(363) jas bocas. Tienen muchas veces cólera en el estío, de lo cual se hace ictericia: es bueno á la res que lo toviere darle, á beber urina de personas, ó con un cuerno, ó mezclada con a g u a , q u e si se abeza la tal res á ella, bebería há de su gana por amor de la sal. Si se les quiebra algún p i e , tomen vino y aceite, y con unas lanas sucias todo bien empapado concierten bien la quebradura, y . e n v u e l v a n el pie con ellas, y átenlo m u y bien, con unas cañas. Si algún lobo la hobiere m o r d i d o , miren si la mordedura es peligrosa, porque mas vale matar luego la res, que no poco á poco se enflaquezca, y en fin se mueran. L á v e n l a la mordedura bien con agua ó v i n o , y después pónganle unas mechas con miel para q u e abra las dentelladas, y úsenlo siempre l a v a r , y después pónganle un poco de cal v i v a encima: si tiene gusanos la mordedura échenles zumo de hojas de priscos dentro, ó u n poco de aceite, ó zumo de cascaras de nueces verdes; si tienen reznos en el vientre, lo cual es m u y malo, y aun para los gusanos que. tienen en las tripas, mojen u n poco de buen trigo en aceite, y enjúguenlo al sol de manera que vaya bien empapado, y , a q u e l l o les den á comer dos veees cada semana. Tienen las cabras algunas veces los ojos sanguientos: dice Plinio que es bueno punzarlas cerca dellos con una punta de un junco ó de otra cosa a g u d a ; y aun es bueno entonce sacarles alguna sangre de por alli cerca, y echarles en los ojos unos polvos de sal de compás ó de alumbre. M u c h a s veces enferman de modorra; y es señal dello que si las abren las cabezas les hallan encima de los sesos una vejiga llena de gna; y aunque aquella modorra no da sueño, hácelas andar tontas: en viendo q u e alguna enferma asi, mátenla l u e g o , y niuden á las otras el pasto en otros lugares mas enjutos: esto s lo que he hallado y sabido de algunas enfermedades de las cabras. Si onde duermen ellas ó cualesquier otros ganados, ó en cualquier otra parte q u e anden culebras ó cosas ponzoñosas, quemaren de sus cuernos y pelos l u e g o h u y e n , ó cuerno de ciervo. D i c e el Aristótel q u e en algunas partes hacen que cabras machorras den leche desta manera: tomen la cabra ta primavera, que en invierno con los frios y heladas y poco pasto aun las que paren tienen poca leche, pues con unas ortigas que espinen bien flétenles mucho las tetas, y q u e esto hace alli llamamiento de la sangre, y que en las tetas 1 a e a C O n