y funcionarios conocen ilícito penal. Tales son: secretos privados. cuya divulgación a) La ley de Bancos N~ 7159 propodría causar daño en el patrirno· nio o en el prestigio de los decla- hibe al Superintendente y a los emrantes. Si los hechos revelados a pleados de la Superintendencia de los agentes de la Administración Bancos "dar a conocer cualquier Pública, cuando actúan como tales información relacionada con los son secretos, escapan a la investi- documentos, informes· u · operaciogación judicial. Pero ·SÍ no tienen nes de cualquier empresa bancaria; este origen, aunque hayan sido co- o proporcionar a persona alguna nocido en el desempeño de su la- que no esté al servicio de la Supebo:c y no pertenezcan al campo de ' rintendencia de Bancos, cualquier lo secreto, pueden ser materia del información con respecto a l;:ls opeinterrogatorio judicial y el funcio- raciones o negocios de cualquier nario o empleado público, llamado empresa bancaria, que pudiera haa declarar, debe acceder a prestar ber llegado a conocimiento de ello su colaboración con la justicia p~­ en el desempeño de su puesto" .. La nal. El secreto profesional es excep- infracción de esta disposición con-25- b) Los Abogados. Al asumir una defensa se establece una vinculación especial entre cliente y profesional. Este se obliga a poner al servicio de la causa que patrocina, sus conocimientos con dedicación y hom;adez pero exije del cliente sinceridad, estando obligado a hacerle una exposición comp leta y veraz de los hechos, para que pueda encausar la defensa en forma apropiada. Con este motivo tiene que enterarse de circunstancias de la vida íntima, cuya divulgación podría causar grave daño en el honor y en el patrimonio de la persona cuyo patrocinio acepta. Tiene que enterarse de hechos materiales como sería la evasión de impuestos o eJ ocultamiento de efectos del deli.to y de hechos inmateriales como sería la amistad con el procesado o las relaciones extramatrimoniales cuya divulgación podría causar perjuicio evidente en el confiden te. Estos hechos de los cuales se entera el abogado en virtud de la defensa que asume y como consecuencia directa de ella, constituyen secreto profesional y no pueden ser dados a la publicidad, ni aún en el caso de que mediara requerimiento judicial. Si fuere citado y preguntado por el juez, el abogado amparándose en el secreto profesional, deberá negarse a absolver el interrogatorio. profesional es un deber fundamental, que subsiste íntegramente después que se' ha dejado de prestarle servicios. Resp~cto a los jueces y demás autoridades, es un derecho que debe invocarsc ante la exigencia o petición de formular declaraciones de cualquier natu raleza que afectan al sector profesional". Luego en el art. 15 al ocuparse de la obligación de guardar el secreto dice: "La obligación de guardar el secreto profesional se extiende a las confidencias hechas por terceros al abogado en razón de su ministerio y a las derivadas de pláticas para realizar un transación que fracasó. El secreto debe comprender tam· bién las confidencias de los cale. gas". La jurisprudencia suprema ha establecido que: "El impedimento del abogado para declarar como testigo es absoluto; le comprende la prohibición, aún cuando haya dejado de patrocinar al cliente, por estar moral, legal y jurídicamente obligado a guardar secreto de todo lo que conoce por razón de su profesión". (A. J . 1909 pág. 252) . Recientemente -en 1965la misma Corte Suprema ha reiterado igual doctrina en el caso citado en El Código de Etica Prosional páginas anteriores, cuyos consideque es norma obligatoria para quie- randos establecen que todo lo que nes integran la Orden de Abogados el abogado conoce por razón de su y que se encuentra vigente desde el profesión y que de suyo sea secreto, 20 de diciembre de 1950- en su art. constituye el llamado "secreto pro14 establece que "Guardar el secre- fesional". y aún que hubiere dejado to profesional constituye a la vez de patrocinar al cliente, siempre un deber y un derecho. En re- continúa obligado a la no divulgalación con el cliente, el secreto ción. -28 - La divulgación de estos secretos En ningún caso ni por motivo aL conocidos en la profesión y con mo- guno el m édico puede divulgar