Junio/2012/B20 Formación ciudadana democrática para la construcción de una cultura de la legalidad Para los niños y jóvenes es primordial tener la capacidad de actuar con libertad ante diversas situaciones que se presentan a lo largo de su vida, por ello deben aprender a convivir en sociedad, respetando las normas establecidas a lo largo de la historia. La Secretaría de Educación Pública creó el programa “Formación ciudadana democrática para la construcción de una cultura de la legalidad” que tiene como propósito fomentar en el alumnado de educación secundaria las competencias para la convivencia social, a fin de que sean capaces de ejercer sus derechos y respetar los de los demás. El sustento de dicho programa está en los principios del Artículo 3° de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, donde se menciona que “la educación será democrática y contribuirá a la mejor convivencia humana, tanto por los elementos que aporte a fin de robustecer en el educando, junto con el aprecio para la dignidad de la persona y la integridad de la familia, la convicción del interés general de la sociedad, cuanto por el cuidado que ponga en sustentar los ideales de fraternidad e igualdad de derechos de todos los hombres.” En este sentido y basados en los principios de igualdad que se marcan en dicho artículo, los docentes inculcan en sus alumnos una conciencia sobre la legalidad y justicia. Logrando que los jóvenes se reconozcan como seres únicos y comprendan que existen diferencias entre los seres humanos como; la razón, la libertad, la voluntad, la autonomía y la inteligencia para decidir el curso de su vida. Al vivir en un régimen democrático es importante que se enseñe el respeto a las normas y leyes que son producto del consenso ciudadano, lo cual permite una sana convivencia. La aplicación de la ley es indispensable, pero por si misma no garantiza una convivencia pacífica, democrática y respetuosa, por ello la educación es el pilar fundamental. Al rescatar los valores de convivencia social los alumnos pueden expresarse, imaginar, tener metas, discernir de forma consciente y voluntaria cuando exista una situación dañina, para sí mismo y para quienes lo rodean. El objetivo es que el estudiante pueda participar de forma activa en la construcción de una sociedad democrática, pero sobretodo que aprenda a respetar y apreciar la diversidad en general, dando como resultado que logre tener relaciones basadas en principios de inclusión y equidad a favor de la democracia, la paz, y el respeto a la legalidad. La colaboración ciudadana en temas de democracia y legalidad es vital para el desarrollo de una nación ya que con ella se logra una sana convivencia social, donde los involucrados cuentan con libertad para ejercer sus derechos y obligaciones, por lo que la formación que se les dé durante su desarrollo se convertirá en una generación de ciudadanos comprometidos con su entorno. [Regresar al Boletín] Rocío Ordaz Sánchez Difusión Centro de Entrenamiento de Televisión Educativa