Purificación a través de las energías del Wesak

Festival of Wesak 2016
Purificación a través de las energías del Wesak
Dorothy I. Riddle
Nos adentramos ahora en ese momento del año que coincide con el máximo aflujo de la energía de la
Voluntad, canalizada a través de dos grandes Avatares – el Buddha y el Cristo. Nuestra responsabilidad durante
este periodo es la de recibir, contener y luego distribuir estas energías espirituales. El proceso de distribución
prevé en particular los últimos dos días de entre los cinco dedicados a este festival, un periodo en el cual
«apartaremos de nosotros el foco de nuestra atención, llevándola a los planos subjetivos internos, el mundo
externo, y nuestro esfuerzo consistirá en pasar o sobrepasar la medida de energía espiritual con la cual se
ha hecho contacto.»1
Se nos dice que «durante el intervalo entre la recepción [de la Energía de Wesak] y la distribución, se ha
trasformado en energía de buena voluntad y en la luz que iluminará las mentes de los seres humanos».2
Generalmente concebimos el proceso de distribución en términos generales – es decir, sin una focalización
específica. Este año, en conjunción con nuestro Encuentro Subjetivo de Grupo sobre “La Labor del Ashrama
y la Correcta palabra,” deseamos explorar dos tareas específicas y de mucha urgencia que están estrechamente
vinculadas con la potencia de la energía del Wesak: disipar la ilusión y destruir formas mentales negativas.
Este enfoque es importante porque la humanidad se encuentra en un punto de crisis debido a cómo nos
relacionamos unos con otros. Asistimos actualmente a una escalada de terrorismo, y al correspondiente
desaliento sobre cómo abordar este problema. Hay también un número sin precedentes de refugiados
escapando de la violencia y de la opresión, y observamos una creciente resistencia a permitir la integración de
personas que cruzan las fronteras. Además, presenciamos un dramático aumento en la disparidad de ingresos,
con la resultante ampliación de la brecha económica, y hay por lo demás graves conflictos por la explotación
comercial de los recursos de nuestra Tierra, en vez de vivir en harmonía con ella.
Podríamos pensar que estos diversos fenómenos son aislados y no tienen relación entre sí, como si
obedecieran a diferentes causas fundamentales. Sin embargo, la Sabiduría Eterna enfatiza que la humanidad
es responsable por el reforzamiento del espejismo y por la creación y el mantenimiento de formas mentales
negativas que originan y sustentan estos fenómenos. Lo hacemos al ignorar sistemáticamente la verdad básica
de que todos somos expresiones energéticas y componentes de la Vida Una y que por lo tanto estamos todos
interrelacionados. En última instancia, la forma en que tratamos a los demás determina la forma en que somos
tratados.
Disipar el Espejismo
El espejismo existe en el plano astral. Si bien algunos de nosotros, miembros de la Escuela, no estemos en
la posición de trabajar directamente con la energía de la Voluntad necesaria para destruir formas mentales,
todos nosotros podemos contribuir al trabajo de utilizar la luz del Wesak en nuestra meditación para «proyectar
luz conscientemente sobre el plano astral, disipando así el espejismo».3
¿Cuál es la relación entre el espejismo y los actuales intensos y dolorosos acontecimientos mundiales?
Reflexionemos por un instante sobre los espejismos más comunes que observamos en la actualidad. Ellos son:
1. El espejismo del destino. Le indica, a quien está controlado por él, que tiene un trabajo importante que
realizar y que debe actuar y hablar de cómo está destinado hacerlo, el cual nutre un orgullo que no tiene
fundamento real.
2. El espejismo de la aspiración. Quien está controlado por él se siente totalmente satisfecho, se preocupa
por su anhelo de ir hacia la luz y se respalda en el hecho de que es un aspirante. Es necesario que estas
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personas avancen en el sendero del discipulado y dejen de preocuparse y sentirse satisfechos de sus
ambiciones y metas espirituales.
3. El espejismo de la autoconfianza, o lo que puede llamarse los principios astrales del discípulo. En lenguaje
simple es la creencia del discípulo que considera correcto su punto de vista. También nutre el orgullo y
tiende a hacer creer al discípulo que es una autoridad infalible. Este es el trasfondo del teólogo.
