cosas de familia - Santa Maria de Poedo

Cosas de
Familia, I
COSAS DE
FAMILIA,I
E. Mangana López, C. M.
Selección de escritos
del P. E. Mangana,
aparecidos, en los boletines
de las Visitas Domiciliarias
de la Virgen Milagrosa.
COSAS DE FAMILIA, I es una publicación deVISITAS DOMICILIARIAS DE LA
VIRGENMILAGROSA
de Chiclayo
CHICLAYO - NOV.2004
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PARA QUE PUBLICAR
COSAS DE FAMILIA
A MODO DE PRESENTACIÓN
Visitas Domiciliarias de la Virgen Milagrosa,-Chiclayo, Perú-, se ha propuesto, con
la publicación de estos pequeños libritos, Cosas de Familia I y Cosas de Familia II, que los
lectores del boletín, tengan a mano, las palabras y el recuerdo de uno de nuestros
asesores, el Padre Enrique Mangana.
La mayoría de los artículos seleccionados provienen de nuestro boletín. Otros -unos
pocos que, por su amplitud, no pudieron ser incluidos en él, -los presentamos ahora, no
ciertamente como primicias, sino como muestra de agradecimiento al autor.
El titulo, Cosas de Familia, hace alusión a uno solo de los trabajos, pero es
adecuado para encerrarlos o enmarcarlos a todos. Parecería que, al hablar de cosas de
familia, nos encaminamos al pequeño mundo de nuestra casa solariega y al grupo de
nuestros familiares, cada vez mas reducido, pero como quiera que la palabra "cosas"
tiene un sin número de significados y la palabra "familia" puede ser tomada en un sin
número de acepciones, la dimensión de cosas de familia puede hacemos levantar el vuelo
y movernos en las diferentes esferas de la vida de los humanos y mas aún en las diferentes
esferas de la vida de los cristianos.
Casi todas las páginas de Cosas de Familia están escritas a la ligera. Esto no va en
detrimento del autor. Lo hemos escuchado en vivo y en directo de sus propios labios.
Están escritas como sin querer queriendo. Los contenidos brotan más del corazón que de
la cabeza, y van dirigidos a gente muy sencilla, como es la gente de Visitas Domiciliarias.
A pesar de ello, o tal vez por ello, quienes quieran entenderlas a profundidad, no
les va a quedar otro remedio que hacerse una composición de lugar. De lugar y de
tiempo.
Visitas Domiciliarias está en condiciones de colaborar con ustedes en esa
composición de lugar y de tiempo.
Es por ello que nos ponemos a su entera disposición.
Visitas Domiciliarias
Chiclayo-Perú
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COSAS DE FAMILIA
Hablar de "Cosas de Familia" despierta siempre una cierta curiosidad.
Pero como la curiosidad no siempre es sana, me gustaría que al hablarles ahora de
"cosas de familia", esa curiosidad estuviera acompañada de "interés" ya que el interés,
como está sujeto a reglas, simples o compuestas, conduce necesariamente a un producto
Para empezar con pie derecho, lo primero que tengo que decirte es, que no se trata
ni de tu familia ni de mi familia, sino de nuestra familia. Porque todos integramos una
familia. Si Dios es nuestro Padre, somos una familia, somos de la familia. Si Cristo es
nuestro hermano, estamos en familia. Si María es nuestra madre, integramos una familia.
Y si hemos optado por integrar Visitas Domiciliarias, hemos optado por vivir en familia...
"Yo pensé que no hallara consonante -decía Lope- y estoy a la mitad de otro
cuarteto". Visitas Domiciliarias se integra en una gran familia, bautizada con el nombre de
"Asociación de la Medalla Milagrosa" Y resulta que la Asociación de la Medalla Milagrosa
es la rama más frondosa y floreciente de una gran familia que lleva el santo y caritativo
nombre, de Familia Vicenciana, el carismático nombre de Familia Vicenciana.
Dichas así las cosas, no corremos el peligro de experimentar el natural rechazo,
que se experimenta siempre que hay que meter la hoz en mies ajena. Un rechazo que en
mi tierra, expresan con la letrilla: Unha vella díxolle a outra, pol o burato da porta: tú
guberna a tua casa que a miña nada che importa", dando a entender que no son ni
quieren ser de la familia. Nos limitamos, por tanto, a la familia vicentina, nuestra familia. A
una familia que tiene, en el amplio y variado mundo de las familias, un estilo propio, un
carisma.
Una familia a la que todos pueden acceder, en la que todos pueden injertarse,
siguiendo la escondida senda por donde han ido los muchos santos que en el mundo han
sido. Es una senda construida por cuatro o cinco guijarros, tomados al paso en el arroyo de
este valle de lágrimas.
Guijarros que tienen los pintorescos nombres de "humildad", "sencillez",
"mansedumbre", "mortificación" y "celo por la salvación de todos", poniendo, a la cabeza
de ese "todos", a los más pobres.
Vicente de Paúl, en su desbordante imaginación, compara esos guijarros con
aquellos que utilizó David para vencer al gigante Goliat. Lo único que nos faltaría a
nosotros sería la "puntería" de David. Y la honda.
Segunda nota previa. Sólo quienes aman, pueden dar con esta senda. Para su
información, el Padre engendrador de esta familia fue y sigue siendo, Vicente de Paúl.
Vicente dice que no. Dice que fue el mismo Señor. Dice que se valió de él para
fundarla. Y dice más, dice que la Madre de esta familia, de la familia vicentina, fue la
Divina Providencia.
Algo habrá de cierto en todo ello, porque por una parte, a la familia, el nombre le
viene de Vicente de Paúl. Familia Vicentina. pero por otra, el que dispone y manda en
la familia es el Señor. Cristo es la regla de la Misión, digo, de la familia. Y la familia
está obligada, de por vida a seguir a Cristo, Evangelizador de los pobres.
Esto significa que nos encontramos ante una familia cristiana, una familia como
Dios manda y en la que Dios manda. Tomen todo lo dicho como una introducción porque,
definiciones aparte, genealogías aparte, lo que yo quiero decirles es otra cosa. Es algo
insólito. Insólito para nuestros días, en los que, el control ha llegado a afectar incluso a
los que quieren nacer para la vida cristiana. Muy por el contrario, la familia vicentina es
una familia numerosa.
Si bien los cánones fijaron ciertos requisitos para los venidos de fuera, para los
de dentro, no se puso tope alguno y la familia creció y creció y sigue creciendo. Y hasta
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tal punto ha crecido, que se le podía aplicar aquello de "somos de ayer y lo llenamos
todo".
Es muy bueno, muy importante esto de que la familia vicentina sea una familia
numerosa, porque, en nuestros días, las familias, las una y las otras, tienden a ser
cada vez mas pequeñas y ¿saben por qué? Porque cada vez se ama menos. La familia
vicentina está creciendo porque ama. Porque ama más y a más personas.
Las primogénitas de la familia fueron las Cofradías de la Caridad. Damas de la Caridad
o Voluntarias Vicentinas mas tarde y enmarcadas ahora en la Asociación
Internacional de Caridades (A. I. C.) con el respetable registro de 250,000
asociadas.
La fidelidad histórica y el rigor estadístico nos manda colocar aquí a la
Congregación de la Misión (Padres Lazaristas, Paúles o Vicentinos, denominaciones
variantes en espacio y tiempo). Congregación que, a pesar de su reducido número, unos
4,193 miembros, sigue siendo la animadora de la gran familia. No voy a caer en la
tentación de decir: ¡pocos, pero buenos!.
Y con los cohermanos, las cohermanas, la Compañía de las Hijas de la Caridad
que, ya en tiempo de San Vicente
contaba con más de sesenta casas y que, en la actualidad, son 34,100 hermanas,
extendidas en 15 países y 75 provincias canónicas.
Hijos incunables en el espíritu, si bien su organización se consolida más tarde,
arrancando de las conferencias, por obra y gracia del Beato Federico Ozanam, son los
integrantes, los 900,000 integrantes de la Sociedad de San Vicente de Paúl.
Del espíritu de Vicente de Paúl y Luisa de Marillac enraizados en el silencio de
Catalina Labouré e iluminados por los rayos de la Milagrosa, brotan, incesantemente,
institutos y agrupaciones que caminan en la misma dirección, la que les señala su propio
corazón, la caridad.
Algunos nombres de los más cercanos.
Hermanas ministras de la Caridad de San Vicente de Paúl.
Hermanas De la Caridad del Japón (Miyasaki).
Hermanas De la Caridad de San Vicente de Paúl. (Mallorquinas).
Hermanas Misioneras de San Vicente de Paúl.
Hermanas de la Providencia de San Vicente de Paúl.
Madres de la Caridad de la Inmaculada Concepción.
Hijas de la Caridad de San José (Santa Isabel Ana Setón).
Los Hermanos de la Caridad (Pedro José Triest).
Hermanas de la Misericordia de San Vicente de Paúl.
Hermanas de la Caridad (Leavenworth).
La sección, de la familia vicentina, -no la mas numerosa, pero si la más pujante y
casi arrolladora-, tiene el nombre de J.M.V. (Juventudes Marianas Vicentinas). Se
trata de gente joven en formación y formada y ya con frutos reconocidos, como son los
Misioneros Seglares Vicentinos (MiSeVi). El registro de las J.M.V. nos ofrece la cifra de
270,000 integrantes, pero claro, aquí no se incluye el medio millón de Jóvenes filipinos,
cuya inscripción está siendo tramitada.
Nos falta hablar aún del grueso de la familia. Está integrado por todos aquellos
que han nacido de milagro y han sido incorporados a la familia por obra y gracia de La
Milagrosa. Unidos por un signo, que decía el otro, aunque con diversos nombres y
matices, integran la Asociación de la Medalla Milagrosa. No es fácil llevarles la
contabilidad, porque aparte de los 150,000 que constan en los Registros de
Coordinación, su número se eleva a muchos millones.
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Como para entender un poco la cifra que acabamos de soltar, bastaría recordar
que, sólo en los Estados Unidos de América hay dos Centros Nacionales de
Coordinación y que, uno de ellos tiene que atender a mas de 3´000,000 de asociados. No es
nada extraño que utilice los servicios de 100 obreros, debidamente remunerados.
A quienes nos colamos en la familia, los índices de difusión y crecimiento no
nos resultan extraños, porque conocemos la estructura interna de la familia y
sabemos que está vertebrada por el carisma de un hombre que cambió casi la faz de la
Iglesia.
Todos los miembros de la familia llevan en el corazón, y -algunos- en la solapa, el
distintivo que el Señor Jesús acuñó para sus discípulos: "En esto conocerán que sois
vicentinos, en que os amáis los unos a los otros". Y les viene como anillo al dedo
aquello que Flavio Josefo decía de los primeros cristianos "miren cómo se aman".
Para entrar en la familia vicentina no hay más remedio que seguir a Cristo
Evangelizador de los pobres. Y aún eso no basta. Hay que hacerlo metiéndose por la
escondida senda de la humildad, de la sencillez, de la mansedumbre, de la mortificación y
del amor. Del amor real y concreto que brota del sudor de nuestra frente y del esfuerzo
de nuestros brazos.
Como ustedes pueden ver, tan sólo son "cosas de familia". Ojalá que su
curiosidad se transforme en interés. Y que su interés no sea simple, sino compuesto. Ya
pueden entrar.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Febrero. 2001
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REFLEXIONES CON MOTIVO DE LOS 60 AÑOS
DE SACERDOCIO DEL P. LUIS GARCÍA
Un atleta en carrera
Un árbol bien plantado
Una casa, casi un rascacielos
Queridos sacerdotes: hermanos y amigos:
Las lecturas que acabamos de escuchar nos dan pie para compartir dos reflexiones:
la imagen paulina del cristiano que debe competir por una corona que no se marchita y
la del cristiano que debe construir el edificio de su santidad sobre fundamentos sólidos
practicando la palabra de Dios.
A ellas quisiera añadir, a titulo personal, una tercera. La del salmista que compara al
justo a un árbol plantado al borde de la acequia. Árbol cuyas hojas no se marchitan, que da
fruto a su sazón y que cuanto emprende tiene buen fin
.
Claro que tampoco nos vendría mal la imagen de otro salmo que nos dice que vale
mas un día en la casa del Señor que mil en la calle.
'
Atleta en carrera, casa o edificio o casi un rascacielos y árbol bien plantado... Creo
que todos -ustedes y yo- y mejor ustedes que yo- podemos sacarle buen partido a estas
imágenes aplicadas a la vida sacerdotal del Padre Luís.
Según indicaciones del Padre José Antonio Ubillús, sería una lástima
desaprovechar una ocasión como esta para compartir algunos pensamientos sobre el
sacerdocio y en particular sobre el sacerdocio vicentino.
Es realmente esta una buena ocasión. Mejor: una de las mejores.
Antes de hacerlo, dejo constancia que soy la persona menos indicada para ello,
pero que me anima el hecho de que aquí no hay que inventar nada. No es necesario
fabricar elogios. En este caso se puede emitir cualquier cantidad de ellos con la mayor
tranquilidad de conciencia, porque todos los que se digan son conformes a la verdad.
Otrosí digo, que en esta celebración hay un factor igualmente importante y que, no
sólo anima o impulsa sino que coobliga a relievar tanto las excelencias del sacerdote, para
despertar tantas y tantas vocaciones sacerdotales dormidas, como la calidad humana,
cristiana, sacerdotal y vicentina de la persona en quien ese sacerdocio se realiza.
Festejar 60 años de sacerdocio es algo que no ocurre todos los días, ni siquiera
cada pocos días. Solo de ciento en viento. Y cuando a veces, esporádicamente se dan
estas celebraciones, los "interesados" suelen hacerlo desde sus cuarteles de "invierno",
ya en retiro. Lo cual no es malo. Pero no puede compararse con esta celebración en
la que el protagonista está en vivo y en directo y en activo.
Es por tanto una celebración extraordinaria. Extraordinaria y hermosa. Y meritoria.
1. Echémonos a andar.
Primero con la imagen del sacerdote atleta.
La imagen paulina de! cristiano que debe luchar por una corona que no se marchita,
es apta para todos los públicos. Al aplicarla a la vida de un sacerdote adquiere un relieve
especial. Y mas que un relieve adquiere una sobredosis de realismo. El sacerdote está
condicionado, en cuerpo y alma, al anuncio ministerial del evangelio. Y el ministerio del
anuncio del evangelio presupone: vocación, preparación, experiencia de Dios.
Experiencia de Dios en Cristo que es la esencia misma del evangelio, su contenido.
a) Vocación. Vocación no sólo la vocación general del cristia- no a la santidad, a la
salvación, sino la vocación específica al ministerio sacerdotal en sus dos
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vertientes de palabra y de vida que, mutuamente, se condicionan y requieren.
Pero la vocación es algo que está siendo constantemente amenazada y hay
que defendería.
b) Preparación. Preparación cualificada, probada y aprobada.
El tiempo de la
preparación es naturalmente relativo, pero, debido a la amplitud de la función
sacerdotal es, tiene que ser, suficientemente largo. Cuando los jóvenes
inquieren sobre su duración, para no desanimarlos, se les habla de unos quince
añitos... Pero la verdad es que la preparación para e! sacerdocio dura de por vida.
E! aspirante o sacerdote que no lo entienda así, se desanima, se anquilosa y
muere. No les sorprenda ver al Padre Luís y a la mayoría de los sacerdotes con
libros y revistas y diversas publicaciones en sus manos.
c) Experiencia de Dios. En la experiencia de Dios radica el secreto. Si no hay
experiencia de Dios, el sacerdocio se torna una impostura, se reduce a una fono
mímica y la fono mímica es algo que no puede durar. Los fieles buscan
productos genuinos como son la paz de la conciencia, el alimento duradero, la
seguridad o claridad de la vida a través de la fe... Reconocen pronto a los
impostores.
El sacerdocio del sacerdote que es sólo imitador de Cristo, no es efectivo ni
duradero. 60 años de sacerdocio resultan imposibles si es que Cristo no está metido en la
persona del sacerdote. Debido a esta verdad es que ya no hablamos de "imitación de
Cristo, sino mas bien de seguimiento de Cristo, imitar a Cristo no es vivir. Seguir a Cristo
es ser y hacer la vida de Cristo.
La imagen del sacerdote-atleta, al margen de toda visualización de la figura humana
que la identifique o sustente, es muy buena. En lugares en donde se habla el castellano
castizo, a las diversas profesiones se les llama carreras. La carrera de la abogacía, la
carrera de las ciencias médicas, la carrera militar, la carrera sacerdotal. Sacerdocio
carrera. Seguimos en el contexto de la imagen paulina.
El sacerdocio es una carrera. El sacerdote tiene que correr. La caridad de Cristo le
apremia. La difusión del mensaje es urgente. Si e! misionero, el sacerdote, no llega a tiempo
"esas pobres gentes se condenarán".
El sacerdote tiene que correr. No puede darse el lujo de decir: "Sigan ustedes, voy a
descansar un poco, luego avanzo lo mío". No es posible porque si se detiene, pierde,
queda descalificado.
Y tiene que correr "en forma", "en plenas facultades", "con todos los sentidos a punto"
porque hay obstáculos en el camino. Es la suya una carrera de obstáculos, que requiere
fuerzas de reserva. Fuerzas que debería ir acumulando con la oración, la eucaristía, e
incluso en celebraciones ejemplares como la de hoy.
¿O es que somos tan ingenuos que creemos que el sacerdote no encuentra piedras
en el camino, obstáculos en su carrera?
Donde menos se piensa salta la liebre; es decir donde menos se piensa, salta el
desánimo o la tentación de abandono.
Mas. Esta carrera, la sacerdotal, la del sacerdote, es una carrera contra el reloj. Y
una carrera a destajo. Se realiza a tiempo y a destiempo. Cuántos días, al término del
día, lo que uno ha ido haciendo no se parece en nada a los que tenía puesto o
programado en su agenda... Y para colmo, la carrera del sacerdote es una carrera de un
solo sentido. One way sttreet que dicen los gringos. Sin opción de retorno.
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Pero esta carrera, a pesar de los latigazos, necesarios de toda necesidad en los
comienzos, y, a pesar, muy a pesar de los aguijonazos de la carne que le llevan a uno a
hacer lo que no quiere y a no hacer lo que quiere... es una carrera alegre. Alegre y
atractiva. Y subyugante. Porque antes de iniciarla y para iniciaría, para atreverse a
correr, ha sido necesario haber tropezado con Cristo y haberse dejado ganar por
Cristo y haberse identificado con Cristo, de modo que al correr ya no es uno quien corre,
es Cristo quien corre en uno. Y tanto mas fácil y veloz se corre, cuanto mayor es la
identificación con Cristo. En esta carrera San Pablo se nos da como ejemplo y dice con una
alegría inconmensurable "Vivo yo, pero no soy yo, es Cristo quien vive en mí".
Si para todos los cristianos es este el ideal supremo, para el sacerdote es ministerio,
ideal ineludible.
No es el momento adecuado. Pero los pormenores de la carrera podrían sernos
también aleccionadores: el punto de partida, -la experiencia de Cristo-, el entrenamiento, la
disciplina, el sistema alimentario, la preparación física y mental, la seguridad de la
victoria, el entrenador, la llegada, las estrategias de la carrera, el reglamento para no ser
descalificado, el estilo, los carismas, el galardón, la corona... Todos ellos para alguna nueva
oportunidad.
2. Vamos, ahora, a lo de la casa.
Daría la impresión de que el Señor se pone a pensar para buscar la imagen que
defina adecuadamente a aquellos que escuchan y ponen por obra su palabra. A ver, a
ver... Ya lo tengo. El que escucha estas palabras mías y las pone en práctica se parece
a...
60 años de sacerdocio son toda una construcción. Un edificio. Casi un rascacielos.
El edificio sacerdotal empieza naturalmente desde abajo, desde los cimientos, desde las
profundidades. En las construcciones, como en casi todas las cosas, no vemos mas que lo
que aparece, lo que sobresale, lo que está por encima. Pero debemos admitir que eso
que aparece, ese edificio de 60 años, no podría estar en pie sin una buena base.
En la base de este edificio está la espiritualidad vicentína. ¿Recuerdan ustedes
aquellas cinco piedras, aquellos cinco guijarros que el profeta David cogió en el arroyo
para derribar al gigante Goliat? A esos cinco guijarros Vicente de Paúl les pone nombres y
los echa en los cimientos del edificio espiritual de la congregación. Humildad, sencillez,
mansedumbre, mortificación y celo por la salvación de las almas. Son las virtudes
preferenciales del vícentino. Con ellas edifica. Con ellas y una diariamente alimentada
devoción a la Santísima Virgen y a San Vicente. Estos son los fundamentos que le dan
trabazón y sentido antisísmico a su casa, a su edificación. Son estas las virtudes que le
hacen crecer al vicentino hacia adentro, hacia el interior, de modo que pueda soportar hasta
sesenta años y mas, de peso.
A esta solidez y estabilidad contribuye no poco el "estilo" vicentino, que, lo identifica
con ese personaje de la parábola que sabe que no basta con decir "Señor" "Señor" sino
que es necesario escuchar y practicar para construir sobre roca firme.
El "pequeño método", que podríamos definir aunque vulgar pero gráficamente
como "al pan, pan y al vino, vino y lo que pasa de ahí es cosa de... otros" y que se
estructura sobre tres conceptos de naturaleza, motivos y medios, imprime en la
construcción espiritual vicentina un indiscutible sentido práctico. Práctico y estable y
trascendente. No hubiera sido posible construir un edificio de 60 pisos, digo de 60 años,
sin estos fundamentos.
Felicitamos al dueño del edificio, porque desde esa altura la visión es mas amplia,
mas acertada. La visión de la vida y del destino de las personas.
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Pero debemos felicitar también a los fieles. Porque este edificio está hecho para
ellos. El sacerdote edifica su vida, su casa para los fieles. Para darles lo que un hogar da:
paternidad, fraternidad, amor, paz, felicidad. ¿O es que acaso el sacerdote no es un
padre? ¿O no es un hermano? ¿O no es un amigo? El término padre referido al sacerdote
está constantemente en nuestros labios Padre, padre. Cuídese, padre. Padrecito ¿no
podría...? Es de suponer que lo que hablamos tiene sentido. Y sentido pleno aunque no
siempre seamos plenamente conscientes de ello. Es precisamente este, el momento en
que debemos agradecer al Padre Luís lo que ese término significa o ha significado para
nosotros. Y es también el momento en que debemos dar gracias a Dios Padre por haber
puesto en nuestro camino al Padre Luís.
3. Ahora viene lo del árbol.
60 años de sacerdocio son también un árbol. Un gigantesco árbol que, plantado
al borde de la acequia -de la acequia, es decir "cerquita del sagrario"- viene dando frutos a
su sazón. Un árbol bien plantado y con mas raíces que tallos y que hojas.
En el caso del Padre Luís se trata no de un árbol tipo algarrobo que cuando le pesa
un poco la cabeza él solo se viene abajo; se trata mas bien de un árbol tipo encina.
Encina castellana hecha de "humildad y fortaleza".
El árbol que ha 'ido creciendo imperceptiblemente, alimentándose de silencio, de
silencio y de amor de Dios, actualizándose constantemente para constantemente dar frutos.
Horas y horas de confesionario, de charlas, de retiros de celebraciones eucarísticas y
sacramentales, de atención a enfermos y moribundos, de .... de todo eso que vemos todos
los días como la cosa mas natural del mundo.
"Atleta de carrera, edificio -casi un rascacielos-.y árbol plantado al borde de la
acequia. Así, el Padre Luís.
Creo que para que nuestra reflexión agarra fondo debemos recordar el
chascarrillo del baturro. Cuando lo llevaron a ver el mar, enormemente sorprendido dijo: ¡Cuánta agua...! Y el que le había llevado le dice "- !Y eso que no se ve mas que la de
encima".
Lo mismo les digo yo: 60 años de sacerdocio ¡Cuánto sacerdocio! Y eso que no se
ve mas que lo de encima.
Enrique Mangana López. C. M.
Un atleta
en carrera
Un árbol
bien plantado
Una casa,
casi un rascacielos
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VAMOS A BELÉN
Vamos A Belén
A los Sres. Párrocos de la Diócesis de Chiclayo
A todas las personas de buena voluntad
Urgente.-
La Oficina de la Nueva Evangelización 2000 de Chiclayo, con pretexto de este
autorizado saludo navideño, quiere invitarles a todos a viajar a Belén.
Viajar a Tierra Santa ha sido siempre un anhelo de todas las personas de buena
voluntad y una verdadera tentación para muchos de nosotros. Lo fue para los judíos de los
antiguos tiempos y lo será, indudablemente para los cristianos de todos los tiempos.
Vamos a Belén: Ir a Belén es, para los entusiastas de la Nueva Evangelización
2,000, una necesidad. La nuestra es una invitación cristiana. No se trata de un comercia!.
Hoy por hoy, no pertenecemos a ninguna agencia de turismo. Nos hemos atrevido a
formular la invitación porque, al escuchar un villancico, nos dimos cuenta de que el viaje es
posible, que el "paquete turístico" es adecuado. El villancico canta:
..."para llegar a Belén
ya no hace falta el camino:
se llega de corazón
cuando estamos decididos
a pensar en los demás
antes que en nosotros mismos".
Como, se puede ver, todo es posible. Y no es cuestión de plata ni de visas. Y, a estas
facilidades, debemos añadir que el natural temor causado por la inseguridad en aquellas
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latitudes, está disminuyendo. Los causantes de las disensiones se encuentran ahorita
mismo en conversaciones de paz.
Vamos a Belén...! Pero a Belén? ¿Para qué?
A Belén, para encontrarnos con El, el único, el Insuperable, el que es nuestro
Valor Absoluto, el que nació allí, en la "mas pequeña de las ciudades de Judá".
A Belén, para encontramos con Jesús, el Hijo de Dios y de María, el que es Dios y
Hombre, una gran Persona con dos naturalezas.
A Belén, para encontrarnos con Jesús, el Pobre, el Obediente, el que escapó de la
espada de Herodes, el que, a los doce años, se puso a discutir con los doctores del Templo
sobre las cosas de su Padre..., porque el Templo era de su Padre.
A Belén, para encontramos con Jesús, el que caminó sobre las aguas como si
nada, el que amainó un mar embravecido, el que resucitó a Lázaro.
A Belén, para encontramos con Jesús, el que se las ingenió para que, con cinco
panes y dos peces, pudieran comer miles; el que curó a tanta gente de tantas
enfermedades: cojos, paralíticos, ciegos, leprosos de alma y cuerpo.
Vamos a Belén para encontrarnos con Jesús, el que llamó al pan, pan y al vino,
vino; el que les dijo a ciertas personas "raza de víboras" y a ciertas otras: "sepulcros
blanqueados". Con el Jesús que dijo: "Juan es el mayor de los nacidos de mujer"; con el
Jesús que aclaró: "Mi reino no es de este mundo".
A Belén, para encontrarnos con el Jesús sangrante que le dijo a su madre: "Mujer, ahí
tienes a tu hijo" y a Juan: (es decir a nosotros) "ahí tienes a tu MADRE".
Vamos a Belén para encontramos con el que dijo "he venido a traer fuego a la tierra
y cómo quisiera que estuviera ya ardiendo" y dijo “tengo sed" y dijo 'todo está
consumado". Para encontrarnos con el que murió y resucitó y VIVE. Con el que rompió el
techo del mundo para que nosotros pudiéramos ir mas allá de las nubes.
Vamos a Belén para encontrarnos con el que, pese a quien le pese, es desde hace
1991 años el CENTRO DEL MUN DO, el Señor de la Historia; el que, dentro de pocos años
-nueve exactamente- celebrará 2000 años de vida MULTIPLICADA, compartida, vivificante.
Vamos a Belén...! Pero ¿a Belén, por qué?
A Belén porque la Navidad es la razón de ser de nuestro Proyecto Pastoral
Eclesial de la Nueva Evangelización 2000 y no se puede hablar de Navidad sin llegar a
Belén para encontrar a María que es quien nos trae a Cristo.
A Belén, porque mantenemos, al menos nosotros, la firme convicción de que la
referencia motora del trabajo pastoral de esta década, léase 2000, nos conduce
necesariamente a Belén y, sólo desde Belén, tiene importancia el 2000.
A Belén, porque todos los integrantes de la oficina -y esperamos que todos ustedes
también- estamos dispuestos a seguir trabajando en el logro de los objetivos y metas del
Proyecto. Al inaugurar la Década de la Nueva Evangelización 2000, en la Pascua de
1990, nos comprometimos a llevar a todos los hombres de buena voluntad, a ese Cristo
nacido en Belén.
En el Pregón de la Pascua del 90 apuntábamos un anhelo: "Ojalá que los
chiclayanos no estén al margen de este gran entusiasmo. O mejor, ojalá que sepan
captarlo y transmitirlo y lleguen a transformarse ellos mismos -nosotros mismos- en
animadores cualificados de la gran tarea misionera que vamos a emprender y realizar en
forma intensa y progresiva a lo largo de estos diez últimos años del segundo milenio. Echen
sus redes para pescar".
Echamos las redes. Pero hemos avanzado poco. Quisimos llegar a todos los
hogares con nuestro proyecto y estamos a menos de la mitad. Quisimos llegar a todos
los colegios de la Diócesis con el sentido de la nueva evangelización y apenas llegamos a
algunos colegios particulares de las tres principales ciudades. Hemos avanzado poco.