los tivo de su ejercicio constituye una secretos que se ha enterado en el grave infracción de normal moral y ejercicio profesional. No se discute legal. Además constituye el delito esta obligación y de hacerlo, el profesional incurre en el delito previsto previsto en el art. 363 del C.P. exi el Art. 363 del C.P. Llamado a Esta obligación de guardar secre- declarar sobre estos aspectos debe to se amplía a los auxiliares y prac- negarse a contestar las preguntas ticantes del· Estudio. En el caso de del interrogatorio. La revelación de los estudiantes de Derecho que con- estos secretos, como los anteriores, forme a ley, realizan su práctica en constituye el delito previsto y penael estudio de un determinado letra- do por el Art. 363 del C.P. do y se enteran de circunstancias íntimas de los clientes, también es· Por expresa disposición de la ley tan comprendidos en esta obliga- penal (última parte del art. 363) los ción del silencio. Es cierto que a estudiantes de medicina quedan ellos no les ha sido confiado el se- comprendidos dentro de la obligacreto y por consiguiente no respO!l· ción de guardar secreto acerca de den de su no divulgaci6n; que tam- aquello que se hubieren enterado poco son abogados y por ende no en su práctica profesional. Si lo diestán protegidos por el secreto pro- vulgaren, quedan incursos de esta fesional. Pero como la ley penal disposición legal. (art. 363, última parte) comprende d) Los Notarlos. Los Notarios cono solamente a los abogados, sino también a los auxiliares, es induda- mo depositarios de la última volunble que como el revelar secreto tad de las personas, estan en poseconstituye delito, están eximidos de sión de datos de familia y patrimola obligación de declarar y prestar niales que tienen naturaleza secreta y cuya divulgación puede ocasionar testimonio. graves desavenencias y hasta litigios e) Los Médicos. Es una de las en la familia. Son asuntos de suyo más antiguas profesiones, la cual secretos y no pueden testimoniar siempre ha estado comprendida co- acerca de ellos. mo obligada a guardar los secretos que se enteran en el ejercicio profe. Pero el secreto profesional no se sional. El médico, como el sacerdo- refiere solo al testamento, el caso te, conoce de las intimidades de sus de más clara comprensión. También clientes quienes necesitan contarlas en diario ejercicio profesional, el cuando concurren en pos de la con- notario tiene ocasión de enterarse sulta. Muy a menudo es necesario de secretos de familia, que no pueque el médico conozca los proble- den ser divulgados sin ocasionar mas que afectan a su cliente para perjuicios económicos y personales. atenderlo con éxito. Las confiden· Es materia que no debe ser divulgacias del paciente a su médico son da, que el notario conoce en su concomunes y en ellas reposa la rela- dición de tal y está comprendida ción que los une. dentro del secreto profesional. - 29- cho y no comunicarlo. Llamada a decJarar sobre este hecho, deberá excusarse en el secreto profesional. De testimoniar incurre en delito También la ley penal comprende (art. 363 del C.P.). a los ·notarios ent re quienes prohibe divulgar secretos a los cuales ha Estos son los únicos profesiona· tenido acceso en el desempeño de les que cstan eximidos de prestar los función. Citado por el juez, debe declaración ante los juzgados de abstenerse de absolver las pregun- instrucción. La ley procesal no se tas del interrogatorio si es que ellas refiere a otras profesiones que tamse refieren a hechos conocidos en bién pueden tomar contacto con sesu labor y que tienen la condición cretos cuya divulgación causaría de secretos profesionales. perjuicio. Aunque este primer inciso no se El Código Penal en su art. 363, es refiere a los empleados de la notamás amplio. Comprende a los aporía que se enteran de asuntos secrederados y farmacéuticos como autotos por razón de su actividad, sin res de delito si revelaran secretos embargo consideramos que estan obligados a guardar silencio y no conocidos en el ejercicio de su ac. pueden declarar como testigos, por tividad. cuanto la ley penal (art. 363) consiTambién entiende que son pasidera delito la revelación de secretos bles de pena "los auxiliares" de los conocidos en razón de su