4. El espejismo del deber. Conduce a un exagerado énfasis del sentido de responsabilidad, a movimientos
inútiles y a acentuar lo no esencial.…
5. El espejismo de la devoción. Conduce a un indebido estímulo del cuerpo astral. El hombre o mujer bajo
este espejismo sólo ve una idea, una persona, una autoridad y un aspecto de la verdad, nutriendo el
fanatismo y orgullo espiritual.4
Ante esta situación, ¿qué podemos hacer? Se nos dice que purificar el plano astral del espejismo es «un
servicio mundial definido. Con el tiempo se han de formar grupos con aquéllos que trabajan para disipar el
espejismo [que] trabajarán unidos en algún aspecto especial del espejismo mundial, empleando el poder de sus
mentes individuales iluminadas».5 Además, se nos dice que la «crítica, separatividad u orgullo…
frecuentemente engendran el espejismo».6 Por ende, nuestro pensar y habla o el nuestro permanecer en silencio
están directamente relacionados con la existencia de los espejismos.
Cada parte del espejismo disipado… allana el camino a los que le siguen, simplificando así el
camino a sus condiscípulos. Este es, por excelencia, el Gran Servicio a prestar….
Uno de los problemas que enfrenta el aspirante es reconocer el espejismo y ser consciente de
los espejismos que acechan su camino…. La mayoría no son conscientes de su existencia.
Muchas personas buenas no los ven, divinizan sus espejismos….
Sin embargo, el reconocimiento lleva en sí sus propios problemas, debido a la incapacidad del
discípulo común para liberarse de la facultad de crear espejismos, desarrollada en el pasado,
encontrando demasiado difícil mantener una adecuada proporción y un sentido exacto de los
valores, respecto a las verdades del plano mental. El discípulo puede adquirir arduamente la
verdad y captar un principio de la realidad y luego… los espejismos de naturaleza emocional
pueden surgir y agruparse alrededor del ideal, puesto que todavía no está esclarecido y
predispuesto a atraer hacia sí aquello que – emocional y sensiblemente – cree ser y poseer.7
Los espejismos han existido desde hace mucho tiempo, se expanden y son reforzados cada vez que no
asumimos la responsabilidad de emitir la “correcta palabra”. Sin embargo, el discípulo tiene la responsabilidad
de «destruir principalmente los fenómenos astrales de los cuales es el creador responsable, [así como] destruir
una parte determinada de sustancia astral de la cual no es individualmente responsable pero, no obstante, está
relacionada con el grupo o la nación, a los que puede estar afiliado por nacimiento o inclinación».8
Destruir Formas Mentales Negativas
Pasando ahora del plano astral al plano mental, sabemos que constantemente creamos formas mentales.
En estudios esotéricos generalmente ponemos más atención al proceso de creación y prestamos poca o ninguna
atención al proceso de destrucción de aquellas formas mentales que ya no sirven a ningún buen propósito. Si
reflexionamos cuidadosamente sobre el ciclo de transformación subyacente a todo ser viviente reconoceremos
que todo lo creado a un cierto punto concluye su función. Por ejemplo, en el plano físico, si solo ingerimos
alimentos sin eliminar lo que es desperdicio, nuestro sistema digestivo se intoxica y el organismo muere. A un
nivel social, creencias que parecen verdades absolutas son a su debido momento desafiadas y superadas, hasta
el punto que luego nos parece impensable que hayan existido. Existen muchos ejemplos de este tipo
verificables a lo largo de la historia. Basta mencionar dos bien distintos: la esclavitud y el fumar en lugares
públicos. Como se ha dicho «el mal… puede definirse simplemente como la adherencia a algo que debíamos
haber superado y dejado atrás».9
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Es asimismo importante recordar que
una forma mental … puede actuar como agente ponzoñoso y envenenar todas las fuentes de la
vida. Quizá no tenga fuerza suficiente para salir del aura de su creador (muy pocas formas
mentales la tienen) y hallar su meta en otra aura, para acopiar allí fuerzas y volver a su punto
de partida, pero puede tener una vitalidad propia capaz de devastar la vida del aspirante. La
violenta aversión, la roedora preocupación, los celos, la constante ansiedad o el anhelo por algo
o alguien, puede actuar tan potentemente como un excitante o veneno, que echará a perder toda
su vida e inutilizará su servicio. Toda una vida se amarga y desvitaliza por la preocupación, el
odio y el deseo encarnado en él. Todas las relaciones con otras personas son inutilizadas y hasta
nocivas, pues el aspirante preocupado o suspicaz, echa a perder el círculo familiar o el grupo
de amigos por su actitud interna ponzoñosa, dominado por una idea. La relación con su propia