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Pero somos conscientes de ello y estamos dispuestos a seguir trabajando, con la ayuda
personal de los señores Párrocos y de sus entusiastas colaboradores.
Y estamos dispuestos a seguir trabajando con alegría porque sabemos que el
Señor está cerca, su Espíritu está a nuestro lado, El es el protagonista de nuestra Misión y
caminará con nosotros, "visitará nuestro Proyecto, es decir, su Proyecto".
Vamos a Belén porque el año 1992 está a la vista y, si bien tiene ciertamente un
sentido histórico propio, su sentido religioso y trascendente le llega desde Belén. En
1992 celebramos el V Centenario de la Evangelización, es decir, de la Buena Nueva de
Belén. No podemos hablar de que América se disponga a celebrar sus "500 años de
Cristianismo". Sería infantil de nuestra parte. Pero si podemos y debemos decir que, el
Nuevo Mundo tiene, en este momento, la inmejorable ocasión de realizarse y bautizarse
"cristiano". Las resultantes históricas del V Centenario y del inicio del Tercer Milenio
constituyen un momento especial de gracia y de poder divino que salva al hombre.
No sólo la historia del cristiano, hasta la historia del hombre, podrían enjuiciamos de
desaprovecharnos este momento especial de gracia este "Kairós" para mejorar la vida de
los hombres, para salvar al hombre!. Qué bien suenan aquí las palabras de la Sagrada
Escritura: "este es el tiempo favorable", "éste es el tiempo de la salvación"...! Bueno sería
transformarlas en canto y cantarlas hasta el 2000...!
Vayamos a Belén. Renovemos nuestra fe en Cristo, en la Iglesia, en el hombre. Como
seres humanos, como hijos de Dios, como chiclayanos, como peruanos, como americanos.
Evangelización 2000 propiciará dicha renovación con Retiros a nivel bolivariano (EneroFebrero), con Escuelas de Evangelización a nivel Latinoamericano (en Chiclayo, Marzo)
con posibles congresos "post-comla" (Chiclayo, Agosto), etc. etc.
Vayamos a Belén y escuchemos la voz del Espíritu Santo, cuya acción nos
disponemos a estudiar a lo largo de 1992, y recabemos insistentemente la presencia y
mediación de la Santísima Virgen, bajo la advocación de Nuestra Señora de Guadalupe,
estrella de la primera evangelización y roturadora de los caminos de la fe de los pueblos de
América.
A Belén, América! Y Feliz Navidad!
P. Enrique Mangana López, C.M.
Navidad, 1991
Oficina de la Nueva Evangelización 2000
Parroquia "San Vicente de Paúl"
Chiclayo
12
YO SIENTO DENTRO DE MI…
Como asesor de “Visitas Domiciliarias de la Santísima Virgen”, confieso que siento
dentro de mí, como en las canciones carismáticas, una inquietud.
La inquietud es esta. El año internacional de la familia acaba de meterse en el
último trimestre y, sin embargo, la mayoría de nuestros proyectos no logran cristalizar. Y
algunos, ni siquiera han llegado a florecer.
Abrigábamos la esperanza de que, antes de que el año culminase, las puertas de
todos los hogares cristianos se abrirían para dar paso a la Señora.
Trabajamos bien como “abre puertas”, hasta el mes de julio. El número de Coros
llegó a su mejor nivel.
Los 42 Coros –si bien dos de ellos debieron ser reestructurados- nos hablan de
que 1,200 familias reciben la visita de la imagen de la Santísima Virgen, por lo menos una
vez al mes.
Todos sabemos que el propósito de la visita exploradora de la Madre es para que
Hijo entre, con confianza, en los hogares chiclayanos, como hacer la lista de todo lo
necesario, para que El, de los tesoros de su corazón, comprados a precio de sangre, vaya
regalando a todos los inquilinos la gracia salvadora, sin recibos ni facturas.
Se fundamenta, además, dicha inquietud, en que hay, todavía, muchos hogares
cerrados. Y cerrados, seguramente, no por falta de llaves o de anhelos de ser visitados,
sino por falta de mensajeros. Quienes hayan comprendido la excelencia de esta
maravillosa devoción mariana, no pueden dormir tranquilos, hasta crear nuevos coros, de
modo que la inmensa mayoría de los hogares cristianos de Chiclayo, se encuentre
debidamente informada, para disfrutar de sus beneficios.
Por lo general, todas las devociones son buenas. Todas las devociones pretenden
poner a las almas en contacto con Dios, para conseguir el cielo con sus encantos. Pero
debemos saber que, algunas de ellas, como la de las Visitas Domiciliarias de la Santísima
Virgen, son especialmente buenas y populares para ello. Buenas a tal punto que llegan a
producir milagros.
A ver si podemos remedar y tararear la canción de Manzano que dice: Mirad al
suelo, corred la voz: “entre los hombres está el Señor” Y completarla con “Abrí mi puerta y
¡en hora buena!: Tengo visita, está la Señora”.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Oct. 94
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NOS URGE PONER SEÑALES
Alguien, allá por los tiempos de María Castaña, acuñó un decir que dice: "todos los
caminos van a Roma". Es una solemne mentira. Si el dicharachero hubiera delimitado un
poco su irresponsable afirmación, llevándola, por ejemplo, al plano religioso, doctrinal y
católico, tal vez se podría perdonar su atrevimiento. Pero, aún en este sentido, en este
plano, hay que decir que hay muchos caminos que no van a Roma. No van a Roma
porque, en cierto modo, Roma ya no está en Roma, y, además, porque los hombres de
hoy han descubierto -o inventado tal vez- otros centros neurálgicos, otros imanes
cautivadores, otros paradigmas que despiertan su interés y su entusiasmo; todos ellos, si
no opuestos, sí al menos muy distantes de Roma.
Puestos a echar cifras, -hoy en día somos muy amigos de presentar números para
corroborar nuestros asertos, números que si no son exactos los recubrimos con un
"estimado" y así acertamos siempre. Puestos a decir cifras decía, diríamos que hay unos
cinco mil millones de caminos que no van a Roma, o que, al menos, hoy por hoy, no están
yendo a Roma. Y esto es mucho mas serio de lo que el dicho refleja, porque, si todos esos
caminos o personas no van a Roma ¿a dónde van?.
Creo que tenemos el derecho y el deber de preguntarnos ¿a dónde van? ¿A dónde
se dirige ese altísimo número de caminos que no quieren o no saben confluir en Cristo
que es el único Camino para llegar al Padre? ¿A dónde se dirigen, si es que no les
apetece lo eterno, simbolizado en Roma, la ciudad que calificamos de eterna, no sólo por
su legado sino también porque guarda las llaves del reino de los cielos? A mi entender, la
falta de señales es la causante de todo. Los caminos son muchos pero las señales son
pocas. Nos urge poner señales. Las señales son necesarias para que los peregrinos
sepan a dónde van y a donde van a dar sus caminos.
Para acometer tamaña empresa como es una señalización planetaria, tendríamos
que pedir ayuda. Tendríamos que pedir algo así como una partida venida del exterior,
posiblemente del cielo. Tendríamos que contactar a los entendidos en la materia... Y, yo
me atrevería a decir que, para este caso en concreto, la referencia obligada seria María,
María la de Nazaret. Ella es la persona mas entendida en señales, porque ella misma es
"señal", la señal, "la gran señal puesta por Dios en el cielo; una mujer, vestida de sol, con
la luna bajo sus pies, y una corona de doce estrellas sobre su cabeza". Ella misma se hizo
camino para que Dios diera con el hombre, y Ella misma sigue siendo camino, para que el
hombre pueda llegar a Dios. Ella misma que es la portadora de la luz para los pueblos, se
ha convertido en la predecesora de la fe para iluminar a los que viven en tinieblas y en
sombras de muerte.
Transformemos, nuestro comentario en súplica y empecemos a poner señales.
Nos urge poner señales. A ver si conseguimos que sea verdad eso de que todos los
caminos van a Roma. Oremos con las palabras del P. Iruarrízaga:
"Estrella del mar y guía del alma que espera en tí,
Madre mía, madre mía, vuelve tus ojos a mí.
Tú que sabes la amargura del que llora sin consuelo
tú que alumbras. Virgen pura, la senda que lleva al cielo,
vuelve tos ojos, María, al que la luz busca en tí;
Madre mía, madre mía, vuelve tus ojos a mí."
Chiclayo, Julio, 2002
P. Enrique Mangana López, C. M.
14
CERTIFICADO DE ESTUDIOS PARA MARÍA
El mejor estímulo, la referencia mas segura y visible para aprender a seguir a
Cristo, por el camino de la Cruz, es María. Hizo un seguimiento tan bien hecho que se hizo
acreedora a un título. El título de Corredentora. Podemos certificarlo.
Sin prisas y sin pausas, no obstante los inesperados golpes que la fe en la misión
de su hijo le fue proporcionando, siguió a Jesús durante toda su vida. La irrupción de lo
espiritual en la fragilidad humana de doncella galilea, no la desestabilizó.
Antes al contrario, las situaciones límite, que van enmarcando las diversas
etapas de su vida (anunciación, nacimiento del hijo, vida pública, pasión, etc.), son
como plataformas de lanzamiento hacia, no tanto una mayor comprensión, sino mas
bien hacia una mayor identificación con la misión de su hijo. Identificación que alcanza su
plenitud en el comienzo de la cruz.
María ha ido, ha venido, como dicen los salmos del pueblo elegido, "de aliento en
aliento, hasta aparecer ante Dios en Sión".
Quienes, eternos aprendices, pasamos casi toda nuestra vida ensayando a dar el
primer paso, debemos pedirle que nos tome de su mano para cruzar, al menos, el trecho
mas difícil. Claro que, sería bueno que nos lleve siempre de su mano.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Marzo. 1996
FUEGOS ARTIFICIALES PARA NOVIEMBRE (Editorial)
Se han producido espontáneamente.
Nadie los ha comprado.
No se puede pensar que se trata de expresiones prefabricadas...
Están ahí. Y son hermosos.
Casi una decena de nuevos coros.
Alguien está trabajando por lo bajo, con humildad y efectividad sin letreros que
digan: "estamos trabajando" como ponen los del Ministerio de Obras Publicas.
Como Asesor de las Visitas Domiciliarias no me queda mas remedio que decir:
"Gracias, señoras. Y gracias Señora, por llevar de tu mano a las señoras"
Ojalá que la hermosura que producen no se acabe con el mes. Al fin y al cabo
quedan tres coros tan solo para completar el ciento. Consideren los integrantes de la
Directiva lo bien que suena eso de "cientos de coros de Visitas Domiciliarias...''
Todos los meses del año tienen fechas, grandes fechas de referencia mariana
que califican a todo el mes: mes de María, mes del rosario..También, noviembre, tiene su
referencia: Es el mes de La Milagrosa.
Hay otras referencias para este mes de noviembre, como Nuestra Señora de los
Treinta y tres (el 8, en Uruguay), Nuestra Señora de la Presentación de El Quinche y
Santa María de la Paz (el 21, en Ecuador y El Salvador respectivamente). Pero la que
califica a noviembre es La Milagrosa. Por su popularidad, por su universalidad, por su
signo de la sagrada medalla. Un signo que nos une a todos en ambiente de fiesta:
Todos los Santos, Fieles Difuntos, Letrán, Presentación, CRISTO REY, Cecilia,
Andrés... Y el nuevo ciclo.
Y todo ello porque... "cura los cuerpos y salva las almas"
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Noviembre.96
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CENÁCULOS-NUEVO IMPULSO
No podemos calificarlo de noticia. Pero el nuevo impulso que está
experimentando la atractiva y popular devoción mariana de los Cenáculos
de Oración y Evangelización, -COE-, es digno de tenerse en cuenta. De ser
sincero y duradero, podría contar con aquel antiguo e incondicional apoyo
nuestro, un apoyo, temporalmente suspendido por razones que no todos
conocen, pero que es fácil deducir por la falta de sensatez en los directivos
de turno.
La seriedad y grandeza de una institución descansa, no tanto en estructura pues,
una vez aprobada por la autoridad eclesiástica, es considerada apta y útil para la
santificación del pueblo de Dios. Descansa mas bien, en la fidelidad que sus integrantes
brindan a sus estatutos y reglamentos.
Al parecer esta fidelidad se ha recuperado.
Es una fidelidad que yo conceptuó corno "respeto".
Respeto, en primer lugar, a Jesús y a María, propietarios y administradores del
cenáculo. Respeto a todos los integrantes de dicha devoción, y respeto, también, a quienes
no la integramos.
En el contexto de esta fidelidad-respeto es que exteriorizamos nuestra felicitación a
los cenáculos y le reiteramos nuestro apoyo, alentando su difusión y su crecimiento hacia
adentro y hacia su volumen.
La actual directiva, por encargo de la dirección nacional, está abocada a la
realización del IV Congreso Nacional de cenaculistas laicos consagrados, los días 21,22 y
23 de marzo, en la vecina ciudad de Ferreñafe.
Este Congreso está programado, para tratar en primer lugar los temas propios de la
obra de los Cenáculos, y también para tratar o estudiar la persona de Jesucristo, en
respuesta a las sugerencias del Papa Juan Pablo II para el presente año de 1997.
El tema de Jesucristo, y los temas correlacionados con el, como son la fe, el
bautismo, la catequesis y la Maternidad divina de María y otros, son los que vamos a
considerar en el Curso.
La sola mención de éstos temas, junto con el clima de animación de la devoción
mariana, infaltable en toda reunión cenaculista, es, ya de por si, un atractivo y una garantía
de éxito.
Desde estas líneas del Boletín de las Visitas Domiciliarias de la Santísima Virgen,
extendemos, a todos, la invitación que se nos ha cursado, de participar en dicho evento.
Nadie, sabiendo que María es puente y camino para todos, puede alegar pretextos
para no acudir.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Marzo, 1997
¿PASIÓN POR LA EVANGELIZACIÓN SIN FRONTERAS
O PASIÓN POR EL "FOLKLORE" RELIGIOSO...?
Formulo esta pregunta porque, casi por inercia y al paso de los años, he podido
percibir en los comportamientos de la Iglesia Local, un "desplazamiento" mas allá de las
fronteras naturales tanto de agentes pastorales como de los mismos fieles para llevar a
cabo tareas o actividades pastorales o de simple cumplimiento religioso. Es como si
estuvieran yendo de la Ceca a la meca.
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El comentario del hecho percibido no exige ni está pidiendo -¡Dios nos libre de
ello!- justificación o aclaración alguna por parte de estos "emigrantes o inmigrantes".
Emigrantes o inmigrantes ya que el movimiento se produce en ambas direcciones, de
parroquia a parroquia aunque estén lejos la una de la otra.
Lo que si se motiva y justifica es, por tratarse de algo síntoma-tico, un brevísimo
comentario. ¿A qué se deben tales desplazamientos? ¿Están motivados por una santa
pasión de una evangelización sin fronteras u obedecen a atractivos de snobismo religioso?
Como motivación, creo que podemos descartar, en primer lugar, el temor al
fracaso o la falta de efectividad pastoral entre los suyos, en su propio barrio, en su
parroquia. Aquello de que nadie es profeta en su propia tierra... no puede traerse a cuento,
ya que estas personas son las que normalmente ostentan el índice de la fe del sector o
lugar. De no ser así, flaco servicio le estarían haciendo a la Iglesia, su Iglesia, y a la
parroquia, su parroquia.
Tampoco debemos pensar en un exceso numérico de tuerzas pastorales que ya no
cuentan con un espacio adecuado, en su entorno para el desarrollo de su celo
evangelizador. Las noticias que tenemos de las 41 parroquias de la diócesis confirman
la necesidad de un numero de animadores de la Evangelización sustantivamente superior
al actual. En nuestro medio, como en casi todas partes, muchos son los bautizados pero
pocos los "evangelizados",
Así las cosas, creo que deberíamos pensar mas bien en esa multisecular influencia
de una natural inclinación a la curiosidad. A la curiosidad de todo tipo, pero sobre todo, a
la curiosidad de tipo religioso y "Religioso" es una palabra que no equivale
necesariamente a "cristiano". Estamos tan inmersos en ella que vamos tras de todo y, a
como dé lugar.
Salta la noticia de que va a impartirse alguna charla sobre te-mas tan llamativos
como (droga, aborto, terrorismo, homosexualidad, travestismo, donación, etc., etc..)
y ahí estamos, aunque sepamos mas de dichos temas que los mismos expositores y
aunque dejemos sin el almuerzo o lo que sea a los otros miembros de la familia.
Nos enteramos de que va a celebrarse una Misa llamada "de Sanación" y allí
estamos, en primera fila, buscando un milagrito que nos libere de nuestras dolencias
crónicas, las mismas que hemos presentado, por años como disculpa para no acudir al
templo de la parroquia a las celebraciones dominicales que, son las que le gustan al
Señor.
Y podríamos pensar también en el otro extremo. Esta especie de "fugas" del
propio medio, el medio natural que el Señor nos ha deparado para nuestra realización
humana y cristiana, podría ser provocado por el hieratismo. El hieratismo de que
adolecen cier-tas celebraciones litúrgicas, especialmente las consideradas "oficiales" y
que generalmente corresponden a esferas de la jerarquía de la Iglesia.
Pero no olvidemos que, entre el hieratismo y el folklore, hay un término medio.
Y, en ese término medio, según dice Tomás, el santo, está la virtud.
La Iglesia, para una mejor atención a sus fieles, ha estructurado la
presentación de sus servicios, en circunscripciones territoriales llamadas diócesis;
y, éstas, en circunscripciones mas chicas, llamadas "parroquias". La parroquia es el
ámbito y el ambiente apropiado para nuestro crecimiento como cristianos y como
animadores de la evangelización.
Procuremos resistir a la terrible atracción de lo fuegos artificiales, cuya
hermosura produce una tristeza infinita y, aceptemos que los picaflores no pueden ser
tomados como modelos de vida cristiana. Son incapaces de distinguir los pompos de
las violetas.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Setiembre, 1997
17
NOVIEMBRE, 1997
Puestos a bautizar nos hemos acostumbrado a bautizarlo todo:
los días y hasta las actividades litúrgicas y pastorales de
importancia.
Al presente mes de noviembre podríamos imponerle un buen
número de nombres y todos ellos muy apropiados y sugestivos.
Podríamos hablar de "el mes de Todos los Santos", "el mes de los
Fieles Difuntos", "el mes de San Martín", etc. etc. Personalmente
prefiero llamarle "el mes de La Milagrosa". Se supone que todos
estamos de acuerdo.
Al fin y al cabo es un título correlativo y muy apropiado. Si a
octubre lo calificamos como el mes del Señor de Los Milagros, y ¿por qué no llamarle a
noviembre el mes de la Señora de los milagros, o mes de La Milagrosa?
Esta denominación, aunque la Fiesta de la Virgen de la Sagrada Medalla se sitúa
litúrgicamente hacia fines de mes: -el 27- está fundamentada y legitimada por la universal
devoción a la Virgen de la Sagrada Medalla, La Milagrosa, que no tiene límites ni en el
tiempo ni en el espacio.
Los miles de familias que son objeto de sus atenciones y prodigios, a través de esta
Devoción de las Visitas Domiciliarias, son quienes apadrinan nuestro bautizo. Bautizo que
no es "nuestro", sino de las más de 3,180 familias que en las diversas parroquias de la
Diócesis, han acogido cariñosamente esta devoción y esta práctica.
El alto número de familias que acogen esta devoción y esta práctica, no resulta de
populismos ni se inspira en ellos ni en grandes concentraciones. Ni es fruto de la
publicidad. Es, más bien, el resultado de las conversaciones que la Santísima Virgen
mantiene en privado, a través de su imagen, con cada familia, sin fisgones y sin la
presencia de terceros. Ahí está el secreto, ahí está la clave.
La labor del celador o de la celadora responsable de cada Coro consiste en asegurar
su adecuado funcionamiento, de modo que la imagen pase de familia en familia, a la hora
y días indicados. La labor de los celadores se ejerce "desde el exterior". La Señora realiza
sus prodigios en "la intimidad" de la familia.
El que hayamos calificado a noviembre como "el mes de La Milagrosa", no significa
que hayamos agotado sus contenidos y proyecciones pastorales. Hay más.
El hecho de encontrarnos en el trienio trinitario de preparación para el Año Santo
2,000, le trae al presente mes de noviembre dos fechas de alta tensión.
La primera de ellas, el día 23, domingo, Solemnidad de Cristo Rev. Fecha elegida
para la Clausura de las Actividades de Reflexión sobre Jesucristo. El Hijo de Dios
hecho hombre para salvar a los hombres" Clausura que no debe ser mas que eso:
clausura de actividades programadas, ya que la pregunta, que el Señor nos formulaba al
comienzo del año, "Y vosotros, ¿quién decís que soy yo"?, sigue naturalmente sin una
respuesta adecuada.
Los pasos dados en este sentido, a través de Cursos de Cristología, celebraciones
bautismales y marianas, a pesar de ser firmes y sinceros, resultan definitivamente
insuficientes para avizorar el logro de las metas proyectadas.
La segunda fecha corresponde al día 30 de Noviembre, 1er Domingo de
Adviento del Ciclo "C", en el que se inaugurará el Año del Espíritu Santo.
Como todos sabemos, los años de reflexión sobre las personas de la Santísima
Trinidad corresponden a los, años litúrgicos. Estos se inician con el primer Domingo de
Adviento y concluyen con la Solemnidad de Cristo Rey.
Habiendo logrado un "algo" de experiencia en los programas de reflexión del primer
año trinitario sobre la Persona de Jesucristo, es muy posible que, nuestro programa de
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reflexión sobre la Persona del Espíritu Santo, sea mas acertado y fructífero. Este programa
deberá ser, a nuestro modo de ver, un programa de celebraciones.
Es esto lo que nos mueve a ofrecerles en ésta edición los apuntes sobre la Persona
del Espíritu Santo. Estos apuntes son de interés para los agentes pastorales como para
los mismos sacerdotes, aun sabiendo que cuentan, por otra parte, con los subsidios de las
diversas Comisiones del Gran Jubileo 2,000.
A nombre de la Señora, nos complacemos en felicitar, a la Directiva de Visitas
Domiciliarias y a todas las responsables de los diversos coros, pero en especial a los de
Motupe y Lambayeque y a los de la Parroquia San Juan María Vianney, por el notable
incremento experimentado.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Noviembre, 1997
CON PAN Y VINO
Chiclayo, 19 y
20 de Nov. de 1997
Saludo en el X Aniversario
del Centro Piloto de ia Primaria Archicofradía de los
Jueves Eucarísticos
Una de las características mejor entendibles de la Eucaristía es la de haberse
constituido -sin menoscabo de los debidos respetos,-en el alimento mas apropiado "para
el camino" camino". Además de reflejar la itinerancia de la vida del cristiano, no implica
demasiados ajetreos en su manejo y administración o repartición. No me extrañaría nada
que aquella vieja expresión castellana de "con pan y vino se anda el camino", tenga una
real dimensión eucarística y su significado se fundamente precisamente en ella. Por
algo los cristianos le damos el nombre de viático.
La nomenclatura es realmente antigua y, si bien antiguamente era referida al
alimento necesario para el último trecho del camino, creemos que bien puede referirse a
todo el trayecto de nuestra vida. Las recomendaciones, hechas por Dios al profeta que huye
de la pérfida Jezabel y se enfrenta, en su huida, al terrible desierto que le separa del
monte Horeb -léase cielo-, tienen una indiscutible actualidad. "Despierta y come" -le dice el
misterioso mensajero- "que el camino es superior a tus fuerzas".
Entiendo que todos los juevistas conocen, de memoria y estimativa, esta expresión.
Obedeciendo la voz del Señor "despiértate, y come que el camino es superior a tus
fuerzas", habrán acumulado ya la fuerza necesaria para cruzar el desierto de la vida.
El año litúrgico que se avecina, nos ofrece un camino muy llevadero, siempre y
cuando estamos en camino y en el camino hacia el año santo 2000, según las pautas del
Papa Juan Pablo en la "Tertio Millennio adveniente". Además del acopio de fuerzas
eucarísticas del Año de Jesucristo, contaremos ahora con la presencia y la ayuda de una
persona muy especial: el Espíritu.
"Guiados por el Espíritu" podría ser el lema de nuestras actividades en 1998.
"Guiados por el Espíritu" ha sido siempre el estilo natural, usual y lógico de vida del
cristiano. Pero en el transcurso del año entrante, este "estilo" debe ser asumido,
examinado, profundizado y consolidado, consciente y definitivamente. Y debe serlo, si es
que queremos ser consecuentes con las sugerencias del Papa.
Todos los juevistas han debido asumir éstas sugerencias como programa, como
principio y desde el principio. Puedo asegurarles que, si han cruzado el desierto del 97
alimentándose del viático de Jesucristo y se dejan "guiar por el Espíritu", a lo largo del 98,
podrán disfrutar la travesía del 99, confiados y alegres, de la mano del Padre.
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Este es el sentido de nuestro saludo a todas las hermanas y hermanos
juevistas, a quienes nos honran con su presencia y a todos aquellos que no han podido
venir.
A unos y otros, en nombre de la Directiva del Centro Piloto, en nombre de las
Hermanas Misioneras y en mi propio nombre, un fraternal saludo. Al igual que una
súplica, vieja e insistida. La súplica de que sean fieles a los artículos y adiciones del
Reglamento y a la práctica de la Hora Santa y de la Santa Misa.
Gracias
por
haber
venido,
y
gracias,
mil
gracias
Señor,
por estar siempre con nosotros. ;
P. Enrique Mangana López, C. M.
ASESOR
Marzo, 1997
VIA LUCIS
Todos los cristianos, unos antes, otros mas tarde, hemos sido informados de "una
espiritualidad pascual". Desde los ejercicios Ignacianos, pasando por los apuntes de
George Bernanos hasta las sugerencias de los subsidios de las Comisiones de
Preparación para el Año Santo 2000, se inculca, sugiere y establece la "necesidad" de vivir
la alegría pascual. La única y verdadera alegría.
Al establecer esta vivencia de la alegría pascual se aclara que debemos acompañar
al Señor, no sólo en el doloroso trayecto de la cruz, -vía crucis- sino también en los
momentos en que, su Resurrección se hace visible y se empoza en la vida ordinaria de
sus discípulos, es decir en un real "vía LUCÍS" o camino de la luz.
La Sagrada Escritura traducida a la experiencia por la Tra-dición de la Iglesia, nos
ofrece catorce momentos estelares -estaciones- que evocan las apariciones de Jesús a:
María, su Madre
María Magdalena
Las tres Marías
Pedro
Los Discípulos de Meaux
Los Discípulos en el Cenáculo
Tomás
Los siete Discípulos en la orilla del mar
Los discípulos en el Monte Tabor
Los quinientos hermanos
Santiago
José de Arimatea
Pablo, y
Los Apóstoles en la Ascensión.
La espiritualidad de éste camino de la luz, vía lucís, es una exigencia y
consecuencia de la espiritualidad de la cruz, del vía crucis. Sin ella no tendría sentido la
celebración de la Cuaresma y de la Semana Santa. Es imperativo pasar de la desilusión,
del desconsuelo, del sufrimiento y de la muerte, a la alegría en el encuentro con el
Resucitado". En éste sentido, la Pascua es el más grande aporte del cristianismo a la
humanidad.
Es necesario cantar el canto de la vida.
Es necesario resucitar. Pasar al otro lado. La espiritualidad
pascual es la que da sentido a todo el camino recorrido y es buena para todos. Pero
sobretodo para aquellos cristianos que, por falta de fe y amor, han ido reduciendo el
horizonte de su vida a los "problemitas" de su pequeño mundo.
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Y es buena hasta para los no cristianos. Que si cantamos bien
no tendrán más remedio que acompañarnos a cantar las maravillas de un Dios
resucitado y resucitador.
Decídete a vivir esa espiritualidad pascual y estrenarás la vida.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Mayo, 1998
PARA QUE TE ENCUENTRE EL QUE TE BUSCA
"Y cuando por desobediencia perdió tu amistad no lo
abandonaste al poder de la muerte: sino que,
compadecido, tendiste la mano a todos para que te
encuentre el que te buscan" Pleg. Euc. IV
Es incuestionable que la celebración de la Pascua de éste año -al igual que todas
las otras pascuas deberá contar con la presencia manifiesta y programada de un
invitado especial: El Espíritu Santo. La verdad es que todo el Misterio Pascual es obra
suya. Lo realiza ciertamente otra persona, Cristo, pero cuenta para ello con la asistencia
permanente del Espíritu.
En el Libro de Los Hechos (Hc 10,37-38) se dice: "Vosotros conocéis lo que
sucedió en el país de los judíos, cuando Juan predicaba el bautismo, aunque la cosa
empezó en Galilea. Me refiero a Jesús de Nazaret, ungido por Dios, con la fuerza del
Espíritu Santo, que paso haciendo el bien y curando a los oprimidos por el diablo; porque
Dios estaba con él”.