empleo profesionales antes mencionados, que causen daño y que sea cometicomprendiéndose dentro de este do por lo auxiliares de Notarios. termino amplio a los practicantes, e) Las Obstetrlces. El Código Pe- ayudantes, secretarios, etc. es decir nal las llama parteras por razón de a todos los empleados que auxilian la profesión que desempeñan y el de- a los profesionales que menciona rogado C.P. en M.C. las denominaba la ley penal y que con motivo de su matronas. Esta labor les permite en- labor se enteran de hechos secretos, terarse de secretos de familia, cuya que no deben ser conocidos. divulgación puede causar daño. La asistencia obstétrica a una mujer no De manera que si la ley penal sandebe salir del ámbito profesional. ciona como delito la declaración de salvo que -como ocurre con las ca. estos profesonales y de sus auxiliasadas- el nacimiento de una cria- res sobre hechos secretos y cuya. tura constituya acontecimiento fa- divulgación causare perjuicio es inmiliar. dudable que llamados por la justicia penal para declarar, deben nePero si la atendida tuviere motigarse a prestar testimonio, ya que vos especiales para ocultar el parto de hacerlo cometerían el delito "vio-tal sería el caso de la mujer sollación de Secretos de empleo y pro· tera- la obstetriz tiene la obligación profesional de silenciar el he- feslón". Todo aquello que conoce fuera de su diario quehacer, no está amparado por esta disposición legal. -30 - Muchos y graves problemas plantean el secreto profesional. Veamos Jos más frecuentes. este motivo se enteran de hechos de naturaleza secreta... _pueden acogerse a la excención del art. 141? Creemos que no. Los curanderos y tinterillos que ofician de médico o de abogado no pueden acogerse al secreto profesional, puesto que no son profesionales 1.- ¿Hasta cuando obliga el secreto? En el tiempo, lo conocido en mérito del secreto profesional, obliga indefinidamente. Ni la muerte del interesado da término a esta obligación pues los herederos o faPero si se enteran de cosas de sumiliares pueden ser perjudicados yo secretas, están obligados a guardar silencio y no divulgarlas, no en con la revelación. virtud del secreto profesional, sino En el espacio también obliga ili- porque la ley penal asi lo obliga, mitadamente. El secreto conocido puesto que de hacerlo cometerían en Lima no puede ser divulgado en el delito previsto en el art. 363 del ninguna otra parte de la República C.P. ni e11 el extranjero. Dada la velocidad de las comunicaciones, lo divul4.-El médico o abogado que con gado en una región del mundo, por motivo de un juicio se entera de alejada que esté, puede ser conoci- ciertos asuntos d~~ famiJia, más tardo casi inmediatamente en el lugar de ¿puede ser llamado a declarar en donde se verificó el hecho, con lo otro juicio, pero sobre esos hechos? que se podría causar igual perjui- Debemos dintinguir: si con motivo del juicio fenecido, se ha enterado cio. de circunstancias generales, conoci2.-¿Es necesario que el testigo das de todos - vg. que el cliente cadiga expresamente que no puede ab- minaba · con la niña-, puede deelasolver determinada pregunta por- rar por cuanto son cosas del conoque su texto constituye secreto pro- cimiento público. Pero si fuese prefesional? No, puesto que así podría guntado sobre algo solamente conodar una pista. Es suficiente que el cido por él, cuya divulgación pudietestigo conociendo el tenor del in- ra dar algún indicio sobre secretos terrogatorio, diga que acogiéndose vertidos en el anterior proceso, ena la ley, se obstiene de declarar, sin tonces deberá callarse, pues en caprecisar en que forma la respuesta so contrario violaría el secreto proviolaría este deber. No puede dar fesional. razón que, de modo indirecto pueS.-Si el abogado o médico con de llegarse a descubrir aquello que motivo del ejercicio profesional, se debe callar, ni ofrecer indicio algu- entera que su cliente ha cometido no acerca del contenido del secreto un delito ¿deberá denunciarlo? de profesión. Consideramos que no. Lo conocido con motivo de juicio, que constitu. 3.