Clinton admitió la relación

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28 EL MUNDO
Ante quién
declaró Clinton
El gran jurado, ante el cual
prestó declaración ayer el presidente de Estados Unidos, Bill
Clinton, tiene su origen en el
derecho inglés del siglo XVII,
cuando fue creado para proteger
a los ciudadanos de enjuiciamientos injustificados por
parte de la ley de los nobles.
En el sistema judicial estadounidense, los 23 miembros
del gran jurado, elegidos al azar,
tienen teóricamente un peso
importante, ya que sólo con su
consentimiento puede un fiscal
entablar una querella.
En este caso, se trata de falso
testimonio u obstaculización de
la justicia por parte del primer
hombre del país, y por este
motivo las características del
proceso son diferentes a las de
un caso normal.
Los 23 jurados completarán
su trabajo sin presentar conclusiones formales y sus sentencias
no conducirán a proceso penal
alguno, sino que se incorporarán al informe que el fiscal
especial Kenneth Starr elevará al
Congreso norteamericano.
A pesar de que la composición del gran jurado es secreta,
trascendieron algunos detalles
del cuerpo que intervino en el
caso Lewinsky.
El mismo estuvo integrado
por doce mujeres negras y seis
blancas, así como por dos hombres negros y tres blancos.
Todos los integrantes son de
edad media o mayores y en su
mayoría pertenecientes al servicio público en la capital estadounidense.
Las reglas del gran jurado
son normalmente muy estrictas.
Sus integrantes están obligados
a guardar de por vida silencio
sobre sur actividades en el cuerpo y los apuntes que éstos
toman durante las declaraciones
son posteriormente conservados
por funcionarios judiciales.
Asimismo, está establecido
que aquellas personas que
declaran ante el gran jurado no
deben ir acompañadas por un
abogado.
El interrogatorio fue guiado
por el fiscal, y su ayudante, no
habiendo ningún juez presente.
Para Bill Clinton se implantaron otras reglas. El es no sólo
el primer presidente en ejercicio
de Estados Unidos que tuvo
declarar ante el gran jurado,
sino también la primera persona
a la que, por respeto a su cargo,
se le permitió dar su testimonio
sin presentarse personalmente
ante los jurados, y pudo hacerlo
acompañado por sus abogados.
Bill Clinton dio su testimonio en la Casa Blanca, el cual
fue transmitido por una cámara
al gran jurado, mediante un circuito cerrado a prueba de
escuchas.
La Plata, martes 18 de agosto de 1998
PIDIÓ PERDON A SU ESPOSA Y A LA GENTE
Clinton admitió la relación
Luego de más de cinco horas de declaración ante el Gran Jurado Clinton se dirigió al pueblo.
“Incluso los Presidentes tienen vida privada” dijo y agregó que ahora debe resolverlo con su familia
El presidente de Estados Unidos,
Bill Clinton, reconoció ayer que
tuvo “una relación inapropiada” con
Monica Lewinsky, de la que dijo
que “soy el único responsable”.
“Esa declaración ha podido
hacer mucho daño a mi esposa, y lo
siento profundamente”, reconoció
Clinton en su mensaje televisado al
país, en el que aseguró que “no pedí
a nadie que mintiera” sobre esa
relación. Añadió que su vida privada
le pertenece a él, porque “incluso los
presidentes tienen vida privada”.
Bill Clinton agregó que este
asunto lo tienen que resolver ahora
entre él y “las dos personas que
más amo, mi mujer y mi hija, y
nuestro Dios”.
El presidente reconoció que,
cuando dijo en público y en su
declaración del caso Paula Jones que
no había tenido ninguna relación
con Monica Lewinsky, no dijo nada
que fuera ilegal, pero “no dije volun-
tariamente toda la verdad y confundí a la gente, incluso a mi
esposa”.
Explicó que actuó así primero
para protegerse a sí mismo por “la
vergüenza” que supondría el escándalo, para proteger a su familia y
porque las preguntas se plantearon
“dentro de una querella inspirada
por motivos políticos y que ya ha
sido desestimada”.
El presidente dijo que ayer contestó “verídicamente” a las preguntas de los fiscales y reconoció que la
relación con Lewinsky fue “un fallo
personal y un error grave de juicio
por el que asumo toda la responsabilidad”.