Desde ese momento la fuerza del Espíritu conduce, como de la mano, al Salvador,
hacia su obra de Salvación. Hasta en el momento de su muerte y sobre todo en el
momento de su muerte, es cuando el Espíritu está visiblemente presente. Hasta el mismo
ofrecimiento de Cristo, para el sacrificio redentor, es suscitado por el Espíritu. Todos los
misterios de Semana Santa suceden bajo el impulso y con la fuerza del Espíritu Santo que
"inspira y sostiene el sacrificio de Cristo porque El estaba en el origen de su caridad hacia
Dios y hacia los hombres sus hermanos".
En el subsidio ofrecido por el Comité Central del Gran Jubileo, para el presente año,
se nos dice que, ciertamente es el Padre quien resucita a Jesús (Rm 8,11; 1ra Cor 6,14)
pero esto sucedió según el Espíritu Santo, porque "Murió en la carne, pero volvió a la vida
por el Espíritu". (1ra Pd 3,18), como sucederá en nuestra resurrección que es una
consecuencia directa de la de Cristo.
Pero este invitado especial para la Semana Santa de 1998, condiciona su
aceptación a una exigencia básica: Quiere que reconozcamos oficialmente nuestra
condición de pecadores. Es esta una exigencia "sine qua non". Y No debe extrañarnos esta
condición porque el Padre y el Hijo nos exigen exactamente lo mismo.
Lo primero que debemos hacer, por tanto, es reconocer nuestra condición de
pecadores. Para muchos de nosotros, este reconocimiento parecería excesivamente fácil. La
verdad es que no lo es. Y que hay que trabajar en ello. Hay que escucharle cuando nos
dice: "vosotros que sois malos... ". Ese es el concepto que el Señor tiene de nosotros: que
somos malos. Hay que cambiarlo, escapando lo antes posible de entre aquellos famosos
"tiradores de piedras, celosos cumplidores de la ley, que, erigiéndose en jueces, querían
apedrear a la adultera y el Señor les dijo "el que de vosotros esté sin pecado...
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Para eso es la Semana Santa.
"Para que te encuentre el que te busca". Esa es la razón de su venida a este mundo y
es, también, el motivo de nuestra celebración.
Los cristianos somos muy sensatos y hacemos siempre las cosas con sensatez.
Nuestros "¿por qué?" y "¿para qué?" van acompañadas siempre de motivaciones de orden
espiritual. Si la celebración de la Semana Santa no tuviera para nosotros estas motivaciones
estaríamos de lleno en el seno de una Iglesia folklórica y actuaríamos como "agentes de
inequidad".
Pero hay una mano tendida ¡Qué menos que ser delicados y educados para
asirnos de ella!.
Si no fuéramos capaces de llegar a ese reconocimiento oficial de nuestra condición
de pecadores, conscientes de que nadie es buen juez en causa propia, deberíamos pedir
ayuda. Pedir ayuda. Y no a cualquier hijo de vecino, porque a lo mejor son capaces de
ponernos corona y todo. Pedir ayuda a una persona bien enterada en estos menesteres y
que lleva, más que años, siglos, trabajando en ello y siempre con muy buenos resultados.
Me refiero a Nuestra Señora, la de las Visitas Domiciliarias. Esta Señora tiene
un estilo muy especial. Se queda, a solas, contigo y en tu propia casa, a solas con la familia
y, yo no se como hará, pero lo cierto es que las cosas cambian. Las cosas y las personas.
Y todo ello, según se nos informa, partiendo de la condición de pecadores y del
reconocimiento de dicha condición.
Esta buena señora, no ha perdido ninguno de sus casos.
Si queremos que Dios haga grandes cosas en nosotros, con la fuerza de su
Espíritu, tiene que ser desde la base de nuestra conversión, es decir, desde el
reconocimiento oficial nuestra condición lamentable pero dichosa, de pecadores. No
olvidemos que El nos ha tendido la mano para que le encontremos.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Abril, 98
SALVE MADRE
También el mes de setiembre puede ser calificado de "mes mariano". Y no sólo por
señalar el inicio de la primavera terrenal que nos lleva a pensar en María "la eterna
primavera", sino también porque esta sembrado de fiestas y advocaciones marianas que han
ido brotando en diferentes lugares y con diferentes aromas y colores. Rubricamos lo dicho
con algunos ejemplos.
El día 8 de setiembre celebramos la Natividad de la Santísima Virgen. El gran Lope
de Vega, el Fénix de los ingenios, se las ingenia para resumirnos el significado de la fecha:
"Hoy nace una clara estrella,
tan divina y celestial,
que con ser estrella, es tal,
que el mismo Sol nace de Ella".
La Estrella nace para alumbrar. Esta luz nos encamina a recibir con
gozo el gran don de la salvación, Es por ello que, en Cuba, recibe el reluciente nombre de
"Nuestra Señora de la Caridad del Cobre"
El día 11, la piedad histórica mariana nos lleva a Venezuela, donde Nuestra Señora
de Coromoto tiene una nueva casa recién estrenada, bendecida por el Papa Juan Pablo II; un
inmenso e impresionante Santuario Nacional, en las cercanías de Guanare, que tuvimos la
dicha de visitar aunque para ello fuera necesario atravesar varios ríos desbordados y varios
puentes rotos.
22
El día 12, fiesta litúrgica del Santo Nombre de María. María, la palabra mas bonita, la
palabra con mas luz, la palabra mas sencilla, María, la Madre de Jesús”. María es el nombre
mas bello de los nombres, el que inspira mas amor, el mas dulce y mas divino; María es un
nombre que suena a primavera, que huele a blanca flor, que sabe a hierbabuena, que
siembra la esperanza, que inspira admiración, que paz y fe derrama, Dios, por eso, a su
Madre ese nombre le dio. Cualquiera diría que somos unos copiones, pero actuamos de
acuerdo a los consejos de Machado: "Deja, Guillen, que tus coplas vayan al pueblo a parar,
que cuando las canta el pueblo, ya no son de los demás".
Como queriendo darnos a entender la estrecha unión que hay entre Cristo y su
Madre, la Iglesia sitúa, inmediatamente después de la Exaltación de la Santísima Cruz, el
día 14 del mes en curso, la contemplación de Nuestra Señora, la Virgen de los Dolores. Si
el nombre de María es un filón inagotable para los músicos, los dolores de María lo es
para los poetas. En la penúltima estación del Vía Crucis, con Jesús en los brazos de
María, escribe el entrañable Gerardo Diego:
IQué soledad sin colores...!
Oh Madre mía, no llores.
¡Cómo lloraba María...!
La llaman desde aquel día:
la Virgen de los Dolores.
Como un himno de acción de gracias, en el Perú, celebramos el día
24 la fiesta de Nuestra Señora de la Merced.
La expresión "Salve, Madre" nos trae a todos los católicos de la
vieja guardia, las notas de una solemne canción. Tarareándola Visitas
Domiciliarias saca fuerzas de flaqueza y se honra en presentar, amén del
Cap. VIII de "María mujer de esperanza", la reseña de los quehaceres de tres
congregaciones religiosas y de una asociación hermana "La Legión de
María".
Estas congregaciones -Hermanas Franciscanas de la Inmaculada, Hermanas
Dominicas de la Inmaculada Concepción y Hermanas de San José de Tarbes- sienten,
como toda Congregación religiosa de la Santa Iglesia, una especial predilección por la
Santísima Virgen.
La Legión de María, por su parte, ha concitado y despertado siempre, para las
Visitas Domiciliarías de la Santísima Virgen, un gran atractivo y un creciente interés para
su difusión. Y esto no sólo porque dicha asociación abarca el amplio mundo católico sino
también porque es La Milagrosa la imagen que preside sus reuniones y la que, desde el
estandarte de la Legión, atrae la mirada y el corazón de los legionarios.
Ponemos punto. Pero conscientes de que "de María numquam satis!".
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Setiembre, 1998
23
SIGUE SIENDO ACTUAL
En nuestro Boletín, Junio, 1989, apuntábamos:
La Archicofradía de los Jueves Eucarísticos, configurada como tal, en virtud de los
Breves de Benedicto XV (05-12-1920) y de Pío XI (12-06-1923), tiene por fin aumentar en
los fieles la devoción hacia la Sagrada Eucaristía, conmemorando su Institución por
Nuestro Señor Jesucristo y reparando las ofensas que El recibe en este augusto sacramento.
La Cofradía, nacida a los pies del Pilar de Zaragoza, y estén-dida por muchos
países, tiene una estructura jerárquica realmente muy peculiar y un Estatuto -casi
elemental, denominado Reglamento- con 12 artículos y 12 adiciones o disposiciones
complementarlas.
Desde su Centro Universal, (Pza. de la Seo, 6, 2do Piso, número 17-CP 50003Zaragoza, España), se proyecta hacia todos los países. Está constituida por un Consejo
Superior, Centros diocesanos, Centros locales, Centros filiales y Secciones
Eucarísticas.
No es difícil comprobar que la obra ha sido y sigue siendo actual. Y no sólo por el
hecho de que su finalidad se desarrolla en el contexto de la principal devoción del cristiano,
sino también por su creciente desarrollo.
En el Perú, la obra cuenta con más de 70 centros. Digo mas de 70, porque a los
grupos que van configurándose, se les pide un período previo de funcionamiento antes
de su aprobación canónica.
Tanto su introducción como su crecimiento se deben al entu-siasmo de la Sra.
Floriza Peralta de Sánchez. Ella fundó el primer centro eucarístico, centro piloto, en la
parroquia de Ntra. Sra. del Rosario de Fátima (Lima) en 1964.
A pesar de los achaques propios da su edad avanzada, ésta santa mujer, sigue
trabajando tesoneramente, junto con su hija Abril: haciendo fundaciones, visitando los
centros, y, lo que es más importante, comunicando entusiasmo y vida interior a todos los
hermanos de la Cofradía.
Para ella, nuestro agradecimiento y nuestra felicitación.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Junio, 1999
DESDE ESPAÑA. CON AMOR
Nos separa una distancia de mas de diez mil Kilómetros. A pesar de la distancia y a
causa de la distancia, me gustaría, con el pretexto de esta pequeña nota, que me permitan
entrar, no sólo en sus hogares, sino también y sobre todo, en sus corazones. Y espero,
además, que nadie se pregunte o me pregunte con qué derecho porque, a decir verdad,
me siento como uno más de su familia. Mas bien creo que soy uno más de cada una de las
familias que integran la maravillosa devoción de las Visitas Domiciliarias de la Santísima
Virgen.
Lo que acabo de decir parecería ser tan solo un sentimiento. Pero es una
realidad. Siempre que nuestra Buena Madre, nuestra común amiga, la Visitadora, la
Milagrosa entra en sus hogares, en cierto modo, entro yo también.
Como ya estoy adentro y de cháchara con ustedes, quiero confesarles que, en el
transcurso de mi ausencia, -no querida pero necesaria- recababa, constantemente,
noticias acerca de las Visitas Domiciliarias. Preguntaba de su vitalidad, su crecimiento, sus
logros. Y casi siempre, recibía respuestas alentadoras.
Pero debo confesarles además -y esto es ya secreto de confesión-, que, a pesar de
las buenas noticias sobre las jornadas, los boletines -con su nueva y mas atractiva
presentación-, la funda-ción de nuevos coros etc. etc., allá en mis adentros, sentía
24
desvane-cerse "aquel adorado sueño de arribar, antes que el tercer milenio se nos echara
encima", por lo menos, al número doscientos (200) coros.
Mi adorado sueño ya lo conocían, ¿qué les parece mi temor? ¿Qué opinan las
hermanas integrantes de la Junta Directiva? ¿Con qué reserva de fuerzas cuentan las
celadoras?.
Que la respuesta no esté en los labios sino en el corazón.
¿Por qué no hacen suya aquella exigente frase "las cosas difíciles las hacemos
rápidamente; las imposibles, tardamos un poco mas"?
Por lo menos deberíamos intentarlo; debemos intentarlo.
Cualquiera que sea .el resultado, yo les voy a seguir queriendo lo mismo, es decir,
mucho.
Ojalá que esta nota cumpla su cometido. No en vano estamos en el Año del Padre.
Del Padre que es Misericordioso, que es esencialmente amor, hogar, domicilio.
Del Padre que abrió las puertas de su casa del cielo a su hija predilecta, coronándola
por reina y señora, como agradecido de su gesto de disponibilidad y apertura.
Con toda segundad, por cada puerta, por cada hogar que abramos a María,
tendremos una puerta abierta para nosotros en el cielo.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Mayo, 1999
EN EL AÑO DE LA GRACIA DEL SEÑOR
Érase una vez...
Así empezaban los mayores a contarnos cuentos.
Nos contaban cuentos, no para entretenemos.
Nos contaban cuentos para hacernos dormir.
Me gustaría contarles un cuento y un minicuento, y no para que ustedes duerman,
sino para que ustedes despierten, que ya va siendo hora...
Érase una vez un muchachito
Un muchachito bastante entrado en años y casi peinando canas, Pero romántico y
soñador, sobrecargado de ilusiones y anhelos de todo tipo...
Uno de estos anhelos -digo la verdad, no miento- era "el de ver extendida por todas
las parroquias de la Diócesis de Chiclayo, la Devoción de Las Visitas Domiciliarías de
la Santísima Virgen"...
Y lo anhelaba porque sabía que, si la Madre lograba derribar las puertas y
franquear la entrada a los hogares, su hijo, el Hijo, rompería los candados de los corazones
de muchos de los miembros de la familia. Porque, eso sí, hay muchos que han echado
candado al corazón.
Y pensaba el muchachito del cuento que sería una lástima que, estando en el
2,000, en el Año de gracia del Señor, el Señor, el repartidor de perdón y condonador de las
penas, tuviera que pasar de largo, porque la puerta de "fulanito de tal" estaba cerrada.
Sabemos, mas que de memoria, de estimativa, que los instrumentos idóneos para
abrir esa clase de puertas, no son ni mucho menos las "patas de cabra" sino mas bien las
atractivas y efectivas Visitas Domiciliarias de la Santísima Virgen.
25
Pregunto: ¿Por qué no seguir fabricando, estos instrumentos en serie, digo en
serio?
Creo que, sólo así, el muchachito del cuento no se vería obligado a compartir el
sabor salobre de las lágrimas del poeta: "Me basta con que digan, reprimiendo su llanto, los
que sepan la historia de mis tristes enojos; -El se hundió sin la rosa, pero la lloró tanto que,
a fuerza de llorarla, le floreció en los ojos.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Enero, 2000
BRUTALMENTE SINCERO
Estamos convencidos de que asumir una actitud de humildad y de sencillez es
imprescindible para toda tarea pastoral. Aquel que se deje llevar por la vanidad o la
soberbia o la intransigencia, reducirá a cero la posible eficacia de su misión. Y esto
sucederá inevitablemente, aunque dichos defectos se presenten de manera eventual.
-Elemental, querido Watson", nos dirán los lectores.
Es elemental que todo cristiano, todo misionero que asume tareas pastorales, todo
joven o no tan joven que integre asociaciones, grupos de oración, cofradías, movimientos o
programas, adopte una actitud de sencillez, de humildad, de mansedumbre y hasta de
mortificación y celo por la salvación de las almas. Elemental. Algo que cae por propio peso
en la esfera de la lógica humana y en la esencia misma de todo proyecto espiritual,
¿Elemental... ?
La experiencia nos dice que, lamentablemente, en muchos sectores de la actividad
pastoral, se infiltran personas que no saben ni lo que quieren, que desconocen estas
virtudes elementales. Como si nada ocurriera, se posesionan de cargas y cargos, con el
único, pero no santo, propósito de figurar, y, no pocas veces, con el malévolo interés de
lucrar prebendas temporales.
Es cierto que, seguimos siendo hijos de esta tierra y que estamos sometidos, por
tanto, a equivocaciones y errores. "Errare humanum est" decían algunos hace ya mucho
tiempo, pero no por ello estamos autorizados a convivir con el error. El ser humano, pero
sobre todo, el ser cristiano debe ser "brutalmente sincero'" y esclarecer siempre la
razón de sus pasos y de sus trabajos.
¿De dónde vengo? ¿Quién soy? ¿Qué estoy haciendo?' ¿Para qué lo estoy
haciendo? ¿Que provecho material, o espiritual me reporta? ¿Cómo podríamos hacer
que estas personas “presumidas e inescrupulosas” bajen de sus pedestales,
rectifiquen su postura, depongan su actitud de intransigencia, su infantil y poco
cristiano afán de querer acaparar puestos o de querer eternizarse en ellos, creyéndose
imprescindibles...?
La delicadeza humana y el amor cristiano, proyectados hacia esta clase de
personas, nos impiden llegar, nos prohíben llegar a la casuística; pero nadie nos impide
pedirles por Dios y por todo lo que mas quieran, que “no cometan el miserable disparate
de fabricar situaciones que rayan con lo sacrílego, para inculpar a personas de cosas que
jamás harían, mermando su buen nombre y anulando su competencia. Nada mas opuesto
a la esencia del cristianismo que esta manera de comportarse. Alguien dijo: Cometer un
crimen en nombre de Cristo es un doble crimen contra Cristo. Podemos naturalmente
bajar el volumen, pero el pensamiento sigue siendo válido.
Hacia lo mismo, solo que, desde mas lejos.
26
El objetivo de toda pastoral como de toda tarea evange-lizadora es llevar los
hombres a Dios o llevar a Dios a los hombres, para que, en uno u otro caso, puedan
salvarse.
Además del camino oficial del culto y los sacramentos, de la evangelización y de la
práctica de la caridad, suficiente y válido en todo momento, hay, para alcanzar los
objetivos señalados, en el pueblo de Dios, senderos o expresiones carismáticas, no
imprescindibles pero buenas (asociaciones, cofradías, grupos de oración, movimientos,
programas y otros) que nos permiten tender hacia el mismo objetivo pero con estilos y
sellos propios. Estas expresiones no son objetivos ni metas; son medios. Y como tales
hay que tomarlos. No pocas personas sienten la necesidad de reconciliarse por no haber
acudido a la reunión del grupo. Pues bien, eso significa que, al hacerlo le están
otorgando al grupo un valor excesivo en el sentido de la obligatoriedad, no caen en la
cuenta de que es un simple medio para tender a la perfección personal y/o grupal que es el
fin.
Pero hay algo más. Estos medios, están autorizados por la Iglesia, gozan siempre
de una estructura que conlleva siempre la exigencia de una postura radical de espiritualidad
que tiene como base la sencillez, la humildad, la mansedumbre y celo por la salvación
propia y de los demás.
Por ello es inconcebible que cualquiera de sus integrantes, en especial
cualquiera de sus dirigentes que tienen de ordinario, el carisma de ir sembrando las flores
del bien las flores de la caridad cristiana... desoiga la voz de la jerarquía, se revista con el
manto del subjetivismo, y se dedique a ir sembrando rosas con espinas o tal vez espinas
y sin rosas. Parecería inconcebible, pero los hay.
Como también hay juevistas -llamamos así a los integrantes de los Jueves
Eucarísticos- que, a pesar de que la Cofradía como tal, da siempre en el blanco y es la mas
centrada y acertada de cuantas hermandades se puedan inventar, se dedican a
desconocer los Estatutos o las Adiciones de su Reglamento, en especial, la número 12 en
la que, al pie de la letra se lee:
“En los Jueves Eucarísticos debe reinar necesariamente la caridad, la armonía y la
disciplina. Los que se sientan juntos en la misma Mesa para recibir el mismo Manjar, los
que juntos cantan y alaban a Jesús Sacramentado, deben estar unidos con los vínculos más
estrechos de caridad, orillando todo lo que suponga pugilato y desunión.
Se dedica, digo, a inventar calumnias a los mismos integrantes del grupo, a fabricar
artimañas casi sacrílegas para desacreditar y evitar que alguien llegue a ocupar el cargo
que dicha persona ostenta.
¡Es inaudito!
Aprovechamos, aprovecho las páginas del Boletín de Visitas Domiciliarias para
recordarle a esa persona -y a todos aquellos que estén en casos similares- que su actitud
es diametralmente opuesta a la naturaleza y a los objetivos de la Cofradía de los Jueves
Eucarísticos.
De persistir en una actitud así, esas personas caen, a mi modo de ver, en eso que el
Código de Derecho Canónico llama excomunión.
Todo agente pastoral debe asumir una postura de sencillez, de humildad y de celo
por la salvación de todos.
Estas cosas no son fáciles de decir. Las decimos movidos por un cariño
inmenso. Un cariño que hacemos extensivo a los grupos pastorales de nuestro medio.
Un cariño del que nadie puede dudar. "Que bien se yo la fuente que mana y corre, aunque
es de noche".
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Julio, 1999
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PÁJAROS EN VUELO
(Nota editorial)
Con el presente Boletín, Visitas Domiciliarias, se propone alcanzar, no dos, sino
varios pájaros de un tiro. Y no es que estemos faltos de municiones, Buenos y "curiosos"
son los artículos que se van acumulando en el "baúl de los recuerdos" esperando
¿cuándo no? Y ¿cómo no? Ver la luz. Por hoy, quedan en el tintero "Cambio de rumbo"
de Pedro Montalvo F. Y "Cumpleaños de un Enano" de Sara Rioja Sánchez. Testimonios
ambos sino aleccionadores, sí al menos, curiosos... Y quedan también, para una mejor
ocasión, los aportes de Margarita -ella es la "culpable"- Emilia, Esther, Ramiro y otros
muchos buenos colaboradores.
Son las circunstancias las que nos coobligan a cambiar ahora la puntería.
Los temas del Curso de Animación y Formación Misionera sobre "La Persona
del Padre", auspiciado por el Centro Diocesano de Misiones, (CEDIMIS) no pueden ser
silenciados para los miles de familias que integran Visitas Domiciliarias.
Menos aún cuando se trata de temas como "La Oferta del Perdón". Lástima que el
exiguo cauce de nuestro boletín no dé de sí para publicarlo todo y lástima, mas grande
aún, por no poder reproducir la vivencia de la correspondiente celebración titulada "La
Demanda del Perdón".
Entre los temas que desbordaron nuestras posibilidades editoriales, tenemos los
referidos a la fiesta de San Vicente de Paúl, fundador de la Congregación de la Misión nobleza obliga-; la referencia de la Semana Nacional de la Familia; el mensaje de la 5ta.
Jornada por la vida; los apuntes sobre el "trasfondo de los cursos de la Unión de Enfermos
Misioneros"; algo sobre los Ángeles, debido a la cercanía de la correspondiente fecha
litúrgica; una visión pastoral de la primavera; la referencia de un nuevo coro para la Ciudad
de Dios, camino a la caleta de San José; y algo que, consideramos sumamente valioso
y alec-cionador, como es el Informe de la colaboración, dada generosamente, por los
coros de Guardia Civil -San Isidro-Miraflores para "el altar de la Capilla Verónica Stack" de
Túpac Amaru. Estos coros hacen su donación después de cumplir con sus propias
obligaciones institucionales.
Tenemos entendido, que no es la primera vez, y que, merecerá siempre nuestra
felicitación.
Tampoco podríamos renunciar a nuestro cancionero. Sería como privarnos del aire
que respiramos.
Pero esto no es todo. Hay algo más. Hay otras noticias -pájaros en vuelo. De las que
nos gustaría darles algún alcance. Me gustaría hacerlo con precisión y con acierto, para
que, también ustedes, entrañables lectores, puedan comprenderlo en su justa dimensión.
Hemos sido testigo de que alguna de las advocaciones de nuestro medio, ha
cambiado hasta tres veces la fecha en su celebración. ¿Por qué? Nos gustaría saber el
motivo de tanto cambio en la fecha celebratoria de esta advocación mariana local.
Estamos convencidos de que, si las motivaciones de los cambios se originan en el
espíritu, las devociones crecen. Si están fundadas en intereses humanos y
subalternos, la devoción, o lo que creemos "devoción", hablando en chiclayano se va al
tacho.
“Siempre la claridad viene del cielo” dice un poeta de nuestros días. Y es bueno que
así sea decimos todos. Porque la claridad celestial, sólo la celestial, nos permite ver las
cosas en una dimensión mas amplia y, por ende, mas sensata, mas justa.
Las cosas! Nos permite ver las cosas! Por cosas entendemos, aquí y ahora, el
acontecimiento religioso, es decir las cosas que ligan o religan a Dios con los hombres y
28
que, son las que realmente nos interesan porque determinan nuestra trascendencia. Estas
cosas de Dios, cosas de los hombres de Dios, nos enseñan y nos llevan a navegar por el
"anchuroso" cauce de la Iglesia-Sacramento-universal de salvación y nos enseñan a ver,
al mismo tiempo, cómo ios riachuelos de nuestras devociones van a dar al lecho madre.
Esta claridad que viene de arriba nos hace ver, además, que dicho lecho o cauce no admite,
por su propia naturaleza, cambio de sentido, pues el depósito de la revelación ya esta
lleno. Como tampoco pueden cambiar de sentido los riachuelos de nuestras devociones. No
se los puede represar o cambiar de destino. Las afluencias de la vida cristiana eucarísticas,
quiera que son manifestación externa de amor y de fervor, se salen por sus fueros, eligen
su propio cauce... Tal fue lo sucedido con la devoción de la Medalla Milagrosa.
Las devociones, manifestaciones externas del amor y del fervor "interno", pueden
ser alimentadas y sostenidas y difundidas. Pero no pueden ser inventadas, ni mucho
menos "impuestas" en caso de que alguien haya tenido la osadía de inventarlas, cosa que
puede darse dentro de eso que llamamos "buena fe".
Como decía un filósofo-sicólogo: "por favor no empujen la corriente", Y si no lo decía
el, lo decimos nosotros. Cuando un producto no fluye con naturalidad, por las vertientes
del espíritu, y su oferta se hace en forma impositiva y hasta fanática..., termina por ser
rechazado. Aunque sea bueno.
Para Visitas Domiciliarias sería muy triste que alguien intentara detenerlas, o
deformarlas o someterlas a otras devociones.
Comprometámonos a evitarlo, fomentando nuestra devoción a María, bajo todas sus
advocaciones locales, de antes y de ahora.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Setiembre, 1999
...Y, A DIOS, LO QUE ES DE DIOS!
Lo primero que se me ocurre al presentar esta edición, es saludar, cordialmente, a la
"2000 años dichosa", María de Nazaret. Creo que es una feliz ocurrencia pues caminamos
por el primer mes del tercer milenio.
Como es de su conocimiento, la Devoción de las Visitas Domiciliarias de la Virgen
Milagrosa tiene un Reglamento que, a pesar de ser breve, le permite alcanzar los fines para
los cuales ha sido creada.
Debe ser de su conocimiento, también, que nuestra devoción está integrada en la
mas grande agrupación mariana del mundo: la Asociación de la Medalla Milagrosa:
Asociación que, a su vez, tiene también, un Reglamento y un Reglamento que cuenta con
la aprobación oficial de la Iglesia para todo el mundo. Nobleza obliga.
Hemos sido informados de las deficiencias que vienen produciéndose, no en la
marcha de los coros que, a Dios gracias, marchan bien, sino a nivel de coordinación o
de coordinadores sectoriales (Lambayeque, la Primavera, las Brisas), quienes, al
parecer, no están debidamente informados. Después de haber conversado, como Asesor
he creído oportuno y hasta necesario, exponerles las siguientes apreciaciones:
1a. Ya antes de formar su Coro, fue Usted informada de que Visitas Domiciliarias tiene
como objetivos fomentar y difundir la devoción a la Santísima Virgen, y propiciar el ingreso
de Cristo al corazón de la familia, con la visita mensual de la imagen de La Milagrosa. Es
por tanto una simple devoción popular de orden pastoral y sin fines de lucro.
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2a. La Devoción de las Visitas Domiciliarias no tienen función lucrativa alguna. Las
erogaciones que se hacen a efectos de financiar la imagen de La Milagrosa, su capillita,
las medallas que deben imponerse a todas las familias y a los miembros de cada familia,
los boletines, la Eucaristía que se celebra con motivo de alguna fiesta mariana o del
aniversario de la fundación del Coro, etc., deben ser voluntarias u opcionales.
3a. Tampoco puede utilizarse a las Visitas Domiciliarias como instrumento recaudador para
cubrir prestaciones de salud o para implementar capillas o templos parroquiales.
La colaboración, con las necesidades de la Iglesia es un mandato. Es el quinto
mandamiento de la Iglesia. Pero su obligatoriedad ema-na del hecho de ser
cristianos, no de pertenecer a Visitas Domicilia-rias.
4a. Las posibles erogaciones son patrimonio del Coro, de las 30 familias del Coro y no de la
Directiva sectorial, ni de la Celadora, ni del Sr. Párroco.
5a. La desafortunada decisión de algunas directivas de exigir a los responsables de los
coros (Celadores) el que se presenten a la Jornada con sus capillitas, para fiscalizar sus
alcancías, no es correcta. No tiene precedente alguno, ni puede justificarse, porque daña
lo mas íntimo de Visitas Domiciliarias y atenta contra la libertad de los Coros y de sus
integrantes.
6a. Algo que aquí podríamos calificar de grave es el hecho de haber removido de sus
funciones a los celadores que, a nombre de sus coros, acostumbran a participar en la
Jornada Mensual que la Directiva Central realiza, provisionalmente, en la Parroquia
San Vicente. Se ve a las claras que dicha remoción no obedece a motivos pastorales ya que
los coros se desempeñan con normalidad. Y si no obedece a motivos pastorales ¿a qué
otros motivos puede obedecer?. Es una remoción que nos lleva a pensar en cosas feas.
