Mensajero Médico ¡EN BUENA HORA! Verano 2009 Baptist Hospital of Miami Un dolor de cabeza casi fatal South Miami Hospital Homestead Hospital Teléfono: 786.596.2373 Fax. 786.596.5979 Dirección electrónica: [email protected] Sitio electrónico: www.baptisthealth.net Tratando lo que era intratable Doctors Hospital Producción y Redacción: Vivian Gude Director de Arte: Carlos Arriaga C DERECHOS RESERVADOS 2009: BAPTIST HEALTH SOUTH FLORIDA Baptist Health International Center of Miami Baptist Health International Center of Miami (BHICM) y Baptist Cardiac & Vascular Institute llevarán a cabo un primer simposio conjunto los próximos 7 y 8 de agosto en el auditorio del Baptist Hospital. Es el primer simposio de este tipo que tiene lugar bajo la égida de nuestro centro internacional y un evento que se esperaba desde hace tiempo, dada las actividades médicas internacionales que caracterizan a ambos centros. “Este simposio es parte de nuestro nuevo programa para invitar a colegas médicos de Latinoamérica y el Caribe, con el objeto de que estrechen sus relaciones con nuestros especialistas y conozcan lo que hacemos de primera mano”, dijo el Dr. Antonio Briceño, Chief Medical Officer del BHICM y uno de los directores del evento. “El mismo contiene un temario importante que incluye las últimas armas terapéuticas y de tratamiento para las enfermedades cardiovasculares”. Entre ellas se encuentran “Terapia percutánea de la válvula”, “Solución endovascular para aneurismas intracraneales”, “Cirugía robótica cardíaca”, “Actualización de investigaciones importantes” y otras. Habrá transmisiones de casos en vivo y en directo. CÓMO EVITAR QUE LOS NIÑOS SE AHOGUEN El verano es, inevitablemente, de agua, ya sea bien limitada, como una piscina, o abierta, como una playa, un lago o un río. Para no tener nada que lamentar en contacto con el refrescante placer, he aquí unos tips: Ponle una cerca a la piscina. No sabes en • qué momento un niño pequeño puede deslizarse hacia la piscina, por lo tanto, cércala con una reja con portezuela que se cierre automáticamente y con cerrojo a prueba de niños. • Los chalecos salvavidas son obligatorios. Haz que todos los niños que vayan a estar cerca de grandes masas naturales de agua, como un océano o un lago, se pongan el chaleco salvavidas, aunque sepan nadar. Aprende “Primeros auxilios”. Aprende resucitación cardiopulmonar (RCP) y renueva el certificado cada dos años. La RCP puede • salvarle la vida a un niño. ¡Mantente vigilante! No pierdas de vista • a los niños pequeños cuando estén en una bañera, en una piscina o alrededor de masas naturales de agua. Los adultos que estén a cargo de niños cerca del agua no deben distraerse con nada: ni jugar cartas, ni leer un libro, ni hablar por teléfono. Nueva técnica para el aneurisma cerebral El “aprisionamiento” (jailing) es una nueva técnica, desarrollada a partir del tratamiento endovascular de los aneurismas cerebrales, que combina el rellenar la bolsita con pequeñas espirales de metal para coagular la sangre (embolización) con la introducción de un stent (endoprótesis vascular o mallita). En la misma se introduce un catéter por la ingle hasta el sitio del aneurisma para colocar el stent, que toma la forma del vaso sanguíneo. Luego se pasa otro catéter por el entramado de la mallita para introducir las espirales metálicas que van a rellenar el aneurisma, con el fin de lograr que la sangre coagule en su interior (embolización) y detenga el sangramiento. El Dr. Italo Linfante, director médico de neurorradiología intervencionista del Neuroscience Center del Baptist Hospital y el galeno que más aneurismas cerebrales realiza en el sur de la Florida, explica que lo que se consigue con eso es que las espirales no escapen. El galeno afirma que “con la técnica de embolización con espirales puedo tratar a cualquier paciente, incluso de más de 80 años, porque el tiempo de anestesia –usamos la general– es mucho más corto, ya que realizo el procedimiento en una o dos horas, y la recuperación es muy rápida”. A Hildelisa Ascunce, de 44 años, la vida se le sale por los poros, una vida que Jorge, su esposo desde hace 28 años, estuvo cerca de perder. “Yo fui enfermero, por eso sé que un accidente hemorrágico como el de ella, siempre deja por lo menos parálisis de la mitad del cuerpo”, dice Jorge, y recuerda el desánimo que sintió entonces cuando supo que lo que había tenido su esposa era la ruptura de un aneurisma cerebral. Un aneurisma es el debilitamiento de la pared de un vaso o arteria que va formando una bolsita por la que se desvía la sangre, presionando cada vez más hasta que se revienta. Esa ruptura puede