En cambio, al referirse al escándalo en sí, Bill Clinton dio a entender que esa responsabilidad es compartida, y también atacó a la investigación del fiscal independiente,
Kenneth Starr, que “ha hecho
demasiado daño a demasiada gente
y ha durado demasiado”.
La breve declaración del presidente, de unos tres minutos de
duración, concluyó con una
invitación a los estadounidenses a
apartar su atención “del espectáculo
de los últimos meses y volver a centrarla en los retos y promesas” del
país.
El fiscal especial Kenneth Starr
y sus ayudantes habían abandonado
la Casa Blanca sin hacer ningún
comentario.
Clinton suele dirigirse a la
nación desde el Despacho Oval,
pero al declarar desde la Sala de
Mapas, que se encuentra en la zona
particular de la residencia del presidente, se subrayaría el hecho de que
se trata de un asunto privado.
Tras el testimonio de ayer, el fiscal Starr enviará próximamente un
informe al Congreso y, según la
Constitución, será la Cámara de
Representantes “la que se convertirá
en verdadero jurado” de Bill
Clinton.
Lo que se debe decidir es si el
presidente cometió perjurio y
obstrucción a la justicia en su
declaración sobre el caso Jones, y si
debe ser perseguido legalmente por
ello.
Si la Cámara encuentra motivos
fundados en ese informe para
recomendar al Senado un “impeachment” (proceso de destitución y
procesamiento), será la Cámara Alta
la que debe proceder a poner ese
mecanismo que, para prosperar, tendrá que contar con el voto favorables de los dos tercios de los 100
senadores.
De momento, según ha confirmado la Casa Blanca, Clinton y su
familia viajarán hoy a la isla de
Martha’s Vineyard, en la costa de
Massachusetts, para comenzar sus
vacaciones de verano y “no tienen
previsto ningún programa público”.
Cronología de una novela presidencial
El “caso Lewinsky” se hace público en enero de 1998 a raíz del rumor que circula por Internet, y del cual hacen eco los diarios
estadounidenses, según el cual Kenneth Starr obtiene autorización para investigar si Bill Clinton mintió en la declaración que
hizo en relación con la demanda civil por acoso sexual, presentada por Paula Jones contra el presidente.
l Algunos de los hechos más destacados relacionados con el caso son, por orden cronológico, los siguientes:
Enero
Día 17
Día 26
l Clinton es el primer
l Clinton declara
presidente de EEUU que
presta declaración bajo
juramento como acusado
en un caso civil o criminal.
Negó el episodio de acoso y
la relación sexual con
Lewinsky.
publicamente que ni obligó
a mentir a la becaria, ni tuvo
relaciones sexuales con ella.
Febrero
Día 21
Día 7
l Tripp, provista de un
micrófono oculto se reúne
con Lewinsky y logra que
confiese que tuvo relaciones
sexuales con Clinton.
Día 4
l El fiscal Starr se niega a
otorgar inmunidad a
Lewinsky a cambio de que
admita su relación sexual
con Clinton.
Abril
Día 1
Linda Tripp
Agosto
Día 1
l Clinton decide no
acogerse al “privilegio
ejecutivo” para negarse a
declarar ante el gran jurado.
Día 3
l La opinión pública de
EEUU y los republicanos
presionan a Clinton para
que revele la verdad sobre
su relación con Lewinsky.
Día 6
l El fiscal Starr y Lewinsky
Kenneth Starr
Día 13
Junio
Día 28
investigación por falso
testimonio, obstrucción a la
justicia y perjurio,
supuestamente cometidos
por Clinton.
l Monica Lewinsky niega
cualquier relación íntima
con el presidente de EEUU,
en su declaración jurada en
la demanda civil de acoso
sexual presentada por Paula
Jones contra Clinton.
probar la supuesta relación
sexual entre la ex becaria y
el presidente.
Julio
l Kenneth Starr abre una
Mónica Lewinsky
Wright, archivar la demanda
de acoso sexual contra
Clinton.
l La jueza federal en el caso
Paula Jones, Susan Webber
pactan la total inmunidad
de la becaria a cambio de
que revele su relación sexual
con el presidente.No dirá
que Clinton la presionara
para negar la relación.
Día 29
l Bill Clinton anuncia que
declarará voluntariamente
el 17 de agosto.