Todos los integrantes de las Visitas Domiciliarias deben ser libres y actuar en libertad.
De no ser así, la Devoción de las Visitas Domiciliarias no tendría atractivo. A modo de
consejo, sería bueno que provean la reposición de dichos celadores y que, en adelante,
para evitar desaciertos, utilicen los servicios de la Directiva Central.
Les comunicamos además:
1. Que si alguno quisiera darle otra finalidad a la Devoción de las Visitas Domiciliarias de
la Virgen Milagrosa, es libre de hacerlo, pero estaría equivocado, faltaría el respeto a la
Santísima Virgen y a las diversas familias que integran los coros, y estaría defraudando
la fe pública, en el orden religioso, al utilizar una institución, buena y conocida, para fines
desconocidos y seguramente "non santos".
2. Sugerirnos a quienes difundan la Devoción y estructuren nuevos coros que, una vez
formados, prescindan del factor plata y de todo tipo de erogaciones. Sería la mejor
manera de evitar ciertas tentaciones, que son muy criollas, pero que desvirtúan la eficacia
de VV. DD.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Visitas Domiciliarias
BUSCANDO AL HIJO y a los hijos
El viento acaba de llevarse las ultimas hojas del viejo calendario. Estrenamos año,
siglo y milenio. Todo a la vez. Somos testigos de excepción de un impresionante
momento histórico. Estamos aquí y ahora, y somos conscientes de estar aquí y ahora. Y
estamos alegres.
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Estamos aquí y ahora. Un aquí y un ahora que se sitúan en relación a un hecho. Un
hecho insólito y sorprendente. El hecho de la permanente Encarnación de Dios. El hecho
que salva al mundo y al hombre, porque uno y otro estaban perdidos.
Esta irrupción de Dios en el hombre y en el mundo es el hecho que nos permite
deletrear el sentido de la vida, el hecho que nos permite ver la dirección de nuestros pasos.
En ella, en la Encarnación, podemos tomar el pulso de la historia y del hombre. Y por
ella, podamos medir o apreciar la situación del hombre y de todos los hombres ya que
todo, y por tanto, todos, toman de ellas su latitud y su longitud.
Estamos aquí y ahora y no por azar ni porque nos haya tocado en suerte, como si
alguien hubiera sorteado los espacios y los tiempos. Estamos aquí porque Dios lo ha
querido y porque Dios lo quiere.
Visitas Domiciliarias tiene una gran experiencia de "este querer de Dios". Han sido y ojalá lo sigan siendo- mimadas por El.
Arropadas por esta predilección y conscientes de la importancia y del significado
de este momento histórico-cristiano, Visitas Domiciliarias han arribado a este "aquí" y a
este "ahora", después de haber transformado a todas las familias que las integran en un
"pueblo amado", un pueblo "bien dispuesto".
No están aquí por inercia, no estamos aquí por inercia, como dicen algunos analfabetos.
Hemos querido venir y hemos venido a pulso. Y hemos tenido que bregar duro para llegar,
superando obstáculos que, en su momento, nos parecían insalvables.
Pero eso sí, debemos confesar, no hay por qué ocultarlo y es por ello que
escribimos éstas páginas-, debemos confesar que, en el trayecto, a lo largo del camino,
alguien ha estado de nuestra parte. Ha sido nuestra Señora. Si la Señora no hubiera
estado de nuestra parte, las dificultades nos habrían tragado vivos, nos habrían arrollado
las aguas espumantes. Por eso al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios. La
Señora no ha escatimado sus milagros. Gracias a ellos hemos escapado, repetidas
veces, "como los pájaros de la trampa de los cazadores".
Y otro sí, confesamos que, no obstante las muchas epifanías que iluminaron
nuestras sendas, en alguna ocasión nos vimos precisados a “desandar el camino”.
Desandar el camino porque el Niño no estaba con nosotros ni entre los nuestros y a lo
mejor, ni en la caravana de turno. Desandar el camino es un poco doloroso y se hace
siempre con ansiedad, aún presumiendo que el Niño se nos zafó de las manos para
largarse y hacer los encargos de su Padre.
Al confesar nuestro descuido no pretendemos justificarlo. La verdad es que un
descuido lo tiene cualquiera, suele decirse. También María y José tuvieron que desandar
el camino y regresar a Jerusalén, la urbe monstruosa y seductora para dar con su Hijo.
María y José se vieron en la imperiosa necesidad de “buscar al Hijo que se les perdió”. En
el fondo todos sabemos que el Niño no se perdió porque estaba en la Casa de su Padre
que era también su Casa.
De éste breve episodio evangélico del Niño perdido brotan muchas y hermosas
lecciones. Lecciones que, las Visitas Domiciliarias saben de memoria y de estimativa.
Desde su experiencia personal y también como sugerencia susurrada por su propio Hijo,
María asume la tarea de buscar a los hijos perdidos a lo largo de todos los tiempos. Uno
de los métodos que utiliza para cumplir su tarea es el de ir casa por casa.
Visitas Domiciliarias se suman con María al mas grande quehacer mariano y se
comprometen a caminar con Ella. A caminar libre y alegremente, diciendo como Juan
Diego: De buena gana iré, Señora mía, de buena gana iré. (Entre paréntesis: por “esa
buena gana” Juan Diego, el de los coloquios con María, ha sido declarado beato).
Ni las 5,000 familias de las Visitas Domiciliarias, ni las celadoras, ni la Directiva o
Directivas deben ceder a la permanente tentación de la inercia. No sea que les pase lo
que le pasa a muchos fieles en ciertas procesiones multitudinarias en las que, ciertamente
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se va a donde se quiere ir, pero no es uno el que va; se lo llevan en volandas, lo empujan.
Y así no vale.
Al navegar por los ríos de la espiritualidad, que eso es lo que hacen las Visitas
Domiciliarias al acompañar a la Santísima Virgen para buscar al “Hijo que se le perdió”,
tengan en cuenta una recomendación que le escuché no se a quien ni sé dónde: “no
empujen la corriente”. Las corrientes impetuosas suelen ser pasajeras y hasta
devastadoras; las que, por el contrario, llevan el ritmo de la normalidad, son permanentes y
profundas.
No empujen la corriente.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
MAGNÍFICAT
El cristiano, inteligente y práctico, debe insertar, en el bienamado y atractivo hilo del
Jubileo, todas las manifestaciones o expresiones de su vida humana y cristiana.
No en vano peregrinamos y derribamos puertas para entrar en el templo santo de
Dios, para pasar de muerte a vida y no en vano la Iglesia distrae, del depósito de sus
tesoros, todo lo necesario para saldar las deudas contraídas por nuestros pecados y que
tantas penas nos causan.
Dentro de las expresiones, a insertar, están nuestras devociones.
Todas las familias de las Visitas Domiciliarias de la Santísima Virgen deben
subirse al tren del año jubilar. Y deben ponerse a cantar. Conocedoras de que están en
camino y de que van por buen camino, deben, a imagen de la Santísima Virgen, ponerse,
espontáneamente, a cantar.
Cada familia, cada integrante de la familia, debe entonar su “Magníficat”, su propio
canto.
Conversar con casi 5,000 familias es un placer indescriptible, una sensación
recién estrenada.
Pero es también una gran responsabilidad. Visitas Domiciliarias es una familia
numerosa.
Y esto lo decimos, no tanto por su edad multisecular ni por su extensión a nivel
católico-planetario, sino mas bien y sobre todo, por su rápido crecimiento en nuestro
medio, en Chiclayo-diócesis.
Daría la impresión de que nuestra devoción estaba acumulada y retenida, porque
con sólo abrir las compuertas y señalar su cauce, empezó a fluir torrencialmente y en todas
las direcciones.
Pero no por ello vamos a echar las campanas a vuelo. A pesar de contar con unos
153 coros, no por ello estamos presentes en todas las parroquias.
Como tampoco hemos logrado el nivel-ideal soñado de los 200 coros antes de
cruzar el umbral del tercer milenio.
No se trata de un consuelo de tontos, pero tenemos que decir: que no sería
decoroso alcanzar todos los ideales.
Es más saludable dejar siempre algunas puertas abiertas para tener opción a tomar
nuevos derroteros.
Por encontrarnos en un tiempo especial de gracia, con facilidades de pago, para
dejar la espuerta, retirar los hombros de la carga, algo así como “borrón y cuenta nueva”,
pasando a limpio toda nuestra vida... brota, imperceptiblemente, la tentadora pregunta:
-¿a qué ilusión nos vamos?
32
“A qué ilusión nos vamos” no puede ser una pregunta. Sería injusto formularnos una
pregunta así cuando conocemos, mas que de memoria y de estimativa, los anhelos, los
gustos y las predilecciones de Nuestra Señora, la Visitadora:
“Haced lo que El os diga”.
Por haberle hecho caso Ella a El, a Ella no le quedo otro remedio que cantar, porque
El, “hizo en Ella”, obras grandes.
Cantemos también, con Ella nuestro propio “Magníficat”. A lo largo y ancho de todo
el año jubilar.
Sabiendo, como todos sabemos, que aquí y ahora, cantar significa acompañarla de
casa en casa, de familia en familia.
Creo que a eso apunta el objetivo, uno de los objetivos del mini-Proyecto de La
Directiva para el año santo.
Gracias por haberme permitido entrar en sus hogares. Ella me lo ha pedido. Qué
harían ustedes en mi caso.
Mariana y navideñamente,
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
A FALTA DE PAN, BUENAS SON TORTAS
El dicho que dice que “las cosas no se hacen solas” suena un poco a frase hecha.
Pero no lo es. Y esto lo saben muy bien las hermanas de la Directiva de la popular Devoción
de las Visitas Domiciliarias de la Santísima Virgen quienes, a sus trabajos
acostumbrados, han sumado últimamente la Rifa de un feo y fofo, pero rentable e
interesante, Papá Noel. Una Rifa aparentemente exitosa pues, con lo obtenido en ella y con
una cantidad similar aportada por la Parroquia San Vicente, se ha podido obtener una
sencilla pero eficiente y práctica impresora Canon.
Esta impresora será utilizada, entre otros propósitos, para la confección del Boletín.
Era y es algo muy necesario para que el Boletín, el extraordinario órgano difusor de la
Devoción de las Visitas Domiciliarias de la Milagrosa, tenga una mejor y más atractiva
presentación.
Ojalá que los lectores valoren el esfuerzo de las entusiastas señoras de la
Directiva, aprecien la calidad del folletito, lo adquieran y lo difundan. Pueden estar seguros
que la Señora sabe compensar muy bien nuestros mini trabajos y servicios.
Y, claro está, debemos dejar constancia de nuestra felicitación a las hermanas de la
Directiva por la adquisición de la impresora, lamentando eso sí, que en la presente edición
no aparezca un número mayor de hermanas colaboradoras ni los aportes de otras
instituciones y grupos como los Cenáculos de Oración y Evangelización, el Centro
Diocesano de Misiones, la Legión de María y otros.
En compensación, al parecer, han querido ofrecemos algo muy importante como
son los derroteros por los que va a encaminarse la pastoral del año en curso y tal vez de
los años venideros, calcados dichos derroteros sobre la Novo Míllennio Ineunte de Juan
Pablo II y la Evangelii Nuntiandi de Pablo VI. A falta de pan, buenas son tortas.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Marzo, 2000
Asesor
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VISITAS DOMICILIARIAS DE LA VIRGEN MILAGROSA
Casi todas las expresiones populares se convierten en frases hechas. Y las frases
hechas, por su misma naturaleza, tienen una connotación despectiva; algo que debe
evitarse. Las frases hechas reflejan una cierta pobreza lingüística y literaria.
Pero se da el caso que las “frases hechas” reflejan también un poco de la
sabiduría popular. Y la sabiduría popular es algo grande, esté o no envuelta en “frases
hechas”. Tan grande que, a través de ellas, podemos asomarnos a las entrañas de las
costumbres y de los comportamientos. Y así lo que parecía “simples frases hechas” se
convierten en novedad y dinamismo.
Qué les parece si utilizamos una de esas expresiones o “frases hechas”, empleadas
generalmente y desde tiempo inmemorial, para señalar el inicio inmediato de una carrera,
de una tarea, de una postura, de una actitud?
¡A la una! ¡A las dos! ¡...a las tres! Así decíamos -así decían también ustedes, no lo
nieguen- al comenzar sus juegos y sus pequeñas empresas ¡A la de tres, va la vencida!
Todos sabemos qué es lo que debemos hacer el presente año, Año Santo, año
de gracia, año del jubileo, año de la Indulgencia plenaria, año de pasar a limpio nuestra
vida... Y todos sabemos que hay que hacerlo ahora, que hay que hacerlo ya. Todos
sabemos que hay que romper cepos y candados; los cepos y candados que el odio ha
instalado en los corazones de muchos. Todos sabemos que hay que abrir puertas y
ventanas en la vida de muchos para que puedan respirar y vivir...
Pero eso sí, sabemos también que no basta con saberlo de memoria. Es necesario
saberlo también de estimativa.
Con ella, con la estimativa, respaldada, un poco, por eso que llamamos sindéresis,
podemos llegar a descubrir que el instrumento numero uno para franquear las puertas de
los hogares, de los domicilios, son las Visitas Domiciliarias de la Santísima Virgen. De
franquear los corazones ya se encarga Ella, la Señora, la Milagrosa. ¡A la una! ¡A las dos!
¡A las...tres!
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Marzo, 2000
DE QUE ME SIRVE UNA CALLE QUE NO LLEVA A LA CATEDRAL
Cuando te vas por esos mundos de Dios siempre aprendes algo nuevo. Y si no
es nuevo -porque no hay nada nuevo bajo el sol- si, por lo menos, curioso.
Estamos en Lima, en nuestro Retiro Espiritual, Enero, 2000. En los ambientes del
Seminario Vicentino. El P. Honorio López, director del Retiro, nos invita a seguir
atendiendo “el negocio”, nuestro negocio. Por si alguno quisiera malinterpretar las cosas,
debo decirle que nuestro negocio es CRISTO. Y debo decirles, a titulo personal que es
un nego-cio redondo. Y lo que es más, les invito a poner en El todas sus acciones.
Entre las múltiples motivaciones y razonamientos para darnos en cuerpo y alma a
Jesucristo, nuestro gran negocio, me pareció de sumo interés y de expectante curiosidad
una especie de chascarrillo, puesto en labios de una desenfadada viejita católica rusa.
El chascarrillo está tomado de una película que se desarrolla en la no sólo atea
sino anticatólica Rusia.
La viejita camina por una calle buscando la Catedral. Algo deso-rientada, se acerca a
una casa y toca en una ventanilla. Los vecinos abren:
-Qué desea señora?
-Dígame -pregunta ella- esta calle ¿lleva a la Catedral?
-Los vecinos responden
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-No, señora, esta calle no lleva a la Catedral
-la viejita insiste y le contestan lo mismo:
-No, señora, esta calle no lleva a la Catedral.
La viejita, contrariada, se retira y dice en forma categórica
-¿De qué sirve una calle que no lleva a la Catedral?
Y, ahora, díganme ustedes ¿de qué sirve un retiro que no lleva a Jesús? ¿De qué
sirve un retiro, o una persona, o una calle, o un trabajo, o un amorío, o un pueblo, o una
jornada, o una cofradía, o un sacramento, o una oración, o una cosa cualquiera, por muy
valiosa y atractiva que sea, si no nos lleva a Jesús?
¿De qué sirve una calle que no lleva a la Cátedra!?
Sabiendo como sabemos que Jesús es nuestro “nuevo centro”, nuestro “gran negocio”,
todo lo que somos y tenemos, todo lo que nos rodea y concierne, debe llevarnos a El.
Repicamos una y mil veces la inmensa frase de la viejita: -Y de qué sirve una calle que
no lleva a la Catedral”.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Febrero, 2000
CONFESION GENERAL
Tengo que empezar diciendo que lo que voy a decir es verdad, pero no toda la
verdad.
Confieso que en nuestro empeño por difundir la hermosa y atractiva devoción de las
Visitas Domiciliarias de la Santísima Virgen, hemos tenido algunas desilusiones y fracasos.
Digo “nuestro empeño” porque, junto al mío, va providencialmente unido y el de las
integrantes de la actual Junta Directiva.
Desilusiones y fracasos. Hoy, quedan todavía, muchos lugares, parroquias, caseríos,
calles, hogares en los que no se han establecido bien las Visitas Domiciliarias. Y esto
constituye, para mí al menos, una vergüenza, un fracaso.
Y si la palabra “fracaso” no es la más apropiada para describir esta situación, tienen
ustedes permiso para cambiarla por cualquier otra, pero eso sí que se relacione con el
corazón, ya que fue en el corazón donde se originó el dorado y adorado sueño de que, a
partir del 2000, se abrirían todos los hogares, más aún todos los corazones, para que la
Señora pudiera entrar y salir a su antojo.
Claro que debo confesar también que, en los fracasos habidos, no todo ha sido
fracaso, no todo ha sido negativo. Paradójica pero felizmente, con los fracasos, nos han
llegado oportunas y necesarias lecciones para enmendar rumbos y reforzar equipos.
Y no es que no trabajemos en equipo ni vayamos por buen camino. La actual
directiva es un “equipo de primera división” como para una liga de campeonas. Y el
camino no es otro que el señalado en el Reglamento de las Visitas Domiciliarias.
Lo que queremos decir es que nos vemos en la imperiosa necesidad de ampliar las
bases del equipo. No creo que la Señora se niegue a aceptar nuestra invitación, aunque
no sea mas que para presidir nuestras correrías. Con ella siempre, siempre a nuestro lado,
podríamos avanzar más y mejor.
Y, si ella acepta a integrar nuestro equipo, no creo que, por ejemplo, los señores
sacerdotes, párrocos y vicarios, agentes de pastoral, los católicos, se nieguen. Sería
como decir que no quieren trabajar con Ella.
Es indudable que con Ella y con ellos podríamos avanzar más y mejor.
Al fin y al cabo, Ella es la primera interesada y ellos los primeros beneficiados.
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En el año de gracia del Señor tenemos el compromiso eclesial de romper cepos y
cerrojos y candados. Y es tarea específica de las Visitas Domiciliarias de la Santísima
Virgen abrir las puertas de los hogares y los corazones de los que en ellos viven.
Pero sólo podrían hacerlo si contratan los servicios de la que es puerta y camino, de
la que es milagrosa.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Febrero, 2000
... PARA CAMINAR SIN TROPIEZOS
La devoción de las Visitas Domiciliarias se inserta en un conjunto de instituciones
marianas enmarcadas en la ASOCIACIÓN DE LA MEDALLA MILAGROSA, cuyos
Estatutos datan de muy antiguo (1909) y que acaban de ser actualizados (1998). Dichos
Estatutos fueron publicados en nuestro Boletín de Visitas Domiciliarias. Nos complacemos
en ofrecerlos de nuevo en las páginas 19-22.
La devoción de las Visitas tiene, como es natural, una estructura para su difusión y
mantenimiento. Una estructura que es sencilla y paradójicamente eficaz. En el supuesto,
claro está, de que sus integrantes se muevan sobre la base de virtudes elementales
cristianas-vicentinas como son: humildad, sencillez, mansedumbre, mortificación y celo por
el bien y la salvación de todos.
En la página 11 y ss. del presente Boletín, encontrarán los lectores detalles de su
estructura.
En aquellos países o lugares en los que la devoción no cuenta con bienes raíces ni
con “mecenas”, los pequeños gastos que puedan producirse se cubren con los aportes,
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siempre voluntarios, de las familias integrantes de los Coros o de cada Coro. El orden
lógico en el empleo de dichos aportes es el siguiente:
1. Compra de la imagen y de su capilla
2. Boletines y hojas relativas a la devoción
3. Medallas para imponer a todas las familias y a todos los
miembros de la familia
4. Emolumentos requeridos por las celebraciones litúrgicas
festivas o aniversarias.
5. Si, después de cubiertos todos los gastos relativos a la
devoción, quedara algún remanente en la caja chica, puede utilizarse en
obras de caridad, previa consulta a las
correspondientes directivas.
A este respecto, es muy sabio ofrecer, tanto a los Integrantes del Coro, como a
los responsables de la organización, un Informe periódico.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Diciembre, 2000
MAGNÍFICAT. EL CANTO DE MARÍA
“Voy a romper la pluma. Ya no la necesito. Lo que mi alma siente, ya no lo se
decir...”
Así dijo uno. Y a mi no me queda otro remedio que decir lo mismo. Esta especie de
incapacidad para decir las cosas y decirlas bien es como una enfermedad que, al
parecer, llega con los años. Claro que hay temas y temas. A veces, sí; a veces, no. Lo malo
del caso es que a mi me afecta siempre que trato de decir algo nuevo, algo impresionante
sobre la Santísima Virgen...
En una de las últimas charlas del curso de animación y formación misionera del año
próximo pasado, o sea del siglo pasado, se me ocurrió de pronto, decir que la Iglesia, es
decir nosotros, debíamos titular el Año 2000 como el “Año del Magníficat”. Pues bien, a
pesar de que la concurrencia era culta -no en vano había recibido tres años de estudio de
relaciones trinitarias- su respuesta podía resumirse así: “no se escucha, padre”.
Como dato aclaratorio que obra en mi favor, tengo que informarles que, de más de
trescientas versiones musicales del “Magníficat”, había seleccionado unas veinte y se las
había ofrecido en bandeja para su degustación. Era un platillo apetitoso que, con
sabores épicos y líricos y dramáticos, contenía pequeñas pero hermosas presas
polifónicas, clásicas, gregorianas, populares hasta desembocar en una especie de rock.
“Predícame cura, predícame, fraile; por un oído me entra y por el otro me saile”.
Definitivamente la pluma ya no me sirve para decir lo que siento. No me lleva a vencer ni
a convencer a nadie. Pensaba yo, creía yo, que “el año del Magníficat” estaría
impreso en todos los documentos oficiales, en los llaveros, en las estampillas, en los
corazones....
Tenía mis buenas razones para soñar y poner el Año 2000 como el “Año del
Magníficat”. Porque, fíjense bien, si la Santísima Virgen tuvo sobrados motivos para
agradecer y engrandecer y clamar y proclamar y cantar al Señor por las maravillas que le
hizo -y nos hizo- ya antes de llegar... ahora, a más de dos mil años de su llegada, el cúmulo
de los beneficios recibidos debía llevarnos a entonar un inmenso, total y
alborozado “Magníficat” durante todo el año.
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Quienes leen la Sagrada Escritura desde la sensibilidad poética y desde una clave
musical, tienen -tenemos- la impresión de estar asistiendo a un recital. Se oyen cantos
por doquier, variados y hermosos, como que han sido inspirados por Dios. Los hay épicos,
como el que canta Moisés y su coro -quiero decir su pueblo- “cantemos al Señor,
sublime es su victoria”. Los hay líricos y en tono menor, como el de aquellos que cuelgan
sus cítaras de los sauces, junto a los ríos de Babilonia. Los hay populares y algunos hay
muy personales, tipo balada. Hay otros que tienen música más allá de las palabras:
“Benedictus”, “Nunc dimittis”...
Pero el mejor de todos y de todos los tiempos es uno que fue compuesto por Ella y
para Ella. Para ser cantado por Ella, por nosotros y por todas las generaciones. Es el canto
de María, el “Magníficat”.
El canto de María, el Magníficat, debe ser nuestro canto, ya que todos hemos
recibido del Señor gracia tras gracia. Del Señor que también ha hecho con nosotros y
para nosotros “obras grandes”.
Y, pues que María aceptó, espontáneamente, ser la primera voz, aceptemos
también nosotros configurar un gigantesco y armonioso coro:
"Gloria al Padre y al Hijo,
Gloria al Espíritu Santo
como era al principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén
Si vuelven a decirme: “no se escucha, padre”, fijo que rompo la pluma.
P. Enrique Mangana López C. M.
Asesor
Abril, 2000
PRESENTACIÓN DEL BOLETÍN DE NOVIEMBRE
Confieso haber tenido que solicitar permiso para hacer la presentación de este
Boletín de Noviembre, el “del mes de La Milagrosa”. Y confieso también que, la Comisión
de Redacción me otorgó, al instante, la "buena pro"... De buena gana, fue la respuesta.
No hay como hacer las cosas de buena gana. Para que salgan bien. De buena gana,
quiero yo por tanto hacer la presentación de estas páginas porque al hacerlo estoy
exteriorizando mi devoción y estoy reconociendo, en voz alta, la encomiable tarea de
cuantos se dedican a la difusión de la popular devoción mañana, conocida como "Visitas
Domiciliarias".
El Boletín se ha mantenido vigente, en cuerpo y alma, a lo largo de muchos años,
no obstante ocasionales cambios de asesoría. Ha constituido, en todo momento, uno de los
mejores Instrumentos de difusión de la devoción mariana y de cohesión de los diversos
grupos marianos, llámense asociaciones o movimientos.
Para ello nació, en definitiva, nuestra minipublicación.
Pero era ese un objetivo no excluyente y rápidamente, asumió y aglutinó otros
propósitos.
Y empezó a correr como una casa rodante. La casa de la Señora. Nos pareció
escuchar sus deseos: “Quiero que mi casa esté abierta al mar y a la voz del viento y luz,
que haya luz por todas partes”.
Y hemos mantenido la casa abierta, el Boletín abierto.
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Abierto a todas las expresiones particulares de la devoción mariana, a los
pintorescos testimonios de los cambios operados en muchas familias por la presencia de la
Señora; abierto a todas las instituciones marianas del entorno diocesano y mas allá.
Abierto a noticias y efemérides a nivel eclesial. Y, abierto a entusiastas colaboradores
perio-distas, muchos de los cuales ensayaron, en el Boletín, sus primeros pasos.
Esa apertura, no obstante la precariedad de sus ediciones y un archipiélago de
defectos de impresión, se convirtió en la piedra de toque para su acogida. Y es que el
boletín de las visitas domiciliarías de la santísima virgen ha querido y ha sabido
canalizar el torrente del fervor mariano que brotara, en el año a Ella dedicado.
La presente edición, Noviembre 2000, ofrece a los 167 Coros (5,010 familias
aproximadamente), los temas propios del año sobre la Eucaristía y su dimensión misionera
y otros muchos aspectos de relativo interés.
Entre ellos, una brevísima semblanza o acopio de datos bibliográficos del P. Roberto
P. Maloney, Superior General de la Congregación de los Padres Vicentinos y de las Hijas
de la Caridad, extractados de una entrevista realizada por los PP. Turati y Esparza al
mismo P. Maloney, aparecida en Anales de la C.M., en octubre de 1992. Semblanza que
hemos calificado de brevísima porque, a decir verdad, desconoce todo lo actuado por el P.
Maloney al frente de la Congregación, así como sus escritos y decisiones.
Aparecen además los acostumbrados aportes del P. Ramiro Fernández, ex
Vicario General de la Diócesis, esta vez sobre la oración y con estilo azorinesco; aparecen
las espigas de la sutil espigadora, Sra. Emilia Olivera de Dávila; aparece una sorpresiva
página de Anicia Moya; aparece la piadosa invitación de la Secretaria de los Jueves
Eucarísticos, Sra. Victoria Cornejo, a celebrar el 13° Aniversario del Centro Piloto “San
Vicente .de Paúl”; aparece la reconfortante Relación de dos nuevos coros; y aparece el
Calendario Litúrgico de Noviembre y una copiosa antología-cancionero, con el Adviento y la
Navidad al fondo.
En la semblanza biográfica del Superior General de la Congregación de los Padres
Vicentinos no se consigna un dato de interés para quienes trabajamos en la obra de las
Visitas. Y éste dato es que, el P. Maloney vendrá, en visita canónica a la Comunidad de
Padres Vicentinos de Chiclayo, el día 17 de noviembre. Vendrá acompañado del P. José
Ignacio Mendoza, Vicario General de la C.M. para los países de habla hispana. La visita
del P. Maloney será breve. Vendrá a Chiclayo en el primer vuelo de la mañana y regresará
a Lima en el último de la tarde. El P. José Ignacio permanecerá algunos días más.
Para Visitas Domiciliarias es un placer darles la “bienvenida” y desearles que su
visita, aunque breve, sea feliz.
Lo que sigue no en el boletín sino en ésta nota, es una invitación.
La formula la Directiva de las Visitas. Las hermanas, animadas por el aceptable
resultado económico de su actividad, decidieron reparar y retocar la Imagen de La
Milagrosa que preside nuestras Jornadas y que, al correr de los años, ha venido
deteriorándose.
La reparación ha sido confiada a la Central de Esculturas Generales “Jesús
Nazareno Cautivo” de Monsefú, siendo responsable el Sr. Jaime A. Cachay Arana.
En la seguridad de que el trabajo de reparación estará listo en breve, se ha
programado la bendición y entronización para el mismo día de su fiesta, 27 de Noviembre.
La bendición se hará a hrs. 5:30 p. m. y, después de la Eucaristía, se trasladará la
imagen, en forma procesional, por las calles perimétricas del Colegio Manuel Pardo y la
Parroquia San Vicente, para ser entronizada en el Salón Parroquial al término de
recorrido.
Las hermanas están entusiasmadas en la organización de esta -para mí “inusitadafiesta y se sienten seguras de una afluencia masiva de fieles y de grupos marianos, no
solo a la fiesta, sino a toda la Novena. Es muy posible que hayan tenido alguna
conversación al respecto con la Señora.