-¿Aquellas personas que sin te- ye secreto profe~>ional , no puede ser ner licencia para ejercer la profe- divulgado. Es claro que no puede sión, per:o de hecho la ejercen y con ayudar al cliente a ocultar el delito -31 - .J ni colaborará en su fuga, pero tampoco puede denunciarlo a la policía. La situación es más grave si se entera de un delito que su cliente prepara. En ese caso deberá tomar todas las precauciones del caso, sin divulgar el hecho, para evitar su consumación. La prudencia y tino del profesional entran en juego para lograr que el cliente desista de su intento. Pero en ningún caso puede denunciar ni hacer público el propósito delictuoso de quien se lo ha confiado en uso del secreto profesional. El art. 363, del C.P. en su primera parte, sanciona como delito la divulgación de los secretos conocidos con motivo del oficio, empleo, profesión o arte, de hechos que no puedan ser divulgados sin consentimiento de su autor, salvo que la revelación fuere necesaria "para salvaguardar un interés superior" dic.e la ley. En su segundo apartado, de modo especial se refiere a determinados profesionales, quienes moral y legalmente están obligados a guardar secreto, sin que las exigencias anteriores puedan eximirlos de esta obligación. La ley .entiende que de· terminadas profesiones para cumplir con su deber, necesitan que quienes las ejercen puedan penetrar al fuero íntimo de la conciencia, ofreciendo la seguridad de que lo conocido con este motivo no sed divulgado en ningún caso ni por ninguna circunstancia. proviene de que el profesional hubiere ofrecido expresamente guardar secreto, sino de la propia naturaleza de estas relaciones y de la esencia del deber profesional. Si el clknte quiere hacer público io contado como secreto, puede hacerlo, pero ello no autoriza a su vez el letrado a divulgarlo por su cuenta. Para el médico, abogado o sacerdote, lo conocido como secreto y en la profesión, siempre es secreto, aunque el cliente no lo considere asi y la obligación del silencio subsiste, aunque el interesado lo desligue de ello. 7.-Cual es límite de lo que constituye secreto profesional: lo es solo aquello que le hubiere sido confiado en el ejercicio de su profesión? - La acepción de lo que com. prende secreto profesional es amplia. Confiar es entregar algo -material o inmaterial- de modo voluntario. En el caso del abogado lo son las confidencias que voluntariamente le hacen los clientes, con motivo de los asuntos encargados a su patrocinio. Todo lo que exceda a este secreto entregado libremente y que no tenga carácter reservado, no es secreto profesional y puede ser contado si fuese requerido por la justicia. La materia que comprende el d;! nominado secreto profesional es todo aquello que el sacerdote, médico, abogado, etc. se entera por boca del cliente, de modo espontáneo y siempre que de suyo sea secreto, es decir que no deba ser divulgado. 6.-Si el cliente autoriza al abo. gado o médico, a que divulgue lo Más apropiado subiera sido que conocido como secreto, éste siemque el Código en vez del vocablo pre queda obligado al silencio?. Creemos que si. La obligación no confiado, empleara el verbo cono-32- cer. Confiado significa conocer por obra del propio interesado, que lo cuenta de manera espontánea; en cambio conociendo comprende todo lo que el profesional se entera con motivo de la profesión y de naturaleza secreta, no susceptible de divulgación. De dos maneras se entera el abogado de los secretos de su clientes: mediante la confidencia espontáneahecha en forma expresa, por el propio interesado; o de modo incidental e involuntario, bien provenga del interesado que, sin querer relata algo secreto; o por referencias ajenas. Lo primero le ha sido confiado; lo segundo no, pero lo ha conocido de modo directo en el ejercicio profesional. Ambas confidencias deben ser calificadas de secreto profesional, puesto que en los dos casos, el abogado ha adquirido ese conocimiento en 31 ejercicio de su actividad como tal. En acepción amplia, ambas constituyen secreto profesional y no deben ser divulgadas. Aceptar que solo constituye secre. to aquello que el cliente le confía de modo expreso, es obligar al abogado a clasificar los datos que guarda en la memoria por sus orígenes y según eso, declarar o no. Se prestaría a errores y confusiones, con evidente perjuicio para el secreto profesional que a la sociedad interesa mantener. - 33-