Día 30
l El fiscal Starr envía a los
laboratorios del FBI un
vestido de Lewinsky con
supuestos restos de semen
de Clinton que podría
Bill Clinton
l Tras 6 meses de silencio y
bajo inmunidad total ,
Lewisnky declaró ante el
Gran Jurado que mantuvo
relaciones sexuales con el
presidente Clinton. Aseguró
que no la forzó a mentir.
ALVIRA / TAFFAREL • DIARIO HOY
EL MUNDO
La Plata, martes 18 de agosto de 1998
Esperan que la declaración sea el final del sexgate
Al fin llegó la hora. El presidente estadounidense, Bill Clinton,
declaró ante el gran jurado sobre su
relación sobre Mónica Lewinsky.
Clinton tuvo que admitir, según
fuentes extra oficiales, que efectivamente hubo algo entre ellos, pero
que no faltó a la legalidad cuando
lo negó anteriormente.
De ahora en más debe esperar
que ni el Congreso, ni el fiscal Starr
ni los abogados de Paula Jones
encuentren en todo ello una base
para seguir teniéndole en el punto
de mira, bien por el flanco político,
bien por el penal.
Aún es muy pronto para saber si
el presidente se saldrá con la suya
pero lo cierto es que Clinton parece
un mago saliendo de situaciones
muy comprometidas y que aún
puede tener otro conejo en
la galera.
Los analistas decían que para
poder salir de esta situación tendría
que decir la verdad. Y eso fue precisamente lo que parece ser que
hizo el presidente, al menos según
su abogado David Kendall, quien
dijo ante la prensa que el
presidente Clinton dio un testimonio veraz.
Numerosos congresistas han
coincidido en señalar que si
Clinton dice la verdad lo más posible es que el Congreso lo pase por
alto, porque casi todos quieren
intentar dejar atrás este embarazoso asunto.
Los abogados de Paula Jones, la
mujer cuya demanda por acoso
sexual fue archivada, ya han avisado que intentarán usar la
declaración de Clinton en la
apelación que han presentado.
David Pyke, uno de los letrados de
Jones, dijo a la cadena “CNN” que
si el presidente admite algún tipo
de relación sexual con Monica
Lewinsky “quedará claro ... que
mintió en la declaración” de enero.
Clinton “incluso dijo que no
recordaba haber estado a solas con
Lewinsky”, añadió el abogado, para
quien el probable perjurio no es
sólo en la definición de qué es una
relación sexual, “sino sobre todo el
asunto”. Según un letrado de Jones,
Donovan Campbell, se podría llevar esa admisión ante el tribunal de
apelaciones para intentar revivir
el caso.
Otros piden, basándose en la
enorme popularidad de Clinton y en
que es un “pecadillo”, que se olvide
el asunto para que la clase política se
centre en asuntos más importantes.
Uno de ellos es David Gergen, ex
consejero de la Casa Blanca, quien
considera que “ha habido un enorme
daño a la Presidencia” y que Clinton
“ya ha pagado el precio” de sus faltas
con la amplitud que ha tomado
el escándalo.
Clinton se prepara para dar su testimonio al pueblo norteamericano
La prensa desplegó un gran operativo para cubrir la declaración
Los medios de comunicación estadounidenses desataron ayer un verdadero frenesí mediático para registrar desde todos los ángulos el
impacto público del testimonio del
presidente Bill Clinton ante el Gran
Jurado, por su presunta relación
con la ex pasante de la Casa Blanca,
Mónica Lewinsky.
En realidad, la onmipresencia de los
medios se hizo sentir en las calles
de Washington desde la madrugada,
no obstante la persistente llovizna y
un cielo cargado de nubes.
Las cámaras y los micrófonos acorralaron en su domicilio a los principales actores del drama: el fiscal
especial Kenneth Starr en Virginia
y David Kendall, el abogado personal del presidente, en Maryland.
Unas horas antes del cara a cara
histórico entre el presidente Clinton
y el Gran Jurado a las 14 (hora
argentina), todas las entradas de la
Casa Blanca fueron tomadas por
asalto por las cámaras y los periodistas, preparados con sillas,
paraguas y sandwiches para aguantar una larga espera.
El tribunal federal, ubicado a unas
cuadras de la Casa Blanca, también
fue rodeado por los camiones de
exteriores, kilómetros de cables,
cámaras y monitores de los canales
de televisión.
Amontonados delante de las rejas
de la Casa Blanca -hoy el edificio
está cerrado al público- hasta los
turistas fueron acosados con preguntas por los periodistas.