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A título personal, tengo que decirles que Ella, La Milagrosa, les quiere
“incondicionalmente” y que yo también les quiero, pero no puedo demostrárselo si no están
presentes...
Al término de la entronización, habrá un compartir. Pero no creo que eso les llame la
atención.
De todos modos, un abrazo a todos.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Noviembre, 2000
A BUEN ENTENDEDOR...
“A buen entendedor, pocas palabras”, reza un refrán castellano. Y yo entiendo que
todos los integrantes de las VISITAS DOMICILIARIAS son buenos entendedores. Así es
que, pocas palabras.
VISITAS DOMICILIARIAS DE LA VIRGEN MILAGROSA constituyen una devoción
popular mariana que quiere, con los buenos oficios de una Buena Madre, abrirle las
puertas de los hogares cristianos, y de los no tan cristianos, a su propio hijo que, es
también, un Hijo de Dios.
No debe extrañamos que los hijos quieran entrar en su casa. No debe extrañarnos
que el Hijo de Dios quiera entrar en su casa, en sus casas, aunque nosotros las hayamos
alquilado, por el momento a otros.
“Abran las puertas al Redentor”, nos recomienda Juan Pablo II, desde el pregón
inicial de su carta “El Redentor del hombre”. Y de esta recomendación se infiere,
aunque sesgadamente, que “el Señor está a la puerta y nos llama”. Sería una estupidez de
nuestra parte y una crasa falta de delicadeza el negarnos a abrirle. Sería algo así como
un “pecado de diplomacia”. Tanto mas estúpido y poco diplomático, cuanto que es una
dama -y ésta de alta alcurnia- la que nos lo pide.
Desde aquella primera visita domiciliaria que realizó la Santísima Virgen a su prima
Isabel hasta la fecha, ella, la Señora, por siglos, por más de veinte siglos, ha venido
cumpliendo la tarea de abrir las puertas de los hogares y las puertas de los corazones.
Sabemos de memoria y de estimativa que Dios ha necesitado de María para visitar
esta pequeña y pobre tienda de campaña que es el mundo. Ella fue quien le abrió la
puerta. Colaborar con Ella en la tarea de las Visitas abriendo las puertas y los corazones
para que su Hijo venga a los suyos y le reciban bien, es una tarea excelsa y es, al mismo
tiempo, una bendición.
Y bendición es la que impartimos jubilosamente a todos los hogares de las Visitas
Domiciliarias.
No se olviden que el Señor “está a la puerta y llama”. Llama no para cobrarnos
el alquiler sino para restaurar “nuestra casa” por dentro.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Diciembre, 2000
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SI DE CONGRESOS MISIONEROS SE TRATA
“Sálvanos, Señor, del folklore y del turismo. “Es la primera súplica que debemos
hacer, cuando de Congresos Misioneros se trata.
Pero no es la única. Debemos pedir también y en forma simultánea, una buena
porción de entusiasmo y de seriedad que son el equivalente de la honestidad profesional.
Es algo que debemos pedir para todos pero, en estos momentos, debemos pedirlo,
y con urgencia, para los responsables o responsa-balizados de acometer tamaña empresa,
así como para los beneficiados con los acariciados frutos de la misma, me refiero a esas
3,500 personas, especialmente convocadas al Congreso. Dicha convocatoria soñaba en
los comienzos del proyecto del Congreso, con los 10,000; bajó luego, por una lógica
elemental a los 5,000 y, después de desgañitarnos, sin que nadie nos lo pidiera, quedó, se
fijó, despiadadamente, en los 3,500 participantes.
A “ojo de buen cubero” podría apreciarse que las cosas van despacio y que, en
algunos frentes -si es que las antenas no nos fallan-, parecen estar detenidas.
Ya sabemos que, para justificarnos, podemos acudir a eso de que “las cosas de
palacio van despacio”, pero no es ese nuestro caso. Y además, cuanto más alto es el
número de invitados, tanto mayores son las exigencias. No sería dable, una vez asumida la
responsabilidad, ponerse a inventar, ya desde ahora, razones que pretendan justificar la
ineficiencia y la improvisación.
Nuestra institución ha recibido algunos materiales de trabajo: El texto base,
elaborado, al parecer, por Obras Misionales Pontificias, el afiche con el logo, el himno y la
oración y algunas fichas para las familias anfitrionas.
A propósito de las “familias anfitrionas”, las familias de Visitas Domiciliarias, que
son mas de 5,000 a la fecha, tienen todas el título de familias anfitrionas, porque reciben
frecuentemente a dos huéspedes. Primero a Ella y luego a El.
Para que puedan recibir a otros, tienen que ser formadas e informadas, por la
correspondiente Comisión de acogida del Congreso.
¡Qué razón tenia Ortega y Gasset al decir que los árboles impiden ver el bosque!
Providencialmente nos encontramos fuera del bosque.
P. Enrique Mangana López, C.M.
Asesor
Abril, 2003
EXCMO. MONS JESÚS MOLINE LABARTA
BREVÍSIMA PRESENTACIÓN
Monseñor Jesús Moliné Labarta nace el 29 de Enero de 1939 en La Puebla de
Alfindén (Zaragoza, España).
Ni pensar que el niño Jesús pudiera percibir la gravedad de la tormenta que se
cernía sobre los cielos de su terruño, pues no eran precisamente tiempos pacíficos
aquellos. Pero lo cierto es que, a pesar de la tormenta, o tal vez a causa de la misma, el
Señor de la vida y de la historia puso en él sus ojos y lo llamó. Y Jesús lo escuchó.
Estudió secundaria en el Seminario Menor de Zaragoza y los cursos de Filosofía y
Teología en el Seminario Metropolitano de Zaragoza.
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Ordenado sacerdote el 28 de Marzo de 1965. Doctor en Derecho Canónico por la
Universidad de Navarra (España)
Vino al Perú en 1973; para desempeñarse como catedrático en la Universidad
de Piura. Al mismo tiempo se encargó de una Parroquia en esta diócesis. En Piura trabajó
también en el Tribunal Metropolitano.
Desde 1991, fue profesor de Teología y Filosofía en el Seminario "San Juan
María Vianney" de Piura; a la vez, continuaba las clases en la Universidad de Piura y
atendía el sector de Los Algarrobos. Y en 1993 el Arzobispo le nombra Rector.
El 8 de febrero de 1997 se hizo público su nombramiento por S.S. como Obispo
Coadjutor de Chiclayo. Fue ordenado en el Santuario Nuestra Señora de la Paz el 19 de
marzo de 1997, Solemnidad de San José.
Al fallecer Monseñor Ignacio María de Orbegozo y Goicochea, el 4 de mayo de
1998, pasó a ser el Obispo de Chiclayo (*)
Estos datos, por mas que se amplíen y se adornen, no pueden revelar la grandeza
y la identidad de una persona. Son las obras, a tenor de lo que el Señor señala en el
evangelio, las que nos permiten asomarnos a la identidad de Monseñor Jesús.
¡Qué pasos habrá tenido que dar Monseñor Jesús, qué renuncias habrá tenido que
hacer para imprimir un nuevo rostro, una nueva imagen a la Diócesis de Chiclayo!
Es muy posible que la doctrina paulina, la de “hacerse todo a todos para ganar, al
menos a algunos”, haya estado presente en el diálogo y el trato que Monseñor dispensa
tanto a particulares como a instituciones.
Pero como solemos decir, “las cosas no se hacen solas”. Y el escenario puede
revelarnos algo de su trabajo.
La diócesis de Chiclayo, comprendida por el departamento de Lambayeque más la
provincia cajamarquina de Santa Cruz, tiene una extensión de 19 mil, 226.41
kilómetros cuadrados, sobre los que habitan casi millón y medio de personas, en su
mayoría católicos.
Creada hace 42 años, su primer obispo fue Monseñor Daniel Figueroa Villón, que
inició los proyectos de la vida de la Diócesis; consolidándose éstos con su sucesor,
Monseñor Ignacio María de Orbegozo y Goicochea.
Hoy, la Diócesis chiclayana está bajo la responsabilidad de Monseñor Jesús Moliné
Labarta, que viene impulsando las labores apostólicas en la jurisdicción eclesiástica
(42 parroquias), en fiel cumplimiento al mandato de Jesucristo y la Iglesia Católica.
Queriendo sintetizar esta brevísima presentación de Monseñor Jesús, no estaría
mal recordar y aplicar la triple dimensión que un Patriarca Cardenal de Alejandría,
vicentino, señala para todo obispo y para todos los obispos:
a) El Obispo, servidor del Evangelio.
b) Obispo Padre y Amigo de los Sacerdotes y
c) El Obispo, Servidor de los Pobres.
Es muy posible que esta imagen de Monseñor Jesús sea muy personal. No se
impacienten. En la visita pastoral tienen ocasión para redibujarla.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Junio, 2002
(*) Nota:
Los datos biográficos nos han sido proporcionados por el P. Rolando Monteza,
Secretario del Sr. Obispo.
42
ZAPATERO A TUS ZAPATOS
La expresión “zapatero, a tus zapatos” ha sido considerada o valorada como un
“refrán” pero, a mi parecer debería otorgársele una categoría superior. Algo así como de
“axioma” o “proverbio”. O más aún, debido al desorden de valores que nos aqueja en la
actualidad, debería ser tenido, sino como ley, sí al menos como disposición transitoria.
Ello nos permitiría, evitar que haya tantos matasanos (médicos) “titulados” o tantos
conductores (choferes de carros) que, sin pedírselo nosotros, nos llevan rápidamente
a la otra.
Ni los “mozos” estarían tan dispuestos a asumir la presidencia del club o de la
empresa o de la república.
Si “el .zapatero a tus zapatos” tuviera una categoría, digamos “ligeramente
superior”, no tendríamos que soportar a tantos pillos o avivados que asumen y ejercen
profesiones para las que están descaradamente impreparados llegando a asumir incluso
“carteras sin carreras”.
Hay, “internos”, tristísimo es decirlo, gentes que no saben lo que es una
propedéutica bíblica y sientan cátedra de iluminados. El desorden de los valores
humanos y religiosos es tan grande en estos momentos, que no podemos menos de
exclamar, no a modo de refrán sino de jaculatoria ¡que la Virgen nos ampare y San
Pedro nos cobije!
El refranero español considera el “ZAPATERO, A TUS ZAPATOS” como una
frase adverbial, con que se aconseja que cada cual no juzgue sino aquello que
entiende, o que no saiga de su esfera.
No faltan quienes, tal vez porque la expresión tiene un origen sixtino, vale decir
papal, le restan valor y la tildan de inhibidor de iniciativas y de creatividad.
Decía Dámaso en un poema: “oh libertad, cuántos crímenes se cometen en tu
nombre! Moralmente, nunca es permitido meter la hoz en mies ajena, pero es que,
además, se producen innecesarios e innumerables descalabros de cabeza.
El zapatero del Papa Sixto, como zapatero, era “buenazo” pero, cuando tuvo la
desfachatez de intentar sustituir al Papa en su cargo, lo hizo tan mal, tan mal... que tuvo
que salir corriendo y casi pierde los zapatos.
¡Zapatero a tus zapatos!
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Setiembre, 2001
VIRGEN SINGULAR
Apuntes de las canciones
de antaño, 1
“...Virgen singular,
Reina esclarecida,
seas bienvenida
a este humilde hogar”
El P. Eugenio Escribano, C. M., es decir vicentino, autor de una obra maestra de
espiritualidad “Meditaciones Sacerdotales”, tenía alma de poeta, y como tal, escribió
una de las canciones mas emblemáticas de las Visitas Domiciliarias de la Santísima
Virgen, con el título de “Virgen Singular”. La música fue compuesta por L. Villalba de la
Orden de San Agustín.
Difícilmente podría sospechar el humilde P. Escribano la popular acogida de su
letrilla en cientos de miles de hogares marianos de habla hispana.
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Lo que apuntamos arriba “Virgen Singular, Reina esclarecida, seas bienvenida a
este humilde hogar” es atribución del solista, pero como respuesta y ratificación, responde
el Coro, sin dejar lugar al silencio:
“Virgen Celestial,
Reina esclarecida,
seas luz y vida
de todo mortal”
Las estrofas, hasta siete en total, van entretejiendo todo un rosario de piropos o
florecillas que brotan de un corazón enamorado de la Señora. Todas ellas concluyen
con la espontánea y delicada súplica que proclaman los miembros de la familia, de toda la
familia y de todas las familias: ...”seas bienvenida a este humilde hogar”.
Tres botones de muestra:
...Flor de las mujeres,
ramo de azucenas,
freno en los placeres,
bálsamo en las penas,
aura que serenas
el furor del mar...
Seas bienvenida
a este humilde hogar!
...Tu eres nuestro amparo
y el mejor consuelo.
Tú, e! radiante faro
que nos guía al cielo.
Tú, nuestro modelo,
tipo y ejemplar...
Seas bienvenida
a este humilde hogar!
...Portan altos modos,
Tu poder rebosa,
que te llaman todos
“Virgen Milagrosa”
no se habla otra cosa
en todo el lugar…
Seas bienvenida
a este humilde hogar
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Noviembre, 2001
44
MARÍA. MADRE DE LA ESPERANZA
“...que nos consuelas y acompañas
cuando todo lo terreno se derrumba
y nos abandona”
(“Pastoral de la esperanza
cristiana” V.G. Manzanedo (Pág. 131)
La palabra esperanza me lleva inevitablemente al ámbito familiar. Esperanza,
abuela. Esperanza hermana. Esperanza sobrina y muchas Esperanza mas en una y otra
orilla. Muchas Esperanza, pero no tanta esperanza, porque la esperanza es una
virtud y una virtud teologal, pero, como toda virtud, anda bastante escasa. Hasta daría
la impresión de que, en nuestros días, son los desesperados los que llevan la
delantera.
Todos sabemos que, los desesperados son los menos, pero como gritan mas,
nos quieren hacer creer que ya estamos viviendo la famosa “Hora 25”, es decir la hora
en la que ni un Mesías podría ya salvamos.
El autor de “La Hora VEINTICINCO” reflejaba la situación de la sociedad en las
postrimerías de la Segunda Gran Guerra, y describía la situación de impotencia del ser
humano ante una sociedad descristianizada y, para colmo de males,
deshumanizada, productos lo uno y lo otro, de la acción devastadora de los cuatro
jinetes del Apocalipsis.
La desesperanza o desesperación tienen, en nuestros días, otras raíces y otros
colores, aunque los frutos sean los mismos.
Las bestias apocalípticas aparecen ahora como “amansa-das”, son “nuevas”,
“recién estrenadas”. Les damos el atractivo y pomposo nombre de “instituciones
tutelares de la sociedad”. Pero, como dice el dicho -y no se lo tomen a mal porque en
el fondo todos pensamos lo mismo- “del dicho al hecho hay un gran trecho”.
Utilizando términos ultracultos: “Quam mutatus ab illo Héctore” o también “Ubinam
gentium sumus” o también “Quam repúblicam habemus”.
Tal vez a las personas que son ultra respetuosas de la auto-ridad, les parezca
una irreverencia tratar a las instituciones tutelares de “bestias apocalípticas”. Vamos a
suavizar la expresión, recu-rriendo a nuestra reservas de la cultura latina y diciéndoles,
tan solo, “corruptio optimi, pessuma”.
Por inercia, somos propensos a exagerar las cosas. En el presente caso somos
testigos de que la realidad, es decir, el sufrimiento de personas con nombres y apellidos,
es muy superior a la suma de todas las exageraciones.
No pocas veces, acudir a esas instituciones que calificamos de tutelares, y que, lo
son, en apariencia, equivale a meterse en la boca del lobo. Esto es válido sólo para quienes
hemos visto al lobo. Normal-mente a estas instituciones se va por lana, presionados por
una nece-sidad jurídica o procesal o arbitral, y regresa uno “trasquilado”. El hecho de no
encontrar tutela, en donde uno necesariamente la esperaba..., produce desilusión,
desengaño, sorpresa, rabia, impotencia. Una impotencia tal que conduce inevitablemente
a la desesperación a través de un pasillo de gritos y de llanto.
Tan sólo la presencia de factores religiosos desde la vivencia cristiana, podría
significar un respiro. Un respiro que no pasaría de ser en el mejor de los casos, una
bocanada de ahogado, ya que estas situaciones-límite arrastran a las personas al, no
tan demoniaco, campo de la irracionalidad.
Consciente de esta corrupción de las “tutelares” y pensando en quienes se
encuentran en el cuenco de la exclusa, alguien bajó estos apuntes del Internet:
“La esperanza fue una virtud muy propia del pueblo de Israel, que por largos siglos
vivió en la expectativa del Mesías.
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El gran ejemplo de esperanza de la Virgen lo encontramos, ante todo, en el
momento de su augusta soledad, después de la muerte del Señor. Ella, segura de las
promesas reiteradas de Jesús de que había de resucitar, y segura como nadie del auténtico
valor de la Redención, y del mensaje de Jesús, sufrió la amargura de su desolación en
medio de la esperanza sobrenatural del triunfo de su Hijo divino sobre la muerte, sobre el
pecado y aun sobre la perfidia de los suyos.
La Virgen Madre de Dios invita a todos los cristianos a seguir el ejemplo de su
esperanza en las promesas divinas, a pesar de los aparentes fracasos que la vida cristiana,
ante la creciente corrupción, pudiera hacer ver. Uno de los más frecuentes motivos de
devoción a María es precisamente la esperanza y la inmensa confianza que su valimiento
infunde en medio de las dificultades de la vida terrena. Al saludarla en la “Salve” como
“Esperanza nuestra”, debemos pedirle no solamente que ella sea nuestra esperanza, sino
también que nos enseñe a imitar su inquebrantable confianza en las promesas divinas;
asimismo, en la oración del Avemaría, el cristiano pone su esperanza en Ella para que sea
su intercesora “ahora y en la hora de nuestra muerte”.
Yo lo rubrico todo y mas.
Atentamente.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Abril, 2001
DE LA MANO CON LA LOCA DE LA CASA
Santa Teresa de Jesús calificaba a nuestra imaginación como la “loca de la casa”,
como queriendo decirnos que no debemos dejarnos conducir por ella ya que su proceder
no es muy cuerdo que digamos.
Este nombre con que Santa Teresa bautiza a nuestra imaginación como la “loca
de la casa” es ciertamente inmejorable. Por algo Santa Teresa era especialista en castillos
y moradas y vericuetos interiores.
Creo, sin embargo, que no todo está falto de cordura en la imaginación. Creo que
hay en ella -hablo por experiencia, no de memoria- creo que hay en ella una súper lógica
casi automática, inquietante y desconcertante a la vez.
Al seleccionar, hace unos días, las canciones para la Reunión del Centro
Parroquial de Misiones, topé con una “canción a la Virgen” que decía:
Madre de los pobres,
los humildes y sencillos,
de los tristes y los niños
que confían siempre en Dios....
El simple título de la canción me presentó como en pantalla, pero en tiempo
subliminar, a una buena cantidad de pobres de la parroquia, de madres pobres de la
parroquia y de madres de los hijos pobres de !a parroquia.
Pero la cosa no quedó ahí. Casi inercialmente estaba contemplando la situación de
todo un pueblo que sufre, y como en recuadros de la gran pantalla, aparecían - ¡qué loca es
la imaginación!- la imagen y las palabras de los señores candidatos en campaña para el
Congreso y la Presidencia de la República,
Conservando, siempre en primer plano, el titulo de la canción, “Madre de los
Pobres”..., me dejé ir hasta donde la loca de la casa quiso conducirme.
Madres de los pobres y madres de los hijos pobres, les tengo una noticia. Pero no me
vayan a tratar de cruel.
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A ojo de buen cubero y, visto el toro desde una barrera que debemos calificar de
diplomática, para el día en que este Boletín se eche a caminar, todos los problemas que
nos aquejan a los pobres y a los enfermos, ya estarán resueltos. Deben estar resueltos. Y si
no totalmente resueltos, en avanzada vía de solución.
¿No creen que es esta una buena noticia? Es un notición. Algo como para frotarse las
manos. Pues, a frotarse las manos ¿O es que no me creen? ¿Están tan decepcionados de
la noticia que creen que esta es demasiado buena para que sea cierta? ¿Igual no me
creen porque soy un poco romántico y soñador?
Una cosa puedo decirles que, más románticos y sentimentales han sido -y siguen
siendo- los señores candidatos que les han encandilado, dejándoles casi sin aliento, tras
ofrecerles el oro y el moro...
Estaban tan mal las cosas que nos preguntábamos si habría algún valiente que se
arriesgara a tomar el toro de la res pública por las astas, pero ¡oh sorpresa! aparecieron,
de la noche a la mañana, como por docenas. Candidatos y candidatas. Y todos, como
empapados de la doctrina social de la Iglesia y como identificados con los mas
sufrientes y necesitados. ¡Qué alivio!
Muy bien, muy bien no se sabe cómo interpretar todo aquel entusiasmo por
conducir los destinos de un pueblo herido y maltratado. ¿Amor a la Patria? ¿Vocación de
santidad..?
Alguna que otra vez se escucharon voces estridentes que hablaban de que “el fin
justifica los medios y de que, en política vale todo”, cosas que nadie puede digerir porque
son obscenas.
Pero en general la sinfonía de las promesas era armónica y todos hacían de los
pobres su peso y su dolor. Al igual que Vicente de Paúl. Y aquí fue donde se pillaron los
dedos, donde se mordieron la lengua. Como todos se comprometieron a estar del lado de
los oprimidos, sea quien fuere el elegido tendrá que cumplir de inmediato su promesa.
Esta es una deducción matemática.
Díganme ustedes si tengo o no motivos para darles la noticia. La loca de la casa
no parece ser tan loca como se la imagina Santa Teresa. .
La loca me hizo una declaración. Candidatos y/o gobernantes acaban de
someterse según sus palabras y por sus propias palabras a un juicio histórico. Los
ciudadanos de a pie hemos crecido con el alimento de la decepción, del engaño, de la
extorsión, de la injusticia, de la improvisación, hasta un punto tal que, hoy en día, ni
siquiera aquellos que han utilizado técnicas maquiavélicas pueden encasillarnos en la
sección de los tontos útiles -lado A- ni mucho menos calificarnos de masoquistas -lado B-.
Es lícito esperar que si estos señores candidatos son seres humanos y cristianos,
emularán a Vicente de Paúl en su gestión bienhechora y no esperarán, implorando plazos
de gracia, a que la sociedad y la historia les condenen. Los pobres no esperan. Se dice que
todos estamos mal, pero los pobres, peor.
Hasta aquí me ha traído la loca de la casa. La canción seleccionada no fue “Madre
de los pobres” sino “Madre de los hijos pobres”. Señoras y señores, a lo hecho, pecho.
Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Mayo. 2001
QUIEN ERES TU, MARÍA
La expresión “dime con quien andas y te diré quien eres” es una vieja expresión
castellana que nos habla de identificaciones y definiciones y nos revela la
circunstancia en que se desenvuelve nuestro yo.
Ortega y Gasset, el filósofo, le otorgaba a esta circunstancia una importancia
tan grande que la hacía participe de los elementos que definen nuestra personalidad: “yo
soy yo y mi circunstancia”.
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La expresión “dime con quien andas y te diré quien eres”, que acepta de buena gana
la importancia del entorno, es mas vieja que Matusalén. Pero, no por vieja, deja de ser
significativa y de estar presente en los diversos tiempos y lugares de la humanidad. Su
valor, sin embargo, aunque realmente auténtico, no llega a ser pleno.
En el “dime con quien andas y te diré quien eres”, se tiene la impresión de que la
cercanía en el andar, en el estar (dime con quien andas), como que define también la
cercanía en el ser (y te diré quien eres). Más aún, parecería que la interacción de la
circunstancia es tan fuerte que, con un poco de imaginación, claro, podría entreverse
dicho comportamiento a nivel de irracionales, de plantas y hasta de minerales.
Volviendo a la cordura, nos preguntamos ¿qué factores otorgan a este “dime con
quien andas y te diré quien eres” toda su virtud y todo su poder de calificar y definir
los comportamientos humanos y hasta su personalidad?
No creo que se pueda hablar de ósmosis. Sería ciertamente una buena
explicación pero, al aceptarla, como nos movemos en el orden de la espiritualidad,
estaríamos negando la libertad al ser humano y su capacidad de cambio, su capacidad de
autodeterminación. Todo proceso osmótico es negación de libertad. Cuando se produce
en el orden espiritual no se consigue otra cosa que marionetas, robots, figurines... es
decir cosas, no personas. En el caso de San Pablo, que podría considerarse como un
caso clásico, por su total identificación con Cristo, no se renuncia en ningún momento a la
personalidad y hay una lucha permanente de su autodeterminación: “Vivo yo, pero no soy
yo, es Cristo quien vive en mí”, ti “dime con quien andas y te diré quien eres” tiene;
después de María, la primera cristiana, en Pablo de Tarso, una de sus mejores
expresiones. El caso de María es inigualable; tiene a Cristo en sus entrañas, lo lleva en su
corazón, gasta todo su tiempo con él, y con él anda, de puerta en puerta, hasta nuestros
días. “Dime con quien andas...”
Creo que los factores, que otorgan al “dime con quien andas y te diré quien eres”
toda su fuerza, su valor, su autenticidad, están y se deducen de la entraña misma de la
expresión.
El primero de ellos sería el conocimiento. Por lo general no andamos con
desconocidos. Cómo te llamas, quién eres, a dónde vas, qué ilusiones o proyectos tienes.
Es, en base a esto que empezamos a andar. A “andar con...”
Como Visitas Domiciliarias ha nacido para “caminar con María”, buscando al hijo que
se le perdió, no hemos escatimado esfuerzo alguno en proporcionar, a todos sus
integrantes, un conocimiento cabal de la persona de María y de sus funciones como Madre
de Dios y como Madre de los hombres. Tal ha sido el propósito de charlas y de proyección
de series de sudes corno: “La Virgen María a través de la pintura universal”, “María, don de
Dios a los hombres”, “El Almendro de Nazaret”, “Después de este destierro”. “Quién
eres tú, María”, etc. etc. Y esto es también “andar con”. Andar con María, sabiendo
siempre que la meta es Jesús. Como ella misma nos dice
…“que no hay tal andar
como adorar al Niño,
que no hay tal andar
como al Niño adorar”.
En el orden espiritual, ustedes y yo sabemos que no es lo mismo “estar con” que “ser
de”. No es lo mismo estar con Cristo que ser de Cristo, estar con María, que ser de María.
Judas, el Iscariote, es la mayor autoridad para explicarles, por experiencia este tema. Judas
estaba con, pero no era de y así hizo lo que hizo. Por todo esto, deducimos que el
segundo factor que le da autoridad al “dime con quien andas” es no sólo andar, sino andar
en la misma dirección. La palabra dirección hace una referencia inmediata a “algo
geográfico”. Pero como nuestro andar es andar en el espíritu, andar en la misma dirección
significa abrigar los mismos sentimientos, los mismos ideales y las mismas metas. Y
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compartir el mismo pan. Recorrer el mismo camino de este valle de lágrimas, sufriendo las
inclemencias del tiempo y gozando de las mismas simples cosas de esta vida.
María ha sido siempre camino. Puente y camino. Un camino que ella recorrió
primero de Dios al hombre, pero que ahora tiene una sola flecha, una sola dirección. Con
ella se vino Dios a nosotros, con ella, vamos nosotros a Dios.
Andar en la misma dirección nos ofrece la confortante certeza de ir por buen
camino.
Andar es lo propio de nuestra condición peregrinante. Y andar en la misma
dirección es sumar esfuerzos hacia una misma meta, es aceptar al otro y es hacer de su
cercanía, de su presencia una especie de culto. Un poeta refleja en cuatro versos, de
arte menor, algo que podría calificarse de factor determinante para otorgarle al “dime con
quien andas y te diré quien eres” toda su fuerza y su alto grado de credibilidad. Dice:
“Dices que no la quieres
ni vas a verla,
pero la veredita
no cría hierba
Fácil es deducir que se trata de amor. Del amor en las múltiples facetas en que
este se presenta: admiración, confianza, atracción. Hay personas tan sinceras en su
proceder, tan nobles en su profesión, tan agradables en su semblante, tan convincentes en
sus expresiones y en su vida, que despiertan en quienes las conocen, nada mas
conocerlas, admiración, atracción, entrega, amor... Analicen sus propias reacciones con
sólo escuchar los nombres de Jesús, María de Nazaret, Juan Pablo II, Teresa de Calcuta...
De Teresa es este pensamiento; “Que nadie que se acerque a ti, se aparte de ti sin sentirse
mejor y mas feliz”.
Los grandes santos han tenido, siempre, muchos compañeros de viaje, así como
los malos malos han tenido los suyos. En uno y otro caso, se ha producido una como
bondad que encandila o una como maldad que succiona y arrastra. Y en uno y otro caso, lo
que el dicho dice, sigue siendo verdad. “Dime con quien andas y te diré quien eres”.
Hay algo que me preocupa mucho en estos momentos: la hierba que está brotando
en ciertas vereditas. Por si hubiera distraídos: Me refiero a las vereditas por las que,
otrora, peregrinaban a las ermitas da nossa Senhora.
Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Junio, 2001
AL CORO 65, CON CARIÑO
La presente nota tiene por objeto dar algunas pautas para un mejor funcionamiento
del coro N° 65, que no obstante contar con el luminoso título de “Virgen María, Señora de la
luz” se ha visto afectado por la ceguera, perdón, por las deficiencias de opinión de alguno
de sus integrantes.
Es indiscutible que, si todos nos hubiéramos esforzado un poco mas en imitar a la
Santísima Virgen en eso que llamamos virtud de la humildad, las diferencias se hubieran
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superado de inmediato. Es necesario de toda necesidad que caminemos en una misma
dirección. Así hacen los que bien se quieren. Y así tenemos que hacer quienes integramos
Visitas Domiciliarias. Una persona que ama... jamás se queja de nadie, aunque sea difícil
encontrarle algo bueno a ese nadie. Las personas que se aman, al hablar, se entienden.
Es el amor lo que motiva esta nota.
Después de haber sido informado, ampliamente, por las hermanas de la Directiva, he
creído conveniente:
1° Ratificar, en su cargo de Celadora, a la Sra. Marcelina Quintana Rumiche (Psj. Unión
379) quien se ha comprometido a brindar informes periódicos tanto a la Directiva como a
las familias del coro.
2° Designar, provisionalmente, a la Sra. Bertha Navarrete Cherres de Paz, para que
colabore con la Sra. Marcelina y aleccione a las diversas familias del coro, sobre el
sentido puramente espiritual que deben tener las Visitas Domiciliarias, dejando bien claro
que, las posibles erogaciones materiales no son obligatorias y que, en todo caso, su
destino es el mantenimiento y/o la difusión de dicha devoción.
3° Disponer que se reestructure el Coro ya que, debido a la celeridad de su conformación,
alguna de las familias no llegó a captar la seriedad de esta devoción, y alguna otra familia
ante la ausencia de la persona que asumió el compromiso inicial, hablando en cristiano,
“ha venido a menos”. Insistimos en que, “hablando”, se entienden las personas”. Y ella, la
Virgen habla mucho más claro que yo,
Atenta y corazónmente,
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Agosto, 2001
LLEVEMOS. CRISTIANOS...
Apuntes de Las canciones
de antaño, II
“Llevemos, cristianos” es la segunda canción que presen-tamos en esta serie
de comentarios. Tal vez no llegue a alcanzar el nivel artístico, musical y literario, de
la primera canción reseñada, “Virgen singular”, pero es, indiscutiblemente, mas popular.
...Llevemos, cristianos,
la santa medalla
que cura los cuerpos
y salva las almas.
Es tan sencilla, tan significativa y tan popular que hasta los bebitos pueden
cantarla. Pero su difusión se debe, no tanto a su estructura sino mas bien a la
veracidad de su contenido. Es un signo, un instrumento puesto en nuestras manos,
para hacer posible aquello que mas profundamente anhelamos: la salvación.
Demás está decir que no es la medalla la que cura, ni la Santísima Virgen a
través de la medalla, sino nuestra fe en la palabra de Dios, expresada en el signo.
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Y, aquí, como en casi todas las cosas serias, a la sabidu-ría popular cristiana
se le permite quemar todos los pasos lógicos intermedios, porque sabe -todos lo
sabemos- que:
Favores sin cuento
la Virgen derrama
sobre los que llevan
la santa medalla.
sus brillantes rayos
publican las gracias
que otorga la Virgen
a los que la llaman,
¡Oh Virgen bendita,
nuestra Madre amada!
Todos llevaremos
tu santa medalla.
Es esta canción hecha para los que no saben leer. Claro que también los sabiondos
podrían cantarla. Les aseguro que no desentonarían. Una canción hecha oración. La oración
que nace de la confianza y de la mas honda experiencia cristiana.
La letra pertenece a uno de los “misioneros de la vieja guardia”. De aquellos que
daban misiones populares tanto en las grandes ciudades como en las pequeñas aldeas. El
P. José María Alcácer, C. M.
Puede que les esté permitido olvidarse del monólogo de Hamlet o de La Vida es
sueño de Calderón y hasta de comer... pero nunca les estará permitido olvidarse de la
popular letrilla:
...Llevemos, cristianos,
la santa medalla
que cura los cuerpos
y salva las almas.
P. Enrique Mangan López, C. M.
Asesor
Diciembre, 2001
GLORIA A TI MILAGROSA QUERIDA
Apuntes de las Canciones
de antaño, III
La mayor o menor popularidad de una canción se valora y se mide, naturalmente,
por la calidad de los factores que la que la integran, no por la fama del compositor o
creador ni por las condiciones de aquellos a quienes va dirigida. Estos factores son la letra
y la música.
Para que una pieza u obra pueda alcanzar popularidad, es indispensable que, al
menos, uno de los citados factores capte en forma inequívoca la atención de la gente.
Puede ser el contenido literario (fondo y forma) puede ser su estructura musical. Con
frecuencia escuchamos expresiones como esta: “es una bonita melodía pero la letra no la
acompaña”, o bien, “este hermoso poema es digno de una música mas apropiada…”
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Pues bien, cuando ambos factores son artísticamente notorios, la popularidad llega
de inmediato. Es un tema que pega, que llega, suele decirse, y que llega a todos los
públicos, a excepción, claro, de los muy profanos en arte.
“Gloria a ti, Milagrosa querida” consigue su popularidad en letra y música, en fondo y
forma. La letra pertenece a Jerónimo de Fregenal, O.M.C. y la música del P. José María
Alcocer, C. M.
Quienes no conozcan la música del P. Alcocer, pueden ponerle su propia música y
seguro que les saldrá bien:
Gloria a ti, Milagrosa querida,
Virgen llena de gracia y de amor.;
oye, Madre, a tus hijos que, amantes,
elevan constantes,
un himno en tu honor,
y al cantarte, fervientes te piden
abundante y cordial bendición
y que abrases en vivos ardores
los puros amores
de su corazón.
Ve con cuánta ilusión y alegría
tu bendita Medalla besamos
que prendida en el pecho, llevamos
como emblema sagrado de amor.
Es la imagen mil veces bendita
de los hijos a tí consagrados
que, acrecientan, por ella escudados,
sus tesoros de fe y tierno amor.
Gloria a ti. Milagrosa querida…
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Enero, 2002
¿ECUMENISMO O PROSELITISMO SECTARIO?
Hemos podido detectar, accidentalmente, algunas actitudes o intromisiones de
hermanos separados que son bastante desconcertantes.
La primera y mas notoria de dichas actitudes es la de incursionar o “meterse” en
agrupaciones pastorales de la Iglesia Católica, lo cual está muy bien, pero sin seguir los
cauces normales, lo cual está muy mal.
Y no se trata de incursiones turísticas como para enriquecerse en vivencias y
costumbres de la sana doctrina. Se trata de algo más audaz y realmente descabellado. Se
pretende utilizar a nuestros humildes, sencillos y dóciles grupos de oración como plataformas
de lanzamiento. Quieren apoderarse de la cancha para su juego, desuniendo y
sembrando un nuevo tipo de cizaña.
Sería consolador pensar que se trata de una “sobredosis de ecumenismo”! Pero
no, estos hermanitos, o mejor, hermanitas, “infiltrados”, tienen un apetito desordenado
de figuración y son muy buenos artistas para incitar a la desobediencia y a la
disgregación y lo hacen y esto sí es un sacrilegio- en nombre del Señor Jesús y a la
sombra tutelar del manto de María. Es por eso que hemos tenido noticia de ellos.
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El evangelio del Señor Jesús tiene expresiones realmente bravas para quienes siguen
esos caminos que no son ni mucho menos “caminos de paz” ni sendas de ecumenismo.
La humildad, la obediencia y el amor cristianos serán siempre los factores que
califiquen a los grupos pastorales cristianos y, en especial, a los que viven, rezan, y actúan
bajo la mirada maternal de María. En esto conocerán que sois discípulos míos: en que
os amáis los unos a los otros.
Quienes quieran, figurar; quienes se aferren a los cargos que, ocasionalmente,
detectan en el grupo; quienes se autoproclamen para asumir la coordinación del mismo,
alegando que ha sido designado para ello por tal o cual autoridad o sacerdote; quienes
desobedecen los reglamentos de la cofradía, devoción o movimiento; quienes se atreven
a deformar la identidad de la institución, generando una criatura que parece que es, porque
tiene el mismo nombre, pero que no es, porque le falta casi todo-, quedarán muy pronto en
evidencia porque han tratado de hacer de su capa un sayo y se ve, a las claras, que no les cae.
La devoción de las Visitas Domiciliarias de la Virgen Milagrosa tiene mas de un siglo y
está integrada por millones de devotos. Que nadie pretenda tocar su identidad ni modificar su
estructura. Si alguien quiere hacer algo nuevo, está en libertad de hacerlo, pero que no utilice
el titulo de Visitas Domiciliarias de la Virgen Milagrosa, porque eso sería defraudación de la
fe pública y no creemos que a la Santísima Virgen le gusten los “depredadores”.
Que María, Madre del Buen Consejo, nos señale a todos el camino más corto para dar
con su Hijo.
Atenta y marianamente.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Abril, 2002
EL AÑO DEL ROSARIO
1. LA DEVOCIÓN DEL REZO DEL SANTO ROSARIO
La devoción del Rezo del Santo Rosario es multisecular. Su práctica ha tenido
ciertamente sus altibajos, pero sus índices de influencia ofrecen una constante de
superación año tras año y siglo tras siglo. Fechas, nombres y lugares constituyen una
buena prueba de esta superación. Desde Lepanto hasta París, Lourdes y Fátima; desde
Domingo y Bernardo hasta Monfort, Ligorio o Peyton. Desde los papas (León XIII
galardonado con el envidiable título de “El Papa del Rosario”, Juan XXIII, Pablo VI, Juan
Pablo hasta beatos, Santos y entusiastas (Pío de Pietrelcina, Bartolomé Longo, Teresa de
Calcuta) y desde las instituciones como la Legión de María hasta la Asociación de la Medalla
Milagrosa y otras, es fácil hablar de difusión y consolidación.
Juan Pablo II, uno de los grandes de esta devoción, ha querido dejar en ella su
impronta personal, adicionando, sin dañar en nada su estructura tradicional, una nueva
línea de reflexión, la de los misterios de la luz. Y para enmarcar su aporte, ha
proclamado todo un año como El Año del Rosario que, entendemos, se extiende desde
octubre 07, Fiesta de la Virgen del Rosario, del 2002 hasta esa misma fecha del 2003.
Es muy posible que, en breve, aparezca algún subsidio que relieve la dimensión
mariana de estos misterios de la luz.
“Debemos redescubrir -nos dice él mismo- el profundo misticismo contenido en la
simplicidad de esta plegaria grata a la tradición popular”. “Este agregado de los nuevos
misterios, sin perjuicio de ningún aspecto esencial del formato tradicional de la plegaria, es
para infundirle nueva vida y suscitar un renovado interés en el lugar que tiene el rosario
en la espiritualidad cristiana.
2. LA DISPOSICIÓN DEL NUEVO ROSARIO
La disposición del nuevo rosario sería seguramente esta:
53
1) Los misterios gozosos: Lunes y sábados. El que los misterios gozosos pasaran al
día sábado como tema de reflexión era un cambio sugerido y esperado, ya que el
sábado es un día especialmente dedicado a honrar a la Santísima Virgen y los
misterios gozosos son misterios “marianos”.
2) Los misterios dolorosos: Martes y viernes. No hay modificación.
3) Los misterios de la luz: Jueves. Entendemos que el jueves es un día
tradicionalmente eucarístico y el quinto misterio de la luz lleva la reflexión a la
institución de la Eucaristía.
4) Los misterios gloriosos:
alguna.
Miércoles y Domingo. Tampoco hay modificación
3. ALGUNAS CONSECUENCIAS
Al escribir estas líneas, nos estamos moviendo por simples conjeturas. Pero
podemos establecer algunas consecuencias. Entre dichas consecuencias: el número de
pasajes bíblicos que se insertan en la cadena del Rosario pasaría de quince a veinte y el
número de Avemarías pasaría de 150 a 200.
Sobre la base de informaciones periodísticas, el enunciado y la referencia
bíblica de los Misterios de la Luz, serían:
Primer Misterio: Bautismo de Jesús. En él, Cristo entra en el agua del río, el cielo se
abre y la voz del Padre lo proclama Hijo Predilecto. Mt. 3, 17.
Segundo misterio: Las Bodas de Cana, Cristo transforma el agua en vino,
abre el corazón de los discípulos a la fe, gracias a la intervención de María, la primera
creyente. Jn. 2. 1-12
Tercer Misterio: La proclamación del Reino. Jesús anuncia la llegada del Reino
de Dios, invita a la conversión y perdona los pecados a quien se acerque a El con fe, Mc.1,
15; Mt. 3: 1-17 Le 4, 14yss.
Cuarto Misterio: La Transfiguración. La gloria de la divinidad resplandece en el
rostro de Cristo, mientras el Padre lo acredita ante los apóstoles extasiados para que lo
escuchen. Lc. 9,35.
Quinto Misterio: La institución de la Eucaristía. Cristo se hace alimento con su
Cuerpo y su Sangre bajo las especies del pan y del vino dando testimonio de su amor
por la humanidad. Jn 13,1 y ss.
4. CARTA APOSTÓLICA: ROSARIUM VIRGINIS MARIAE
En su reciente Carta Apostólica ROSARIUM VIRGINIS MARIAE. Juan Pablo II, no se
limita a su original innovación, sino que se propone, o nos propone, revitalizar esta popular
devoción mariana. Espero que Visitas Domiciliarias asuma la propuesta, otorgándole la
primera prioridad, durante todo el Año del Rosario, de octubre del 2002 a Octubre del
2003, y presente, a todos sus lectores, el contenido de la Carta del Papa.
Dicho documento consta de 43 números, cada uno de ellos con su correspondiente
acápite o titulo, distribuidos de la siguiente manera:
54
Introducción (Nos 1-8)
Capitulo I: Contemplar a Cristo con María (Nos. 9-17)
Capitulo II: Misterios de Cristo, Misterios de la Madre (Nos.
18 al 25).
Capítulo III: Para mi la vida es Cristo: (Nos. 26-38)
Conclusión (Nos. 39-43)
En la presente edición del Boletín, presentamos, por la lógica necesidad y urgencia
de informar y ambientar, dos numeritos. El primero, tomado de la Introducción (3) sobre la
Proclamación del Año del Rosario. Y el segundo referente a la innovación papal, misterios
de luz, tomado del Cap. segundo (21).
4.1 Octubre 2002 - Octubre 2003: Año del Rosario
“Por eso, de acuerdo con las consideraciones hechas en la Carta apostólica Novo
millennio ineunte, en la que, después de la experiencia jubilar, he invitado al Pueblo de
Dios “a caminar desde Cristo”, he sentido la necesidad de desarrollar una reflexión sobre
el Rosario, en cierto modo como coronación mariana de dicha Carta apostólica, para
exhortar a la contemplación del rostro de Cristo en compañía y a ejemplo de su Santísima
Madre. Recitar el Rosario, en efecto, es en realidad contemplar con María el rostro de Cristo.
Para dar mayor realce a esta invitación, con ocasión del próximo ciento veinte
aniversario de la mencionada Encíclica de León XIII, deseo que a lo largo del año se
proponga y valore de manera particular esta oración en las diversas comunidades cristianas.
Proclamo, por tanto, el año que va de este octubre a octubre de 2003 Año del Rosario.
Dejo esta indicación pastoral a la iniciativa de cada comunidad eclesial. Con ella no
quiero obstaculizar, sino más bien integrar y consolidar los planes pastorales de las Iglesias
particulares. Confío que sea acogida con prontitud y generosidad. El Rosario,
comprendido en su pleno significado, conduce al corazón mismo de la vida cristiana y
ofrece una oportunidad ordinaria y fecunda, espiritual y pedagógica, para la contemplación
personal, la formación del Pueblo de Dios y la nueva evangelización. Me es grato reiterarlo
recordando con gozo también otro aniversario; los 40 años del comienzo del Concilio
Ecuménico Vaticano II (11 de octubre de 1962), el “gran don de gracia” dispensada por el
espíritu de Dios a la iglesia de nuestro tiempo”.
4.2 Misterios de Luz (21)
“Pasando de la infancia y de la vida de Nazaret a la vida pública de Jesús, la
contemplación nos lleva a los misterios que se pueden llamar de manera especial
“misterios de luz”. En realidad, todo el Misterio de Cristo es luz. El es “la luz del mundo”
(Jn 8, 12). Pero esta dimensión se manifiesta sobre todo en los años de la vida pública,
cuando anuncia el evangelio del Reino, Deseando indicar a la comunidad cristiana cinco
momentos significativos -misterios “luminosos”- de esta fase de la vida de Cristo, pienso que
se pueden señalar: 1. su Bautismo en el Jordán; 2. su autorrevelación en las bodas de
Caná; 3. su anuncio del Reino de Dios invitando a la conversión. 4. su Transfiguración; 5.
institución de la Eucaristía, expresión “sacramental del misterio pascual”.
“Cada uno do estos misterios revela el Reino ya presente en la persona misma de
Jesús, Misterio de luz es ante todo el Bautismo en el Jordán. En él, mientras Cristo,
como inocente que se hace “pecado” por nosotros (cf. 2 Co 5, 21), entra en el agua del
río, el cielo se abre y la voz del Padre lo proclama Hijo predilecto (cf, Mt 3, 17 par.), y el
Espíritu desciende sobre El para investirlo de la misión que le espera. Misterio de luz es
el comienzo de los signos en Caná (cf. Jn 2, 1-12), cuando Cristo, transformando el agua
en vino, abre el corazón de los discípulos a la fe gracias a la intervención de María, la
primera creyente. Misterio de luz es la predicación con la cual Jesús anuncia la llegada
del Reino de Dios e invita a la conversión (cf Mc 1, 15), perdonando los pecados de quien
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se acerca a El con humilde fe (cf. Mc 2. 3-13. Lc 47-48), iniciando así el ministerio de
misericordia que El continuará ejerciendo hasta el fin del mundo, especialmente a través
del sacramento de la Reconciliación confiado a la Iglesia. Misterio de luz por excelencia
es la Transfiguración, que según la tradición tuvo lugar en el Monte Tabor. La gloria de la
Divinidad resplandece en el rostro de Cristo, mientras el Padre lo acredita ante los
apóstoles extasiados para que lo “escuchen” (cf. Lc 9, 35 par.) y se dispongan a vivir
con El el momento doloroso de la Pasión, a fin de llegar con El a la alegría de la
Resurrección y a una vida transfigurada por el Espíritu Santo. Misterio de luz es, por fin, la
institución de la Eucaristía, en la cual Cristo se hace alimento con su Cuerpo y su Sangre
bajo las especies del pan y del vino, dando testimonio de su amor por la humanidad
“hasta el extremo” (Jn 13,1) y por cuya salvación se ofrecerá en sacrificio”.
“Excepto en el de Caná, en estos misterios la presencia de María queda en el
trasfondo. Los Evangelios apenas insinúan su eventual presencia en algún que otro
momento de la predicación de Jesús (cf. Mc 3. 31-35; Jn 2, 12) y nada dicen sobre Su
presencia en el Cenáculo en el momento de la institución de la Eucaristía. Pero, de
algún modo, el cometido que desempeña en Caná acompaña toda la misión de Cristo. La
revelación, que en el Bautismo en el Jordán proviene directamente del Padre y ha
resonado en el Bautista, aparece, también en labios de María en Caná y se convierte en
su gran invitación materna dirigida a la Iglesia de todos los tiempos: “Haced lo que él os
diga” (Jn 2, 5). Es una exhortación que introduce muy bien las palabras y signos de
Cristo durante su vida pública, siendo como el telón de fondo mariano de todos los “misterios
de luz”.
Súplica a la Reina del Santo Rosario
“Oh Rosario bendito de María,
dulce cadena que nos une con Dios,
vínculo de amor que nos une a los Ángeles
torre de salvación contra los asaltos del infierno,
puerto seguro en el común naufragio,
no te dejaremos jamás.
Tu serás nuestro consuelo en la hora de la agonía.
Para ti el último beso de la vida que se apaga.
Y el último susurro de nuestros labios
será tu suave nombre,
oh Reina del Rosario de Pompeya,
oh Madre nuestra querida,
oh Refugio de los pecadores,
oh Soberana consoladora de los tristes.
Que seas bendita por doquier,
hoy y siempre,
en la tierra y en el cielo”.
Es la súplica del Beato Bartolomé Longo.
Espero que la Comisión de Redacción vaya presentando, si no en forma secuencial, sí,
al menos, de acuerdo a las necesidades o a las exigencias de los tiempos litúrgicos, los
diversos capítulos de la carta. Esta última sugerencia está en consonancia con un
pensamiento que se expone en la Carta misma. “En realidad, puntualiza Pablo VI, esta oración
no sólo no se opone a la liturgia, sino que le da soporte, ya que la introduce y la refuerza,
ayudando a vivirla, con plena participación interior, recogiendo así sus frutos en la vida
cotidiana”.
Gracias, María. Gracias, Juan Pablo, Gracias hermanas.
P. Enrique Mangana López, C. M. Asesor
Noviembre, 2002
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NOTA DE SALUDO Y DESPEDIDA
Primero: Saludo ¡Feliz Navidad!
Una de las prácticas y vivencias, infaltables, de la Navidad es el saludo. El saludo,
los saludos, en especial, los navideños, envueltos en palabras o desenvueltos en gestos,
constituyen siempre la genuina y sincera expresión de nuestros sentimientos. Es por ello
que resultan siempre novedosos y atractivos, aunque no siempre estén acompañados por la
rúbrica y el sello personales.
Y nada tiene de extraño que así sea, ya que, los saludos navideños son portadores
de las emociones y los sentimientos propios de un hecho religioso, siempre antiguo y
siempre nuevo, la Encarnación.
Visitas Domiciliarias de la Santísima Virgen experimenta un placer inusitado al llegar
a los hogares de 5,670 familias, correspondientes a 189 coros, con nuestro saludo
navideño. A las familias, y a los corazones de cada uno de los integrantes de todas esas
familias.
Al saludarles a ustedes, hacemos extensivo nuestro saludo a María, la reina de la
fiesta y causa de nuestra alegría, que, entendemos, se encuentra, permanentemente, en su
casa.
Y segundo: despedida ¡hasta luego!
Despedida, no porque nos vayamos, sino porque no tendremos tantas ocasiones
para estar de cháchara con ustedes a través de estas páginas, ya que, según pude
escuchar, en una conversación de la Comisión de Redacción, el Boletín está en veremos.
Creo que no tenemos por qué esperar a que nos den explicaciones. Ustedes y yo lo
entendemos muy bien. Los costos de impresión han subido en un 300%, y la colaboración,
no ha variado desde hace muchos años.
No quisiera meterme donde no me llaman. Pero entiendo que si cada uno de los
500 boletines se vendieran a S/. 2.00, se financiaría la impresión y aun sobraría, siempre,
claro está, sobre la base de las 28 o 30 páginas.
A buen entendedor, pocas palabras.
¿Hasta siempre o hasta luego?
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Diciembre, 2002
LA OTRA MANERA DE DAR LAS GRACIAS
He sido informado de que, a partir de la fecha, no aparecerá el nombre de la Sra.
Esther Altamirano de Delgado, como Tesorera de la Directiva de Visitas Domiciliarias.
Los motivos del cambio hacen referencia a ineludibles tareas familiares. Tenemos que
aceptarlo aunque nos duela. Pero eso no significa que su nombre deje de aparecer en las
páginas del Boletín, presentando temas de actualidad mariana, al igual que aparecen los de
sus hijas Lily y Miriam.
Visitas Domiciliarias debe agradecer, una vez más, los servicios prestados, por la
Sra. Esther, a esta popular institución mariana. Prestados siempre en forma eficiente, y
siempre y sólo, -como anota una de las hermanas- por su devoción y amor a la Santísima
Virgen, quien, seguramente, le ha dado también las gracias, pero no con palabras, como
nosotros, sino de otra manera...
Y gracias también a la Sra. Ricardina Soto de Jiménez, por haber aceptado el
preocupante cargo de Tesorera. Digo preocupante porque, por lo general, estas
57
instituciones de carácter religioso, tienen que vérselas para caminar sólo con la gracia de
Dios y algún que otro centavo. La aceptación de un cargo, en estas condiciones, tan sólo
puede producirse por el amor a la Santísima Virgen y el lógico y encomiable deseo de
difundir su devoción, a través de las Visitas Domiciliarias.
El cargo de Pro Tesorera que dejaba libre la Sra. Ricardina será desempeñado,
a partir de la fecha, por la Sra. Bertha Luz Navarrete Cherres. Se podría decir que “todo
queda en casa”. Creo que nunca lo he dicho, porque nunca ha sido necesario decirles, que
colaboren con las responsables de este equipo de Tesorería. Ahora, les digo que colaboren. Colaborar equivale a decir gracias.
Sra. Esther, Sra. Ricardina, Sra. Bertha Luz, gracias. Pero no olviden nunca que la
Santísima Virgen tiene otra manera de dar las gracias.. Se trata de derechos reservados.
P. Enrique Mangana López C. M.
Asesor
Febrero, 2003
“MAGNÍFICAT”
Al comentar el “Benedictus” en una de nuestras charlas del presente curso,
decíamos que “era un canto y un encanto”. Al comentar ahora “el Magníficat”, debemos
aceptar que estos calificativos nos vienen cortos. El “Magníficat” no es tan sólo un canto y
un encanto, es el Canto, el canto de María y es el encanto de un alma que reconoce y
agradece todo lo que un Dios ha hecho en ella, con ella y, posiblemente, por ella.
Hay en la sagrada Escritura muchas canciones, antiguas y nuevas. Si quieren
escucharlas, acudan ustedes a los siguientes escenarios:
(Lc 2,29-32; Lc 1,68-79; Ef 1,3-10; Fil 2.6-11; Col 1,12-20; Tim 3,16; 1 Pe2,21b-24).
Y, en el Apocalipsis pueden encontrar todo un recital de canciones, con
acompañamiento, coreografía y todo; 4,11; 5,9.10.12; 11,17-18; 12, 10b-12; 15,3-4; y un
canto muy especial 19,1-7.
Se puede afirmar que todos los cantos en la Sagrada Escritura tienen varios
elementos comunes. Pero ninguno de ellos tiene la espontaneidad del Magníficat.
una verdadera lástima no contar con la versión musicada original, pero nos
atrevemos a pensar que fue algo así como un torrente de gozo incontenible que, a modo de
saeta, lanza hacia el Infinito, la cantautora, María de Nazaret.
Los entendidos dicen que el Magníficat tiene un contexto literario propio, muy
parecido al de otros cantos.
María es la esclava del Señor, la elegida del acontecimiento escatológico que
ahora experimenta y vive junto con el pueblo de Dios.
Daría la impresión que lo que dice, lo dice, mas que a título personal, a nombre del
pueblo. Lo obrado por Dios en la historia de la salvación alcanza su punto culminante en
el anuncio de la venida del Verbo de Dios a la tierra.
Desde esta dimensión, el Magníficat es el Canto del pueblo, el canto de nuestro
pueblo y de todos los pueblos.
Respetuoso de lo que dicen los entendidos, me atrevería a decir que el Magníficat
tiene una dimensión modélica y es el Canto que todos debemos cantar.
Estamos en el momento apropiado para cantar.
Que cada uno de nosotros ensaye su propio Magníficat.
Las versiones musicales de los diversos autores, a excepción de las antiguas que
parecían un poco estereotipadas, pueden ayudamos a ensayar y a cantar. Escuchemos:
Leit-motif :Proclama mi alma, Erdozain (16 cantos para la Misa)
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E. V. Mateu :
E. V. Mateu :
Kairoi
:
Proclama mi alma (María, Madre)
Canto de María )(Madre de los pueblos)
Magníficat (María, música de Dios)
Palazón:
Madurga:
Núfiez :
Magníficat (Madre de los creyentes)
Magníficat (Madre de la Esperanza)
Engrandece mi alma (María, pobre de Yavé)
Jáuregui:
Gabarain
Fuertes:
Magníficat (Cantemos con María)
: Proclama mi alma (Porque eres Madre)
Proclama mi alma (El camino de María)
:
J. A. García: Magníficat (En el nombre del Padre)
Gutiérrez : Magníficat (María, Madre del 2000)
Kairoi
: Canto de María (A tu lado, Señor)
Enrique Mangana López. C. M
Asesor
Junio, 2001
CARTA ABIERTA A QUIEN CORRESPONDA
Estimada y recordada Abril:
Recibe mi cordial saludo para ti y todos tus familiares. Quiero felicitarte por tu
entusiasmo y desvelo en mantener la unidad y el correcto funcionamiento de la Primaria
Archicofradía de los Jueves Eucarísticos. Entusiasmo y desvelo que me llevan a pensar
inevitablemente en tu queridísima madre, cuya inspiración debes y debemos
agradecer.
Quiero, además, como respuesta a tu larga carta, -casi un testamento-,
compartir algunos de mis puntos de vista que pueden refrendar la gestión que has
emprendido de actualizar la inscripción-reinscripción de la Primaria Archicofradía de
los Jueves Eucarísticos para que sea reconocida a nivel nacional por los Sres.
Obispos y de deslindarla de los Centros Eucarísticos Unidos del Perú, institución
que, al parecer, la Sra. Inés R. de Mariátegui y su Equipo quieren independizar de la
Primaria Archicofradía.