Alma y la fuerza de contacto con el mundo de las ideas espirituales se paralizan, no progresa,
queda detenido por el veneno de su sistema mental. Su visión se deforma, su naturaleza se
corroe y todas sus relaciones impedidas por los pensamientos agotadores que él mismo ha
encarnado en formas, poseen una vida tan poderosa que pueden envenenarlo.10
La falta de atención a la destrucción de formas mentales puede originarse en los desafíos que el pensar en
la destrucción misma nos presenta. El objetivo inicial nos puede parecer abrumador. Se nos recuerda:
Uno de los mayores obstáculos en el sendero de Retorno, del cual el individuo es definidamente
responsable, dentro de los límites esotéricos, lo constituyen esas formas animadas que ha
venido creando permanentemente desde mediados de la raza raíz atlante, cuando el factor
mente comenzó con lentitud a asumir mayor importancia. El egoísmo, los móviles sórdidos, la
rápida respuesta a los impulsos del mal, que han caracterizado a la raza humana, acarrearon un
estado de cosas que no tiene parangón en el sistema. Se cierne sobre toda la familia humana
una forma mental gigantesca, construida durante épocas por las personas de todas partes,
energetizada por los deseos insanos y las inclinaciones malignas de la peor naturaleza humana,
vivificada por las inclinaciones de sus deseos inferiores. Esta forma mental debe ser
desintegrada y disipada por el ser humano…. De acuerdo a la Ley del Karma tiene que ser
disipada por quienes la han creado.11
Esta gigantesca forma mental, producto de la ignorancia y el egoísmo del ser humano, se
mantiene viva y vitalizada… mediante la acumulación de malos deseos, perversas intenciones
y propósitos egoístas individuales. Todo mal pensamiento involucrado en la palabra y
manifestado como acción en el plano físico, contribuye a expandir las proporciones de esta
entidad maléfica.12
La Iniciativa de Purificación de la Escuela
Poner fin al actual ciclo de violencia alimentada por la falta de atención a los efectos dañinos no sólo de
nuestros pensamientos y palabras, sino también por la creciente forma mental de mala voluntad implica abordar
las causas fundamentales de los espejismos y de las formas mentales negativas. Como analogía a nuestra
situación actual, pensemos en un jardín. Tenemos algunas flores hermosas, pero también tenemos algunas
malas hierbas virulentas. Al regar las flores (mediante el envío de energía positiva), también fortalecemos esas
malas hierbas. Tal vez se reconoce la presencia de las malas hierbas y las cortamos, pero hasta que no las
desarraigamos por completo, simplemente retornan, y a menudo más fuertes que antes.
Lo mismo pasa con los espejismos y las formas mentales. Si no las destruimos a la raíz, en sus causas,
continúan a diseminarse e infectan nuestras vidas. Quizás nos damos cuenta que estas energías dañinas
sobreviven porque nos olvidamos de quienes somos y porqué estamos aquí. Pero, ¿por qué sería importante
hacerlo? ¿Cuáles son las consecuencias prácticas de este olvido?
Una manera de entender el problema, en el contexto de nuestro Encuentro Subjetivo de Grupo, es reconocer
que, al olvidar quienes somos, somos presa de la gran herejía de la separatividad, que tiene sus raíces en el
pensamiento dualista – vernos a nosotros mismos como diferentes y distintos de los otros de alguna manera.
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El pensamiento dualista es una parte tan importante de nuestra vida cotidiana que prácticamente todos, en
algún área, aplicamos el dualismo “nosotros-ellos” sin darnos debida cuenta de ello. Podemos empezar a
comprender mejor este proceso si reflexionamos sobre cinco formas en que se expresa esta separatividad:13
1. Intolerancia hostil – expresar separatividad abiertamente a través de brutalidad y abuso físico o psicológico
En el mundo occidental los actos de agresión identificables son condenables. La brutalidad de los actos
terroristas nos puede dejar atónitos pues no entendemos cómo tal barbaridad pueda ocurrir. Si tenemos en
cuenta que estos actos derivan de una forma mental basada en el sentido de justificación u obligación moral
tenderemos más herramientas para su destrucción.
2. Intolerancia protectora, o paternalismo – expresar separatividad encubiertamente o con condescendencia
En este caso vemos los otros menos evolucionados o menos maduros que nosotros. En la vida social, esto
conlleva considerar que el otro necesita protección en vez de considerarlo como par.
3. Estereotipos – negar la individualidad del otro
En este caso, podríamos decir que se trata del lujo del pensamiento perezoso. En lugar de esforzarnos por
conocer al otro en toda su singularidad, lo metemos en una categoría grupal y asumimos que es y se
comportará como los otros elementos de esa categoría grupal.