El servicio de prensa de la Casa
Blanca advirtió que no estaba en
condiciones de dar más pases, y
sólo fueron admitidos los periodistas acreditados.
Desde el domingo se realizaron
programas especiales en las cadenas de TV. La jornada de ayer
recordó el día en que estalló el caso
Lewinsky, en enero pasado, cuando
los periodistas que cubrían la visita
del Papa a Cuba tuvieron que
regresar a Washington. Peter
Jennings, de la cadena ABC, inclu-
Los medios desplegaron toda su capacidad para cubrir la declaración
so sacrificó el último tramo de su
luna de miel.
Publicidad electoral
El escándalo sexual del presidente de EEUU, Bill Clinton, y la ex
becaria Mónica Lewinsky ha llegado
ya a la publicidad electoral, de cara
a los comicios legislativos del próximo noviembre.
El republicano Dan Page,
aspirante a la Cámara de
Representantes, ha elaborado un
mensaje publicitario en el que
denuncia a su opositor, el congresista demócrata por Carolina del
Norte Bob Etheridge, por no manifestarse en contra de la conducta del
presidente Clinton.
Dan Page, senador por el estado
de Carolina del Norte, dice en su
mensaje que Etheridge no ha tenido
el coraje para indicarle a Clinton
que “ya es suficiente”.
La Cámara de Representantes de
Estados Unidos se renovará totalmente el próximo 3 de noviembre,
al igual que una tercera parte
del Senado.
En medio del escándalo ClintonLewinsky, los observadores todavía
se debaten entre si la controversia
afectará a los candidatos demócratas
o si los republicanos, con los cuales
se vincula al fiscal especial Kenneth
Starr, pueden ser los perjudicados.
29
Una larga historia
de adulterios
El presidente Clinton es el
primero que se ve obligado a
hablar públicamente de sus
supuestas relaciones extramaritales, pero desde luego no es el
único que ha sido adúltero mientras estaba en la Casa Blanca.
De hecho, algunos de los presidentes más apreciados por el
pueblo estadounidense o por los
historiadores, como Franklin
Roosevelt o John Kennedy,
cometieron adulterio sin que ello
fuera explotado por la prensa ni
por sus rivales políticos.
Tal vez el caso más conocido
fue el de John Kennedy, del que,
sólo tras su muerte, comenzó a
conocerse su vida privada.
Una larga serie de mujeres
admitieron haber tenido relaciones con el asesinado presidente, como la pintora Mary
Meyer, la cabaretera Blaze Starr o
Judith Exner, quien a la vez era
amante del famoso “capo”
mafioso, Sam Giancana. A
Kennedy y a su hermano Robert
se les relacionó también con la
famosa actriz Marilyn Monroe, y
la extraña muerte de ésta no hizo
sino alimentar los rumores.
Franklin Delano Roosevelt,
uno de los presidentes más carismáticos (1933-45), mantuvo una
larga relación con Lucy Page
Mercer, aunque no se sabe exactamente cuándo comenzó (ciertamente entre 1912 y 1918).
En 1918 Eleanor Roosevelt
descubrió el asunto y exigió a su
marido que lo dejara, cosa que
hizo, al menos por un tiempo.
Mercer estuvo presente en Warm
Springs (Georgia) cuando el presidente sufrió el ataque que acabó
con su vida en abril de 1945.
Lyndon Johnson (1963-69)
tuvo, según su biógrafo Robert
Caro, un largo romance extramatrimonial con Alice Glass. La
relación duró 30 años y finalizó
debido a la oposición de ella a la
Guerra de Vietnam.
Otro presidente que cometió
adulterio estando en la Casa
Blanca fue el republicano Warren
Harding (1921-23), quien tuvo
una relación con una mujer llamada Nan Britton desde 1917, de la
que tuvo una hija llamada
Elizabeth en 1919.
Según los historiadores, ambos
tuvieron relaciones sexuales incluso en la Casa Blanca, en un
pequeño cuarto situado junto al
despacho de Harding.
El asunto personal de un presidente que más trascendió a la
política, aunque propio de la mentalidad de otra época, afectó al
presidente Andrew Jackson
(1829-37), quien se casó con
Rachel Donelson Robards en
1791, en un matrimonio inválido
porque el divorcio de ella de su
primer marido no estaba aún
en vigor.
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