1. Respecto de la inscripción-reinscripción
Tengo que decir que no tengo acceso a los documentos de archivo, pero sí se leer:
“Una vez cumplida esta primera gestión, se dice en el Boletín conmemorativo de
los 25 años, pedimos el Reconocimiento Oficial al Arzobispado de Lima y un Director
Espiritual, cuyo nombramiento recayó en la persona de Monseñor Hugo Garaycoa,
quien, después, delegó sus funciones a nuestro Párroco Monseñor Oswaldo Ruiz,
que sigue desempeñando su cargo de Director Espiritual hasta la fecha”.
Como comentario: Monseñor Garaycoa no aceptaría jamás la Dirección Espiritual
de una institución que no haya sido reconocida. La posible pérdida de documentos no
implica la obligatoriedad de una reinscripción.
En otra nota de Homenaje a la Primaria Archicofradía, por sus 25 años de
funcionamiento en el Perú, la Sra, Floriza Sánchez, Coordinadora General y
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fundadora de más de 95 Centros Eucarísticos a nivel Nacional, se identifica de tal
modo con la Cofradía, que llega a escribir:
“Una vez reconocido nuestro Centro, por el Arzobispado de Lima, y luego por el
Centro Universal de Zaragoza-España, bajo la dirección y administración del
Reverendo P. Federico Carreras...”
¿Cómo se atreve a decir, la buena Sra. Inés de Mariátegui que la Primaria
Archicofradía de los Jueves Eucarísticos había funcionado clandestinamente?
Sólo la ignorancia puede ser tan atrevida.
De todos modos, como Usted ha dado los pasos pertinentes para la reinscripción
y tiene toda la documentación requerida, es bueno que la presente para que la
Primaria Archicofradía de los Jueves Eucarísticos, con todos sus centros unidos, sea
reconocida nuevamente.
2. Respecto de la diferencia o deslinde entre Primaria Archicofradía de los Jueves
Eucarísticos y Centros Eucarísticos Unidos del Perú, para mi las cosas son muy claras,
pero sé que para los juevistas no lo son tanto.
Posiblemente tendrá que utilizar alguna comparación. Decir-les, por ejemplo, que
dentro de una casa hay muchas habitaciones, pero por muchas que estas sean nunca
serán mas grandes que la casa. La Cofradía -la casa- tiene muchos centros eucarísticos
que están unidos porque están dentro de la casa. Pero si quieren salirse por razones
de emancipación o inculturación o modernización... se quedan sin la casa.
Esta institución, autotitulada C.E.U.P., quiere ubicarse fuera y por encima de la
Cofradía. Con sólo intentarlo, ya ha creado desunión entre los Centros Eucarísticos, al
menos en Lima.
A Dios gracias, en provincias los centros siguen unidos.
2. Posibles motivos para que la Sra. Inés v su equipo se
hayan atrevido a dar este paso en falso.
Tengo la impresión de que los Centros Eucarísticos Unidos del Perú nacen
como un anhelo de reforma. Bajo el pretexto de inculturación, actualización y
configuración como entidad autónoma local, quieren tomar distancia de la Primaria
Archicofradía de los Jueves Eucarísticos, una institución indiscutida e indiscutible
porque se sitúa y vive en el corazón de la iglesia; una institución centenaria que está
extendida por todo el mundo y que cuenta con millones de asociados. Si esto fuera cierto.
Centros Eucarísticos Unidos del Perú no serían mas que Centros del Perú pero no
eucarísticos ni unidos que, entendemos, debería ser lo esencial de la institución.
Entiendo, perfectamente, que tanto el anhelo como los pretextos son necesarios y
recomendables para muchas otras instituciones pero no para la Primaria Archicofradía. Y
menos aún cuando estos anhelos y estos pretextos son expresados y acometidos por
personas no adecuadamente informadas y, tal vez, las menos indicadas para realizar los
cambios y las actualizaciones.
Tampoco soy yo la persona indicada para detallar todos los pasos que la Cofradía ha
dado para su aggiomamento o actualización y para su inculturación en los diversos países,
pero si puedo afirmar que su voluntad de cambio ha sido permanente.
Tengo a mano una Carta Circular del P. Federico Carreras, Secretario General de
la Cofradía en aquel entonces, en la que nos dice:
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“En este próximo año 1984, queremos dar un gran paso en la reestructuración de los
Jueves Eucarísticos, con la reforma del Reglamento, poniendo al día nuestra
Archicofradía, según las normas del nuevo Código de Derecho Canónico y las
necesidades actuales y trabajando para fundar nuevos Centros e incorporación de nuevos
archicofrades. No podemos anquilosarnos ni dormirnos...”
El P. Carreras escribía esto en 1983 y muchos de nosotros hemos sido testigos de
esta realidad, consignada en las páginas del órgano oficial de la Cofradía, la revista de los
Jueves Eucarísticos, en la que pueden apreciarse, también, el proceso de asimilación y
vivencia de las nuevas disposiciones litúrgicas. Y este anhelo de renovación es una
constante en casi un centenar de cartas que, la buenísima Sra. Floriza tuvo a bien
remitirme para la animación de todos los hermanos de la zona norte.
Y, yo mismo lo he solicitado pensando, no tanto en el Reglamento en si, sino mas bien
en los contenidos de las Adiciones. Una solicitud atendida por el P. Vicente de Val quien,
después de informarme que se había designado una Comisión (algo así como ZaragozaRoma) para la reforma del Reglamento y que “las cosas de Palacio van despacio”, sería yo el
afortunado en contar con la primera copia.
3. Comentarios sobre el Reglamento de los C.E.U.P.
Sin sentar cátedra y sin pretensiones pedagógicas, puede afirmarse que el Reglamento de
los Centros Eucarísticos Unidos del Perú tiene como base el Reglamento de la
Archicofradía, Adiciones incluidas.
No está estructurado como un todo orgánico, secuencial y lógico. Es como un centón
de interpolaciones, cambios y añadiduras sin sustento legal. La institución que quisiera
caminar con él será una institución mal nacida.
Las añadiduras y las interpolaciones no se avienen con los contenidos del Reglamento
de la Cofradía. Devienen en anacrónicas, artificiales, ilógicas... A modo de ejemplos:
1. Los documentos pontificios -Breves de Benedicto XV y Pío IX- que se aducen para
dar legitimidad a los Centros Eucarísticos Unidos del Perú, no fueron emitidos para
ellos, que todavía no existían, sino para la Primaria Archicofradía.
2. Forzando bastante las cosas, se nos quiere hacer creer que los C.E.U.P. nacieron
a los pies de la Virgen del Pilar en su Basílica de Zaragoza. Al igual que se nos
quiere hacer creer que nacieron bajo el pontificado de San Pío X. De la Primaria
Archicofradía sí se puede afirmar ambas cosas.
3. En el artículo XI, que habla del sostenimiento de la institución, hay una oposición
frontal que puede dejar perplejos a no pocos juevistas:
El Reglamento de la Primaria Archicofradia dice: “Bajo ningún concepto, los
asociados están obligados a pagar cuota alguna”.
El Reglamento de los Centros Eucarísticos Unidos del Perú dice; “Los asociados
estarán obligados a cotizar para el sostenimiento de la institución”.
4. Basta una lectura superficial de dicho Reglamento, al menos de la copia que obra
en mi poder, para tropezar con toda clase de inexactitudes y hasta con deficiencias
de redacción como la que constata “...himno de la Misa” debiendo constatar “himno
de la misma” ya que el contexto lo refiere a la bandera.
61
5.- Como aporte personal, tengo que decir que:
La denominación Centros Eucarísticos Unidos es correcta y tiene sentido pleno
cuando está referida a la Primaria Archicofradía de los Jueves Eucarísticos. Y así aparece
con toda normalidad en diversos documentos. Por ejemplo en el Programa
celebratorio del IX Aniver-sario: “La Coordinadora General de los Centros Unidos de la
Archico-fradía de los Jueves Eucarísticos, tiene el agrado de invitar...”
La misma nomenclatura utilizada por una de las últimas directivas, asesorada por el
P. Adolfo Palacios, M.S.A., es casi correcta pues dice: Centros Eucarísticos Unidos del
Perú (Archicofradía de los Jueves Eucarísticos). Digo casi porque lo correcto hubiera sido:
Primaria Archicofradía de los Jueves Eucarísticos (Centros Eucarísticos Unidos del Perú).
Los Centros Eucarísticos están dentro de la Cofradía y es la Cofradía quien les une.
Una unidad que brota de una misma bandera, de una misma medalla-insignia, de una
misma Hora Santa, de una misma Eucaristía y, en fin, de lo que se establece en la Adición
N. 12: “Los que se sientan juntos en la misma Mesa para recibir el mismo manjar, los
que juntos cantan y alaban a Jesús Sacramentado, deben estar unidos con los vínculos
mas estrechos de caridad...”
6.- Conclusión
Te pongo Abril una comparación, que insinuaba arriba, para que les hagas ver a las
hermanas cuál es el camino recto:
La primaria Archicofradia es como una casa. En la casa hay muchas habitaciones,
todas ellas unidas por un sin número de factores. Las habitaciones representan a los
Centros Eucarísticos Unidos. Unidos por estar dentro de la casa y por un sin número de
factores. Por muchos que estos centros sean, nunca serán mas grandes que la casa.
Daría la impresión de que algunos de estos centros (en Lima) quieren salirse de la
casa, o alguien quiere hacerlos salir de la casa. Mal está, pero son libres. Pero eso sí,
que sean suficientemente honestos para aceptar que han salido de la casa y que no les es
permitido disponer, a su antojo, de los bienes de la casa porque ya no les pertenecen.
Si todos los juevistas de todos los centros eucarísticos se hubieran esforzado por
cumplir el Reglamento, que es antiguo pero no anticuado y que cuenta con la experiencia
práctica de millones de cohermanos, no hubiera sido necesario hablar de estas cosas.
Con mi respetuoso saludo.
P. Enrique Mangana López. C. M.
Asesor
03 MINUTOS
-Y el Congreso, ¿qué tal?
Es la pregunta que, en forma socarrona y un poco irresponsable, formulan no
pocas personas que conocen mi vinculación con el Conami, por haber elaborado la oración
y el himno y algunos otros subsidios.
No puedo ni tengo derecho a pronunciarme, porque mi participación en este
congreso fue muy limitada, a pesar de haberse celebrado en mi propia casa.
Lo que sí puedo decirle es que fui protagonista de una experiencia desconsoladora
que me hizo sentirme extraño en mi propia casa y “extranjero en los campos de mi tierra”.
La cosa sucedió cuando al final de la exposición del panel que se me había
encomendado, alguien me alcanzó un papelito con estas palabras “03 minutos”. Con el
62
papelito de los 03 minutos se me conminaba a concluir la exposición del tema que, a mi
entender, constituía la razón suprema del Congreso, es decir, la creación de los centros
diocesanos y parroquiales de misiones en el ámbito nacional.
Paradójicamente no fueron necesarios los tres minutos. Con dos tenía bastante.
Pero el atentado ya estaba hecho.
Y este hecho que carece de importancia a nivel personal, cobra un relieve inaudito a
nivel mas amplio. ¿Por qué se invita a toda una celebridad misionera, me refiero a
Monseñor Luís Augusto Castro Quiroga, y luego se le corta la trama y se le invita a
callarse, vía papelito, antes de llegar a las conclusiones?
No faltarán quienes digan que son cosas de poca monta y que el cumplimiento del
horario es más importante. A mí, sin embargo, me parece monstruoso y creo que refleja
una crasa idea de lo que es un congreso misionero y para qué es un congreso
misionero. No voy a traer a colación aquello de “zapatero a tus zapatos” porque no sería
justo ni consecuente, pero sí puedo hablar del “mucho ruido y pocas nueces”.
Para el próximo congreso, nada de papelitos; ya sabemos que los universitarios
saben escribir. Nada de papelitos y unos kilitos mas de sindéresis.
Y termino porque se van a cumplir los 03 minutos.
P. Enrique Mangana López, C. M
Asesor
Setiembre, 2003
NO APAGUÉIS VUESTRO AMOR
Como decíamos ayer:
Siempre es hermoso recordar las fechas que tienen aroma de trascendencia.
Trascendencia para los ideales de nuestra vida, pero en especial para nuestros ideales
religiosos.
Como siempre, el recuerdo nos obliga a decir “gracias”. Gracias, Señor Jesús, por el
16 Aniversario de fundación de este Centro Piloto de la Primaria Archicofradía de los
Jueves Eucaristicos. Gracias por la fundación, pero sobre todo, gracias por mantenernos,
como suele decirse en términos gerenciales, operativos y en activo.
Una de las características mas y mejor entendibles de la Eucaristía es la de
haberse constituido -sin abandonar la seriedad teológica- en el alimento mas
apropiado “para el camino”. Además de reflejar la itinerancia de la vida del cristiano, no
implica demasiados ajetreos en su manejo y administración o repartición. No me extrañaría
nada que aquella vieja expresión castellana de: con pan y vino, se anda el camino”, tenga
una real dimensión eucarística y se fundamente precisamente en ella. Por algo los cristianos
le damos el nombre de viático.
La nomenclatura es realmente antigua. Y, si bien antigua-mente era referida
como alimento necesario para el último trecho del camino, creemos que bien puede
referirse al alimento necesario para todo el trayecto de nuestra vida. Las
recomendaciones, hechas por Dios al profeta que huye de la pérfida Jezabel y se
enfrenta, en su huida, al terrible desierto que le separa del monte Horeb -léase cielo-,
tienen una indiscutible actualidad para nosotros. Despierta y come -le dice- el misterioso
mensajero, que el camino es superior a tus fuerzas”.
Entiendo que todos los juevistas conocen, de memoria y estimativa, esta expresión y
que, obedeciendo a la voz del Señor “despiértate y come que el camino es superior a tus
fuerzas”, han acumulado ya la fuerza necesaria para cruzar el desierto de la vida.
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Hemos caminado, durante más de un año, con María y de la mano de María. Ahora
creemos oportuno, darle, a esta celebración del decimosexto aniversario del Centro,
una dimensión mariana.
Siendo justos y sensatos los juevistas debemos amplificar el sonido de aquellas
palabras de la Virgen en Caná: Haced lo que El os diga”.
Una de las muchas cosas que El nos dice es que debemos ser fieles al
reglamento y a los propósitos últimos de la Primaria Archicofradía. Conmemorar y Reparar.
No sólo reparar como creen -y espero practiquen- los integrantes de esa institución
recién nacida UNER.
Gracias María, por habernos recordado, una vez mas, eso de “Haced lo que El os
diga”.
Este es el sentido de nuestro saludo a todas las hermanas y hermanos juevistas,
tanto a quienes nos honran con su presencia, como a todos aquellos que no han podido
venir.
A todos, en nombre de la Directiva del Centro Piloto, en nombre de las Hermanas
Misioneras y en mi propio nombre, un fraternal saludo. Como una súplica, vieja e insistida,
les pido que sean fieles a los artículos y adiciones del Reglamento, a la práctica de la
Hora Santa y a la Santa Misa.
Gracias a ustedes por haber venido. Gracias, mil gracias al Señor, por estar siempre
con nosotros.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Diciembre, 2003
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UNA TAREA DE POR VIDA
¡Que bueno y qué fácil es obedecer cuando a uno le mandan hacer las cosas
que le gustan. Acostumbramos a decir: ¡“Miel sobre hojuelas”!.
Pues bien, tal es mi situación.
Visitas Domiciliarias se complace en cumplir con el encargo de saludar, a nombre
de la Señora y con motivo de su fiesta -27 de Noviembre-, no sólo a quienes han estado
presentes en la Novena, la Fiesta y la Procesión, sino también a todos los que integran
la Devoción y que no han podido estar presentes en estos actos.
Reciban, pues, el saludo de la “Visitadora” y así, como sin querer queriendo,
reciban también el nuestro.
Con nuestro saludo, nos complacemos en recordarles algo que seguramente se
saben mas que de memoria, pero que no es suficiente saberlo de memoria, sino
también de estimativa: Visitas Domiciliarias de la Virgen Milagrosa es una institución
multisecular, que está avezada a sobrellevar toda clase de dificultades y a superarlas.
Superarlas incluso con alegría. Hasta las posibles deserciones, ocasionadas casi
siempre por envidiejas, miopías y modas seudo religiosas, se desvanecen, nada mas
conversar con Ella.
Lo cierto es que como la Señora es y será siempre la misma, y los hijos, es
decir, nosotros, los jóvenes y los no tan jóvenes, vamos a necesitar siempre de sus
servicios, la Devoción de las Visitas Domiciliarias de la Virgen Milagrosa está llamada a
durar solo hasta el fin del mundo. Decimos esto, porque su cometido es “de por
vida” y siendo las Visitas Domiciliarias la esencia de toda pastoral no pueden estar
sometidas a límites de tiempo ni de lugar, ni a ningún tipo de presiones externas o
internas.
Mas aún, -alguien ha dicho y yo lo ratifico-, quienes nunca han arribado a esta
Devoción o aquellos que por desgracia han desertado de ella, son los que más
necesitan de ella y de Ella.
No dejemos sola a la Santísima Virgen en esta tarea de buscar a los hijos que se han
perdido, ni menos darle el desconsolador trabajo de tener que volver a buscarnos a
nosotros que hicimos juramento de acompañarla de por vida.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Diciembre, 2003
Presentamos:
RONDA DE NAVIDAD
Visitas Domiciliarías tiene el privilegio de publicar uno de
los más interesantes guiones navideños de las producciones
musicales y fílmicas que nuestro asesor acostumbra presentar
con motivo de la Navidad. La banda sonora y fílmica cuenta
con 36 diapositivas, algunas de ellas tomadas de "En Tierra
Santa", y con casi un centenar de villancicos.
La Directiva
VV.DD
Un diálogo con las figuras de Belén, del belén y de todos los belenes.
Todo buen cristiano y, por ende, todo misionero que quiera dar razón de su
esperanza, debe acudir al lugar de los hechos.
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El lugar de los hechos, o mejor, del gigantesco hecho que nos salva, es Belén. Es en
Belén donde tiene lugar el suceso. Es en Belén donde tiene lugar la Encarnación. Es en
Belén donde las promesas se hacen realidad. Vamos a Belén.
A pesar de la inseguridad de la zona, muchos van a Belén por turismo, por decir
que estuvieron allí y hasta por curiosidad.
Nosotros vamos a Belén por necesidad. Por delicadeza. Para felicitar a nuestro
hermano mayor en su cumpleaños 2,003. No inventemos pretextos para no ir. ¡La
inseguridad de la zona, el alto costo del paquete turístico...! Las balas que a veces se
equivocan de blanco, y casi nunca de negro. No inventemos pretextos. Yo estoy en
condiciones de anunciarles que:
(...para llegar a Belén
ya no hace falta el camino:
se llega de corazón
cuando estamos decididos
a pensar en los demás
antes que en nosotros mismos...)
Mas aún. Tienen sumas facilidades: ...
y como en Belén no hay puerta...
Por otra parte, solo yendo a Belén, estarán ustedes en condiciones de entender y
explicar la paradoja más grande de nuestro tiempo “que a pesar de las balas...”suenan
voces de paz”.
Es que es Navidad. Y en Navidad, todo se viste de fiesta. Vitrinas, escaparates, luces
de colores, estrellas, árboles, aguinaldos, panderetas, zambombas, ilusiones, sueños...
Es Navidad. Y en Navidad, los mayores nos hacemos un poco más niños, cantamos
villancicos que son canciones de cuna y no de villanos, hablamos de paz y de amor y
hasta nos hacemos un poco mejores.
Los pueblos en contienda firman treguas. Se detienen las guerras por unos días...
Y todo y sólo porque ha nacido Jesús, el Salvador. Un salvador que, paradójicamente viene a
traernos lo que más necesitamos, la paz.
Su venida estaba ciertamente anunciada y prometida. Prometida y anunciada. Pero
los cuatro siglos de espera hicieron que muchos perdieran toda esperanza. Vino a los suyos
y los suyos no lo recibieron.
Peor para ellos.
Y mejor para nosotros. Para nosotros, gentes de buena voluntad, que, como María, le
esperábamos anhelantes.
La noticia de su venida empezó a difundirse en Nazaret.
El pueblo cristiano ha entrado siempre en la Navidad bajo el pórtico de la
Anunciación. Es por María que se entra a la Navidad. No hay portal sin María. Sin María
no hay Hijo de Dios. Es por María que se entra al gozo. Es por María que se entra al bullicio
de la fiesta. Es a partir del anuncio y del “hágase de Nazaret” que empieza la celebración
de la gran fiesta a la que todos estamos invitados.
Aterricemos en Nazaret. Echémosle una vista general a la ciudad, entremos en la
Basílica de la Anunciación y, antes de emprender el camino hacia Belén, tomemos un poco
de agua en la Fuente de la Virgen.
Nazaret - Vista general
Nazaret, situada en medio de las colinas de la Galilea, ocupa un lugar predilecto en
el corazón de todo cristiano. Aquí es donde apareció ante la Virgen María el ángel de Dios
para anunciarle el nacimiento de su Hijo. Es aquí también donde “aquel Verbo fue
hecho carne y habitó entre nosotros” (Juan 1: 14). Jesús creció en estas calles y entre
estas colinas, sin que nada pudiera diferenciarlo de otros niños ni de otros jóvenes o
artesanos de Nazaret.
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Nazaret - Basílica de la Anunciación
Muchas iglesias han sido construidas en el transcurso del tiempo, sobre la
modesta gruta de la Anunciación. La más reciente e indudablemente la más
hermosa de todas fue construida entre 1960 y 1968, de acuerdo a los planos del
arquitecto italiano G. Muzio, quien trató de engastar en una misma estructura de dos
pisos la santa Gruta de la Anunciación y los restos de dos antiguas iglesias: la bizantina
y la cruzada.
Una majestuosa cúpula corona el edificio de 44 metros de altura, uno de los mas
grandes santuarios del Medio Oriente.
Nazaret - La Fuente de la Virgen
Las aguas que se precipitan de las montañas alrededor de Nazaret llegan a la
única fuente que conoció la ciudad en su larga historia. Es esta una fuente pública que
puede verse en la iglesia griega de San Gabriel. No es difícil imaginar a la Virgen y al
niño Jesús abasteciéndose de agua, tal como aún lo hacen tantas mujeres y niños de la
Nazaret de hoy. Una tradición greco-ortodoxa sitúa, en esta fuente, el encuentro del
Ángel con la virgen María. Para recordar ese evento, construyeron su iglesia,
dedicada al arcángel Gabriel.
Y, ahora sí, todos a Belén. Se pueden ir en tren, o a pie o en burrito sabanero. El
caso es llegar.
Belén...
No hay que perder detalle. Compremos una agenda. Busquemos un plano. Es
necesario ponerlo todo ante los ojos: el Niño, María, José, los pastores, los reyes, los
ángeles, las estrellas, la mula y el buey, el heno y el establo y los caminos y las
campanas, la nieve y el frío, regalos y zambombas, los requesones y algún que otro
sospechoso que se cuela en el portal para aprender del Niño a robar. A robar
corazones...
(Como casi todos ustedes están un poco desinformados me voy a dar de
entendido y haré de cicerone. Pero eso al final, “lo que sea su voluntad”.
Belén (Vista General)
Belén, con una población actual de aproximadamente 30 mil habitantes, está situada
sobre una colina rocosa, a 9 Kms. al sur de Jerusalén. Los orígenes de Belén se remontan
a los lejanos tiempos de los Patriarcas. Se halla mencionada en la Biblia en relación con la
muerte de Raquel: “Así murió Raquel y fue sepultada en el camino de Efrata que es BethLehem” (Génesis 35: 19). En Belén Rut conoció a Booz y se casó con él. En Belén nació
David y fue ungido Rey de Israel por el Profeta Samuel (Samuel 16: 1-14). “Pero tú, Belén
Efrata el más pequeño de los clanes de Judá, de ti nacerá el que gobernará a Israel”
(Miqueas 5:12).
“Y aconteció en aquellos días, que se promulgó un edicto de parte de Augusto
César, que todo el mundo fuese empadronado. E iban todos para ser empadronados, cada
uno a su ciudad. Y José subió de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de
David que se llama Belén, por cuanto era de la casa y familia de David; para ser
empadronado con María su mujer, desposada con él. La cual estaba encinta. Y aconteció
que estando ellos allí, se cumplieron los días de su alumbramiento. Y dio a luz a su
hijo primogénito... “El nacimiento de Jesús en Belén inmortalizó a esta pequeña ciudad, e
hizo que su nombre viva en el corazón de todos los cristianos.
La Basílica de la Natividad.
En el año 135 D.C. bajo el reino del Emperador Adriano, tanto el Calvario y la
Tumba de Cristo como la Gruta del Nacimiento fueron profanados, queriendo él construir
en ella un templo dedicado al culto de Adonis. Pero esta profanación, lejos de haber borrado
la memoria del lugar, sirvió para preservarlo. Constantino halló intacta la Gruta del
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Nacimiento y ordenó construir sobre el lugar una magnífica basílica, profusamente
adornada con mármoles, frescos y mosaicos. En el siglo VI la iglesia quedó seriamente
deteriorada.
El Interior de la Basílica de la Natividad
La Basílica de la Natividad tiene forma de una cruz, de 60 metros de largo y 30 de
ancho. Cuatro hileras de columnas de piedra roja la dividen en cinco naves. Sobre la
Gruta de la Natividad, se halla el coro de los griegos, enteramente esculpido en madera de
cedro del Líbano.
La Gruta de la Natividad
Dos pequeñas entradas conducen a la Gruta de la Natividad, que tiene forma
rectangular. Una estrella de plata con la inscripción en latín “Hic de Virgine Maria Jesús
Christus natus est” -Aquí nació Jesús de la Virgen María- señala el lugar de su nacimiento.
El Pesebre
EL Pesebre que se encuentra a la derecha del lugar donde nació Jesús era usado
probablemente para almacenar forraje. Era el mejor lugar el más acondicionado y seco, para
poner al Niño, mejor que el suelo duro: “María trajo al mundo a su hijo primogénito y le
envolvió en pañales, y acostóle en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón”.
Sobre los lados, en el interior de la gruta, una especie de pesebre, transformado hoy en
capilla latina, sería el lugar donde María acostó al Hijo de Dios. Puede aun verse claramente
la roca primitiva, ennegrecida por el humo de las velas y lámparas de aceite, que arden en el
lugar del Santo Pesebre. Eso es lo que queda para evocar la Encarnación del Verbo que, en
la humildad, vino acá a participar en nuestra condición humana.
El campo de los pastores
“Y había pastores en la misma tierra, que velaban y guardaban las vigilias de noche
sobre su ganado. Y he aquí el ángel del Señor vino sobre ellos y la claridad de Dios los rodeó
de resplandor y tuvieron gran temor. Mas el ángel, les dijo: “No temáis, porque, he aquí os doy
nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo: que os ha nacido hoy en la ciudad de
David un salvador, que es Cristo, el Señor” (Lucas 2).
Aunque el Evangelio no indica el lugar preciso donde estaban los pastores, una
tradición muy antigua los sitúa en el Campo de los Pastores, a unos 4 kilómetros de Belén”.
DE BELÉN... MAS ALLÁ!
Ahora que ya conocemos el escenario, vamos a dialogar con todas las figuras del
Belén: Con las estrellas, los ángeles, los pastores, los reyes, las campanas, la nieve y el
frío... y, si tenemos suerte, con María, José y el Niño!
Conversamos en clave de villancicos.
Los villancicos lo dicen todo. Son capaces de hacernos tiritar de frío o de bajar las
estrellas.
Con suma facilidad, los Villancicos son capaces de unir a propios y extraños, a
nacionales y extranjeros, a pastores y reyes, a blancos y negros... y derribarlos a todos
ante la humilde cuna del Niño-Dios. Los villancicos… no pocas veces dicen cosas que
nos sacan de quicio, dicen disparates que, a la hora de la hora, contienen una gran verdad.
*Estrellas Los villancicos hablan de las estrellas. Los Magos tuvieron su estrella.
Los pastores tuvieron su estrella. Algunos de nosotros nacieron con estrella. Qué bueno
sería que cada uno de nosotros tuviera una estrella. En Belén es fácil conseguirlas.
*Ángeles. Junto a las estrellas suelen andar los ángeles Los ángeles, según los
villancicos, se dedican a cantar. Es lo que siempre han hecho. “Gloria a Dios en las
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alturas y en la tierra al hombre, paz; así los ángeles cantan, de Belén en el portal” decía el
P. Alcacer en uno de sus hermosos villancicos.
Los ángeles... lo hicieron tan bien en su primera presentación, que la Iglesia
compró todos los derechos de autor y ha venido repitiendo su canto, su Misa de Ángeles, su
gloria en casi todas sus expresiones litúrgicas: Gloria, gloria, aleluya.
*Los Pastores:
Fueron los primeros en acudir a Belén. Escucharon la noticia y echaron a correr. Y con
mucha razón, porque al parecer la noticia era para ellos.
Qué buen ejemplo, el de los pastores para los cristianos de nuestro tiempo! Eso de
echarse a correr para ir a ver al Señor... contrasta enormemente, tristemente, con la
indolencia de nuestras gentes de ahora, que desprecian, olímpicamente el acudir allí donde
está Dios, en la Eucaristía, en el servicio de los pobres, y en todos aquellos lugares en
donde, se encuentra todavía más accesible que cuando niño en Belén.