4. Desdeño, o invisibilidad – asumir que el otro no es suficientemente importante como para prestarle
atención
Esta forma de separatividad literalmente niega la existencia del otro en cualquier modo significativo. Es
una forma de separatividad que a veces aplicamos con nosotros mismos, cuando rehusamos admitir
nuestras propias necesidades o cuando no respetamos nuestra intuición.
5. Objetivación – tratar al otro como un objeto de uso y gratificación personal
Si bien la objetivación sexual ha recibido mucha atención, hay otras maneras de objetivación. Se asume
que los demás no tienen capacidad de elección sobre sus vidas si esas elecciones entran en conflicto con
nuestros deseos.
Abordar las causas a su raíz no es algo que se logre rápida o fácilmente. El Festival de Wesak, sin embargo,
es el momento más adecuado para acceder a las energías espirituales necesarias a este fin y, por ende, la Escuela
de Estudios Esotéricos presenta esta iniciativa durante el Wesak, con el objetivo de contribuir a:
1. Disipar la niebla del temor y los espejismos que mantienen cautiva la humanidad.
2. Destruir las formas mentales negativas, presentes y arcaicas.
Todos los miembros de la comunidad espiritual son bienvenidos a unirse a nosotros en esta especial iniciativa
de servicio. Como parte de la iniciativa se proporcionará un alineamiento específico para la meditación para
disipar el espejismo y para la destrucción de formas mentales negativas, junto con pensamientos simiente
mensuales para la meditación.
Si queremos ofrecer servicio con esta iniciativa, la “correcta palabra” es un punto crítico, así como la
capacidad de disipar o destruir utilizando el amor.
Que cada uno obtenga el control de la palabra, que ha sido a menudo su meta, pero raras veces
lo lograron, y recuerden que el factor más poderoso para controlar la palabra es un corazón
amoroso. La charla desordenada y desbocada, una conversación plena de odio, una insinuación
cruel, una sospecha, la atribución de móviles erróneos y malintencionados a personas y pueblos
y la diversidad de actitudes que separaron a las numerosas naciones del mundo, abundan en la
actualidad y llevaron a la actual situación angustiosa. Es muy fácil adoptar las mismas
costumbres de hablar y pensar que prevalecen a nuestro alrededor y participar de las
habladurías y demostraciones de odio. Cuídense esforzadamente de esto y no digan nada que
pueda encender el odio y la suspicacia respecto a cualquier raza, persona, grupo o líder de
grupos y naciones. Deberán precaverse cuidadosamente para, aun en defensa de lo que personal
o nacionalmente puedan aprobar, no dejarse llevar por el odio y quebrantar la ley del amor –
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única ley que puede salvar verdaderamente al mundo. Quizás la clave para el éxito en esta línea
sea el silencio de un corazón amoroso.14
Esperamos contar con su participación en este importante servicio a la humanidad. Si desea unirse a
nosotros en esta iniciativa, por favor contáctenos vía email: [email protected] solicitando el
material de la iniciativa.
1
Alice A. Bailey, Psicología Esotérica, Vol. 2 (Buenos Aires, Fundación Lucis, 1942), 520.
Alice A. Bailey, La Exteriorización de la Jerarquía (Buenos Aires, Fundación Lucis, 1957), 529.
3
Alice A. Bailey, Glamour (Espejismo): Un problema mundial (Buenos Aires, Fundación Lucis, 1950), 200.
4
Alice A. Bailey, Discipulado en la Nueva Era, Vol. 1 (Buenos Aires, Fundación Lucis, 1944), 40.
5
Bailey, Glamour, 153.
6
Ibídem, 68.
7
Ibídem, 42.
8
Alice A. Bailey, Discipulado en la Nueva Era, Vol. 2 (Buenos Aires, Fundación Lucis, 1955), 330.
9
Alice A. Bailey, De Belén al Calvario (Buenos Aires, Fundación Lucis, 1937), 206.
10
Alice A. Bailey, Tratado Sobre Magia Blanca (Buenos Aires, Fundación Lucis, 1934), 355.
11
Alice A. Bailey, Tratado Sobre el Fuego Cósmico (Buenos Aires, Fundación Lucis, 1925), 748.
12
Ibídem, 748.
13
Dorothy I. Riddle, Moving Beyond Duality (Bloomington, IN: iUniverse, 2015).
14
Bailey, La Exteriorización de la Jerarquía, 73.
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