ser fatal. En el cerebro, el derrame puede ocasionar la muerte o al menos serias incapacidades físicas. de manera intervencionista colocando una presilla que sella el cuello de la bolsita, rellenando ésta con espirales de metal. Sin embargo, eso es posible sólo cuando ese cuello es pequeño; cuando es ancho la técnica no se puede emplear, porque las espirales se escapan. La única opción en ese caso ha sido la cirugía de cráneo abierto, de alta mortalidad y riesgo de daños al cerebro, sobre todo si el aneurisma se ha reventado, provocando un derrame cerebral. El nuevo procedimiento intervencionista, que la Agencia de Alimentos y Drogas de los EE.UU. autoriza a que se realice sólo en contados centros médicos del sur de la Florida, entre ellos el Baptist Hospital, consiste en combinar la embolización con espirales con un stent o tubito de malla por medio de un catéter que se introduce por la ingle y que va hasta el cerebro. “El stent es un tubito con una malla que se coloca en el cuello del aneurisma, tapándolo. El aneurisma se rellena luego con las espirales”, explica el Dr. Linfante. “De esta manera tratamos aneurismas como los de cuello ancho y los fusiformes, que hasta ahora se consideraban intratables”. La Sra. Hildelisa Ascunce con su El tratamiento de cráneo esposo, Jorge. abierto hubiera sido muy riesgoso para la Sra. Ascunce, confiesa el Dr. Linfante, quien aclara que el aneurisma “tenía el cuello muy ancho y estaba cerca de grandes arterias del cerebro. Una cirugía abierta le hubiera sellado una de las arterias y se hubiera quedado paralítica. De esta manera le protegimos la arteria y le corregimos el aneurisma”. El procedimiento intervencionista tomó 12 horas, según recuerda Jorge. El derrame cerebral era masivo. “Pusimos un tubo dentro de los ventrículos del cerebro para extraer la sangre y ésta, con el tiempo, se reabsorbió”, comenta el Dr. Linfante, “pero, por supuesto, hubo daño al cerebro con la ruptura inicial”. Una persona con un ángel guardián muy fuerte Cuando la Sra. Ascunce fue a darse una ducha sintió que las piernas le flaqueaban; no tenía idea de que un aneurisma en las profundidades de su cerebro estaba a punto de terminar con su vida. “Me comenzó un gran dolor de cabeza y vómitos”, dice hoy, casi totalmente restablecida. “Llamamos a Rescate. Pero el dolor de cabeza comenzó a ceder y mis signos vitales se normalizaron. Así y todo, le pedí a los rescatistas que me llevaran al Baptist Hospital. Allí llegué sin problema, pero entonces me comenzó de nuevo un dolor de cabeza insoportable”. De ahí en adelante no recuerda nada más. “Le hicimos una tomografía computarizada y una angiografía”, nos explica el Dr. Italo Linfante, director médico de neurorradiología intervencionista del Neuroscience Center del Baptist Hospital. “Sospechamos que se trataba de un aneurisma. Era uno muy irregular y difícil, con un cuello muy ancho; era difícil de tratar. Hubiera sido un desastre si se hubiera tratado abriendo el cráneo”. Pero el Dr. Linfante había comenzado a realizar un nuevo procedimiento intervencionista. Tradicionalmente, los aneurismas cerebrales se tratan De esos daños se recuperó la Sra. Ascunce durante una estancia de dos semanas en el hospital. Hoy, nadie puede sospechar la crisis de salud por la que pasó hace apenas medio año. “El aneurisma desaparece al cabo de seis meses”, subraya el Dr. Linfante, “y la posibilidad de que le vuelva a sangrar es menos de 1 en 1.000”. El aneurisma de cuello ancho generalmente se trata en pocas horas y el paciente se va a casa al día siguiente, siempre y cuando el mismo no se reviente, algo frecuente en este mal silencioso del cual usualmente el que lo padece no tiene idea. “A diferencia del dolor de migraña, que progresa en intensidad, la ruptura de un aneurisma produce un dolor de cabeza intenso y repentino”, explica el doctor. “Eso le ocasiona somnolencia, a veces un coma, y también puede hacer vomitar a la persona”. La Sra. Ascunce tenía un ángel guardián que velaba por ella aquel día: “Yo me hubiera podido quedar en mi casa cuando me dijeron que estaba bien”, comenta. “Tengo otros hospitales que me quedan más cerca, pero algo me dijo que tenían que llevarme al Baptist...”. dicos Próximos eventos mé CUARTO SIMPOSIO ANUAL DE CUIDADO DE HERIDAS Fecha: 26 de septiembre Lugar: The Doral Marriott Resort, Miami, Florida SIMPOSIO SOBRE ANEURISMAS CEREBRALES Fecha: 10 y 11 de octubre Lugar: Miami Beach Resort and Spa, Miami Beach, Florida SÉPTIMO SIMPOSIO ANUAL SOBRE EL SUEÑO Fecha: 14 de noviembre Lugar: Auditorio Victor E. Clarke, en South Miami Hospital Si desea más información, escriba a [email protected]