Ojalá que los pastores nos sigan animando a ir a Belén…
*Las campanas. Qué es lo que está sonando? Las campanas de Belén. Y qué es
lo que están diciendo?... Con el bronce de su piel, “Que Dios nace de María...”
En el tema de las campanas, los autores no han logrado llegar a acuerdo alguno.
Para unos son de bronce, para otros de plata, para otros son simples esquilas o
cencerros. Otros acumulan campana sobre campana y no faltan quienes digan que... “En
Belén no había campanas...
Din don di lin din dan! Repican las campanas. Llegó la Navidad! Campanita del
lugar suena, alegra, suena. Son con este son son los campanilleros, son con este son una
ronda de amor.
Campanas de navidad, tocad, tocad. Todo es fe y es amor en la Navidad... Los
pastores por la madruga adoran al Niño que ha nacido ya... En Belén las campanas tocan
solas... en Belén las campanas tocan a gloria… Campanas... campanas... campanas...que
anuncian al mundo la paz....
El tema de las campanas es como una golosina de sabor espiritual....
*Los Reyes. En el Retablo de la Navidad aparecen aunque un poco tarde, los
Reyes. Que les llamaron Magos porque adivinaron donde estaba el Señor. Dieron con el
lugar.
Y, qué decir de los reyes?
Lope de Vega, el más grande de los que yo llamo “navideños”, como que les
pone a los reyes en su sitio:
...reyes que venís por ellas,
no busquéis estrellas ya,
porque donde el Sol está,
no tienen luz las estrellas...
Como dice el dicho: No se si eran reyes, no se si eran tres, lo más importante es
que fueron a Belén.
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*RECUPERANDO EL CENTRO
Dejemos en paz la ciudad y sus entornos: La noche, el frío, la nieve, las estrellas,
los ángeles, los pastores y los reyes, la mula y el buey... Centremos nuestra atención en las
figuras del misterio: la Virgen, San José y el Niño.
Aprovechando que San José se está afeitando porque el Niño se había quejado... “que
me pinchas con tus barbas; y que la Virgen está viendo cómo beben los peces en el
río...” nos quedamos a solas con el Niño:
...Este Niño y Dios, Antón,
que en Belén tiembla y suspira,
con unos ojuelos mira
que penetra el corazón.
Este Niño celestial
tiene unos ojos tan bellos
que se va el alma tras ellos
como a centro natural.
Ya es Cordero y no es león,
y cómo dejó la ira,
con unos ojuelos mira
que penetra el corazón
Antiguamente miraba
en nube, monte y en fuego,
y, en ofendiéndole, luego
luego del ofensor se vengaba.
Mas después que vino, Antón,
donde como hombre suspira,
unos ojuelos mira
que penetra el corazón
No se dejaba mirar,
envuelto en nubes y velos,
ahora, en pajas y hielos
se deja ver y tocar.
Como mira a los que son
la causa por quien suspira
con unos ojuelos mira
que penetra el corazón.
Gracias Lope, por ayudarnos una vez más.
San José y la Virgen regresan a escena. Vamos a pedirles que nos dejen “tener al
Niño”. El anhelo natural es tener al niño, a los niños. Tener al niño. Nuestro anhelo natural
y sobrenatural debe ser tener al Niño. A este Niño.
Déjanos, Niño Jesús,
déjanos que te acunemos.
Y, nosotros, mientras duermes,
bajito te cantaremos...
Hoy te cantamos, Jesús,
nuestra felicitación.
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Como regalo te darnos todo entero el corazón.
5 y último: DE AQUÍ A LA ETERNIDAD
Lo que acabamos de ver y escuchar, no está editado. Son pinceladas sobre las
principales figuras del Retablo de la Navidad.
¡“Salta de júbilo, hija de Sión, dice el profeta. Alégrate Hija de Jerusalén. He aquí
que tu Rey viene a ti”.
En Jerusalén estamos representados todos. Jerusalén es símbolo del encuentro
definitivo con el Señor. Encuentro que vamos preparando ya aquí en la tierra.
Adviento...Navidad! Tiempo de preparación, tiempo de esperan-za, tiempo de venida
del Señor.
Isaías, el profeta mesiánico por excelencia, se imagina la venida de Jesús como “una
gran luz que rompe las tinieblas en las que vive la humanidad”. “El pueblo que andaba en
tinieblas -dice- vio una gran luz. Sobre los moradores del país de mortal sombra, la luz ha
despuntado”.
Esa es la luz que nos acompañará a través de nuestra vida mortal. Es la luz de la
fe, de la alegría, de la paz. La luz de los que creemos en Jesús. La luz que nunca se
apaga. Cantemos alegres.
Hoy ha nacido el Mesías...
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Enero, 2004
DEL BAÚL DE LOS RECUERDOS
Uno de los incondicionales lectores del Boletín de Visitas Domiciliarias, entre
sorprendido y molesto, preguntaba qué había sucedido con aquella mini serie de
artículos sobre las “Canciones de antaño”.
Aunque la pregunta venía dirigida al autor de dichos articulillos, la respuesta tenía
que ser desviada a la Comisión de Redacción ya que sólo ella estaba autorizada a darla.
Yo me atrevería a pensar pero no a decir que, cuando dicha Comisión no contaba,
a su debido tiempo, con los trabajos de sus colaboradores, pedía auxilio a su asesor, y
éste, su seguro servidor, abría, con sumo gusto, el baúl de sus recuerdos y siempre
encontraba algo para ponerte remedio a un par de páginas. Dicho de otro modo: era algo
improvisado para salvar la edición.
Ahora la situación es totalmente distinta.
“Del Baúl de los Recuerdos” ya no pretende sacar de apuros a las hermanas que
elaboran el Boletín. Del Baúl de los Recuerdos quiere introducir mis dos manos hasta el
fondo del baúl de mis recuerdos e ir sacando y ofreciendo a las buenas gentes que
integran la maravillosa obra de las Visitas Domiciliarias, aquellas sabrosísimas
canciones de antaño que, aunque habían sido retiradas de la circulación liturgo-religiosa,
por haber sido tildadas de “melifluas, sentimentaloides, etc. etc., siguen teniendo un
irresistible atractivo, sino para entrar con ellas al templo, sí, al menos, para
acompañarnos hasta la entrada.
Por si hay lectores interesados en llegar hasta el fondo del baúl, puedo señalarles
caminos rápidos y seguros para encontrarlas.
El primero: Las Obras Completas del P. Luís Iraurrízaga, C.M.F., (Madrid, 1945).
Pueden tararear conmigo: “Cerquita del Sagrario”, “Vamos, niños, al Sagrario”,
“Jesús, vivir no puedo”, Estrella de la mar”, “Madre mía que estás en los cielos”, "Quiero,
madre, en tus brazos queridos",... Y si todavía son capaces de llorar, apuntamos, también,
la “Canción del viejo poeta”:
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“Pasar yo vi la alegra primavera
y de ella en pos, la mas bella ilusión
cruzó ante mí, cual sombra fugitiva,
y me llenó de frío el corazón...
El segundo podría ser la Colección de CÁNTICOS de Edelvives, (Zaragoza, 1960).
Claro que no toda la colección ha sido desahuciada, pues muchos de sus cantos siguen en
vivo y en directo. Entre los mas lejanos: “Venid a Belén” (Rial). “Ay qué lindo” (Marraco).
“Altísimo Señor”, “Dios mío, Dios mío, acércate a mi”, “Las palomicas vuelan”, (Molera).
“Dueño de mi vida” (Otaño), “Noche y día”. “Amante, Jesús mío” y aquel otro “Rosario
de la Aurora:”
“Cristianos, venid;
devotos, llegad”
a rezar el Rosario a María.
Solaz y alegría del pobre mortal”.
Una tercera vía: El Cancionero Religioso del P. José María Alcácer, C. M. (Madrid,
1958). Además de sus creaciones originales, el P. Alcácer da cabida a las de otros autores y
cubre satisfactoriamente los diversos ciclos litúrgicos. De sumo interés para Visitas
Domiciliarias es el Suplemento referido a la Virgen Milagrosa. De “Gloria a Ti, Milagrosa:”
Ve con cuanta ilusión y alegría
tu bendita medalla besamos
que, prendida en el pecho, llevamos,
como emblema sagrado de amor.
Es la insignia mil veces bendita
de los hijos a Ti consagrados
que acrecientan, por ella escudados,
sus tesoros de fe y tierno amor.
Qué mas quieres que te diga? Ven y verás.
P. Enrique Mangana López C. M.
Asesor
Febrero, 2004
PARA CAMBIAR EL ROSTRO
El tiempo, las cosas y los lugares así como las personas suelen tener un rostro, una
cara. Cuando no lo tienen, ya sea porque se desconocen o porque todavía están
naciendo, es necesario darles un rostro.
El Pueblo Joven Santa Rosa no tenía rostro. Hubo quienes, posiblemente sin
quererlo, le fueron dando uno. Uno que, sinceramente, no le caía. No le caía bien. Era un
rostro sucio, maltrecho, en el que se reflejaban casi todas las taras morales y físicas de
los tiempos en que vivimos. Era un rostro que daba lástima. Un rostro que era necesario
cambiar. Y cambiarlo todo, almas, cuerpos, calles, veredas, instituciones...
Para ello, siguiendo una lógica elemental, había que convocar a las fuerzas vivas
del pueblo. Fuerzas que, muchas de ellas, resultaron siendo “vivales” no vivas, y
dificultaron la tarea.
Pero las instituciones tutelares no se arredraron y fueron poco a poco, mas o
menos durante unos treinta años, poniéndole un rostro nuevo.
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Una de estas instituciones, la Iglesia, a través de la Parroquia San Vicente de Paúl,
en cuya jurisdicción territorial se enclava nuestro pueblo, contribuyó dándole un templo y
unos ambientes adecuados para la promoción humana y cristiana de los santarroseños;
pero dándole, sobre todo, un nombre del que pudiera tomar rostro, su identidad de pueblo
joven Santa Rosa.
A este respecto transcribo un fragmentito del discurso inaugural de la primera etapa
del Proyecto Santa Rosa, proyecto que está próximo a concluir su cuarta y última etapa:
“Para cambiar el rostro de nuestro pueblo, la tercera cosa que, creo yo, debemos
hacer, es buscar inspiración, precisamente en la persona de Santa Rosa. Inspiración
para configurar una comunidad humana que sienta y exprese e! respeto por el otro, por
el vecino, por todos los vecinos, por todas las personas. E inspiración para constituir una
comunidad cristiana que se identifique con las virtudes señeras de la Santa, como son su
humildad y su laboriosidad, su sentido de lo transcendente.
Buscar en ella inspiración y pedirle que nos de el coraje necesario para superar
las lacras de este sector por todos
conocidas, en orden a lograr una mayor seguridad ciudadana y un mas alto nivel de
felicidad, aquí y ahora.
Solo así podremos construir el otro templo, el verdadero templo del Pueblo Joven
Santa Rosa. El templo que el cristiano está llamado a construir, dondequiera se
encuentre -con templo material o sin él, dentro o fuera de él-, con los ladrillos de la fe y
el cemento de la caridad, según palabras de Vicente de Paúl. Ese es el templo-familia,
el templo-acogida, el templo que transforme este rincón de Chiclayo en un rincón
atractivo.
La pobreza material de las familias de este sector no justifica en modo alguno la
situación de abandono de las calles, las pintas en las paredes, la falta de áreas verdes,
la falta de comunicación intervecinal, la acumulación de basura en torno a un colegio
donde deberían crecer los rosales y las margaritas y donde deberían volar mariposas y
cantar jilgueros... La pobreza material no justifica el vertido a superficie externa, de
aguas utilizadas en el lavado de pescado, en vez de utilizar, como está mandado, los
desagües-resumideros, para evitar la proliferación de moscas y roedores y olores
pestilentes... La pobreza, entre los cristianos, no está reñida con la limpieza, ni con el
respeto, ni con la educación.
Pero para que esta situación mejore, cambie y se normalice, para que Santa
Rosa pueda disponer de un nuevo rostro; se necesita, además, ese otro elemento, tan
difícil de conseguir pero tan poderoso una vez conseguido, que se llama “unión”. El
refrán lo dice: la unión hace la fuerza. Y otro refrán que yo acabo de inventar dice: La
desunión ha hecho de Santa Rosa una lástima.
Pero ¿es posible lograr la unión en una comunidad que ha tardado mas de 20
años en configurarse y que ha tenido que hacerlo sufriendo insistentemente los
latigazos de una delincuencia “impuesta”?... Yo entiendo que es casi un insulto
formular esta pregunta. Lo único que necesitamos, señoras y señores, para conseguirla,
es, meternos bien en la testa, en la cabeza que, el bien común, por ser común y por
ser bien, es tarea de todos. Y meternos, asimismo, bien adentro en el corazón que,
el bien que hagamos a los otros, a nuestros vecinos, cualquiera que sea su color, su
credo o su condición social, redundará siempre a favor nuestro.
Señoras y señores: Como responsable de la conducción espiritual de la Parroquia
San Vicente de Paúl, a la que, al menos por ahora, pertenece Santa Rosa, aplaudo, a
nombre de la Comunidad Vicentina y a nombre de los santarroseños, esta dádiva del
templo y de los salones adjuntos y hago constar, en este acto público, mi acción de
gracias a todos”.
Visitas Domiciliarias, a nombre de los santarroseños, se complace también, en dar
gracias a todos los que han contribuido a cambiar el rostro del pueblo joven: A los Padre
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Vicentinos, a la comuna de Chiclayo, al señor Enrique Verdú (Barcelona España con la
colaboración de su Club “Peña marinera”), al Excmo. Sr. Alcalde Jaurrieta (España), al
CTAR, a los profesores y alumnos del Colegio Manuel Pardo, a la firma comercial de “la
Concordia”, a los católicos de Santa Rosa y, en especial al P. Julián Arana, (hermano del
Padre Segundo Arana), quien, con el respaldo de Visitas Domiciliarias de La Milagrosa
de Pamplona, está permitiendo culminar la obra.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Agosto, 2004
SOBRE LOS ANGELES
Tanto la Tradición como la Biblia, canales de la doctrina cristiana, nos dicen que la
existencia de seres espirituales, no corporales es una verdad de fe. A estos seres
espirituales no corporales le llamamos, ángeles.
1. Qué son
Pero, qué son o quiénes son y por qué los llamamos así? Responde San Agustín:
“El nombre de ángel indica su oficio, no su naturaleza. Si preguntas por su
naturaleza, te diré que es un espíritu; si preguntas por lo que hace, te diré que es un
ángel”. Con todo su ser, los ángeles son servidores y mensajeros de Dios. Porque
contemplan “constantemente el rostro de mi Padre que está en los cielos”, (Mt. 18,10), “son
agentes de sus órdenes, atentos a la voz de su palabra” (Sal 103, 20).
Son criaturas personales e inmortales, tienen inteligencia y voluntad, superan en
perfección a todas las criaturas visibles. El resplandor de su gloria da testimonio de ello” (Dn
10, 9-12).
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En Col 1,16 se dice:
“Porque en él -en Cristo- fueron creadas todas las cosas, en los cielos y en la tierra,
Las visibles y las invisibles, los tronos, las dominaciones, los principados, las potestades:
todo fue creado por él y para él”.
Esto significa que los ángeles le pertenecen a Cristo. “Cuando el Hijo del hombre
venga en su gloria acompañado de todos sus “ángeles...” ( Mt 25.31).
2. Qué hacen
Desde la creación (Jb 38,7) donde los ángeles son llamados “hijos de Dios” y a lo
largo de toda la historia de la salvación, los encontramos, anunciando, de lejos o de cerca,
esa salvación y sirviendo al designio divino de su realización:
 cierran el Paraíso terrenal (Gn 3,24)
 protegen a Lot (Gn 19)
 salvan a Agar y a su hijo (Gn 21,17)
 detienen la mano de Abraham (Gn 22,11)
 la ley es comunicada por su ministerio (Hch 7, 53)
 conducen el pueblo de Dios (Ex 23, 20-23)
 anuncian nacimientos (Jc 13)
 anuncian vocaciones (Jc 6,11-24; Is 6, 6)
 asisten a los profetas (1R 19, 5)
 uno de ellos, Gabriel, anuncia el nacimiento del Precursor y el de Jesús (Lc 1,11 -26)
 cuando nace Cristo, entonan un himno que todavía no ha cesado de resonar:
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


“Gloria a Dios en las alturas
y en la tierra al hombre paz”
así los ángeles cantan, de Belén en el portal (Lc 2.14)
protegen la infancia de Jesús (Mt 1,20; 2,13.19)
sirven a Jesús en el desierto (Mt 1,12; Mt.4,11)
reconfortan a Jesús en su agonía (Lc 22,43)
Son también los ángeles quienes “evangelizan” (Lc 2,10) anunciando la Buena Nueva
de la Encamación (Lc 2,8-14) y de la Resurrección de Cristo (Mc 16,5-7)
Con ocasión de la segunda venida de Cristo, anunciada por los ángeles (Hb 1,1011), estarán presentes al servicio del Señor (Mt 13,41; 25,31; Lc 12,8-9).
3. Otras tareas
Debemos apuntar también que toda la vida de la Iglesia se beneficia de su
misteriosa y poderosa ayuda. (Hch 5, 18-20; 8, 26-29; 10, 3-8; 12, 6-11; 27, 23-25).





La liturgia de la Iglesia Católica:
Canta con ellos al Dios tres veces santo.
Invoca su asistencia (Te pedimos humildemente que...)
Le encomienda la tarea de llevar a los fieles al Paraíso.
Celebra de un modo especial la memoria de algunos de ellos: Miguel, Gabriel, Rafael,
ángeles custodios.
Rechaza frontalmente la presencia y la acción de los ángeles malos, porque Dioslos creó buenos pero ellos se volvieron malos y los llama demonios, luciferes,
luzbeles, satanes, etc. etc.
Nuestra vida, desde que nacemos hasta que morimos está rodeada de ángeles
buenos, ángeles custodios, ángeles que nos guardan de los ángeles malos que andan
dando vueltas como leones que quisieran devorarnos. (Mt 18, 10; Le 16, 22; Sal 34, 8; Sal
91.10-13; Jb 33, 23-24;-Za 1,12; Tb 12, 12).
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San Basilio nos cuenta que cada fiel tiene a su lado un ángel como protector y pastor
para conducirlo en la vida. Sabemos también de buena tinta que, en los seminarios de
algunas congregaciones religiosas, los seminaristas o estudiantes de los cursos
superiores reciben el encargo de hacer de ángeles de los seminaristas de los cursos
inferiores a los que llaman “Tobías”.
Y bueno, no solo la Tradición y la Sagrada Escritura nos traen esta noticia. Toda la
vida de la Iglesia está llena de “angelofanías”. La escultura, la pintura, la literatura, la
poesía, la denominación de personas, templos y hasta en el campo profano encontramos un
Blue Ángel, un Ángel fieramente humano o un Sobre los Ángeles...
En los “villancicos” son los ángeles los que ponen las notas mas altas y mas alegres. El
gran Lope de Vega juguetea con ellos: “Ángeles que estáis de guardia a los presidios
eternos, al arma, al arma, a la puerta, que quieren robar el cielo...! Y como tiene que
abrirse la puerta del cielo para que el Hijo baje a este suelo, aprovecha la ocasión y nos
invita: “Ahora que el cielo roban, es buena ocasión, entremos, que podrá ser que después
le pongan candados nuevos...” (Rimas Sacras).
Yo creo que exageran, pero dicen que, cuando vine a este mundo, en el que todavía
me encuentro, en vez de saludar o llorar que suele ser bastante común, lo que hice fue
recitar algo que aprendí antes de nacer:
“Ángel de mi guarda,
dulce compañía,
no me desampares
ni de noche ni de día;
no me dejes solo,
que me perdería.!”
Colaboraron: Graciela Mora de Supo
Catecismo de la Doctrina Católica
Nuevo Diccionario de Espiritualidad
Otros
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
ORACIÓN DEL CONGRESO
(COMINOR)
Oh Dios,
que quieres que todos los hombres se salven
y lleguen al conocimiento de la verdad
tiende tu mirada compasiva
sobre las mies cada vez más abundante de tus fieles
y haz que este Congreso Misionero del Norte del Perú
sea un instrumento eficaz
de animación, formación y organización misioneras,
para que los obreros, llamados a continuar la obra de tu Hijo,
dentro y fuera del Perú, congreguen y sostengan,
por la palabra de vida y la fuerza de los sacramentos,
a todos los hombres
y los conduzcan por el camino de la salvación.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén
María, estrella de la Evangelización:
Ilumina y alienta nuestros esfuerzos por construir el Reino
de tu Hijo.
P. Enrique Mangana López, C. M.
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ORACIÓN PARA EL AÑO SANTO 2,000
Padre Nuestro
te doy gracias por el Espíritu Santo
que envías sobre mi alma
para conocerte más y amarte mejor.
Se que es el mismo que bajó sobre tus Apóstoles
impulsándoles a ser tus testigos
hasta los confines del mundo.
A las puertas
del tercer milenio de la venida de Cristo,
haz, Señor, que comprenda
el honor y la responsabilidad de ser cristiano
para que mi vida sea, también,
un testimonio de que Tú estás con nosotros
construyendo la civilización del amor.
Te pido, Señor.
por tu Iglesia, extendida por toda la tierra,
para que acoja, con fervor y compromiso,
este tiempo de gracia, de jubilo y de salvación
proclamado por el papa Juan Pablo II
para todos los hombres que ama el Señor,
sobre todo, para los tres mil millones de hombres
que no saben que Tú la has enviado,
como sacramento universal de salvación.
Suscita
muchas vocaciones de jóvenes generosos
que, oyendo tu llamada consagren su vida
a anunciar a todos los hombres
tu reino de amor.
Y, haz, Señor
que toda nuestra vida sea, también,
al igual que la vida de María, la Virgen Madre,
un anuncio gozoso de ti
y una colaboración entusiasta
a la misión de tu iglesia.
Amén.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Agosto, 1996
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ORACION PATORAL
PARA EL NUEVO MILENIO
Padre Nuestro,
el Espíritu Santo que impulsó a los Apóstoles
a ser testigos tuyos
hasta los confines de la tierra,
es el mismo que nos impulsa, ahora,
a “remar mar adentro”,
en el inicio de este nuevo milenio.
Sabemos, Padre, que,
“remar mar adentro” significa
romper las amarras que nos atan
a las seguridades de la orilla
y quedar a merced de las olas y de los temporales,
con el único asidero de tu palabra.
“Remar mar adentro” significa
levar anclas y enrumbar
hacia los mas alejados y desatendidos
y adentrarse en lo mas alto y profundo
del corazón de los hombres
Y sabemos también,
que “remar mar adentro”
es cosa sólo de valientes.
Por eso te pedimos, Padre
que sea el viento de tu Espíritu Santo
el que nos oriente e impulse
en esta nueva travesía
para que, remando con Cristo y desde Cristo,
seamos fieles testigos de tu amor
y braceros incansables
para que la barca de la Iglesia de tu Hijo,
pueda llevar al ancalado Puerto de la Salvación,
una pesca constante y abundante.
Un nuevo siglo, Padre, y un nuevo milenio
se abren a la luz de tu Espíritu,
pero no todos ven esta luz.
La experiencia del año jubilar,
nos ha permitido contemplar, de cerca,
el rostro paciente y resucitado de tu Hijo,
un rostro cuya impronta,
animados por un nuevo dinamismo,
y como reflectores de la luz de Cristo
vamos a proyectar en el corazón y en la mente
de todo hombre y de todos los hombres.
¡Esa es nuestra misión!
Y, conscientes de que nuestra andadura,
al principio de este nuevo siglo,
deberá hacerse mas rápida,
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al recorrer los senderos del mundo,
acudimos también a María,
la Estrella de la Nueva Evangelización,
para que sea Ella,
“aurora luminosa y guía segura
de nuestro camino”
Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor.
Amén.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Asesor
Chiclayo, 2001
ORACION DEL PRIMER CONGRESO NACIONAL MISIONERO
(CONAMIS)
Padre Nuestro,
la Iglesia Misionera del Perú,
siempre atenta a los gestos y palabras de tu Hijo,
ha podido percibir, de nuevo,
aquella indeclinable invitación
a remar mar adentro.
Una invitación que Juan Pablo II,
Vicario de tu Hijo,
peregrino incansable y marinero de cien mares,
transforma en deber supremo, como un grito,
para todos los bautizados.
Sabemos, Padre,
que, remar mar adentro
es cosa sólo de valientes.
Por eso,
en este Primer Congreso Nacional Misionero,
te pedimos
que sea el viento de tu Espíritu Santo
el que nos oriente e impulse
a emprender esta nueva travesía
para que la Iglesia de tu Hijo
pueda llevar al encalado puerto de la salvación
una pesca constante y abundante.
Animados por un nuevo dinamismo,
queremos implantar
en el corazón y en la mente
de todo hombre y de todos los hombres
el Reino de tu Hijo.
Esa es nuestra misión.
Conscientes de que nuestra andadura
deberá hacerse mas rápida
en el comienzo de este nuevo siglo,
acudimos también a María,
la Estrella de la Nueva Evangelización,
para que ilumine
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nuestra tierra y nuestra siembra,
nuestro mar y nuestra pesca.
Te lo pedimos por Cristo Nuestro Señor.
Amén,
P. Enrique Mangana López, C. M.
Chiclayo, 2002-2003
ORACION PARA EL AÑO DE LA SOLIDARIDAD
Padre Nuestro del Cielo,
a Ti que, al enviarnos a tu Hijo a la tierra,
nos has dado
la mas alta lección de solidaridad,
te pedimos que, en este tiempo de gracia,
nos enseñes a ser solidarios
con El y como El.
Solidarios con los niños,
con todos los niños pero, en especial,
con aquellos que han sido privados
del derecho de nacer,
con aquellos que llevan la etiqueta
de “mal nacidos” o de “no deseados”
con aquellos que nacieron en la calle
o para la calle
y que aún no tienen pan ni padre.
Solidarios con los ancianos
con aquellos ancianos que caminan cuesta arriba,
cargando a sus espaldas
un pesado fardo de años mal vividos
y una pesada cesta de enfermedades
que no les deja ver dónde poner sus ojos
ni a dónde tender sus brazos.
Solidarios, Padre, con los enfermos,
con los enfermos terminales y los otros,
con aquellos enfermos que ya han sido privados
de escuchar alguna voz familiar
y de apretar alguna mano amiga.
Solidarios con los pobres,
con los “pobres de solemnidad” y aquellos otros
que, a pesar de ser los engreídos de tu Hijo,
siguen siendo, desde San Vicente de Paúl
hasta la fecha, entre comillas,
“terriblemente suspicaces y groseros”.
Solidarios con los mas alejados,
con los que no te conocen,
con los que ni siquiera tienen
su documento de identidad de cristianos.
Y SOLIDARIOS, con mayúscula,
con todos aquellos que reclaman,
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a gritos y con lágrimas,
su reconocimiento legal como hijos tuyos,
con todos aquellos que nos llevan
a convertir nuestra solidaridad
en Misión.
Impulsados por el Espíritu,
con la ayuda de María, nuestra madre,
y el aval de tu Hijo, nuestro hermano,
te pedimos, Padre nuestro del Cielo,
que nos enseñes a ser solidarios.Amén.
P. Enrique Mangana López, C. M.
Abril, 2004
INDICE
Introducción
Cosas de familia
Reflexiones con motivo de los 60 años de
sacerdocio del P. Luís García
Vamos a Belén
Yo siento dentro de mí
Nos urge poner señales
Certificado de estudios para María
Fuegos artificiales para noviembre
Cenáculos - Nuevo impulso
Pasión por la evangelización sin fronteras
o pasión por el "folklore religioso"
Noviembre 1997
Con pan y vino
Vía lucis
Salve Madre
Desde España, con amor
En el año de gracia del Señor
Brutalmente sincero
Pájaros en vuelo
...y a Dios lo que es de Dios
Buscando al Hijo
Magníficat
De que me sirve una calle que no me lleva a
la Catedral
Confesión general
Para caminar sin tropiezos
Magníficat, el canto de María
Presentación
A buen entendedor
Si de congresos misioneros se trata
Excmo. Mons. Jesús Moliné Labarta
Zapatero a tus zapatos
Virgen singular
María, Madre de la Esperanza
De la mano con la loca de la casa
Quién eres tu, María
Al Coro 65, con cariño
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Llevemos, cristianos
Gloria a ti, Milagrosa querida.
Ecumenismo o proselitismo sectario?
El año del Rosario
Nota de saludo y despedida
La otra manera de dar las gracias
Magníficat.
Carta abierta a quién corresponda.
03 minutos.............
45 No apaguéis vuestro amor
46 Una tarea de por vida
47 Ronda de Navidad.
48 Del baúl de tos recuerdos......
49 Para cambiar el rostro
50 Sobre los ángeles..
51 Oración del Congreso Misionero del Norte
52 Oración para el Año Santo 2000
53 Oración pastoral para el nuevo milenio
54 Oración del Congreso Nacional Misionero..
55 Oración para el año de la Solidaridad…………………
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